Jump to content

Ian alexander

Magos
  • Mensajes

    153
  • Ingresó

  • Última visita

  • Días ganados

    4

Mensajes publicados por Ian alexander

  1. Hola a todos.

     

    A mi también me ha encantado la firma y el avi, ya me la puse como pueden ver e iré a presumirle en algunos sitios xD

    Con respecto al Rol, ¿les parece ir a Nefertiti Discotheque? O ustedes recomienden, no me muevo mucho por el callejon, claro también podríamos ir a la taberna de Myrtle.

    Ustedes digan y paso a dejar mi rol.

     

    Y sigo trabajando en la sorpresa (?) porque mi photoshop anda leento.

  2. Jessi! Amiga mía, cuanto tiempo sin verte, aunque la verdad soy yo quien no aparece por el foro desde hace mucho tiempo xD

    En fin, me alegro mucho que hubieras decidido unirte al equipo de apoyo de Dangelin, todos tenemos fe en que gane :D

     

    Y ya que estoy pensando en algo, ¿que les parece si armamos un rol para que nuestros pj se conozcan? Porque Dan y Jessi no se conocen, y yo no conozco a David. ¿Les parece?

    Oh estoy trabajando en algo, cuando lo tenga listo lo traigo.

     

    ¡Suerte!

  3. Hola David.

     

    Pues ojala que los dos ganen, o si no que se lleven un premio de consolación xD Aun no me e leído las bases del concurso, ni los premios *Vuelve a abrir la pestaña* pero lo hare pronto.

    Y con todo eso, tengo pensado ponerme a hacer firmas, quiza desempolvo mi arte (?) Así que me pondré a buscar imagenes para la campaña y todo.

    • Me gusta 1
  4. El rubio si que se había tomado sus vacaciones en esos últimos meses. A diferencia de otras veces no fue a visitar lugares exóticos, ni anduvo de ciudad en ciudad asesinando gente. Al contrario, fue a New York y rento una casita con una vista fenomenal. Solo quería alejarse de la magia lo mas que pudiera, controlar sus ataques nerviosos y asesinos. Reflexionar sobre la vida y todo ese tipo de cosas.

     

    - Pero es hora de volver al mundo.

     

    Lo primero que había echo al volver era dirigirse a su trabajo, y rogar que aun no lo hubiesen despedido. Su cabello volvía a ser largo y aunque tratara de negarlo amaba tener su varita de nuevo cerca de el. Llevaba una playera verde y unos pantalones grises, planeaba andar lo mas casual, cambiar su modo de vestir tan formas de antes, ahora solo quería ser una persona nueva.

     

    - Buenas tardes. - saludó al llegar

     

    Lo primero que notó fue el revuelo de los elfos, los cuales cargaban con papeles que seguro mostraban una nueva noticia. El tomó uno y descubrió el porque del caos. Juegos del hambre mágicos.Palideció pero estaba seguro que quería participar.

     

    - ¿En que puedo ayudar?

  5. Hola, hola.

    No se que decir pues desaparecí años y no se que es eso *Abre la pestaña sobre los juegos*

     

    En fin, estoy aquí para decir que quiero formar parte del equipo de mi preciosa Dangelin.

    "Vamos Dan, a ganar, los tributos a matar"

     

    Ok no, pero vengo a dar todo mi apoyo a la belleza que va a ganar :D

    • Me gusta 2
  6. Hola

    No me acordaba que tenía que pasar acá y eso que me lo han repetido un millón de veces desde que obtuve mis permisos para ver la mini marca, y pues eso. Me gustaría pertenecer a la familia de manera legal, porque rolear en la Riddle me da cosa si no soy legal aún.

    Así que supongo es todo, ¿no?

     

    P.s me encanta estar involucrado con ustedes,son lo más (:

    • Me gusta 2
  7. El rubio regreso a su trabajo después de ausentarse un poco, ya sentía que no egresaría a ese sitio si no hasta un par de meses más tarde, pero por fortuna ya estaba ahí, con las pilas puestas y preparado para hacer lo que debía. Lamentaba haber faltado durante un tiempo y haber dejado un poco inconcluso su ultimo reportaje. Apenas entro se fijo que había gente nueva en el lugar, estaba tentado a acercarse y presentarse pero noto que había una persona más que solicitaba los servicios de El profeta así que se acerco a la mujer (Felicity).

     

    - Buenos días, mi nombre es Ian Alexander - dijo mirando a la secretaria para que supiera que el se encargaba - escuché que necesita ayuda para publicar un anuncio.

     

    Entonces tomó un pergamino y pluma que había en el mostrador y se puso atento a lo que la mujer pedía. Seguro que su aspecto sería un poco extraño y no combinaría con el resto de los magos con capas que había en el ajetreado departamento, un traje blanco era lo que le vestía y una camisa verde con una corbata del mismo color pero más oscura. Parecía haber salido de una boda y no de las calles de Inglaterra, pero se sentía cómodo con ese atuendo.

     

    - Entonces, ¿de que va el anuncio señorita?

  8. La junta había terminado, el rubio aprendiz había entendido todo a la perfección y había pedido hacerse cargo de la sección de deportes. Estaba enamorado del Quidditch desde hacía bastante tiempo y últimamente sabía más de ello gracias a que había viajado por todo el mundo y había conocido los distintos juegos en Alemania, Paris y Egipto. Podrá trabajar bien ese articulo, solo tendría que ponerse al día con los equipos que actualmente practicaban en el estadio.

     

    El chico volvió a su oficina, le encantaba como se veía la pintura con esas frases sacadas de su mente. Se sentó tras el escritorio y puso a reflexionar acerca de lo que iba a hacer. Suspiro lentamente y llamó a sus elfos para hacerles un encargo, quería que le trajesen unos papeles que había dejado en su habitación en la Malfoy, cosas que había guardado antes de perder la memoria.

     

    Se levanto y comenzó a caminar por la oficina esperando que los pensamientos que llegaban a su mente se regresaran a otro lado, que fuera como un bumerán y no llegaran hasta el. Y apareció su elfina pequeña y escuálida. Le sonrió y tomo los papeles, eran reportajes de viejos partidos de Quidditch, de jugadores que había adorado, eso le daba inspiración para hacer el reportaje. Entonces entre los papeles encontró una fotografía de el y su hermana Meiiden jugando en escobas.

     

    - Ya se lo que debo hacer.

     

    Sacó un pergamino y comenzó a escribir.

  9. Aún no salia de su oficina y todo gracias a que se le ocurrió una increíble idea para decorar su habitación. Tomó su varita y gracias a un hechizo comenzó a escribir en las paredes, eran frases simples sin mucho significado entre sí pero que le gustaban mucho, venían de canciones, de libros, e incluso algunas venían de películas muggles. Su caligrafía lleno las antes blancas paredes con frases en color negro, no necesitaba tener mucho tiempo para pensar las frases, todas llegaba a su cabeza de inmediato.

     

    Terminó y sonrió satisfecho ante su decoración y sobre todo por una frase que tenía en la pared de enfrente, "Todos somos jugadores, pero no somos los que movemos las fichas". Las cosas suceden por cosa del destino, pensó y suspiro. Ahora si tenía que salir y asistir a la reunión antes de que se terminara o dijeran lo más importante. Salió acomodándose el cabello pues a pesar de que estaba corto seguía siendo muy rebelde.

     

    No había nadie fuera de las oficinas, por lo cual supuso ya todos se encontraban en la oficina de su jefa listos para escuchar lo que tenían que decir en aquella reunión mensual. Ian avanzó hasta la oficina y la abrió sin antes tocar, aunque como no esperaba una respuesta por eso había entrado de inmediato.

     

    - Hola, ¿Iniciaron sin mí?

  10. Incluso estando tan callado y con tanta gente alrededor se perdió de la platica que sus compañeras llevaba, quizá discutían o algo por el estilo, solo que el Malfoy no lograba hilar las oraciones en su cabeza. Se sentía realmente desconcertado y su cuerpo temblaba como si quisiera romper algo otra vez, no podía hacerlo o quizá lo echarían de "El profeta".

     

    Decidió apurar el paso cuando vio a su directora acercarse al resto. Dio una bienvenida, hablo sobe la junta mensual que se se celebraría en unas horas y dio instrucciones a unos cuantos elfos. Ian no dijo absolutamente nada y solo jugaba con el reloj que tenía atado a su muñeca. Bel dijo algo de elegir oficinas y eso fue suficiente para el.

     

    No le gustaba permanecer tan callado pero lo prefería a ponerse a gritar como demente. Utilizó el elevador junto con otras personas y les sonrió agradable,no quería que pensaran que era un ogro o algo por el estilo. La idea lo hizo reír.

     

    Al llegar al piso de oficinas encontró una que no llamaba mucha la atención por una puerta despintada y un poco avejentada, pero para el fue perfecta.

     

    - Seguro por eso nadie la eligió. - dijo al entrar.

     

    Era pequeña y sucia, unas cuantas arañas caminaban por el piso lo cual causa gracia al joven rubio. Ian llamó a su elfo Ritty y su elfina Misk y les ordeno limpiar el sitio. Mientras que el sacaba su varita y acomodaba los muebles, tenía una ventana y enfrente de ella acomodo un escritorio, un pequeño estante con libros cerca de la puerta y era todo.

     

    - Después pinto las paredes. Ahora a la reunión.

  11. Tenia que admitirlo, llevaba bastante tiempo sin pisar aquel edificio, y tenía que ser realista no era porque no quisiera o lo hubiera olvidado,al contrario, le encantaba ser profetista y pensar que al graduarse podría convertirse en un empleado regular lo entusiasmaba, pero su vida lo ponía increíblemente ocupado, si antes creía que era difícil ahora era un manicomio.

     

    Con todos los dramas que vivía seguro podría crear un articulo completo en el periódico, pero tenía que mantener su vida personal alejada al menos hasta que las aguas se calmaran. O hasta que su ex novia y casi prometida decidiera volver con el, algo que veía un poco complicado pero no difícil.

     

    Entro al sitio acomodándose la corbata esmeralda que colgaba de su cuello, llevaba un pantalon de mezclilla y una camisa blanca pero le encantaba usar corbatas en el día, lo hacía lucir mejor, o eso pensó. Se llevo una mano a su ubio cabello y se quedo ahí parado, estático. No tenía idea de que hacer a continuación.

     

    - Bueno, las noticias nunca duermen.

  12. El rubio volvió al Profeta donde trabaja. Ian llevaba un buen tiempo sin aparecer por ahí, aunque había traído un reportaje sobre la gala de Halloween. Llevaba una gabardina gris con botones hasta el cuello y el largo hasta las rodillas, además de un pantalon negro.

     

    Se acerco a las escaleras y subió. Quería llegar donde hubiera un escritorio para ponerse a escribir. Quizá hubiera algún trabajo que hacer.

  13. Llevaba ya un par de horas sentado descansado, se estaba quedando dormido, por no decir que ya estaba dormido, cuando un elfo se acerco a el un poco nervioso y angustiado. Ian se espabilo observándolo, sus ojos verdes se encontraron en su frágil cuerpecito, no estaba ahí frente a el por nada así que Ian le envió una mirada que significaba que continuara con lo que quería decirle.

     

    - Joven Ian - empezó - la señorita Bel quisiera informarle que en este momento esta ocupada ya que el ultimo articulo de la señorita Skeeter esta trayendo algunos problemas

    - Entiendo - esbozó el chico sonriendo

     

    Era bien sabido que Rita Skeeter causaba muchos problemas cuando traía algún articulo.

     

    - No importa, mientras veré con que me entretengo

  14. El chico volvía de sus vacaciones no planeadas. Esperaba que no lo hubieran corrido aún de la oficina pues enserio deseaba trabajar como empleado ahí una vez que se hubiera logrado graduar de la academia. Llegó hasta El profeta, esperando ver a su directora y pedirle disculpas por su ausencia y sobre todo pedirle que le pusiera a cargo de cualquier cosa que pudiera hacer. Quería ayudar en lo que fuera necesario después de haber perdido tanto tiempo de trabajo.

     

    pero como no hallaba a Bel en ningún sitio decidió enviarle un memorándum. Le pidió un pergamino a uno de los elfos ahí dispuestos a ayudarle y escribió con su pulcra caligrafía:

     

    A Bel Blackwood

    Mi nombre es Ian Alexander Malfoy Rambaldi, aprendiz de esta oficina y por medio de este quisiera pedirle disculpas por mi larga ausencia. Al mismo tiempo decirle que de ahora en adelante estoy a su servicio y por lo tanto si necesita mi ayuda en algún proyecto no dude en incluirme, con gusto le ayudare.

     

    Terminó de escribirla y se la mando a su jefa en forma de Memorándum.

  15. Vio como Dangelin y Devi intercambian palabras y notó como su cita trataba de mantenerse ocupada para no estar a solas con el. El sonrió divertido, las dejo platicar unos minutos y después trató de intervenir para seguir con la ojiazul y quizá avanzar un poco más en su relación complicada. Tomó la mano libre de Dangelin y entrelazó nuevamente sus dedos mirando a Devi y después diciéndole:

     

    - Apoyaba a Irlanda. Lamento interrumpirlas pero, ¿te la puedo robar tía? me gustaría pasear con ella a solas - esperó la respuesta y después se alejo con la chica de cabello negro

     

    Estaba seguro que eso traería graves consecuencias pero ya no había nada que hacer y no se podía echar para atrás. La arrastró hasta una mesa con bebidas y le sirvió una copa de algún vino que había ahí y el se sirvió una igual. Enseguida se le quedo mirando fijamente a los ojos y tuvo la sensación de estar viendo a través de un ventana la lluvia caer. Hizo un grande esfuerzo para simular estar enojado y ofendido y le reclamaó:

     

    - Sabes que Kahty es mi madre ¿Porque no me pediste a mi que la saludara de tu parte?

     

    Su intención no era saber la verdad sino solo ponerla a ella rabiosa, sabía el verdadero motivo por el cual le pidió a Devi y no a el, no quería que el abriera la boca y dijera cosas de mas acerca de la relación de el y ella.

     

    - No te preocupes querida, mantendremos esto en discreción si así lo quieres - mencionó acariciando con la yema de los dedos la mano de ella

  16. Dangelin jamás soltó su mano y un poco apenada (nada usual en ella)le aclaro que no le había dejado nada por hecho y que quizá en un futuro podría ser perdonado, eso era más que suficiente para el chico que deseaba hacer las paces completamente con ella y en un futuro pedirle una relación más sería. No sabia como ni cuando pero esa chica de ojos azules lo había hipnotizado dejándolo como un esclavo tratando de complacerla.

     

    Ella volvió a insistir buscar a alguien más pues seguro que estaba nerviosa con el a solas, y el no se la ponía fácil pues comenzó a acariciarle la mano con las yemas de los dedos, y lo que más quería era acariciarle el rostro nuevamente y probar sus labios, pero decidió que ya había tentado su suerte muchas veces así que se metieron entre las mesas buscando a algún conocido

     

    Entonces los halló: Devi y Deiwan.. La primera era su tía y compañera de generales, y el segundo era el patriarca de su familia y ex profesor de la academia. Los dos estaban caminando hacía el salón principal tomados del brazo lo cual no se le hizo extraño al rubio, quizá su tía se había pasado de copas y necesitaba ayuda para caminar (xD)

     

    - ¡Devi! - gritó el rubio acercándose hacía ella y jalando a su pareja - y Deiwan, ¿cómo están? - preguntó entusiasmado de ver más rostros conocidos - Les presento a Dangelin Haughton - dijo el ojiverde señalando a la bruja

  17. El rubio regresaba a trabajar tras unos días de vacaciones no planeadas, no sabía con que cara llegar pues había estado ausente por un largo tiempo y no sabía que trabajo realizar. Sabía que necesitaban a alguien que asistiera a eventos importantes y realizar alguna nota sobre ello, pero el solo sabía de la boda de su amiga Lily y siquiera había asistido. Gruño por lo bajo y sacó una libreta de su bolsillo trazando una sonrisa, era lo más que podía hacer para mejorar su humor.

     

    Tenía muchos motivos para ser feliz y entre ellos se encontraban sus calificaciones en la academia, y también el hecho de haber hecho las paces con su amiga, o al menos besarse con ella significaba hacer las paces. Entró al edificio y sus tenis hicieron ese desagradable rechinido que tanto odiaba, pero la culpa la tenían esos pisos tan pulidos por los elfos.

     

    - Un nuevo día - esbozó observando el sitio - y no tengo idea de que hacer

  18. Sintió los labios de su pareja corresponderle ese beso por unos breves instantes pero casi de inmediato ella se separó y le pidió que parara, o así lo interpreto el. El estaba sonrojado y con los ojos brillando de alegría mientras que ella se encontraba como siempre pálida y por algún motivo molesta, más sin embargo Ian sabía que no estaba furiosa con el sino consigo misma. El la conocía perfectamente aunque la hubiera olvidado por casi 3 años.

     

    - No te preocupes, no lo haré a menos que me lo pidas - susurró apartando su rostro del de ella con mucha fuerza de voluntad - Me dejaste muchas cosas en claro - y sonrió encantado por los resultados de su experimento.

     

    Ella también lo amaba, o al menos sentía algo hacía el para haberle correspondido el beso. Ian aprovechó de su suerte y le tomo de la mano entrelazando sus dedos con los de ella tratando de buscar su mirada y cerciorarse que ella se encontraba bien. No quería causar un escándalo.

     

    - ¿Qué te parece si nos sentamos y buscamos a alguien conocido para platicar? Al menos que quieras seguir a solas conmigo - esbozó provocativamente mientras se mordía el labio inferior.

  19. - ¿Educación? - le preguntó el deteniendo la marcha y parándose frente a ella

     

    El era más alto que ella por lo cual le tomó de la barbilla para obligarla a sostenerla la mirada. Ella se rehusaba a mirarlo pero Ian no desistiría, quería que lo mirara a los ojos y que tratara de negarle algo que ella bien sabía que era verdad. Tenerla tan cerca, con solo 10cm de distancia lo puso nervioso pero se tranquilizó de inmediato pues si quería desarmarla tenía que actuar serio y maduro: ya no era un niño.

     

    - Niega que no adoras como tocó tu rostro. Niega que no amas el modo en el que susurró tu nombre, Dangelin. Dime que no deseas besarme como yo quiero besarte

     

    Estaba jugando en un terreno prohibido. Ella le había hecho jurar que no volvería a hablar sobre sus sentimientos y menos en un lugar publico. Pero era bastante complicado tenerla tan cerca, respirar su aroma y no hacer nada al respecto. El no lo pensó ni un segundo más y se acerco peligrosamente a los labios rojos de su acompañante, apreciando cada segundo, guardando cada respiración y atesorando el recuerdo de sus latidos palpitando al mismo ritmo, al son de una misma melodía que solo ellos conocían.

     

    - Dime que no me extrañas - le susurró mientras recargaba su frente en la de ella - di que no me amas y te dejare en paz

     

    Terminó diciendo y la beso suavemente en los labios, temiendo la reacción de la pelinegra.

  20. Era bastante extraño para el estar esperándola a ella para ir al baile de cierre del mundial, las diferencias entre ambos eran millones pero las semejanzas les ganaban a todas esas. Ian no podía contener su sonrisa pues amaba ver a la chica de cabello negro, lo hacía sentirse como en casa aunque ella fuera todo lo contrario a un hogar. Ian suspiró pesadamente mientras la esperaba, sabía que era normal que las chicas se dieran su tiempo antes de salir algún lado, pero estaba bastante nervioso y la idea de que ella lo rechazaría y no asistiría con el rondaba cada segundo en su mente.

     

    Finalmente apareció, un vestido ceñido al cuerpo y de color negro al igual que su largo cabello negro. Se veía deslumbrante a los ojos del rubio. Ella lo miró y a el se le cortó la respiración, odiaba sentirse así cada vez que ella le dirigía una mirada, odiaba que su corazón se comportara tan ridículo con tan solo verla, odiaba amarla. Pero amaba sentir su mirada en el. El le sonrió y le mostró su brazo para que lo acompañara.

     

    Ian llevaba un traje negro pero con una camisa verde debajo del saco para que combinara con sus ojos verdes. Su cabello rubio estaba más despeinado de lo habitual pues el sabía que a Dangelin le gustaba el cabello despeinado. Ella le tomó el brazo resignada, se le notaba en la mirada. Ian sabía que era bastante extraño que ambos estuvieran juntos pues después de todo se odiaban mutuamente pero de igual forma le encantaba.

     

    - Te ves hermosa - le dijo cuando llegaron a donde se celebraría el baile

  21. Un elfo le había aceptado su permiso para realizar el examen y se encontraba esperando su turno junto a otros compañeros de la clase, aunque por supuesto no entablo conversación con ninguno puesto que todos estaban bastante concentrados para aprobar el examen, sentado como se encontraba trató de concentrarse en todo lo que había leído y le habían contado antes e llegar ahí. Por algún motivo el rubio presentía que antes ya se había aparecido y dedujo que quizá lo habría hecho antes de perder su memoria en ese accidente con los muggles, pero decidió no confiarse y concentrarse en lo que hacía y no en su tortuoso pasado. Entonces escuchó como lo llamaban, era su turno y estaba listo. Se levantó y se acomodo la corbata verde.

     

    Al entrar encontró un escenario tan maravilloso que le daban ganas de aplaudir. Se encontraba en un coliseo romano, el suelo era completamente de tierra y alrededor había unas gradas donde pudo distinguir a Nathaly sentada con una libreta. Quería echarse a saltar, reír o bailar todo a la vez pues su sueño se estaba haciendo realidad: roma. Amaba la historia y sobre todo lo que tuviera relación con los romanos, podía imaginarse a la gente del pasado sentados en las gradas observándolo y esperando que fallara, e incluso a los soldados cuidando de la seguridad de los curiosos cerca de las jaulas. Sentía que su destino era encontrarse ahí y no en otro sitio. Un aire caliente le revolvió el flequillo y sus orbes esmeraldas se clavaron en un círculo.

     

    Había olvidado por completo por lo que estaba ahí y ver el círculo fue como si le hubiesen dado una cachetada, se paro dentro del círculo mientras observaba alrededor en busca del siguiente círculo color sangre, de su próximo destino. A diez metros de donde se hallaba halló otro circulo el cual se hallaba peligrosamente cerca de un león enorme, su melena se agitaba con el viento y observaba al rubio con el rabillo del ojo, el chico no podría distraerse y avanzar más de los diez metros o sería comida de león. Suspiró profundamente, si antes se hallaba nerviosos ahora más y el calor que hacía en el lugar no ayudaba mucho.

     

    Respiró profundamente y se concentro en las 3’D, se las sabía de memoria pues había leído sobre ellas en un libro de la mansión Malfoy. Se quitó las manos de los bolsillos y cerró los ojos, era mejor para el concentrarse si cerraba los ojos y la luz del sol no le daba directo al rostro. Destino, fue la primera D que llegó a su mente, su destino era el círculo rojo y nada más, no más lejos ni más cerca: el círculo. Escuchó un rugido proveniente del león pero lo ignoro, estaba en completa concentración y el animal no lo desconcentraría ahora.

     

     

    Determinación, pensó enseguida. Estaba bastante decidido respecto a querer aparecerse pues no quería volver a usar el autobús noctambulo nunca más, la determinación que tenía era bastante grande y nadie podría quitársela, la había estado fortaleciendo desde que pidió que le firmaran el permiso. Se sentía cada vez más cerca y pensar en la última D se le hizo bastante sencillo: Deliberación. Fue tan sencillo girar sobre si mismo y lo que sintió fue algo que jamás había experimentado, como si pasara a través de un pequeño tubo y se le cortara la respiración y un segundo después respiro.

     

    Un hediondo olor invadió su nariz y cuando abrió los ojos se encontró frente al animal de gran melena. Chilló y salió corriendo en dirección de la puerta, pero orgulloso porque había logrado aparecerse en un intento, el león que parecía estar amarrado solo lo observo mientras Ian salía de esa sala, sin antes preguntarle a Nathaly como lo había hecho, esperando haber aprobado.

     

    - Espero lo haya logrado - le comentó mientras salía y pensaba como les habría ido a sus amigos

  22. Había estado a punto de recorrer el edificio con sus nuevas compañeras de trabajo cuando la recepcionista les hizo saber que la directora había llegado y que los esperaba a todos en la sala de juntas. Entusiasmado el chico sonrió y se encaminó a la dichosa sala detrás de Goshi. No sabía que esperar de esa reunión pero deseaba trabajar de inmediato.

     

    Entonces al abrir la puerta se encontró con quien sería su jefa a partir de ahora, a partir de ahora porque no querría salirse de ese trabajo. Después de que su nueva compañera se presentase Ian hizo lo suyo consigo mismo:

     

    - Hola, mi nombre es Ian Alexander y también soy nuevo...aprendiz - concluyó, aunque debería ser obvio pus era la primera vez que pisaba ese edificio

  23. Alicia había sido muy amable en proponer un recorrido por el lugar, ya que así todos podrían saber donde tenían que trabajar de ahora en adelante. El Malfoy le sonrió a la chica que parecía muy amable y moviéndose sus manos en forma de desesperación aceptó la oferta de la Báthory.

     

    - ¿Así que la jefa esta ausente?, pues me encantaría conocer un poco el lugar, después de todo ya me pedí una vez y creo que sera mejor echarle un vistazo antes de que se repita una vez más - señaló riendo

     

    No era muy extraño en el ponerse a reír por sus propios errores, después de todo ese era el primer paso de un escritor: Aprender a burlarse de si mismo. Entonces encaró a las otras dos chicas y les preguntó su opinión acerca de ir a recorrer el edificio junto a el y Alicia.

  24. Se había perdido en aquel edificio y no solo eso,había hecho tropezar a un elfo que cargaba una pila de periódicos, más sin embargo el no se sentía abochornado ni avergonzado, todo lo contrario. De esa experiencia se habría de llevar una grata experiencia y un nuevo aprendizaje: "Jamas tomar desprevenido a un elfo que carga una pila de periódicos". Aún riendo bajo para ver si podía encontrar a alguien que le ayudara con su nuevo puesto de aprendiz.

     

    Entonces descubrió a la chica que el había ignorado unos minutos atrás,no por ser descortés sino porque cuando la escuchó ya estaba subiendo. A la chica se le habían unido dos persona más (Az, Goshi,Alicia). Al parecer hablaban sobre sus nuevos puestos de trabajo así que Ian se les acercó, al menos con ella sería más sencillo saber que tenía que hacer.

     

    - Buenos días - dijo - Mi nombre es Ian Alexander y no pude evitar escuchar su conversación, yo soy un nuevo aprendiz y la verdad estoy perdido - finalizó con una sonrisa de oreja a oreja

     

    Solo esperaba que las mujeres no lo ignoraran o decidieran no ayudarle, pues después de todo el había ignorado a la chica que tenía enfrente.

  25. Se encontraba bastante emocionado a decir verdad, había conseguido un empleo en el periódico mágico El profeta, el primer acercamiento que tuvo al mundo mágico fue gracias a ese periódico y ahora se encontraba gustoso en el callejon Diagon en direción al edificio. No podía disimular la gran sonrisa en su rostro, simplemente estaba contento por su pequeño trabajo como aprendiz en dicho lugar.

     

    Al entrar el departamento era increíble, le sorprendía el estilo con el cual estaba decorado, era tan elegante que le hacía recordar a sus libros muggles de historia. Un elfo se le acercó ofreciéndole algo de beber y el aceptó un vaso con agua, le dio unos sorbos mientras observaba todo el sitio. La verdad es que estaba perdido, ni siquiera el letrero con los distintos pisos lo sacó de sus dudas, ¿ahora a donde tengo que ir? se preguntó.

     

    Tenía que presentarse con su jefe, así que subió las escaleras esperando llegar a la oficina del director del profeta y poder comenzar con su trabajo de inmediato. Después de todo era su sueño estar ahí.

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.