La libélula encantada (MM B: 111815)

[Dennis Delacour]

No pudo evitar soltar un suspiro de alivio al escuchar a la joven decir que lo ocurrido no tenía importancia alguna mientras le indicaba que la siguiera con rumbo a la cafetería del lugar. A pesar de que lo que decía era cierto y los accidentes a veces ocurrían no todos opinaban lo mismo. La Delacour muchas veces había tenido que lidiar con magos y brujas que pensaban que por ser de determinadas familias o poseer ciertos cargos podían portarse de la forma más petulante posible, y si eso lo hacían con alguien de buena familia como ella no imaginaba como serían con personas con menos recursos, pero de todo había en el mundo y sólo quedaba tolerar a esa gente.

 

Se ubicaron en una de las mesas de la cafetería que se hallaban en el lado del jardín, esas eran las mejores dado que los rosales del lugar daban un hermoso y sutil aroma alrededor. Antes de tomar asiento en esa mesa recogió el bolso que había dejado tirado antes de ir a perseguir a Pete.

 

Katy se acercó para recibir la orden del par de brujas, - creo que tomaré el café americano que no pude por el lío del escarbato. - luego fijo la mirada en la joven que la acompañaba - que deseas pedir? La libélula tiene una gran variedad de bebidas frías y calientes que son deliciosas así como también te recomiendo el cheese cake de frutos rojos, es una maravilla. Y todo va por la casa así que puede pedir en confianza - termino de decir, realmente en el centro cultural una de las principales cosas que les gustaba tener presente era el buen trato a sus visitantes.

 

- si efectivamente tenemos ambos talleres, son bastante entretenidos además de que brindan variedad de horarios para que puedan ajustarse a las vidas ocupadas de nuestros asistentes. Después de tomar este receso podríamos ir a ver el que te interese más - dijo de manera amable, recordaba que cuando abrió el local con su socia lo más importante para ellas era brindar opciones variadas que permitieran a la gente explorar sus talentos y escapar del estrés de la vida diaria.

 

@@Nicole Evans Crowley

[justo]

Aun me rondaba por la cabeza el alumno que habia visto en el tren. Por su uniforme era de Hufflepuff y tenia un no se que indefinible, una expresion extraña como si no tuviera edad, admito que lo que digo es muy raro pero es lo que pense.

Asi que llegamos a la estacion y montamos en los carruajes. Para muchos les parecio curioso que fueran solos hacia el castillo pero para mi no, y no lo era porque habia notado que estaban guiados por thestrals, esos cadavericos caballos alados, y la razon de que yo pudiera verlos es que ya habia asimilado la muerte de mi madre.

En fin, que llegamos al castillo y nos fuimos al Gran Comedor para la acostumbrada ceremonia de seleccion y el banquete subsiguiente. Y alli me di cuenta de algo muy curioso, que Harry y Ron no estaban ni tampoco Snape. Snape montaba guardia por ser su turno y entonces...un increible rumor empezo a recorrer la sala, Ron y Harry habian llegado ¡en un auto volador!

Por lo visto no pudieron pasar la barrera y, en vez de mandar una lechuza solicitando instrucciones como es logico, no se les ocurrio nada mas absurdo que coger el coche volador del padre de Ron para llegar a la escuela.

Lo malo es que fueron vistos por varios muggles y la bronca que les cayo fue de aupa. Incluso fueron castigados, pero eso ya lo contare en otro momento. Lo que si me di cuenta es que cuando nos ibamos a nuestros dormitorios se separo de su grupo el chico de antes de Hufflepuff y siguio a Dumbledore.

[Nicole Evans Crowley]

El lugar en donde decidieron sentarse otorgaba una vista de lo más pintoresca, los rosales eran tan grande y de diferentes colores que eclipsaban la vista de las personas, su dulce aroma inundaba el lugar y se mezclaba con el rico olor de las cosas que se preparaban en la cafetería. ¿Cómo había sido posible que no conociera aquel lugar? Hasta el momento lo poco que había visto la había dejado encantada.

 

Una chica se acerco hasta ellas a tomar la orden, Nicole no quería sonar aprovechada, aún después de escuchar la propuesta de Dennis de ordenar lo que se le antojara -Entonces tomaré el cheese cake de frutos rojos- la joven anoto los pedidos y se retiró de la mesa – Pues con todo lo que esta pasando actualmente si he estado muy ocupada precisamente por eso me gustaría tomar alguno de los talleres.

 

La joven que había tomado la orden regreso en aquel momento con su orden, algo que adoraba Nicole del mundo mágico era la rapidez con la que los alimentos eran servidos. Sujeto el tenedor, tomando el primer bocado del postre, Dennis no le había mentido, el cheese cake estaba delicioso, aún no tragaba su primer bocado cuando llevo el segundo a su boca.

 

-Me parece bien, estaba un poco más interesada en el taller de pintura y también me gustaría conocer más el lugar, tengo entendido que hay una biblioteca aquí ¿No?- tomo otro pedazo de postre - Respondeme algo ¿Eres la dueña del lugar? Supongo que si, sino, no ofrecerías comida tan fácilmente- otro bocado más fue devorado por la Evans -No he visto mucho del lugar pero tengo que decirte que lo que he visto me ha gustado mucho, ya no hay lugares como estos actualmente.

 

Un "crack" interrumpió la plática, junto a la mesa apareció Van, su elfo domestico, el pequeño elfo sujetaba un pergamino entre sus diminutas manos -Lo siento ama pero me dijeron que le entregara esto con urgencia- la bruja habia solicitado al elfo no molestarla aunque fueran asuntos del ministerio. Tomo el pergamino que le ofrecía Van, diciéndole que no habia problema y agradeciendo que fuera hasta allá, el elfo desapareció con otro chasquido.

 

-Lamento la interrupción pero con las cosas que estan pasando actualmente uno no puede dejar de lado al cien por ciento las obligaciones del Ministerio- echo un rápido vistazo al contenido del pergamino, para después guardarlo en el bolsillo de su chaqueta.

 

 

@@Dennis Delacour

[justo]

Lo que paso despues fue, mas o menos, asi:

- ¡Profesor! ¿Podemos hablar?

- ¿Que hace por los pasillos? Deberia estar en su dormitorio.

- Tenemos que hablar...Albus.

- ¿Como sabe mi nombre? ¿Quien es usted?

- Soy Manuel.

- Pero... ¿que?

- ¿Hablamos...?

- Ven a mi despacho.

Entraron en el recinto y...

- Te veo bien Albus.

- No puedo creerlo. Pero...¿como lo haces?

- Transformacion organica avanzada ¿que si no?

- Si claro..---balbuceo--- pero es que me cuesta creerlo.

- Para todos los demas soy un alumno de intercambio y estoy en Hufflepuff ¿entendido?

- Tu mandas. ¿Hablaste con Nicolas?

- Me informo de todo ¿que ha pasado con Harry y su amigo?

- Se les cerro la barrera del anden 9 y 3/4 y cogieron un Ford Anglia volador.

- ¡Curioso! No se si tendra importancia pero...ten ojo avizor.

- ¿Temes algo?

- Voldemort intenta apoderarse de la Piedra el año pasado y ahora esto. Si, es preocupante.

Los dos magos se quedaron silenciosos. Tenian razon, algo no marchaba como era debido.

[Dennis Delacour]

Escucho a la joven hacer su pedido a Katy lo cual le alegro ya que en serio quería compensar el incidente que había sucedido anteriormente, le gustaba que cada persona que asistía a la libélula encontrará la tranquilidad que buscaba así como que pudieran desarrollar sus aptitudes en los diferentes talleres que brindaban. Y al parecer esa falta de tiempo y exceso de trabajo era lo que había traído a Nicole al centro cultural.

 

Katy no demoro en traer lo ordenado y su rostro dibujo una sonrisa al ver que el cheese cake había sido del agrado de la bruja, la cafetería del lugar tenía sin lugar a dudas uno de los primeros lugares en repostería del callejón Diagon. Dio un sorbo a su café mientras escuchaba la pregunta de la joven.

 

- si la verdad la biblioteca es bastante amplia y abarca diversos géneros literarios tanto muggle como mágicos, la verdad es un orgullo para nosotros. Incluso hoy estoy trayendo unos manuscritos sobre runas para ampliar esa sección. Con gusto te la enseñó cuando termines - dijo mientras observaba cómo el lugar se iba llenando.

 

- soy un de las dueñas, el lugar lo abrí junto a una buena amiga y socia, no se si hayas oído de ella, Dorothy Anne Lockhart. Ella tenía una idea de crear un sitio que pudiera disfrutar toda la comunidad mágica y era algo que yo compartía así que unimos fuerzas y de ello resultó este lugar - dijo mientras movía sus manos con suavidad alrededor refiriéndose al local. Su socia por ahora estaba fuera de Londres así que ella se encargaba de todo en la libélula.

 

Esperaba no estar aburriendo a aquella joven con tanta palabrería. Al menos esperaba que con la biblioteca o los talleres olvidara que le había hablado por montones.

 

Negó con un movimiento de cabeza cuando la bruja se disculpo por la interrupción por motivos de trabajo. Terminó su café mientras pensaba en que departamento trabajaría aquella joven, la Delacour estaba algo ausente por esos días del ministerio pero pronto tendría que regresar.

 

@@Nicole Evans Crowley

[justo]

Al dia siguiente de tan memorables hechos las cosas empezaron a ponerse "divertidas" aunque a algunos no creo que les hiciera ninguna gracia.

Para empezar, Hermione estaba bastante ceñuda con sus amigos. Quizas le disgustaba la posibilidad de que pudieran expulsarles ¡vete a saber!. Pero lo mejor vino durante el desayuno, Ron recibio un "regalito" de su madre, un Howler.

LLego Errol la lechuza de su familia, con su acostumbrada habilidad para aterrizar, vamos que se la pego. Le lanzo a Ron un sobrecito rojo que abrio y...

...ROBAR EL COCHE. NO ME HABRIA EXTRAÑADO QUE TE EXPULSARAN; ESPERA A QUE TE COJA, SUPONGO QUE NO TE HABRAS PARADO A PENSAR EN LO QUE SUFRIMOS TU PADRE Y YO CUANDO EL COCHE NO ESTABA...

Ron se estaba quedando palido, mas que la propia leche, pero la señora Weasley seguia gritando:

...ESTA NOCHE LA CARTA DE DUMBLEDORE, CREI QUE TU PADRE SE MORIA DE LA VERGUENZA, NO TE HEMOS CRIADO PARA QUE TE COMPORTES ASI, HARRY Y TU PODRIAIS HABEROS MATADO...

Ron estaba con una curiosa expresion, las mejillas coloradas y la frente palida, creia que le iba a dar un sincope, pero su madre aun no habia terminado:

...COMPLETAMENTE DISGUSTADO, EN EL TRABAJO DE TU PADRE ESTAN HACIENDO INDAGACIONES, TODO POR CULPA TUYA, Y SI VUELVES A HACER OTRA, POR PEQUEÑA QUE SEA, TE SACAREMOS DEL COLEGIO.

El Howler callo. Se notaba que Harry y Ron estaban muy tristes. En ese momento senti pena por ellos, Draco estaba de muy buen humor pero yo no dejaba de pensar en ellos.

Pero no podia encargarme mucho del asunto. Teniamos que ir a Herbologia. La profesora Sprout era afable pero no por eso habia que llegar tarde. Asi que Draco, Dap, y los demas nos pusimos en marcha, nuestra primera clase prometia ser memorable.

¡Y vaya si lo fue!

[Nicole Evans Crowley]

Dejó el cubierto sobre el plato, el postre no habia durado prácticamente nada frente a ella, en su defensa el cheese cake había estado delicioso, sin duda regresaría nuevamente para probar aquel postre o si era posible pediría uno para llevar, se sentía un poco avergonzada por ser tan glotona pero no podía evitarlo.

 

-Eso es interesante, no sabia que también tenían libros muggles, no creo conocer otro lugar dentro de Londres que cuente con textos tanto muggles como mágicos, eso es interesante, en cuento a los textos rúnicos me temo que no cuento con los conocimientos necesarios para comprender su contenido.

 

La chica, Katy, regreso en aquellos momentos a recoger el plato vació que yacía frente a ella. La Evans agradeció con un movimiento de cabeza para no interrumpir lo que la Delacour le platicaba. Nicole hizo un esfuerzo tratando de evocar alguna cara o un recuerdo que involucrara en nombre que la chica acababa de pronunciar, algo difuso apareció en su memoria, como siempre no podía recordar con claridad en donde habia escuchado el nombre en cuestión.

 

-Te mentiría si digo que si pero la verdad es que el nombre me suena de algún lado, tal vez me cruce con ella en los últimos días que estuve en Londres antes de mi partida. Pero la verdad es que tu amiga y tu tuvieron una buena idea con este lugar. Yo también tengo un negocio aunque claro su rubro es totalmente diferente.

 

Dennis termino su cafe, Katy recogió la taza, limpiando la mesa con un movimiento. La chica lanzó una mirada a su alrededor, disfrutando nuevamente de la vista que el centro cultural le brindaba, ya quería recorrer el lugar para descubrir las salas que lo integraban y las cosas que estas contenían.

 

-¿Te parece bien si realizamos un recorrido por el lugar? Si es que tienes tiempo, claro.

 

 

@@Dennis Delacour

[justo]

A veces me da la sensacion de que soy profeta. Un profeta de pena por la de desgracias que preveo pero profeta.

El caso es que nos fuimos a Herbologia charlando animadamente. En la puerta nos tropezamos con el profesor Lockhart, quien, en un aparte, alecciono a Harry con las desventajas de una publicidad a destiempo. Un comentario que dejo a Harry bastante perplejo. ¿De que iba ese hombre? Cada vez me gustaba menos el profesor.

Asi que entramos en el invernadero 3 dispuestos a aprender de la profesora Sprout.

Pero antes un breve apunte sobre ella. Pomona Sprout era la profesora titular de Herbologia. Tambien era la jefa de Hufflepuff, una bruja de aspecto bajo y rechoncho de jovial aspecto y gran sentido del humor.

Nos pusimos alrededor de una larga mesa con macetas que contenian mandragoras. En mi vida he visto una planta mas fea. Parecian hombrecillos con ramas y hojas y un aspecto entre arrugado y hosco. Por lo visto habia que trasplantarlas de maceta y añadir abono. La profesora nos dio las instrucciones pertinentes antes de ponernos unas mullidas orejeras ya que el sonido que emitian las plantas al sacarla de los tiestos podria causar perdida del conocimiento.

[Dennis Delacour]

No pudo evitar dibujar en su rostro una sonrisa de orgullo antes las palabras de la joven sobre lo poco común de su biblioteca, y eso que aún no la veía. — Bueno pues estas en el primer lugar en Londres que tiene tanto libros muggle como mágicos, la verdad es que tengo una fascinación por los libros de literatura, los conocidos como clásicos así que no pude evitar la tentación de compartirla con la comunidad y pues así se decidió, que fuera una biblioteca lo suficientemente completa para todos los gustos — hablaba con alegría extrema ya que la biblioteca era lo que más empeño había llevado de su parte. — Claro entiendo, bueno yo curse ese conocimiento en la universidad y me defiendo un poco aunque a veces la verdad me cuesta —admitió con un poco de vergüenza, en aquel curso prácticamente había tenido que ser autodidacta.

 

— si tal vez es probable que te la cruzaras, aunque cuando abrimos el local ella también acababa de regresar de estar un buen tiempo en el extranjero así que nunca se sabe. Y gracias, creeme que nos agrada mucho que a la gente le guste el lugar y lo que ofrecemos. Y de que es tu negocio? — preguntó con genuina curiosidad a la joven.

 

Cuando Nicolle le propuso dar el recorrido se puso en pie de inmediato — si claro por supuesto, aunque no se si te convenga porque me pongo a presumir mucho el lugar y puede ser algo molesto — dijo bromeando mientras se despedía de Katy agitando su mano al aire y dándole las gracias por la atención. — Si quieres vamos a la biblioteca primero y luego te llevo a los talleres — comentó mientras le indicaba que la siguiera hacía las escaleras ya que la biblioteca se hallaba en todo el segundo piso, si así de grande era además que requería ese espacio por la disposición de varias mesas para que la gente pasara tiempo leyendo en ella o haciendo sus trabajos.

 

@@Nicole Evans Crowley

[justo]

Lo que voy a decir ahora sorprendera mucho pero el atontado (entonces) de Neville Longbottom vio las mandragoras y se cayo redondo con las orejeras puestas. Parece mentira que ahora sea todo un experto en el tema pero en aquella epoca se trataba del bobalicon mas grande con el que me habia tropezado.

Me di cuenta que Harry, tras quitarnos las orejeras, conversaba con un muchacho de Hufflepuff. Se trataba de Justin Finch-Fletchley, de origen muggle, y uno de los magos mas ricos de la escuela. No se si os habeis dado cuenta pero Justin es de familia noble ¿que como lo se? sencillo, por su apellido compuesto y porque le habian reservado plaza en Eton, el colegio destinado para la nobleza.

Me cayo bien Justin, era un muchacho sencillo a pesar de sus antecedentes y muy amigo de sus amigos. Tal vez por eso el sombrero lo puso en Hufflepuff, no hay casa mejor para bajar los humos a cualquier presuntuoso.

Pero me estoy desviando. El caso es que cuando acabamos la clase parecia que volviamos de la guerra por la mucha tierra que nos salpicaba el uniforme. Harry y los suyos iban a Transformaciones y yo obtuve permiso para cambiarme de ropa y darme una ducha rapida, de verdad que la necesitaba.