Ada Camille Dumbledore

hay cariño bienvenido entonces como mi nuevo bebe, yo pues me siento muy felí z de tenerte como hijo es un honor y espero poderte guiar poe el mundo magico. ahm en estos dias te presento a tus hermanas, estan un poco ocupadas espero poder encontrarlas... entonces ya veo q estas en el arbol te invito a pasar por la academia y por el castillo para q podas acomodarte en tu habitacion... detalle importante tendras un hermanito en casi dos meses (no soy un conejo sally -.-XXD) pero bueno circunstancias... asi q bueno los veo por el castillo con mi barrigota magica besos

Habia salido de la tienda para acompañar a Sagitas y a mi madrina Cye a un local mas alla a comer pasteles de chocolate con leche caliente, por lo menos ese habia sido mi antojo, aunque mi verdadera razon era que joaquin estaba en su oficina y temia se disgustara, apenas nos hablabamos por medio de nuestros elfos y para mi tranquilidad era lo mejor. Tenía ya casi siete meses y el ya sabia que mi bebe era el resultado de aquella noche de tragos y pociones en el local, me odiaba y lo entendia, por eso no me le acercaba. Camine hasta la puerta del local y vi a Xell saliendo de allí, le salude con la mano y la vi alejarse felíz, la varita era muy importante para un mago. acaricie como cada vez que entraba el grabado del arbol familiar de los ollivanders, pero esta vez fije la vista en el nombre de mis hijos, a los que extrañaba enormemente y al lado estaria el nombre de mi bebe, de eso estaba segura, seria el nuevo brote de un arbol genealogico muy desaparecido ya para los magos. Ingrese y allí estaba Joaquin,en frente al mostrador poniendole a escoger varitas a un joven cliente, sonreí y seguí hacia mi oficina, subi con dificultad las escaleras y tuve detenerme en ellas para darme fuerza. Respire con dificultad y suspire. Volvi a seguir y llegue a la oficina cansada. Me acomode en la silla, trate de respirar suavecito... Era normal las escaleras eran demasiado empinadas y ya mi vientre estaba muy grande, lo acaricie con una sonrisa.

hola Laimi de mi corazon... eres bienvenida a casa y siempre lo seras... esta siempre.ha sido y sera tu hogar. Alexander pues ya que la.competencia a desaparecido poe unos dias jajaja (siento.la mirada de Sally mirandome por algun lado)... puea escoge entre ambas corazon... Sally es buena mamá y bueno yo soy mejor que ella (me cubro del zape), pero tu debes escoger... somos una gran democracia xxd asi que hay tenes a la rubia (Sally ) y a la.pelipurpura xd en este caso yo ( Selene Ariane)... avisanos cual eliges... besos

La joven Xell se notaba preocupada, no dije nada pero, estaba segura que esa varita se habia dañado en un ataque, habia sufrido daño pero la fuerza de su dueña la habia protegido de terminar rota. Poca gente lo sabia o evitaba saberlo, pero la varita no hace al mago, es la fuerza del mago la que le da el poder a la varita...canaliza ese poder y lo centra en su objetivo. Cuando la dí las noticias me abrazo con emocion, sentía un extraño afecto por ella, ademas de saber que Hyattie antes de morir me habia dejado como legado cuidara y velar por su bondad. - ¿En verdad estará bien? ¿En verdad se ha salvado? Asentí a su pregunta - ¿Cuándo puedo llevarme a la paciente a casa? Reí ante su comentario, y ladee la cabeza con picardia y me puse seria como medico irgiendome de más - La paciente estara lista en unas horas, asi que si quieres puedes ir y volver, prometo cuidarla mientras vuelves, necesitamos que se consolide la madera. Los hechizos ya hicieron lo suyo y ahora la recina se seca... Consentí su mejilla con ternura

El elfo que habia entrado se habia distraido y vi a la joven Xell tan apurada que le pedí a mi elfina que se encargara de él y fui directo al taller a reparar esa varita, era de cudiado la reparación porque cualquier movimiento que yo realizara de manera indebida, era fatal para aquella. La coloque en el torno y saque a Bast para realizar el arreglo, coloque varios hechizos sobre esta, la madera deberia ser regenerada en el lugar que habia la falta y ser compacta para que se integrara con el nucleo para crear la magia que da la varita a un mago, el canalizador de su poder. Varios hechizos hicieron que la varita se regenerara, luego con otro hechizo lance un recubrimiento de barniz especial, para que quedase soldada la reparacion, estaria perfecta tras secarse. Con una floritura la eleve hasta ponerla sobre un terciopelo y con un hechizo de luz del sol que se secase tras unos minutos, y estaria lista. Salí a ver en el sofa de la entrada del local en donde estaba Xell. - bueno no te angusties mas, ya estara lista, el defecto de la madera era poco y ademas es una gran varita, cuando se seque estar lista para que la uses... Sonrei al decirselo porque sabia que estaria feliz y más tranquila

La Joven Xell estaba explicandome su problema con su varita, al parecer esta estaba rota, pero no veía una lesion total de la madera, por lo que creía que el nucleo debia estar intacto. Le sonreí con amabilidad y tome en mis manos la varita, tenía un poder delicioso ancestral, me agradaba era una varita fuerte pero llena de amabilidad. - tranquila pequeña, puedo repararla... la madera esta rota pero veo que el nucleo esta intacto, así que sera sencillo repararla... no te angusties... En ese instante se acerco otro cliente al negocio e ingreso a este buscando algo, sonrei - buen dia señor... digame en que puedo ayudarle? Solte para recibirlo antes de retirarme al taller a reparar la varita de la señorita Vladimir

Estaba departiendo con mi madrian y con Sagitas, la verdad sabia que todo saldria bien, era un total misterio pero mi corazon me lo decia. - Gracias madrina sera un honor tener tus cuidados en el post parto... no te preocupes seguro que no estare mucho tiempo en la clinica... Escuche la campanilla de la puerta, voltee a mirar a la puerta y nana me indico que era un cliente. - Denmen un momento me necesitan a la puerta, vuelvo en un momento... Me levante despacio camine hasta la parte de adelante hasta el estante y via a la joven rubia al frente de la vidriera - Buenas tardes joven Vladimir, puedo ayudarle en algo? La conocia poco, pero sabia que era la hija de Reena una gran dama y ademas muy amiga

Sonrei ante la alegria de mi querida madrina Cye al sentir a mi pequeño bebe, eran tan delicados sus movimientos que parecia que ciertamente le estuviera saludando, yo me senti feliz y agradeci con una suave caricia a mi pequeño por ser tan cortes desde tan joven. Sagitas me hizo pensar en algo que no habia tomando en lo absoluto en cuenta y era el lugar donde naceria, no me habia permitido pensar en eso, por lo que me quede pensandolo un poco. -Sagitas si no hay mucho problem me gustaria que fuese en Santos mangos, no quiero ir a San mungo, es un lugar donde confio y ademas es alli en donde he sabiado de mi hijo, asi que preferiria que fuese allí. Le afirme con decision, queria que mi bebe estuviese bien cuidado y ademas que yo pudiera estar tranquila ante el personal de allí, porque queria muy seguro a mi pequeño.

Escuche la campanilla, pero por estar embebeida en la conversacion con Sagitas y Cye, no alcance a ver a quien era, pero sono la puerta unos minutos despues, así que imagine que ya se habian ido y que nana lo habia atendido. Coloque mi mano sobre la de Cye y la guie hasta un lugarcito en mi abultado abdomen donde sentia una piececillo o una mano de mi pequeño bebe, y deje que sintiera el suave movimiento que hacia. Era tan delicado el movimiento pero era perceptible. - Sagitas, la verdad esta para principios del año que entra, la segunda semana, pero tienes razon debere estar preparada desde el dia de navidad...asi que bueno espero con ansia el poder verle su rostro. Nana entro y me entrego la invitación de la fiesta en la madriguera, sonreí, habia dejado la Orden pero con gusto asistiria para apoyar a los que habian elegido ese camino.

La verdad estaba preocupada por tener que consumir sangre, no por nada en particular, algo en mi interior me decia que todo estaría mas bien, que mal. Tome el sorbo de té y escuche sus palabras, no habia tenido madre y ellas dos me hacian sentir como si lo fueran. Reí al pensarlo, debia tranquilizarlas, aunque debíl era normal pero no era porque nada malo me sucediera. - Vamos, no se preocupen yo estoy bien, mi pequeño bebe estara bien y la mama mejor con su presencia Cuando escuche el comentario de Sagitas me dolio un poco la herida, habia sido terrible lo que habia sucedido pero mi hijo habia sido lo mejor de todo aquello. - No lo pense Sagitas- Suspire- pero no hay nada que hacer, ya hay que asumir y cuidarse. Tomen el té por favor, no quiero que se enfrie Espere un poco que ellas se tranquilizaran para volver a dar un sorbo a mi té

El tener a aquellas dos personas tan queridas para mi a mi lado me haci ver porque era tan felíz en Ottery, eso era lo que ataba a aquel pintoresco pueblecillo lleno de magos, lo que me habia hecho volver tras estar escondida en mi cabaña en los alpes suizos tanto tiempo. Sonreí y suspire sin decir nada, asentí porque sabia que podria romper a llorar si abria la boca sin controlarme primero. Me reincorpore y las tome ambas del brazo para guiarlas de nuevo al saloncito, allí mi elfina ya habia dispuesto el te las galletas para que tomaramos. - sirvanse, prometo ir a la clinica a que me revisen y si acepto gustosa tu compañia madrina, la verdad creo que no es anda de eso. Se lo que es llevar una cria de un vampiro dentro y no es facil para una simple humana. Pero todo estara bien ya veran... Las tranquilice, sabia que debia hacer para que eso no pasara, pero no queria hacerlo, el beber sangre no era algo amable para mi y peor teniendo que ser humana.

La verdad me estaba sintiendo sin energia, era como si mi pequeño hijo tomara toda esa energia que tenia en mi cuerpo. Yo estaba alimentandome bien, pero las ultimas veces creia necesitar mas comida para satisfacerme,lo cual me parecia curioso. Descanzaba en una silla, la voz de mi cuñada Sagitas me hizo voltear, rogue porque no me viese palida ni de mal semblante, no era mi idea preocuparla. - estoy bien, solo cansada, ya las energias no me dan para tanto peso... dentro de poco empezare a rodar y no a caminar Dije bromeando

Bueno me pase y creo que habra qhe hacer otra limpieza de arbol genealogico... me puse a llorar leyendo a mi Lucas , chicos , familia no podemos dejarnos caer... Aunque ya nos abandono media familia tenemos qud seguir y activar el Castillo, por amor a nosotros y a los que nos acompañaron alguna vez. Solo animense y juntos lo lograremos. Sally hacemos un censo?

La Dumbledore se hallaba complacida de poder recibir en su negocio a dos queridas amigas como ellas, estaba muy alegre de tenerlas al lado. Recibio todo aquellos documentos con agrado, y los regalos con mucho mas agrado, mi sonrisa no odia verse más grande. - Gracias Sagitas...y pues si conspirabamos para secuestrarte... Bromee con respecto a mi charla con Cye, mi madrina era muy dulce y me divertia, alegraba este lugar. Mas ahora la llegada de mi querida amiga y cuñada Sagitas lo era más. - Bueno denme un momento voy a traer una aromatica de frutas y traere el té ya casi es hora... Me dirigí al cafetín, pero allí me sentí algo mareada ultimamente habia estado demasiado activa y eso no era tan bueno, debia estar mas descanzada. nana me miro con rostro preocupado. - No es nada nanita, nos llevas el té y las galletas al saloncito por favor? Me sente un momento en una sillita pequeña

La propuesta de mi madrina me habia interesado, estaba contenta de saber que a alguien le interesaba compartir conmigo un tiempo y poder acompañarnos de muchas formas. La voz de alguien mas me alerto de otra presencia agradable, tome de la mano a mi madrina sonriendole. - Madrina dame un momento, debo ir, alguien ha llegado al local...vuelvo en un instante. Camine hasta la entrada y ví a mi querida Cuñada Sagitas, la abrace fuerte trayendola hacia mi antes de decir cualquier cosa. Al separarme de ella la tome de las manos. - Que sorpresa verte aquí, ¿A que debo el honor querida? Dije con cariño y no table emocion de verla, sin esperar la lleve de la mano al estar donde estaba mi madrina Cye esperandome. - Imagino que se conocen... Dije al entrar para que mi madrina Cye se diese cuenta de que Sagitas habia llegado

La visita de mi madrina me habia hecho muy felíz, la verdad me hacia muchisima falta el tener visitas agradables en el local, aunque ultimamente la gente que mas queria habia pasado por el y eso me habia hecho muy felíz. Tenía razón, mi hijo era una bendición - Es una total bendición... es que fue concebido en unas circunstancias algo "confusas" - No sabia como explicar que una pocion habia sido la causante de todo aquella noche con su mejor amigo, además de su abandono repentino a todo tras esto - ...aún no se que sera, pero sospecho que es una niña, se torna muy tranquilo y siento muchas sensaciones propiamente femeninas, es bastante curioso. Pero aun no estoy muy segura Las galletas estaban en el cafetín, mi elfina siempre que yo cocinaba me dejaba todo organizado y eso se lo agradecia. - No engordas porque asi es tu cuerpo, lo cual es una bendición, despues de un bebe debes bajar de peso pero la lactancia lo hace mucho mas facíl El comentario sobre mi padrino Ishaya me hizo reir, la oficina parecia un desierto, pues ni Felias ni el habian aparacido por allí por la temporada. Yo no habia ido pues mi estado no era recomendable par estar en tumultos. Depronto tuve un flashback sobre la última vez que habia visto a Thyago Severus, estaba rodeada de mucha gente y varios animales magicos habian causado una gran conmocion. En aquel entonces habia sido designada para la proteccion del Ministro, junto con su familia y mi gran amor habia arriesgado su vida por la mia. Fue la última vez que ambos habiamos estado bien como pareja. Esa era la gran razon por la que odiaba el quidditch secretamente. -Tomare lo que tu tomes, no quiero ponerte a trabajar, que estas para estar descanzando, es más te ofrezco que pases unos días en mi castillo o mejor aun recíbeme en el tuyo y así te cuido y mimo un poco Las palabras de mi madrina me sacaron de mis pensamientos, me sorprendio la propuesta pero no era del nada descabellada, hacia falta una escapada y vivitar a mi madrina era una gran forma de hacerlo, aparte ambas se acompañarian y pasarian unos lindos dias juntas. - Me encanta la propuesta -Sonreí ampliamente - Pues como desees, hace poco hice unas pequeñas remodelaciones al Castillo, pues practicamente vivo sola allí y mis apocentos los transforme en un pequeño apartamento de dos plantas en la torre norte del castillo. Todo independiente, asi no me siento tan sola en un lugar tan grande... La verdadera razón era esa, me sentía absolutamente sola allí, por eso o pensé mejor - Aunque si te parece podría ir a tu mansion, creo que me debo unos dias lejos de todo... Esa idea me habia gustado más, pasar momentos en lugar que me hiciese llenar de tranquilidad era una excelente idea.

la presencia de su madrina la lleno de alegria, ella era una de las pocas personas del pasado que aun permanecia en su vida, pues todos habian abandonado Ottery de una u otra forma. La visita la habia tomado por sorpresa, pero la hacia muy feliz. Para mi era una curiosidad escuchar mi nombre de pila era extraño, solo los que me conocian de mucho tiempo atras me llamaba asi, el resto lo hacia por mi segundo nombre, como habia procurado que fuera despues de mi segundo matrimonio. -Te ves maravillosa. ¿Cuánto tienes? ¿Cuándo llegara? Sonreí mientras la guiaba hasta el sillon de estar de entrada - Ahm esta para enero, bueno segun mis calculos para mediados. gracias, la verdad no muchos saben de mi embarazo ha sido algo sorpresivo hasta para mi... Era muy descortes decirle que era algo que no habia planeado, aunque era totalmente cierto - Y mi padrino, hace dias que no lo veo por el ministerio, me abandonaron en el departamento... Bromee - deseas te o alguna bebida, tengo unas deliciosas galletas de canela que hice esta mañana en el castillo le ofrecí con cariño

Estaba algo agotada, por lo que me sente frente a la mesita ratona, al lado del gran sillon que estaba allí como estar para descanzar, suspire en esa misma mesa estaba aquella botella, sentí ganas de llorar pero sentir como el bebe se movia en mi vientre me hizo sonreir. - Tranquilo mi cielo, tu eres lo mejor que me ha pasado, pero no fue la forma correcta y eso es lo que me duele... Susurre con dulzura, depronto escuche mi nombre de pila y me levante, conocia la voz pero no recordaba a quien pertenecia, salí hacia el mostrador y ví a mi madrina Cye allí, tan hermosa y delicada como siempre. Era una persona a la que le tenía gran cariño y afecto. - madrina que gusto verte... Dila vuelta al estante del mostrador y le abrace, olia estupendamente, recordaba ese leve olor a flores que siempre le acompañaba.

La mañana estaba limpia y clara, eso me gustaba. use una blusa negra larga y una falda verde militar larga, junto a unas botas negras de poco tacon. Camine por el callejon a paso acompasado, ya no me era posible el hacerlo rapidamente y eso que aun no cumplia los seis meses. Este bebe crecia rapidamente, eso era bueno. No me habia permitido que mis hijos me viesen embarazada, temia sus reacciones y un desaire de su parte romperia mi corazon en miles de trozos, y ya eran demasiadas emociones juntas. Como cada día acaricie el arbol genealogico de los Ollivander que estaba tallado en la puerta. Pronro habria otro nombre tallado hay junto al de mis dos hijos menores, eso me hacia sentir muy extraña, pues no habia planeado tener más hijos. Suspire y entre a la tienda escuchando el tintineo de la campanilla, sonrei al ver la tienda ordenada. Dirigi mis pasos al taller y allí me dispuse a organizar algunos materiales.

Habia tomado una siesta en el cuarto de descanzo,toda la noche habia estado trabajando en unas muestras de varitas para el stand de la fiesta recreacional que el departamento de accidentes estabq organizando en los dias mediados del mes. Habia inscrito el negocio como patrocinador para colaborar a esta causa. Mi hija Giorgiana habia ido a la academia y habia prometido volver al terminar para colaborarme, pero no habia resistido y me habia ido a descanzar antes. Una vocecita suave me alerto de la presencia de alguien y me espanto el sueño,baje las escalas descalza hasta el primer piso y allì me percate de lapresencia de mi sobrina Laimi - hola querida como estas? La salude

Al parecer no temía realmente a lo que él me hiciese, solo que yole apreciaba demasiado para sentir que me odiaba y al parecer era eso realmente a lo que yo le temía, a perder una gran persona. - Bueno, Selene, Pero has de ir con cuidado, alguien de quien sospechas que puede violentarse no es buen acompañante. Y menos si estás embarazada. Sonreí con comprension, tal vez yo estaba demasiado asustada y estaba exagerando el alboroto que podia generarse. - Selene, he de irme, tengo que acudir al Evento de Accidentes. Espero tu visita. Pero cualquier cosa que necesites, cualquier cosa, llámame. Dejaré lo que tenga en manos para venir a ayudarte. Te lo prometo. Bese su mejilla - te acompaño a la puerta Tome unas galletitas de la encimera del cafetín y las puse al llegar a la puerta de salida se las entregue en la mano - Son de chispas de chocolate, te serviran si te da algo de hambre... Musite con rapidez viendola irse Le di un beso y me dirigí a la salida.

Listo, lo habia dicho, por fin alguien se habia enterado de la verdad, que mi hijo era suyo y que no podía decrile que lo era gracias a la situacion dificil en que habia sido concebido. - Un momento. No sé si es correcto o no que desconozca que es el padre. Pero de ahí a que se ponga furioso y le tengas miedo... Que ni se le ocurra amenazarte o agredirte porque se las verá conmigo. Sonreí ante sus palabras y la abrace casí de inmediato, era como una hermana para mi, esa que no tenia de cuerpo presente por ser la hija menor. - No, no te preocupes. Evitare que suceda... es por eso que no he querido que se entere... Susurre entre sus brazos recostada en su violace cabello, suave y deliciosamente oloroso, era como estar en un abrazo con tu mas fiel confidente.

La ternura que sagitas me inspiraba era propia de la que seguramente hubiera sentido por una herman cercana, todos mis hermanos eran mayores a mi y cuando había llegado al castillo todos ellos ya hacian sus vidas por separado, me habia criado con mis primos y hermanos adoptivos, pero no es el mismo lazo como aquel que hace el llamado de la sangre. Al escucahr mi respuesta con respecto a lo que habia sucedido con Joaquin y mi peticion de hacerlo en otro lugar me respondio con sigilo - ¿Y dónde podrás decirme qué te pasa? ¿Quieres que vayamos a algún otro sitio? Si quieres, aplico un muffliatto y nadie nos escuchará. Le sonreí tratando de bajar la intensidad de la verdadera razón - Es una gran idea- sacando la varita hice una floritura y musite - "muffliatto" Mire con picardia a Nana que me miro asustada y desaparecio al instante. - Joaquin y yo no nos veíamos desde esa "noche", no sabia que estaba embarazada y mucho menos sabe que El es el padre, temo que en su ira por todo esto nos haga daño. El cree que yo puse intencionalmente la pocima en la botella para ambos, pero no fue asi, mis elfos confundieron la botella y la colocaron en el taller aquella noche. Suspire y tome animos para seguir hablando - Por eso llore, me duele que crea que soy zapaz de algo así - solte con voz decepcionada- por eso me contuve al decirle que el bebe es suyo, no estoy segura de hacerlo... La mire a los ojos en los mios podia verse la duda y el miedo

Hola ya vine XXD Bueno vengo a aceptar como hija a wonder y por supuesto suplico a mi queiridisima prima Sally que si se digna aparecer su nombre en el listado de mis amados hijos XXD, por cierto si podemos mandar llamar al submundo a Neter seria estupendo porque anda muyyyy desaparecida... Wonder mi cielo*la abrazo fuerte* bueno mi niña pasa por el castillo para recibirte como es merecido por una hermosa niña y que esojas tu habitación Besos familia

La elfina se habia puesto manos a la obra, Sagitas se sento a mi lado en la mesa y noto mi atencion sobre el creciente bulto sobre mi abdomen, ese pequeño ser que crecia dentro de mi. - ¿Se mueve? ¿Puedo...? La mire con delicadeza y ladee la cabeza con una gran sonrisa, tome su mano para que pudiera sentir mi vientre mientras la escuchaba hablar sobre su hijo, el pequeño sobrinito inquieto que me encantaba ver jugando con mis hijos. - No se mueve mucho, la verdad siento que es muy suave, como si se acunara dentro de mi vientre haciendome sentirlo. Nanita sirvio el té de frutos rojos y el café de Sagitas el aroma era exquisito y recorde el delicioso y suave sabor de aquel cafe Colombiano. - A ver, ¿qué ha pasado para que estés tan triste? Quiero que me lo expliques, para poder matar a quien te hace llorar. Tendría que irme a hacer otros negocios, pero me voy a quedar un poquito más hasta que me asegures que estás bien. Mis ojos entristecieron de inmediato recordando la discusion y todo lo que guardaba dentro de mi, sabia que si El nos escuchaba no seria muy bueno. - Te lo contare, pero aqui no es pridente hablar de ello, sabes que confio en tí, pero no es el lugar apropiado... Subí la mirada para que entendiera que en el piso de arriba estaba mi socio, quien no deseaba se enterara de lo que sentia con respecto de la paternidad. Tome un largo sorbo de mi té y mire a nanita que ya estaba de pie a mi lado. - Delicioso como siempre Nanita, gracias por consentirme tanto Tome la mano de Sagitas y la aprete contra mi vientre, mi pequeño parecia acomodarse suavemente dentro de mí