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Marie J. Báthory Poulain

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Mensajes publicados por Marie J. Báthory Poulain

  1. Tras el escritorio iban lanzando a los sospechosos atados y desarmados. No tardé en ponerme de pie cuando Seba puso junto a mí a la mujer (Keaton) que hace mucho nos acompañaba en la oficina. La miré y tenía claro que su pésima actuación bastaba para considerarla una de nuestras primeras sospechosas. Y no era menos, hace horas el departamento rogaba por tener a más personas en su interior, tanto a empleados como clientes, y justo cuando los ataques comienzan grupos y más grupos de brujas y magos conocidos y desconocidos se hacían presentes causando más de un lío en el departamento. Sabía que tanta paz en el mundo mágico no iba a durar como muchos creían que sería.

     

    Pronto, Seba amordazó a la chica que intentó atacarlo, mas luego, algo ocurrió con la energía del lugar dejándonos con un disminuido campo visual. Miré a mi alrededor y no demoré en pronunciar un «Lumos» esperando que me ayudara a vigilar a los sospechosos junto a mí. Fuera de la oficina, se escuchó un gran estruendo por lo que salí y me asomé a ver qué ocurría, era esa chica de ojos amarillos (Pandora) la que había atacado soltando una de las arañas del pasillo para que así, esta cayera sobre otras dos chicas. Luego, vi como ella se acercó a Sophie que estaba herida así que supuse que se encontraba en buenas manos. Volví a mi lugar junto al escritorio para vigilar a los capturados. No estábamos el cien por ciento seguros de que fueran enemigos, sin embargo, no podíamos darles el privilegio de la duda viendo como estaban las cosas. Mi varita ya no iluminaba, ya que no era no necesario, las luces de emergencia se activaron dejandonos ver nuevamente, por lo que me giré y miré los rostros de ambas mujeres atadas (Aleera y Keaton). Pronto me entregaron a otra mujer(Evarela) a la que no esperé y revisé para quitarle la varita y guardarla en los bolsillos interiores de mi vestido. Lo pensé mejor, y comencé a revisar a cada una de las capturadas, entre tanto, encontré en cada una de ellas trozos de pergaminos iguales entre sí, sabía que no podía ser algo bueno así que los guardé junto a la varita de la última chica (Evarela), después, no tardé en encontrar una varita desconocida en el piso. Recordé que se trataba de la varita de la primera chica(Keaton) a la que Annick desarmó con un Expelliarmus, así que la tomé y guardé junto a todo lo demás.

     

    Me planté allí vigilando el momento que las capturadas despertaran, mas pronto hizo su entrada otra chica, que conocía más que bien. Era Bel la que venía con intenciones de fotografiar lo ocurrido. Solo sonreí por que tendríamos buena evidencia gracias a ella. Dirigí mi mirada a las chicas atadas y me percaté de que la primera inmovilizada (Keaton) comenzaba a morder las cuerdas intentando zafarse.

     

    - ¿Qué crees que haces? Cualquier intento de librarte será peor –le dije apuntándolo con mi varita amenazadoramente – «Petrificus Totalus»

     

    Pronuncié viendo como este quedaba inmovilizado nuevamente.

  2. No tardé en sentir la oficina más tranquila, por lo que me levanté de detrás del escritorio viendo a Seba y a Annick controlando a la extraña mujer(Keaton) ahora atada contra la pared. Parecía que todo había acabado, sin embargo, una chica llegó luego diciendo que venía a hacer una denuncia, pero viendo las circunstancias había dado ello por negado. Hablé de la bomba que acababa de desaparecer a lo que ella exclamó estupefacta por lo que había dicho, hasta que otra persona se acercó a nosotros con claras intenciones de herir o simplemente, matar. No vi a quienes atacó siendo que solo tomé mi varita con fuerza y me agaché ocultándome tras el escritorio. Pronto la atacante quedó fuera de mi campo visual por lo que vi desde mi escondite, mas otra chica a su lado se quedó allí mientras escuchaba a Sophie recuperar la conciencia junto a mi. Por suerte, la había escondido tras el gran mueble de madera conmigo.

     

    No pasó mucho cuando asomé mi cabeza y me percaté que ella quería atacarme, lanzó un «sectusempra» el cual no alcanzó ni a tocarme siendo que el escritorio me cubría por completo. Sin embargo, ella no pareció darse cuenta de ello si no que se marchó probablemente con la primera. No sabía si se habían marchado del departamento o aún seguían allí, mas procuré hacerme la herdia recostada sobre el suelo y aún así, poder tener una buena visión de lo que ocurría. Sabía que en cualquier momento podrían volver, así que con mi mano derecha, tomé fuertemente mi varita a la espera de cualquier cosa. Vió que su jefa, Sophie, comenzaba a moverse de más a pesar de sus heridas.

  3. Comencé a escuchar la batalla que daba comienzo a mi lado por el extraño comportamiento de la mujer desconocida en la oficina, así que sin más, me oculté tras el escritorio protegiendome de cualquier intento o hechizo fallido aún con el pequeño objeto en mi poder. Lo observé mejor, y por mi cabeza pasaron como pelicula recuerdos del momento que conocí estas bombas en Francia, eran peligrosas y viendo la situación tenía claro que no traían nada bueno al departamento.

     

    Noté que aún tenía mi varita en la mano, por lo que no demoré en dejar la bomba sobre el piso y luego apuntarla con ella.

     

    - Evanesco... -dije lo suficientemente fuerte para que diera resultado. Así, la bomba se desvaneció dejandonos sin peligro alguno, bueno, a parte del que ya sabemos. Con todo listo, volvi con Sophie viendo aún esperanzas y la arrastré tras el escritorio.

     

    No tenía intenciones de dejarla por allí y Annick con Seba parecían tener a la mujer bajo control. Solo esperaba que los demás fuera de esta oficina se encontraran bien, deseaba salir y ver si podía ayudar en algo, pero no tenía idea a que me estaría enfrentando, tampoco los planes de quienes intentaban protegernos así que básicamente, podría ser un simple estorbo fuera de aquí.

  4. Annick otra chica, del departamento, se apresuró a responder a la mujer recién llegada, al principio fue amable, sin embargo, un acto de ella hizo que desviara mi mirada preocupada desde Sophie hacia ellas. La pelirroja Poulain ató a la mujer dando una muy buena escusa la que apoyé asintiendo. Tenía razón, cualquier persona que no perteneciera al departamento era un sospechoso y debíamos asegurarnos de que nada más ocurriera, si nos equivocabamos, luego daríamos las explicaciones y disculpas correspondientes.

     

    Sabía que no era momento de explicaciones, pero era una necesidad la que tenía de saber que ocurría, quería ayudar y no podía si no tenía ni la más minima idea de lo que estaba pasando. Odiaba sentirme como un objeto sin tarea o propósito y mucho menos en estas circunstancias. No podía y tampoco quería quedarme sin hacer nada productivo por mis compañeros de trabajo.

     

    Sin embargo, el intento de Annick para capturar a la mujer fue frustrado por ella misma(keaton), lo que hizo que me pusiera de pie con varita en mano. Su respuesta se me hizo sospechosa, si no tuviera nada que ocultar simplemente se hubiera dejado atar. Mas antes de ponerme de pie, pude ver algo extraño bajo el escritorio de Sophie, nunca había visto algo parecido y de seguro, no era un objeto común. Me acerqué y la tomé con cuidado -¿Qué es esto? -pregunté y aunque era más para mi, todos pudieron escuchar mis palabras igualmente. El objeto parecía una de esas bombas muggles que vio muchas veces mientras vivia en Francia, pero ¿quién pudo haber puesto algo así allí?.

  5. Ruidos, fuertes ruidos se escuchaban a las afueras del despacho de Sophie, yo solo esperaba que nadie más saliera tan mal herido como Sophie. En compañía de Selene y Seba, me dispuse a interar hacer reaccionar a mi jefa, mas no tenía intenciones de soltar mi varita. No era un juego lo que estaba ocurriendo y debía mantenerme a alerta hasta que todo se diera por terminado, si es que tiene fin. Sabía que lo mejor sería llevar a Sophie a San Mungo, pero no quería actuar sin escuchar la opinión de los demás a mi lado. Estaba muy preocupada, no quería que esto terminara lamentando la muerte de alguien en el departamento.

     

    Luego, alguien entró con un fuerte estruendo a la oficina, me giré rapidamente y como lo hice son Seba, mi varita apuntó a la mujer que ingresaba asustada por lo que estaba pasando. No sabía si podía fiarme de cualquiera, sin embargo sus palabras terminaron por convencerme. Aunque ella parecía realmente asustada, preferí dejarla, no respondí directamente a su petición, esperé que alguien más lo hiciera, mi única preocupación por el momento era la salud de Sophie y de quienes estaban afuera.

     

    - ¿Alguien me puede decir que rayos hacemos? -cuestioné enfurecida, por todo lo que ocurría. Simplemente no podía entender como alguien puede causar tanto daño.

  6. El rostro de Sophie cada vez me era más preocupante y más aún siendo que no recibía respuesta alguna de la otra chica. Tomé el rostro de mi jefa e intenté hacerla reaccionar dando pequeñas palmadas sobre sus mejillas. Pronto, escuché que alguien ingresaba a la oficina alertandome. Me giré y apunté con mi varita, sin embargo, era una chica que desconocía por completo la cual atacó a Selene, mas pronto llegó Seba quien la petrificó y ayudó al instante a nuestra compañera recien atacada. Suspiré aliviada de ver a otra persona conocida y por lo menos sin daños a la vista, él no tardó en asegurarse atando a las dos chicas petrificadas.

     

    Todo era realmente confuso, fuera de la oficina se seguía escuchando movimientos bruscos mientras por mi cabeza pasaba la opcion de mandar a Sophie a San Mungo lo antes posible. No la veía bien, para nada. Miré a quienes estaban conmigo en el despacho buscando alguna respuesta a todo esto, mas solo veía lo que yo tambien sentía. Confusión, preocupación y alteración por el momento.

     

    ~

    off: horriblemente corto, pero para no quedarme atrás.

  7. Sin nada más que hacer, me quedé en el despacho de Elvis ordenando el papeleo que acababa de entregar a mis superiores mientras cada uno de ellos se marchaba de pronto. Afuera, pude escuchar un ajetreo bastante grande, aunque recordé que Seba estaba preparando a sus empleados para comenzar con el cateo en la Diggory. Suponiendo que de eso se trataba, dejé la carpeta ya ordenada sobre el escritorio del director departamental, de seguro luego la necesitaría para alguna otra tarea, y salí de allí en seguida. Mas en cuanto cerré la puerta detrás de mi, me encontré con la desagradable escena. Tanto movimiento fuera del despacho era a causa de un poco común ataque mortifago. No pude reaccionar al instante, solo observaba a mi alrededor analizando la situación. Sin embargo, ese estado no me duró mucho, no tardé en escuchar un grito sobresalir de entre los otros, corrí hacia la oficina de mi jefa que era de donde provino esa voz, se trataba de Selene, una de las nuevas empleadas de Agatha, que había atacado a una motifaga con un «petrificus totalus» liberando a Sophie de su poder. Viendo esto, no tardé en sacar mi varita de entre los plieges de mi vestido y correr hacia donde Selene llevaba a Sophie.

     

    - ¿Que rayos está ocurriendo? ¿Qué le pasó? -cuestioné conmocionada por la situación. Solo quería ayudar, mas no sabía por donde empezar. Me inqué junto a ellas mirando a mi jefa con preocupación, esperando alguna respuesta por parte de la chica que apenas conocía, Selene.

  8. Luego de que la castaña entregara los papeles a Seba, se dispuso a retirarse satisfecha con la respuesta que el jefe de cateos le había dado. Ella estaba tan preocupada por el caso como por la salud de los testigos del ataque, por lo que, el acto rápido de los de cateo la dejaron más tranquila. Con una pequeña sonrisa de despidió de Seba y de su esposa que la Báthory acababa de conocer, y salió de la oficina directo a entregarle la información a los demás.

     

    Con la última carpeta bajo el brazo, dirigió sus pasos hacia la oficina de Elvis donde se encontraba su jefa Sophie y si aún no se había marchado, Agatha, la jefa de relaciones ministeriales, así haría su última parada para informar a los restantes lo más pronto posible. Ya enfrente de la puerta, dio unos suaves, pero audibles golpes y cuando escuchó respuesta desde el interior ingresó percatándose de que se les había sumado una nueva chica. No sabía si trabajaría con nosotros o era una simple visita, mas le dedicó una sonrisa a la chica que llamaban Selene en forma de saludo, para luego dirigirse a su jefa y Elvis.

     

    - Espero no interrumpir nada, pero vengo a entregarles los formularios que Mayita Meadows acaba de hacer informando de un ataque en la mansión Diggory - dijo la ojimiel extendiendo la carpeta y dejándola sobre el escritorio frente a los jefes - Allí dentro está la denuncia y la petición de cateos que hizo y además solicita que nos comuniquemos con el departamento de reversiones para que ellos hagan lo suyo en el lugar.

     

     

    ~Petición para Cateos~

    - Nombre: Mayita Meadows

    - Lugar deseado para realizar el Cateo (Link): Mansión Diggory

    - Razones para el registro: Ataque mortifago en la mansión dejando daños materiales. Queremos que se aseguren de que no han dejado objetos malditos o algo más.

    - Otros Datos: Atacaron en el vestíbulo, la cocina y la sala de estar.

     

    ~Ficha de Denuncia~

    - Nombre del denunciante: Mayita Meadows

    - Nombre de la persona/familia a la que denuncia: Mortifagos

    - Lugar de los hechos: Mansión Diggory Link

    - Fecha del suceso: 7 de Enero de 2012

    - Razones de la denuncia: Un grupo de mortifagos entro en la mansión haciendo estragos, destruyendo inmuebles materiales. Incendiaron la casa, la cocina y la sala.

    - Testigos del suceso: Wormmy, elfo domestico.

    - Otros Datos: Afortunadamente no hubo heridos, pues la mansión se encontraba libre de miembros de la familia, sin embargo, mi familia y yo queremos asegurarnos de que no hayan dejado ningún objeto maldito. Así mismo, revisen la mansión por precaución de que no vayan a volver.

     

     

    Esperó a que Sophie y Elvis revisaran los papeles y así saber si necesitaban de algo más. Por el momento, miró a su alrededor viendo como los de cateos se organizaban y esperando reconocer a la chica allí sentada, sin embargo, por más que lo intentaba, la castaña no lograba hacerlo.

  9. La Báthory revisó con atención el último formulario entregado y escrito por Mayita, cuando escuchó que esta ya se estaba preparando para marcharse, y bueno, era obvio, luego de un suceso como el que presentaba la chica, era normal estar algo alterado. Así que Kotee, siempre con una sonrisa en el rostro, le dedicó un gesto amable para luego despedirse de la Meadows que caminó hasta desaparecer del departamento con prisa. Para la ojimiel, a veces le resultaba realmente raro actuar con tanta sonrisa y amabilidad siendo que su trabajo era escuchar hechos horribles, mas ella no lo podía evitar, su forma de actuar era de esa forma, además, una sonrisa y buena atención podría ayudar a llevar lo ocurrido. Ahora viendo que la plantilla de petición estaba bien, la puso en la carpeta con la denuncia anterior y dando un pequeño golpe con su varita esta se triplicó. Así la castaña se levantó de su asiento y tomando dos de esas carpetas con el nombre de la mansión y de la denunciante en la portada, dejó la restante junto a los demás archivos y se dirigió a la oficina más cercana, la de Seba Granger para hacerle entrega de los papeles que necesitará.

     

    Caminó entre los demás cubicu.los mirando si por allí veía al jefe de cateos, mas no lo vio por ningun lado, de seguro se encontraría en su oficina si es que no ha salido a comer, pensó la ojimiel. Llegando a la puerta que rezaba el nombre del jefe, golpeó para luego de unos segundos, abrir pidiendo permiso. Alli estaba Seba acompañado de su esposa que Kotee saludó con una sonrisa antes de dirigirse a él.

     

    - Buenas, han venido recién a hacer una denuncia y piden que se haga el cateo correspondiente en la mansión que aquí se indica -dijo extendiendole una de las carpetas - Me pidieron que si no hay problema, fueran lo más pronto posible.

     

     

    ~Petición para Cateos~

    - Nombre: Mayita Meadows

    - Lugar deseado para realizar el Cateo (Link): Mansión Diggory

    - Razones para el registro: Ataque mortifago en la mansión dejando daños materiales. Queremos que se aseguren de que no han dejado objetos malditos o algo más.

    - Otros Datos: Atacaron en el vestíbulo, la cocina y la sala de estar.

     

    ~Ficha de Denuncia~

    - Nombre del denunciante: Mayita Meadows

    - Nombre de la persona/familia a la que denuncia: Mortifagos

    - Lugar de los hechos: Mansión Diggory Link

    - Fecha del suceso: 7 de Enero de 2012

    - Razones de la denuncia: Un grupo de mortifagos entro en la mansión haciendo estragos, destruyendo inmuebles materiales. Incendiaron la casa, la cocina y la sala.

    - Testigos del suceso: Wormmy, elfo domestico.

    - Otros Datos: Afortunadamente no hubo heridos, pues la mansión se encontraba libre de miembros de la familia, sin embargo, mi familia y yo queremos asegurarnos de que no hayan dejado ningun objeto maldito. Así mismo, revisen la mansión por precaución de que no vayan a volver.

     

     

    A causa de la situación, Mayita no se encontraba muy bien y Kotee no dudaba que la familia afectada estaba de igual manera y era obvio, así que con ver ellos que el proceso se está llevando a cabo, los ayudaría a mantener la calma y a sentir un gran apoyo de parte del departamento. Solo esperaba que Seba se diera un tiempo para hablar con sus empleados e ir a visitarlos.

     

    Sin más, la castaña esperó que el jefe de cateos revisara los papeles y si ya no había nada más que hacer o hablar, se dirigiría a la oficina de Elvis donde estaban los demás jefes reunidos. La llegada de Agatha había causado alboroto que decidieron tratar con el director y así a la castaña se le haría más fácil, les entregaría la última carpeta y así no demorarían en ponerse de acuerdo.

  10. Pronto, la chica que se había presentado como Mayita Meadows, le hizo entrega del pergamino con toda la informacion necesaria a la castaña. Ella lo leyó con suma atención, revisando que no faltara ningún campo. Era muy importante para el departamento que ningún detalle fuera obviado, para así realizar los trámites necesarios y las denuncias cumplieran con su objetivo. Ya todo verificado, la Ackerley guardó la plantilla en una de las carpetas que hizo aparecer con un movimiento de su varita, así tendría la información ordenada para cuando la necesitaran. Mientras tanto, escuchó las preguntas que la señorita Meadows le hacía. Era agradable que la gente preguntara las cosas, no muchos lo hacían, aunque se tratara de algo tan básico, la mayoría solo actuaba creyendo que todo lo que hacen es correcto. Así que le sonrió amable y percatandose de lo inquieta que estaba por irse, decidió responderle los más resumidamente posible. Kotee ya estaba acostumbrada a lidiar con todo tipo de personas y con diferentes reacciones respecto a ataques, así que nada de lo que Mayita le demostraba, le era nuevo.

     

    - Mire para el cateo, solo necesitará llenar una petición que yo misma entregaré al jefe de oficina para que vean el caso pronto -dijo la ojimiel buscando la ficha para cateos que guardaba en la gaveta izquierda del escritorio - Y respecto a las reparaciones, nosotros haremos el enlace con el departamento y les enviaremos la denuncia para que actuen lo más pronto posible. Obviamente esto será luego del cateo para no alterar nada.

     

    Terminando ella de explicarle todo, le extendió un nuevo formulario, mas ahora se trataba de las peticiones para cateo que luego haría llegar a Seba para que se pusiera de acuerdo con sus empleados para ir a la mansión.

     

    ~Petición para Cateos~

    - Nombre:

    - Lugar deseado para realizar el Cateo (Link):

    - Razones para el registro

    - Otros Datos:

  11. Al parecer el tema de las denuncias en la tercera planta, le había caído muy mal a la jefa de Kotee, pero ella no podía omitir lo que había visto. Solo esperaba no haber causado algún lío por abrir su bocota, pues tenía claro que a pesar de sus actos erróneos con las denuncias, ellos cumplían con informar los pasos a seguir para ese tipo de trámite. Es por esto, que a la castaña le hubiera gustado seguir hablando del tema, para dejar en claro aquello, mas la llegada de Agatha al departamento causó tal revuelo que la junta quedó hasta allí. Viendo que la Granger iría con Elvis, la chica decidió hacerle caso a la rubia y así volver a su escritorio para trabajar en el pedido que su jefa le había dado. Salió de la oficina y caminó hacia su puesto, sin embargo, no alcanzó a llegar cuando escuchó la voz de una mujer buscando a alguien para realizar una denuncia.

     

    - Buenas, soy Kotee Ackerley -se presentó la ojimiel con amabilidad cuando llegó junto a la chica- Yo le puedo ayudar con la denuncia, por favor sigame.

     

    La Báthory caminó a su escritorio esperando que la chica en busca de ayuda la imitara, ya allí, ella se ubicó en su asiento tras el mueble de madera y le pidió que se sentara señalándole la silla enfrente. Buscó una denuncia en blanco en una de las gavetas y se la extendió junto a una pluma.

     

     

     

    ~Ficha de Denuncia~

    - Nombre del denunciante:

    - Nombre de la persona/familia a la que denuncia:

    - Lugar de los hechos (Link):

    - Fecha del suceso:

    - Razones de la denuncia:

    - Testigos del suceso:

    - Otros Datos:

     

     

    - Rellene todos los campos y si tiene alguna duda me dice ¿Está bien? -le explicó Kotee dedicándole una dulce sonrisa.

     

    Mientras esperaba que la chica llenara la ficha, Kotee se dispuso a pensar en alguna idea para el sello que Sophie le había pedido. Aún no tenía muy claro lo que haría, pero esperaba que algo se le ocurriera pronto.

  12. La Báthory comprendió al instante que se hallaba en el límite. Su larga ausencia le habría provocado lo que justamente ella no quería, su despido y enfado con ella misma. Así que asintió sin problemas a las palabras de su jefa, ella tenía mucha razón y la ojimiel procuraría tenerlo en mente para el futuro, aunque esperaba que algo así no se volviera a repetir. Por un lado estaba feliz porque la Granger estaba siendo sincera con ella y además tenía su empleo aún, mas se sentía irresponsable, no haber siquiera avisado le hubiese costado su empleo y algo así Kotee no podría haberselo perdonado, suele ser muy responsable y haber caido en ello, le pesaba. Sin embargo, ya estaba más aliviada y podía asegurar que esto nunca más iba a ocurrir. Tomó la taza de té frente a ella y bebió un poco para luego, escuchar con atención las nuevas indicaciones de su jefa. Para Kotee, lo que hablaba Sophie era el mismo drama que a ella se le venía a la cabeza en momentos determinados. Varios denunciantes iban al departamento de accidentes mágicos a hacer la denuncia y luego, solo si tenían el tiempo de dejar constancia del suceso en este depatamento lo hacían, siendo que esta área era la principal, eso no debía ser así, la gente llegaba a confundirse mucho.

     

    -No, yo por lo menos no recuerdo haber recibido ningún papeleo de parte de ella – respondió intentando rememorar aquel informe- Pero según lo que he visto en mis rápidas visitas a la tercera planta, he notado que ellos poseen pergaminos de nuestra oficina los que le entregan a los denunciantes, así que creo que eso produce una gran confusión en las personas respecto a qué lugar deben dirigirse para realizar una denuncia formal, aunque igualmente ellos dan las instrucciones de que deben venir hacia acá primero, ya luego es decisión de ellos mismos venir o no.

     

    En cuanto al sello, ya se le comenzaban a venir algunas ideas a la cabeza, aunque sabía que se le haría algo difícil encontrar el que fuera correcto, mas haría su mejor esfuerzo. Poseer un sello que permitiera identificar los papeles de la oficina le parecía una forma muy buena de detener las confusiones entre ambos departamentos. Varias cosas se venían a la cabeza de la Báthory, pero pronto todo pensamiento se vio interrumpido por unos golpes en el pasillo. La castaña intrigada por lo que ocurría, siguió con la mirada a su jefa que salía a dar un vistazo, sin embargo, por las mismas palabras de la Granger en la puerta, se dio cuenta de que se trataba de Agatha, la jefa de relaciones ministeriales.

  13. Hola! Despues de tanto tiempo vengo a dejar unos nuevos cambios ^^

    Necesito cambios en en "Datos Personales"

     

     

    ~ Datos Personales:

     

    Nombre del Personaje: Kotee Ackerley Báthory

    Sexo: Femenino

    Edad: Adolescente de 17 años

    Nacionalidad: Francesa

    Familia(s):

    Familia Báthory♧Matriarca [adoptiva]

    Familia Poulain [sanguínea]

    Padre(s) Sanguíneo: Ethan Ackerley-- Cyrine Poulain--

    Padre(s) Adoptivos: Alissia Macnair Báthory

    Trabajo: Aprendiz en la Oficina para la Recepción de Denuncias sobre la Utilización de Artes Oscuras

     

     

     

    [color="#FFA500"][u][b]~ Datos Personales:[/b][/u][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Nombre del Personaje:[/b][/color] Kotee Ackerley  Báthory 
    [color="#F5DEB3"][b]Sexo:[/b][/color] Femenino
    [color="#F5DEB3"][b]Edad:[/b][/color] Adolescente de  17 años
    [color="#F5DEB3"][b]Nacionalidad:[/b][/color] Francesa
    [color="#F5DEB3"][b]Familia(s):[/b][/color] 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color]  Familia Báthory♧[b][i]Matriarca[/i][/b] [adoptiva]
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color]  Familia Poulain [sanguínea]
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Sanguíneo:[/b][/color] Ethan Ackerley-- Cyrine Poulain--
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Adoptivos:[/b][/color] Alissia Macnair Báthory
    [color="#F5DEB3"][b]Trabajo:[/b][/color]  Aprendiz en la Oficina para la Recepción de Denuncias sobre la Utilización de Artes Oscuras
    

     

     

     

    Y necesito otros cambios en mi historia, pero solo en el último párrafo

     

    Historia:

     

    "...."

     

    Durante el año siguiente, la nueva Báthory, entró a la academia perteneciendo a la casa de fuego, los Dragones de Lancashire. Allí, descubrió sus claras aspiraciones a la Orden del Fénix, por lo que se inscribió en ella tomando el puesto de aspirante hasta que terminara la academia. Más adelante, se puso a trabajar como aprendiz en el departamento de aurores, recibiendo las denuncias sobre utilización de artes oscuras, a la espera de algún día poder trabajar allí oficialmente. Ya al terminar la academia, se postuló para ser otra empleada más de aquella oficina que tanto le había agradado realizandose su deseo con éxito. Ahora trabaja como otra empleada, recibiendo denuncias y ayudando a los demás en cuanto puede, mas otras sorpresas vendrían por el lado de su familia. Varios problemas con sus parientes provocaron la separación de estos, por lo que se fué a vivir definitivamente con su prima y madre adoptiva Alissia, sin embargo, pronto esta le haría una propuesta a la que no podría negarse, por lo que se volvió una de las matriarcas de la familia Báthory.

     

     

     

    Eso es muchas gracias ^^

  14. La castaña seguía removiendo entre los papeles y guárdandolos en las gavetas correspondientes, hasta que dió con el anhelado final. El escritorio por fin lucía más organizado, tal cual como a ella le gustaba. Por nada soportaba un lugar tan desordenado y mucho menos si era el área donde ella debía trabajar. Así que satisfecha, descansó su torso sobre el respaldo suspirando aliviada. Desató su cabello y lo arregló para no parecer luego una loca. De seguro tanto movimiento de aquí para allá la había dejado algo desalineada.

     

    Recordó luego que su jefa vendría para hablar con ella y no pudo evitar sentir algo de nervios. Sabía que le preguntaría por la causa de su ausencia y digamos que sus razones no eran las mejores. Se trataban de cosas más bien familiares, problemas en general y en el fondo, la Ackerley tenía claro que eso no bastaba para haber practicamente abandonado el trabajo así como así. Tenía que pensar mejor en como se lo diría a su jefa, mas poco tuvo para pensar cuando escuchó unos pasos acercarse a ella. Miró y se trataba de Sophie que venía a cumplir con lo antes dicho. La chica allí sentada suspiró y caminó junto a su jefa cuando esta le pidió que la siguiera a su oficina. Ya allí, tomó asiento y aunque ya había tomado una taza de café con Elvis, recibió por cortesía el té que su jefa le ofrecía.

     

    - Bueno, la verdad es que pasé por varios problemas personales que no me permitieron venir a trabajar, pero le aseguro que no volverá a pasar, lo que menos quiero es perder mi trabajo -le explicó la castaña esperando que eso bastara, no quería hablar de ello. Sabía que tales escusas no eran las mejores ya que, todos tienen problemas y aún así cumplen con sus deberes, sin embargo, para Kotee fue como caer en un agujero, en el que se aseguraría nunca caer de nuevo.

  15. Las cosas si que andaban lentas en el departamento, y Kotee lo pudo notar al volver a su cubicu.lo para ponerse al día con sus debéres. Poca gente pasaba por el angosto pasillo mientras ella revolvía los papeles en busca de denuncias complementarias, parecía que la mitad de los empleados habían renunciado o una buena parte del mundo mágico había sido quitada de todo lo que conocíamos dejando a solo unos cuantos.La castaña solo suspiraba al lanzar unas miradas hacia las demás oficinas sin ver anda nuevo, era obvio que se alegraba de que últimamente no hubieran tantas denuncias porque ello significaba que nada malo ocurría en el mundo mágico, mas no podía dejar de pensar en lo aburrido que estaba el trabajo. Ya solo se estaba dedicando a organizar bien su escritorio despejándolo del papeleo que parecía emanar de el casi por naturaleza.

     

    Sin embargo, en una de las tantas miradas que la ojimiel lanzó hacia el pasillo, vió con alegría la llegada de se jefa Sophie. Esta última, apenas la vió se dirigió a ella con una directa pregunta respecto a su larga ausencia en el departamento.

     

    - Si claro. Y he vuelto para quedarme -dijo respondiendo a su alusión soriente siendo lo más sincera que podía. No se podía negar que ella amaba su trabajo y por ello, no lo volvería a dejar botado sabiendo que eso se podría transformar en su despido.

     

    Asintió cuando la Granger se marchaba hacia la oficina de Elvis para poder luego hablar con ella. Debieron de pasar muchas cosas en su tiempo inactiva y quería ponerse al tanto de todo y si era posible, ayudar. Así que se dispuso a esperar que su jefa volviera regresando a lo que estaba haciendo. Amarró su cabello en una cola alta dejando que su flequillo fuera lo único sobre su rostro. Había comenzado a sentir algo de calor a causa de sus constantes movimientos. Aunque estuviera sentada, el hecho de revisar tres veces el mismo documento apra que luego otros varios papeles cayeran y así mismo se formara otro lío, causaba que se sintiera algo agobiada.

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  16. La Ackerley tenía claro que sus preguntas no eran de lo más importantes, mucho menos impactarían al mundo mágico, pero debía sacarselas de la cabeza. Kotee rió ante el comentario de Elvis sobre mortifagos y magia oscura, pensando con ello en la rara actitud que llevaba la sociedad estos días. Para la castaña algo se estaba preparando bajo sus propias narices y, aunque pareciera de algún modo que sufría de una gran psicosis, sentía que era correcto preocuparse un tanto. Mas no quiso sacar aquel tema con el director del departamento, obvio que no lo haría, lo peor que podría hacer era hacerse ver como una loca en frente de sus superiores, además ellos, si en efecto ocurría algo extraño, serían los primeros en enterarse, por lo que, decidió hacer caso al indirecto consejo de Elvis y calmarse en cuanto a las cosas en el trabajo. Estaba todo bien a pesar de que le pareció raro que el Gryffindor confundiera a su jefa Sophie con Agatha, pero solo sonrió pensando en la gran cantidad de trabajo que debía de tener y a causa de ello, se le producían tales confusiones.

     

    - Bueno, muchas gracias por su tiempo -dijo la ojimiel poniendose de pie sin siquiera haber tomado el café- Sé que no era nada de lo que esperaba, pero aprecio que aún así me hubiera ayudado. Estaré pendiente para cuando llegue mi jefa tambien. Ahora lo dejo para no quitarle más tiempo.

     

    Kotee se giró dedicándole una última y pequeña sonrisa expresando verdadera gratitud por su buena disposición y caminó hacia la salida. Mas antes de salir volvió su mirada a Elvis para hacerle saber su pequeño error durante la charla. Solo quería asegurarse que la información llegara a la persona correcta.

     

    - Oh, por cierto, trabajo para Sophie no para Agatha -le corrigió cordial manteniendo una dulce sonrisa en el rostro- Así que si la ve, le avisa que ando por el departamento.

     

    Con ello, la chica salió haciendo una leve reverencia con la cabeza en forma de despedida y caminó directo a su escritorio para tomar asiento y ponerse a organizar las denuncias. Hace mucho tiempo que no lo hacía y le parecía necesario por si algún día llegaban a necesitarlas, así les ahorraría el trabajo de buscarlas en grandes masas de papeles escritos.

  17. La Ackerley sonrió abiertamente al ver que el director le respondía de tan buena manera, sabía perfectamente, y tambien recordaba, lo mal que otros magos podían reaccionar ante cualquier interrupción. Estaba acostumbrada a ese tipo de reacciones ya que en su trabajo, muchas veces había tenido que lidiar con más de algún y alguna malhumorada, sin embargo, ya le habían llegado muy buenos comentarios por parte de sus compañeros, y de su jefa también, sobre el Gryffindor, por lo que no temía que fuera descortés en algún momento, aunque la castaña debía admitir que si no fuera por la ausencia de su jefa, nunca se hubiera dirigido a él, mas se sentía agradecía por el buen trato.

     

    - Si, claro -dijo respondiendo al castaño. Le había ofrecido ir a su despacho y ello le parecía lo mejor. Quizá no era algo tan importante, pero las dudas en la cabeza de Kotee nunca eran buenas. Luego no le permitirían concentrarse en su trabajo y la ojimiel ya era lo bastante despistada. Además, después con suerte podría dormir a la noche sin comenzar a divagar.

     

    La chica siguió a Elvis intentando llevar su paso, pero le costaba al ser varios centimetros más pequeña que él. Pasaron por todas las subdivisiones del departamento y allí fue cuando Kotee se percató de la ausencia de varios compañeros de trabajo. El lugar parecía más tranquilo a causa de la poca actividad en el mundo mágico y casi solitario si no fuera por la presencia de unos cuantos empleados. Le resultaba tan raro a la castaña que hasta un ligero miedo se le presentó, tanto silencio y paz nunca era bueno por más que fuera lo que se deseaba normalmente, el equilibrio entre los problemas y los buenos momentos debía existir para ella o algo malo realmente estaba ocurriendo mientras todos disfrutaban de una vida tranquila. Sin embargo, intentó dejar de lado tanta preocupación cuando entró a la oficina de Elvis, tenía que enfocarse en las dudas que quería saciar, tomó asiento cuando él se lo indicó y suspiró tratando de mantener todo en su cabeza ordenado.

     

    - Primero, muchas gracias por recibirme - dijo con un sonrisa puesto que no sabía de las tantas ocupaciones que podría tener mientras se tomaba un tiempo para ella- Y bueno, teniendo en cuenta que mi jefa no se encuentra, que es algo que igual me intriga, me gustaría saber si aún conservo mi trabajo. He estado ausente por mucho tiempo a causa de algunos problemas, pero me gustaría volver y así recuperar todo el tiempo perdido.

     

    Kotee siempre era sincera y cuando decía que amaba su trabajo era enserio. Antes de entrar a trabajar al departamento auror, buscó otras posibilidades ante el poco aprobamiento que su madre adoptiva tenía respecto a este trabajo, mas decidió seguir lo que quería y al entrar se maravilló. Así que tan solo pensar en su posible despido la abrumaba.

  18. Este tiempo no había sido el mejor para Kote, nada en general había mejorado desde que se enteró del quiebre definitivo de su familia. Por suerte, la castaña había recibido el apoyo y el cariño de la única persona que siempre había estado con ella, Alissia, su madre adoptiva. Mas era momento de dejar todos los problemas atrás y volver al trabajo que tanto le gustaba. Era la única manera para la Ackerley de superar otro drama familiar. Así que dejando la mala cara en el castillo Báthory, la diecisiete añera apareció en el ministerio que ya casi había comenzado a olvidar y a pesar de su disgusto por la gran cantidad de gente pululante en el lugar, una sonrisa se dibujó en sus labios viendo que nada había cambiado. Caminó en dirección al elevador y recordó lo difícil que se le hacía abrirse paso entre los demás trabajadores, pero alcanzando a tomar el último ascensor que partía, suspiró más calmada a la vez que se preparaba para el viaje a la segunda planta. No hacía falta mucho tiempo para llegar allí, pero aquel transporte no era el más suave.

     

    Se emocionó un tanto al escuchar la voz que le avisaba su esperado paradero, por lo que, al abrirse las rejas, salió sonriente para encontrarse con la entrada al departamento auror. Saludó a Emma viendo a Elvis, el director del departamento, allí acompañado de dos mujeres de las que solo pudo reconocer a una. Sin querer interrumpir, fue directo a su escritorio. Había pasado mucho tiempo desde que vio la oficina por última vez y mucho más tiempo de no haberse cruzado con su jefa. A causa de esto, unas importantes dudas la embargaron. ¿Dónde estaría Sophie? ¿Aún tendría su trabajo? Kote rió por el error de no habérselo preguntado antes de venir, pero ahora que recordaba, no había recibido ninguna lechuza que le avisara de su despido y tampoco Emma la detuvo al ingresar, así que tomó la decisión de ir a hablar con Elvis del asunto, el sabría responderle. Dejó su abrigo en el perchero quedando solo con un simple vestido azul y salió del cubículo en dirección al vestíbulo.

     

    La castaña se incomodó al pensar que algo importante podría estar interrumpiendo, pero debía saber algo tan importante como lo era su permanencia en el departamento. Se acercó a Elvis y con una sonrisa saludó amable a las tres personas allí.

     

    - Hola Señor Gryffindor. Señoritas- dijo inclinando levemente la cabeza con una sonrisa, para después volver su mirada a Elvis- ¿Podría hablar con usted? Solo tardaré unos minutos, tengo unas dudas respecto a mi trabajo.

     

    Esperaba con ansias que el director tuviera unos minutos para ella. Odiaba quedarse con dudas en la cabeza que luego no pararían de darle vueltas.

  19. Por suerte para la castaña Báthory, la chica a la que se le acercó en busca de Goderic, tomó su formulario pudiendo ella aceptarlo. Agradecida con la pelirroja del otro lado del escritorio, le sonrió cuando aprobó su ficha al primer intento. Viendo que luego ella comenzó a recibir otras de las fichas de sus compañeras de graduación, decidió alejarse e ir a las sillas para esperar las siguientes instrucciones. Ya allí sentada, arregló su cabello que lucía suelto y lo amarró en una cola. Tenía claro que si lo mantenía de esa forma, el examen de vuelo se le haría más fácil al no tener que luchar con sus mechones sobre la vista. Sopló el flequillo que le caía hasta por sobre las cejas y lo apartó hacia los lados. Esto era un acto habitual de la chica con camisa roja cada vez que se ponía nerviosa. En este caso, le preocupaba el hecho de no poder pasar el examen de vuelo. Por lo general, le asustaban las alturas, pero era un efecto raro lo que le causaba estar sobre una escoba. Le parecía realmente divertido.

     

    Observó a la chica que hace unos minutos la atendió y se percató que solo restaba que les diera el consentimiento para poder pasar al cuarto especialmente modificado para la obtención de licencias como esas. Ya cuando al parecer revisó cada formulario e hizo lo debido, las llamó en grupo hacia su escritorio alzando un tono su voz. Kote al escucharla, se levantó intentando parecer tranquila y llegó junto a las otras chicas ante la pelirroja.

     

    -Sus fichas están correctas, ahora deben ir al Consejo Regulador de Escobas a realizar el examen. Suerte en su examen- les dijo amablemente antes de desearles suerte para lo que seguía.

     

    -Está bien, muchas gracias –agradeció y con una sonrisa se dirigió hacia la salida.

     

    Sin esperar más, la ojimiel guió sus pasos hacia el Consejo Regulador de Escobas y buscó con la mirada aquel cuarto al que debía llegar. Sin embargo no demoró mucho, ya que al final de los pasillos, distinguió una puerta con una placa en la que se leía claramente «Exámenes de Vuelo». La Ackerley suspiró obligándose a calmar los latidos de su corazón. Tal y como para el examen de aparición, no podía estar nerviosa. Era algo que le podría perjudicar de tal manera que por esa razón terminaría en San Mungo.

     

    Se acercó a la puerta y la abrió dejando a la vista un hermoso paisaje natural cubierto por el elevado techo del cuarto. Ahora, viendo al encargado de supervisar el examen, le sonrió en forma de saludo y al recibir respuesta positiva, se fue directamente hacia el lugar donde las escobas estaban colgadas. Tomó una de las escobas Moscardas que al ser una especialmente familiar, resultaba ser una de las más seguras para este tipo de pruebas. La castaña caminó hasta el centro de lo que parecía un cuarto sin fin y poniendo la escoba entre sus piernas, respiró hondo recordando guardar calma. Puso la mente en blanco y ya estando más segura, posó sus pies en el soporte para ello, comenzando a elevarse hacia el techo que cada vez veía más lejano.

     

    En una considerable altura, se detuvo al sentir una brisa que resultaba casi imposible que estuviera presente en un lugar cerrado como se suponía que era ese. Mas poca importancia le tomó sabiendo que habían muy pocas cosas imposibles para los magos. Pronto, aquella brisa se hizo más fuerte y densa hasta que bajo ella, comenzaron a aparecer de forma repentina gigantescas rocas en forma de aguja. Una tras otra comenzaron a surgir subiendo hasta el, sin fin, cielo raso. Kotee inclinando su escoba, se libró de las puntiagudas rocas que aparecían bajo ella. Mas en un trato de esquivar, otra se le interpuso frente a sus narices rompiendo la parte delantera del mango provocando desequilibrio en la castaña sobre la escoba. Por suerte, alcanzó a sujetarse de la misma roca frente a ella, la cual ya no le haría daño al no poseer parte puntiaguda.

     

    Tratando de calmar su respiración y mantener de mejor manera su equilibrio sobre la Moscarda, se ubicó más atrás de lo debido pudiendo así sujetarse de lo que quedaba de madera. Aferrándose de ello, prosiguió entre las rocas que cesaron de aparecer ladeándose de un lado a otro con su peso. Siguió por un tiempo dando vueltas y más vueltas hasta que otro extraño ruido se hizo escuchar haciéndola detenerse. Agudizó el oído para luego percatarse que las mismas rocas, comenzaban a girar como si encima de una plataforma giratoria se encontraran.

     

    -No, por favor no –murmuró cansada cuando estas se le empezaron a acercar desde atrás con una mediana velocidad.

     

    Evitando que las primeras le pegaran, miró por sobre su hombro y, apoyando todo su peso hacia el lado más despejado, giró de lado sobre la escoba hasta apartarse de la roca. Así lo hizo durante lo que duró tal movimiento de los grandes pedruscos.

     

    Cuando ya había captado la maniobra para pasar aquella prueba, estos dejaron de moverse y sin más, a desaparecer. La prueba había terminado y sólo restaba el aterrizaje. La Ackerley bajando la velocidad, continuó dando vueltas tranquilamente hasta que ninguna quedó a la vista. Tan solo en ese momento la chica giró descendiendo hacia el lugar donde se encontraba el encargado de tomar los exámenes y pronto cercana al suelo, pisó firmemente para luego caminar hacia él.

     

    -Lo siento por lo de la escoba –se disculpó avergonzada mientras se la entregaba.

     

    Al parecer no le había ido tan mal. Aparte de lo ocurrido con la escoba, la Báthory supo manejar la situación tanto como al mismo objeto de transporte. Se despidió amablemente y salió del lugar a la espera del resultado.

  20. o.o lo siento! no me había percatado de esos cambios :$ Dejaré la ficha con el nuevo modelo para cuando pueda ser modificada ^_^ Volveré a dejarlo todo como debe estar y abajo pondré los códigos (:

     

    http://i1213.photobucket.com/albums/cc480/playthatsong/kabID.png

    ~ Datos Personales:

     

    Nombre del Personaje: Kotee Ackerley Báthory

    Sexo: Femenino

    Edad: Adolescente de 17 años

    Nacionalidad: Francesa

    Familia(s):

    Familia Poulain [sanguínea]

    Familia Báthory [adoptiva]

    Padre(s) Sanguíneo: Ethan Ackerley-- Cyrine Poulain--

    Padre(s) Adoptivos: Alicia S. Báthory

    Trabajo: Aprendiz en la Oficina para la Recepción de Denuncias sobre la Utilización de Artes Oscuras

     

    ~ Poderes Mágicos:

     

    Rango Social: Aprendiz

    Bando: Neutral

    Rango dentro del Bando: --

    Nivel de Poder Mágico: 1

    Puntos de poder en objetos:

     

    Hechizos adicionales:

     

    Puntos de poder en criaturas:

     

    Criaturas controlables en asaltos y duelos:

     

    Habilidades Mágicas: --

    Conocimientos Especiales: --

     

    ~ Perfil del Personaje:

     

    Raza: Humano

    Aspecto Físico: Kotee al poseer una piel tersa y extremadamente blanca ha sido comparada con vampiros por mucho tiempo tomando en cuenta su descendencia. Pero a causa de sus largas extremidades, la estatura de 1.69 y poca gracia al moverse, la posibilidad de ser una criatura tan ágil como esa queda completamente descartada. Sus brazos y piernas son completamente blancas, pero no por eso feas, están bien formadas y aunque a ella no le importe extremadamente su aspecto físico, su cuerpo está en todos los sentidos totalmente saludable y bien proporcionalmente. La chica es una adolescente completamente común y poco llamativa, su cabello castaño claro es ligeramente ondulado y lo bastante largo como para casi alcanzar sus codos con las puntas del pelo. Su rostro es como el de una niña que causa ternura y simpatía teniendo unos penetrantes ojos color miel, enmarcados en largas pestañas bajo cejas delineadas que apenas se pueden ver bajo el flequillo que cae livianamente sobre su frente hasta sus parpados. Su nariz recta termina redonda dando un lindo perfil entre unos poco notables pómulos que la mayoría del tiempo lucen un color rosado pálido. El rostro de la castaña es algo alargado y termina en un mentón pequeño ubicado bajo su boca de labios delgados y rosados.

     

    Cualidades Psicológicas: Kotee debe reconocer que es una persona sensible a todo y a todos, mas no es pura ternura en todo momento, puede tener una reacción fuerte en situaciones que a ella no le parezcan, no dudará en dar a conocer su opinión respecto a cualquier tema, a excepción que sea mejor guardar silencio y así no empeorar las cosas. Tiene el hábito de siempre querer ayudar a los demás sea cual sea el problema o favor, no le gusta defraudar a nadie respecto a esto o cualquier otra cosa, por lo que procura ser responsable. Le desagrada ver a alguien mal o triste, así que si ella puede ayudarle a sonreír lo más seguro es que lo hará o por lo menos lo intentará. Suele ser juguetona tal y como una niña, pero muy madura al pensar y actuar a pesar de su edad. Ama leer y saber sobre todo, por lo tanto un hobbie que nunca va a dejar va a ser el de leer. Por esto, es muy inteligente y capaz de todo, pero siempre tomando en cuenta sus principios y valores que sus padres le inculcaron.

     

    Historia: Kotee Ackerley Poulain nació un 13 de Junio de 1994 en el pueblo francés Autoire, donde sus padres Ethan y Cyrine se habían instalado hace 1 año luego de contraer matrimonio. Siendo ambos franceses, la mudanza en el mismo país no fue complicada, sin embargo, se aseguraban de no dejar rastro de ellos, puesto que eran seguidos por servidores del mago oscuro. Creyendo en su total protección, armaron su hogar en aquel colorido y pequeño pueblo de Francia dando el primer paso teniendo una bebé.

     

    Luego, varios años pasaron sin tener preocupación alguna. El hombre de la casa ya tenía un buen trabajo en el mundo mágico francés, y a pesar de que no era un dineral lo que ganaba, alcanzaba perfectamente para su diario vivir. Además, Ditry, el elfo de la familia, era de gran ayuda en todo. La criatura no se había despegado de ellos desde que la misma niña lo vio deambulando por los bosques cercanos a la casa, en una de las tantas caminatas que daba la familia por los alrededores.

     

    La alegría y la sencillez de los Ackerley era casi imposible de creer, todo estaba saliendo perfectamente y nada se había sabido de mortífagos durante un buen y largo tiempo. Algo que tenía a la pareja muy segura de haber dejado atrás lo malo del pasado. Agradecidos de lo que tenían hasta el momento, pasaron más y más años, en los que la niña creció convirtiéndose en una dulce jovencita. Ya a estas alturas, se podía apreciar con más claridad los distintos rasgos heredados de sus padres que resaltaban en su actuar. El rostro de apariencia infantil y de muñequita de porcelana con pecas, era lo que más parecido a su madre que obtenido, aparte de la delicadeza con la que actuaba y lo frágil que se veía en todo sentido. Por su parte, Ethan le había dado ese color castaño claro a su cabello y lo miel a sus ojos. Sin embargo, la personalidad amable, sencilla y respetuosa, la había heredado de ambos, por lo que no podían estar más orgullosos.

     

    En el cumpleaños número dieciséis de Kotee, tuvieron una pequeña celebración familiar en casa como lo hacían todos los años. Ella, pocos amigos tenía a causa de tener pocas instancias para socializar con los demás, aun que la mayoría de los habitantes del pueblo ya eran mayores de edad. Por esta misma razón, ambos padres deseaban que fuera a la academia, en donde, no tal solo haría más amigos, sino que también, la formarían para el futuro en donde ellos ya no podrían protegerla como lo hacían ahora. Hace pocos días ellos habían recibido una carta de familiares en Inglaterra, quienes habían comenzado a sufrir ataques de mortífagos, avisando de aquella situación para que tomaran las medidas correspondientes. Por lo que, mandar a su única hija a una de las academias más seguras del mundo, era algo que debían hacer rápido. Mas esta quedaba en Inglaterra y Kotee se rehusaba a dejarlos solos, incluso sin saber nada de lo que estaba pasando. Los padres, sintiendo una gran preocupación por el mañana, intentaban buscar otra forma de convencerla o tendrían que actuar con otro plan. Los estaban buscando y no tardarían mucho en dar con ellos.

     

    Pasaron semanas y por suerte, nada había ocurrido aún. Kotee, aún ajena a todos los problemas que cargaban sus padres, había decidido por fin hacerles caso e ir a la academia a la que tanto le habían rogado que fuera. Sentía que si era algo que ellos querían tanto, sería una forma de retribuirles todo el amor que le habían entregado. Decidida, mandó una lechuza con el formulario de inscripción antes de decírselo a su familia. Sabía que se alegrarían mucho por ello y más confiados estarían si les dijera que ya estaba inscrita. Al recibir una respuesta de aceptación, no esperó más y corrió a contarles con emoción.

     

    - Madre, ¿Dónde está mi padre? –inquirió a su madre llegando junto a ella. Cyrine se encontraba lavando los platos de la cena junto a Ditry quién los secaba y guardaba al instante. Ya era tarde y a causa de la poca iluminación, costaba un tanto ver de buena manera.

     

    Acercándose al interruptor, encendió las luces de la cocina esperando la respuesta de su madre. Quería darles la noticia a ambos en el mismo momento y ver sus caras de emoción al enterarse. Entre tantas ansias, no podía aguantar hasta aquel momento.

     

    - Cariño, creo que salió al jardín a solucionar el “problema” con la lechucería-respondió no tan segura –Pero está en el jardín, ¿por qué preguntas? –cuestionó pasándole el último plato a Ditry para que hiciera su parte. Cerró el grifo y se giró a verme de frente.

     

    - Les tengo una noticia que les gustará mucho, pero los necesito a ambos presentes –respondió la castaña sonriendo.

     

    La lechucería hace mucho que no se limpiaba y eso siempre era tomado en la familia Ackerley como un “problema” ya que a nadie le gustaba ir a asearlo, ni a Ditry. La castaña miró por la ventana hacia donde se suponía que estaría su padre, pero no vio luz ni ningún indicio de que alguien anduviera por esos lados. Tan raro le resultó aquello, que su corazón comenzó a palpitar como nunca antes. Era más que un sentimiento de confusión, sintió miedo ante tanta oscuridad asomándose por su ventana. Un fuerte viento comenzó a soplar queriendo echar abajo la casa mientras que ella no apartaba la vista intentando visualizar algo que le dijera el paradero de su padre.

     

    - Kotee, ¿te ocurre algo preciosa? –le preguntó Cyrine poniéndole con preocupación una mano sobre el hombro. De un segundo al otro, el rostro de felicidad de su hija, había dado lugar a uno de temor.

     

    Sin palabra alguna, la primogénita corrió hacia la oscuridad del salón principal dispuesta a ir en busca de Ethan, su padre. Lo necesitaba para hacerlo feliz y sentía que estaría todo mejor teniéndolo en casa junto a ellas. Mas al cruzar la mitad del salón, las puertas se abrieron dando paso a una fuerte ventisca que azotó las puertas, dejando entrar una alta figura que se dirigió despavorida hacia Kotee quién abrazó a su padre sintiendo como temblaba.

     

    -¡Ethan!

    –gritó desgarradoramente desde la cocina Cyrine.

     

    Tomándose de la mano, ambos se dirigieron para atender a su madre. Al llegar, vieron con horror como el jardín delantero se incendiaba entre sombras y risas ahogadas a causa del ruido. La chica miraba con temor lo que estaba ocurriendo e interrumpiendo el silencio, miró el rostro tenso de su padre y el humedecido por las lágrimas de su madre.

     

    - ¿Qué… qué está ocurriendo? ¡Mamá, hay que hacer algo! –la chica intentó correr y así detener la propagación del fuego. Mas su movimiento hizo recapacitar a sus padres quienes la tomaron y sacaron por la puerta trasera de la casa.

     

    Ditry había desaparecido y ambos se abrazaban a su hija deteniendo sus impulsos, a la vez, llevándola hacia uno de los bosques que rodeaban la casa.

     

    - Quédense aquí –dijo Ethan volteándose a su familia- Iré a ver si logro rescatar lo necesario para irnos de aquí.

    - Pero Ethan... –paró Cyrine a su marido con lágrimas en su rostro.

    - Cariño, tú sabías que esto pasaría. No hay que perder más tiempo. Escóndanse, vendré luego.

     

    Sin decir más, corrió hacía la casa hasta que se perdió para su hija. Kotee estaba confundida respecto a lo que estaba ocurriendo y el hecho de que su padre las dejara solas, provocó que la desesperación llegara a ella bruscamente haciéndola derramar continuas lágrimas llamando la atención de su madre.

     

    -Hija, no llores todo estará bien… ya verás –la consolaba abrazándola. A pesar de lo que salía de su boca, no creía en ese posible futuro. Esto tenía que terminar ahora y sólo había una forma.

     

    Ante esta idea, el rostro de la mujer se desfiguró dolorosamente sobre el hombro de su hija sin evitar que su pequeña escuchara su ahogado llanto.

     

    -Sé que algo anda mal… dímelo, por favor… -le suplicó la ojimiel mirando a los azules ojos de su madre.

    Sin embargo, antes de que ella pudiera contestarle, unas agresivas risas se hicieron escuchar. Al mirar, unas rápidas sombras comenzaron a rodear la casa por las alturas mandando verdes rayos que provocaron diversas explosiones en la casa ante los llorosos ojos de su familia. Al instante, Ditry apareció con sus grandes ojos atestados de lágrimas.

     

    - El señor… mi amo… -divagaba con voz quebrada antes de largarse a llorar.

    - Mamá… ¡Mamá! –gritó llorando- Mi papá, mi papá… -murmuraba perdida cayendo al suelo.

    - Ditry… ya sabes que hacer –habló con tono serio la mujer de cabellera negra. Tenían muy claro que esto pasaría y habían elaborado un plan en el que la última opción era salir con vida.

    - Yo iba a ir a la academia… iba a ir y los habría hecho feliz –decía como pensando en voz alta la joven sobre las hojas secas en el suelo.

     

    Lo que estaba ocurriendo tenía a Kotee en un estado emocional difícil, su padre acababa de ser atacado y según la reacción de Ditry, asesinado. Como pudo, miró a su madre quien se agachó a su altura.

     

    - Ya nos haces felices querida y ahora aún más –explicó sonriendo, pero de un momento a otro, su tristeza volvió- Cuídate mucho, linda-le pidió acariciándola y besándole la frente antes de pararse, sacar su varita y salir corriendo en la misma dirección que su padre había tomado hace unos minutos.

    -¡No! No, no… -exclamó corriendo tras ella entre tropiezos -¡Mamá!

    –gritó desgarradoramente cuando ya no la vio más.

     

    Pronto, un grito agudo de profundo dolor, se escuchó dejando a Kotee estupefacta con lágrimas en los ojos. Risas malvadas provocaban más y más explosiones en lo que era su hogar. Sacó su varita y sin esperar nada, corrió hacia la casa en llamas, pero siendo alcanzada por su elfo, ambos se trasladaron hasta la total oscuridad de un prado frente a un gran castillo. Confundida, la chica miró a todos lados en busca del pueblo en el que vivió durante toda su vida, pero nada le resultaba conocido.

     

    - ¡Ditry! ¿Dónde me has traído? ¡Tengo que volver! –le pedía caminando de un lado a otro con claro enfado.

    - Ditry lo siente, pero no puede hacerlo. Sus padres me dijeron que…

    - ¡¿Qué?! ¡Mis padres están en peligro! ¡Entiéndeme, necesito volver! Quiero volver con ellos… -terminó quebrándose para volver a caer llorando desconsoladamente.

    - Vamos mi señorita, tengo órdenes de presentarle a alguien…

     

    Tomó del brazo de la acabada joven y la llevó hasta el castillo. Antes de que pudiera tocar, la puerta se abrió dejando ver a una chica joven de tez blanca, ojos marrones y cabello negro liso. Su expresión parecía fría pero de un momento a otro sonrió como queriendo consolar.

     

    - Vaya, no creí que ocurriera tan pronto –dijo con dejo de tristeza.

    - ¿A qué se refiere? Ditry, no entiendo nada. Quiero ir con mis padres… por favor –le suplicó cansada.

    - Kotee, entra… -le dijo la chica frente a ella.

    -¿Cómo sabes mi nombre? ¿Te conozco? –inquirió la desconsolada joven con lágrimas en las mejillas, mientras entraba a la gran y oscura estancia acompañada de su elfo.

    - Debí suponer que no me recordarías. Soy tu prima. Fui adoptada por Lucien y Amelie Poulain, creo que nos habíamos visto en algunas reuniones familiares hace mucho.

    - Puede ser… -respondió incómoda Kotee. La situación la tenía desconectada de todo. No podía dejar de pensar en sus padres.

    - Mejor llévala a descansar Ditry, tengo su cuarto listo desde hace mucho.

     

    Al otro día llegó una lechuza avisando la muerte de sus padres a causa de un ataque mortífago. Para Kotee saber esta noticia, la mantuvo por mucho completamente deprimida. Lo único que anhelaba en esos momentos era los recuerdos que en esa casa, ahora destruida, había dejado atrás. Pasaron días y el asunto de su custodia se vino encima. Sin embargo no fue algo difícil, Alicia le había tomado un cariño especial a aquella chica, por lo que no dudó en tomarla como su hija adoptiva y dejarla viviendo con ella en su castillo ubicado en Ottery, Inglaterra.

     

    Desde ese momento, Kotee pasó a tener el apellido Báthory en su nombre, pero sin sacar de su lugar el de sus difuntos padres, quienes fueron sepultados en el cementerio del pueblo francés en donde vivían. Y para recordarlos, instalaron en el jardín frontal de la casa, que se remodeló luego de un tiempo, una gran roca en la cual se tallaron sus nombres. Ahora, todos los años Kotee y su elfo, van a dejarles flores al cementerio y pasan por la casa que, por consecuencia, le pertenece a la joven.

     

    Durante el año siguiente, la nueva Báthory, entró a la academia perteneciendo a la casa de fuego, los Dragones de Lancashire. Allí, descubrió sus claras aspiraciones a la Orden del Fénix, por lo que se inscribió en ella tomando el puesto de aspirante hasta que terminara la academia. Más adelante, se puso a trabajar como aprendiz en el departamento de aurores, recibiendo las denuncias sobre utilización de artes oscuras, a la espera de algún día poder trabajar allí oficialmente.

     

    ~ Pertenencias:

     

    Objeto Mágico Legendario:

    Objetos Mágicos:

     

    Objeto 1: Varita hecha a partir de una pluma de fénix, madera de acebo. Arriba de 30 cm de longitud muy poderosa, excelente para hechizos complicados, de defensa personal y de ataque.

    Clasificación: AA

    Puntos de poder: 20

     

    Mascotas y Criaturas:

    Criatura 1: --

    Clasificación: --

    Puntos de poder: --

     

    Criaturas en la Reserva:

    Criatura 1: --

    Clasificación: --

    Puntos de poder:

     

    Elfos:

    Ditry: Criatura de ojos grandes y amarillos, los cuáles ocupan la gran mayoría de su pequeña cabeza. Posee orejas grandes que terminan en punta, cayéndole ligeramente por sobre sus ojos de vez en cuando. Su nariz es puntiaguda, pero de un tamaño normal la cual se asoma entre ambos desproporcionados ojos con respecto al resto del cuerpo. Es de un pequeño tamaño, delgadas extremidades y largas manos. La mayoría de tiempo viste unas largas prendas en perfecto estado, prácticamente nuevas de diferentes diseños y telas. Siempre había sido considerado como alguien de la familia, por lo que, siempre había vestido ropa decente.

     

    ~ Licencias, Tasas, Registros:

     

    Licencia de Aparición: Si

    Licencia de Vuelo de Escoba:--

    Registro de XXX:--

     

    ~ Otros Datos:

     

    Otros datos:

    Al su madre ser Poulain, toma el apellido de su padre Ackerley. No le gusta que se equivoquen en cuanto a su nombre.

    Su tío era Lucien Poulain. Hermano de Cyrine Poulain.

    Su elfo Ditry, es el único ser vivo que ha vivido con ella durante toda su vida, por ello lo quiere como su mejor amigo.

    Habla francés fluidamente gracias a los años que vivió allí, mas ahora procura hablar en inglés sin problema alguno, sus padres, gracias a sus viajes a Inglaterra, le enseñaron mientras pudieron hacerlo.

    Le gusta tocar el piano.

    Sus colores favoritos son el azul, verde y naranjo.

    Escucha cualquier tipo de música, desde clásica hasta rock.

    Le encanta la naturaleza a excepción de algunos insectos. Sin embargo, a veces se arma de valor ante ellos.

    El mejor regalo que le pueden hacer sería algo que le demostrara el cariño que sienten por ella.

    No le importa mucho lo material.

    Ama el helado por sobre toda las comidas y cosas materiales.

     

    Cronología de Cargos:

     

    Premios y Reconocimientos:

     

    ~ Links de Interés Referentes al Personaje:

     

    Link a Bóveda Personal: B:90605

    Link a Bóveda Trastera: --

    Link a Bóveda de Negocio: --

    Link a Bóveda Familia 1: Bóveda Familia Poulain

    Link a Bóveda Familia 2: Bóveda Familia Báthory

     

    Aquí los códigos ^_^ ahora si creo que está todo bien :blush:

     

    [center][img=http://i1213.photobucket.com/albums/cc480/playthatsong/kabID.png][/center]
    
    [color="#FFA500"][u][b]~ Datos Personales:[/b][/u][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Nombre del Personaje:[/b][/color] Kotee Ackerley  Báthory 
    [color="#F5DEB3"][b]Sexo:[/b][/color] Femenino
    [color="#F5DEB3"][b]Edad:[/b][/color] Adolescente de  17 años
    [color="#F5DEB3"][b]Nacionalidad:[/b][/color] Francesa
    [color="#F5DEB3"][b]Familia(s):[/b][/color] 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color]  Familia Poulain [sanguínea]
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color]  Familia Báthory [adoptiva]
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Sanguíneo:[/b][/color] Ethan Ackerley-- Cyrine Poulain--
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Adoptivos:[/b][/color] Alicia S. Báthory
    [color="#F5DEB3"][b]Trabajo:[/b][/color]  Aprendiz en la Oficina para la Recepción de Denuncias sobre la Utilización de Artes Oscuras
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Poderes Mágicos:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Rango Social:[/b][/color] Aprendiz 
    [color="#F5DEB3"][b]Bando:[/b][/color] Neutral
    [b][color="#F5DEB3"]Rango dentro del Bando:[/color][/b] --
    [color="#F5DEB3"][b]Nivel de Poder Mágico:[/b][/color] 1
    [color="#F5DEB3"][b]Puntos de poder en objetos:[/b][/color]
    
    [quote][color="#F5DEB3"][b]Hechizos adicionales:[/b][/color][/quote]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Puntos de poder en criaturas:[/b][/color]
    
    [quote][color="#F5DEB3"][b]Criaturas controlables en asaltos y duelos:[/b][/color][/quote]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Habilidades Mágicas:[/b][/color] --
    [color="#F5DEB3"][b]Conocimientos Especiales:[/b][/color] --
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Perfil del Personaje:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Raza:[/b][/color] Humano
    [color="#F5DEB3"][b]Aspecto Físico:[/b][/color] Kotee al poseer una piel tersa y extremadamente blanca ha sido comparada con vampiros por mucho tiempo tomando en cuenta su descendencia. Pero a causa de sus largas extremidades, la estatura de 1.69 y poca gracia al moverse, la posibilidad de ser una criatura tan ágil como esa queda completamente descartada. Sus brazos y piernas son completamente blancas, pero no por eso feas, están bien formadas y aunque a ella no le importe extremadamente su aspecto físico, su cuerpo está en todos los sentidos totalmente saludable y bien proporcionalmente.  La chica es una adolescente completamente común y poco llamativa, su cabello castaño claro es ligeramente ondulado y lo bastante largo como para casi alcanzar sus codos con las puntas del pelo. Su rostro es como el de una niña que causa ternura y simpatía teniendo unos penetrantes ojos color miel, enmarcados en largas pestañas bajo cejas delineadas que apenas se pueden ver bajo el flequillo que cae livianamente sobre su frente hasta sus parpados. Su nariz recta termina redonda dando un lindo perfil entre unos poco notables pómulos que la mayoría del tiempo lucen un color rosado pálido. El rostro de la castaña es algo alargado y termina en un mentón pequeño ubicado bajo su boca de labios delgados y rosados. 
    
    [color="#F5DEB3"][b]Cualidades Psicológicas:[/b][/color] Kotee debe reconocer que es una persona sensible a todo y a todos, mas no es pura ternura en todo momento, puede tener una reacción fuerte en situaciones que a ella no le parezcan, no dudará en dar a conocer su opinión respecto a cualquier tema, a excepción que sea mejor guardar silencio y así no empeorar las cosas. Tiene el hábito de siempre querer ayudar a los demás sea cual sea el problema o favor, no le gusta defraudar a nadie respecto a esto o cualquier otra cosa, por lo que procura ser responsable. Le desagrada ver a alguien mal o triste, así que si ella puede ayudarle a sonreír lo más seguro es que lo hará o por lo menos lo intentará. Suele ser juguetona tal y como una niña, pero muy madura al pensar y actuar a pesar de su edad. Ama leer y saber sobre todo, por lo tanto un hobbie que nunca va a dejar va a ser el de leer. Por esto, es muy inteligente y capaz de todo, pero siempre tomando en cuenta sus principios y valores que sus padres le inculcaron.
    
    [color="#F5DEB3"][b]Historia:[/b][/color] Kotee Ackerley Poulain nació un 13 de Junio de 1994 en el pueblo francés Autoire, donde sus padres Ethan y Cyrine se habían instalado hace 1 año luego de contraer matrimonio. Siendo ambos franceses, la mudanza en el mismo país no fue complicada, sin embargo, se aseguraban de no dejar rastro de ellos, puesto que eran seguidos por servidores del mago oscuro. Creyendo en su total protección, armaron su hogar en aquel colorido y pequeño pueblo de Francia dando el primer paso teniendo una bebé. 
    
    Luego, varios años pasaron sin tener preocupación alguna. El hombre de la casa ya tenía un buen trabajo en el mundo mágico francés, y a pesar de que no era un dineral lo que ganaba, alcanzaba perfectamente para su diario vivir. Además, Ditry, el elfo de la familia, era de gran ayuda en todo. La criatura no se había despegado de ellos desde que la misma niña lo vio deambulando por los bosques cercanos a la casa, en una de las tantas caminatas que daba la familia por los alrededores. 
    
    La alegría y la sencillez de los Ackerley era casi imposible de creer, todo estaba saliendo perfectamente y nada se había sabido de mortífagos durante un buen y largo tiempo. Algo que tenía a la pareja muy segura de haber dejado atrás lo malo del pasado. Agradecidos de lo que tenían hasta el momento, pasaron más y más años, en los que la niña creció convirtiéndose en una dulce jovencita. Ya a estas alturas, se podía apreciar con más claridad los distintos rasgos heredados de sus padres que resaltaban en su actuar. El rostro de apariencia infantil y de muñequita de porcelana con pecas, era lo que más parecido a su madre que obtenido, aparte de la delicadeza con la que actuaba y lo frágil que se veía en todo sentido. Por su parte, Ethan le había dado ese color castaño claro a su cabello y lo miel a sus ojos. Sin embargo, la personalidad amable, sencilla y respetuosa, la había heredado de ambos, por lo que no podían estar más orgullosos. 
    
    En el cumpleaños número dieciséis de Kotee,  tuvieron una pequeña celebración familiar en casa como lo hacían todos los años. Ella, pocos amigos tenía a causa de tener pocas instancias para socializar con los demás, aun que la mayoría de los habitantes del pueblo ya eran mayores de edad. Por esta misma razón, ambos padres deseaban que fuera a la academia, en donde, no tal solo haría más amigos, sino que también, la formarían para el futuro en donde ellos ya no podrían protegerla como lo hacían ahora. Hace pocos días ellos habían recibido una carta de familiares en Inglaterra, quienes habían comenzado a sufrir ataques de mortífagos, avisando de aquella situación para que tomaran las medidas correspondientes. Por lo que, mandar a su única hija a una de las academias más seguras del mundo, era algo que debían hacer rápido. Mas esta quedaba en Inglaterra y Kotee se rehusaba a dejarlos solos, incluso sin saber nada de lo que estaba pasando. Los padres, sintiendo una gran preocupación por el mañana, intentaban buscar otra forma de convencerla o tendrían que actuar con otro plan. Los estaban buscando y no tardarían mucho en dar con ellos. 
    
    Pasaron semanas y por suerte, nada había ocurrido aún. Kotee, aún ajena a todos los problemas que cargaban sus padres, había decidido por fin hacerles caso e ir a la academia a la que tanto le habían rogado que fuera. Sentía que si era algo que ellos querían tanto, sería una forma de retribuirles todo el amor que le habían entregado. Decidida, mandó una lechuza con el formulario de inscripción antes de decírselo a su familia. Sabía que se alegrarían mucho por ello y más confiados estarían si les dijera que ya estaba inscrita. Al recibir una respuesta de aceptación, no esperó más y corrió a contarles con emoción.
    
    - [i]Madre, ¿Dónde está mi padre?[/i] –inquirió a su madre llegando junto a ella. Cyrine se encontraba lavando los platos de la cena junto a Ditry quién los secaba y guardaba al instante. Ya era tarde y a causa de la poca iluminación, costaba un tanto ver de buena manera. 
    
    Acercándose al interruptor, encendió las luces de la cocina esperando la respuesta de su madre. Quería darles la noticia a ambos en el mismo momento y ver sus caras de emoción al enterarse. Entre tantas ansias, no podía aguantar hasta aquel momento.
    
    - [i]Cariño, creo que salió al jardín a solucionar el “problema” con la lechucería[/i]-respondió no tan segura –[i]Pero está en el jardín, ¿por qué preguntas?[/i] –cuestionó pasándole el último plato a Ditry para que hiciera su parte. Cerró el grifo y se giró a verme de frente.
    
    - [i]Les tengo una noticia que les gustará mucho, pero los necesito a ambos presentes[/i] –respondió la castaña sonriendo.
    
    La lechucería hace mucho que no se limpiaba y eso siempre era tomado en la familia Ackerley como un “problema” ya que a nadie le gustaba ir a asearlo, ni a Ditry. La castaña miró por la ventana hacia donde se suponía que estaría su padre, pero no vio luz ni ningún indicio de que alguien anduviera por esos lados. Tan raro le resultó aquello, que su corazón comenzó a palpitar como nunca antes. Era más que un sentimiento de confusión, sintió miedo ante tanta oscuridad asomándose por su ventana. Un fuerte viento comenzó a soplar queriendo echar abajo la casa mientras que ella no apartaba la vista intentando visualizar algo que le dijera el paradero de su padre.
    
    - [i]Kotee, ¿te ocurre algo preciosa? [/i]–le preguntó Cyrine poniéndole con preocupación una mano sobre el hombro. De un segundo al otro, el rostro de felicidad de su hija, había dado lugar a uno de temor.
    
    Sin palabra alguna, la primogénita corrió hacia la oscuridad del salón principal dispuesta a ir en busca de Ethan, su padre. Lo necesitaba para hacerlo feliz y sentía que estaría todo mejor teniéndolo en casa junto a ellas. Mas al cruzar la mitad del salón, las puertas se abrieron dando paso a una fuerte ventisca que azotó las puertas, dejando entrar una alta figura que se dirigió despavorida hacia Kotee quién abrazó a su padre sintiendo como temblaba. 
    
    -[i]¡Ethan![/i]
    –gritó desgarradoramente desde la cocina Cyrine.
    
    Tomándose de la mano, ambos se dirigieron para atender a su madre. Al llegar, vieron con horror como el jardín delantero se incendiaba entre sombras y risas ahogadas a causa del ruido. La chica miraba con temor lo que estaba ocurriendo e interrumpiendo el silencio, miró el rostro tenso de su padre y el humedecido por las lágrimas de su madre.
    
    - [i]¿Qué… qué está ocurriendo? ¡Mamá, hay que hacer algo![/i] –la chica intentó correr y así detener la propagación del fuego. Mas su movimiento hizo recapacitar a sus padres quienes la tomaron y sacaron por la puerta trasera de la casa. 
    
    Ditry había desaparecido y ambos se abrazaban a su hija deteniendo sus impulsos, a la vez, llevándola hacia uno de los bosques que rodeaban la casa.  
    
    - [i]Quédense aquí[/i] –dijo Ethan volteándose a su familia- [i]Iré a ver si logro rescatar lo necesario para irnos de aquí. [/i]
    - [i]Pero Ethan...[/i] –paró Cyrine a su marido con lágrimas en su rostro.
    - [i]Cariño, tú sabías que esto pasaría. No hay que perder más tiempo. Escóndanse, vendré luego. [/i]
    
    Sin decir más, corrió hacía la casa hasta que se perdió para su hija. Kotee estaba confundida respecto a lo que estaba ocurriendo y el hecho de que su padre las dejara solas, provocó que la desesperación llegara a ella bruscamente haciéndola derramar continuas lágrimas llamando la atención de su madre.
    
    -[i]Hija, no llores todo estará bien… ya verás[/i] –la consolaba abrazándola.  A pesar de lo que salía de su boca, no creía en ese posible futuro. Esto tenía que terminar ahora y sólo había una forma.
    
    Ante esta idea, el rostro de la mujer se desfiguró dolorosamente sobre el hombro de su hija sin evitar que su pequeña escuchara su ahogado llanto. 
    
    -[i]Sé que algo anda mal… dímelo, por favor… [/i]-le suplicó la ojimiel mirando a los azules ojos de su madre.
    Sin embargo, antes de que ella pudiera contestarle, unas agresivas risas se hicieron escuchar. Al mirar, unas rápidas sombras comenzaron a rodear la casa por las alturas mandando verdes rayos que provocaron diversas explosiones en la casa ante los llorosos ojos de su familia. Al instante, Ditry apareció con sus grandes ojos atestados de lágrimas. 
    
    - [i]El señor… mi amo… [/i]-divagaba con voz quebrada antes de largarse a llorar.
    - [i]Mamá… ¡Mamá![/i] –gritó llorando- [i]Mi papá, mi papá…[/i] -murmuraba perdida cayendo al suelo.
    - [i]Ditry… ya sabes que hacer[/i] –habló con tono serio la mujer de cabellera negra. Tenían muy claro que esto pasaría y habían elaborado un plan en el que la última opción era salir con vida.
    - [i]Yo iba a ir a la academia… iba a ir y los habría hecho feliz[/i] –decía como pensando en voz alta la joven sobre las hojas secas en el suelo.
    
    Lo que estaba ocurriendo tenía a Kotee en un estado emocional difícil, su padre acababa de ser atacado y según la reacción de Ditry, asesinado. Como pudo, miró a su madre quien se agachó a su altura.
    
    - [i]Ya nos haces felices querida y ahora aún más[/i] –explicó sonriendo, pero de un momento a otro, su tristeza volvió- [i]Cuídate mucho, linda[/i]-le pidió acariciándola y besándole la frente antes de pararse, sacar su varita y salir corriendo en la misma dirección que su padre había tomado hace unos minutos. 
    -[i]¡No! No, no…[/i] -exclamó corriendo tras ella entre tropiezos -[i]¡Mamá![/i]
    –gritó desgarradoramente cuando ya no la vio más.
    
    Pronto, un grito agudo de profundo dolor, se escuchó dejando a Kotee estupefacta con lágrimas en los ojos. Risas malvadas provocaban más y más explosiones en lo que era su hogar. Sacó su varita y sin esperar nada, corrió hacia la casa en llamas, pero siendo alcanzada por su elfo, ambos se trasladaron hasta la total oscuridad de un prado frente a un gran castillo. Confundida, la chica miró a todos lados en busca del pueblo en el que vivió durante toda su vida, pero nada le resultaba conocido. 
    
    - [i]¡Ditry! ¿Dónde me has traído? ¡Tengo que volver![/i] –le pedía caminando de un lado a otro con claro enfado.
    - [i]Ditry lo siente, pero no puede hacerlo. Sus padres me dijeron que…[/i]
    - [i]¡¿Qué?! ¡Mis padres están en peligro! ¡Entiéndeme, necesito volver! Quiero volver con ellos… [/i]-terminó quebrándose para volver a caer llorando desconsoladamente. 
    - [i]Vamos mi señorita, tengo órdenes de presentarle a alguien… [/i]
    
    Tomó del brazo de la acabada joven y la llevó hasta el castillo. Antes de que pudiera tocar, la puerta se abrió dejando ver a una chica joven  de tez blanca, ojos marrones y cabello negro liso. Su expresión parecía fría pero de un momento a otro sonrió como queriendo consolar.
    
    - [i]Vaya, no creí que ocurriera tan pronto[/i] –dijo con dejo de tristeza.
    - [i]¿A qué se refiere? Ditry, no entiendo nada. Quiero ir con mis padres… por favor[/i] –le suplicó cansada.
    - [i]Kotee, entra…[/i] -le dijo la chica frente a ella.
    -[i]¿Cómo sabes mi nombre? ¿Te conozco? [/i]–inquirió la desconsolada joven con lágrimas en las mejillas, mientras entraba a la gran y oscura estancia acompañada de su elfo.
    - [i]Debí suponer que no me recordarías. Soy tu prima. Fui adoptada por Lucien y Amelie Poulain, creo que nos habíamos visto en algunas reuniones familiares hace mucho.[/i]
    - [i]Puede ser… [/i]-respondió incómoda Kotee. La situación la tenía desconectada de todo. No podía dejar de pensar en sus padres. 
    - [i]Mejor llévala a descansar Ditry, tengo su cuarto listo desde hace mucho.[/i]
    
    Al otro día llegó una lechuza avisando la muerte de sus padres a causa de un ataque mortífago. Para Kotee saber esta noticia, la mantuvo por mucho completamente deprimida. Lo único que anhelaba en esos momentos era los recuerdos que en esa casa, ahora destruida, había dejado atrás. Pasaron días y el asunto de su custodia se vino encima. Sin embargo no fue algo difícil, Alicia le había tomado un cariño especial a aquella chica, por lo que no dudó en tomarla como su hija adoptiva y dejarla viviendo con ella en su castillo ubicado en Ottery, Inglaterra.
    
    Desde ese momento, Kotee pasó a tener el apellido Báthory en su nombre, pero sin sacar de su lugar el de sus difuntos padres, quienes fueron sepultados en el cementerio del pueblo francés en donde vivían. Y para recordarlos, instalaron en el jardín frontal de la casa, que se remodeló luego de un tiempo, una gran roca en la cual se tallaron sus nombres. Ahora, todos los años Kotee y su elfo, van a dejarles flores al cementerio y pasan por la casa que, por consecuencia, le pertenece a la joven.
    
    Durante el año siguiente, la nueva Báthory, entró a la academia perteneciendo a la casa de fuego, los Dragones de Lancashire. Allí, descubrió sus claras aspiraciones a la Orden del Fénix, por lo que se inscribió en ella tomando el puesto de aspirante hasta que terminara la academia. Más adelante, se puso a trabajar como aprendiz en el departamento de aurores, recibiendo las denuncias sobre utilización de artes oscuras, a la espera de algún día poder trabajar allí oficialmente.
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Pertenencias:[/b][/u][/color]
    
    [b][color="#F5DEB3"]Objeto Mágico Legendario:[/color][/b] –
    [color="#F5DEB3"][b]Objetos Mágicos:[/b][/color]
    
    [b]Objeto 1:[/b] Varita hecha a partir de una pluma de fénix, madera de acebo. Arriba de 30 cm de longitud muy poderosa, excelente para hechizos complicados, de defensa personal y de ataque.
    [b]Clasificación:[/b] AA
    [b]Puntos de poder:[/b] 20
    
    [color="#F5DEB3"][b]Mascotas y Criaturas:[/b][/color]
    [b]Criatura 1:[/b] --
    [b]Clasificación:[/b] --
    [b]Puntos de poder:[/b] --
    
    [color="#F5DEB3"][b]Criaturas en la Reserva:[/b][/color]
    [b]Criatura 1:[/b] --
    [b]Clasificación:[/b] --
    [b]Puntos de poder:[/b] –
    
    [color="#F5DEB3"][b]Elfos: [/b][/color]
    [color="#F5DEB3"][b]• [/color]   Ditry:[/b] Criatura de ojos grandes y amarillos, los cuáles ocupan la gran mayoría de su pequeña cabeza. Posee orejas grandes que terminan en punta, cayéndole ligeramente por sobre sus ojos de vez en cuando. Su nariz es puntiaguda, pero de un tamaño normal la cual se asoma entre ambos desproporcionados ojos con respecto al resto del cuerpo. Es de un pequeño tamaño, delgadas extremidades y largas manos. La mayoría de tiempo viste unas largas prendas en perfecto estado, prácticamente nuevas de diferentes diseños y telas. Siempre había sido considerado como alguien de la familia, por lo que, siempre había vestido ropa decente. 
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Licencias, Tasas, Registros:[/u][/b][/color]
    
    [b][color="#F5DEB3"]Licencia de Aparición:[/color][/b] Si
    [color="#F5DEB3"][b]Licencia de Vuelo de Escoba:[/b][/color]--
    [color="#F5DEB3"][b]Registro de XXX:[/b][/color]--
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Otros Datos:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Otros datos:[/b][/color]
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color]  Al su madre ser Poulain, toma el apellido de su padre Ackerley. No le gusta que se equivoquen en cuanto a su nombre. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Su tío era Lucien Poulain. Hermano de Cyrine Poulain.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Su elfo Ditry, es el único ser vivo que ha vivido con ella durante toda su vida, por ello lo quiere como su mejor amigo.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Habla francés fluidamente gracias a los años que vivió allí, mas ahora procura hablar en inglés sin problema alguno, sus padres, gracias a sus viajes a Inglaterra, le enseñaron mientras pudieron hacerlo. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Le gusta tocar el piano. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Sus colores favoritos son el azul, verde y naranjo.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Escucha cualquier tipo de música, desde clásica hasta rock. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Le encanta la naturaleza a excepción de algunos insectos.  Sin embargo, a veces se arma de valor ante ellos.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] El mejor regalo que le pueden hacer sería algo que le demostrara el cariño que sienten por ella.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] No le importa mucho lo material.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Ama el helado por sobre toda las comidas y cosas materiales. 
    
    [color="#F5DEB3"][b]Cronología de Cargos:[/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Premios y Reconocimientos:[/b][/color]
    
    [color="#FFA500"][b][u]~ Links de Interés Referentes al Personaje:[/u][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Link a Bóveda Personal:[/b][/color] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90605"]B:90605[/url]
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda Trastera:[/color][/b] --
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda de Negocio:[/color][/b] --
    [color="#F5DEB3"][b]Link a Bóveda Familia 1:[/b][/color] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90399"]Bóveda Familia Poulain[/url] 
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda Familia 2:[/color][/b] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90196"]Bóveda Familia Báthory[/url]

     

  21. Hola! Vengo con unos pequeños grandes cambios (?) xD Espero que no sea mucha molestia :unsure: Bueno, les dejaré toda ficha con códigos, son muchos cambios .__.

     

    [center][img=http://i1213.photobucket.com/albums/cc480/playthatsong/kabID.png][/center]
    
    [color="#F5DEB3"][b]Nombre del Personaje:[/b][/color] Kotee Ackerley  Báthory 
    [b][color="#F5DEB3"]Rango Social:[/color][/b] Aprendiz 
    [color="#F5DEB3"][b]Sexo:[/b][/color] Femenino 
    [color="#F5DEB3"][b]Edad:[/b][/color] Adolescente de  17 años
    [color="#F5DEB3"][b]Nacionalidad:[/b][/color] Francesa
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Sanguíneo:[/b][/color] Ethan Ackerley** Cyrine Poulain**
    [color="#F5DEB3"][b]Familia Sanguínea:[/b][/color] Poulain 
    [b][color="#F5DEB3"]Patriarca/Matriarca:[/color][/b] -
    [color="#F5DEB3"][b]Padre(s) Adoptivos:[/b][/color] Alicia S. Báthory
    [color="#F5DEB3"][b]Familia Adoptiva:[/b][/color] Báthory
    [color="#F5DEB3"][b]Raza:[/b][/color] Humano
    [color="#F5DEB3"][b]Trabajo:[/b][/color] Aprendiz en la Oficina para la Recepción de Denuncias sobre la Utilización de Artes Oscuras
    [color="#F5DEB3"][b]Bando:[/b][/color] Neutral
    [b][color="#F5DEB3"]Rango dentro del Bando:[/color][/b] -
    [color="#F5DEB3"][b]Habilidades Mágicas:[/b][/color] -
    [color="#F5DEB3"][b]Conocimientos Especiales:[/b][/color] -
    [b][color="#F5DEB3"]Objeto Mágico Legendario:[/color][/b] -
    [color="#F5DEB3"][b]Objetos Mágicos:[/b][/color]Varita hecha a partir de una pluma de fénix, madera de acebo. Arriba de 30 cm de longitud muy poderosa, excelente para hechizos complicados, de defensa personal y de ataque.
    
    
    [center][img=http://www.harrylatino.org/style_images/fields/MM.png]
    [size=3][b]Objetos Mágicos: [/b]
    Certificados por el Ministerio de Magia.[/size][/center]
    
    [b]Objeto:[/b] Varita mágica.
    [b]Clasificación:[/b] AA
    [b]Puntos:[/b] 20
    [b]Total de puntos:[/b] 20
    
    [b][color="#F5DEB3"]Licencia de Aparición:[/color][/b] Si
    [color="#F5DEB3"][b]Licencia de Vuelo de Escoba:[/b][/color] No
    [color="#F5DEB3"][b]Elfos: [/b][/color]
    Ditry
    
    [i][color="#FFA500"][b]~ Aspecto Físico:[/b][/color][/i]
    
    Kotee al poseer una piel tersa y extremadamente blanca ha sido comparada con vampiros por mucho tiempo tomando en cuenta su descendencia. Pero a causa de sus largas extremidades, la estatura de 1.69 y poca gracia al moverse, la posibilidad de ser una criatura tan ágil como esa queda completamente descartada. Sus brazos y piernas son completamente blancas, pero no por eso feas, están bien formadas y aunque a ella no le importe extremadamente su aspecto físico, su cuerpo está en todos los sentidos totalmente saludable y bien proporcionalmente.  La chica es una adolescente completamente común y poco llamativa, su cabello castaño claro es ligeramente ondulado y lo bastante largo como para casi alcanzar sus codos con las puntas del pelo. Su rostro es como el de una niña que causa ternura y simpatía teniendo unos penetrantes ojos color miel, enmarcados en largas pestañas bajo cejas delineadas que apenas se pueden ver bajo el flequillo que cae livianamente sobre su frente hasta sus parpados. Su nariz recta termina redonda dando un lindo perfil entre unos poco notables pómulos que la mayoría del tiempo lucen un color rosado pálido. El rostro de la castaña es algo alargado y termina en un mentón pequeño ubicado bajo su boca de labios delgados y rosados. 
    
    [color="#FFA500"][i][b]~ Cualidades Psicológicas:[/b][/i][/color]
    
    Kotee debe reconocer que es una persona sensible a todo y a todos, mas no es pura ternura en todo momento, puede tener una reacción fuerte en situaciones que a ella no le parezcan, no dudará en dar a conocer su opinión respecto a cualquier tema, a excepción que sea mejor guardar silencio y así no empeorar las cosas. Tiene el hábito de siempre querer ayudar a los demás sea cual sea el problema o favor, no le gusta defraudar a nadie respecto a esto o cualquier otra cosa, por lo que procura ser responsable. Le desagrada ver a alguien mal o triste, así que si ella puede ayudarle a sonreír lo más seguro es que lo hará o por lo menos lo intentará. Suele ser juguetona tal y como una niña, pero muy madura al pensar y actuar a pesar de su edad. Ama leer y saber sobre todo, por lo tanto un hobbie que nunca va a dejar va a ser el de leer. Por esto, es muy inteligente y capaz de todo, pero siempre tomando en cuenta sus principios y valores que sus padres le inculcaron.
    
    [color="#FFA500"][i][b]~ Historia de Personaje:[/b][/i][/color] 
    
    Kotee Ackerley Poulain nació un 13 de Junio de 1994 en el pueblo francés Autoire, donde sus padres Ethan y Cyrine se habían instalado hace 1 año luego de contraer matrimonio. Siendo ambos franceses, la mudanza en el mismo país no fue complicada, sin embargo, se aseguraban de no dejar rastro de ellos, puesto que eran seguidos por servidores del mago oscuro. Creyendo en su total protección, armaron su hogar en aquel colorido y pequeño pueblo de Francia dando el primer paso teniendo una bebé. 
    
    Luego, varios años pasaron sin tener preocupación alguna. El hombre de la casa ya tenía un buen trabajo en el mundo mágico francés, y a pesar de que no era un dineral lo que ganaba, alcanzaba perfectamente para su diario vivir. Además, Ditry, el elfo de la familia, era de gran ayuda en todo. La criatura no se había despegado de ellos desde que la misma niña lo vio deambulando por los bosques cercanos a la casa, en una de las tantas caminatas que daba la familia por los alrededores. 
    
    La alegría y la sencillez de los Ackerley era casi imposible de creer, todo estaba saliendo perfectamente y nada se había sabido de mortífagos durante un buen y largo tiempo. Algo que tenía a la pareja muy segura de haber dejado atrás lo malo del pasado. Agradecidos de lo que tenían hasta el momento, pasaron más y más años, en los que la niña creció convirtiéndose en una dulce jovencita. Ya a estas alturas, se podía apreciar con más claridad los distintos rasgos heredados de sus padres que resaltaban en su actuar. El rostro de apariencia infantil y de muñequita de porcelana con pecas, era lo que más parecido a su madre que obtenido, aparte de la delicadeza con la que actuaba y lo frágil que se veía en todo sentido. Por su parte, Ethan le había dado ese color castaño claro a su cabello y lo miel a sus ojos. Sin embargo, la personalidad amable, sencilla y respetuosa, la había heredado de ambos, por lo que no podían estar más orgullosos. 
    
    En el cumpleaños número dieciséis de Kotee,  tuvieron una pequeña celebración familiar en casa como lo hacían todos los años. Ella, pocos amigos tenía a causa de tener pocas instancias para socializar con los demás, aun que la mayoría de los habitantes del pueblo ya eran mayores de edad. Por esta misma razón, ambos padres deseaban que fuera a la academia, en donde, no tal solo haría más amigos, sino que también, la formarían para el futuro en donde ellos ya no podrían protegerla como lo hacían ahora. Hace pocos días ellos habían recibido una carta de familiares en Inglaterra, quienes habían comenzado a sufrir ataques de mortífagos, avisando de aquella situación para que tomaran las medidas correspondientes. Por lo que, mandar a su única hija a una de las academias más seguras del mundo, era algo que debían hacer rápido. Mas esta quedaba en Inglaterra y Kotee se rehusaba a dejarlos solos, incluso sin saber nada de lo que estaba pasando. Los padres, sintiendo una gran preocupación por el mañana, intentaban buscar otra forma de convencerla o tendrían que actuar con otro plan. Los estaban buscando y no tardarían mucho en dar con ellos. 
    
    Pasaron semanas y por suerte, nada había ocurrido aún. Kotee, aún ajena a todos los problemas que cargaban sus padres, había decidido por fin hacerles caso e ir a la academia a la que tanto le habían rogado que fuera. Sentía que si era algo que ellos querían tanto, sería una forma de retribuirles todo el amor que le habían entregado. Decidida, mandó una lechuza con el formulario de inscripción antes de decírselo a su familia. Sabía que se alegrarían mucho por ello y más confiados estarían si les dijera que ya estaba inscrita. Al recibir una respuesta de aceptación, no esperó más y corrió a contarles con emoción.
    
    - [i]Madre, ¿Dónde está mi padre?[/i] –inquirió a su madre llegando junto a ella. Cyrine se encontraba lavando los platos de la cena junto a Ditry quién los secaba y guardaba al instante. Ya era tarde y a causa de la poca iluminación, costaba un tanto ver de buena manera. 
    
    Acercándose al interruptor, encendió las luces de la cocina esperando la respuesta de su madre. Quería darles la noticia a ambos en el mismo momento y ver sus caras de emoción al enterarse. Entre tantas ansias, no podía aguantar hasta aquel momento.
    
    - [i]Cariño, creo que salió al jardín a solucionar el “problema” con la lechucería[/i]-respondió no tan segura –[i]Pero está en el jardín, ¿por qué preguntas?[/i] –cuestionó pasándole el último plato a Ditry para que hiciera su parte. Cerró el grifo y se giró a verme de frente.
    
    - [i]Les tengo una noticia que les gustará mucho, pero los necesito a ambos presentes[/i] –respondió la castaña sonriendo.
    
    La lechucería hace mucho que no se limpiaba y eso siempre era tomado en la familia Ackerley como un “problema” ya que a nadie le gustaba ir a asearlo, ni a Ditry. La castaña miró por la ventana hacia donde se suponía que estaría su padre, pero no vio luz ni ningún indicio de que alguien anduviera por esos lados. Tan raro le resultó aquello, que su corazón comenzó a palpitar como nunca antes. Era más que un sentimiento de confusión, sintió miedo ante tanta oscuridad asomándose por su ventana. Un fuerte viento comenzó a soplar queriendo echar abajo la casa mientras que ella no apartaba la vista intentando visualizar algo que le dijera el paradero de su padre.
    
    - [i]Kotee, ¿te ocurre algo preciosa? [/i]–le preguntó Cyrine poniéndole con preocupación una mano sobre el hombro. De un segundo al otro, el rostro de felicidad de su hija, había dado lugar a uno de temor.
    
    Sin palabra alguna, la primogénita corrió hacia la oscuridad del salón principal dispuesta a ir en busca de Ethan, su padre. Lo necesitaba para hacerlo feliz y sentía que estaría todo mejor teniéndolo en casa junto a ellas. Mas al cruzar la mitad del salón, las puertas se abrieron dando paso a una fuerte ventisca que azotó las puertas, dejando entrar una alta figura que se dirigió despavorida hacia Kotee quién abrazó a su padre sintiendo como temblaba. 
    
    -[i]¡Ethan![/i] –gritó desgarradoramente desde la cocina Cyrine.
    
    Tomándose de la mano, ambos se dirigieron para atender a su madre. Al llegar, vieron con horror como el jardín delantero se incendiaba entre sombras y risas ahogadas a causa del ruido. La chica miraba con temor lo que estaba ocurriendo e interrumpiendo el silencio, miró el rostro tenso de su padre y el humedecido por las lágrimas de su madre.
    
    - [i]¿Qué… qué está ocurriendo? ¡Mamá, hay que hacer algo![/i] –la chica intentó correr y así detener la propagación del fuego. Mas su movimiento hizo recapacitar a sus padres quienes la tomaron y sacaron por la puerta trasera de la casa. 
    
    Ditry había desaparecido y ambos se abrazaban a su hija deteniendo sus impulsos, a la vez, llevándola hacia uno de los bosques que rodeaban la casa.  
    
    - [i]Quédense aquí[/i] –dijo Ethan volteándose a su familia- [i]Iré a ver si logro rescatar lo necesario para irnos de aquí. [/i]
    - [i]Pero Ethan...[/i] –paró Cyrine a su marido con lágrimas en su rostro.
    - [i]Cariño, tú sabías que esto pasaría. No hay que perder más tiempo. Escóndanse, vendré luego. [/i]
    
    Sin decir más, corrió hacía la casa hasta que se perdió para su hija. Kotee estaba confundida respecto a lo que estaba ocurriendo y el hecho de que su padre las dejara solas, provocó que la desesperación llegara a ella bruscamente haciéndola derramar continuas lágrimas llamando la atención de su madre.
    
    -[i]Hija, no llores todo estará bien… ya verás[/i] –la consolaba abrazándola.  A pesar de lo que salía de su boca, no creía en ese posible futuro. Esto tenía que terminar ahora y sólo había una forma.
    
    Ante esta idea, el rostro de la mujer se desfiguró dolorosamente sobre el hombro de su hija sin evitar que su pequeña escuchara su ahogado llanto. 
    
    -[i]Sé que algo anda mal… dímelo, por favor… [/i]-le suplicó la ojimiel mirando a los azules ojos de su madre.
    Sin embargo, antes de que ella pudiera contestarle, unas agresivas risas se hicieron escuchar. Al mirar, unas rápidas sombras comenzaron a rodear la casa por las alturas mandando verdes rayos que provocaron diversas explosiones en la casa ante los llorosos ojos de su familia. Al instante, Ditry apareció con sus grandes ojos atestados de lágrimas. 
    
    - [i]El señor… mi amo… [/i]-divagaba con voz quebrada antes de largarse a llorar.
    - [i]Mamá… ¡Mamá![/i] –gritó llorando- [i]Mi papá, mi papá…[/i] -murmuraba perdida cayendo al suelo.
    - [i]Ditry… ya sabes que hacer[/i] –habló con tono serio la mujer de cabellera negra. Tenían muy claro que esto pasaría y habían elaborado un plan en el que la última opción era salir con vida.
    - [i]Yo iba a ir a la academia… iba a ir y los habría hecho feliz[/i] –decía como pensando en voz alta la joven sobre las hojas secas en el suelo.
    
    Lo que estaba ocurriendo tenía a Kotee en un estado emocional difícil, su padre acababa de ser atacado y según la reacción de Ditry, asesinado. Como pudo, miró a su madre quien se agachó a su altura.
    
    - [i]Ya nos haces felices querida y ahora aún más[/i] –explicó sonriendo, pero de un momento a otro, su tristeza volvió- [i]Cuídate mucho, linda[/i]-le pidió acariciándola y besándole la frente antes de pararse, sacar su varita y salir corriendo en la misma dirección que su padre había tomado hace unos minutos. 
    -[i]¡No! No, no…[/i] -exclamó corriendo tras ella entre tropiezos -[i]¡Mamá![/i] –gritó desgarradoramente cuando ya no la vio más.
    
    Pronto, un grito agudo de profundo dolor, se escuchó dejando a Kotee estupefacta con lágrimas en los ojos. Risas malvadas provocaban más y más explosiones en lo que era su hogar. Sacó su varita y sin esperar nada, corrió hacia la casa en llamas, pero siendo alcanzada por su elfo, ambos se trasladaron hasta la total oscuridad de un prado frente a un gran castillo. Confundida, la chica miró a todos lados en busca del pueblo en el que vivió durante toda su vida, pero nada le resultaba conocido. 
    
    - [i]¡Ditry! ¿Dónde me has traído? ¡Tengo que volver![/i] –le pedía caminando de un lado a otro con claro enfado.
    - [i]Ditry lo siente, pero no puede hacerlo. Sus padres me dijeron que…[/i]
    - [i]¡¿Qué?! ¡Mis padres están en peligro! ¡Entiéndeme, necesito volver! Quiero volver con ellos… [/i]-terminó quebrándose para volver a caer llorando desconsoladamente. 
    - [i]Vamos mi señorita, tengo órdenes de presentarle a alguien… [/i]
    
    Tomó del brazo de la acabada joven y la llevó hasta el castillo. Antes de que pudiera tocar, la puerta se abrió dejando ver a una chica joven  de tez blanca, ojos marrones y cabello negro liso. Su expresión parecía fría pero de un momento a otro sonrió como queriendo consolar.
    
    - [i]Vaya, no creí que ocurriera tan pronto[/i] –dijo con dejo de tristeza.
    - [i]¿A qué se refiere? Ditry, no entiendo nada. Quiero ir con mis padres… por favor[/i] –le suplicó cansada.
    - [i]Kotee, entra…[/i] -le dijo la chica frente a ella.
    -[i]¿Cómo sabes mi nombre? ¿Te conozco? [/i]–inquirió la desconsolada joven con lágrimas en las mejillas, mientras entraba a la gran y oscura estancia acompañada de su elfo.
    - [i]Debí suponer que no me recordarías. Soy tu prima. Fui adoptada por Lucien y Amelie Poulain, creo que nos habíamos visto en algunas reuniones familiares hace mucho.[/i]
    - [i]Puede ser… [/i]-respondió incómoda Kotee. La situación la tenía desconectada de todo. No podía dejar de pensar en sus padres. 
    - [i]Mejor llévala a descansar Ditry, tengo su cuarto listo desde hace mucho.[/i]
    
    Al otro día llegó una lechuza avisando la muerte de sus padres a causa de un ataque mortífago. Para Kotee saber esta noticia, la mantuvo por mucho completamente deprimida. Lo único que anhelaba en esos momentos era los recuerdos que en esa casa, ahora destruida, había dejado atrás. Pasaron días y el asunto de su custodia se vino encima. Sin embargo no fue algo difícil, Alicia le había tomado un cariño especial a aquella chica, por lo que no dudó en tomarla como su hija adoptiva y dejarla viviendo con ella en su castillo ubicado en Ottery, Inglaterra.
    
    Desde ese momento, Kotee pasó a tener el apellido Báthory en su nombre, pero sin sacar de su lugar el de sus difuntos padres, quienes fueron sepultados en el cementerio del pueblo francés en donde vivían. Y para recordarlos, instalaron en el jardín frontal de la casa, que se remodeló luego de un tiempo, una gran roca en la cual se tallaron sus nombres. Ahora, todos los años Kotee y su elfo, van a dejarles flores al cementerio y pasan por la casa que, por consecuencia, le pertenece a la joven.
    
    Durante el año siguiente, la nueva Báthory, entró a la academia perteneciendo a la casa de fuego, los Dragones de Lancashire. Allí, descubrió sus claras aspiraciones a la Orden del Fénix, por lo que se inscribió en ella tomando el puesto de aspirante hasta que terminara la academia. Más adelante, se puso a trabajar como aprendiz en el departamento de aurores, recibiendo las denuncias sobre utilización de artes oscuras, a la espera de algún día poder trabajar allí oficialmente.
    
    [color="#FFA500"][b][i]~ Otros Datos:[/i][/b][/color]
    
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Al su madre ser Poulain, toma el apellido de su padre Ackerley. No le gusta que se equivoquen en cuanto a su nombre. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Su tío era Lucien Poulain. Hermano de Cyrine Poulain.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Su elfo Ditry, es el único ser vivo que ha vivido con ella durante toda su vida, por ello lo quiere como su mejor amigo.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Habla francés fluidamente gracias a los años que vivió allí, mas ahora procura hablar en inglés sin problema alguno, sus padres, gracias a sus viajes a Inglaterra, le enseñaron mientras pudieron hacerlo. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Le gusta tocar el piano. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Sus colores favoritos son el azul, verde y naranjo.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Escucha cualquier tipo de música, desde clásica hasta rock. 
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Le encanta la naturaleza a excepción de algunos insectos.  Sin embargo, a veces se arma de valor ante ellos.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] El mejor regalo que le pueden hacer sería algo que le demostrara el cariño que sienten por ella.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] No le importa mucho lo material.
    [color="#F5DEB3"][b]•[/b][/color] Ama el helado por sobre toda las comidas y cosas materiales. 
    
    
    
    [color="#F5DEB3"][b]Link a Bóveda Personal:[/b][/color] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90605"]B: 90605[/url]
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda de Negocio:[/color][/b] -
    [color="#F5DEB3"][b]Link a Bóveda Familiar Principal:[/b][/color] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90399"]Familia Poulain[/url] 
    [b][color="#F5DEB3"]Link a Bóveda Familiar Adoptiva:[/color][/b] [url="http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=90196"]Familia Báthory[/url]

     

    Muchas gracias a quien se pase *-* <3 Cualquier cosa que esté mal me dicen y lo siento por eso :blush:

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