Prueba Libro de la Fortaleza - Noviembre 2021 [Kyle vs Luna]

[Kahlan Blackthorn]

 

Está vez esperaba que Luna diera lo mejor de ella, no era nada grato tener a un alumno dentro del mismo libro dos meses seguidos. No con lo combativo y exigente que era el Senescal ce Caronte, dándole a su alumna la oportunidad de aprender realmente cual era el manejo adecuado de todo lo enseñado por el libro de la Fortaleza. Las faldas del K2 eran el sitio elegido por el castaño, rocas bañadas por una fina capa blanca que hacía imposible mantener la temperatura cálida en sus cuerpos, pero el al ser un vampiro no sentía le menor incomodidad al respecto.

— Última oportunidad—la voz del Senescal de Caronte retumbo en el K2, dándole una nueva perspectiva a la enseñanza del libro de la Fortaleza. Apretando su zurda apareció su varita negra como el ala de un cuervo, sujetando con firmeza la empuñadura recorría el terreno marcando un circulo perfecto. Dentro del mismo estarían ambos duelistas, no se podía salir a menos que el Nigromante lo autorizará y la única forma era vencer al otro dentro del duelo. 

La prueba de Luna comenzó desde que aceptó presentarse a esa clase. Ya tenía experiencia con el tema, bastaba que se lo creyera para que las cosas salieran a su favor. Kyle era todo menos compasivo y no le pondría las cosas sencillas a al joven, aprender las duras lecciones dela vida siempre era un trago amargo y era mejor para ella hacerse a la idea de que así serían las cosas al enfrentarse al caballero. Macnair ya no tendría una sola consunción más con la alumna, le tocaba darlo el todo por el todo costará lo que costará. El perder la vida era la menor preocupación que debía aquejarle, ya que las cosas estaban predestinadas desde que les dejará caer al vació. 

Sus ojos azules estaban fijos en el nublado firmamento, escuchando a lo lejos los lamentos de las personas que masacrará antes de llegar a Londres. Cuerpos mutilados y sueños reducidos a un puñado de cenizas, ahora le tocaba a Luna elegir su era parte de esa obra maestra pintada por el lienzo blanco o comenzar otra donde ella era la poseedora de todos los conocimientos que le obsequiará dentro de la clase que había concluido—Preste atención a todo lo que suceda, aprenda a comprender antes de reaccionar o responder a mis ataques—le aconsejaba elevando con elegancia su varita—Silencius—el efecto fue inmediato, nada saldría de los labios de la Gryffindor, esperaba que pudiera ingeniárselas y atacar con astucia a su profesor. 

C O N D I C I O N E S

• No existen límites de tiempo entre respuesta y respuesta. Por tanto, la regla de hechizos impactados desaparece.
• Duración del duelo: Del 23 al 28 de Noviembre.
• Nos guiaremos por las Reglas Nuevas de duelos existentes.
• Lista de Hechizos (con especial énfasis en el Libro de la Fortaleza). Obligatorio su uso para poder aprobar y quedar vinculadas con éxito al libro.
• Están prohibidos los Off y las ediciones.
• Consultas, dudas o sugerencias, al topic del Consultas del Libro de la Fortaleza

 

@ Luna Gryffindor Delacour

Editado 23 de Noviembre del 2021 por Mica Gryffindor

[Luna Gryffindor Delacour]

Estaba allí lista para el duelo, una parte de ella se preguntó porque había vuelto allí, otra quería demostrarle que podría hacerlo bien esta vez, su primer impulso fue decirle que no se amedrentaria y que daría lo mejor de sí misma y así se lo hizo saber, aún a riesgo de sonar más segura de lo que en realidad estaba en esos momentos. 

 

- No escaparé y aprenderé a saber cuál es la mejor idea de acción, antes de lanzarme a hacer algo, será interesante ver si lo logro al fin... No si sabe que soy algo impulsiva... así que si algo está mal, no tema en corregirme por favor- le dije segura de que podría conseguirlo esta vez - 

 

Su silencius me dio el tiempo justo para sacármelo de encima, si me había dado pero no por eso significaba que no podría evitarlo de alguna manera, habiéndome quedado muda, decidí deshacerlo de la única manera que sabía, esperando que eso estuviera bien y pensando muy bien la forma de seguir el duelo, debería de salir ilesa y además quería demostrarle que había aprendido la lección principal de aquel día, tomar precauciones y pensar bien antes de actuar. 

 

- Finite Incantatem - Dije apunta a mi garganta y viendo cómo podía volver a hablar al fin y esperando que eso solo fuera el comienzo de un buen aprendizaje - 

 

Mi mente voló hacia algún hechizo que podría funcionar para él, no tenía que pensarlo demasiado así que se dijo que lo haría lo mejor posible o al menos, saldría viva de aquello está vez. 

 

- salvaguarda mágico - dije viendo cómo me volvía intangible a sabiendas de que eso era correr un riesgo, uno que querría correr en esos momentos mientras esperaba su siguiente movimiento- 

 

Estaba bien empleado? Una parte de ella quiso darse de sartenazos en la cabeza, sabiendo que le había dado vía libre para que la atacara como quisiera, pero aún así se dijo que era mejor intentar protegerse como mejor sabía que atacar, algo dentro de ella le dijo que eso podía ser un error, pero suspiró porque quería salir viva de acá y además esperaba aprender a usar los hechizos pertinentes. 

 

- Bueno, solo intente no matarme por favor... Qué tengo una cena familiar a la que acudir luego de aquí y por cierto me olvidaba de inclinarme perdón - le dije mientras le hacía una reverencia sin dejarlo de ver a los ojos, esperando que supiera que daría todo de mí para aprobar está vez - 

 

Suspiré indecisa de que pasaría a continuación, una parte de ella supondría que había tomado la decisión incorrecta, la otra le dijo que era mejor prevenir que curar, a cuál de las dos hacia caso? Sea como fuera, la suerte estaba echada y ya no podía hacer más nada, sólo esperaba que nada tan malo le pasara, al fin y al cabo, pensaba que el profesor jamás querría matarla o dañarla tanto o al menos, eso es lo que se imaginaba en su fuera interno. 

[Kahlan Blackthorn]

 

El Holandés, esperaba en está ocasión que a Luna le fuera mejor dentro del duelo. Porque la situación, no le pintaba de lo mejor a su rival. Concentrando en el duelo, intentó no prestar atención ala perorata de la mujer, no era el mejor sitio para ponerse al día con sus agendas personales. El como Ministro de Holanda, si que tenía un mundo de reuniones, pero no por eso las llevaba al campo de batalla. Le aconsejaría concentrarse en como atacar y defenderse, dejando de prestar atención a situaciones triviales y sin sentido

—Zancadllla—pensó atando los tobillos de la mujer con un lazo mágico, provocando que cayera de bruces contra el suelo. El dolor debió ser profuso, pero no para causarle una herida que pusiera en peligro su integridad física. De desearlo, le hubiera matado de una y no darle tantos rodeos al asunto. Su cuerpo era una bomba cargada de adrenalina, dispuesto a estalla sin remedio alguno. Los sentidos del caballero estaban fijos en atacar y defenderse de todo lo que lanzarán contra su persona.

— Si sobrevive, no dude que podrá cenar hasta hartarse de comida—la seriedad reinaba en su atractivo rostro. Cerrando sus ojos por un breve instante, recorría con las yemas de los dedos su pecho, justo donde descansaba quimera su nexo con su mejor amiga y aliada. Ambos Macnair acabarían con cualquiera que se cruzará en sus caminos, dejándose ese deleite para otro momento. No dudo en atacar de nueva cuenta a Luna, dando un fuerte latigazo con su varita sentenció desafiante—Silencius—nada saldría de la boca de su rival, debería ser más astuta y elegir con inteligencia sus siguientes acciones. Porque de un momento a otro, si que se le pondría el camino mucho más escabroso de lo que ya se le estaba revelando.

@ Luna Gryffindor Delacour

[Luna Gryffindor Delacour]

Escuché lo que dijo asentí resuelta y preocupada, nunca había sido mi fuerte los duelos pero como ya estaba en el baile era mejor bailar no? Así que seguiría su consejo poniéndole más atención que antes, así que frunciendo el entrecejo pensé en mi siguiente acción.

 

- Evanesco - dije apuntando a mis tobillos viendo como el lazo magico desaparecía por suerte - 

 

- Entonces comeré hasta hartarme cuando termine esto, solo quiero salir viva de acá o al menos intentarlo, ojalá pueda defenderme bien - Le dije y le hice una reverencia, preguntándome porque no lo había hecho antes - 

 

Había sido tan descortés con él? Mientras pensaba en eso, aprovecho mi distracción para dejarme muda, suspiré sonriendo porque así pondría las cosas más interesantes, acababa de darme una buena idea y no querría estar en sus zapatos en estos momentos. 

 

- Embrujo Punzante - Pensé esperando que su rostro quedé desfigurado y eso le impidiera decir bien los hechizos - 

 

Sonreí alegre de al menos haber podido defenderme bastante bien de su hechizo, me pregunté si estar tan concentrada podría hacer que estuviera viva luego de esto, aún así estaba feliz de haber dado este libro y porque no de intentar al menos aprobarlo está vez y aprender el conocimiento pertinente, sólo debía de pensar bien mis siguientes movimientos. 

 

@ Juv Macnair

[Kahlan Blackthorn]

 

Luna parecía estar un poco desfasada del duelo, errando al intentar librarse del Zancadilla del Senescal de Caronte. Desviando la mirada de su objetivo por un breve instante, intentaba sin éxito apaciguar la decepción que apareciera en su faz.  Notando que el lazo mágico aún ataba los tobillos de la joven. 

— Parece ser que la lección, no ha sido aprendida de la forma correcta—sentenció elevando con elegancia su oscura varita—Salvaguarda mágica—pensó ese conjuro sintiendo como si el mismo fuera una flecha que surca el aire y lo corta. Volviendose intangible evito de ese modo que en embrujo punzante hiciera de las suyas en su rostro,  experimentando lo que vivía un fantasma al atravesar las paredes. 

—Debe prestar más atención, porque la suerte no esta de su lado tampoco en esta ocasión—preparando si siguiente ataque, tercio una ácida sonrisa en sus labios. Dando un golpe certero contra el suelo, desataba con esa acción una oleada de adrenalina —Seccionatus—pensaba con calma esa hechizo. Emanando de la punta de su varita doce medias lunas, resplandecientes y filosas. 

Buscaba que al menos cinco de ellas se incrustaran en la pierna derecha o brazo izquierdo de su aprendiz. Todo quedaba en manos de la suerte y esperaba que en esta ocasión no errara al intentar defenderse. Sino volvería una a cursar una tercera vez en libro de la fortaleza. 

El tenía tiempo de sobra para dedicarlo a sus clases, no le molestaba en lo más mínimo ceder algunas horas a la enseñanza de los libros de hechizos. Porque con cada clase impartida, aprendía cosas y obsequiaba algunas más a quienes deseaban incrementar los conocimientos que ya poseian o adquirir otros que les serían de gran ayuda en el futuro. 

@ Luna Gryffindor Delacour