Kathy Daray Van Halen

Avery Harnois

 

Al menos no tendría que buscar por mucho tiempo a la bruja cuyo nombre retumbaba en su memoria. Caminó hasta encontrarse frente a ella y con ojos suplicantes se presentó.

 

-Espero que si pueda ayudarme, mi nombre es Avery Harnois- dijo la joven rubia. En su voz se notaba un tono de duda mezclado con temor, casi podría sentirse lástima por la muchacha que parecía un cachorrito perdido. Su ansiedad hacía que sus dedos no dejaran de jugar con la cadena del guardapelo que empuñaba en sus manos. Lo abrió y extrajo de este un pequeño trozo de papel que contenía el nombre de Lyra y unos garabatos con el antiguo escudo Rambaldi.

 

-He encontrado esto en mi guardapelo, después de mucho buscar he dado con este lugar donde me han dicho que podría encontrarla. No sé qué sea esto, ni mucho menos sé de dónde le conozco, pero apenas tengo el vago recuerdo de que una pequeña criatura, un elfo doméstico creo, que me hacía entrega de esto. Sé que no es mucho, pero no poseo muchos otros recuerdos de nada más y esperaba que pudiese ayudarme con ello o brindarme alguna información de cualquier otra cosa.

 

Avery esperaba que la bruja no pensara que ella estaba loca y la corriese del lugar, al menos esperaba que le invitasen a quedarse allí un rato pues temía que empezara a llover, y siendo sinceros, ella no tenía muchos lugares donde quedarse, apenas si había podido pasar los pocos días que recordaba estar consiente. Aunque no lo decía, sus ojos verdes eran quienes pedían una cierta piedad a la bruja y a cualquier otro que se encontrara con ella.

 

@@Lyra Katara Selwyn

Avery Harnois

 

Sola, nuevamente enfrentaba ese triste vacío de la soledad en que no tenía ni idea de qué había pasado antes. No sabía si quiera si había despertado hace mucho, es más ¿acaso había dormido? ¿Había comido algo? No llevaba cuentas de días ni de horas, estaba perdida en un limbo en el cual lo único que sabía era que caminaba sin rumbo alguno por las calles aferrándose a su túnica y a aquel guardapelo que, aunque no sabía bien por qué, atesoraba con su vida entera. Algo en su memoria, un vago recuerdo quizá, le decía que debía cuidarlo con cada parte de su ser. Sabía también que de alguna forma este contenía una magia oscura que no se atrevía a develar, ella prefería quedarse con la curiosidad.

 

Recordaba también, como si de un sueño se tratara, como un elfo doméstico le indicaba que si alguna vez perdía todos sus recuerdos y se encontraba en problemas, acudiera a una bruja de nombre Lyra. Este dibujó un escudo, ella desconocía que se trataba de la antigua familia que la recibió y con cuyo patriarca inicial contrajo matrimonio antes de desaparecer ambos. Pero ¿había sido ella quien en realidad se había casado con Deiwan Rambaldi? A los ojos de todos Kathy Daray, hija de Alucard Van Halen fue quien se casó con el joven vampiro italiano. Ni ella ni nadie, salvo dos elfos domésticos de nombre Edward y Beetlejuice, se daban por enterados de que Avery y Kathy compartían el mismo cuerpo. Avery era la luz mientras que Kathy era la oscuridad. El temible Alucard quiso encerrar la bondad y todo lo bueno de la joven, pues solo así ella podía progresar en sus conocimientos y alcanzar el poder que él quería para su aprendiz e hija, de tal manera que con secretos muy avanzados logró crear el guardapelo que contendría a Avery encerrada.

 

Por alguna extraña razón Avery, quien era la única parte de ella que recordaba compartir su cuerpo con otra personalidad, había olvidado todo por completo. Vagabundeaba de arriba abajo, y a pesar de que se veía un poco cansada no dejaba de verse tan bella como siempre con sus hermosos cabellos dorados cayendo cual cascadas por sus hombros y sus brazos cubiertos por su vestido blanco de princesa. Finalmente llegó hasta donde se le indicó que Lyra podría encontrarse. No tenía muy claro qué le iba a decir o preguntar, pero al menos quería encontrarse con alguien que supiera algo de ella. Entró por la puerta y esperó a que sus ojos se acomodaran a la luz del lugar.

 

@@Lyra Katara Selwyn

Recién despertaba. Quién sabe cuánto tiempo llevaba inconsciente luego de que una viga cayera encima de mi tras ser atacada por Thomas, a quien le había perdido el rastro y ya no sabía donde se hallaba. Podía hacer de héroe y salvar a todos los allí presentes, o podía evitar que nuestra "pequeña" excursión en el tiempo continuara haciendo estragos en la línea temporal.

 

No sabía en que ala del hospital me hallaba, pero escuchaba a las alarmadas enfermeras comentar entre ellas que ciertos miembros de algún cuerpo organizativo habían capturado a alguien y que le estaban exigiendo sus documentos de identidad. Estaban preocupadas porque fuera uno de los crimínales que habían escapado. Ya suficiente tenía con el hecho de que un demente andaba por ahí suelto con una varita haciendo daños a diestra y siniestra.

 

Un poco mareada, con mi mano en mis a doloridas costillas y apoyándome contra las paredes de los pasillos, caminaba cojeando hacia mi despacho. Finalmente logré llegar hasta la oficina que ahora se encontraba vuelta un desastre. Había alguien ahí. Nadie entraba a mi despacho, no sin mi permiso, especialmente porque tenía ciertos encantamientos para que solo el personal autorizado por mi pudiese entrar, pero yo no había autorizado a nadie para entrar. Solo yo podía estar ahí. Y efectivamente así fue. Había vuelto antes de aquel simposio al que me habían llamado en aquella época. La Kathy del pasado estaba allí, contemplando el desorden que la Kathy del futuro, yo, había desatado en su lugar de trabajo. Tenía que entrar allí, pero no podía ser vista por mi misma. ¿Cómo se suponía que tomaría los giratiempos para mi y mis estudiantes?

 

Kathy montó en cólera cuando no vio su bata de doctora colgada en su perchero, aquella que yo estaba usando en ese instante. Y vaya que eso si me ponía de malas, que alguien se metiera con mi indumentaria de trabajo. Lo sabía, si, pero otra cosa era verlo con mis propios ojos. ¡Cielos, si que me ponía roja cuando me enojaba!

 

Kathy encontró uno de los giratiempos en el escritorio y se lo metió en su bolsillo. ¡Demonios! Ese tendría que ser el mío, pues tenía que sacar a mis alumnos de allí lo antes posible ¿y yo? Suponía que debería quedarme en aquel sitio hasta que encontrara la forma de que yo misma me devolviera mi tiquete de regreso. Kathy iba apurada, tras ella debía ir yo también para recuperar lo que se había llevado. Invoqué un patronus cuya forma de murciélago indicaría a los estudiantes la dirección a mi despacho para que ellos mismos fueran por sus giratiempos mientras que yo me sometía a la misión de recuperar el mío. Al llegar allí, debían suministrar un santo y seña, el cuál eran tres adivinanzas diferentes para cada uno (1º- al momento; no tiene carne, ni sangre, ni huesos.- 2ºTiene grandes pabellones, mas no tiene habitaciones.-3ºDos buenas hermanas son, pero con muy diferente educación)

de una caja que rezaba "buzón de sugerencias". Un pequeño trozo de papel con el acertijo escrito en este saldría de la ranura por la cual se suministraba la sugerencia en lo que para los ojos ingenuos era meramente un pequeño buzón azul.

 

Por aquellos años, estaba en una posición tan superior como para manejar el hospital y aspirar a cualquier tipo de mejora, ya fuera en nuestro servicio, infraestructura u otro aspecto. Los magos y brujas que sabían lo del santo y seña del acertijo, debían completar la acción dejando una sugerencia, queja o reclamo en este mismo para que el proceso fuera exitoso. En el caso de los muggles, simplemente sentían una urgencia de dejar su aporte allí cada que pasaban cerca al buzón, un truco algo sucio el de obligarles a decir algo respecto a la institución, pero no me importaba mucho si el fin era el de mejorar.

 

Guardé en mi bolsillo un papel donde tenía anotados asuntos referentes a la salida de campo, y me encaminé en dirección opuesta a la de mi patronus, en busca de la Kathy del pasado que tenía retenido mi giratiempos.

Al principio pensé que habrían muchas bajas en el curso, pues inicialmente solo unos cuantos se presentaron a la clase y solo un alumno cuyo nombre no registraba en la lista de estudiantes se nos unió. Pero al parecer, mientras encontraban el aula indicada, este personaje de cabellos rojos logró perderse. En un momento temí que a parte de los dos enamorados, el historiador, se hubiese perdido también. Pero allí estaba, listo para realizar su entrevista a la paciente.

 

Aquel que alguna vez fue mi lado humano sintió cierto sosiego al ver cómo los alumnos entablaban una empatía con Gertrude y le incitaban a reavivar sus más felices recuerdos. Después de todo, sin importar cuál fuera su ideología o creencia, sus actitudes reflejaban que de algún modo siempre habría compasión entre quienes compartían un papel en una sociedad.

 

Tomaba apuntes sobre el desempeño de cada uno. Quería registrar sus acciones y cómo se comportaban. Antes de que el último alumno pasara a dar su entrevista, tomé un pedazo de tiza y comencé a escribir dos conceptos en una pizarra que se hallaba en la pared opuesta al vidrio oscuro que nos separaba a nosotros de Gertrude y su dementor.

 

 

Emergencia: Es la situación de salud que se presenta repentinamente, requiere inmediato tratamiento o atención y lleva implícito una alta probabilidad de riesgo de vida.

 

Urgencia: Es una situación de salud que también se presenta repentinamente, pero sin riesgo de vida y puede requerir asistencia médica dentro de un período de tiempo razonable (dentro de las 2 o 3 horas).

 

Ejemplos de posibles casos de emergencias son: Pérdida de conocimiento, abundante pérdida de sangre o hemorragia, dificultad respiratoria prolongada, dolor intenso en la zona del pecho, convulsiones, electrocución, asfixia por inmersión, caídas desde alturas, accidentes de escoba/tránsito/aparición, etc (desparticiones). En estos casos, las personas no pueden manejar esta situacion y se necesita de los profesionales especializados para que puedan ocuparse de ella.

 

En cuanto a lo relacionado con urgencias, sólo lo constituyen los accidentes leves, es decir, que no son graves y en el cual las personas pueden controlarlos debidamente hasta que vengan los especialistas en atender la situación.

La tiza se detuvo tras dejar plasmada en la pizarra las definiciones que estaba pronta a explicar luego de que escuchara la conversación entre el historiador y la paciente. No obstante, algo andaba mal. El ambiente se tornó mas pesado que de costumbre.

 

Cuando atendía el caso de Gertrude sabía a qué debía atenerme, siempre iba por un poco de chocolate y una infusión de sangre para pasar el mal trago de haber estado junto al dementor. Esta vez todo era diferente. Varios patronus comenzaron a volar por toda la habitación, incluso algunos de ellos salían en pos de otros dementores por la puerta. No estaba segura de si eran procedentes de mis alumnos o si se trataba de algún otro mago de la época, pues como Gertrude, también habían otros magos y brujas recluidos allí por diferentes casos.

 

La instrucción inicial había sido la de no usar magia en ningún momento, sin embargo la ocasión lo requería, y si de alguna forma la historia se veía alterada, peor habría sido no hacer nada en nuestra propia defensa. Antes de poder salvar vidas o hacer algo por alguien, siempre se debe tener en cuenta el bienestar y aptitud del profesional para que este pueda asistir otras vidas en el futuro. Ahora nuestro futuro se veía amenazado.

 

Una alarma comenzó a sonar por todo el hospital mientras que luces rojas iluminaban los pasillos para alertar a la gente. El caos se desató. Los pacientes del pabellón mental escaparon. Aquellos recluidos por delitos cometían fechorías y delitos de gestión pública . Para los ojos muggles todo habría sido un desastre sin explicación, para nosotros la respuesta estaba en las varias sombras negras que deambulaban por ahí avivando los mas tristes y temerosos recuerdos de pacientes, médicos y enfermeras que se atacaban entre si.

 

Thomas era uno de aquellos pacientes cuya sangre familiar traía una historia de magos y brujas. Suponíamos que era huérfano, pues nunca recibió una visita de nadie. Su única compañía era su varita. Los demás médicos muggles pensaban que solo se trataba de una tonta ramita de la cual él no se desprendía, pero yo conocía su secreto y por ello tenía un trato con él. Le permitiría practicar pequeños y simples trucos de magia y encantamientos en mi oficina en horarios especiales, pero él no podría dejarse pillar por nadie. Thomas siempre fue muy inteligente y audaz, de hecho era difícil pensar que alguien tan elocuente como él podría terminar en un sitio como ese. La razón de su confinamiento estaba en que este era todo un sociopata. Se volvió mi caso personal luego de que yo lo pidiera en un exhaustivo formulario psiquiátrico. Sabían que él estaba mal pero no entendían qué tanto. Poco o nada entenderían los muggles de aquel entonces y de ahora lo peligroso que era tener a un chico rubio y agraciado proclamándose a sí mismo como el autentico Gellert Grindelwald.

 

Como por instinto, tras indicar a mis alumnos que abandonaran el aula me proponía a regresar a mi oficina para buscar los giratiempos que nos harían regresar a nuestro tiempo. -Les diría que esperen aquí, pero es peligroso. Encuentren un refugio. Yo iré a buscar los giratiempos a mi despacho

 

Era como si la guerra que se estaba llevando a cabo afuera se hubiese hecho de las suyas para llegar hasta el hospital. No fue sino que avanzara unos cuantos pasos para distinguir la rubia y salvaje melena de Thomas sacudirse mientras este agitaba su varita con orgullo lanzando un maleficio a otra indefensa mujer. Reía desquiciado.

 

-¡Thomas! -grité furiosa y a todo pulmón. Sus batas blancas salieron corriendo despavoridas mientras el seguía riendo por los pasillos cuya luz fallaba.

Debía ir tras él, pero la mujer era ahora algo mucho más importante. Le dejé escapar.

Me acerqué a ella y con cuidado le sostuve la cabeza. Apunté a sus costillas con mi varita y pronuncié un "¡Braquiam Emendo!" que le curaría sus costillas rotas y le salvaría por el momento. Ella ya estaba bien, solo debía reposar. Le acomodé mejor en el suelo y salí tras el culpable de ello.

 

Una anciana muggle intentaba huir del desastre que se desató en la zona de pacientes de la tercera edad. Para su infortunio se atravesó en el camino del veloz Thomas, quien le dirigió un "expulso" a la mujer que salió volando por los aires. Ella había perdido el conocimiento. Estaba a punto de realizar el debido encantamiento cuando escuché que nuevamente Thomas se dirigía a atacar a alguien más con un "Sectumsempra". Tuve que dejar a la inconsciente mujer para ir a asistir a quien Thomas hería. Corrí por los destrozados pasillos, haciéndome camino entre otras injurias y calamidades que allí ocurrían para detener al que llamaba 'mi caso especial'

El ejercicio de la medicina por parte de las mujeres no fue bien recibido por mucho tiempo. Ni siquiera después de que la primer mujer graduada oficialmente como médico en Nueva York(Estados Unidos), Elizabeth Blackwell, hubiese alcanzado su más alto reconocimiento. Desde la antigua Grecia con la afamada conocedora en medicina, Agnodice, hasta aquellos años después de la revolución feminista, las mujeres siempre tuvieron que ocultarse y hacerse pasar por hombres para poder practicar sus conocimientos en salud.

 

Esos años tampoco fueron muy fáciles para mi. Sin embargo había logrado alcanzar cierto reconocimiento como para ganarme el respeto del equipo médico del hospital. Contaba con la disposición de las enfermeras para ayudarme hábilmente en lo que les pidiera. También estaban los envidiosos, hombres que se sentían amenazados por trabajar con alguien como yo y que insistían en que una mujer no debía ser doctora como ellos. De igual forma había enfermeras que por sus celos ante mi cargo daban la razón a estos caballeros. De todas formas mi opinión solía ser consultada en importantes equipos y reuniones en que se planteaban interrogantes de cómo llevar a cabo las acciones con los pacientes. Ese día tenía agendado un importantísimo encuentro con el tribunal médico, por lo que sabía que la Kathy de aquella época no estaría presente en el hospital, podía tomarme la libertad de estar allí sin encontrarme conmigo misma.

 

Tomé el giratiempos que se encontraba en una gaveta de un escritorio con apenas tres patas, empolvado y lleno de telarañas, este se hallaba en medio de una habitación con paredes que tenían un olor impregnado de humedad. Al frente, a la derecha, se hallaba una puerta sin perilla que daba hacía un desolado pasillo, totalmente opuesta a la inmensa ventana rota cuyos vidrios sucios dejaban escaparse unos cuantos rayos de luz en dirección al escritorio.

 

Di las vueltas necesarias para encontrarme con mis alumnos en el periodo de tiempo indicado. Varias imágenes borrosas pasaron como un haz de luz ante mis ojos, permitiéndome presenciar de manera regresiva los sucesos que allí ocurrieron hasta el día antes de que yo partiera del hospital. La secuencia se detuvo. Todo estaba ahora en orden y como lo recordaba. Mi bata se encontraba en el perchero donde solía dejarla cada que salía de las instalaciones. Guardé el giratiempos en el cajón donde lo hallé, junto con unos cuantos apuntes que tomé al escuchar la opinión de mis alumnos tras la pregunta que les había formulado al principio.

 

Era mi costumbre profesional usar siempre la bata médica dentro del hospital, así que me la puse. Me dirigí al punto de información donde se hallaba la secretaria que recibía a los visitantes y le pedí que por favor llamara a mis alumnos.

 

-¿Qué acaso no tenía usted una importante asamblea a la cual asistir, Doctora Van Halen?

-He tenido que aplazarla, Sybill. Un grupo de estudiantes de la Universidad de Hardvard viene a realizar una pasantía.- le expliqué. Los estudiantes de esta universidad muggle siempre han sido muy bien recibidos en todos lados, incluso desde aquellos años, por lo que no sería raro recibir un pequeño grupo proveniente de esta universidad, al menos no para Sybill si le comparábamos con la universidad mágica. - ¿Podrías por favor solicitar que asistan a la escucha del testimonio de Gertrude?

 

Antes de hacer caso a mi pedido, Sybill no se percató de ocultar su rostro de terror. Gertrude era uno de los casos más severos que teníamos en el hospital, según los otros médicos muggles. No era mucho lo que podía hacer por ella, pero al menos intentaba mantenerla con vida escuchando todo lo que ella tuviera para decir.

 

-Estudiantes de la pasantía de Hardvard, se solicita que asistan a la habitación A4. Estudiantes: Ishaya, Juliens Malfoy, Seba Granger y Darla Potter de Hardvard, favor presentarse en la habitación A4.

 

Esperé a que aparecieran mis alumnos y dispuse unas batas médicas para ellos también para que las usaran mientras estaban en el hospital y se movieran por sus pasillos y habitaciones con ellas puestas.

La habitación a la que los cité estaba separada por un inmenso y grueso vidrio oscuro. De un lado se ubicaban quienes estaban allí para escuchar y estudiar los casos, del otro había solo una silla y una luz colgada del techo para brindar una tenue iluminación.

 

El caso era severo, y solo alguien con suficiente fuerza de voluntad podría llevarlo a cabo. Eso y bastos conocimientos en la magia y encantamientos, pero eso no era posible de ejecutar con tal facilidad en medio de tantos muggles presentes, por lo que había que optar por la parte de la voluntad. En momentos como este agradecía que no muchos sucesos agradables hubiesen sido parte de mi vida, así no habría tenido que luchar contra aquello de manera tan constante día a día y con cada encuentro que tenía con Gertrude.

 

Les indiqué a mis alumnos que se ubicaran tras el vidrio, si era necesario, debían mantener su varita en ristre, pero sólo si se trataba de una situación que realmente lo requiriera, pues no querrían causar ningún cambio en el hilo de la historia.

 

Una enfermera entró en el lugar empujando una silla de ruedas en la que se encontraba sentada una mujer con expresión triste. Miraba hacia la nada. Un catéter salía de su muñeca y se conectaba con un líquido contenido dentro de una bolsa que colgaba de la silla de ruedas. La enfermera que empujaba la silla traía una mirada apagada y melancólica, pero no tanto como la que el rostro de Gertrude dibujaba. Detrás de ellas, una sombra negra las acompañaba. La enfermera ubicó la silla en medio de la habitación y se marchó.

 

- Ella es Gertrude. Una mujer hija de muggles. Acusada de haber matado a su hijo tras la muerte de su marido. Sus conocidos afirman conocerla desde hace mucho tiempo y que la tristeza ha sido su rasgo mas característico, de alguna forma consigue contagiar esa tristeza a quienes la acompañan. Ha sido diagnosticada con depresión severa. Se cree que no solo es capaz de cometer suicidio, sino de que puede acabar con la vida de otros. Las enfermeras le han pillado varias veces arrojando objetos contundentes y filosos al aire, diciendo que es en defensa propia, pero nunca ha dejado claro de quién se defiende. La cuestión es que ella no se defiende de alguien, sino de algo...

 

Señalé a la sombra que flotaba al lado de Gertrude.

 

- Desde muy pequeña, a Gertrude la acecha un dementor. Si bien es bruja, sus padres muggles no han podido enviarla a una escuela de magia, por lo que ni ellos ni ella saben qué es lo que le acecha. Sus padres ni los muggles con los que convive pueden ver al dementor, pero ella si, por lo que cada vez que describe a la criatura es tomada como una demencia esquizofrénica por su parte. En aquellos días no me fue posible descifrar porqué esta criatura perseguía a Gertrude desde tan temprana edad.

 

Suspiré. Esperaba que mis alumnos comprendieran la difícil posición que tenía en esa época. Gertrude necesitaba a alguien que la escuchara, y tristemente eso era todo lo que yo, nosotros, podíamos brindarle por ahora.

 

-El uso de la magia queda descartado, no solo porque irrumpiría con el curso de la historia, sino porque...con los muggles alrededor se hace difícil- realmente había otras explicaciones de por medio, pero por ahora quería llegar al punto de la lección - muchas veces, personas como ella solo necesitan ser escuchadas y que entiendan su situación. Si se sienten preparados para estar en una misma habitación con un dementor, pueden pasar y entrevistar a la paciente, de lo contrario, pueden quedarse resguardados tras el vidrio y someterse al temor de ser insuficientes como personal de la salud.

 

Sabía que eso último había sido duro, tal vez bastante cruel. Pero si querían ser aptos para servir a otros tenían que dejar de lado todos sus prejuicios y temores para lograr un apto nivel de profesionalismo.

Era extraño, si, que para una vampiresa se complicara el asunto de poder identificar a algo o alguien ya fuera en la penumbra, pues a diferencia de otras criaturas la vista de un vampiro siempre ha sido la más característica entre los depredadores. Quizá se debía a que los múltiples gases dejados por las bombas de la guerra y otros químicos utilizados en el hospital aún se encontraban impregnados en el aire. Motivos por los cuales fue grata mi sorpresa al percatarme de que parte de los alumnos que recibía eran también a su vez compañeros de profesorado en la universidad. No era extraño, después de todo al fin y al cabo todos siempre tenemos algo que aprender de los demás.

 

En cierto modo, dadas las respuestas de los anteriores, muy bien planteadas al tratarse de su propia opinión, lo que quería oír era algo similar a lo que el último alumno había planteado. Durante los años de guerra descubrí, y mas tarde se desarrollarían discursos desde diferentes enfoques científicos y sociales al respecto, que la salud y el bienestar era subjetivo.

 

-La Organización Mundial de la Salud, o OMS, definió en 1946 la salud como "un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente ausencia de afecciones y enfermedades". Para el principio de los tiempos solo se daba atención a las enfermedades en un enfoque reduccionista donde solo primaba el organismo. Claro que hubo previos aportes médicos y filosóficos que hablaban de otros aspectos mentales y espirituales que influían en la salud física de un paciente. Más tarde, con las secuelas de las guerras se apreció que también el bienestar socioeconómico tenía un importante impacto en la salud mental, y por consiguiente físico, en las personas. Supongo que recordarán la "Gran Depresión" muggle cuándo ocurrieron miles de suicidios tras dicho evento. Así como la catástrofe de Chernobyl que dejó graves heridos y cuyas repercusiones siguen hasta hoy en día.

 

Carraspeé un poco. Mi intención no era la de brindar una clase de historia muggle, para eso ya tendrían tiempo de apuntarse a esa asignación en la universidad mágica. De todos modos era importante hacerles dejar en claro lo importante de la situación para que supieran luego a que nos atendríamos no solo en lo que seguiría de clase, sino también en sus vidas, nuestras vidas.

 

Había sido miembro de un grupo oscuro, similar a la Marca Tenebrosa, y luego logré ser miembro de esta misma. Actualmente había optado por la neutralidad mientras evaluaba otros aspectos de mi vida. En ese tiempo en que pertenecí a dichos grupos me percaté de las personalidades que pasaban por allí, sin importar que tan alto o bajo fuera su rango dentro de estos todos se daban (nos dábamos) aires de importancia y en su mayoría se proclamaban todopoderosos hasta el punto de pensar que no dependían de nadie. Pocos eran lo suficientemente inteligentes como para saber que por más que se desee actuar solo, mientras se sea parte de un grupo o sociedad, las acciones de uno repercuten a todos y atentan hacía la salud y bienestar de todos los miembros, de uno mismo.

 

No me agradaba mucho lo que estaba por decir, pues aún creía en la supremacía de los magos y brujas a pesar de todo, pero de todos modos, era algo verídico.

 

- Esta definición que les he compartido, como sabrán, es bastante utópica. Compartimos bastante con los muggles aunque no lo crean. Según lo que les he dicho, nadie podría contar con completa salud actualmente, pues como criaturas que somos, siempre querremos mas de cualquier cosa y nos sentiremos inconformes con lo que tenemos. Hay quienes pueden contar con pleno estado físico y mental, pero no social. Tal vez cuenten con lo social y mental, pero no lo físico. Siempre habrá algo que nos haga falta. Entonces, según esto ¿estamos todos enfermos?....

 

Todo esto ha sido un preámbulo que les aseguro tiene una razón de ser. Previamente les he indicado que podrían dar un paseo por las viejas instalaciones de este hospital abandonado. Aquí en el pasado se cometieron fechorías y atrocidades que para aquel entonces se explicaban con aras de la ciencia y en pro de la salud para lo que hoy en día consideramos un comportamiento normal. ¿Pueden imaginarse aplicar una lobotomía a una mujer con la excusa de ser ella una mala madre por abandonar a sus hijos cuando en realidad esta solo salía a trabajar para conseguirles alimento? Es aquí donde ustedes entraran a juzgar qué es apto para ser tratado y que no.

 

Hay varias y diversas habitaciones en este hospital, algunas más tétricas que otras. Hay escondidos para ustedes diversos giratiempos en cada habitación diferente. Deberán separarse e ir en busca de ellos. Nos vemos en este mismo hospital, más o menos 100 años atrás.

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Los pasos retumbaban secos pero fuertes por los pasillos cuyas paredes desteñidas por la humedad y el moho eran los pilares de aquella edificación que albergaba diversas salas y habitaciones, algunas incluso remotamente escondidas. Las ventanas, con sus vidrios rotos y sucios seguían enmarcadas por barrotes oxidados. El polvo y las telarañas junto con la falta de iluminación y perturbadora ambientación no eran nada comparado con la historia que cada muro del edificio cargaba consigo.

Era la época Victoriana. Entre los años 1800 y 1900, muchos eventos lograron transcurrir. Importante fue el ascenso de la reina Victoria I al poder como para que este periodo fuera reconocido con su nombre. Inventos que propulsaron la revolución industrial y hallazgos que se hicieron famosos bajo la revolución científica con nombres tan aclamados como los de Charles Darwin en la antigua Europa tomaron gran relevancia por estos años. La política y la guerra también tuvieron su auge como todo lo demás.

Por aquellos años yo había decidido regresar a Londres después de uno de mis viajes. Los heridos por la guerra eran tantos que se necesitaba bastante personal para atenderles. A pesar de que siempre he preferido tener un trato distante con los demás, en mi naturaleza siempre ha estado el servir para salvar una vida, lo que extrañamente y para mi sorpresa, me ha llevado a tener un lado más amable, un lado que pocos conocen en mi y que para ser sincera, me asusta cada que sale a flote. No soy amigable, pero mi aprendizaje y convivencia con otras culturas y pueblos no solo me enseñó sobre la medicina, sino cómo está debía ser llevada a cabo para lograr una eficaz recuperación.

Fue por ello que los años transcurridos en el hospital de Londres lograron tener un gran impacto en mi vida. Junto con el equipo de enfermeras debíamos atender todo tipo de casos que allí llegaran. Londres se encontraba en un declive socioeconómico, por lo que varias instituciones debían hacer de hospital, asilo psiquiátrico y hasta cárcel. Toda la "escoria" que querían alejar de la sociedad iba a parar allí sin importar su caso o gravedad. Aquellos que eran considerados dementes o asesinos iban a dar junto con mujeres acusadas de herejía ya fuera porque fumaran o se dedicaran a negocios mal vistos en una sociedad totalmente puritana. Era difícil en ese entonces tratar las auténticas enfermedades, pues antes había que tener un perfil de quienes allí llegaban y rara vez se solía escuchar a estas personas, pues más que gente eran considerados animales dejados a su suerte.

El caminar por aquel edificio abandonado me recordaba los gritos y suplicas que se escuchaban por sus pasillos. Habían pasado bastantes años y aún me parecía escuchar las lamentaciones de los pacientes siendo ahogadas por las alarmas de la bélica ciudad de Londres. Situaciones como esa nos ayudaron al equipo médico y a mi a lograr tener un mejor entendimiento del deber ético hacía quienes acudían a nuestro cuidado. Por ello quería poner a mis nuevos alumnos a prueba, quería que experimentaran todo tipo de emociones que les llenaran de adrenalina,o algo parecido, sin que perdieran su mente racional para saber cómo salvar y asistir correctamente a alguien.

Las indicaciones eran sencillas, cada uno sería citado por medio de una carta a este viejo y abandonado hospital. Antes de que ellos llegaran me encargaría de realizar los debidos encantamientos para que los muggles no se percataran de nuestra presencia, no quería tener un malentendido con sus autoridades por meternos en algo que era propiedad privada de su gobierno.

Comenzaron a llegar. Esperaba que tomaran asiento en las sillas ubicadas en media luna que había dispuesto en medio de lo que parecía ser el antiguo lugar de descanso y actividades de los reclusos. Debido a la poca iluminación del lugar era un tanto difícil poder distinguir a mis alumnos. Así que comencé a hablar para darles una idea de quién era yo y qué íbamos a hacer allí.

-Mis mas cordiales saludos a todos y cada uno de ustedes. Mi nombre es Katherine Daray Van Halen. Hay quienes simplemente me llaman Kathy. Si bien esta es mi primera vez como profesora de conocimientos, no es la primera vez que he actuado en el campo de la salud. He pasado mi vida viajando, y como toda vampiresa que conozco, han sido varios milenios los que he vivido y he aprendido de otros. Desde los antiguos Griegos, Romanos y Celtas hasta las épocas más jóvenes. De todos esos años, he querido hacerles participes a ustedes de uno de los momentos que más me ha marcado en mi tiempo de ejercicio de esta profesión.... El presente lugar solía ser un hospital que servía de orfanato, psiquiátrico, geriátrico y hasta cárcel en los años 1800 y subsecuentes. Ya se imaginarán que tipo de personalidades llegaron a pasar por aquí. Antes que nada, quisiera escuchar un poco de ustedes, abrir un pequeño debate para entender mejor sus pensamientos y más tarde les permitiré explorar el lugar. Espero no vayan muy lejos.

No estaba segura de si acaso lo que sentía eran nervios por impartir mi primera clase o un mar infinito de sensaciones por saber lo que se vendría después, un reencuentro con la historia de mi vida. Lo que si sabía era que me interesaba mucho saber qué tenían mis alumnos para decir respecto al pequeño ¿debate? O mejor aún, la charla que planeaba tener con ellos, pues por medio de está podría hacerme una idea de cómo sería su desempeño el resto de la clase, o hasta podrían sorprenderme demostrándome si habían o no cambiado su punto de vista inicial a la pregunta que tenía para formularles.

- Es algo sencillo, sólo quiero conocer su opinión personal, nada rebuscado ni qué esté necesariamente en un texto. Quiero conocer la percepción de cada uno sobre ¿qué consideran que es el bienestar? ¿qué se considera estar en enfermedad?¿para ustedes, qué es el gozar de salud? ¿Cuándo alguien o algo no está en estado de bienestar?

Una vez hayan compartido cada uno su respuesta, la cual espero con ansiedad, les indicaré que haremos a continuación

Nick:Kathy Daray Van Halen

Conocimiento a impartir: Primeros Auxilios

Motivo: siempre quise dar algún conocimiento, pero nunca había vacantes para los que podía y quería impartir. Pienso que con la reforma a la academia puedo ayudar a dar un nuevo giro al rol de clase.

Cargos:

 

 

- 05/05/2011 Comienza su cargo como aprendiz en la 1 planta de San Mungo

- 14/06/2011 Es nombrada prefecta de la casa de los Aethonans de Salem

- 05/10/2011 Comienza su cargo como empleada en el Departamento de Misterios (Oficina Creadora de Hechizos y Pociones)

- 12/12/2011 Ingresa como sanadora en San Mungo en las Mazmorras (Heridos y Resurreción del Bando Mortífago)

- 25/01/2012 Asciende de Mortifago Base a Mago Oscuro

- 06/02/2012 Inicia como Directora del Escuadrón Para La Aplicación de la Ley Mágica.

- Actual empleada en el Departamento de Misterios.

 

Plan de estudios: Enviadoen proceso.

 

Además de que por mucho tiempo he querido probar mis habiliades como maestra en el rol de conocimientos, con este cambio que le han dado a las clases me surge un mayor deseo de ser participe de estas como docente, pues ahora resulta ser mucho más divertido y entretenido que antes. Me apuro en enviar mi solicitud, aunque sé que poco o nada tiene que ver el hecho de que postee o no antes que nadie para obtener el puesto, sin embargo, debido a mi afán y a que ahora el mundo muggle me solicita, envío mis datos y mas tarde en el transcurso del día estaré enviando mi plan de estudios.

 

¡Saludijillos!

Anabella Rinaldi

 

La bruja tenía absolutamente toda la razón, poco o nada lograba con lanzar aquel hechizo que sin mucho apenas si lastimaba alguna que otra de las serpientes que aparecían en el lugar. Si bien el hechizo que ella sugería era mucho mas potente que el mío, apenas si lastimaba algunas de las serpientes que continuaban amenazando al grupo de científicos malheridos. Nosotras solo conseguíamos enfurecerlas mas.

 

-Eres más rápida que yo. Encárgate tu de las serpientes, yo me ocupare de tratarlos a ellos...- apunté hacia uno de los hombres cuyos rostro tenía profundas cortadas ocasionadas por el vidrio roto de sus lentes. Apunté a estos y tras repararlos con un "¡reparo!" me enfoqué en lanzar a él y a sus compañeros varios encantamientos episkeys.

 

La otra bruja continuaba muy ocupada en su misión. Me disponía a ayudarle ahora mientras los demás se recomponían. Un extraño sonido provenía de las copas de los árboles más cercanos. Era como si miles de centenares de patas descendieran de estos. Arañas de dimensiones descomunales bajaban furiosas por los troncos de los árboles. Nunca había visto un arácnido de tales proporciones, parecían modificadas genéticamente para alcanzar aquel monstruoso tamaño.

 

¡Cuidado! No son arácnidos comunes, son creados en nuestros laboratorios para ser gravemente venenosos. Son híbridos de otras criaturas peligrosas, como casi todo aquí

Una de ellas estaba a punto de atacar a la otra bruja por la espalda.

-¡Arania Exumai!- mi hechizo consiguió protegerla mientras ella hacía lo suyo.

 

Nunca había experimentado alguno de esos momentos en que dicen que la adrenalina hace presenciar todo mas lentamente, pero así lo fue para mi. Probablemente porque era una de las pocas veces en que ponía en practica verdaderos hechizos estudiados de unas cuantas páginas para salvar mi pellejo, pero esto era real. Quizá para alguien mas avanzado esto era un juego de niños, pero para mi era un nuevo nivel. Una nueva sensación que me ayudó a percibir mejor todo a mi alrededor y agudizar el resto de mis sentidos, entre ellos la vista. Mientras atacaba a las arañas, una extraña figura se alcanzaba a vislumbrar a lo lejos, allá donde aquel claro se convertía en una luz tenue.

 

Rápidamente detuve los hechizos hacia las arañas y apunté a aquella silueta. Tenía que averiguar qué era. -¡Homenum Revelio!- las palabras que salieron de mi boca retumbaron con fuerza. Fue en vano.

-¡¿Pero qué demoni...?! ¡¿Por qué no funciona?!

-Porque no es humano- explicó adolorida la mujer de cabello corto -es el peor y más terrible híbrido que hemos creado

 

Mi hechizo había delatado nuestra presencia a la criatura que en un principio se hizo pasar por nuestro profesor.

 

-¡Es él! ¡Ahí viene! ¡Se acerca a nosotros!

Anabella Rinaldi

 

Como por reflejo, usé mis brazos como escudo tras de que la chica que se presentó como Sofia amenazó con atacarme con su varita. Acto que se debió haber visto muy tonto e ingenuo, pues yo también contaba con una de esas para defenderme o atacarle igualmente. Pero mis intenciones no eran atacar a ninguno de ellos sino al monstruo que para nuestro infortunio había escapado tras esfumarse sin dejar rastro alguno.

 

- ¡No hay momento de explicar nada! ¡Estamos todos en peligro! Este no es el bosque que creemos que es, y ese no es el profesor que creíamos que era. Estamos en medio de una facilidad donde se lleva a cabo un experimento de alto riesgo

 

Les enseñé las insignias y documentos de algunos de los científicos que se encontraban heridos más adelante. Una de ellas tenía la foto de la mujer de bata blanca y cabello corto que me había suministrado la información.

 

-¡Vengan! Conozco un lugar donde tal vez estemos a salvo y podamos tener más información acerca de lo que aquí sucede - escuché como alguien estuvo a punto de reprochar, pero tras mis siguientes palabras guardaron silencio y no pareció haber objeción alguna - hay un grupo de científicos más adelante, están gravemente heridos, pero algunos siguen con vida. Tal vez puedan suministrarnos más información para poder salir tanto ellos como nosotros con vida de este lugar.

 

Dos de los nuestros se habían alejado. Esperaba que los que quedaran me siguieran. No reparé en si lo hacían o no, simplemente corrí hacía el sitio donde hallé al grupo de científicos implorando dentro de mi a que mis compañeros me siguieran, no podría soportar el cargo de mi conciencia si sabía que uno de ellos perdía su vida por alejarse demasiado.

 

Tal y como la mujer de cabello corto lo había dicho, el lugar estaba infestado de otras criaturas que también eran peligrosas. Cerca al grupo de hombres y mujeres de batas blancas había varias serpientes que intentaban acercárseles para hacerles daño.

 

-¡Vipera Evanesca!- exclamé una y otra vez apuntando a diferentes serpientes. No era suficiente, pues continuaban apareciendo más y más.

Algo tenía que hacerse pronto. Había que mover a los científicos de allí y dejarlos en un lugar seguro para tratar sus heridas.

 

-¡¿Qué hacer ahora?! ¡Mamma mía!

Anabella Rinaldi

 

Una bruja más llegó, parecía haber estado haciendo labores de jardinería. Intenté dibujar una pequeña sonrisa en mi rostro para darle la bienvenida sin interrumpir a las presentaciones de los demás. Tras esto, mi mente pareció perderse por unos instantes y comenzó a divagar, enfocándose en el bosque y en los sonidos de la naturaleza que le envolvían. El bailar de las hojas y el chasquido de los árboles al sonar contra el viento.

 

Algo llamó mi atención. Por el rabillo de mi ojo alcancé a percibir el sutil movimiento de unos arbustos. ¿Sería algún pobre animalito asustado ante nuestra presencia en medio de su hábitat? Lentamente, intentando que el resto de presentes no se diera cuenta, me fui alejando del grupo en dirección del arbusto. Nadie se percató de que ya me había alejado una buena distancia de ellos. Investigué, no había nada. Un ruido seguido de otro movimiento de un arbusto mas cercano a ese llamó mi atención. Me acerqué, nuevamente me encontré con nada. Estaba a punto de regresar con mis compañeros de clase hasta que escuché "¡Bombarda!". Una explosión dio de lleno contra un tronco que estaba a mi izquierda. Seguí el rastro proveniente de aquel encantamiento y allí descubrí una trágica y grotesca escena.

 

Un grupo de personas ataviados con batas blancas e indumentaria que decía que podían trabajar en un laboratorio se hallaba en el suelo gravemente herido, unos sangraban y tenían cortadas profundas con moretones y otros tenían algunos huesos rotos. Una mujer de cabello corto intentaba sostener su varita para protegerse, deduje que fue ella quien lanzó el encantamiento. Mi rostro no podía más que reflejar pánico, no sabía que hacer o qué estaba pasando allí.

 

- M...m...monstruo - susurró levemente

-¿Monstruo? ¿Q...qué quiere...?

-Hay un monstruo suelto por aquí. Escapó de nuestro laboratorio. Aniquiló a varios de los nuestros tras robar una varita y tomar varios broches trasladores. Intentamos encerrarle de nuevo, pero....pero... Tomó la forma de alguien más, de otro mago que en nuestra base de datos registra como... - no parecía poder resistir mucho. Me entregó un documento con una foto y el nombre del mago cuya apariencia el monstruo había adquirido.

 

Ahogué un grito con mis dos manos al darme cuenta de que se trataba de quien se había presentado como el profesor Liam.

 

- Este... Tampoco es el bosque en el que crees estar... Se t..trata de una facilidad que hemos creado para contener otras criaturas de las cuales el monstruo se alimenta, pero no por ello menos letales. Es...este lugar está diseñado para que solo alguien pueda salir, el monstruo. En caso tal de que logres acabar con él, s...sol...solo una persona podrá salir. Si has venido con alguien más, tendrás que m...ma...matarlos para garantizar tu salida de aquí.

 

¿Qué debía hacer? ¿Debía dejarla allí para morir? De todos modos tampoco le quedaba mucho tiempo, pero no era justo ni con ella ni con sus compañeros. ¿Y los míos? ¡Debía avisarles! Pero también quería salir de allí. No tendría que matar yo a ninguno si no les decía a qué nos enfrentábamos ¿cómo podría yo matar a magos tan prestigiosos y de más alto rango que yo? El monstruo se encargaría de ellos por mi. Y así quedaba la otra situación ¡el monstruo!...

 

Fuera como fuera, no podría cargar en mí consciencia el hecho de que algo le sucediera al grupo de personas que aún se hallaba en el claro con aquel falso profesor. Me armé de valentía y todo lo demás para salir corriendo a alertar a todos, reunirles, llevarles hasta el grupo de científicos y analizar todos juntos cómo salir de allí.

Anabella Rinaldi

 

Me incorporé y acomodé mi delantal de trabajo para seguir adelante. ¡Aquello había sido emocionante! ¡Mi primer dementor! ¡Y lo había evadido con tanta facilidad! Sabía lo que debía hacer en presencia de ellos gracias a lo que había leído antes, pero llevar mis conocimientos teóricos a la práctica era otro asunto en el cual, a mi parecer, me defendí más que bien.

 

Avancé por el camino del bosque hasta llegar a un claro donde se hallaban ya otras dos personas, una bruja y un mago. Por algún motivo algo parecía incomodarles, pues tenían una extraña expresión reflejada en sus rostros. Tal vez se tratara de alguna prueba que también tuvieron que realizar para llegar hasta allí ¿pero quién era yo para juzgarles?

 

Al cabo de un rato distinguí otra figura más, un mago que se presentó como el profesor de la clase. Sentí la urgencia de presentarme ante él y los otros compañeros allí presentes. Quizá haya sido un poco osado de mi parte haber querido tomar la palabra tan abruptamente, pero siempre que he sentido algún tipo de tensión entre personas, me gusta hacer lo que esté a mi alcance para poder liberarla un poco. Algo así como un chiste, compartir un dato curioso o sonreír, normalmente ayudaba. Esta vez opté por el lado amable de presentarme.

 

-Bongiorno! Mi nombre es Anabella Rinaldi. Vengo desde Italia.Trabajo en un café para sustentar mis estudios en la academia, de tal forma que un día pueda conseguir un empleo mas formal en el ministerio. Mis conocimientos referentes a la magia y otros asuntos relacionados son un poco escasos, pues en mi familia no se hablaba mucho de este tema, no obstante puedo llegar a trabajar para estar a su nivel....

 

Y ahí lo hacía de nuevo, aquel habito del que tanto me hablaban pero que ella daba importancia. Solía hablar por horas y horas sin tener en cuenta a quienes meescuchaban. La gente de vez en cuando solicitaba que guardara silencio, pero muchas veces hacía caso omiso a la orden. Solo cuando terminaba mis monólogos era cuando callaba.

 

Atenta a las otras personas que llegaban, guardé silencio impacientemente para que ellos también pudieran presentarse. Tuve una extraña sensación al escuchar que había gente entre mis compañeros que ostentaba importantes cargos en el mundo mágico, yo apenas si era una barista en aquel café. ¡Esto sería emocionante! ¡Tendría tanto que aprender de estas personas!

Anabella Rinaldi

 

Hacía muy poco que había llegado a Londres desde que dejé a mi familia y amigos allá en Italia. Extrañaba los fines de semana que compartía con ellos en la Tosacana y las cenas donde siempre había algún pariente que se embriagaba con la grappa de mi padre. Sin embargo, como toda aventura, esta sería una experiencia hermosa para mi. Conocer personas y hacer nuevas amistades siempre me ha fascinado.

 

No tenía un hogar como tal, si bien dormía en una pequeña habitación por la cual tenía que pagar, no conocía aún un rostro amigo al cual llamar mi familia. Mamá siempre decía que una casa es simplemente un lugar con paredes, se convierte en un hogar cuando tu corazón está allí, con aquellos a quienes consideras tu familia.

 

De todos modos la renta se hacía cada vez mas costosa, y no podía vivir a la espera de que mis padres me enviaran dinero desde Italia. Intenté conseguir múltiples empleos y trabajé en diferentes negocios en el Diagon, pero ahora quería algo más comprometedor. Había escuchado que los puestos en el Ministerio abrían sus puertas de vez en cuando para jóvenes emprendedores. El único percance era el hecho de que se debía poseer estudios avanzados para poder postularse a ellos.

Escuché a unas señoras de avanzada edad hablar sobre este y otros temas relacionados con el ministerio y la política mientras barría la cafetería en la cual trabajaba en aquel entonces. Comentaban el hecho de que varios jóvenes ahora se vieran tan interesados en estudiar leyes, idiomas, encantamientos y demás para poder acceder a dichos puestos.

 

Con que encantamientos... Era buena en Idiomas, se me facilitaba el español, italiano, inglés y francés por tratarse de lenguas romances. Las leyes eran algo muy propio de mi gente, pues no hay que olvidar el Imperio Romano. Los encantamientos si que eran algo totalmente nuevo que quería aprender. Sería interesante inscribirme nuevamente en la academia para ello. ¿Por qué no? De pequeña siempre fui muy buena estudiante, sin contar con la parte social, era la divertida amiga de todos.

 

Pasaban los días y no recibía noticia alguna sobre mi inscripción al curso. ¿Se habría perdido? ¿Habría sido rechazada? Después de todo era apenas una chica nueva en todo este asunto. La magia, si bien era conocida por mi familia, me fue oculta por un largo tiempo para vivir como un muggle más en la sociedad. Esa era también otra de las razones por las que opté a entrar a la clase de encantamientos, así estaría más cerca e involucrada con este misterioso mundo de la magia. ¡Oh, rayos, definitivamente me habían negado la entrada! ¡Yo, la niña que no sabía bien como blandir una varita y que apenas aprendió a hacerlo contados días atrás!... Bien, no había que ahogarse en la preocupación, tal vez podría pedirle a alguien más que me enseñara lo más básico de la magia, no hacía poco aprendí un par de hechizos simples que me venían bien en la cafetería. Lo único que me preocupaba era que varios de ellos eran de limpieza y mantenimiento, como "fregoteo", "reparo" y similares. Pero de vez en cuando también leía un libro que encontré por ahí titulado "Magia para Dummies", quizá me hiciera el hazme reír, pero me venía muy bien de vez en cuando para salir de pequeños apuros.

 

Continue limpiando la cafetera, cuando un pequeño sobre cayó en el mostrador frente a mi. 'Anabella Rinaldi' decía en fina caligrafía. Apenas si lo abrí, no alcancé a ver qué era lo que contenía. Mis dedos hicieron contacto con algo que parecía ser de metal. La cafetería ante mi desapareció por completo y ahora me hallaba en lo que parecía ser un bosque. Entre el asombro, el miedo y la emoción, intenté recuperar mi aliento a la vez que me ajustaba el delantal con el logotipo de la cafetería.

 

-¡wow! He oído hablar mucho de estos. ¡Un traslador! ¡Genial! No había usado uno de estos, no al menos que yo recuerde...

 

Escuché varios ruidos que provenían de un camino que conducía hacia otros tres diferentes. ¿Habría mas gente allí? Tal vez podrían indicarme qué sucedía y cómo podría volver a Londres. Avancé. Las voces de quienes parecían ser un hombre y una mujer cesaron. Ahora si que estaba perdida. "¿Hola? ¿Hay alguien allí?", grité. No hubo respuesta. Lo mejor que podía hacer era avanzar, tal vez los encontraría.

 

Decidí tomar el camino mas iluminado, tenía hermosas plantas por doquier. ¡Sería maravilloso! ¡Tal como caminar por un cuento de hadas! Todo tan....

 

-¡Ahhhhh!

 

Algo me había atrapado por el tobillo. Parecía una enredadera. Forcejee, pero esta me amarraba mucho más hasta que me tumbó. Me asfixiaba, me era difícil recordar qué de lo poco que sabía sobre la magia podía ayudarme a salir de aquel apuro. El tiempo era oro, cada vez me apretaba con mas fuerza y la falta de oxígeno dificultaba mi concentración.

Debí suponer que algo malo sucedería en cuanto el hermoso bosque iluminado se transformó en uno húmedo, oscuro y tétrico, pero para ser sincera, incluso así me parecía un majestuoso paisaje.

 

-¡Oscuro! - exclamé para mis adentros cuando recordé una que había escuchado de esa planta, no crecía en Italia porque este era un país muy soleado y brillante. Se le conocía como Lazo del Diablo y solía ser importado desde otras tierras. Gracias al calor de la bella península Itálica, esta no lograba sobrevivir por mucho tiempo, por lo que era vagamente comerciable, pero aún así de muy alto precio.

 

Intenté tomar la varita del bolsillo de mi delantal.

-¡L-l-lumos!

 

La planta se esfumó como si nada. Me incorporé y seguí mi camino. Con el avanzar todo se hacía más triste, oscuro y desolado. El paisaje que a pesar de ser oscuro era una majestuosa obra de los tiempos góticos se transformó en un lugar macabro donde primaba la desolación. Eso era extraño, sobretodo para mi, pues siempre he sido una persona que ve maravillas donde nadie mas las ve. De repente, todo cobró sentido.

-Dementores... - se acercaban. Sentía su frío.

 

No hizo mucha falta que me esforzara en pensar en momentos alegres, para mi todo momento es especial. Pero siempre tendría en mi corazón esos gloriosos instantes con mi familia y nuestras cenas juntos.

-¡Expecto patronus! - cerré mis ojos con fuerza. Esperaba que el haz de luz fuera suficiente para alejarlo. Así pareció ser, pues tras ello todo volvió a ser tan normal como lo era antes, o al menos para mi, algunos dicen que mi personalidad es aveces exagerada para ciertas situaciones, pero ¿qué mas daba? Después de todo había sido mi constante alegría la que me salvó tan fácilmente de un dementor como aquel.

Buen...algo! Paso por acá para inscribir mi próximo conocimiento. Aunque confieso que quiero adquirir tantos que aún no estoy totalmente segura de si es este el que quiero o no. Pero como sea, luego iré viendo cuáles más quiero y esas cosas. Dejo por acá mis datos y estaré al tanto para cuando avisen la apertura del próximo curso. ¡Feliz fin de semana!

 

 

Nick: Kathy Daray Van Halen

ID: 112609

Conocimiento: Encantamientos

Nivel de Magia: IV (4)

Link a la Bóveda: Bóveda de Personaje

Link a la Ficha: Ficha de Personaje

hola! bueno, yo sé que no soy la única perdida, y seguro hay más personas enredadas como yo en el mismo tema. Disculpen si ya contestaron dudas muy similares a esta, lo cual es lo más probable, pero sé que entenderan el hecho de que lo pregunte de nuevo. De hecho, son unas cuantas dudas las que tengo, las enumero:

 

1) He leído lo del nivel mágico y esas cosas para poder adquirir conocimientos. Acutalmente, mi nivel es de 4 y los conocimientos que obtuve al egresar de la academia fueron pociones y artes oscuras, primeros auxilios lo cursé después. Mi pregunta es, ya sé que se adquieren conocimientos cada tres(3) niveles ¿eso es a partir de los que tengo o puedo adquirir uno nuevo? es decir ¿primeros auxilios contaría ya como el conocimiento que alguien de mi nivel puede tener o puedo optar para inscribirme ahora en la academia para obtener uno nuevo?

 

2) Mi personaje principal, debido a ciertos asuntos rolísticos en su historia, posee dos personalidades. Una es morena (ella) y otra responde a otro nombre y otras cualidades fisicas y psicologicas. No obstante, ambas habitan el mismo cuerpo y solo mediante un amuleto es que la otra se hace presente. Lo que quiero saber es si debo inscribir a esta segunda como un personaje secundario o no. Pues al fin y al cabo ambas tienen el mismo cuerpo y sería como si de todas formas mi personaje principal fuese el que está roleando.

 

3) Respecto al punto anterior, quisiera saber para el trabajo y los pagos, si roleo con la otra personalidad de mi personaje ¿el pago cuenta como si fuera para el personaje con el cual me postulé al trabajo?

 

había otra duda, pero no me acuerdo cuál era xDD disculpen si me ven muy seguido por acá xD

¡Hola! hace un buen rato que no me paso por acá. Así que vengo a pedir varios cambios a mi ficha de personaje.
También hay algo que quiero preguntar. Mi personaje, debido a ciertas problemáticas en su historia, posee otra personalidad de otra chica rubia con otro nombre pero que habita en su mismo cuerpo. ¿Esta la puedo agregar dentro de esta misma ficha o debo agregarla como un personaje secundario y en su defecto, crearle una ficha como tal?

Muchas gracias a quien se tome el trabajo tanto de responder como de editarme la ficha.

¡Feliz semana!

 

http://i.imgur.com/IPKbHAg.png?1

Datos Personales




Nombre del Personaje: Katherine Daray Van Halen
Sexo: Femenino


Edad: Joven
Nacionalidad: Transilvania

Familia(s):
* Van Halen

* Selwyn

(*) Familia Sanguínea
(*) Familia Adoptiva




Padre(s) Sanguíneo:
Alucard Van Halen*


Padre(s) Adoptivos:
-Lyra Katara


Trabajo: --

Poderes Mágicos: --
Rango Social: Unicornios de Bronce


Bando: Neutral.
Rango dentro del Bando: --





Nivel de Poder Mágico: --

Puntos de poder en objetos: 40




Hechizos adicionales: --


Puntos de poder en criaturas: 10

Habilidades Mágicas: --

Conocimientos Especiales:
-Pociones
-Artes Oscuras
-Primeros Auxilios (Conocimiento Adquirido).








Perfil del Personaje:



Raza: Vampira

Aspecto Físico: alta; piel blanca (pálida); ojos grises; cabello largo, laceo color negro. Tiene buena figura.

Cualidades Psicológicas: Sarcástica, no siempre se impresiona con facilidad, extremadamente inteligente, a veces fría. Valiente, puede ver por si sola. Es difícil, pero no imposible que desarrolle sentimientos de afecto por otras personas. Sin embargo, a pesar de su actitud, logra que la gente le quiera.


Historia:

Todo comenzó cuando apenas era una chiquilla. Su pueblo, pero por sobre todo, su casa estaban siendo atacados por un extraño grupo de hombres. Entre sollozos, Kathy se encontraba completamente escondida de manera en que ninguno de ellos pudiera encontrarla. Pero aquello fue en vano, puesto a que uno de los hombres la siguió hasta la habitación en que ella se encontraba. Con aire triunfante el sujeto de piel tan blanca como el mármol, movimientos agiles, y filosos dientes, se acercó a ella con intenciones de querer matarla y continuar con aquel caserío al cual ellos ya habían dado inicio. Pero para su sorpresa, al contemplarla más de cerca, el hombre se detuvo abruptamente, "eres igual a ella" dijo él con una mirada que develaba que no podía creer lo que sus ojos veían. De igual forma, Kathy no entendía nada de lo que allí sucedía. ¿Quiénes eran esos hombres? ¿Por qué querían acabar con su pueblo? ¿A qué se refería aquel sujeto al decir que ella era igual a alguien? ¿Igual a quién?

Pero para su infortunio, nada de esto importó. Pues el hombre ya la había tomado entre sus brazos mientras que ella intentaba forcejear en vano para escapar de él. El sujeto le susurró unas cuantas palabras y con ello, Kathy perdió el conocimiento.

Pasaron los años, y ella creció en una vida un tanto lujosa al lado de su instructor como una joven y valiente señorita. De él no solo adquirió conocimientos sobre las artes, magia oscura, y entre otros; si no que también adquirió el don de la inmortalidad. Así como ella era consciente de que él no era su verdadero padre, sabía también que él no era humano. Su maestro no solo vio en ella una gran aprendiz, sino también alguien merecedor del regalo de la vida eterna, y a pesar de que ella no sabía en qué se estaba metiendo, aceptó el regalo por parte de su maestro.

Kathy no tenía ni tiene conocimiento alguno de quienes son en realidad su verdadera familia. Y aunque sabía que gracias a su maestro ella había sido desprendida de ellos, no le importó, puesto a que con él encontró más que un vínculo de hogar. Pues a pesar de la forma sarcástica y despectiva en que su maestro la trataba- comportamiento que ella luego adquirió gracias a él- ambos se tenían un amor parecido al de un padre y una hija.

Y aun así, su maestro no le enseñó todos sus oscuros secretos a Kathy. Pues él trabajaba arduamente de la mano de un extraño y oscuro grupo mágico del cual solo le enseñaba lo básico a ella; pues al igual que él, quería que Kathy también fuera un miembro fiel de aquel grupo.
Jamás le contó a ciencia exacta cuales eran las hazañas que se llevaban a cabo dentro de el. A Kathy nunca le importó tanto aquel misterio de dicho grupo, no hasta que un día perdió a aquel que fue lo más cercano a su padre. Su maestro había fallecido y ella intuía que aquel suceso se debía gracias a dicho grupo. Kathy no pudo odiarlos ni culparlos debido al amor que su instructor le había enseñado a tenerle al grupo; pero aun así aquello no evitaría que ella misma buscará las respuestas al misterio.

Kathy emprendió un largo viaje en búsqueda de otros miembros pertenecientes al grupo oscuro. Y fue así como tuvo que atravesar montes, valles y montañas para lograr su travesía. En el camino tuvo que encontrarse también con diferentes culturas: Indias, Celtas, y entre otras con las que aprendió y compartió más secretos de la magia, sus tradiciones, etc.

Participó de varias guerras del lado de aquellos bandos que decían tener algún apoyo por parte del grupo oscuro. Y aunque jamás encontró las respuestas que buscaba, no se dio por vencida; lo haría por la memoria de su maestro, lo haría también por su propia memoria. Pues con el pasar de los años, una nueva incógnita se sumó a su misión; varias cartas habían llegado a sus manos, cada una con el mismo mensaje de una remitente diferente que decía ser su verdadera madre biológica.

Y así fue como ella llegó a las calles de Ottery, visitando mansión tras mansión intentando descifrar por ella misma quien decía y quien no la verdad.
Fue hasta que llegó a la mansión Black, lugar donde encontró a aquella que respondía al nombre de Goshi Black. Y a pesar de que debido a diferentes situaciones Kathy no creyó que en realidad ella pudiera ser su madre, logró desarrollar un gran y muy extraño afecto por aquella mujer. Su relación con ella era extraña, pero aun así se sentía identificada con ella.
Sabía también que la familia Black tenia algún conocimiento sobre aquel grupo oscuro del cual su maestro tanto le habló. Pero al igual que él, no le iban a revelar todo a ella. También encontraba muchos misterios en aquella mansión.
Una noche escuchó como Goshi y su prima hablaban en la oscuridad sobre Kathy. Mencionaban algo sobre su ya fallecido maestro y sobre ciertos asuntos del grupo oscuro. Por lo visto, gracias a algún hecho que había cometido su maestro en el pasado, ahora Kathy no solo debería abandonar la mansión black; si no también la idea de encontrar aquel grupo.
En medio de aquella conversación, se enteró de una nueva noticia. Una nueva mujer, enemiga del grupo oscuro, proclamaba ser madre adoptiva de Kathy.

No estaba muy segura de la idea, pero sabía que al menos quería develar el misterio. Así que sin aviso previo salió en búsqueda de Ashley Atkins; su nueva madre adoptiva por parte de la familia Rambaldi. Su estadía en aquel lugar, antes que despejarle la mente hizo de su vida un completo mar de confusiones más grandes. Ahora no sabía si en realidad quería seguir con su búsqueda del grupo oscuro, tampoco sabía si quería volver o no con los Black; pues aunque se sintiera identificada con Goshi, al menos Ashley le daba lo que ella nunca tuvo, el sentirse protegida por una madre.

Su vida comenzaba a forjarse poco a poco. Varios vinculos le llevaron a tener relaciones con la afamada "Marca Tenebrosa", grupo que para ella tendría muchos lazos con la vida de su maestro y probablemente con ella misma. Ascendió a varios cargos en diferentes puestos de trabajo e incluso decidió dar honor y homenaje a su Maestro al decidir volver a abrir la familia que un día ella conformó, la Van Halen. No obstante, varios otros interrogantes emergieron gracias a su estadía con la familia Rambaldi, quienes le enseñaron a acoger su nueva persona e intentar olvidar su oscuro pasado ¿Querría ella seguir en la búsqueda exhaustiva de respuestas que siempre parecían tener nuevos cuestionantes? Empezaba a creer que ahora era momento de darse un tiempo para ella. Especialmente cuando dentro de este mismo hogar cayó bajo el enamoramiento de uno de sus patriarcas, Deiwan Rambaldi.
Se casaron y fueron felizmente enamorados hasta que un antiguo encantamiento malefico volvió a atormentarla. Edward, el elfo principal de Kathy, era el único que recordaba el sello que el Maestro de Kathy había puesto en ella para que la joven pudiera adquirir todos los conocimientos de mágia oscura que él deseaba para formar en ella la gran hechicera oscura que él deseaba. Encerró en un amuleto la parte más humana que quedaba de ella y su bondad, con el tiempo esta se reprimió y se convirtió en una personalidad que Kathy desconoce de ella misma. Avery Harnois, es el nombre de la dulce doncella rubia que habita en Kathy y que solo sale a relucir cada que la vampiresa es despojada de su amuleto.
Con la perdida de dicho objeto, Deiwan y los hijos de Kathy tuvieron que acostumbrarse a la nueva mujer que habitaba aquel cuerpo. Las cosas no mejoraron después de que Kathy le recuperó. Durante su ausencia, los miembros de La Marca Tenebrosa se enteraron de su probable traición al bando, pues se rumoreaba por Ottery que la familia Rambaldi tenía conexiones con miembros de La Orden Del Fénix, ella lo había escuchado por ahí, pero no estaba muy segura de ello, tampoco era que le importara mucho, estaba enamorada de su patriarca. Con ello, los altos rangos de La Marca Tenebrosa hicieron todo en su poder para dañarle: Destruyeron la familia y el castillo Van Halen, acabaron con sus negocios, lástimaron a quienes ellos creían merecían serlo por tener una conexión con ella, y con ello, Kathy fue gravemente herida por un grupo de mortifagos caza recompensas. Se le creyó muerta por un largo tiempo.
No fue así. Despertó sin saber nada de lo que había pasado, sin estar segura si el mundo había vuelto a olvidarse de ella. Solo sus elfos han estado a su lado para cuidarle en ese letargo en el que se encontraba. A pesar del ataque, seguía sin poder odiar a aquellos que su maestro tan fervorosamente le enseñó a servir, no obstante, sabía que debía permanecer lejos de ellos y buscar sus respuestas a todo por otros medios. Bajo su propia ley. Tenía dudas, si, pero ahora creía más que nunca que ella estaba destinada para no seguir a nadie que no fuera ella misma. Comenzó a reescribir su historia tras ir en busca de Lyra Katara, una sabia bruja a quien ella no solo guarda gran respeto, sino que también se dirigía a ella como su tía. Debido al cobijo que la honorable bruja le otorgo, Kathy no tuvo más que verle desde entonces como una nueva figura materna, razón por la cual ahora se llama así misma como su hija.




Pertenencias




Objeto Magico Legendario: --


Objetos Magicos:
Objeto 1: Varita Mágica.
Clasificación: AA
Puntos de poder: 20

Objeto 2: Flechas de Cupido (San Valentin)
Clasificación: A
Puntos de poder: 10

Objeto 3: Anillo (Alianza de
compromiso)
Clasificación: A
Puntos de poder: 10

Objeto 4: --
Clasificación: --
Puntos de poder:--



Mascotas y Criaturas:
Criatura 1: Gato
Clasificación: X y no mágicas
Puntos de poder: 10


Criaturas en la Reserva:
Criatura 1: --
Clasificación: --
Puntos de poder: --





Elfos:
* Elfo 1:
* Edward: Muy alto y delgado a comparación de los de su especie.Sus extremidades son largas y su nariz es un poco grande pero respingada. Su rostro se hace pequeño en contraste a sus enormes y vidriosos ojos. A pesar delas circunstancias siempre intenta tener una sonrisa en sus labios (así sea fingida) y verle el lado amable a la vida.

Él fue quien crió a Kathy cuando ella solo era una pequeña humana que vivía con su maestro. Por lo que bien podría decirse que Edward fue algo así como su niñera. Él siempre tuvo un sentido de amor hacia las demás criaturas, sobre todo las más ingenuas, por lo que para él fue muy especial el ayudar a crecer a quien luego sería su verdadera ama.

Edward en realidad siempre sirvió a su amo quien a la vez fue el maestro de Kathy. Pero en cuanto este murió, gracias al testamento que dejó,los servicios de Edward pasaron a corresponderle a la que alguna vez fue la humana Katherine. Sin embargo, Kathy creció, y con ella creció también su desprecio hacia la sociedad pero por sobre todo a los elfos. Razón por la cual a partir de ese entonces la relación entre ella y el elfo ahora solo sería una de ama y servidumbre, sin nada de sentimentalismos.

Él aceptó, puesto que a pesar de sus maltratos él seguía queriendo a la "pequeña Kathy", y no deseaba contradecirle en nada. No obstante, Edward seguía añorando el querer cuidar y responsabilizarse de algo o alguien; fue cuando encontró la oportunidad perfecta en el momento en que Kathy le permitió hacerse cargo de sus hijos y criarlos como lo había hecho con ella.Ahora él le tiene un apego especial a estos jóvenes y ellos a él, ya que Edward los consiente y les sigue todos sus caprichos. Eso si, teniendo cuidado de lo que el ama Kathy pueda llegar a pensar de esto.



* Elfo 2:
* Beeteljuice: Su historia es algo simple debido a su reciente llegada a la vida de Katherine. Beetel solía vivir en las calles puesto a que no le interesaba tener un verdadero hogar hasta que por motivos del destino conoció a Edward.

Él siempre fue un sujeto dedicado a los chistes, bromas y sarcasmo, nunca se tomó nada en serio y es por ello que aun le cuesta asimilar su posición de servidumbre hacia Kathy. Al igual que a todos los elfos ella le desprecia, sin embargo a veces llega a encontrar un mejor confidente en él que en Edward ya que en ocasiones suele divertirse con él, ya que es su compañero para hacer bromas a los demás.Esta es otra de las razones por las que Beetel no se toma tampoco muy en serio el maltrato de Kathy, pues es un charlatán.

Beeteljuice es un poco bajito y muy delgado. Sus orejas y su nariz son bastante grandes. Tiene varias arrugas en las comisuras de los labios, sus ojos tienen una tonalidad amarillos a debido al poco sueño que adquiere, sus dientes también son amarillos y un poco torcidos.

A pesar de que sea extraño para un elfo, siempre viste con una corbata de rayas horizontales negras y blancas. Prenda que adquirió hurgando entre los basureros de las calles, y aun así Kathy no le dio mucha importancia y permitió que se la quedara.

Algo que cabe destacar de Beeteljuice, es que solo aparece si lo llaman 3 veces.


Licencias, Tasas, Registros




Licencia de Aparición: --

Licencia de Vuelo de Escoba: --

Registro de XXX: --

Registro civil: Divorciada.




Otros datos:
*Su maestro se llamó Alucard Van Halen. Se dice que fue el hijo de el conde Drácula, por ende, no fue solo su descendiente directo, sino también de los primeros vampiros de la historia. Lo que convierte a Kathy en una de las más antiguas vampiras.

*Ella no recuerda nada, pero aun así cuando aparece alguien nuevo proclamando ser su hijo; sin reproche alguno ella lo acepta. Pues a pesar de su forma de ser, tiene un sentimiento de humanización en cuantoa querer instruir y acompañar a quienes lo necesiten.

*En la academia conoció a Violette, quienluego descubriría sería su hermana. Lo más curioso de su relación con esta, es que se basa en una de constantes riñas entre ambas. Pero finalmente, se tienen un cariño especial el cual Kathy siempre deja enclaro al decir que siempre se divierte al discutir con su querida hermana.

*Junto con cierta ayuda, decidió hacer honor a su maestro y convertirse en una de las matriarcas de la que alguna vez fue la familia Van Halen.

*Detesta el licor, sin embargo se ha vuelto una excelente catadora de este mismo gracias a que en cada acontecimiento social prefiere tomar antes que integrarse a la fiesta.

*Detesta los elfos, en especial después de ciertos incidentes ocurridos en la mansión Black. Es por ello que siempre se refiere a estos como los "elfos del demonio"

*Sus vestimentas siempre suelen ser negras.

*Su época preferida es la victoriana. Ama los trajes de esta época.

*Tiene un gran respeto por Lyra Katara, a quien reconoce como su tía, pero gracias a la acogida de esta tras el despertar de Kathy de su largo letargo, ahora le considera como una figura materna.

*Estubo casada con Deiwan Rambaldi, pero debido a que se le consideró muerta, ahora alberga el titulo de divorciada.

*Posee un gran interes en los automoviles muggles. En especial si se tratan de Ferraris, Lamborginis, Mercedes Benz y otros autosmoviles clásicos en general.



Cronología de cargos:

- 05/05/2011 Comienza su cargo como aprendiz en la 1 planta de San Mungo
- 14/06/2011 Es nombrada prefecta de la casa de los Aethonans de Salem
- 05/10/2011 Comienza su cargo como empleada en el Departamento de Misterios (Oficina Creadora de Hechizos y Pociones)
- 12/12/2011 Ingresa como sanadora en San Mungo en las Mazmorras (Heridos y Resurreción del Bando Mortífago)
- 25/01/2012 Asciende de Mortifago Base a Mago Oscuro
- 06/02/2012 Inicia como Directora del Escuadrón Para La Aplicación de la Ley Mágica.



Premios y reconocimientos:

-"La Venus de Botticelli". Da Vinci in Memoriam [ http://i54.tinypic.com/j0k8cx.gif]

- Diploma de Graduación; generación 26 -20/08/2011- [ Diploma ]

- Calaveritas Tenebrosas. Tercer Lugar [ http://i.imgur.com/DeD7I.gif] [http://i.imgur.com/1ND9l.gif ]

- "Promesa de la Marca". Premios Seamus 2011 [ http://i.imgur.com/oIAHJ.gif ] [ Premio ] [ Etiqueta ]




Links de Interés Referentes al Personaje:




Link al Perfil de Comprador MM: 75

Link a Bóveda Personal: Bóveda de Kathy Daray

Link a Bóveda Trastera:

Link a Bóveda de Negocio: Nyx Pub (Cerrado)
Ex-socia de: Juan Valdez

Link a Bóveda Familiar 1:
Link a Bóveda Familiar 2: Bóveda 105495 Familia Selwyn

 

Espero no me zapeen por postear esto acá, pero es que quería pasar a dejar un saludito tras siglos de ser una muerta difunta que ya falleció (?) CofcofTalVezEsteComeriendoUnGranErrorPeroBuenocofcof

Me alegra mucho que aun no me hayan dejado de patitas en la calle y me recuerden todavía por acá TT__TTRambaldis, sobretodo aquellos que aun siguen siendo mis hijos, les encargo la misión de evitar que su padrastro Deiwan se case nuevamente y se olvide de su mami (osease, yo) así de fácil...

Mi espíritu vampiresco cobrará venganza ante ti, si ya dejaste a Kathy, Deiwan e__e

Mmm nada mas, solo quería venir a portarme mal un ratito. Misión cumplida ohsi

Espero sigan vivos para después del 21/12, si es que los Mayas y Kira lo permiten. Mientras tanto...

Amor muppet para todos!! *-* Apuesto que extrañaron la frase celebre

ahmm yo supongo que no está mal que me pase por aquí a darles la bienvenida y esas cosas....digo, después de todo también tengo titulo de matriarca, no?

 

así que eso... bienvenidos y todo lo demás. Blak, antiguo compañero de academia, espero verte bastante por aquí y que no te nos pierdas mucho. Espero sea de tu agrado la familia, y para los demás también.

Supongo que ya luego vendrá Deiwan a hacer las debidas modificaciones y demás.

 

Como sea, saludos!

Realmente me encontraba allí para hacer lacompra de la que seria una de las adquisiciones más importantes de toda mivida, estaba dispuesta a comprar aquel anillo de compromiso con el cual decidiríael futuro de mi vida. La opción más acertada seria elegir aquel que apenas si teníaun valor de unos cuantos galeones, precio que para la época en que yo era solouna aprendiz habría sido totalmente inasequible para mi.

 

Entré en el gran lugar que pocas veces solíavisitar, no por tacañería a gastar algo de mi monedero, sino bien por mi pocaexperiencia con las compras y a terminar mal parada con ello. Al ingresar pudedivisar que había un extraño articulo al que le podías susurrar lo que buscabasy este te diría la ubicación de lo que deseabas, o bien, podías perder eltiempo dando inútiles vueltas por ahí. Así como bien pude notar que había ungran cartel que avisaba sobre una sección donde podrías adquirir autos mugglesvoladores.

 

¡bingo! Llevaba varios meses yendo de aquípara allá en busca del Ferrari que tanto ansiaba y era tan difícil de encontrardebido a que se traba de un mero vehículo muggle, de hecho, para mi no era tannecesario que este volara, pero allá ellos…

 

De todas formas debía cumplir con miobjetivo principal, la misión en ese momento era comprar el anillo, ya luegoveríamos qué sucedería después.

 

-Quisiera comprar este anillo- dijecon gesto cortante sin siquiera molestarme en saludar a quien me atendía. –ese deahí- señalé el objeto cuyas indicaciones en la descripción rezaban:

 

 

 

 

 

 

ID: 112609

Nick: Kathy Daray Van Halen

Bóveda: Bóveda

Fecha: 2012-03-05

 

Nombre del producto: Anillo (Alianza de

compromiso)

Objetos, Criatura o Poción: B

Catalogación: A

Puntos por unidad: 10

Cantidad de unidades: 1

Precio por unidad: 150 G

 

Precio total: 150 G

Total de Puntos: 10

 

 

 

 

 

Y en cuanto terminé de indicar lo que quería,a continuación volví a formular la pregunta que ya debería de tener hartos por mi parte a medio ministerio y callejón Diagón.

 

-Ese anuncio…- le enseñé el letrero que decía

 

 

…Existe un rincón especial, junto almostrador, en donde se muestran los objetos mas codiciados e importantes, comolo son los coches muggles encantados para volar y el pensadero, objetosumamente extraño y útil en opinión de algunos magos que buscan simplementeexplorar su pasado, junto a otras personas.

 

 

-¿quiere decir que puedo comprar aquí el auto muggleque tanto deseo? Estoy hablando de un Ferrari Scuderia Spider. Sé que nocuentan con él en el inventario por el momento, pero estoy segura de que siusted pone el precio, yo estaría más que dispuesta a pagarlo…

omg! ahora ven que se reproducen por generación espontanea? xDD no es mi culpa u.u

jajaja Jess! de todo me esperaba menos que pidieras ser mi hija! xDD pero bueno, como me encanta adoptar cofcofAPocoYNoLoNotancofcof y me caes bien y todo eso.,..

pues obvio que te recibo! *-*

eso si, te advierto que tendrías como mil hermanos u.u ya luego socializaras con ellos xDD

un beso y feliz inicio de semana *-*

Todo había que decir que ya estaba más queharta de tanto ir y venir por todo el mundo mágico y Diagón preguntando donde podríaadquirir aquel auto muggle que tanto deseaba. Algunos me decían que podíaencontrarlo en x lugar cuando otros comentaban que seria en un sitio diferente.Sea como sea, al final los rumores daban con que tal vez podría llegar a algofijo con tan solo visitar el departamento de transportes.

Era extraño, pues nunca creí que dicho lugar pudiera encargarse de algodiferente a escobas, red flu, trasladores, etc. Cosas ajenas al mundo mágico.

Y es que hoy en día ¿Quién querría adquirir lo que para ellos era un patéticoauto muggle? La respuesta estaba en nada más y nada menos en alguien que dealguna u otra forma quería oponerse al sistema: yo.

 

Era la primera vez que me adentraba enaquel lugar, de hecho, debí haberlo hecho hace tiempo atrás cuando apenas erauna estudiante, adquirir la licencia de vuelo y el permiso de aparición eranprimordiales para un estudiante. Pero no iba a negar que la vagancia se habíaapoderado de mí para realizar dichos trámites, algo que me recriminaba a mimisma, pues sabía que por ello iba a pasar mucho tiempo hasta que finalmente medecidiera a adquirirlos.

 

Sin bajar la mirada ni un solo instante,caminé por todo el pasillo hasta dar con alguien que pudiese ayudarme aproporcionarme alguna información sobre lo que quería realizar allí. Si memandaba a otro lugar, estaba segura que le propiciaría un golpe que jamás iba aolvidar. No estaba como para dar más vueltecitas por ahí, mi tiempo era algovalioso y los tontos del ministerio se estaban aprovechando de ello.

 

-Buenos días. El día de hoy me presento austedes con cierta inquietud que me gustaría me ayudasen a solventar-dije con seguridad- verán, hace un tiempo para acá he querido adquirir un vehiculomuggle. Sé que es poco normal que alguien pregunte por eso, pero así como bienestoy segura poco le importaran mis explicaciones para ello es también escasoel tiempo que tengo para charlar al respecto.

 

Sabía que mis palabras sonaban algo toscaspara el común, aun así, la elegancia con las que las decía hacían que no sologanara respeto, si no que prestaran mas atención a mi cordialidad que alsignificado de lo que decía.

 

-¿es este el lugar indicado para ello? De serasí ¿qué tramites debo realizar y cuales son los pasos a seguir para que dichotransporte sea avalado por el ministerio de magia?

 

 

Off: creí que iban a pasar de largo de mi T_T la próxima me avisan si mecontestan en 3 meses e_e xDD

 

 

 

AnabellaRinaldi-Atrapada en algún lugar del profeta

 

Intentaba gritar, moverme, hacer cualquiercosa. Pero más que perfecta a comparación de cualquier atadura, el imperius queme había propiciado la mortifaga en el departamento de misterios había sidocompletamente exitoso. A pesar de mi insistencia lo único que podía lograr eraunos leves y patéticos susurros, contrario a lo que quería lograr.

 

Sin embargo, no supe si fue gracias a misplegarias o qué, pero parecía haber movimiento cerca del lugar al que meencontraba ¡alguien venia a rescatarme!

 

-¡Auxilio! –comencé a decir con masdesespero. Sabía que a penas si podrían oírme gracias al hilo de voz que proveníade mis labios, pero en ese instante cualquier cosa era de utilidad.

 

Un leve rayo de luz se alcanzó a hacerpresente en mi campo visual, la puerta de ese extraño lugar se habría para darpaso a mi rescatista. Y aunque no sabia a ciencia exacta donde me encontraba,si sabia que yacía en medio de algún lugar del profeta, eso gracias a quefueron las ultimas palabras que escuché que la mortifaga que me había lanzadoel imperius me había ordenado.

 

 

Me quieren poner de matriarca mala ;O; pero yo no soy así...soy buenita (?) xDD

 

En ese caso, quedas mas que aceptada como hija de Lestad. Salvo que, según me dicen, tendremos que agregarte en el árbol el mes que viene, cuando logres actualizar tu ficha.

Sin embargo, como ya he dicho, puedes rolear en la mansión cuando tu desees.

 

Un gusto enorme contar contigo entre los Rambaldis, _nicole_ ^^

 

por otro lado, déjame aclarate unas cuantas pautas que necesitas saber...

 

1) siempre escribe mas de dos lineas, así no comentes spam y no te sancionan

2)2) deberás postear en tu ficha de personaje el mes que viene con el cambio y crearte una bóveda personal en Gringotts. Si necesitas alguna ayuda para ello, puedes proporcionarme tu msn y te ayudo desde ahi

 

 

y eso es todo... saludos!!

Hola, querida _nicole_ !!

me han enviado para darte noticias u.u y me temo que unas no muy buenas...tal vez.

 

Es que ocurre que según tu ficha de personaje, tu ya cuentas con las dos familias con las que puedes contar... la Vladimir y la Rexdemort

A no ser que reconsideres esto, no podemos contarte como miembro de la familia como tal aunque claro, siempre seras bienvenida como amiga de esta misma.

 

En caso de cambiar de opinión y darnos el honor de tenernos en tu ficha, solo tendrías que pasar nuevamente por acá y avisar.

 

Saludos! ^^

A ver que ahora si tengo poderío muppet sobre este lugar ò.o ahrre xDD

 

Awwww extrañaba esto *-* ahora si que no me ligaran ninguna trompa ni nada ññ ademas que ELLA solita lo ha pedido sabe lo que le conviene (?) así que

a seguir las peticiones de la chica y aceptarla como bella hija de moi +.+

 

me hace tan feliz este momento :cry.

 

querida Jailbait!! estas mas que aceptada en la familia! ahrrè pequeño orco... actualiza y ponla como mía e__e xDD

y pues puedes pasar por la familia a rolear con tus hermanos y conmigo.

 

en fin, esta little Dhampir te deja saluditos y amor muppet del bueno

 

te espero en la familia *-*