DCAO y Adivinacion

[Valky]

Kaori M.

Lo cierto es que la pelinegra no había visto ni hablado con su prima desde hace un rato, no sabía en donde estaba y por ende ella no había tenido la oportunidad de contarle sobre su embarazo y dudaba que su prima Dennis, quien sí podría tener motivos para querer ver muerto a su esposo, le hubiese contado algo.

—No he visto a Memy...no sabe nada —respondió Kaori. El sonido que hacían las patas de las acromantulas al acercarse a donde ellos se encontraban no le gustaba para nada. — de hecho, no sabía que daría la clase... —comentó cuando él la tomó del brazo y comenzaban a caminar alejándose de las criaturas.

Su esposo estaba manejando bien la situación, como era de esperarse, pero usar el encantamiento que las hacia alejarse por un momento, era agotador y al parecer las arañas tenían mucha energía. Ella obviamente lo ayudaba para así poner la suficiente distancia, para alivió de la Delacour las acromántulas quedaron rezagadas. > pensó mirando hacia atrás.

—Creo que nos llevaría mucho tiempo crear uno —dijo riendo ante semejante ocurrencia del pelivioleta.

Entonces dejo de caminar y la sonrisa desapareció de sus labios. No muy lejos de donde ellos se encontraban, los árboles y lianas habían formado una especie de túnel por el cual tenían que pasar si querían continuar. > pensó la bruja al ver a los Dementores. El ambiente, ya de por si frio, bajo su temperatura aún más, el viento era tan gélido que calaba en lo huesos, pero ese no era el verdadero problema, la sensación de desolación,de desesperanza, de tristeza que los empezaba a rodear, era el verdadero problema.

—¿En serio? —preguntó sorprendida cuando su esposo le confesaba que jamás había conjurado un patronus. Las criaturas no tardarían en notar su presencia y confiando en las capacidades de su amado, la pelinegra le explicó lo básico para poder conjurar uno.

—Debes concentrarte en el recuerdo más feliz que tengas, uno que genere un sentimiento muy fuerte en ti —La pelinegra trajo a su mente un recuerdo reciente, específicamente el día en el que se había enterado de que estaba embarazada. —haces este movimiento de varita y dices Expecto patronum — de la varita de la bruja salieron varios filamentos de un blanco brillante que poco a poco iban formando la figura de un animal.

—Tu puedes amor... vamos que se acercan —dijo la bruja sin bajar la varita, el haber conjurado el encantamiento patronus había terminado de llamar la atención de los dementores que sin dudarlo se desplazaron en su dirección.

[Mackenzie Malfoy]

Su recientemente adquirida habilidad de la legilimancia resultaba en extremo incómoda en algunas ocasiones. Con la mente abierta para captar lo que pasaba por la mente de Patrick Colt, también habían llegado hasta ella, las suspicacias de Zahil. Por un momento se olvidó de la clase de adivinación, de Patrick Colt y del motivo que la había llevado allí y lo único que deseó fue gritarle a Zahil un par de cosas sobre esa culpabilidad que ella le adjudicaba. ¿Pero de qué serviría? Ni aunque le relatara la historia entera mil veces, serviría de nada. Le dolía que la creyeran causante de la guerra y de los peligros que entrañaba, cuando todos sus desvelos se habían concentrado en tratar de evitar esa guerra, desde que descubrió la existencia de la Tercera Profecía. Y de eso hacía demasiados años. No, indudablemente no serviría de nada gritar la verdad. Y, además, Mackenzie había enterrado el hacha de guerra. No estaba allí para enfrentarse con un miembro de su propio bando. El único en aquellos momentos que podía hacer algo por devolverle la magia a un mundo que ni siquiera se había enterado todavía de que la había perdido.

 

Le dedicó una sonrisa y una cordial inclinación de cabeza a Zahil y dedicó su atención a Patrick. No se le había escapado tampoco su extrañeza ni sus recelos y una tímida esperanza prendió en Mackenzie cuando vio reflejado a Boss Elessar en la mente de Patrick. Lástima que la imagen hubiera sido diferente de la que ella hubiera deseado percibir. Pero se conformó. Después de todo, era un principio que la hubiera relacionado con él.

 

- Encantada, Patrick. - Le respondió, devolviendo inmediatamente su atención a la clase y a la profesora Alessandra que les daba la bienvenida y se estaba presentando en aquel momento.

 

La profesora le entregó el mazo de cartas del Tarot de Marsella y le pidió que las mezclara y eligiera tres de ellas. Conocía aquellas cartas. No porque le interesara la lectura del futuro, sino porque, como buena erudita de la magia antigua, era experta en simbología y aquel mazo estaba repleto de símbolos. De hecho, era un compendio oculto de magia antigua.

 

Se concentró en el problema que le había llevado hasta allí. Saber qué había sido de McGonagald y descubrir si había una forma de... No se atrevió a seguir pensando más allá, aún no era el momento. Con la mente concentrada en su antiguo cuñado, barajó las cartas, sacó tres de ellas y las colocó boca abajo en la mesa. Luego le entregó el mazo a Patrick Colt.

 

- ¿Puedo alzar las cartas o debo esperar? -Preguntó a la profesora.

[Ky.]

Aries movió la cabeza de forma afirmativa tras la explicación de su esposa. Entendía la teoría, más se le complicaba un tanto la práctica, todos los recuerdos que tenía en su mayoría trataban de él siendo cruel con otros individuos y eso lo hacía feliz. Pero no tan feliz como para lograr hacer lo que su esposa había logrado, ahora tenía que buscar ese momento de felicidad para lograr formar un patronus que ahuyentara a las criaturas que se aproximaban. Los dementores se acercaban y mediante más estaban cerca, se podía sentir como toda la felicidad que tenía se iba por la borda.

 

Levantó su varita y apuntó al espectro succionador de alegrías. El momento que eligió para hacer su patronus fue la primera vez que había conocido a Kaori, ella no lo sabía, pero el hecho de haberla conocido había sido su salvavidas en ese profundo abismo en el que se sentía. Y la noche que se había acercado a la mansión Delacour para conseguir una cita con ella y el momento incómodo que le había hecho pasar fue uno de los mejores momentos de su vida.

 

—Expecto Patronum. —gritó.

 

Una figura de filamentos blancos se formó de su varita, era un felino grande, si hubiese sido de color estaba seguro que aquella figura era un tigre siberiano, el cual corrió hasta donde estaban los dementores y los ahuyentó dejando el camino libre para seguir cruzando para llegar hasta donde debían ir. En eso la figura de un zorro apareció frente a ellos, como si tratará de decirles que debían seguirlo y así fue se giró a ver a su amada esposa.

 

—No sé qué tan loco este, pero creo que aquella criatura desea que la sigamos. Tu prima no está trastornada, ¿o sí?

[Mackenzie Malfoy]

Las cartas aún seguían boca abajo sobre la mesa y, extrañamente, Mackenzie sentía mucha curiosidad por saber qué cartas habría elegido y qué representarían. ¿Se le estaría contagiando la enfermedad de la superchería? Sonrió para sí misma, mirándose divertida las líneas de la mano. Sabía de sobra lo que representaba cada una de ellas, porque de adolescente se había dedicado a hacer lo típico: probarlo todo.

 

Recordaba bastante bien el caso de una compañera a quién las hojas del te le habían predicho que sufriría un accidente mortal montando en escoba y, para evitarlo, había asegurado con encantamientos anti caída todas sus escobas. Eso, precísamente, fue lo que la mató. Uno de los encantamientos quedó mal acoplado y, en lugar de evitar una caída, la provocó. ¿Cuál era el verdadero poder de la adivinación entonces? ¿Se habría cumplido aquella profecía si nunca se hubiera pronunciado? Probablemente no.

 

La mente era poderosa y el pasado y el futuro conceptos muy efímeros y sutiles, con los que era mejor no tratar de jugar. Mackenzie era una firme defensora del libre albedrío y estaba convencida de que el futuro no estaba escrito en las líneas de la mano. Lo escribíamos nosotros sobre la base de lo que nuestra mente concebía como experiencias y en función de la interpretación que esa mente hacía de las circunstancias. El futuro podía acabar siendo un recuerdo más implantado en esa mente, antes de tiempo.

 

Mientras esperaba a que alguien levantara las cartas que había elegido, tomó un tomo que hablaba sobre las interpretación de los posos. Había quien utilizaba té y quien utilizaba café, pero el sistema era básicamente el mismo. Disfrutar de un buen te o café, saborearlo, mientras uno se concentraba en una cuestión que le preocupara. Finalizada la bebida, voltear los posos sobre un plato y tratar de identificar una imagen en ella. A partir de ahí, surgiría la interpretación del significado de esa imagen.

 

A Mackenzie no le importaría tomar el te. Aunque aún no era precisamente la hora del té, pero amaba esa bebida y nunca estaba de más. Con lectura de posos o sin ella. Pensó que no perdía nada por sugerirlo.

 

- ¿Les apetece un te? -Preguntó, señalando un pequeño bote transparente en cuya etiqueta podía leerse Earl Grey, uno de sus preferidos.

[Sophie Elizabeth Granger]

El Tarot Marsella era el mas común y el mas usado en el mundo, ella misma tenia el suyo en casa y era con el que tiraba cada que algo le preocupaba y no había podido dilusidarlo por medios convencionales. Tampoco era una esclava de su don, trataba de usarlo poco y solo para sus clientes, que no eran pocos ya que solia ser muy atinada. Espero a que Mackenzie escogiera las cartas y las pusiera sobre la mesa y por un momento sintió el impulso de estirar la mano y voltear las cartas pero no era su clase ni su sesión así que se contuvo.

 

De pronto la ex ministra sintió deseo de te y la verdad es que ella también quería, ademas estaba deseando que la profesora les hablase sobre el te, aunque sabia interpretar los pozos del cafe y el te, no era por mucho una experta por lo que solo lo usaba en casa y no en sus sesiones. Si la Delacour lo era, seria emocionante

 

- yo tomare un poco de te si no hay problema - le contesto a la Malfoy - del que tu vayas a tomar

[Leslie Ashryver PB]

-Oh si te- exclamo ida.

 

Se puso en pie antes que Mackenzie lo hiciera y se acerco a la tetera que tenia la bebida caliente desde que habia empezado la clase.

 

Los posillos que habia sobre la mesa se elevaron cuando Alessandra hizo un encantamiento levitatorio y se pusieron rectos para poder vertir el contenido en las tazas.

 

-Muy bien, giren sus cartas y me diran los arcanos elegidos- les explico con otro movimieto de su varita de vid cuatro libros diferentes flotaron hasta ellas -en este libro-

 

Señalo el primero, era un tomo con mas paginas que el segundo, era de color marron gastado y en su tapa escrito con letras doradas y finas "Lectura de Tarot".

 

-Con ese se sacaran las dudas sobre los arcanos y su significado- les explico.

 

-El segundo sera para cuando comencemos con el te- les explico restandole importancia por el momento.

 

Se levanto para tomar una canasta con galletas, unas cucharas y azucar, por si querian, y se los dejo en medio para que se sirvieran.

 

Mientras tanto Arael miraba a Kaori y a Aries, habia visto como se defendian de los dementores pero estaban atrasados, debian avanzar con rapidez si querian llegar a la hora del te.

 

-Esten atentos, deben avanzar con rapidez si quieren evitar los trolls y hombres lobos previno el zorro -y par derrotar a los boggart la risa en su unica arma-

 

Arael esperaba que con eso supieran su siguiente defensa, girandose comenzo su marca por el soto bosque, lo bueno era que no estaba muy lejos la cabaña solo un par de metros y estarian al resguardo de la profesora.

[Ky.]

El zorro se presentó ante ellos, se llamaba Arael y buscaba apresurarles el camino, para que no se toparan con trolles y hombres lobo. Aquello hizo que el cambiaformas confirmara su peor temor, Alessandra Delacour estaba trastornada y buscaba de una u otra forma el dejarlo en aquella selva sin vida, lo bueno era que había ido a esa clase con su amada para que, si en algún momento él llegaba a fallecer, se llevara su cuerpo.

Los dementores habían sido algo sencillos después de aprender a convocar un patronus, así que seguro enfrentarse a su boggart era aún más sencillo, aquella criatura era de sus elementos favoritos cuando daba clases de Encantamientos. De un tronco hueco salió el primer boggart, el cual adquirió el aspecto de un gran edificio, no parecía tan claro el boggart para mostrar el miedo más oculto de Black Lestrange el cuál había cambiado de ser la pérdida de su madre a las alturas.

—Ridikkulus.

El boggart cambio a un muñeco de aire que se balanceaba de un lado a otro, al ritmo de alguna canción que tenía Aries en la cabeza mientras comenzó a reir, aquello hizo que aquel boggart se alejara de su camino, el segundo boggart tomo el aspecto de Kaori tirada en el suelo acariciando su vientre, siendo atacada por una serpiente. Por un instante, Aries había perdido de su periferia visual a la pelinegra, así que por un momento creyó que el boggart era ella.

—Kaori… Kaooooori RESPONDEME.

Estuvo a nada de echarse a llorar sobre el cuerpo inerte del boggart, cuando escucho la voz de Kaori a su espalda.

—Aquí estoy Amor, es un boggart, yo me encargo de él.

—No, ya lo hago… Ridikkulus.

El boggart cambio a una Kaori usando a la serpiente como un aro el cual giraba en su cintura y su muñeca.

[Patrick Colt]

Alessandra había dado las indicaciones y Patrick Colt torció el gesto de su boca. Resultaba cansino para él ese instinto póstumo de querer saber por cuales causas se consideraban a los infortunios recurrentes en la vida de algún desafortunado. Para el mortífago, esta lectura era irrisoria e innecesaria, tan solo le bastaba con blandir su varita y acabar con sus enemigos de la manera más rápida que conocía.

 

La tetera se elevó por arte de su magia, y empezó a llenar las tazas de los presentes. Para entonces, el hombre había tomado asiento en la mesa donde habían más participantes. Entre ellos, estaba Mackenzie quien en su momento se cruzó con el Cardenal de la Muerte para tener un encuentro sospechoso. Y él, cual infante de guerra, había concluido que la bruja tenía otras visiones. Pero, ¿Por qué no en la Marca Tenebrosa?

 

Tomó dos cartas de su mazo de tarot y las volteó. La primera carta que le había salido era El Carro. Frunció el ceño ante los dos caballos y el joven nobiliano que con mañas dubitativas miraba sobre su derecha, la imagen de dicha carta le resultaba extraña pero la asoció con la página número siete del libro que Alessandra había puesto a su disposición.

 

Control de la mente humana, sobre pasiones animales. Instinto del Yo Superior para afrontar guerras que involucran bajos egos y adendas psicológicas. Las fuerzas superiores y los defectos internos del individuo son batidos constantemente.

 

- Basura - pensó inmediatamente y sin reparos. La segunda carta era el Emperador.

 

Ladeó la cabeza un poco y sonrió. Le gustaba aquel nombre y lo asoció en el libro inmediatamente por el número y el anciano rodeado de duendes ayudantes.

 

Solidez, el ciclo culminado, contundencia y tenacidad.

 

No le desagradaba del todo, pero solamente había decidido tomar dos. Porque literalmente la clase le aburría.

 

- Listo - le indicó a @ en un intento por zafarse del resto de la clase.

[Mackenzie Malfoy]

Iba a levantarse para preparar el te para Zahil y para ella, cuando Alessandra se le adelantó. Mackenzie lo agradeció, pues resultó que la profesora tenía el té preparado y en su punto desde el comienzo de la clase.

 

Lo bebió satisfecha, tratando de deleitarse en su sabor, hasta que Alessandra les indicó que levantaran las cartas y les dio unos tomos para interpretar los arcanos y los posos, una vez que hubieran terminado el té.

 

Mackenzie no se apresuró. Había estado observando a Patrick y a las cartas que éste había levantado: el carro y el emperador. Las buscó curiosa en el libro y sonrió para sí misma al descubrir la interpretación: liderazgo y poder, obtener el favor de amigos poderosos y tomar las riendas de algún tipo de empresa. ¿Sería que iba a ascender muy pronto?

 

No estaba teniendo en aquella clase la oportunidad de interrogar al Colt como ella hubiera querido. Eran preguntas complicadas las que quería abordar y la ocasión no estaba resultando propicia. Se concentró en lo inmediato, mientras daba un sorbo a su taza de té. Era hora de levantar las cartas que había escogido y descubrir lo que le deparaban los Arcanos.

 

- Un ángel alado, vertiendo agua de una jarra a otra. La templanza. - Señaló en voz alta al levantar la primera carta. - Indica paciencia y saber encontrar el equilibrio de las cosas.

 

Curioso que saliera aquella carta cuando un instante antes había pensado que quizás no fuera la mejor ocasión para interrogar a Patrick Colt. Las cartas parecían indicarle que debería buscar una ocasión mejor.

 

Levantó las dos siguientes cartas.

 

- Los enamorados -esa carta sabía distinguirla sin consultar el libro- y la rueda de la fortuna. Parece que un acontecimiento rápido, crucial y fortuito empujará los caminos de mi vida hacia el amor. ¿O quizás hacia alguna nueva asociación o lealtad?

 

- Interesante -comentó dando un sorbo pausado al exquisito té que les había preparado Alessandra.

[Leslie Ashryver PB]

Alessandra fruncio el ceño a su unico alumno en adivinacion varon cuando sólo sacó dos cartas en vez de tres.

 

Suspiro.

 

Aquél hombre le resultaba estirado, de esos magos que solo por ser sangre puras debían pisotear a cualquiera que éste por debajo de él o simplemente no consideré innecesaria su cercanía. La Nigromante apretó los labios para evitar que su enojo hiciera meter la pata al gritarle al alumno.

 

Simplemente pasó su mirada a Mackenzie cuando dio vuelta sus cartas y asintió con la cabeza a cada palabra que decia.

 

-Sienten que les ha ayudado en algo las cartas?- les preguntó seria - que han encontrado algo en ellas que les será o es beneficioso?-

 

Esperó mientras terminaba su té y dio vuelta la taza.

 

-Ahora veremos la tesomancia, terminen de tomar el té y giren sus tazas para leerlas- pidió.

 

Mientras tanto Arael, observaba lo que pasaba aquellos dos magos con mucha curiosidad, aparte de Asami y Alessandra no habia tenido contacto con nadie mas por lo que le resultaba curiosos.

 

<<Falta poco>> les dijo <<sigan caminando que cuando pasen los trolls todo abra acabado>> les previno a Aries y a Kaori.