Kary Lili Potter

-¿Pueblerinos?- Kary rió estridentemente mientras tomaba su larga cabellera roja haciéndose un moño alto, sin duda el calor estaba castigador, pero a la vez agradable, quizá por el simple hecho de estar al lado de su mejor amiga. -¿En Serio? ¿un montón de personas en tapa-rabo cantando cosas raras mientras me dan mi anillo? no señora, yo quiero algo que impacte, una ceremonia en uno de esos hoteles de hielo- Miró al horizonte mientras imaginaba como sería estar en ese lugar maravilloso.

Posó su mirada en el verde césped ante las palabras de la rubia, sin duda estaba enojada por su ausencia, no la culpaba en lo absoluto, simplemente se fue sin mirar atrás, mas que todo por su bienestar emocional, suspiro antes de contestar a su pregunta, sin duda no sabia como hacerlo.

-Yo..- Acomodó un mechón de cabello que había escapado de su moño y lo puso en su lugar. -Yo la verdad me fui porque no me sentía muy a gusto con estos lugares- Sonrió levemente y volvió a hablar con voz pausada. -Muchos recuerdos, demasiados, y dolorosos algunos, pero al menos ahora estoy feliz, estoy perfecta- Miró a su compañera justo a tiempo para ver como aparecían unos lentes oscuros sobre su rostro.

-Marida, si te incomoda tanto el sol, podemos buscar alguna sombra- Sonrió amable y prosiguió. -¿Ahora eres jefa de casa?, ¿de cuál? se bien que eso siempre fue lo que quisiste hacer, y me alegro mucho-

La holandesa estaba mas que feliz del rumbo que habían tomado sus vidas, y aun mas feliz de poder seguir contando con ella a pesar de tanto tiempo.

"Weasley reprimida" esas palabras entraron como bombas en los oídos de la Potter.

-Reprimida nada, un cambio de look no le hace daño a nadie, además, eso de ser rubia afecta el cerebro, esta probado científicamente- Rió sutilmente mientras miraba a su amiga, sin duda este era uno de los momentos mas felices para la pelirroja, siguió a Leah mientras escuchaba su propuesta sobre la boda, África, sin duda estaba completamente chiflada.

-¿África? ¿en serio? estas muriéndote con este solsito, y tu te quieres ir a África, ¿porque no en Alaska? ¿o en el Ártico? ambos comienzan con "A" y hace mucho menos calor- Dijo dedicándole una sonrisa a la rubia mientras estiraba sus blancas piernas haciendo que recibieran por completo los rayos solares, había sido buena idea irse con ropa fresca, y era la primera vez en años que la holandesa no usaba sus enormes tacones, si no unas confortables zapatillas que combinaban a la perfección con su delicado short y su camisa de tirantes.

-Cuéntame entonces, ¿que es de tu vida?- Dirigió sus ojos celestes hacia Leah y le dedico una sonrisa. -Me he enterado que estás muy ocupada últimamente.

Había pasado ya cerca de dos años desde su último encuentro, sin duda las cosas habían cambiado, pero lo que jamás iba a poder cambiar, sin duda, era el cariño que la Holandesa le tenia a Leah. Una carta anónima sin duda la iba a despistar, y nunca, ni en un millón de años sospecharía a quién iba a ver en esos jardines.

- Mientras no me mate...- Sonrió la pelirroja retractándose por unos segundos de la idea de la carta.

No tubo que esperar mucho antes de escuchar los pasos, los reconoció al instante, no todo había cambiado, no pudo evitar sonreír mientras se escondía tras un árbol cercano, esperó el momento perfecto para arremeter contra ella y con un fuerte abrazo la tiró al suelo.

-Tory- Gritó tan fuerte como pudo, no importaba si alguien la escuchaba, había pasado mucho tiempo como para preocuparse por eso. -¡Si viniste! me querías matar...- Dijo mirando la mano de Leah que apretaba con fuerza la varita y luego volvió a su habitual sonrisa. Subió la mirada hasta el rostro de su amiga y se sorprendió al verla con el cabello de otro color, rió intensamente mientras se levantaba, sacudía su ropa y extendía su mano hacia Leah.

-No sabia que ahora era una de esas rubiecitas oxigenadas- Guiño un ojo con picardía sin paras de mover sus orejas ahora teñidas de un rojo intenso.

-¿Como esta la marida mas sexy que conozco?.

Zamira

Recepcionista

Estaba limando mis uñas como siempre, parece que nunca quedaban perfectas, cosa que tarde o temprano iba a lograr, escuchaba perfectamente cada conversación que se llevaba acabo en ese lugar cuando llegaron dos personas (Enrick y Anna), o si a eso se le pueden llamar personas, quienes pedian registro para demonios.

-Cuando sera el día que dejen de molestar estos- Dije por lo bajo mientras tomaba dos formularios para demonios. -¡Hey tu! el demonio o lo que seas, vengan.- Dije de mala gana, parece que nunca me dejarían limar mis uñas en paz.

Ficha para el registro de Demonios y Banshees.

 

• Link a la Ficha Personal:

 

• Nombre del registrado:

• Tipo de espíritu: (Solo en caso de Demonio; indicar si es Íncubo y Súcubo. Si se es Banshees solo indicarlo.)

• Residencia:

 

• Características físicas:

• ¿Puedes cambiar tu físico de alguna forma?

• Características peligrosas:

• Poderes o dones:

• Causas que te pueden descontrolar:

-Esa es la ficha para demonios, ahora no hay nadie que los pueda atender, pero seguro algún día llegan y los registran, si es que quieren, se la pasan haciendo nada en esos cubícul.os.- No estaba de mas una pequeña mentira blanca para aliviar el estrés, igual nadie me estaba escuchando en ese momento. Miré como ambos tomaban su respectiva ficha y volví a limar con extremo cuidado mis uñas.

El departamento se encontraba prácticamente desolado, a excepción de Zamira y un joven que estaba llenando unas planillas, observe curiosa a ver si la recepcionista me hacia alguna señal para que fuera en ayuda del chico pero parece que la mujer no había notado siquiera que ya había llegado nuevamente.

Suspire con impaciencia, pocas cosas me hacían enfadar o poner estresada, pero sin duda alguna esa mujer me ponía de un humor de perros. Vi como el joven entrego los formularios y salió rápidamente, acomodé el registro de Laimi que había hecho momentos atrás y me levante en dirección a la recepcionista.

-Hola Zamira ¿como estás?- Pregunté con el tono de voz más amable que pude en ese momento mientras movía mis tiernas orejas gatunas, la mirada de la mujer fue directo a estas y sus ojos se pusieron como platos, quizá nunca había visto algo así hasta los momentos, miré a otro siempre me había incomodado un poco ese tipo de miradas por lo que decidí ignorarla.

-¿Me das los formularios que te entrego el chico? Así vamos adelantando el trabajo, y nada se nos acumula- El tono de mi voz sonó casi como una orden, lo que me sorprendió bastante y al parecer a Zamira también quien me dedico una mirada frívola y entregó de mala manera los pergaminos que había solicitado para luego empezar a limar sus uñas.

–Gracias- Comenté sin ganas a causa de la actitud de la mujer y me dirigí a mi cubículo mientras revisaba cada formulario.

Una vez ya en mi escritorio tomé mi pluma y comencé a aprobar los registros.

Aprobado tres Elfos Domésticos Pumkin, Petry, Ferdinan de la Familia Lovegood

Observé la ficha de los fantasmas, con una extraña sensación de felicidad y temor, era la primera vez que registraría un fantasma, en este caso dos, y sabía bien lo que debía hacer.

Dejé sobre el escritorio los formularios de los elfos ya aprobados, juntos con los otros y tomé mi bolso dirigiéndome a la salida. Posé mi mirada sobre Zamira y me pareció más prudente avisar que haría, aunque lo más probable es que si llegaran a preguntarle a donde había ido no respondiera nada, o simplemente no supiera.

-Zamira, iré a las mansiones Lovegood y Ravenclaw, necesito hablar con los fantasmas antes de hacer la aprobación, si llega alguien por favor diles.- Hice énfasis en las últimas tres palabras, de modo que parecía casi una súplica. Arreglé rápidamente mi larga cabellera azabache, y Salí del departamento lo antes posible.

Mis ojos celestes seguían posados sobre la foto, sin duda alguna me encantaba verla y recordar ese hermoso momento <<Amigos para siempre,incluso parece mentira>> Pensaba distraída intercalando la mirada entre el brazalete que tenia en la mano derecha y la foto, sin poder evitar sonreír con los recuerdos. El ambiente sin duda estaba diferente, no por la soledad si no por algo mas, algo casi imperceptible para alguien que no conociera el lugar por lo que quité la mirada del porta retrato y miré sorprendida mi escritorio, no lo había notado pero se encontraba totalmente impecable, también tenia un bonito florero con lilas que no se encontraba cuando me fui unos días atrás.

Esos pequeños detalles me hizo fijarme mas detenidamente en el espacio que me rodeaba, sin duda lo habían cuidado en mi ausencia lo cual aprecie inmensamente, y no dudaría en agradecer personalmente en cuanto llegaran todas, pronto me fijé en una pequeña hoja que se encontraba en mi escritorio, no me tomo mas de un segundo saber de qué y de quién se trataba por lo que sonreí mientras tomaba mi pluma para aprobar de inmediato la ficha que había dejado la chica peliazul Laimi.

Aprobado un Elfo Doméstico "Zura" de Laimi Petterson

Dejé la ficha ya aprobada encima de mi escritorio, y posé mi mirada esta vez sobre las flores sobre el escritorio, que sin duda era algo que luego le recompensaría a Laimi.

Imprevistos personales habían tomado parte importante en mi agenda durante un tiempo, haciendo que faltara al trabajo, lo que no me ponía nada feliz, aunque volver al ministerio me llenó de una energía positiva que me hizo poner de nuevo mi mejor sonrisa. Caminé hasta los ascensores del ministerio, ya conociendo a la perfección el camino.

<<Dudo que mi ausencia haya causado algún problema>> pensé mientras murmuraba un leve "buenos días" mientras abordaba el ascensor, que luego de no mas de un minuto anunció la cuarta planta. Los tacones negros que por lo general usaba esta vez habían dado paso a unas ligeras sandalias del mismo color, que estaban casi al ras del suelo haciendo que mi pequeña estatura se notara mas que nunca.

Me acerqué al escritorio de Zamira dispuesta a hablarle, pero parece que esta estaba con la misma actitud de siempre, al parecer ni los clientes la hacían sacar una sonrisa amable, suspire un poco ante su comportamiento y me limite a saludarla con la mano. Me dirigí a los cubículos y sorprendida observé que no se encontraba nadie.

<<Ahora si me perdí de algo>> dije a mis adentros mientras asomaba tímidamente la cabeza hacia el despacho de Tauro a ver si al menos ella se encontraba.

-Vacío- Dije suspirando y sentándome en frente a mi escritorio mientras observaba los movimientos de los chicos en la foto ue reposaba sobre mi escritorio esperando por hacer algo.

La visita de Leah ciertamente me había llenado de una alegria nueva, era genial verla y estaba segura que eso nunca cambiaría, también me sentía satisfecha con el desempeño de la aprendiz, Laimi, ya estaba lista para hacerlo ella sola. Me encontraba jugando con mi cabello color azabache cuando me percate de la llegada de una persona mas, sonreí al ver al chico tomar la ficha de elfos y esperé paciente a que la llenara.

-Buenos días- Dije amable mirándolo cuando termino de llenar su correspondiente ficha. -Permiteme por favor- Tome la cartilla y la revise cuidadosamente. Todo parecía estar correcto, por lo que no dude en aprobarla de inmediato.

Aprobado registro de un Elfo Doméstico Siro de Lestanus Rambaldi

Di una copia del formato ya aprobado al joven y sonreí. -Todo listo, ¿hay algo mas en lo que te pueda ayudar?- Comente posando mis orbes celestes en los suyos y moviendo ligeramente mis orejas gatunas.

Observe lo que hacia Laimi, parecía debatirse entre la seguridad y sus nervios de primeriza, parece que lo estaba manejando de maravilla. Pose mis ojos sobre Leah, mirando como se recostaba sobre el escritorio, algo que sin duda solo dejaría hacer a alguien de mi confianza.

-¿Mas compañía eh?, pues si es por mi te diera un lugarcito a mi lado- pronuncié animadamente mientras daba vistazos rápidos al trabajo que hacia la peliazul. Miré en silencio a Leah parecía estar observando todo con detalle cuando finalmente sus ojos de color verde se posaron en la foto que había puesto a penas llegar, espere por su reacción sabia que se reconocería y también sabia que los recuerdos de ese día llegarían a su mente.

-Es muy bonita, sabes que soy gran fotógrafa- Dije mirando el brazalete que los tres llevábamos como pacto de amistad por lo que arregle hice un movimiento rápido mostrando que yo también la conservaba.

Finalmente Laimi dio por aprobada la ficha de nuevo Elfo del cual habían pedido registro minutos atrás.

-Perfecto Laimi- Dije dedicándole una sonrisa, sin tener nada que corregir. Escuché a Leah que también agradecía y se preguntaba que hacer por lo que reí mirándola.

-Ahora todo queda por parte de nosotros, y espero que vayas a cuidar bien a ese elfo, mira que los otros dos son una catástrofe andante.- Pronuncié mirando a la licantropa. -Gracias por la visita tan agradable Tori.- dije sonriendo en gran manera.

Laimi parecía callada, no había pronunciado palabra alguna, ni sobre la carta, ni sobre los rumores que había escuchado sobre el mini thestral que tenia Tauro en su oficina. <<Quizá aun esta nerviosa>> Pensé mirando aun a ver si hacia algún movimiento, Pero no se veía reacción de su parte, suspiré levemente y luevo posé mi mirada en la foto que había puesto en mi escritorio, mientras tamborileaba ligeramente mis perlados dedos sobre la mesa.

Escuché unos pasos, sin darle importancia, hasta que escuche una voz que me resulto familiar, Leah había ido a registrar un nuevo elfo, uno que al parecer iba a amar.

-Ya era hora de que quisieras a uno- Dije riendo mientras tomaba la planilla llena que me entregaba, la revise con cuidado y luego posé mi mirada sobre Laimi. -¿Porque no lo haces tu? así vas aprendiendo como es todo- Sonreí pasandole el formulario a la peliazul.

-Vamos a ver como lo hace Tori- Dije guiñando un ojo a la licantropa. -Espero no te moleste. Y por ahora todo bien, un poco mas tranquilo de lo que esperaba- Dije tranquila con una gran sonrisa en mi rostro como era costumbre, estaba convencida de que mi amiga entendería la situación.

El trabajo no estaba tan ajetreado como me lo había imaginado, pensé que seria todo el día registrando toda clase de seres y elfos sin descanso, pero por ahora era todo lo contrario, a excepción de un chico que se fue corriendo luego de entregar el formulario a Zamira, no pude evitar reír un poco, nunca había visto hacer eso, quizá por estar rodeada de muggles durante tanto tiempo.

Observé como Lyra hablaba con Laimi, ciertamente se la veía poco participativa, y se notaban sus nervios de hacer el trabajo, como normal en cualquier persona y mas en una aprendiz. Escuché atenta las palabras que la Ryddleturn le brindaba a la chica y no dudé en confirmarlas.

-Es cierto Laimi, nosotras te ayudaremos, no es nada difícil- Sonreí amable mientras veía como la peliazul se acomodaba en su escritorio.

Pronto recordé algo que guardaba en el bolso negro con el que había llegado, me disculpe un momento con las chicas mientras estas hablaban sobre mandar una lechuza y comencé a rebuscar en el bolso. Finalmente saque un pequeño porta retrato con una foto de tres jóvenes (dos chicas y un chico) abrazados riendo riendo, la aprecié por unos segundos y la coloqué cuidadosamente en mi escritorio, sabia que eso me llenaría de animo cada vez que lo viera.

Giré mi cuerpo hacia ambas chicas justo a tiempo para escuchar como Lyra se excusaba para atender a una joven que había llegado.

-No te preocupes, ve tranquila, nosotras nos encargamos por aquí- Dije mirándola mientras caminaba hacia la oficina de Tauro. Pose mis orbes celestes de nuevo en la aprendiz y sonreí. -Bueno, ¿quieres ir redactando la carta? o quieres ir a curiosear mientras no tenemos trabajo.- Inquirí riendo mientras señalaba con el dedo pulgar la oficina de Tauro. -Escuche que la Jefa tiene un mini Thestral ahí dentro, que te parece si hacemos la carta y vamos a verlo.- Comenté con los ojos brillantes, propios de un pequeño niño al ver su dulce favorito.

Por un momento pensé que diría la Jefa Tau por mi intromisión, pero nunca había visto un thestral y mucho menos uno miniatura, pero la curiosidad me estaba calando los huesos.

Buenaas ^^ paso a hacer una modificacion enterita de la ficha, que hace mucho la tenia abandonada y ya es hora antes de que le salgan telarañas (?)

*pinchale aqui *

ese es el link a la ficha entera, creo que asi es mas fácil porque le añadí muchas cosillas jaja, y asi es solo copiar y pegar, o eso espero muchas gracias por todo.

*Dejo fresitas con crema *

ºº

Sonreí un tanto apenada al joven, quien entendió perfectamente los nervios que sentía al ser nueva en el empleo. Miré de nuevo como tomaba el formulario y lo llenanaba asegurándose de tener todos los datos correctamente esta vez a la vez que me daba palabras tranquilizadoras, lo que agradecí.

Cuando finalizó de llenar el formulario lo tomé revisándolo con la misma precaución de antes y no pude evitar escapar una gran sonrisa al ver que todo estaba en perfecto orden esta ves.

Aprobado registro de un elfo Doméstico Beetlejuice de Elodia Riddle

Le entregué el formulario ahora completamente segura que no habría mas problemas.

-Ahora si, todo esta en orden.- Comenté aun risueña mientras arreglaba hacia un lado mi ondulado cabello y movía mis características orejas gatunas.

Seguía jugando delicadamente con el agua entre mis dedos cuando Paula dijo que inspeccionáramos una clase de rocas, que parecían tener un sendero tras ellas, no se veía nada mal, un poco de aventura entre chicas siempre seria divertido.

sonreí imaginando estar en aquel lugar con mi amado y perdiéndome en los recuerdos, cuando un ligero toque me hizo entrar a la fuente, salí de ella respirando hondo, no me lo esperaba para nada, luego miré a las dos goddess, y sin poder evitarlo reí y me quedé boca arriba observando las frondosas copas de los arboles y las pocas nubes que cruzaban el cielo, cuando otra chica apareció repentinamente entre nosotras.

<<Llamen a a oscuridad tres veces...>> repetí en mis pensamientos intentando entender que quería decir aquello, cuando las palabras de todas llegaron a mis oidos.

-Yo no se ustedes pero esto del baño me gusta- Dije con una expresión divertida en mi rostro. -Dicen, que estas aguas te dan el poder de la vida eterna, si es así estamos hechas, mejor que ser vampiro.- Reí animada mirándolas mientras tomaba la mano de Paula arrastrándola al agua.

Observé como el joen revisaba las planillas ya certificadas, y una extraña sensación de vacío se me habia pronunciado en el estomago, es que acaso... ¿habia hecho mal mi primer trabajo?, mordi levemente mi labio inferior mientra esperaba su respuesta esperando haber hecho todo bien.

Sonreí levemente al escuchar lo ocurrido con el formato de la ficha y decidí ser sincera con el joven.

-La verdad es mi primer dia de trabajo- Dije casi en un tono de suplica. -Pero si no estoy mal, creo que deberias volver a llenarla, para asi no causar confusion.- Le extendi al chico una planilla nueva mientras le brindaba una sonrisa.

Si bien antes no tenia duda alguna sobre el trabajo, ahora si la tenía por lo que esperaría el momento oportuno para acercarme a la oficina de Tauro a presentarla, no quería tener que dudar más de mis acciones.

No fue mucho lo que tuve que esperar para comenzar a revisar los primero tramites. Observé como un joven con aspecto de estar molesto tomo unos formularios y comenzó a llenarlos, lo miré expectante, tamborileando levemente mis perlados dedos sobre el escritorio.

-Buenas tardes- Respondí amable con una sonrisa mientras extendía mi mano para tomar los formularios.

Aprobado registro de vampiro de Zarco Bulche Haigh

 

Aprobado registro de un elfo doméstico Beetlejuice de Elodia Riddle

 

Aprobado registro de un elfo doméstico Morte de Zarco bulche Haigh

 

Aprobado registro de dos elfos domésticos Rigel;Deneb de la familia Damilse

Luego de revisarlos cuidadosamente le entregue los formularios ya aprobados. –Todo esta correcto.- Sonreí posando mis orbes celestes en él –¿Hay algo mas en lo que te pueda ayudar?- Esperé la respuesta del chico mientras movía levemente mis orejas gatunas satisfecha con mi desempeño.

Escuché atenta las palabras de Tau, el trabajo se escuchaba tal cual parecía, fácil. Al tener frente a mi los formularios los revise con cuidado, observando todos los detalles, sonreí al entender todo fácilmente.

Las palabras de tau sobre los fantasmas llamaron mi atención de inmediato, siempre me había gustado las aventuras, y hablar con uno o muchos definitivamente sería una gran experiencia y por los momentos no tenía ninguna duda sobre lo que se debía hacer.

-Por ahora todo entendido Jefa.- Dije sonriendo.

Zamira la secretaria había aparecido indicando que había una joven esperando para registrar sus elfos, Lyra amablemente se ofreció a atenderla, y sin duda eso sería una ventaja para mi, pues con mis nervios quizá arruinaría ese primer registro. Pedí permiso para levantarme y ver manteniendo la distancia, que hacia la chica. Observé curiosa por un momento a la joven que estaba esperando, era idéntica a otra que ya había conocido y de la cual era muy gran amiga, había escuchado hablar de ella, era la hermana gemela de Leah Black.

-Sin duda me hubiera gustado conocerla- Dije en un susurro casi imperceptible mientras miraba como se marchaba.

Al parecer todo estaba en orden. Sonreí a Lyra a modo de felicitación dirigí mi mirada al despacho de Tauro pidiendo permiso para marcharme a mi respectivo cubícu.lo, al ver su consentimiento sonreí y de inmediato camine hasta el, sentándome a esperar pacientemente a que fuera mi turno de atender.

No pasó mucho tiempo hasta que otra joven llego a hacernos compañía, se presentó como Laimi y también había sido convocada para trabajar junto a nosotras. Sonreí extendiendo mi mano hacia ella, presentándome como es debido, cuando las palabras de Lyra captaron mi atención, era cierto, habíamos estado esperando una hora o más para ver a la señorita Taurogirl.

Posé mis orbes celestes en la recepcionista que parecía estar haciendo su mejor esfuerzo para ignorarnos, la impaciencia al ver su comportamiento me estaba invadiendo cuando una voz salió desde la sección de oficinas regañando a la chica, viré mis ojos hacia la chica con cabello celeste que se había acercado hasta nosotras dándonos la bienvenida e invitándonos a seguirla hasta la oficina.

La Seguí con paso seguro, sonriendo al escuchar su petición para sentarnos, lo que hice de inmediato. Observé atenta a la chica que se había sentado en frente, tras su escritorio y pedía que nos presentáramos, decidí tomar la iniciativa esta vez, era algo que pocas veces hacia, pero la situación lo ameritaba.

-Gracias por la bienvenida- Dije con un sincero tono de agradecimiento. –Como dije antes a las chicas, me llamo Kary Lili Potter, soy de nacionalidad holandesa y tengo 18 años.- No estaba muy segura si era necesario decir eso, pero nunca estaba de más dar esa información. –Solicité el empleo porque quede enamorada del lugar y desde la primera vez que vine a registrar mis elfos, me pareció un lugar relativamente tranquilo, interesante, y en el que me sentiría completamente a gusto.- Hablaba mirando fijamente a los ojos de Taurogirl demostrando que decía todo aquello con total convencimiento. –Bueno creo que básicamente eso.

Sonreí satisfecha con mi respuesta mientras cruzaba la pierna elegantemente, para luego arreglar con cuidado hacia un lado mi cabello azabache, moviendo ligeramente mis orejas gatunas esperando a que hablaran las demás chicas.

-División de Seres, Duendes y Espíritus

Me repetía a mi misma a cada paso que daba, estaba nerviosa sin duda alguna, ese seria mi primer trabajo y no quería arruinarlo.

El traje estilo ejecutivo compuesto por una falda tubo negra, una camisa mangas largas color blanca, unos altos zapatos de tacón complementando la imagen, y un pequeño bolso color negro donde tenía la varita de cerezo y otros objetos de importancia, ciertamente no era de mi gusto personal, pero tenía que usarlo, dar una buena impresión siempre es importante por lo que deje de reprocharme por la vestimenta.

Pronto me encontré con la cabina telefónica roja, una vez dentro de ésta marqué el número correspondiente e administré mis datos para llegar al atrio del Ministerio. Salí a paso presuroso de la cabina, intentando no chocar con las personas que se encontraban ahí mientras me dirigía a los ascensores.

Sentía como las miradas se posaban en mí al irme acercando a ellos.

<<No deben estar acostumbrados a ver una chica con orejas de gato>> Pensé divertida para mis adentros y sin darle mucha importancia a las miradas entré al ascensor. Posteriormente una voz chillona anunció el cuarto piso, amablemente sonreí mientras pedía permiso para salir del que parecía un muy pequeño ascensor.

Los nervios ya estaban calando en mis huesos, sentía que mientras más me acercaba, mis piernas dejaban de funcionar, respiré hondo, pues no era hora para juegos y me encaminé a la recepción. Tomé asiento esperando mi turno, un tanto despistada mientras tarareaba para mis adentros una canción, al parecer era la única manera de calmarme, cuando escuché “…Señorita Taurogirl Crouchs, vengo a trabajar...”

Posé mis orbes celestes en la mujer que se encontraba hablando con la recepcionista, seriamos compañeras laborales, se notaba muy segura de ella y eso me llenó de coraje para también estarlo. Me levanté delicadamente de mi asiento y me acerqué al mostrador sonriendo.

-Disculpa, yo también la busco…- Dije con voz suave y segura- Soy Kary Lili Potter, y también fui solicitada para trabajar.- Finalicé de hablar y luego posé mis ojos de nuevo en la mujer que había llegado antes que yo.

-Por cierto mucho gusto.- Dije en un tono de voz un poco más bajo y sonreí levemente mientras extendía un tanto tímida mi perlada mano hacia ella y movía ligeramente mis orejas gatunas, si quería trabajar ahí lo mejor sería llevarme bien con quienes me rodeaban.

La Dreamer Goddes escuchó atenta los planes de ambas jóvenes, al parecer había llegado a tiempo para hacer un excursión por el lugar lo que le pareció maravilloso, ya que ella también apenas había llegado al hermoso jardín. Sonrió complacida al escuchar que la invitaban a explorar.

-¡Claro! con gusto las acompañaría chicas- Dijo animadamente mirando a ambas Goddes para luego meter la ultima uva en su boca.

-Y... ¿a donde tienen planeado ir primero?- Pronunció mientras se acercaba a la fuente y pasaba delicadamente uno de sus perlados dedos sobre la superficie del agua, observando como las ondulaciones se perdían a la distancia.

La Dreamer Goddes caminaba tranquilamente por el jardín secreto con un racimo de uvas en sus perladas manos, con aquel aire soñador y romántico que tanto la caracterizaba, Observando cada centímetro del lugar, ciertamente le encantaba ese lugar, la naturaleza, las aves, todo era perfecto.

-Perfecto se queda corto- Dijo en voz baja mientras tomaba otra uva y la ponía entre sus labios color rubí.

Pronto sus ojos color celeste se posaron en dos jóvenes que estaban en el estanque, una le resultaba extrañamente familiar, la joven gatuna se dirigió lentamente a ambas chicas quienes parecían dispuestas a inspeccionar el lugar. Estando un poco mas cerca observó que una de las jóvenes era su querida sobrina, sin pensarlo extendió los brazos invitándola a darle un cálido abrazo.

-¿Como estas Sunar?- Dijo suavemente al abrazarla. -hace tiempo no hablo contigo.- se separó lentamente y le dedicó una sonrisa a la joven, luego observó a la segunda chica que se encontraba en aquel lugar.

-Disculpa mis malos modales- Dijo acercándose despacio y posando sus ojos celestes en la joven mientras sonreía para luego extender delicadamente su mano en dirección a la joven. -Un gusto, me llamo Kary.-

La Joven Potter Black estaba muy emocionada por haber adquirido su primera mascota, por lo que sin perder tiempo fue al Ministerio a registrarla y asi tener todo en orden, pues no le gustaba terner cosas pendientes por hacer. Se acercó con su característica sonrisa y su elegante caminar a la ventanilla correspondiente, tomo una ficha y se apartó mientras procedía a llenarla.

Nombre de quien registra: Kary Lili Potter

Nombre del mago/bruja, negocio o familia a la que pertenece: Kary Lili Potter

Nombre: Hemel

Especie: Micropuff

Clasificación del ministerio: X

Color: Azul Celeste, con ojos color amarillo

Tamaño: Pequeño

Sexo: Masculino

Edad: Dos meses

Ambiente en el que vive: Mansion Potter Black

 

Link a la certificación de descuento por parte Gringotts: certificación

Link de la Ficha del dueño de la criatura, registro de familia o negocio: Ficha de Kary Lili Potter

La chica gatuna miro por última vez la ficha de registro en busca de algún error, y al no encontrar ninguno se dirigió de nuevo a la ventanilla, extendiendo su perlada mano para hacer entrega de la ficha.

-Buenos dias, Espero este todo en orden.- Dijo posando sus ojos celestes en la persona encargada y sonriendo amablemente.

Últimamente me estaba aburriendo mas de lo normal, por lo que decidí ir al Magic Mall a comprar una linda mascota con la cual entretenerme mientras estaba sola, miré curiosa todos los animales que ofrecían a la venta, aun no estaba muy decidida de que quería comprar <<Quizá... un gato estaría bien, combinaría con mis orejas, o un sapo, seria divertido verlo saltar>> Pensaba distraída mientras posaba mi orbes celestes en cada animal cuando al fin lo vi, un hermoso micropuff, era perfecto, tranquilo, dócil, y también "limpiaba", lo que me resultaba bastante útil. Me acerqué sonriente al mostrador, tomé una de las planillas y procedí a llenarla.

ID: 113716

Nick: Kary Lili Potter

Bóveda: Bóveda de Kary

Fecha: 2011-11-18

 

 

Nombre del producto:

Micropuff

~Azul celeste

Objetos, Criatura o Poción: C

Catalogación: X

Puntos por unidad: 10

Cantidad de unidades:1

Precio por unidad:200

 

Precio total: 200

Total de Puntos: 10

 

Si es una criatura para personaje, colocar el Rango Social del comprador: Unicornio de Bronce.

Ojeé por ultima vez la planilla en busca de errores, al no encontrar ninguno me acerqué de nuevo al mostrador.

-Espero este todo en orden- Dije pausada y amablemente y luego sonreí mientras jugueteaba un poco con un mechón de mi cabello esperando que mi compra fuera aceptada.

Hola buenas tardes/días/noches/madrugadas (?) xD... me gustaria hacer las siguientes actualizaciones a mi ficha si no es mucho problema (:

tambien me gustaria modificar mis conocimientos, ya que me gradué y creo que es por acá que se piden . me gustaría: Defensa contra las Artes Oscuras y transformaciones.

creo que eso es todo por ahora, muchas gracias ^^ *deja chocos ºº*

Me encontraba en mi cama, en la habitación de chicas, aun la luz no entraba por la ventana como solía ocurrir cada mañana, serian eso de las tres de la mañana y los nervios de la ceremonia hacían que no pudiera seguir durmiendo, sin pensarlo mucho me levante de la cama observando todo con melancolía, entré a la ducha y luego de un largo rato, salí y procedí a vestirme para la ceremonia, me puse mi vestido negro con toques de colores, mis altos tacones, los cuales no dejaba de usar solo para disimular mi baja estatura y arreglé mejor mis risos color azabache, todo esto lo hacia como si mi cuerpo pensara por si solo.

Caminé a paso lento hasta la salida y antes de cerrar, eché un rápido vistazo a la habitación y finalmente cerré la puerta tras de mi. Iba por uno de los pasillos con sigilo, esperaba no encontrarme a nadie, en especial a Ansaley, ya que no estaba preparada para sus preguntas con respecto a que hacia a esas horas, vestida tan elegante y fuera de la cama.

Llegué a la puerta del dormitorio de los chicos y un frío intenso recorrió mi espalda, la realidad había caído sobre mi con todo su peso, y me hizo pensar que esa sería la última ves que podría entrar en aquella estancia, y por sobre todo, la última ves que podría verlo dormir.

Abrí con cuidado la puerta y miré cada una de las camas, me quedé observando por un segundo la cama del prefecto, Heko y sonreí, era una de las mejores personas que había conocido y tuve el placer de conocerlo en esta casa, luego miré a Enrick casi no habíamos podido hablar, y me hubiera gustado conocerlo mejor, aunque esperaba verlo en alguna otra ocasión, y por último, la cama mas desordenada, llena de envoltorios de caramelos y una que otra media sin par por ahí perdida. Me acerqué a ella y lo vi, Frank se encontraba durmiendo (como siempre xD), con su largo cabello desordenado y sin percatarse de mi presencia, sonreí y una lagrima solitaria rodó en mi mejilla, a el mas que a nada lo iba a extrañar. Sequé mi lágrima con el dorso de mi nívea mano, y como era costumbre deje un pequeña caja color plateada llena de caramelos de limón en su mesita de noche, y esta vez bajo ella, un pequeño trozo de papel, que rezaba.

Extrañaré venir a invadir y endulzar tus sueños amor, tambien despertarte para que llegues a tiempo a todos lados... bueno en realidad te extrañaré... nos vemos en un rato, te amo.

Att: Kary

Lo observé unos segundos más y luego me retiré con el mismo sigilo con el que había entrado, baje los escalones despacio, observando de nuevo todo, quería recordar cada milímetro de la estancia, y al llegar a la sala observé el jarrón blanco con una hermosa rosa blanca.

<<Este tuvo que ser Heko>> Pensé divertida mientras me acercaba a apreciar mejor el jarrón, y luego me senté delicadamente en uno de los sillones, mirando la sala por completo, recordando todo, al cabo de unos minutos una gran sonrisa se dibujó en mi rostro al ver que ya los primeros rayos de sol se colaban por uno de los enormes ventanales que había en la sala. Me levanté con la gracia gatuna que me destacaba y saqué una carta del pequeño bolso color negro que solía llevar conmigo a todos lados, la posé al lado del jarrón con la rosa.

Queridas Althea y Cye:

Fue un verdadero placer compartir en esta casa con ustedes, y con todos, las extrañaré mucho, espero nos veamos en algún otro momento, muchísimas gracias por todo, las quiere un montón (y más)

Kary (:

 

P.D: He tomado una de las ranas de chocolate que había en la mesa, no pude resistirme.

Hecho esto, me encaminé a la salida rumbo a los jardines, pues aun me quedaba mucho tiempo para el comienzo de la graduación.