Leia Yui
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ld10Al fin había sido aprobado el formulario que hace mucho había presentado pero valía la pena después de todo si pasaba la prueba, me compraría la escoba que desde hace mucho estaba deseando. Fui conducida hacía una pequeña habitación del departamento. Grande fue mi sorpresa cuando al entrar lo que pude observar fue un gran prado verde, con obstáculos en la parte derecha.
Por suerte traía puesto un short y una blusa, no hubiera podido dar el examen en falda hubiera sido totalmente vergonzoso.
En el lugar ya se encontraba la instructora por lo que sin perder más tiempo me coloqué al lado de una de las escobas y escuché atentamente todo lo que decía.
Arriba dije con firmeza apenas la instructora terminó de dar la primera indicación. La escoba casi al instante ascendió y la sujete fuertemente con la mano derecha seguido a ellos la monte y me aseguré de estar sujetándola correctamente. Ahora venía la siguiente indicación.
Di una patada y con alegría pude comprobar como la escoba se elevaba, a penas llegué a un metro me incliné ligeramente hacía adelante y descendí. Ya en tierra firme (?) me dirigí hacía la escobera y tomé de entre todas las escobas la Nimbus 2000.
Esperaba haber hecho correctamente todo lo que había indicado la instructora para proceder ahora sí, con la verdadera prueba. -
Sexta Planta- Dándole el alta a Röv
Mientras tomaba la poción reabastecedora de sangre y la revitalizante noté como mi compañero de bando se levantaba totalmente ¿Asustado?No sabía si llamarlo de esa manera aún así no estaba segura de porque reaccionaba así ¿Es qué nunca había sido resucitado?Era demasiado extraño aún así, tenía que calmarlo después de todo no podía gastar la poca energía que tenía de esa manera.
—Tranquilo, estas en un hospital y lo único que he hecho es curarte— no sabía si mis palabras eran las adecuadas pero prefería ser lo más sincera posible —es muy extraño que nunca hayas estado aquí, así que te lo explicaré— continué un poco más calmada —cuando una batalla finaliza, los heridos y muerto acuden aquí para sanarse y poder continuar como es debido— nunca había sido muy buena explicando pero esperaba que de cierto modo me entendiera —Por cierto soy Leya ¿Cuál es tu nombre?—sonreí.
Estaba apenas terminando de contestar, cuando noté como tomaba sin saber siquiera lo que hacían ambas pociones. Por suerte eran las correctas, pues hace poco las había colocado ahí.
—No debes ser tan descuidado, ya sé que no es agradable estar aquí pero debes ser más cuidadoso pudiste haberte hecho daño—. Mi rostro tenía una expresión que raramente mostraba, enojo.
—Bueno, de todos modos ahora ya debes encontrarte mejor—dije mientras rellenaba la hoja de alta —así que puedes marcharte—agregué mientras se la entregaba.
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Sexta planta- Despidiéndome de Bel y recibiendo a Röv
Medio dormida escuché las palabras de mi compañera que tal vez podrían resultar hirientes si se lo dijera a otra persona pero por suerte ese no era mi caso pues después de todo tenía algo de razón con lo que decía. No solo de amor se podía vivir ¿Verdad? Además tenía que mantener a Killu que era el que me sacaba la mayor parte del sueldo (?).
—No del todo—contesté con sinceridad —también lo hice porque no quería volver a las redadas así que esta era otra forma de ayudar— continué —mejorarás estoy segura— estaba terminando de decir aquello cuando un compañero más llego a la planta. Era seguro que había habido muchas bajas en la última batalla.
Me acerqué hasta su camilla y después de sujetarme el cabello y colocarme otros guantes para atenderlo como era debido empecé a curar sus heridas. No conocía a aquel compañero lo que hacía todo más fácil pues estaba más calmada (?).
<<Episkey>> pensé varias veces. Los diferentes cortes y heridas que poseía empezaron a sanar y a cerrarse dejando su piel como nueva. Seguido a ello tomé la pasta naranja para quemaduras y empecé a aplicarla por todas las quemaduras que poseía con sumo cuidado. Ahora venía la parte más complicada, resucitar.
El cuarto se llenó de luz por unos pocos segundos y a penas esta se extinguió pude notar que mi compañero de bando había vuelto a la vida.
—Bienvenido—dije mientras me dirigía al gabinete de pociones —descansa, en unos momentos te alcanzaré las pociones que necesitas para poder marcharte— terminé de decir con una sonrisa.
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Sexta Planta- Dándole el alta a Bel (MUAJAJAJAJ fui primera v_v )(?).
No me había dado cuenta en que momento había aparecido Arya pero por suerte se había encargado de limpiar y cambiar a Bel, trabajo que como sanadora nunca hacía porque no me agradaba ver a la gente desnuda y mucho menos bañarlos. Sabía que era necesario para que no contraerán infecciones pero aún así no lo hacía pues ese proceso requería de mucha energía que no tenía ni tendría nunca tal vez.
-Vale no me sermonees que me deprimo- no me gustaba escuchar sobre las redadas, después de todo era ahí donde sacaba mi peor lado -Ahora sí prueba el hermoso sabor de la fuerza- comenté mientras le entrega la poción revitalizante -sabe a chocolate lo prometo-.
Estaba segura de que ella sabía que mentía descaradamente pero aún así me divertía diciendo aquello. Mientras Bel terminaba de tomar la poción empecé a rellenar su hoja de alta.
-Bueno, esta todo listo- dije mientras le entregaba su hoja de alta y me recostaba en otra de las camillas para seguir descansando -Ah cierto. Hola Arya-
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Sexta Planta- Recibiendo a Bel
No había asistido a San Mungo por las distintas festividades que se habían estado celebrando. Sabía que si continuaba con ello de seguro me echarían como no hace mucho había pasado por lo que apenas había comenzado el mes había comenzado a asistir e incluso dormía ahí para no gasta fuerzas regresando todos los días. Era un buen método, además tenía comida gratis y no me la podía quitar nadie, especialmente Killu.
Últimamente no había habido demasiados muertos o heridos lo que era toda una alegría, por lo que podía pasar más tiempo recostada sobre las camillas.
<<Una oveja, dos ovejas y un cuerpo>>
No sé en que momento había sucedido pero tenía un cuerpo encima mío. Eso debería de ser mala suerte, de todas las camillas el cuerpo había aparecido encima de la que yo estaba recostada. Con mucho cuidado me liberé y deje al cuerpo sobre la camilla. Era bel mi compañera de trabajo, aún con tantas quemaduras la podía reconocer.
Sin perder más tiempo, me coloqué los guantes y la bata para empezar a curar las heridas de mi compañera. Tomé la pasta naranja y la empecé a esparcir por todo su cuerpo con sumo cuidado para curar las graves quemaduras que presentaba. Por suerte no había otra cosa que curar, pues no había perdido sangre ni presentaba ningún tipo de herida por lo que procedí en seguida a revivirla.
El cuarto se ilumino con una brillante luz cegadora y a penas aquella luz se extinguió pude escuchar claramente los latidos del corazón de mi compañera. Ya me había acostumbrado a ello.
—Welcome— dije entre risas —vaya que te gusta morir— continué —bueno ya conoces el procedimiento, tienes que tomar las pociones— empecé a caminar hacía el gabinete donde se encontraban las pociones —recuéstate, en un momento te las alcanzo—.
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Sexta Planta, dando el alta a Vrael
Por suerte ya no había tantos pacientes en la planta pero no estaba segura de si la razón era que no había habido muchas redadas entre estos días o que simplemente estábamos llevando la ventaja. Esperaba sinceramente que fuera lo segundo. Me agradaba ser sanadora, pero ver cuerpos todos los días no me mantenía muy animada.
Mientras mi compañero me agradecía, le alcancé ambas pociones. La revitalizante y la reabastecedora de sangre.
—Espero que me sigas teniendo presente después de probar lo deliciosas que son—contesté entre risas, pues era sabido que al menos la poción revitalizante tenía un sabor desagradable.
Después de asegurarme de que se tomará completamente amabas pociones y que su estado de salud era totalmente estable, procedí a entregarle su hoja de alta.
—Cuídate—. Finalicé mientras me acercaba hacia Bel. Desde que había entrado a la planta, no había tenido la oportunidad de hablar con ella.
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Sexta Planta, dando el alta a Nathan y recibiendo a Vrael
Cogí ambas pociones(revitalizane y me acerqué nuevamente a la camilla donde se encontraba Nathan, aún se encontraba débil por lo que se las entregué ambas pociones, una en cada mano, para que pudiera bebérselas al instante y de ese modo recuperar sus fuerzas. Sabía que la poción revitalizante no poseía un sabor agradable, debido a ello, tuve que asegurarme de que se la bebiera completamente junto con la reabastecedora de sangre.
—¿Mucho mejor?—pregunté a la par que tomaba una de las hojas de alta y empezaba a rellenarla con sus datos.
A mi alrededor muchas de mis compañeros empezaban a levantarse y marcharse, conocía a algunos pero como parecían aún un poco idos no me atreví a saludarlos.Cuando la planta empezó a despejarse, pude notar cuan atareada estaba Bel y que a pesar de eso no se tomaba ni un solo+ descanso, me sentí algo mal por lo que me apresuré en alcanzarle la hoja de alta a Nathan.
—Eres libre—dije entre risas mientras me alejaba corriendo hacia otra de las camillas donde se encontraba otro cuerpo que hace apenas unos minutos había aparecido.
Al estar más de cerca pude reconocer de quien se trataba, era Vrael. No había tratado mucho con aquel miembro, pero si lo conocía pues lo había visto un par de veces en los terrenos de la Orden.
Su cuerpo presentaba profundos cortes, por lo que me apresuré a limpiar cada una de esas herida con sumo cuidado y lentamente. Ahora tocaba cerrar aquellas heridas.
<<Episkey, Episkey>> pensé apuntando a las partes de su cuerpo que presentaban cortes u otras heridas. Estas se fueron cerrando, sin dejar marca alguna.
Seguido a ello, comencé el proceso de resurrección. La habitación se iluminó por unos cuantos segundos y apenas aquella luz se extinguió, pude confirmar que Vrael había vuelto a la vida pues podía oír claramente los latidos de su corazón.
—Es un gusto tenerte aquí de nuevo— comenté mientras cogía nuevamente una pociones reabastecedora de sangre y otra revitalizante.
A este paso pronto tendríamos que renovar la despensa (?) y eso significaba mucho más trabajo.
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Sexta Planta-Recibiendo a Nathan
Empezaba a sentirme aliviada de que ya no aparecieran demasiados heridos pero cuando apenas me disponía a tomar un descanso aparecieron en las camillas casi al mismo tiempo, cuatro de mis compañeros. Sabía que debía acostumbrarme a aquello pero aún no estaba totalmente lista, por lo que respirando profundamente me dirigí hacía uno de los cuerpos que aún no estaba siendo curado.
Al estar más de cerca pude reconocer que se trataba de Nathan, no había tratado mucho con él pero si lo había visto alguna vez en alguna actividad de la Orden si es que mi memoria no me fallaba. Su cuerpo estaba cubierto de quemaduras y también de profundos cortes.
<<Episkey>> pensé, los cortes producidos probablemente por una Katana dejaron de sangrar y se fueron cerrando <<Episkey>>pensé nuevamente, para que los cortes quedaran totalmente cerrados. Seguidamente procedí a aplicarle la pasta naranja en los distintos lugares donde presentaba quemaduras. Ahora, solo quedaba resucitarlo.
Concentré todo el poder que poseía y respirando profundamente comencé el proceso. El cuarto se ilumino por unos cuantos segundos y apenas terminó, pude comprobar con alegría que todo había salido bien pues mi compañero había vuelto.
—Bienvenido de nuevo—dije con una sonrisa mientras iba en busca de una poción reabastecedora de sangre y una revitalizante.
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Bueno, ya que cada la última vez que participé en uno de estos cosos del foro me sentí horrible porque no regalé nada D:, vengo a redimirme por aquí *-*
(además de que esa vez me toco un mortio :c pero acá entre plumíferos nos tenemos confianza ps B|).En fin ojalá alguien me regale algo bonis (???).
Saludos o/.
Esto de llenar las líneas es complicado gosh ._..
Vamos todos pa' Ushungalandia (8)
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Luego de sufrir para llenar todo esto, al fin vengo a dejar mis grandes nominaciones http://emoticoner.com/files/emoticons/onion-head/happy-onion-head-emoticon.gif?1292862507.
Premios para Aspirantes
El/la más aplicad@ de la Academia
-BrujaOesed
-JuanaLovewood
El/a más activo
-Lunática Evil Lupin Black
-Morrighan McKhena
-Jess Lovegood
El/la dueñ@ de "La Madriguera"
-BrujaOesed
-Jess Lovegood
El/la más desead@
(?)
El/la más suicida
No entro a redadas :c
El/la más perver
(?)
El/la Más despistad@
(?)
El/la Más timid@
(?)
El más sexy
(?)
La más sexy
(?)
El/la Más travieso
(?)
Mejor espíritu OdF
-Lunática Evil Lupin Black
-Jess Lovegood
-Morrighan McKhena
Aspirante por Siempre
-Irina Selene
Premios Especiales para Aspirantes:
El/la mejor Aspirante
-Jess Lovegood
-Lunática Evil Lupin Black
El/la mejor roler@
-Lunática Evil Lupin Black
El/la mejor duelista
(?)
El/la más Fenixian@
-Jess Lovegood
Futura Promesa de la Orden del Fénix
-Sherrinford Hound
-Lunática Evil Lupin Black
-Jess Lovegood
Premios Orden del Fénix
La más sexy
-Soamily Evans McGonagall
-Bínfey Evans (?)
El más sexy
-Marcellus Allan
-Edmund Browsler
La mejor pareja
-Zarco Bulche Haigh y Eloddia Riddle
-Elvis F. Gryffindor y Annick
-Elizabeth Tonks y Pandora Stark
El/la más desead@
-Dorothy Anne
-Marcellus Allan
-Mía Black Lestrange
El/la Más enamoradiz@
-Groter Shulton Granpié
-Laimi Evans
-Bel Evans McGonagall (?)
El/la Más travies@
-Leya Malfoy Rambaldi (ewe)
-Alessandra G. Delacour
El/la más loc@
-Lestat Rambaldi
-Ishaya
El/la más vag@
-Sain M. Ollivander
-Bínfeyd Evans
El/la más Perver
-Lestat Rambaldi
-Lisa Weasley Delacour
El/la más tiern@
-Athena Rouvás (forever <3)
-Rose V.Walker
-Kirara Ruak
El/la más egocéntric@
(?)
El/la más activ@
-Kirara Ruak
-Mia Black Lestrange
-Seba Granger
El/la más creativ@
-Pandora Stark
-Dorothy Anne
El/la más gruñón(a)
-Nathan Weasley
-Mei Black Delacour
El/la más divertid@
-Hank Rosier
El/la mejor compañer@
-Eloddia Riddle
-Pandora Stark
-Cye Lockhart
El/la más compulsiv@
-Adryanie
-BrujaOesed
El/la más despistad@
(?
El/la más suicida
-Pandora Stark
-Arya T. Macnair
-Adryanie
El/la OdF meteoro
-Nathan Weasley
-Elizabeth Tonks ♥
-Harry S. Diggory
El/la noctámbul@ de la OdF
-Zarco Bulche Haigh
-Elvis F. Gryffindor
El/la más "querid@" por los Mortífagos
-Adryanie
-Bínfeyd Evans
El/la Más Omnipresente
-Mia Black Lestrange
-Pandora Stark
El/la más Atrevid@
-Lisa Weasley Delacour
-Lestat Rambaldi
-Hank
El/la más fiester@
-Bel Evans McGonagall
-Dorothy Anne
El/la más trabajador@ra/or
-Seba Granger
-Elodia Riddle
El/la más responsable
-Annick
-Kirara Ruak
La luz más resplandeciente
-Mia Black Lestrange
-Hank Rosier
La llama más ardiente
-Pandora Stark
-Kirara Ruak
El alma más presente
-Mei Black Delacour
-Hank Rosier
Premios Especiales Orden del Fénix:
Leyenda OdF
-Pandora Stark
-Eloddia Riddle
Mejor OdF
-Elvis F. Gryffindor
Revelación OdF
-Helen Evans
-Kirara Ruak
Promesa de la OdF
-BrujaOesed
-Morrighan McKhena
Mejor Perfil OdF
-Pandora Stark
-Elvis F. Gryffindor
-Eloddia Riddle
Mejor Roler@
-Saya Black
-Pandora Stark
Mejor Duelista
-Hank Rosier
-Boss Elessar
-Mei Balck Delacour
El/la Mejor Firmer@
-Athena Rouvás ♥
-Saya Black
El/la Mejor Blinker@
-Cye Lockhart
-Annick
El/la Mejor Padrino/Madrina
-Mia Black Lestrange
-Lisa Weasley Delacour
Mejor Dama/Caballero de la noche
-Saya Black
-Pandora Stark
Mejor Paladín
-Elvis F. Gryffindor
-Annick
-Elizabeth Tonks
Mejor Sacerdotisa/Sacerdote
-Lestat Rambaldi
Mejor Cazador(a) de Mortífagos
-Hank Rosier
-Mei Black Delacour
-Boss Elessar
El/ La mejor sanador/ora
-Allen Joe Walker
-Arya T. Macnair
Mejor Brigada
-Luces del Fenix
-Llamas del Fénix
Mejor Proyecto
(?
Mejor negocio OdF
-Moon River
Mejor familia OdF
-Evans McGonagall
-Stark
-Gryffindor cofcofpachoncofcof♥
El/la más destacado en el rol del MM
-Bel Evans McGonagall
-Seba Granger
-Kirara Ruak
Premios extraordinarios a Mortífagos:
El/la Mortífag@ más cazad@
- Emmet Haughton Gaunt (el morpheador de árboles)
El/la mortífag@ más "querid@"
-Elaena Malfoy
Gosh termine D:, creí que nunca lo haría deoh T_T.
Salu o/
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Sexta Planta- Dándole el alta a Mei
Las cosas iban mejorando, pues pude percatarme de que Hank ya se encontraba curado y que ahora Bel estaba curando a otro de mis compañeros que no alcancé a reconocer a lo lejos(?).
Estaba a punto de dirigirme hacía el laboratorio de pociones, cuando recordé que tenía una botella de poción revitalizante en uno de los bolsillos de mi bata. Siempre había pensando que estos eran muy útiles y que debían de estar en todas las prendas posibles, no importaba si fueran poleras, vestidos o lo que sea (?).
Durante aquellos pensamientos, casi olvidé que estaba atendiendo a Mei. Por suerte su comentario hizo que volviera a la realidad, de cierta manera porque yo nunca estaba ahí.
— Bueno, puedes comprobarlo por ti misma— contesté con una sonrisa mientras le alcanzaba la poción.
Tomé uno de los papeles de alta y empecé a rellenarlo mientras cercioraba de que Mei se bebiera completamente la poción, que a pesar de no tener para nada un sabor agradable, le devolvería las fuerzas casi instantáneamente. A penas noté que la terminaba le entregué su alta pues eran muy notorias sus ansias por retirarse de una vez y yo, no quería detenerla en aquello.
—Espero no haberte quitado mucho tiempo—dije mientras me quitaba la bata. El blanco no era mi color.
Cuatro o/
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Sexta Planta- Atendiendo a Mei (Primer rol)
Ya había terminado de preparar las pociones que Arya me había encargado cuando recibí la terrible noticia de que muchos compañeros habían caído en batalla y otros que estaban gravemente heridos, los cuales ya se encontraban en la planta esperando ser atendidos.
Sin perder más tiempo acomodé todas las pociones, me coloqué nuevamente la bata y tomé unos nuevos guantes de látex. Seguidamente corrí hacía una de las camillas en la que se encontraba Mía, al estar más cerca pude comprobar que poseía graves quemaduras en todo el cuerpo. Aún no estaba acostumbrada a ver tantos rostros todos los días sin importar que fueran de mi bando, pero aún así estaba dispuesta a curarlos.
Por propio instinto(pues nunca había curado quemaduras) tomé un ungüento para las quemaduras y empecé a aplicarlo por todo el cuerpo de la Líder con sumo cuidado. A medida que pasaban los minutos empezaba a notarse la mejora, pues la piel empezaba a dar muestras de mejoras.
—Bueno, ahora solo falta una poción revitalizante—. Definitivamente la charla no era lo mío.
Estaba contenta por el trabajo que había hecho, realmente empezaba a gustarme el curar. Claro que aún tenía que superar lo de ver constantemente a la gente y hablar.
Tres
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Sexta Planta - Dándole el alta a Adryanie
No había esperado una reacción tan rápida por parte de Adry, después de todo seguía temiendo que algo me hubiera salido mal pues no era muy buena curando a los demás, ya que era un manojo de nervios. Aún así a pesar de que era la primera vez que practicaba una curación había salido todo bien. Tal vez después de todo el estar en San Mungo no sería tan estresante como había pensado.
Tomé una poción reabastecedora de sangre y se la entregué a Adry a la par que hacía un ademán de saludo con la mano dirigido hacia Arya que al parecer ya se encontraba bien gracias a Bel. Seguido a ello me aseguré de que la bebiera completamente, pues aunque sus heridas estuvieran totalmente curadas, había perdido mucha sangre y necesitaba recuperarla antes de marcharse. Por lo demás su estado era totalmente estable pues no presentaba daño alguno ni infección.
—Si, aunque aún no me acostumbro— respondí mientras le entregaba su alta —Espero no verte por aquí en un tiempo—solté un suspiro, sabía que con todas las batallas que se realizaban sería una petición casi imposible de cumplir pero aún así me sentía obligada a decirlo.
Dos
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Sexta Planta - Recibiendo a Adryanie
Era mi primer día en el hospital mágico. Estaba nerviosa pues después de todo era la segunda vez que era aceptada y no quería (como la primera vez) decepcionar a mis compañeros por lo que esta vez, a pesar de que no era muy fanática del trabajo, daría todo de mí para ayudar en todo lo que me fuera posible.
Había llegado tranquila hasta la Sexta Planta y esperaba encontrarme con Arya para que me diera algunas indicaciones y no cometer ningún error pero para mi mala suerte apenas llegué la ayudante de esta me informó que ella se encontraba en la sala de resurrección, junto a otra compañera, Adryanie.
Me coloqué los guantes y una mascarilla tratando de permanecer en calma, lentamente me dirigí primero hacia Adryanie que por como lucía era fácil decir que había muerto producto de un sectusempra. Sujetando fuertemente a mi varita realicé dos Episkey para cerrar las heridas y de esa manera evitar que continuara perdiendo sangre. Seguido a eso empecé a lavar su cuerpo y le coloqué una bata nueva y limpia.
Nunca antes había observado una resucitación, ni mucho menos realizado pero era mi deber ayudar a mi compañera por lo que me concentré al máximo y apuntando a su cuerpo con mi varita comencé la resucitación. La habitación se iluminó por un momento y cuando volvió a su estado normal logré escuchar los latidos del corazón de Adryanie.
—Bienvenida—dije con una sonrisa mientras tomaba un tablero y empezaba a escribir en él.
Sabía que había perdido mucha sangre, por lo que apenas estuviera consiente le tendría que suministrar la poción reabastecedora de sangre para darle la alta.
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*SE viene corriendo antes de que alguien le gane* ;OOO; YOYOYO el primer premio que gano en mi vida *se pone a llorar como en anime shojo * (?)
Nick: Leya Malfoy Rambaldi
Día y hora: 26/10 2:06 pm Lima -PERÚ O/
Link a la imágen: http://i.imgur.com/MPd5sqa.png /
http://conlacomidanosejuega.isf.es/images/correcto.pngNombre del Topic onde se encontraba: Grimmauld place #12
# de post donde se encontraba la imagen: #23
Ta da o/ , en serio estoy emocionada e_e, nunca había encontrado algo así que estoy reeeeeeeeeeee feliz *se pone a bailar como loca traumada por todo el tópic*
PD: Edito porque mi completa emoción no llegó a llenar las tres líneas y en fin ahora siento que ya se me fue el feeling (?) xD.
Creo que con eso ya esta /o/.
Salu o/
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Por suerte, no paso mucho tiempo para que una de las empleadas del departamento me atendiera. Era muy amable y realmente me sorprendió lo bien que atendía a todos los presentes considerando que eramos una buena cantidad, que se había estado acumulando. Admiraba eso, pues yo nunca había sido una empleada buena en el tiempo en el que había estado en el ministerio, todo lo contrario solía irme por temporadas y dejar el trabajo abandonado.
—Gracias—respondí mientras tomaba el formulario con una de mis manos.
A penas la joven termino de dar las últimas indicaciones sobre como rellenar el formulario, empecé a llenarlo con toda la rapidez que podía, pues me encontraba algo apurada después de todo.
Con mucho cuidado, me volví a acercar a la joven, era algo muy común en mí pues era muy torpe y solía caerme muy a menudo.
—Espero este todo bien— dije, mientras le entregaba el formulario.
Ficha de Identificación Personal:
~ Nombre del examinado: Leya Yui Stark Rambaldi~ Enlace a su ficha personal: http://www.harrylatino.org/index.php/topic/96898-ficha-de-leya-malfoy-rambaldi/Consentimiento informado:La escoba es el único objeto legal como medio de transporte que no necesita ser registrado. Es una de las formas de transporte mágico más utilizada y aceptada en Gran Bretaña, aunque es algo cultural. En el pasado, los magos eligieron la escoba como medio para volar por ser discreta, barata y fácil de llevar.Los alumnos de RB de la Academia de Magia y Hechicería que hayan sido mandados al Departamento, deberán recurrir al Consejo Regulador de Escobas para realizar el examen. Con esto se sabrá si el mago o bruja está capacitado para manejar el medio de Transportes.Yo, Athena Ravenclaw Rouvás, madre de Leya Yui Stark Rambaldi, he leído y comprendido el presente informativo.Firma del responsableLink de la ficha del responsable: -
Bueno vengo a dejar un cambio radical en mi ficha
. Que quede así (?).http://i.imgur.com/Lq4bmJw.jpg
DATOS PERSONALES
*Nombre del Personaje: Leya Yui Stark Rambaldi
*Edad: Joven
*Nacionalidad: Inglesa
*Familia(s):- .Familia Stark
- Familia Rambaldi
*Padre(s) Sanguíneo: Kris Gryffindor & Athena Ravenclaw
*Padre(s) Adoptivos: Lestat Rambaldi
*Trabajo: --
*Poderes Mágicos: --
*Rango Social: Unicornios de Bronce.
*Bando: Orden del Fénix
*Rango dentro del Bando: Initié.
*Nivel de Poder Mágico: --
*Puntos de poder en objetos: 20
*Hechizos adicionales: --
*Puntos de poder en criaturas: 40
*Criaturas controlables en asaltos y duelos: --
*Habilidades Mágicas: --
*Conocimientos Especiales:- Artes Oscuras
- Encantamientos
- Primeros Auxilios (Conocimiento Adquirido)
PERFIL DEL PERSONAJE
Raza: Vampiro
Aspecto Físico: Tiene una contextura delgada y curvilínea, que combina a la perfección con las facciones delicadas de su rostro. Su estatura esta entre 1,65 m. Posee los ojos de color azul marino y su cabello ondeado color rubio le llega aproximadamente a la altura de la cintura.En uno de sus viajes con Killu, él le tiño el cabello de color azul a forma de broma. Lamentablemente pese a los distintos intentos de Leya de volverlo a su color original, no lo pudo lograr quedándose con aquel tono de cabello.
Cualidades Psicológicas: De pequeña era muy malcriada, orgullosa e envidiosa pero desde que dejo de vivir con los Malfoy se tornó un tanto amable incluso cariñosa con los que le rodeaban, especialmente con su padre Lestat. Es un tanto insegura y se deja llevar muy fácilmente pero trata de mejorar en aquello. Detesta que la vean como alguien débil por lo que a pesar de no tener un talento en especial trata de hacer todo bien para que no la riñan.
Historia:
Nació en Inglaterra, rodeada de todo tipo de comodidades. Desde pequeña se le inculcó la idea de que ser sangre limpia era lo único correcto en la comunidad mágica y que por ello debía de menospreciar a los que no lo fueran, pero pronto se descubrió que no era una Malfoy sino que su supuesta madre se la había robado a una pareja de magos cuando ella era una bebé. Al principio su “madre” había planeado matarla, pero había terminado encariñándose con la pequeña bebé.Después de que todos se enterarán de aquella escandalosa noticia nadie volvió a hablarle a la niña, todo lo contrario la trataban mal y aprovechaban cualquier oportunidad para humillarla por su dudosa procedencia, por ello al cumplir los ocho años, la niña, decidió huir de la casa para ir en busca de sus padres y así comprobar que era de sangre limpia (idea con la que estaba terriblemente obsesionada), pero nunca pensó que su madre interpretaría mal esa decisión pues desde aquel momento aquella mujer que le había brindado tanto cariño decidió olvidarla para siempre pues consideraba la actitud de la niña como una traición.
Debido al ambiente de comodidades en el que la niña había crecido le costó mucho adaptarse a los cambios de vida que sufrió al ir en busca de sus padres. Pasó hambre y frío pero para su buena suerte, encontró a su familia a los pocos meses, al menos a uno de ellos, a su madre. Era rubia igual que ella(?), y para su total gozo de sangre limpia(pertenecía a la familia Stark) aún así le inquietaba que ella no le contará sobre su padre. ¿Por qué lo hacía? ¿Sólo para torturarla? ¿Por qué él tal vez no era sangre limpia? Cada vez que ella pensaba en eso se iba formando en su cabeza una idea cada vez peor.
A la edad de los once años, al fin su madre decidió contarle la verdad. No le agradaba la idea de que su padre la hubiera abandonado junto a su madre pero al menos su padre había sido sangre limpia o al menos eso le había dicho su madre, a quien no parecía importarle si este lo era o no. Pero había algo extraño en aquella relación madre-hija pues se llevaban pocos años de edad por lo que ambas se miraban más que todo como amigas.
La niña nunca había gozado de buena salud, pues siempre había sido enfermiza pero un día todo empeoró y la niña que apenas había cumplido 12 años cayó gravemente enferma. Todo indicaba que pronto moriría; la verdad era que a la niña no le importaba aquello después de todo había cumplido su meta de comprobar su pureza de sangre y con eso le bastaba pero no contaba con que un vampiro de nombre Lestat, se compadecería de ella y que el método que usaría para sanarla de aquella enfermedad tan grave sería convertirla en un vampiro.
No odiaba a Lestat por haberla convertido en vampiro, todo lo contrario lo consideraba como un padre al que le debía mucho y al que le estaría eternamente agradecida. La niña siempre lo visitaba cada vez que podía. Especialmente en los veranos. Él nunca la menospreció sino todo lo contrario correspondió su cariño de una forma que la niña nunca se hubiera imaginado, era un gran padre y en el fondo ella sentía envidia de sus hermanastras.
Llegó el momento en el que la niña tuvo que ir a la Academia, nunca había sido una gran alumna pero logró pasar todos los cursos con una nota intermedia. Apenas terminó aquello, sabía que debía de acoger un bando. Estaba segura de que quería ser mortífaga pues consideraba que la pureza de sangre era primordial y además odiaba a los miembros de la Orden por ser tan permisivos en ese aspecto pero aún así dudaba.
Para decidirse con más calma sin personas que le hablaran mal de uno u otro bando, decidió conocer el mundo y ver si este le traía la respuesta a su gran duda. Cuando estaba de pasada en París, por pura casualidad encontró un bar de magos, nunca había conocido a un mago fuera de Londres, por lo que quiso averiguar como eran ellos pero no había nada fuera de lo normal, eran todos iguales. Sin esperanzas, cuando estaba a punto de salir del bar se chocó en la entrada con un panda parlante.
-Mira por dónde vas boba- soltó de primera aquel oso. La adolescente, quien no estaba acostumbrada a recibir ese tipo de trato tan hosco, le dio un puñete en el estómago (el oso estaba en dos patas) y luego salió corriendo del lugar.
Al siguiente día cuando estaba a punto de regresar a Londres, para su sorpresa se volvió a encontrar con aquel panda. Él la reconoció por más que ella trató de cubrirse el rostro pero aunque parezca sorprendente no le riñó ni nada, solo le preguntó su nombre.
-Leya- respondió la muchacha con una sonrisa que no iba para nada con aquella situación.
-Bueno Leya, me has caído muy bien- contestó el panda – así que te acompañaré a donde vayas hasta que me aburras-.
-Como quieras- dijo apenas el panda había terminado -pero al menos dime tu nombre- en el fondo no terminaba de confiar en él.
-Killu-.
Pasó un tiempo y ambos se volvieron muy unidos, compartían muchos gustos especialmente que ambos adoraban el pay de limón. Killu no era noble, ni honrado. Todo lo contrario, era un panda sin modal alguno y estafador pero aún así aquella actitud caótica llamaba la atención de Leya, quien en el fondo lo admiraba pero no lo expresaba por miedo a la reacción, lo más probable burlona, de Killu.
La actitud de Killu influyó mucho en la decisión final de Leya sobre que bando elegir, junto a él, ella se sentía débil y eso le incomodaba mucho pues no le gustaba ser vista como una persona débil, por lo que finalmente decidió ser miembro de la Marca Tenebrosa pues para ella, ellos tenían una imagen de mucha fuerza y poder, que era todo lo que ella deseaba y quería pero estando dentro del bando se dio cuenta de que no era lo que buscaba o lo que esperaba, era totalmente distinto. Ellos no eran como se los había imaginado. Eran fuertes y usaban esa fuerza contra los más débiles y los que no eran de sangre limpia, pero de cierta manera ella no se sentía a gusto con ello. Siempre había creído que eso era lo que buscaba pero estaba en lo incorrecto, después de tanto no se había dado cuenta de que ya no le importaba la pureza de sangre ni ser superior a los demás pues había conocido una nueva forma de fuerza, la amistad.
No pasó mucho tiempo para que ella decidiera salirle se aquel bando( Killu no se enteró al instante pues andaba en busca de una receta de pay) pero sintió que hacía lo correcto ya que los ideales que tenía no eran los mismos que el de los demás mortífagos. Poco después salirse de aquel bando se sintió a gusto consigo misma nuevamente e hizo nuevas amistades, amistades que poco a poco hicieron que se decidiese por entrar nuevamente a un bando. Ella estaba segura por primera vez de que en ese ambiente estaría cómoda y defendería sus ideales y todo lo que más quería, y así fue. Aquel bando, le transmitía una paz que nunca antes había conocido y eso le encantaba.
Cuando al fin se decidió por contarle todo a Killu, sentía mucho miedo pues lo que menos deseaba era ser rechazada por su mejor amigo, quien cuando ella le había confesado que era una mortífaga se había alegrado mucho, pero para su sorpresa, el panda le dijo que había sido la mejor decisión que había tomado hasta ahora(claro, después de jugarle un broma diciéndole que volvería a París), con todo ello Leya sintió que al fin había encontrado su camino, un camino que estaba lleno de luz, esperanza y que por primera vez, se había ampliado para dejar que alguien más la acompañase.
Los días de soledad habían terminado.
*Objeto Mágico Legendario: --
*Objetos Mágicos:
Objeto: Varita mágica.
Clasificación: AA
Puntos: 20
Total de puntos: 20
*Mascotas y Criaturas:
Criatura 1: Gato Angora
Clasificación: X y no mágicas.
Puntos de Poder: 10 puntos.
Criatura 2: Caballo
Clasificación: X y no mágicas.
Puntos de poder: 10 puntos.
Criatura 3: Tigre
Clasificación: X y no mágicas.
Puntos de poder: 10 puntos.
Criatura 1: Oso panda
Clasificación: X y no mágicas.
Puntos de poder: 10 puntos.
Total puntos: 40
Criaturas en la Reserva: --
Criatura 1: --
Clasificación: --
Puntos de poder: --
*Elfos: Ani & Soul
*Licencias, Tasas, Registros:
Licencia de Aparición: Aprobada
Licencia de Vuelo de Escoba: --
*Registro de XXX:
- Registro de Raza: Vampiro
- Registro de Elfos domesticos:
- Registro de Criaturas:*Otros Datos:
- Su patronus es en forma de Pingüino Emperador
- Estuvo a punto de casarse
- Después de entrar a la Orden del Fénix le agarro mucho cariño a las criaturas mágicas
- Sueña con tener un dragón
- No le gusta que le recuerden su pasado
- A pesar de ser vampiro no bebe sangre
- Conserva la edad de 18 años a pesar se que fue mordida a las 12
*Cronología de cargos: --
*Premios y reconocimientos: --
*Links de Interés Referentes al Personaje:
Link al Perfil de Comprador del MM: 147
Link a Bóveda Personal: Bóveda de Leya Malfoy Rambaldi
Link a Bóveda Trastera: --
Link a Bóveda de Negocio:Bóveda 100540 Negocio Frawen's
Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda Familia Stark
Link a Bóveda Familiar 2: Bóveda Familia RambaldiBueno eso sería todo. Gracias o/ -
Hace mucho tiempo que no ponía pie en el ministerio, ya fuera porque no tenía nada que hacer o porque simplemente no se me había dado la gana pero ahora requería ir a el por mas que no tuviera ganas de salir del castillo Stark. No había podido salir con Killu pues no estaba segura si es que se permitían pandas parlantes en el ministerio, eso me ponía de más mal humor de lo normal, no me gustaba estar sola en lugares como ese.
-Sexto piso- Me repetía en la cabeza mientras tomaba el ascensor, no quería perderme ni nada por el estilo como habitualmente lo hacía.
Salí a toda prisa del ascensor hacía la recepción, no era mi primera vez en aquel departamento, pero nunca antes había acudido a pedir un formulario, pues todas mis visitas al lugar hacían sido con el único propósito de hablar con Roxie, por lo que me sentía algo perdida. Con el poco sentido de la orientación que me quedaba me acerqué a la recepción y tratando de no usar un tono mandón pregunté por el formulario para el examen de vuelo.
-Buenos días ¿Me podría dar un formulario para el examen de vuelo?- dudé por unos momentos lo que quería agregar -claro si es que lo hay-sonreí- la verdad es que me encuentro algo desorientada-.
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Tomé un emparedado de Dorothy aún sujeta de la mano de Bel y mientras me lo llevaba a la boca dos niños idénticos se acercaron a nosotras. No quería decirlo pero nunca había sido buena tratando con los niños, era una de las pocas cosas que aún conservaba de mi crianza con los Malfoy.
La súplica de los niños llegó más a Bel que a mí pero aunque tuviera ganas de largarme en ese mismo momento, sabía que no podía, era mi deber quedarme ahí. Además ya había llegado el momento de que dejará atrás mi comportamiento osco con los niños que no tenían la culpa de mi forma de crianza est****a.
Tomé el juguete con cuidado y le dediqué una sonrisa tanto a los niños como a Bel, le estaba muy agradecida a ella por haberme traído.
-¿Cuál es tú nombre?- pregunté animada.
-No importa, solo queremos jugar-.
Aquella respuesta me perturbó un poco, pero antes de preguntarle porque había dicho eso de manera tan grosera, las luces se apagaron y escuche el sonido de una bandeja dándose contra el suelo. Era horrible no ver nada, por suerte la oscuridad duro poco y más rápido de lo que esperaba las luces volvieron a encenderse.
Miré hacía todos lados, todos parecían estar bien, por lo que me sentí más aliviada pero esa sensación duró muy poco pues todos los niños habían desaparecido y solo se alcanzaba a ver los juguetes desperdigados por todos lados.Volteé la cabeza al escuchar la voz de Bel quien se encontraba más sorprendida y asustada de lo que había esperado. Desvié hacia abajo la mirada tratando de encontrar la razón de sus palabras y entonces lo vi.
El muñeco que parecía haber sido de trapo hasta antes de que se apagasen las luces ahora era uno hecho de huesos y unido con cabello humano. Con todas mis fuerzas lo arrojé, no quería tener cerca esa cosa, me daba asco. Quería largarme de ese sitio, lo deseaba en verdad pero los gritos de niños no me dejaban moverme ni un solo paso.
Asentí con la cabeza a lo que decía Bel. Deberíamos permanecer unidos, esa era la única manera de salir de aquel sitio pero mientras pensaba en potenciales maneras de salir de ahí escuché claramente la voz de Hank, más que palabras eran gritos ¿Qué quería que destruyamos? ¿Dónde estaba? ¿Seguía con vida?. Trataba de no pensar con más esperanza en lo último, nunca había sido muy animosa pero no era momento tampoco de caer en el pesimismo. Teníamos que salvarlo y luego huir de esa casa maldita.
-Debemos seguir las voces- dije con tono decisivo dirigiéndome a todos aunque más a Bel, era a la que le tenía más confianza y estaba segura de que me apoyaría o al menos eso quería creer.
Me alegré al ver que estaba a favor por lo que empezamos a correr a lo largo del pasillo buscando la habitación de dónde provenían los gemidos de los niños y también la de Hank.
De pronto un grito de terror se hizo escuchar de manera clara, pero no era la voz de los niños ni la de Hank, era una voz más potente, la de un adulto. Corrí a lado de Bel hacía la habitación de dónde provenía aquel grito y con la varita en la mano pateé la puerta con todas mis fuerzas. La puerta se abrió al instante.
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No me había dado cuenta de que mi ropa estaba chorreando hasta que Bel lo mencionó, no me parecía importante pero ella conocía más de esos lugares por lo que asentí con la cabeza de inmediato y casi mecánicamente me saqué el abrigo que llevaba y lo coloque sobre mi brazo mientras que con el otro lo iba secando, además dejaba ver lo extremadamente delgada que estaba pues no comía bien después de la pelea con Killu( comer me recordaba a Killu). Ya completamente seca recobré el hilo de la conversación con Bel.
-Si, una linda niñez- contesté con tono burlón.
Al notar que Adry avanzaba un poco más hacia dentro la seguí intuitivamente. Asintiendo seguidamente a la idea de Bel de que al día siguiente tal vez sería una buena jornada. La desaparición de la señora de delantal hizo que dejará de pensar en que el día de mañana tal vez el cielo sería claro y haríamos un gran trabajo con los niños.
-¿Es en serio?- empezaba a sentirme con más ganas de irme de ese lugar - esto ya es demasiado terrorífico como para que esa señora nos deje solos-.
Algo dentro de mí hacia que me portará tan a la defensiva, tenía un mal presentimiento. Algo iba a ocurrir y no era precisamente bueno. Caminamos un poco más, no mucho después Adry encontró un salón con una luz amarillenta dónde estaban jugando los niños del orfanato.
-Una hora muy peculiar para jugar ¿no creen?- la medianoche no me parecía la hora ideal para que niños jueguen.
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La idea de visitar un orfanato no me agradaba, a esto se le sumaba que últimamente había tenido la extraña sensación de no me sentirme cómoda rodeada de gente aún así Bel había conseguido convencerme de ir. Tal vez había aceptado dan fácil porque en mí aún permanecía la idea de jefa-empleada.
A pesar de haber usado un trasladador para llegar al orfanato, no me había salvado de la lluvia y estaba completamente mojada. El cielo estaba gris y corría un viento fuera de lo normal que me hacía pensar que pronto me levantaría del suelo. Las zapatillas blancas que traía se habían tornado de un color marrón al pisar un charco profundo y el pantalón celeste tampoco estaba del todo limpio. Mi cabello estaba lleno de pequeñas hojas y ramitas que no me molestaba en sacar pues me parecía que se veían bonitas además sería complicado pues ahora que se encontraba todo mojado se había enmarañado más de lo normal.
Nunca antes había visitado un orfanato, pero nunca me los había imaginado tan lúgubres, incluso se podría llegar a decir que inspiraba cierto temor.
-Es horrible- respondí a penas escuché las palabras de Bel. Me tranquilizaba pensar que no era la única persona a la que el lugar le producía cierto horror.
La respuesta de la mujer que atendía el lugar hizo que sintiera escalofríos ¿Había usado la palabra atrever? ¿A qué se refería con eso?. Mientras pensaba en aquello llegaron más personas, de las cuales reconocí a un par. Hank y Kirara.
-Es cierto, es demasiado tarde- solté un suspiro ¿A quién se le ocurría venir en la noche? - Por cierto hola- dije con un tono amable.
En ese momento, la mujer que hablaba con Adry nos invitó a pasar, por lo que sin siquiera ver si alguien respondía mi saludo me puse en marcha y crucé la puerta. Por dentro el lugar, tampoco era distinto, es más creo que ahora empezaba a apreciar más la vista de afuera. Tenía ganas de salir del lugar pues sentía que algo iba mal y eso me incomodaba mucho.
-¿Por dónde empezamos?- pregunté, algo avergonzada pues nunca había visitado un lugar como ese.
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Los días transcurrían lentos y desesperantes. Había esperado que el alejarme un tiempo del bando logrará calmarme pero había sido todo lo contrario, además Killu también me había dejado por lo que me sentía más sola que nunca. La única novedad era que mi cabello había vuelto a crecer, volviendo a la vez a su clásica tonalidad rubio claro.
<<Extrañaré el azul>>
La pequeña casa en la que estaba parecía caerse al igual que mis ánimos pues de repente un trozo del techo cayó muy cerca de mi cama.
—Esto es el colmo— grité, aunque era improbable que alguien me escuchará —Te calmará esta en ese sitio—dije imitando el irritable tono de voz de Killu —le hará bien a tu ánimos— continué—Uff, si viera cuanto bien le ha hecho— termine de decir con mi propio tono de voz.
No esperaba mucho de un lugar como ese, pero tampoco esperaba que fuera tan horrible. Estaba a punto de ir en busca de killu cuando ante mi apareció un patronus que nunca antes había visto, eran en forma de un centauro <<demonios>>. El mensaje, me resultó aún más confuso que el patronus ¿A quién se supone que tenía que buscar? ¿Quién era John Doe?Debía de ser importante si había enviado un patronus.
<<Supongo que ya es hora de volver>>
Tomé mi varita de entre los escombros aun dudando de presentarme en el lugar pues sabría que me vería como una total inútil al no saber que estaba pasando. Todavía pensando en eso me puse de pie y giré sobre mis talones rumbo al lugar del encuentro.
La fortaleza era más pequeña de lo que recordaba, era de piedra labrada y poseía una puerta de medio tamaño de madera aún así, el lugar estaba bastante iluminado por antorchas. Un tanto dudosa empujé la puerta, pues no sabía si era mejor llamar primero. Tal como esperaba el pasillo estaba también alumbrado por antorchas. Caminé por par de minutos hasta que pude ver unas caras conocidas, alrededor de una mesa de madera.
—Espero no llegar tarde—Mis mejillas casi como siempre su pusieron coloradas —¿Alguien podría explicarme lo que pasa?— estaba pasando exactamente lo que me había imaginado antes de partir.
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¿Una feria?
Las veces que había asistido a alguna las podía contar con los dedos de las manos, era espantoso. Debía de salir más de la casa del árbol donde ahora vivía, gracias a que Catherine se esforzaba por no caerme bien(?).
Había sido casi pura suerte, haber encontrado una invitación, sino tal vez como muchos otros eventos me lo hubiera perdido. Era tan extraño salir de nuevo, que no tenía ni siquiera una pequeña idea de como ir vestida. No era formal, así que los vestidos estaban descartados, pero no tenía nada más que mi pijamas fuera de eso.
—Una pijama será—
Después de luchar unos cuantos minutos más con las sábanas, me levanté y tomé una ducha fría. Necesitaba levantarme de una buena vez. A penas salí, me sequé rápido el cuerpo y cogí la pijama que había sobre la cama. Ani conservaba aún su buen gusto para la ropa. Debajo había unas zapatillas azules, por lo que sin demorarme más me las puse, seguidamente con algo de esfuerzo me hice un moño alto.
—Killu no puedo llevarte— en realidad no sabía si permitían animales pero no quería arriesgarme a pelearme de nuevo con alguien —no permiten, ya sabes—dudé por un instante en lo que estaba a punto de decir —animales—.
—¡PERO NO SOY UN ANIMAL!—aquel reclamo hizo que los pájaros salieran volando por la ventanas.
—Si, lo tengo claro, pero ellos no— empezaban a agotarse mis excusas, al igual que mi tiempo — de todos modos, te puedo llevar a otras ferias—
—No, yo quiero ir a esta—.
—Entonces, solo es un capricho— no quería reprocharlo, pero ya era muy tarde para seguir discutiendo pasivamente — Te prometo que a la siguiente feria te llevaré ¿Sí?—.
—Esta bien, pero asegúrate de traer mucho pie de limón, si no te quedarás sin un mano—. Sonrió.
—Eso ni lo dudes—sabía que sus amenazas en cuanto al pie siempre eran serias, así que lo mejor era responderle sin risas ni nada parecido.
Era aburrido caminar sola, pero me ayudaba a calmar mis nervios.Ya habían pasado ¿un mes?¿dos? desde mi última salida, la cual no había sido del todo agradable ya que Killu había terminado mordiendo a Groter ¿Groter? que sería de la vida de él. No lo había vuelto a ver desde aquel incidente.
Después de caminar por varios minutos por un sendero, encontré lo que parecía ser una flecha. Luego de ello, fue fácil encontrar la Calabaza dorada.
Por dentro, no se podría decir que estaba vacía, todo lo contrario había tanta gente que se me había imposible poder concentrarme en buscar a alguien, además de que tantas voces me perturbaban. Con las manos en las orejas, pasé viendo al suelo la recepción para luego entrar al comedor, donde la gente tampoco era poca. Aún así casi por pura suerte, llegué a ver a Belosa y unos cuantos conocidos más.
Me le acerqué a Bel por detrás y no pudiendo contener mis ánimos(?) le di un pequeño golpe en la cabeza. Casi haciéndole caer la bandeja de bocaditos que estaba repartiendo por las distintas mesas.
—¿Sabes cuándo comenzará todo esto?—pregunté relajada, como si nada hubiera pasado mientras tomaba un bocadito de la bandeja.
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9
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Últimamente había estado muy alejada de las distintas actividades que organizada el bando por motivos de tiempo pero esta era una ocasión que no podía dejar pasar, después de todo adoraba las fiestas tanto o más que Killu(?). A pesar de ello me sentía algo mal pues no había ayudado a organizarla por ello, había tratado de ir lo más temprano posible para tal vez lograr ayudar en las últimas cosas que faltarían terminar antes de la llegada de todos los invitados.
Después de caminar un buen tramo, había llegado al fin al lugar donde se desarrollaría la fiesta, el bosque prohibido. No era una miedosa, pero tampoco me agradaba demasiado estar en un lugar como ese, dónde podía pasar cualquier cosa aún así trataba de parecer lo más calmada posible.
No traía mi habitual vestido corto, después de todo no concordaría con la temática aún así me sentía cómoda con el vestido largo de algodón con motivos florales. A parte de ello la bandana que llevaba en la frente y las botas de gamusa combinaban perfectamente con los collares de conchas de mar.
-¿Hay algo en lo que pueda ayudar?- pregunté algo tímida mientras me acercaba con pasos rápidos hasta donde se reunidos algunos de mis compañeros.
No muy detrás de mi se encontraba Killu, no entendía porque últimamente insistía en acompañarme a todos lados pero aún así no podía negarme, después de todo entendía que tal vez se aburría demasiado estando solo en la Mansión. Necesitaba salir más.
Me quede en silenció esperando alguna respuesta por parte de mis compañeros, mientras observaba todo el lugar. En realidad se podría decir que a penas pisabas el lugar una gran paz te invadía, definitivamente iba a ser una gran fiesta. No podía esperar más por ver todo el lugar lleno de aspirantes y demás. No era muy social ni nada por el estilo, pero en ocasiones como la que se estaba presentando tendía a relajarme un poco más y ser abierta con la gente.
. Que quede así (?).
Consejo Regulador de Escobas
en Londres: Ministerio de Magia
Publicado
Seguidamente a que Roxie nos entregó a ambas nuevas escobas y después de ver detalladamente lo que nos indicaba procedí nuevamente a intentar levantar mi escoba(?).
—Arriba — exclamé claramente. La escoba al igual que en mi alucinación se elevo, la sujeté fuertemente. Seguido a ello la monté y observando el ejemplo de Roxie dí una patada al suelo, con alegría comprobé que me había elevado. Finalmente me incliné ligeramente hacia adelante y descendí.
Ahora vendría la siguiente parte de la prueba(?) que según me habían dicho era mucho más complicada.