Jump to content

alia2

Magos Expertos
  • Mensajes

    278
  • Ingresó

  • Última visita

Mensajes publicados por alia2

  1. Entonces llegó mi tía Rachel, muy contenta corrí hacia ella y la abracé, no la había dicho nada de mi graduación, pero aún así ella se había enterado y eso me ponía muy contenta. Esperaba que se lo hubiera dicho también a mi madre. Me felicitó y me entregó un prendedor rojo, me guiñó el ojo y me dijo que escondía alguna cosa. Decidí preguntárselo en cuanto llegáramos a casa.

     

    Después Ishaya, el abuelo de Aziid, se acercó a mí y me entregó una sirena de plata. La sostuve con orgullo en mis manos y le abracé, agradeciendo sus felicitaciones del mismo modo que había hecho con mi tía.

     

    Entonces ví como vi hermana Esme se acercaba a mí, pero no me miraba, miraba a la hermana de Anna, la que sostenía el bebé. Decidí darle un susto y me acerqué por detrás suyo.

     

    -¡Hermanosa!-la abracé por detrás-¿Has venido a verme no?

  2. 5ª PLANTA:HERIDOS Y RESURRECIÓN DE NEUTRALES

     

    Apenas unos días después de mi alta en el Hospital, volví entrar apresuradamente. De mi cuello manaba sangre abundante, y se estaba poniendo de un feo color negruzco. En mi cara habían comenzado a asomar de mi boca unos pequeños colmillos.

     

    Jadeante de dolor, me acerqué a la recepción:

     

    -Rápido, necesito un médico. Me ha mordido un vampiro, y mi Directora quiere el reporte de la curación !Rápido!- no me importaba ser exigente, lo único que sabía es que comenzó a dolerme la cabeza horrores, de mi cuello salía cada vez más sangre.

     

    Mientras perdía el conocimiento, pensé que ahora lo único peor que me podía pasar era que mi sanador fuese un vampiro, y me desplomé con un fuerte golpe sobre el suelo.

  3. Entonces vino otra chica, llamada Liza, a la que yo conocía. Aleera me dijo que debía tomar una poción, así lo hice y de inmediato me sentí mucho mejor. Me dijo también que me deseaba suerte en la próxima oportunidad.

     

    -Verás, Aleera, aprobé el examen, pero gracias de todos modos por el deseo.

     

    Me dio un papel que debía entregar en la recepción, me dijo que volviera si a los tres días me encontraba mal, y le agradecí su atención:

     

     

    -Muchas gracias por todo, han sido muy amables.

     

    Bajé a la recepción, entregué el papel que me daba el alta en el hospital y me marché

  4. Jessi estaba enfadada, lo percibí en su mirada, ahora fría como el hielo. Aiiden lo estaba menos pero aún así su enfado se hacía visible. Me mandó ir a San Mungo para curarme, y me dijo que no iba a seguir investigando. Eso me alegró, no podía seguir así, si no cambiaba pronto de actividad iba a perder los nervios de nuevo.

     

    -Muchísimas gracias Directora, agradezco enormemente su comprensión, le iba a pedir yo misma ir a San Mungo. No me negaría ni aún estando loca. No quiero acompañar a Aicitel, me parece que es mejor que no hablemos durante algún tiempo. Sin ofender, compañera- dije mirando a la chica-Iré a San Mungo, me curarán, traeré el reporte y seguiré con mi trabajo, no tendrán queja alguna de mi comportamiento. Haré todo lo posible por trabajar rápido y bien.

     

     

    Respiré hondo¡Por fin me alejaría de allí! La verdad es que estar tanto tiempo en el subsuelo me estaba afectando, tanto tiempo rodeada de aquel grupo de delincuentes est****os.

     

    -No sabe usted el favor que me hace al enviarme lejos de aquí, Directora. Ahora, con su permiso, me voy a San Mungo- dije, y salí de la oficina, tomé el ascensor y salí del Ministerio de Magia.

  5. La Directora nos perdonó, nos dijo un montón de cosas halagadoras acerca de nuestra inteligencia y todo eso, y dio por terminado el asunto. Aún así, seguía sin encontrarme bien, sabía que había hecho las cosas mal, podía controlarme y no lo había hecho, yo estaba por encima de eso. Otto me dijo que saliera a tomarme algo, y vi en sus ojos algo extraño, me miraba como si yo fuera una bruja sin experiencia, una novata.

     

    -Muchas gracias por disculparnos, Directora, prometo que no volverá a ocurrir. Sin embargo... Tal vez debería ir a echarme algo en el cuello, por lo menos lavarme la sangre. Si no le importa saldré un momento a descansar, no me encuentro con ánimos para seguir con esto, acaben ustedes con estos canallas.

     

    Dicho esto, esperé a que la Malfoy me diera su permiso para salir y vi como los delincuentes me miraban con cara de satisfacción.

  6. -Buenos días.- entre quejidos me acerqué a la recepción de la subdivisión de seres, en el Dpto. de Regulación y Control de Criaturas Mágicas. La tarde anterior me había mordido un vampiro, y debía ir a notificarlo rápidamente por si acaso ocurría algo y no estaba documentada- vengo a dejar un papel del registro de Vampiros.

     

    Ficha para el Registro de Vampiros

     

    Link a la Ficha Personal:Mi Ficha

    Nombre Completo: Alia D'Aubigne Marsbone Lóriyen

    Residencia: Castillo D'Aubigne y Mansión Marsbone

    Vampiro desde: 16 de Julio del 2013

    Mordida por: Aicitel Lëw Crouchs B.

    Dieta: Presas pequeñas, a veces animales grandes como vacas o animales muertos, aún no he especificado mucho.

    Cualidades Especiales: Colmillos pequeños, aún no desarrollados completamente debido a lo reciente de la mordedura

    Situación que causa el enojo/descontrol: De momento no he sufrido ninguna, pero estar de los nervios o muy irritada podría provocar un descontrol en mí.

    Aspecto Físico Caracterizador: Cabello rojo, al igual que ojos, cuando me transformo.

  7. -¡Episkey!- dije sacando la varita para curar las heridas que me había producido Ferra- Bueno, dije con un gemido- sé que hice mal, yo podía controlarme y Ferra no, quería controlarla para que no hiciera daño a nadie, pero la subestimé. Discúlpame Ferra, o Aicitel, quien quiera que seas ahora.

     

    Quería que quedara bien claro que lo que había hecho lo hice con buena intención, no quería montar un espectáculo.

     

    -Lo siento Directora, Jessi, tal vez lo mejor sea que dimita, pero ruego, y creo que mi compañera piensa lo mismo, otra oportunidad. No estoy segura de que me la deis, y si no es así, aceptaré las consecuencias de mi acto de descontrol.

     

    Sabía que había hecho un ridículo tremendo, además de enfadar a Aiiden y a Jessi. Había montado un espectáculo frente a los ladrones, haciéndoles ver nuestros puntos débiles.

     

    -De todas formas, me parece que no estoy capacitada para seguir con esta investigación. Clinton y su "pandilla" me estresan demasiado- dije mirando en dirección a aquel desgraciado, que aún se frotaba la herida en su cara con expresión de dolor-Tal vez fuera eso, que perdí mis nervios, debería estar encerrada en un psiquiátrico. Siento mi acción, lo juro, y odio haberlo hecho, pero creo que lamentarme arregle las cosas. ¿Podrían encargarme algo útil que hacer que no implique estar cerca de esos criminales? Es decir, si deciden conservarme

     

    Bajé la cabeza, avergonzada, me sentía como cuando mi madre de pequeña me castigaba y me daba una azotaina, solo que aún peor, esta vez había metido la pata hasta el fondo, y me merecía algo más. En esa posición aguardé a que decidieran que debía hacer.

  8. 5ª planta, con Aleera

     

    Una chica llamada Aleera me curó, sentí un poco de ardor en las heridas donde me había echado esencia de díctamo, pero se me pasó en seguida, tal y como la sanadora me dijo que pasaría.

     

    -Me gradué de la Academia hace tiempo, sólo que mi ceremonia de Graduación no se había celebrado aún. Cuando se celebró, me llamaron a hacer el examen de Aparición- ya me encontraba mejor, así que, levantándome, sacudí mis leggins del polvo que tenían y añadí- Muchas gracias por todo, me parece que ahora lo que necesito es una buena ducha- y esperé a que la chica me dijera que me podía ir.

  9. Quinta planta, resurrección de heridos y neutrales

     

    Me aparecí en medio de Londres, enfrente de un edificio que, a la vista de los muggles, tenía una tienda abandonada. Evitando que nadie me viera, entré en el lugar y esperé a que uno de los maniquíes me inspeccionara para darme acceso al lugar al que pretendía llegar, el Hospital San Mungo de Enfermedades y Heridas Mágicas. El motivo, tenía sangre saliendo de mi cabeza y heridas y magulladuras por todo el cuerpo, consecuencia de mi examen de Aparición.

     

    Entré a través de una puerta, y me dio la sensación de estar pasando por una cortina de agua, después de esto, fui caminando despacio hasta la recepción y me puse en la cola.

     

    Cuando llegó mi turno, le conté al recepcionista lo que me ocurría:

     

    -Bueno, al cursar mi examen de Aparición sufrí las heridas que ve, en brazos y piernas y en la cabeza. La examinadora me recomendó venir para que me curaran.

  10. Alia D'Aubigne- Fase de Diablesa

    Corrí detrás de Aicitel cuando la chica salió en dirección a la oficina de la Directora.Me agradeció mi apoyo y dijo que había tenido una buena idea. Entró en la habitación hecha una furia, y se transformó en Ferra, una vampiresa.

     

    En ese momento me arrepentí de explicarle mi idea a la joven. Fruncí el ceño y, temerariamente, la agarré de los hombros.

     

    -Mira, Aicitel, o Ferra, o quien seas. Tal vez te has tomado esto demasiado a pecho, y puedes morder a alguien de los "nuestros". Deja el rollo vampiresa para otro momento.

     

    Entonces me aparté rápidamente de ella y comencé mi transformación. Esta era menos notable que la de mi compañera, pero me hacía ser cruel y despiadada, aún así podía controlarme. Mis ojos se volvieron de un tono escarlata, con destellos dorados, como si fueran de fuego. Mi cabello castaño oscuro comenzó a brillar, para ser del mismo tono que mis ojos pero a la inversa, con tonos amarillos y naranjas y destellos rojos. Mis cejas se alargaron, dándome un ligero aire "malvado".

     

    Saqué mi varita para impedir que Ferra atacara a nadie y gruñí:

    -Que nadie que no pueda hacerse cargo de la situación se meta en esto, podría resultar herido.

  11. Hola! Bueno, no sé si tengo que esperar, pero ya que andan con cambios en mi ficha:

     

    Solicito conocimientos de Aritmancia y Artes Oscuras

     

    Cronología de Cargos:

     

    15 de Julio de 2013: Obtiene su Licencia de Aparición

     

    Familia 2:

     

    Marsbone Lóriyen

     

    Padres Adoptivos:

     

    Valent, familia D'Aubigne, Litah Black Lestrange, familia Marsbone Lóriyen.

     

    Raza: Vampiresa, mordida por Aicitel Lëw Crouchs B.

  12. Menuda locura. Todo había comenzado cuando se me ocurrió la loca idea de hacer mi examen de Aparición, pensando que contaba con tiempo para hacerlo. <<tonta>> me reprendí mentalmente. Después del trabajo me pasé por el Departamento de Transportes Mágicos para presentarme al examen de Aparición. Llevé todo, y, cuál fue mi sorpresa y mi cara de tonta cuando la secretaria me dijo que debía presentarme al examen en ese momento.

     

    Le iba a decir que no, que ni en sus mejores sueños, pero me lo guardé, y, al cabo de unos segundos, me mandó entrar en la famosa “Sala Cambiante”. Me coloqué a esperarla en un círculo rojo del tamaño de mis pies juntos, aproximadamente, y, sin comerlo ni beberlo, estaba en una roca en lo que parecía ser el Río Amazonas. Para colmo de males, el calor me sentaba como un tiro y comencé a estresarme. Me senté en la roca e hice un ejercicio de relajación, no quería perder el control y acabar loca perdida en medio de la jungla.

     

    En eso estaba cuando vi una roca más allá del río, la cual tenía un círculo rojo idéntico al que estaba en mi piedra. <<Allí tengo que ir>> pensé, y me apresuré a fijar en la mente el lugar seguro al que me tenía que trasportan por medio de la Aparición, una rama de la magia que nuca había probado, y de la cual sabía solo la teoría, las tres “D”: Destino Decisión y Desenvoltura. Sabía que sin aquellas tres importantes normas estaría perdida, podría aparecer despartida en cualquier parte del mundo, sin nadie para socorrerme, y moriría indudablemente.

     

    -Alia, no hagas tonterías, ni las pienses, eres fuerte, puedes hacer lo que te propongas-me dije en voz alta, y al parecer no debería haberlo hecho, puesto que, al terminar de decir la última palabra de mi frase para darme ánimos, una especie de avalancha compuesta por troncos de árboles, comenzó a caer sobre la otra orilla, y se fue extendiendo hacia mí cual cielo desplomándose sobre mi cabeza, como en los cómics de Astérix el Galo, que mi padre me leía cuando era pequeña.

     

    Entonces dejé de ver la piedra, y me puse muy nerviosa. Me parece que fue el momento en el que comencé a pensar que mi vida corría peligro de verdad, que no era un juego en el que, ganara o perdiera, iba a salir ilesa. Podía morir.

     

    Nunca había tenido miedo a la muerte, comprendía que era algo que debía pasar, el ciclo natural de las cosas, pero de pronto un temor injustificado comenzó a apoderarse de mi cuerpo, haciéndome olvidar lo que debía hacer. <<Debo serenarme>> me dije<<Nerviosa no conseguiré nada>>.

     

    Me puse de pie en la roca, haciendo que mis pies estuvieran en el centro del círculo rojo, y me concentré, intentando recordar las “Tres D”.

     

    Destino: Ese era fácil, la roca al otro lado del caudaloso río. Recordaba exactamente dónde estaba, a unos tres metros y medio a mi derecha, cruzando el río, que tenía unos ¿Veinte metros? de caudal. Si de algo podía jactarme era de tener muy buena memoria, así que me acordaba perfectamente del lugar exacto donde tenía que Aparecerme.

     

    Decisión: Debía hacerlo cuando yo quisiera, pero decidida, centrándome en mi objetivo. Esto tampoco era demasiado difícil, pues si algo decían de mí, es que era terca como una mula, que no paraba hasta lograr mi objetivo.

     

    Y juntando las dos anteriores salía: Desenvoltura, la última de las “D” la que me ayudaría llegar fácilmente al lugar que yo deseara ir.

     

    Tenía aquellas tres normas a mi disposición, ahora sólo necesitaba concentrarme:

     

    -Un, dos, tres ¡Ya!- me dije, y concentrándome, noté un tirón en el estómago, sensación de mareo y un golpe seco en la cabeza. Mareada, abrí los ojos y vi que me había Aparecido bien, en la roca, pero había caído mal y me había dado un golpe con ella. Me puse de pie, para esperar a que el examinador llegara, pero resbalé y quedé colgando de la roca, en una situación bastante cómica para el que la estuviera viendo como espectador, pero bastante dolora para mi, puesto que al resbalarme me había agarrado sin darme cuenta a un tronco grueso que había en el río, y mi otro hombro, el que se había agarrado a la roca, había triscado con un sonoro<< ¡Crack!>>.

     

    Dolorida, me senté en la roca, no quería correr más riesgos, y comencé a observar mis brazos, llenos de heridas ocasionadas por las ramas que caían a mi alrededor, mis piernas, con magulladuras por las rocas del fondo del río, que me habían hecho daño también, y mi cabeza, la cual emanaba un débil hilillo de sangre.

     

    Entonces me di cuenta de que la “avalancha maderera” no había terminado, y saqué mi varita. Con ella realicé el hechizo Protego, que me protegería de las ramas que aún no habían terminado de caer y seguían arañándome brazos y piernas.

     

    Así, con un hechizo Protego erigido sobre mi cabeza, esperé al examinador. Aguardaba la esperanza de que mi actuación hubiera estado bien, no quería volver a correr riesgos entrando otra vez en esa endiablada “Sala Cambiante”.

     

    Edito porque el rol me quedó cortito, y no quiero suspender.

  13. -Gracias-sonreí cuando la tía de Pink, Anna, me felicitó, dejó al niño en brazos de su hermana y se dispuso a hablar con otra persona. Un momento después llego Kritzai. Encantada, corrí hacia el muchacho y le di un abrazo, haciendo que los volantes de mi vestido se agitaran.

     

    -Primitivo!!!¿Qué tal? Oye, ¿No crees que deberíamos ir a celebrar esto?Ya sabes, mi graduación.¿Por qué no vamos a la heladería de tía Carol? Es un sitio magnífico para tomar helados, y ahora mismo me apetece bastante uno...

     

    El chico me entregó un paquete muy pequeño, en el cual había un collar con un diamante en forma de flecha en la punta. Sorprendida, abracé de nuevo al chico, esta vez casi lo tiré al suelo.

     

    -Kritzai, gracias, gracias, mil millones de gracias eres el mejor-el collar me encantó, así que me le puse, quedaba genial con mi vestido- ¿Entonces vamos?

     

     

    OFF:

     

    Gracias primitivo! de verdad eres genial, gracias por pasarte. Felicidades a todos los graduados, felicidades Aziid, Rose, Angel, Pink, Maia, bueno, si me olvido de alguien, ¡Todos!

     

  14. La secretaria que allí estaba me dio un papel que debía firmar un familiar responsable, así que fui directamente al callejón Diagón, al negocio de mi tía Carol, y le entregué el papel para que lo firmara. Ella así lo hizo y salí zumbando de nuevo hacia el Ministerio de Magia. Allí, tomé el ascensor para la sexta planta y entregué el pergamino a la secretaria.

     

     

    Consentimiento Informado:

     

    La aparición/desaparició n es un conjuro avanzado que permite al que lo dice desaparecer de un sitio y reaparecer en otro instantáneamente. Para lograrlo se debe pasar por un entrenamiento exhaustivo y poseer un gran dominio de las 3 D's: Destino, Determinación y Deliberación.

     

    Como todo hechizo realizado por un mago novato tiene su riesgo, puesto que si el mago no se concentra bien en las 3 D’s podrían ocurrirle terribles consecuencias que lo mandaría directo a San Mungo. Por este motivo el Departamento de Transportes Mágicos no se responsabiliza por las posibles lesiones con las que pueda quedar su hijo, ya que sólo depende de los examinados el dominio y la correcta realización del conjuro.

     

    Cabe destacar que el aprobar el examen de aparición es vital dentro de la vida de todo mago, es por este motivo que es tan importante que los alumnos se preparen bien para que rindan un buen examen.

     

    Yo, Caroline Ryddleturn D'Aubigne, tía de Alia D'Aubigne Marsbone Lóriyen, he leído y comprendido el presente informativo, asumo los riesgos que mi sobrina corre al realizar el examen de aparición y libro de toda responsabilidad al Departamento de Transportes Mágicos.

     

    Caroline Ryddleturn D'Aubigne

    Firma del responsable

     

    -Aquí tiene, pueden demorarse lo que necesiten, estos días puedo no estar disponible, ruego que se me avise por lechuza cuando tenga que entregar el mensaje.

  15. Yo estaba en mi cuarto, tirada en la cama, leyendo un libro con la música de mi Mp4 hechizado para funcionar con magia a tope, intentando a ratos sin éxito soportar el inmenso calor que hacía en la estancia, cuando una lechuza moteada entró en habitación. Al principio no me percaté de su presencia, pero después, cuando el animal comenzó a darme picotazos en un brazo para que me enterara de una buena vez que estaba allí, me le desenganché de mi adolorida extremidad, me quité los cascos, posé mi libro en la mesita de noche que se encontraba a mi derecha, y atendí al “atacante”.

     

    -Bueno bueno ¿Qué tienes, guapa?- Le dije a la lechuza cuando me extendió la pata para entregarme el mensaje que tenía amarrado a su pata derecha- A ver...-continué para abrir el pergamino y leerle- Así que me invitan a mi Ceremonia de Graduación ¡Es fantástico!¿No crees?- le dije a la lechuza.

     

    Esta me miró con sus imponentes ojos y comprendí que quería un pago. Me levanté, agarré mi varita y murmuré <<Accio chucherías lechuciles>>. Cuando estas vinieron hacia mí las agarré con la mano izquierda y se las extendí a la lechuza. Ésta, agradecida, me dio un picotazo cariñoso en la palma de la mano y emprendió el vuelo.

     

    Así que, en cuanto la lechuza echó a volar por la ventana, comencé a prepararme para el gran acontecimiento que se iba a desarrollar en el Gran Salón: ¡Mi Ceremonia de Graduación! Me sentía muy emocionada y quería causar la mejor impresión posible, así que puse muchísimo esmero en arreglarme para la ocasión, tan importante para mí.

     

    Tras un largo rato en el que estuve mirando todo mi vestuario, me decidí por un vestido “Palabra de Honor” plateado con los hilos del escote negros y dorados, unas sandalias plateadas “romanas” y un peinado que consistía en un elegante moño en lo alto de la cabeza con dos mechones, uno a cada lado, que cubrían mi desnudo cuello.

     

    Cuando estuve preparada, bajé al Gran Salón para comenzar con la ceremonia. Allí, el director Nikopronunció unas palabras, que no entendí, debido a mi nerviosismo, y dijo que iba a comenzar a llamarnos (a los estudiantes), para entregarnos nuestro diploma de Graduados.

     

    Yo fui la primera. Feliz, me acerqué a los directores y les dí un beso en la mejilla a cada uno, para después recoger mi diploma y unos lirios blancos que recibí con una pequeña reverencia al público.

     

    Entusiasmada, me senté en mi sitio a ver como mis compañeros Angel, Aziid, Maia, Dylan, Rose y Pink. No conocía ni a Maia ni a Pink, pero el resto habían sido mis compañeros de clase. Cuando Rose, que fue la última en ser galardonada, recogió su diploma, la aplaudí y dije:

     

    -Felicidades guapa, te lo mereces- ella era muy simpática y sin duda una de mis mejores amigas en la Academia, a pesar de estar en otra Casa.

     

    Después de eso, Tau, la otra directora, nos felicitó a los Tritones por haber ganado las Jornadas de Primavera y yo me acerqué a los recién graduados y les dí un pequeño abrazo a cada uno:

     

    -Felicidades chicos, ahora ¡Vamos a por todas! Estoy segura de que sobresaldréis en cualquiera de los dos bandos. Espero veros por el Ministerio- les dije, en verdad estaba muy contenta de haberme graduado y estaba segura de que los otros también.

     

    Dicho esto, me acerqué a saludar a Anna, que estaba con su hija Pink, otra de las galardonadas. Esperaba que mi tía Carol llegara pronto, me había prometido que me iba a venir a ver.

    • Me gusta 1
  16. Me crucé con Jessi a la salida de la oficina de la Directora, le hice un gesto con la cabeza y seguí andando. Al minuto, cuando estaba a punto de alcanzar aAici,unos gritos salieron de la pared reforzada. Seguramente estarían torturando al más vulnerable de los sujetos, un tal John Weasley, que había sido Director de la Oficina de Investigaciones alternas. No se entendía mucho de lo que decía, balbuceaba sin parar cosas sin sentido, incomprensibles para oírlas a través de una pared ligeramente insonorizada.

     

    El hombre calló y al cabo de dos minutosJoa salió de la Oficina, para dirigirse a la Sala de Cerebros. Seguramente había averiguado donde el ladrón había escondido el cerebro robado.

     

    Me recargué en la pared y esperé a que mi compañera se tranquilizara para decirle algo.

     

    -Aicitel¿Te encuentras mejor? Mira, no quiero ser inoportuna, o molestarte ni nada de eso, pero creo que tienes mucho "potencial" y creo que juntas podemos acabar con todo el rollo de los ladrones. A mi me irrita el Rustikov ese particularmente, podríamos pensar un plan de ¿Intimidación?La verdad es que parece que no nos toman mucho en serio.

    • Me gusta 1
  17. Salía del trabajo, cuando decidí aprovechar el tiempo que tenía para dejar una solicitud de examen en el Dpto. de Transportes Mágicos, concretamente para el centro examinador de aparición. Me arreglé mágicamente el cabello, ligeramente enredado por el fuerte viento que soplaba aquel día, y me dirigí al departamento.

     

    Justo enfrente de la salida del elevador mágico, que me llevó desde los subsuelos del Ministerio de Magia hasta la sexta planta, se encontraba la recepción. Allí fue adonde me acerqué para solicitar una plaza en los exámenes.

     

    Con paso firme, llegué a la mesa y pregunté a la allí presente secretaria:

     

    -Hola, buenos días¿Podría decirme qué debo hacer para poder realizar el examen de Aparición?Muchas gracias

  18. EL desesperante de Rustikov volvió a retarme, se notaba que disfrutaba haciéndolo, sus ojos denotaban placer <<Pero eso acabará pronto>> pensé. Creía que iba a usar en el la Legeremancia, que ingenuo. Sabía que la gente como él tenía barreras fuertes en la mente, que impedirían la entrada de "extraños". Me sacaba de quicio que esa gente pudiera estar siendo tan irónica cuando les estábamos amenazando de muerte, o cosas peores.

     

    -Directora, tengo que calmarme, o perderé el juicio. ¿Puedo inyectarle veneno con veritaserum o me lo inyecto a mi misma?. Mire, me parece que saldré al Atrio un momento para relajarme.

     

    Dije todo eso muy segura de mi misma, pero antes, saqué un pequeño látigo de mi mochila y golpeé con él a Clinton, dejándole una fea marca alargada en medio de la cara.

     

    -Eso para que aprendas a respetarme, traidor- le dije, y le escupí en la herida sangrante.

     

    Dicho esto,me giré, dejando mi cabelo al aire y salí resueltamente de la oficina.

  19. Aicitel salió de la estancia con el beneplácito de Aiiden, y apenas unos instantes después, mi jefa Jessi la siguió.Después de eso, la Directora continuó explicandoles a los ladrones las ''ventajas'' que les supondría hablar, y los dolores que soportarían si no lo hacían. Dijo también que tenían apenas cinco horas para contar todo lo que sabían o el hermano de Steve, el atractivo Anton, moriría entre los más terribles tormentos.

     

    -Directora¿Podría "charlar" con Anton para comprobar si es inocente?-quería saber si el joven era culpable o no, eso influiría en mi forma de tratarle. Si era culpable le torturaría con mucho mas agrado que si ni lo fuera. Podría ayudarle a no sufrir si no estaba relacionado con los hechos. Si algo definía de verdad mi carácter era que disfrutaba haciendo sufrir a los que me causaban problemas,pero me remordería la conciencia de tener que torturar a un inocente.

  20. Después de mi fugaz intervención, Anton, el atractivo hermano de Sede, declaró su inocencia frente a todos nosotros. Dijo que, salvo su parentesco con su hermano, ni tenía ninguna relación con los hechos que investigábamos en ese momento. Una parte de mí, seguramente la menos dotada de sentido común, deseaba creerle, y perdonarle. Pero la otra parte de mi mente se impuso, obligándome a volver al mundo real . Si bien era cierto que desde que Lys me había dejado de visitar ansiaba una persona del sexo masculino que estuviera conmigo, eso días me encontraba mal, con situaciones bastante extrañas que me sacaban la cabeza de mis casillas.

     

    Entonces Aicitel, una de las Inefables con las que mejor me llevaba, pidió permiso parasalir un momento, ya que se encontraba mal. Cuando pasó a mi lado me incliné hacia ella y susurré:

     

    -Ánimo Aici, enseguida terminaremos con esto. Debemos ser fuertes-y sonreí a la chica para animar la.

     

     

    -

  21. Joa me contestó, diciéndome que tal vez debiéramos emplear la tortura psicológica con aquellos individuos, que parecían masoquistas y apreciaban el dolor que nuestras "torturas" les causaban. Entonces entró un tercer hombre, algo más joven que el resto y al parecer más débil.

     

    Escuché a Aiiden hablar con él sobre su hermano, al parecer ése era su punto débil. Según lo que entendí el joven había sido inefable,quizás había sido él el que proporcionara los métodos para evadir las medidas de seguridad. Después les dijo a los otros dos que les mataríamos sin pestañear en cuanto no hicieran falta.

     

    Gruñí a Rustikov con una sonrisa de superioridad en mi cara, al parecer no sabía con quien se estaba metiendo.

     

    -Ves, asqueroso ladrón-escupí las palabras-Sólo esperamos, o bueno, al menos yo espero, la orden para matarte, ya has oído a la Directora, no haces falta vivo, te mataremos cuando dejes de ser necesario.

     

    Esperaba que al dichoso ladrón le hubiera quedado claro lo que la Malfoy había dicho, para interrogar sólo hacía falta uno, y seguramente ese uno sería el recién llegado, el que parecía más débil, los demás morirían entre terribles dolores

  22. Sonreí al escuchar cómo aquel hombre me retaba, y, haciendo un mohín de desprecio, le contesté:

     

    -Verás, yo sigo órdenes, mi Jefa me ordenará cuando te tengo que matar, o lo que deba hacer con tu miserable vida de traidor-dicho esto, continué pensando un plan hasta que el otro dijo que si teníamos miedo a matarle, y el primero le corroboró. Decían que sabían cosas de Aiiden, pero a mí me daba igual, me enfrentaría a la verdad, había hecho un Juramento y sería leal a él, aunque me costase la vida.

     

     

    Harta, salté delante de él y lo arreé una bofetada-¡Mira! Estoy harta de todo esto, usaré la Legeremancia y luego te torturaré y finalmente haré que los dementores te roben el alma y luego te mataré¿Entiendes?Haré lo que sea por acabar con esto-solté de golpe, y de inmediato me retiré avergonzada mirando a mi Directora.

     

    Entonces oí a Joa, una muchacha que solo había hecho acto de presencia en una ocasión decir:

     

    -Tenemos que hacer algo- y percibí que ese"algo" significaba hacerlos hablar más allá de las torturas.Y susurrando, le dije- Verás, tratamos de hacer precisamente eso, pero no es que dé mucho resultado¿Se te ocurre algo?- Esperaba que todos colaboraran y que algunos dijeran que no estábamos haciendo lo suficiente me sacaba de quicio, aunque sabía que era verdad.

  23. Salí del agua y seguí a Ishaya hasta la Sala Común, esta vez no podía usar el mismo camino que la vez anterior así que entré en la Academia otra vez y entré por el recorrido habitual, en las cocinas. Allí dije la contraseña al Rey Tritón y entré.

     

    En el lugar estaba el Jefe de Casa con la alumna nueva, al parecer, este le estaba formulando unas preguntas. Ella contestó a una de ellas diciendo que había sido Autista, eso me sorprendió y decidí presentarme:

     

     

    -Hola, encantada de conocerte, soy Alia ¿Cómo te llamas?

  24. Pido edición:

     

     

    Historia:

     

    Nací hija de una pareja de magos "Sangre Limpia" con una inmensa fortuna que vivía en Trasmoz, un pequeño pueblo de España donde las malvadas brujas se reúnen en Aquelarres.Allí conocí a Lysander, un niño muggle con el que no me dejaban estar debido a su estatus de sangre.Un día, jugando con mi padre cerca de un viejo pozo, me caí y unas brujas me capturaron. Allí hacían experimentos conmigo, y me trataban fatal, así se forjó mi mal carácter.En ese lugar estaba también Lysander, al que yo llamaba Lys, quien se convirtió en mi mejor amigo.Tras convertirme en diablesa por un experimento fallido, me devolvieron de nuevo a mis padres, los cuales me repudiaron porque pensaron que aquellos seres me habían convertido en uno de ellos y estuve viajando de orfanato en orfanato junto a la única bruja del clan que me trataba bien, hasta llegar al último, en el que me quedé definitivamente porque ya era mayor y mis padres pagaron una cuantiosa suma para que me quedara allí sin que les molestara. Después no supe nada de ellos.

     

    Allí me llegó mi carta de Hogwarts. Fui a Gryffindor,recuerdo el día de la selección, que nerviosa estaba. Al empezar mi segundo año jugué Quidditch como buscadora,con una Saeta de Fuego que compré gracias al premio del Profeta.Con 15 años, mientras estaba en el orfanato leyendo el periódico, descubrí que unos agentes de la orden del fénix habían asesinado a mis padres, o que me impulsó hacia el lado tenebroso por motivos de venganza. Fui prefecta y premio anual porque sacaba muy buenas notas.También saqué 10 E en los Éxtasis y cuando acabé Hogwarts, me adoptó Valent y me integró a la familia D'Aubigne.Me uní a la mini-marca tras acabar mi clase de generales, que por cierto, tuve que repetir 2 veces, lo que me frustró mucho, ya que acostumbraba a hacer las cosas a la primera y bien. Tras terminar mis clases de rol y duelo básicos, realicé las de Avanzados y por último la de ByP, en la que fue mi profesora la actual Directora de mi dpto. en el MM: Aiiden Malfoy. Esta profesora fue la que definitivamente me impulsó hacia el lado oscuro.

     

    Y gracias a unirme a la mini-marca mortífaga fue que me uní de nuevo con Lys. Ocurrió un día, en el cual mi otra madre adoptiva, Litah Black, nos invitó a los aspirantes a mortífagos a tomar algo en la Culebrilla casi Decapitada. Yo me dirigía a los servicios y vi a un joven muy guapo, que me preguntó mi nombre, y resultó ser mi mejor amigo de la infancia, al que las brujas habían dado poderes mágicos. Ahora somos novios y él me visita clandestinamente en el castillo de la familia D'Aubigne. Fue él también el que me impulsó a ser inefable, profesión que desde siempre me gustó.

     

     

    Cronología de cargos:

     

    Febrero de 2013: Ingresa a la Academia de Magia y Hechicería.

    Mayo de 2013: Comienza a trabajar de Aprendiz de Inefable.

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.