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Natalie Nicole Granger

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Mensajes publicados por Natalie Nicole Granger

  1. Nadie parecía haber notado mi ausencia excepto por Cye. Se acercó a mi sin tocarme y comenzó a examinarme con detenimiento. Algunos cabellos que se habían soltado de mi piel estaban enredados en mis manos, así que me dispuse a quitarlos y dejarla hacer lo que quisiera. Cuando me miró supe que había comprendido lo que me ocurría. Mis ojos eran como un libro abierto. Eso me decía mi padre cada vez que no quería contarle algo y él sabía que algo me sucedía. Y usualmente, no era bueno.

     

    -¿Está bien, señorita Granger?-me preguntó Cye, algo alarmada por mi repentino cambio de humor. No quería hablar pero se notaba en mí que no estaba de lo mejor. La miré, dejándola ver en la simple expresión de mis ojos azules que acababa de tener una premonición sobre el paradero de los dos desaparecidos. De golpe sentí de nuevo esa voz en mi cabeza, pero esta vez sólo me sujeté la cabeza y la dejé hablar. Si podíamos saber más, mejor.

     

    No entendía mucho de lo que decía. En ese momento sentía como que me había olvidado cómo hablar español o inglés y sólo podía hablar en Griego. Balbuceaba en griego bastante bajo. Le iba a pedir algo a cambio a Oliver por dejarlo volver. Y no era un objeto cualquiera. Iba a ser o una joya familiar o una reliquia milenaria o algo así. Codicia. Lo único que ese fantasma quería era la joya.

     

    Igual al anterior, paró así como comenzó. Miré a Cye y le conté todo lo que había oído, en la primera y en la segunda premonición. Me cortó cuando terminé la primera. Estaba empezando a palidecer y sin saber por qué, me asusté. Su rostro mostraba una mezcla de estupor, miedo y nerviosismo que jamás había visto manifestada. Estaba blanca como la nieve. Casi no se movía y temía que dejara de respirar en lo que yo parpadeaba.

     

    -¿Fuera de la torre? No… no puede ser-dijo algo alarmada. No sabía si me lo decía a mí o no, pero estaba comportándose extraño. La sostuve por las dudas. ¿Qué habría allí que la preocupaba tanto? ¿Dónde estaba esa entrada? ¿Ella lo sabía?

     

    -Sí. Escuché clarísimo como hablaban de una entrada afuera.-la miré mientras respondía.-¿Qué sucede Cye?

    -Yo sé cuál es la entrada-dijo de forma entrecortada. La observé, alejándome un poco para verla mejor. Algo no iba bien.

     

    -Será mejor que nos demos prisa. Oliver habló con el fantasma y le hizo prometer que si lo ayudaba a salir de ahí, él luego debería darle una recompensa. Podía ser una reliquia milenaria o una joya familiar. Lo hizo prometer que se lo entregaría si lo reclamaba y sin poner peros en el medio. Será mejor que vayamos.-le dije, recordando la segunda premonición. Comencé a caminar hacia la salida pero noté que no me seguía. Regresé y esperé, aunque mi cabeza estava por explotar y sabía que no podíamos demorarnos.

  2. Athena se había perdido junto a Oliver. Tita había estado a punto de cruzar la puerta con la advertencia pero yo había llegado justo a tiempo para hacerla entrar en razón y evitar que ella también desapareciera. A pesar de que no decía nada, yo sabía que algo pasaba por su cabeza en aquellos momentos.

    La llevé sujeta por los hombros de regreso a la sala común y ahora más que nunca me mantuve pegada a ella. No quería que le pasara nada a mi mejor amiga, y menos siendo una de las que más contacto con los chicos desaparecidos parecía presentar.

     

    De repente, un zumbido comenzó a dar vueltas en mi cabeza. Cada vez se intensificaba más y más. Llegó a un punto que era completamente insoportable. Me tapé los oídos en un arrebato desenfrenado de desesperación y cólera. En mis años de vida jamás había sentido algo así. Era como tener una colmena dentro del cráneo. Me senté en un rincón, apretándome el cráneo con las manos. No sentía el dolor pero sabía que me estaba haciendo daño. Apreté los dientes y un haz de luz iluminó el alambre de mis brackets.

     

    De repente, entre todos esos zumbidos se escuchó una voz. Era como un jadeo gutural, algo muy suave. Se iba perdiendo entre los zumbidos y regresaba, pero esta vez tan suave como la brisa oceánica. Cada vez aumentaba hasta casi convertirse en un grito dentro de mi cabeza.

     

    -¡Ayuda, ayuda!- gritaba la vocecilla dentro de mi cabeza. Era muy dulce y era de mujer, pero parecía pedir ayuda a gritos. -La entrada al pasillo está por fuera, no sé en dónde pero está por fuera. Y las Jefas de Casa lo saben. ¡Ayuda!- dijo la voz antes de que ella y los zumbidos cesaran por completo.

     

    Todo se calmó. Abrí lentamente los ojos aunque no recordaba haberlos cerrado. Me estaba mordiendo el labio muy fuerte,pero no sangraba. Todo era muy extraño. Tenía marcas de arañazos en las mejillas, supuse que yo misma me las había hecho en el ataque de cólera. Había sido como un sueño, aunque se parecía más a una pesadilla.

     

    Regresé con los demás. Aún estaba algo aturdida por todo, pero recordaba perfectamente la voz aquella. No había podido distinguirla pero por alguna razón que no podía explicar, sabía de qué hablaba. No me contuve y sabiendo que había muchas posibilidades de que fuera algo de vida o muerte, llamé a reunión a todos los presentes.

     

    -Chicos y chicas, ¿alguien tiene alguna idea de que halla otra forma de ingresar al apsillo que tiene la advertencia... pero por afuera de la torre?- añadí al ver que ya alguien estaba por contestar que no. Se hizo el silencio. Había que encontrar ese pasadizo costara lo que costara. No sabía el por qué, pero tenía el presentimiento de que esa voz era la de Athena.

     

    OFF:

     

    Hola! Disculpen mi ausencia :) Pero creo que ya me puse al día, no? ^^ Por cierto, Feliz Navidad a todos! Espero que la hayan pasado super bien.

    Bueno, sobre el rol, no sé si será el mejor, pero había que ponerle suspenso y ganas. Leí las dos páginas de rol y nadie parecía notar a los chicos excepto por Tita, así que como Tita veía a Oliver, yo decidí escuchar. No quise hacer referencia a palabras textuales porque no recuerdo si en algún momento hablaron, pero algo había que hacer con el rol, y ahí está ^^ Espero no haberme adelantado demasiado :S

     

    Un saludo!

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  3. Me di media vuelta sólo un minuto para contemplar la hermosa luna nueva que se veía a lo lejos. Cuando regresé a mi posición inicial, Drew no estaba. Me asusté. Caminé por toda la sala e incluso subí a los dormitorios a ver si había ido a buscar algo o si se había acostado. No estaba. Un escalofrío helado recorrió mi columna vertebral. No pude evitar pensar en lo peor. ¿Y si Drew había desaparecido también?

     

    -No, es imposible. Debe... debe estar escondida en alguna parte, o buscando a Oliver. Sí, es eso.-me dije en voz alta, tratando de pensar en que se había escondido. Bajé como un rayo las escaleras y me reuní con el resto. Las otras ya sabían, y Tita estaba caminando por un pasillo a oscuras. Corrí para alcanzarla y llegué a ver la puerta cerrarse. Le coloqué una mano en el hombro y la miré. Tragué saliva. No sabía si volvería a ver a Drew.

     

    -Vamos, tenemos que empezar la búsqueda. No podemos entrar a ese pasillo, pero quizás podamos ir por otro.-le susurré en el oído a mi amiga. Hice presión en su hombro y esperé a que reaccionara para pasar mi brazo por detrás de su cuello y regresarnos a la Sala Común para reunirnos con Cye.

  4. -Em... si lo soy-respondió Athena a mi pregunta ante su nacionalidad. Sonreí. Creí que iba a ser la única griega rondando por allí.-Aunque mi padre es Inglés, mi madre es Griega y conservé la nacionalidad-asentí levemente ante la explicación, dándole a entender que comprendía lo que me decía. La notaba interesada en la charla.

    -Tu eres Inglesa ¿No?-me preguntó y mi sonrisa se marcó aún más en mi rostro. Sabía que todos lo pensaban.

     

    -No. Yo también soy Griega.-dije sonriéndole. Sabía que le iba a resultar raro; a todos les resultaba extraño.-Mi padre era Griego y mi madre Holandesa. Nací en Atenas, pero no sé por qué mis nombres son ingleses. Quizás fueron elegidos por mi madre.-añadí sin dejar de observarla. Mis ojos azules paseaban por su rostro, observándola.

     

    Todos parecíamos concentrados en la misión que teníamos delante. Athena dudó en contestar mi pregunta acerca de su visión, y comprendí que posiblemente le molestara hablar de eso, así que no la presioné demasiado. Si quería decirlo, lo diría sola.

     

    Noté que Gyvraine y Cye planeaban algo, pero decidí no meterme en sus conversaciones. Si era sobre la búsqueda iban a plantearlo en el grupo, y sino, bueno, no lo harían.

  5. Notaba algo extraño en Tita, pero no sabía qué era. Cuando me abrazó se dio cuenta de mis colmillos, y estoy segura de que supo que era un vampiro. No pareció molestarle porque siguió abrazándome y subió conmigo a los dormitorios. Recordé lo que me había dicho: "Diablos! Es esto posible? Bueno Nicole, contigo no habría problema pero, bueno después te explico, para ser precisa el próximo día 10, tratare de estar mejor en el castillo, ay, tu sabes, luna llena Aaawuuuu! Pero no te preocupes,no estaré cerca para poner a nadie en peligro, Eres mi compañera de clase, de casa, y prometo ser la mejor amiga y protegerte si es necesario de lo que sea".

     

    Me sentí reconfortada al recordarlo. Me hacía bien saber que ahí estaría ella si necesitaba algo. Sonreí y me coloqué a su lado. Cambié la varita de mano y tomé la de ella disimuladamente. Cuando me miró, le sonreí.

     

    -Gracias por lo que me dijiste allá en el dormitorio. Si algún día necesitas ayuda, cuentas conmigo.-le dije en un susurro leve, sonriendo aún. Era tan extraño convertirme en la mejor amiga de una Lycan. Jamás lo habría creído. No me molestaba que fuéramos diferentes. En realidad no lo éramos. Sólo estábamos definidas por una condición. Por lo demás, podíamos llegar a ser muy parecidas.

     

    OFF:

     

    Tita! Apareciste xD Pues como verás intenté enlazar mi rol con el tuyo. Espero no haberte mareado :S Que genial que estés aquí! Yo no tengo problema en convertirme en tu mejor amiga, a tí te molesta? :)

     

    Saludos! ^^

  6. -Muchas gracias Nicole.-me dijo Athena en agradecimiento a mi comentario sobre su nombre.

    -¿Eres griega, verdad?-le pregunté. Era algo un poco obvio por el nombre, pero yo también lo era y no muchos lo creían al oír mis nombres. Y ella podía no serlo y tener un nombre Griego. No lo sabía.

     

    Todos estábamos esperando pistas, o alguna señal del paradero del tal Oliver. Yo no lo conocía, pero si sus compañeros lo estaban buscando, debía de ser alguien muy querido por todos.

    Athena se acercaba a Gyvraine. Yo podía observarla por el rabillo del ojo.

     

    -¿Por dónde buscaremos? Eso que vimos en la terraza parecía ser Oliver pero algo... algo poco sólido, alcancé a tocar esa especie de ente y se sentía como... agua, o arena, no estoy segura-dijo en voz baja, intentando no levantar sospechas. Parpadeé rápido, mirando a todos los presentes.

     

    -¿Qué viste? Cuéntame con detalle...-le pedí, mirándola ahora esclusivamente a ella.

  7. Estábamos por comenzar la búsqueda cuando una tercer chica se nos acercó. Al igual que las otras parecía ser muy amable, y sólo con mirarla ya imponía algo de respeto.

     

    -Hola Nicole, Tita, soy Cye Lockhart colega de jefatura de Gyv y una compañera de aventura para ustedes en esta casa.-se presentó ante nosotras. Le sonreí y la observé, como había hecho con las otras dos mujeres.

     

    -Hola Cye, un gusto. Soy Natalie Nicole Granger Dumbledore.-me presenté, dándole un abrazo rápido como forma de bienvenida. Todas las chicas a las que había conocido me caían bien.

     

    De repente, con una floritura de su varita, Cye hizo aparecer un retrato de un chico. Luego, nos señaló otro. En el segundo estaba representada una foto grupal de una generación de Aethonans y su fantasma. Se veía la foto del chico, soriente, entre el grupo.

     

    Luego nos señaló el primer retrato, en el que estaba el chico solo y nos miró, tratando de advertirnos con la mirada.

     

    -A él es a quién tenemos que encontrar y ella es la única fantasma de la torre, de lo demás... desconfíen-nos indicó con precaución. Asentí con la cabeza de forma rápida y saqué mi varita del bolsillo trasero de mi jean. La sujeté fuertemente y esperé. No sabía muchos hechizos, pero creía que podría ayudar en algo si lo necesitaban.

     

    -No sé muchos hechizos...-le susurré a Cye, algo avergonzada.-Pero me mantendré cerca de tí o de Gyvraine, quizás las pueda ayudar en algo...-añadí y volví la mirada al frente, esperando instrucciones.

     

    OFF:

     

    Bien, gracias Cye por la bienvenida. Ya vamos siendo más (: No sé muchos hechizos (y creo que sólo tenemos permitido uno, que si mal no recuerdo es el Desmaius), pero ayudaré en lo que pueda. Disculpen si el rol es muy corto :_

     

    Saludos! ^^

  8. De repente, una chica se nos acercó a Tita y a mí con una gran sonrisa y nos saludó con una voz muy dulce. Pensé que no había reparado en nosotras, pero me equivoqué. Era muy amable. O al menos, así pareció cuando nos miró.

     

    -¡Hola chicas! Veo que son nuevas por aquí ¡Bienvenidas a las Aethonans!-dijo con alegría, observándonos a las dos.-Soy Athena Ravenclaw Rambaldi, es un gusto conocerlas.-añadió y al finalizar su discurso, nos dio un abrazo rápido a las dos, en señal de bienvenida.

     

    Detrás de ella, otra chica se acercaba a nosotras. Ésta también se notaba muy alegre por nuestra llegada, aunque yo sabía que algo las preocupaba. Se había hecho demasiado silencio cuando habíamos entrado, y eso no me parecía una buena señal.

    ¿O recibían a todos los nuevos de igual manera?

     

    -Bienvenidas, chicas-nos saludó con cordialidad y mostrando una bellísima sonrisa.-soy Gyvraine Malfoy, jefa de casa.-añadió y en seguida comprendí que ella no era simplemente una alumna más.

    -Cuando quieran pueden instalarse en sus habitaciones que están en las escaleras de la derecha-nos indicó, señalándonos una escalera de caracol que había hacia la derecha del lugar.

     

    -Gracias, Athena. Me gusta tu nombre.-le agradecí la bienvenida, sonriendo. Su nombre me resultaba griego. Conocía muy bien los nombres griegos, y aún no entendía por qué mis dos nombres eran ingleses. Jamás lo pregunté.

     

    -Oh, gracias Gyvraine.-le agradecí a ella también y tomé de nuevo mi capa y la maleta.

    Me di media vuelta para dirigirme a los dormitorios pero la voz de Athena me hizo voltearme.

     

    -Sé que no llegaron hace mucho tiempo, pero de casualidad ¿no vieron a un chico llamado Oliver Granger por aquí o Ansaley, la fantasma?-nos preguntó algo exaltada. Entendí que era eso lo que las tenía preocupadas cuando entré.

     

    -No, lo siento. No los conozco. Pero si los están buscando, puedo ayudarlas. Si no les molesta, claro.-sentía el calor ardiendo en mis mejillas aunque sabía que los demás no podían verme ruborizada. -Dejo las cosas en la habitación y en seguida bajo, ¿les parece? Así comenzamos con la búsqueda.-añadí y sin esperar respuesta comencé a caminar hacia las escaleras a paso más o menos rápido.

     

    Cuando entré a los dormitorios, me detuve en la puerta. No era como yo me los esperaba. Habían seis camas por dormitorio, todas con ropa de cama de color celeste claro. Supe cuál era la mía porque no había nada al lado y porque en la cabecera de la cama parecieron dibujarse las letras de mi nombre por un momento.

     

    Fascinada, me acerqué a ella, me senté en el borde y dejé mi maleta a un lado. La capa la acomodaría después, pero por el momento la dejé a mi lado. Me levanté y recorrí un poco el lugar, viendo como las chicas que allí dormían tenían distintas cosas alrededor de su cama.

    Recordando la importante búsqueda a la que había accedido ingresar, salí del dormitorio y bajé las escaleras casi corriendo. No muy rápido para mí pero a velocidad normal para un humano.

     

    -¿Listos?-pregunté con emoción. Ya quería comenzar a jugar al detective. Eso iba a ser muy interesante.

     

    OFF

     

    Gracias a las dos por la bienvenida! Qué tal? Ya me presenté más o menos allá arriba, pero si alguien quiere saber más, mi lechucería y mi MSN están dispuestos.

    Como verán, me uní a la búsqueda xD Lo siento si les molesta, pero me encanta esto de buscar pistas.

     

    Saludos!

  9. Mientras esperaba a que todo en mi cabeza se normalizara, sentí que alguien más entraba a la sala. Me di media vuelta y vi a mi compañera de Generales, Tita. Se acercó y me abrazó, y yo hice lo mismo mientras le sonreía.

     

    -Hola Tita, ¿qué tal?-la saludé, apartándome de ella para mirarla. Como vi que nadie se nos acercaba, disimulé un poco y me acerqué a ella un poco más.

     

    -¿Quieres sentarte o prefiers ir a dar un paseo para conversar? Me encantaría saber más de tí.-le pregunté con mi mejor sonria. Oculté lo mejor que pude mis colmillos. No sabía si era una vampiro o no, y no quería asustarla. Me quité la capa y la dejé sobre mi maleta.

     

    Lancé una mirada a una de las ventanas, observando como estaba el día allá afuera.

  10. Caminaba por la Acaemia, algo perdida debido a su gran tamaño, buscando la torre más alta al Oriente. Había sido seleccionada para pertenecer a las Aethonans de Salem, la casa que representaba al viento. Acababa de terminar Generales, y todo era demasiado nuevo para mí.

     

    Continué caminando a paso lento, observando todo a mi alrededor. La Academia era enorme. Iba vestida de manera sencilla, como me gustaba a mí. Llevaba un pantalón vaquero ajustado, una blusa lila y una capa negra encima. Mi cabello color caoba caía en forma de cascada por mi espalda. Trataba de mantenerlo alejado de mi rostro con una tiara blanca, de la cual una rosa blanca sostenía un par de cintas que se mezclaban con los mechones caoba en distintos tonos de mi pelo.

     

    Era apenas pasado el mediodía cuando llegué a aquella torre. Estaba en el lado Oeste de la Academia. La reconocí por el estandarte que había sobre la puerta. Abrí y entré. Una gran escalera de caracol conducía a los pisos superiores. Comencé a subir, despacio, apoyándome en la pared a mi izquierda. Mis piernas temblaban.

     

    ¿Qué opinarían mis compañeros de mí? ¿Les agradaría? No lo sabía, por eso fue que seguí subiendo. Llegué a una puerta y la abrí suavemente, mirando hacia el interior en busca de alguien conocido. Había gente, pero no distinguía ninguno de mis compañeros de Generales.

     

    -Esto va a ser interesante...-me dije a mí misma mientras terminaba de entrar. No mucha gente reparó en mi presencia, y como era nueva, hasta demasiado nueva, no muchos se molestaron.

     

    -¡Hola!-exclamé con entusiasmo cuando entré, esperando a que alguien me fuera a saludar. Aquello debía ser la Sala Comun, por la forma en la que estaban distribuídos los sillones y la cantidad de adornos que había. Y también, por el hecho de que había chicos y chicas. Dudé mucho que fuera un dormitorio.

     

    OFF

     

    Bueno, hola :) Mi nombre muggle es Sara y tengo 13 añitos. Soy de Uruguay, un pequeño país en Sudamérica :D Amo la lectura y escuchar música.

    Hace poco terminé las Generales 58, y fui asignada a esta casa. No creo conocer a los que han roleado más arriba, pero espero llevarme bien con la mayoría :)

     

    Un gusto.

     

    PD: Disculpen el Off, es que no sé si hay tópic Off-Rol D:

     

    Saludos!

  11. N0ola! Paso a dejar mi tarea n.n

    Pues yo AMO la pluma. No me cuesta usarla (sdi me lleva algo de tiempo, pero por los detalles y eso ^^). Al principio usaba borrador de fondos o borrador mágico paa borrar el fondo, pero requería demasiado pulso para las zonas del contorno y pues, quedaba feo xD Y luego la varita mñagica siempre me arruinó la vida ¬¬ Con la tolerancia de colores y blablabla, recuerdo que a veces tomaba una zona, pero por el propio brillo de la imagen me tomaba zonas que yo no quería D: La Pluma es la MEJOR herramienta del Photoshop ♥ (Tengo Photoshop CS4)

     

    Pero sin más que decir, dejo mi tarea ^^

     

    Original || Tarea 2

     

    Eso es todo! Espero el visto bueno ^^

     

    Saludos!

  12. Hola, hola :unsure: Recién me animé a ir probando con los Tutos de por aquí, a ver que tal.

     

    Esto fue lo que hice yo:

     

    Original || Tarea 1

     

    ¿Qué hice? Bueno, comencemos...

     

    Abrí un fondo de 400 px. de largo por 200 px. de ancho de color Transparente. Abrí la imagen y la coloqué sobre el fondo. La moví un poco (creo que no necesité transformar escala ninguna) hasta que me gustó como quedó.

    Luego creé una nueva capa y en modo Exclusión le apliqué una capa de este color: #964545.

    Luego escribí "Wake me up" con fuente Beyond Wonderland (la descargué de dafont.com); y con la misma fuente escribí "Wake me up inside" y lo puse a seis pts, ubicándolo debajo del primer texto. Utilicé el mismo color que para el efecto de la capa 3.

    Fui a Opciones de Capa de la segunda capa de texto y le apliqué una sombra interior negra y un resplandor exterior negro también.

     

    Luego fui a Imagen > Modo > Brillo y jugué un poco con el brillo y el contraste, tratando de darle un aspecto un poco más pálido a la piel del vampiro y haciendo que el fondo quedara un poco más oscuro.

    Después me dirigí a Filtro > Interpretar > Efectos de iluminación... Y donde dice "Por defecto" seleccioné "Cruzada". Di en OK y no toqué más de ahí.

    Luego le apliqué un destello Prime de 105 mm al 115% detrás del texto (siempre trabajando en la segunda capa, que es la de la imagen). Guardé y ahí está mi resultado.

     

    Saludos! ^^

  13. Salí del castillo Dumbledore y me dirigí un poco más hacia el Norte, hacia la casa de la familia Granger. Allí estaba mi madre, Luna, a quien hacía algo de tiempo que no veía. Iba a reencontrarme con ella. ¿Cómo sería? ¿Me recordaría? Creía que sí, al fin y al cabo, no había pasado tanto tiempo tampoco.

    Caminaba a paso relajado, pensando. Iba vestida de manera bastante informal, de falda y blusa. La falda, negra, me quedaba apenas encima de las rodillas y se bamboleaba al son de mis caderas al caminar. La blusa, blanca, era lisa pero con un leve fruncido en la mitad. La llevaba con el botón superior desprendido. No exhibía demasiado tampoco.

     

    Mi cabello castaño claro caía sobre mis hombros, formando allí un pequeño bucle en cada punta. Llevaba una tiara con una rosa blanca. En los pies, unas botas negras completaban mi atuendo otoñal. Encima de todo eso, llevaba un tapado negro que me llegaba apenas al primer tercio de los muslos. El viento jugaba con mi cabello mientras seguía caminando, mirando el piso.

     

    Finalmente me detuve frente a una casa bastante grande. En el cartel que había a la entrada rezaba "Familia Granger".

     

    -Es aquí.-me dije en voz baja mientras atravesaba la verja de hierro. Crucé el jardín en tres zancadas y golpeé la puerta principal. Esperé a que saliera alguien. Los nervios me devoraban viva por dentro. Estuve por salir corriendo pero eso sería muy maleducado por mi parte. Alisé mi falda, más como una forma de matar el tiempo de espera que de verme más arreglada.

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