Idylla Macnair T.

—David— repitió el nombre y lo saboreo en los labios, se escuchaba bien y le agradaba, si le quedaba y cuando lo.dijo sus ojos azules brillaron. Aunque le había gustado decirle pastelillo, era mucho mejor conocerse bien.

—Pues si no me alcanza, podemos sacar galeones de la bóveda deceleste mi familia. No creo que Cissy se entere si le sacamos unos cuantos galeones mas— sonrió y miro el chocolate que se acababa de comer, era imposible adivinar de que sabor eligió, pero simplemente diría uno solo para no quedar mal —No se, puedo intentar adivinar ¿De fresa?—

Fueron a sentarse a una mesa no muy lejos de unos chocolates con almendras —Bueno no diré que sabor es mi favorito hasta que adivines, los de trufa fue una trampa. Así que ahora te reto a escoger el chocolate que creas que me va a gustar, y si lo adivinas dejo que me pongas el reto que tu quieras—

Era muy divertido jugar con el y los chocolates, le gusto más saber que aún seguían en pie los tragos. Hacia mucho que no se divertía decon aquella manera y no sabía que lo necesitaba. En aquellos momentos en que cada esquina era un campo de batalla, había que tomar cualquier oportunidad para bromear y ser feliz.

@@David James Dumbledore

Al parecer nadie había hecho caso de lo que ella había pedido, no era una sorpresa ella no se veía como si misma y sólo aparentaba ser una simple muggle. Así que tomaría aquello cómo ventaja al robar todo aquello que llevaba encima aquel carguero.

Se fue como si la hubieran molestado y comenzó a hablar con sus hombres, bajando la voz poco a poco y mirando la escena. Tendrían que despistar para poder llevarse toda la mercancía, incluido a los muggles que se encontraban bajo cubierta.

—Necesito que empiecen una distracción John, y luego todos tus hombres Desmantelen aquel barco antes de que alguien se de cuenta de nuestra presencia

—Señora ¿Pero donde pondremos todo después de que lo probemos?— muy buena pregunta, miro a todos lados y sólo vio un gran camión en el que había llegado aquel chico que estaba con Ada.

—Llevenlo a ese camión, y salen rápido de aquí hacia los almacenes—

—Muy bien y latu distracc...— no termino de decir lo queque estaba a punto. Porque en aquel momento sonó una fuerte explosión, haciendo que el barco estallara en llamas y la mitad de el terminara regada por toda el agua.

—Ahora, no hay tiempo— Gritó.

Sus hombres se pusieron en marcha en medioel de la confusino y lograron ssacar la mayor parte de la mercancía, lo malo fue que el encargado del barco estaba a punto de esterarse y ellos no llevaban ni la mitad arriba de aquel transporte.

@@Sean -Ojo Loco- Linmer

@@AZRAEL Licaón

@@David James Dumbledore

@@taison logan greyback

@@Lady Luxure Grindelwald

@@Ada Camille Dumbledore

—Puedes llamarme Idylla eentonces, me siento más cómoda con ese nombre— comentó la chica, pensando que no habría problema si le decía por su nombre, cualquier que lo pudiera oír pensaría que era un apodo. Así que eso sería lo mejor, aparte el la no se sentiría tan mal por lo que estaba haciendo si una persona la llamaba por el nombre correcto.

Le agradó que el chico tomará el juego, aunque era muy raro que aún no supiera su verdadero nombre. Bueno ya habría tiempo para eso de alguna manera le gustaba llamar aa alguien con un apodo gracioso. Cuando mencionó las trufas de sabores, fue gracioso se había ido por la tangente y claro.que en alguna de ellas tendría su chocolate favorito el cual era el de almendras, estaba un poco decepcionada, ya que ella se le antojaron los tragos que había insinuado más adelante; pero no se lo haría saber.

—Bueno eso no es justo, las trufas no son solo un chocolate. Pero esta bien no especifique así que te concedo que seas ganador del juego— sonrió.un poco de lado la chica y uno de los elfos que estaban atendiendo el local les dieron algunos chocolates de los que estaban mirando en el estante.

—Ahora, veremos si sale mi chocolate favorito— tomó una de las trufas que les habían dejado los elfos en una bandeja y la comió. Sabía riquísima, era un chocolate amargo con nueces y licor de café —Bueno no es mi favorito, pero esta muy bueno. ¿Gustas?— le pregunto dándole uno de los chocolates.

@@David James Dumbledore

El giro del duelo había cambiado por completo, ni compañera alde quedar paralizada y no responder a ningún estímulo, se decidió rápidamente que el guerrero fuera mi contrincante. Obviamente no estaba familiarizada con los hechizos del libro y eran la primera vez que los probaba, así que cuando el uso la daga para infringirse daño y a ella, sintió un corte profundo. Pensando en el amuleto que llevaba pensó rápidamente en curación para curarse a así misma rapifrápido y seguir con el duelo.

Sin pensárselo tanto agarró su daga y la lanzó atinnandole al guerrero, al cual dio un pequeño corte en el brazo derecho y con eso tuvo.

—Obedire— gritó haciendo que pudiera controlar sus movimientos si el hechizo funcionaba, y para no dejar algún cabo suelto, también decidió hacer el juramento de sangre, la única desventaja es que ella estaría sujeta a lo mismo.

—Yo juro dejar de defenderme— si funcionaba ninguno de los dos podría defenderse en algunos turnos, así podrían terminar el duelo más rápido. E irse a rescatar a la princesa, para poder llevarla con el rey.

Le tomó totalmente desprevenida, cuando agarró su abrigo y lo puso justo a un lado de ella de ella y todavía se estaba dando el crédito el mismo por hacer aquella acción.

—Entonces si estamos a mano, aún así caballerosamente usted puede invitarme ela chocolate a mi—

Comenzaba a creer que aquel chico solo quería burlarse de ella. Sin duda tenía sentido del humor, sólo que llamarla chocolatina azul era algo demasiado para alguien que acababa de conocer. Lo miro arrugando el entrecejo y trato de pensar que responder ante tal falta de decoro.

—No dude de mi nombre, es solo que hay personas que me llaman Idylla y otras Ariadna.. aún no me decido cuál me gusta más... Pero seguramente me gustan más que chocolatinas azul— comentó sin ánimo de pelear, sólo respondiendo de buena manera, ella también sabía cómo jugar y divertirse con la gente —Si no me da su nombre, tendré que ponerle un apodo a usted también. Tal vez lo llame pastelillo de café y así somos dos con apodos de comida—

No estaba preparada para que de una manera repentina agarraran mi mano con tanta confianza, pero dado que fue delicado y amable al hacerlo no le puso objeción. Tal vez escoger algún chocolate fuera más divertido después de todo, aún se escuchaba afuera que la lluvia tardaría un rato en quitarse por completo, podría quedarse un rato a pasar un momento agradable.

—Muy bien paseíllo, te reto a que adiciones cuál es mi chocolate favorito y si le atinas yo pago los que quieras— ya estábamos delante del mostrador y en un rincón más apartado estaban algunas sillas y mesas para poder disfrutar de los chocolates ahí mismo —Pero si pierdes, tendrás que invitarlos tu y además unos tragos más adelante—

Sonrió pasando su mirada por los chocolates y luego dandole una a el, para poder apreciar bien su reacción al insinuar que podia que la tarde no terminara en esa simple tienda. Aún tenía su mano sobre la de ella, pero no estaba del todo incómoda por aquello.

@@David James Dumbledore

Hola como están ?? Tengo la misma duda que Matthew y pues la prueba concluye en tres dias y nadie se a pasado todavía, el Uzza contestará para poder terminar mi prueba bien?? Porque de verdad quería aplicar los hechizos en duelo y llevo esperanos bastaante A que alguien se pase

Saludos a todos xD

Una ráfaga de aire se coló por la puerta y debajo de su abrigo, pronto lo cerró intentando calentarse y mirando con reproche al chico que estaba aún parado, no le gustó que le dijera que no se había mojado, sin embargo no quería estar empapada ahí afuera en la entrada del local.

Después de unos segundos de indecisión, por fin el chico pudo entrar en el lugar y ella lo siguió, suspirando ante el aroma del café. Si aroma llenaba todo el espacio y daba una sensación relajante, con ganas de estar comiendo o bebiendo algo de aquello.

Sus fosas nasales aspiraron despacio e hicieron que sus tripas gruñeran con hambre. Había olvidado alimentarse por andar saliendo apresurada de la mansión, pero era difícil tratar de pasarse por alguien que no era durante mucho tiempo más.

Se tocó su cabello ante el comentario, sabía que su hermana le gustaba el color azul... Pero a ella no le agradaba del todo, solo lo traía para seguir con la fachada. Iba a decir un comentario grosero hasta que se dio cuenta que el chico sólo le tomaba el pelo, era aalguien bromista por lo que parecía. Al oír las siguientes palabras sólo sonrió un poco ruborizarse y alcanzó a pronunciar un bajo —Gracias—

—Creo que el que debería invitarlo es usted señor, dado que nadie se queda parado en la entrada impidiendo que alguien más entre— comentó mientras se quitaba el abrigo que llevaba y lo colgaba justo a un lado del de el.

— Por cierto, soy Idy... Ariadna Macnair— pronunció la bruja por poco metía la pata y decía su propio nombre, aunque aquel personaje no supiera su identidad, podria conocer a alguien que sino la conocía.

—Es de bsuena educación presentarse, antes de pedir chocolate regalado— lo miro burlonamente y espero su respuesta.

@@David James Dumbledore

Oficina del ministro Muggle

Allison Turner (Poción multijugos)

Estaba harta de esperar, era obvio que la nueva ministra no iba aparecer para la reunión, por lo que no se podía quedar en aquel lugar mientras el cargamento estaba a punto de llegar y sólo había mandado a Ada para que supervisara las cosas. Era cierto que los egipcios no tenían fama de ser cooperativos pero ella ya había hecho negocios con ellos.

Se metió a uno de los baños en las oficinas y desde ahí se desapareció del lugar, apareciendo no muy lejos de los muelles. Casi corriendo pero sin levantar sospechas se acercó a donde se encontraban ya un poco de gente congregadas en el barco que acababa de llegar.

PUERTO DE LONDRES

Vio a Ada platicando con un hombre que no ubicaba, estaba de espaldas a mi y no sabía quien era. Sabía que aún seguía con la poción multijugos y que pronto se desvanecerian los efectos. Así que tendrían que hacer aquello rápido.

Llegó hasta (@@Ada Camille Dumbledore ) y tocó su brazo —Querida, ya llegó el barco que esperábamos. ¿Puedes ir a decirle a los chicos que vayan bajando la mercancía mientras hablo con el capitan?— comentó la bruja y mientras hacía eso, le daba la señal que sólo ellas conocían para decirle que era Ariadna Macnair —Soy Malachai, espero te acuerdes de mi—

Y con una sonrisa, se separó de aquella pareja y fue en dirección a la embarcación. No había caminado ni dos metros cuando alguien se puso en su camino —vengo con el señor Luxure, dígale que Malachai está aquí — siempre que hacía aquel tipo de negocios trataba de no dar su nombre verdadero, así podía seguir con la tapadera de buena y decente gente que era.

@

Cada vez más se hacia habitual encontrarse en el callejón, simplemente para bobear o encontrarse con alguna persona para hacer un trato. Por lo que ahora simplemente estaba con la primera opción, hoy estaría más que nada viendo las tiendas, sin esperar mucho de lo que quería.

Vestía con un largo abrigo negro, pantalones de mezclilla y una camisa ligera de color beige por debajo. Unas botas para la lluvia hacían juego a su vestimenta y con la varita había hecho aparecer un paraguas, no quería mojarse el cabello y que se estropeara el peinado.

La lluvia que comenzaba a mojar aún más fuerte y caer por doquier la hizo buscar algún lugar abierto donde pasar el aguacero hasta que terminara y pudiera seguir paseando por el callejón. No era raro que se encontrará sola, ya que su hermano y su prima cuidaban de Sebastián en la mansión, ella pudo salir a distraerse mejor.

Las gotas caían aún más rápido y alcanzaban a mojar su abrigo que llevaba puesto, así que sin pensarlo muy bien decidió entrar en la primera tienda que vio. Lo que no contaba fue que plantado en la puerta estuviera una persona sin moverse.

Gruño por dentro y quitando el paraguas dede su varita, alzó la cara y lo miro —Hay gente que quiere entrar al lugar. ¿O entras o sales chico? — preguntó mirando solamente su espalda, y vaya que era un poco alto.

—¿Hello? Me estoy mojando aquí afuera— gritó un poco para hacerse entender en el aguacero, y mientras tanto adentro parecía oler agradablemente a chocolate.

@

Cambio de nick

ID: 109250

Nick actual: Ariadna Macnair Gryffindor

Nick nuevo: Idylla Macnair T.

Premio obtenido: premio de la sala de Menesteres.

Muchas gracias xD

@ wooo si me encanta la idea... de hecho eso andaba pensando que bueno que te nos unes, la verdad andaba medio parado el rol, pero ya vamos moviendolo que se me hacía muchas ilusiones y quiero retomarlo... Así que nos encanta que te nos unas.

@ que bueno que también te unes, me gusta tenerte en el rol dE ya todo va tomando forma

Sala de Menesteres:

Criatura XX

6500 G

Cambio de Nick (2)

Criatura X (2)

Premio por salir de la Sala: 10000 G + 2 Llaves escolares.

Invernadero:

Criatura XXXX (2)

2000 G

Galeones totales: 18500 G

Ok va empiezo hahaha arriba están mis premios así que lo haré en orden, primero las criaturas xD

Premio obtenido: Criatura XX

Elección: Bowtruckle

Premio obtenido: Criatura X

Elección: Horklump

Premio obtenido:Criatura X

Elección: Gusamoco

Premio obtenido: Criatura XXXX

Elección: Fénix

Premio obtenido: Criatura XXXX

Elección: Thestral

Llaves escolares: Slytherin y Ravenclaw

Bueno hasta ahí, después vengo por mi cambio de nick y quiero regalar el otro cambio de nick a Albus Seeverus Potter peverell..

Bueno entonces cuando piense bien mi nick vengo por el.. que aún me falta pensarlo muuuy bien xD saludos y gracias por todos los premios xD

Aparecieron los tres en las mazmorras y por lo que se veía ya los estaban esperando. La Macnair se admiro de toda la gente que había, en realidad nunca había estado en una batalla real, sabía usar el escudo y la espada porque le enseñaron, pero su educación no fue probada hasta el día de hoy.

Varios soldados atacaron al mismo tiempo, más que nada al guerrero y dejaron para después a las chicas. Eso la frustró tanto de quedarse a un lado en la pelea cuando para aquello ellas estaban ahí. Comenzó a pelear con dos de aquellos guerreros con su espada y no pudo escuchar las primeras palabras del guerrero por lo mismo.

Hasta que en aquellas palabras, se escuchó la que decía que harían un duelo, y oh sorpresa Hannity y ella tendrían que pelear. La peliazul no había olvidado las palabras del guerrero por lo que se separó de los atacantes y transformando la espada en su daga de sangre tan rápido como pudo para no ser captada con las intenciones.

Se movió rápido hacia su compañera y la corto en el brazo con la daga, a partir de ahí ya podían empezar a pelear. Pero trataría de quedarse tan fuera de su alcance como le fuera posible, así no podría usar mucho su daga.

—Muy bien, espero que sea un duelo entretenido. Y tener la oportunidad de usar esta bonita daga— comentó admirando la y haciendo mover su varita con la otra mano que le quedaba libre. Antes de que el la tuviera tiempo de pensar en que hacer, la Macnair apunto a su pecho, gritando:

—Sectusempra!— el hechizo salio de su varita e impacto de lleno el pecho de la chica, provocando que le salieran llagas sangrantes por todo el cuerpo. Si no las detenía con una curación, podría perder más que sólo el duelo.

PV: 100

PP: 4

Hacia un tiempo que le había pedido a su prima Arya que la dejará ser su aprendiz. Pero ese dja aún no llegaba dado que primero tenía que pasar la clase de primeros auxilios y esa aún estaba en pausa.

Así que cuando la lechuza llegó entregando el mensaje urgente de que necesitaba su ayuda para poder asistirla en un par se emocionó. Tomó sus cosas de la habitación y dándole un beso a su hijo desapareció de ella sin hacer mucho ruido.

Iba vestida abrigada por la fría noche que hacia, por lo que al llegar a la mansión VOn Alexandros no le dio frío el aire helado que soplaba fuera de ella. Ahí estaba su prima tocando la puerta de la mansión y se acercó a ella rápidamente para que pudiera explicarle mientras esperaban en el umbral, en que podía ayudarla.

@@Arya Macnair

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Mientras veía como su compañera agarraba las cosas que la Malfoy había dejado para ellas. Siguió sus pasos expectantemente, ella sabía poco de pociones y de sanación con magia. Pero si tenía conocimientos sobre medicina muggle y sólo quería comsuplementaria para poder ir más adelante con sus estudios.

La maestra se paró a un lado del cuerpo y con un hechizo y golpes de su varita restauró algunas marcas sobre el cadáver, explicando que ese hechizo ayudaba a reparar las llagas y cortes que el Sectusempra dejaba sobre la piel. Sin duda guardaría el hechizo en su memoria para la posteridad, estaba ansiosa por hacer algo. Pero no quería demostrarlo así que espero a que la bruja terminara de hablar, y mientras lo hacía les iba explicando las variedades de curaciones que podían emplear, ya sea para reparar huesos, heridas y magia oscura.

Hizo aparecer un tercer cuerpo en las mesas frente a ellas y destapó las sábanas, el último cuerpo era un antiguo general romano, no sabía porque lo suponía pero su cuerpo también estaba en un estado deplorable, magulladuras y cortes por doquier. Unos cuantos huesos rotos y sin piel en algunas zonas. Vaya, si que teníamos trabajo que hacer, debíamos averiguar la causa y después reanimarlo, si, sería algo complicado. Sólo esperábamos las instrucciones de Malfot para poder comenzar.

@

Su respuesta fue bien recibida para el guerrero, y era cierto que para poder activar los hechizos del libro había que estar en una pelea cuerpo a cuerpo para poder tocar al oponente. Eso era muy conveniente en peleas donde la varita no era necesaria o donde pudieras cortar a la otra persona sin que se diera cuenta de tus intenciones.

Mientras pensaba aquello, salio elel rey otorgándoles dos escudos a las chicas y ella se lo puso rememorando épocas pasadas, uno de sus hermanos le enseñó ya hacia bastante tiempo a usar espadas y escudos con gran habilidad. Lástima que lo hubiera perdido cuando aún era muy joven, miro al guerrero diciendo las palabras de que podían abandonar la clase cuando quisieran, así que lo miro ferozmente.

—Un Macnair nunca abandona la batalla, y menos si una persona está en riesgo. Aprender sobre hechizos nunca va a ser fácil, pero para eso estamos aquí ¿Qué no? Si las cosas fueran fáciles cualquiera las haria—

Así que la princesa se eencontraba abajo, la chica siguió al guerrero y al los demás hacia el sitío donde la tenían prisionera. Pensando alguna forma de pasar sus barreras —Se queque esto es de otro libro, pero podría usar el salvaguardia para poder pasar por los hechizos y el anillo de detención de peligro para saber ccuántos son a lo que nos enfrentamos—

—Quizá con la daga cortar a algunos cuantos guardias y ponerlos a nuestro servicio, aunque eso me deja otra duda— hablo en direccon al guerrero —se puede sólo controlar a una persona o ¿pueden ser varias a la vez?—

Tocó una vez a la puerta y contempló el fabuloso paisaje que creaban los árboles que crecían en aquella propiedad, sin duda eran hermosos y daban a la mansión una fabulosa vista y además escondía un poco la casa de los ojos ajenos a ella.

Nadie parecía estar viniendo a abrirle, por lo que ddecidió tocar una vez más y esperar, tal vez Aaron estava muy lejos y no la estaba escuchando. Segundos después de haber tocado escucho pasos en dirección a la puerta y un sonriente mago salio a recibirla, se le hacia extraño que fuera el personalmente el que le abriees la puerta y no un elfo, pero le resto importancia y lo saludó.

—Ariadna está bien, dejemos las formalidades para cuando no estemos solos señor Yaxley...— respondió con una sonrisa y se adentro a la estancia cuando el mago se lo indicó —el café suena maravilloso para esta helada tarde, muchas gracias—

Después de haber respondido a su pregunta, se quitó el abrigo que traía encima. La cada estaba cálida y no necesitaba estar más abrigada, y mientras hacia eso y dirigía su mirada alrededor se daba cuenta que es un hogar acogedor —Se preguntara, cual es el motivo de mi visita señor Yaxley, aunque antes debo decir que su casa es encantadora y muy agradable— comentó la Macnair mientras lo miraba dirigirse hacia la cocina por el café.

—Pues estoy aqui más que nada para estrechar lazos, se que soy nueva entre las filas, así que me eh decidido a conocer más a mis compañeros y no sólo dentro de misiones o con máscaras. Me agradaría conocerlos aún más, y que mejor opción que venir a sus casas y entablar conversaciones amenas— inquirió la bruja y se tocó los dedos de una mano con la otra mostrando su nerviosismo, a pesar de estar ahí, aún aque mago le inspiraba un poco de temor y no sabía cómo iba a reaccionar —Aunque pensándolo bien, tal vez debí avisar antes de autoinvitarme a su casa—

@

La tarde era helada, los fríos de otoño avisaban que pronto estaba cerca el invierno y Londres estaría aún más congelada que ahora. Le gustaba más el calor que e frío que callaba hasta los huesos, pero hoy tenía que estar abrigada y hasta un gorro se había puesto el día de hoy.

Llegaba hasta la verja de la mansión de los Yaxley, no sabía que hacia ahí la verdad. Después de la ceremonia de iniciación con el nuevo líder Aaron no lo conocía en realidad y le había dado mucha curiosidad platicar con el fuera del bando o del Ministerio.

Cruzó la verja y los jardines de afuera para llegar a la puerta de entrada. Después de unos largos segundos y de pensar que excusa inventar para estar ahí ese día, por fin tocó a la puerta de la inmensa mansión, esperaba que se encontrará el mago en su casa si no todo habría sido en balde.

@

Parecía que nunca llegaría su contacto, se estaba impacientando al esperar sin que llegará. Por lo menos ya llevaba unos diez minutos sin ver a nadie queen reconociera, se puso a caminar por el lugar admirando las plantas y flores que llenaban todo el espacio.

Estaba absorta en sus pensamientos, cuando un chico le tocó el hombro preguntándole un par de cosas —Oh Hola— contesto de buena manera, aún no estaba al borde de los nervios y eso era bueno, dado que nunca le había gustado esperar —No, disculpa no eh visto a nadie con esa descripción...— tan pront termino de decir aquellas palabras, que una mujer justo como la que el chico buscaba comenzó a hablarles a los dos. Por lo visto no era la única hacsiendo negocios en aquel lugar, al parecer ya varió había tenido aquella idea.

Cuando la chica le entregó Una runa, no sabía que hacer con ella. ¿Había estado mal su contacto? ¿A quién esperaba era una mujer y no un hombre? No lo sabía y aquella situación le resultaba un tanto extraña, miro al chico que le había preguntado antes y se veía totalmente descolocado.

—¿A dónde vamos si se puede saber?— inquirió la bruja y miro a los dos sin saber que más decir, ella no iría a ninguna parte sin saber antes hacia donde y menos si no sabía si es a chica era su contacto con quien debia encontrarse.

@@Syrius McGonagall

El haz de noche que acababa de aparecer delante de ellos, era sin lugar a dudas un portal por el que el guerrero desapareció y ellas lo siguieron sin preguntar. Lo que le gustaba de aquellas clases era la capacidad de transportarlos hacia otros universos y conocer aún más sobre el universo que solo Londres y las peleas de los muggles y brujas.

Como estaba pensando hacia unos momentos, aparecieron en un campo de batalla, la cual parecía haber terminado por un tiempo ya que Bakari las condujo hacia una tienda de campaña, donde al instante de entrar les presento al Rey que gobernaba en aquel reino.

Su hija había sido secuestrada, comentaba mientras relataba sus problemas y lo que ellas ayudarían al guerrero a ir por la hija del rey, pero nada era fácil en aquellas pruebas, anoche leyó el libro por lo que al escuchar las preguntas, supo que contestar casi inmediatamente, pero la primera en hacerlo fue su compañera. La cual se veía mucho más dispuesta y menos hostil que la última que le había tocado.

—Bueno tiene muchas ventajas, desde poder ejercer tu voluntad en alguien por unos momentos, hasta maldecirlo con sólo un golpe de tu espada. Eso ayuda mucho a infringir daño después de haber luchado con alguien y ganarte aún más tiempo para poder ganarle o querer extraer información de el— comentó la bruja, cuando fue su turno y aún así se quedó pensando si su respuesta habla sido la correcta.

Al pocorato momento de llegar, ya sabíamos que estábamos separadas Arya y yo y por el otro lado Alessa y Cissy. Así que para no perder más tiempo había que empezar con los hechizos. Agarró fuertemente la varita que ttraía en la mano y subiéndose las mangas de su gabardina lanzó el primer hechizo.

Este hechizo iba dirigido a Alessa, así que gritó fuertemente —Zancadilla—, lo cual provocaría que la bruja trastabillara y ocasionará que les diera tiempo para poder lanzar los siguientes hechizos.

Se volteó hacia su madre y sonrió fuertemente, Tal vez sería la unicaprimera vez que tendría la oportunidad para poder atacarla libremente y sin que tuviera repercusiones, dirigió su varita en la dirección de Cissy y gritó fuertemente —Babosas— el hechizo lo que iba a hacer sería provocar que lanzará babosas por la boca y se le dificultará enormemente pronunciar los hechizos. Esperaba que su prima Arya fuera mejor en duelos que ella, porque sinceramente estaba un poco nerviosa por lo que pasaría con aquel simulacro.

La profesora hablo en aquel momento cuando ya todos habían llegado, comenzó a darnos la bienvenida y explicar algunas cosas sobre el antiguo Egipto. Cuando llegó a la parte de los cuerpos y de que ella y su compañera tenían que descubrir cómo murieron y sabía que algo más era su tarea. ¿Tal vez volverlos a la vida? Si era así, sería la clase más interesante a la que había asistido en toda su formación mágica.

Estaba absorta en sus pensamientos cuando sintió la presencia de alguien más en la habitación y miro a su alrededor para mirar la cara de su progenitora. Bueno la clase sin duda se había tornado más atractiva ahora. Le dio una sonrisa a Cissy y continuó con la vista en las dos figuras bajo aquellas sábanas, sin duda ella también noto las pociones y los sacos de aquella mesa. Pero Hannity le ganó en preguntar para que servían y que contenían en ellos. No perdió la sonrisa de la Malfoy cuando contesto y con una miradas dio luz verde a que viéramos que había detrás de la sabana.

Si no hubiera visto antes cuerpos mutilados y con heridas, sin duda habría volteado la mirada y vaciado el contenido de su estómago por el piso. Pero no fue así, el cuerpo mostraba evidencias de que había pasado por muchas cosas antes de morir y solo le daba curiosidad como tendrían que empezar a trabajar con el.

—Entonces maestra si entendí bien, tenemos que determinar la causa de la muerte y cuando lo hagamos ¿Qué haremos con los cuerpos?— estaba intrigada, ella hasta ahora no había estudiado nada de nigromancia y parecía que hoy podía ser su día de suerte.

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Estaba dudosa si ir o no ir a la cita, claro estaba que aquel cliente era muy importante para su negocio. Pero aún no podía sacarse de la mente que era una especie de trampa, alguien la había seguido y estaba investigando en lo que trabajaba.

Sacudió la cabeza para quitarse las ideas paranoicas que se inventaba y cruzó el callejón para entrar al lugar donde se habían citado, el muchacho era quien la citó. Por lo que ella para no levantar sospechas usaba una poción multijugos que la hacia verse mayor de lo que era en realidad, cabello castaño y ojos color miel. Su ropa era muy normal unos vaqueros y una camisa blanca con algún dibujo muggles, nada fuera de lo común. Sin embargo no veía a nadie con la descripción de aquel chico por ninguna parte.

Eso era lo malo de hacer todo mediante cartas, no podías confiar en alguien que no habías visto todavía, volteó alrededor y sólo se encontraban otras tres personas en el lugar y ninguno era a quien buscaba.

@@Syrius McGonagall

Off: disculpa mi tardanza es solo que no sabía cómo empezar jejeje xD

Después de haber pasado el primer libro de hechizos, se sentía con más confianza cuando llegó la carta que contenía el traslado, el cual la llevaría hasta su clase para poder dominar los hechizos del libro. Se había leído el libro un poco antes de que la carta llegará y en verdad era interesante lo que podía encontrar en el, esperaba ser lo suficientemente fuerte y afrontar los desafíos que se le presentarán.

Tocó el broche con espadas atravesado y de pronto una sensación ya bastante familiar se apoderó de ella, la sacó de su habitación en el castillo Triviani y pronto estaba parada en un lugar muy grande y bastó con un árbol más lejos de lo que ella se encontraba. Su compañera estaba apareciendo en aquellos segundos y caminaron hasta donde estaba parado el guerrero.

Sin duda era un poco diferente al del libro de la fortaleza Badru, pero aún así mientras se iba acercando se veía mucho más impresionante cada vez, se encontraba delante del árbol que había visto en la distancia y parecía lleno de sangre. Eso no le importaba, últimamente ella misma terminaba bañada en sangre debido a la cacería y venta de muggles, gracias a Merlín hoy no era el caso por lo que se había vestido lo más libremente posible, tomando el curso anterior como muestra.

Unos pantalones de mezclilla, una blusa pegada blanca, y unas botas militares cafes que combinaban con el atuendo. Ahora que lo pensaba si habría sangre por todas partes si blusa iba a contrastar muy bien con ella. Aún estaban unos metros algo lejos de el cuando les gritó que fueran bienvenidas —Bueno siempre estoy lo suficientemente lista para una buena pelea— y de pronto clavando su espada en la tierra delante de el y sacando su varita. Ella se dio cuenta de que daba la señal para sacar la propia por lo que pronto la sacó de sus vaqueros y siguieron acercándose con la varita alzada, aunque no les sirvió de nada se pararon y un haz de la noche se puso en medio de ellos.

—Bueno vamos a comenzar, estoy ansiosa por saber que más hay—

@@Bakari

Muy bien, otra clase sin duda estaba un poco aburrida últimamente sin aprender nada en casa y ahora cuando había llegado la notificación para poder estudiar esta clase sin duda, sería una buena adquisición para los conocimientos que ya tenía.

Salió de la mansión con su atuendo habitual, jeans de mezclilla, una blusa

Pegada de color azul y unos botines negros. Su cabello azul estaba recogido en dos coletas y llevaba una túnica encima porque se sentía elcómodo frío en el ambiente.

Desapareció rumbo al lugar que los citaban, un museo que lugar tan particular para una clase de primeros auxilios, ella pensaría que un hospital sería una mejor opción, pero debía de haber una razón para que aquel fuera la decisión.

Al llegar miro tres figuras ya en el sitio, la maestra Malfoy y dos personas que ubicaba, su hermano Matthew y otra chica que sólo conocía de vista. Miro alrededor y se fijó en la exposición egipcia dando una sonrisa porque aparte de los griegos era una de sus civilizaciones favoritas.

—Hola a todos— comentó con una sonrisa y se quitó la túnica ya que elno lugar estaba lo suficientemente cálido.