Radamantys

Y una fase mas habia concluido , eso lo supo el demonio cuando el piso en el cual se encontraba de pie se habia movido bruscamente y de inmediato una sensacion de vacio se extendio en su estomago, tal parecia que estaba cayendo a un gran abismo, el demonio simplemente se aferro a la varita que estaba en su mano derecha.

Cuando encontro el piso bajo sus pies se dio cuenta que se encontraba una vez mas frente a lso organizadores, una suave sonrisa se marco en sus labios al escuchar las palabras de los magos, parecia que habia avanzado, aquello era sumamente agradable, los esfuerzos por seguir en la lucha estaban dando sus resultados.

En ese momento el demonio se percato que la mano derecha que habia sido destruida en el duelo con Juve ahora se encontraba bien, aquello queria decir que estaba listo para seguir con aquel torneo, no se daria por vencido ya que estaba cerca y sabia que los rivales que seguian serian de lo mas dificiles pero no tenia miedo.

Rada giro y pudo ver de quienes se trataba, no habia duda que eran rivales dificiles, seria bastante dificil de eso no habia duda,un largo suspiro escapo del pecho del demonio mientras se aferraba su varita y centraba su atencion en los organizadores que continuaban su sermon, Rada asintio mientras esperaba paciente.

No paso mucho para que una vez mas el suelo se moviera con brusquedad, aquellos temblores parecian ser el unico metodo que los brujos tenian para moverlos de un lugar a otro, poco importaba aquello pues el final estaba cerca y daba igual , lo importante era seguir adelante y conseguir una nueva victoria para llegar mas lejos.

Cuando la sacudida se detuvo Radamantys se dio cuenta que se encontraba en la mitad del recinto que antes estaban, este se habia quedado dividido por la magia que se habia ejercido sobre este y sin duda en la otra mitad estarian los otros dos duelistas batiendose a duelo, Radamantys se pregunto quien seria su rival.

Despues de eso el demonio se movio emepzo a alejarse del centro y se situo a 9 metros de todo objeto y de su rival que aun no distinguia, habia varios objetos esparcidos pro el lugar, antiguas mesas de pesada madera de buen tamaño, algunas grandes sillas pesadas de rustico metal y algunos trozos de madera esparcidos por el sitio.

Radamantys no presto mucha atencion a los detalles se centro en la figura que tenia delante , la distancia que habia marcado con ella seria manetnida, si su rival se acercaba el se alejaria dejando siempre los 9 metros iniciales, depsues de aquello y con un largo suspiro Radamantys apunto directo a su rival y susurro:

- Celerus Anular Celerus-

Y de inmediato la varita de su contrincante vibro ante la potencia del hechizo recibido ahora no podria usar mas aquel ataque en lo que restaba del combate e inmediatamente después el demonio susurro:

-Seneca-

La intencion de aquello eras que la garganta de su rival se resecara y como consecuncia los hechizos verbales no salieran, el duelo habia empezado, aquella semifinal estaba en curso y ahora solo podria ser detenida con la victoria de alguno de los dos duelistas aunque estaba claro que para ninguno de lso dos los seria.

El ambiente se encontraba tetrico, estaba cargado de tension, en cualquier momento y ante cualquier mal movimiento el duelo se decidiría en favor de alguno de ellos, no habia lapso para errores , despues de aquello al final, verian quien llegaba hasta ella y quien se batiría por el tercer y cuarto puesto, todo estaba cerca.

Y Radamantys sonrió al ver como Juv trataba de acercarse hasta donde él estaba, cuando desde un inicio el demonio dejo claro que el mantendría los 9 metros, que si la rival se acercaba el retrocedería, pero ya estaba por acabar, ya poco importaba y realmente poco deseaba enfrascarse en una polémica referente a si lo alcanzaban o no.

Así que después de ver salir el Fuego purpura Radamantys agito la varita con suavidad mientras de sus labios salía su defensa:

-Detritus-

De inmediato una fina capa de niebla envolvió el cuerpo de Radamantys defendiéndole del Fuego purpura enviad por Juv, así que nada había pasado Radamantys estaba totalmente ileso, al mismo tiempo que noto como La Malfoy repetía el mismo hechizo en su contra, de nada le serviría pues ya estaba bajo la protección del detritus, que le defendió del segundo fuego purpura.

Aquello había acabado ya, Radamantys había ido poco a poco limitando a Juv, para poder acabarla de la manera en que él deseaba, los grandes combates se finiquitan de una manera digna y aquel combate merecía la pena, no hubiera sido agradable verla morir desangrada por un sectusempra o calcinada por un Fuego maldito.

Debía morir con la maldición más temida en el mundo mágico, con aquella maldición que no se podía detener, aquella maldición que solo Harry Potter había sobrevivido y ahora ni siquiera Juv podría salvarse de ella, así que el Slytherin elevo al varita hasta el pecho de la bruja y con un brillo demoniaco en los ojos susurro:

-Avada Kedavra-

De inmediato la varita de Radamantys vibro ante la potencia del hechizo, el ambiente se tiño de verde mientras de la varita del demonio salía a toda velocidad aquel rayo verde que llevaba por destino el pecho de Juv, para arrebatarle la vida y acabar con aquello de una vez por todas, concediendo a Rada la victoria.

No había escapatoria para la bruja, no tenía ningún hechizo no verbal que pudiera detener el avada kedavra y le había arrebatado el zancadilla que solían usar para evadirlo, aunque a Radamantys nunca le había terminado de cuadrar ya que cuando se lo aplicas a alguien se va de bruces y bueno en pocas palabras a Rada no le gustaba.

Mas en esta ocasión no había salvación , Radamantys había ganado, lo había logrado y seguiría adelante con aquel torneo, esperando llegar a la final y alzarse con el campeonato, sabía que mejores magos estarían esperando rival , pero Radamantys no era un mal duelista, así que no temía y estaba seguro que podría con lo que viniera.

El zumbido de muerte se escuchaba claramente, de un momento a otro el Rayo impactaría y la muerte se haría presente para llevarse de la contienda a Juv, al fin en todo el combate Radamantys bajo la varita y sus ojos negros e centraron en su rival, deseaba ver el momento en que cayera muerta, deseaba disfrutar su victoria.

El demonio pensaba en todo el camino que había recorrido para llegar hasta ahí, no había encontrado rivales fáciles ya que todos merecían el honor del respeto de un rival de duelo, slytherin daba las gracias a cada uno de ellos pues de cada duelo se aprende algo nuevo y todos los anteriores no habían sido la excepción.

Y así Radamantys dejaba en claro porque era considera el más extermina aurores, el en soledad se había dedicado a seguir matando odefos, no se había echado atrás y había dejado claro que sus capacidades eran buenas y el reconocimiento de la marca descansaba en esa condecoración otorgada por su bando y se los agradecía sinceramente.

Ya no quedaba mucho por hacer en ese lugar, Radamantys echo una ojeada a la entrada del salón, la oscuridad se había hecho consistente, la única luz que se veía era la luz verde del rayo que estaba ´por impactar en Juv, seguramente era muy noche, Radamantys esperaba tener el tiempo suficiente para curar su muñeca.

Rada desvió los ojos hasta la podrida mano, de verdad se veía fea, el aspecto era deplorable, pero bien había valido la pena, pues había conseguido lo que buscaba en ese momento y era ganar, una vez más quedaba claro que los sacrificios son necesarios para poder conseguir un fin, pensar y actuar con calma ya que de palabras no vive el hombre y al final las mismas se las lleva el viento, el ego se derrumba y el alarde se olvida.

Aquel duelo al fin estaba llegando a su fin. la estrategia que Radamantys había conjeturado en su mente estaba dando sus resultados, ahora solo se trataba de hacer un par de movimientos más, como jalar los hilos de una marioneta para que esta adoptara la posición final, para que el acto terminara trayendo consigo la victoria para Slytherin.

Una vez más el mago sintió como era afectado por el absorvere, la muñeca que tenía sana se partió extendiendo por el brazo del dueño un agudo dolor, Radamantys simplemente sonrió ya que aquello no sería suficiente para detenerlo, era tan fácil curarse en ese momento y al ser un efecto no necesitaría la puntería que hubiese sido necesaria para un rayo.

-Episkey-

Pensó Radamantys y con aquello la muñeca anteriormente dañada se curó, si bien había perdido la de la mano derecha no podría permitirse bajo ningún aspecto perder la segunda ya que lo que usaría para acabar con el duelo era algo que necesitaba la puntería, así que por ese motivo Radamantys había actuado de inmediato curando la muñeca que aun necesitaba.

La sensación de alivio que recorrió la muñeca fue de lo más revitalizante, pues al menos el demonio sabía que no estaba totalmente acabado, de hecho ya todo terminaría dentro de poco ya los movimientos estaban medidos y previstos, con aquello Radamantys estaba al máximo seguro de su victoria solo había que decidir el orden.

Así que tomando su decisión final y con aquello se jugaba todo el duelo que se había desarrollado el demonio apunto con firmeza a Juv y susurro pro tercera y última vez el hechizo:

-Anular Zancadilla-

Y una vez más la varita de Juv vibro al recibir el hechizo de Radamantys, el Mortifago había acabado, ahora la bruja no podría ocupar ese hechizo en lo que restaba del duelo, ahora solo restaba esperar un poco más y terminar con aquel combate, que se había prolongado más de lo que el habría deseado más al final todo estaba casi como el quería.

Un largo suspiro escapo del pecho del demonio mientras estaba atento a cualquier movimiento que la bruja pudiera hacer, la cuestión ahora era neutralizar lo que viniera y estaba seguro que podría, aun poseía casi todo su arsenal de hechizos potentes pues se había dedicado a mermar a su ponente hasta el grado de dejarla casi sin posibilidades.

Y al parecer de Radamantys lo había logrado, no había cometido un solo error en el encuentro a pesar de aquel sacrificio de la muñeca, pues el controlar ese hechizo adicional no desperdiciado en la cura había sido lo que marco la batuta del combate haciendo que Rada pudiera seguir adelante con la estrategia deseada.

Ya para ese momento no le importaba el haber perdido la mano derecha, ni lo que hubiera pasado antes simplemente estaba concentrado en la estocada final, Radamantys era de aquellos magos que no solía alardear de un poder que sabía que tenía, él lo demostraba en el momento que era necesario y correcto.

Un torneo de duelos era la mejor manera de hacerlo y si avanzaba tendría que poner más empeño , no confiarse y seguir adelante con aquel torneo, sabía que si lograba derrotar a Juv, los rivales que vendrían adelante serian más fuertes, no había espacio para fallos, no había una segunda oportunidad, no en esta fase en que se encontraban.

Radamantys contemplaba ya un poco cansado seguía separado de la bruja por 9 metros, no había nada entre ellos, nada que pudiera ser utilizada para el rival, para que le complicara las cosas, ahora solo estaban midiéndose en base a la capacidad del manejo de sus hechizos y la creación de sus estrategias, como a gusto de Rada debía ser.

Los negros oso del demonio aun seguían brillando teñidos en rojo, la adrenalina aun recorría el cuerpo de slytherin, al final lo que le gustaba de aquellos torneos es que todos los mortifagos sin importar el rango, se podían medir en igualdad de condiciones y era ese el momento en que se demostraban las verdaderas habilidades.

Poco importaba en esos momentos el rango de cada duelista del torneo, pues todos usaban lo mismo y era entonces como los grandes nombres se alzaban, como se mostraba que a veces un rango no hace al duelista, como quedaba claro que los nombres se desmoronan y se pierden en el olvido, en esos torneos solo los mejores ganaban.

Radamantys contemplo como la muñeca de Juv era rota. El sonido que hasta sus oídos llego le había indicado que el hechizo había producido el efecto deseado, ahora el dolor se extendería desde la muñeca hasta sus alrededores haciendo claramente que la bruja no pudiera apuntar debido al mal estado de la extremidad.

Mas no paso ni un minuto cuando la Malfoy se aplicó la necesaria curación para aquel hechizo que Radamantys había hecho llegar hasta ella, ahora sin duda la sensación de calor que producía el episkey aplicado había recorrido toda la zona afectada dejando el hueso sano y salvo tal cual estaba antes del ataque.

Ahora el demonio tenía escasos segundos para aplicar su siguiente hechizo antes de que Juv, realizara su segundo ataque por lo que sin demora y haciendo una floritura con la varita el demonio susurro:

-Anular Seneca-

Con ese movimiento la varita de Juv vibro al recibir el efecto de aquel hechizo, con aquello Radamantys se aseguraba de que la bruja no pudiera conjurar aquel ataque en o que restaba del combate y era algo bastante útil ya que ese hechizo podía provocar grandes problemas y heridas limitando a meras curas hasta que se recuperaba el habla.

Después de eso Radamantys contemplo como la bruja volvía a aplicar un episkey, esta vez para curar su cuerpo de las quemaduras hechas por el Fuego maldito de Slytherin, mas aquello aun no acaba y había que hacer el último movimiento de ese turno, irse acercando poco a poco a lo que sería la conclusión del combate.

Radamantys sin más apunto por segunda vez a la bruja y con claridad susurro:

-Seneca-

Ahora y por segunda ocasión la garganta de Juv empezaría a resecarse como consecuencia del mismo ataque que él le había anulado, dejándola así con la molestia de no poder hablar por un buen tiempo que Rada esperaba fuera suficiente para poder acabar con aquel duelo, solo esperaba que el tiempo no se agotara antes de aquello.

Al fin después de su último ataque el Nigromante bajo la varita un poco y se quedó contemplando el escenario que tenía frente a él, si bien había perdido por completo la muñeca derecha, aun había logrado realizar la magia que tanto el gustaba, para el eso era un duelo, un intercambio de hechizos y la mejor estrategia.

No le gustaba aquellos enfrentamientos en los que los rivales solían buscar algún pretexto para inclinar la balanza a su favor, el noble arte del duelo implicaba a su parecer, la mejor estrategia , aun y con los riesgos que conllevara, todo radicaba en la mejor manera de usar los hechizos que se poseían y Radamantys estaba sacando provecho de estos.

Rada recordaba algunos de los magos que le habían instruido en el campo de batalla, grandes y loables duelistas, con su estilo propio, más las bases firmes las habían dejado de ahí para adelante que cada quien elegía su mejor estilo de duelo y así era como se hacía crecer un nombre, así era como el de Radamantys lo había hecho.

Jamás había buscado reconocimiento por hechos que no fueran suyos, desde siempre había salido al campo de batalla, aun y con inferioridad numérica, aun y con diferencia de rangos, el siempre había estado al pie del cañón listo para morir por los suyos si eso era necesario, si una y otra vez debía irse a revivir al hospital mágico.

Y por supuesto dispuesto a conquistar la gloria de considerarse un buen duelista, cosa que sin duda alguna había logrado, estaba seguro de poseer una de las mejores técnicas para aquello y esperaba que el camino siguiera frente a el para seguir avanzando y seguir labrando su fama y reputación a la par de sus habilidades.

La mirada del demonio estaba fija en el contra ataque de su rival, no pretendía perder un solo detalle, ya que los errores cuestan ye l estaba dispuesto a detectar el más mínimo de parte de Juv y si no los tenía el mismo haría que los cometiera pero lo que era seguro es que el no perdería, el ganaría y seguiría avanzando en el torneo.

Y Radamantys decidió que dejaría que su muñeca se pudriera, pensaba que podría prescindir de ella, la estrategia que tenía en mente le aseguraba la victoria, aquello al fin había tomado forma ye l demonio se había mantenido firme, había soportado el dolor que le produjera la pérdida de su extremidad más como el mismo lo había dicho todo había sido como el ajedrez.

Después de ver a Juve tratar de pronunciar algún hechizo inexistente el demonio se adelantó a lo que sería su segundo movimiento y antes que ella lo lograr Radamantys susurro con deleite:

-Absorvere-

La muñeca de la mano con que Juve sostenía la varita se partió estrepitosamente, ahora ella sufriría el dolor que el mismo había sentido cuando ella le quebrara su muñeca y ahora peor que lo había dejado sin esta, no había manera más justa que pagarle con la misma moneda la bruja que se había encargado de su extremidad y así evitaría que apuntara con precisión.

En ese momento Radamantys fue lanzado al piso por una fuerza mágica, sin duda alguna se trataba de un zancadilla, la fuerza mágica lo mando al suelo, mas Radamantys hábilmente giro un poco haciendo que fuera su hombro derecho el que recibiera el golpe, de todos modos ya no importaba pues esa mano no le servía ya.

Después de aquello el demonio se giró acomodándose en el piso y con una sonrisa en los labios apunto a Juve al tiempo que susurraba con voz clara y potente:

-Fuego Maldito-

De la punta de su varita salió un chorro de aquel fuego el calor se extendió por la mano del slytherin, poco a poco la forma de fuego fue convirtiéndose en una águila majestuosa que de inmediato elevo el vuelo y se lanzó hasta la posición de Juve que para esos momento había perdido la protección del Detritus así como las necros habían desaparecido, el animal de fuego caería en picada sobre la bruja haciendo imposible que lo pudiera evitar.

El fuego se extendería por el cuerpo quemando cada zona que tocara y haciendo que la bruja necesitara un episkey para poder controlar el dolor ya que si no lo hacía seria mucho más difícil para ella y ahora había que tomar en cuenta que Juve estaba con la muñeca rota y por un tiempo más estaría muda, lo único que le serviría en ese momento seria la persistencia.

Radamantys contemplaba embelesado el vuelo del animal que se había elevado ya y se proyectaba hacia abajo para caer en Juve que hiciera lo que hiciera no podría detenerla ya que era una invocación dirija a su cuerpo no como cualquier rayo que seguía la trayectoria y algún factor pudiera desviarlo, aquella vez no sería así.

Aquel combate se había tornado interesante para los dos contendientes, mas sin embargo la gloria solo podría ser llevada por uno y Radamantys se estaba esforzando por llevarla consigo y sabía que dentro de poco se alzaría como el vencedor de aquel combate, la estrategia que se había propuesto había funcionado a la perfección.

Una fuerte briosa se desato en las ruinas de aquel castillo, elevando poco sobre el piso la cortina de polvo. Radamantys sintió como el calor se extendía por todo su cuerpo, la muerte estaba cerca y aquello seria lo único que apaciguaría la iría del demonio, aquella que solo se desataba cuando entraba en batalla.

El tiempo realmente se había desvanecido, Rada no sabía cuántas horas llevaban batallando y bien hubieran podido pasar días y Slytherin no lo habría notado, el duelo lo apasionaba y cada que entraba en batalla no podía menos que dar todo de si hasta el final, ahora deja en claro que era uno de los mejores duelista al llegar a aquella fase.

Radamantys pensó quienes serían los siguientes que se colarían a la siguiente faso, cada hechizo, cada palabra y cada dolor en su cuerpo lo aproximaban un poco más a la ansiada victoria, aun no estaba todo escrito y bien podría Juve darle alguna sorpresa, Radamantys lo sabía pero lucharía hasta el fin y trataría de evitar que aquello ocurriera.

Rada bajo la mirada a su podría muñeca, era una verdaderas pena pero había sido necesario , ya habría tiempo para curarse de aquello y dejarla como antes, ahora lo que realmente importaba era acabar con aquello y saber quiénes eran los próximos contendientes si es que lograba pasar, tenía fe y confiaba en sus habilidades.

Poca luz entraba por las maltrechas ventanas y Radamantys no sabía si eran naturales o de alguna antorcha que pudiera estar encendía un poco más allá de donde su vita llegaba, al final de cuentas todo aquello era la magia de los organizadores así que todo se podía esperar, Radamantys desvió la mirada hasta su rival en espera una vez más dé su contra ataque.

Aquel encuentro seguía avanzando, a pasos agigantados, parecía que cada uno de los movimientos del otro lo acercaba más a la gloria y separaba a su rival de la misma, estaban usando al máximo sus poderes y habilidades, momento a momento aquello se ponía mejor, no había duda que ganara quien fuese de los dos aquel habría sido un combate épico.

Radamantys observo a Juve en el piso y sabía que ese no era ningún impedimento para la bruja, tal como lo demostró segundos más adelante atacando a Radamantys con un absorvere, esta vez el blanco fue su muñeca, en la mano con que sostenía la varita, el crack le anuncio al demonio que su muñeca había sido quebrada.

El dolor se extendió por toda la mano de Radamantys que con una suave sonrisa cambio de mano la varita y apunto a Juve antes de que ella pudiera conjurar el segundo hechizo el demonio susurro:

-Seneca-

Con aquello la Malfoy seria presa de la resequedad tal como lo había sido momentos antes Radamantys, costaba bastante trabajo lidiar con aquello pues los hechizos eran pocos, Juve, había ya usado varios de los más potentes, ahora le tocaba a ella sufrir un poco sin voz, en sus siguientes ataques no podría hacer uso de los hechizos verbales.

La muñeca de Radamantys seguía doliendo, pero en ese momento vio como la Malfoy era cubierta por una capa de niebla, lo que como era lógico haría que ningún ataque físico fuese en su contra, con aquello estaba totalmente cubierta de todo lo físico que en su contra pudiera ser lanzado, Radamantys bajo la varita mientras meditaba la mejor manera.

El tiempo de cada hechizo era claro para el demonio y como el mismo solía decir aquellos duelos eran como un juego de ajedrez en el cual muchas veces había que sacrificar algunas cosas, ahora le tocaba a el de momento seguir adelante con aquel dolor y ya que ella no podría ser tocada por hechizos rayo o invocaciones lo mejor que podría hacer Radamantys era atacar con efectos.

-Anular Necrohands-

Susurro el demonio en voz baja con lo que Juve no podría en el resto del combate invocar aquellas fantasmales manos que tanto ayudaban cuando se tenía la voz ausente, y para su desgracia las suyas estaban por desaparecer, así mismo el Detritus con que se había cubierto duraba poco tiempo lo que haría que en breve estuviera más expuesta.

Ahora no había mucho por hacer, no había mucho para atacar pues Juve estaba cubierta, aunque sin los efectos del Seneca había un par de buenos efectos que podrían ser usados para atacar, el demonio se movió en su mismo eje, los 9 metros que había marcado al inicio seguían vigentes entre el par de magos.

Las necros que estaban frente a ellos seguían sujetándose mutuamente, solo era cuestión de que Radamantys se moviera dos metros a su derecha para que estas quedaran a un costado dejando libre la visión de Radamantys para atacar, lo mejor era que las Necros de Juve no podrían seguirle ya que las de Slytherin las tenías firmemente sujetas.

La muñeca derecha de Rada dolía como el infierno y en el siguiente turno estaba el todo por el todo, o se curaba o perdía la mano por completo, aquello supondría un gran dilema para el nigromante, que de momento estaba concentrado en lo que a continuación haría, en ese mismo momento su cerebro se ilumino por una idea.

Las necros que antes había invocado desaparecieron de frente de las de Juve y reaparecieron delante de Radamantys con la orden de defenderlo de cualquier ataque en su contra, ahora que lo pensaba Juve estaba bajo un Detritus y las Necros que tenía como defensa no lo hacían peor, de hecho eran algo innecesario siendo que Rada mejor usaba las suyas para defenderse.

Una vez más la varita del nigromante bajo unos centímetros mientras estaba atento a los movimientos de la Malfoy, poco a poco aquello se había tornado más crudo y más peligroso para ambos, se sentía que el final estaba cerca aunque aún no se sabía para cuál de los dos, pero si era seguro que aquella batalla estaba por llegar a su fin.

Que limitada gama de posibilidades se tenían cuando no se podía hablar, aquello había sido un verdadero problema para el demonio pero aquello no significaba que fuese a rendirse ni mucho menos a caer en la desesperación cometiendo errores que sabía que le podrían llevar a perder el duelo había que tener calma y un poco de paciencia.

Tal como lo había previsto los ataques más fuertes de Juve se hicieron presentes al ver un águila de fuego aparecer y volar hasta su posición, parecía sin duda que trataba de atacar por detrás por lo que las Necros de Rada le envolvieron en un cerrado circulo lo que le defendió de aquel ataque que no pudo legar a hacer contacto con Rada.

Una suave sonrisa se marcó en los labios del nigromante al ver que podía adelantarse a los ataques de la bruja por lo que después del Fuego Maldito Radamantys pensó:

-Zancadilla-

Inmediatamente después de aquello un lazo mágico ato los tobillos de juve haciéndola que se fuera de bruces al suelo, con lo que le sería mucho más difícil tener una clara perspectiva de lo que pasaba a su alrededor y eso era la primera parte de la estrategia de Radamantys, hacerla caer, la segunda parte estaba por venir, pero era prioritario que no se levantara.

Después de aquello un par de Necrohands aparecieron delante de la Malfoy para defenderla de cualquier ataque, cosa que no le serviría de mucho ya que en ese momento Radamantys pensó unas Necrohands, estas se materializaron delante de las de Juve, impidiendo que estas pudieran seguirle defendiendo por un tiempo ya que la orden era que las Necros de Rada sujetaran firmemente las de Juve y si estas se movían, ellas se movieran juntas.

Era raro pues en ese momento Radamantys empezó a sentirse cansado, empezaba a hacerse viejo para aquellos asuntos, a lo mejor el momento de dejar que otros tomaran su lugar había llegado, el momento de que otros pudieran alzarse con la gloria de ser el terror de Ottery como lo era Radamantys en ese momento.

Ya el plan estaba puesto en marcha, la defensa de Juve estaba neutralizada y ella en el piso, solo faltaba un paso más para finalizar con la estrategia, aunque el duelo era como un albur, un solo movimiento y todo podría cambiar o acabarse, lo que importaba para ese momento era que las necros de Rada no desaparecieran y que Juve siguiera en donde estaba, en el piso.

Los ojos negros de Radamantys se inyectaron de rojo mientras su pecho subía y bajaba, no podía darse por vencido, sabía que ambos deseaban ganar, pero también sabía que ninguno de los dos se detendría hasta el final, aun y que con eso llegara la muerte de uno de los dos, de hecho era lo más honorable, morir en manos de un buen camarada.

Con la varita en elato, Radamantys esperaba con atención ver lo que haría Juve, no sabía cuánto tiempo había pasado de que iniciara el duelo pero le había gustado la fluidez con que se estaba dando Rada no era de los que gustaban de esperar mucho por el contra ataque de sus rivales y parecía que Juve lo sabía pues respondía de rápida manera y con acertados movimientos.

El cuerpo del demonio empezó a sacudirse como resultado de la adrenalina que corría por este, un gran calor se extendió por todas las partes del demonio a pesar de que había cierto frio en el lugar, aquellas ansias de matar, aquellas ansias de victoria se hacían mas y más fuertes en el nigromante a cada momento.

Aun si perdía o si ganaba se sentía feliz pues se había encontrado con quien a su perspectiva era una de las mejores duelistas de la marca y con aquello podría decir si moría que había muerto cono honor ya manos de uno de los mejores mortifagos, la mejor Ángel Caído que había tenido hasta entonces la marca.

Radamantys no podia esperar menos de su rival, ella se habia adelantado perfectamente a su movimiento creando al rededor suyo una barrera de niebla, de sobra era sabido por el Slytherin que con aquello no podria atacarle con algun movimiento fisico ya que aquella capa solo permitia efectos.

Sumado a aquello que Radamantys estaba mudo por lo que las opciones de aquello era pocas, habia que crear una rapida estrategia para contra atacar de la mejor manera y evitar caer en esa parte del combate, bastante lejos ya se habia avanzado para dejar que las cosas se quedaran asi y si despues Rada desaparecia, ya seria otra historia.

De momento daria lo mejor de si, atacaria como si de ello dependiera su vida y no estaba dispuesto a dejar que todo acabara tan facil o tan rapido, Slytherin no tuvo mas tiempo de seguir pensando pues en ese preciso momento su perono fue roto, el dolor por este hechizo se extendio de rapida manera por lo que sin mas Rada penso:

-Episkey-

Con aquello los huesos rotos de Radamantys se curaron y ahora estaba totalmente sano para seguir con sus ataques, lo que era una verdadera complicacion era el no tener voz y mas aun que Juve estuviese cubierta por una capa de niebla que detenia todo lo que Radamantys pudiese lanzar.

El nigromante suspiro profundamente mientras sus ojos negros se clavaban en su rival, las Necrohands se materializaron delante suyo para defenderlo de cualquier ataque que pudiera ser enviado en su contra, los duelos eran un gran arte a veces era como jugar al ajedrez habia que hacer sacrificios.

Slytherin bajo levemente la varita y espero paciente el siguiente movimiento de Juve, los efectos e invocaciones no eran eternos y en determinado momento que ya no era muy lejano aquellos acabarian y entonces podria darse un giro diferente a las circunstancias, una suave sonrisa se marco en los labios del Rada.

Seguirian adelante, el sabia que niguno de los dos se daria por vencido, asi que o se mataban o el tiempo expiraba, Rada estaba seducido por la primer idea, alguno de aquellos mortifagos caerian, el pecho de Rada subia y bajaba con suavidad, queria darle un verdadero cambio a aquello y sabia que podria.

No podia desear un mejor rival , sabia de la honorabilidad de Juve y sabia que ese duelo seria un choque de ideas y estrategias, no una busqueda de errores como algunos solian hacer, entonces de aquello dependia todo, el tiempo seguia su paso y el ambiente se tornaba mas denso y hostil a cada momento.

Una nueva historia se agregaba a todas las que aquellas ruinas podrian contar y talvez esa historia seria la mas eocionate de todas, aquellos dos poderosos mortifagos haciendo tamblar el suelo, la negra varita s}vibraba en la mano del demonio esperanod el momento adecuado para realizar la perfecta magia.

Radamantys regreso hasta la zona donde se encontraban los organizadores, sus negros ojos se clavaron con desgana en ellos, estaba en ese lugar solo por la gloria, por la victoria y por dejar evidente su poder, no se menospreciaba ni se sentía inferior a aquellos que daban las instrucciones en aquel torneo, tal vez en algún momento los retase a un duelo.

El Sltyherin tomo en la mano derecha el pergamino que le entregaban y lo abrió con calma, cuando leyó el nombre de su siguiente rival una suave sonrisa se marcó en sus labios. Así que la pareja más oscura se batía en duelo, el momento de demostrar por qué habían ganado aquel galardón había llegado, el momento de que sus varitas chocasen.

En ese momento Radamantys sintió como una fuerza invisible tiraba de él, se trataba de la magia del traslador, de inmediato re apareció frente a lo que parecía ser un ruinoso castillo, ese era el lugar en que Juve y Radamantys se enfrentarían y solo uno de ellos podría alzarse con la victoria, esta vez no podrían ayudarse mutuamente.

Radamantys empezó a avanzar con total calma, el tiempo que había pasado ene l campo de batalla lo habían vuelto un poderoso mortifico, temido por la Orden y respetado por la comunidad, él no se colgaba bajo el nombre o apellido de ningún mago o familia famosa, él había escrito su historia por sí mismo, el simplemente era Radamantys.

Así el demonio empezó a avanzar entre escombros, se notaba que en otros tiempos aquello había sido un lugar glorioso, lleno de esplendor y acompañado de una gran y digna vida de los magos que lo habitasen, más el tiempo como siempre había acabado con todo, había llevado consigo el esplendor y gloria de antaño.

Radamantys sonrió con melancolía mientras pensaba que tal vez aquel era el caso para él, que tal vez el tiempo ya había hecho su trabajo con él y que era el tiempo de desaparecer y dejar de su nombre un recuerdo de gloria como lo hacían aquellas ruinas en las que se encontraba parado , habían sucumbido como todo.

Radamantys sacudió la cabeza aquellos pensamientos, no era el momento sin duda alguna lo consideraría pero aun no era el momento, en ese instante lo que deseaba era llegar hasta el fin de aquello y alzarse con la victoria de aquel torneo en el que se había inscrito tiempo atrás, solo eso lo hacía aparecer esporádicamente.

Slytherin avanzaba con una suave sonrisa en sus labios contemplando todo lo que había , derruidas columnas, muebles viejos, todo sumido en el olvido, lleno de polvo y signos inequívocos del abandono que reinaba, más su destino estaba un poco más adelante, su destino con la derrota o la vida estaba a unos metros más adelante.

Cuando al fin ubico el sitio de donde emanaba la presencia de Juve, se encamino, estaba con aquella negra camiseta, el pantalón negro con hebillas a los lados y el par de zapatos negros, lo ideal para un ben combate, así Radamantys ingreso al sitio en que Juve lo estaba esperando de inmediato ubico la figura delante de él.

Rada recorrió el sitio con la mirada y era un lugar totalmente vacío, no había muebles, no había fragmentos de nada al rededor, simplemente polvo y algunas piedrillas de tamaño pequeño esparcidas por el piso, Radamantys poso los ojos negros en Juve quien se encontraban totalmente desnuda, sin duda alguna estaba formando su estrategia.

Slytherin no dijo nada simplemente se movió a 9 metros de Juve, esa distancia seria marcada el resto del combate a no ser que Rada decidiera acortarla, si juve se acercaba el retrocedería, no hubo más tiempo de nada en ese momento Radamantys sintió su garganta ser resecada por el hechizo recién conjurado de la Bruja.

La varita del demonio se elevó mientras sentía como su garganta empezaba ser resecada por el Seneca, el hechizo que Radamantys deseaba pronunciar pasó por su mente y cuando estaba a punto de pagarle con la misma moneda se arrepintió y previo hacia adelante, hacia los posibles movimientos de la bruja y susurro:

-Morphos-

De inmediato su zapato derecho se trasformó en un bezoar, Radamantys lo levanto con la mano izquierda y lo mantuvo en esta mientras sentía como su voz desaparecía por completo, su ultimo hechizo verbal había sido usado ahora no podría pronunciar palabra alguna por lo que sin más Radamantys pensó unas Necrohands.

Dos fantasmales manos del tamaño de un hombre adulto brotaron delante de Juve con la orden de abrazarla fuertemente haciendo así que no pudiera apuntar al mismo tiempo que la presión podría romper alguno de sus huesos, el demonio simplemente centro sus ojos negros en Juve, si bien era su mejor amiga, en aquel combate no tendría piedad y Radamantys era uno de los Mortifagos más letales.

El tiempo habia seguido su marcha, muchas cosas habian cambiado, ahora el mundo magico estaba totalmente distintos a aquellos tiempos de gloria, aquellos tiempos de los cuales el Nigromante hubiese deseado no salir, mas todo lo bueno acaba y como el suave viento que soplaba llevandose consigo hojas sueltas, asi se habian ido las cosas mas muchos recuerdos y sentimientos aun perduraban.

Los negros ojos de Radamantys escrutaban la creciente mañana, el gelido aire helado se dejaba sentir, dejando las mejillas heldas y sonrojadas, mas el demonio parecia ajeno a todo aquello, su mente vagaba en otro tiempo, en otras eras y en otras personas, nada parecia romper la quietud de aquel dia, nada parecia ser diferente.

Mas no era asi, paerecia que la mirada de Radamantys h abia encontrado algo en el horizonte, algo que habia perdido y de momento regresaba hasta sus manos, una suave y melancolica sonrisa se marco en los finos labios del Mortifago, entrecerro los ojos y dejo que de su pecho escapara un largo y profundo suspiro.

-Veamos- susurro Radamantys con un tono de voz suave e inexpresivo, cuando estaba dispuesto a girar sintio la presencia de su elfo, el slytherin se giro con suavidad y se encontro con los grandes ojos cafe del elfo, Radamantys se quedo por un instante sin moverse, sin decir palabra, al final ese elfo era el unico que sabai el verdadero ir y venir de Rada por el mundo magico.

-No esta vez- susurro Radamantys mientras su mente volaba y se sumergia en un sin fin de recuerdos, cada uno mas doloroso que al anterior, cada palabra que se habia esfumado, cada persona que habia desaparecido, cada sentimiento pisoteado por el pasar del tiempo y de las malas elecciones, todo pasaba por la mente del demonio.

Y al final un par de ojos verdes acompañados de una sonrisa angelical y con aquello Radamantys giro sobre si mismo y desaparecio del interior de su habitacion en el castillo slytherin reapareciendo en los limites de la Mansion Malfoy, un par de parpadeso y Rada fue conciente de todo lo que le rodeaba, la suave brisa mecia las hojas de los arboles altos.

El castillo que acababa de dejar guardaba muchos recuerdos y muchas historias para el demonio, asi como para algunos integrantes de la descendencia de Salazar, mas la gran mayoria habian desaparecido, habian sido borrados como si nunca hubiesen existido, mas habia algo que aun los tenia presentes y aquello estaba dentro del Patriarca.

En ese momento Radamantys se pueso a pensar si habia llegado el momento de desaparecer, dejar de aferrarse a un presente que no compartia, un presente que podria ser la secuela de un pasado, un sueño borroso de lo que habia sido, talvez el tiempo de partir como lo habian hecho aquellos a los que apreciaba era ahora.

Radamantys se fijo en el atuendo que llevaba ni siquiera se habia tomado la molestia de ponerse presentable para la ocasion, una camiseta blanca sin mangas que dejaba al descubierto los tatuados brazos de Radamantys, acompañada de unos jeans Azules, aquello era la vestimente de Rada que parecia no ser conciente del frio que se extendia.

Ignorando todo aquello y con la cabeza baja Radamantys avanzo hasta la entrada de la Mansion Malfoy, paso la reja de entrada y empezo a avanzar con total calama por los jardines de la familia, si bien no era mimebro de aquella tampoco le precedia una mala reputacion para no ser bien recibido en ella.

A lo lejos pudo vislumbrar una silueta femenina, la conocia bien, en algun tiempo aquella fue el motivo de su existencia, lo que le habia dado sosten a su vida y en torno a la cual habia girado todo su mando, mas la cruel realidad habia hecho destrozos en ellos como lo hacia en todo en el mundo y Radamantys nunca supo manejar tanta bondad.

Se acerco sin hacer mucho ruido quedando tras la bruja que se encontraba abrazando un arbol, -Creo que existen cosas mejores para abrazar Aleera- susurro Radamantys dejando que el nombre de la bruja saliera con total suavidad de su boca, mucho tiempo hacia que no lo pronunciaba y el hacerlo y tenerla frente a el era como volver el tiempo atras.

Aun podia recordar el sabor de sus labios, la calidez de su aliento, la suavidad de su piel, aquellos ojos verdes clavados en los suyos mientras e confesaban amor eterno, podia recordarlo como si hubiese sido ayer, el momento en que se volvieron uno solo, el momento de la despedida y el momento del olvido.

Todo aquello estaba presente en Radamantys y ahora Aleera aparecia depues de tanto tiempo, como un fantasma, como si de un recuerdo se tratara, sabia que ya no era su tiempo ni su espacio, pero por un momento se dejo inundar por los recuerdos y las sensaciones de otros tiempos, tiempos mejores y de los que solo existi aun recuerdo y esporadicos destellos de Realidad.

-Radamantys bufo molesto al sentir como lso Fenixianos estaban haciendo su fiesta particular afuera,-Ya me cansaron- Susurro el dmeonio al tiempo que avanzaba hastala salida del lugar, en la entrada se veian dos de ellos, los demas estaban escondidos como ratoneas entre la basura, no era anormal ahora jugaban a las escondidas.

Al menos dos de ellos ya se habian echo visibles evelyn y Morrigan que la chcia claro se puso frente a la puerta y la otra llego hasta donde ella asi que el demonio salio y se movio a 9 metros de ellos al tiempo que susurraba:

-Celerus Absorvere-

Las muñecas con que Evelyn y Morrigan sostenian las varitas se partieron, despues de eso el cangrejo de fuego que avanzo tras Rada ubicado a 5 metros de los odefos cobardes ataco con un chorro para evelyn y otro para Morrigan suin duda sus creaciones les defenderian pero no daria tregua, depues de eso Rada susurro:

-Fuego Maldito-

Dos cuervos de fuego maldito brotaron uno contra evelyn y el otro contra Morrigan la orden era caerles en picada y matarlos, depues de eso Rada mando el tercer fuego negro que el seguia en contra de Evelyn y sin mas susurro:

-Avada Kedavrea- apuntando a Morrigan

La maldicon asesina salio al cuello de morrigan y si le daba moriria.

Radamantys sonrio con ironia al ver coo los odefos emepzaban a entrar al lugar, parecia ser que antes de entra se habian dispuesto ap onerse a asalvo de sus atques Radamantysmiro a Adryanie y sin mas viendola seguida de un hipogrifo se adelanto a loq ue seria su segudno movimiento ya que el primero lo habia hecho fuera y susurro:

-Anular Aquoera-

Con aquello el Aguamagica que habia querido hacer no habia salido y no podria salir mas por lo que sin mas Radamantys susurro:

-Fuego Maldito-

Dos cuervos de fuego brotaron el primero iba contra el hipogrifo, lo mataria sin duda,d espues de eso el segundo iba en contra de Adryanie asi que sin mas Radamantys lanzo el primer fuego negro nivel tres en contra de Adryanie que le quemaria de gravedady le haria perder su siguiente accion inmediata, y parecia que los demas Fenixianos se quedarian escondidos por lo que Rada mando el segundo Fuego negro contra Adryanie al msmo tiempo que ordeno al cangrejo atacarla con dos bolas de fuego y a la araña picarla, el estaba cubierto pro el detritus de Juve.

Para finalizar Rada susurro:

-Avada Kedavra-

La maldicon brillo mientras viajaba al cuello de Adryanie para acabarla.

-Pobre tipa, esperemos que con eso sepa elegir mejor sus amistades- susurro Radamantys con una sonrisa sarcastica en sus labios al tiempo que observaba como Juv atacaba a la chica, no tendria opcion moriria sin remedio alguno por lo que en ese momento el demonio decidio que era el tiempo de hacer algo mas por lo que susurro:

-Expectro Protego-

Una sombra sin forma salio de su varita transformandose en un cangrejo de fuego que se quedo a 5 metros de Radamantys con la orden de esperar para atacar cuando este se lo mandara de nueva cuenta el demonio movio la varita ye sta vez susurro:

-Morphos-

Un vaso que estaba sobre la barra cercana a las chicas se transformo en una viuda negra que se escondio para cuando el demonio le mandara a atacar a alguien y pro ultimo Radamantys susurro un tercer fuego negro que se elevo a dos metros y se separo a 5 estaba a la msima distancia que lso otros, haciendo un triangulo mortal.

La niebla de Juv ya le habia cubierto.

El demonio no puedo menso que esbozar una amplia sonrisa al sentir la presencia de Juve, su inseparable compañera de bando, amiga y confidente, cuando ella llegaba hasta donde el estaba se sentia seguro pues asi no podrian caer, eran la contraparte el uno del otro, asi que elmomento de hacer magia negra habia llegado.

-Celerus Sectusempra-

Susurro Radamantys apuntando al cuello de Helen Evans y de inmediato sintio como la adrenalina se extendia en todo su cuerpo, con lo que tenia mas velocidad por lo que sin mas Radamantys susurro:

-Fuego Negro-

La primer bola de fuego se elevo a 2 metros sobre su cabeza con lo que ganaria poder para el momento en que este decidiera usarla , sin perder mas el tiempo el demonio susurro de nueva cuenta:

-Fuego Negro-

Una segunda bola de aquel fuego negro se elevo al aire a dos metros de altura y separada de la anterior por 5 metros, ambas brillaban de manera inocente pero era sabidoq ue crecerian y ganarian el poder necesario para acabar con quien se lanzaran, el demonio estaba expectante de quienes acudirian a ayudar a la chica Evans.

La silueta del demonio se materializo en los limites del callejon Diagon, sus fuentes le habian dicho que una supuesta Fenixiana estaba dentro de uno de aquellos locales por lo que sin duda alguna Radamantys acudiria a matarla, para que aprendiera a respetar el poder de la marca asi como la sangre pura que debian seguir los magos.

Sin mascara vestido de negro, el demonio avanzaba con calama, sus ojos negros se desviaron hasta la entrada de Doyles que era el sitio en el que le habian indicado que estaba aquella traidora o sangre sucia no estaba seguro pero de lo que si estaba seguro era que su sangre correria, esperaba que la orden acudiera y asi matarlos a todos.

Radamantys ingreso al lugar y de inmediato la ubico se trataba de una tal Helen Evans, el simple apellido decia mucho de ella por lo que sin mas Radamantys avanzo hasta ponerse a 9 metros de ella y de cualquier objeto al tiempo que la varita aparecia en su derecha y viajaba hasta la marca tatuada en su antebrazo, el ardor recorreria a los suyos y pronto llegarian.

Mazmorras-Dando de Alta a Cirse Atkins

Parecia que todos los procesos de Resureccion y de curacion habian sido exitosos porque al poco rato la joven brujo recobro la razon, se empezo a mover y no dudo en quejarse del sabor de la pocion y lo peor para ella era que apenas era la primera de estas, Radamantys simplemente sonrio ante las palabras de la joven, el se habia quejado mucho de eso tambien.

-No me agradezcas que es mi trabajo- respondio Radamantys al tiempo que avanzaba con total calma hasta el armario de las pociones y sacaba dos frascos mas, uno con un liquido carmesi y la otra con un liquido de color azul intenso, -Bueno en cuanto te tomes esto podras irte- le dijo el demonio enseñandole ambas pociones.

Avanzo hasta el lado de ella le dejo ambas pociones en el regazo, mientras esperaba que las bebiera saco la pluma y firmo el alta de la joven, -Con esto eres libre y me gustaria saber que fue lo que paso ya que planeo tomar venganza- agrego Radamantys guiñandole un ojo y dejanod el alta tambien en su regazo.

Claro estaba que ella bien podria solo beber las pociones y retirase sin decir nada al mago, que se echo para atras y se quito los guantes de latez al tiempo que se cruzaba de brazos, esperando verla partir.

Mazmorras Recibiendo a Cirse Atkins

La silueta del nigromante se dibujo en el interior de San Mungo, habia sido notificado del deceso de algunos de sus compañaeros, cosa que lo molestaba en gran medida, se lamentaba no haber estado en el lugar para ayudarlos y ahora lo unico que podria hacer era recibirlos y traerlos a la vida prometiendoles despues una dulce venganza en contra de los causantes.

Sus ojos negros barrieron el lugar y empezo a avanzar hasta un box en el que estaba el cadaver de una joven bruja, no la conocia, eso significaba que recientemente se habia unido a las filas de la marca, siendo que su deber como Alto Rango y Sanador era devolverle la vida y despues indagar quienes le habian arrebatado la vida.

Se puso un par de guantes de latex mientras avanzaba hasta el cuerpo que presentaba numerosas heridas, la varita negra aparecio en la diestra de Radamantys que de inmediato empezo a recorrer el cuerpo sin vida con la varita susurrando varios Episkey y algunos hechizos mas para devolverle la salud al cuerpo.

Tras terminar con aquello una pocion de color verdoso aparecio en la mano de Rada, que sin mas abrio los labios de Cirse con suavidad y vertio el liquido en la boca, acabado aquello se hizo un poco para atras mientras esperaba que la vida regresara al cuerpo de la chica. Esperaba que todo saliera como debia y poderla tener de vuelta.

Y el odefo o supuesto caia muerto, su cuerpo se desvanecio llenod e sangre y cortes sangrantes, asi mismo elc adaver estaba totalmente carbonizado, no habia podido nada en contra de los ataques de los Mortifagos y tampoco era que hubiera tratado de hacer algo, mas poco le importaba a Rada, su mision era la de exterminarlos a todos, la de acabar uno a uno con aquellos traidores a la sangre y sangre sucia esparcidos por el mundo Magico.

Ya no habia nada que hacer en el lugar, por lo que Slytherin movio la mano y todas sus invocaciones desaparecieron, el momento de retirarse habia llegado, Slytherin camino con total calma hasta donde estaba Juv, -Vamonos que aqui apesta- le dijo Radamantys tomandola por la citura y atrayendola hasta el.

De inmediato el cuerpo de Rada reacciono ante la cercanai, una sonrisa se formo al tiempo que ambos magos avanzaban hasta la salida y una fuera y lejos de cualquier hechizo desaparecian.

OFF

Bueno después de una hora de esperar respuesta de Seba y no obtenerla decretamos su muerte , siendo que tendra que ir a SM a revivir a su personaje para poder rolear libremente o entrar en situaciones de batalla.

Un saludo xD

-Pues para mi que estan aterrados- respondio Radamantys con asco a las palabras de Juv, aquello se empezaba a tornar aburrido parecia ser que los fenixianos cada dia se volvian mas y mas cobardes era dificil que algunos dieran la cara y aquello le daba asco al demonio, tener que dejar cadaveres pro doquier.

Mas no habia mucho que hacer por lo que Radamantys apunto lacvarita y susurro:

-Expectro Protego-

Un hipogrifo se materializo de las oscuras sombras de la varita del nigromante el ave se quedo a 5 metros delante suyo conm la orden de atacar o defender segun el o deseara, de nuevo Rada susurro:

-Detritus-

Una fina capa de niebla se materialio el rededor de su cuerpo asi mismo que lo hacia con Juv dejandolso cubiertos de cualquier ataque fisico y siendo solo vulnerables a ataques del tipo efecto y por ultimo Radamantys apunto a una silla que estaba cerca y susurro:

-Morphos-

Esta se convirtio en un puma de buen tamaño , largas y afiladas garras que pdoria matar a quien deseara con sus ataques, ahora deberian esperar, -A lo mejor deberiamos bebernos algo- le dijo Radamantys a Juv.

No habia dudda que el chico Seba quedaria totalmente fulminado, eso pasaba cuando se interponian en el caminio de la marca y mas aun cuando Radamantys y Juv decidian quitarle la vida a alguien, el demonio nego con la cabeza al tiempo que agitaba la varita una vez mas , les podnria una hermosa decoracion:

-Fuego negro-

La primera de estas se elevo a 2 metros sobre su cabeza, lista para ganar pdoer y crecer y en el momento necesario ser lanzada a sus rivales, una vez mas la varita de Slytherin se movio y esta vez sususrro:

-Fuego negro-

Un segundo fuego negro se elevo a la msima altura, es decir dos metros solo que esta vez se separo del primero a 5 metros haciendo una linea recta, y para finalziar con aquello el demonio susurro el tercer Fuego negro que se elevo a dos metros de altura al igual que los dos anteriores y se separo a lso mismos 5 metros.

El traingulo Mortal se habia creado ahora solo era cosa de tiempo de esperar un poco y quein se atreviera a dar la cara seria aplastado por los hechizos del nigromante.

No paso nada de tiempo cuando Juv ya estaba donde Radamantys que al solo sentir su presencia sintio que algo se alborotaba en su interior, le sonrio y desvio la mirada tratando de esconder lo que pasaba asi sin mas apunto a Seba y con una voz fuerte y clara susurro:

-Celerus Sectusempra-

De inmediato el rayo verde salio disparado de la varita de Radamantys con destino del cuello de Seba, si este impactaba la sangre correria por el cuerpo del joven y la muerte llegaria de manera inevitable a este, una vez mas Radamantys apunto a Seba y esta vez penso un Levicorpus con lo que una fuerza invisible tiro del tobillo de este elevandolo a dos metros en el aire .

Y para finalizar Radamantys susurro:

-Fuego Malditio-

Dos cuervos de fuego brotaron de la varita del mago uno iba por arriba con la orden de caer sobre su cabezay el segundo a la altura del estomago con las misma intenciones de calcinarlo, -Espero que esta vez si vengan ya que ultimamente han estado muy cobardes- le comento Rada a juv

-Dumbledore- susurro Radamantys con una sonrisa de maldad en los labios al tiempo que su cuerpo se estabilizaba en los alrededores de Ottery, segun le habian dicho sus informantes en un lugar de Ottery se encontraba un traidor a la sangre que ya tiempo antes habia caido en manos de los mortifagos y esta vez volveria a caer y asi lo haria una y otra vez hasta que entendiera que apoyaba al lado equivocado, hasta que llegara a las pies de los mortifagos pidiendo que lo aceptaran en sus filas y dejaran de arrastralo a lso brazos de la muerte.

Asi el demonio avanzo hasta estar frente a Chateau Dumbledore, sin mas Radamantys ingreso al lugar y de una fuerte patada volo la puerta de entrada, el aroma a traicion era pausible por lo que subio las escaleras y de inmediato identifico la habitacion en donde estaba el supuesto Fenixiano, entro a esta y sus ojos buscaron y no encontraron hasta ver la puerta que sin duda daba a algun balcon, hasta ella se fue Rada.

La abrio y ahi estaba el odefo o seguidor de estos Seba, la varita aparecio en la mano del dmeonio y se fue hasta la marca que ardio , ahora era de esperar a Juv, sabia que ella no tardaria, depues de eso Rada apunto al pecho de Seba listo para matarlo.

Todo habia terminado el cuerpo de elvis Cayo al piso con un ruido sordo, Radamantys sonrio al ver el resultado de los tres fuegos malditos de Juv, Slyhterin nego con la cabeza, habia esperado que los de la orden aparecieran y es que con aquello habria sido mas emocionante el encuentro, los fuegos negros que levitaban sobre Radamantys estaban en su punto maximo por lo que para no dejarlos sin uso este los envio al cadaver.

El piso se sacudio ante la potencia de los tres fuegos, el cadaver quedaria calcinado e irreconocible, un duro trabajo les esperaba en San Mungo para poder traerlo a la vida, una sonrisa de maldad se formo en los labios del Nigromante que empezo a avanzar hasta la salida al tiempo que el demonio ordenaba a la Hiena acabar con el cadaver.

-Espero que te guste la carne quemada- agrego Rada soltando un par de carcajadas, sus ojos negros se desviaron de la escena buscando a Juve, una vez que la encontro la tomo firmemente de la cintura, -Y si seguimos la fiesta en otro lado?- pregunto Radamantys dejando que sus labios resbalaron por los de ella y haciendo que sus cuerpos se sintieran mutuamente.

Despues de eso Rada salio con Juv a su lado, una vez que estuvieron lejos del lugar y de todo hechizo desaparecieron juntos, ya se volverian a ver en otra ocasion.

OFF

Bueno la cosa es sencilla Elvis Gryffindor debera ir a SM a revivirse para poder seguir su camino xDD asi mismo dejo constancia que se negocio un aspecto que no le cuadraba a Adryanie siendo que este sera llevado a los lideres para evitar entorpecer negociaciones y roles en un futuro.

En ese momento el demonio sintio como una niebla cubria su cuerpo, habia sido invocada por Juv, con aquello el par de Mortifagos estaban cubiertos de ataques fisicos, lo que dificultaria que los pudieran detener, aquello sin duda terminaria con la muerte de Elvis y con la de todo aquel que osara aparecerse por el lugar, Radamantys no pudo menos que sonreir y alegrarse de no ser el blanco del Odio de la Malfoy que podria ser devastadora.

-Realmente no se que tipo de muerte puda merecer alguien asi- añadio Rada con desden , -A lo mejor dejarlo morir desangrado o devorado por los carroñeros- agrego al tiempo que su varita se movia y susurraba:

-Expectro Protego-

La masa de sombras se materializo en un cangrejo de fuego que quedo a 5 metros de Radamatys listo para atacar o defenderlo Rada le mando lanzar los chorros de fuego a Elvis, despues de eso la varita de Rada se movio apuntando a una de las estatuas y susurro:

-Morphos-

De inmediato esta se animalizo reduciendo su tamaño, habia aparecido una Hiena, con sus negros ojos clavados en Elvis, -Ese sera tu cena- agrego con sarcasmo al tiempo que susurraba un Tercer Fuego negro que se elevo a 2 metros a 6 de los otros dos , mas pequeño que los demas pero en su momento igual de mortal.

Una vez acabado se giro y avanzo hasta donde estaba Juv, las palabras de ella habia creado un calor en su cuerpo sin poder evitarlo y aun ambos bajo la niebla el dmeonio se acerco y poso sus manos en la cintura de ella buscando los ojso azules, -Sabes que siemrpe me has encantado no?- le pregunto pero esta vez con seriedad y no puedo evitarlo, busco lso labios de la bruja, atrayendola hasta su cuerpo, sintiendo cada centimetro de este pegado al suyo, cada parte y cada cuerva embonaron con el suyo mientras su labnios se perdian en los de ella .

-Perdon- exclamo el dmeonio tras separarse de ellos pero sin soltar la cintura de la bruja, le cuasab una mezcla de exitracion con ternura tenerla tan cerca suyo, la sonrisa en sus labios volvio a alforar, lo mas que podria pasar era un katanazo de juve e ir al medico.Depues de eso la voz de Elvis llego a Rada que simplemente exploto en carcajadas ante sus palabras y nego con la cabeza, ya juve lo mataria.

-No tan buenas como tu presencia- respondio Radamantys a las palabras de juve mientras dejaba que sus ojos recorrieran por completo el cuerpo de la Malfoy, aun recordaba la placentera sencaion que le hyabia producido el tenerlo tan cerca, depues de eso Rada negoc on una sonrisa y se centro en el chico Elvis asi que sin mas susurro:

-Celerus Sectusempra-

Un rayo verde partio de la varita de Radamantys directo al cuello de Elvis, si este impactaba la sangre apareceria brotando de las heridas que la maldicion le causaria, una vez mas la varita de Radamantys se movio pero esta vez no atacando a Elvis , solo susurro:

-Fuego Negro-

La primer bola de fuego salio de la nada y se elevo a dos metros sobre la cabeza del dmeonio con lo que ganaria poder y seria lanzada en el momento adecuado asi que por tercera vez la varita de Rada se movio y susurro un segundo Fuego negro que se elevo a la misma alatura que el anterior pero separado a 6 metros de este, con lo que ambos ganarian su poder destructivo y serian lanzados en el momento adecuado.

Despues de eso los ojso negros de Radamantys se centraron de nuevo en Juv, -Sabete que te heche de menos- agrego el demonio con una sonrisa en lso labios mientras se acercaba un par de metros a la bruja, habia varias cosas que habian quedado incoclusas entre ellos y el desaba dejarlo todo terminado.