Ethan R.

Después de escuchar las palabras de Lisa acerca de su visita Cuartel General de Aurores del Ministerio, Ethan decidió ser él mismo en acercarse allí y pedir la información que la Oficina de Ministro requería para poder realizar el trabajo correspondiente. No entendí el porqué habían tratado así a su empleada y más teniendo en cuenta, que con aquel departamento tenían que trabajar de manera compenetrada.

Salió de su despacho y camino por el pasillo que daba al ascensor, las puertas se abrieron y el demonio se encontró con varias caras conocidas. Su destino estaba en la segunda planta por lo que apretó el botón mientras saludaba a varios conocidos. Era primera hora de la mañana y se sentía el ajetreo que traía las primeras horas al Ministerio.

Una voz anunció la planta en la que se encontraban: “Departamento Organizativo del Cuartel General de Aurores.” y el joven se hizo pasó para poder salir de allí. Nunca antes había estado en ese departamento por lo que comenzó a caminar por un corto pasillo hasta que alcanzó la recepción del mismo.

-Buenos días, soy Ethan Rambaldi, jefe del Gabinete de Seguridad y me gustaría poder reunirme con algún miembro del departamento que me pudiera ofrecer cierta información de cómo se desarrolla la actividad por aquí.

El tono del Rambaldi fue serio, no aceptaría un no como respuesta y esperaba que algún miembro del equipo le recibiera en una reunión privada improvisada. Espero que la recepcionista le diera alguna respuesta mientras observaba como se desarrollaba la actividad allí dentro.

Ethan observó al joven que acaba de entrar, había algo en él que no terminaba de gustar al Rambaldi pero por el momento obvio todo aquello y se centró en lo que le acababa de preguntar. Hacía ya un tiempo que no veía a Alicia por la oficina, apenas tenía contacto con aquel gabinete.

-Evarela creo que te puede ayudar más que yo.

Hugo no tardó en abandonar el despacho, después de saludar al nuevo miembro, parecía que tenía que atender algún asunto en su gabinete. La reunión parecía complicarse en aquellos momentos y para Ethan empezaba a ser prioritario comentar con Hugo y Evarela novedades en su gabinete.

Miró a la directora esperando una respuesta por su parte, hasta ese momento había permanecido en silencio. Fue en ese momento cuando alguien entró de nuevo en el despacho. Volvió a leer el pergamino que poco antes le había llegado y cayó en la cuenta que aquel debía de ser el nuevo enlace que estaban esperando.

-Bienvenido Finnick, mi nombre es Ethan Rambaldi y soy el jefe del Gabinete de Seguridad. Vas a tener bastante trabajo. –respondió al saludo del joven.

Fue en ese momento en el que se dirigió a la Banshee de nuevo.

-Evarela tenemos que tener una reunión, necesito plantearte unas cosas para organizar el trabajo del departamento.

Vengo apuntarme a clases de duelo...no tengo mucho nivel asi que a intentar mejorarlo...

Nick: Ethan R.

Rango: Base

Tutoría a tomar: Duelo.

Link de Referencia: Link

Nada más cruzar la puerta del despacho de la directora, varias miradas se quedaron clavadas en el joven. La primera en hablar fue Evarela, como siempre en el tono amable que le caracterizaba. Hugo también tomó la palabra haciendo un comentario que provocó en el Rambaldi una sonrisa.

-Ojalá –contestó a su padrino mientras tomaba asiento.

Observó la pila de papelas que abarrotaba la mesa de la Banshee, desde luego había trabajo pendiente dentro de la oficina y por los comentarios de entrada, esperaban la presencia del demonio en aquella reunión.

-Si me informaras de estas reuniones…te podría honrar más con mi presencia, Evarela.

Antes de poder seguir hablando, tres pergaminos aparecieron en la oficina parándose delante de cada uno de los presentes. Ethan cogió el suyo y comenzó a leer con detenimiento, parecía que su Gabinete contaba con un nuevo miembro, algo que le agradaba ya que en aquellos momentos solo Lisa y él atendían el mismo.

-Perfecto, un nuevo miembro, pero el problema radica en que este departamento esta desierto…

En realidad ya no recordaba para que había ido a la oficina, pero entre las cosas que tenía en la cabeza estaba el hecho de que ese departamento estaba pasando una etapa bastante complicada. La respuesta no llego, ya que en ese preciso instante apareció un joven por la puerta presentándose como el nuevo Defensor del Mago. Parecía que la plantilla de la oficina empezaba a llenarse.

-Bienvenido, Kris. Soy Ethan Rambladi, jefe del Gabinete de Seguridad, un placer tenerte en el equipo. – añadió con una leve sonrisa en el rostro.

Hace demasiado tiempo que no me paso por aquí!

Bienvenidos a los nuevos miembros de la familia!!!!!! Me alegro de ver caras nuevas por aquí

A los que se fueron, espero que les vaya bien por el foro y que nos veamos roleando en algún momento. Siempre tendrán un hueco si desean volver.

Hare un excepción y como Agus Marauder no tiene a nadie...yo la adopto como mi hija.... si ella acepta . Seria mi primera hija! xDDD

Espero tu respuesta con lo que sea...

En cuanto Lisa se percató que la figura con la que había chocado era Ethan, esta se lanzó a su cuello dándole un fuerte abrazo para inmediatamente soltarle y decirle, resumidamente, hacia donde se dirigía. Una visita al departamento de aurores, suponía que Evarela le había ordenado informa de cómo estaban las cosas por allí.

-Ok, hermanita. Luego nos vemos.

El demonio se quedó pensativo antes las últimas palabras de Lisa sobre no entrar en el despacho de la Banshee. Por un momento, pensó en seguir a su hermana, que se dirigía a seguridad, y preguntarle qué era lo que estaba sucediendo. Pero optó por acercarse y ver qué era lo que estaba sucediendo.

Escuchó a Hugo mencionar algo sobre el gabinete de seguridad y otras cosas más sobre otro departamento. En el despacho también divisó la figura de otra persona que no supo reconocer. El Rambaldi toco tres veces la puerta y carraspeó un poco para hacer notar su presencia en aquella reunión.

- Hugo, Evarela… ¿todo bien por aquí?

Contempló el reloj preguntándose cuanto tiempo había pasado rellenando papeles que tenía atrasados. Se estiro en la silla y comenzó a guardar, en un cajón de su escritorio, aquellos asuntos que había podido terminar, más tarde los archivaría. El resto de papeles fueron a parar a otro de los cajones.

Se levantó de la silla de su escritorio y salió de su despacho en dirección a la sala de descanso a por un café. Apenas había probado bocado aquel día y necesitaba algo. Mientras atravesaba la oficina se percató del silencio que la envolvía, ni rastro de Lisa por ninguna parte. Fue en ese momento que se acordó de la carta que había recibido hacía unos días anunciando el ascenso de su hermana.

-¡Lisa! –dijo alzando la voz.

Al no obtener respuesta decidió, buscarla fuera del gabinete. Al salir a la recepción se acercó a la recepcionista que parecía algo alterada. Intentó entender el balbuceo que tenía, alguien había entrado en la oficina de Evarela sin tener el permiso correspondiente o algo parecido intentaba decirle. Sin prestarle mucho más atención se encaminó hacia la oficina de la directora que parecía bastante ajetreada. De refilón le pareció ver la figura de su hermana.

-¿Lisa?

Entre el ir y venir de los alumnos, Ethan se había distraído observando los detalles que envolvían aquella sala común. No podía evitar recordar su etapa de estudiante, sin lugar a dudas, fue una gran época de su vida de la cual disfruto mucho y donde hizo grandes amistades. El recuerdo de Grace le embargó por unos segundos o, tal vez, minutos antes de volver a tomar conciencia de todo lo que ocurría a su alrededor.

Absortó en sus pensamientos apenas se dio cuenta de que nuevos centauros habían entrado a formar parte de aquella pequeña familia. Observó como Bodrik iba a comenzar con la actividad del tesoro y no dudo en ir a buscar cual sería el suyo. Aquella hoja llevaba con el varios meses, no se separaba de ella ni de día ni de noche, era todo lo que le quedaba de ella.

Se quedó observando como el resto de los estudiantes depositaban sus recuerdos y objetos preciados en aquel cofre, mientras él jefe de casa seguía con la hoja agarrada con fuerza. Finalmente y viendo que ningún otro miembro se animaba a continuar, dio un paso al frente y guardó en el cofre aquel trozo de papel. Grace lo había pintado mientras estaban en algunas de las muchas clases que habían dado en sus tiempos de estudiantes, una representación de los inseparables Grace y Ethan.

-Por aquellas amistades que no deberían de terminar nunca… - susurro el demonio -este dibujo es importante para mí…

No dijo nada más, no era necesario que todo el mundo conociera el significado de aquello, con que él lo supiera bastaba en aquel momento. Dio varios pasos hacia tras recuperando su sitio dentro del circulo que se había formado en torno al cofre, siguió observando como el resto de estudiantes seguían la ceremonia.

Off: Siento estar ausente, pero ando de vacaciones y se me complica eso de rolear tanto como quisiera. En poco tiempo estaré al 100%

Hola! me paso por aqui para pedir mi baja de la familia. Los motivos son obvios...no roleo xDD y no consigo que mi historia encaje con mi padre (Hugo tenemos que hablar )

Por lo demás gracias por acogerme por aquí, aunque no roleé. Tal vez en otro momento.

Y ahora tengo que hacer las dos líneas reglamentarias para poder irme en paz ^^

Un saludo ^^

Hace mucho que no me paso por aquí, lo sé...pero más vale tarde que nunca...

Lo primero de todo daros la Bienvenida a los nuevos. Espero veros por la mansión y el semper...y espero poder estar yo también por alli xDDD.

Ginny Rambaldi Weasley, en verdad me paso por que leí que te ibas de la familia y me dio mucha pena...no hay alguna forma de que te quedes entre nosotros??? De todos modos, entiendo tu decisión y como dice Deiwan, espero que te vaya muy bien por el foro y te siga viendo por algún otro lado. Un abrazo muy fuerte y nos seguimos leyendo.

Deiwan...intentare activarme un poco más pero ahora ando de vacaciones...:/

Después de ceder la palabra a Ethiane para que le contase a Evarela todo lo que le había dicho a él, Ethan se limito a escuchar. Se recostó en su asiento y prestó atención a cada una de las palabras que decía la empleada del Departamento de Misterios. De vez en cuando echaba una mirada a la directora de su oficina que no perdía en ningún momento la compostura que la caracterizaba.

En el intercambio de acusaciones se podría sentir cierta tensión entre las dos mujeres. Aquel caso empezaba a dar bastantes problemas y estaba claro que no sé iba a resolver tan rápido como cabía esperar. Evarela no quería dejar cabos sueltos y enseguida puso en la mesa todos los informes acerca del caso.

Ethan observaba cada movimiento de Ethiane, le gustaba su determinación para cerrar el caso pero estaba cayendo en el error de no analizar bien todas las pruebas que tenía a su alrededor. Era evidente que el Gabinete de Seguridad no tenía el cadáver allí y sí el departamento de misterios se hubiera molestado en acudir a Gringotts cuando se les avisó, tendrían todos los datos que estaban reclamando en aquel momento.

Dejó que la directora cerrará el asunto y observó impasible como las dos jóvenes se despedían. Por un momento miró a la Banshee, esperaba que con aquella reunión el asunto del cadáver quedará zanjado para su gabinete aunque dudaba de que fuera tan sencillo.

- ¿Qué opinas de todo? ¿un complot para que no se resuelva el caso?

Mientras esperaba una respuesta comenzó a recoger todos los documentos que había depositado en la mesa. Tendría que reorganizar toda su agenda pues aquella reunión improvisada había descolocado todos sus planes. Fue en ese momento en el que encontró el informe que había realizado Lisa; lo había olvidado por completo, era al despacho de Evarela donde se dirigía cuando se cruzó con Ethiane.

- Se me olvidaba, quería que leyeras este informe sobre el departamento de aplicación mágica.

Bueno...paso por aquí para dar mi apoyo a Dany y a Gatiux xDDD sin duda el grupo que ganara los juegos del hambre (no sé quienes son los otros grupos xDDDDD). Supongo que tengo que llevar el blinkie ese, así que ahora me lo pongo.

Sin más que añadir...si necesitan ayuda para alguna cosa me dicen

Saludos ^^

El joven Rambaldi esperaba la respuesta de Bodrik pero antes de que esta pudiera responder un joven al cual había visto antes ir a las habitaciones, volvió aparecer con un baúl en la mano y acercándose hacían donde estaban ellos. El resto de estudiantes seguían con la fiesta sin apenas prestar atención a los nuevos miembros de la casa.

Ethan lo contempló con curiosidad cuando se paró delante de él y comenzó a presentarse como Percy, el perfecto de los centauros. Una media sonrisa apareció en el rostro del demonio con las palabras del joven, sobre todo cuando le dijo que no habría habitación para él de momento.

-Está bien, mientras que no me llené de babas y sea algo temporal…puede que aguante…sino, pues ya me prestas tú, tu habitación –dijo con tono burlón.

Percy dejó el baúl enfrente de Ethan y les animó a él y a la nueva chica que había entrado con él a que cogieran lo que quisieran para unirse a la fiesta. Rebuscó entre las cosas mientras seleccionaba aquello que se iba a poner. De pequeño le encantaba disfrazarse de distintos personajes y jugar con sus hermanos haciendo diferentes historias.

Cogió un pañuelo lleno de calaveras que se colocó en la cabeza, un parche, una camiseta de rayas rojas y blancas en vertical y un chaleco negro. Los pantalones eran pesqueros de color negro y por último cogió un cinturón donde iría colocada la espada. Con todo en una mano miró a su alrededor buscando una habitación donde pudiera cambiarse; se dirigió a la primera habitación que encontró y se cambió rápidamente dejando su ropa doblada en un rincón.

Cuando salió ya se sentía parte de la fiesta con su nuevo atuendo. Miró a la joven aún indecisa de su elección. Se acercó a ella y empezó a observar de nuevo el contenido del Baúl. Se levantó el parche del ojo para poder ver mejor lo que hacía.

-¿Te ayudó a elegir lo que ponerte? – preguntó a la chica antes de volver su mirada al perfecto de la casa –Percy, ¿así encajó más en la fiesta? –dijo, abriendo las brazos mostrando su atuendo - ¿qué vamos hacer ahora para animar la fiesta? ¿algo que deba saber?

Dentro de la Oficina del Ministro el Gabinete de Seguridad está situado entre el Área Directiva y el Gabinete del Defensor y Fiscal del Mago. La puerta que da acceso al Gabinete es del mismo tono y forma que el resto; una puerta amplia y de madera oscura. Al lado derecho de la misma hay una placa que indica el nombre del Gabinete.

Una vez que se cruza la puerta, accedemos a una sala amplia decorada en su mayor parte por madera del mismo color que la de la puerta. Se trata de un lugar bien iluminado que hace olvidar que no hay ventanas por las que se cuelen los rayos del sol. El suelo es de tarima del mismo tono que el resto de la sala y por los pasillos destaca el color rojo de la moqueta que cubre parte del piso.

Nada más entrar, a mano izquierda, podemos observar una zona habilitada para el descanso de los trabajadores donde hay varias sillas y mesas junto a una maquina de café. Al lado de esta zona, encontramos la sala de reuniones. Es una sala circular sin ventanas ni nada que permita ver lo que sucede en su interior. La decoración es bastante simple, una mesa circular, con sus correspondientes sillas, ocupa la mayor parte del espacio. La decoración es escasa alguna planta situada al fondo junto con una pizarra para determinadas ocasiones.

Al lado de esta sala se sitúan varios despachos destinados a los enlaces del gabinete cuyas paredes están formadas por cristales que permiten ver el trabajo que se realiza dentro. Si dirigimos nuestra mirada al lado derecho del Gabinete, en la esquina inferior derecha podemos encontrarnos con varias mesas destinadas a los empleados y aprendices destinados a ese departamento.

Por último, enfrente de estas mesas se sitúa el despacho del director del Gabinete. Este despacho tiene varias cristaleras que permite controlar el trabajo del resto de los trabajadores pero que impide ver lo que ocurre dentro desde fuera. El interior presenta la misma línea de decoración que el resto de la sala. Lo muebles son de madera oscura, el suelo presenta una parte, el centro, con moqueta de color rojo y el resto es de tarima oscura. El escritorio se sitúa al entrar, al lado derecho. En el fondo hay varios sillones y una mesita de café para reuniones improvisadas y al lado izquierdo hay una estantería con libros y documentos relacionados con la oficina.

Aquel comedor que ahora era pasto de una batalla sin precedentes, había sido el escenario de muchas historias contadas, con cierta pasión, por su abuelo. Se quedó unos segundos o tal vez minutos, en aquel momento el tiempo le era indiferente, mirando aquella enorme sala rectangular. Por un momento, desaparecieron todas aquellas personas, todos aquellos rayos que cruzaban de un lado a otro y que no le daban por milímetros y se imagino cuatro enormes mesas que recorrían la sala de arriba-abajo.

Al fondo se podía ver una especie de tarima en la que se disponía otra mesa donde se situaban los profesores; su abuelo siempre le nombraba a los profesores que más le marcaron, casi todos de Slytherin, pero el Rambaldi no recordaba ninguno en aquel momento. Levantó la mirada para ver el techo, sin lugar a dudas lo mejor de aquella sala; tenía que ser mágico sentirse bajo las estrellas allí…

Pero ahora todo era distinto a como el joven se lo imaginaba. No estaban las cuatro mesas dispuestas ocupando toda la sala, las paredes estaban negras por el impacto de los rayos perdidos y parte del techo estaba destruido. En un rincón varias personas intentaban sanar a los heridos pero era imposible si quiera poner un simple vendaje.

Ethan empezó a tomar conciencia de nuevo de lo que tenía a su alrededor. Miró a su derecha y pudo ver a la joven Afrodita apoyada en la pared jugueteando con su varita de manera divertida, estaba claro que aquello le gustaba. Fue entonces cuando se dio cuenta de lo que realmente pasaba, no sé había percatado de que estaba siendo rodeado por un grupo de cinco personas.

Por la actitud de la Banshee tuvo claro que no pensaba intervenir. El demonio empezó a buscar la manera de enfrentarse a ellos. Miró a su alrededor buscando una forma de dispersarlos un poco antes de atacar. A su izquierda vio un montón de escombros, no lo dudo ni un segundo, alzó la varita y con determinación lanzó su primer hechizo.

-Protego

Varios rayos chocaron contra el escudo que el joven había creado y aprovecho ese momento para, en un movimiento rápido, escabullirse hacía el montón de escombros y caer detrás de ellos. Notó como otros hechizos impactaron contra su nuevo refugio; era hora de contraatacar, con otro rápido movimiento se incorporó, apuntó al primero que se encontró de frente y pronunció el hechizo.

-Avada Kedavra!

Enseguida volvió agacharse pero no pudo permanecer allí por mucho tiempo; un rayo suelto, golpeó la vidriera que se encontraba detrás de él haciéndola añicos y obligándole a moverse a rastras hacía el lado izquierdo, internándose cada vez más en plena batalla. Mientras gateaba entre los trozos de paredes que se iban acumulando, por el rabillo del ojo, observó como de la varita de otro mago salía un rayo, sin dudarlo mucho pronunció lo primero que se le paso por la mente.

-Expelliarmus!

El mago perdió su varita entre la multitud pero su rayo impactó en el joven demonio produciéndole una hemorragia que no tardó en currar. Se incorporó y volvió a observar su alrededor, los cuerpos se empezaban a amontonar por el suelo. Sus ojos se detuvieron en el cuerpo inerte del mago al que lazó el Avada y no pudo más que sonreír. El resto que lo había rodeado ahora luchaban por su vida contra otros mortifagos excepto aquel al que había hecho perder su varita la cual había recuperado y se dirigía de nuevo al moreno.

Una media sonrisa apareció en el rostro del Rambaldi, le parecía patética la seguridad de aquel viejo mago, espero que estuviera unos metros más cerca de él para volver a levantar la varita y, con una sonrisa prepotente, pronunció el hechizo saboreando cada una de sus silabas, sabiendo lo que causaría, sin ningún tipo de reparó ni compasión.

-Avada Kedavra

El rayo impactó de lleno sobre el mago haciéndole caer de espaldas. El golpe sonó seco contra el suelo. Ethan se acercó al cadáver y le arrebató la varita de la mano, nunca sabía si le haría falta en aquella guerra. Se la guardó en la parte de atrás de su pantalón y dirigió una fugaz mirada a su tutora que seguía parada en el mismo sitio con la misma sonrisa.

Evarela no tardó en despachar a la persona con la que estaba y reunirse con Ethan. Estaba claro que la jefa no paraba de atender gente y el joven estaba seguro que no les gustaría en absoluto el caso por el que le había ido a buscar. Mientras caminaban hacia donde se encontraban las trabajadoras del departamento de misterios el Rambaldi aprovecho para informar a la Banshee.

-Tenemos visita del Departamento de Misterios…adivina para que caso – sin esperar una respuesta el joven continuó hablando – El caso Gringotts, me vienen preguntando que donde tenemos el cadáver… ¿tenemos nosotros el cadáver, Evarela? Porque de ser así no tengo ninguna noticia sobre eso…

Llegaron a la puerta que daba entrada al gabineta de seguridad y siguieron caminando sin detener el ritmo. Ethan seguía con una expresión seria en el rostro algo raro en la personalidad del joven.

-Creo que no te va a gustar mucho la conversación. Están preguntando cosas como por que no sabemos la identidad del cadáver y sobre lo averiguado en Gringotts … y dan a entender cosas… bueno, es mejor que lo descubras por ti misma.

El joven se adelanto y abrió la puerta para que Evarela entrara primero a la pequeña sala de reuniones. Las jóvenes seguían sentadas donde las había dejado Ethan; este dejó que la Banshee tomará asiento presidiendo la mesa y él se sentó en el lado izquierdo.

-Bueno, ya tenemos a Evarela aquí; Ethiane podrías hacerle un resumen de lo que me has preguntado y dicho a mí.

La expresión del joven comenzó hacerse más tensa con cada palabra que pronunciaba Ethiane. Tenía la extraña sensación de que se le estaba echando en cara a su departamento la falta de profesionalidad con el caso y lo que el Rambaldi tenía claro es que las cosas no eran así. Se acomodo en la silla escuchando las ultimas palabras que decía la joven.

- Rl caso ha sido un caos desde el primer momento, falta de coordinación y colaboración... -recordaba el desplante que sufrió en misterios hace unos meses atrás cuando intentaba recabar información - Dicen que el cuerpo lo tenemos aquí si así fuera, no me han informado de eso y estaría profundamente enojado por ello.

Se inclino apoyando los codos en la mesa y cruzando sus manos. Estaba claro que necesitaba la presencia de la directora para resolver ese asunto cuanto antes; lo más sensato seria salir a buscarla, no confiaba en que la secretaria le avisara a tiempo.

- Creo que lo mejor es que vaya a buscar rápidamente a Evarela y resolvamos esto lo antes posible... Espérenme aquí un momento, por favor.

Ethan se levantó y salió de la sala pronunciando esas últimas palabras sin más. Recorrió el gabinete con paso rápido y llego a la recepción yendo directo a la oficina de Evarela. Golpeó tres veces la puerta y sin ser consciente de si la jefa esta ocupada o no, abrió la puerta.

- Evarela te necesito con urgencia en la sala de reuniones de Seguridad. Tenemos un problema.

Como siempre Evarela estaba detrás de su escritorio atendiendo varios asuntos, el joven se quedó en la puerta esperando la reacción de la Banshee.

Una vez en la sala de reuniones, Ethan escuchó lo que Ethiane y su compañera le contaban sobre el caso. El joven suspiró, estaba claro que el caso había sido complicado y tal vez todos habían trabajado demasiado despacio recopilando pistas y haciendo averiguaciones.

-Creo que vamos a necesitar a Evarela para resolver algunas preguntas. De lo que yo averigüé sobre la identidad del sujeto es más bien poco. Intenté ponerme en contacto con los inefables para que me ayudaran pero hubo varios problemas, son ellos los que tenían que darme la identidad, pero no tuve respuesta al respecto... básicamente, me tuve que ir de misterios sin respuesta alguna... -dejo caer las últimas palabras para luego reanudar su respuesta -Evarela se encargó de todo lo relacionado con Gringgots.

Ethan recordaba aquellos días donde todo se fue ralentizando poco a poco. Él no llego a ir al banco por lo tanto todo lo que sabía era lo que estaba recogido en el informe. Esperaba que la directora se pasara por allí lo antes posible…quería terminar con aquel caso que se estaba alargando demasiado en el tiempo y del que no tenían nada claro.

-El cadáver no sé donde está. Lo último que se de él, es que se lo llevaron a San Mungo para hacer el examen correspondiente… Y poco más os puedo decir al respecto.

Bueno, más vale tarde que nunca .

Por fin Lisa tiene su grupo de apoyo y aquí estoy yo para que pongan mi nombre en uno de esos 3 huecos que hay.

Nahhh, tengo que cumplir con las dos líneas para que no nos echen la bronca... asi que ya nos veremos por ahí.

Animo, Lisa!!!

El joven Rambaldi seguía pendiente de la apertura de la estatua, seguía haciendo ruido y se había quedado tan embobado observándola que apenas se había dado cuenta de la presencia de otra persona cerca de donde él se encontraba. Clavó su mirada en la joven de cabellos morenos que parecida también perdida sin saber muy bien cómo entrar.

-¿Tampoco sabes la contraseña?

Preguntó Ethan intentó captar la atención de la joven pero poco tiempo tuvo para eso, finalmente la estatua del centauro se empezó abrir y una joven surgió abriendo la puerta que conducía al interior de la casa. Antes de entrar detrás de ella se giro a la joven que seguía sentada en el suelo y le sonrío, extrañamente le resultaba familiar.

-¿Entras o te quedas un rato más disfrutando de las vistas?

El joven siguió a la chica que le acababa de abrir la puerta. Mientras avanzaba se quedó observando el disfraz que llevaba puesto de pirata. En ese momento no pensó mucho en el motivo de aquella vestimenta su mente solo pensaba en una cosa, presentarse.

-Mi nombre es Ethan Rambaldi y soy el nuevo jefe de esta casa… ¿tú eres…?

Ethan se detuvo el ver la decoración que presentaba la sala común todo ambiento al estilo pirata, acorde con los disfraces que podía ver por allí. Levantó la cabeza y pudo observar un cielo estrellado que se extendía por toda la sala también se podía apreciar el sonido de las olas…

-Un buen hechizo…

Avanzó unos pasos apreciando la decoración que envolvía aquel lugar, sin lugar a dudas había llegado en un momento especial. Sin perder tiempo se giró a la joven que le había abierto la puerta.

-Todavía no se tu nombre –dijo con una sonrisa –y supongo que tendré que ir a cambiarme para ponerme acorde con el momento. ¿Sabes donde esta mi habitación?

Off.

Muy buenas a todos! Bueno, como ya ha dicho Bodrik soy el nuevo/a jefe de casa . Mi nombre muggle es Dámaris aunque todo el mundo me dice Dama, tengo 24 años y bla bla bla xDD. Como veréis, aunque yo soy chica mi personaje es masculino… así que tener en cuenta esa peculiaridad.

La verdad que no sé me dan muy bien las presentaciones Off rol así que para no aburriros más… cualquier duda, comentario, pregunta, ect… mp estaré encantada de contestaros. Espero que todos nos los pasemos muy bien por aquí ^^.

Como sospechaba la visita de las dos empleadas del departamento de misterios estaba relacionada con el caso que seguían teniendo entre manos, el asesinato de Gringotts. La identidad del cadáver continuaba siendo toda una incógnita y en la mente del Rambaldi seguía el dato sobre los resto de sangre que no eran de la víctima.

-Por supuesto –dijo el joven reaccionando a las palabras de Ethiane – iremos a la sala de reuniones del gabinete de seguridad. Allí estaremos más tranquilos.

Buscó la mirada de la recepcionista que parecía estar muy interesada en la conversación que estaban manteniendo. La mirada de Ethan se volvió algo más sería, no le gustaba la gente tan descarada.

-En cuanto Evarela esté disponible le avisas que estamos en la sala de reuniones de seguridad.

Sin más se dio la vuelta y camino hacia la entrada, atravesó la oficina y accedió a la amplia sala. La decoración era escasa; en el centro se encontraba una gran mesa ovalada de cristal rodeada de sillas. En una de las esquinas una planta daba algo de vida a la sala. Ethan avanzó hasta el fondo de la sala y se situó al lado de una de las sillas dejando en la mesa el informe que más tarde tendría que entregar a Evarela.

-Podéis tomar asiento –señaló dos sillas situadas cerca de donde él estaba – contarme ¿en qué os puedo ayudar?

Lisa no tardó en ponerse en marcha con el trabajo que su hermano le había mandado. La oficina llevaba unos días bastantes tranquilos y eso al joven Rambaldi no le gustaba, parecía que los días se hacían más largos y aburridos.

Se terminó la taza de café que traía en la mano, la dejo en la mesa de su hermana y cogió el documento que la morena había elaborado sobre el departamento de Aplicación de la Ley Mágica. Aprovecharía ahora que tenía un rato para pasarse por el despacho de Evarela y entregárselo para ver qué opinaba al respecto.

Nada más salir del gabinete de seguridad se encontró de frente con una cara conocida. Parecía que esta vez era el Departamento de Misterios el que se había trasladado. Sonrió al ver a Ethiane de nuevo y se acercó a ella tendiendo la mano a modo de saludo.

-Que sorpresa tenerte por aquí.

Enseguida la recepcionista se adelantó a cualquier comentario y carraspeó interrumpiendo el saludo.

-Señorito Ethan, la directora Evarela no responde. ¿Las atiende usted?

Hasta ese momento Ethan no se había percatado de la presencia de otra persona sentada en una silla esperando. Movió afirmativamente la cabeza en respuesta a la recepcionista y se dirigió a la chica que estaba sentada, repitiendo el mismo movimiento que con Ethiane.

-Soy Ethan Rambaldi, jefe de seguridad –dijo, estrechándole la mano - ¿en qué puedo ayudaros?

Hacía apenas unas horas había recibido la lechuza ofreciéndole el puesto de Jefe de casa de los Centauros de Blodwyn. Enseguida acudió a la biblioteca y se informó de todo lo relacionado con esa casa. Durante su pasó por la Academia solo había conocido dos casas. El perteneció a los Dragones de Lancashire y había visitado a los Tritones en una ocasión para celebrar una fiesta. De las otras dos casas restantes no había sabido nada y ahora tenía por delante todo un desafío.

Avanzó por los terrenos de la Academia en busca de la estatua que daba entrada a la sala común de los centauros. No tardó en llegar a la cúpula que albergaba la figura de aquella fantástica criatura mágica. A Ethan siempre le habían fascinado las historias que se contaban sobre los centauros; la examinó con interés, captando, con su profunda mirada azul, cada detalle.

Pasados unos minutos se preguntó cuales serían las palabras para poder acceder al interior de la sala común que, según sus investigaciones, tenía que estar bajo sus pies. No había caído en la cuenta de que necesitaría la clave y ahí estaba el moreno, de pie, enfrente de aquella estatua y sin saber muy bien qué hacer. Echó un vistazo a su alrededor esperando que algún estudiante apareciese y le ayudase a entrar pero en aquel momento no había ni un alma por allí.

-Toda la tarde mirando libros y no sé me ocurre consultar la contraseña –dijo el Rambaldi para si mismo.

Estaba apuntó de irse cuando empezó a escuchar unos ruidos procedentes de la figura. Se quedó quieto, esperando que esta se abriera y alguien saliera de ella, así no tendría que darse la vuelta y buscar a alguien que le ayudará.

Ethan se quedó leyendo de nuevo el documento que Lisa le había pasado. Ahora tendría que reunirse con Evarela para hablar del tema. Se llevó la mano a la frente pensando si ir directamente o esperar, tal vez tomarse un café antes de pasarse por el despacho de la directora sería lo mejor.

-No hay mucho más que hacer de momento, Lisa. Descansa un rato si quieres.

Sin más el Rambaldi se dirigió a la cafetera que había al final de la oficina. Pasó por la mesa de trabajo de Spectum y se paró en seco. De repente se acorda de las últimas novedades; giró sobre si mismo y volvió a la mesa donde estaba su hermana con una sonrisa en la cara y apuntándola con un dedo.

-Ya tienes trabajo, te vas a pasar por el departamento de aurores y vas a realizar otro informe sobre las novedades que hayan pasado en estos días. Spectum se va a ausentar por un tiempo así que mientras Aaron no aparezca nos va a tocar trabajar a los dos mano a mano.

“Esa zona debería de estar realmente controlada” pensó el demonio mientras espera alguna respuesta por parte de su hermana. El mismo había pensado en ir pero tenía otras cosas que resolver por allí y confía en que la morena haría un buen trabajo.

Por la cabeza del demonio pasaba una palabra para describir aquel lugar, lúgubre. Se podía sentir en cada rincón de aquel sitio el terror que había vivido cada una de las personas que habían pasado por allí. El silencio que envolvía al grupo era rotó, a cada minuto, por los gritos de lamento y de auxilió de aquellas almas perdidas condenadas a una tortura eterna.

El joven se sentía cómodo. No entendía el cambio que había experimentado en tan poco tiempo pero estaba seguro que unos meses atrás se había sentido raro en aquel lugar como culpable de lo que les pasaba aquellas personas; sin embargo, hoy por hoy, no sentía nada incluso se podría decir que disfrutaba de aquellas lamentaciones.

Afrodita rompió el silencio que se había formado. Sin duda tenía la impresión de que era una mujer fría y calculadora, sin escrúpulos. Debería de causarle cierto respeto pero Ethan tenía una tendencia innata a provocar a personas como la Banshee; era algo inevitable.

Observó los movimientos de la mujer mientras hablaba y se acercaba a un armario. El Rambaldi nunca se había enfrentado a un boggart, es más, por la mansión siempre había evitado aquellos lugares donde tenía constancia de que habitaban pero ahora no tenía forma de evitar aquello.

Ni siquiera sabía que aparecería cuando se pusiera delante del armario. Espero a que algún compañero diera el primer paso y vi como Spectum se preparaba. El demonio miró toda la escena pero apenas si prestó atención, sus pensamientos estaban puestos en sus propios miedos; en lo que podría salir.

El moreno respiró hondo mientras el armario temblaba, el boggat quería salir y no tardó en hacerlo. Al principio la forma no era definida pero poco a poco fue tomando forma un silueta se hizo visible ante los ojos del Rambaldi. Las miradas se cruzaron, la de él era una mirada dura con odio mucho odio.

Ethan reconoció enseguida al muchacho que se encontraba delante de él, podría reconocer su pelo azul en cualquier lugar pero lo que no recordaba era aquella mirada. Levantó un dedo acusador y la rabia se hacía más visible es sus facciones; sabía que significaba eso pero no quería pensarlo, estaba haciendo lo correcto.

-Estás muerto -susurro

Sin dudarlo, apuntó con su varita y pronunció las palabras <<Ridikulus>>. La silueta de su amigo Jason fue desvaneciéndose hasta tomar la forma de una tumba para después desvanecerse y volver al armario. El joven se retiró, dejando que algún otro compañero tomará su lugar. Se metió en sus pensamientos, en la imagen que acababa de ver intentando controlar el remolino de sensaciones que se había apoderado de él.

1. ¿Qué significa Semper fidelis?

No tengo claro su traducción literal pero cada vez que lo veo me viene a la cabeza “Siempre fiel”.

 

2. ¿Cuál es la esencia de la Marca Tenebrosa?

Sangre limpia. Es su ideología, su meta y creo que entorno a eso se encuentra la esencia; lo que la hace diferente.

 

3. Describe la personalidad de tú personaje

No le gusta mucho seguir las normas y le encanta sacar de quicio a ciertas personas. Le gusta la broma y la fiesta aunque también tiene su lado serio. Es leal a sus principios e impulsivo.

Aquí quiero cambiar cosas de su personalidad. Por un lado quiero que salga su lado más soberbio y cierta maldad pero sin dejar de lado su lado bromista.

 

4. ¿Por qué hay diferencia entre un mortífago normal a lo que se considera un mortífago autentico?

Supongo que el autentico es el que tiene las características reales de los mortífagos mientras que el normal es el que tiene cosas de los auténticos pero no todas.

 

5. En la marca cada personaje tiene un perfil propio, ninguno es igual ¿Cuál es la característica que el tuyo causará la diferencia?

Cuando consiga enmarcar a mi personaje en un perfil mortífago diré pero me gustaría darle ese punto bromista… que no sea tan serio.