Duelo - Libro Equilibrio - Enero 2022

[Badru]

Badru se encontraba en un paraje desierto, no existía nada alrededor del Uzza. Ni una sola alma pululaba por esa zona, dejándole el campo abierto a su aprendiz y al hombre. Era momento de poner el práctica todo lo aprendido por Agnes, dándole la oportunidad de demostrar que era capaz de equilibrar el cuerpo, la mente, el alma y sobre todo la magia que se llevaría con ella tras aprobar aquel examen que sin duda le llevaría al limite de lo inimaginable. 

— Piense antes de atacar o responder a mis acciones. Medite cada una de las posibilidades que tenga a su favor y aprenda a sobrellevar las que estén en su contra—la voz de Badru era como una pesada loza. No se tentaría el corazón y mucho menos se dejaría dominar por las emociones. Ya le había enseñado parte de su personalidad de la mujer, mostrándose como un ser puramente desligado de las conexiones que solían entablarse entre profesor y alumno. Apareciendo su varita en su mano meditaba por un breve instante su primer movimiento.

—Arena de hechicero—soltó lanzando los huesos cristalizados de un mago al aire, caído por el fuego mágico. La visión de Agnes se vio afectada, dejándole como único recurso usar hechizo de tipo efecto o invocación. Esperaba que actuará de forma inteligente. Lanzando toda la carne al asador. El simplemente se limitó a esperar, no se intimidaría ante la rival que tenía delante, sino todo lo contrario. El tiempo ya estaba comenzando a correr, sintiéndose francamente emocionado por la travesía que habían iniciado hace unas semanas. 

C O N D I C I O N E S

• No existen límites de tiempo entre respuesta y respuesta. Por tanto, la regla de hechizos impactados desaparece.
• Duración del duelo: Del 21 al 30 de Enero 2022.
• Nos guiaremos por las Reglas Nuevas de duelos existentes.
• Lista de Hechizos (con especial énfasis en el Libro del Equilibrio). Obligatorio su uso para poder aprobar y quedar vinculadas con éxito al libro.
• Están prohibidos los Off y las ediciones.
• Consultas, dudas o sugerencias, al topic del Consultas Libro del Equilibrio

@ Scavenger Weatherwax

[Agnes Lynn]

Agnes Lynn

De algún modo, es como si estuviera despegada del tiempo. En un momento su profesor le explicaba a detalle el correcto funcionamiento de los elementos del libro del Equilibrio y en un parpadeo, la batalla ha empezado. Asegura el libro y los frascos de ingredientes en el bolso que cuelga de su cadera, dejando las manos libres para iniciar el duelo.

Los árboles que adornaban el paisaje antes ahora no se ven por ningún lado, y lo vacío del área sólo sirve para recordarle la urgencia del asunto. Frente a ella, tan impasible como el desierto que los rodea, se encuentra su profesor. La mirada intensa, pero sin reflejar una simple emoción. Ni siquiera sus palabras, que dichas por cualquier otra persona bien podrían ser una amenaza suenan como una, sino como un consejo: debe recordar las cosas que puede usar a su favor y lidiar con las que estén a su contra.

Esto se hace evidente cuando su maestro lanza el primer hechizo, y en un instante Agnes encuentra su visión comprometida. La arena del hechicero ha hecho su trabajo correctamente, no puede ver nada. Instintivamente siente el miedo empezar a reunirse en su estómago, pero recordando las palabras dichas al inicio del duelo, respira profundo y se obliga a sí misma a mantenerse calmada.

Trayendo la imagen de su profesor a la mente, piensa en una maldición, para que el siguiente hechizo del mago se vea afectado, se convierta en una versión ridícula que no pueda dañarla a ella o darle una ventaja a su oponente.

En voz alta, y con la imagen seria del mago aún en la cabeza, entona — Cinaede. No puede verlo, gracias a la arena que le cubre los ojos, pero si todo sale bien el gas venenoso del hechizo empezaría a rodearlo, haciéndole imposible el respirar a menos que despeje sus vías respiratorias.

@ Badru

[Badru]

La sonrisa que se plasmó en los labios de Badru era imposible de descifrar, sintiéndose satisfecho ante el accionar de su alumna. Pero un segundo después la decepción de hizo presente en sus ojos, porque algo no terminaba de cerrarle dentro del duelo, observando como una maldición afectaba su siguiente movimiento, se limitaba a actuar de lo más normal ante el ataque de Agnes— Aguamenti—pensó el Uzza brotando de la punta de su varita todo menos un chorro de agua. Serpentinas de colores y un remedio de broma era lo que surgió de su varita.

Le gustaba como sus aprendices aderezaban las clases, muchos de ellos eran bastante ocurrentes y creativos. El mismo se consideraba severo a la hora de entrenarlos en las pruebas finales, pocos salían con la cabeza en alto y la vinculación debida con el libro del Equilibrio— Anapneo—se libraba de la obstrucción del gas sobre sus vías respiratorias. Soltando una profunda bocanada de aire, dándose el tiempo de retomar el control de sus  pulsaciones y salvándose de morir. Ahora le tocaba a Agnes ser un poco más astuta y no tan certera en sus ataques, porque la vinculación con el libro, no estaba ni cerca de hacerse presente en sus planes.

— Aprenda a reconocer con claridad los daños que causan sus efectos, no importa que puedan ser o no frenados por sus oponentes. No deje espacios vacíos o huecos que puedan ser usados en su contra—le aconsejaba asegurándose de que el mensaje fuera recibió con éxito. Estaban a nada de terminar con la clase, pero aún no se sentía del todo complacido con lo aprendido por la mujer.

[Agnes Lynn]

Agnes Lynn

El Uzza se sacude el cinaede fácilmente, sin mostrar algún temor o incomodidad. No le sorprende, sabe que los guerreros Uzza son increíblemente poderosos y deben estar acostumbrados a lidiar con estudiantes día tras día.

Es más el tono de decepción que acompaña las palabras subsecuentes del mago lo que la incomoda. Es cierto que esta clase le ha resultado más confusa que las anteriores, ya sea por los tiempos o la cantidad de materiales que vienen con el libro, es como si no pudiera enfocarse del todo. Esto no quiere decir que no va a intentarlo, ha llegado muy lejos como para rendirse ahora.

Su profesor le pide que piense, así que eso hace. Al final decide devolverle al Uzza el ataque que él había hecho contra ella. — Arena del hechicero — extendiendo el brazo lo más lejos posible, suelta el fino polvo de los huesos cristalizados al aire. El efecto es inmediato, dejándolos a ambos en igualdad de condiciones, sin poder ubicar bien al otro y con sólo efectos e invocaciones a su favor.

En su mano izquierda, la que no sostiene la varita, visualiza su daga del sacrificio.  — Immolo oppugnare — enuncia antes de hacer un corte profundo en su muslo, mismo que se podrá ver en su profesor inmediatamente. Siente el ardor familiar en la pierna, y el flujo de la sangre corriendo por su piel, para detenerlos piensa en una curación mientras espera la reacción del Uzza.