Zeth Black Lestrange

Yo no estoy deacuerdo con que Keaton sea patriarca, por varias razones, y la principal es por que no es mortífago.

Asi que, Mía,

gracias totales!!

por otro lado...

Bienvenido Zapato, espero tengas una agradable estadía en la mansión Black Lestrange

…

Por momentos, me petrificaba al pie de los largos ventanales, observando las calles y las personas que transitaban en ellas, distrayendo mi mente de los espacios vacios que me rodeaban, un silencio perfecto, guardando mis pensamientos en cada rincón de la oficina. Había perdido la noción del tiempo. Mi diestra reposaba sobre un folio con registros internos, apiñados, como la información que se aglomeraba en sus renglones, como la esencia del veneno en diminutos frascos.

Mi mano izquierda, sujetaba con elegancia y determinación uno de los pergaminos empilados, siendo el punto de atención de mi visión analítica, caía en los grafos que englobaban interesantes conclusiones, mientras, cierta ansiedad empezaba a canalizarse en los torrentes sanguíneos, donde el liquido vital había escaseado años atrás. Pronto, el sonido de la puerta rompió con mi concentración, desviando mis celestes orbes a la criatura que originaba ese quiebre en mi concentración, y en el sigilo absoluto de la habitación.

Desde los inicios de mi existencia, aquellas extrañas criaturas, las criaturas mágicas siempre me habían causado gran fascinación. La elfina, a penas había adentrado su cabeza detrás de la puerta, por lo que su presencia me causaba gracia. Enarcando mi ceja derecha, tumbé lentamente mi porte en el espaldar acolchado del sillón, arrancando mis manos de la superficie lisa del escritorio para observar y atender con mayor consideración, a las palaras que vociferaría la elfina. Mi rostro maquinizaba un serio semblante, y la nula expresión de mis palabras, tensaba más el hilo del salón.

— ¿qué haces aquí? — pregunté finalmente a la pequeña criatura.

— Cristal ¿cierto? ¿te ha enviado Valentine?

…

Poco después de detenerme a rivalizar con el retrato de un mago muerto, decidí incorporarme a mi anterior búsqueda, hallándome nuevamente en medio de una sala elegante y hogareña —excelente— mascullé con decepción. Maquinizando un gesto indiferente sobre mi etérea faz, fijé mi visión en la puerta colindante a mi oficina, donde, se disponía de un ambiente seleccionado para efectuar las reuniones del departamento, donde se fijaban importantes metas para el desarrollo de las funciones del Escuadrón.

Sin mayores distracciones y con los ánimos de aventura consumidos, me encaminé hacia dicha puerta, abriéndola con un solo movimiento de mi diestra en el aire. Un par de pasos dentro del salón, fueron suficientes para marcar mi vista en los ambientes predispuestos, el aroma, el calor, los colores y los muebles, eran extraños. Continué con mi andar espontaneo sin perder la postura altiva, observaba el entorno y enarcaba la ceja frente a los objetos que acentuaban algunas áreas de la extensa habitación. Ciertamente, la idea de hacer cambios en ese mismo instante, no era lo más prioritario.

Antes de alzar mi varita en pos de una reforma decorativa, decidí almacenar las energías y dejarme llevar por la flojera, así que, continué mis pasos hasta atisbar en la mesa de reuniones, donde la extensión del mueble era exacta para cobijar a los empleados del escuadrón; seguramente decisiones importantes se tomaron en aquella estancia, pero el tiempo había marcado la distancia desde la última sesión que se realizó, hasta la programada el día de hoy.

Sin más, me tumbé en el sillón que encabeza dicho mesón, materializando una varita de vid en la mano derecha, con la cual, realicé una floritura para levitar un reloj de arena que se hallaba reposando sobre un buró en un extremo del salón; aterrizando dicho objeto preciado sobre la superficie lisa de la mesa, observaba cómo la arena del reloj caía y el tiempo de espera para la apertura de la reunión disminuía. Pronto, me hallaría frente al equipo activo del Escuadrón para la Aplicación de la Ley Mágica, y la espera, cernía la sensación de expectativa.

…

Retenido en una posición neutral, escuchaba cómo desaparecía el rastro del sonido de los memorándums interdepartamentales. Sin mayores responsabilidades que estudiar unos oficios que se apiñaban en una columna de pergaminos, releí las caratulas de los folders que archivaban los últimos movimientos del escuadrón. Mentalmente, plasmaba las funciones originales que retomarían las oficinas, y entre meditaciones, trataba de encajar dichas funciones con el trabajo actual que se desarrollaba.

El silencio gobernaba cada espacio de la extensa habitación, los muebles aun intactos, afloraban una sensación extraña que acentuaba la incomodidad sobre un espacio desconocido. No existían paredes blancas, la sensación de frio había desaparecido, y el silencio, parecía adornarse con los colores cálidos que revestían los muros de la oficina personal de la anterior directora del departamento. Distraía mi mente con las irrelevancias de una estancia pasajera.

Antes de vociferar palabra alguna, mis dedos se encargaron de romper con el transe sigiloso que asesinaba el sentimiento vivo de la Dirección, poco a poco, las yemas congeladas de mis inertes dedos, se turnaban para retumbar sobre la extensión lisa del escritorio de caoba, componiendo un sonido secuencial de vaivenes armoniosos. Mis ojos, atisbaban las mangas de la camisa negra que vestía mi torso etéreo, deteniéndose en las marcas extrañas que adornaban mis muñecas pálidas, de eslavas de espinas penetrando la piel.

Abatido y en un estado de putrefacción mental, inhalaba hondamente tragando la infinidad de excusas que me invitaban a destruir la habitación. Cuando la campana del reloj de pared, anuncio la una de la tarde, decidí arrancar mi talle altivo del mueble acolchado donde descansaba el peso de mi inmortalidad. Paciente y con cierta preocupación carcomiendo mis pensamientos, abandoné los ambientes de la dirección, encontrándome nuevamente en el recibidor del Escuadrón.

— Así que ésta es la nueva guarida — musité clavando mis ojos en el cuadro de un mago, colgado en la pared. Desviando la mirada en búsqueda de un sillón donde dormir.

buenas buenas, ¿que tal?

me gustaria hacer la siguiente modificacion:

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1. DATOS PERSONALES:
    
   
   • Nombre del personaje: Zeth Black Lestrange
     
   • Sexo: masculino
     
   • Edad: 18 años, aparentemente
     
   • Nacionalidad: japonés
     
   • Familia:
     
     • Familia 1:Black Lestrange (Patriarca)
       
     • Familia 2: --

[*]Padre(s) sanguíneos: Litah Black Lestrange e Illidan Black Lestrange

[*]Padre(s) adoptivos: --

[*]Trabajo: Escuadrón para la Aplicación de la Ley Mágica, MM - director

 

 

[*]PODERES MÁGICOS:

 

• Rango social: Unicornio de Bronce
  
• Bando: Mortífago
  
• Rango dentro del bando: Tempestad
  
• Nivel de Poder Mágico:
  
• Puntos de poder en objetos: 140

Hechizos adicionales:

 

• Puntos de poder en criaturas: 20

Criaturas controlables en asaltos y duelos:

 

 

• Habilidades mágicas:
   
  
• Conocimientos especiales:
  
  • Conocimientos sobre maldiciones
    
  • Artes oscuras
    
  • Adivinación
    
  • Encantamientos

 

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[*]PERFIL DEL PERSONAJE:

 

• Raza: vampiro
   
  
• Aspecto físico:
  De 184cm de altura, piel extremadamente pálida; de contextura delgada pero con músculos largos y desarrollados a la vista; cabellos color negro-grisáceos, lacio, largo y alborotados; ojos intensos, de mirada gélida y misteriosa, de celestes orbes (de acuerdo al estado de ánimo, varían entre grises/estado de legeremancia y rojos/vampiro); lleva 2 pircing en el lado izquierdo del labio inferior, además de 2 pequeños aros en cada oreja y un pendiente largo que termina en una cruz que cae por encima de su hombro derecho; se detectaron cicatrices en los antebrazos (probablemente con intensiones de cubrir marcas de nacimiento); de temperatura corporal extremadamente fría.
  Generalmente utiliza gabardinas y chaquetas largas; su vestimenta sport-elegante, generalmente se basa en tonos negros, y en ocasiones utiliza colores en gama de grises o azules, zapatillas casuales y medallones con simbología religiosa.
   
  
• Cualidades psicológicas:
  Joven de carácter extremadamente fuerte, con gran sabiduría, rebelde, con mucha personalidad, y un temperamento incontrolable, agresivo, astuto, sarcástico. Presenta autoaislamiento y problemas de autoridad. Tiende a ser una persona fría e inerte, que difícilmente confía en alguien.
  Pero cuando se encuentra en confianza, es comprensivo y hasta puede llegar a ser compasivo, siendo una persona leal a los suyos. No tiende a las discusiones o peleas pero es muy celoso de los suyos, inteligente y emprendedor.
   
   
  
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• Historia del personaje:
   
  Nació en una familia aristocrática y adinerada, de brujas y magos reconocidos; su padre Illidan murió poco antes de que Zeth naciera, siendo éste un terrible incidente que marcara su vida. Mientras crecía, su madre y sus hermanas siempre vieron en su rostro, el rostro de su fallecido padre, siendo ésta la razón por la que desde muy niño, entendiera los sentimientos de la culpa y el dolor. El sentimiento de impotencia aumentaba, puesto que era el mismo retrato de Illidan y ante tanta presión, le pide a su madre un gran favor. A los 8 años es enviado a un internado en el continente de América, donde solo mantuvo comunicación con su madre y hermana Ashley por medio de cartas y fotografías.
   
  En sus inicios en el internado, fue un niño muy aplicado en los estudios, y sumamente tímido, ya en la adolescencia se le conoció con el sobrenombre de Clow, desarrollando una personalidad oscura, agresiva y rebelde. Siendo así que conoce a su mejor amigo y hermano de aventuras, Evander, al que Zeth llama Moody. El encuentro se inicio en circunstancias poco amistosas, y fue entre golpes y heridas que se comprendieron a pesar de la diferencia de personalidades y de mundos, unificando un lazo irrompible de amistad, hermandad y lealtad, uniéndose al dueto la hermana menor de Evander.
   
  Al poco tiempo en una de sus clases, conoció a una bella joven de nombre Stella Nox, hija del profesor de pociones, quien tuvo que pasar mil y un obstáculos para conocer el verdadero corazón de Zeth, convirtiéndose en una pieza fundamental en el desarrollo como persona “humana” de Zeth. Aprendiendo el sentimiento de la compasión, la preocupación, la afectividad y el amor. Mas tal estado duro muy poco, puesto que el cabo de su ultimo año en dicha institución, su novia era muy dulce e inteligente pero a la vez siempre le hablaba de morir, pues siempre le contaba a Zeth de sus problemas con sus padres, quien la obligaban a ser perfecta a tal punto de tomar decisiones por ella. Hasta que Stella tomó una decisión por sí misma, morir. Volviendo a encerrar a Zeth en su caparazón, escondiendo su fracturado corazón en lo más profundo del baúl de sus recuerdos. En sus vacaciones viajaba al país de Perú, a un criadero de dragones Vipertooth peruanos, ubicados en la selva del Amazonas.
   
  7 años transcurrieron desde su auto-exilio, tras esto vuelve a la mansión de los Black Lestrange, tras una carta de un familiar; junto a su madre y hermana, reviven a su difunto padre, así mismo en Zeth sus fantasmas del pasado. La relación con su padre actualmente es nula y se mantienen distantes con la esperanza de que el tiempo pueda sanar las heridas. Paralelamente su relación con su hermana se ha fortalecido con el tiempo, considerándola como la persona más importante en su vida.
   
  Su etapa durante la Academia de Magia y Hechicería, fue óptima, siendo uno de los estudiantes más destacados, aprendiendo a potencializar sus poderes y descubriendo otros como sus dones de vampiro, esperando tener el rango necesario para poder utilizarlos legalmente. Ostento el puesto de prefecto durante su último año, conociendo a personalidades que se volverían en amigos formadores de una nueva personalidad, entendiendo que había algo de humanidad aun en él, la amistad. Conoce a las trillizas de Salem y su atención es captada por una de las jóvenes, una castaña que esconde lazos familiares con Zeth, quién corresponde la innegable atracción, relación que promete mucho hacia el futuro, pues al terminar la Academia dejaron abierta la posibilidad de intentar un compromiso. El tiempo hizo de Zeth una persona fría, encerrando todo sentimiento bajo un inerte rostro. Volviendo el pasado a mantenerlo en vela durante las noches, donde los recuerdos de su fallecida amada aun lo atormentan tentándolo a vivir en un mundo irreal.
   
  Fue allí que conoció a una nueva mujer en su vida, una de sus maestras durante su primer año, con quien mantuvo una relación compleja, una atracción apasionada que envolvía amor verdadero, a pesar de lo tormentoso de expresar ambos sus emociones, lograron comprenderse y demostrar su cariño el día de su graduación, fortaleciendo una relación que en sus inicios fue negativa para ambos (quienes tienen una diferencia de edad considerable poseían una relación de profesora-alumno) relación que nunca se formalizó. A pesar de que Zeth siempre gustó de tener un perfil bajo, muchas personas influyeron en romper el noviazgo entre él y Mónica a tal punto que los malentendidos y las constantes peleas hicieron florecer la frialdad y la poca confianza en Zeth hacia su amada, observándola en las sombras que ésta no le era del todo fiel pero tragándose las escenas a cambio de un día más a su lado, mezclando esos golpes a su orgullo con pensamientos de “no soy suficiente” despertando su odio hacia ella y para no lastimarla decidiendo alejarse de la “pelirroja”. Una noche Mónica apareció en la habitación de Zeth, y a pesar de verse la escena como una aparente reconciliación, el agrio comportamiento del mago acciona las replicas en la Malfoy, fulminando Zeth en sus manos la varita de Mónica, y ésta ultima llevándose como recuerdo de la última vez que se vieron, la varita del mago. Desde ese entonces no se han vuelto a ver.
   
  Paralelamente sirvió como aprendiz en el departamento de Misterios en el Ministerio de Magia, para luego tras recibir su título de Unicornio de Bronce, resolverse como un empleado. Actualmente una visita del futuro desató un sin fin de dudas en la vida de Zeth, la llegada de un supuesto hijo que posee su misma edad, refugiándose en este mundo para asegurarse de que su nacimiento se lleve a cabo. Con quien aprenderá de manera notable los lazos de padre e hijo y los problemas que surgirán en un futuro no muy lejano. Logrando abrir un local en el Callejón Diagon de nombre Sapientia junto a su socio y mejor amigo Evander. En dichos pasillos conoce a una joven de rubios cabellos, quien le recuerda mucho a Stella. Apodada como Sylverlin, ésta bruja le enseñara a Zeth a ayudarse ayudándola, prometiendo un futuro incierto pero un lazo profundo de un sentimiento aun no comprendido. Después de atravesar una etapa difícil de su vida, en el trabajo, como mortífago y persona, encuentra el camino correcto rehaciendo su vida laboral, ignorando su vida sentimental para entregarse a su trabajo como Jefe de la Oficina de Investigación Secreta.

 

[*]PERTENENCIAS:

 

• Objeto mágico legendario:
   
  
• Objetos mágicos:
   
  
  • Objeto 1: Varita mágica (38 centímetros, madera de vid con centro de plumas de fénix)
    
  • Clasificación: AA
    
  • Puntos de Poder: 20
  • Objeto 2: Collar de Ópalo.
    
  • Clasificación: AA
    
  • Puntos de Poder: 20
  • Objeto 3: Chivatoscopio.
    
  • Clasificación: AA
    
  • Puntos de Poder: 20
  • Objeto 4: Poción Desinfladora.
    
  • Clasificación: A
    
  • Puntos de Poder: 10
  • Objeto 5: Poción Pimentónica.
    
  • Clasificación: A
    
  • Puntos de Poder: 10
  • Objeto 6: Esencia de Rue.
    
  • Clasificación: AA
    
  • Puntos de Poder: 20
  • Objeto 7: Poción Reabastecedora de Sangre.
    
  • Clasificación: AAA
    
  • Puntos de Poder: 40

   

  Total de Puntos de Poder en Objetos: 140

   

   

  [*]Mascotas y Criaturas:

  • Criatura 1: Zorro
    
  • Clasificación: X y no mágicas
    
  • Puntos de poder: 10
  • Criatura 2: Zorro
    
  • Clasificación: X y no mágicas
    
  • Puntos de poder: 10

   

  Total de Puntos de Poder en Criaturas: 20

   

   

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  [*]Criaturas en la Reserva:

  • Criatura 1:
    
  • Clasificación:
    
  • Puntos de poder:

   

  [*]Elfos:

  • Tenebrae: Elfo más alto de lo normal con nariz pequeña y redonda, de piel pálida y ojos grandes húmedos y marrones como de cachorrito. Viste camisetas negras con extraños gráficos alusivos a las bandas metaleras muggle, posible vestimenta vieja de un adolecente (quien hace como si no le importase que su elfo use su ropa).

 

 

[*]LICENCIAS, TASAS, REGISTROS:

 

• Licencia de aparición: Obtenida.
  
• Licencia de vuelo de escoba: Obtenida.
  
• Registro de XXX:

 

 

[*]OTROS DATOS:

 

• Otros datos:
  
  • Le gusta el silencio, pero tolera a los animales y algunas criaturas mágicas.
    
  • Valora las cosas y/o fenómenos más sencillos de la vida, sentir la lluvia en su rostro, la brisa helada del viento, admirar la luna y siente fascinación (disfrazada de incomodidad) por el color dorado o rubio de las cosas.
    
  • Posee cierta obsesión por la lectura de autores muggles, específicamente por la poesía.
    
  • Pasa las noches sobre el suelo frio del balcón de su habitación para admirar las estrellas, pues le recuerdan subconscientemente a Stella.
    
  • Generalmente no concilia el sueño, y cuando lo logra sus sentidos se funden en tormentosas pesadillas, noches de desvelos.
    
  • en algunas ocaciones encontrándose despierto, puede observar el fantasma de su primer amor, Stella Nox, una hermosa joven de cabellos dorados y ojos ámbar, que según él era como el sol que iluminaba sus lúgubres días. Stella se suicida ante él, causándole una gran conmoción emocional que logra bloquear todo intercambio de afecto en Zeth, convirtiéndose en una lastimosa característica de él.
    
  • Suele "autoexiliarse" al tronco de un árbol cerca al lago de los terrenos de la mansión Black Lestrange.
    
  • El demeguise que registró en el Ministerio como suyo, pertenece realmente a Stella.
    
  • A veces cantar casi en sigilo: “fuiste tan dulce nena, pero a la vez perversa, siempre me hablabas de morir, y te seguí los pasos hasta que tu locura me comenzaba a destruir.”
    
  • Su varita es gemela a la varita de Stella, por lo que guarda en secreto dicha varita entre otra de sus posesiones que logró obtener de la habitación de su novia en la Academia. Dicha varita es la que usa actualmente mientras espera el regreso de su verdadera arma.

   

  [*]Cronología de cargos:

  • Nace el 26 de enero de 1992.
    
  • 14 de febrero del 2007, muere Stella Nox Merlyn.
    
  • Regresa a la mansión Black Lestrange, noviembre 2010.
    
  • Ingresa a la Academia de Magia, diciembre del 2010.
    
  • labora como Aprendriz en el Departamento de Misterios, enero 2011
    
  • Unicornio de Bronce, marzo del 2011.
    
  • Ascendido a Jefe de la Oficina de Investigación Secreta. octubre del 2011
    
  • Unicornio de Plata, octubre del 2011.
    
  • Es nombrado Director del Escuadrón para la Aplicación de la Ley Magica, junio del 2012.

   

  [*]Premios y reconocimientos:

 

 

[*]LINKS DE INTERES REFERENTE AL PERSONAJE:

 

• Link al Perfil de Comprador MM: 84
  
• Link a boveda personal : Bóveda de Zeth
  
• Link a Bóveda Trastera: --
  
• Link a Boveda de Negocio : B:91111 - Sapientia | B:96495 - La tía Veneno. | B:97422 - Ten Bells
  
• Link a boveda familiar principal : Black Lestrange
  
• Link a Bóveda Familiar 2: --
  

…

La segunda planta del ministerio de magia, no lograba la sensación de caída que podía percibir desde el ventanal de mi antigua oficina, más el silencio absoluto me brindaba la sensación de comodidad. Después de un intento por familiarizarme con mi nueva área de labor, decidí contemplar la vista que ofrecía la Dirección. Mis ojos apuñalaban las transparentes láminas de vidrio que limitaban el espacio de mi oficina personal, el bullicio del exterior se amortiguaba en las calles colindantes, y desde mi ubicación privilegiada, atisbaba el movimiento rutinario de los transeúntes.

Mientras mis pies me devolvían hacia el escritorio vacio, registraba nuevamente el entorno que me rodeaba, desde la repisa de caoba hasta algunos formularios cancelados en un fichero sobre el pupitre. Los muros eran revestidos por colores neutrales, similares a las tonalidades de la tierra seca cobijando las raíces de los troncos de árboles, extendiéndose en toda la superficie lisa de los suelos de la habitación. En ese instante, me pareció recorrer los paisajes tenebrosos de los jardines ocultos de la mansión Black Lestrange.

En una honda inhalación, me tumbé en el sillón frente a la mesa de trabajo, apoyando mi peso en el espaldar del acolchado asiento, asimilaba el nuevo techo que cubría mis pensamientos. Antes de perderme en una absurda divagación cotidiana, y arrancarme los recuerdos con hiel de trabajo, observé las manecillas de un reloj de pared, a punto de dar las doce del medio día; posteriormente, me dispuse a buscar entre las carpetas, el listado de los jefes de las oficinas y los empleados que conformaban el equipo de trabajo del escuadrón.

— Sospecho que será una interesante tarde — susurré materializando con una acción de mi diestra, un trozo de pergamino y una pluma con la cuál grafiqué una breve composición, posteriormente configuré mágicamente el memorándum departamental. En forma de avión de papel, multipliqué el pergamino original para realizar un manojo de copias exactas, las cuales fueron repartidas inmediatamente entre el personal del departamento.

http://i.imgur.com/cAzUK.png

 

Buenas tardes.

 

Esperando se hallen en optimas condiciones, se les comunica a los magos y brujas que laboran en las instalaciones del Escuadrón, que se realizará una reunión de carácter OBLIGATORIO para la programación de las actividades del departamento, entre otros asuntos en agenda.

La hora y el lugar: Sala de Reuniones, 14:00h.

 

Atte.

Zeth Black Lestrange

Director del Departamento

Escuadrón para la Aplicación de la Ley Mágica

Ministerio de Magia

buenas buenas... gente que tal??

ahaha kasss... no necesitas que te confirme, si hace mucho que eres mi hija reconocida por la ficha y el ministerio jajajaa, no tengo como negarte xDDDDDD

bueno gente, parece que las cosas empezaran a coajar

gracias sheyla por avisar que no quieres seguir siendo mi hija me encanta enterarme de las cosas que me competen por mi mismo.

nos vemos!

…

Una puerta de caoba maciza, se alzaba frente a mis ojos; coronándose sobre la madera, un dorado título exhibía el nombre del departamento a fin, el Escuadrón para la Aplicación de la Ley Mágica. Mi porte altivo se envolvía de una gabardina de paño oscuro, donde el fúnebre color contrastaba con la palidez de mi helada piel, acentuando las facciones etéreas de mi rostro asqueado por el perfume dulce de las acompañantes del elevador metálico. Eliminando los gestos, centraba mi acida visión en la explanada del segundo nivel.

Mi vista indiferente, perforaba la superficie labrada de la madera oscura, mientras, mi diestra se alzaba despegándose del contorno rígido de mi porte, realizando con la mano un gesto con el cuál instantáneamente la puerta cedió para permitirme el ingreso hacia sus instalaciones, hallándome en el inicio de un amplio pasillo limitado por diversos retratos enmarcados sobre los muros de los ambientes. Sin el interés de admirar o adular los nombres de los magos en los cuadros, proseguí recorrer el camino.

La ausencia de empleados contribuía el desazón de mis labios. Los colores vibrantes y el olor de las plantas en el interior de las oficinas, envolvían mis sentidos, repeliendo la sensación delicada y el toque femenino que seguramente se había encargado de la ambientación de los espacios de espera y trabajo; una sensación incomoda, pero no del todo desagradable. Mis ojos fulminaban todo objeto que acompañase los pisos lisos o las paredes frías del pasaje. Antes de maldecir el último retrato sobre la pared, desvié mis celestes ojos hacia el final del pasillo, donde cuatro puertas remataban el camino.

Sin mas titubeos, y a sapiencia de haber saboreado parte de las instalaciones de recepción del departamento, proseguí a dejar las observaciones espontaneas, dirigiéndome sin más distracciones hacia la puerta que me invitaba a entrar. En el interior, un espacio amplio y ajeno a mis preferencias. Enarcando una ceja, aproximé mi altivo porte hacia el escritorio elegante donde una exagerada pila de papeles realizaba la introducción al trabajo que me esperaba, exhalando con gusto, me despojé de la gabardina oscura, tumbándome después en el sillón de la dirección.

Joieiael Stella Nox

Horas antes…

Me veía en el reflejo, embelesada por las formas que proyectaban el objeto plateado, después de tanto tiempo, observaba… mi reflejo. Pero ni siquiera el sentimiento de libertad, lograba arrancar de mis pensamientos, la opresión que prensaba mi pecho contra mi corazón. Casi petrificada, terminé atorándome por tragar mas aire del que debía, el frio me recordaba lo desnuda que estaba, y no era únicamente porque me hallaba descalza. Lo siento, susurré observando los objetos de él, sentía que le estaba robando de los momentos más importantes a él, a Zeth, me sentía una ladrona, una usurpadora — “no olvides que aun estoy aquí” — escuché en mi cabeza sorprendida.

— Gracias Zeth — susurré. “sabes que haría más que eso, Stella” respondió.

Retrocedí unos pasos y caí sentada sobre el blando colchón de la cama, donde un vestido negro reposaba sobre el delicado edredón purpura, anonadada por el gesto del pelinegro, desvié mis ojos hacia los complementos que también había seleccionado para mí. Sonreí y me tumbé de lleno en el espacioso mueble, observando el techo blanquecino, quedando embrujada por una percepción ajena a la visión. Los mechones claros sobre mi rostro, bloqueando parte de mi observación, el aire inflando mis pulmones y el pulso en mis muñecas, que agradable sensación. Al instante, el elfo que del mago se materializó a mi lado, indicándome que ya era hora.

Actualidad

Recorría lentamente los pasajes, acostumbrándome nuevamente al caminar, era un trance ajeno, como volver a hacer todo de nuevo, y realmente era así. Me sentía como una bebe dando sus primeros pasos, solo que ahora, temía tropezar más que antes. Mi cuerpo se envolvía con el vestido negro; a veces, llevaba las manos a la tela suave que forraba el exterior del vestido, sintiendo también la asperidad de los guantes largos que cubrían parte de la piel de mis brazos, ahí, donde las cicatrices de mi última decisión como humana habían acabado con mi existencia.

Presionando mis carnes como si fuera a desvanecer nuevamente, continuaba a través del extenso pasillo, saboreando del aroma de los jardines y sintiendo la brisa fría acariciando mi rostro. Extendía mi mano hacia la superficie de la pared, palpando con las yemas de mis dedos la asperidad que ofrecía el muro. Las grietas entre los adoquines que la componían, me traían una extraña sensación, un sentimiento familiar que me hacia entender, que de alguna manera, mi cuerpo se sentía cómoda en su cercanía ¿Por qué te gustaba tanto esto? pregunté al mago, quién ya no respondía, descansa, pero solo un momento.

Pronto, me percaté del sonido que se producía en el interior de un ambiente cercano, intuyendo que ese lugar era el final de mi recorrido. Mantuve una postura neutral, pero mis ojos dubitativos, registraban todo lo que a mí alrededor habitaba, como si temiera la proximidad con los humanos, después de tantos años muerta, la sensación de soledad sumada a los propios sentimientos de Zeth, me desubicaban en el entorno, y creaban un conflicto de sentimientos, sin embargo, estaba segura que las tramas emocionales no impedirían que esa noche le diera la sorpresa a mi amiga.

Ingresé al espacio preparado para la ceremonia, lamentablemente había llegado demasiado tarde para observar los honores a Gomita, no obstante, la idea era pasar un tiempo junto a ella. Colándome entre los invitados, tratando de mantener un perfil bajo, e incluso de esforzarme a sobremanera para que el sonido de mis pasos no atrajeran miradas que pudieran notar lo ajena que era a los recuerdos de los presentes, pues era un completa extraña. Antes de arrepentirme y salir corriendo en búsqueda del retorno al mundo de los muertos, divisé a Gomita.

Sin importarme quien o quienes estuvieran a su lado, me acerqué sigilosamente y le di unos toquecitos con mi índice en su hombro — ¿adivina quién soy? —

• • Nats Moon: (R: 17pts / C: 10 pts) = 27 pts.
     
    
  • Jenay Black: (R: 20pts / C: 10pts) = 30 pts.
     
    
  • Sakura Uzumaki: (R: 00pts / C: 10pts) = 10 pts.**
    ** con oportunidad de postear los roles que debe para ser evaluada en ese rubro.

Leyenda:

 

R= Rol

C= Cuestionario

...

La observaba divertirse con mis vocablos, no obstante, me hallaba más consciente de la espera que se prolongaba por descubrir el preciado objeto que la pelirroja pregonaba. Aun así, escuchaba con atención a la mujer, mientras seguía a su lado recorriendo los ambientes de la que no parecía una simple oficina. La escuché repetir sobre mi comentario anterior, y tendí a formular una sonrisa alargada hacia un extremo de mi frígido rostro, correspondiéndole con sinceridad. — Exactamente por eso lo dije — agregué sin volver mi faz a la mujer.

Seguramente aquella acción había sembrado una sensación inesperada por la pelirroja, mas en ese instante, la curiosidad sobre el predicado objeto misterioso, abarcaba todas las cavilaciones de mi mente, realmente me cuestionaba qué objeto preciado más útil que un giratiempos, podría guardar la fémina en las instalaciones de su dependencia. tal vez un nuevo hechizo recién creado, o un encantamiento propio de su oficina, pensaba, observé el rojo predominante del salón y contuve una inhalación alargada desviando mi semblante hacia otro extremo de la habitación.

En un instante, observé su semblante cándido aun con la efusión de mi anterior comentario, respondiéndole con mi semblante inexpresivo mientras la acompañaba a través de un pasillo junto a la chimenea, donde un objeto poco peculiar reposaba sobre su masa. Mi rostro se mantuvo gélido observando los gestos vanidosos de la narcisista jefa de la Oficina Creadora de Pociones y Hechizos, observaba los detalles definidos del espejo, unos curiosos grafos labrados en el marco de oro, realmente era un interesante objeto de colección.

Al oír la voz de la fémina, pidiendo mi opinión sobre el objeto dorado, solo tendí a arrastrar mi semblante hacia ella, petrificando unos segundos mi visión en su rostro. Inmediatamente enarqué una ceja como diciendo “eso ya lo veremos” y me centré en observar el tan mencionado ejemplar de oro. El semblante de la mujer se reflejaba en la lámina del espejo, sin embargo, cuando la primera realizaba otros gestos, la proyección de su rostro en el objeto no lo hacía, por lo que inmediatamente entendí de que se trataba de un elemento encantado, extraño y singular.

— ¿Orión? — Repetí — vaya, realmente no me esperaba esto —.

Tras ello, enarqué una ceja observando las visiones que se formulaban en la superficie aparentemente lisa del espejo. En instantes, una cronología de visiones sobre la vida de la pelirroja, se ilustraban como los dibujos de un cuento, en la lámina delgada del ornamento delicado. Me mantuve quieto, manteniendo la postura indiferente ante el magnífico elemento, conteniendo las teorías que se tejían en mi garganta, cayendo mis celestes orbes en el rostro de la Macnair.

— Parece que guardas una baratija excepcional — cuestioné empozando mis frígidos ojos en la bruja. — ¿Dónde lo has conseguido?—

...

El silencio reinaba en los parajes de la Isla Epiro, y a penas se dejaban oír el sonido de las olas azotando los arrecifes de corales. Me hallaba solo a mitad del salón junto con Jessi, donde habíamos instalado un espontaneo centro de trabajo para auxiliar la investigación que llevábamos a cabo sobre la búsqueda de la Fuente de la Juventud. La joven compartía la teoría que tenia acerca de la ubicación de la Fuente de la Juventud, por lo que mientras los aparatos científicos realizaban su trabajo con las muestras de la primera probeta de agua de Bethesda, nos centraríamos en buscar la ubicación de la Atlántida.

— Así es — vociferé a Jessi — empezaré con las pruebas de los líquidos que traerán de muestras. Y, deseo que mientras, tú te encargues de revisar los manuscritos y propongas las posibles ubicaciones del continente escondido —

Entre tanto, Gaby se aunaba al grupo para acompañar el silencio de la investigación, terminando de dividir las muestras en una caja con cerradura mágica, modulaba mentalmente las indicaciones que les daría a las jóvenes que debían traer los vitales elixires, para que colaboraran con los descartes de los componentes “milagrosos” de las aguas. Al instante, la presencia de una inefable más se hacía denotar en el espontaneo centro de operaciones de la OIS.

— será suficiente — respondí inmediatamente a Ariadna, girando con la silla para atisbar al recipiente.

Tras dividir el agua en diferentes probetas para su óptima utilización y experimentación, procedí a mezclar el agua con diferentes sustancias químicas, esperando después alguna reacción positiva o negativa de acuerdo al descarte que estaba evaluando. En la espera, me apoyé en el espaldar de la silla giratoria del escritorio de cedro, en un extremo del salón, donde empezaba a sentir la necesidad de alimento que pedía mi cuerpo.

Con esfuerzo me desprendí del mueble encaminándome hacia la cocina del búngalo, apropiándome de una botella de líquido azul, con la que me volví hacia mi anterior ubicación; para con un sencillohechizo, multiplicar las bebidas y dejarlas sobre una mesa, junto a las inefables, quedándome sólo con un ejemplar; para dar lectura a los datos que la computadora empezaba a recopilar sobre la temperatura del agua de Bethesda. Al instante, coloqué el recipiente que contenía el agua traída desde Bimini, iniciando un nuevo trance de espera. Inhalando profundamente, quedaba en el silencio que las jóvenes perpetuaban.

— Según las primeras pruebas, parece tener los mismos compuestos del agua potable, H2O con algunos químicos añadidos—

— puede ser posible, que las coordenadas hayan sido erróneas — sugerí — y que las fuentes no se hallen exactamente donde supusimos. Como también es posible que en el caso de Bethesda, al estar ligada a la religión católica… haya sido escondido. En el caso de binimi, recuerdo que Ponce habló de otra posible ubicación. En tal caso, sugiero que revisen vuestros datos recopilados, y planteen una posible ubicación — indiqué.

...

El arrullo del viento se afilaba con más intensidad en los alrededores del búngalo, el sol ya debía haber caído y esperaba que el manto de la noche refrescara la arena y todo lo que bajo sus pies había, con la esperanza de poder dar un paseo nocturno por las orillas del mar. La arena del reloj caía lentamente, mientras paseaba mi porte por el silencio de mi dormitorio, con el fin de recordar algunos datos que podrían servirme para una investigación particular. Pronto, el llamado de la puerta de la habitación, fracturó mi concentración.

Apunté mis ojos a la superficie de la puerta, y percatándome del aroma de la joven, la distinguí desde el otro ambiente. Aproximándome hacia ella, para girar de la perilla y dejarme a la vista de mi visitante. Hallando efectivamente a Jessi ensimismada en la investigación que le tocaba, seguramente rebuscaba datos más relevantes sobre la Atlántida. Mientras la oía, consideraba oportuno transmitirle mi teoría acerca de la Fuente, y la relación que tenia con la Atlántida, que era a mi criterio el lugar donde se escondía dicha Fuente de la Juventud.

— Perfecto — vociferé invitándola a reunirnos en el salón, pues no me parecía correcto realizar el estudio en mi dormitorio — tengo la sospecha, de que la Fuente nunca se ha encontrado, porque está escondida de los muggles — le dije dándole un indicio de la maraña que se tejía en mi cabeza desde antes de plantearles la investigación a las jóvenes.

Me aproximé a ella y le indiqué algunos manuscritos antiguos que podrían ayudarla, poco después el sonido de una ráfaga se oyó desde afuera, y al instante se divisó a Gaby. Dirigí mi atención hacia la joven, buscando entre sus manos las muestras sobre el líquido que se le había encomendado. La Piscina de Bethesda y las teorías sobre su elixir pertenecían a una cultura veranada por la mayoría de muggles, además de que muy respetada por mí, debito a los incontables misterios de su religión. Observando que dejaba el frasco sobre la mesa, afilaba mi visión hacia el agua en el interior de la diminuta botella.

En medio de mis cavilaciones, la voz de la fémina ante la mirada atónita de la otra inefable, me desligaron del rutinario proceso que pensaba realizar, desviando mi vista analítica hacia las vestiduras empapadas y embarradas de lodo de la joven inefable. Enarcando una ceja y apunto de graficar una sonrisa en mi rostro ante la presentación de la hechicera, tendí a mantenerme inerte, distrayendo el gesto de mi faz hacia una computadora muggle que serviría de bitácora. Finalmente ingresé los datos de la llegada de la primera inefable.

Sin perder mayor tiempo, materialicé mi varita de vid en la mano derecha, y con una floritura de mi diestra, levité el frasco hasta mi ubicación para ponerlo dentro de una cámara transparente que estudiaría la temperatura del liquido, hasta tener los datos básicos para empezar un estudio más detallado sobre su composición, y posteriormente poder realizar las pruebas de ensayo para el descarte de sus propiedades.— necesitamos esos datos y los de Ariadna, para proceder a efectuar los experimentos que propondrán para el descarte de sus propiedades mágicas — expliqué.

...

Cuando el reloj antiguo, que se hallaba empotrado en la pared de la sala, dio las doce en punto, clavé mi visión en los archivos que estaba efectuando en el computador, guardé la información y me puse en pié caminando hacia una pequeña mesa que se encontraba entre los muebles, con intenciones coger una moneda dorada que descansaba sobre una bandeja plateada. Antes, me dirigí hacia el ala donde se hallaban los dormitorios de las inefables, y en medio del pasillo en penumbras susurré casi inaudiblemente, cogiendo la moneda.

— iré al departamento de misterios. Pórtense bien — dije presionando el traslador, desapareciendo en una brisa.

…

Materializándome instantáneamente en los ambientes desolados de las oficinas del departamento de Misterios, fijé mi visión en la sombra de un individuo que caminaba en medio de la oscuridad del hall de la planta, distinguiéndola a la distancia, seguía la tenue luz que apenas iluminaba mis pasos, antes de llegar a la puerta que daba el acceso a la oficina de investigación secreta, me detuve para saludar a la mujer, pues sabía que no se había percatado de mi presencia, y no quería ocasionarle algún susto, sobre todo por el estado en el que se hallaba —ya no deberías trabajar— murmuré en mis pensamientos.

— Buenas noches — vociferé observando a la fémina de pie junto a la puerta — siento haberte hecho esperar — confesé girando la perilla de la puerta sin siquiera tocarla.

Mientras la puerta se abría para invitarnos a ingresar, hice un gesto con mi mano cediéndole la primera visual a la joven, enrumbándonos posteriormente al laberinto de pasajes angostos y largos que tejían la circulación de las instalaciones de la OIS. Las paredes, pisos y techos, estaban cubiertos de una pintura blanca, dándole a la dependencia la sensación de un lugar similar a los hospitales, la misma temperatura, el mismo misterio, solo faltaba el olor a antiséptico. Entre tanto, se podían observar las diferentes cámaras de cristal donde realizábamos los diversos ensayos experimentales para las investigaciones.

— bien ¿en qué puedo ayudarte? — exclamé a la Slytherin llegando al final del pasillo principal, donde a través de un hall, llegamos hacia una oficina neutra, donde un par de pinturas entintaban de vida el frio ambiente.

buenas buenas, que tal gentita?

aparezco de nuevo trayendo el reporte d emi guardia, andaba ocupado con complicaciones muggles de la universidad, se de esas que tienes que ir todos los dias a clases si no te votan del curso pero ya he vuelto y vengo con ganas de compulsear, asi que espero inspiracion y compañia

Ficha de reporte Roles/Torturas

 

Nombre de la Sombra(Mortifago): Zeth Black Lestrange

Actividad(Rol/Tortura o ambas): rol

Nurmengard I

Prisionero Torturado o con el que se roleo: solo

Resultado: esperando respuesta de Marion

Fecha: 17/05/12

...

El cielo se entintaba de rayos anaranjados, sobre el firmamento celeste que aun no concebía el atardecer, el clima era asfixiante y la abundante luz del exterior, empezaba a atosigarme obligándome a adentrarme vertiginosamente en los ambientes oscuros y tenebrosos de la monumental edificación. Seguro de haberme quedado dormido en el piso accidentado de ese balcón, me puse en pie recargándome en uno de los muros más próximos, despidiéndome de las bestias que reguardaban los cielos de la prisión.

Aspirando del aire afilado que gobernaba los alrededores. Observaba los rayos del sol atravesando los orificios de mi mascara marfil, mascara, que cumplía la función de guardar mi identidad en los menesteres que conllevaba hacer la guardia en el fuerte de Nurmengard, consciente y con los sentidos perfilados, me dispuse a ingresar a los espacios fúnebres de la vieja arquitectura, esperando hallar nuevos visitantes ocupando las siempre predispuestas celdas.

La vasta de gabardina a modo de sotana, recorría tras de mí el sendero lúgubre de mi destino, oyendo el eco de mis pasos colapsando con el piso empedrado de un extenso callejón, cruzándolo y atravesando un sortilegio de pasadizos que me llevarían a mi destino a fin, me hice de la capa oscura que se anudaba sobre mis hombros, cogiendo la capucha negra para cubrir mis azabaches cabellos, contrastando el níveo color de mi piel tras las vestiduras.

Fulminando con mi visión celeste el punto de llegada de mi recorrido, pausé para relajar los músculos de mi cuello, ladeándolos hacia los costados para obtener un sonido intolerante del roce de mis huesos. Pronto, sentí la presencia de una sombra familiar, por lo que proseguí por el pasaje angosto hasta llegar a una galería de celdas, donde esperaba hallar a la portadora de tan conocido aroma.

—veamos que tenemos hoy— musité.

• • Nats Moon: (R: 20pts / C: 10 pts) = 30 pts.
     
    
  • Courtney Adams: (R: 18 pts / C: 9 pts) = 27 pts.
     
    
  • Jenay Black: (R: 16pts / C: 9pts) = 27 pts.
     
    
  • Michelle Carvanaugh: (R: 17pts / C: 9pts) = 26 pts.
     
    
  • Wolf Lovett: (R: 00pts / C: 07 pts) = 07 pts.

Criterios de Evaluación:

 

Tareas, fechas límites, calificación

 

1ra tarea - 9, 10, 11 de mayo - 20 puntos.

2da tarea - 12, 13, 14 de mayo - 20 puntos.

3ra tarea - 15, 16, 17 de mayo - 20 puntos.

4ta tarea - 18, 19, 20 de mayo - 20 puntos.

 

 

Plus:

21, 22 y 23 de mayo

10 puntos extras sobre la calificación total

 

 

☼ Calificación total

 

Extraordinario: 100 Puntos

Supera las Expectativas: entre 75 y 95 Puntos

Aceptable: entre 50 y 70 Puntos

Insuficiente: entre 25 y 45 Puntos

Desastroso: entre 0 y 20 Puntos

 

 

☼ Calificación por tarea y rol

 

Extraordinario: 20 puntos

Supera las Expectativas: 15 puntos

Aceptable: 10 puntos

Insuficiente: 5 puntos

Desastroso: 0 puntos

 

En caso del plus y cuestionarios:

 

Extraordinario: 10 puntos

Supera las Expectativas: 7.5 puntos

Aceptable: 5 puntos

Insuficiente: 2.5 puntos

Desastroso: 0 puntos

 

Valor de los Cuestionarios 1 y 2: 10 puntos.

 

Total:

20®

20® + 10©

20® + 10©

20

___________

100

 

+10 extras.

 

Leyenda:

®= Rol

©= Cuestionario

 

 

EDITO: para actualizar las notas en la segunda Tarea

Wolff Lovett

Presenta un rol muy decente, con aparentes consideraciones al momento de narrar lo que quiere rolear, xD se entiende y hasta podría leerlo a totalidad jajaja. Tiene algunos detalles que se le escapan, comas y acentos que pulirá conforme avance en la academia.

Su perfil está casi vacio, no tiene amigos visibles en su cuenta y presenta un sugerente comentario de Laime, quien según mi memoria es su profesora en las Generales, quien tiene tendencias fenixianas lógicamente.

En su ficha de personaje, denota claramente que su familia es fictisia, y revisando sus datos leo claramente que él ha añadido los siguiente: “Bando: por el momento Neutral (aspirante a mortifago)”, asi que no hay mas que hacerle xD será de los nuestros. Según su historia, todos sus familiares (ficticios) son mortífagos, y como meta propone terminar la academia para ser “un gran mortífago”.

Nats Moon

Su rol es algo desordenado, normal para un principiante. Lo narra en tercera persona y posee una que otra cosa que hace interesante la lectura. Se entiende que le falta corregir algunos detalles y comprender muchos “tips” que le ayudarían a mejorar su rol, no obstante, es un rol creativo. He leído sus posteriores intervenciones en el rol de la clase, y está mejorando.

En su perfil noto que ya tiene muchos amigos, además de que Tau la ha adoptado como hija -.- y parece que Spectum como padre. La familia Crouchs la aceptado como integrante de su familia, así que no hay mucho que decir, pues son obvias las tendencias mortífagas que la rodean, a pesar de que ella ha mencionado en su presentación en OFF que no desea pertenecer a ningún “mundo” puesto que está acostumbrada a los aurores y mortífagos.

En su ficha no hay muchos datos relevantes, su historia no está actualizada, pero se entiende que ha creado un personaje muy neutral. Como ella lo explica, vive por vivir. Tiene conflictos emocionales y entre sus características sicológicas, destaca su extremismo con su reacción ante las acciones. Así que cuídense de sus venganzas xD

Yo creo que deberíamos tenerla como neutral, esta visto que le llega y quiere manejar un personaje complejo, centrado en sus conflictos interiores. Sin embargo, estoy seguro que Tau y Spectum pueden hacerla cambiar de parecer, y atraerla al lado oscuro…

Jenay Black

Me gusta su rol! Y me gusta mucho xD tiene algunos detalles para pulir pero casi es perfecto para la lectura, por un instante me deje llevar por su narración y casi termino de leerlo todo jajaja. Realmente una futura rolera. No me sorprende entonces, por qué los odefos están rondando su perfil xDD y me parece que la quieren atraer a su bando. Y me resisto a permitirlo xDDDDD

Según su ficha, ha sido adoptada por la familia Black, siendo sus padres Eavan y Anneka Black. Su personaje se describe como una chica fría, audaz, orgullosa y todos los sinónimos que generalmente se usan para describir a un mortífago. Además, en su historia narra que fue criada por una madre innata de la casa de Ravenclaw, y un padre Slytherin, quien imprimió su afinidad por dicha casa.

Le gustan las artes oscuras y odia a los muggles, tal como lo cuenta en su OFF de presentación, además de que añade un insignificante detalle: aspira a ser Mortífaga algún día.

Courtney Adams

Tiene un rol decente, y leyendo su narración, no entiendo el por qué de embarazarse aun en el juego jajajaja, bueno -.- eso es otra cosa xD. En fin, volviendo a lo del rol, si, decente, con detalles que corregir, como a la mayoría, pero aceptable para Generales. Su descripción en OFF me pareció interesante, no por el hecho de que sea modelo xD, sino, también, si si también porque describe a un personaje interesante, nada de conflictos internos, sino a una vampireza antigua, me va a gustar seguir su historia

En su perfil, ya cuenta con más de una docena de amigos, muy variados a decir. Ha sido adoptada por la familia Mcnair y la Damilse, no me sorprende al ser ella una vampira. Su padre sanguíneo es Pik Malfoy Macnair, y sus padres adoptivos son Zarco Bulche Haigh y Elodia Riddle. El primero mortífago, y los otros dos fenixianos.La historia de su personaje tiene tantos detalles, que me dan pereza leerlos xD pero puedo imaginármelos al haber leído los primeros párrafos. Es toda una vampira.

Está centrada al mundo de los vampiros, por lo que no veo una tendencia marcada a algún bando, sin embargo, ella describe en una línea su personalidad fría y calculadora, lo que no necesariamente puede referirse a una simpatía a los mortífagos, puesto que tambien es la descripción general de un vampiro.

Neutral.

Nymphadora Tonks Weasley

No sé por qué sospecho que tiene tendencias al bando fenixiano, será su nombre, ¿será su primer apellido, tal vez el segundo? Jajaja . la chica pelirosa, tiene un rol decente, común entre los jóvenes aprendices. Tiene de singular, la descripción física de su personaje, lo cual es escaso en el foro. En su OFF, nos cuenta que adora a Harry, a los weasley, a hermione, obviamente a nymphadora y a todos los aurores que se le ocurran escribir. Parece que su otra ídola es la Sra Weasley.

Según la ficha de personaje, parece que ninguna familia la ha adoptado aun, no oficialmente, pero me da la impresión que ha sido adoptada por Mynerva. Entre sus cualidades sicológicas, se encuentra a la chica cool, inteligente, ruisueña, genial y demás aspectos buenos de la gente xD. Según su historia, vivió con sus abuelos, hasta que alguien incineró su hogar, dejándola sola, puedo sospechar quienes fueron según ella. ^^

En su último post de la ficha, busca actualizar sus datos (datos que lógicamente no han sido actualizados) donde, describe que efectivamente ha sido adoptada por Mynerva y Sunar Potter. Además de que tiene dos familias, Tonks y Weasley , como sanguínea y adoptiva respectivamente.

Asi que… fenixiana en potencia!

Mayte Ayén Evanik Peverell

Su OFF me ha entretenido bastante xD nos cuenta entre muchas cosas irrelevantes, que es hermana muggle de Aleera, se Aleera Lux Evanik Malfoy. Felagund-Evanik y vive en la mansión Crepúsculo, debo entender que soy el único perdido con todo esto, así que he tratado de escribirlo todo tal como ella lo ha narrado xD.

Su rol está escrito en YO-presente, curioso y gracioso, le falta lo mismo que a la mayoría pero es un rol aceptable, decente, singular y entretenido. En su perfil no hay mucho de interesante, un par de amigos, un par de comentarios, y se nota que busca activarse en el foro, puesto que se registró en el 2008

Según su ficha de personaje, ha sido adoptada por Dagonet & Aleera Lux Evanik Malfoy, como sus padres sanguíneos, confirmando que pertenece a la familia Felagund Evanik. Su personalidad es el reflejo de una jovencita reservada, inmadura, amigable e introvertida. No encuentro datos relevantes en su historia, por lo que no hallo algun indicio de favoritismo hacia algún bando.

Neutral.

...

Respondía la mirada de la mujer, y leía los gestos que se empozaban sobre la faz de su rostro, como se articulaban sus labios y en qué momento arqueaba las cejas. No necesitaba de más actos para comprender a la perfección, que la jefa de la Oficina Creadora de Hechizos y Pociones me estaba analizando, y detestaba aquello, no era un juguete en exhibición, ni un artefacto antiguo para estudiar. Mi mano derecha se extendía hacia el brazo diestro del mueble y en un halo de luz, desvié mis celestes orbes hacia un extremo.

No tenia interés en descifrar los símbolos que guardaba tras aquella esmeralda mirada, no me importaba siquiera el entorno rojizo que rodeaba. Solo deseaba terminar los interludios para centrarnos en el tema principal, en el asunto que me llevaba hacia la intimidad de su oficina, donde el oxigeno se combinada con el fragante aroma de perfume y la habitación rubí tenia tatuada la personalidad de la mujer. La Amprina en si misma podría desconcentrarme, pero esa no era la ocasión.

Nuevamente mis ojos se fijaron en su postura, leyendo la actitud extraña de la mujer ante la consecuencia de sus actos. Inhalé profundamente desviando nuevamente la visión, mientras la joven se hacía de una baraja de adivinación. Tan solo ese acto me recordó a una buena amiga, quien también parecía compartir el arte de la adivinación, arte que conocía y que me negaba a aceptar como ciencia. Al oír los fonemas de su voz, regresé el porte serio hacia a ella, esperando comprender la frase que ésta empezaba a articular.

Ahogando una risa en la garganta, contuve las palabras hasta que la mujer culminara su explicación, entonces, como gesto de captación vociferé: —puedo comprenderlo—

Mi postura relajada, mostraba un temperamento neutral pero serio, tendía mi peso en el espaldar del asiento color fuego, incorporando mi semblante inerte hacia la vista de la hechicera, cuestionándome que era lo que la mujer consideraría mejor que un giratiempos. La curiosidad atisbó mi entendimiento y fijé mis celestes orbes hacia las manos de la mujer, preguntándome esta vez ¿acaso se tratara de un…? pensé descartando inmediatamente la idea. Sin duda, los jefes del departamento de Misterios compartíamos el hobby de guardar preciados objetos tras salas secretas.

—Si es necesario— vociferé y tras algunos segundos, tendí a ponerme en pie.

— espero no lo hayas guardado entre tules y velas aromáticas — agregué momento después, empozando una mirada severa y retadora a la pelirroja.

...

Después de dar las indicaciones respectivas, observé como las inefables se disponían a realizar las tareas indicadas, mientras ellas abandonaban el salón, me dispuse a encerrarme en la habitación que se hallaba cerca de mi dormitorio. De esa manera, trasladé mi porte altivo hasta el pasillo que me llevaría a la puerta que separaba una galería del hall de distribución del búngalo, necesitaba dejar de observar las visuales del mar, similares a las portadas de los calendarios muggles. Envidiaba tanta tranquilidad.

Introduciéndome en el espacio continuo a mi habitación, revisé el entorno antes de cerrar la puerta tras de mí. Satisfecho con el espacio para mi trabajo, cerré la puerta con una floritura de mi varita de vid, la cual había materializado segundos antes para efectuar tal acción. Observé la imponente luz que penetraba por los cristales del ventanal, y la claridad que por efecto reinaba en el ambiente, ciertamente no podía luchar contra toda la luz que rodeaba el lugar.

Presionando mis híbridos dedos contra la madera de la varita mágica, me encaminé hacia el escritorio para tumbarme en el sofá, y cerrando los ojos me disponía a disfrutar del silencio, opacado por las olas del mar que arrastraban el aroma de sus aguas en las ráfagas del viento. Trataba de encerrarme en las paredes de mis pensamientos, para colarme de los recuerdos y meditar sobre las decisiones tomadas.

Pronto un sonido proveniente desde el espejo de agua, sobre el escritorio, revelaba una forma atravesando la pantalla liquida. Se trataba de un pergamino doblado a manera de avioncillo, un memorándum interdepartamental que utilizamos en el departamento de Misterios como herramienta de comunicación. Arranqué el objeto de papel que abortaba la minúscula pileta, y componiendo el papiro en su forma original, me dispuse a leerlo.

La lectura se realizo de manera calmada, mi peso descansaba sobre el respaldo del sillón y mis ojos descifraban los grafos de la fémina que lo había escrito. En sus letras entendía la alarma que la gobernaba por los negativos resultados que dieron sus investigaciones, mas, no era la primera vez que leía un informe con tonos caóticos de cataclismos y fulminaciones de la vida humana. Extendí mi mano para coger un vaso transparente que contenía una bebida de color amarillo, la cual bebí con calma, maquinizando mis movimientos para coger después otro pergamino.

http://i.imgur.com/iUYmR.png

 

• Buenas tardes.

• • Señorita Slytherin:
    Entiendo la alarma que sobrelleva vuestra investigación. En este momento me encuentro en una investigación particular, propia de la actividad del equipo de mi oficina, la cual requiere mi presencia a totalidad. Sin embargo, al ser requerida mi presencia ante el indicio de una catástrofe mundial, y a sabiendas de que no cuentan con un jefe que guie su expedición haré la excepción.
     
    La espero en las instalaciones de la OIS, en mi oficina personal dentro de 4 horas.

 

• Atte. Zeth Black Lestrange
  Jefe de la Of. Investigación Secreta
  Departamento de Misterios
  Ministerio de Magia

Buscando los sellos de mi dependencia, culminé la narración de la carta, realizando los dobleces necesarios para efectuar el memorándum interdepartamental, introduciéndolo en la pantalla de agua de la fuente mágica, enviando mediante magia el avión de papel hasta las instalaciones del departamento de misterios, esperando que la joven Slytherin recibiera mi mensaje y la hora pactada de nuestro encuentro. Mientras, meditaba sobre las fuentes posibles que utilizaban los inefables de dicha dependencia.

…

De pie plantado en la arena, observaba la llegada de la última inefable, enarcando mi ceja izquierda para volverme hacia el interior de la peculiar edificación, donde desarrollaríamos con mayor recelo, la indagación preliminar para partir en la búsqueda de la Fuente de la Juventud. Dentro de los ambientes cálidos, me dirigí a las inefables antes de ingresar al dormitorio donde descansaría, recordándoles antes, la importancia de que conservaran sus monedas, los singulares trasladores que contaban con gemelos. ejemplares que reposaban sobre la superficie de una pequeña bandeja en una mesita de la sala.

— Nos vemos dentro de dos horas en el salón— dije arrancando mi visión de las jóvenes — no olviden vuestros cuadernos de campo y demás carpetas de información. Iniciaremos la búsqueda de la Fuente—

Horas más tarde…

Revisaba con obcecación los manuscritos que había traído desde la oficina de Investigación Secreta en las instalaciones del departamento de Misterios. Atento a todas las fuentes de información que aglomeraban las carpetas, que descansaban en una pila sobre la superficie lisa del escritorio de cedro de mi espontanea habitación, repasaba uno a uno los archivos históricos, remarcando los datos más relevantes, seguro de hallar tan valorado objeto mágico.

Las horas transcurrían rápidamente, por lo que decidí hacer una pausa en la revisión de los folders, tumbándome en el espaldar de la silla giratoria, con la finalidad de retener las fechas y ubicaciones de los posibles puntos de inicio para la búsqueda de la Fuente de la Juventud. Encajaba mis celestes orbes en el techo poroso del búngalo, degustando de la tranquilidad que se percibía en el exterior, pues nos hallábamos en una isla rodeada de corales y mares translucidos y profundos, técnicamente en medio de la nada.

Cuando las inefables llegaron a espontanea reunión. Me referí a ellas preguntando brevemente por su comodidad, esperando que éstas se sintieran a gusto con el actual centro de operaciones. Después de revisar la información y coincidir sobre los puntos relevantes (…) nos distribuimos las tareas para agilizar la búsqueda de la Fuente, de manera que se pudiera recorrer la mayor cantidad de terreno, descantando las zonas y prosiguiendo a acortar las posibilidades de hallazgo.

— bien, nos guiaremos de acuerdo a la indagación que cada una ha realizado de manera individual—

— Gaby, trasládate hasta la Jerusalén. Quiero que busques el Estanque de Bethesda y me traigas unas muestras del agua de su piscina —

— Ariadna, ve hasta el Caribe, a la Isla Bímini y busca el manantial que dicen que contiene el agua capaz de convertir a los ancianos en jóvenes, las coordenadas de la localización son estas — le dije entregándole un manuscrito con la latitud y la ubicación exacta de la ubicación de un manantial — mis fuentes no me confirman su pureza. Probablemente sea un manantial común y corriente, pero deseo también esas muestras para cerciorarnos—

— Jessi, te quedarás para analizar las muestras que envíen Gaby y Ariadna, las cuales deberán ser enviadas simultáneamente, para realizarles las respectivas muestras. Mientras éstas llegan, te pediré que analicemos la investigación que me hiciste llegar en la mañana—

…

Mientras culminaba mi explicación, graficaba en mis pensamientos, el destino que utilizaríamos como faro de nuestras investigaciones, además que, esperaba que el traslado del equipo, sea beneficioso para las jóvenes, y para el trabajo encomendado. Mientras las brujas degustaban el brillo de las monedas, me dispuse a tumbarme en mi asiento, para recordar la oscuridad y el frio que habitaba dichas instalaciones, puesto que realmente iríamos a un ambiente contrastante.

Ante la primera interrogante por parte de una de una de las jóvenes. Me compuse nuevamente de pié, sostenía en la diestra un ejemplar del compendio de datos que habían reunido las inefables, a la espera de posibles dudas para resolver. Introduciendo los folders dentro de los bolsillos de mi saco, mediante un hechizo complejo, desaparecieron las carpetas en el interior de mis ropajes. Logrando una honda inhalación en mi hermetizada postura, fijé mi visión en la primera pregunta de una de las inefables, la cual desató una reacción en cadena ante mis últimas indicaciones.

— pronto lo descubrirán — respondí.

Y materializando una gabardina larga de denso color negro, en mi mano derecha, atisbé a la moneda que cogería, pero antes, me detuve a observar los rostros de las féminas reunidas, que aun asimilaban la razón que nos motivaba y nos forzaba a dejar las instalaciones conocidas y embarcarnos en un nuevo espacio. Seguramente, tampoco se acercaban a la idea del lugar donde nos ubicaríamos, para realizar la investigación. Después de todo, había dejado entredicho que trasladaríamos todo el equipo de trabajo hacia las arenas de un exuberante paraje.

— Necesitamos un entorno acorde a nuestro trabajo — pausé — no olviden su moneda.

Y cogiendo la moneda con la diestra — las veo allá — exclamé desapareciendo antes de fijar mis orbes en sus rostros.

…

Inmediatamente aparecí en medio de un paraje exótico. Mis pies descalzos pisaban la candente arena, y mis ojos tropezaban con la imagen de un bungalow cercano. Denotando que las inefables aun no había aparecido, decidí esperarlas volviéndome hacia el punto donde me habia materializado. Allí observaba el alrededor que se avivaba con los colores cálidos del sol descendiendo tras el horizonte, donde las copas de las palmeras formaban un límite verde, entre el cielo y las playas.

A punto de caer rendido en el piso blando, camine una corta distancia para adaptarme al entorno, entre el sonido del mar y el movimiento de las grandes hojas de los arboles tropicales, empezaba a abrumarme con la elección del lugar, considerando haber sido más prudente enviarnos a la cúspide del Everest, o a las falda del rio Amazonas. Pero, aun mantenía clara la noción, de que esta isla escondida, seria excelente para ir y venir sin que nadie sospeche, después de todo, quería mantener el recelo en el secreto de la ubicación de la Fuente.

Inhalando hondamente, cruzaba mis brazos sin más distracción que el movimiento de las aguas cristalinas, cuya corriente golpeaba contra el corta-olas de los cimientos de la casa que tomaríamos como centro de operaciones. Relajando mi cuello con movimientos circulares, destejí mis brazos soltando la gabardina en el suelo, deshaciéndome de la chaqueta sastre que cubría mi torso sobre el polo blanco. Entretanto, aguardaba la llegada de las hechiceras del OIS, parecía que la extensión de la espera, empeza a preocuparme.

— no necesitaban saber el lugar a fin — me dije manteniendo la neutralidad de mi faz.

buenas buenas, como vamos gente?

aqui llegando de la universidad y viendo que los roles en la carcel se ponen interesantes, siempre es interesante cuando hay prisioneros xDDD aun sigo molesto porque volvieron a matar a Darla -.- por consiguiente roleo con un fantasma, lo cual es indignante!

Ficha de reporte Roles/Torturas

 

Nombre de la Sombra(Mortifago): Zeth Black Lestrange

Actividad(Rol/Tortura o ambas): rol

prisionera II

Prisionero Torturado o con el que se roleo: Marion y Darla

Resultado: esperando que la revivan para proceder a la tortura xD

Fecha: 04/05/12

...

Observando el bulto de carne descansando sobre los fríos cimientos del calabozo, notaba las heridas del cuerpo cerrándose, y la estela abstracta de magia que se percibía en los alrededores. Era curioso que la asesinaran, me sabia extraño acelerar su muerte y negar la diversión a las demás sombras, que predeciblemente se hubieran turnado por degollar a la presa agonizante, como las hienas insensibles que eran, éramos.

— ¿Qué hiciste mal, para que te atraparan? — susurré.

Mi raciocinio empezaba a tejer una infinidad de teorías, el aburrimiento y la seudo-soledad, animaban el juego mental que me llevaba a contemplar posibles flagelaciones que realizaría a la odefa de estar con vida, por el simple hecho de desquitarme de la rabia que amargaban mi existencia. De todas formas, nunca dejaría en cuerda floja a su bando — tontos leales —, así como yo no lo haría. Indefensa y sin soltar información, me provocaba una insultante admiración.

Pronto, un aroma familiar impregnó mi olfato. Sin quitar la mirada de la prisionera, escuché aproximarse los pasos de la que era mi hermana, una Black Lestrange arrogante y orgullosa como la mayoría de los mortífagos. Me sabia extraño encontrármela en aquellos ambientes, pero, en ese instante, el centro de mi concentración apuntaba a otras interpelaciones. — Todos amontonados por torturarla — agregué con sarcasmo manteniendo un semblante analítico.

— No es un animal en exhibición — vociferé perfilando mi visión en la encarcelada, mientras la rubia se ubicaba a mi lado.

— si quisiera torturarla, su muerte no sería una limitante — respondí, a pesar de saber a la perfección, que aquel día, no haria uso de mis pasatiempos sádicos.

Abrumado por las presencias, me volví hacia la joven de cabellos rubios, atisbando a sus ojos mientras la oía canturrear sus deseos de diversión. Pero estaba seguro que en algún momento, los odefos nos devolverían la amabilidad de nuestro hospedaje, y que, así como esta mujer muerta, mi hermana iría a visitar su cárcel. Enarcando mi ceja izquierda, volví mi semblante hacia la fallecida, presionando la varita contra la gélida palma de mi puño, convenciéndome que no valía la pena gastar energías.

— Ya me he desquitado suficiente con los vivos — respondí a la Black Lestrange, clavando mi afilada mirada en su máscara — tengo “fe” de que llegaran presas más suculentas — añadí con malicia.

...

Tumbado en el respaldo blando del sofá rubí, mascullaba la interpretación que la mujer daba a mis palabras. En medio de aquella intervención, sentía la sensación de sed nuevamente, no estaba seguro, pero presentía que había estado dentro de las instalaciones de mi oficina, más tiempo del que requería, en el cual mi paladar no fue empapado con aquel liquido rojizo. Maquinizando un gesto de sarcasmo mientras observaba la preocupación de la Ravenclaw, atisbaba a los diminutos recipientes que acompañaban sus palabras, molestándome la subestimación.

— Estoy bien — aseguré.

Observando los frascos plateados predispuestos — Yo no necesito eso — musité imponiendo seguridad.

Fastidiado por la sugerencia de la pelirroja, atisbé mis celestes ojos hacia, indicándole con el sulfurante gesto, que no bebería del liquido ofrecido. Pero, las palabras que la mujer había usado para la explicación de los frascos, ya habían penetrado en mi cabeza, y la sed parecía jugarme una mala pasada. Sentía los labios secos y estaba casi seguro, de que el rojo empezaba a entintar mis orbes. No obstante, mantenía el porte altivo y gallardo que me caracterizaba, clavando mi vista en la mujer.

Atento a la pelirroja, saboreaba sus palabras con cuidado, preguntándome, por qué la pelirroja habría detenido la fabricación de dichos artefactos, siendo interesantes y útiles en los viajes a través del tiempo. Seguramente el descenso de personal, le habría quitado a los inefables capacitados para dicha elaboración, yo le hubiera hecho un mejor uso, pensé. Aun continuaba ensimismado en lo que me explicaba, parecían excusas, por lo que me compuse altivamente, asimilando la oferta que me tendía, mejorando mi petición sobre el anhelado giratiempos.

— ¿algo mejor? — cuestioné inmediatamente.

Tenía una daga clavada en la parte alta de mi pecho, en medio de la unión de mis costillas, una presión que apresuraba las palabras desde mi diafragma, seguramente atropellándose en mi garganta por ser escupidas al instante. Sin embargo, en medio de la curiosidad a punto de ebullición, un comentario empezó a desintegrar mi adicción por el objeto, desviando con rabia mi semblante hacia un costado, intentado demostrarle mi nula colaboración frente a su última demanda.

— ¿qué es eso, que dices ser mejor que un giratiempos? —

...

Ensimismado en la conversación que se tejía en la oficina privada de la Nevarak, disfrutaba del intercambio de palabras que nacían a partir de la investigación que pronto se aperturaría, a penas tengamos el apoyo oficial de Ministro; desviándonos en unos instantes a la ausencia innegable de uno de los magos que ocupaban la jefatura de la oficina de Investigaciones Alternas. Enarcando una ceja, deslicé mi mano por la larga extensión de mi varita de vid, la cual materialicé segundos atrás, para la distracción de mis gélidos dedos.

— Por supuesto — respondí inmediatamente, meditando sobre los rumores que iban de boca en boca en el departamento, como los fantasmas que atravesaban las paredes de mi oficina. Sabía que aquella oficina estaba funcionando como normalmente lo hace, la presencia del jefe ha sido asumida por una de las empleadas oficiales, cuyo nombre y rostro conocía a la perfección, y cuyos dones para liderarla no podrían ser cuestionados, mas la experiencia era un factor restante.

Saliendo de aquellas cavilaciones, me incorporé al centro de la conversación, tumbando mi peso en el espaldar de la silla oscura, apoyando parte del dorso de mi frígida mano sobre el escritorio de la mortífaga, entre tanto, continuábamos intercambiando miradas y pensares sobre la investigación planificada, la cual empezaba a acentuarse cada vez más, de manera peligrosa, y yo, esperaba el momento preciso para comenzar el desenmascaramiento de los odefos.

— No dudo del poderío de nuestro bando — musité sin ataduras — pero no debemos subestimar al enemigo —.

— además, no supongas que les daremos de sorpresa. No es un secreto el hecho que marcó dicha oficina en la última postulación a plazas vacantes del Ministerio. Seguramente La Orden del Fénix ya barajea una carta de posibles excusas para sus seguidores, seguidores que ciertamente ya se hayan infiltrados al igual que nosotros, manejan opiniones y percepciones de magos influyentes —.

Dije, buscando un vaso de agua que se hallaba cerca mío, cogiéndolo al entender que era para mí, bebí de su elixir refrescando mi garganta, posteriormente, me volvía a referir a la rubia con un tema que estaba atrasando: — mientras tensamos los detalles de esa investigación, orientaré a las inefables a abrir un nuevo tema de indagación. Pretendo hallar la Fuente de la Juventud, junto con todos los dones que le pintan a sus aguas. No pretendo volver sin tan venerado líquido —

Buenas buenas, ¿qué tal gente?

despues de algunos dias perdido, me paso a dejar mi reporte sobre mi recorrido en la prision, noto que ha habido indicios de accion, aunque ninguna tortura -.- no entiendo por qué la mataron!! no me dejan nada para entretenerme.

Ficha de reporte Roles/Torturas

 

Nombre de la Sombra(Mortifago): Zeth Black Lestrange

Actividad(Rol/Tortura o ambas): rol

prisionera I

Prisionero Torturado o con el que se roleo: solo

Resultado: esperando respuesta

Fecha: 03/05/12

…

Habían voces que gritaban pidiendo clemencia, pero sin soltar información que valiera la pena, muchas imágenes agonizantes y sangre resbalándose por pieles desgarradas, eran los recuerdos que se manifestaban en lugar de sueños. El olor nauseabundo era lo primero que inundó mis fosas nasales. Abriendo mis ojos, reconocí inmediatamente el lugar donde me había dispuesto a echar a dormir. Los cimientos duros y fríos de la banca rocosa, entumecían más mis carnes muertas.

Poniéndome de pié, incorporé mi porte altivo y serio hacia el marco de piedra por el que había accedido hacia dicho espacio. Empujando levemente los barrotes de acero, oía el chillido de la puerta lacrada mientras abandonaba el calabozo, las telarañas se colaban sobre la capa negra, mientras, mis manos ajustaban mi varita en el bolsillo de mi larga gabardina oscura, a manera de sotana, percibiendo una sed insaciable en la garganta y una rabia que empezaba a bullir desde los puños.

Con el rostro cubierto por la máscara marfil, recorría los pasajes de aquellas celdas abandonadas, disfrutando del silencio, a pesar de la sangre podrida tatuada en sus suelos. Sabía que en aquella parte de la cárcel, guiado por la única intención de dormir. Las ganas de amenizar la estadía de los prisioneros, habían sido reemplazadas con intenciones de apartarme de las personas, exiliarme en los oscuros ambientes, de una fortaleza que me recordaba a una tumba en cementerio.

Recorriendo las galerías, manteniendo los movimientos rígidos de mi postura altiva, como si la vida me pesara. Con la mirada asqueada, me detuve al frente de un calabozo ocupado, donde la silueta de una mujer yacía tumbada en el suelo agreste. Enarcando una ceja, minimicé la velocidad de mis pasos, acechando el cuerpo cual presa en medio del desierto — seguramente, los cuervos llegaron antes que yo — pensé, percibiendo el olor de otras sombras, colándose entre pasadizos lejanos.

…

Tumbado en la silla rígida, en una posición relajada, acariciaba la liza extensión de la superficie de la mesa. La habitación se hallaba desolada, y mi presencia hueca no era suficiente para avivar el centro iluminado del tenue escenario. Inhalaba profundamente atisbando mis ojos en un punto inexistente de la pared del frente, recordando al instante que debía tener listo unos objetos antes del regreso de las inefables. Casi vertiginosamente, introduje mi mano derecha en el bolsillo mi pantalón, incorporando el puño sobre el mesón, observando el reflejo dorado de las monedas encantadas, en el fondo neutral de la mesa de trabajo.

Horas después…

El vacio en la habitación se acentuaba con el caer de los granos del reloj. Abatido y reducido a mi asiento, me hallaba con los ojos cerrados, deleitándome del silencio orquestado y la extraña brisa existente en las instalaciones, meditando sobre aquella corriente de aire que parecía hablarme al oído, preguntándome su origen y si será la voz de algún nuevo fantasma en la dependencia de OIS, tratando de aturdir mi control o intentando entregarme algún mensaje desde el otro mundo.

Pronto, el sonido de pasos me arrancó de las cavilaciones, incorporándome a una postura altiva y formal, mientras, la silueta de la primera inefable se dibujaba detrás de la mampara de vidrio opaco que servía como ingreso a la sala. Posteriormente las demás hechiceras se aglomeraron en el salón, con la información demandada y con el equipaje ya resuelto para trasladarnos a las nuevas inmediaciones del centro de trabajo, claro que eso no lo sabían ellas. Pero estaba convencido que un cambio de aires, les minimizaría el estrés de la oficina. Satisfecho con el trabajo de las jóvenes, les indiqué que tomaran asiento.

— Perfecto — vociferé.

Me puse en pie haciendo unas florituras con mis manos, logrando levitar las carpetas que contenían los resúmenes y demás fuentes de información que ayudarían a cazar las pistas necesarias para llegar a un punto de inicio en la búsqueda de La Fuente, sin embargo, ya tenía en mente un posible punto de partida. Cogiendo dichos folders, me demití a dar una leída veloz al contenido de las mismas, asintiendo al concluir la lectura. Finalmente, materialicé mi varita en la diestra, para que con un conjuro, multiplicar las fuentes de información, y entregarle un compendio a cada una de las jóvenes.

— Bien, ahora necesito que ustedes preparen una breve exposición, donde señalen los detalles relevantes que hayan hallado en sus distintas indagaciones — musité. — Pero eso será después de trasladarnos a nuestro centro de trabajo—

— Cada moneda será vuestro traslador. Solo deben cogerlo —.

— entonces ¿Preguntas? — cuestioné.