Libro de la Fortaleza - Enero 2022 Zenin Vs Belmont

[Kahlan Blackthorn]

Había preparado un terreno ideal para que Zenin y Belmont tuvieran el encuentro tan esperado, destilando lo aprendido durante la clase del libro de la fortaleza. Esperando que las explicaciones dadas por el Holandés, no pasaran desapercibidas para el par de jóvenes. Era como tener en la zurda una balanza vacía colocando del lado derecho una pluma y en el lado opuesto el corazón de uno de los aprendices. Si el mismo era menos pesado que la pluma, se daría por complacido al comprobar que su misión estaba cumplida. Transmitir los conocimientos que adquirió tras cursar aquel libro años atrás, refrescando en parte el sistema que se aplicaba en la actualidad.

— Fortaleza es lo que se requiere, no olviden lo citado dentro de la clase. Deben usar todos los hechizos que crean les sirven dentro de la batalla, aquellos que no tiene un uso como ataque o defensa—carraspeó aclarando su garganta— Úsenlos solo si lo consideran necesario—agregaba admirando el grupo de montañas que rodeaban a sus alumnos. Ya no estaban dentro del bosque, pudo transportarlos hacia una zona menos extremosa y que les sacará la poca energía que aún conservaban en sus cuerpos.

Dándoles la libertad de moldear a su antojo el sitio donde se llevaría acabo el duelo, decorándolo de la forma más creativa que ellos pudieran imaginar. Sería un espectador apreciando con ojo clínico el desempeño de sus pupilos, indicándoles de ser necesario cuando cometieran alguna clase de fallo o errarán en sus movimientos.

C O N D I C I O N E S

• No existen límites de tiempo entre respuesta y respuesta. Por tanto, la regla de hechizos impactados desaparece.
• Duración del duelo: Del 23 al 30 de Enero 2022.
• Nos guiaremos por las Reglas Nuevas de duelos existentes.
• Lista de Hechizos (con especial énfasis en el Libro de la Fortaleza). Obligatorio su uso para poder aprobar y quedar vinculadas con éxito al libro.
• Están prohibidos los Off y las ediciones.
• Consultas, dudas o sugerencias, al topic del Consultas del Libro de la Fortaleza

 

Editado 23 de Enero del 2022 por Kahlan Macnair

[toji]

El Zenin repasaba mentalmente lo aprendido con el holandés en las clases para hacerse con el libro de hechizos que estaba estudiando. Sobre la teoría era muy fácil entender los nuevos poderes que estaba a punto de utilizar en contra de su contrincante, si bien no dejaba de ser un duelo de practicas, Fushiguro no iba a ponérselo fácil al belga, no si iba a dejar pasar esta oportunidad para incrementar su poder y ponerlo en práctica. —Estoy listo, señor Macnair— masculló decidido mirando a su oponente. El belga allí plantado en frente de Toji, mirándolo fijamente en señal de también estar preparado para lo que se avecinaba. 

El Zenin sintió en sus entrañas la rara sensación que le provocaba la aparición. El profesor le había trasladado a un sitio diferente para poder poner en prácticas los conocimientos que habían adquirido. Ahora se encontraban a la orilla del rio Congo, antiguamente llamado Zaire, el noveno río más largo del mundo, seguían en la región africana, apenas se habían desplazado un poco del lugar de origen en donde había estado aprendiendo sobre los nuevos poderes del libro. —Buena elección— agradeció el poder salir de la calurosa espesura del bosque tropical en el que los había hecho andar el profesor. —ahora estaremos más frescos, eso si.

—Muy bien Belmont, ¿estás preparado para sufrir unos cuantos arañazos? 

Sacó su varita y se puso en guardia esperando a que su contrincante haga lo propio y así poder empezar el duelo. Toji miró a su alrededor para visualizar el terreno en el que se iban a desenvolver, aun había bosque a su alrededor, pero en menor cantidad. Los arboles no eran tan grandes como los que habían dejado atrás. Se veían los estragos de las corrientes y las marejadas en los trozos caídos de los mismos arboles, trozos de troncos de varios tamaños y formas. Unos más arraigados que otros interponiéndose en el cause del río, haciendo de hogar para algunos mamíferos que los tenían como su hogar. Del otro lado del rio se veía como una manada pequeña de elefantes bebían y jugueteaban en la orilla. ¿Una serpiente? Quizás si … o habrá sido sus ojos o su cabeza que lo traicionaban. 

Varita en ristre y muy concentrado pensó en su primer hechizo. El Disparo de flechas, de su varita salieron doce flechas disparadas hacia Belmont. El belga tendría que defenderse de estas flechas ya que de no ser así estas impactarán en su cuerpo provocándole heridas de gravedad.  

 

@ noe_snape  @ Kahlan Macnair

[Noeline Malfoy McFarlan]

 

Blandir la varita en contra de un ¿amigo? No era lo que esperaba de esta actividad; para la próxima debería de leer las letras pequeñas pensó soltando una risilla, como si aquel fuera su estilo de enfrentar la vida. Sabiendo que siempre se dejaba llevar por las situaciones, era más que obvio que era una idea que nunca aplicaría. 

El maestro los había transportado hacia otro lugar. Una brisa de viento fresco llegó a mover los cabellos del rubio. No había mucho cambio en el clima pero ese ligero viento proveniente del río se agradecía mucho. Rodeados del bosque por un lado, se mantenían de pie en un área limpia de los grandes árboles, donde quedaban restos de troncos resultado de la subida del río. Ante sus ojos sólo un par de elefantes se alcanzaban a divisar, pero era seguro que habitaban más seres al rededor, aunque no estuvieran al alcance de la vista. 

A la voz del japonés se volvió a enfocar en lo que habían venido a hacer. Su familia no era muy dada a la batalla ni a los duelos, menos de una manera deportiva. Pero una de las pocas cosas que su padre le había enseñado sobre ellos era que tenía que mostrar su educación. Luego de hacer una reverencia hacia el nipón, levantó en ristre su varita atento a lo que podría surgir del arma de su contrincante. 

—¡Que comiencen los juegos del hambre!— soltó con una sonrisa, recordando una frase que solían usar los muggles, aunque no tenía claro si la había empleado en una situación oportuna. 

De inmediato vio como una serie de flechas se dirigían a su humanidad, sin tiempo de explorar en su mente los hechizos que conocía, recordó algo que recientemente les había comentado el profesor. —Salvaguarda mágica— pensó y escuchó el silbido de las flechas al acercarse y luego al alejarse, pero estas no lograron tocarlo y por ende no le infligieron herida alguna. Ahora ya se perdían entre la espesura del bosque. 

—Buena jugada colega.— soltaron sus labios acompañados del siguiente hechizo —Incárcerus— a la vez que su varita se movía en consecuencia. Unas delgadas cuerdas envolverían al mago.

 

[toji]

Fushiguro, Toji 

PV: 100
PP: 5 +1

Los movimientos del belga eran raudos, al parecer tenía nociones de duelos. ¿Los jugadores de quidditch se baten en duelo? Jamás pensó en esa posibilidad, sin embargo, le subió la moral. Tenía curiosidad por saber como acabará el duelo, se estaba divirtiendo y esa sensación le sacaba una sonrisa, cosa que no sucedía desde hace mucho. 

Belmont sorteó las flechas mágicas lanzadas por Toji con uno de los hechizos que habían llegado a aprender en esos bosques. El nipón se regodeo excitado por la adrenalina que subí su ritmo cardiaco segundo a segundo, escuchaba muy fuerte sus pulsaciones y su instinto de supervivencia estaba a flor de piel. El duelo, aunque de práctica le venía muy bien para adquirir más experiencia. 

—Salvaguardia mágica— pensó al tiempo que Dubois lanzaba su hechizo para invocar las cuerdas. Toji había empleado la magia propia del libro de hechizos que estaba estudiando, tenía la teoría fresca y era hora ya de ponerla en practicas. 

—Hay que esforzarse un poco más, “colega” — se burló el Zenin. —No me gustaría que Macnair nos suspenda porque ninguno de nosotros sangre— finalizó mientras describía pequeños movimientos circulares sobre si mismo. Volvió alzar la varita y apuntando directamente el belga vociferó emocionado. —Sectusempra—  (PP -1) un rayo salió despedido de la varita del japonés en dirección a Belmont. Le obligaba a defenderse de inmediato, de lo contrario se desangraría. Las heridas, de impactar el rayo, le consumirían 50 puntos de vida a causa de la herida crítica, necesitando así una curación inmediata y otra más si quería curarse del todo. 

—Espero no acabar con tu carrera deportiva en este duelo— sonrió con divertida malicia. 

 

@ noe_snape  @ Kahlan Macnair

[Noeline Malfoy McFarlan]

 

La brisa agitaba los rubios cabellos y la actividad que habían iniciado con su compañero aún no ahuyentaban a la familia de elefantes que se encontraba junto al río. El sol que se levantaba en lo alto del cielo de Africa Central continuaba provocando sus efectos en el belga, esperaba pronto terminar con esta clase. Era divertido, pero el clima del lugar no era para nada favorecedor. Si se hubiera desarrollado en un lugar más templado, o mejor aún frío se podría quedar divirtiéndose todo el tiempo necesario.

El segundo hechizo que había lanzado no había tenido el efecto deseado. Cuando las cuerdas tomaron forman sobre su contrincantes, cayeron inmediatamente al suelo sin encontrar donde sostenerse. El japonés parecía haber replicado el mismo hechizo que usara el rubio con anterioridad, porque el efecto era similar y no le había escuchado pronunciar ningún otro. Como reacción una mueca de decepción se dibujo en el rostro del joven, la cual duró breves segundos; le era tan extraña a sus maneras que le costaba mantenerla.

Observaba los movimientos de varita y junto con la emoción, no eran buena señal. A la vez que el rayo se dirigía al lugar donde se encontraba no le quedaba más que soltar su contraparte, era algo básico pero que sería de gran ayuda. –Protego– La palabra salió de sus labios y al mismo instante se formó un muro a modo de escudo que absorbió el rayo antes de impactarlo. –Buena jugada, parece que esto va en serio– Con una sonrisa aún en el rostro, pero la mente completamente enfocaba en el intercambio de hechizos debía continuar con el encuentro.

Desde el inicio no había descuidado el grupo de elefantes y aunque parecían serenos y eran carentes de poderes especiales, bien podrían provocar algún que otro contratiempo. Esta vez no apunto su varita hacia Toji y pensando en otra de las enseñanzas del holandés en su mente se formaron las palabras –Orbis Bestiarum– un anillo dorado envolvió al más grande de las criaturas y en una rápida carrera se dirigió a embestir a Fushiguro. No era muy adepto a los animales, pero si este lograba cumplir su cometido lo amaría.

[toji]

Fushiguro, Toji 

PV: 100

PP: 4 +1

El calor le pasaba factura al mago, el sudor recorría su espalda empapando su haori pegándolo cada vez más a su robusto cuerpo. Le recordaba a los largos verano que pasaba en Osaka, en donde se había criado. El clan del que era procedente tenía sus raíces en una aldea a las afueras de la antigua capital nipona. Sonrió al evocar la idea de volver a su país natal. Contaba los días para poder volver a su patria para reclamar lo que es suyo, lo que le arrebataron cuando apenas era un niño… cuando escapó del seno de su familia por que lo querían asesinar. Algún día volverá. 

Miró fijamente a Belmont, la expresión en su rostro le delataba, se estaba divirtiendo al igual que Toji, se le notaba en la cara. El belga sorteó su ataque con facilidad, verdad no esperaba herirlo de gravedad, si no simplemente causarle unas cuantas magulladuras o cortes pequeños que sirvieran como recuerdo de haber tomado esa clase juntos. Hizo una mueca después de ver fallido su ataque. 

—Expelliarmus— susurró divertido. El rayo salió disparado de su varita en dirección al mago que tenía en frente despojándolo así de su varita. Este había hechizado un elefante que se acercaba directo al Zenin, el animal lo arroyó haciéndole una leve herida en antebrazo izquierdo. (PV: -10). El animal no se dio de la vuelta y siguió su rumbo de vuelta al rio. Toji vio su herida y pensó en que tenía que curarse de inmediato si no lo hacia de inmediato sangraría mas. —Curación— (PV: +30) Fushiguro se concentró en la herida que estaba sufriendo y en que tenía que sanarla. Era otra de las enseñanzas que había compartido Kyle con ellos. Así lo hizo, sintió cómo sus fuerzas volvían a su cuerpo y la herida sufrida a causa de la embestida sanó de inmediato. 

—Sectusempra. (PP: -1)

Belmont ya despojado de su varita recibió el rayo directo en su cuerpo hiriéndolo de gravedad (PV: -50) y acorralándole y poniéndolo entre la espada y la pared. 

 

@ noe_snape  @ Kahlan Macnair