Deax Black Lestrange

La clase había dado inicio. El castaño no sabía mucho de los temas que se estaban tratando pero sabía más de algo, no estaba tan perdido como creía antes de iniciar. Aunque sabía las primeras respuestas, se había quedado callado prestando atención a las palabras de Sally que, por la expresión de la profesora, eran más que correctas. Sonrió a la alumna en gesto de aprobación y amabilidad.

Al parecer, los principales temas a tratar en clase serían los venenos y antídotos para los mismos. Un tema muy poco conocido por él, pero sin duda: uno de los que más le atraían del curso. Se quedó en silencio, con los brazos cruzados, escuchando y tratando de retener todo lo que escuchaba, a la vez que asentía ligeramente con la cabeza.

De pronto, los instrumentos a utilizar volaban por los aires directo a las mesas en las que Sally y Deax estaban colocados. Los ingredientes, de igual manera, aparecieron deprisa delante de ellos. Restos casi imperceptibles de los ingredientes pulverulentos caían de las bolsitas mientras estas se posicionaban cuidadosamente sobre las mesas. Había de todos los tamaños y colores, así también vasijas para depositar la poción finalizada.

Se puso de pie ante los implementos que tenía delante y lo organizó todo para poder tener todo listo a la mano. Sacó la varita de su bolsillo y la dejó al lado del caldero. Al mismo momento, las instrucciones de la profesora salían rápidamente de su boca –Un segundo… –se detuvo. Las indicaciones de Heliké habían sido tan rápidas que seguirle el hilo había sido un poco complicado tanto para él, como para Sally que le había detenido segundos antes.

Sonrió para sí, e intentando recordar con exactitud todo lo que la profesora había dicho, inició con la preparación de la poción. Puso el mechero con flama baja, después de poner cierta cantidad de agua dentro del caldero –Creo que debería tomar apuntes al igual que tú –dijo a Sally mientras machacaba el bezoar dentro del mortero –sería todo más fácil de recordar –soltó una pequeña risa.

Se detuvo al momento de observar un polvillo fino de bezoar dentro del mortero. Colocó la cantidad indicada del mismo, así también siguió cada uno de los pasos que antes había mencionado Heliké, con un poco de dificultad para recordarlos pero nada de qué preocuparse ya que si olvidaba alguno de ellos, podía pedir ayuda.

Los minutos pasaban rápidamente mientras agregaba los ingredientes, pero mientras dejaba reposar a fuego medio, los veinte minutos se hicieron un tanto largos. Pero eso le sirvió para poder repasar mentalmente cada uno de los pasos que debía seguir luego de eso. Mientras agregaba los ingredientes finales, su compañera finalizó su trabajo –Qué rápida eres –dijo amablemente con una sonrisa. Removió la poción en el sentido correcto, las veces necesarias y dejó reposar el líquido ligeramente viscoso y de color verde-azulado que había obtenido –¿podrías también observar la mía?

–Ahora… Había escuchado sobre una modificación de este antídoto. Si no mal recuerdo, uno de los ingredientes que lleva son ramillas de menta, ¿o de lavanda? –Pensó. No recordaba exactamente dónde o cuándo había escuchado de aquello, pero estaba seguro de que llevaba esos ingredientes –O podrían ser ambos. Disculpa mi memoria –sonrió – Y bueno, ¿cuál sería el principal efecto diferente entre estas? –preguntó a Heliké. Volvió su rostro al caldero para notar que el líquido dentro ya estaba enfriándose.

Mansión Black Lestrange

No había podido dormir muy bien durante la noche, por lo que no le fue difícil ponerse en pie temprano cuando Rulkol, su elfo, llegó a despertarle. Se quedó unos minutos observando por la ventana, el gélido clima lo animaba, el cielo estaba parcialmente nublado y algunos rayos de Sol de dejaban entrever en cada movimiento de las nubes. Los árboles que habían en el jardín del castillo estaban bellamente adornados con ligeras capas de nieve y de sus hojas caía lentamente el rocío y el agua que se formaba por el hielo al derretirse.

No abrió la ventana porque sabía que una ráfaga de viento helado entraría por ella, y aunque el frío no le afectaba tanto por su naturaleza de demonio, la temperatura cálida de su habitación lo hacía sentir cómo en ese momento.

La voz de su elfo resonó en el cuarto de nuevo, esta vez lo apresuraba para que se preparara. Los minutos corrían más rápido de lo que él sentía y si no se daba prisa, llegaría tarde. Tomó una ducha de agua caliente y cuando salió del baño, su vestimenta ya estaba lista sobre la cama. Minutos después se encontraba frente al espejo intentando arreglar su cabello, cosa que sabía que nunca podría lograr. Por último colocó una bufanda gris que hacía juego con su pantalón del mismo color, sobre su camisa blanca remangada por el antebrazo. Tomó su abrigo entre los dedos y se despidió de Rulkol, jugueteando con una de sus orejas puntiagudas –Llegaré tarde, no me esperes –sonrió y desapareció entre humo negro azulado y un chasquido.

Universidad

Apareció segundos después en la mazmorra de la Universidad. El aspecto sombrío y aroma a hierbas, le decían que estaba en el lugar correcto.

Caminó hasta la puerta de la habitación y entró sin más. El lugar era antiguo, se encontraba empolvado y con poca luz. En cada pared había estantes y cajones repletos de vasijas de todos los tamaños llenas con líquidos de diferentes colores y densidades; instrumentos como agitadores, mecheros y calderos adornaban cada mesa dentro de la sala. Las paredes eran viejas y gastadas por el tiempo y en uno de los extremos había un gran armario, donde seguramente se guardaban todos los ingredientes.

Se adentró cada vez más en la sala mientras su compañera de clase se presentaba. Cuando esta tomó asiento, el ojimiel tomó la palabra –Buen día, mi nombre es Deax Black Lestrange. Siempre quise saber más sobre el tema de pociones –sonrío levemente y se sentó a unos pocos asientos de Sally.

My precious! [? muahaha naaaah, qué ganas de hacer esto tenía antes pero no había podido así que acá vengo.

Nick: Deax Black Lestrange
ID: 116922
Conocimiento: Pociones
Nivel de Magia: I
Link a la Bóveda: Bóveda
Link a la Ficha: Deax

Hola :3 vengo a solicitar un cambio en la ficha, más que un cambio.. una agregación? XD Bueno, hace rato me aceptaron en la familia Malfoy pero no había venido a pedirlo a la ficha para que lo modificaran.

Gracias.

Hola gentes nunca me había pasado por acá, ¡qué pecado! u.u XD Vengo a registrarme por aquí :3 como mi madre @@Aine Malfoy u______u nunca me dijo nada, ni me presentó, ni nada [? D: Creo que todavía no quiere reconocerme [? XD vengo, pues, a hacerlo yo u.u XD no sé qué tengo que dejar por aquí, pero dejo lo que se me ocurre:

Ficha: http://www.harrylatino.org/index.php/topic/103022-ficha-de-deax-black-lestrange/

Bóveda: http://www.harrylatino.org/index.php/topic/104840-boveda-de-deax-black-lestrange/

Lindo perfil: http://www.harrylatino.org/index.php/user/116922-deax-black-lestrange/ :3 [?

Y bueno, por último solo digo que soy el adoptado más lindo de Aine y Jock *-* soy hijo de la ley D: qué miedo jajaja ya bueno, solo eso xD

http://i.imgur.com/qew7d.png

Yo, Deax Black Lestrange, certifico que Leyla Kutsy Stroud, realizó el Examen de Vuelo y lo aprobó satisfactoriamente, por lo que por medio del presente memorándum solicito la edición de su ficha.

Deax Black Lestrange

Instructor de Vuelo y Aparición

Departamento de Transportes y Deportes Mágicos

Escuchaba las palabras de los Ryddleturn con atención, sus palabras eran muy entusiastas, eso le contagiaba de ánimo para llevar a cabo el plan que fuera. Dio un último trago a su bebida para terminarla. Miró a Alba y le dedicó una leve sonrisa cuando ella terminó de hablar. Ahora Cillian estaba centrado en las imágenes que habían en su mente, planeando rápidamente la travesura que aplicarían a Roxanne.

Soltó una ligera sonrisa cuando mencionó los dramas muggles que se mostraban por todos lados, tipo telenovela. Esta sonrisa se volvió más amplia al imaginar la reacción de su jefa cuando todo el plan estuviera en marcha -Creo que es una muy buena idea -el hecho de que él le hubiera dado un beso era un buen comienzo, no sabía cuál había sido la reacción de la bruja en aquel entonces así que no podía asegurar que había causado un desequilibro emocional o algo parecido, pero seguramente que llevar una serenata haría alguna de sus neuronas explotar.

-¡A su salud! -tomó el vaso que el elfo extendía hacia él, lo levantó en forma de saludo y agradecimiento y dio un sorbo grande. ¿Qué podrían hacer entonces él y Alba? ¿Los coros? ¿Tocar un instrumento? ¿Llevarle flores? -¿Cuál sería nuestro papel con Alba?, supongo que tú serás el que cante. Podríamos hacerte el coro o acompañarte con algún instrumento o haciendo armonías -río por lo bajo -¡Fuegos artificiales en su habitación! -eso podría ser algo peligroso al final de todo, pero al fin y al cabo era solamente una idea que podían descartar.

@@Cillian @@Alba Ryddleturn

El hechizo del castaño había fallado al impactar en una roca que Nicole había utilizado como escudo. Empuñó de nuevo su varita, levantando el brazo hasta la altura de su hombro y pronunció en tono moderado -Incárcerous -invocando tres cuerdas que salieron a toda velocidad de su varita, una por una: la primera impactando en las piernas de Nicole, envolviéndola y haciéndole perder el equilibro hasta que quedara tendida en el suelo; la segunda envolvería sus dedos, cubriendo completamente sus manos, haciendo que esta perdiera el control de su varita y que cayera al suelo; y, por último, la tercera cuerda gruesas envolvería parte de su rostro, cubriéndola la boca para que no pudiera soltar palabra alguna.

Así es como la bruja quedaría totalmente desvalida, sería muy difícil librarse de aquello pero para terminar, el mago soltó una sonrisa picarezca y las palabras salieron de su boca otra vez -¡EXPELLIARMUS! -esta vez su varita estaba en dirección al suelo, donde se encontraba la varita de su oponente. Inmediatamente chispas y rayos rojos salieron de la varita del mago, impactando sobre el arma de la bruja y expulsándola dos metros lejos de ella. Ahora se encontraba tendida en el suelo, atada por grandes y gruesas cuerdas, y desprotegida sin su varita. Solo faltaba ver cómo terminaría todo.

Deax Black Lestrange

El castaño dirigió su vista hasta su compañero Antoni. Si bien no tenían una gran relación como amigos, eran buenos compañeros de clases y de duelos, así como la última vez que habían estado juntos en una batalla. Sonrió y asintió al joven que estaba a su lado -Manos a la obra, amigo -respondió amistosamente.

Levantó su varita a la altura del hombro y pronunció en tono moderado, casi terminando en un grito -Sectumsempra -chispas verdes se formaron de la punta del arma de madera, formándose un rayo del mismo tono y con dirección a Nicole. El rayo iba dirigido justo a su pecho así, cuando impactara, provocaría heridas profundas que sangrarían profusamente hasta dejar su cuerpo sin vida.

Su sonrisa se volvió más amplia y malvada. Sus ojos soltaron un brillo de emoción y vitalidad, eso le causaba el participar en un duelo, fuera cual fuera. Su cuerpo cambió de dirección, así también su brazo que sostenía su varita, siempre listo y atento para lo que viniera a continuación.

No había sido hace mucho tiempo que el mago había completado sus estudios en la Academia, eso era algo que lo hacía sentir orgulloso. Ahora se dedicaba a cosas varias fuera de la institución de estudios, pero claro, siempre podía tener tiempo para un duelo y qué mejor que para ayudar en una de las clases que él había disfrutado con tanta emoción. Ya había recibido su carta, pero no entendía muy bien todo aquello. Lo que sí sabía era que en cada clase nueva, era escenario y arena nueva, así como circunstancia y jugadores nuevos, no le sorprendería que todo aquello estuviera planeado como un atentado contra los alumnos, había visto de cerca la muerte muchas veces ahí.

Dejó la cara de un lado y se fue, hasta llegar a su destino en el centro de una montaña. La vista era espectacular, los árboles bañados por el sol y un clamado claro en el centro de aquello. Sus ropas iban adecuadas al clima: una polera ligera, de color blanco, y un pantalón corto de color negro; los zapatos que vestían eran cómodos y hacían juego perfecto con el pantalón; ni en sus manos, ni ninguna otra parte de su cuerpo, habían detalles, adornos u otra cosa que pudiera ser utilizado en su contra.

Vio que ya estaban sus compañeros en la arena, para ambos equipos faltaba un integrante... no debían tardar, el duelo ya había comenzado y no creía que se fueran a perder aquello tan emocionante. Sacó su varita del bolsillo y sonrió a los presentes mientras estos lanzaban hechizos y se protegían de otros. Era agradable volver a ver en batalla, y participar de ella, a personas con las que había realizado antes esto: Jess y Antoni, con quienes se había graduado -Esto será divertido, ¡a por ello! -dijo por último y entró en el campo de batalla, sosteniendo fuertemente su varita entre sus dedos y con una sonrisa de malicia y emoción en su rostro.

Con Cillian y Alba.

Estaba a punto de responder al Ryddleturn cuando fue interrumpido, no era que tuviera una grandiosa idea… de hecho, no tenía ninguna para compartir, por lo que la interrupción llegó en el momento correcto. Sus palabras quedaron a medio salir cuando su compañera de trabajo se acercó y besó rápidamente su mejilla. El gesto de la bruja dibujó una leve sonrisa en el rostro del castaño –Alba… -fue lo único que respondió de momento.

Al instante que la bruja se dispuso a buscar un banco, el ojimiel la detuvo tomándola del brazo –Por favor, siempre eres invitada –se puso de pie para ofrecerle su lugar –Estábamos pasando el rato con Cillian –dijo poniéndola al tanto de la reunión mientras buscaba otro banco para tomar asiento –No siempre hay razón para tomar un par de copas, pero tampoco es malo hacerlo… y qué mejor que con buena compañía –la reunión no era precisamente para hacer planes malévolos contra Roxanne, sino también era una salida amistosa entre compañeros de trabajo. Siempre es bueno estrechar los lazos de amistad. En sus labios se formó de nuevo una sonrisa, esta vez algo pícara –Aunque… estábamos pensando en hacerle alguna broma a Roxanne –esperaba que después de lo que pasara esa noche, la travesura, broma o lo que fuera, no le costara su trabajo.

Pidió una bebida para la Ryddleturn y mientras se lo servían dio un sorbo a su bebida, para ese entonces su vaso ya se encontraba lleno hasta la mitad. Dirigió su mirada de nuevo al mago que tenía enfrente –Y bien, Cillian, respondiendo a tus respuestas –su tono de voz era sereno pero algo parecía no convencerle por completo de lo que decía –No estoy seguro de qué le molesta, pensaría que tú has de conocerla más… llevan más tiempo de ser compañeros y amigos –era bastante difícil pensar en algo que pudiera molestar a alguien cuando casi no le conocía.

–No puedo asegurarte que esté dormida y tampoco que esté en la Rambaldi –seguramente la bruja era una mujer de las que les gustaba preparar todo una noche antes para no tener ningún pendiente a la mañana siguiente, así empezaría bien el día –pero… ¿dónde más podría estar? –no tenía idea de por qué preguntaba aquello, no era que el castaño supiera cada movimiento de su jefa o lo tuviera agendado, ella también tenía una vida y podía hacer lo que quisiera, en el momento que quisiera –Supongo que es muy probable que se encuentre ahí…

@Cillian, @Alba Ryddleturn

Planes Macabros [?

Con Cillian.

Se había topado por los pasillos del ministerio a su antiguo maestro de Rol de la academia, Cillian. Nunca habían entablado una gran conversación, no habían tenido mucho en común o simplemente la ocasión no se había dado para que tuvieran una charla. Pero ahora, aquella tarde habían saludado e intercambiado una que otra palabra.

La conversación no se había hecho muy larga, pero la simpatía entre ambos los llevó a planear una que otra travesura para molestar a una persona en común, Roxanne, su jefa del departamento. Quizá sería una mala idea molestarla, pero también sería algo divertido y otro motivo para ganar una nueva amistad.

Aquella tarde salió del Ministerio rumbo al lugar donde habían quedado de tomar unas copas, Ranas Lunares, un pequeño bar donde podían conversar, beber y comer a gusto. El ojimiel entró de prisa al edificio, su reloj de nuevo lo acusaba de su tardanza. Raramente, toda la semana se había atrasado en sus labores y citas pendientes, esperaba que esta vez no fuera así.

Subió a la segunda planta y a lo lejos, en la barra, observó la figura del mago. Se acercó y tomó asiento en el banquillo de al lado, dejando su abrigo en el bando contiguo.

—Cillian, hola. Espero no haberte hecho esperar de más —saludó amistosamente con la mano y pidió una bebida al elfo que atendía la barrra.

@Cillian

Deax Black Lestrange

Caminó junto a la bruja después de pedir los helados. Comió un poco del suyo antes de escuchar sus palabras —Entonces debo disculparme por insultarte así —rió un poco por el comentario de Esmeralda y dio otro bocado al cremoso postre.

El Sol seguía brillando en lo alto, pero las nubes lo cubrían de vez en cuando dando una luz adecuada para que el castaño pudiera quitarse las gafas. Así lo hizo, se quitó las gafas y las colocó en su camisa. El refrescante viento soplaba y seguía haciendo danzar su cabello de un lado a otro, con una mano intentó acomodarlo para que no le cubriera la vista.

Posó su mirada sobre la chica que parecía estar muy interesada en los juegos mecánicos —De hecho no tengo ningún plan por el momento —volvió su mirada hasta las maquinas —pero a juzgar por tu mirada y gran interés en los juegos... —se detuvo al instante en que ella empezaba a hablar y, efectivamente, ella tenía una idea malvada para llevar a cabo.

—¿Qué es lo que planeas hacer? Con gusto me uno a ti —sacó su varita que estaba guardada en uno de sus bolsillos y miró detenidamente a su acompañante con una sonrisa pícara en su rostro.

@Esme2016

@@Adryanie hola. Los conocimientos que quiero adquirir son: Encantamientos y Maestría con Escobas. Gracias. ^^

Deax Black Lestrange

El Sol había disminuido un poco su intensidad, eso era muy bueno para su vista, aunque no había bajado lo suficiente como para poder quitarse las gafas antireflejo que cubrían sus ojos. A pesar de eso, sus ojos podían apreciarse a través del cristal, ya que ese no era oscuro en absoluto.

Su mirada se volvió un poco más suave después de que la joven bruja le ofrecía el helado. Asintió y sonrió con simpatía -Gracias por el gesto -se volvió hasta el señor que vendía los helados y ordeno uno de vainilla. Unos segundos después, tenía su postre helado en la mano -¿tú de qué ordenarás? -su voz era suave y amable.

El Sol había aumentado su intensidad de nuevo, el movimiento de las nubes jugaban con la luz del lugar. El viento seguía siendo cálido pero refrescante.

El mago no era de muchas palabras, pero sentía que con aquella chica le sería muy fácil entablar una conversación. Desvió la mirada para apreciar el parque mientras la bruja ordenaba su helado -¿Y bien, qué te gustaría hacer? -sus ojos se posaron en los de ella de nuevo -¿algún plan macabro o eres una chica buena? -sonrió un poco más amplio esta vez y comió un poco de su helado.

@Esme2016

Deax Black Lestrange

El viento seguía jugando con su cabello. Era cálido y sobre su piel era agradable, no era muy caliente sino más bien refrescante. Intentó acomodarlo un poco, pero le fue imposible... nunca lo iba a lograr, no sabía por qué seguía intentándolo.

Observó con amabilidad a la joven que tenía enfrente, sus ojos seguían serios. Era algo que no podía evitar, eran parte de él y le costaba cambiarlo. No sabía si la chica podía percibir la seriedad de su mirada a través de los vidrios poco oscuros. A pesar de ser casi traslúcidos y de color claro, cumplían con su deber: proteger de los rayos de sol. Sus ojos se podían ver a través del cristal, pero por lo intenso que se encontraba el Sol no sabía si el reflejo permitía que se vieran sus orbes de color miel.

Puso atención a la chica mientras observaba cómo acomodaba su cabello tras su oreja. Sonrió amablemente y respondió -No te preocupes por el atropello. Ya veré la forma de cobrármela -su tono de voz era alegre -¿Qué pensabas hacer? Podría acompañarte, si no te molesta... O podríamos ir a por un helado -. Terrminó sus palabras y se quedó a la espera de su respuesta; el carrito de los helados estaba cerca pero quizá la bruja tenía otras cosas que hacer y el atropello solo había servido para quitarle el tiempo. No sabía, de igual manera ya no podía retirar sus palabras.

@Esme2016

OFF: Lo siento por la tardanza.

Deax Black Lestrange

Seguía caminando sin dirección alguna después de haber recuperado y revivido su más hermoso recuerdo. En su pecho no había otra sensación que no fuera alivio y tranquilidad, aunque en su mano todavía se encontraba presionada su varita... por si acaso pasaba algo más, él estaría alerta y preparado.

El cielo estaba claro pero nuboso y gris. La luz no era muy fuerte ya que el Sol estaba oculto tras las nubes. El viento se hacía cada vez más fuerte y frío. Deax caminaba lentamente con las manos en los bolsillos, viendo por cada intersección por dónde cruzaba si había alguna señal de sus compañeros y profesores.

De pronto, un águila se presentó frente a él. Un ave grande y majestuosa. De colores maravillosos, se lograba entrever que había sido creada con magia ya que los hilos transparentes y brillantes que lo formaban se veían al observar el vuelo del animal. El águila retomó el vuelo y el castaño lo siguió con paso ligero, sabía que debía seguirla para encontrarse con las personas con las que había llegado a aquella extraña ciudad.

El vuelo del ave era rápido y elegante, y el ojimiel trataba de seguirlo lo más rápido que podía con su trotar. Por fin el animal se detuvo frente a una vieja escuela. El edificio estaba desgastado por el tiempo, descolorido y solitario... el mago se acercó a la puerta delantera dispuesto a entrar. Se detuvo por un momento ¿y si aquello era una trampa de sus profesores y debía enfrentarse a la muerte nuevamente? Alejó aquel pensamiento cuando se llenó de valor y, presionando con fuerza su varita, entró en el edificio.

Dentro estaba iluminado, todo estaba desordenado y sucio. No había amueblado ni muchas cosas qué ver. Estaba casi vació. En el fondo del salón principal estaban sus profesores, ambos con cara de pocos amigos y uno que otro compañero de clase que había podido volver ileso. Se recostó sobre una pared al entrar al salón -¡Gracias por el grato paseo! -dijo fríamente a sus profesores. Sus ojos eran serios y duros, sobre su rostro no había expresión alguna... de todas partes de él no había nada más que seriedad y frialdad.

Recostado sobre la pared escuchó las palabras de ambos magos al mando. Levantó la mirada cuando ellos terminaron y les cedían la palabra a los alumnos. Algunos de ellos lanzaron rápidamente sus preguntas, el ojimiel se quedó en silencio por unos minutos pensando sobre qué podría preguntar... al cabo de un tiempo pronunció con tono moderado -Esta pregunta es para ambos. En cada uno de los bandos hay rangos especiales... ¿cómo pueden optar para uno?, ¿cómo pueden subir de rango? -preguntó con curiosidad. Esperaba que después de decidirse por un bando, no se quedara solamente ahí. Quería poder optar a un rango especial y, por qué no, aumentar su nivel y subir su rango conforme pasara el tiempo. Sabía que si tenía un futuro en cualquier bando, adquiriría la experiencia suficiente para llegar a ser poderoso.

Corrió su mirada fría hasta posarla sobre los ojos serios de su profesora. Ella era una aurora. Según, ese era el bando de los buenos... de eso no estaba al 100% seguro; muchas veces los que intentan hacer el bien, lo logran... pero el daño y el mal es mucho mayor. Esperó unos segundos para poder hablar -¿Por qué el bando de los aurores sería la mejor opción?, ¿qué hay de atractivo en cazar y matar a los supuestos malvados, cuando la mayoría de veces ustedes son los malos? -sus palabras salieron como espinas puntiagudas e hirientes para cualquiera que fuera frágil de voluntad y de emociones débiles. Pero sabía que su profesora no débil, ni frágil y que unas simples palabras no le harían daño alguno.

Seguido de eso, volvió su rostro hasta su profesor. El mortífago estaba firme en su puesto, serio y con su mirada fría. Eso no le sorprendía al ojimiel, muchos de los mortífagos que había conocido eran igual: serios, irónicos y fríos. La mirada del castaño no disminuyó ni un poco su intensidad, aquel hombre no lo intimidaba ni un poco. Sus labios volvieron a formular palabras -Después de la caída del señor Tenebroso, todos sus seguidores siguieron su camino. No todos son tan malvados a cómo parecen. Todos siguen unidos por un fin, pero no es el mal... Ya que su líder ya no existe, cayó. Entonces, ¿qué mueve a los mortífagos? El poder y la avaricia, esas son buenas razones. Pero ¿cuál es el fin de estar del lado de los 'malos', si lo malvado en ustedes solo aflora cuando uno de los 'buenos' sale en su contra? -su voz se volvía más curiosa con cada palabra que decía -¿cuál es el fin de separarse en bandos... cuando todos terminan siendo lo mismo? Hasta parejas se crean conformadas de ambos bandos, las familias son de diferentes bandos... todos de alguna manera están unidos. ¿Por qué entonces? -ahora en su voz se lograba percibir confusión en lugar de curiosidad. Se lograba captar totalmente que no entendía por qué el tema de los bandos, cuando todos eran del mismo equipo. Hasta las clases se impartían juntos.

Al final de todo no había hecho dos preguntas, ni tres... varias, la mayoría para ambos profesores. Ahora sería paciente para esperar la respuesta a cada una de sus dudas.

Hola gente. Vengo a disculparme por no poder pasarme antes del simulacro antes de que terminara. Tuve complicados los últimos días con un examen que tuve ayer, pero no había podido estudiar y aparte tenía tarea que entregar que por flojo no la había terminado xDDD Espero que comprendan esto y que no pasarme en las últimas no afecte mi calificación T___T bueno, que anden bien. ^^ A ver qué sigue para terminar la clase.

Holahola vengo con una duda. Pensé que no te aparecerías por acá, Agatha ya que no habías comentado ni por este topic ni por el del simulacro. D: Pero bueno, esa no era mi duda. Lo que quería saber era con el fortificum. Este hechizo alza un muro, de cualquier material, para defender ya sea a una persona o a todo el grupo (según cómo se describa y el alcance que tenga), eso lo entiendo bien. Ahora lo que no comprendí es si dura tres turnos (¿tres post del que lo conjuró, tres post del equipo, o tres post en particular?) ¿o soporta solo tres hechizos (sea cuáles sean los hechizos en los post que mencionen donde impacta? Y también, ¿los efectos pueden traspasarlo o también los bloquea?

Deax Black Lestrange

Equipo Aqua

Estaba preparado para lo que fuera necesario en aquel encuentro. Después de los primeros intercambios de hechizos, sus rivales estaban heridas pero aún seguían de pie. Era de admirar, casi todos los hechizos habían sido lanzados a matar.

Su mirada estaba fija en ambas rivales, iba y venía de una a la otra. De pronto, un rayo le luz corrió con mucha velocidad hacia él. Estaba destinado a dejarlo ciego. Pronunció rápidamente, con su varita empuñada hacia el frente -¡PROTEGO! -más que alzar la voz, gritó aquel hechizo y rápidamente un escucho mágico apareció protegiéndole del encantamiento strellatus. El escucho mágico hacía absorbido en su totalidad aquel rayo de luz; eso lo dejó tranquilo, pudiendo soltar un pequeño suspiro. Debía estar más atento ahora.

Observó cómo hechizos iban y venían por todo el campo de batalla. El equipo contrario había sido completado por la ayuda de uno de sus profesores, por lo que estaba decidido a atacar. Antes de lanzar su hechizo, vio correr a su compañero Hound hacia el estadio y prepararse para atacar o defender, había llegado tarde, pero había llegado, era lo que contaba. Soltó una sonrisa simpática, con un toque malicioso a su amigo -¡Bienvenido!, ya era hora de que aparecieras... -dijo -ahora prepárate para el duelo -la sonrisa no se desvanecía aún. Alzó de nuevo su varita, se puso en posición de batalla y pronunció en voz alta -¡FUEGO MALDITO! -instantáneamente, una gran llamarada de fuego, en forma de tigre, salió corriendo a toda velocidad hacia a Sherrinford para quemarle los brazos y la mitad de todo el cuerpo. Seguramente con tales heridas necesitaría un par de episkey para poder curarse de las quemaduras que el tigre le había provocado.

Según la explicación que leí y lo que he entendido, me surgió una duda... Si solo se puede intercalar la segunda acción y no la primera de cada persona, ¿por qué, en tu explicación Elvis, se muestra que C intercala la primera acción, defendiéndose con un protego y luego intercala la segunda acción con un Avis? Ahí se está defendiendo de ambas acciones, y solo se puede de la segunda acción.. en ese tema me perdí un poco. D:

Con respecto al Fortificum, ¿cuánto tiempo dudará la muralla o defensa que ponga o debe quitarse con magia?

Esa misma duda de Jess tengo también, pero creo que sí funcionan los hechizos de sanación al equipo contrario, al fin y al cabo son hechizos xD pero ese sería solamente un episkey de emergencia, para evitar que se desangre, todavía le faltaría el segundo para estar totalmente curada, ¿no?

Deax Black Lestrange

Aquella mañana se había despertado muy temprano para leer algunos pergaminos con contenido de interés sobre sus clases. Bajó hasta la sala común, aún con su pantalón de dormir, a rayas, de color rojo y negro y una sudadera gris que le cubría el torso en ausencia de playera o camisa. Bajo su brazo derecho llevaba los pergaminos que leería y en su mano un ejemplar del profeta de aquella mañana. En su mano izquierda llevaba una taza que contenía café caliente. Iba leyendo los titulares del periódico sin concentrarse tanto en las palabras, solo ojeaba las letras y las imágenes; su mente estaba más concentrada en poder encontrar algo para poder comer o merendar.

Llegó hasta la sala y, como cosa rara, observó que estaba vacía. Seguramente todos estarían durmiendo por ser tan temprano y los madrugadores estarían ya en sus labores correspondientes. Se acercó hasta una mesa del fondo donde encontró un panecillo, lo tomó en su mano y se encaminó hasta el sillón.

Se sentó sobre el sofá a leer con tranquilidad. Era placentero estar un momento con calma, pero también se sentía muy solitario. No era que él fuera el mejor amigo de todos en aquella casa, pero sí estaba acostumbrado a que por lo menos una que otra persona le saludara al pasar. De igual manera, se sentía complacido con la tranquilidad que inundaba el lugar.

OFF

Recordé que te dije que hiciéramos un rol con travesuras, @, ya sea con Cye o con Ansaley.. ^^

Deax Black Lestrange

Le había ayudado a ponerse de pie a la chica, ella todavía se miraba algo confundida por el golpe. El ojimiel había cambiado de un momento a otro la sonrisa que forzaba, por un gesto confuso -¿un lugar más apropiado donde atar mis cordones? -preguntó algo inquieto -podrías tú también tener un poco más de cuidado -dijo en tono un poco más divertido, lo que lo llevó a sonreír de forma más natural y sincera.

El clima era ligeramente cálido, el Sol estaba en su punto más alto pero no quemaba como para hacer arder la piel. El viento refrescaba el parque y le daba una sensación más agradable al día. El soplar del mismo le hacía danzar su cabello de un lado a otro. Al estar la chica totalmente incorporada, pasó su mano libre por su despeinado cabello para evitar que cubriera una parte de sus gafas.

Clavó su mirada miel en los ojos de la bruja mientras se presentaba, tampoco había notado que seguía sosteniendo su mano hasta que ella finalizó su presentación. Al término de las palabras de la joven, habló con su tono de voz característico: calmado y un poco ligero, serio pero ésta vez nada frío -el placer ha sido mío, señorita.. Slytherin, dado que no fui yo quién recibió el golpe -bufó. Sus ojos eran sinceros y amables, y su voz simpática -Puedes tratarme de tú, si no te molesta. Mi nombre es Deax Black Lestrange -terminó, presionando son suavidad la mano de Esmeralda.

@Esme2016