Libro del Equilibrio - Julio 2022

[Runihura]

El equilibrio era vital dentro de la existencia de los seres que habitaban el planeta, aunque Runihura lo veía desde otra perspectiva mucho más intensa y profunda. Sintiéndose conectada con el amuleto que era capaz de devolver de la muerte a una persona que pereciera dentro del campo de batalla. La resurrección era un proceso que le daba la oportunidad de recuperar lo que le arrebataron de manera inesperada, debía tenerse cuidado con esas fuerzas una vez que las mismas fueran puesta en acción.

El cementerio donde yacían los antiguos Uzzas, contrastaba a la perfección con la perspectiva de la mujer. Su rostro aparentaba ser más joven de lo que era realmente era, dibujándose en sus labios una sonrisa inocente que le hacía lucir como una pequeña que solo deseaba jugar y gastar bromas al por mayor. Para la mala suerte de sus dos estudiantes, no existirían risas o juegos divertidos que les hicieran más sencillo su aprendizaje— Recuerden traer los amuletos y anillos que el libro contiene, aprenderán el uso correcto de cada uno de ellos—la voz de la Uzza se plasmó en dos pergaminos que se doblaron perfectamente en un par de avioncito de papel.

Aguardaría impaciente la aparición de las dos chicas, jamás se había cruzado con ellas dentro de Uagadou y eso le daba cierta ventaja sobre ellas. Ya que no conocía los métodos empleados por la guerrera, bien se decía que era mejor lo viejo por conocido que lo nuevo por conocer. Caminando entre las tumbas percibía la energía que brotaba de los antiguos maestros, seres que le enseñaron lo que sabía durante demandantes horas de entrenamiento— Pasarán por lo mismo, no será sencillo que salgan de aquí con vida—iluminándose sus ojos con un brillo enigmático. Tomaba el mango liso y cilíndrico de su vara de cristal, continuando con su andar.

Detectaba a lo lejos el lazo del diablo que colocará para que sus alumnas no entrarán a sus anchas dentro del campo santo. Debian afrontar esa prueba y otra que les estaría esperando más adelante, el chillido estridente de algunas mandrágoras que habían sido molestadas por la pequeña y ahora se quejaban como críos desesperados por un poco de atención que aliviará su dolor.

@ Malum Luxure @ Ada Camille Dumbledore

Editado 1 de Julio del 2022 por Goderic Slithering

[Ada Camille Dumbledore]

De nuevo de regreso en las montañas de la luna en dirección al Instituto mágico de Uagadou, la verdad iba a terminar comprando un terreno al lado del Lugar para residir allí cerca mientras seguía mis estudios mágicos porque se me estaba haciendo bastante habitual el estar por allí. Esta vez estaba por adquirir los conocimientos del libro del equilibrio, no era descabellada la idea de estar allí en aquel lugar en donde yacía tanto conocimiento, lo Uzzas llevaba sobre sus hombros una responsabilidad enorme al transmitir todo este conocimiento a magos y brujas que mirábamos hasta aquí para lograr aprenderlo. Esta vez iba menos ansiosa, me había llevado bien con el manejo del libro del equilibrio y no entendía del todo porque, era como si fuera algo más cercano a mi como persona. Los hechizos los había leído y casi aprendido al instante de leerlos, cosa que no era usual pues me habían costado comprender otros conocimientos. Por eso mismo me sentía más tranquila y enfocada, era como si algo dentro de mi me dijera que ese conocimiento era parte de mi desde hace mucho y fluiría a través de mi con naturalidad.

 

En esta ocasión iba vestida más casual pantalón de cuero negro y una capa a rayas roja azul y dorada, botas largas, el cabello suelto bajo la capucha de la capa. Mi cabeza iba directamente en el pensamiento de poner en práctica el libro del equilibrio, raramente esa era la palabra que justo expresaba lo que sentía que estaba mi vida : equilibrada.

 

Vi a la Uzza esperándonos, me sorprendí y me alegre a la vez, pues el ver a una mujer enseñándonos los conocimientos ancestrales de los Uzza.

 

- Saludos maestra, soy Ada Camille Dumbledore, es un honor. 

 

Salude con una venia, saque de mi bolso de piel de Moke el amuleto y el anillo del libro del equilibrio y los puse en mi mano izquierda, lista para empezar.

 

 

 

 

 

[Malum Luxure]

Me parece que me había precipitado a seguir estudiando, pero bien dicen "ya estamos en el baile...pues bailemos", el libro del equilibrio sonaba muy bien su título, pues es algo que todos buscamos tener, es una manera de llevar la vida en forma ordenada, tener mucho de una cosa es malo, ya sea justamente algo bueno por que a la larga se trasforma o algo malo por que empeora...yo soy parte de un equilibrio constante entre la misma Lady y yo Malum, la existencia compartida de la dos en un cuerpo es difícil pero no imposible, así que adquirir este conocimiento me ayudará a subir un nivel más en mi meta y desde ya seguir manteniendo el control balanceado de mi situación.

Un avión de papel llegó a mi oficina personal en el Palacio Imperial de Hofburg donde me encontraba trabajando, en el pergamino informaba que debían preséntame a mi clase con el libro, el anillo, los dos frascos con sustancias y el amuleto que este contiene, me apresuré a cambiarme y tomar rumbo a destino.

La escuela mágica de Uagadou era sin duda enorme esta vez el llamado de Runihura nos había citado en un cementerio, supuse que esto tenía que ver con la posibilidad de revivir a uno durante el duelo, no me asustaba ni nada, mas bien me daba curiosidad un sitio sagrado, de hecho podría tomar ideas para mí local "Cajita feliz"...una sonrisa se plasmó en mi rostro pues me había casado en una funeraria con cementerio, pero volviendo a lo que me compete llevaba un Atuendo lo suficientemente cómodo que me permitiría libertad de movimiento, me coloqué el anillo en la mano izquierda junto con los de los libros anteriores, los amuletos al cuello y los frascos bien agarrados a la cintura junto con mi bolso de piel de moke donde llevaba los libros, tanto que el que iba a necesitar como los anteriores, "Angis" en mi mano derecha y la posibilidad de invocar la daga de sacrifico en caso de ser necesaria.

Finalmente partí usando el mensaje como guía de mi destino, al llegar noté que mi hermanita ya estaba ahí, sutilmente toque su mano a modo de saludo cuando llegue a ponerme a su lado y le regalé una dulce sonrisa, luego miré al frente encontrándome con la Uzza que impartirá la clase y mi rostro se volvió gélido, tenía apariencia de joven "inocente" pero como las mayoría de las veces eso es un vil engaño.

-Un gusto encontrar una dama guerrera...supongo que no por ello será más fácil o usted más piadosa.- Le salude con calma, pues aún no quería pensar demasiado en lo que tendríamos que afrontar y ponerme nerviosa. -Soy Malum Luxure.- Finalice la presentación pues decir algo más estaba más que sobrado.

Dando una mirada un poco generalizada noté muchas plantas, no es que no me agraden pero en especial las mágicas hay que saber tratarlas, tenía estudio en herbologia a ver si eso me servía de algo para complementar lo que veníamos a aprender, así que no puedo más que esperar que la maestre empiece con la lección.

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[Runihura]

Runihura era todo menos amistosa a la hora de impartir sus clases, centrando su atención en lograr que sus alumnos aprendieran a usar los hechizos de manera correcta. Detestaba más que nada los errores que solían cometer de manera tan absurda y todo por no prestar la debida atención a las explicaciones dadas por la Uzza. La educación que mostraron ambas mujeres fue agradecida por la joven con un asentimiento de cabeza, dándole la importancia mínima a todo ese asunto. No estaba ahí para socializar con ellas, sino todo lo contrario, buscaría exprimirlas como limones extrayendo la última gota de sumo que poseyera en sus cuerpos.

— El anillo antiveneno de las ayudará a evitar los efectos de los venenos que sean usados en su contra. Si ustedes lo llevan puesto al ser envenenadas, no les causará el menor daño dicha toxina, aunque deben recordar que no es útil contra el veneno de basilisco—les señalaba el anillo que llevaba puesto en su dedo corazón. Agitaba un pequeño frasco que contenía las semillas de hielo, diminuta arena de color plata que tiene la capacidad de transformar en hielo una zona de 100m2— Se agotan si se usan con frecuencia, pero se van reponiendo conforme pasa el tiempo. Pueden llevar las semillas de hielo de manera fácil y sencilla, colgándose el frasco en el cuello como un amuleto—explicaba observando los pétalos que volaban en el aire.

— Son los pétalos del pensamiento, suelen ser empleados para la elaboración de perfumes que pueden ser tan venenosos y al mismo tiempo encantadores, dependiendo de la concentración que se le de. Si la fragancia se propaga a través de una vela, alentada por el fuego los efectos alucinógenos antes de que sobrevenga la muerte serán más potentes de lo normal—tomaba uno con la yema de sus dedos— Poseen su parte positiva y es que se emplean para la creación de pociones que son capaces de estimular la agilidad mental o en caso contrario, lograr que una persona pierda la capacidad de razonar o no pueda pensar de manera lógica—aquella parte le resultaba divertida y emplearla para gastarles una broma no estaba del todo descartada. 

— La muerte suele ser implacable dentro del campo de batalla, arrancándoles del plano terrenal de manera estrepitosa.  Sin embargo, existe un amuleto que les puede ser de suma utilidad y devolver a una persona al mundo de los vivos, salvándolo de las garras de la muerte—el colgante con forma de esmeralda emitió una luz fluorescente en el paraje oscuro que les rodeo sin que las jóvenes se lo esperarán— Deben llevarlo puesto en el cuello, para que el amuleto surta el efecto deseado. El amuleto de la resurrección es aquel que siempre deben llevar consigo a donde vayan—finalizó con un tono enigmático en su voz.
 

@ Ada Camille Dumbledore  @ Malum Luxure

[Ada Camille Dumbledore]

La idea de obtener conocimiento era algo que me gustaba, no es que me quisiera volver erudita o sabía pero estaba segura que él conocimiento era poder. Cuando conoces sobre algo, cualquiera tema eso te da capacidad de controlarlo y eso era muy bueno. El libro del Equilibrio brindaba conocimientos muy profundos que debían conocerse muy bien para lograr controlarlos, lo había leído y me parecían muy acordes a mi proceder. La Arcana Runihura había entrado en materia rápidamente y eso estaba bien, la veía severa y concentrada, comprendí de inmediato porque, la s mujeres que estábamos en puestos de poder estábamos más exigidas que los caballeros pues éramos menos y aún existían pensamientos poco amables sobre nosotras, eso nos obliga a ser más listas y ampliar más nuestra mente para superar obstáculos y cerrar bocas.

Con Calma escuche sus palabras, era muy poderoso el conocimiento que adquiriríamos, si lográbamos controlarlo de la manera correcta podríamos tener una gran ventaja en una confrontación y eso nos podría garantizar el triunfo en un duelo. Poder utilizar en cualquiera de los casos unos hechizos tan poderosos nos permitía grandes ventajas.

Observe con atención los pétalos del pensamiento, quien diría que algo tan bello podía ser tan mortal, era algo que me había llamado mucho la atención. El destello del amuleto me hizo enfocarme en la magnífica joya, definitivamente no tendría ningún problema en usarlo si de eso dependía que no muriese. Recordé que faltaba un hechizo que había leído en el libro y aún tenía duda de lo que era.

-    Runihura las Flechas de fuego, ese hechizo no lo conozco bien, podría explicármelo por favor

Le pedí amablemente para no perder la atención sobre lo que ella nos hablaba.
 

@ Runihura  @ Malum Luxure

[Runihura]

La mujer que estaba delante de ella, parecía dispuesta aprender el exquisito conocimiento que brindaba el Libro del Equilibrio. Era como colocar en una balanza las posibilidades de vincularse con éxito al mismo o tener que dar un paso al costado, replanteándose si se contaba con lo necesario para acceder a un poder que a muchos les quedaba grande sin refutación posible ante tal aseveración. Los ojos de Runihura estaban fijos en cada una de las expresiones de la Dumbledore, la forma en que asimilaba lo explicado con anterioridad por la guerrera.

— Las Flechas de Fuego son filamentos que causan quemaduras y heridas graves en la persona que impactan. Salen en una andanada y solo puede sanarse su daño, al apagar el fuego que las compone con un Aguamenti—comentaba continuando con su explicación para concretar con éxito la sanación contra ese hechizo— Luego de eso debe curarse con un episkey las heridas sangrantes que han causado, para que la gravedad desaparezca por completo. Debe hacerse antes de que sea demasiado tarde, recordando que muchos conjuros tienen un lapso de tiempo que permite ponerles fin o terminar del todo con los efectos que han causado—indicaba aferrando con fuerza su vara de cristal.

— La Arena de hechicero debe usarse de manera no verbal y son los huesos de un mago que ha muerto a causa del fuego mágico. Se han cristalizado y al ser lanzados al aire son capaces de cegar a un contrincante, dejándole solo con la capacidad de realizar hechizos de tipo efecto e invocaciones, ya que esas no requieren de puntería—deambulaba por un grupo de lapidas que estaban cerca de la entrada del mausoleo. Conectándose con las  energías que brotaban de los antiguos Uzzas, maestros que le dejaron la encomienda de transmitir los conocimientos que ella adquirió a base de esfuerzo, sangre, sudor y ni una sola lagrima. 

— Semillas de hielo—soltaba desatándose un viento helado de un momento a otro— Esto es lo que surge al emplear ese hechizo, este viento helado es capaz de paralizar cualquier criatura recubriéndola de hielo. No se puede usar en contra de criaturas de sombra o ofuscables—indicaba dando paso al último hechizo que formaba parte del Libro del Equilibrio— Cinaede, es un veneno gaseoso extraído de los pétalos del pensamiento. Alrededor de su rival surge un gas que penetra en el acto en sus vías respiratorias, cortándolas. Pasando posteriormente a la sangre, provocando la paralización del sistema nervioso y circulatorio, dando como consecuencia la muerte—jugaba con la idea de lanzarlo contra la mujer cuando estuvieran dentro del duelo.

— El bezoar no ayuda a contrarrestar el veneno gaseoso del Cinaede. El veneno será más potente en función del nivel que posea el mago o bruja que lo ha empleado dentro del un duelo o situación de batalla, se requiere de un Anapneo del nivel 10 al 19 en el primer turno. Del nivel 20 al 29 se requiere de un Anapneo en el primer turno y un episkey en el segundo, ya que además de envenenar causa una herida grave. Al ser lanzado por magos de nivel 30 en adelante, debe usarse un Anapneo en el primer turno y la herida que se recibe es de carácter critico. Debe curarse si o si en ese instante con un episkey, siendo el mismo de emergencia—finalizaba su perorata.

Lista para escuchar las dudas que le pudieran surgir, porque ella no sería tan condescendiente como sus otros compañeros Uzza.

@ Ada Camille Dumbledore

[Malum Luxure]

Escuchaba la clase con atención, mis ojos fríos miraban a la arcana sin expresión alguna, casi como si yo misma estuviera ausente, no tenía nada que decir así que de mis labios no escapaba ningún sonido, miré el anillo en mi mano similar al suyo...anti veneno pero no 100% efectivo ya que no funcionaba contra uno tan letal como el de basilisco, eso implicaba llevar necesariamente lágrimas de fénix, supuse que a la guerra hay que bien provisto de todo.

La semillas de hielo sonaban muy bien aquello de congelar al oponente o mejor dicho paralizarlo, solo que se debe tener en cuenta su uso medido por que de lo contrario se acaba y no le da tiempo a reponerse de en cantidad.

Los pétalos de pensamiento son un arma de doble filo que ataca con su perfume la psiquis, le hace sufrir alucinaciones antes que le alcance la muerte, un poco más refinado y utilizado en forma de gas ataca el sistema respiratorio provocando en deceso, por lo que entendí un bezoar no sirve con este veneno y a mayor nivel es más crítico su daño.

-Según lo que leí arcana y lo que explico, el anillo antiveneno es más para prevenir el efecto de picaduras de serpientes, arañas o escorpiones por ejemplo que son criaturas pequeñas... ya con una de inmenso tamaño no es efectivo.- Le miraba fijo luego me giré hacia mí hermanita y con una sonrisa le dije en broma. -Te hubiera ayudado mucho cuando estudiamos el libro de fortaleza.- Luego volví a mirar a la maestra.

La clase era digamos que entretenida, no era común que exprese mis dudas pero bueno para eso estábamos aquí si no podría ser malinterpretado como que no me interesaba aprender sobre el tema en cuestión.

-Las semillas de hielo son buenas para el verano.- Comenté en tono de broma ante el lúgubre ambiente que mi no me movía un solo cabello. - En Caso de tener la irresponsabilidad de terminarlas es posible volver a adquirirlas en el mercado?.- Fije la mirada pensativa en un punto lejano, siempre es bueno saber por si se presenta la posibilidad de negocio. -Lo mismo que los pétalos de pensamiento...pero lo que más me interesa saber es esto: abro el frasco y como lo transformo en perfume y más tarde en gas para poder hacer el "cinaede" ?. -Aquel traspaso llevaba un proceso de elaboración al parecer.

En cuanto a las arenas del hechicero parecía que su poder estaba en inutilizar al contrincante para que no pueda atacar con un rayo certero, aún así lo dejaba libre de realizar alguna estrategia mejor, luego las flechas de fuego que son una invocación, note que la mayoría de los elementos a aprender se utilizan de forma no verbal lo que implica prestar atención, que mientras uno tiene una consecuencia tiene posibilidad de otro con un efecto contrario, la oportunidad de usar hielo y fuego en un mismo duelo, el dejar sin efecto el rayo de las semillas mientras se está ciego por las arenas era sumamente interesante y complejo.

-Una duda más el amuleto de resurrección te trae a la vida "sano" o debes aplicarte hechizos de curación?.- aquel cuestionamiento llegó a mi persona de golpe y era mejor aclararlo.

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[Ada Camille Dumbledore]

La clase estaba interesante, la explicación de cada uno d elos elementos que utilizábamos para el libro del equilibro aclaraba todos las funciones desde la creación y el porqué de cada una de las bases de esto. El conocerlo era algo que algunas veces no se le daba importancia pero el origen de todo era fundamental. La Uzza se veía que era una mujer de acción y tenía gran conocimiento en el tema de los libros, pues con detalle nos dio y explicó con calma la función el origen y las consecuencias de varios de los hechizos. Como todo en la magia el equilibrio era algo muy importante y nos mostraba el que siempre todo lo que se realice tiene una respuesta igual a la acción que se inició, pues todo en la naturaleza la tenía. En la naturaleza y en la magia todo era algo recíproco y no era de dejar de serlo con los hechizos que estábamos aprendiendo ahora. Todo ellos eran profundamente fuertes y debíamos conocerlos y explotarlos antes de realizarlos, aparte de la belleza que llevaba en sí cada uno de ellos, porque no se podía negar que en especial los pétalos del pensamiento me parecían una forma bellísima y mortal.

 

Estaba muy ensimismada, pero era porque en mi cabeza estaba enamorándome de aquella magia, analizaba cada uno y podía ver el porqué los Uzzas habían guardado este ancestral conocimiento con tanta importancia y secreto y sólo lo impartían a quienes vinieran a su origen a buscarlo, pues las montañas de la luna no eran un sitio muy visitado por turistas, más que por aquellos que buscaban ese profundo saber.

 

El hechizo Cinaede había llamado por completo mi atención, sobretodo porque era potente y dependía exactamente del nivel de desarrollo mágico del mago, lo que era profundamente interesante.

 

- Está claro maestra

 

Asentí a la Uzza Runihura con energía y una sonrisa en el rostro, porque había entendido, mire a Malum que también atendía a la clase y sonreí.

@ Runihura  @ Malum Luxure

[Runihura]

Se agradecía así misma no poseer las expectativas demasiado altas con respecto a sus alumnos, porqur varios de ellos habían resultado ser una apabullante decepción dentro del duelo de la prueba final. Lo estaba experimentando con la joven que intervino después de sus explicaciones en la clase—No poseo el titulo de Arcana, sino de Uzza. Yo no imparto una habilidad, sino los conocimientos que poseen cada uno de los libros de hechizos que ustedes deben aprender al acudir a estás clases—indicaba con serenidad. El prestar atención a lo explicado por los guerreros, no era una petición que costará demasiado concretar con altas expectativas o al menos eso pensaba Runihura.

— No, no se pueden comprar dentro de un mercado. Tal y como lo explique, se van reponiendo una vez que se han usado de manera constante. Lo mismo ocurre con los pétalos del pensamiento, no puede crear el Cinaede y usarlo dentro de un duelo—la voz de la Uzza era tan fría que se quedaría corto un iceberg con ella— Una cosa es alucinar con el perfume que se crea de los pétalos del pensamiento y otra cosa es ahogarse por que las vías respitatorias están obstruidas por el gas que invoca el Cinaede—ladeando la cabeza se cuestionaba como había sido el paso de la joven por el libro anterior. Su compañera captó las palabras de la mujer con facilidad y sin  crearse tantos debrayes mentales.

— Algunos hechizos no le servirán dentro del campo de batalla, otros si. Le aconsejo que lea los que se han plasmado en las hojas de su libro, para que eso le ayude al momento de enfrentarse a la prueba de vinculación—cambiando su humor por uno que no conocía las bromas en ese instante. El jugarles una trastada no estaba en sus planes, no tras pasar por ese trago amargo— ¿Tienen alguna duda, señoritas?—mirandole fijamente espero que tomará esa oportunidad que le ofrecía la más joven de los guerreros Uzza.

Su mirada pasaba de una a la otra, deseando que no le hicieran perder el tiempo dentro del duelo. Porque ahí no tendrían las cosas tan sencillas, ya que les tocaría enfrentarse a las dos a la Guerrera del Libro de las Auras.

@ Ada Camille Dumbledore  @ Malum Luxure

[Malum Luxure]

La miré con calma pues un error lo comete cualquiera, pero plasme una sonrisa escuche sus palabras por que su provocación no me afectaba en lo más mínimo, no sería la primera ni la última así que no tendría ninguna mala reacción, sinceramente había olvido que los Arcanos y los Uzza tienen sus diferencia, no pretendía ofenderla.

-Disculpe usted señorita Uzza admito mi error pero sepa que no confundo conocimiento con habilidad .- Sabia que mi boca te traería problemas pero ya lo había dicho, notaba que me estaba menospreciando pero era parte de su "personalidad" y yo no iba a caer en ello.

Arquee una ceja escuchando, había comprendido que "solo tenía que leer el libro", era interesante saber lo del mercado pues es un objeto que debe ser cuidado una vez adquirido, el uso irresponsable no entraba en la ecuación, así que el cinaede no puede ser creado en duelo...veré que tan cierto es eso.

Decidí no decir más pues de contestar de la manera en que realmente deseo traería consecuencias que no quiero, al mal paso darle prisa e ir al duelo final, estaba visto que esto no sería ameno y dilatarlo es pérdida de tiempo con alguien cerrado, no hay más dudas y si las había buscaría en "el libro" las respuestas.