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Marie J. Báthory Poulain

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Mensajes publicados por Marie J. Báthory Poulain

  1. Rayos, era mi mejor sangre, lamentaba en silencio. Ditry, sin ser de gran ayuda, con solo escuchar unos pasos acercándose se ocultó detrás de su ama quien en solo unos segundos pasó del shock, a un millón de preguntas aglomerarse en su mente, los nervios le jugaron una mala pasada pudiendo solo dibujar una sonrisa a quienes aparecieron para recibirla, o para saber quién estaba haciendo tanto alboroto.

    Miró de reojo a la elfina que la salvó con la limpieza y luego solo respiró profundo respondiendo al abrazo de su amiga. Solo ese acto disipó todas sus dudas.

    — Solo me fui por un largo tiempo, no me dio ningún derrame Belosa mía — respondió divertida ¿Cómo podría olvidarla? Sus años en su compañía fueron los mejores de su vida. No se aguantó y puso sus manos frías abrazando el rostro de su amiga — No sabes cuánto extrañaba este rostro ¡Estás igual! —  agregó sonriente hasta fijar su atención en el hombre que había llegado con ella. Bajó inmediatamente sus manos y dirigió la derecha hacia el castaño.

    Oh, un gusto Scott, ya veo que la familia sigue creciendo, soy Marie Báthory, amiga de la familia aunque... — se volvió a Bels un poco confundida —  ¿Acaso no recibieron mi lechuza? —  preguntó retrocediendo en las palabras de la bruja notando que no tenía idea del porqué de su llegada, bajó la mirada hasta Ditry quien tuvo la valiosa misión de enviar la carta y este solo se encogió dando así una respuesta a la francesa — Ya veo... — dijo por lo bajo y suspiró — Bueno, ni modo, les aviso inmediatamente que me tendrán que apartar una habitación por un tiempo bastante extenso, de paso me pueden ir añadiendo a ese árbol familiar —  bromeó dando algunos pasos adentrándose y yendo hacia la sala desde donde ellos salieron.

    ¡Scott ya me cae bien! Eso del trago me gustó — respondió antes de que a Bels se le ocurriera ir a la biblioteca, iba recién llegando no tenía planes de ir a encerrarse con libros. Quizás después de que le cuenten por qué tanta curiosidad con los secretos familiares, para ella algunas cosas simplemente deberían quedar enterradas por el bien común. Les dedicó una ultima sonrisa y se adentró en el salón principal. Era increíble como cada vez que estaba en ese castillo le invadía una sensación de seguridad y calidez, a pesar de los años aún le parecía lo más cercano a un hogar.

     

  2. ¿Hace cuánto no veía el cielo desde ese punto? De a poco, mientras avanzaba por el sendero, iba recordando lo tanto que amaba ese lugar. El castillo Evans había sido uno de los lugares que más frecuentaba en su antigua vida y ahora ya no sería solo una visita, sino que podría considerarlo su hogar aunque sea temporal. Llevaba un nudo de emoción en la boca del estómago y se le hacía imposible contener la sonrisa en su rostro. En los diez años que estuvo en Hungría había cambiado bastante, por no decir del todo, sin embargo, el adentrarse en ese bosque y comenzar a ver como el castillo se asomaba por el horizonte le hizo sentir más humana que nunca.

    El cabello blanco se alborotó sobre su rostro al sobrepasar la copa de los árboles que le impedían tener una amplia vista de lo que se encontraba a las faldas del desfiladero. Su rostro se iluminó a penas el sol tuvo libre acceso a su piel a la vez que se detenía a contemplar, su capa flameaba con el viento y aunque recordó que el podía estar muy frío no tardó en entrar en razón, por más que intentara recuperar lo que tenía en Inglaterra cuando era humana, nada podría ser igualmente percibido siendo vampira. Esperaba también no fuera un inconveniente para su amigas y el resto de la familia.

    Detrás apareció Ditry y las maletas que Marie le había encargado, el elfo miró a sus costados confundido con el lugar donde se encontraban a lo que Marie le respondió adelantándose a las preguntas que se acumulaban en la mirada de la criatura — Sólo quise tomar el camino largo, aún no traigas las maletas — se excusó pues el elfo por supuesto esperaba que se aparecieran inmediatamente dentro del castillo. Sinceramente, le estaba costando trabajo mentalizarse en que sus amigas la verán de la misma forma que antes. Ditry hizo desaparecer las maletas y ambos siguieron el escaso camino que quedaba hasta la entrada de la residencia. Allí se quedó con la vista fija por unos segundos hasta que decidió simplemente dar el gran paso, le guiño un ojo a su elfo e inmediatamente apareció en el hall. sus pasos no tardaron en escucharse pues empezó inmediatamente a pasearse, luego, con unos segundos de desfase, se escuchó el estruendo de Ditry dejando caer todas las maletas contra el piso.

    ¡Ditry! - alzó la voz llamándole la atención por el descuido, mas no pudo controlar una pequeña risa por la gran entrada de esta intrusa— ¿Y cuándo será el momento que alguien se aparezca y me indique cuál será mi habitación? ¡¿Hola?! — preguntó al aire con una sonrisa jocosa.

    ¡Marie, Marie! —exclamó Ditry aún con su acento francés—Creo que hice algo mal... — le jaló la capa hasta llevarla nuevamente al recibidor donde las maletas habían caído desordenadas una sobre otra provocando una verdadera escena del crimen. Uno de los bolsos donde llevaba bolsas de sangre para lo que sería su cena, quedó atrapado bajo uno de los baúles propiciando el derrame.

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  3. ¡Hola! Yo muy "nueva" actualicé mi ficha y mientras esperaba que la actualizaran me dije "¿Tendré que avisar en algún lado?" Y al aparecer ese lado es aquí 😂

    Así que aviso que me quiero reintegrar, hice varios cambios al personaje original así que quedo atenta si cometí algún error, en especial si me salté alguna norma del nuevo sistema que aunque lo leí, aún estoy adaptándome. Les dejo mi ficha enlace directo a la actualización solicitada. ¡Gracias!

  4. ¡Hola! Vengo a instalarme con el permiso de Mel y Bels ♥ 

    Nombre muggle:  Kote 

    Link a la Ficha y Bóveda de personaje: Ficha • Bóveda

    Parentezco con la familia: Visitante, solo de paso de paso a destruir y molestar un poco

    Inclinación de bando: Neutral

    Mascotas o elfos: Un elfo adorable llamado Ditry

    Negocio en el Callejón : Ninguno. Volví pobre.

    ¿Por qué deseas ser parte de la familia? Porque acabo de volver y quiero hostigar a mis amigas 

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  5. ¡Hola! Vengo a solicitar la renovación de mi ficha para poder reintegrarme.  Creo que no hay errores, sin embargo, me disculpo si hice algo mal, gracias a quien haga la actualización ♥

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    DATOS PERSONALES

    Nombre del Personaje: Marie J. Báthory Poulain

    Sexo: Femenino

    Edad: Joven.

    Estado Civil: Soltera.

    Nacionalidad: Francesa

    Familia(s):

    • * Familia 1: Familia Evans McGonagall
    • * Familia 2

    Padre(s) Sanguíneo: Ethan Poulain-- Cyrine Ackerley

    Padre(s) Adoptivos: Annlik Báthory

    Trabajo:
     

    PODERES MÁGICOS

    Puntos de poder en objetos y pociones: 20

    Hechizos adicionales: 

    Puntos de poder en criaturas: 

    Criaturas controlables en asaltos y duelos: 

    Habilidades Mágicas: --

    Conocimientos Especiales:

    • Defensa Contra las Artes Oscuras
    •  Encantamientos
    •  Artes Oscuras (Conocimiento Adquirido)


    Medallas: 

    • Medalla 1
    • Medalla 2

     

    PERFIL DEL PERSONAJE

    Raza: Vampiro. 

    Aspecto Físico: Marie posee una piel blanca y tersa, largas extremidades, estatura de 1.69 y poca gracia al moverse. A simple vista es una chica común y poco llamativa. Su cabello blanco cae ligeramente ondulado hasta casi alcanzar sus codos con las puntas. Su rostro es como el de una niña que causa ternura y simpatía teniendo unos penetrantes ojos color azul gris enmarcados en largas pestañas bajo cejas delineadas. Su nariz recta termina redonda dando un lindo perfil entre unos poco notables pómulos que la mayoría del tiempo lucen un color rosado pálido. El rostro de la castaña es algo alargado y termina en un mentón pequeño bajo su boca de labios delgados y rosados.  Tiene cicatriz en el brazo de cuando fue trasformada en vampiro por su madre adoptiva.

    Cualidades Psicológicas: Debe reconocer que es una persona sensible a pesar que trata de ocultarlo. A lo largo de su vida siempre se dejó afectar de más por cualquier cosa que no podía controlar, por lo que a medida que fue creciendo, su carácter se fue tornando cada vez más fuerte hasta el punto de poder mantener a raya esas emociones que solían dispararse con tan solo ver una flor marchita. No es que sea un chica seria y cascarrabias, aunque la mayoría suele pensar eso al verla por primera vez, simplemente no permite que el resto la pueda leer fácilmente así que sin siquiera pensarlo antepone una imagen de ella mucho más dura de lo que es realmente. Sin embargo, cuando logras sumarte a su preciado círculo cercano, suelta todas sus ataduras y deja ver su lado más amable y divertido, aunque esto cueste un poco al no permitirse confiar en muchas personas. Piensa las cosas una y mil veces, pero cuando es necesario que sea tenaz va con todo, con palabras firmes y actos imponentes.

    Historia:

    Marie J. Poulain nació un 13 de Junio de 1992 en el pueblo francés Autoire, donde sus padres Ethan y Cyrine se habían instalado hace 1 año luego de contraer matrimonio. Siendo ambos franceses, la mudanza en el mismo país no fue complicada, sin embargo, se aseguraban de no dejar rastro puesto que eran seguidos por servidores del mago oscuro. Creyendo en su total protección, armaron su hogar en aquel colorido y pequeño pueblo de Francia dando el primer paso teniendo una bebé.

    Luego, varios años pasaron sin tener preocupación alguna. El hombre de la casa ya tenía un buen trabajo en el mundo mágico francés, y a pesar de que no era un dineral lo que ganaba, alcanzaba perfectamente para su diario vivir. Además, Ditry, el elfo de la familia, era de gran ayuda en todo. La criatura no se había despegado de ellos desde que la misma niña lo vio deambulando por los bosques cercanos a la casa, en una de las tantas caminatas que daba la familia por los alrededores.

    La alegría y la sencillez de los Poulain era casi imposible de creer, todo estaba saliendo perfectamente y nada se había sabido de mortífagos durante un buen y largo tiempo. Algo que tenía a la pareja muy segura de haber dejado atrás lo malo del pasado. Pasaron más años en los que la niña creció convirtiéndose en una dulce jovencita. 

    Una noche, toda la felicidad se quebró como vaso de cristal contra el suelo. Mortífagos fueron en busca de los fenixianos que habían logrado encarcelar a varios de sus aliados, Ethan y Cyrine habían quedado tachados como un peligro para la marca y debían ser eliminados. Para proteger a su primogénita sabiendo el riesgo que corrían, pusieron a correr el plan que hace mucho habían trazado. Enviar a Marie a Inglaterra con una familia de vampiros húngaros que habían conocido en uno de sus tantos viajes, los Báthory. 

    Durante el ataque, el padre de la peliblanca y su madre fallecieron mientras Ditry la llevaba a las afueras de Ottery, Inglaterra para encontrarse con el clan Báthory. Por mucho tiempo Marie se halló totalmente perdida. Durante un par de años fue motivada a llevar una vida pseudo normal con el clan, aunque nunca se pudo sentir realmente parte de ellos cuando algunos aún la marginaban por ser solo una humana frágil. No era una de ellos, lo sabía muy bien, pero tampoco sentía que era una Poulain, ese apellido sin sus padres ya no le significaba nada más que una gran carga emocional.

    Los Báthory eran un clan húngaro muy antiguo, directos descendientes de Erzsébet Báthory ya que fueron hijos y nietos de la primera hija de Erzsébet abandonada a las afueras de Nyírbátor, pues la tuvo con tan solo 13 años fruto de una relación con un sirviente. Dada la larga y compleja vida que tuvieron, Marie no les reprochaba lo desconfiados mucho menos el que pensaran que era un insulto a su apellido cuando Annlik decidió adoptarla. 

    Luego de años, MJ se sintió confiada de no quebrarse en el escenario donde asesinaron a sus padres, Marie volvió a la localidad francesa en compañía de Annlik, allí visitó los vestigios de una vida que luchaba por seguir recordando, pero era inevitable que el tiempo se llevara esos recuerdos que ahora parecían de una persona que ya no reconocía en ella.  Hasta ese punto ya había vivido una nueva vida en Inglaterra estudió e hizo buenas amistades, Annlik se había transformado en una madre para ella aunque bastante diferente de lo que había sido Cyrine y por supuesto, aún estaba Ditry, su fiel elfo quien fue el primero en sollozar al volver a pisar las ruinas de la antigua casa Poulain, en ese momento MJ tuvo una revelación, guardó con cariño dentro de su ser todo lo vivido en Francia, pero ahora quería avanzar y ser para Annlik una verdadera hija: le pediría que la transformara en vampiro.

    Pasó un tiempo para los preparativos, pero cuando ya estuvo todo, MJ se fue a Hungría con el clan, allá la convirtieron y le enseñaron a adaptarse pudiendo con los años ganarse por fin la confianza de todos. Tuvieron unos buenos años, pero era tiempo de separarse, MJ necesitaba volver a Inglaterra y reencontrarse con ese mundo que en un momento la cautivó. Sin embargo, no se fue sin antes ser advertida, aún era neonata como vampira por lo que no podía confiarse mucho de su autocontrol aunque hasta el momento no había presentado ningún problema y no pretendía generarlos, su mayor aspiración era el llevar el apellido Báthory con honor. Al llegar a Inglaterra se reencontró inmediatamente con algunas amigas, con ellas se quedaría por un tiempo. Había querido hacer uso de la mansión Báthory, pero aún restaba ganarse el respeto de algunos vampiros mayores que por supuesto no le harían su paso por allí muy agradable.

     

    PERTENENCIAS

    Objeto Mágico Legendario:

    Objetos Mágicos: 

    Clasificación A:

    Clasificación AA:

    Objeto 1: Varita hecha a partir de una pluma de fénix, madera de acebo. Arriba de 30 cm de longitud muy poderosa, excelente para hechizos complicados, de defensa personal y de ataque.

    Puntos de poder: 20

    Clasificación AAA:

    Clasificación AAAA:

    Clasificación AAAAA:

     

    Pociones Mágicas: 

    Clasificación A:

    Clasificación AA:

    Clasificación AAA:

    Clasificación AAAA:

    Clasificación AAAAA:


    Criaturas Mágicas: 

    Clasificación X:

    Clasificación XX:

    Clasificación XXX:

    Clasificación XXXX:

    Clasificación XXXXX:



    Criaturas en la Reserva: 

    Libros de Hechizos: 

    Libro:

     

    Poderes de Criaturas:

    Tipo de Poder:

     

    Consumibles en Batallas

    Nombre:
     

    Elfos:

    • Ditry: Criatura de ojos grandes y amarillos, los cuáles ocupan la gran mayoría de su pequeña cabeza. Posee orejas grandes que terminan en punta, cayéndole ligeramente por sobre sus ojos de vez en cuando. Su nariz es puntiaguda, pero de un tamaño normal la cual se asoma entre ambos desproporcionados ojos con respecto al resto del cuerpo. Es de un pequeño tamaño, delgadas extremidades y largas manos. La mayoría de tiempo viste unas largas prendas en perfecto estado, prácticamente nuevas de diferentes diseños y telas. Siempre había sido considerado como alguien de la familia, por lo que, siempre había vestido ropa decente.

    • Elfo 2: --


    LICENCIAS, TASAS Y REGISTROS
     

    Licencia de Aparición: 

    Licencia de Vuelo de Escoba: Obtenida

    Personajes Secundarios: 

    • Personaje 1
    • Personaje 2
    • Personaje 3
    • Personaje 4
    • Personaje 5

     

    OTROS DATOS

     

     Su elfo Ditry, es el único ser vivo que ha vivido con ella durante toda su vida, por ello lo quiere como su mejor amigo.

     Habla francés fluidamente gracias a los años que vivió allí, y aunque procura hablar en inglés, los años en Hungría le hicieron adoptar un acento tosco.

     Le gusta tocar el piano.

     Está muy al tanto de las cosas muggles.

     Aún tiene en su poder un colgante con el escudo Báthory el que suele llevar colgado al cuello.


    Cronología de cargos:
     

    Premios y reconocimientos:
     

    LINKS DE INTERÉS REFERENTES AL PERSONAJE

    Link al Perfil de Comprador MM: --
    Link a Bóveda Personal: 
    Link a Bóveda Trastero: --
    Link al Laboratorio de Fabricación: --
    Link a Bóveda de Negocio: --
    Link a Bóveda Familiar 1: --
    Link a Bóveda Familiar 2: --

  6. ¡Gracias por la bienvenida!

    Sí, espero poder retomar el rol, por suerte he podido seguir escribiendo en otros lados, pero nunca es igual que este foro así que por supuesto pretendo agarrar nuevamente el ritmo y adaptarme a los cambios. De hecho, estoy partiendo por mi ficha y leyendo absolutamente todas las reglas para no llegar a tropezones jajajaja

    ¡Nos leemos por ahí!

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  7. Hola a todos, es un poco raro estar aquí después de tantos años, si no mal recuerdo anduve por aquí desde el 2010  hasta el 2012, en resumen, ¡hace 10 años que no me aparecía por aquí! Sin embargo, le guardo un cariño enorme a este foro, conocí gente tan genial y la pasé tan bien que quise volver y más me animé al ver que aún recordaba mi usuario y, aún más importante, la clave 😅 No sé si estarán por aquí aún las tantas personas que conocí, pero espero poder integrarme nuevamente. He visto que se han hecho varios cambios, agradecería me puedan guiar para activar mi personaje debidamente. Mi pregunta principal es si tendré que empezar de cero, aún tengo mi ficha por ahí, creo que tendría que acomodar ciertas cosas, pero no sé que es lo que aún está vigente.

    Ahora fuera de temas "técnicos", de verdad espero poder reconectar con quienes me recuerden, si me hablan me haría muy feliz saber que siguen por aquí ♥ 

    Espero el trabajo me permita dedicarle el tiempo que se merece este lindo espacio y como ya dije, conocer a otros usuarios, tengo muchas ganas de compartir con ustedes así que si necesitan algo estoy a su disposición 🥰

    ¡Los estaré leyendo por ahí!

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    • Gracias 1
  8. La castaña a pesar de lo mal que se había sentido por el regaño del Malfoy a la Black, se impresionó al no sentir lo mismo por si misma al escuchar la corrección tan tajante y fría que le proporcionaba. Al contrario, miró atenta al profesor procesando cada palabra con gesto positivo como si tuviera razón, y de hecho, la tenía. Tal vez la sensibilidad que ella creía tener no era tan así puesto que las personalidades de ambos eran lo bastante diferentes como para que en un pasado, y casi sin esmero, el Malfoy la hubiera hecho sentir muy mal. Al parecer el viaje que había realizado a Francia no solo le ayudo a llevar mejor la ausencia de sus padres, sino que también la hizo mucho más fuerte.

     

    Suspiró asintiendo a lo que decía el pelinegro con un leve levantamiento de comisuras y volvió a buscar un nuevo pergamino en su bolso ante el aviso de que proseguiría con la clase. Por lo menos ya se había quedado tranquila con saber que el resto de su tarea incluyendo el informe estaban perfectos para él. Guardó el documento usado junto a los demás y con pluma en mano fijo sus ojos color miel hacia el frente, Marie siempre procuraba ser muy ordenada con sus cosas, el haber trabajado en la oficina de denuncias del departamento auror le había enseñado lo cuidadosa que debía ser con cada papel y un buen hábito no se lo iba a sacar con facilidad.

     

    Al principio no hubo nada que anotar, pero el solo escuchar que ahora aprenderían a enfrentarlos utilizando hechizos la hizo sentirse algo mareada. La Báthory tenía muy claro que era algo de esperarse en esta clase, mas hacía mucho tiempo que no utilizaba su varita de esa forma por lo que le era imposible sentirse insegura al respecto. Respiró profundo mirando hacia sus manos y cerrando por unos segundos sus ojos logró encontrarse mejor volviendo a prestar atención. Aunque al abrir los párpados, dio un leve respingo al tener al profesor frente a ella poniendo algo en su pupitre. Frunció el ceño ladeando un poco la cabeza para ver que trataba de un anillo. Lo observó curiosa por un buen rato escuchando las palabras de su profesor hasta que se apartó lo que más le dejó el respaldo de su silla a causa de las chispas que comenzó a lanzar el objeto. Una rara ventisca le impactó en el rostro y desordenó sutilmente sus cabellos ante la mirada atónita de la muchacha.

     

    Levantó la mirada hacia el Malfoy y oyendo su explicación repasó en su mente cada palabra que él decía. Hasta que en un momento, se percató de que debía estar anotando en vez de mirar y escuchar como tarada al profesor. Pestañeó varias veces y buscó su pluma para anotar los hechizos de los que le hablaba más su función y efecto. Terminó de escribir y observó la muralla en donde aparecía una nueva tarea. Barrió por encima lo que el profesor había escrito dándose una idea de lo que tendría que hacer y luego lo anotó con calma. Algo en Marie le hacía querer detenerse, alargar el tiempo para no tener que usar su varita y quedar en ridículo por lo oxidada que estaba respecto al tema de hechizos.

     

    Lanzó un bajo suspiro con los ojos pegados al pergamino regañándose a si misma. Era una ridiculez lo que le estaba pasando, que si no era ahora el momento lo sería otro día y sin dudarlo, prefería que fuera dentro de la clase, por lo menos así tendría a alguien experimentado por si llegara a causar catástrofes por estar fuera de entrenamiento.

     

    Despejando su mente con un leve movimiento de cabeza, se sumió en su trabajo. Al leer la primera pregunta renegó con cansancio, ¿acaso para estar en esta clase debía odiar tanto a alguien? Ese no era su estilo. Miró hacia un lado mordiendo su labio pensante sin saber que hacer, lo más probable es que tuviera que mentir y poner un nombre cualquiera pues ni por el o los asesinos de sus padres sentía la necesidad de maldecir.

     

    Le costó mucho a la castaña terminar su tarea dejando para el último la primera de las preguntas, pero logró hacer lo que pudo. Rendida a que quizá se llevaría otro regaño llamó la atención del Malfoy y poniéndose de pie hizo el intento de leer, pero su lado resentido con las preguntas salió a flote.

     

    - No quiero ser grosera, pero ¿por qué cada pregunta tiene que ser contra alguien? - inquirió mirándolo fijamente con el ceño fruncido - Sinceramente yo no tengo a nadie en mente a quien quiera maldecir, para mi es imposible pensar en ello y si vine a esta clase fue para obviamente aprender de las artes oscuras, tal vez también para utilizarlas, mas esperando nunca tener que hacerlo contra nadie... -explicó y suspiró habiendo sacado su molestia. De un segundo a otro se percató de lo que había hecho e hizo una mueca, genial, ya lo había arruinado todo.

     

    Bajó la mirada recapacitando y se dispuso a leer con un dejo de arrepentimiento. Malditas palabras que salían solas - Como sea, si quisiera maldecir a alguien, utilizaría un prendedor. Pequeño y fácil de poner en cualquier prenda. A quién... -suspiró incómoda - No lo sé, quizá a usted que tanto habla de maldiciones ¿Qué tal sería bajo una? -respondió sintiéndose horrible por lo que solo salía de su boca. Ella no era alguien que se enfadara con facilidad, pero si habían cosas que la sacaban de sus casillas, nada la detendría, ni ella misma. No tenía pelos en la lengua como se decía mugglemente.

     

    - Si existiera la posibilidad de realizar un horrocrux ¿Qué objeto elegiría y qué persona sacrificaría para guardar un trozo de su alma? -releyó la pregunta y miró su respuesta - Elegiría el objeto más preciado para mi, ese al que no le quitaría ojo de encima, como el medallón de mi madre - dijo recordando tan preciada joya que mantenía oculta hasta las noches que era cuando la sacaba y observaba bajo la luna - Insisto, no tengo idea a quien le haría algo tan horrible, pero si estuviera desesperada, creo que al primer desconocido que se me cruzara -respondí casi de mala gana, tan solo pensarlo me daban náuseas.

     

    Al ver que tocaba la última pregunta, se acercó a los horrocruxes con una mueca - Bueno, el que yo sé debió ser el más difícil no está aquí -contestó girándose a ver al Malfoy - Harry Potter fue el horrocrux casi fatal para él - explicó y dio una rápida mirada a los objetos nuevamente - Pero sin duda el primero es siempre el con más dificultad de crear, la inexperiencia lo hace todo peor. Así que el anillo de Marvolo Gaunt, pero el más interesante para mi es el diario de Tom Riddle. Siempre me llamó la atención la forma como actuó esa parte del alma de Voldemort contra Potter.- se explicó y sumida en un repentino silencio tomó asiento.

     

    Ahora lo que quedaba de clase, simplemente intentaría no meter la pata como ya lo había hecho y procurar no abrir la boca hasta que se lo pidieran. Esos impulsos bastante comunes en Marie nunca le habían traído buenas cosas a su vida.

     

     

     

     

    ~

     

    Off: Digo lo mismo, no la odies, tiene sus momentos de arrebato pero es una ternura de chica :sad: Por si las dudas a mi me gustan las tareas, ella es la que tiene problemas :P

  9. Marie se había puesto a jugar con las puntas del pergamino que contenía su tarea mientras miraba y escuchaba atenta los comentarios del Profesor Malfoy respecto a los tres magos que le leyó. De a poco, ese gesto preocupado de haber hecho algo mal se fue diluyendo en una leve sonrisa verificando que al Malfoy le resultó interesante su trabajo. Sabía que con la respuesta lanzada al comienzo de la clase y lo bien que le había parecido su investigación, la castaña comenzaba a ganar puntos con el profesor, por lo que no tenía intenciones de meter la pata en lo que quedaba del curso.

    Dejó que sus manos siguieran entretenidas con el pergamino, pero ahora su atención iba a su compañera. Prestó oído a cada palabra interesada en lo que decía, mas cuando el profesor habló a penas respiró viendo sorprendida como las reacciones del pelinegro podían variar considerablemente si no se hacía lo que pedía, así que procuraría no caer en ningún error como ese, le vendría muy mal un regaño tan tajante como el que le dio a la Black.

    Ante el aviso del Malfoy, no demoró en hacer desaparecer el pergamino usado reemplazándolo por uno nuevo y comenzar a tomar apuntes de lo que decía sentado en su trono de diseño gótico. De vez en cuando, detenía la escritura para prestar suma atención a cosas que le parecían más relevantes y extensas para después resumirlo con sus palabras. En el momento que oyó del Malfoy algo que parecía más un consejo de vida que algo importante en las Artes Oscuras, sonrió. A la castaña le gustaban ese tipo de profesores que no se centraban solo en dar la típica clase.

    La Poulain viendo que él se ponía de pie caminando hacia la muralla supo lo que vendría, nueva tarea. Anotó mientras pensaba en como partiría por lo que al momento de tener que responder, solo faltaba redactar lo que en su mente había trabajado. Miró su pergamino con gesto pensante, mordiendo su labio y ordenando el cabello tras su oreja a la vez que friccionaba la pluma en sus manos.

    De un rato a otro, la tinta marcó en el pergamino las respuestas a la tarea y sin casi percatarse, terminó con satisfacción - Profesor Malfoy, ya he acabado ¿puedo? - pidió permiso antes de ponerse de pie. Su típica voz grácil, dando a parecer de que se trataba más de un poema que de un trabajo, leyó el primer ítem y luego la respuesta la dijo como si de una conversación se tratara:- Lo cierto es que nunca creí que me tocaría decir esto, pero si llegara a tener ese sentimiento de odio hacia alguien, creo que lo haría con el método clásico. De frente, en un duelo y con mi varita. Los rituales me parecen cobardes y mucho más mandar a alguien para ello. ¿A quién?, no lo tengo claro como para decir un nombre - explicó con una risa baja - Pero para que yo tenga tal sentimiento de odio y venganza, esa persona debería haber causado mucho daño a mis seres queridos, tal vez a quien sea que haya asesinado a mis padres - concluyó tratando de mantener la compostura, mas hace mucho tiempo que no pensaba en eso y por lo visto, no le hacía para nada bien.

    Carraspeó la garganta con incomodidad y leyó el último punto de la tarea y después explicó - Lo más común es que la persona afectada comience a sentirse cansada durante todo el día, incluso después de haber descansado bien, esto traería un excesivo mal humor y alta irritabilidad respecto al entorno. A veces también, se provocan cambios en el metabolismo, por ejemplo cuadros de sudoración excesiva, mareos o cambios bruscos de la temperatura corporal. Los pensamientos pesimistas la abordarán y aunque se tengan los medios para el éxito no habrá forma de lograrlo. Esto último hará que sus defensas naturales bajen al deprimirse y comenzar a tener una visión lóbrega de la vida haciéndola aún más vulnerable. Por último, se desapegará de todo círculo de amistades incluso de su pareja y familia. Su desconfianza la hará llegar a la completa soledad. Visiblemente esto se podría verificar en su físico y ambiente en el que vive. Lo más probable es que el cansancio demacre su rostro y las pocas ganas de incluso comer lo adelgacen. En su entorno se demostraría la masacre del ritual en su interior, como el tener todo desordenado, a oscuras, sucio, etc.

    Al terminar, revisó rápidamente que no le faltara nada y con una leve sonrisa se dirigió al profesor para extenderle el informe pedido. Y para no demorar más, tomó asiento en silencio ocultándose en su chaqueta de cuero, ese frío la estaba matando y la humedad, la podía sentir en el mismo aire.
  10. La fría ventisca, que siempre estaba presente en el clima de Inglaterra, entraba como mar de hielo por los ventanales de la academia alborotando los cabellos castaños de la Poulain a medida que su silueta avanzaba por los pasillos de la gran construcción. Marie no era una chica muy alta, pero en comparación con el porte de mujer que conocía lograba sacarles unos cuantos centímetros a su favor, además, poseía largas extremidades que no hacían más que dar la impresión de que tuviera más altura. Mientras caminaba, posó una de sus manos sobre la mejilla expuesta al viento tratando de darle más calor. Su piel blanca daba a comprender que era alguien acostumbrada al frío, pero aunque le gustaba el clima, no quería llegar a su clase con la mitad de la cara congelada.

     

    Con paso apresurado y sus ojos clavados en el frente, procuraba recordar el camino que la llevaría a las mazmorras, pues había sido hace mucho tiempo atrás la última vez que pisó esos gélidos suelos de piedra. Ahora Marie volvía a la Academia de Magia y Hechicería para cursar la clase de Artes Oscuras, si bien decidió tomar el curso por temas de trabajo, ese no era su único motivo, la exfenixiana era de creer que, a pesar del lado al que apoyes o no te importe ninguno en si, uno debía instruirse respecto a todo tema por más prohibido que fuera, no se podía ser un completo ignorante sobre una de las caras presentes en el mundo mágico.

     

    Cuando comenzó a percibir que el ambiente se tornaba frío y húmedo pudiendo solo ver su camino con la ayuda de las antorchas colgando de las murallas, supo que se encontraba cerca. Al principio, le había resultado extraño que la clase fuera dictada en el área de las mazmorras, pero no demoró en encontrarle sentido y pensar que se trataba de algo interesante el mezclar la materia con un aula así de lúgubre. Prestó atención a los salones al comienzo del pasillo, pero todos se hallaban vacíos, mas no tardó en visualizar una con escasa iluminación en el fondo, aunque en tal oscuridad, parecía un gran rayo de sol asomándose. La puerta se encontraba abierta así que dirigió sus pasos hacia la entrada, sin embargo, allí se detuvo al notar la presencia de un hombre con gesto frío en medio del salón. En el momento, Marie no tuvo claro si fue su postura intimidante o el intento que hizo ella por captar el rostro del hombre en la poca iluminación azafranada lo que la hizo detener, por lo mismo, no supo si saludar o no así que solo desvió la mirada al ver su nombre escrito en la carbonífera muralla y siguió hacia uno de los asientos dispuestos para la clase sin querer hacer más el ridículo allí parada - Eh... Buenos días -saludó bajo sin intenciones de que la escuchara, simplemente lo hizo para no romper con el protocolo de cortesía. Se sentó notando que era la primera y colgó su bolso en la silla para luego abrazarse a su chaqueta de cuero negro, allí hacía mucho frío y lo único que llevaba bajo esta era una simple camiseta blanca. No solía producirse mucho para salir y menos para ir a una clase, prefería estar cómoda en sus jeans ajustados de siempre. Tampoco sabía cuantos más irían a tomar la clase con ella, pero bajo su nombre solo leía uno más, Marie esperaba que no demoraran en comenzar, tenía curiosidad en como sería la clase.

     

    No pasó mucho cuando la voz del profesor se hizo escuchar haciéndole enderezar la espalda y levantar la cabeza para prestar atención a lo que decía. Ahora sí pudo observar con precisión el rostro del Profesor Malfoy, como dictó ser llamado, mas con desilusión no logró encontrarlo en ningún registro de su memoria, en el fondo había estado esperando que se tratara de uno de sus antiguos docentes, pero obviamente, no tenía nada en contra de que él la diera, ni siquiera lo conocía y tomando en cuenta su carácter, lo más probable es que la Poulain tampoco lograra sacarle más información que su nombre - Quizá se enseña por el complemento que hace a la clase de DCAO -contestó de pronto la ojimiel casi sin percatarse. Siempre era lo mismo, ante una pregunta no podía quedarse callada - La más lógica respuesta a su pregunta sería que se enseña para tener claro a qué nos enfrentamos en el momento que debamos lidiar con algo oscuro. Comprender bien lo que hacemos y por qué actuamos de tal manera. No sirve solo saber cómo atacar o defender, también hay que tener claro la naturaleza de ello y bueno, en el caso de otra preferencia, podría servir para saber como manejarlas. Además, la creación de esas artes es tan parte de nuestra historia como cualquier otra cosa- terminó y volvió a mirar al profesor y a su compañera de curso, mas su gesto y encogimiento de hombros demostró algo de incomodidad, no le gustaba llamar mucho la atención, pero a veces las palabras salían de su boca sin más - Por cierto, soy Marie Báthory Poulain - se presentó con una mueca avergonzada por su olvido.

     

    Quedó mirando al profesor y luego este siguió con sus palabras advirtiéndoles lo duro que sería el curso. Por su parte, la castaña no temía en absoluto, había algo en esas áreas ocultas que le llamaban profundamente la atención y estaba dispuesta a hacer lo necesario por comenzar a dominarlas. Apoyada sobre su pupitre, observó lo que hacía el Malfoy con su varita frunciendo el ceño sin comprender al principio de qué se trataba todo eso, pero solo bastó que estirara el cuello para ver los objetos frente a ellos. Sus músculos se relajaron ante la impresión y sus ojos se abrieron con disimulo repasando las reliquias una y otra vez. Tenía claro que no podían ser las originales, nunca las prestarían para una simple clase, pero aún así su corazón se agitó por la emoción y una sonrisa se formó en su rostro mientras escuchaba al profesor Malfoy. Volvió a notar como agitaba su varita y leyó interesada lo que había reemplazado sus nombres en la muralla. Al saber ya lo que debía hacer, buscó sin esperar ninguna otra indicación un pergamino y pluma en su bolso para comenzar. Sumergida en su trabajo, no demoró mucho en hacerlo pues hace un tiempo había leído todo sobre magos oscuros en la historia, más demoró en revisarlo convenciéndose de que estaba todo bien.

     

    -Si me permite ya he acabado y me gustaría leerlo para ustedes ahora - dijo con una leve sonrisa luego de haber levantado la mano para llamar la atención del profesor. No era para nada de su agrado tener que leer su trabajo frente a ellos, pero era mejor terminar con eso antes de aplazarlo. Suspiró nerviosa poniéndose de pie y comenzó a leer:

     

    - Gellert Grindelwald: Fue el gran Mago Tenebroso antes de Voldemort. Estudió en la Escuela de Durmstrang, de la que fue expulsado a causa de sus retorcidos experimentos. Con 17 años marchó unos meses a Inglaterra a visitar a su tía abuela, la famosa historiadora, Bathilda Bagshot. Allí conoció a Albus Dumbledore, junto a él planeó reunir las Reliquias de la muerte para establecer un régimen en el que los magos y brujas gobernasen a los muggles. La unión se rompió en una pelea brutal entre Albus, Aberforth, hermano de Albus, y él, terminando con la muerte de la hermana de los Dumbledore, Kendra. Resurgió a finales de la década de los treinta para apoderarse del mundo apoyado por un grupo de seguidores, encarcelando a sus opositores y matando a los resistentes a su tiranía. Finalmente en 1945, Dumbledore se enfrentó a él y le derrotó ganándose la Varita de Sauco que Gellert poseía. Encarcelado en la misma prisión que utilizaba para encerrar a sus adversarios, Nurmengard, murió en marzo de 1998 en manos de Voldemort al negarse a darle el paradero de la Varita de Sauco - leyó con grácil voz una de las biografías y se detuvo para mirar a los demás. Dio un respiro y siguió, aunque lo próximo no fue necesario sacarlo de su pergamino. Estaba todo en su cabeza - Su importancia en la sociedad mágica refuta en que fue el primer mago en emplear las artes oscuras para un objetivo tan grande y ambicioso como el de tomar control sobre ambos mundos, muggle y mágico. Además de que él fue el primero en combatir por un radical cambio con el principio de la pureza de la sangre y la inferioridad de los no mágicos - finalizó y sin esperar mucho buscó a su segundo personaje en la lista.

     

    -Herpo el Loco: Antiguo mago oscuro griego. Mejor conocido por ser el primer creador del basilisco, de algunas maldiciones y quizá del ritual para crear un Horrocrux, pues se sabe que hizo uno. Además, fue uno de los primeros magos conocidos que hablaban pársel. Con estas características podemos concluir que este mago fue un gran impacto en el mundo mágico al ser un claro impulsor de las Artes Oscuras - explicó con facilidad pues a ese personaje lo conocía bien y le resultaba más que interesante.

     

    - Y por último, Salazar Slytherin: Se dice que él provenía de los pantanos, de ahí que también hablaba pársel. En un momento de su vida hace amistad con Godric Griffindor y con ayuda de otras dos hechiceras, Helga Hufflepuff y Rowena Ravenclaw, fundan el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. A causa de su ideal de solo admitir a estudiantes de familias de magos entra en disputa con los demás fundadores y aunque no logró su cometido, creó una cámara oculta bajo la institución antes de abandonar Hogwarts con el objetivo de limpiar al colegio de los magos impuros o de "sangre sucia" - finalizó la lectura y como lo demás podía decirlo sin ayuda, bajó el pergamino y miró a los demás - La gran importancia de este personaje es que no tan solo remarcó la exclusión de los muggles o magos impuros de la sociedad, sino que la llevó al área educacional donde hasta hoy en día se sigue instruyendo con esos ideales a quienes pertenezcan a la casa de Slytherin donde dejó el legado de la pureza.

     

    Al terminar de hablar, se quedó unos segundos viendo la reacción del profesor Malfoy con el pequeño temor de haber hecho algo mal por el gesto común que notaba en su rostro, mas se sentó en silencio y esperó a que prosiguiera la clase, ya había hecho lo que le pedían y estaba satisfecha con el resultado.

     

     

     

     

     

    ~

    Off: Esta bien, ahora toca por acá ^_^ Primero, gracias Juan Andrés por la clase, desde el principio me esta gustando mucho C: Y al grano, mi nombre es María José, pero por favor nunca me llamen por ese nombre que se me hace muy serio o díganme Kote como muchos lo hacen ;) Soy de Chile, tengo 18 años y por el momento con título de vaga xD Acabo de terminar el colegio a la espera de que me acepten en la universidad para estudiar Cine y Comunicación Audiovisual. Como pueden imaginar con mi carrera amo todo lo que tenga que ver con las artes, lo que sea. Me encanta el teatro, la literatura, la pintura, la música, etc. Ehm... Y eso, creo jaja

     

    Ahora mando el ensayo por MP ;)

  11. Por fin vengo a actualizar mi ficha *-* Dejo todo listo para copiar&pegar y... me preguntaba si podrían cambiar el título de mi ficha con mi nuevo nick por favor :3

     

    [center][img=http://i.imgur.com/kP3kl.png][/center]
    
    [color="#FFA500"][u][b]~ Datos Personales:[/b][/u][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Nombre del Personaje:[/b][/color] Marie J. Báthory Poulain 
    [color="#F5DEB3"][b]Sexo:[/b][/color] Femenino
    [color="#F5DEB3"][b]Edad:[/b][/color] Adolescente de  18 años
    [color="#F5DEB3"][b]Nacionalidad:[/b][/color] Francesa
    [color="#F5DEB3"][b]Familia(s):[/b][/color] 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Familia Lovegood [sanguínea]
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] -
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Sanguíneo:[/b][/color] Ethan Poulain-- Cyrine Ackerley--
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Adoptivos:[/b][/color] Alissia Y. Ryddleturn
    [color="#F5DEB3"][b]Trabajo:[/b][/color] 
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Poderes Mágicos:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Rango Social:[/b][/color] Unicornio de Bronce  
    [color="#F5DEB3"][b]Bando:[/b][/color] Neutral
    [b][color="#F5DEB3"]Rango dentro del Bando:[/color][/b] --
    [color="#F5DEB3"][b]Nivel de Poder Mágico:[/b][/color] 1
    [color="#F5DEB3"][b]Puntos de poder en objetos:[/b][/color] 20
    
    
    [color="#F5DEB3"][b]Puntos de poder en criaturas:[/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Habilidades Mágicas:[/b][/color] --
    [color="#F5DEB3"][b]Conocimientos Especiales:[/b][/color] 
    • Defensa Contra las Artes Oscuras
    • Encantamientos
    
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Perfil del Personaje:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Raza:[/b][/color] Humano
    [color="#F5DEB3"][b]Aspecto Físico:[/b][/color] Marie posee una piel blanca y tersa, largas extremidades, la estatura de 1.69 y poca gracia al moverse. La chica es una adolescente completamente común y poco llamativa, su cabello castaño claro es ligeramente ondulado y lo bastante largo como para casi alcanzar sus codos con las puntas. Su rostro es como el de una niña que causa ternura y simpatía teniendo unos penetrantes ojos color miel, enmarcados en largas pestañas bajo cejas delineadas. Su nariz recta termina redonda dando un lindo perfil entre unos poco notables pómulos que la mayoría del tiempo lucen un color rosado pálido. El rostro de la castaña es algo alargado y termina en un mentón pequeño bajo su boca de labios delgados y rosados. 
    
    [color="#F5DEB3"][b]Cualidades Psicológicas:[/b][/color] Marie debe reconocer que es una persona sensible a todo y a todos, mas no es pura ternura en todo momento, puede tener una reacción fuerte en situaciones que a ella no le parezcan, no dudará en dar a conocer su opinión respecto a cualquier tema, a excepción que sea mejor guardar silencio y así no empeorar las cosas. Tiene el hábito de siempre querer ayudar a los demás sea cual sea el problema o favor, no le gusta defraudar a nadie respecto a esto o cualquier otra cosa, por lo que procura ser responsable. Le desagrada ver a alguien mal o triste, así que si ella puede ayudarle a sonreír lo más seguro es que lo hará o por lo menos lo intentará. Suele ser juguetona tal y como una niña, pero muy madura al pensar y actuar en momentos de seriedad. Ama leer y saber sobre todo, es un hobbie que nunca va a dejar. Por esto, es muy inteligente y capaz de todo, pero siempre tomando en cuenta sus principios y valores que sus padres le inculcaron.
    
    [color="#F5DEB3"][b]Historia:[/b][/color] Marie J. Báthory Poulain nació un 13 de Junio de 1994 en el pueblo francés Autoire, donde sus padres Ethan y Cyrine se habían instalado hace 1 año luego de contraer matrimonio. Siendo ambos franceses, la mudanza en el mismo país no fue complicada, sin embargo, se aseguraban de no dejar rastro de ellos, puesto que eran seguidos por servidores del mago oscuro. Creyendo en su total protección, armaron su hogar en aquel colorido y pequeño pueblo de Francia dando el primer paso teniendo una bebé. 
    
    Luego, varios años pasaron sin tener preocupación alguna. El hombre de la casa ya tenía un buen trabajo en el mundo mágico francés, y a pesar de que no era un dineral lo que ganaba, alcanzaba perfectamente para su diario vivir. Además, Ditry, el elfo de la familia, era de gran ayuda en todo. La criatura no se había despegado de ellos desde que la misma niña lo vio deambulando por los bosques cercanos a la casa, en una de las tantas caminatas que daba la familia por los alrededores. 
    
    La alegría y la sencillez de los Poulain era casi imposible de creer, todo estaba saliendo perfectamente y nada se había sabido de mortífagos durante un buen y largo tiempo. Algo que tenía a la pareja muy segura de haber dejado atrás lo malo del pasado. Agradecidos de lo que tenían hasta el momento, pasaron más y más años, en los que la niña creció convirtiéndose en una dulce jovencita. Ya a estas alturas, se podía apreciar con más claridad los distintos rasgos heredados de sus padres que resaltaban en su actuar. El rostro de apariencia infantil era lo que más parecido a su madre había obtenido, aparte de la delicadeza con la que actuaba y lo frágil que se veía en todo sentido. Por su parte, Ethan le había dado ese color castaño claro a su cabello y lo miel a sus ojos. Sin embargo, la personalidad amable, sencilla y respetuosa, la había heredado de ambos, por lo que no podían estar más orgullosos. 
    
    Una noche, toda la felicidad se quebró como vaso de cristal contra el suelo. Mortífagos fueron en busca de los fenixianos que habían logrado encarcelar a varios de sus aliados, Ethan y Cyrine habían quedado tachados como un peligro para la marca y debían ser eliminados. Para proteger a su primogénita sabiendo el riesgo que corrían, pusieron a correr el plan que hace mucho habían planeado. Enviarla a Inglaterra con la familia Lovegood Poulain quienes habían estado viviendo en la casa de la bisabuela de Marie, Luna Scamander. 
    
    Durante el ataque, el padre de la castaña y su madre fallecieron mientras Ditry, su mejor amigo y elfo doméstico, la llevaba con sus primas a las afueras de Ottery. En Inglaterra estudió e hizo buenas amigas, entre ellas se pudo destacar Alissia quien fue mucho más que un gran apoyo, fue su madre adoptiva aunque su trato suele ser muy informal en ese tema. El tiempo pasó y ya graduada de la academia, se encuentra con su mejor amiga de Francia, Pandora, una excelente perfumista a la que recurrían siempre. 
    
    En la actualidad, se encuentra de vuelta en Inglaterra luego de haber dejado todo y vuelto a sus raíces en Autoire. Reconstruyó la casa de su familia y allí se quedó por un tiempo con su leal elfo hasta que se percató que ya nada quedaba allí para ella más que recuerdos. En una rápida decisión tomó sus cosas y volvió con los Lovegood a Ottery y por el momento, no piensa marcharse de nuevo. 
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Pertenencias:[/u][/b][/color]
    
    [b][color="#F5DEB3"]Objeto Mágico Legendario:[/color][/b] –
    [color="#F5DEB3"][b]Objetos Mágicos:[/b][/color]
    
    [b]Objeto 1:[/b] Varita hecha a partir de una pluma de fénix, madera de acebo. Arriba de 30 cm de longitud muy poderosa, excelente para hechizos complicados, de defensa personal y de ataque.
    [b]Clasificación:[/b] AA
    [b]Puntos de poder:[/b] 20
    
    [color="#F5DEB3"][b]Mascotas y Criaturas:[/b][/color]
    [b]Criatura 1:[/b] --
    [b]Clasificación:[/b] --
    [b]Puntos de poder:[/b] --
    
    [color="#F5DEB3"][b]Criaturas en la Reserva:[/b][/color]
    [b]Criatura 1:[/b] --
    [b]Clasificación:[/b] --
    [b]Puntos de poder:[/b] –
    
    [color="#F5DEB3"][b]Elfos: [/b][/color]
    [color="#F5DEB3"][b]• [/b][/color][b]   Ditry:[/b] Criatura de ojos grandes y amarillos, los cuáles ocupan la gran mayoría de su pequeña cabeza. Posee orejas grandes que terminan en punta, cayéndole ligeramente por sobre sus ojos de vez en cuando. Su nariz es puntiaguda, pero de un tamaño normal la cual se asoma entre ambos desproporcionados ojos con respecto al resto del cuerpo. Es de un pequeño tamaño, delgadas extremidades y largas manos. La mayoría de tiempo viste unas largas prendas en perfecto estado, prácticamente nuevas de diferentes diseños y telas. Siempre había sido considerado como alguien de la familia, por lo que, siempre había vestido ropa decente. 
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Licencias, Tasas, Registros:[/u][/b][/color]
    
    [b][color="#F5DEB3"]Licencia de Aparición:[/color][/b] Si
    [color="#F5DEB3"][b]Licencia de Vuelo de Escoba:[/b][/color] Obtenida
    [color="#F5DEB3"][b]Registro de XXX:[/b][/color]--
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Otros Datos:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Otros datos:[/b][/color]
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Su tío era Lucien Poulain. Hermano de Ethan Poulain.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Su elfo Ditry, es el único ser vivo que ha vivido con ella durante toda su vida, por ello lo quiere como su mejor amigo.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Habla francés fluidamente gracias a los años que vivió allí, mas ahora procura hablar en inglés sin problema alguno, sus padres, gracias a sus viajes a Inglaterra, le enseñaron mientras pudieron hacerlo. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Le gusta tocar el piano. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Sus colores favoritos son el azul, verde y naranjo.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Está muy al tanto de las cosas muggles. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Le encanta la naturaleza a excepción de algunos insectos.  Sin embargo, a veces se arma de valor ante ellos.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] El mejor regalo que le pueden hacer sería algo que le demostrara el cariño que sienten por ella.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] No le importa mucho lo material.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Ama el helado por sobre toda las comidas y cosas materiales. 
    
    [color="#F5DEB3"][b]Cronología de Cargos:[/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Premios y Reconocimientos:[/b][/color]
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Links de Interés Referentes al Personaje:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Link a Bóveda Personal:[/b][/color] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90605"]B:90605[/url]
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda Trastera:[/color][/b] --
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda de Negocio:[/color][/b] --
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda Familia 1:[/color][/b] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=99008"]Bóveda Familia Lovegood[/url]
    [color="#F5DEB3"][b]Link a Bóveda Familia 2:[/b][/color] --

     

    Muchas gracias ^^

  12. Luego, de un significante descanso que tuvo la Báthory en un spa del callejón, hoy ella volvía de lo mejor. Le gustaba pasar tiempo en su trabajo, pero de todos modos, agradecía a Sophie por haberle dado el día de ayer libre para cambiar aquella cara de estrés. Marie iba tan feliz que hasta sonreía y no se hacía problemas por chocarse con los mismos magos de siempre a la entrada del ministerio. Otras veces solo maldecía mentalmente que le costara tanto llegar hasta los elevadores, pero hoy simplemente estaba feliz. No sabía si era por el relajo que se había dado ayer o si se trataba de esos días que solo despertaba de buen humor sonriendole a la vida, aunque vamos, todos saben que la ojimiel no es ninguna amargada, pero de que lucía y se sentía mejor, así era.

     

    Casi divertida, caminó lenta y cuidadosamente hasta toparse con la rejilla de un elevador abierta. Entró y se sostuvo de las correas pensando en que haría. Sabía que las cosas por el departamento estaban verdaderamente aburridas, aunque por un lado debía verlo como algo positivo, si no había trabajo para ella, significaba que la vida de los magos no estaba en peligro, o por lo menos no en masa. Así que la castaña, pensándolo mejor, prefería no tener tanto trabajo. Siempre se repetía que amaba su trabajo, pero su trabajo incluye el bienestar de los demás y si no había denuncia alguna, al parecer todo iba bien «al parecer», repitió mentalmente.

     

    Salió de la diminuta caja al escuchar que ya se encontraba en la segunda planta y caminó hasta su oficina sin siquiera prestar atención al aún vació pupitre de Emma. Ya casi lograba llevar su ausencia como algo normal, aunque no fuera así. Sus pasos se hicieron escuchar en el pequeño pasillo hacia los cubicu.los a causa de los tacones que llevaba puestos. No eran altos, ya que a la Báthory eso le parecería más una tortura, pero si llevaban un pequeño tacón que la elevaba unos centímetros. Esta vez no llevaba ningún vestido, solo unos pantalones ajustados de color negro a lo que sumó una camisa blanca sin mangas holgada y larga. Obviamente el día no estaba para tal vestimenta, pero su chaqueta de cuero la mantenía abrigada.

     

    Llegó a su escritorio y como siempre, se sacó el abrigo, lo colgó tras su asiento para luego tomar asiento y sumirse en sus pensamientos. ¿Qué otra cosa haría? Todo lo había ordenado, leído, guardado y grabado en su mente. Apoyó aburrida los brazos sobre la madera barnizada y después posó su cabeza en ellos. Cualquier cosa daba vuelta por su mente hasta que se le ocurrió una gran idea.

     

    - Decoremos esto, se ve bastante aburrido - dijo para si misma antes de comenzar. Sacó su varita desde el interior de su chaqueta e hizo aparecer diversos materiales. Solo juntó lo que se le ocurría, ni una idea venía a su cabeza, pero unas cuantas fotos de su elfo Ditry, de sus padres y de su madre adoptiva no faltaron en su escritorio.

  13. Marie acababa de abrir la puerta disponiéndose a entrar explicando con quien iba a Agatha, cuando la voz de su jefa le hizo mirar por sobre su hombro. La sorpresiva aparición de su jefa le hizo dar un pequeño salto y no supo cuando fue que la Granger arrastró a su empleada y aparente prima por el pasillo de vuelta. Caminó intentando igualar la rapidez de Sophie más solo logró unos cuantos tropezones antes de que se detuvieran.

     

    La rubia había actuado tan rápido que la cabeza de Marie daba pequeñas vueltas a causa del giro que dieron las cosas. Por lo mismo, nada de su boca salió a pesar de unas preguntas que le rondaban por la mente, mas no hubo necesidad de ello, puesto que su jefa habló antes intentando excusar nerviosa a Agatha que, como ella explicó, estaba ocupada con algo muy importante. La Báthory solo asintió algo perdida y un poco antes de que Sophie se encaminara junto a Valeskya a la oficina del director solo moduló:-Si, claro. Gracias- para que la rubia supiera que le había escuchado.

     

    Sacudiendo algo la cabeza dio un profundo suspiro pensando que la gente cada vez estaba un tanto más loca, aunque debía admitir que eso le agradaba. Últimamente todos andaban serios y amargados por la vida por lo que alguna que otra cosa o suceso raro venía muy bien para levantar los ánimos.

     

    Se dirigió a su cubicu.lo sin prisa y con la misma lentitud tomó su abrigo, verificó que todo estuviera en orden y caminó hasta el recibidor abrigándose. Vio el puesto vacío que había dejado Emma y un retorcijón en el estomago le hizo desviar la mirada. Solo esperaba que se encontrara bien. Dio una pequeña mueca levantando la comisura derecha y trató de darse ánimos. Arregló su cabellera castaña que había quedado por debajo del abrigo y salió del departamento para encontrarse con el elevador. Las rejas se abrieron y Marie entró en silencio, pensativa buscando con el tacto de donde sujetarse para cuando aquella diminuta caja partiera «Quizá un paseo por el callejón me haga bien, hace mucho que no voy… » pensó en el transcurso, aun pronto desistió sintiéndose cansada. Lo mejor sería volver al castillo terminó por decidir o tal vez, visitar a los Poulain y quedarse el fin de semana. Luego vería que haría.

  14. La Báthory siguió con su disimulada búsqueda de su jefa mientras esperaba alguna respuesta de la joven. Como Marie había escuchado antes, ella se encontraba en la búsqueda de Sophie y lo más probable es que se tratara de algo importante, mas al momento en que la otra hizo aquella singular pregunta, sonrió mirándola de frente a la vez que estrechaba su mano con la de ella –Bueno, señorita Valeskya he trabajado aquí desde que salí de la academia aunque sin contar el tiempo que fui aprendiz en esta misma oficina- respondió a su alusión como si se trata de una simple conversación con alguien conocido, aunque a la castaña le parecía bastante haberse topado antes con aquella chica.

     

    Marie, atentamente escuchó lo que Valeskya decía procurando no perderse. Últimamente era mucho lo que en su cabeza se acumulaba y de vez en cuando, perdía el hilo de las cosas a cada momento que otro tema fluía de su mente. Era bastante despistada pero con el suceso reciente, ya no era algo tan pequeño. En cuanto la ojivioleta terminó, la matriarca Báthory observó a su alrededor nuevamente por si alguno de los jefes se dejaba ver. Sin embargo, a Sophie no la había visto desde que se encerró con los demás jefes en la oficina del director. Aunque luego recordó cuando Agatha salió en compañía de un mago que Marie solo había visto unas cuantas veces y después, lo mismo hizo Seba para dirigirse a su oficina.

     

    -Uhm… Creo que alguno de ellos tres debe estar disponible para hablar con usted. Mejor sígame y vamos en su búsqueda –la invitó con una leve sonrisa

     

    Pasaron por el corto pasillo que dirigía hacia las oficinas cuando la Granger hizo otra pregunta a la joven castaña –Uff… ya ni recuerdo alguna actividad hecha antes del ataque al departamento y en los últimos momentos ninguna denuncia se ha hecho –explicó y luego mantuvo silencio intentando recordar su última denuncia- A ver, creo que la última denuncia que se hizo fue por la Mansión Diggory donde se realizó un cateo también, pero más allá no sé.

     

    Siguieron caminando hasta llegar a la oficina de jefes más cercana, la de Agatha. Dudó si tocar o no sabiendo que se hallaba ocupada, mas lo hizo sin pensar una segunda vez, puesto que si lo hacía se retiraría. Dio tres golpecitos contra la madera y cuando escuchó respuesta ingresó.

     

    -Disculpe, pero aquí está Valeskya Granger en busca de algún jefe con quien poder hablar –se explicó al momento en que señalaba a su acompañante esperando que la Gryffindor pudiera atenderla.

  15. Pronto, tanto hurgar entre los papeles que contenía Sophie en su oficina, un pequeño dolor de cabeza hizo a Marie levantar la vista. Quizá se trataba de lo incómoda que estaba en el puesto de su jefa o la respuesta al último gran acontecimiento por fin llegaba como golpe a su conciencia. Sin embargo, no esperó a averiguar de qué se trataba. Cerró la carpeta entre sus manos y acomodándola entre su brazo y pecho, se dispuso a salir de allí. En cuanto cerró la puerta de la oficina, sintió como sus músculos descansaban y el malestar se aliviaba. «Creo que mi cuerpo conoce cuál es mi lugar» pensó riendo para sus adentros. Dirigió sus pasos hacia el cubicu.lo cercano a la entrada del pasillo que separaba al recibidor de las oficinas, y tomó asiento sintiéndose en el lugar indicado. Sonrió y negó con la cabeza pensando en lo rara que era su conciencia, mientras abría el archivador con denuncias de hace mucho. A la castaña le gustaba investigar sobre antiguas denuncias y tener un historial propio lo más completo posible. No eran pocas las veces que llegaban magos a hacer consultas por denuncias hechas años atrás, así que lo mejor para Marie, o Kotee como solían apodarla, era estar al tanto.

     

    En su cuaderno de tapa dura, anotó lo más importante que encontraba como ya había hecho con todo formulario con el que se topaba, por lo que el gran tamaño de este, le parecía de lo mejor aunque muchas veces se detuvo a pensar, que un simple cuaderno no debía utilizar más de la mitad de un escritorio. Pronto una voz en la entrada del departamento se hizo escuchar llamando fuertemente a Sophie. La Báthory se puso de pie y miró por el pasillo en busca de la Granger, mas de ella no vio nada. Miró sobre su hombro y con un agite de su varita todo sobre su escritorio se cerró y guardó. Después de lo ocurrido, debía tener todo más asegurado.

     

    -Buenas –saludó con una leve sonrisa a pelinegra recién llegada – Soy Marie, trabajo con Sophie en la oficina de denuncias. Por el momento, creo que ella está ocupada con temas del departamento, pero ¿Puedo ayudarte en algo?

     

    Mientras hablaba, la ojimiel observó a su alrededor en busca de su jefa, mas no podía verla en ningún lado. Marie pensó que de seguro estaba ocupada aun con la cuestión del nuevo director del departamento, así que se haría cargo de esto. Sophie ya le había pedido que se hiciera cargo de la oficina mientras se arreglaba todo, por lo que la castaña no dudó en atender a aquella chica que parecía conocer a la rubia Granger.

  16. Holaa! vengo por vaarios cambios :3 Dejo toda la ficha ya actualizada para que copien y peguen (:

     

     

    [center][img=http://i.imgur.com/gbhu8.png][/center]
    
    [color="#FFA500"][u][b]~ Datos Personales:[/b][/u][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Nombre del Personaje:[/b][/color] Marie J. Báthory Poulain 
    [color="#F5DEB3"][b]Sexo:[/b][/color] Femenino
    [color="#F5DEB3"][b]Edad:[/b][/color] Adolescente de  18 años
    [color="#F5DEB3"][b]Nacionalidad:[/b][/color] Francesa
    [color="#F5DEB3"][b]Familia(s):[/b][/color] 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color]  Familia Báthory♧[b][i]Matriarca[/i][/b] [adoptiva]
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color]  Familia Poulain [sanguínea]
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Sanguíneo:[/b][/color] Ethan Poulain-- Cyrine Ackerley--
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Adoptivos:[/b][/color] Alissia Macnair Báthory
    [color="#F5DEB3"][b]Trabajo:[/b][/color]  Empleada en la Oficina para la Recepción de Denuncias sobre la Utilización de Artes Oscuras
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Poderes Mágicos:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Rango Social:[/b][/color] Unicornio de Bronce  
    [color="#F5DEB3"][b]Bando:[/b][/color] Neutral
    [b][color="#F5DEB3"]Rango dentro del Bando:[/color][/b] --
    [color="#F5DEB3"][b]Nivel de Poder Mágico:[/b][/color] 1
    [color="#F5DEB3"][b]Puntos de poder en objetos:[/b][/color] 20
    
    [quote][color="#F5DEB3"][b]Hechizos adicionales:[/b][/color][/quote]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Puntos de poder en criaturas:[/b][/color]
    
    [quote][color="#F5DEB3"][b]Criaturas controlables en asaltos y duelos:[/b][/color][/quote]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Habilidades Mágicas:[/b][/color] --
    [color="#F5DEB3"][b]Conocimientos Especiales:[/b][/color] 
    • Defensa Contra las Artes Oscuras
    • Encantamientos
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Perfil del Personaje:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Raza:[/b][/color] Humano
    [color="#F5DEB3"][b]Aspecto Físico:[/b][/color] Marie al poseer una piel tersa y extremadamente blanca ha sido comparada con vampiros por mucho tiempo tomando en cuenta su descendencia. Pero a causa de sus largas extremidades, la estatura de 1.69 y poca gracia al moverse, la posibilidad de ser una criatura tan ágil como esa queda completamente descartada. Sus brazos y piernas son completamente blancas, pero no por eso feas, están bien formadas y aunque a ella no le importe extremadamente su aspecto físico, su cuerpo está en todos los sentidos totalmente saludable y bien proporcionalmente.  La chica es una adolescente completamente común y poco llamativa, su cabello castaño claro es ligeramente ondulado y lo bastante largo como para casi alcanzar sus codos con las puntas del pelo. Su rostro es como el de una niña que causa ternura y simpatía teniendo unos penetrantes ojos color miel, enmarcados en largas pestañas bajo cejas delineadas que apenas se pueden ver bajo el flequillo que cae livianamente sobre su frente hasta sus parpados. Su nariz recta termina redonda dando un lindo perfil entre unos poco notables pómulos que la mayoría del tiempo lucen un color rosado pálido. El rostro de la castaña es algo alargado y termina en un mentón pequeño ubicado bajo su boca de labios delgados y rosados. 
    
    [color="#F5DEB3"][b]Cualidades Psicológicas:[/b][/color] Marie debe reconocer que es una persona sensible a todo y a todos, mas no es pura ternura en todo momento, puede tener una reacción fuerte en situaciones que a ella no le parezcan, no dudará en dar a conocer su opinión respecto a cualquier tema, a excepción que sea mejor guardar silencio y así no empeorar las cosas. Tiene el hábito de siempre querer ayudar a los demás sea cual sea el problema o favor, no le gusta defraudar a nadie respecto a esto o cualquier otra cosa, por lo que procura ser responsable. Le desagrada ver a alguien mal o triste, así que si ella puede ayudarle a sonreír lo más seguro es que lo hará o por lo menos lo intentará. Suele ser juguetona tal y como una niña, pero muy madura al pensar y actuar a pesar de su edad. Ama leer y saber sobre todo, por lo tanto un hobbie que nunca va a dejar va a ser el de leer. Por esto, es muy inteligente y capaz de todo, pero siempre tomando en cuenta sus principios y valores que sus padres le inculcaron.
    
    [color="#F5DEB3"][b]Historia:[/b][/color] Marie J. Báthory Poulain nació un 13 de Junio de 1994 en el pueblo francés Autoire, donde sus padres Ethan y Cyrine se habían instalado hace 1 año luego de contraer matrimonio. Siendo ambos franceses, la mudanza en el mismo país no fue complicada, sin embargo, se aseguraban de no dejar rastro de ellos, puesto que eran seguidos por servidores del mago oscuro. Creyendo en su total protección, armaron su hogar en aquel colorido y pequeño pueblo de Francia dando el primer paso teniendo una bebé. 
    
    Luego, varios años pasaron sin tener preocupación alguna. El hombre de la casa ya tenía un buen trabajo en el mundo mágico francés, y a pesar de que no era un dineral lo que ganaba, alcanzaba perfectamente para su diario vivir. Además, Ditry, el elfo de la familia, era de gran ayuda en todo. La criatura no se había despegado de ellos desde que la misma niña lo vio deambulando por los bosques cercanos a la casa, en una de las tantas caminatas que daba la familia por los alrededores. 
    
    La alegría y la sencillez de los Poulain era casi imposible de creer, todo estaba saliendo perfectamente y nada se había sabido de mortífagos durante un buen y largo tiempo. Algo que tenía a la pareja muy segura de haber dejado atrás lo malo del pasado. Agradecidos de lo que tenían hasta el momento, pasaron más y más años, en los que la niña creció convirtiéndose en una dulce jovencita. Ya a estas alturas, se podía apreciar con más claridad los distintos rasgos heredados de sus padres que resaltaban en su actuar. El rostro de apariencia infantil y de muñequita de porcelana con pecas, era lo que más parecido a su madre que obtenido, aparte de la delicadeza con la que actuaba y lo frágil que se veía en todo sentido. Por su parte, Ethan le había dado ese color castaño claro a su cabello y lo miel a sus ojos. Sin embargo, la personalidad amable, sencilla y respetuosa, la había heredado de ambos, por lo que no podían estar más orgullosos. 
    
    En el cumpleaños número dieciséis de Marie, tuvieron una pequeña celebración familiar en casa como lo hacían todos los años. Ella, pocos amigos tenía a causa de tener pocas instancias para socializar con los demás, aun que la mayoría de los habitantes del pueblo ya eran mayores de edad. Por esta misma razón, ambos padres deseaban que fuera a la academia, en donde, no tal solo haría más amigos, sino que también, la formarían para el futuro en donde ellos ya no podrían protegerla como lo hacían ahora. Hace pocos días ellos habían recibido una carta de familiares en Inglaterra, quienes habían comenzado a sufrir ataques de mortífagos, avisando de aquella situación para que tomaran las medidas correspondientes. Por lo que, mandar a su única hija a una de las academias más seguras del mundo, era algo que debían hacer rápido. Mas esta quedaba en Inglaterra y Marie se rehusaba a dejarlos solos, incluso sin saber nada de lo que estaba pasando. Los padres, sintiendo una gran preocupación por el mañana, intentaban buscar otra forma de convencerla o tendrían que actuar con otro plan. Los estaban buscando y no tardarían mucho en dar con ellos. 
    
    Pasaron semanas y por suerte, nada había ocurrido aún. Marie, aún ajena a todos los problemas que cargaban sus padres, había decidido por fin hacerles caso e ir a la academia a la que tanto le habían rogado que fuera. Sentía que si era algo que ellos querían tanto, sería una forma de retribuirles todo el amor que le habían entregado. Decidida, mandó una lechuza con el formulario de inscripción antes de decírselo a su familia. Sabía que se alegrarían mucho por ello y más confiados estarían si les dijera que ya estaba inscrita. Al recibir una respuesta de aceptación, no esperó más y corrió a contarles con emoción.
    
    - [i]Madre, ¿Dónde está mi padre?[/i] –inquirió a su madre llegando junto a ella. Cyrine se encontraba lavando los platos de la cena junto a Ditry quién los secaba y guardaba al instante. Ya era tarde y a causa de la poca iluminación, costaba un tanto ver de buena manera. 
    
    Acercándose al interruptor, encendió las luces de la cocina esperando la respuesta de su madre. Quería darles la noticia a ambos en el mismo momento y ver sus caras de emoción al enterarse. Entre tantas ansias, no podía aguantar hasta aquel momento.
    
    - [i]Cariño, creo que salió al jardín a solucionar el “problema” con la lechucería[/i]-respondió no tan segura –[i]Pero está en el jardín, ¿por qué preguntas?[/i] –cuestionó pasándole el último plato a Ditry para que hiciera su parte. Cerró el grifo y se giró a verme de frente.
    
    - [i]Les tengo una noticia que les gustará mucho, pero los necesito a ambos presentes[/i] –respondió la castaña sonriendo.
    
    La lechucería hace mucho que no se limpiaba y eso siempre era tomado en la familia Poulain como un “problema” ya que a nadie le gustaba ir a asearlo, ni a Ditry. La castaña miró por la ventana hacia donde se suponía que estaría su padre, pero no vio luz ni ningún indicio de que alguien anduviera por esos lados. Tan raro le resultó aquello, que su corazón comenzó a palpitar como nunca antes. Era más que un sentimiento de confusión, sintió miedo ante tanta oscuridad asomándose por su ventana. Un fuerte viento comenzó a soplar queriendo echar abajo la casa mientras que ella no apartaba la vista intentando visualizar algo que le dijera el paradero de su padre.
    
    - [i]Kotee, ¿te ocurre algo preciosa? [/i]–le preguntó Cyrine llamándola por su apodo y poniéndole con preocupación una mano sobre el hombro. De un segundo al otro, el rostro de felicidad de su hija, había dado lugar a uno de temor.
    
    Sin palabra alguna, la primogénita corrió hacia la oscuridad del salón principal dispuesta a ir en busca de Ethan, su padre. Lo necesitaba para hacerlo feliz y sentía que estaría todo mejor teniéndolo en casa junto a ellas. Mas al cruzar la mitad del salón, las puertas se abrieron dando paso a una fuerte ventisca que azotó las puertas, dejando entrar una alta figura que se dirigió despavorida hacia Marie quién abrazó a su padre sintiendo como temblaba. 
    
    -[i]¡Ethan![/i]–gritó desgarradoramente desde la cocina Cyrine.
    
    Tomándose de la mano, ambos se dirigieron para atender a su madre. Al llegar, vieron con horror como el jardín delantero se incendiaba entre sombras y risas ahogadas a causa del ruido. La chica miraba con temor lo que estaba ocurriendo e interrumpiendo el silencio, miró el rostro tenso de su padre y el humedecido por las lágrimas de su madre.
    
    - [i]¿Qué… qué está ocurriendo? ¡Mamá, hay que hacer algo![/i] –la chica intentó correr y así detener la propagación del fuego. Mas su movimiento hizo recapacitar a sus padres quienes la tomaron y sacaron por la puerta trasera de la casa. 
    
    Ditry había desaparecido y ambos se abrazaban a su hija deteniendo sus impulsos, a la vez, llevándola hacia uno de los bosques que rodeaban la casa.  
    
    - [i]Quédense aquí[/i] –dijo Ethan volteándose a su familia- [i]Iré a ver si logro rescatar lo necesario para irnos de aquí. [/i]
    - [i]Pero Ethan...[/i] –paró Cyrine a su marido con lágrimas en su rostro.
    - [i]Cariño, tú sabías que esto pasaría. No hay que perder más tiempo. Escóndanse, vendré luego. [/i]
    
    Sin decir más, corrió hacía la casa hasta que se perdió para su hija. Marie estaba confundida respecto a lo que estaba ocurriendo y el hecho de que su padre las dejara solas, provocó que la desesperación llegara a ella bruscamente haciéndola derramar continuas lágrimas llamando la atención de su madre.
    
    -[i]Hija, no llores todo estará bien… ya verás[/i] –la consolaba abrazándola.  A pesar de lo que salía de su boca, no creía en ese posible futuro. Esto tenía que terminar ahora y sólo había una forma.
    
    Ante esta idea, el rostro de la mujer se desfiguró dolorosamente sobre el hombro de su hija sin evitar que su pequeña escuchara su ahogado llanto. 
    
    -[i]Sé que algo anda mal… dímelo, por favor… [/i]-le suplicó la ojimiel mirando a los azules ojos de su madre.
    Sin embargo, antes de que ella pudiera contestarle, unas agresivas risas se hicieron escuchar. Al mirar, unas rápidas sombras comenzaron a rodear la casa por las alturas mandando verdes rayos que provocaron diversas explosiones en la casa ante los llorosos ojos de su familia. Al instante, Ditry apareció con sus grandes ojos atestados de lágrimas. 
    
    - [i]El señor… mi amo… [/i]-divagaba con voz quebrada antes de largarse a llorar.
    - [i]Mamá… ¡Mamá![/i] –gritó llorando- [i]Mi papá, mi papá…[/i] -murmuraba perdida cayendo al suelo.
    - [i]Ditry… ya sabes que hacer[/i] –habló con tono serio la mujer de cabellera negra. Tenían muy claro que esto pasaría y habían elaborado un plan en el que la última opción era salir con vida.
    - [i]Yo iba a ir a la academia… iba a ir y los habría hecho feliz[/i] –decía como pensando en voz alta la joven sobre las hojas secas en el suelo.
    
    Lo que estaba ocurriendo tenía a Marie en un estado emocional difícil, su padre acababa de ser atacado y según la reacción de Ditry, asesinado. Como pudo, miró a su madre quien se agachó a su altura.
    
    - [i]Ya nos haces felices querida y ahora aún más[/i] –explicó sonriendo, pero de un momento a otro, su tristeza volvió- [i]Cuídate mucho, linda[/i]-le pidió acariciándola y besándole la frente antes de pararse, sacar su varita y salir corriendo en la misma dirección que su padre había tomado hace unos minutos. 
    -[i]¡No! No, no…[/i] -exclamó corriendo tras ella entre tropiezos -[i]¡Mamá![/i]
    –gritó desgarradoramente cuando ya no la vio más.
    
    Pronto, un grito agudo de profundo dolor, se escuchó dejando a Marie estupefacta con lágrimas en los ojos. Risas malvadas provocaban más y más explosiones en lo que era su hogar. Sacó su varita y sin esperar nada, corrió hacia la casa en llamas, pero siendo alcanzada por su elfo, ambos se trasladaron hasta la total oscuridad de un prado frente a un gran castillo. Confundida, la chica miró a todos lados en busca del pueblo en el que vivió durante toda su vida, pero nada le resultaba conocido. 
    
    - [i]¡Ditry! ¿Dónde me has traído? ¡Tengo que volver![/i] –le pedía caminando de un lado a otro con claro enfado.
    - [i]Ditry lo siente, pero no puede hacerlo. Sus padres me dijeron que…[/i]
    - [i]¡¿Qué?! ¡Mis padres están en peligro! ¡Entiéndeme, necesito volver! Quiero volver con ellos… [/i]-terminó quebrándose para volver a caer llorando desconsoladamente. 
    - [i]Vamos mi señorita, tengo órdenes de presentarle a alguien… [/i]
    
    Tomó del brazo de la acabada joven y la llevó hasta el castillo. Antes de que pudiera tocar, la puerta se abrió dejando ver a una chica joven  de tez blanca, ojos marrones y cabello negro liso. Su expresión parecía fría pero de un momento a otro sonrió como queriendo consolar.
    
    - [i]Vaya, no creí que ocurriera tan pronto[/i] –dijo con dejo de tristeza.
    - [i]¿A qué se refiere? Ditry, no entiendo nada. Quiero ir con mis padres… por favor[/i] –le suplicó cansada.
    - [i]Kotee, entra…[/i] -le dijo la chica frente a ella.
    -[i]¿Cómo sabes que me dicen así? ¿Te conozco? [/i]–inquirió la desconsolada joven con lágrimas en las mejillas, mientras entraba a la gran y oscura estancia acompañada de su elfo.
    - [i]Debí suponer que no me recordarías. Soy tu prima. Fui adoptada por Lucien y Amelie Poulain, creo que nos habíamos visto en algunas reuniones familiares hace mucho.[/i]
    - [i]Puede ser… [/i]-respondió incómoda Marie. La situación la tenía desconectada de todo. No podía dejar de pensar en sus padres. 
    - [i]Mejor llévala a descansar Ditry, tengo su cuarto listo desde hace mucho.[/i]
    
    Al otro día llegó una lechuza avisando la muerte de sus padres a causa de un ataque mortífago. Para Marie saber esta noticia, la mantuvo por mucho completamente deprimida. Lo único que anhelaba en esos momentos era los recuerdos que en esa casa, ahora destruida, había dejado atrás. Pasaron días y el asunto de su custodia se vino encima. Sin embargo no fue algo difícil, Alissia le había tomado un cariño especial a aquella chica, por lo que no dudó en tomarla como su hija adoptiva y dejarla viviendo con ella en su castillo ubicado en Ottery, Inglaterra.
    
    Desde ese momento, Marie pasó a tener el apellido Báthory en su nombre, pero sin sacar de su lugar el de sus difuntos padres, quienes fueron sepultados en el cementerio del pueblo francés en donde vivían. Y para recordarlos, instalaron en el jardín frontal de la casa, que se remodeló luego de un tiempo, una gran roca en la cual se tallaron sus nombres. Ahora, todos los años Marie y su elfo, van a dejarles flores al cementerio y pasan por la casa que, por consecuencia, le pertenece a la joven.
    
    Durante el año siguiente, la nueva Báthory, entró a la academia  perteneciendo a la casa de fuego, los Dragones de Lancashire. Allí,  descubrió sus claras aspiraciones a la Orden del Fénix, por lo que se  inscribió en ella tomando el puesto de aspirante hasta que terminara la  academia. Más adelante, se puso a trabajar como aprendiz en el  departamento de aurores, recibiendo las denuncias sobre utilización de  artes oscuras, a la espera de algún día poder trabajar allí  oficialmente. Ya al terminar la academia, se postuló para ser otra  empleada más de aquella oficina que tanto le había agradado realizandose  su deseo con éxito. Ahora trabaja como otra empleada, recibiendo  denuncias y ayudando a los demás en cuanto puede, mas otras sorpresas  vendrían por el lado de su familia. Varios problemas con sus parientes  provocaron la separación de estos, por lo que se fué a vivir  definitivamente con su prima y madre adoptiva Alissia, sin embargo,  pronto esta le haría una propuesta a la que no podría negarse, por lo  que se volvió una de las matriarcas de la familia Báthory.
    
    Un tiempo después de que asumiera el matriarcado de la Báthory, Marie se enteró de que su familia por parte de los Poulain, habían vuelto a reunirse. Por lo que feliz, volvió a aquella mansión que tanto extrañaba, aunque obviamente, tenía más obligaciones en el castillo junto a su madre.
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Pertenencias:[/u][/b][/color]
    
    [b][color="#F5DEB3"]Objeto Mágico Legendario:[/color][/b] –
    [color="#F5DEB3"][b]Objetos Mágicos:[/b][/color]
    
    [b]Objeto 1:[/b] Varita hecha a partir de una pluma de fénix, madera de acebo. Arriba de 30 cm de longitud muy poderosa, excelente para hechizos complicados, de defensa personal y de ataque.
    [b]Clasificación:[/b] AA
    [b]Puntos de poder:[/b] 20
    
    [color="#F5DEB3"][b]Mascotas y Criaturas:[/b][/color]
    [b]Criatura 1:[/b] --
    [b]Clasificación:[/b] --
    [b]Puntos de poder:[/b] --
    
    [color="#F5DEB3"][b]Criaturas en la Reserva:[/b][/color]
    [b]Criatura 1:[/b] --
    [b]Clasificación:[/b] --
    [b]Puntos de poder:[/b] –
    
    [color="#F5DEB3"][b]Elfos: [/b][/color]
    [color="#F5DEB3"][b]• [/b][/color][b]   Ditry:[/b] Criatura de ojos grandes y amarillos, los cuáles ocupan la gran mayoría de su pequeña cabeza. Posee orejas grandes que terminan en punta, cayéndole ligeramente por sobre sus ojos de vez en cuando. Su nariz es puntiaguda, pero de un tamaño normal la cual se asoma entre ambos desproporcionados ojos con respecto al resto del cuerpo. Es de un pequeño tamaño, delgadas extremidades y largas manos. La mayoría de tiempo viste unas largas prendas en perfecto estado, prácticamente nuevas de diferentes diseños y telas. Siempre había sido considerado como alguien de la familia, por lo que, siempre había vestido ropa decente. 
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Licencias, Tasas, Registros:[/u][/b][/color]
    
    [b][color="#F5DEB3"]Licencia de Aparición:[/color][/b] Si
    [color="#F5DEB3"][b]Licencia de Vuelo de Escoba:[/b][/color] Obtenida
    [color="#F5DEB3"][b]Registro de XXX:[/b][/color]--
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Otros Datos:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Otros datos:[/b][/color]
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color]  Al su madre ser Ackerley, toma el apellido de su padre Poulain. No le gusta que se equivoquen en cuanto a su nombre. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Su tío era Lucien Poulain. Hermano de Ethan Poulain.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Su elfo Ditry, es el único ser vivo que ha vivido con ella durante toda su vida, por ello lo quiere como su mejor amigo.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Habla francés fluidamente gracias a los años que vivió allí, mas ahora procura hablar en inglés sin problema alguno, sus padres, gracias a sus viajes a Inglaterra, le enseñaron mientras pudieron hacerlo. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Le gusta tocar el piano. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Sus colores favoritos son el azul, verde y naranjo.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Escucha cualquier tipo de música, desde clásica hasta rock. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Le encanta la naturaleza a excepción de algunos insectos.  Sin embargo, a veces se arma de valor ante ellos.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] El mejor regalo que le pueden hacer sería algo que le demostrara el cariño que sienten por ella.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] No le importa mucho lo material.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Ama el helado por sobre toda las comidas y cosas materiales. 
    
    [color="#F5DEB3"][b]Cronología de Cargos:[/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Premios y Reconocimientos:[/b][/color]
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Links de Interés Referentes al Personaje:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Link a Bóveda Personal:[/b][/color] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90605"]B:90605[/url]
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda Trastera:[/color][/b] --
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda de Negocio:[/color][/b] --
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda Familia 1:[/color][/b] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90196"]Bóveda Familia Báthory[/url]
    [color="#F5DEB3"][b]Link a Bóveda Familia 2:[/b][/color] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=96692"]Bóveda Familia Poulain[/url]

     

     

    http://i.imgur.com/gbhu8.png

    ~ Datos Personales:

     

    Nombre del Personaje: Marie J. Báthory Poulain

    Sexo: Femenino

    Edad: Adolescente de 18 años

    Nacionalidad: Francesa

    Familia(s):

    Familia Báthory♧Matriarca [adoptiva]

    Familia Poulain [sanguínea]

    Padre(s) Sanguíneo: Ethan Poulain-- Cyrine Ackerley--

    Padre(s) Adoptivos: Alissia Macnair Báthory

    Trabajo: Empleada en la Oficina para la Recepción de Denuncias sobre la Utilización de Artes Oscuras

     

    ~ Poderes Mágicos:

     

    Rango Social: Unicornio de Bronce

    Bando: Neutral

    Rango dentro del Bando: --

    Nivel de Poder Mágico: 1

    Puntos de poder en objetos: 20

     

    Hechizos adicionales:

     

    Puntos de poder en criaturas:

     

    Criaturas controlables en asaltos y duelos:

     

    Habilidades Mágicas: --

    Conocimientos Especiales:

    • Defensa Contra las Artes Oscuras

    • Encantamientos

     

    ~ Perfil del Personaje:

     

    Raza: Humano

    Aspecto Físico: Marie al poseer una piel tersa y extremadamente blanca ha sido comparada con vampiros por mucho tiempo tomando en cuenta su descendencia. Pero a causa de sus largas extremidades, la estatura de 1.69 y poca gracia al moverse, la posibilidad de ser una criatura tan ágil como esa queda completamente descartada. Sus brazos y piernas son completamente blancas, pero no por eso feas, están bien formadas y aunque a ella no le importe extremadamente su aspecto físico, su cuerpo está en todos los sentidos totalmente saludable y bien proporcionalmente. La chica es una adolescente completamente común y poco llamativa, su cabello castaño claro es ligeramente ondulado y lo bastante largo como para casi alcanzar sus codos con las puntas del pelo. Su rostro es como el de una niña que causa ternura y simpatía teniendo unos penetrantes ojos color miel, enmarcados en largas pestañas bajo cejas delineadas que apenas se pueden ver bajo el flequillo que cae livianamente sobre su frente hasta sus parpados. Su nariz recta termina redonda dando un lindo perfil entre unos poco notables pómulos que la mayoría del tiempo lucen un color rosado pálido. El rostro de la castaña es algo alargado y termina en un mentón pequeño ubicado bajo su boca de labios delgados y rosados.

     

    Cualidades Psicológicas: Marie debe reconocer que es una persona sensible a todo y a todos, mas no es pura ternura en todo momento, puede tener una reacción fuerte en situaciones que a ella no le parezcan, no dudará en dar a conocer su opinión respecto a cualquier tema, a excepción que sea mejor guardar silencio y así no empeorar las cosas. Tiene el hábito de siempre querer ayudar a los demás sea cual sea el problema o favor, no le gusta defraudar a nadie respecto a esto o cualquier otra cosa, por lo que procura ser responsable. Le desagrada ver a alguien mal o triste, así que si ella puede ayudarle a sonreír lo más seguro es que lo hará o por lo menos lo intentará. Suele ser juguetona tal y como una niña, pero muy madura al pensar y actuar a pesar de su edad. Ama leer y saber sobre todo, por lo tanto un hobbie que nunca va a dejar va a ser el de leer. Por esto, es muy inteligente y capaz de todo, pero siempre tomando en cuenta sus principios y valores que sus padres le inculcaron.

     

    Historia: Marie J. Báthory Poulain nació un 13 de Junio de 1994 en el pueblo francés Autoire, donde sus padres Ethan y Cyrine se habían instalado hace 1 año luego de contraer matrimonio. Siendo ambos franceses, la mudanza en el mismo país no fue complicada, sin embargo, se aseguraban de no dejar rastro de ellos, puesto que eran seguidos por servidores del mago oscuro. Creyendo en su total protección, armaron su hogar en aquel colorido y pequeño pueblo de Francia dando el primer paso teniendo una bebé.

     

    Luego, varios años pasaron sin tener preocupación alguna. El hombre de la casa ya tenía un buen trabajo en el mundo mágico francés, y a pesar de que no era un dineral lo que ganaba, alcanzaba perfectamente para su diario vivir. Además, Ditry, el elfo de la familia, era de gran ayuda en todo. La criatura no se había despegado de ellos desde que la misma niña lo vio deambulando por los bosques cercanos a la casa, en una de las tantas caminatas que daba la familia por los alrededores.

     

    La alegría y la sencillez de los Poulain era casi imposible de creer, todo estaba saliendo perfectamente y nada se había sabido de mortífagos durante un buen y largo tiempo. Algo que tenía a la pareja muy segura de haber dejado atrás lo malo del pasado. Agradecidos de lo que tenían hasta el momento, pasaron más y más años, en los que la niña creció convirtiéndose en una dulce jovencita. Ya a estas alturas, se podía apreciar con más claridad los distintos rasgos heredados de sus padres que resaltaban en su actuar. El rostro de apariencia infantil y de muñequita de porcelana con pecas, era lo que más parecido a su madre que obtenido, aparte de la delicadeza con la que actuaba y lo frágil que se veía en todo sentido. Por su parte, Ethan le había dado ese color castaño claro a su cabello y lo miel a sus ojos. Sin embargo, la personalidad amable, sencilla y respetuosa, la había heredado de ambos, por lo que no podían estar más orgullosos.

     

    En el cumpleaños número dieciséis de Marie, tuvieron una pequeña celebración familiar en casa como lo hacían todos los años. Ella, pocos amigos tenía a causa de tener pocas instancias para socializar con los demás, aun que la mayoría de los habitantes del pueblo ya eran mayores de edad. Por esta misma razón, ambos padres deseaban que fuera a la academia, en donde, no tal solo haría más amigos, sino que también, la formarían para el futuro en donde ellos ya no podrían protegerla como lo hacían ahora. Hace pocos días ellos habían recibido una carta de familiares en Inglaterra, quienes habían comenzado a sufrir ataques de mortífagos, avisando de aquella situación para que tomaran las medidas correspondientes. Por lo que, mandar a su única hija a una de las academias más seguras del mundo, era algo que debían hacer rápido. Mas esta quedaba en Inglaterra y Marie se rehusaba a dejarlos solos, incluso sin saber nada de lo que estaba pasando. Los padres, sintiendo una gran preocupación por el mañana, intentaban buscar otra forma de convencerla o tendrían que actuar con otro plan. Los estaban buscando y no tardarían mucho en dar con ellos.

     

    Pasaron semanas y por suerte, nada había ocurrido aún. Marie, aún ajena a todos los problemas que cargaban sus padres, había decidido por fin hacerles caso e ir a la academia a la que tanto le habían rogado que fuera. Sentía que si era algo que ellos querían tanto, sería una forma de retribuirles todo el amor que le habían entregado. Decidida, mandó una lechuza con el formulario de inscripción antes de decírselo a su familia. Sabía que se alegrarían mucho por ello y más confiados estarían si les dijera que ya estaba inscrita. Al recibir una respuesta de aceptación, no esperó más y corrió a contarles con emoción.

     

    - Madre, ¿Dónde está mi padre? –inquirió a su madre llegando junto a ella. Cyrine se encontraba lavando los platos de la cena junto a Ditry quién los secaba y guardaba al instante. Ya era tarde y a causa de la poca iluminación, costaba un tanto ver de buena manera.

     

    Acercándose al interruptor, encendió las luces de la cocina esperando la respuesta de su madre. Quería darles la noticia a ambos en el mismo momento y ver sus caras de emoción al enterarse. Entre tantas ansias, no podía aguantar hasta aquel momento.

     

    - Cariño, creo que salió al jardín a solucionar el “problema” con la lechucería-respondió no tan segura –Pero está en el jardín, ¿por qué preguntas? –cuestionó pasándole el último plato a Ditry para que hiciera su parte. Cerró el grifo y se giró a verme de frente.

     

    - Les tengo una noticia que les gustará mucho, pero los necesito a ambos presentes –respondió la castaña sonriendo.

     

    La lechucería hace mucho que no se limpiaba y eso siempre era tomado en la familia Poulain como un “problema” ya que a nadie le gustaba ir a asearlo, ni a Ditry. La castaña miró por la ventana hacia donde se suponía que estaría su padre, pero no vio luz ni ningún indicio de que alguien anduviera por esos lados. Tan raro le resultó aquello, que su corazón comenzó a palpitar como nunca antes. Era más que un sentimiento de confusión, sintió miedo ante tanta oscuridad asomándose por su ventana. Un fuerte viento comenzó a soplar queriendo echar abajo la casa mientras que ella no apartaba la vista intentando visualizar algo que le dijera el paradero de su padre.

     

    - Kotee, ¿te ocurre algo preciosa? –le preguntó Cyrine llamándola por su apodo y poniéndole con preocupación una mano sobre el hombro. De un segundo al otro, el rostro de felicidad de su hija, había dado lugar a uno de temor.

     

    Sin palabra alguna, la primogénita corrió hacia la oscuridad del salón principal dispuesta a ir en busca de Ethan, su padre. Lo necesitaba para hacerlo feliz y sentía que estaría todo mejor teniéndolo en casa junto a ellas. Mas al cruzar la mitad del salón, las puertas se abrieron dando paso a una fuerte ventisca que azotó las puertas, dejando entrar una alta figura que se dirigió despavorida hacia Marie quién abrazó a su padre sintiendo como temblaba.

     

    -¡Ethan!–gritó desgarradoramente desde la cocina Cyrine.

     

    Tomándose de la mano, ambos se dirigieron para atender a su madre. Al llegar, vieron con horror como el jardín delantero se incendiaba entre sombras y risas ahogadas a causa del ruido. La chica miraba con temor lo que estaba ocurriendo e interrumpiendo el silencio, miró el rostro tenso de su padre y el humedecido por las lágrimas de su madre.

     

    - ¿Qué… qué está ocurriendo? ¡Mamá, hay que hacer algo! –la chica intentó correr y así detener la propagación del fuego. Mas su movimiento hizo recapacitar a sus padres quienes la tomaron y sacaron por la puerta trasera de la casa.

     

    Ditry había desaparecido y ambos se abrazaban a su hija deteniendo sus impulsos, a la vez, llevándola hacia uno de los bosques que rodeaban la casa.

     

    - Quédense aquí –dijo Ethan volteándose a su familia- Iré a ver si logro rescatar lo necesario para irnos de aquí.

    - Pero Ethan... –paró Cyrine a su marido con lágrimas en su rostro.

    - Cariño, tú sabías que esto pasaría. No hay que perder más tiempo. Escóndanse, vendré luego.

     

    Sin decir más, corrió hacía la casa hasta que se perdió para su hija. Marie estaba confundida respecto a lo que estaba ocurriendo y el hecho de que su padre las dejara solas, provocó que la desesperación llegara a ella bruscamente haciéndola derramar continuas lágrimas llamando la atención de su madre.

     

    -Hija, no llores todo estará bien… ya verás –la consolaba abrazándola. A pesar de lo que salía de su boca, no creía en ese posible futuro. Esto tenía que terminar ahora y sólo había una forma.

     

    Ante esta idea, el rostro de la mujer se desfiguró dolorosamente sobre el hombro de su hija sin evitar que su pequeña escuchara su ahogado llanto.

     

    -Sé que algo anda mal… dímelo, por favor… -le suplicó la ojimiel mirando a los azules ojos de su madre.

    Sin embargo, antes de que ella pudiera contestarle, unas agresivas risas se hicieron escuchar. Al mirar, unas rápidas sombras comenzaron a rodear la casa por las alturas mandando verdes rayos que provocaron diversas explosiones en la casa ante los llorosos ojos de su familia. Al instante, Ditry apareció con sus grandes ojos atestados de lágrimas.

     

    - El señor… mi amo… -divagaba con voz quebrada antes de largarse a llorar.

    - Mamá… ¡Mamá! –gritó llorando- Mi papá, mi papá… -murmuraba perdida cayendo al suelo.

    - Ditry… ya sabes que hacer –habló con tono serio la mujer de cabellera negra. Tenían muy claro que esto pasaría y habían elaborado un plan en el que la última opción era salir con vida.

    - Yo iba a ir a la academia… iba a ir y los habría hecho feliz –decía como pensando en voz alta la joven sobre las hojas secas en el suelo.

     

    Lo que estaba ocurriendo tenía a Marie en un estado emocional difícil, su padre acababa de ser atacado y según la reacción de Ditry, asesinado. Como pudo, miró a su madre quien se agachó a su altura.

     

    - Ya nos haces felices querida y ahora aún más –explicó sonriendo, pero de un momento a otro, su tristeza volvió- Cuídate mucho, linda-le pidió acariciándola y besándole la frente antes de pararse, sacar su varita y salir corriendo en la misma dirección que su padre había tomado hace unos minutos.

    -¡No! No, no… -exclamó corriendo tras ella entre tropiezos -¡Mamá!

    –gritó desgarradoramente cuando ya no la vio más.

     

    Pronto, un grito agudo de profundo dolor, se escuchó dejando a Marie estupefacta con lágrimas en los ojos. Risas malvadas provocaban más y más explosiones en lo que era su hogar. Sacó su varita y sin esperar nada, corrió hacia la casa en llamas, pero siendo alcanzada por su elfo, ambos se trasladaron hasta la total oscuridad de un prado frente a un gran castillo. Confundida, la chica miró a todos lados en busca del pueblo en el que vivió durante toda su vida, pero nada le resultaba conocido.

     

    - ¡Ditry! ¿Dónde me has traído? ¡Tengo que volver! –le pedía caminando de un lado a otro con claro enfado.

    - Ditry lo siente, pero no puede hacerlo. Sus padres me dijeron que…

    - ¡¿Qué?! ¡Mis padres están en peligro! ¡Entiéndeme, necesito volver! Quiero volver con ellos… -terminó quebrándose para volver a caer llorando desconsoladamente.

    - Vamos mi señorita, tengo órdenes de presentarle a alguien…

     

    Tomó del brazo de la acabada joven y la llevó hasta el castillo. Antes de que pudiera tocar, la puerta se abrió dejando ver a una chica joven de tez blanca, ojos marrones y cabello negro liso. Su expresión parecía fría pero de un momento a otro sonrió como queriendo consolar.

     

    - Vaya, no creí que ocurriera tan pronto –dijo con dejo de tristeza.

    - ¿A qué se refiere? Ditry, no entiendo nada. Quiero ir con mis padres… por favor –le suplicó cansada.

    - Kotee, entra… -le dijo la chica frente a ella.

    -¿Cómo sabes que me dicen así? ¿Te conozco? –inquirió la desconsolada joven con lágrimas en las mejillas, mientras entraba a la gran y oscura estancia acompañada de su elfo.

    - Debí suponer que no me recordarías. Soy tu prima. Fui adoptada por Lucien y Amelie Poulain, creo que nos habíamos visto en algunas reuniones familiares hace mucho.

    - Puede ser… -respondió incómoda Marie. La situación la tenía desconectada de todo. No podía dejar de pensar en sus padres.

    - Mejor llévala a descansar Ditry, tengo su cuarto listo desde hace mucho.

     

    Al otro día llegó una lechuza avisando la muerte de sus padres a causa de un ataque mortífago. Para Marie saber esta noticia, la mantuvo por mucho completamente deprimida. Lo único que anhelaba en esos momentos era los recuerdos que en esa casa, ahora destruida, había dejado atrás. Pasaron días y el asunto de su custodia se vino encima. Sin embargo no fue algo difícil, Alissia le había tomado un cariño especial a aquella chica, por lo que no dudó en tomarla como su hija adoptiva y dejarla viviendo con ella en su castillo ubicado en Ottery, Inglaterra.

     

    Desde ese momento, Marie pasó a tener el apellido Báthory en su nombre, pero sin sacar de su lugar el de sus difuntos padres, quienes fueron sepultados en el cementerio del pueblo francés en donde vivían. Y para recordarlos, instalaron en el jardín frontal de la casa, que se remodeló luego de un tiempo, una gran roca en la cual se tallaron sus nombres. Ahora, todos los años Marie y su elfo, van a dejarles flores al cementerio y pasan por la casa que, por consecuencia, le pertenece a la joven.

     

    Durante el año siguiente, la nueva Báthory, entró a la academia perteneciendo a la casa de fuego, los Dragones de Lancashire. Allí, descubrió sus claras aspiraciones a la Orden del Fénix, por lo que se inscribió en ella tomando el puesto de aspirante hasta que terminara la academia. Más adelante, se puso a trabajar como aprendiz en el departamento de aurores, recibiendo las denuncias sobre utilización de artes oscuras, a la espera de algún día poder trabajar allí oficialmente. Ya al terminar la academia, se postuló para ser otra empleada más de aquella oficina que tanto le había agradado realizandose su deseo con éxito. Ahora trabaja como otra empleada, recibiendo denuncias y ayudando a los demás en cuanto puede, mas otras sorpresas vendrían por el lado de su familia. Varios problemas con sus parientes provocaron la separación de estos, por lo que se fué a vivir definitivamente con su prima y madre adoptiva Alissia, sin embargo, pronto esta le haría una propuesta a la que no podría negarse, por lo que se volvió una de las matriarcas de la familia Báthory.

     

    Un tiempo después de que asumiera el matriarcado de la Báthory, Marie se enteró de que su familia por parte de los Poulain, habían vuelto a reunirse. Por lo que feliz, volvió a aquella mansión que tanto extrañaba, aunque obviamente, tenía más obligaciones en el castillo junto a su madre.

     

    ~ Pertenencias:

     

    Objeto Mágico Legendario:

    Objetos Mágicos:

     

    Objeto 1: Varita hecha a partir de una pluma de fénix, madera de acebo. Arriba de 30 cm de longitud muy poderosa, excelente para hechizos complicados, de defensa personal y de ataque.

    Clasificación: AA

    Puntos de poder: 20

     

    Mascotas y Criaturas:

    Criatura 1: --

    Clasificación: --

    Puntos de poder: --

     

    Criaturas en la Reserva:

    Criatura 1: --

    Clasificación: --

    Puntos de poder:

     

    Elfos:

    Ditry: Criatura de ojos grandes y amarillos, los cuáles ocupan la gran mayoría de su pequeña cabeza. Posee orejas grandes que terminan en punta, cayéndole ligeramente por sobre sus ojos de vez en cuando. Su nariz es puntiaguda, pero de un tamaño normal la cual se asoma entre ambos desproporcionados ojos con respecto al resto del cuerpo. Es de un pequeño tamaño, delgadas extremidades y largas manos. La mayoría de tiempo viste unas largas prendas en perfecto estado, prácticamente nuevas de diferentes diseños y telas. Siempre había sido considerado como alguien de la familia, por lo que, siempre había vestido ropa decente.

     

    ~ Licencias, Tasas, Registros:

     

    Licencia de Aparición: Si

    Licencia de Vuelo de Escoba: Obtenida

    Registro de XXX:--

     

    ~ Otros Datos:

     

    Otros datos:

    Al su madre ser Ackerley, toma el apellido de su padre Poulain. No le gusta que se equivoquen en cuanto a su nombre.

    Su tío era Lucien Poulain. Hermano de Ethan Poulain.

    Su elfo Ditry, es el único ser vivo que ha vivido con ella durante toda su vida, por ello lo quiere como su mejor amigo.

    Habla francés fluidamente gracias a los años que vivió allí, mas ahora procura hablar en inglés sin problema alguno, sus padres, gracias a sus viajes a Inglaterra, le enseñaron mientras pudieron hacerlo.

    Le gusta tocar el piano.

    Sus colores favoritos son el azul, verde y naranjo.

    Escucha cualquier tipo de música, desde clásica hasta rock.

    Le encanta la naturaleza a excepción de algunos insectos. Sin embargo, a veces se arma de valor ante ellos.

    El mejor regalo que le pueden hacer sería algo que le demostrara el cariño que sienten por ella.

    No le importa mucho lo material.

    Ama el helado por sobre toda las comidas y cosas materiales.

     

    Cronología de Cargos:

     

    Premios y Reconocimientos:

     

    ~ Links de Interés Referentes al Personaje:

     

    Link a Bóveda Personal: B:90605

    Link a Bóveda Trastera: --

    Link a Bóveda de Negocio: --

    Link a Bóveda Familia 1: Bóveda Familia Báthory

    Link a Bóveda Familia 2: Bóveda Familia Poulain

     

     

     

    Hice cambios en la historia, nombre y actualice el link de la boveda poulain

    Gracias!!

  17. La castaña escuchó atentamente la respuesta que su jefa le daba respecto al dudoso futuro del departamento. Obviamente no estaba satisfecha con lo que estaba escuchando y no creía que los demás empleados también lo estuvieran, contando a la Granger en frente de ella. El saber que debía venir una persona totalmente desconocida a ocupar el mayor cargo y por ende, el más importante, no le parecía lo mejor. Si no fuera porque Elvis se había puesto como meta encontrar a Emma, no habría duda de que Kote y los demás mantendrían al Gryffindor como su director mientras pudieran.

     

    Suspiró y miró la taza de té buscando inconscientemente en su cabeza alguna solución, pero no había nada mejor que buscar a alguien en el departamento para tomar el puesto y esto Sophie ya lo había descartado por completo de las posibilidades de la Báthory.

     

    -Está bien, nos vemos luego –le dijo en forma de despedida momentánea a la rubia mientras se ponía de pie y le dedicaba una sonrisa algo forzada por el momento. Se giró y al encontrarse con Agatha en la puerta inclinó la cabeza en forma de saludo para luego salir de la oficina que aún gustaba llamar como la de Elvis. Caminó por el pasillo que ya conocía lo bastante bien y se detuvo en la puerta con el nombre de su jefa. No sabía si habían arreglado el lio allí y si no lo habían hecho, sería lo primero que haría para que todo volviera a la normalidad. En especial ahora que debía hacerse cargo de la oficina temporalmente, no podía atender todo en tanto desorden.

     

    Al entras se dio cuenta que la mayoría estaba destruido, pero no reparable. Sacó su varita y con unos cuantos movimientos, todo volvió a la normalidad. Se acercó a los archivadores y los ojeó para tener una idea de que trataban. No se sentía muy bien estando allí, era como una ajena a un lugar tan privado como es una oficina, pero debía hacerlo, mas procuraría no entrometerse más allá del trabajo. Con ligero sentimiento de aprovechamiento que no le agradó a la castaña, se sentó incómoda en la silla de su jefa mientras revisaba unas denuncias sobre el renovado escritorio.

  18. Los minutos pasaban y la castaña solo se limitaba a estar sentada con la mirada perdida. Tenía muy claro que algo debía hacer, pero sus pensamientos pasaban sobre sus ojos clavados en un punto inerte. Entre sus manos jugaba con su varita como acariciándola a la vez que sus párpados se entrecerraban frunciendo el ceño a causa de la masa de cosas que parecían no caber en su cabeza. Muchos hechos habían ocurrido en tan poco tiempo que a la Báthory le costaba procesarlos todos de una vez, sintiendo con pesadez la retirada del Gryffindor. Entre esto último, tenía ligeras visiones de cómo podría ser el o la nueva directora, aunque como fuera no era muy importante, lo único que le interesaba a la ojimiel era que supiera ocupar un puesto tan valioso y mantener la altura de su antecesor.

     

    Parpadeó repetidamente como despertando de un trance al sentirse completamente inútil. De pronto por su cabeza imaginó que todos sus compañeros estarían haciendo algo más productivo que estar sentados pensando. Así que sacudiendo su cabeza ligeramente para botar las preocupaciones, guardó su varita en un bolsillo de su vestido azul que había arreglado justo antes de la pequeña reunión de hace un momento. Pronto, la voz de su jefa se alzó entre los sonidos cotidianos del departamento llamando su atención. Kote asintió ante la orden y dirigió sus pasos siguiendo a la rubia.

     

    Caminaron hasta toparse con la oficina del extrañado Gryffindor algo que descolocó un poco a la chica, aunque no hizo más que suspirar intentando acostumbrarse a lo que ya no tenía vuelta. Ingresó y tomó asiento frente a la Granger sonriendo ante la aparición del té, Sophie tenía muchas similitudes a Elvis, incluso le pareció que ella podría ser una buena opción para el puesto.

     

    -Claro, Sophie no te preocupes, que estoy dispuesta a ayudarte en lo que necesites así que de nuestra oficina por mientras yo me encargo–le respondió sonriente - ¿Y no tiene alguna idea de quién podría ser el próximo director? Es decir, lo mejor sería que quien ocupara el puesto fuera alguien que conozca ya el trabajo en el departamento ¿no?

     

    Dijo soltando una de sus tantas preocupaciones. Tenía un ligero temor de que llegara cualquier persona a tomar el puesto y de paso dejaba todo hecho un lío. Sin embargo, la castaña no desechaba la optimista idea de que fuera alguien bueno y que llevara nuevas ideas al departamento, porque sí que las necesitaban.

  19. La reunión parecía estar yendo bien para la castaña allí mirando a sus compañeros que contaban sus historias sobre el ataque. En realidad, prefirió quedarse callada al ver que la mayoría de lo que ella había vivido estaba siendo narrado por los demás y es obvio, no había estado ni un minuto sola por lo que todo lo que le había pasado a ella, le había pasado a los demás incluso en peor forma. Llegó un momento en que simplemente observaba fijamente sin escuchar. Se sentía perdida e incluso un pequeño mareo comenzó a dejarle sin ganas, sin fuerzas. En su mente solo podía reírse de ella misma. No era una chica que se pusiera nerviosa con cualquier cosa, pero de vez en cuando no podía controlar sus propios nervios y esto le provocaba mareos. Pensar en el desastre de hace unas horas no la ponía mejor.

     

    Suspiró e intentó recomponerse, pero no se sentía bien. Tenía muy claro que debía prestar atención a todo lo que se hablaba allí, mas no podía contener las ganas de apartarse y dejar de escuchar sobre lo ocurrido. Recordarlo solo la ponía peor, sin embargo era su deber estar al tanto de todo. Como se había dicho al principio, esto era incumbencia de todos en el departamento.

     

    Pronto empezaron a hablar sobre una chica perdida, la conocía, pero nunca había cruzado palabra con ella, aunque claro, no dejaba de ser preocupante el hecho. Siguió escuchando atenta a cualquier cosa, las náuseas seguían presentes pero esto era más importante. De pronto, el elfo de Elvis se apareció junto al grupo entregándole algo angustiado y sorprendido una pequeña nota. El director no demoró en leerla para luego mostrárnosla. Emma había sido capturada. La furia se le notaba en los ojos y no tardó mucho en arrugar el pergamino para dirigirse a paso rápido hacia su despacho. Hubo un silencio largo, nadie sabía que decir respecto a lo recién informado, mas los empleados reunidos allí no tardaron en recibir una nueva noticia. Una tristeza les invadió al leer que Elvis dejaría el cargo de director para ir en busca de Emma. Kote por su parte, le había tomado cariño al Gryffindor. Había sido su profesor en la academia y luego su jefe superior, sentía que el departamento no sería lo mismo.

     

    Miró a su alrededor fijándose en las expresiones de los demás presentes, en especial la de Sophie que actuó con prisa buscando a Elvis en su oficina. La Báthory no pudo más que agachar la mirada apenada, al parecer los mortífagos consiguieron más de lo que tenían pensado. Sophie no demoró en regresar dando las siguientes instrucciones que Kote comenzó a acatar dando media vuelta en silencio para caminar a su escritorio.

     

    Ya allí, se sentó cayendo pesadamente sobre la silla, completamente desanimada. Esperaba que nada peor ocurriera. Puso los brazos sobre la madera de su escritorio y apoyó su cabeza sobre ellos ocultando su rostro. Se sentía mal por todo, mas tenía una disposición para ayudar en lo que se necesitara. Las cosas sin un director se pondrían feas y más cuando llegara el nuevo. Un completo desastre -Solo espero que las cosas no empeoren... - suspiró y se enderezó a la espera de que le necesitaran, miró hacia la oficina de Elvis, pero Sophie no se encontraba allí. Luego le preguntaría si necesitaba de ella.

  20. La Báthory expresaba sin temor lo feliz que estaba aunque reprimió con fuerza las ganas de querer dar un abrazo a cada uno de los presentes. A veces el ser tan afectuosa le jugaba en contra en momentos como este. Mas se concentró sin mayores problemas en lo que los reunía allí. Las señales de todo lo que había ocurrido estaban a la vista y eran difíciles de ignorar, especialmente viendo las heridas que sus compañeros poseían.

     

    Elvis fue el primero en responder a la castaña explicándole que aún no había nada importante que debiera saber, nada a parte de una pregunta que él había formulado a los demás hace no mucho. Aunque al parecer nadie había sido testigo de la explosión por la que el cuestionaba, siendo que nadie respondía ni comentaba nada respecto a ello y Kotee tampoco tenía que aportar. Ella pasó de la oficina del director a la oficina de su jefa luego de percatarse de lo ocurrido y allí se mantuvo la mayoría del tiempo cuidando a los heridos.

     

    Luego Athena, una muy amiga de Kotee que trabajaba en el departamento, se apareció para unirse a ellos entregando a Elvis un pergamino idéntico a los que la Báthory había quitado a algunos sospechosos que ella estuvo cuidando. Vio con atención lo que el director departamental hacía con el pergamino intentando descifrar de qué trataba. Si funcionaba con uno, podrían hacerlo con los otros tres que ella tenía en su escritorio. Observó las maniobras del mago y cuando él escribió en el pergamino siendo las palabras absorbidas por este, se dio cuenta de lo que trataba.

     

    -Esperen un momento… -les dijo para luego correr a su escritorio en busca de los otros tres pergaminos que ella había sacado de los bolsillos de los capturados. Volvió con los trozos amarillentos y vio en ellos los garabatos hechos por Elvis – Tienes razón, mira –ratificó al Gryffindor enseñándoselos –Estos los encontré en los sospechosos que habíamos atado en la oficina.

     

    Parecía todo tan claro, pero a la vez tan complicado para la ojimiel. Podían saber cómo se comunicaban, mas al momento de pensar en quienes eran los que les utilizaban todo se nublaba. Tal vez solo le ocurría a Kotee que tenía poca información de estos temas y a sus jefes simplemente era otra pista que los acercaba cada vez más hacia los responsables. Lo único que esperaba es que esto fuera de ayuda y no en vano.

     

    Sophie, su jefa, no tardó en lanzar comentarios negativos pero reales al sistema de seguridad en el departamento. Kotee no se había percatado de que ella había ingresado a su oficina, por lo que solo se limitó a mirarla. Tenía mucha razón respecto a la seguridad y esperaba que por lo menos algo bueno sacaran de todo lo que ha pasado.

  21. Mientras la Báthory ordenaba los papeles intentando simular el orden que estos tenían antes de la “visita” de aquellos intrusos, no podía dejar de pensar en las razones que tuvieron para hacer algo así. Raptar, herir e incluso intentar asesinar a empleados del departamento siendo los más inocentes en todo esto. Deseaba que su jefa y el director llegaran pronto a salvo, la castaña tenía claro que habían muchas cosas que hablar, ya que ningún lugar del ministerio debería ser tan fácil de ingresar y no dudaba que sus superiores pondrían serias restricciones en esta área.

     

    Movía de aquí para allá documentos y pesados archivos guiándose por sus notas en aquel gran libro sobre cada denuncia hecha. Solo así podía ordenarlas por fecha y clasificación de importancia. Siguió haciéndolo por varios minutos más cuando pasos desde la entrada se hicieron escuchar. Se giró para observar a quienes ingresaban y como si hubiera tenido un escritorio encima, sintió un gran peso que desaparecía aliviándola por completo. Y no es porque no le importara lo sucedido, si no que su preocupación por los demás era mayor. Sonrió para sí y vio como Sophie, Annick y Elvis se dirigían hacia el pequeño grupo que se había formado unos pasos más allá. Pronto iría a unírseles, mas quería terminar lo que estaba haciendo. Kotee no acostumbraba a dejar las cosas a medias aunque quisiera.

     

    Pronto terminó con los últimos papeles, no era mucho lo que le faltaba así que no demoró más de cinco minutos. Dejó el libro sobre su escritorio y cerró las cajoneras metálicas dejando todo ordenado. Mas al salir de su área, se fijó que no bastaba con ordenar aquellos papeles. En general, el departamento estaba como si un huracán hubiera pasado por allí a pesar de los múltiples arreglos que hizo el chico de reversiones, aún quedaba mucho que poner en su lugar. Caminó entre papeles y cosas hasta llegar donde todos se encontraban. Quería ponerse al tanto de todo lo ocurrido y lo que pasará ahora.

     

    -Oh, cuanto me alegra verlos bien-expresó la Báthory con alegría y alivio mientras se posicionaba junto a los recién llegados- Ya me estaban preocupando, pero qué bueno que regresaron.

     

    La chica ya llevaba un buen tiempo trabajando en el departamento y sentía un real apego por quienes trabajaban junto a ella, así que su preocupación era algo normal de sentir ante lo que ha pasado.

     

    -¿Hay algo con lo que deba ponerme al tanto? –preguntó sabiendo que antes de su llegada la discusión sobre la infiltración ya había comenzado y no deseaba quedar fuera de ello ya que se trataba de algo que afectó a todos allí, no solo a algunos.

  22. Lo sucedido había sido una verdadera sorpresa para Kotee, no sabía que había llevado a los mortifagos a realizar tales destrozo y herir a los trabajadores, mas ya no tenía intenciones de seguir pensando en los últimos acontecimientos, la castaña solo deseaba que todo terminara para volver a su trabajo.

     

    Sin reflexionar mucho, la joven salió de la oficina donde había permanecido la mayoría del tiempo durante el ataque, desconocía por completo lo que estuviera ocurriendo fuera de allí y comenzaba a escuchar mucho movimiento por el departamento. Caminó con varita en mano pendiente a cualquier cosa, sin embargo, pronto se percató de que las cosas en el departamento se habían calmado. Observó que ya un empleado del departamento de Reversión hacía lo suyo en el lugar y unos metros más allá algunos compañeros de trabajo ordenaban lo que podían. Notó la ausencia de mucha gente y deseó que todos estuvieran bien. Lo que había pasado dejó a muchos heridos y la mayoría del departamento destrozado. Lo único que ahora se le venía a la cabeza a Kotee era la necesidad de ir a ver su escritorio, los papeles que ella tenía archivados eran muy importantes como para despreocuparse de ello.

     

    Así que la castaña no espero instrucciones ni nada parecido, solo se encaminó a su área de trabajo para percatarse de que todo estuviera en orden, aunque de esto último dudaba mucho. Al llegar lo primero que vio fue su escritorio volteado entre las cajoneras metálicas y papeles esparcidos por el lugar. Suspiró pesadamente al ver que el esfuerzo de ordenar tan bien aquellas denuncias había sido en vano, un ataque de mortifagos y el trabajo se va por la borda. Mas sabía que su varita le haría el trabajo más fácil. La levantó apuntando las gavetas de metal que antes contenían gran parte de los archivos sobre denuncias y con un ligero movimiento estas se levantaron para quedar tal cual como antes. Así lo hizo con los otros archivadores de la oficina y luego con los papeles que metió dentro de los cajones, después los ordenaría de nuevo, por ahora solo necesitaba despejar. Luego hizo igual con el gran mueble de madera que había sido dañado, parecía que lo habían arrastrado por todo el departamento. Lo levantó y posicionó como estaba antes para después dejarlo como nuevo.

     

    -Esto es un desastre… -murmuró para sí misma tomando la silla para limpiarle el polvo a la vez que dejaba su varita en uno de los bolsillos de su vestido.

     

    Tomó asiento y revisó lo que antes había guardado. Eran los pergaminos que había logrado quitar a algunos mortifagos. Los miró con cautela hasta que decidió guardarlos en un cajón del escritorio, luego se lo entregaría a quien correspondiera.

     

    Se puso de pie, buscó su abrigo en el piso, lo sacudió y colgó nuevamente percatándose de que su vestido no estaba en las mejores condiciones. El azul de este ahora era bastante más oscuro y poseía pequeños desgarros en la tela superficial. No podía estar así, así que sacó nuevamente su varita para remediarlo. Ya lista, solo quedaba revisar que todo estuviera en orden. Por lo que se acercó a los archivadores y comenzó con su tarea, debía revisar que todo se encontrara allí, por suerte había hecho varios libros con los registros de cada denuncia y fecha para poder comparar. Pronto solo quedaría saber como y donde se encontraban los demás, estaba muy preocupada por quienes habían salido del departamento.

     

    ~

    Off: lo siento si me salté algo importante, pero no quería quedarme tan atrás :3

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