Liliana McDougall

Gruñó, aunque para ella no fue más que un siseo grave, había pasado demasiado tiempo lejos de contacto humano, siempre que no fuera para alimentarse, cuando encontraba algún explorador moribundo en los bosques de Dean, y ellos no hablaban mucho, balbuceaban para pedir fin a sus miserables vidas.

Una de sus serpientes reapareció cuando Sagitas le ofreció ingresar a la Mansión, le lanzó una mirada furtiva e hizo un gesto con la mano, era Eris, ella solía detectar las presencias débiles, razón por la cual se solía acompañar de ellos, parte de su rutina de alimento "fresco" era gracias a sus anacondas, pero en aquel momento le pareció extraño, si bien su anfitriona lucía aún angustiada ante su presencia, lo que no mejoraba mucho el ánimo de estar ahí, no parecía... vulnerable.

Su serpiente no agachó la cabeza y se mantuvo expectante, hasta que un giro brusco de Sagitas la alertó, había otra presencia notoria en el lugar, alguien que bajaba de las escaleras, y por el aroma no parecía muy estable. Ahora entendió porque su mascota decidió permanecer alerta. Lanzó un pequeño silbido corto y seco en dirección a Eris, tras unas pocos segundos dió media vuelta derrotada. "Nosotros no comemos a los anfitriones" -era lo que había siseado en pársel-

Se quedó algo estancada en la entrada, aún cuando la habían invitado a pasar, se sentía como una pequeña criatura al acecho de algo o alguien, aún preguntándose si Amicus la extrañaría, ese condenado elfo que la salvó de la muerte una vez, bueno, él y su madre, en el fondo sentía que quitarle el crédito la haría aparecer de entre los muertos para atormentarla hasta la locura.

Avanzó un par de pasos buscando donde acomodarse pero el vestíbulo era muy amplio, parecía que las armaduras ocupaban un lugar especial en esa Mansión, ya que veía infinidad de ellas apostadas entre las paredes, unas más educadas que otras, por la posición en la que estaban colocadas.

Se acercó a una de ellas y sacando su varita, le dió leves golpes al pecho.

- Juraría que me ha inclinado la cabeza.

Dió media vuelta decidida mirando a Sagitas.

- He andado por el pueblo -dijo de repente- siempre es bueno cambiar de aires un poco, yo lo he hecho por los úlimos siete años, así que pensé que pasar a verte no sería una tan mala idea.

Off: Epa! Que yo no recuerdo haber asaltado ningún Banco con usté Jefa.

On:

- ¿Y esa cara?

Esperaba cualquier cosa, desde un elfo gruñón, pasando por un dragón prohibido, hasta que le lanzaran alguna poción transformadora, pero con lo que no contaba era con encontrar a Sagitas, de cara frente a la puerta, como esperando que bajaran el telón de un guillotinazo.

La castaña a veces podía ser impaciente, así que solo se limitó a cruzar los brazós mirándola de pies a cabeza, los rasgos de payasa, que recordaba en ella, se acentuaban mucho más con esa expresión de temor, no estaba segura si era temor hacia su persona, no recordaba haber cometido ningún crimen, un duelo aquí y un duelo allá talvéz, en sus mejores épocas se habían lanzado cuerdas, animales controlados, y hasta maldiciones... pero nada con el afán de acabar la una con la otra.

Hizo un pequeño ademán hacia adelante y se contuvo, mordió su labio inferior mientras retrocedía, la misma cantidad de pasos que ella, alejándose un poco.

- ¿Esto significa que no puedo pasar?

Sagitas siempre había tenido un temperamento peculiar, en el tiempo que creció rodeada de mortífagos, rara vez se la cruzaba, sus idas y venidas eran siempre una una gran interrogante en lo poco que recordaba de ella, después de intentar estudiar en aquella Academia y empezar a aventurarse en lo que deparaba el mundo mágico para ella, ese lazo extraño que había formado con Sagitas se tensaba y estiraba muchas veces.

Unas a favor y otras en contra.

- No recordaba el clima tan frío.

Se hallaba, hacia varios kilómetros, caminando por las calles del pueblo de Ottery St. Catchpole, un poco lejos de los pasajes más concurridos, porque detestaba ser vista por cualquier persona que pudiese reconocerla, al menos lo suficiente como para querer entablar una conversación que ella no consideraba amena,

Envuelta en una capa gastada por los años, pero que conservaba los colores verduzcos, se deslizaba por un amplio jardín hasta llegar a unos arcos de medio punto, lso admiró por un momento, si su memoría no fallaba, era el hogar de alguien a quien siempre volvía, sin importar el tiempo, ni el momento, sabía que ella estaría ahí. O le dejaría el mensaje con algún elfo.

Atravesó el umbral y golpeó la entrada con fuerza, sentía la mansión ligeramente silenciosa por dentro, pero las paredes se veían tan imponentes, que suponía que por mas grito y barullo que hubiese de un lado, no llegaría hasta donde ella estaba. Se sacó la capucha y se estiró un poco a la espera que alguien apareciese.

Por un instante se sintió observada tras de sí, pero luego, con un siseo bajo, habló con sus serpientes Eris y Ares, fieles compañeras que siguieron la travesía que decidió emprender, las dejó perderse entre la maleza y se recostó sobre la puerta.

- De todas maneras, no es como que esté apurada.

Haber sobrevivido a la muerte una vez, le había dado una nueva perspectiva sobre la vida, no la apreciaba más, tan solo, no la aborrecía tanto como antes, ello le hizo recordar que Amicus debería andar por algún lado, luego de haber dejado la Gaunt, en manos de nuevos dueños, que la habían convertido en una suerte de palacio "de mala muerte", el Hipogrifo de su hermana y la promesa de las galletas perdidas se desvanecieron con los años.

Pero ahí estaba de vuelta, esperando. Como siempre.

- Que adorable

Revolvió los cabellos del chico en un gesto casi infantil, cuando de pronto lo vió cambiar de forma, su rostro se fue afinando hasta que pudo reconocer los rasgos tan notorios de Ludwig, le sacó la lengua y lo empujó con firmeza hacia un asiento.

- Ya, ya... no te molestes conmigo, sabes que me encanta jugar.

Sacó su varita y la empezó a revolotear entre sus dedos, miraba alternadamente a Afrodita y Kiara cuando el Malfoy lanzó su propuesta, apoyó la varita sobre la mesa con un golpe seco.

- Siempre habrá por estos callejones que podamos utilizar, siempre y cuando me dejen un poco de él para mis... necesidades, no sé que estamos esperando.

Se cruzó de piernas mientras se apoyaba en el respaldar de la silla, apuntó hacia una abandonada chimenea en un rincón del bar y lanzó un par de chispas para tener un poco de fuego con el que alumbrar sus planes nocturnos.

El pobre mago ya se encontraba atado en el suelo a merced de ellas. Liliana acentuó más su sonrisa cuando escuchó a Kiaramelo, notó ese brillo de nostalgia en su morada y recordó aquel época en la Academia, en sus encuentros improvisados y, porqué no, en las batallas también.

Se acercó al cuerpo del joven y lo levantó de las piernas que permanecían fuertemente atadas, mientras Afrodita proponía pasar a un lugar más 'cómodo', sus colmillos se hicieron más notorios cuando relamió sus labios.

- No me haría problema que podamos acomodarnos en un lugar más 'apropiado'

Arrastró un poco al chico por el suelo rumbo a la entrada del destartalado bar y se detuvo un segundo para hacerle pase a Kiaramelo y compañía, guardó su varita nuevamente en el Cinto.

- Yo no tengo ningún problema con el incesto -mencionó recordando que compartía línea familiar con los Malfoy- pero pasen, que yo no muerdo... no a ustedes, al menos.

Off:

Ando del cel no juzguen mi falta de cursivas xD

Off topic: Lud...

estás muerto *3*

On:

Antes que su interlocutora respondiera, sintió un escalofrío recorrer su columna, casi instintivamente sujetó con fuerza su varita, había olvidado el placer que le producía sentirla entre sus dedos, lista para lanzarse a una batalla.

Ligeramente dio media vuelta y encontró el rostro de un joven que la miraba desafiante y que apuntaba en dirección a ella, algo en la voz de ese mago no le daba la impresión de ser alguien desconocido, pero no retrocedió, no le tuvo miedo a la muerte antes y no lo tendría ahora, era como si cada parte de su ser disfrutara ese oportunidad.

- Vaya, vaya... ¿se te perdió algún enfermo por aquí? -comentó de manera burlona haciendo referencia a su vestimenta- ¿o debería darte motivos para ir a San Mungo lo más rápido posible?

Extendió su varita.

- Incárcerus

Tres cuerdas gruesas se dirigieron hacia su oponente, las tres a la altura de las piernas. No era momento de pelear a morir, lo presentía.

- No he venido a acabar contigo -agregó- aquí solo estamos teniendo una pequeña reunión familiar ¿verdad?

Antes de acabar se había unido una bruja más a la reunión, reconocía esa cabellera oscura donde fuese.

- Pobre de mí, una triste y solitaria arpía rodeada de dos banshee bu bu

Lanzó una risa algo desquiciante, antes de continuar.

- Y bueno, ¿alguien quiere hacerse cargo del "doctorcito" o me lo dejan a mi?

Nunca es suficiente, pensó

Se detuvo a pocos metros de la entrada hacia el Callejón Knockturn y suspiró.

Había abandonado los bosques hacia varias semanas, regresando al ritmo habitual de las ciudades, le molestaba un poco tener que rodearse de tantas personas y un par de veces tuvo el impulso de dar media vuelta y regresar a su pequeño retiro en la penumbra de Dean, pero ya estaba hecho, aquellos magos con los que se reencontró algunos meses antes le habían dicho que sería una buena idea, sino fuese porque en ocasiones no solía pensar mucho las cosas antes de tomar una decisión, hubiese dicho que no.

- Espero que se acuerde de mí.

"Tengo algo que quieres"

Recordaba haberlo escrito en un pedazo de pergamino, pero no sabía cuanto tardaría en llegar, afinó el olfato, podía sentir su aroma, el tiempo que pasó lejos de la naturaleza le hizo perder un poco sus dotes de Lugat pero aún podía detectar ese aroma, compartió parte de sus mejores años con ella así que ea capaz de preservarla en su memoria sensorial.

Guardó la varita en el cinto y se ajustó un poco la capucha que cubría su rostro, con un rápido vistazo a ambos lados de la calle se internó en el callejón.

Los murmullos de seres conversando entre sí no la distrajo, cada uno venía por sus propios asuntos y no eran su tema, por el momento, buscó y olfateó, como si acechara, cada vez más cerca, cada vez más rápido, hasta que sus ojos se detuvieron en una figura a un lado de unas calderas de aspecto mohoso.

Al detectar su presencia, se volteó hacia ella.

- Lo sé, siempre es mejor darme por muerta. -cambió su expresión a una media sonrisa que dejaba entrever uno de sus colmillos- Llegaste muy rápido, parece que ya no es necesario presionar el brazo para invocarte... ¿no?

Le dió una última bocanada de humo al cigarrillo a punto de consumirse entre sus dedos, era lo que quedaba de su reserva del mes.

Ese día no se hallaba refugiada en la vacía cabaña de Little Hangleton, había estado dando vueltos por las calles de Ottery, envuelta en su capa de un sólido color verde oscuro, cruzando calles y evitando negocios muy concurridos, tan solo atinó a levantar la mirada cuando la ciudad se remeció por la llegada de la bestia alada que transportaba a los miembros del Capitolio.

Liliana frunció el ceño cuando los vió descender, nunca le tuvo mucha simpatía a esa gente, creían que podían dominar y doblegar a todos los que ahí vivían, solo porque ellos tuvieron la mala fortuna de perecer bajo el abandono y la destrucción.

Llevada por su curiosidad innata se acercó un poco más hacia el grupo de gente que se iba formando, a la par que se formaba una extraña hilera de Agentes de la Paz, negó levemente con la cabeza y suspiró resignada, sospechaba lo que estaba por venir.

- Es hora de la cosecha.

Esa era una de las razones por las que detestaba tanto vivir en aquel lugar, estaba cansada de que jugaran con ellos como si fueran marionetas, siempre que se aproximaban esas fechas solía refugiarse en su escondrijo predilecto a "hibernar" esperando que todo pase, pero en aquella ocasión la pilló de sorpresa, por lo que decidió darles una oportunidad de hacer el ridíc.ulo frente a sus ojos, antes de encerrarse de nuevo en algún otro lugar.

- Victoria, honor y gloria... -murmuró interesada-

Palabras que parecían enterradas desde hace años en Ottery, palabras que le daban un nuevo sentido a su vida, la joven McDougall llevaba mucho tiempo ya lejos de toda actividad "visible" para la comunidad, no se quejaba tampoco, siempre preferió moverse de forma distante a sus semejantes, pero el ambicioso deseo de volverse la mejor de todos.

Mientras cavilaba sobre estos deseos internos, el otro representante, comenzó a detallar el tema de los mentores, sonrió de forma irónica, nadie en su sano juicio se atrevería a escogerla a ella como su Tributo, estuvo a punto de lanzar una carcajada a la sola idea pero se contuvo, mas valía apresurarse a inscribirse, o aquella vocecilla en su cabeza se atrevería a retenerla.

Avanzó con paso decidido, haciendo a un lado a las personas que se acumulaban en el camino conforme se acercaba, nadie parecía reparar en su presencia, cosa que en el fondo agradecía, hasta que se subió al estrado, dejó caer su capucha y parte de su larga cabellera castaña quedó al descubierto, ubicó el listado de nombre y anotó el suyo, mientras el murmullo, de los que solo parecían disfrutar del espectác.ulo, se acrecentaba.

o_o es la segunda vez que intento escribir aqui, se borró automaticamente mi comentario D:

En fin...

tengo una duda con mi ficha aquí linkeada: http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=84468

y en esta parte en específico:

Puntos de poder en objetos: Los asignarán los moderadores

Hechizos adicionales: Los pondrán los moderadores

Puntos de poder en criaturas: Los asignarán los moderadores

Criaturas controlables en asaltos y duelos: Los pondrán los moderadores

se supone que esa parte deberían editarla pero, no lo han hecho, lo harán? demorará? o se han olvidado? o_o solo pregunto, porque igual no avisaron y pues no sé xD a parte que antes tenía los loguitos del MM por mis criaturas y objetos registrados y bien pagados o_o pero pues nada o.o , entonces a partir de ahora ya no hay loguitos del MM por tener cosas registradas oficialmente? debi haberlos puesto yo? xD No sé.

Espero que resuelvan mis curiosidades :3 gracias!

Hola, aviso que ya corregí la actualización de mi ficha D: que la primera vez que la hice salió mal por esta cuestión de los códigos .___. pero bueno, lleva un par de días corregita así que creo que solo me toca esperar que puedan actualizarmela ustedes, espero que todo este correcto x.x ,gracias D: andaré rondando a ver que fue x.x

Actualización de Ficha de Personaje a Formato actualizado.

Datos Personales:

Nombre del Personaje: Liliana Daphne McDougall Gaunt

Sexo: Femenino

Edad: Joven n

Nacionalidad: Británica.

Familia(s): Gaunt.

Padre(s) Sanguíneo: Sophia Gaunt** - Lucas McDougall**

Padre(s) Adoptivos: Mel Black

Trabajo: --

Poderes Mágicos:

Rango Social: Unicornio de Bronce

Bando: Neutral

Rango dentro del Bando: --

Nivel de Poder Mágico: 4

Puntos de poder en objetos: Los asignarán los moderadores

Hechizos adicionales: Los pondrán los moderadores

Puntos de poder en criaturas: Los asignarán los moderadores

Criaturas controlables en asaltos y duelos: Los pondrán los moderadores

Habilidades Mágicas: --

Conocimientos Especiales:

* Conocimiento 1: Aritmancia

* Conocimiento 2: Artes Oscuras

Perfil del Personaje:

Raza: Vampiro.

Aspecto Físico: Alta de 1.72 cm, de cabellera castaña larga hasta casi la cintura, de tez clara y rostro fino, enormes ojos azules, piel suave y complexión delgada, por lo general viste una blusa blanca de manga tres cuartos, y una falda con tacones bajos, envuelta en una capa de color verde oscuro, de mirada perdida y actitud variante.

Cualidades Psicológicas: De actitud cambiante, personalidad tranquila pero por momentos explosiva, tiene un ligero transtorno de identidad disociativo, a la que se suman el exceso de dopamina en su sistema dándole un ligero comportamiento relacionado a la psicosis. Es de poca locución y detesta a los muggles, así como no guarda mucho cariño con peronas de sangre "mixta" dentro de la comunidad mágica, evidenciándolo solo cuando lo considera necesario, prefiere andar sola o en defecto no salir de casa, es tolerante al frío y odia el clima soleado.

Historia:

Merope y Morfin Gaunt, eran dos hermanos, hijos de Sorvolo Gaunt, formaban lo que parecía ser la última línea sanguínea del gran Salazar Slytherin. La historia de la joven ya es conocida por todos, pero muy pocos magos han descubierto la línea generacional que le siguió al hermano de ella.

Morfin Gaunt, mantuvo un encierro menor en la prisión para magos, Azkaban, después de cumplida su condena permaneció en la cabaña familiar, donde conoció, en una de sus tantas escapadas a Gran Hangleton, a una mujer con la que contrajo una relación fugaz y extraña, puesto que el mago no gozaba siempre de todas sus facultades mentales.

Eris, la mujer era una bruja, descendiente de los Malfoy, que habitaba en aquel lugar por motivos aún desconocidos, pero que pareció ver en la extraña personalidad del Gaunt un atrayente poderoso.

No contaba con que Morfin volvería a ser encerrado, acusado de unos asesinatos que el mismo se atribuía, pero que la bruja estaba segura, no había cometido aunque no hubiese forma de demostrarlo.

Sumida en una gran decepción, Eris abandonó Hangleton y buscó refugio con alguno de sus familiares, pero se vió rechazada al descubrirse que había quedado embarazada, mucho peor aún, de un desconocido, puesto que ella se negaba a revelar la identidad del padre, por el temor que la tildasen a ella y su futuro bebé de dementes.

Sophia fue el nombre que le impuso al fruto de aquel inusual amor, en recuerdo a la sabiduría mágica que sabía que ella había heredado de su padre, muerto en cuatro paredes y en una creciente demencia, aún entonces decidió nombrarla con el apellido Malfoy, el suyo, para evitar indiscreciones y puesto que no había logrado concretar nunca una relación con otro mago posteriormente.

La muchacha creció en una casona entre Phoenix St. y Charing Cross Rd., su educación la llevó en Hogwarts, aunque siempre trató de pasar desapercibida, uno de sus compañeros de casa, Slytherin, la seguía constantemente, a pesar que ella, heredando la personalidad hostil y solitaria de su padre, hacía de todo por alejarse del sexo opuesto.

Con el paso de los años, este joven logró ganarse parte del cariño de Sophia e iniciaron una relación tranquila al salir de la Escuela de Magia y Hechicería, la madre de ella ya había muerto, quizás producto del cansancio de cargar a cuestas un terrible secreto familiar y al parecer deseosa de acompañar en la eternidad a quien fuera el único amor de su vida.

Ignorante de todas esas cosas Sophia se casó con Lucas McDougall, el único mago capaz de pasar esa barrera impuesta por su mente tan extraña.

Liliana nació en el seno de aquella familia, instaurada en el corazón de Londres, ambos tenían estudios ya concluidos y una profesión, así que la llegada de Liliana fue, al principio, muy oportuna para la pareja.

Recibieron, a los tres años cumplidos de Liliana, una notificación del Ministerio - Departamento de Misterios, donde les indicaban que la niña debería ser llevada con carácter de urgente al mismo, puesto que habían descubierto y descifrado una profecía que coincidía con las características de ella, era necesario internarla para corroborar las investigaciones. Los McDougall se negaron rotundamente e ignoraron la misiva, a los tres días llegó otra más y se preocuparon, fue el padre quien tomó la decisión de huir del lugar. Se instalaron al Este de Glasgow en East Killbride y consiguieron una casa alejada del bullicio de la ciudad Londinense, ocultos también de cuanto personal del Ministerio se atreviera a irrumpirlos. Aquí, Liliana comenzó a desarrollar el particular gusto por los reptiles, heredado tal vez por parte de su madre, y una actitud maliciosa que probablemente vendría de su padre.

A días de cumplir los cuatro años, y luego de casi doce meses de tranquilidad, la familia recibió una visita del Ministerio, un par de magos, uno de ellos identificado como Mike Stevens, asesinó a la pareja de esposos, y raptaron a la niña llevándosela consigo, con el cuento de rescatarla. Así comenzó su encierro en el Departamento de Misterios.

Llevó muchos años de entrenamiento mágico con tutores, que no solían durar mucho, por el temperamento tan particular de la bruja, a pesar de ello, consiguió manejar la magia sin varita y la habilidad de comunicarse con las serpientes la perfeccionó.

A sus nueve años, un asalto de mortífagos al Ministerio, logró penetrar hasta el lugar donde se hallaba Liliana, fue rescatada por Mel Black, quien la llevó a la Cabaña de los Gaunt, curiosamente el lugar donde comenzó toda su historia, aunque no conociera nada al respecto. Mel Black, era parte de un grupo de magos oscuros que, después de la caída de Lord Voldemort, siguió el legado del mismo, dedicándose a construir un mundo libre de magos impuros, repudiando toda clase de mezcla y generándole problemas al Ministerio de Magia, cada que se ponían de acuerdo.

A sus once años Liliana fue llevada a Hogwarts, como correspondía, pero en el fondo no se sentía cómoda en aquel lugar, algo la llamaba a desligarse de aquellas paredes, y así descubrió un par de años después que su padre, figura que influyó mucho en el poco tiempo en que lo tuvo consigo, había pertenecido al grupo denominado como "mortífagos" y que, luego de derrocado Lord Voldemort, huyó hasta ser capturado por el Ministerio de Magia, siendo muerto en su hogar junto con su esposa; así descubrió el inicio de su verdadera línea familiar.

Huyó de Hogwarts, sin terminar los estudios y se refugió en la Mansión Malfoy Black, bajo la tutela de Angel y Nathaniel, patriarcas de ese lugar, la criaron como a una hija y pudo proseguir sus estudios en una Academia de Magia y Hechicería particular.

En una de sus salidas de investigación, llegó a parar a una posada extraña y sombría, y hubiera estado solo de pasada, de no ser porque, entre todos los indigentes que habían, se topó con una chica, que se veía sola e indefensa, entre tantos rostros extraños, tuvo una sensación extraña en el corazón, trato de saber quién era, pero el encargado del lugar no parecía acertar sobre que persona se trataba, al parecer era recién llegada y no tenía ni un solo sickle en bolsillo. Liliana pudo notar en el brillo de su triste mirada algo diferente a los demás, así que con decisión y un buen par de sandwiches de pollo con zumo de calabaza la invitó a comer con ella. Al finalizar ese día, la pequeña Polyta, pasó a ser su primera hija adoptiva, la cuidaría bajó su tutela y la ayudaría en lo que fuere.

En aquel tiempo, profesionalizando su aprendizaje de la magia, la llevó a visitar varios lugares del interior del Reino Unido, uno de ellos fue el Bosque de Dean en el Valle Wye, lugar donde fue atacada por un vampiro, sobreviviendo al mismo puesto que la raza que ostentaba el ser, los Lugat, no atacaba a matar, ello la llevó a convertirse en una especie de híbrido que rara vez gustaba de la sangre.

Se hallaba terminando sus estudios de Magia y Hechicerí, cuando un día llegaron a la Mansión de los Malfoy Black, dos pequeñas niñas, casi tan idénticas la una de la otra, Nely y Reena se volverian también hijas suyas en adopción, al igual que Polyta, sentía una especie de cariño por ellas, que siempre andaban alborotándola con sus locuras. Luego de eso, regresó donde su primera madre adoptiva, Mel, la cual no tuvo reparos en acogerla de regreso junto con sus tres hijas.

Fue en aquellas épocas donde también, llevada por las ansias de poder y aventura, se enfiló en los mortífagos junto con su hermana Sam, adoptiva al igual que ella, llevando una doble vida de perfil oscuro, ascendió de rango y se dedicó a educar a los nuevos proyectos de seguidores dentro de la Fortaleza Tenebrosa, lugar de reunión principal de todos ellos.

Pasado un tiempo de servicio, McDougall decidió enfilarse de espía, por lo que adoptó una segunda identidad, logrando infiltrarse en la Orden del Fénix, cargo que asumió por poco tiempo, pero le fue crucial para desarrollar aspectos de su propia personalidad y conocer artes que le habían sido negadas durante algún tiempo.

Ella misma, al dejar el trabajo de espía, abandonó también la Marca y mantuvo un largo viaje, lejos de todo lo que le recordara a Londres y su familia, siendo este período una especie de página en blanco en su diario mental.

Para mantenerse unida a su hermana Sam, deciden realizar un pacto/maldición, mediante el cual cada una es marcada con un tatuaje del ying-yang, Liliana en su hombro izquierda y Sam en el opuesto, ello las ayuda a mantenerse siempre en contacto y saber cuando la una necesita de la otra.

Sara Weasley fue la última hija que adoptó, después de dejar su trabajo de espía y haber conocido a esta bruja en su estadía en otro lugar, la invita a formar parte de los Gaunt, teniendo así cuatro hijas que son su adoración máxima: Polyta, Nely, Reena y Sara. Hay muchos otros jóvenes magos que llega a "adoptar" temporalmente pero que en corto tiempo se alejan de ella, por lo que son esa uatro brujas las que considera casi como si fueran de su sangre.

Años más tarde, vuelve a la Cabaña de los Gaunt, donde se contacta con su hermana Samantha mediante el tatuaje de ying-yang que lleva impregnado en su hombro izquierdo, producto de una maldición que la mantiene unida a ella y vuelve a su vida pacífica en Little Hangleton.

Leyenda: ** Personajes inventados.

Pertenencias:

Objeto Magico Legendario: --

Objetos Magicos:

Objeto 1: Varita mágica; varita de caoba, 17 centímetros, con núcleo de nervios de corazón de Basilisco.

Clasificación: AA

Puntos de poder: 20

Objeto 2: Escoba voladora, Saeta de Fuego.

Clasificación: AA

Puntos de poder: 20

Mascotas y Criaturas:

Criatura 1: Owen, lechuza macho de color negro y ojos azules

Clasificación: X y no mágicas

Puntos de poder: 10

Criatura 2: Eris, anaconda hembra de 7 metros de largo color verde oscuro

Clasificación: X y no mágicas.

Puntos de poder: 10

Criatura 3: Ares, anaconda macho de 7 metros de largo color verde oscuro

Clasificación: X y no mágicas.

Puntos de poder: 10

Total de puntos de poder: 30

Criaturas en la Reserva: --

Elfos:

* Elfo 1: Amicus.

Licencias, Tasas, Registros:

Licencia de Aparición: Obtenida

Licencia de Vuelo de Escoba: Obtenida

Otros Datos:

Otros datos:

- Tiene un tatuaje de ying-yang en el hombro izquierdo, producto de una maldición que la mantiene unida a su hermana Samantha.

- Aunque no habla pársel se entiende muy bien con sus serpientes.

Cronología de cargos: --

Premios y reconocimientos: --

Links de Interés Referentes al Personaje:

Link a Bóveda Personal: Bóveda de Liliana McDougall

Link a Bóveda Trastera: --

Link a Bóveda de Negocio: --

Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda Familia Gaunt

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Tengo la vaga esperanza de que esté bien hecho =/ no sé en verdad , leí el tópic y traté de entenderlo así que según creo estoy actualizando mi ficha con el nuevo formato, solo que no he puesto los Logos del Ministerio , que supongo que deben seguir ahí, que algún mode los ponga nose, puesto que mis animales, elfo y pertenencias son oficiales y están registrados, y pagados x.x Así que si hay algún problema, no me peguen D: solo díganme en que lo corrijo o.o Gracias o.o

Ahora si *O*

EDIT: Porque hubo un error de dedo D: sorry x.x

Hola o.o

vengo aqui porque.... postee para actualizar mi ficha de personaje y me he topado con u nproblema: El editor ha dejado horrible todo mi post, sera porque no le entiendo bien aún, pero tengo partes del texto que estan en color negro y no se leen a menos que la remarques con el mouse o partes que estan mal separadas y asi ;___;

Me desespera que sea tan feo porque luego pensaran que hice mal mi post u.u pero no entiendo este editor >,<

bueno, solo pasaba a avisar que si ven mi ficha no se asusten y me den una manita de puerco (?)

gracias .__.

Actualización de Ficha de Personaje a Formato actualizado.

Nombre del Personaje: Liliana Daphne McDougall Malfoy

Sexo: Femenino

Edad: Joven.

Nacionalidad: Británica.

Familia(s): Gaunt.

Padre(s) Sanguíneo: Mel Black

Padre(s) Adoptivos: --

Trabajo: --

Rango Social: Unicornio de Bronce

Bando: Neutral

Rango dentro del Bando: --

Nivel de Poder Mágico: 4

Puntos de poder en objetos: Los asignarán los moderadores

Hechizos adicionales: Los pondrán los moderadores

Puntos de poder en criaturas: Los asignarán los moderadores

Criaturas controlables en asaltos y duelos: Los pondrán los moderadores

Habilidades Mágicas: --

Conocimientos Especiales:

* Conocimiento 1: Aritmancia

* Conocimiento 2: Artes Oscuras

Perfil del Personaje:

Raza: Vampiro.

Aspecto Físico: Alta de 1.72 cm, de cabellera castaña larga hasta casi la cintura, de tez clara y rostro fino, enormes ojos azules, piel suave y complexión delgada, por lo general viste una blusa blanca de manga tres cuartos, y una falda con tacones bajos, envuelta en una capa de color verde oscuro, de mirada perdida y actitud variante.

Cualidades Psicológicas: De actitud cambiante, personalidad tranquila pero por momentos explosiva, tiene un ligero transtorno de identidad disociativo, a la que se suman el exceso de dopamina en su sistema dándole un ligero comportamiento relacionado a la psicosis.

Es de poca locución y detesta a los muggles, así como no guarda mucho cariño con peronas de sangre "mixta" dentro de la comunidad mágica, evidenciándolo solo cuando lo considera necesario, prefiere andar sola o en defecto no salir de casa, es tolerante al frío y odia el clima soleado

Historia: Merope y Morfin Gaunt, eran dos hermanos, hijos de Sorvolo Gaunt, formaban lo que parecía ser la última línea sanguínea del gran Salazar Slytherin.

La historia de la joven ya es conocida por todos, pero muy pocos magos han descubierto la línea generacional que le siguió al hermano de ella.

Morfin Gaunt, mantuvo un encierro menor en la prisión para magos, Azkaban, después de cumplida su condena permaneció en la cabaña familiar, donde conoció, en una de sus tantas escapadas a Gran Hangleton, a una mujer con la que contrajo una relación fugaz y extraña, puesto que el mago no gozaba siempre de todas sus facultades mentales.

La mujer era una bruja, descendiente de los Malfoy, que habitaba en aquel lugar por motivos aún desconocidos, pero que pareció ver en la extraña personalidad del Gaunt un atrayente poderoso.

No contaba con que volvería a ser encerrado, acusado de unos asesinatos que el mismo se atribuía, pero que la bruja estaba segura, no había cometido aunque no hubiese forma de demostrarlo.

Sumida en una gran decepción, abandonó Hangleton y buscó refugio con alguno de sus familiares, pero se vió rechazada al descubrirse que había quedado embarazada, mucho peor aún, de un desconocido, puesto que ella se negaba a revelar la identidad del padre, por el temor que la tildasen a ella y su futuro bebé de dementes.

Sophie fue el nombre que le impuso al fruto de aquel inusual amor, en recuerdo a la sabiduría mágica que sabía que ella había heredado de su padre, muerto en cuatro paredes y en una creciente demencia, aún entonces decidió nombrarla con el apellido Malfoy, el suyo, para evitar indiscreciones y puesto que no había logrado concretar nunca una relación con otro mago posteriormente.

La muchacha creció en una casona entre Phoenix St. y Charing Cross Rd., su educación la llevó en Hogwarts, aunque siempre trató de pasar desapercibida, uno de sus compañeros de casa, Slytherin, la seguía constantemente, a pesar que ella, heredando la personalidad hostil y solitaria de su padre, hacía de todo por alejarse del sexo opuesto.

Con el paso de los años, este joven logró ganarse parte del cariño de Sophie e iniciaron una relación tranquila al salir de la Escuela de Magia y Hechicería, la madre de ella ya había muerto, quizás producto del cansancio de cargar a cuestas un terrible secreto familiar y al parecer deseosa de acompañar en la eternidad a quien fuera el único amor de su vida.

Ignorante de todas esas cosas Sophie se casó con Lucas McDougall, el único mago capaz de pasar esa barrera impuesta por su mente tan extraña.

Liliana nació en el seno de aquella familia, instaurada en el corazón de Londres, ambos tenían estudios ya concluidos y una profesión, así que la llegada de Liliana fue, al principio, muy oportuna para la pareja.

Recibieron, a los tres años cumplidos de Liliana, una notificación del Ministerio - Departamento de Misterios, donde les indicaban que la niña debería ser llevada con carácter de urgente al mismo, puesto que habían descubierto y descifrado una profecía que coincidía con las características de ella, era necesario internarla para corroborar las investigaciones.

Los McDougall se negaron rotundamente e ignoraron la misiva, a los tres días llegó otra más y se preocuparon, fue el padre quien tomó la decisión de huir del lugar.

Se instalaron al Este de Glasgow en East Killbride y consiguieron una casa alejada del bullicio de la ciudad Londinense, ocultos también de cuanto personal del Ministerio se atreviera a irrumpirlos.

Aquí, Liliana comenzó a desarrollar el particular gusto por los reptiles, heredado tal vez por parte de su madre, y una actitud maliciosa que probablemente vendría de su padre.

A días de cumplir los cuatro años, y luego de casi doce meses de tranquilidad, la familia recibió una visita del Ministerio, un par de magos, uno de ellos identificado como Mike Stevens, asesinó a la pareja de esposos, y raptaron a la niña llevándosela consigo, con el cuento de rescatarla. Así comenzó su encierro en el Departamento de Misterios.

Llevó muchos años de entrenamiento mágico con tutores, que no solían durar mucho, por el temperamento tan particular de la bruja, a pesar de ello, consiguió manejar la magia sin varita y la habilidad de comunicarse con las serpientes la perfeccionó.

A sus nueve años, un asalto de mortífagos al Ministerio, logró penetrar hasta el lugar donde se hallaba Liliana, fue rescatada por Mel Black, quien la llevó a la Cabaña de los Gaunt, curiosamente el lugar donde comenzó toda su historia, aunque no conociera nada al respecto.

Mel Black, era parte de un grupo de magos oscuros que, después de la caída de Lord Voldemort, siguió el legado del mismo, dedicándose a construir un mundo libre de magos impuros, repudiando toda clase de mezcla y generándole problemas al Ministerio de Magia, cada que se ponían de acuerdo.

A sus once años Liliana fue llevada a Hogwarts, como correspondía, pero en el fondo no se sentía cómoda en aquel lugar, algo la llamaba a desligarse de aquellas paredes, y así descubrió un par de años después que su padre, figura que influyó mucho en el poco tiempo en que lo tuvo consigo, había pertenecido al grupo denominado como "mortífagos" y que, luego de derrocado Lord Voldemort, huyó hasta ser capturado por el Ministerio de Magia, siendo muerto en su hogar junto con su esposa; así descubrió el inicio de su verdadera línea familiar.

Huyó de Hogwarts, sin terminar los estudios y se refugió en la Mansión Malfoy Black, bajo la tutela de Angel y Nathaniel, patriarcas de ese lugar, la criaron como a una hija y pudo proseguir sus estudios en una Academia de Magia y Hechicería particular.

En aquel tiempo, profesionalizando su aprendizaje de la magia, la llevó a visitar varios lugares del interior del Reino Unido, uno de ellos fue el Bosque de Dean en el Valle Wye, lugar donde fue atacada por un vampiro, sobreviviendo al mismo puesto que la raza que ostentaba el ser no atacaba a matar, ello la llevó a convertirse en una especie de híbrido que rara vez gustaba de la sangre.

Terminados sus estudios mágicos decidió dejar a los Malfoy Black y regresar donde su primera madre adoptiva, Mel, la cual no tuvo reparos en acogerla de regreso.

Fue en aquellas épocas donde también, llevada por las ansias de poder y aventura, se enfiló en los mortífagos junto con su hermana Sam, adoptiva al igual que ella, llevando una doble vida de perfil oscuro, ascendió de rango y se dedicó a educar a los nuevos proyectos de seguidores dentro de la Fortaleza Tenebrosa, lugar de reunión principal de todos ellos.

Pasado un tiempo de servicio, McDougall decidió enfilarse de espía, por lo que adoptó una segunda identidad, logrando infiltrarse en la Orden del Fénix, cargo que asumió por poco tiempo, pero le fue crucial para desarrollar aspectos de su propia personalidad y conocer artes que le habían sido negadas durante algún tiempo.

Ella misma, al dejar el trabajo de espía, abandonó también la Marca y mantuvo un largo viaje, lejos de todo lo que le recordara a Londres y su familia, siendo este período una especie de página en blanco en su diario mental.

Años más tarde, vuelve a la Cabaña de los Gaunt, donde se contacta con su hermana Samantha mediante el tatuaje de ying-yang que lleva impregnado en su hombro izquierdo, producto de una maldición que la mantiene unida a ella y vuelve a su vida pacífica en Little Hangleton.

Objeto Magico Legendario: --

Objetos Magicos:

Objeto 1: Varita mágica; varita de caoba, 17 centímetros, con núcleo de nervios de corazón de Basilisco.

Clasificación: AA

Puntos de poder: 20

Objeto 2: Escoba voladora; Saeta de Fuego.

Clasificación: AA

Puntos de poder: 20

Mascotas y Criaturas:

Criatura 1: Owen, lechuza macho de color negro y ojos azules

Clasificación: X y no mágicas

Puntos de poder: 10

Criatura 2: Eris, anaconda hembra de 7 metros de largo color verde oscuro

Clasificación: X y no mágicas.

Puntos de poder: 10

Criatura 3: Ares, anaconda macho de 7 metros de largo color verde oscuro

Clasificación: X y no mágicas.

Puntos de poder: 10

Total de puntos de poder: 30

Criaturas en la Reserva: --

Elfos:

* Elfo 1: Amicus.

Licencia de Aparición: Obtenida

Licencia de Vuelo de Escoba: Obtenida

Otros datos:

- Tiene un tatuaje de ying-yang en el hombro izquierdo, producto de una maldición que la mantiene unida a su hermana Samantha.

- Aunque no habla pársel se entiende muy bien con sus serpientes.

Cronología de cargos: --

Premios y reconocimientos: --

Link a Bóveda Personal: Bóveda de Liliana McDougall

Link a Bóveda Trastera: --

Link a Bóveda de Negocio: --

Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda Familia Gaunt

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Tengo la vaga esperanza de que esté bien hecho =/ no sé en verdad , leí el tópic y traté de entenderlo así que según creo estoy actualizando mi ficha con el nuevo formato, solo que no he puesto los Logos del Ministerio , que supongo que deben seguir ahí, que algún mode los ponga nose, puesto que mis animales, elfo y pertenencias son oficiales y están registrados, y pagados x.x Así que si hay algún problema, no me peguen D: solo díganme en que lo corrijo o.o

Gracias o.o

EDIT:

Saben porque edito? se ve feo ;___; Y no logro hacer que se vea bien, no entiendo este editor u.u *sufre*

Algo no estaba bien.

La desaparición momentánea la mantuvo más en silencio, si podía, curiosamente la voz en su cabeza no se atrevió a emitir algún comentario al asunto ya desplegado, cuando vieron regresar a la figura de Katara, levantó levemente una ceja.

- Así sí habían problemas -susurró-

Escuchó atenta las indicaciones memorizando el nombre de la Oficina a la que tendría que ir junto con Sol, miró de reojo a su compañera, la mujer terminó de hablar y en segundos ya desaparecía, para ellos el trabajo recién comenzaba.

- Bien, entonces...

Se acercó a Sol, hacia tiempo no se cruzaba con ella, incluso en aquel ambiente de trabajo se sentía extrañamente movida, acostumbrada a tratarla en otras circunstancias; desechando esas ideas absurdas movió ligeramente su cabellera.

- ¿Vamos al Ministerio no?

Al menos aún conservaba su permiso de aparición, hubiera maldecido si le pasaba algo al mismo, solo porque ya no era... movió la varita al mismo tiempo que su compañera, desapareciendo rumbo al Hall del Ministerio de Magia, trabajo, trabajo... a por elllo.

Escuchó con atención la ligera advertencia de la mujer, las palabras se formaban como pequeñas imágenes en su cabeza mientras asentía, la melodía de su voz casi podía compararse al susurro de un felino, sus orbes azules se desenfocaron un segundo al girar en torno a los demás.

-Lo lamento, procuraré en lo mínimo de demostrar tales faltas y que esto no vuelva a suceder

Su tono de voz silabeante respondió y aguardó a que siguiera explicando.

Con cuidado se acomodó en una de las sillas, cruzando ligeramente las piernas.

¿Y... decimos tan tan?

Mordió su labio inferior, desde que había regresado tambien consiguió volver aquella voz en su cabeza, su atípico "otro yo" como solía calificarlo de vez en cuanto, nunca conversaba mucho pero aparecía siempre para soltar el comentario perfecto para la ocasión.

Juso como en aquel momento.

Dale un poco de comocidad al asunto, o terminaré descuartizando a alguien y... no será del gusto público.

- Deberías practicarlo primero contigo -murmuró para sus adentros-

Sí claro, apareces y ya quieres irte tan rápido, no me hagas ser irónica.

- Sólo... -rodó de manera sutil la vista- sólo mantente quieta

Aún le parecía extraño que la hubiesen aceptado en el puesto de trabajo, los asuntos referentes a la paga nunca le habían preocupado mucho; recordaba, hacia muchos años atrás, que si había algo que le gustaba era darse el lujo de trabajar y bien, al menos aquí tendría conque distraerse, podría incluso ser... divertido.

Siempre y cuando recuerdes que los entrevistados... no se pueden comer.

Primer día y tarde...

- Cállate

La castaña caminaba enrumbándose a la entrada del enorme edificio de mármol, pequeñas gotas resbalaban de letrero que indicaba su denominación, El Profeta le dejaba paso mientras inconcientemente se refugiaba de la lluvia.

Al pasar al gran Hall de entrada descubrió su cabellera castaña, libre ya de las inclemencias del tiempo, un elfo doméstico se acercó con un ejemplar del periódico y la mejor de las sonrisas, la joven rodó la visa y le hizo una seña con la mano, como quien espanta un mosquito.

- Busco a la... Señorita Lyra Katara Malfoy. He sido aceptada para poder laborar aquí.

La criatura que aún sostenía el periódico en la mano le miró extrañado.

Voldemort bendiga tu sentido de la sociabilidad.

Se mordió el labio inferior y se inclinó hacia el elfo que aún no sabía que responderle.

- Me citaron hoy para que pudiese reunirme con ella, ¿Serías tan amable de indicarme por donde están?

Le miró un segundo más y sacudió su pequeña cabecita tratando de entender lo que acababa de pasar, ella solo sonrió resuelta y le siguió, después de conversar con otro elfo por unos breves segundos pareció indicarle un camino diferente, los ascensores la espraban.

- Vamos hacia el cuarto piso señorita.

Deberían demandarte por ser tan bipolar ¿sabes?

Mientras ingresaban a esas cuatro paredes, tres adornadas con espejos, sonrió maliciosamente.

- Sin mí no existirías tú

- ¿Dijo algo señorita?

- Ehm... digo que si no existian antes tantas cosas agradables a la visa en este lugar

- Oh... muchas cosas han cambiado por aquí

La charla extensa del elfo la perdió por unos segundos al ver su reflejo en el espejo de la izquierda, una joven de enormes ojos azules le devolvía la vista, algo cansada por lo vivido, pero de un profundo vacío peculiar en ella, sonrió de nuevo cuando con un ligero chirrido llegaron al destino.

- ... y así fue como epantamos a las doxys del cuarto de fotografía.

- Interesante... -soltó al notar la voz que anunciaba la llegada y salía hacia el largo pasillo-

- La sala de Juntas señortia, es aquella puerta.

Con una seña de la cabeza a modo de entendimiento avanzó, su falda ligeramente cubierta por la capa, al igual que la blusa le daban un aire semi-formal, típico en ella que tampoco escapaba a la oportunidad de usar una túnica más a su estilo.

En la puerta indicada se detuvo al tocar, juraría haber escuchado la mención a su nombre del otro lado, cerró el puño en el aire y aguardó en silencio, maldecía por haber llegado un tanto fuera de la hora pactada, la voz sonaba entre autoritaria y suave, un ligero escalofrio en su nuca y apartó esa sensación moviendo la cabeza. Tal vez era que solo tenía la voz muy familiar.

¿Un chocolate no nos caería mal a esta hora sabes?

- Oh... cállate de una vez. -sentenció-

Dió un par de golpes y simplemente esperó.

------------

Lo siento o.o no vi el MP D:

Ya vine o.o

o.o

FICHA DE PERSONAJE

Datos Personales:

Nombre del Personaje: Liliana Daphne McDougall Gaunt

Sexo: Femenino

Edad: Adulto Joven

Estado Civil: --

Nacionalidad: Británica.

Familia(s):
* Familia Sanguínea - Gaunt
* Familia Adoptiva - Malfoy

Padre(s) Sanguíneo: Sophia Gaunt** - Lucas McDougall**

Padre(s) Adoptivos:

Trabajo: --

 

Poderes Mágicos:

Puntos de poder en objetos y pociones: 40

Hechizos adicionales:

Puntos de poder en criaturas: 30

Criaturas controlables en asaltos y duelos:

Habilidades Mágicas:
* Habilidad 1
* Habilidad 2
* Habilidad 3

Conocimientos Especiales:
* Conocimiento 1: Aritmancia
* Conocimiento 2: Artes Oscuras

Medallas:
*
*
*

 

Perfil del Personaje:

Raza: Vampiro.

Aspecto Físico: Alta de 1.72 cm, de cabellera castaña larga hasta casi la cintura, de tez clara y rostro fino, enormes ojos azules, piel suave y complexión delgada, por lo general viste una blusa blanca de manga tres cuartos, y una falda con tacones bajos, envuelta en una capa de color verde oscuro, de mirada perdida y actitud variante.

Cualidades Psicológicas: De actitud cambiante, personalidad tranquila pero por momentos explosiva, tiene un ligero trastorno de identidad disociativo, provocando un comportamiento relacionado a la psicosis. Es de poca locución y detesta a los muggles, así como no guarda mucho cariño con personas de sangre "mixta" dentro de la comunidad mágica, evidenciándolo solo cuando lo considera necesario, prefiere andar sola o en defecto no salir de casa, es tolerante al frío y odia el clima soleado.

Historia:
 

Merope** y Morfin Gaunt**, eran dos hermanos, hijos de Sorvolo Gaunt**, y formaban lo que parecía ser la última línea sanguínea del gran Salazar Slytherin. La historia de la joven ya es conocida por todos, pero muy pocos magos han descubierto la línea generacional que le siguió al hermano de ella.

Morfin Gaunt**, mantuvo un encierro menor en la prisión para magos, Azkaban, después de cumplida su condena permaneció en la cabaña familiar, donde conoció, en una de sus tantas escapadas a Gran Hangleton, a una mujer con la que contrajo una relación fugaz y extraña, puesto que el mago no gozaba siempre de todas sus facultades mentales.

Eris**, una bruja descendiente de los Malfoy, que habitaba en aquel lugar por motivos aún desconocidos, pero que pareció ver en la extraña personalidad del Gaunt un atrayente poderoso.

No contaba con que Morfin volvería a ser encerrado, acusado de unos asesinatos que el mismo se atribuía, pero que la bruja estaba segura, no había cometido aunque no hubiese forma de demostrarlo.

Sumida en una gran decepción, Eris abandonó Hangleton y buscó refugio con alguno de sus familiares, pero se vió rechazada al descubrirse que había quedado embarazada, mucho peor aún, de un desconocido, puesto que ella se negaba a revelar la identidad del padre, por el temor que la tildasen a ella y su futuro bebé de dementes.

Sophia fue el nombre que le impuso al fruto de aquel inusual amor, en recuerdo a la sabiduría mágica que sabía que ella había heredado de su padre, muerto en cuatro paredes y en una creciente demencia, aún entonces decidió nombrarla con el apellido Malfoy, el suyo, para evitar indiscreciones y puesto que no había logrado concretar nunca una relación con otro mago posteriormente.

La muchacha creció en una casona entre Phoenix St. y Charing Cross Rd., su educación la llevó en Hogwarts y aunque siempre trató de pasar desapercibida, uno de sus compañeros de casa, Slytherin, la seguía constantemente, a pesar que ella, heredando la personalidad hostil y solitaria de su padre, hacía de todo por alejarse del sexo opuesto.

Con el paso de los años, este joven logró ganarse parte del cariño de Sophia e iniciaron una relación tranquila al salir de la Escuela de Magia y Hechicería, la madre de ella ya había muerto, quizás producto del cansancio de cargar a cuestas un terrible secreto familiar y al parecer deseosa de acompañar en la eternidad a quien fuera el único amor de su vida.

Ignorante de todas esas cosas Sophia se casó con Lucas McDougall, el único mago capaz de pasar esa barrera impuesta por su mente tan extraña.

Liliana nació en el seno de aquella familia, instaurada en el corazón de Londres, ambos tenían estudios ya concluidos y una profesión, así que la llegada de Liliana fue al principio, muy oportuna para la pareja.

Recibieron, a los tres años cumplidos de Liliana, una notificación del Ministerio - Departamento de Misterios, donde les indicaban que la niña debería ser llevada con carácter de urgencia al mismo, puesto que habían descubierto y descifrado una profecía que coincidía con las características de ella, era necesario internarla para corroborar las investigaciones. Los McDougall se negaron rotundamente e ignoraron la misiva, a los tres días llegó otra más y se preocuparon, fue el padre quien tomó la decisión de huir del lugar. Se instalaron al Este de Glasgow en East Killbride y consiguieron una casa alejada del bullicio de la ciudad Londinense, ocultos también de cuanto personal del Ministerio se atreviera a irrumpirlos. Aquí, Liliana comenzó a desarrollar el particular gusto por los reptiles, heredado tal vez por parte de su madre, y una actitud maliciosa que probablemente vendría de su padre.

A días de cumplir los cuatro años, y luego de casi doce meses de tranquilidad, la familia recibió una visita del Ministerio, un par de magos, uno de ellos identificado como Mike Stevens**, asesinó a la pareja de esposos, y raptaron a la niña llevándosela consigo, con el cuento de rescatarla. Así comenzó su encierro en el Departamento de Misterios.

Llevó muchos años de entrenamiento mágico con tutores, que no solían durar mucho por el temperamento tan particular de la bruja, a pesar de ello, consiguió manejar con destreza los hechizos y la habilidad de entenderse con las serpientes, aunque no hablara pársel, la perfeccionó.

A sus nueve años, un asalto de mortífagos al Ministerio, logró penetrar hasta el lugar donde se hallaba Liliana, fue rescatada por Mel Black quien la llevó a la Cabaña de los Gaunt, curiosamente el lugar donde comenzó toda su historia, aunque no conociera nada al respecto. Mel Black, era parte de un grupo de magos oscuros que, después de la caída de Lord Voldemort siguió el legado del mismo, dedicándose a construir un mundo libre de magos impuros, repudiando toda clase de mezcla y generándole problemas al Ministerio de Magia, cada que se ponían de acuerdo.

A sus once años Liliana fue llevada a Hogwarts, como correspondía, pero en el fondo no se sentía cómoda en aquel lugar, algo la llamaba a desligarse de aquellas paredes, y así descubrió un par de años después que su padre, figura que influyó mucho en el poco tiempo en que lo tuvo consigo, había pertenecido al grupo denominado como "mortífagos" y que, luego de derrocado Lord Voldemort, huyó hasta ser capturado por el Ministerio de Magia, siendo muerto en su hogar junto con su esposa; así descubrió el inicio de su verdadera línea familiar.

Huyó de Hogwarts, sin terminar los estudios y se refugió en la Mansión Malfoy Black, bajo la tutela de Angel Black* y Nathaniel Malfoy*, patriarcas de ese lugar, la criaron como a una hija y pudo proseguir sus estudios en una Academia de Magia y Hechicería particular.

En una de sus salidas de investigación, llegó a parar a una posada extraña y sombría, y hubiera estado solo de pasada, de no ser porque entre todos los indigentes que habían se topó con una chica, que se veía sola e indefensa, entre tantos rostros extraños tuvo una sensación extraña en el corazón, trato de saber quién era, pero el encargado del lugar no parecía acertar sobre qué persona se trataba, al parecer era recién llegada y no tenía ni un solo sickle en bolsillo. Liliana pudo notar en el brillo de su triste mirada algo diferente a los demás, así que con decisión y un buen par de sandwiches de pollo con zumo de calabaza la invitó a comer con ella. Al finalizar ese día, la pequeña Polyta*, pasó a ser su primera hija adoptiva, la cuidaría bajo su tutela y la ayudaría en lo que fuere.

En aquel tiempo, profesionalizando su aprendizaje de la magia, llegó a visitar varios lugares del interior del Reino Unido, uno de ellos fue el Bosque de Dean en el Valle Wye, lugar donde fue atacada por un vampiro, sobreviviendo al mismo puesto que la raza que ostentaba el ser, los Lugat, no atacaba a matar, ello la llevó a convertirse en una especie de híbrido que rara vez gustaba de la sangre.

Se hallaba terminando sus estudios de Magia y Hechicería, cuando un día llegaron a la Mansión de los Malfoy Black, dos pequeñas niñas, casi tan idénticas la una de la otra, Nely* y Reena* se volverian también hijas suyas en adopción, al igual que Polyta Lupin*, sentía una especie de cariño por ellas, que siempre andaban alborotándola con sus locuras. Luego de eso, regresó donde su primera madre adoptiva, Mel*, la cual no tuvo reparos en acogerla de regreso junto con sus tres hijas.

Fue en aquellas épocas donde también, llevada por las ansias de poder y aventura, se enfiló en los mortífagos junto con su hermana Sam, adoptiva al igual que ella, llevando una doble vida de perfil oscuro, ascendió de rango y se dedicó a educar a los nuevos proyectos de seguidores dentro de la Fortaleza Tenebrosa, lugar de reunión principal de todos ellos.

Pasado un tiempo de servicio, McDougall decidió enfilarse de espía, por lo que adoptó una segunda identidad, logrando infiltrarse en la Orden del Fénix, cargo que asumió por poco tiempo, pero le fue crucial para desarrollar aspectos de su propia personalidad y conocer artes que le habían sido negadas durante algún tiempo. Siendo este episodio crítico en ella hasta el punto que le costaría permanecer con vida, ya que su segunda personalidad se había apoderado por completo de ella en apariencia y esencia, gracias a sus esfuerzos mágicos pudo 'acabar' con ese ente en el que se convirtió durante mucho tiempo, llegando a separar aquella parte 'noble' que quedaba en ella, dejando un ser frío casi sin consciencia.

Siendo ya ella misma y al dejar el trabajo de espía, abandonó también la Marca y mantuvo un largo viaje, lejos de todo lo que le recordara a Londres y su familia, siendo este período una especie de página en blanco en su diario mental.

Para mantenerse unida a su hermana Sam, deciden realizar un pacto/maldición, mediante el cual cada una es marcada con un tatuaje del ying-yang, Liliana en su hombro izquierda y Sam en el opuesto, ello las ayuda a mantenerse siempre en contacto y saber cuando la una necesita de la otra.

Sara Weasley* fue la última hija que adoptó, después de dejar su trabajo de espía y haber conocido a esta bruja en su estadía en otro lugar, con el paso de los años entre sus viajes, tanto ellas cuatro, como otros hijos que llega a adoptar tomaron su propio rumbo, quedando sola en la actualidad, todas sus relaciones amorosas quedaron enterradas bajo un lugar muy profundo en su memoria.

En la actualidad ha retomado el rumbo hacia Ottery St. Catchpole, esperando.

Leyenda:
** Personajes inventados.
* Personajes inactivos
 

Pertenencias:

Objeto Mágico Legendario:

Objetos Mágicos:

Clasificación A:

Clasificación AA:

varita mágica
Escoba voladora, Saeta de Fuego.

Clasificación AAA:

Clasificación AAAA:

Clasificación AAAAA:

Pociones Mágicas:

Clasificación A:

Clasificación AA:

Clasificación AAA:

Clasificación AAAA:

Clasificación AAAAA:

Criaturas Mágicas:

Clasificación X:

lechuza
anaconda (2)

Clasificación XX:

Clasificación XXX:

Clasificación XXXX:

Clasificación XXXXX:

Criaturas en la Reserva:

Libros de Hechizos:

Libro:

Poderes de Criaturas:

Tipo de poder:

Consumibles en Batallas:

Nombre:

Elfos:
* Elfo 1: Amicus.
* Elfo 2: ---


 

Licencias, Tasas, Registros:

Licencia de Aparición: Obtenida

Licencia de Vuelo de Escoba: Obtenida

Personajes Secundarios:
* Personaje 1
* Personaje 2
* Personaje 3
* Personaje 4
* Personaje 5

 

Otros Datos:

Otros datos:
- Tiene un tatuaje de ying-yang en el hombro izquierdo, producto de una maldición que la mantiene unida a su hermana Samantha.
- Aunque no habla pársel se entiende muy bien con sus serpientes.
- Varita mágica; varita de caoba, 17 centímetros, con núcleo de nervios de corazón de Basilisco.
- Owen, lechuza macho de color negro y ojos azules
- Eris, anaconda hembra de 7 metros de largo color verde oscuro
- Ares, anaconda macho de 7 metros de largo color verde oscuro

Cronología de cargos:
- Profesora de Rol Básico en la Academia - 2008
- Reportera de El Profeta - 2010

Premios y reconocimientos: 

Links de Interés Referentes al Personaje:

Link al Perfil de Comprador MM: --
Link a Bóveda Personal: Bóveda Nº 84560
Link a Bóveda Trastero: --
Link al Laboratorio de Fabricación: Bóveda nº XXXXX
Link a Bóveda de Negocio: --
Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda Familia Gaunt
Link a Bóveda Familiar 2: Bóveda Familia Malfoy