Nell H. Olive
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Mensajes publicados por Nell H. Olive
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¡Muchas felicidades a todos los que han ganado! Y a los que no, también, que hacer mascotas es mucho trabajo >.<
Muchísimas gracias al jurado, no me esperaba segundo premio al mejor diseño después de ver otras mascotas geniales *__* Me ha hecho muchísima ilusión, graciasgraciasgracias >_< ¡También a los que me han felicitado!
Nippo es monísimo, Boss *_* Muchas felicidades. ¡Y también Ocixém! Los de cerezas azules habéis hecho un trabajo genial :3
Y eso, qué guay *__* (Hoy ya no estoy tan ilusionada, es que me enteré hace un par de días y ya me he calmado, jajaja).
Besos!
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¡Hola! Tenía pendiente pasarme por aquí, que Fiamma y Sylar ya me lo dijeron, y al fin lo hago e__e
- ¿Eres miembro o aspirante? Si eres miembro, dinos el rango: Aspirante.- Nick: Nell H. Olive
- Nombre Muggle: Núria.
- Edad: 15 años
- Pais: España
- Fecha de Cumpleaños: 9 de noviembre
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¡Hola! Me paso por aquí porque tengo unas cuantas dudas.
Si tengo que modificar la historia de mi personaje, ¿cómo puedo hacerlo? ¿Si mi personaje es jugador de quidditch pero no tiene escoba, puedo rolear cómo la compra? Pero entonces no estaría incluido en lo de "Objetos personales" de la ficha...
Seguro que ya os han preguntado todo esto, pero lo he buscado y no lo he encontrado >.<
¡Muchas gracias!
Editado: He resuelto por mí misma algunas dudas xD
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Muchas gracias por querer adoptarme aunque estéis pasando por todo esto.
La verdad es que no tengo preferencias, pero he estado mirando en el árbol y he visto que Sally ya tiene muchos hijos, y tú no tienes ninguno, así que si quieres puedo ser tu hija adoptiva :3. ¡Muchas gracias de nuevo!
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Me gustaría unirme a la familia Rambaldi. Dejo aquí la ficha:
- Nombre: Nell H. Olive- Ficha de personaje: http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=93158
- Bóveda personal: http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=93174
- ¿Qué parentesco quieres tener? ¿Con quien? Hija de Pad. Ya lo he hablado con ella previamente.
- ¿Quieres que la Rambaldi sea tu familia sanguinea o adoptiva? Sanguínea.
- Email: niwalchandrian@hotmail.com
- Cumpleaños: 9 de noviembre.
- Edad: 15
- País: España.
¡Muchas gracias!
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¡Hola! Me gustaría mucho unirme a la familia Dumbledore :3. Dejo aquí los datos:
Nombre: NellEdad: 15
País: España
MSN (Opcional): niwalchandrian@hotmail.com
Lugar en la familia: El que os venga mejor, yo no sabría escoger >__< Me gustaría ser hija adoptiva de quien se ofrezca >_<
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¡Hola! Antes que nada, la apariencia es fantástica y muchas gracias a los organizadores del Mundial
Tengo una pequeña duda (no sé si lo han comentado antes, he leído las páginas anteriores muy por encima), y es que soy nueva en el foro. Todavía no tengo ficha del Ministerio, pero la ficha que he colgado en las Inscripciones del Torneo es muy parecida a la que colgaré. En las inscripciones puse que no utilizaba la misma porque no tenía, pero, si ahora colgara la ficha en el Ministerio, ¿habría algún problema?
¡Y otra duda! ¿Lo que pasa en las otras partes del foro con mi personaje puede "compaginarse" con lo que sucede en el Torneo de Rol? Quiero decir que, por ejemplo, el personaje de Nell ahora está cursando la Academia... ¿En el rol puedo hacer alusiones a algunas situaciones que ella ya "ha vivido" anteriormente en otros subforos? No sé si me explico >___<
¡Muchas gracias!
Edito: ¡Una última cosa! Me apunté el día 10 a las 23:00h o por ahí... ¿Estoy dentro o fuera? T.T
Centro Examinador de Aparición.
en Londres: Ministerio de Magia
Publicado · Editado por Nell H. Olive
Rol básico XXVI
La licántropa se movía de un lado a otro en la sala de espera, haciendo caso omiso de la invitación a sentarse que dijo la encargada de aceptar los formularios. Poco a poco se dio cuenta de que la sala se había estado llenando sin siquiera darse cuenta, y sorprendida cayó en la cuenta de que muchos eran algunos de sus compañeros de clases.
Estaba demasiado nerviosa como para saludar, así que simplemente apretó los labios a modo de sonrisa. Había empezado a sudar y su cara estaba más pálida que nunca, además de que no podía dejar de moverse para ocupar su mente con algún pensamiento. Los demás parecían igual de nerviosos, y Nell se sintió aliviada al ver que los llamaban antes que a ella.
–Destino, determinación y deliberación… –se dijo, en voz alta. No quería olvidarlo de ningún modo. Su corazón latía desbocado en su pecho y deseó que se la tragara la tierra en cuanto se quedó sola en la habitación. Al poco rato la llamaron, y armándose de valor, entró en la sala.
–Vaya –susurró, con los ojos como platos, aunque no se oyó nada–. Estoy en… ¿dónde estoy? –Unas burbujas salieron de su boca y solo oyó un borboteo. De pronto se dio cuenta de que estaba atada y amordazada, debajo del agua y por si fuera poco, dentro de una caja de cristal sin paredes.
En apenas unos segundos tomó consciencia de lo que había a su alrededor. Delante de ella había muchísimas caras sonrientes, aplaudiendo y señalándola con energía. La chica no entendía nada, aunque sabía que la caja donde estaba metida estaba colocada sobre un escenario. «¿Cómo he llegado hasta aquí? ¿Dónde está la sala de examinación?.»
Había ido varias veces al teatro, pero jamás había estado en el lugar donde se realizaba la actuación. ¿Estaría interrumpiendo una función? Entonces se dio cuenta de algo: ella era la función. La atención estaba puesta en ella por completo, y todos parecían esperar algo.
Enseguida cogió su varita y dijo un hechizo para hacerse un casco burbuja, pero no hizo efecto. Trató de romper el vidrio con conjuros, pero se empezó a poner nerviosa en cuanto no tuvo ningún resultado.
Soltó una exclamación ahogada, y al hacerlo una bocanada de aire escapó de su boca y le hizo sentir un aguijón a la altura de los pulmones. Se rodeó el pecho con energía, notando cómo se iba quedando poco a poco sin oxígeno, y la desesperación y el pánico la invadieron. Temblando de miedo, se lanzó contra el cristal, golpeándolo con todas sus fuerzas sin éxito. Estaba completamente encerrada, y no podía escaparse de aquel horrible lugar.
En medio del caos mental que la envolvía, una pequeña vocecita d¬entro de su mente le ordenó tranquilizarse y realizar la aparición. Ya no porque necesitara la licencia, si no porque tenía que salvarse de aquella muerte inminente fuera como fuera. Intentó recordar con urgencia el significado de aquellas tres D que había repetido tantas veces, desesperada.
«Destino, destino…» se recordó, luchando por no dejarse vencer y no ponerse a llorar. Intentó concentrarse, y visualizó el exterior de la caja. Simplemente unos pasos, solo unos pasos… «Determinación», pensó, ya más calmada. Todas sus energías se concentraron en salir de aquel lugar, en salvarse, en volver a respirar aire y aliviar sus pulmones.
«Deliberación», concluyó. Recordó cada uno de sus miembros poniendo consciencia en los tendones, músculos, huesos que había estudiado minuciosamente, y de repente perdió la concentración al notar que no le quedaba aire. Notaba la mente enturbiada, ya empezaba a perder la consciencia, se iba hundiendo en la negrura…
«Fuera…» fue su último pensamiento, y con un gran esfuerzo giró sobre sí misma. El destino lo tenía claro gracias a su desesperación. La determinación se veía reformada con su voluntad de hierro y su decisión de salvarse. La deliberación fue una rápida reflexión, esta vez sin pensar en cada miembro de su cuerpo. Simplemente se concentró en ella misma, en su esencia, y fusionó las tres partes de su pensamiento en apenas unos segundos.
De inmediato una sensación angustiosa se apoderó de ella, pero no era peor a quedarse sin aire. Sintió que le aplastaban la consciencia y le removían el estómago, provocando una sensación muy desagradable. Le entraron ganas de vomitar, y se habría dado cuenta de que tenía frío si no fuera porque estaba demasiado atontada. Casi había muerto.
Lo siguiente que notó fue un fuerte alivio al sentir el aire entrando por sus pulmones doloridos. Respiró profundamente varias veces seguidas, para recuperar lo perdido, boqueando. Entonces miró a su alrededor, y se dio cuenta de que lo había conseguido. Estaba intacta, sobre el escenario, a unos metros de la caja que la había hecho prisionera.
Sonrió aliviada y emocionada a la vez, mientras el público estallaba en aplausos. Una mujer se le acercó, y Nell cayó en la cuenta de que debía ser la examinadora. Había tomado notas en su libreta. Le sonrió discretamente y la licántropa se dirigió hacia la salida de la estancia, todavía impresionada con lo que había sucedido allí dentro.