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Adolph Eisenheim

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Mensajes publicados por Adolph Eisenheim

  1. Mientras el tiempo transcurría, cada tortuoso y lento movimiento que daban las manecillas del reloj, miraba el jardín y lo que podía ver del castillo, el tiempo parecía haberse detenido, los segundos parecían horas y a esto sumaba la demora de la llegada de Kytta, a mi mente llegó una angustiosa idea de que tal vez no quería verme, pero eran los nervios, solo esperaba que esté tan ansiosa como yo de sentir el calor de sus brazos y la tibieza de sus labios, no quería mas que ello.

     

    De pronto mientras miraba el jardín aquella voz me traspasó el alma, aquel sonido angelical, dulce, melodioso, una sinfonía perfecta de sonidos, todo ello trasformado en palabras; tratando de que no se diera cuenta del gran impacto que su presencia tenía en mi, no me gustaba mostrar mi debilidad, giré despacio, con una sonrisa en los labios, di un par de pasos hacia ella y con todo el atrevimiento del mundo tome su mano llevándola a mis labios regalándome un beso en ella. No sabía como algo tan frío como el mármol podía producir tanto calor en mi.

     

    - ¿¿Necesitarte??....- le dije simulando un falso asombro...- creo que desde que te conocí no he necesitado otra cosa mas que tu...-me acerque un poco mas y le dí un delicado beso en los labios.

     

    Llevé mis manos al bolsillo de mi chaqueta sin dejar de ver sus ojos, quería perderme en ellos, tomé una caja de terciopelo negro donde tenía el PRESENTE para mi novia.

     

    - Ha estado en mi familia durante siglos, creo que no se verá mejor en ningún lado mas que contigo...- Acaricie su mejilla de porcelana y tomé su mano...-Feliz cumpleaños mi amor...-

  2. Mire la invitación que tenía en mis manos y luego levanté mis ojos para observar aquel castillo que se encontraba en frente mío. Si mi sentido de ubicación servía definitivamente aquel era el lugar. Esperaba que mi ATUENDO sea el correcto. Definitivamente estaba nervioso, sentía húmedas las manos, como un adolescente, impaciente, impetuoso, iracundo, necesitaba estar cerca de ella, sentir el calor de su piel que me arrastra a su lado, sentir el dulce olor de su aliento.

     

    Sacudí la cabeza tratando de salir de aquel embeleso, la piel se me había erizado completamente, y traté de volver nuevamente en mis cabales para ver la mejor forma de entrar a aquel castillo, el llegar no fue inconveniente, el ingreso era lo que me preocupaba.

     

    Al acercarme a la verja de hierro esta se tornó opaca como niebla, al pasar mis manos por ella la traspasaba sin problemas disipándose al igual que aquella primera preocupación que tenía, seguramente aquella invitación era la que me daba la facilidad de penetrar en aquella fortaleza.

     

    Caminé casi aprisa por aquel sendero que me llevaría a la puerta principal del castillo, no podía esperar más, las ansias de verlas era mayor a cualquier tipo de prudencia o recato que debería tener en aquel lugar que no conocía. Mientras un paso seguía al otro una de mis manos instintivamente fue hacia el bolsillo de mi chaqueta, el presente se encontraba allí, solo quería ver sus ojos cuando lo vea, solo esperaba que sea de su agrado.

     

    Apacigüé un poco mi frenético caminar unos cuantos metros antes de llegar a la puerta principal del castillo, pasé mis manos sobre la ropa verificando que se encontraba tan impecable como tenía que estar y adopté una pose serena, tratando de ocultar todo lo que por mi mente pasaba en ese instante. Me detuve en la puerta de entrada, no sabía si golpear o pasar sin anunciarme pero una pequeña elfina abrió la puerta como si leyera mis pensamientos, mirándome de pies a cabeza preguntó:

     

    -¿A quién busca el señor?-… dijo sin dejar yo de sentirme prácticamente desnudo ante la analítica e inquisidora mirada de la elfina.

     

    -Dile a Kytta que Adolph se encuentra acá- no dije entre en mayor detalle, tampoco debía darle explicaciones a ese ser.

     

    Se dio la vuelta y fue, según yo suponía, a buscar a Kytta, respiré profundamente y me dispuse a esperar unos segundos más, ya faltaba poco, y estaría con ella, segundos nada más, solo segundos.

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  3. El lugar estaba empezando a llenarse de gente, todos acercándose y dándome la bienvenida al lugar, mis nervios poco a poco se fueron calmando, empezaba a sentirme en casa y a pesar de estar distante el calor del fuego de la chimenea se empezaba a sentir en todo aquel mágico lugar.

     

    Etoile fue la primera en llegar a donde yo estaba, me invito a desayunar, pero la verdad estaba aún con el estomago revuelto todo lo vivido en mi ultima clase de generales, por lo que decliné la muy amable invitación, seguramente en una hora o dos volvería el hambre con fuerza, allí es cuando me vería en problemas.

     

    -Muchas gracias pero su amigo Tritón me quitó el poco apetito que aún me quedaba- sonreí recordando aquel momento, ya era parte de mi inicio allí -soy Adolph Eisenheim, es un gusto conocerte Etoile, la verdad es que aun ando perdido por acá, espero que sean pacientes conmigo-

     

    Segundos después llegó Gabrielle, prefecta de la casa, seguramente estaban esperándome porque incluso conocían mi nombre, yo apenas me había enterado que casa me correspondía y sin embargo mi nombre parecía ya ser de dominio público, aquello me agradaba, me hacia no sentirme un extraño.

     

    -Gracias Gabrielle, es un gusto conocerte, este lugar es maravilloso- le decía mientras mis ojos bailaban de un lugar a otro contemplando la bella decoración que allí existía, era como estar en un hermoso transatlántico.

     

    Luego llegó Jessie, al igual que Gaby parecía ya conocerme, al menos mi nombre en lo mas aproximado se lo sabía, me hicieron sentir en casa, y en verdad allí me encontraba, a ese lugar era al que yo pertenecía.

     

    -Adolph- le dije con mucha cortesía y sonriendo- mucho gusto Jessie-

     

    Terminadas las presentaciones empecé a sentir el calor del lugar así que me retiré mi chaqueta, tenía tantas dudas, tantas inquietudes en la cabeza sobre las casa, a que se dedicaban, como funcionaban, en Austria a pesar de haber pocos alumnos igual teníamos casas, pero no sabía si el funcionamiento era el mismo.

     

    -Cuéntenme del lugar, ¿por que me colocaron acá?, ¿que cualidad tuve para pertenecer a este selecto grupo?

  4. Al fin había terminado la primera parte de mi instrucción en la academia, una muy dura clase de generales, donde pasamos muchas aventuras y peligros, pero sin percance alguno, mis notas fueron de las mejores y esperaba mantenerlas en los demás cursos, una de mes cualidades era ser siempre el mejor en todo lo que me proponía, y la academia no sería la excepción.

     

    León, Director de la Academia de Magia me indicó que se me había asignado como casa la de los Tritones, me entrego un papel con la dirección a la que tenía que ir y una frase la cual tenía que pronunciar a su momento, asumía que era una especie de contraseña para poder llega al lugar de reunión de mi casa.

     

    Las costumbres mágicas de Londres no eran muy distintas de las de mi país, lo que si no entendí es por que razón me habían asignado esa casa, alguna cualidad en mi seguramente fue la que motivo a que yo vaya a ese lugar, seguramente con el paso de los días dentro de mi casa y con la convivencia con mis compañeros, seguramente sabría la razón.

     

    Tomé el papel y seguí las instrucciones al pie de la letra, todo ello me llevo a la orilla del lago, que se encontraba por el ala oeste de la academia, allí se erguía una estatua del Rey Tritón, me acerque y ante mi sorpresa la estatua cobraba vida para amenazante poner su tridente en mi cuello con cara de pocos amigos y con ansias de matarme.

     

    -¡¡Contraseña!!- gritaba con impaciencia -¡¡Dije contraseña!!-

     

    De los nervios casi olvido el papel, alcancé a meter mi mano en el bolsillo y saqué aquel trozo de pergamino.

     

    -¡¡¡Estrella de río, estrellas de río!!!- grité esperando que dejara de presionar su tridente en mi cuello, me iba lastimando poco a poco.

     

    Segundos después la actitud de aquella estatua cambió de lo visto a lo pintado, empezó a reír a carcajadas y luego me dio una palmada en la espalda y me dijo:

     

    -Bienvenido Adolph, bienvenido- en ese instante dio un golpe con su tridente en el suelo dejando ver una pequeña puerta en el piso la cual era la entrada a la sala común de los tritones.

     

    -Gracias- le respondí mientras bajaba por aquellas escaleras, seguía riéndose murmurando que le encantaba jugar estas bromas a los nuevos, yo no podía ocultar mi disgusto, pero bueno, era parte de haber llegado allí, no me iba a amargar por una broma pesada de una estatua.

     

    Seguí bajando pero ahora con un poco mas de precaución, tenia miedo de que algo parecido a lo anterior me suceda nuevamente, terminaron las escaleras y llegue a un salón grande de color azul, no vi a nadie por lo que decidí anunciarme esperando que alguien conteste.

     

    -Hola, ¿Hay alguien acá?-

  5. Holas:

     

    Ayudenme cambiando la apariencia de mi ficha, porfis que me dijeron por alli que estaba fea ¬¬

     

    http://i.imgur.com/oe4Dfgs.png

     

     

    Datos Personales:

     

    Nombre del Personaje: Adolph Eisenheim

     

    Sexo: Masculino

     

    Edad: Joven.

     

    Nacionalidad: Austriaca

     

    Familia(s):

    • Haughton

     

    Padre(s) Sanguíneo: Erik Jan Eisenheim**

     

    Padre(s) Adoptivos: Dovakhin Haughton y Rachel Brice

     

    Trabajo: --

     

     

    Poderes Mágicos:

     

    Rango Social: Aprendiz

     

    Bando: Neutral

     

    Rango dentro del Bando: --

     

    Nivel de Poder Mágico: --

     

    Puntos de poder en objetos: 20

     

    Hechizos adicionales:

     

    Puntos de poder en criaturas: --

     

    Criaturas controlables en asaltos y duelos: --

     

     

    Habilidades Mágicas: --

     

    Conocimientos Especiales: --

     

     

    Perfil del Personaje:

     

    Raza: Humano

     

    Aspecto Físico:

     

    Mide 1.83 metros, de contextura delgada, atlético, cabello castaño oscuro, ojos azules.

    Su ropa habitual es un pantalón, chaqueta y capa de tela negra, camisa blanca, zapatos negros y sombrero de copa negra, pero suele usar ropa informal, jeans y camisetas pegadas al cuerpo, buzos de cuello de tortuga y tenis.

     

    Cualidades Psicológicas:

     

    Adolph es un personaje introvertido, pero una vez entrado en confianza empieza a abrirse con el mundo, calculador, siempre seguro de lo que dice y hace, directo en las cosas que quiere decir, pero es muy difícil que la gente que no ha ganado su confianza pueda descifrar cuáles son sus intenciones. Su carácter es algo bipolar cuando se encuentra en peligro, el encanta ser el primero siempre, aunque tampoco reniega del trabajo en equipo, guarda resentimiento con su padre ya que nunca le ha dedicado el tiempo necesario por sus múltiples ocupaciones políticas y por jamás revelar quién es su madre.

     

    Historia:

     

    Adolph Eisenheim, nació en Viena, Austria, en cuna de oro, ya que su familia provenía de una larga lista de magos muy influyentes en el continente europeo. Su padre Erik Jan Eisenheim es uno de los principales candidatos a ser primer ministro de Magia en Austria, ocultó siempre la identidad de su madre, la cual los abandonó apenas dio a luz, todo nombre y fotografía fue borrado de la familia, el tema es proscrito en el Castillo de la familia y por el poder que tiene su padre en el país nadie se atreve siquiera a dar un solo dato con respecto a ese tema.

     

    Su nombre, puesto por su padre, fue en honor al Führer Adolfp Hitler, quien fue en la época de la Alemania Nazi uno de sus más cercanos colaboradores por su gran habilidad en la legeremancia.

     

    Educado con profesores particulares, el joven Eisenheim, tuvo poco contacto con niños de su edad, una o dos veces al año, casi siempre en verano, sus primos de Londres solían visitarlos, pero con el tiempo cada vez eran menos seguidas.

     

    Siempre jugó solo, no se le permitía el contacto con los hijos de los sirvientes, aunque él lo prefería así, ya que fue educado para mantener su distancia con la servidumbre, mestizos y sangre sucia, tuvo un gran amigo de juventud, Laurent Cold, pero al enterarse de que su madre era muggle Adolph cortó todo tipo de contacto con él.

     

    Su padre, lo envía a Londres con la finalidad de que estudie en la Academia de Magia y Hechicería para que regrese a ocupar su lugar en la política en su país, cosa que no atrae por el momento, Adolph es un hombre ambicioso, le gusta el poder, por lo cual, no sería extraño que después de un tiempo la idea de ser líder le seduzca.

     

    Ahora Adolph en Londres se encuentra cursando los primeros años de la academia, haciendo amigos a su manera, con perfil bajo, pero soñando en grande.

     

     

    Pertenencias:

     

    Objeto Magico Legendario: --

     

    Objetos Magicos:

     

    Varita: Roble, 11” de largo, rígida, núcleo de Fibra de Corazón de Dragón (Gregorovitch)

    Clasificación: AA

    Puntos de poder: 20

     

    Mascotas y Criaturas: --

     

    Criaturas en la Reserva: --

     

    Elfos:

     

    • Varnewe :[/b] Siempre de mal carácter, desconfiado y demasiado sobreprotector con Adolph.

     

     

    Licencias, Tasas, Registros:

     

    Licencia de Aparición: No.

     

    Licencia de Vuelo de Escoba: No.

     

    Registro de XXX: --

     

     

    Otros Datos:

     

    Otros datos: --

     

    Cronología de cargos: --

     

    Premios y reconocimientos: --

     

     

    Links de Interés Referentes al Personaje:

     

    Link al Perfil de Comprador MM: --

    Link a Bóveda Personal: Bóveda 101108

    Link a Bóveda Trastera: --

    Link a Bóveda de Negocio: --

    Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda de la Familia Haughton

    Link a Bóveda Familiar 2: --.

     

    Saludos,

     

    Eisenheim

  6. Por fin estábamos todos listos ya, Sol se había encargado de traer a los rezagados incluso arriesgando su vida, pero al fin estábamos todos, era momento ya de tocar el traslador antes que nos salga alguna otra de aquellas maravillosas sorpresas, era hora ya que todo esto acabe de una vez por todas.

     

    Se escuchaban aún hechizos aislados salir de una que otra varita, figuras plateada de animales por doquier atacando a malvados dementores que deseaban extraer nuestro mas hermosos recuerdos para tener espacio libre y de allí robarnos el alma, estos volaban por los aires al recibir la envestida de los patronums.

     

    Erath dio la señal, era momento de tocar la copa y salir de allí, todos hicimos lo posible para poderla tocar, seguramente las profesoras sabían que ya era el tiempo de tocarla sino lo perderíamos, me aferré a la primera parte de metal plateado que pude tocar, aun estaba frio, pero pasaron algunos segundos y allí todavía estábamos, aun no era tiempo, podrían ser segundos como horas, solo quería que esto acabe.

     

    Un grupo de unas 10 acromantulas corrían ya hacia nosotros, escuchaba los chasquidos de sus colmillos mientras emprendían veloz carrera para atacarnos, simplemente cerré los ojos esperando ya la muerte cuando ocurrió.

     

    Empezamos a girar rápidamente, mi cuerpo sentían las revoluciones pero no me atrevía abrir los ojos, sentí como mu cuerpo golpeó fuertemente sobre el suelo, el aroma de césped recién cortado inunda el lugar, cuando abrí los ojos no pude controlar la emoción, allí estaban las estatuas de magos y brujas famosas que nos dieron la bienvenida hace unos días que ahora parecían meses, mire a las maestras y les sonreí.

     

    -Gracias por esta maravillosa experiencia- les dije casi con lagrimas en los ojos por la felicidad de aun estar con vida- gracias por salvarnos también la vida, sin ustedes nunca lo hubiéramos logrado, ha sido una grandiosa clase- y empecé a romper en aplausos.

     

    A pesar de que mi vida corrió peligro y que por poco no la cuento, tenia la felicidad de que había aprendido muchas cosas más, que gracias al error provocado o no, esa experiencia fue la mejor lección que tuvimos, y lo mas importante, que tengo una razón por la cual vivir y apenas salga de la clase iré en busca de ella, en busca de hacer mi propia historia

  7. La muerte parecía en esos instantes una idea atractiva, muchas cosas me vinieron a la mente, cosas que simplemente no quería recordar, quería aprovechar el poco tiempo que me quedaba, pero me preguntaba ¿para qué?, ¿qué había allí afuera para mi?, en verdad me quedaba poco tiempo para saldar una deuda, que no era mía sino de mi padre, y aquel boggart no hizo más que recordarmelo.

     

    Marcus por un extraño motivo que no entendía, se preocupaba por mi, trató de ayudarme siendo apenas conocidos de clase, algunos abrían aprovechado al verme en el piso para tomar impulso y salir de allí, quien sabe que hasta yo lo hubiera hecho, sin embargo él me levanto del suelo, me incitó a no rendirme, de pronto como la luz de una patronus vino a mi mente aquel rostro, aquella deliciosa sensación gélida, aquel sabor dulce en mi boca, la presencia de los dementores seguramente bloquearon aquel maravilloso recuerdo, aún había por que luchar.

     

    -May- dije mientras me levantaba -si alguien en este mundo tiene el derecho a sacarme de él, es ella- una sonrisa iluminó mi rostro, puse mi mano sobre el hombro de mi compañero y le dije -Gracias, te debo una-

     

    Ya de pié sentí un vigor nuevo, una fuerza que incluso me hacía pensar que podría arrancar las cabezas de una quimera con mis propias manos, tome mi varita la apreté fuertemente y estábamos ya frente al la copa, teníamos que tocarla y estaríamos salvados, pero antes de tocarla miré atrás y le dije a Marcus.

     

    -Aun no, tenemos que estar todos para tocar el traslador, de lo contrario lo que se queden morirán- sentencié, ya que si tocábamos la copa ella nos llevaría a lugar seguro pero solo los que la toquemos.

     

    Poco a poco la gente iba llegando, algunos con heridas leves, pero todos bien, esperábamos ya a pocos, pronto nos iríamos y todo esto pasaría a convertirse en una anécdota, si así fue el inicio de la academia, me preguntaba como sería el resto de clases, pero sintiendo al grupo cansado una media docena de dementores se acercaban amenazantes, el olor de su podredumbre llegó a mis sentidos, yo estaba con nuevos bríos, tomé mi varita y no tuve que pensar mucho tiempo en mi momento mas feliz, ya que aquel pensamiento lo tenía fresco.

     

    -¡Expecto Patronum!-

     

    En ese momento de la punta de mi varita, emergió como una luz mas enceguecedora que la del astro rey, una pequeña gata, la cual cayo al piso y después de ronronearme rosándose entre mis piernas, corrió cuan ágil es un felino y golpeó uno a uno a esos fieros dementores enviadolos lejos de allí, ahora si me sentí a salvo, como nunca estaba bien, solo tocaba esperar a los últimos, entre ellos las maestras quienes se preocupaban que todos estemos al momento de tocar el traslador.

    • Me gusta 1
  8. Era tarde para las flechas, estábamos rodeados, no había salida, alguno caería en esta aventura mal planificada, se salió de las manos de profesores y los responsables de esto se averiguará después, por lo pronto la prioridad era salir con vida de allí, aunque las posibilidades se agotaban a cada segundo, sentía mi ropa empapada de sudor provocado no por el fragor de la lid, sino por los nervios que a cada segundo se apoderaban más de mí, tanto es así que las ideas se agotaban.

     

    Gracias a los hechizo invocados por profesores y compañeros, tanto el fuego de la quimera como los dementores habían quedado fuera de combate por el momento, era mi oportunidad para alcanzar la copa plateada que era el traslador que me llevaría a lugar seguro, la verdad tampoco pensaba en los demás, cada cual salvaría su vida, no había nada allí o nadie que valga la pena para arriesgar mi aun corta existencia.

     

    El campo estaba libre, a pesar de una ráfaga huracanada lastimaba mi rostro con trozos de hojas y maderas, estaba a unos pocos metros de la libertad, ya sentía el frío metal de la copa en mi mano pero un enorme reloj de arena se interpuso entre el traslador y yo y una voz gutural se escuchaba salir de su interior.

     

    -Sabes que tu tiempo se esta agotando Adolph, así como mi paciencia, no veo aún ningún resultado, no estas cumpliendo con lo que te ordené- se escuchaba como la arena que caía de la parte alta del reloj, golpeaba contra el su base sintiendo el desesperante paso del tiempo con mayor intensidad -tu tiempo se acaba, se acaba, se acaba, se acaba, se acaba, se acaba-

     

    -Riddikulus- dije con toda la fuerza que tuve, nuevamente apuntando con mis ojos cerrados, simplemente dirigiendo a la macabra voz, no supe como sostuve mi varita, temblaba de pies a cabeza, la arena del reloj se regó por el piso y sobre ella se abrió un parasol y una pelota de playa, ya no pude correr más y a pesar de que estaba a pocos metros de la copa, no tenía el valor de tomarla, tal vez lo mejor para mí sería morir allí.

  9. Hechizo salían de las varitas a diestra y siniestra, lo cual era un verdadero peligro porque la mayoría aun no estábamos preparados para ello, la tensión era muy grande, temía que algún hechizo rebotara o fuera mal dirigido y en vez de que las criaturas que nos atacaban nos hicieran daño seríamos nosotros mismos los que hagamos daño irreparable a otro compañero.

     

    Helen me recordó un detalle especial de la hazaña de Belerofonte, el pegazo, aquel caballo alado daba un ángulo elevado de tiro, necesitábamos altura para realizarlo, no teníamos a la mano ni un thestral que nos ayude, teníamos que valernos de ingenio, y en ese momento se me vino una gran alternativa, era imperativo conseguir altura y yo sabía donde encontrarla.

     

    -Escuchen todos, ayúdenme, tenemos que subir a Sol o a Erath a la parte mas alta de los Setos, estoy seguro que una de ellas sabe el hechizo adecuado para enviar flechas a las fauces de la quimera, es la única salida que tenemos, hay que matarla-

     

    Matar a una criatura mágica tan grandiosa era un verdadero sacrilegio, pero era su vida o la de nosotros, definitivamente no había otra alternativa, pero estaba seguro que una de las dos profesoras podía realizar aquel hechizo. Había la opción de burlar a la quimera, pero no todos podríamos hacerlo, somos muchos, tendríamos que lamentar la muerte de por lo menos dos compañeros, lo que me preocupaba era que de esos dos yo podría estar allí.

     

    Puse mi rodilla en el piso para que se apoyaran en mi para poder subir el seto y miré a las dos maestras.

     

    -Y bien, ¿Cuál de ustedes va?, o ¿tenemos algún mejor plan?-

  10. No pude tener mejor idea que estar junto a la maestra, definitivamente sabia lo que hacia, cada movimiento, cada hechizo, creo que aquella fue la mejor clase que me podía haber dado, lo que mas me maravillaba era que a pesar del peligro jamás perdía la calma, y en sus hechizos no había consideraciones contra aquellas criaturas, era directa, a matar o morir, como tiene que ser, mentiría si dijera que no tuve miedo, en algunas ocasiones pensaba que de esa no iba a salir, sin embargo con garbo y prestancia salia adelante con cada barrera que se atravesaba a nuestro paso.

     

    El grave problema es que eran criaturas mágicas muy poderosas, los mas fuertes hechizos solo conseguían retrasarlos, mas no los detenía, la situación cada vez se ponía mas critica y más cuando nos dimos cuenta que la profesora Sol faltaba, aquello complicaba mucho más ya que al ser maestra al menos en algo contribuiría a contener un poco a aquellas magníficas criaturas, regresamos a buscarla, si todos entramos, todos salimos, esa era la consigna.

     

    Los serpenteantes caminos nos llevaban muchos a paredones verdes sin salida, no podíamos memorizar los caminos porque estos cambiaban a voluntad, nos guiamos por los gritos que Sol profería, cuando llegamos donde ella, vimos como se encargaba ya de boggart, estaba bien y ahora los dos grupos estábamos juntos.

     

    Un frío helado recorrió mi cuerpo cuando detrás de los setos, se escuchaba los bramidos, rugidos y chasquidos de aquellas criaturas que tenían sed de sangre, mi mente me ordenaba correr, pero mis piernas no obedecían, me había quedado petrificado a lado de mis compañeros, detrás de nuestras maestras, haciendo un solo cuerpo, pero nuestros minutos estaban contados.

     

    De la nada salieron por debajo del piso unas ramas las cuales me tomaron de los tobillos a mi y a unos compañeros y nos arrastraba para dentro de los setos, tratando de incapacitarnos, sentía como trepaba por mis piernas, aferrándolas con fuerza, en poco tiempo atraparía mi brazos dejándome inmóvil para defenderme, recordé uno de los hechizos de que la maestra profirió, y aunque sabia que aun no podíamos hacer hechizos, era un caso de vida o muerte, así que con mi varita apunte al origen de las ramas y grite cerrando los ojos:

     

    -¡Sectusempra!-

     

    Abrí los ojos cuando sentí que mis ataduras se aflojaban, mis piernas estaban libres y las bases de aquella planta cortados como si cuchillas las hubieran podado de una manera limpia, sin corte irregulares. Mi corazón latía a mil, lo que me había atacado se convertía en matar una cucaracha comparado con la enorme Quimera que venía a atacarnos, en ese momento, es que me resigné a recibir a la muerte, aquella actitud me relajó un poco, sería rápido, como una flecha atravesando mi corazón. ¿Flecha?. Como no lo pensé.

     

    De inmediato llamé la atención de Erath, quien con cara exasperada, como diciendo "no es momento para molestarme" le dije:

     

    -Recuerda la historia de Belerofonte- le dije con una sonrisa en los labios, estaba seguro que la sabía de todos modos se la repetí -Él empezó a lanzarle flechas e introdujo la punta de su lanza en las fauces de la Quimera, cuyo aliento de fuego fundió la punta de plomo y luego esta se escurrió por la garganta de la Quimera, quemando los órganos vitales y de esta manera Belerofonte logró vencerla, tu sabes el hechizo hazlo!!!-

  11. 1.- Link al tópico de su ficha de personaje: Adolph Eisenheim
    2.- Link de las bóvedas de negocios que posea el personaje: --
    3.- Link del tópico de registro de sus familias:
    Familia N° 1: Haughton
    Familia N° 2: --
    4.- Link a las bóvedas de sus familias:
    Bóveda Familia N° 1: Bóveda Familia Haughton
    Bóveda Familia N° 2: --

     

    ​Saldo en Bóveda Previo a la Migración: 480 G

  12. http://i.imgur.com/oe4Dfgs.png

     

     

    Datos Personales:

     

    Nombre del Personaje: Adolph Eisenheim

     

    Sexo: Masculino

     

    Edad: Joven.

     

    Nacionalidad: Austriaca

     

    Familia(s):

    • Haughton

     

    Padre(s) Sanguíneo: Erik Jan Eisenheim**

     

    Padre(s) Adoptivos: Dovakhin Haughton y Rachel Brice

     

    Trabajo: --

     

     

    Poderes Mágicos:

     

    Rango Social: Aprendiz

     

    Bando: Neutral

     

    Rango dentro del Bando: --

     

    Nivel de Poder Mágico: --

     

    Puntos de poder en objetos: 20

     

    Hechizos adicionales:

     

    Puntos de poder en criaturas: --

     

    Criaturas controlables en asaltos y duelos: --

     

     

    Habilidades Mágicas: --

     

    Conocimientos Especiales: --

     

     

    Perfil del Personaje:

     

    Raza: Humano

     

    Aspecto Físico:

     

    Mide 1.83 metros, de contextura delgada, atlético, cabello castaño oscuro, ojos azules.

    Su ropa habitual es un pantalón, chaqueta y capa de tela negra, camisa blanca, zapatos negros y sombrero de copa negra, pero suele usar ropa informal, jeans y camisetas pegadas al cuerpo, buzos de cuello de tortuga y tenis.

     

    Cualidades Psicológicas:

     

    Adolph es un personaje introvertido, pero una vez entrado en confianza empieza a abrirse con el mundo, calculador, siempre seguro de lo que dice y hace, directo en las cosas que quiere decir, pero es muy difícil que la gente que no ha ganado su confianza pueda descifrar cuáles son sus intenciones. Su carácter es algo bipolar cuando se encuentra en peligro, el encanta ser el primero siempre, aunque tampoco reniega del trabajo en equipo, guarda resentimiento con su padre ya que nunca le ha dedicado el tiempo necesario por sus múltiples ocupaciones políticas y por jamás revelar quién es su madre.

     

    Historia:

     

    Adolph Eisenheim, nació en Viena, Austria, en cuna de oro, ya que su familia provenía de una larga lista de magos muy influyentes en el continente europeo. Su padre Erik Jan Eisenheim es uno de los principales candidatos a ser primer ministro de Magia en Austria, ocultó siempre la identidad de su madre, la cual los abandonó apenas dio a luz, todo nombre y fotografía fue borrado de la familia, el tema es proscrito en el Castillo de la familia y por el poder que tiene su padre en el país nadie se atreve siquiera a dar un solo dato con respecto a ese tema.

     

    Su nombre, puesto por su padre, fue en honor al Führer Adolfp Hitler, quien fue en la época de la Alemania Nazi uno de sus más cercanos colaboradores por su gran habilidad en la legeremancia.

     

    Educado con profesores particulares, el joven Eisenheim, tuvo poco contacto con niños de su edad, una o dos veces al año, casi siempre en verano, sus primos de Londres solían visitarlos, pero con el tiempo cada vez eran menos seguidas.

     

    Siempre jugó solo, no se le permitía el contacto con los hijos de los sirvientes, aunque él lo prefería así, ya que fue educado para mantener su distancia con la servidumbre, mestizos y sangre sucia, tuvo un gran amigo de juventud, Laurent Cold, pero al enterarse de que su madre era muggle Adolph cortó todo tipo de contacto con él.

     

    Su padre, lo envía a Londres con la finalidad de que estudie en la Academia de Magia y Hechicería para que regrese a ocupar su lugar en la política en su país, cosa que no atrae por el momento, Adolph es un hombre ambicioso, le gusta el poder, por lo cual, no sería extraño que después de un tiempo la idea de ser líder le seduzca.

     

    Ahora Adolph en Londres se encuentra cursando los primeros años de la academia, haciendo amigos a su manera, con perfil bajo, pero soñando en grande.

     

     

    Pertenencias:

     

    Objeto Magico Legendario: --

     

    Objetos Magicos:

     

    Varita: Roble, 11” de largo, rígida, núcleo de Fibra de Corazón de Dragón (Gregorovitch)

    Clasificación: AA

    Puntos de poder: 20

     

    Mascotas y Criaturas: --

     

    Criaturas en la Reserva: --

     

    Elfos:

     

    • Varnewe :[/b] Siempre de mal carácter, desconfiado y demasiado sobreprotector con Adolph.

     

     

    Licencias, Tasas, Registros:

     

    Licencia de Aparición: No.

     

    Licencia de Vuelo de Escoba: No.

     

    Registro de XXX: --

     

     

    Otros Datos:

     

    Otros datos: --

     

    Cronología de cargos: --

     

    Premios y reconocimientos: --

     

     

    Links de Interés Referentes al Personaje:

     

    Link al Perfil de Comprador MM: --

    Link a Bóveda Personal: Bóveda 101108

    Link a Bóveda Trastera: --

    Link a Bóveda de Negocio: --

    Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda de la Familia Haughton

    Link a Bóveda Familiar 2: --.

  13. Holas:

     

    Creo que soy el mas nuevo acá, claro que quiero quedarme, estoy en lo de mi ficha y bóveda, espero que en estos días ya la pueda tener para poderla incluir en el árbol, pero hasta eso allí van mis datos

     

    Nick: Adolph Eisenheim

    Ficha: En tramite

    Bóveda: En tramite

    Parentesco: Hijo de Dovakhin Haughton y Rachel Brice

     

    ¿Nos llevas en la ficha? Si [ x ] No [ ] *Claro que se los va incluir en la ficha

    *En caso de que sea NO: ¿Piensas ponernos como familia en tu ficha?

    Aspiraciones o bando de pertenencia: Mortífago

     

    Abrazos a todos.

  14. Aun sentía aquel malestar de nauseas en mi cuerpo, odiaba movilizarme en traslador, nada mas seguro que una escoba. El olor a ceped recien cortado, humedo, y un viento frio que cortaba la piel se sintió en todo el lugar, pero no solo eso hacia que el ambiente alli no sea el apropiado, me dí cuenta que las maestras se encontraba igual o mas sorprendidas que nosotros por estar en aquel lugar.

     

    Un frío helado recorrió mi espalda regándose por todo el cuerpo, ya que si los que se supone que nos "cuidan" estaban casi en shock por ver el lugar en el que estábamos, no podía sentirme seguro, en mi nacía la incertidumbre, ¿qué clase de peligros podremos encontrar allí dentro?. Respiré profundamente tratando de tranquilizarme y observé que algunos de los que estaba allí se habían dado cuenta de aquel detalle que yo había percibido.

     

    Nos hicieron formar en fila atrás de cada uno de los maestros, rápidamente me coloqué a espaldas de Erath, si algo pasaba estaría cerca de alguien que tenga experiencia y que pueda cubrirme, si algo sucedía con ella, pues aún quedaba Sol, sabía que ambas tenían experiencia y que cuidarían de nosotros, pero siempre es bueno tener un plan B.

     

    La Haugthon iluminó el camino con su varita, a la orden de la profesora saque la mía también, sentía que las manos me sudaban, pero aparentaba con cara de poker la mayor tranquilidad posible, luego una esfera iluminó nuestro camino, Sol fue la que la hizo, nos daba mayor visibilidad, sonreí porque por un segundo me sentí en un concurso de "Cual era la maestra que mejor trucos hacía", me acerqué al oído de Erath y pregunté:

     

    -Se que las cosas no están bien, se que no quieren preocupar a los demás pero no son tontos, si es el mismo laberinto del Torneo de los Tres Magos sabes que lo que encontremos dentro no van a ser duendes de Cornualles, así que me disculpas pero tu sombra seré, espero que sepan a donde vamos y que estamos haciendo-

  15. Castillo de la familia Haughton

     

    No tenía ni veinticuatro horas en Londres y ya tenía que asistir a clases, era ya tarde, el sueño y el cansancio del viaje me había jugado una mala pasada, no había siquiera cruzado palabra con mis padres adoptivos y ya tenía que salir. El Castillo Haughton me acogería durante el tiempo que dure mis estudios en la Academia, después, solo el tiempo lo sabrá, diría que dejaría las cosas al destino pero siempre pensé que el estar atado a un futuro ya trazado simplemente le quitaba emoción a la vida.

     

    Rápidamente tomé lo que encontré en mi baúl, no tuve siquiera tiempo de desempacar, unos jeans azules y una camiseta de color marrón, unos tenis blancos, y después de un baño escrupuloso, salí sin probar bocado directo a la chimenea con rumbo a la academia, tome con mi mano un generoso puñado de polvos Flu que habían en una repisa sobre la chimenea y pronuncié el lugar al que quería ir, la lenguas esmeraldas me envolvieron arrastrándome en un remolino haciendo desaparecer en una borrosa imagen del hermoso salón del castillo Haughton.

     

    Academia de Magia y Hechicería.

     

    Un salón con una gran cantidad de trofeos me dio la bienvenida, estaba ya en la academia, me sacudí un poco el hollín de mis prendas, y fui en busca del punto de encuentro de la clase de Generales ochenta y ocho. Vi un grupo de chicos desorientados en un plazoleta, con bustos de magos y brujas de los cuales jamás había oído o sabido, de las que habían en los interiores de la academia, intuí que ese era el grupo y para fortuna mía así fue, llegué justo a la presentación de quienes serían mis maestros en este curso: Sol Lestrange Black y Erath Anarion Hauhgton, al menos una de ellas era familia mía.

     

    La verdad es que a pesar de mi aparente seguridad, por dentro sentía que el estomago me daba vueltas, nunca fui bueno para encajar en grupos, pero trataba de atribuir todo a la falta de desayuno así como al viaje en la turbulenta chimenea. Seque mis manos en mi pantalón y me preparé para presentarme ante mis compañeros y profesores, mientas ellos lo hacían repasaba mentalmente que tenia que decir hasta que mi turno llegó.

     

    -Hola con todos- levanté la mano en un ademan de saludo -mi nombre es Adolph Eisenheim, nací en Viena, y mi familia adoptiva es la Hauhgton, la verdad no es la primera ves que estoy en Londres pero nunca me he quedado mas de una semana, así que prácticamente esta experiencia es nueva para mi, amante de quiddich, la verdad es que no se que mas decirles de mi, solo que espero llevarnos todos de la mejor manera.-

     

    Terminado aquel monologo, el cual me había parecido extenso y sin sentido, pero la verdad es que una de las cosas que mas me fastidiaba era hablar de mi mismo, si algo más necesitaban saber pues que me lo pregunten, si alguien en verdad quiere conocerme mas a fondo pues que lo intente.

     

    Si me pedían que repita los nombres de todos los que se presentaron antes y después que yo, hubiese sido un rotundo fracaso, pues si lograba repetir el mio sin dudarlo era un éxito, pero por suerte esa no fue la primer tarea. Una copa de plata con incrustaciones esmeralda resaltaba por su brillo, nos invitaron a tocarla, se trataba de un traslador. Poco a poco todo lo que estaba a mi alrededor empezó a dar vueltas, apoderándose de mi nuevamente esa sensación de nauseas. Cuando mis pies por fin toparon piso me encontraba aun con los ojos cerrados, poco a poco los fui abriendo encontrándome con la colosal imagen de un laberinto de setos gigantes, tan altos que con dificultad se colaban entre sus entrelazadas ramas, los rayos del sol, sentí como la adrenalina empezó a correr por mis venas, sea lo que sea que nos tenían preparado las maestras sería muy educativo, pero para nada divertido, de eso estaba muy seguro.

     

    OFF:

     

    Hola con todos: Mi nombre es Adolfo, soy de Perú y tengo 20 años, estoy estudiando Sociología y me encanta la lectura, espero llevarme muy bien con todos y hacer grandes amigos, Adolph es algo bipolar, ya lo irán conociendo, en lo poco que les pueda ayudar cuenten conmigo.

     

    Suerte a todos!

    • Me gusta 2
  16. Hola: Mónica me invitó por acá, soy nuevo con hambre de rol, espero que seamos activos, en el rol, y llevarnos muy bien, de antemano gracias por aceptarme

     

    Ficha para la inscripción:

    • Nick: Adolph Eisenheim

    • Fecha de Nacimiento: 7 de Julio

    • Bando de preferencia: ya veremos

    • Lugar en la familia. La verdad es que estoy abierto a sugerencias.

    • Mascotas y/o elfos: Gata Negra "Pandora"

     

    • ¿Esta será tu familia sanguinea o adoptiva? Adoptiva

    • Link a la ficha de personaje (Si se tiene)

    • Link a la bóveda personal (si se tiene)

     

    • Link a una imagen que te represente:yo

    • Link a la imagen de tu habitación o en su defento, descripción del dicha estancia.Mi estancia

    • Piso/lugar en el que se quiere la habitación. Indiferente

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