~ Café Tacuba 2.0 ~ (MM B: 99190)

[Anne Gaunt M.]

http://i.imgur.com/TfMEy.png

Aproximadamente en la mitad del Callejón Diagon se alza un edificio que alberga, en su interior, una novedosa cafetería con una amplísima variedad de cafés y tés, así como de pastas y otros artículos de repostería, todos ellos de la mejor calidad.

Es un edificio de ladrillo rojizo, con amplias ventanas de cristal a ambos lados de la puerta, también de cristal, cuyos bordes son de madera de color verde. Sobre la puerta, un gran rótulo anuncia el nombre de la cafetería. Conforme te vas a acercando al lugar, el olor de las pastas y cafés calientes y recién hechos atrae a los clientes y compradores del Callejón, y el aspecto acogedor de la cafetería invita a todos a detenerse en su estancia para disfrutar de un rato de descanso saboreando los mejores sabores.

Una vez en el interior, hay varias mesas repartidas por el lugar, con un buen número sillas alrededor de cada una de ellas, encontrándose la barra al fondo. Las mesas y sillas son de madera marrón tapizadas en el mismo tono, todas ellas con elegante y con perfectas terminaciones. La barra es amplia, de madera oscura con base metálica. Tiene buena iluminación, dando a la cafetería un aspecto acogedor y cercano.

En el extremo izquierdo, hay un reservado solo disponible para los clientes V.I.P., donde disponen de más espacio e intimidad y descuentos en sus consumiciones, así como otros beneficios.

Interior 1 del Café Tacuba || Interior 2 del Café Tacuba

Carta de cafés || Carta de postres

***

Elfos del local
Nami
Jack

Empleados
Gregory Musse
Andrea Izquierdo

***

http://i.imgur.com/8zSAktb.png

Editado 27 de Abril del 2019 por Sagitas E. Potter Blue

[Darla G Dumbledore]

Su ojos observaban a Seba un poco preocupada, no terminaba de entender sus nervios, aunque no podía negar que el hecho de encontrarse ante una alto rango de su bando, aunque ella no le había dicho aún a su prometido quiénes eran los miembros de la no tan extinta facción. Su madrina lo observaba con curiosidad y Darla se preguntaba si lo que su corazoncito palpitaba en ese momento sería la razón por la que el mago expresaba esas palabras. Intentaba por todos los medios mantener su expresión tranquila y no hacer muecas con los labios, teniendo que acudir a la mejor concentración de metamorfomagia mientras escuchaba al amor de su vida.

 

Podría haber reído cuando llamó "madre" a Anne, pero solo dejó que se trasluciera en el brillo divertido de sus ojos, recordando lo mucho que le gustaba molestar a su madrina con esos temas. Y el brillito de burla hacia Anne se transformó en brillo de amor hacia Seba a quién presionó con ternura la rodilla en señal de amor. Observó a Seba con amor y luego a Anne con gesto amenazante por si se atrevía a decir que no y allí recordó que tenía permiso de su madrina para pegarle, se lo había dicho por el tema de la comunicación, pero no dudaría en usar el permiso contra su madrina según su respuesta.

 

Como si quisiera calmar las aguas, el elfo llegó con las tazas de té, una tetera con agua y una jarrita con leche tibia, en cada una de las tazas había unas esferas de metal que contenían las hierbas de los té que ambos habían pedido. La Gaunt mientras se movía algo automáticamente con su taza de té, todo el tiempo parecía avanzar en cámara lenta y cuando al fin habló, Darla solo asentía, hasta que la pregunta fue directa.

 

--Claro que es la mejor persona para mí, el amor de mi vida, quien me hará feliz por siempre y sí, quiero ser su esposa --un sonrojo inesperado surgió en las mejillas de la Potter Black, mientras sonreía con timidez --lo amo, de verdad, con todo mi ser.

 

--Acepto una vez más --dijo girando su vista desde Anne hacia Seba --casémonos --y sus labios buscaron los de él una vez más, olvidándose por unos minutos de la bruja que estaba enfrente de ellos.

 

@ @@Seba Granger

[Seba Granger]

No había pensado que esto sería tan difícil, bueno la verdad es que si, siempre había sopesado un poco como haría la pedida de mano de mi novia, sabía que llevábamos muchos años juntos, y tal vez muchas otras parejas esperaban el año y ya se casaban, pero quería hacer las cosas bien, no quería correr el riesgo que por acelerar todo no funcionara como queríamos, pero el tiempo nos había demostrado que lo nuestro era solido pese a que como toda pareja pasábamos por altos y bajos, pero siempre las cosas buenas eran las que se quedaban.

No sabía en realidad cuando tiempo se había tardado Anne en responderme, la mano de Darla en mi rodilla apretaba un poco mas, no estaba seguro ya si era de apoyo o por que ella también estaba tan nerviosa como yo, claro a ella no le había dicho nada, esperaba que fuera una linda sorpresa para ella también, en esos momentos sentía que sudaba, "¿Acaso lo había hecho mal?"

Sentía que el calor subía por mis mejillas y que el aire me comenzaba a faltar cuando Anne comenzaba a mirarme y no decía absolutamente, "respira Granger, ya estamos aquí" dije en mi cerebro un par de veces, no sabía si bajar la mirada o ver hacía otro lado.

Cuando la Gaunt comenzó a responder pude sentir que a mis pulmones le entraban aire de nuevo, estaba seguro que mi Darla me amaba y que quería casarse conmigo, al menos así lo había habíamos decidido hace un tiempo, pero no estaba seguro como sentía ahora al estar frente a la que yo sabía era una de las personas importantes en su vida.

Miré desde la Gaunt a Darla una y otra vez, creo que ya un poco mas aliviado, creo que me aceptaba en la vida de su ahijada, o al menos lo consideraba, pero siempre estaba aquella duda "¿De verdad sería lo mejor para la Potter Black?, ¿Era de verdad lo mejor para alguien?", no es que tuviera a muchas personas cerca de mi con el transcurso de los años, la familia cercana era escasa.

Las palabras que salían de los labios de mi amada me regresaban al local, me daban un poco de la seguridad que necesitaba, me confirmaban que si me amaba tanto o mas de lo que yo lo hacía, pero si era capaz de dar todo por ella si me lo pedía, hasta la última gota de mi sangre si era necesario.

Reí ante el casémonos, estaba a punto de responderme cuando sus labios atrapaban los míos, me sonroje aun mas al saber que Anne estaba ahí pero no pude evitar besarla con mucho amor y dulzura solo como ella se lo merecía.

Acaricie su mejilla con suavidad cuando nos separábamos de nuevo, -Te amo mucho mi Darla, gracias por aceptar ser mi esposa- me giré hacía Anne de nuevo.

-Muchas gracias, de verdad que es muy importante para mi tener tu consentimiento, no te arrepentirás- dije un poco colorado, -Ninguna lo hará- repetí mientras tomaba las manos de mi prometida en las mías y las besaba con suavidad.

[Darla G Dumbledore]

La risa tierna de su futuro esposo la hizo sentirse en las nubes, era algo que Seba lograba fácilmente, era la persona más maravillosa del mundo, ambos eran complejos y se complementaban de una manera como nadie jamás podría imaginar y la hacía tan feliz como no podía haber imaginado antes. El beso era lo más tierno y romántico del mundo, Darla pudo sentir cuánto amor había en ese beso, cuanta ternura, pero también podía sentir el calor en las mejillas de su Seba, timidez ante la presencia de su madrina, pues en otras ocasiones ese beso hubiera tenido dos lenguas enredadas jugueteando en sus bocas.

 

Suspiro con la caricia en su mejilla y sus ojos vieron con adoración y amor al hombre que se había ganado su corazón y acababa de pedir su mano, de hecho casi había olvidado que no se la había pedido solo a ella, sino también a su madrina, que parecía mantener un silencio respetuoso al rito de amor que se estaba desarrollando delante de ella. Aunque Seba no la olvidaba y tras agradecerle a ella hizo lo propio con la Gaunt. Darla emitió una risita tímida, tras lo cual Seba beso sus manos.

 

--Se que no lo haré mi amor, ni tú tampoco, te haré la persona más feliz del universo, lo prometo --miró con amor a su prometido y luego a Anne --un no de tu parte, hubiera sido el final de nuestra relación, la tuya y la mia, Anne --la sonrisa tierna en el rostro de Darla no reflejaba la mirada decidida de la Potter Black y la clara promesa de que si su madrina no hubiera consentido en su matrimonio toda amistad entre ella y su madrina ya que no estaba dispuesta a permitir que nada ni nadie se interpusiera entre ella y su Seba.

Editado 5 de Febrero del 2019 por Darla Potter Black

[Leandro Malfoy]

Abrió la puerta de cristal al fin luego de asegurarse que sus acompañantes lo siguieran. Hacía tiempo que Ele no bebía un buen café. Siempre andaba a base de vodka, carne y una pequeñisima rasion de fruta, sólo para mantener la "figura" y es que tenía un físico que cualquier hombre envidiaría. Aunque no se notaba demasiado por el hecho de que siempre usaba esa capa con capucha, de vez en cuando se la quitaba y dejaba que el sol le dé en la cara.

 

Una vez dentro de la cafetería, tomó asiento en una de las primeras mesas, se sentó después de la bruja y esperó que alguien les acercara las cartas.

 

Luego de unos segundos, se acercó un elfo con una identificación en el pecho que dejaba leer su nombre "Jack". Leandro soltó un suspiro de fastidio. Aunque ya se sentía mas cómodo que de costumbre en Ottery, todavia no terminaba de entender porqué los humanos empatizaban con aquellas criaturas de aspecto grotesco. Más aun siendo los magos de una raza de humanos superior a los ordinarios o "muggles". Negó levemente con la cabeza, disimulando un poco para que los demas no se percataran mientras tomaba la carta y miraba al elfo con fastidio.

 

-Expreso- dictó y devolvió la carta sin más - Entonces...¿Cuándo me vas a decir tu nombre?- se dirigió a la ojiazúl suavizando nuevamente su mirada bajo las sombras de su capucha negra.

 

@ @

[Anthony R. Dracony M.]

 

Miró su reloj de plata al alzar su muñeca para poder ver la hora...diez de la mañana, ni tarde ni temprano, pero la búsqueda está tomando tiempo y ya siente que falta algo...pasa por un edificio de ladrillo rojo, con amplias ventanas al lado de una puerta de madera que da acceso al local, la puerta también tiene cristal pero el detalle verde del marco, llama la atención del mago que mira el lugar...se acerca y entra debido a la variedad de aromas que pueden apreciarse sin problema, uno en particular ha captado su interés: té....y de inmediato se admira de lo que capta estando en la estancia.

 

Resuelve en ese momento que es hora de un descanso y que mejor opción que disfrutar de un aromático té...camina a donde se ve el amplio mostrador justo en el fondo, hay varias mesas con sus sillas dispuestas pero el peliverde prefiere ir directamente a la barra para solicitar con rapidez una taza de té de vainilla francesa, la barra es de madera oscura sobre una base metálica, el mago se sienta sin pensarlo y hace su pedido, después de saborear su té, continuará la búsqueda...

[Kiyotaka Ayanokouji]

En su interior se encontraba en conflicto aún no podía aceptar la idea de que su padre el gran Sherlock Holmes se encontrará muerto... No lo había fingido... No había cadáveres... En esta ocasión no había podido burlar la muerte... Pero que era lo que le hacía dudar a ese chico?... Ahora el poseia la marca de caín... Y este no lo dejaba morir... Era un gran peso el que tenía encima ya que el jamás igualaria las proezas que su padre había hecho... Pero ahora era su momento de hacer las suyas en ese mundo...

 

--Este local no está en la lista... Café... Tacuba... Hum será una sucursal de la que se encuentra en América latina.?--

 

Se decía a si mismo mientras revisaba lista que su padre le había dejado de todos los negocios de ottery, nombres, descripciones y demás datos que podía resultarle útil Dada la situación, cosa que adentrándose en el local miro algunas personas que en su vida había visto, así que sin emitir palabra se acercó a la barra de cantinero del fondo... Y sonriendole al bartender comenzó a hablar:

 

--Buen día... Soy Dick Grayson, nuevo dueño de la churrería los conejitos y detective del FBI americano mucho gusto, disculpe se encontrará la dueña de este sitio?--

 

Y sin mediar más palabras se les quedó mirando con una cara emocionada, estaba dando sus primeros pasos en el mundo mágico... Todo era nuevo y eso le causaba cierta emoción cosa que intento disimular pero un ligero escalofrío le recorrió la nuca haciéndolo temblar...

 

@@Anne Gaunt M.