Santos Malfoy

Tras atravesar el portal público del mundo muggle al mágico, Santos avanzó con prisa entre los cientos de brujas y magos que albergaban el vestíbulo del Ministerio. Todo parecía estar en orden, al menos en el Atrio y la planta más baja. El ascensor, parcialmente lleno como de costumbre, con un par de memorandos inter-departamentales sobrevolando las cabezas de los presentes.

La instrucciones habían sido claras y la urgencia en el llamado, lo había sido aun más. Sin embargo, los asuntos personales eran los principales causantes del desgaste físico en Gaunt y fue por eso que no pudo atender con la misma inmediación a la lechuza que llegó a su residencia horas antes.

Una vez ingresado al departamento, colgó su abrigo en el perchero. Y las voces que apenas rasgaban el silencio, sirvieron de guía a el aprendiz para encontrarse con sus compañeros de trabajo.

—Buenas tardes, disculpen la tardanza— saludó, interrumpiendo a una muchacha que al parecer había llegado también hace unos minutos. Con sonrisa forzada y un grado de amabilidad apenas convincente. No había sido una de sus mejores semanas, sin embargo era su obligación asistir al trabajo y tenia que hacer lo mejor para sobre llevar la situación.

—Tuve un contratiempo, pero pueden comenzar poniéndome al corriente porfavor— culminó, mientras se situaba en un lugar no tan apartado de los miembros del Cuerpo de Seguridad.

Bien, vengo a dejar mi tarea

1. No leí con atención

2. Ocupé dos hechizos inválidos

3. En algunos ataques no coloqué el nombre a quien iba dirigido

4. Dejé impactar un hechizo que pudo haber sido evitado

5. Las cuerdas del incárerus impactaron y nopodía hablar, sin embargo utilicé un hechizo verbal

Creo que es todo, hasta luego o/

Hades, leí tu corrección antes de que editaras y puse mi post en el simulacro, pensando que las cuerdas no estaban atadas, asi que, ahora qué hago?

Rápidamente se puso en pie y apuntó con precisión a su objetivo (Atria). La verdad es que estaba un poco desconcertado, no había estado tanto tiempo en el sol y seguramente era la principal causa del declive que tuvo ante su adversaria. —Séneca— bramó antes de perder el sentido del habla, pues la sensación de resquedad en la garganta apenas comenzaba a mermar su la amplitud de su voz. y de ésta manera equidistaría la situación en el duelo.

—Crece-uñas— pensó con inmediación y un rayo corto las distancias entre la punta de su varita y el pecho de la bruja (Atria). De impactar en ella provocaría el crecimiento de sus uñas y tendría serias dificultades a la hora de apuntar y ejecutar un ataque. Miró a Misha y esperó a que hiciera algo también respecto al duelo, como compañera de duelo, comenzaba a mostrar un alto grado de incompetencia y eso a Malfoy no le agradaba nada.

Claramente algo había salido mal en los hechizos que intento efectuar, pero al menos no fue el unico con errores ya que Atria habia lanzado un rayo en dirección indefinida. La actuación de Misha no fue para nada provechosa para Santos, hizo uso de un efecto de manera incorrecta y las cuerdas ataron al demonio en los lugares que la Haughton planeó.

<<Evanesco>> pensó con inmediación y la cuerda que ataba y unía sus brazos a los costados desapareció instantáneamente. Rápidamente pensó en deshacerse de la cuerda en su boca, pero esa no era una idea contundente asi que en una floritura de su varita de caoba y con trayectoria a Atria, pensó:

<<Seccionatus>> doce medias lunas de un plateado tan brillante como el de sus ojos, salieron disparadas con celeridad en dirección al abdomen de la chica. Si ella no hacia un movimiento próximo con rapidéz, el filo de las cuchillas perforará segun lo planeado.

http://i.imgur.com/CVpBzjh.png

En su andar con camino a la oficina —Será mejor que guardes silencio— bramó Santos con euforia, la verdad es que el balbuceo de la bruja lo comenzaba a hartar y las posibilidades de que el demonio atentara contra la chica, aumentaban a medida que la castaña escupía palabras que no contribuirían en nada para el proceso de su veredicto.

La distancia entre la punta de su varita y la espalda de la chica era nula, por lo que si ella intentaba desaparecer, se llevaría consigo a Malfoy. Para ser una de las más buscadas en meses, se trataba de una mujer con dotes de poder relativamente poderosos, por lo que Santos se mostró atento tanto de cada una de las palabras que la chica parlaba, como de sus movimientos, a pesar de la exasperación que eso le causaba.

A la llegada de Pandora y Kurt, se detuvieron, el rubio mantuvo con firmeza su varita y llevó la mano desocupada al hombro de la bruja. Una vez culminadas las indicaciones y sugerencias de la directora, continuaron. Tendrás derecho a hablar, una vez nos encontremos en la oficina. Asi que ¡andando!— ordenó el nuevo patriarca de los Gaunt y con un suave empujo de su varita a la espalda de la bruja, la insto a proseguir a caminar en dirección al ascensor.

Por delante iba Bel, por lo que el traslado de la chica al departamento, no fue un gran problema.

El grado de perplejidad de su hermana era alto, tanto que su rostro no expresaba otra cosa que no fuese confusión. Al cierre de la puerta, de la estancia en donde se hallaban, Anne desahogo su pensar respecto a la situación que de una u otra forma a ella también se le veía involucrada. Santos habló —entiendo que sea difícil de entender, pero, Evarela y yo... ya sabes— admitió, con una sonrisita llena de rubor, dándole la espalda a la bruja y llevando ambas manos a su cabeza, sin nada más que decir. En seguida, notó el ligero malestar de la castaña, el demonio volteó con inmediación y se acercó, se colocó en cuclillas cerca de la chica —debes tranquilizarte linda, tómalo con calma— colocó una mano sobre su vientre y la otra detrás de su espalda en señal de afecto y comprensión —que niño tan inquieto— sonrió mirando a la Hauhgton. Y respecto a Emmet, deberás tratarlo como mejor te sientas— anexó poniéndose en pie.

La onda de silencio que inundó la sala, sirvió de meditación para ambos hechiceros. Ciertamente, los lazos familiares en el mundo mágico eran difíciles de entender, pero incluso la familia de la que ahora ellos estaban a cargo, había logrado salir adelante gracias al incesto del que fueron participes sus antecesores.

—Si, tenía pensado ir mañana mismo por la mañana al Ministerio, a resolver unos asuntos pendientes y puedes alcanzarme allá— contesto paseándose por el lugar con las manos atrás. No nos podemos quedar estancados, si dinero es el que necesitamos, tendremos que hallar la forma conseguirlo, así yo me tenga que partir el lomo trabajando, estoy dispuesto a colaborar—. Se detuvo y permaneció inmóvil creyendo haber escuchado algo anormal <<deben ser los tranquilizantes>> pensó.

—Te sigo— respondió y se dirigió hasta donde Anne, para ayudarla a ponerse en pie, con caballerosidad ofreció su brazo como apoyo para juntos caminar. En su andar por los corredores de la planta baja, un ruido descomunal rasgo el silencio y la calma del castillo. Por la amplitud del sonido y el sitio en el que se encontraban, era muy probable que el fenómeno proviniera desde lo más alto del edificio. Si hace un rato lo escuché también, será mejor que vaya a echar un vistazo, no vaya a ser algo pero que un fantasma—.

La verdad es que no había tratado antes con una mujer embarazada tan allegada, pero si algo sabía es que no podía realizar esfuerzos en gran magnitud —Preferiría que te quedes aquí, alertaré a Emmet y bajo en seguida a avisarte— mirando a los ojos a la mujer-lobo, materializó su varita y con un desplazamiento acelerado se subió las escaleras principales.

Una ves que llegó a la sexta planta, se dirigió a la habitación de su hijo quien al parecer estaba igual de confundido que Anne y el propio demonio —Emmet, ¿escuchaste...algo?— sus palabras fueron interrumpidas pasos que provenían la misma trayectoria que él tomó por llegar hasta ahí, era su hermana —que testaruda Anne— entendía a la perfección que de los presentes ella era la de más experiencia y mejores dotes con la varita, pero no se perdonaría nunca si algo lle llegase a pasar a ella o al sobrino que cargaba en su seno.

—Sin Anne, es mi hijo— contesto igual de natural para en seguida voltear en dirección a Emmet —Eres libre de hacer lo que quieras, esos lloriqueos no me causan ni la más mínima pisca de sentimentalismo, si es lo que intentabas lograr conmigo— sentenció mientras miraba como su hijo se apartaba del sitio en donde estaban hasta hace un momento los tres.

—​Estos jóvenes de ahora están demasiado consentidos (?)— agregó mirando a la matriarca Gaunt —​creo que éste lugar necesita un poco más de movimiento, deberíamos organizar una fiesta— agregó con complicidad a la mujer que reposaba relativamente quieta ante sus platinos orbes. —Y por cierto, aun tenemos el pendiente de ir al departamento del control de criaturas mágicas, éste lugar necesita se mucha atención, no nos daremos a basto con nuestros elfos personales— anexó mientras tomaba asiento en un lugar frente al de la licántropa.

—Sput— pronunció sereno y en seguida una nube de humo blanco señaló la aparición de su sirviente personal —atiende a Emmet en lo que necesite y llévale algo de comer, pareciera que no puede aguantarse hasta la cena (?)—.

Off:

No me salen los roles de padre :E

—Atria, que sorpresa, no pensé que tuvieras el valor para presentarte— y ésa fue la bienvenida que el demonio le dio a la Haughton. Entonces rápidamente se situó a una distancia de diez metros de toda persona y objeto capaz de ser morpheado.

No pasó mucho tiempo para que la integrante de su equipo llegara —No venimos aquí a cotillear, será mejor que pongas atención— sentenció Gaunt respecto al saludo de la chica, sin apartar la mirada de su único objetivo, alzó la varita en dirección a Atria y pronunció —Séneca— el efecto fue inmediato y a partir de su segunda acción no podría utilizar hechizo verbal alguno durante los siguientes tres turno y eso era algo realmente favorecedor tanto para él como para su compañera.

—Anular Strellatus— volvió a pronunciar y los efectos fueron inminentes; odiaba ése hechizo, muy fenixiano para su gusto, por lo que hizo que la hija de su hermana no lo pudiese pronunciar y utilizar en su contra. Haciendo uso de su vista periférica, se percató de que se encontraban alejados del pueblo y de ésa manera ningún muggle los lograría molestar. El escándalo que emanaba del cabaret proporcionaban un ambiente aun más motivante para la realización del enfrentamiento.

Había sido oportuno y prefirió tomar el traslador una noche antes. Ahora, los esclarecedores rayos del sol, acaparaban en iluminación cada uno de los rincones del pueblo, no era un lugar de admirar, todo era sencillo y la tranquilidad predominaba en aquel caluroso día.

Las manchas en su pantalón vaquero eran la señal más evidente de la ruda travesía que se animó a tomar por la mañana, las botas vaqueras que arrebató a la fuerza a un campesino estaban totalmente forradas por una fina capa de arena y el sudor que transpiraba, era notable por el cuello de su ramera blanca. Ahora solo tenía que esperar a la llegada de los otros y mientras tanto, él ya se había aclimatado por lo que la temperatura no sería un problema para su desenvolvimiento en el simulacro que los profesores de la Academia organizaron con el propósito de incrementar sus habilidades con la varita. Gracias a la participación que con anterioridad, ha tenido en asaltos, capturas y defensas, se sentía motivado y aunado a una pisca de confianza, esa era la combinación perfecta para comenzar el duelo.

Había pasado toda la mañana explorando el recién remodelado castillo; bastante limpio y ordenado a diferencia de como lo encontraron. La pulcritud con la que los jardines habían sido adornados, denotaban la elegancia no solo de las inmediaciones del castillo, sino también de sus interiores. Aún habían muchos proyectos en mente, pero el inicio de éste, fue un hincapié para los planes futuros.

Avanzó sonriente la calzada que conecta los jardines traseros a una de las entradas principales del lujoso edificio, en donde su elfo personal, Sput, lo esperaba con sus pociones relajantes listas para ser ingeridas, diluidas en un sabroso jugo de naranja. —Gracias ¿has visto a Anne?— parló, luego de finalizar el líquido amarillo y en seguida reposar el vaso sobre la charola de plata.

—Está en el salón, su hijo Emmet también esta en casa, amo— contestó con naturalidad y desapareció con todo y utensilios hacia la cocina.

Atravesó el vestíbulo e inmediatamente la armonía de voces familiares resonaron en su oído. —Buenas tardes— saludó dirigiéndose a su hermana —¿llevas mucho tiempo aquí querida?— cuestionó en palabras en par al beso que depositaba en su mejilla —estaba divagando por los terrenos y sería bueno que en la noche nos reuniéramos junto con Dérek, ya sabes, hay que terminar de organizarnos—. Volteó al vampiro —Emmet, será mejor que salgas a cazar o ¿no me digas que prefieres la carne animal?—.

Todo parecía estar a favor del bando oscuro, su amiga Koa estaba a salvo y tenían el mundo por delante para conquistar esa noche, palabras inspiradoras por parte de un aspirante y muy ciertas a su vez. Era fascinante la manera en que el bando tenebroso se desenvolvía día tras días y el hecho de ser un aspirante a él, era un verdadero honor para el joven patriarca de los Gaunt. Miró a todos de reojo y esperó el momento indicado para salir corriendo por el marco que divisa al Callejón y el local,se perdió entre las penumbras y nunca nadie más se ente´ro de la identidad del desconocido que apoyó a los mortifagos asi que no había que temer y Santos estaba salvo —Que ameno, que ameno— sentenció ya cuando estaba a mucho kilometros lejos del local donde se libró la batalla.

—Avis— sentenció y con inmediación una parvada de gorriones comenzaron a danzar a su al rededor con el propósito de cubrirlo de todo ataque enemigo que propagara un as de luz con intenciones de dañar su estabilidad física, psicológica y motriz. Una vez cubierto por los custiodos de su cuerpo y de su fracción de alma, las ganas por atacar a un fenixiano no mermaron hasta que pronunció con rigidéz y firmeza, apuntando con la varita en dirección a la miembro de la Orden (Elodia) —Sectusempra— un rayo cortó las distancias entre su cuerpo y el de la chica, que impactó de lleno en su abdome y necesitaría de asistencia médica de urgencia si quería sobrevivir. Una vez finalizados sus dos hechizos, mantuvo su posición de defensa a la espera de un ataque enemigo más que seguramente no estaría tan lejos de llegar. Ahora más que nunca tenía ganas de sangre y pura sangre, rió sarcastico y miró el panorama envuelto de rayos y maleficios de todo tipo, era sin duda un escenario de lo más lindo.

Luego de comprar unas cosas en el Callejón Knockturn optó por ira a tomar unos tragos en Diagón, seguramente ahi encontraría un lugar donde bailar y pasarla bien un rato y puesto que ya tenía mucho tiempo sin salir era esa una buena idea.

Lastima que para su sorpresa miró como el alboroto se armaba en el local El Refugio Mágico, cubrió su rostro con la bufanda que portaba aquel día y se encapuchó con el sombrero que sale de la capa negra. Materializó su varita en la diestra e ingresó al local, seguramente todos lo verían como un extraño pero por sus vestimentas estaba más que claro que apoyaba al bando oscuro y atacaría sin cesar a los seres de luz o fenixianos hasta la muerte. Se situó a diez metros de todo objeto que pudiese ser morpheado y de toda persona que estaría dispuesto a atacarlo —Muy buenas noches señores lo saluda su amigo Steve Jobs— (?) asi que ahora esperó que alguien lo atacara para después defenderse y asi fue como su idea por tomar unos tragos desapareció.

Salió disparado del Castillo Gaunt rumbo al Ministerio de Magia, tenía unos asuntos que atender junto con su hermana Anne a quien esperaría en el Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas. Atravesó el atrio y tomó el ascensor que lo trasladaría hasta la cuarta planta. Atravesó el marco de madera que divisa al corredor y el departamento y se dirigió a la oficina donde aprovecharía para registrar unos asuntos personales en la división de seres, duendes y espíritus. Tomó una ficha y culminada la redacción dejó las fichas con quien tenía que dejar —Buenos días— saludó y entregó los papeles que previamente había escrito con tinta.

Ficha para el registro de Demonios y Banshees

Ficha de Santos Mallfoy

Nombre (s) de/los registrado (s): Thanatos & Hypnos

Tipo de espíritu: Demonio

Residencia: Cuerpo de Santos Malfoy.

Características físicas: La mismas que las del registrado.

¿Puedes cambiar tu físico de alguna forma?: El tono de de los ojos del poseído tornan a ser totalmente negros tal cual y no tuviera, cuando se presenta su lado demoníaco.

Características peligrosas: Hacen del poseído un explosivo, demente, capaz de hacer cualquier tipo de locura sin tener consentimiento total.

• Thanatos (personificación de la muerte sin violencia): Se manifiesta como el alma serena. Es mesurado, sabio y paciente, aunque tiende a ser manipulador. Su trato es cruel sin caer en lo rabioso y lo iracundo.
• Hypnos (personificación del sueño): Es el mismo que confiere al muchacho un aspecto de fatiga, todo lo contrario a su temperamento, colérico y sanguíneo. Sus acciones no son congruentes, hacen que Santos sea despistado, no permite que lo corrijan por lo que tiende a ser muy explosivo.

Poderes o dones: Rapidez y fuerza descomunal. Hacen a Santos un hombre más reflexivo y capaz de dominar la situación desde diferentes punto de vista, por lo que no es un problema para Malfoy tomar una decisión. Memoria fotográfica y proyección de ideas sobre ideas.

Causas que te pueden descontrolar: Atentar contra familiares o amigos.

Ficha para el Registro de elfos.

• Nombre del elfo: Sput
  • Sirviente personal
• En caso de servir a un mago/bruja
  • Nombre del mago/bruja: Santos Malfoy
  • Tiempo en el que lleva sirviendo al anterior: 20 años
  • Nombre de quien lo registra: Santos Malfoy
• Ficha de Santos Malfoy

 

 

Ahora se sentó en una banca, donde reposó para esperar a su hermana quien seguramente ya estaría en camino, miró su reloj de muñeca y miró a la entrada para ver si no aparecía ya.

<<Evanesco>> pensó al ver como doce medias lunas se acercaban con celeridad a su cuerpo, y la suerte de una la corrieron todas, desaparecieron y una vez más Santos logró defenderse. La situación era ciertamente desconcertante pues sabiendo que su profesor es un buen duelista ¿cómo es que no atacaba con mayor euforia? probablemente le gustaba jugar con su alumno y al demonio eso no le gustaba (?). Hizo una serie de pasos que lo dejaron posicionado a siete metros del pedestal donde reposaba el tablero de ajedrez.

El maestro se puso en pie y apuntó en dirección a su alumno en dirección a su rostro.

Santos estaba atento por lo que intuitivamente supuso que su maestro atacaría nuevamente <<Zancadilla>> pronunció en su mente y la misma estrategia fue repetida, Ragnarock cayó y su rayo salió desviado en dirección al techo del lugar en donde se encontraban, haciendo que éste se agrietara en la vigueta.

Lo único que anhelaba, era aguantarle y salir vivo de ésta.

<<Claro, la cultura objetiva de la Marca Tenebrosa, es buscar el perfeccionamiento personal de sus miembros para un bien en común>> pensó Malfoy, sereno y disfrutando de la cavidad que proporcionaba el bosque. —Ayuda para ayudar— comentó Malfoy volteándose a su compañero de clases, Ryddleturn.

Tras la respuesta del mentor, Santos no pudo evitar trazar una pequeña sonrisa en su semblante. Era la respuesta que esperaba <<Debe ser asombroso>> dijo para si mismo en la mente, divagando en el futuro de cómo se veía en unos cuantos años como miembro leal de la Marca. Apretó , tronó los dedos de su mano y esperó alguna otra pregunta de Takeshi, pero al parecer no había nada más que dudar y al menos el demonio estaba seguro de lo que quería, sin embargo quería conocer más a fondo el trabajo que su profesor ha llevado dentro del bando y de su relación con la Orden —¿podrá compartir con nosotros alguna experiencia persona? y ¿cuál es su opinión respecto a la Orden del Fénix?— esperó la reacción de su profesor mientras acomodaba su espalda en el tronco de uno de los miles de árboles plantados en el lugar.

Culminada la sesión de preguntas, comenzó una nueva actividad y una oscuridad cegadora se interpuso entre su vista y el panorama al llegar al punto donde los profesores acordaron encontrarse.

***

Miró toda su vida pasar. Ahí estaba, pequeño e indefenso siendo molestado por los demás chicos del orfanato. Luego apareció la escena en que fue expulsado del mismo y fue llevado a Durmstrang, su cuerpo ahora se materializó y apareció en el salón principal de la Mansión Malfoy donde todo comenzó. Y todo era como si hubiese retrocedido en el tiempo, en cuestión de milésimas.

<<No vas a lograr nada>> una susurrante voz en su mente comenzaba a intimidar al adolescente de apenas diecisiete años. Al frente estaba Crazy, su abuelo conversando con Juve, su madre, quienes al parecer estaban en un desacuerdo. Del antebrazo de Aiel, comenzó a brillar la insignia con la que se identifica todo mortifago y en seguida tuvieron que desaparecer, dejando al chico sentado en el sillón completamente desconcertado <<Pero si quieres saber de que se trata, tendrás que luchar mucho... pero mucho, mucho>> agregó la voz. Fue esa noche donde su curiosidad despertó aquellas ganas por probar que tiene las capacidades para ser alguien importante en la vida y teniendo esa marca tatuada en el brazo, sería como tenía planeado lograrlo.

Hola chicos, vengo a dejar mi tarea ^^

Ishaya: Expelliarmus (impacta en la pared) (Acción 1 - Turno 1)

Koa: Forticum (protege el rayo/Expelliarmus) (Acción 1 - Turno 1)

Ishaya: Morphos (transforma el Forticum en un lobo y acepta el intercambio de daños con el efecto/Absorvere) (Acción 2 - Turno 1)

Koa: Absorvere (es mordida por el lobo e Ishaya tiene la muñeca rota) (Acción 2 - Turno 1)

 

Ishaya: Morphos (Cambia de mano la varita y transforma la capa de Koa en una avispa marina) (Acción 1 - Turno 2)
Koa: Oppugno (controla al lobo y el veneno de la avispa es inyectado) (Acción 1 - Turno 2)

Ishaya: Babosas (intercalado a efecto/Silencius, por consiguiente Koa se puede defender. Es mordido por el lobo) (Acción 2 - Turno 2)

Koa: Silencius (demasiado tarde para surtir efecto en el Morphos, pero el conjuro es pronunciado y la siguiente acción de Ishaya debe ser no-verbal) (Acción 2 - Turno 2)

 

Ishaya: Expelliarmus (silenciado y desviado por el ataque del lobo en su brazo) (Acción 1 - Turno 3)

 

 

*Ambos reciben ataques del lobo.

*Koa es envenenada por el piquete de la avispa.

 

Al jactarse que iba corriendo sin nada entre sus manos, regresó con rapidez y destreza a la Torre Abbadon en donde pasó por desapercibido entre la batalla que se libraba en ésos momentos, tomo valor y se adentró aun más hasta el sitio donde Koa estaba cubierta por hechizos de protección —Ahora si no te vayas a quedar atrás eh...— sentenció tal cual le hablara a un bebé, pero luego de acordarse de que se trataba de Koa agregó —Ay, holis maldita— rió por lo bajo y la tomó por los pelos, asi corrió nuevamente en dirección a la salida arrastrando el cuerpo de su compañera de bando por todo el lugar ensangrentado, miró el cuerpo de Aimé muerta y no dudó en darle una patada en la cara, siempre quiso hacer eso. Ahora sí, salieron entre vitores y gritos de los moritfagos de la prisión de la Órden del Fénix y tras una seña con el pulgar arriba, avisó a los altos rango que ya estaba afuera con el cuerpo, fue algo dificil y laborioso pero fin lo consiguió y tanto él como su amiga estaban a salvo.

Una damisela estaba en peligro y era hora de acudir a su rescate, Santos corrió con destreza entre los miles de hechizos, rayos, conjuros y demás cosas que los moritfagos y aurores hacían, llegó hasta un lugar cerca de el sitio donde estaba Koa y apuntó con precisión al cuerpo flotante de la chica —Liberacorpus— inmediatamente su cuerpo fue liberado y así podrian hacer todo lo que se debe hacer con ella. —Yo solo sigo ordenes, solo sigo ordenes— se dijo asi mismo apartandose del lugar y volviendose a situar a diez metros de todas las cosas. —Sectusempra— gritó en dirección a Mey Potter Black, la Demon Hunter. No es que tuviera algo contra ella, pero comenzaba a parecerle divertido atacarla a ella porque era una de las que más magia hacían en el lugar, ahora corrió hasta donde estaba hace unos momentos, nuevamente se posiconó en defensa en la espera de nuevos ataques enemigos que seguramente no tardarían ne llegar, ya comenzaba aburrirse.

—Si, seguro no se lo esperaba— chilló entre risas sarcásticas que presagiaban lo deseoso que estaba por sangre. —Sectusempra— volvió a gritar en dirección precisa a la de la auror (Mey Potter Black) quien parecía estar entretenida jugando con pájaros revivientes caídos y aguas frescas, hacía calor en la playa y seguramente por eso decidió darse un baño con el agua curativa y super-ultra-mega poderosisima.

—Incárerus— tres cuerdas de desprendieron con rapidéz de la punta de su varita en dirección a la otra de las alto rango (Mei) a la par en que atacaba a Koa. La primera buscó atar sus brazos a los costados de su torso para impedirle apuntar con precisión, la segunda se enredó al rededor de sus ojos para impedirle ver a sus objetivos y la última se ató en la comisura de su boca y de ésta manera no podría utilizar hechizo verbal alguno, solo esperaba que no saliera con una de esas fantasiosas estrategias que los fenixianos tanto gustan hacer. Sin duda alguna Santos comienza a ser un verdadero odioso de la farandula.

—Que ameno, que ameno— sentenció ladeando su cabeza en señal de "no".

<<¿Strellatus otra vez?>> se preguntó a si mismo y esa sensación de ojos enrojecidos comenzó nuevamente a emanar desde los mas profundo de su ser. Y así se convirtió en el numero uno de los hechizos que más comenzaba a odiar, ésta sería una lista larga pero, del Top 19, el Strellatus se encontraba ahora en primer lugar y después quizás el Sectusempra pero a ése tambien lo amaba, lo odiaba y lo quería —Episkey— pensó apuntando a sus ojos y la visión comenzó nuevamente a cobrar vida —Episkey — repitió y la clara visión fue de lo más lindo para el aspirante. Se colocó ne posición de defensa y espero ver que hacer, mantuvo sus distancias con los aurores y con todo objeto que se pudiese morphear y miró a todos lados mirando como los altos rangos odefos, no dejaban de hacer maravillas con su varita y fue cuando a Malfoy le surgió la idea de sacar un puntuaje del Demon Hunter con más hechizos y hacer una lista Guiness, simple y sencillamente para reirse un rato.

Apuntó nuevamente en dirección a la chica a quien momentos atrás lanzó un rayo y volvió a repetir —Sectusempra— era sin duda uno de sus ataques favoritos y sin duda no se cansaría de usarlo en la noche, gustaba mucho de oler, mirar y sentir la sangre derramada de los impuros, por lo que no había algo existente que lo detuviera en aquella bella velada. —Sectusempra—volvió a gritar apuntando con precisión al abdomen de la Demon Hunter (Mey Potter Black) quien se encargaba de atacar a otros miembros del bando, el rayo de impactar en ella, necesitaría de atención médica urgente y de no ser así moriría. Rió sarcastico y mantuvo las distancias a las que estableció desde un principio, diez metros, ni un metro más, ni un metro menos y así se mantendría durante el ataque a menos de que algo surgiera a su conveniencia —¿Qué ganas de lanzar diez mil hechizos?— se preguntó mientras veía a la poderosa Demon Hunter que hacía de las suyas por querer impedir el escape de los moritfagos.

—Uy yo que pensaba invitarlos a dar la vuelta por Knockturn— comentó divertido. Era evidente que los aurores no estaban acostumbrados a recibir visitas en horas no tan congruentes para su persona, pero qué más podían hacer que inhalar, exhalar y como siempre intentar hacer milagros con la varita. A estas alturas del partido ellos ya tendrían que haber invertido su horario sabiendo que se enfrentan la night people del mundo Mágico <<Y yo que me quería echar un café>> pensó a si mismo dibujando una siniestra sonrisa en su semblante y de repente… sintió sus ojos quemados.