Prueba de Metamorfomagia I Cillian Haughton

[Amara Majlis]

PRUEBA DE METAMORFOMAGIA 
CILLIAN HAUGHTON

Una prueba más estaba por comenzar y en esta ocasión uno de los estudiantes más sobresalientes de Amara se enfrentaba a la a los portales que el ateneo tenía a su disposición. Ya que había cumplido con todos los requisitos que la arcana había puesto durante su estancia en la clase de metamorfomagia, había decidido que Cillian Haughton estaba más que listo para ser sometido a la prueba por lo que le preguntó si se sentía preparado a lo que el miembro de la orden del fénix contestó con un sí.

Salieron de la casa de Amara y le informó sobre la serie de pruebas que tendría que realizar antes de cruzar el portal  y una vez finalizadas las distintas tareas se volverían a encontrar para dar inicio oficialmente a la prueba final con la que finalmente quedaría vinculado el chico con la habilidad, le extendió entonces el anillo que ya le había mostrado previamente y le dijo – colócatelo, con el podré verte y escucharte, siempre estaré observando pero no podré intervenir una vez aclarado todo, te deseo el mejor de los éxitos – le entregó un papel con las indicaciones para llegar al sitio de la prueba.
 

Cita

Estimado Cillian Haughton:

Estás cada vez más cerca de cumplir con tu meta de convertirte en un metamorfomago, por lo que te veré en el Ateneo donde realizarás tu prueba para ello deberás seguir las siguientes instrucciones para no perderte.

1.- Deberás cruzar el laberinto que conduce al ateneo el cual ha sido tomado por una célula de los Yakuzas los cuales no te permitirán el paso a menos que te identifiquen como uno de los suyos.

2.- Una vez dentro del laberinto te encontrarás con varias criaturas que intentarán devorarte como Nundus y Quimeras, te recomiendo que uses técnicas que camuflaje los cuales te permitirán estar a salvo.

3.- Al finalizar el laberinto llegarás al lago que rodea al ateneo para cruzarlo hay dos opciones, la primera es cruzar el puente colgante que llega hasta ahí, sin embargo sus cuerdas son tan frágiles que deberás tener un peso muy ligero para que puedas cruzarlo sin problema, la otra opción es tomar una lancha la cual también solo soporta un peso menor a 30 kilogramos así que deberás manipular tu peso.

Una vez entregado el documento se retiró para alistarse, sabía que al mago le tardarían algunas horas por lo que la arcana tendría tiempo de sobra para estar lista a la llegada del Haughton.

Editado 6 de Noviembre del 2021 por Amara Majlis

[Cillian Haughton]

Dio un par de vueltas al anillo que recién se había colocado, había logrado avanzar al siguiente paso en el proceso de vincularse con la aquella habilidad y sabía que lo que seguía sería mucho más difícil que la práctica que había tenido durante los días previos, pero también sabía que toda esa práctica le sería de bastante ayuda. Comenzó a leer las indicaciones una vez que Amara se retiró de su lado, ¿Yakuzas dentro del Ateneo? Aquello parecía algo sacado de una película muggle, pero sabía que debía enfrentarse a aquello.

Al haber salido ya de la casa de Amara ya no tenía acceso a su guardarropa así que tuvo que buscar otra opción para encontrar algo de ropa más adecuado que aquello que vestía, desapareció del Ateneo durante un par de minutos para reaparecer luego vestido con el típico traje con el cual los Yakuzas solían ser identificados y después comenzó a jugar con su aspecto. Lo primero que hizo fue el cambiar su pálido tono blanco de piel por uno un poco más amarillento y después cambio el color de su cabello por un negro intenso. Lo siguiente que hizo fue cambiar el aspecto de su rostro, alargando un poco sus ojos y achatando un poco su nariz. Lo último fue su masa muscular la cual volvió un poco más robusta.

En el camino hacía el laberinto jugó un poco con su tono de voz para volverla un poco más grave y seca. Al llegar a la entrada del laberinto comenzó a temer un poco que el cambio de aspecto que había realizado gracias a la habilidad no fuera lo suficientemente bueno para engañar a los presentes, pero a primera instancia no parecía haber levantado alarma alguna.

- El Jefe me ha pedido que nos encontremos al final del laberinto -soltó al hombre que se encontraba en la entrada y este lo dejó otorgándole solo un gruñido como respuesta.

Al parecer los Yakuzas no estaban del todo contentos de estar en aquel lugar. Avanzó lo más rápido que pudo hasta toparse con el siguiente problema. Nundus y Quimeras cuidaban aquellas zonas de laberinto que daban acceso al lago. ¿Cómo lograría sortear aquel obstáculo? Camuflaje, sí, era obvio lo decían las propias indicaciones de Amara. Así que lo primero que hizo fue desnudarse por completo y acto seguido tocó las paredes del laberinto para cambiar el tanto de su piel como de su cabello por el tono exacto de aquellas y una vez que logró comenzó a caminar pegado a ellas intentando hacer el menor ruido posible, así como también esperando que su olor no llamara la atención de las criaturas.

Y logró, por poco ya que el último tramo un Nundu logró percibir su olor e intentó atacarlo, pero él fue un poco más rápido y llegó hasta el lugar donde al parecer Amara había plantado un limite y justo en aquel lugar lo esperaba también un cambio de ropa. ¿Y ahora qué? El último tramo, debía cruzar el río y debía jugar con su peso. Recordaba como hacerlo así que se concentró en ello y redujo su peso lo suficiente para cruzar el lago, temía del puente.

Al llegar al otro lado, después de un par de horas, se adentró a la Pirámide donde seguro Amara ya estaría esperándolo.

[Amara Majlis]

No tardó mucho en llegar al Ateneo y realizar los preparativos pertinentes para la prueba a la que sería sometido su alumno, mientras tanto podía observar sus pasos y cada uno de sus movimientos, necesitaba estar segura de que su alumno estuviera a salvo y no resultara herido por alguno de los obstáculos que se hallaban en el trayecto hacia la prueba. En cuanto vio que comenzaba a atravesar el rio decidió salir de la pirámide para esperarlo de la manera más formal posible. Le sonrió e hizo señas para que pudiera seguir su rastro y una vez que llegó hasta ella prosiguió.

-Vaya tardaste menos de lo que esperaba es una pena que no te haya enseñado a modificar tus glándulas sudoríparas pero incluso eso te hubiera ayudado a no ser percibido por la mantícora – comenzaron a caminar hacia el interior de la pirámide donde se hallaban colocadas las siete puertas, en ellas estaban los portales que tenían que ser atravesados para cumplir finalmente las pruebas, se colocaron justo en la quinta entrada la cual  – aquí es donde realizaras tu prueba una vez dentro no podré acompañarte pero estaré observando cada movimiento así que ahora me corresponde volver a preguntar ¿estás listo para iniciar tu prueba?

Esperó la respuesta del chico la cual estaba segura que sería afirmativa desde que lo vio llegar a su casa supo que su determinación sería pieza clave y que acabaría con todo los requerimientos adecuadamente y a gran velocidad, ahora se encontraba listo para terminar con el paso que había emprendido y Amara no podía estar más satisfecha. Caminó hacia el pomo de la puerta la cual abrió con fuerza, en ella se veía un destello plateado el cual era el portal que llevaría al mago al lugar de destino.

-En caso afirmativo eres libre de atravesar la puerta, te estaré observando así que procura utilizar al máximo la habilidad de metamorfomagia, ya sabes, nada de otro tipo de conocimientos o magia en general a menos que sea estrictamente necesario, buena suerte y no lo arruines.

 

@ Cillian Haughton

[Cillian Haughton]

- Eso hubiera sido realmente de ayuda…

Había temido por su vida durante un par de segundos al tener que escapar de esas criaturas, pero lo bueno era que había salido completamente ileso aquella situación. Durante su camino hacia el interior de la pirámide se concentró en devolver el peso de su cuerpo a la normalidad mientras escuchaba las palabras de la arcana. ¿Así qué ella no podría acompañarle durante su prueba? Algo había escuchado sobre eso, pero no fue hasta ese momento que pudo comprobarlo.

- Estoy más que listo -respondió-. He estado bastante tiempo esperando este día. Desde hace bastante tiempo que estoy interesado en la habilidad, pero nunca había logrado llegar tan lejos como lo he hecho con sus enseñanzas.

¿Nada del uso de otros conocimientos, magia o habilidades? Suspiró, aquello parecía complicado, pero tenía bastante sentido. Estaba en ese lugar para vincularse con aquella actividad, no con otro tipo de magia. Así que sí, estaba listo, aunque no sabía exactamente para qué, ¿cuál sería la prueba que le esperaba del otro lado de la puerta? ¿Sería algo personal o simplemente un reto al azar por superar? Se acercó un poco más a la puerta.

- Entonces de aquí en adelante estoy solo, ¿no?

Sí, lo estaba.

Se adentró al interior de la puerta y una vez que estuvo del otro lado pudo verlo, el castillo de la familia Haughton. ¿Qué tenía eso que ver con su prueba? Su apariencia cambió por completo, volvió a verse tal y como lucía hacía ya ocho años. ¿Cómo era aquello posible? Estaba ya tan acostumbrado al aspecto de Seres que se había olvidado de como es que el lucía realmente.

[Amara Majlis]

El chico ingresó por el portal sin temor alguno, Amara admiraba su determinación y la valentía con la que emprendía su viaje ambos desconocían los términos y enfrentamientos a los que se vería sometido y aún así se veía la confianza y tenacidad que lo caracterizaba para cumplir con su prueba de la manera más adecuadamente posible. Ahora solo quedaba esperar.

Se aproximó a un pequeño banco y se dispuso a observar el anillo de arcana, con el observaría los movimientos y el entorno en el que aparecía Cillian, gracias a eso identificó de inmediato una estructura perteneciente a un castillo, Amara nunca había estado ahí pero pudo apreciar que a Cillian se le hacía un lugar conocido, posiblemente perteneciente a su infancia, tanto ella como el Haughton se encontraban extrañados y a la espera del motivo que lo llevó a ese lugar y época por ahora solo quedaba esperar.

Adentro del castillo había gente discutiendo, un par de magos se enfrentaban a duelo y parecían muy molestos uno con el otro, en el centro una mujer de cabello castaño intentaba interrumpir el enfrentamiento, Amara arqueó su ceja derecha tratando de comprender la situación, ahora dependía de Cillian ver de qué manera podía someter sus habilidades a prueba sin ser descubierto.
 

@ Cillian Haughton

[Cillian Haughton]

El aspecto que pensaba había tomado al cruzar la puerta no había sido más que una simple ilusión. En aquel momento continuaba siendo aquel rubio algo escuálido que había sido desde el momento en que su madre había transferido su alma a un cuerpo nuevo. Desde su posición frente al castillo de la familia Haughton podía escuchar que como una pelea se desarrollaba dentro de sus límites, ¿qué estaría pasando ahí dentro y como es que él estaba relacionado a todo aquello? Negó, si no comenzaba a moverse nunca terminaría por descubrirlo así que comenzó a moverse poco a poco hasta llegar frente a una ventana gracias a la cual podría tener una mejor visión de lo que estaba sucediendo dentro del castillo.

- ¿Qué demonios?

Uno de los dos hombres que se encontraban en aquel momento en medio de un duelo era bastante parecido a él solo que con un par de años más de los que él tenía en el momento en que cambio de cuerpo. Desde fuera poco se enteraba de lo que decían, pero al parecer todo aquello tenía que ver con la mujer que intentaba detenerlos. Tenía que hacer algo, tenía que hacerlo rápido y lo mejor es que utilizara la animagia para crearse un poco de ventaja en aquella situación.

Se dejó caer al suelo bajo la ventana y centró su atención en cambiar el color de su cabello, logrando que este cambiara del rubio a un tono rojo cobrizo. Lo siguiente fue centrarse en su cuerpo, antes del cambio, era un poco más corpulento y un tanto más alto por lo cual primero puso toda su atención en cambiar su estatura. En sí, no recordaba exactamente su estatura exacta, pero logró que su cuerpo se alargara un par de centímetros. Lo siguiente fue volverse un tanto más corpulento, para después centrarse en los detalles como la forma de su rostro y el color de sus ojos.

Cambió la forma de su rostro intentando que este fuera lo más parecido a su rostro real y después añadió un par de pecas al mismo, las cuales nunca le habían gustado, para finalizar jugó un poco con sus cuerdas vocales, aunque lo cierto es que su voz no había cambiado demasiado y cambió el color de sus ojos un a un tono un poco más oscuro. No sabía exactamente como es que aquello ayudaría, pero esperaba que por lo menos el parecido que tenía con uno de los hombres le diera el tiempo suficiente para intentar descubrir que sucedía ahí dentro.

Una vez que su aspecto había cambiado por completo, se dirigió al interior del castillo y después hasta la habitación donde los otros se encontraban logrando escuchar a cada paso un poco más de la discusión que se tenía ahí dentro.

- No debiste llevártelo, Derek.

¿A quién no debió llevarse? Aquel momento no era el presente, había sido transportado varios al pasado y quizá él en aquella realidad no tenía más de un par de años de vida.

- Ella no era capaz de criarlo, lo sabes…

- No eres quien para decidir sobre lo que tu hermana es o no es capaz. Es su hijo, ella debió decidir lo que era mejor para él.

- Cillian estará mejor con los Ryddleturn -soltó Derek sin más-. Ese niño esta destinado para grandes cosas e Isobel solo iba a ser un obstáculo en su vida.

No.

¿Qué?

¿Ciilian? ¿Los Ryddleturn? ¿Por qué hablaban de él?

Ahora lo comprendía, era esa la razón de que siempre hubiera sido completamente lo opuesto a un Ryddleturn físicamente hasta después del cambio de cuerpo, pero aún así Lyra nunca lo había hecho menos. Sus pasos se fueron volviendo lentos poco a poco, no tenía ánimos de continuar, pero aún así logró llegar hasta la puerta de la habitación donde aquel trío se encontraba.

- Debes traerlo de vuelta, Derek, por favor -fueron las primeras palabras que escuchó decir a su madre.

- El volverá cuando este listo, Isobel… No hay nada que puedas hacer para impedirlo.

Abrió la puerta de un portazo, sin más, tenía que involucrarse en aquella historia. ¿Cómo demonios? ¿Realmente no era un Ryddleturn? ¿Había vivido engañado toda su vida y todo debido a aquel hombre con el que tenía un gran parecido? Estando ya frente aquel trío se percató de que su parecido no era únicamente con Derek, también podía ver gran parte de Isobel en él. En el momento en que cruzó la puerta todos lo vieron, la discusión se detuvo sin más.

- ¿Qué es todo esto? -preguntó Cillian.

¿Por qué el portal había elegido exactamente aquel momento como su prueba? Sí, había ocupado de la animagia para poder recuperar su aspecto real, aunque fuera solo por unos momentos, pero realmente no se esperaba nada de aquello.

- ¿Quién eres tú? -inquirió el hombre con quien no tenía parecido alguno-. ¿Cómo es qué…? Espera.

- ¿Esperar? ¿Qué debo esperar? No entiendo ni la mitad de todo esto y no sé porque el portal eligió mostrarme esto.

La tensión en aquel momento era demasiada, las palabras de Cillian fueron las últimas durante un par de minutos hasta que Isobel habló.

- ¿Eres Cillian no?

Cillian asintió, sus ojos comenzaban a llenarse de lágrimas.

- ¿Por qué lloras? -Intervino Derek-. Si estás aquí es porque mi plan ha funcionado… Debes estar casi listo para portar el apellido Haughton con orgullo.

¿Portar el apellido con orgullo? Cillian soltó un resoplido. ¿Por qué Derek había hecho todo aquello? Isobel se acercó hasta él, sus palabras apenas y lograban entenderse entre el llanto, pero pedía a Cillian que la perdonara. Sobre el plan de Derek aún no era el momento de que Cillian tuviera esa información, aquella prueba en la que tuvo que recuperar su aspecto real tenía como único objetivo de que él conociera la verdad sobre su pasado.

Así que de un momento a otro el escenario cambió y se encontraba una vez más frente a la puerta que lo había llevado hasta su prueba, al cruzarla descubrió que la arcana aún lo esperaba del otro lado. Su aspecto aún era el de un joven pelirrojo un tanto más joven de la edad que tenía realmente en aquel momento.

- ¿Lo he hecho bien? -para ese momento aún temblaba un poco, aún no lograba procesar aquello que la prueba le había puesto sobre la mesa.

[Amara Majlis]

Amara observó cada detalle desde que partió hacia dentro de aquel portal, si bien desconocía el motivo que había llevado a Cillian hacia el pasado y en aquel castillo, sabía por los años de experiencia que todo pasaba por algo, las pruebas siempre habían cumplido con el objetivo de enseñar algo a los aplicantes y de mostrarles un camino hacia su futuro. En esta ocasión no había sido la excepción, el Haughton había sido testigo de un secreto que muy pocos sabían, el origen de su verdadero apellido y mejor dicho el origen de el como persona y como mago. Amara hubiera deseado estar ahí para abrazarlo y apoyarlo en su camino pero sabía que aunque abriera la puerta de ninguna manera sería transportada hacia el muchacho.

Observó como cambiaba su aspecto físico aunque si bien le hubiera gustado ver mucha mas variedad en la prueba, el chico lo había hecho bastante bien, se notaba la naturalidad con la que usaba la metamorfomagia además había pasado con éxito los obstáculos que se habían colocado previos al ateneo. Ahora no quedaba más que observar la escena familiar tan conmovedora que hasta el ser con corazón más duro se llenaría de lágrimas. Una vez finalizada dicha situación, Cillian regresó al lugar del que había partido, su cuerpo había regresado a la normalidad aunque en su cara se veía nostalgia y tranquilidad, no tenía ni una hora que se había ido pero pudo ver a un joven mucho más maduro.

-Lo hiciste bien  - dijo la arcana – he de admitir que me hubiera encantado ver usando la habilidad muchas más veces pero has demostrado tener un talento único y nato así que no tengo más que hacer por ti – tomó su varita de cristal y comenzó a conjurar un hechizo hacia el anillo que le había otorgado a Cillian, acto seguido el mismo adquirió un brillo bastante especial – enhorabuena, has quedado vinculado a la perfección a la habilidad de metamorfomagia, espero uses tu habilidad con sabiduría y responsabilidad.

Amara se encontraba muy feliz, tenía mucho tiempo que no egresaba un alumno tan dedicado como él, sabía que era momento de verlo partir pero le daba tristeza saber que no lo tendría más en su clases. Le dio unas palmadas en su hombro mientras caminaban juntos hacia la salida del ateneo, ésta vez no como maestra y alumno si no como iguales.

 

@ Cillian Haughton