Marcus McGonagall

Saldo anterior 13900 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 31/10/2012 --> 1
• Ganancia por posteos --> 50 G (1 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Octubre 2012 --> 0 G (0 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1000 G (calificación 2 * 500 G)

Total Ingresos ---> 1050 G

• Egresos
• Impuesto Octubre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Octubre 2012: -300 G

Total Egresos ---> -600 G

• Ingresos Totales Octubre 2012: 450 G

Saldo anterior 19150 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 31/10/2012 --> 7
• Ganancia por posteos --> 350 G (7 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Octubre 2012 --> 0 G (0 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 1850 G

• Egresos
• Impuesto Octubre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Octubre 2012: -300 G

Total Egresos ---> -600 G

• Ingresos Totales Octubre 2012: 1250 G

Saldo anterior 42005 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 31/10/2012 --> 15
• Ganancia por posteos --> 750 G (15 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Octubre 2012 --> 0 G (0 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 2250 G

• Egresos
• Impuesto Octubre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Octubre 2012: 0 G

Total Egresos ---> -300 G

• Ingresos Totales Octubre 2012: 1950 G

Saldo anterior 23990 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 31/10/2012 --> 40
• Ganancia por posteos --> 2000 G (40 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Octubre 2012 --> 200 G (1 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 3700 G

• Egresos
• Impuesto Octubre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Octubre 2012: 0 G

Total Egresos ---> -300 G

• Ingresos Totales Octubre 2012: 3400 G

La embarcación dio una sacudida violenta en cuanto la mujer cayó al piso. Los ojos del muchacho se abrieron tanto como pudieron, al mismo tiempo que enarcaba ambas cejas, debido a la sorpresa que había ocasionado aquel hecho. La cuestión era que él jamás se hubiera imaginado que una dama con la figura de Galedra podría generar tanta fuerza en una caída. Al parecer, se había equivocado, aunque eso no significara que ella dejara de ser atractiva.

La madera crujió, hasta se quebró en ciertas partes. Marcus compuso la expresión de su rostro a una más normal voluntariamente, no se iba a permitir distraerse en un momento tan clave del duelo. Se percató que la distancia entre ellos se había acortado, producto de su hechizo. Aquello podría jugarle a favor, al menos con la estrategia adecuada. Por lo pronto, la pelirroja mutaba su zapato en un bezoar, que la dejaba libre del veneno.

Su vista se posó sobre aquel viejo mueble que había estado allí tirado desde el comienzo de la batalla. Hasta ese punto, nadie lo había utilizado en su favor, y aquel parecía el momento preciso para hacerlo, pero una especie de corazonada lo atrapó, era como si una necesidad con razones desconocidas para él le dictara cual debería ser su siguiente movimiento.

—Morphos

El hechizo salió de sus labios en un susurro. Se había apuntado a sí mismo, más precisamente a sus pantalones. Éstos rápidamente su transformaron en una araña Viuda Negra, conocida por ser una de las pocas cuyos colmillos sí atraviesan la piel humana para inyectar su veneno paralizante. Con una orden mental, la envió a picarle el pie descalzo, teniendo que recorrer la distancia de seis metros que los separaban. De esta manera, la siguiente jugada de su rival había quedado sin efecto, puesto que ya no tenía pantalones, algo que no le molestaba en absoluto.

El arácnido caminaba rápido hacia donde se le había indicado. Tenía la orden de esquivar cualquier obstáculo que se le pusiera en su camino, aunque sólo la cómoda pudiera hacerlo y, claro, el bicho la evitaría a toda costa. Su destino era el pie de la mujer, donde clavaría sus pequeños pero letales colmillos, si tenía éxito. Pero no podía arriesgarse a que su plan fallara, debía preparar una alternativa, y no se le ocurrió otra cosa que:

—¡Sectusempra!

Exclamó a continuación. Exactamente como al inicio del duelo, el rayo que se dirigía amenazante en dirección a Galedra tenía como objetivo producirle profundas heridas a lo largo de todo su cuerpo, sintiendo como si espadas muy afiladas la estuvieran cortando. Ahora tendría que lidiar tanto con la araña como con el rayo; aquello sería, al menos, interesante de ver.

Sus ojos brillaron más de lo normal, signo de expectación, pero a la vez producto de la adrenalina que hacía tiempo no sentía a causa de un enfrentamiento mágico. Estaba conciente que se trataba de una compañera, pero su deseo de ganar afloró desde lo más profundo de su ser, viéndose reflejado en la clase de hechizos que había usado. Estaba claro, quería llevarse la victoria.

Cuando su rival invocó aquel escudo mágico que la protegió del rayo que el muchacho le había enviado, en su rostro apareció una mueca de falsa incredulidad. Es que era más que obvio que la mujer no se iba a dejar herir de aquella forma tan sangrienta desde el comienzo del duelo; su movimiento resultó predecible pero eficaz al mismo tiempo. Por un momento hubo un silencio que no era otra cosa sino producto de la tensión que ambos vivían. El barco bajo sus pies se mecía lentamente.

—Y ahí está esa frase de nuevo… —encantador era el adjetivo calificativo que más era utilizado para describirlo, aunque, como en aquel caso, muchas veces se tratase de mero sarcasmo. No la conocía demasiado, pero a juzgar por su mirada, pudo detectar que algo tenía en mente, así que debería actuar de inmediato: —Zancadilla —pensó, atando de aquella forma un lazo mágico a los tobillos de Galedra, haciendo que ésta caiga de bruces al suelo. Pero eso no fue todo, sino que las sospechas de Marcus se vieron confirmadas cuando, en plena caída, salió un rayo de la varita de su contrincante, que chocó contra la pared del barco, dejándolo sin efecto.

«Ahora sí», se dijo a sí mismo. Aquel hechizo le había costado caro en su duelo anterior; pero ahora lo había usado para desviar el rayo que la pelirroja había intentado enviar en su contra. Una vez más, su rival estaba en el piso, como había sucedido horas atrás cuando se había enfrentado a Niko. Tendría que buscar una forma de sacar provecho de esa situación. Pero eso tendría que ser más adelante, ya que, por lo pronto, quería probar otras cosas. Empuñó su arma mágica y la alzó un poco más en dirección a la muchacha.

—Morphos —musitó. De repente, el largo vestido que lucía mutó y se transformó en una avispa marina. Aquel era considerado uno de los animales más venenosos del planeta, transmitiendo su veneno a través de sus cilios o tentáculos. Y éste no era la excepción: por tratarse de su vestido, el animal entró en contacto inmediatamente con el cuerpo de Galedra, inyectando su veneno directamente en su torrente sanguíneo. Ahora sí Marcus estaba seguro de que su hechizo había surtido el efecto que había esperado, por lo que su adversaria debería hacer algo, con cierta urgencia, si no quería debilitarse por completo.

El barco volvió a mecerse de la misma forma, pero la situación que se vivía sobre él era muy distinta ahora. De todas maneras, el chico siguió en posición de lucha, puesto que cualquier cosa podía suceder.

Después de haber dado el puntapié inicial de la actividad, Marcus se limitó a observar cómo se desenvolvían los alumnos en un primer momento. Había sacado su varita del bolsillo trasero derecho de su pantalón, que era donde solía guardarla, para corregir imperfecciones que se pudiesen presentar. Pero no tuvo la necesidad de utilizarla para tal fin; los estudiantes parecían satisfechos con aquella labor encargada, y eso se podía notar por el empeño que le ponían a sus respectivas tareas.

Cruzó los brazos y comenzó a recorrer el lugar. La mayoría de las cajas ya habían sido exploradas por los jóvenes entusiastas que habían asumido aquel reto. El Gran Salón pronto se llenó con adornos verdes y rojos, característicos de la época, de árboles y hasta criaturas que inundaron el espacio aéreo del recinto con brillantes colores. La atmósfera que entre todos habían creado resultaba extraordinaria, pero lo que dibujó una sonrisa involuntaria en el rostro del muchacho, fue ver a su compañera congeniando con el grupo.

—¿Para mí? —dijo, deteniéndose en seco. Una de sus alumnas, Lily, se había interpuesto en su camino y le había entregado un pequeño objeto. El castaño lo tomó entre sus dedos y lo examinó: se trataba de un prendedor plateado con forma de lechuza. —Bueno, muchas gracias —no intentó disimular la sorpresa, en verdad no esperaba un gesto como aquel, pero era eso lo que más le atraía de aquellas fechas, el hecho de poder impresionar a otro. Le agradeció con la mirada, y volvió a andar.

—¿Nadie revisó esa? —lanzó al aire de repente, haciendo referencia a una solitaria caja que había quedado cerrada cerca de la pared. Sin esperar una respuesta, se dirigió con decisión hacia ella, con el objetivo de colaborar con la causa. Ni bien llegó a su lado, se puso en cuclillas y la abrió. Casi se cae de espaldas al suelo por lo que salió de la caja. Se trataba de un amarillento pergamino, que rápidamente mutó y se convirtió en un conocido vociferador que empezó a hablar con una voz fuerte y llena de enojo, sin darle la oportunidad a Marcus de detenerlo.

El objeto volvió a desdoblarse y retornó a su forma original, ante la atenta y desconcertada mirada de todos los presentes. Reincorporándose, tomó el pergamino que había caído al piso, en busca de alguna explicación a lo sucedido. No había nada extraño en aquel pedazo de papel, salvo por una inscripción en el margen superior izquierdo, que con mala caligrafía rezaba: «oeste». Bridget se le había acercado, y él no dudó en pasarle el pergamino para que ella también le echara un vistazo. Podían estar ante la pista de un tesoro académico, y a juzgar por la antigüedad del papel, éste podía datar de decenas de años atrás. Sin duda, algo deberían hacer al respecto.

OFF:

Hola de nuevo chicos

Antes de dejar las correcciones, me gustaría decirles que estoy sorprendido por lo activos que andan. Sorprendido en un muy buen sentido, claro; hacía tiempo que no veía una clase tan activa como lo son ustedes, y no podía dejar de comentarlo. Así que espero que sigan así, divirtiéndose y conociéndose entre ustedes tanto on rol como off rol.

Correcciones tarea #2

Eso es todo de mi parte por el momento.

Bridget pasará en un rato con su rol y la tarea, esperen por ella antes de postear.

¡Saludos!

—¿Será posible?

La sorpresa se estampó en el rostro del muchacho cuando vio que ninguno de los mortífagos andaba custodiando las celdas de la prisión. Con sumo cuidado, porque más allá de todo, no tenía su varita mágica para defenderse de un eventual ataque, se puso de pie, y como pudo, desató las cuerdas que apresaban su cuerpo desde hacía días. Se acercó a la reja para ver si aquello que había supuesto era cierto. Y efectivamente, nadie se hallaba cerca. Cerró sus ojos, e invocó el artilugio que lo llevaría directo al hospital San Mungo.

—Adiós

Fracción de segundo después, ya no estaba en Nurmengard.

OFF: edito para aclarar que me voy por no haber presencia mortífaga en la cárcel por más de 24 hs. ¡Saludos!

¡Hola por aquí!

Xell, mucho gusto, no sé si nos hemos cruzado por otro lado Ante todo, decirte que me gusta mucho la nueva organización de la información que has implementado, está muy claro y así es más fácil de entender para todos. Pero principalmente pasaba para decirte que de a poco voy liberándome de exámenes finales y por ende tendré mas tiempo para el foro, así que me pasaré por aquí más seguido y de esa manera repartir el trabajo.

Citando a Mei, se agradecerá muchísimo que quienes lleven adelante una captura, pasen por éste tópic a dejar el veredicto, ya que la lista debería contener todos los prisioneros, hayan roleado o no, y eso nos ayudará bastante a saberlo.

Bueno, nos vemos.

¡Saludos!

Los magos tenebrosos habían logrado capturarlo semanas y semanas atrás. Su cuerpo sin vida había sido depositado en una celda por lo que parecía un alto rango dentro de su organización secreta, teniendo en cuenta las órdenes que había dado al llegar a Nurmengard, órdenes que Marcus no había sido capaz de escuchar, claro, por encontrarse muerto. Las horas y los días habían ido pasando, y nadie parecía percatarse de su presencia allí. Hasta que por fin, uno de los suyos se había dignado a reanimarlo y traerlo de vuelta a la realidad.

—Interesante —musitó, al mismo tiempo que intentaba abrir los ojos, con algo de dificultad. Era la primera vez que había caído en manos mortífagas y, por ende, era su primera estadía en su prisión, por fuera de los rescates a los que había asistido. La recorrió con un vistazo rápido, no iba a examinar el recinto minuciosamente. Después de una fracción de segundo en la que había titubeado, llegó a la conclusión de que su tiempo allí estaba llegando a su fin. —Sólo un poco más… —susurró, a tal punto que sólo él logró oírse. Desaparecería hacia el hospital antes de lo pensado, pero estaba completamente seguro que durante ese lapso de tiempo, uno de ellos se le acercaría a decirle algo.

En búsqueda de la superficie, había escalado el pozo con suma facilidad, algo que llamó su atención, dadas las heridas, sobre todo internas, que su reciente combate mágico había dejado en él. Pero parecía ya no haber rastro de veneno en sus venas, por lo que supuso que la magia contenida en la ciudad perdida había tenido algo que ver con aquello. Cuando logró salir, el mismo paisaje que había contemplado momentos antes de haberse lanzado por aquel agujero, apareció nuevamente ante sus ojos.

A Marcus le daba la sensación de haber mantenido el duelo con Niko días, semanas atrás. Al parecer, su mente había bloqueado aquel evento, algo que no le molestaba en absoluto, puesto que en aquella oportunidad no había podido demostrar su potencial en plenitud. La estrategia que había elegido no funcionó como había esperado, y eso le costó la derrota. Pero ahora tenía frente a él la preciada posibilidad de redimirse, de volver a empuñar su varita y combatir ante uno de sus compañeros. Después de meditar esto por una fracción de segundo, detenido y con la mirada fija en un punto lejano, echó a andar.

El viento persistía, incluso resultaba muy violento en algunos pasajes del camino. Había vuelto a echar sobre sus hombros la capa de viaje que había estrenado para aquel viaje. De pronto, se percató de que sus compañeros de bando avanzaban en la misma dirección. Le hubiera gustado poder hablar y preguntarles a sus amigos más cercanos cómo les había ido o qué sensación tenían del lugar. Pero fue imposible: a medida que caminaban, una densa niebla los había empezado a cubrir por completo. «Excelente», ironizó el muchacho para sí mismo; no le quedaba otra que seguir adelante por su cuenta.

La sorpresa apareció varios metros más adelante. Se trataba de un claro, una zona que luchaba para erradicar a la tiniebla de su territorio, aunque sin demasiado éxito. Pero eso no fue lo que captó la mayor atención de Marcus, sino lo que se podía distinguir más allá. Se trataba de un viejo barco de madera, que había quedado en el olvido, como la mayoría de las cosas en la isla. No dudó en acercarse a él y subir la pequeña y desvencijada escalera que ofrecía. Era tal su asombro, que no reparó en que ninguno de sus compañeros estaba con él. Cuando lo hizo, dedujo que ese sería el sitio para su próximo duelo.

Mientras quitaba la capa de sus hombros, dejando a la vista la camisa cuadrillé y el jeans que vestía, se puso a buscar una ubicación ideal para esperar a su contrincante, que por cierto, no tenía siquiera una pista de quién podía llegar a ser. Sobre babor encontró el ambiente perfecto para un duelo. Se trataba de un espacio a cielo abierto, con piso de madera, de unos diez metros de largo por tres de ancho. A un lado, no había nada, sólo se veía la costa; sobre el lado opuesto, había una pared y una puerta, que conducía al interior de la embarcación. Una vieja cómoda estaba tirada a mitad de camino. Marcus no sabía cómo había llegado allí, pero pensó que podría usarla en el futuro.

Se ubicó en uno de los extremos, a unos siete metros de aquel antiguo mueble, al mismo tiempo que volvía a empuñar su varita, expectante. Fue en ese instante que su rival apareció. Se trataba de una muchacha de rojos cabellos, alguien a quien verdaderamente no conocía, salvo por algunas actividades grupales de la Orden del Fénix en donde se habían cruzado. Pero eso era todo. Su instinto dictaba que, antes de lanzar el primer hechizo, debía presentarse.

—Creo que no tenemos el gusto —dijo, sosteniéndole la mirada—. Me llamo Marcus —hizo una pausa—. Bah, me llaman —continuó—, cuando hablo conmigo mismo evito utilizar mi nombre… —ya no sabía qué decir para extender el inicio del combate, por lo que decidió que era hora.

—¡Sectusempra! —exclamó, levantando su varita al mismo tiempo que apuntaba a Galedra. Antes de que el brillante rayo saliera en su dirección, sintió como su instrumento mágico había vibrado debido a la potencia del hechizo que había escogido para dar comienzo al duelo. De no defenderse, su adversaria estaría en graves problemas, puesto que grandes y profundas heridas comenzarían a aparecer en todo su cuerpo, de las cuales brotaría sangre a borbotones, lo que podría causar su muerte. Marcus esperó, porque era obvio que eso no acabaría allí.

Viendo que mis opciones se reducen a tres, vengo a pedir lo siguiente:

Link a la Ficha de Personaje: Click

Criatura que desean Adquirir: Micropuff

Premio que ganaron:

http://i.imgur.com/sKkrW.png

Ya tengo regalo para mi futuro/a ahijado/a rolístico *-* xD

Bueno, eso era todo.

Muchas gracias.

¡Saludos!

Era el turno de las presentaciones y cada vez que un alumno hablaba, los demás volteaban en su dirección. Algunos podían manejar esa presión mucho mejor que otros, pero de igual manera, todos tenían algo que decir de sí mismos, eso estaba asegurado. Casi al compás de Bridget, el muchacho también asentía desde su lugar en el escritorio, frente a la clase. Había aprovechado esa posición para contemplar con cuidado a cada quien que tomaba la palabra, al mismo tiempo que intentaba asociar los rostros a los nombres. No era una clase muy numerosa, por lo que aquello no supondría mayor dificultad.

De repente, el silencio reinó en la sala. Ya todos se habían presentado y aguardaban, tan impacientes como titubeantes, el momento en que sus profesores se dignaran a contarles qué harían a continuación. «Nadie mejor que ella», pensó Marcus luego de cruzar una rápida mirada con su compañera, quien sería la encargada de inyectarle ese toque de misterio a la situación, siendo, en opinión del castaño, una experta en la materia. Mientras se despegaba del escritorio y pasaba los dedos de su diestra por entre sus revueltos cabellos, la observó encaminarse hacia la puerta.

Siguiendo las indicaciones de la pelirroja, los estudiantes comenzaron a ponerse de pie. Marcus se había ido acercando muy lentamente, hecho por el cual se vio rodeado de jóvenes en el medio del salón. De no ser por su altura y porte, podría haber pasado por uno de ellos tranquilamente. Sonrió de lado al observar al grupo de magos y brujas a su alrededor, para luego mirar directo a los azules ojos de Bridget; fue en ese momento cuando ambos comprendieron que aquella clase sería diferente a las demás. Sólo dos rápidos pasos le bastaron para ubicarse junto a ella.

—Con gusto —respondió, a la vez que sentía como lo tomaban por el brazo, algo a lo que estaba habituado. Sin decir una palabra más, comenzaron a caminar. Los profesores de la institución eran adeptos a salir de excursión con sus respectivos grupos, por lo que la Academia estaba tan o más desierta que de costumbre. De vez en cuando, miraba por encima de su hombro, para verificar que los alumnos los siguieran; luego, con una simple mirada, transmitía aquello a quien avanzaba a su lado.

Llegaron al Gran Salón en un par de minutos. No se llamaba así por nada: en verdad era enorme, por eso era el sitio escogido cada vez que una graduación u otro evento importante se debía llevar a cabo. Tal como habían previsto, las cajas ya se encontraban allí, sobre un costado del recinto, razón por la cual Marcus dirigió al grupo en esa dirección.

—Bien, formen un semicírculo —comenzó—. Se preguntarán para qué los hemos traído hasta aquí, ¿verdad? Pues bien, la respuesta es muy simple. Como sabrán, se acerca una fecha por demás importante, la Navidad. Se nos ha encomendado la tarea de acondicionar el Salón para la ocasión, y para ello nos han proporcionado estas cajas —señaló el montón de cajas que tenía detrás—. Aunque… no sabemos muy bien qué hay dentro de ellas, puede que nos topemos con alguna que otra sorpresa —hizo una pausa—. Bueno, ¡comencemos! —la actividad, además de dejar listo el lugar para las celebraciones navideñas, serviría tanto a alumnos como profesores para conocerse entre ellos y entablar lazos aún mas fuertes.

OFF:

¡Hola de nuevo! Bueno, ahora sí les puedo decir con seguridad que me leerán que me da gusto acompañarlos en esta etapa. Hablando de rol, lo que he visto hasta acá, es un muy buen nivel, así que sigamos así y divirtámonos.

Los consejos que ha dejado Bridget son sumamente útiles, así que tómense unos minutos para leerlos. Por mi parte, me gustaría rescatar uno, que es el tema de los cuestionarios. Ellos son esenciales para pasar esta clase, así que pónganle empeño al resolverlos. Y si les surgen dudas, no se la guarden, usen los MPs o el msn para evacuarlas. Dicho eso, dejo las demás correcciones:

Correcciones tarea #1

Mahia y Misha: Bienvenidas también. A más tardar mañana tendrán sus correcciones

Ahora, la tarea:

TAREA #2

 

ON rol: deberán seguir nuestros roles. Ahora es cuando queremos ver su creatividad e ingenio. Además, procuren interactuar entre ustedes.

 

OFF rol: deberán resolver otro cuestionario, y enviarlo en MP a Bridget o a mí.

 

1.- ¿Qué tengo que hacer para participar en el Ministerio de Magia? ¿Qué es el registro de magos y brujas? ¿Puedes editar tu ficha de personaje?

2.- ¿Qué son los rangos sociales?

3.- ¿Qué son los conocimientos y qué necesitas para adquirirlos?

4.- ¿Dónde se encuentran las familias de mundo mágico? ¿Qué debes hacer para pertenecer a una?

5.- ¿Encontramos solamente duelos en la Sala de Duelos Mágicos o qué más?

6.- ¿Qué es lo que se hace específicamente en el Bosque Prohibido? Menciona dos reglas que sean específicas para los Roles del Bosque Prohibido

(!) Tienen tiempo para rolear y entregar el cuestionario hasta el 30 de Noviembre.

Eso es todo de mi parte por ahora.

Nos reencontramos en unos días.

¡Saludos!

La madrugada había tomado posesión de las calles de Ottery St. Catchpole cuando el muchacho retornaba al castillo de su familia, después de un día de arduo trabajo en la agencia de detectives de la cual era dueño. Sus horarios resultaban extraños para los demás, por lo que sólo su elfina personal estaba despierta.

—Señor, ¿qué hace aquí? No debería estar en la cita con aquella chica que…

—No, Gisa, eso deberá esperar —la interrumpió—. Mañana tengo que estar temprano en la Academia.

—¡Cierto! —dijo la criatura, casi gritando; el brillo que había empezado a aparecer en sus grandes ojos desapareció debido a la mirada severa que su amo le dedicó— ¿Qué tienen planeado para esta ocasión con la señorita Wenlock?

—Navidad —contestó con una sonrisa de lado, típica en él.

—Justo como en los viejos tiempos…

Mientras Marcus recorría el camino de piedra que conducía a la Academia de Magia y Hechicería, recordó su época de estudiante, cuando sus pasos eran mucho menos seguros que los de aquel instante. El invierno aún no había llegado, pero en aquella mañana el frío se hacía sentir con todas sus fuerzas, dejando en segundo plano a aquel tenue sol que luchaba inútilmente con entibiecer el ambiente. La gruesa capa de viaje negra que lucía el muchacho le era efectiva para paliar las el clima austero.

Algunos metros antes de llegar a la puerta principal del edificio, se desvió del camino, algo que no era habitual en él, pero lo hizo considerando que aún faltaba tiempo para la hora pautada para su encuentro con Bridget. Llegó al lugar que estaba buscando antes de lo pensado. Se trataba de las cercanías de las ruinas de la antigua Academia, sitio que jamás había conocido en pie, pero que le atraía por razones que desconocía. Se detuvo por un segundo para después girar hacia las colinas que tanta belleza poseían. El frío y su sentido de la responsabilidad hicieron que retome el camino hacia el hall principal, olvidando aquel momento de nostalgia que no le era propio.

Recorrió los pasillos que conocía de memoria al mismo tiempo que quitaba la capa de sus hombros, dejando ver el atuendo que había elegido para aquella jornada. No era nada fuera de lo común, un simple pantalón de vestir negro, zapatos haciendo juego y una camisa cuadrillé blanca y roja. La temperatura en el interior distaba de aquella en el exterior, por lo que aprovechó para arremangar la camisa justo antes de encontrar el aula que les habían designado para dictar Generales 81. Sabía que no pasarían mucho tiempo en él, de acuerdo a la actividad que tenían planeada, pero los alumnos llegarían a ella y no era justo que no encontraran a nadie. Más tarde podrían trasladarse.

—Ya no sé si sorprenderme o guiñarle un ojo cada vez que la veo —le comentó a Bridget, con cierta picardía. El salón estaba vacío, pero estaba completamente seguro que se llenaría antes de poder darse cuenta. Una vez que todos los afortunados alumnos hubieron llegado, se posicionó al frente de la clase y se presentó.

—Buenos días a todos. Mi nombre es Marcus McGonagall y seré uno de sus profesores el día de hoy. Si quieren saber algo más, deberán descubrirlo por ustedes mismos —sonrió automáticamente—. Ella, mi compañera, les sabrá decir qué hacer… —dio lugar a Bridget para que comenzara, mientras él se apoyaba sobre la parte delantera del escritorio.

OFF:

¡Bienvenidos a Generales 81! Mi nombre es Lautaro, tengo 19 años y soy de Argentina. Como queremos que ustedes lo hagan, les voy a contar un poco sobre mí. Estoy terminando el primer año de la carrera de Licenciatura en Relaciones Laborales, me encanta leer, ver series y jugar al tenis *o* Como siempre digo, me da mucho gusto poder ser su profesor en esta ocasión y espero que nos llevemos bien y disfruten la clase. Si tienen alguna duda, sugerencia o queja, comuníquense con nosotros. Para eso tienen a su disposición los mensajes privados del foro, o bien, pueden agregarme a msn (mgmcgonagall@hotmail.com).

Antes de la lista de alumnos habilitados a postear aquí, algunas consideraciones previas.

Recomendaciones:

-» Ortografía. Se entiende que sean nuevos en esto, pero es un detalle importante a la hora de hacer rol, después está lo demás.

-» No olviden que están creando un personaje, y aunque éste puede tener las características de ustedes, personaje y persona detrás del computador, no es lo mismo.

-» Todos hemos tenido flojera alguna vez, sin embargo deben dejarla de lado a la hora de leer nuestros roles y el de sus compañeros. Es importante seguir una secuencia y saltarnos un párrafo puede hacer confusas las cosas.

-» Nadie es perfecto, se nos puede pasar un error sin querer. Lean en voz alta todo su rol antes de publicar.

-» Y ANTE TODO: No se rindan, chicos, todos hemos comenzado como ustedes, y ahora estamos para apoyarlos si tienen dificultades con el rol. No es difícil si le hallan el gusto

Tomen nota:

1. A la hora de entregar tarea, se considera tarea atrasada después de que nosotros hayamos vuelto a traer otra tarea, y en éste caso se califica a la mitad de la nota.
   
2. El no presentar la tarea significa un 0 directamente, no hay justificación puesto que estamos dando plazos bien controlados y con anticipación. Excepción sería en casos extremos.
   
3. Pueden mantener rol con sus compañeros y contestarles las veces que quieran, pero siempre el mínimo por tarea es de 1 (un) rol.
   

Entonces, ahora sí la lista:

Sin más, me despido hasta dentro de unos días.

¡Saludos!

—Maldición…

El uso estratégico que había intentado darle al Zancadilla había sido un fracaso, puesto que su rival no parecía muy incómodo con el hecho de conjurar hechizos desde el suelo. De todas maneras, mientras él no se pusiera de pie ayudado por la magia, era un plus que Marcus podría utilizar en cualquier momento. Pero en ese instante, sus preocupaciones eran otras. Antes de caer, Niko había transformado su zapato en una araña, que de inmediato inyectó su veneno en el castaño. El efecto fue instantáneo, según pudo advertir, así que debía hacer algo pronto si quería seguir de pie.

Observó la zona donde la araña lo había picado, la cual se estaba poniendo colorada; fue cuando lo vio que la sutil mueca de preocupación que había aparecido en su rostro, se esfumó para dar paso a una de esperanza. Justo a un lado del zapato que todavía le quedaba yacía un bezoar salvador. Recordaba haber visto a Niko tomar un par de la mesa antes de comenzar el duelo, por lo que de seguro serviría. Con una velocidad inusitada, se agachó, tomó el bezoar y lo tragó, eliminando así todo el veneno que ya empezaba a esparcirse por todo su cuerpo. Volvió a erguirse para continuar.

Se sorprendió al ver que una llamarada, la cual podía distinguir como Fuego Púrpura, más allá de que su adversario no había pronunciado palabra alguna, se dirigía hacia su posición. En el pasado, no había lidiado con aquel hechizo, ni recordaba haber acudido a él jamás, pero lo conocía, y sabía exactamente lo que tenía que hacer para contrarrestarlo.

—Protego

Exclamó, y su voz retumbó en el recinto. De inmediato, un escudo mágico de un pálido color celeste se materializó desde la punta de su varita y contuvo el fuego. Los hechizos desaparecieron al unísono, después de una fracción de segundo en la cual sus respectivos poderes colisionaron. «Déjate de niñadas. Es hora de que comience el verdadero duelo » se dijo Marcus a sí mismo, con la clara idea de subir el nivel. Podía hacerlo, sabía cómo, pero debía ir de a poco. Por lo pronto, no se le ocurrió nada más agresivo:

— ¡Sectusempra!

Un destello brillante salió disparado hacia su contrincante, desde su arma mágica. Ambos magos sabían de qué esperar de ese hechizo, si Niko no hacía nada para evitarlo, su cuerpo se empezaría a llenar de profundos cortes sangrantes, que podrían conducirlo a la muerte. Marcus supuso que, al estar en el suelo, los efectos serían aún peores, pero no quería precipitarse, estaría atento ante cualquier movimiento de su rival.

La suave brisa que azotaba la ciudad perdida de Atlantis revolvió los cabellos castaños de Marcus, pero éste no se molestó en acomodarlos de vuelta en su lugar; estaba demasiado ocupado contemplando el paisaje a su alrededor. Si por su mente, tan sólo una única vez, se hubiera cruzado una vaga idea de cómo sería aquel sitio, en realidad, se habría llevado una decepción. La desolación y el abandono eran evidentes, pero ni siquiera tenía a alguien a quién culpar.

Suspiró, y todo pensamiento desapareció de su mente, a excepción de aquel acontecimiento por el que había tenido que viajar desde tan lejos. Se hallaba parado con los pies abiertos a un lado de aquel pozo por el cual debería arrojarse para encontrar a quien sería su rival en aquella oportunidad. Vestía una camisa cuadrillé en tonalidades rojas mechadas con blanco, un pantalón de jeans y zapatos haciendo juego, no se había esmerado en elegir su atuendo. De lo que sí estaba orgulloso, era de su nueva capa de vieja, que ahora flameaba debido al insipiente viento.

No pudo evitar clavar la mirada directamente sobre el agujero en el piso que tenía a tan sólo unos metros, sintiendo que el momento de aventarse a través de él había llegado. Antes de hacerlo, volvió a confirmar que su arma mágica estuviera donde siempre, en el bolsillo trasero derecho de su pantalón, ubicación estratégica si las había. Pero esta vez no sólo la palpó, sino que la empuñó en su diestra; así sería capaz de protegerse ante cualquier sorpresiva eventualidad. Echó un último vistazo a la Atlantis que conocía, para brincar hacia el misterio que encerraba aquel pozo.

Un silbido agudo producido por la ventisca fue lo último que escuchó antes de comenzar a caer con una suavidad que jamás se le hubiera ocurrido. Incluso atónito por ese hecho, le fue imposible no percibir la concentración de magia que había en aquel lugar, y de inmediato estuvo seguro que aquel descenso apacible era fruto de ella. No quiso imaginar qué hubiese sido de él si la magia contenida no hubiera actuado para suavizar la caída. Sus pies volvieron a tocar suelo firme, un suelo tan húmedo como rocoso.

El recinto donde había ido a parar estaba en penumbras, pero eso no le impidió divisar algunos muebles antiguos y lujosos que estaban regados por todo el lugar. «Ésta es la Atlantis que quería ver» pensó, fantaseando un momento con la época dorada de la Isla, cuando todo estaba en su máximo esplendor. Un ruido sordo lo sacó de su ensimismamiento, y, casi como acto reflejo, extendió el brazo derecho delante de él y apretó la varita con fuerza. Recorrió la habitación con la mirada, buscando la fuente del estruendo. Se alegró al comprobar que nadie más que su oponente se encontraba allí.

«Interesante», fue lo que surcó su mente al verle el rostro. Se trataba de una persona conocida por Marcus, no en profundidad, claro está, pero al menos se habían cruzado un par de veces en la Academia de Magia y Hechicería. Estaba consiente de que Niko era un eximio duelista, por lo que debería dar lo mejor de sí si quería derrotarlo.

—Hola —contestó el saludo—. Lo mismo pensé yo. Que gane el mejor —el tono de su voz en aquella última frase pudo parecer algo hipócrita, pero era su verdadero deseo. Sonrió de lado y desató el nudo de su capa de viaje, dejándola caer sobre el irregular suelo, al mismo tiempo que su contrincante comenzaba con el duelo.

—Avis —dijo, haciendo aparecer una bandada de pequeños pájaros. Algunos de ellos recibieron el aciago impacto del Sectusempra, protegiendo a su invocador. En un abrir y cerrar de ojos, y como consecuencia del hechizo, todos ellos desaparecieron, incluso aquellos que habían salido ilesos. Era su momento de actuar.

—«Zancadilla» —pensó de pronto. En los tobillos de Niko se crearía instantáneamente una cuerda mágica que lo haría caer al suelo, esto con el objetivo de hacerle perder tiempo e inclinar la balanza del duelo desde el principio. Marcus aguardó, todavía con la varita al frente, por la respuesta de su rival.

Saldo anterior 8150 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/09/2012 --> 0
• Ganancia por posteos --> 0 G (0 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Septiembre 2012 --> 0 G (0 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 1500 G

• Egresos
• Impuesto Septiembre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: -300 G

Total Egresos ---> -600 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: 900 G

Saldo anterior 19500 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/09/2012 --> 14
• Ganancia por posteos --> 700 G (14 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Septiembre 2012 --> 200 G (1 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 2400 G

• Egresos
• Impuesto Septiembre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: 0 G

Total Egresos ---> -300 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: 2100 G

Saldo anterior 22500 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/09/2012 --> 3
• Ganancia por posteos --> 150 G (3 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Septiembre 2012 --> 1000 G (5 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 2650 G

• Egresos
• Impuesto Septiembre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: -300 G

Total Egresos ---> -600 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: 2050 G

Saldo anterior 27200 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/09/2012 --> 19
• Ganancia por posteos --> 950 G (19 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Septiembre 2012 --> 0 G (0 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 2450 G

• Egresos
• Impuesto Septiembre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: 0 G

Total Egresos ---> -300 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: 2150 G

Saldo anterior 25850 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/09/2012 --> 11
• Ganancia por posteos --> 550 G (11 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Septiembre 2012 --> 400 G (2 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 2450 G

• Egresos
• Impuesto Septiembre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: 0 G

Total Egresos ---> -300 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: 2150 G

Saldo anterior 39500 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/09/2012 --> 33
• Ganancia por posteos --> 1650 G (33 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Septiembre 2012 --> 800 G (4 * 200 G)
• Ingreso por rating: 1500 G (calificación 3 * 500 G)

Total Ingresos ---> 3950 G

• Egresos
• Impuesto Septiembre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: 0 G

Total Egresos ---> -300 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: 3650 G

Saldo anterior 42250 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/09/2012 --> 4
• Ganancia por posteos --> 200 G (4 * 50 G)
• Ingreso por Afiliados Septiembre 2012 --> 600 G (3 * 200 G)
• Ingreso por rating: 2000 G (calificación 4 * 500 G)

Total Ingresos ---> 2800 G

• Egresos
• Impuesto Septiembre 2012 --> -300 G
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: -300 G

Total Egresos ---> -600 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: 2200 G

Saldo anterior 33775 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/9/2012 --> 67
• Ganancia por posteos --> 1675 G (67 * 25 G)
• N° de usuarios activos (Septiembre 2012) -> 275 (11 * 25 G)

Total de Ingresos ---> 1950 G

• Egresos
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: -0 G

Total Egresos ---> -0 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: 1950 G

Saldo anterior 21875 G

• Ingresos
• N° de posteos del 1 al 30/9/2012 --> 3
• Ganancia por posteos --> 75 G (3 * 25 G)
• N° de usuarios activos (Septiembre 2012) -> 0 (0 * 25 G)

Total de Ingresos ---> 75 G

• Egresos
• Impuesto por Inactividad, menos de 10 posteos Septiembre 2012: -500 G

Total Egresos ---> -500 G

• Ingresos Totales Septiembre 2012: -425 G