Hessenordwood Crouch

Justo como lo había imaginado a la Loveless no le había importado mucho el retraso por su parte, pero aun así pensó que de todas formas esperaba que no volviera a pasar. La Loveless tomo del brazo de Sain y comenzaron a caminar tranquilamente para buscar un traslador, le gustaba el modo sereno y tranquilo que Kutsy se cargaba. Caminaron en dirección a una de las entradas de la academia, mientras Kutsy entablaba conversación.

-Bien…eso creo, las clases suelen ir algo despacio a veces, eso no están bueno todo el tiempo, pero no me quejo- dijo encogiéndose de hombros –Además así se disfrutan mas algunas cosas ¿no?- le sonrió mientras de su bolsillo sacaba la invitación que había encontrado en la sala común de la casa de los centauros.

–Sabe, ahora que lo recuerdo, me acabo de enterar que gane la prefectura de los Centauros- dijo sin ninguna importancia, mientras desdoblaba el papel para leerlo –Realmente ni siquiera se como paso…aah vaya he olvidado mis anteojos- reviso sus bolsillos rápidamente –Creo que….- trataba de leer aquel pedazo de pergamino aunque sabia que sus intentos eran en vano gracias a su estropeada vista que aquella tarde Luna había tratado de arreglar con un hechizo para no llevar anteojos al baile pero parecía que los efectos terminaban.

Ahora solo quedaba tratar de recordar alguna ubicación, el pergamino era algo difícil de leer por lo arrugado además de que Garry había olvidado sus anteojos haciéndolo aun mas difícil <ahh genial> pensó son pesadez, estaba dando una mala impresión a Kutsy.

-Espero y no haya interrumpido otros planes para venir a esto, parece que nos tocara bailar la última pieza nada mas- soltó una risa torpe –Debe haber uno cerca de los baños o dentro de ellos, según esto…están ubicados para moverse lo más discretos posible, al igual que cuando mandaron las invitaciones, seguro habrá algo ahí- Caminaron solo un par de pasillos mas con dirección hacia los baños, realmente esperaba encontrar uno antes de llegar a los baños -<entre más pronto mejor> pensaba.

Intentaba mantener una conversación amena con Kutsy para que no se aburriera, pero los nervios de llevar a la Loveless del brazo terminaban enmudeciendo a Garry, pero parecía que Kutsy le traía más que suerte. En uno de los corredores más largos de la academia que parecía tener luz natural a no ser porque no tenía vanos y afuera era de noche, lleno de gárgolas de piedra, con rostros frívolos que hacían guardia en el pasillo, justo en aquel corredor parecía que al fin habían encontrado al fin uno de esos trasladores.

-Mire ahí- dijo como en un susurro –Creo que este es uno…- se soltó de Kutsy con mucho cuidado para tomar el traslados, nada pasaría si solo Sain lo tomaba pues para funcionar se necesitaba una pareja –Eso debe ser, porque…- se agacho para tomar una taza vieja que una de las gárgolas sostenía con sus garras de los pies – Que haría una gárgola tomando té…- se incorporo nuevamente con la taza en la mano – No son horas para tomar el té- le sonrió a Kutsy.

Ya era bastante noche, la vez que había conocido a Kutsy se miraba algo enferma, esperaba que ojala el baile le animara un poco o al menos que se olvidara un rato de sus males. Aunque aquella noche Kutsy no parecía ser la misma chica enferma en el departamento de criaturas, estaba radiante en aquel vestido y tenía un brillo en esos ojos bi color con los que Sain se familiarizaba, solo entre Kutsy y Sain había cuatro ojos de colores diferentes.

-Entonces…- con una mano le ofrecía la taza y con la otra su propia mano enfundada en unos suaves guantes de tela blanca, para que Kutsy se sostuviera al aterrizar, pronto sentirían aquel jalón bajo el ombligo y viajarían en un remolino de aromas, colores y sonidos para aparecer justo en el lugar de la cita. –¿Lista?-

Garry Sain~

De aprendiz

Escucho la respuesta de Cillian sobre la pregunta que le había hecho de los elfos, la verdad es que pensaba muy parecido a Cillian, los elfos eran criaturas muy nobles y trabajadores, pensaba que estaba por de mas esclavizarlos, mas sin embargo le constaba que era naturaleza de ellos servir a los magos, el ¿por qué? era algo que Sain se preguntaba en cuanto veía a uno de ellos y que aun lo desconocía. Un simple y despistado -oh~-salio de su boca.

Después de aquello escucho a Kutsy sobre una última cuestión de su formulario y a decir verdad se sorprendió con la respuesta, la revelación de la joven le llevo a Sain navegar en otro mar de ideas y dudas. Debió notarse en el rostro de Sain todo aquello que pensaba cuando Kutsy le dirijo la palabra .

–Por supuesto que no lo creo…es comprensible lo del papeleo- dijo con una sonrisa divertida recordando la solicitud del examen de vuelo que había solicitado, la verdad sintió alivio de que no se percatara de sus pensamientos, era extraño pensar que Kutsy fuera un demonio y aunque la verdad desconocía la variedad del comportamiento de ellos, consideraba que Kutsy no lo parecía en absoluto.

En aquel momento Sira había llegado y Sain le había contestado son un saludo a su ex compañera de casa. Rió con dificultad tratando de no soltarse a reír sobre su comentario sobre el traje de conejo –No podría decir lo mismo de ti…enserio que te quedaba muy bien- dijo entre risas –Pues, eso trato, la verdad es que soy aprendiz en el departamento, no llevo mucho aquí- confeso a Sira con un rosto pensativo que se interrumpió con las cuestiones que Nats comenzaba a recitar.

Al parecer había vuelto de su trance, parecía una chica fácil de “irse”, pero Sain no era la persona más indicada para considerarle de aquella manera, pues como muchos seguramente, tenía sus momentos en los que estaba más en la tierra de los pensamientos que en el lugar donde estaba, aunque ya no era tan constante que le pasara aquello, últimamente su mente estaba bastante ocupada entre los deberes de la academia y el trabajo, ya no había tiempo para un “viaje mental”.

-Parece que si Nats…un registro de elfos- dijo a la castaña mientras miraba a la persona que se acercaba pidiendo que le atendiera, después desvió la mirada a Cillian para recibir instrucciones de su parte, aunque no parecía tener todas las respuestas era buen mentor.

Garry Sain~

Versión chico para Kusty

Caminaba a pasos firmes y rápidos por el gran corredor, los zapatos de baile hacían un <clack> a cada paso que daba, brillaban de lo limpio que estaban y como no estarlos, su prima se los había mandado comprar cuando le dijo que asistiría al evento, eso y aquel taje de pantalón y chaleco blanco con rayas negras y camisa negra, que Sain había escogido. Aunque su prima duro horas tratando de convencer a Sain de que llevara un lindo vestido, Sain opto por un traje de pantalón y camisa de vestir, Kutsy había invitado a Sain al baile y no sabía bien si le incomodaría, por lo que aprovecharía esa asexualidad que se cargaba y se aria pasar por un chico para Kutsy.

-Pero como me pudo pasar esto- caminaba más rápido que de costumbre. Había quedado con Kutsy de verse en la academia, de ahí buscarían un traslador para llegar al lugar de la fiesta y como decirle a Kutsy que se adelantara...los taladores no funcionarían si uno llegaba sin pareja.

Avanzaba cada vez con más rapidez, casi corriendo, se había retrasado quince minutos de la hora acordada con la Loveless y Sain esperaba encontrarla sin que se enfadara, aunque la Loveless siempre le pareció una chica alegre, tal vez aquello no le molestaría, pero aun así no era muy propio dejar esperando a su pareja menos si ella había tenido la amabilidad de invitarle al baile.

Casi llegaba al jardín central de la academia, donde habían acordado estaba a una vuelta de llegar, pero antes de hacerlo se detuvo en seco, si la chica había esperado quince minutos de retraso, seguro soportaría un par mas. Profirió un gran suspiro para calmar su respiración que se había agitado por ir tan deprisa, se acomodo el chaleco del traje y sacudió con sus manos la parte de inferior de su pantalón, solo para quitar alguna mancha de polvo que se le hubiera adherido mientras caminaba.

Soltó otro gran suspiro después de acomodar su cabello el cual había peinado con mucha dedicación para que mantuviera quieto, vaya que estaba de nervios, nunca había asistido a un baile y mucho menos ido con una pareja. Dio la vuelta a la esquina del pasillo esperando encontrarse con la Loveless y efectivamente ahí estaba, se miraba muy hermosa, Sain quedo in móvil al verla y sintió un leve calor en el rostro, seguramente se había sonrojado, gracias a Merlín con su piel morena era difícil notarlo.

-!Aah!…Hola….ehh…- Kutsy se miraba muy linda para aquel baile, Sain agradecía mucho su invitación – Vaya se ve muy bien- soltó regalándole su más sincera sonrisa.

Reviso su reloj de bolcillo para ver la hora – Seguro llegaremos un poco tarde, lo lamento no quise dejarla esperando, pero bueno ¿llegaremos con un elegante retraso?- bromeo riendo tontamente, ni siquiera le había parecido graciosa su propia broma, carraspeo su garganta después de eso –Bueno ¿Esta lista para irnos?- se ergio ofreciéndole el brazo a Kutsy para que le acompañara por el traslador.

Desgraciadamente había fallado en el intento de enmudecer a Bea y evitar que controlara al lobo, pero al menos enmudeció su siguiente ataque, por lo que ahora tenia arreglárselas para evitar desangrarse por las heridas que el animal le había logrado hacer, pero también tenía que lidiar con lo que Bea tendría, seguro la Haughton no lo dejaría así de de sencillo.

-Vaya...- Bea permanecía en silencio, no podría dejar que se le adelantara, de verdad que había cometido un error en querer probar a la Haugton, pero esto se ponía interesante –Sectusepra- soltó con un poco mas de ansiedad de la que le hubiera gustado demostrar.El rayo lanzado con su varita impactaría a la Haugthon causándole varias heridas sangrantes en la pálida piel de su contrincante, heridas tal vez más grandes que las que tenía ocasionadas por el animal. Comenzaba a creer que aquella seriedad de la Haughton era mas que una seriedad, por alguna razón le inquietaba y le ponía de nervios.

Tenia que lidiar con sus heridas pronto o eso le daría más ventaja a Bea, no podía cometer mas errores, era una suerte que el efecto del oppugno sobre el lobo hubiera terminado y seguro el animalito volvería a atacar a Bea un turno mas, eso y las heridas ocasionadas por el sectusempra, mantendrían ocupada a la Haughton mientras Sain se aplicaba auxilios sobre sus heridas.

Pero como debió haberlo previsto, un rayo viajaba a toda dirección hacia Sain ¿Pero qué es lo que era?, fuera lo que hubiera sido , era una suerte que el animal se lanzara contra Bea en aquel instante y el rayo impactara contra el convirtiéndolo nuevamente en una gran roca. Sain profirió un gran suspiro de alivio.

“Episkey” pensó, las heridas que el lobo le había hecho comenzaron a curarse, era una sensación más agradable que lo que se había imaginado, pronto eras heridas sanarían y tendría que ponerse alerta, para lo que se venia.

Off rol:

Podemos hacer off aquí(?)
Bea estas en lo correcto chica /o/
no lo vi venir(?) nahh si dude en ponerlo cuando escribía, pero no hice mucho al respecto xDD

Tu tenias las intercalaciones, así que solo silencie el Incárcerus~

El calor en la playa comenzaba a aumentar conforme el duelo avanzaba, el cielo nublado comenzaba a despejarse dejando al sol descubierto y brillante, al menos era mejor que en el último lugar donde había dueleado, en el aquel bosque donde hacia un frió insoportable que le había congelado hasta los pensamientos. El clima era perfecto, mas con la suave brisa refrescando de aquel calor que el sol emanaba.

-¿Pero qué es lo que trama?- se pregunto a si al ver a su compañera apuntarle con su varita a su lobo – Claro, pero ¿como no lo pensé?- dijo con tranquilidad – ¡Silencius!- rápidamente apunto su varita a Bea y lanzo su hechizo, lo bastante claro y fuerte antes de que Bea pudiera terminara de pronunciar su hechizo y lograra controlar al lobo.

-"Oppug…"- Bea había enmudecido y el lobo se lanzó a morderla, haciéndole heridas de gravedad en sus antebrazos, lo que la incapacitaba y le tendría bastante entretenida para poder realizar algún otro hechizo.

Aquello no podía terminar solo así, tenía que asegurarse de que su contrincante terminara fuera de combate o desarmada,¿Darle un poco mas de ventaja a la criatura la vez?, pensó, Bea tendría que ingeniárselas pronto para conseguir salir de esta.

-Experlliarmus~- el rayo color rojo proveniente de la punta de su barita se disparo hacia Bea, la varita empuñada de la Haughton voló por los aires cayendo en la arena, eso la hacía más difícil de encontrar, si agitabas mucho la arena, la varita quedaría enterrada.

Sain~

De un lado a otro(?)

-Bueno…- le contesto a Cillian mientras tomaba unos pergaminos con formularios.

Sain siguió de cerca a Kutsy para ver como llenaba los formularios que Cillian le había dado, la chica no se miraba muy bien, estaba algo pálida y se miraba como si en cualquier momento desfallecería. Kutsy se sentó en un escritorio vació, sin preguntar Sain se sentó justo frente a ella en unas de esas sillas que dan vuelta sobre su eje y con llantitas en su base, le encantaban esas sillas y lentamente comenzó a dar vueltitas en ella, esperaba que no le incomodara a Kutsy.

Miro a la chica terminar en poco tiempo y regresarle los formularios a Cillian quien le hizo una seña para acercarse mientras los revisaba. Sain se levanto inmediatamente de la silla, tomo sus pergaminos que había dejado en el escritorio y acompaño a Cillian para que le explicara un poco de todo aquello que eran los formularios para elfos. Cillian al fin había sellado y con ello aprobado el formulario d Kutsy.

-¿C-como es…que se consigue a un elfo?- pregunto a Cillian mientras observaba a Kutsy con sus formularios ya aprobados.

A espaldas de Sain, una voz familiar, pero un poco difícil de reconocer de donde, se había aparecido en aquellos lares. Dio media vuelta para ver de qué se trataba de Sira, a Sain se le dibujo inmediatamente una sonrisa en el rostro, era bueno volverla a ver, aunque tardo unos segundos en recordarle, la última vez que había visto a la Rambaldi estaba vestida de conejo de pascuas.

-Hola Sira- Saludo discretamente, después de que la joven terminara de hablar con su familia, Cillian y Kutsy.

-Estoy de acuerdo con ello- contesto con una gran sonrisa.

Al fin la Haughton había llegado al encuentro, justo a tiempo diría Sain, quien estaña apunto de recostarse y dormir. La Haughton llego muy silenciosamente, aunque con el ruido del mar, probablemente eso se justificaba, noto que al igual, Bea se había des hecho se sus zapatos, eso le gusto, esperaba que a la Haughton no le molestara tener que haberlo hecho. Sain se incorporo frente a ella y le sonrió, por alguna razón le gustaba esa seriedad que la joven se cargaba.

-Espero que le moleste el lugar que he elegido para el duelo- dijo mientras buscaba su varita.

Tal vez a Bea el lugar no le importaba mucho, por su expresión en su rostro y su prisa por el duelo, eso pensó Sain, pero era difícil saberlo del todo, igual no debía quebrarse la cabeza por aquello, Bea tenía razón, estaba ahí para enfrentase en un duelo y no en un paseo turístico.

Hizo su reverencia hacia Bea, curiosamente en esta ocasión no despego nunca la mirada de su contrincante, no sabía de qué maneras la Haughton atacaría o si le dejaría la oportunidad de atacar. Bea hiso su primera acción, un buen movimiento por parte de su compañera, aunque fácil de lidiar, pensó Sain.

-Protego- Dijo con firmeza y el rayo que iba directo a paralizar fue absorbido.

Aquello apenas iba comenzando y por alguna razón quería que este duelo durara lo suficiente para ver el ingenio que la Haughton podía ofrecerle en aquel enfrentamiento, pero para ello Sain tendría que ideárselas para poder lograrlo sin terminar en el hospital de San Mungo.

-Morphos~- soltó al mismo tiempo que exhalaba, su hechizo afecto a una de las rocas filosas que estaban detrás de Bea, convirtiéndola en un lobo salvaje. Seguro eso entretenerla un rato a Bea, el lobo la atacaría mordiéndola y causándole graves heridas en bazos, piernas o donde sea que el animal le ataque.

Les Grands Démons

Garry Sain

El torneo estaba dando inicio. El espectáculo que había presentado el equipo Axius del colegio de Beauxbatons era muy bueno, se notaban las ganas que tenía de estar ahí, por lo bien que habían preparado todo aquello, pero Les Grands Démons también tenían algo preparado para mostrar.

-Paff…presumidos- gruño Sain que apenas se entendio por el cigarrillo en su boca que trataba de prender –Seguro y esto será cosa fácil- dijo mientras exhalaba el humo del tabaco sin quitar la vista del espectáculo.

Sain consumía su cigarrillo con mas ansias de la que le hubiera mostrado demostrar, era agradable fumarse uno o dos cigarrillos tranquilamente durante el día, y aunque Tejo era bastante insistente en que dejara ese feo hábito, el joven capitán había encontrado un uso para aquel momento, por eso era más que necesario terminar con ese cigarrillo a tiempo.

-No me moleste…que no ve que veo el espectáculo- contestó a la joven asistente que le prohibía fumar en aquel lugar –Si no me das una buena razón para apagarlo no lo haré… Después de todo no es un lugar cerrado- continuó discutiendo aun muy atenta al equipo en el campo –Y si no te parece…puedes irte a…- Tejo le interrumpió, y le dio una especie de señal - Y yo solo trato de hacer el mío- se justifico con Tejo mientras le lanzaba miradas amenazadoras a la asistente –Bien- dijo enfadada lanzando el cigarrillo al aire.

Miro de reojo a sus compañeras quienes preparaban sus varitas. Verónica se miraba bastante nerviosa, Sain esperaba que todo saliera bien, era el momento en el que la castaña y la pelirroja hicieran lo suyo y ocuparían de mucha, magia y concentración para lograrlo. Anna y Verónica agitaron sus varitas coordinadamente, justo al tiempo en el que el cigarrillo tocaba la superficie pastosa y el cigarrillo que Sain había lanzado al suelo los envolvió en un fuego obscuro al instante. Las llamas que se formaron sobre ellos era tan alto que le cubría incluso los casi dos metros de altura de Sain.

EL campo había permanecido en calma tan solo unos instantes después de que el primer equipo se presento. Algo parecido a lo que podría ser un leve temblor sacudió ligeramente el estadio y hacia rugir el suelo. De en medio del campo una mano del tamaño de un sofá comenzaba a salir, como si se tratara de alguna especie de brote y valla que saldría algo más que una flor de ella.

En unos cuantos segundos, un enorme hoyo se había formado en medio del campo, dejando salir de las profundidades a una enorme bestia roja de al menos 10 metros de altura, con enormes cuernos y alas, sus ojos brillaban con intensidad y una enorme sonrisa se le dibujaba en el rostro, se movía en dirección hacia los espectadores para asustarlos asustándolos un poco.

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-¡! Somos Les Grands Démons!!- la voz de aquella bestia, era grave y rasposa, se oía por todo el estadio y podría apostar que mas allá de el -¿hace falta decir por qué? Somos fuertes como demonios, atacamos a nuestros enemigos con astucia y sensatez y nos defendemos con valentía e inteligencia, tal cual demonios. ¿Grandes? De corazón, de mente y de pasión, sencillamente Les Grands Démons.- soltó aun manteniendo una tétrica sonrisa.

El esfuerzo de Ana y verónica habían dado, estaban dando resultados, los gritos de impresión y miedo de los espectadores lo decían todo. La bestia permaneció sonriente unos instantes a que cesara un poco todo aquel escándalo, después dio una gran carcajada y cuando cesó inhaló profundo, tanto que parecía que el extinguiría todo el aire del planeta.

El demonio que había aparecido para presentarlos exhalo por su boca expulsando contra el suelo una enorme ráfaga de fuego negro tan obscuro como la noche. Y tal cual la arena nace el cristal, Les Grands Démons comenzaba a surgir de de entre las llamas obscuras y vivas, mostrando aquellos brillantes uniformes azul marino que habían preparado con anterioridad y el humo que emanaban aquellas llamas escribían en el cielo el nombre de cada uno de los integrantes y el tan mencionado lema al cual su capitán era más que fiel.

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Sain salió de las llamas hasta el final, tras Anna y Verónica, las cuales se miraban algo agotadas, se habían esforzado mucho en esa parte del espectáculo y pasa su joven edad Sain pensaba que eran excelentes brujas.Tejo continuó, recito aquel tan esmerado himno que había hecho. Tomó su lugar, esperando el momento para hacer su parte del show, aunque sencilla, tenía que hacerlo bien si no quería tener a Tejo como fantasma de culpa por el resto de su vida .

Cuando al fin Tejo terminó con el himno, Sain se abrió paso entre sus compañeros, en su mano izquierda un hasta color oro yacía sin bandera. Camino solo un par de pasos delante de su equipo, ahora era su turno. Hizo malabares con el asta floreándola, era tan fluido que parecía que danzaba con ella, el asta no era más que medio metro más grande que ella, la giraba con rapidez entre sus manos a una gran velocidad, la giraba por un lado por detrás por el otro lado hasta tenerla de frente nuevamente y detuvo los malabares con ambas manos en un movimiento seco, brusco, firme.

-Fuerza y Gloria es lo que queremos- su propia versión del himno resonaba gracias a un sonorus hecho con anterioridad -Inteligencia y valentía lo que poseemos- recitaba con mucha seriedad y coraje -Lucharemos por la Gloria, por que sabemos lo que merecemos- soltó al mismo instante que anclaba al suelo el asta con todas sus fuerzas y al fin al enterrase en la tierra, la bandera se desplegaba por arte de magia ondeándose con libertad y quedando al descubierto del público.

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Levantó la vista para ver la bandera ondearse, era más grande y pesada de lo que recordaba, discretamente saco su varita y en encantamiento sonorus había terminado.

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LES GRANDS DÉMONS

El movimiento constante de las carrozas siempre le adormecía, era algo que no podía evitar al viajar en aquellos medios de trasportes “algo primitivos”. Hacia unas horas atrás que habían subido a una de aquellas carrozas para partir en dirección al Estadio New Trafford, donde según la cita, se llevaría a cabo la primera prueba del torneo. Solo basto avanzar un par de kilómetros para que Garry comenzara a cabecear en aquella estrecha carroza.

Los casi dos metros de estatura que Garry se cargaba le hizo muy incomodo el viaje, el torneo no le ponía nerviosa, al contrario, deseaba ya estar ahí enfrentándose a lo que el destino le pusiera enfrente. Debería haberse preocupado más bien por su compañero y capitán de equipo, parecía algo tenso, sabía que al chico le hacía mucha ilusión todo aquello, sin duda para todos los miembros del equipo debía serlo.

El constante sonido de su cabeza golpear el vidrio de la ventanilla, se opacaba por el cabalgar de las criaturas que alaban el carruaje, no había evitado quedarse dormida. El fuerte golpe que se llevo después de que la carroza dio un salto, le despertó justo a tiempo para darse cuenta que su capitán les daba instrucciones para la presentación en la primera prueba -<¿Cuantas más me abre perdido?>- pensó mientras asentía con su cabeza a la orden que Tejo le había dado.

Sain seria quien presentaría la bandera del equipo, Tejo les había hecho practicar bastante para ese momento, sin duda todo saldría bien, solo esperaba que su exceso de confianza calmara un poco al joven capitán del equipo. Tejo siguió dando instrucciones, unas cuantas repetidas y otras que creyó que no serian necesario emplearlas, pero bueno, era mejor estar prevenidos. La carroza seguía avanzando a gran velocidad, seguro en cualquier momento llegarían.

Un gran estadio que brillaba con intensidad se aparecía tras la ventanilla del carruaje, en cuanto más se acercaban el ruido de los espectadores y la brillante iluminación del estadio se hacían más intensos.

-¡Bien! Ya era hora- sintió detenerse el carruaje y trato de estirarse un poco dentro de él, pero sin querer golpeo con su codo a Verónica, la compañera con quien había compartido el lado de la carroza durante el viaje –ah! Lo siento no quise…es solo que es esta carroza ¿que no pudieron mandar algo más grande?- dijo fingiendo que la carroza le comprimía.

La puerta del carruaje al fin se había abierto y Tejo junto su mano con las del resto del equipo. Una brisa fresca entro al interior de la carroza, Garry sonrió al escuchar del joven capitán, aquel tan mencionado lema que les había dado ánimos durante sus entrenamientos. Sain, después de que Tejo bajo de la carroza, tomo el asta que tenia sobre el asiento y les dirigió una sonrisa fugas a Anna y Veronica.

–Andando- comento en vos baja al mismo tiempo que trataba de salir por la estrecha puerta teniendo cuidado de no estrellar su cabeza, otra vez, con la parte de arriba del carruaje como cuando había tratado de subir.

EL lugar estaba lleno de gente, seguramente todos entre espectadores, competidores, reporteros, gente importante del ministerio y mundo mágico que habían esperado el torneo con ansias, a pesar de haber escuchado que el número de competidores había reducido, Garry pudo notar a bastantes competidores, tanto de Beaxbatons como de los otros colegios. Camino por detrás del resto de su equipo con una mirada fulminante y amenazadora, sentía una gran necesidad de cuidar a su equipo, siendo Garry la mayor de todos (tanto por edad como de estatura) no se iba a permitir que algún bravucón tratara de des motivarlos, no después de todo lo que habían pasado para estar ahí.

La presión de la gente en las gradas comenzaba a aturdirle, por suerte pronto habían encontrado su camerino – ¿Crees que haya comida ahí adentro? - pregunto a Anna asomando la cabeza por encima de su compañera mientras eran dirigidos por una asistente.

Entrando al camerino, Les Grands Démos se puso cómodo, era grato un poco de relajación después de un camino tan incomodo, o al menos eso pensaba Garry mientras escuchaba las palabras de motivación por parte de su capitán. La puerta del camerino sonó después de unos minutos, al fin había llegado el momento, era la hora de presentar a Les Grands Démosn como lo que eran… ¡Grandes!

Caminaban por un estrecho pasillo siguiendo al equipo, Garry camino a paso lento tarareando una canción que escucho en un anuncio muggle que había tenido la desgracia de oír y que ahora no salía de un mente -<Que buen momento escogiste>- se reprocho. Al igual que sus compañeros avanzo hasta donde seria la entrada, cuando se detuvieron tomaron sus respectivos lugares, Garry atrasito de su equipo para no taparlos por su tamaño, se inclino hasta quedar a la altura de su capitán.

-Claro que puedes Tejo…eres Grande- le susurro al oído y con una enorme sonrisa se incorporo – ¿Listas entonces?- pregunto guiñarles el ojo a Anna y Verónica.

Astwood cove, una playa en un rincón de Bermudas, una de las más hermosas del Caribe pero que en aquel momento un aire lúgubre rondaba en el ambiente, el agua tan azul encandilaba, aun estando el cielo nublado, en ocasiones corrientes de aire fresco te empujaban debes en cuando, haciendo tambalearte sobre aquella inestable arena suave de aquella playa escondida.

La brisa del mar le acariciaba con suavidad aquel rostro lleno de rasguños, el ruido de las olas romperse con las grandes y filosas piedras de la costa le ensordecía, el cielo nublado, pero aun así estaba muy iluminado.Siendo casi medio día, Sain esperaba en aquella playa, contemplando el lugar, la paya estaba encerrada entre montañas de piedras filosas, había vegetación muy viva sobre ellas, había visto ese lugar en algún libro que, era un lugar muy diferente a los que había estado antes, aunque eran muy pocos, preparo un par de trasladares para que su encuentro con Bea Haughton y dejo una nota cerca un traslador. Según tenía entendido la joven Haughton había estado viajando por varios sitios del mundo, no esperaba impresionarla con el lugar que había escogido, más bien era un capricho suyo.

Profirió un suspiro al mismo tiempo que se había dejado caer sobra la arena, la humedad y la temperatura eran altas, Sain había asistido al encuentro con una playera suelta sin mangas de rallas azul marino y gris, las cicatrices de sus brazos apenas se notaban en esa piel morena pálida, sus entallados pantalones color negro comenzaban a incomodarle un poco ya hacia un buen rato que se habia deshecho de sus grande botas para sentir la arena entre sus pies mientras esperaba a su compañera.

El calor, el ensordecedor sonido del mar y la espera, le hacían adormecerse, Bea Haughton tendría que aparecerse pronto o Sain dormiría una siesta que seguro le aria un indeseado y doloroso bronceado. Pensar en qué clase de contrincante seria la Haughton le mantuvo consiente, la joven siempre permanecía muy callada y tranquila ¿Cómo conocer a una persona así?, sin duda el duelo sería bastante útil para tratar conocer qué es lo que Bea escondía tras aquella seriedad.

Caminaba por un largo prado de hierba seca que sonaba romperse bajo sus botas, avanzaba deprisa con una sensación de que alguien venía detrás, respiraba por la boca agitadamente y su vista era borrosa y todo a su alrededor parecía moverse como si fuera a una gran velocidad. Esa sensación de querer voltear para ver que estaba siguiéndole le invadió la mente, debía buscar su varita y enfrentarlo, pero su cuerpo no respondía, solo seguía avanzando, no encontraba su barita por ninguna parte, se sentía que en cualquier momento desfallecía.

Siguió así lo que parecía un par de metros más, hasta que de repente tropezó, pero <¿Con que?> había caído y rodado y rodado como si se encontrara cuesta abajo. Manchas negras y blancas era lo único que distinguía, no sentía dolor, pero si mucho mareo y con un sordo sonido de su cuerpo detenerse contra el suelo, quedo boca arriba en una profunda obscuridad.

-Lumus~- se incorporo y dijo en un susurro apenas audible, pero que aun así tubo un eco que sonó como un silbido lejano, al fin había encontrado su varita, la había tenido todo el tiempo en su mano pero <¿Como?> la luz brillante en la punta de la varita le alumbraba en un radio casi de metro y medio y aun así no lograba ver nada

-¿Quien está ahí?- una voz grave resonó por todo el lugar. Sain abrió aquellos ojos bicolor lo mas que pudo para ver mejor <¿Qué era es vos? O mas bien ¿Quién era?> abrió la boca para articular, pero todo aquello era demasiado extraño.

-Garry- soltó después de titubear un segundo.

Seguía tratando de ver algo o a alguien, lo que fuera bueno encontrar para saber qué es lo que pasaba, trato de recordar donde había estado antes <<la academia>> pensó, una ansiedad le comenzaba a corroer la mente.

-¿Garry?- contesto la voz que cada vez le parecía más grave, más rasposa, más familiar.

-Si- soltó fríamente, reconocía la voz, pero era imposible que fuera de esa persona, seguramente estaba bajo un hechizo o alguien trataba de jugar con su mente.

-Y Garry ¿Qué haces fuera de casa?- siguió hablando aquella vos que parecía que estaba dentro de su cabeza.

-Yo estoy…estaba en la academia pero…-

-¿En la academia dices?, pero ¿eso para qué? si tu ya as !aprobado!- le interrumpió la voz.

-¿Enserio?- soltó incrédulamente, ¿Pero que estaba pasando? ¿Dónde estaba? Y ¿Qué era aquella vos?, agito su cabeza tratando de concentrarse, no era conveniente fiarse de una voz en la obscuridad.

-¡Por supuesto!! ¡Ahora eres oficialmente el conejo de pascuas!!-

-¿Que?- Su vita pronto haba convertido en un huevillo decorado que brillaba con mucha intensidad, las orejas y bigote le habían crecido tanto como las de un conejo, Sain comenzaba en transformarse en un conejo igual al de su disfraz -¿Pero que haces? ¡Detente!-

-¡Pero si ya has aprobado Garry!, Aprobado, aprobado….!!- la voy se oía mas fuerte, mas aguda, mas real.

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Despertó con un calós frió que le recorrió el pequeño cuerpo, era una sensación helada que parecía correr más lenta y dolorosamente en las articulaciones de las manos y rodillas, aquella voz sonaba aun en su cabeza convirtiéndose en un aullido más agudo y suave, como una chica, como Sira.

Sain yacía aun boca arriba entre dos paredes muy juntas <Que lugar es este?> se pregunto, una pared era suave y aterciopelada y la otra rígida y llena de hojas, volteo su cabeza a un lado y miro su canasta con los huevillos que había logrado conseguir, no eran la gran maravilla pero eran todos muy buenos, seguramente aquel mal sueño se lo había provocado aquel huevillo morado con círculos amarillos que encontró un rincón, que por cierto, había sido el único que había comido <vaya, que mala experiencia> pensó con satisfacción.

Respiro profundo y su sonrisa se dibujo nuevamente como de costumbre, borrando aquel gesto preocupado, se sentó y acerco su canasta, aun escuchaba la vos de Sira hablando, pero esta vez toda era más real. Aquella pared suave de que tenia de lado derecho no parecía llegar al techo, ni siquiera era tan alta para llegar a la mitad de una pared. Estiro la mano para alcanzar el limite de ella, se sostuvo y de incorporo de rodillas. Se trataba nada más y nada menos que del respaldo de uno de los sillones de la sala común <bonito lugar para dormir> pensó al darse cuenta que estaba detrás de un sillón.

Aun sin salir de ahí, recargo sus brazos en el respaldo y su mentón sobre ellos, viendo la escena de Sira, quien solo daba saltos y parecía que aleteaba con un pergamino empuñado. Sain contemplo con una mirada extrañaba ¿Qué es lo que tramaba ahora? Mitzi se acerco a Bodrik pasándola y sentándose en uno de los cojinetes, después de eso felicito a Sira, Sain sonrió, se miraban tan curiosas con esos disfraces aun puestos.

Sira le comentaba a Mitzi que al fin se graduaría y mordió uno de los chocolates que tenia, Sain escucho hablar a Sira no quería interrumpirle si salía detrás del sillón en ese momento. En un segundo Sira parecía la persona mas feliz de ese lugar y al otro un aire de nostalgia brillo en sus ojos, pues dejaría la casa de los Centauros para seguir su camino, Sain miro con preocupación.

<¿Una fiesta?> Sira había propuesto una despedida por su graduación. Si bien Sain tenía la mayoría de su años en el exilio, pero no era una persona primitiva, sabía lo que la palabra fiesta significaba y seguro eso animaría a Sira <de no ser así no la hubiera propuesto> pensó irónicamente haciendo un gesto.

-¡Pues bien!- dijo saliendo por fin de “su escondite” una vez que Sira concluyo, se puso completamente de pie tras el sofá, el cual le llegaba a la altura de las costillas.

Se dejo caer asía adelante dando una voltereta sobre el respaldo del sillón quedando bien sentada sobre este, al final dio una pequeña carcajada –Sera mejor que comencemos a decorar- Saco su varita del bolsillo de sus disfraz, no pensó que a las jefas de casa les molestara que comenzaran con la fiesta.

Sería una pena quitar aquel bonito cartel que Bodrik había colgado anunciando la búsqueda de los huevos, pero por lo que vio en la canasta de Mitzi, la búsqueda seguramente ya había concluido. Hizo un ademan con su varita en dirección al cartel. Las letras que quería permanecieron ahí mismo solo cambiaban de color y se movían de lugar, las que no le servían se fueron esfumando.

El letrero comenzó a cambiar de color y un poco las forma, la tipografía cambio y con otro leve movimiento de varita las letras comenzaron a brillar como si tuviera pequeñas luces. Miro el letrero y asintió con la cabeza una vez concluido. Le parecía algo tétrico y horrendo, seria mejor pedir ayuda.

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–Sera mejor que se vaya alistando- le hizo una seña a Sira apuntando hacia los dormitorios para que la graduara se fuera a arreglar para su fiesta de despedida –Ahh por cierto...Felicidades Sira, Mitzi, ven ayúdeme con esto que no tengo creatividad- hizo una mueca a su letrero –Terminemos pronto para que también tengas tiempo...ameos que quieras festejar aun con ese disfraz- dijo a Mitzi entre risas mientas con su varita hacia una floritura sobre una mesa, esta se hizo más larga y un enorme mantel blanco apareció sobre ella, bajo con delicadeza sobre la meza y Sain trazo la trayectoria por debajo del mantel por donde iba apareciendo un grande y brillante color plateado.

-Ese color va bien con el verde- pensó en que la decoración fuera negro, blanco y plateado que a su parecer confinaban bien con aquel verde brillante de la sala, pero igual esperaba que Mitzi le diera alguno consejos, estando una vida en el exilio no se consideraba una persona con buen gusto.

-- -- -- -- -- --

Off:

Perdonen por la mala calidad del cartel(?) es que no se hacerlos y use una pagina x'D
pero si lo quieren cambiar adelante xDD no nos opondremos /o
Felicidades Sira~ /o/
Ciaos~

-¿ehh? – la pregunta le desconcertó un poco, realmente vino venir algo más acerca sobre su estado como licántropo –Yo pues…- se agacho un poco pasa poder ver su cuerpo –¿realmente no se nota?- dijo con una gran sonrisa que sus compañeros no pudieron ver.

Aquello que parecía era lo que les inquietaba era cosa que ya le había pasado bastantes veces, pero al menos ellos lo había preguntado, eso era lo diferente, Sain recordó la primera vez que hablo con Pandora Stark, la mujer, sin decir nadase había atrevido a tocarle el pecho para averiguarlo, en aquel momento Sain entro en pánico, detestaba el contacto, pero ahora, al recordad el rostro de la Stark después de todo el tiempo que le trato como un chico, bueno valió la pena el contacto.

Puso el rostro más serio que pudo para enfrentar a sus compañeros y dirigió una sonrisa fugas a Kutsy que permanecía muy silenciosa, Sain se cuestiono por ese instante si la hermana de Cillian se hacia la misma pregunta que sus compañeros, no quería que se sintieran avergonzados como la Stark, pero antes de que pudiera confesar Nats y Cillian rompieron en una carcajada, parecía todo una broma y antes de que Sain respondiera, Cilian dijo lo que Sain tanto quería escuchar desde que llego al departamento.

-¡Claro!!- se lanzo un poco en dirección hacia el chico, con más entusiasmo que del que le hubiera gustado mostrar, Cillian le había invitado a acompañarle para ver el caso de una “Tal Elenea” -Por supuesto- carraspeo la garganta ¿Elena? que importa quién era o que era <<!al fin algo de acción!>> aunque pensó que sería bueno saberlo, para saber qué hacer, pero seguro Cillian le pondría al tanto -¿Qué es lo que haremos?-

La cuestión de un principio aun no se había resuelto, pero seguro ya lo descubrirían algún día, Sain solo esperaba que no fuera a la manera de la Stark, pero mientras, dejaría que se quedaran con esa duda, apenas entraba a la adolescencia, seguro no tardaría en desarrollarse, o al menos eso pensaba, mientras tanto los torturaría con la curiosidad.

En el pasillo se escuchaban los sordos pasos arrastrados de aquellas botas pesadas, el tarareo de una canción lúgubre sin mucho ritmo y debes en cuando un largo suspiro que en ocasiones era más como un gemido de dolor.

Hubiera preferido que la clase fuera en otro momento, tenía el cuerpo adolorido, con raspones y heridas aun frescas que la luna llena le había ocasionado un par de noches atrás, aunque la sesión del mes hubiera terminado, deseo esta vez tener unos cuantos días para descansar. Aquella la primera luna llena del mes, por alguna razón se sintió como la primera de su vida, no había sentido tanto dolor al cambio desde las primeras veces, es mas ya era tan normal que muchas veces creía ser más un animago que un licántropo.

Pero ya había pasado por todo aquello antes, a diferencia de que, ahora tenía un empleo y deberes en la academia, sin cortar que ahora había gente a sus alrededores, ahora tenia algo por lo cual levantarse al día siguiente y seguir. Se pregunto que hubiera sido si aun permaneciera en aquel exilio, en aquella extensión que parecía infinita de arboles grises y secos como chamizos en cualquier estación del año, en la soledad que yacía en aquella casa de madera podrida en algún lugar de aquel bosque putrefacto. Una sonrisa se dibujo en su rostro rasguñado al mismo tiempo que detuvo su avance y su lúgubre tarareo, el recordar aquello no era tan malo, después de todo había sido como su castillo, claro, si se tratara de un reino muerto.

Aun de perfil a una puerta donde detuvo sus arrastrados pasos, giro la cabeza, aquel día se había dirigido a clase con solo caminar sin alguna dirección y parecía funcionar , aquella sonrisa se borro y los ojos aun malhumorados brillaron, un estremecimiento recorrió su cuerpo, según los rumores la case se impartiría en otro sitio, por lo que tendría que usar un trasladar para llegar ahí, ya antes había tenido experiencia usando esos trasladores, le parecían divertidos, pero muchas veces el aterrizaje era el problema y en aquel momento lo que menos quería era terminar el suelo, no con el cuerpo adolorido.

La puerta rechino al entrar en al aula, un anuncio en la pizarra fue lo primero que noto, seguido de varios objetos como zapatos, relojes o sombreros viejos sobre las paletas de los asientos. Sain soltó un largo y agonizante suspiro. Leyó el pizarra sin ganas antes de tomar uno de aquellos trasladores, parecía que los rumores eran originarios de las cartas para iniciar la clase, que habían llegado vía lechuza algunos cuantos días atrás, pues en el pizarra garabateado con tiza blanca decía algo como “el lugar acodado” o algo parecido a eso, probablemente en la carta vendría eso, pero al pasar toda la semana durmiendo después de cada transformación, seguramente había olvidado ese detalle, ni siquiera recordaba haberla leído por completo.

Sintió por unos momentos, que el reloj viejo sobre el asiento que tenia aun lado hacia un ruido infernal cada vez que las manecillas avanzaban, lo miro con desprecio, sentía dolor muscular y un malhumor que le hacía sentir que la cabeza se le partía en dos. Aquel sonido que seguro provenía de la reliquia, era insoportable.

-Tú no deberías estar funcionando o ¿sí?- le soltó con amargura al objeto inerte mientras lo tomaba –Vaya, pero si no eres tu quien hace el ruido…- al verlo de cerca se percato que el viejo reloj que sostenía en su mano no estaba en funcionamiento, pero antes de tratar de encontrar el horrible ruido que le taladraba las sienes, aquel gancho bajo el obligo despego sus pies del suelo.

Tenía que admitir que la sensación de viajar con un traslador era divertida, por lo que por unos segundos, mientras viajaba por el remolino de colores y sonidos, Sain reía nerviosamente con el reloj como pegado en la mano. El sonido de el reloj cayendo al suelo de su mano, se perdió con el de Sain cayendo hacia atas, siempre era complicada esa parte. Aunque sintió un fuerte dolor no puedo evitar reír un poco, así era su naturaleza. Se incorporo lentamente, parecía sentirse un poco mejor. Miro a sus lados para darce cuenta que estaba en un bosque, pero no podría estar tan adentro de este, lograba ver luz de entre los troncos de algunos árboles.

Camino por un rato en el bosque, sus pensamientos ahora más relajados, flotaban sobre la idea de “cuánto tiempo podría vivir algún animal fuera de su habitad natural”, no era un tema muy relacionado, pero bueno sus pensamientos no eran del todo coherentes cuando vagaba. Salió finalmente del bosque, avanzo un poco más para orientarse. Estaba en un gran acantilado, seguramente en otra parte del mundo, el aire corría fresco y se perdía en el bosque que había quedado detrás de Sain.

Cerca de ahí, a un costado, dos hombres yacían frente a un espejo, lo contemplaban como si la vida se les fuera en ello, Sain se acerco un poco a ellos sin interrumpir, era más que obvio que se trataba de los profesores, o almeno alguno tenía que serlo, porque, do otra manera ¿qué harían dos hombres en un acantilado contemplando un espejo? Aunque todo era posible.

De entre los arboles comenzaba a llegar más gente, sitio alivio al ver rostros conocidos de sus otras clase, eso quería decir que entonces no se había equivocado de lugar y después de esperar un rato la clase parecía dar inicio, su cuerpo se sentía mejor y su mal humor comenzaba a cesar.

< ¿ Pocos logran llegar y muchos menos, terminar? Todo estará bien mientras no nos ponga a luchar unos contra otros> - pensaba mientras los profesores daban la bienvenida y se frotaba el hombro adolorido.

—Les recomiendo que si ven a alguien tosiendo, vomitando o mostrando algún signo que marca la palabra muerte en la frente, no intercambien palabras con ellas, ¿vale? — comento un segundo profesor mientras, el otro se colocaba del otro lado del espejo. -<<¿Qué?>>-Sain sonrió.

La clase había dado inicio, no hubo presentaciones ni algo por el estilo, Sain por una parte lo agradeció, a cambio los profesores explicaron la función del espejo, Sain ahora comprendía lo que pasaba cuando llego y vio al par frente al espejo.

Aquel espejo tenía un funcionamiento muy inquietante, el “cómo es que lo hacía” era lo único en lo que podía pensar, camino hasta el espejo con mucho cuidado para quedar frente a él. -¿Qué es lo que ves?- Susurro para sí, realmente no miraba nada mas que su reflejo en él, solo estaba ahí recorriéndose con la mirada de arria abajo, todo era igual, esos cabellos caoba rojizos despeinados y esponjados, siempre le gusto el color de su cabello, pero se interrumpía con aquel cano mechón en de su lado izquierdo, todo por ese lunar, ese lunar que le pintaba el ojo del mismo lado de ese color gris que le asustaba un poco y que dejaba a su ojo ambarino brillar con más intensidad detrás de aquellas gafas de media luna.

Ladeo su cabeza un poco asía el lado izquierdo, tratando de encontrar “el deseo mas profundo de su corazón”, se enderezo nuevamente frente al espejo, se noto que había crecido al menos un par de centímetros, aunque llegando casi a la adolescencia, seguro eso era algo normal, seguramente su voz y aquel cuerpo sin forma también cambiaría y ya no tendría que pasar por esos momentos incomodo cuando la gente preguntaba si se trataba de una niña o un niño, esa asexualidad que tenia y le causaba muchos momentos incómodos.

Aunque era consiente que para su edad era de estatura muy baja, no tenía inconveniente por ello. Realmente no le molestaba como era físicamente, le gustaba ese color moreno en su piel adornado con aquellas horrendas cicatrices, aunque las cicatrices estaban por demás, tampoco le molestaban mucho, salvo por aquellas días de frió donde ardían con más intensidad. Sonrió su reflejo y las cicatrices de algunos días atrás se marcaron más en su pálido rostro -<es nuestra naturaleza>- se consoló.

El espejo no le mostraba nada mas, pensó entonces, que tal vez que no le mostraría nada, el espejo no podría mostrarle el deseo mas profundo de su corazón, porque ¿Qué podría mostrarle? ¿A sus padres?, no Sain había olvidado la existencia de esas dos personas después de vivir tanto tiempo con el viejo Ollivander en aquel bosque, ahora estaba bastante feliz, tenía un empleo como aprendiz en el departamento de criaturas mágicas y no era una persona ambiciosa, solo esperaba llegar al puesto que le llevara a lo que quería hacer en aquel lugar, tratar con criaturas mágicas. Tenía una nueva “familia”, aunque Sain pensaba que solo por nombre, pues no sentía algún verdadero lazo sentimental hacia ellos, solo gratitud, aunque tampoco es como que le afectara si tuviera o no una familia, siendo así ¿Qué podría mostrarle el espejo entonces?

El reflejo era igual como verse en cualquier espejo, la sonrisa se borro de su rostro, aquel día había dejado al descubierto sus brazos usan do una playera blanca con rayas verticales de diferentes tamaños de color esmeralda, sus piernas se miraban quebradizas con esos pantalones entallados negros y esas grandes botas al final parecían anclarle más al suelo que de costumbre, pero justo de su lado derecho, el espejo comenzaba a mostrarle algo mas, que solo su reflejo. Se dibujo un largo rasguño que salía desde la manga de su camisa y corría por todo su brazo hasta llegar a su muñeca. Sabía que ese rasguño no estaba ahí realete, lo sabía porque se había limpiado las heridas aquella mañana entonces ¿Qué era aquello? ese espejo no podría tratar de decirle lo que mas anhelaba era lastimarse todas las noches de luna llena.

Dio un par de pasos más al espejo para mirar mejor, sus ojos quedaron tan abiertos de la impresión con lo que vio. Junto a su brazo mal herido, la silueta de un hombre sentado se dibujaba. La imagen se hacía cada vez más visible y Sain estaba en una discusión mental entre quería o no saber de qué se trataba. Sus ojos se crisparon y rió, al siguiente segundo enmudeció con seriedad y trago con dificultad, la silueta de aquel hombre no era más que la de su viejo Ollivander, quien había aparecido y le trataba aquella herida.

Sain lo miro sin parpadear, respirar se hacía difícil, quería voltear a su brazo para poder verlo, pero sabía que no habría nadie ahí cuando lo hiciera y temía no encontrarlo en el reflejo del espejo cuando lo buscara en el reflejo. Cuando el viejo en el espejo termino de curar la herida, se incorporo a su lado, con su cara llena de amargura <<típica del viejo>> cómo es que no se había percatado de eso, de que lo que más quería en el mundo aquellos momentos, era volver después de un largo día de trabajo y estudio y contarle al viejo todo lo que había hecho, aunque este no le respondiera, Sain siempre supo que le escuchaba, era la persona que más quería y ahora era un reflejo en aquel espejo que jugaba con sus recuerdos.

Como es que no se había dado cuenta, después de tanto, todo lo que hacía, todo lo le pasaba desde su llegada a Ottery todo caía en "¿me pregunto que hubiera pensado el viejo de esto?” o “¿al viejo le hubiera gustado esto?”. Sin duda Sain añoraba ver a ese viejo huraño de vuelta a su lado, igual que en el espejo.

El hombre del reflejo le hizo una seña a Sain para que apartara sus ojos del espejo, Sain respondió con un puchero de mal humor y después sonrió, ese tonto espejo había proyectado tal cual era el viejo Ollivander con el que vivía en aquella casa podrida en medio del bosque que parecía tener vida propia.

-El espejo no me muestra nada- mintió. Al fin había apartado la vista del espejo, manteniéndola baja, seguro los profesores sabrían que Sain mentía, pero no era algo que le mortificara. –Solo estoy yo- miro hacia arriba para ver a los ojos a uno de los profesores –¿Eso es malo?- dijo mirando de reojo fugazmente al espejo una vez mas, la respuesta no le importaba mucho.

Se alejo del espejo para que alguien más pudiera torturarse con él ¿A quién le gustaría tener un espejo como ese? ¿Qué es lo que los demás mirarían? ¿Acaso había alguna posibilidad de que el espejo mostrara el futuro?, no, aquel espejo solo mostraba aquello que tu mas querías, si lo conseguías o no, ese dependería de uno.

Espero a que la clase continuara, mientras lo hacía, observo la reacción de sus compañeros y sus pensamientos flotaban en crudas ideas sobre lo que ellos podrían estar viendo. El cuerpo ya no le dolía, pensaba tan rápido en tantas cosas que había olvidado que su cuerpo aun estaba moreteado y lleno de rasguños, pero por alguna razón su mal humor parecía regresar nuevamente.

** ** ** ** **

Off:

Bueno Hola a todos, (no estamos seguros de que hay que poner off rol pero en las otras clase hubo asi que bueno...) bueno primero que nada gracias por la bienvenida (abraso a Elvis~)

EN fin yo soy Sain Vargas (pero mis amigos me dicen Chery) no se por que xDDD, soy de Baja California y estudio arquitectura, pues ya ese soy yo xDD

Mi personaje es Garry Sain, en una persona que vivió en el exhilio y ahora anda aqui en Ottery explorando y metiendo su nariz por todas partes(?) <<Yuli es nostra mejor amiga(?)>>

Creo que escribiré un off muy corto por que ya es tarde y tengo que salir ( o mama nos matara?) en fin para cualquier cosa aquí andamos ( o aveces por aya)

Saludos~
Nos leemos
Ciaoooos~

Sain~

-Nada de otro mundo ¿eh?- dijo a Nats quien le contesto con mucha naturalidad sin ningún problema.

Realmente Sain esperaba que aquel departamento se fuera más allá de revisar registro de elfos, aunque claro que acababa de llegar a su puesto y no esperaba que hubiera mucho que hacer por su parte mas que aprender. Sain sonrió con satisfacción, aquello no parecía cosa difícil, seguro no batallaría en tomar el ritmo, sería solo cuestión de…tiempo.

Guardo silencio por unos segundos frente a Nats, hasta que una mujer con cabellos color celeste paso cerca saludando con prisa, solo pudo saludarla con un ademan sin decir nada, la mujer parecía llevar prisa, sería mejor no entretenerla, pensó. Rodó sus ojos para mirar, una vez más, su alrededor mientras se balanceaba sobre los talones de sus pies con las manos en la espalda.

-¿Hay algo que le inquiete?- detuvo su balanceo quedando sobre sus talones y pregunto a Nats con una risa, la joven sentada en frente, quien no le dejaba de observar como si tratara de atravesarle con la mirada para ver que había detrás.

Holou~

Bueno, gracias por la bienvenida <teníamos que presentarnos(?)>

Soy Sain Vargas, soy de Baja California y estudio arquitectura en la universidad del estado y trabajo en casa, este es el primer foro de rol en el que me he metido, pero tengo que admitir que le tome aprecio a esto de escribir roles *v*....ehh...

Mi personaje de HL es Garry Sain, es una chica que a estado en el exilio tanto del mundo muggle como del mágico (aunque es mas allegado al mundo mágico), tiene el comportamiento de un chiquillo pequeño, pero es muy sensata, en fin espero algún día rolear con uds para que le conozcan 8)

Y ahora mi ficha x3

 

Nombre: Rafael Bramante

 

Sexo: Masculino

 

Edad: 22 años

 

Aspecto Fisico:
Es de estatura media (1.82m), luce un poco mayor a su edad, su piel blanca esta bronceada por el sol, es delgado, pero bien formado, posee músculos largos y bien definidos sin exagerar, aunque no es muy resistente en los combates cuerpo a cuerpo es muy ágil y veloz. Un cabello bien tratado lo lleva corto y siempre bien peinado, dándole a ese negro brillante la sensación de terciopelo solo con la vista, sus ojos color plomo son frágiles al sol, pero son su mejor cualidad, ya que a pesar de su sensibilidad a la luz tiene una vista increíble, lo que lo hace ejecutar tiros perfectos sin fallar a un blanco, incluso aunque este en movimiento.

 

Viste siempre muy bien arreglado, usando trajes costosos, zapatos lustrados, guantes de piel y lentes obscuros. Le gusta viajar por la calles en autos lujosos destrozando cosas a su camino incluyendo los coches en los que viaja.

 

Papel en la historia: Civil

 

Cualidades psicológicas:

Aun siendo un psicópata homicida, Rafael pasa desapercibido siendo un joven positivo, sonriente, serio cuando la situación lo pide, mal humorado cuando las cosas no salen bien, coqueto cuando hay una chica linda, bromista, sarcástico, etc. Tiene miedos como cualquier persona, no le gusta que la gente se preocupe por él y posee una paciencia casi infinita, aunque no lo hace tranquilo del todo, es bastante inquieto e impulsivo (por diversión). Vive como si no estuviera en medio de un apocalipsis. Cuando se lo propone es bastante arrogante, prepotente y patán, pero solo para molestar a las personas. Al menos lo es la mayoría del tiempo.

Bramante aparenta ser una persona bastante normal, a no ser porque los tiempos ya no son como antes, el es de sangre fría cuando se trata de matar, no siente remordimientos, culpas ni compasión, no le da importancia a las personas, salvo a su niña, es un sicario.

 

Breve historia:

 

Rafael Bramante, psicópata asesino australiano hijo de una familia de clase media, vivió una infancia tranquila en el sur del país, hasta que en la adolescencia sus padres mueren en un atentado. Huérfano sin ningún familiar conocido, escapa del orfanato y vaga por las calles, un par de años después, sobreviviendo con astucia, logra hacer tratos con la mafia a muy corta edad y se convierte en un miembro importante para esta.

Cuando sus padres murieron, Bramante perdió toda cordura que le quedaba, se convirtió en un sicario de alto riesgo y era buscado por cargos de homicidio, atentados contra el gobierno, crimen organizado, etc. Considerado por la ley como un enfermo mental, por su manera de trabajar.

En el año del 2012 Bramante se separa de la mafia y se convierte en un mercenario encubierto, engañando a la sociedad como el jefe más joven que el Royal Bank of Scotland pudo tener. A principios del año 2014 contrae nupcias con una joven mayor que él, se separaron ese mismo año, pero a mediados del 2015 su ex mujer tiene una hija de Bramante.

 

Con la presión que la policía ejercía contra él, Bramante no pudo ocultarse por más tiempo y fue encarcelado en una clínica mental, después de confesar sus crímenes de una forma aterradora asustando a todo el jurado. Ahí permaneció encerrado tan solo un par de meses, las noticias en los periódicos matutinos anunciaban un virus que acezaba con extinguir a la humanidad y la llamada de una mujer con una pequeña, para ponerla a salvo, le regreso un poco de cordura, tenía que salir de ahí y encontrar a su pequeña Gabriel y saber que estaba bien. Con su astucia para matar silenciosamente logra abrirse paso y salir de ahí y buscar a su pequeña pero lo único que hay es un caos en el mundo a tan solo un año de que el virus se había desatado.

Nos leemos~

Sain~

Aprendiendo a ser parte del departamento(?)

Era la recepción del departamento, Sain había solicitado al joven pelo negro, Emment, si podría decirle cual sería su función como aprendiz en el departamento, esperaba que le mandaran pronto a algún caso que se tratara sobre fantasmas, eran criaturas con las cuales aun no había tenido la fortuna de encontrarse y que por el momento era lo que le rondaba por su cabeza. De pronto, casi sin notarlo, aquella castaña, del escritorio en aquella oficina, yacía su lado hablando de una manera muy extraña, Sain le miraba sonriente mientras le hablaba.

-Gracias- respondió entre risitas producidas por la forma de hablar de la castaña, la cual se había presentado como Nats <<¿Por qué hace eso?>>- pensó aun riendo –Esta en lo correcto Nats, seré aprendiz en este departamento, es un gusto conocerle << ¿la más antigua?>> por cierto soy Sa…

La vos de un joven venir a paso veloz en dirección a Nats y Sain, llamo su atención. El joven llego enterado de la situación, parecía bastante contento por anunciar que tal vez un aprendiz mas llegaría.

-Eh….si, Soy Garry Sain- contesto y regalándoles una amplia y sincera sonrisa, hizo una leve inclinación al chico que acababa de presentarse como Cillian y a su hermana Kusty -Garry Sain- dijo esta vez en dirección a Nats, a la cuan aun no le había dicho su nombre y que tal vez no era necesario repetirlo otra vez, pero así era algo más personal, pensó.

Sain rió al escuchar a Cillian, por alguna razón aquellos dos (Nats y Cillian) se comportaban de una manera...bueno digamos, fuera de lo común al hablar o hablarle a Sain, pensó que tal vez sería una especie de conversación en clave entre compañeros de trabajo, o alguna secuela por trabajar en el departamento <<bien~>> le agradaba esa última idea.

Se quedo en silencio por unos momentos escuchando como sus, ahora, compañeros se ponían desacuerdo para trabajar (y haber quien se quedaba a cargo de Sain(?), volteaba de un lado a otro escuchando lo que decían y asintiendo constantemente con su cabeza, finalmente, su atención quedo en Nats, quien le explicaba algo acerca de los registros de elfos.

-¿Qué es lo que se tiene que revisar en los registros?- le pregunto –Es decir… ¿que clases de errores puede haber en un registro, para que no pueda ser completado o realizado?- había muchas preguntas que tenia sobre el departamento, pero clavárselas a Nats y a Cillian en ese mismo momento, tal vez no sería lo más indicado, además ya tendría tiempo suficiente para formular cada pregunta cuando fuera el momento, después de todo, Sain ahora pertenecía al departamento de regulación y control de criaturas mágicas y esperaba no salir de ahí por ningún motivo.

Holou~

Bueno, yo soy Sain Vargas, soy de Baja California (realmente no sé si tenga algún titulo xD pero si hubiera seria algo como el estado de……..bueno no se me ocurre nada tengo mucho sueño), soy técnico en mecatronica (aunque no ejerzo como tal) y estudio la licenciatura en Arquitectura, tengo un trabajo en casa haciendo formatos para empresas pequeñas y como instructor de bandas de guerra (además como segundo comandante *v*), tengo un gato : 3 que es el amors de mi vida.
Sobre pasatiempos pues me gusta escribir, dibujars, leer(aunque me pone de mal humor xDD) hostigar gente...Dormir!!, la comida china, comer, aunque no me gusta cocinar (no se hacerlo xD), realmente no veo mucha televisión, pero casi no me despego de mi portátil (creen que sea adicción(?) yo no lo creo *tic en el ojo*), pues realmente ahí está toda mi vida laboral y de estudiante DD; que más seria bueno….(naaah vamos con mi personaje)

Boooeno…Mi personaje es Garry Sain y se trata de un personaje cuya vida (antes de pisar Ottrery) la vivió en el exilio con un viejo mago (lo que lo lleva a desconoces muchas costumbres tanto de muggles como de magos), la razón (?) sus padres no quieren lidiar con su estado (licántropo), así que Garry se pasa toda su infancia en un bosque putrefacto 8). Es un personaje muy inquieto, que se puede impresionar con facilidad, es un personaje curioso, despistado, torpe, ansioso (en otras palabras es como un niño pequeño), pero que todo esto muchas veces es mas como una careta a su otra personalidad, calmada, calculador y en ocasiones (aunque muy raras) hostil. Le gustan los juegos (mas aquellos que te hacen explotar la mente), ama comer manzanas verdes y le gustan los dulces (excepto los chocolates), detesta el frió y es de esas personas que prefiere escuchar y oír mas que hablar para, según Sain, así se aprende mas de las personas.

Y bueno mas sobre lo que es Garry en Ottery….pues pertenece a los Tonks como familia adoptiva y solo a esa por ahora, pero con eso es más que suficiente 8) Trabaja en el Ministerio de Magia como aprendiz en el Departamento de Criaturas Mágicas (yey~) y pues realmente es todo xDD ( es un Centauro de Blodwin~ xDD).

Pues mas menos eso es Garry Sain (en un resumes extremoso DD; ) y estará a su disposición tanto como 8). Gracias por la bienvenida (aléjense de mi hago demasiadas preguntas DD; ) por mi parte daré lo mejor que cargo.

Ciaos~

Garry Sain

El aprendiz novato que parece un chico, pero es una niña xD

-Gracias- torpemente estrechó la mano del joven Haugton.

El Departamento de regulación y control de criaturas mágicas, el lugar que desde que había mandado una solicitud como aprendiz, esperaba el día de tener la autorización para presentarse a trabajar y tener contacto con aquellas dichas criaturas. Emmet Haugton Graunt, el joven pelo negro que le había atendido al llegar al departamento, yacía en su escritorio trabajando, pauto para darle una confiable bienvenida, Sain agradeció que lo hiciera.

-Lo mismo digo.- soltó sin dejar de verlo –Es un gusto estar aquí...- sonrió ampliamente al ver al joven volver a su trabajo –Ehh…- no era su intención interrumpirlo o atrasarlo en lo que hacía, pero realmente, salvo por ahora conocerlo, Sain estaba en las mismas desde que llego a recepción -..sería bastante bueno, saber qué es lo que debo hacer ahora- dijo volteando hacia todos lados.

En uno de las oficinas cercanas, diviso a una pensativa chica castaña sentada detrás de un escritorio y que observaba a esa dirección, Sain, con la mano le hizo un ademan de saludo y regreso la vista a Emmet, para escuchar su respuesta, tal vez aquella joven castaña tras el escritorio de aquella oficina, estaba ida en sus pensamientos y no era la intención de Sain traerla de vuelta en contra de su voluntad, detestaba cuando la gente le hacia eso.

Sain~
( Aprendiz Novato xD)

Caminaba por los pasillos del ministerio con más seguridad de la que le hubiera gustado mostrar, como si ese recorrido fuera cotidiano y monótono, tal vez era el deseo de llegar pronto a su destino o el de no llegar tarde a su primer día como aprendiz en el Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas, aquel lugar el que esperaba entrar con ansias. Caminaba esquivando gente casi como si danzara mientras avanzaba, aunque con aquella, tan pequeña, estatura era más fácil escabullirse por entre la gente de lo que se aparentaba.

Tan solo un par de horas atrás, se encontraba sobre la acera de la calle esperando el transporte, se lamentaba aun no tener los permisos para usar los medios mágicos, hubiera sido útil usar la chimenea de la hacienda, pero Sain conocía tan poco su, ahora hogar, que podría jurar que la mansión de los Tonks no tenía una y ahora peleaba contra el tiempo esperando paciente fuera de la hacienda, sobre la acera, bajo la sombra de un árbol a que su transporte llegara <<Tal vez…hubiera sido mejor caminar>> pensó mirando la poco poblada calle que tenia al frente.

Una noche anterior, con ayuda del elfo domestico, Sain había alistado la vestimenta que pensó más adecuada –Tendría que ser formal- le comento el elfo.

-Si claro, pero…también cómodo- le contesto Sain casi de cabeza en su armario, donde solo se podían ver suéteres de diferentes colores –algo como…esto- del armario saco una prenda de vestir de botones y cuello pero sin mangas –Me pregunto ¿de dónde habrá salido?- observo la prenda.

Al final, y después de que el elfo le dio algunos consejos de moda (los cuales Sain no presto mucha atención), salió de la hacienda, vistiendo sus jeans entallados, negros, debajo de esas enormes y pesadas botas, que le cubrían un poco más arriba de los tobillos y que parecían anclarle al piso, y aquel cinturón extraño que colgaba de la cintura, se le escondía debajo de aquella prenda de vestir blanca de cuello, de donde se amarraba una corbata negra sin ajustar, algo muy “casual” como decía el elfo, tomo su capa negra y en su morral, que le colgaba en un hombro, unos guantes marrones y un repuesto para sus anteojos yacían ahí guardados.

*********************

Viajaba por el elevador, casi solo sosteniéndose por sus pesadas botas, cuando los pensamientos de ¿El qué es lo que habría ahí? ¿Qué clase de criaturas? ¿Qué actividad desempeñaría? –Seguro de todo tipo- se auto contesto con una tenue sonrisa en el rostro. Sacó el par de guantes y se los coloco con la intención de querer esconder (por lo menos las manos) esos rasguños aun frescos que adornaban de forma aterradora su piel, eso debió pensar antes de escoger una blusa sin mangas.

–Tal vez debí comer algo antes de venir- se dijo mientras trataba de acomodar un poco su alborotado cabello, lo cual no se mantuvo por mucho tiempo. El ascensor se había detenido tan bruscamente que Sain pensó que saldría votando como canica por todo el ascensor, agradecía cargar aquellas pesadas botas más que nunca. La voz suave del ascensor anuncio casi como una canción -“Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas”-. Con el cabello igual de alborotado de siempre, Sain resoplo tratando de quitarse un mechón canoso del ojo y salio del ascensor.

EL departamento no parecía tener mucho movimiento aquella tarde, pero Sain se consintió y se detuvo para contemplar el que había, gente entraba y salía, algunos con criaturas, otros que parecían criaturas, camino hacia la recepción mirando de un lado a otro, no tropezaba con nada, ni con nadie, esquivaba bien los obstáculos sin dejar de de caminar boca abierta contemplando el lugar.

-Hola, buenas tardes...- Saludo en recepción, dudo un momento de su siguiente línea –Soy Garry…Sain y he venido a ocupar el puesto que me han otorgado como aprendiz en el departamento en la división de seres, duendes y espíritus estoy a sus disposición- soltó esto con un tomo muy alegre.

Sain~

Dylan, el amable joven que había ayudado a organizarse para poder realizar su examen con todas las de la ley, al fin había aparecido, justo a tiempo pensó Sain, una joven que parecía molesta, parecía repréndeles por estar en el lugar. Dylan aterrizo justo cerca de ellos, aclaro el asunto y les llevó de regreso al campo.

Después de regresar con Kelly, quien llevaba una escoba del mismo modelo que el de Sain , esperaron a que Dylan volviera para ejecutar al fin la prueba para tan anhelado permiso. El joven instructor volvió con un cofre muy grande y reto a las jóvenes para realizar el examen.

Mas chicos de la clase comenzaban a llegar, realizaban con facilidad la primera etapa, no era un desafío después de todo, Kelly fue quien tomo la iniciativa para comenzar la prueba y una joves que parcia salía de la nada (porque Sain no se había percatado de su llegada asta ese momento) la secundo. Sain, espero paciente que llegara su turno, con la escoba lista, seguro en cualquier instante le llegaría su momento.

-¿Qué conocimientos anhelo tener?- leyó en voz baja

Escucho la responder a la profesora Evans, con un poco mas de atención que el resto de la clase, rió cuando la escucho decir que “Ni siquiera Sain, era un ermitaño alejado del mundo”, de igual manera Sain no se sentía uno, pero le pareció graciosa la idea de que, tal vez, habría gente que así le considerara.

Su atención aumento al ver a la profesora Black escribir en la pizarra “¿Qué conocimientos anhelo tener?”, una pregunta que le habían formulado con anterioridad y que Sain, podría decir, que aunque corto el tiempo había cambiado de parecer, pareciera ser que no era de carácter testarudo después de todo.

Sonrió al escuchar la voz de Yuli participando, casi olvidaba su presencia en clase, Sain pensó que la chica había entrado en una especie de coma, ya que no participo mucho en la sesión anterior, aunque de igual manera Sain no lo había hecho.

Todos los conocimientos eran buenos a su manera, saberlos todos sería algo bueno, pensó, ya fuera para ejercer en el ministerio o solo para saber, sin embargo tal vez solo habría un par que anhelara mas que cualquier otro, no, no era su caso.

Realmente no había pensado mucho en eso, es como si solo se dejara llevar y lo todo con lo que se topara en el camino fuera bueno, es decir, si algún mago tenebroso se acercara y le ofreciera nuevas enseñanzas, aceptaría con una facilidad incrédula, tal vez por eso era tal influenciable en ocasiones, de igual manera Sain emplearía sus conocimientos de la manera a la cual le pareciera mas propio <<aaah entonces eso era>> creyó comprender al fin la polémica que se llevo hacia unos momentos, rió con una sonrisa irónica.

-Sobre conocimientos…-

Su participación al final le puso algo nerviosa, tal vez fuera que aun estaba algo adormilado el asunto y había perdido sus pensamientos eligiendo conocimientos, clavo sus ojos al suelo y continúo.

– Pociones seria- comento aun pensativamente -<<el arte de crear magia>>- pensó -Conocimiento de maldiciones y cuidado de criaturas mágicas sería bueno- había varios muy interesantes, no se dejaba guiar mucho por “me serviría para el departamento de…”, aunque era lo más conveniente, simplemente le costaba soltar sus ideas –y tal vez Astronomía o defensa contra las Artes Oscuras- dijo esto último con una mueca.

Quiso seguir hablando abrió la boca para continuar al mismo tiempo que levanto la vista hacia la clase, luego con una sonrisa prefirió no continuar –Creo que eso seria algo- tomo asiento aun con algo de vergüenza de su participación tardía.

Off:

Bueno, primero que nada lamento la tardanza, ehm, pues me gusto mucho esta clase, más que nada por la participación que hubo por parte de los compañeros, muy activos ellos, mi clase anterior cada vez éramos menos hasta que solo quede yo xD , y pues es diferente no(?) Porque ya con tres cuatro personas más esto agarra más sabor xD, no y la verdad es que hasta te motiva para continuar.

A las profesora, hay que agradecerles el tiempo y las correcciones, aunque eran muy similares a las de las clases de generales xDD (jamás aprenderé a escribir bien u__u, ), me gusto mucho la actitud de la profesora Kya xD y las respuestas de Bel /o/ <<geniales>> y bueno, supongo que nos volveremos a ver por ahí no(?) entonces hasta pronto(¿).

Espero y mi aportación también les aya gustado <<o disgustado lo que sea es bueno xD>> y pues nos seguimos leyendou~

Tarea

Bueno aun no pido el cambio <<pensamos que primero tenían que revisarlo DD; >> pero aquí están alunas correcciones <<que creímos haber hecho xD>>

Sobre el Examen de vuelo <<aun esperamos respuesta>>

consejo regulador de escobas

De hecho tuve problemas <<nos confundimos>> pero creo que nomas hay que esperar <<Creemos>> xC

-¿Qué conocimientos anhelo tener?- leyó en voz baja

Escucho la responder a la profesora Evans, con un poco mas de atención que el resto de la clase, rió cuando la escucho decir que “Ni siquiera Sain, era un ermitaño alejado del mundo”, de igual manera Sain no se sentía uno, pero le pareció graciosa la idea de que, tal vez, habría gente que así le considerara.

Su atención aumento al ver a la profesora Black escribir en la pizarra “¿Qué conocimientos anhelo tener?”, una pregunta que le habían formulado con anterioridad y que Sain, podría decir, que aunque corto el tiempo había cambiado de parecer, pareciera ser que no era de carácter testarudo después de todo.

Sonrió al escuchar la voz de Yuli participando, casi olvidaba su presencia en clase, Sain pensó que la chica había entrado en una especie de coma, ya que no participo mucho en la sesión anterior, aunque de igual manera Sain no lo había hecho.

Todos los conocimientos eran buenos a su manera, saberlos todos sería algo bueno, pensó, ya fuera para ejercer en el ministerio o solo para saber, sin embargo tal vez solo habría un par que anhelara mas que cualquier otro, no, no era su caso.

Realmente no había pensado mucho en eso, es como si solo se dejara llevar y lo todo con lo que se topara en el camino fuera bueno, es decir, si algún mago tenebroso se acercara y le ofreciera nuevas enseñanzas, aceptaría con una facilidad incrédula, tal vez por eso era tal influenciable en ocasiones, de igual manera Sain emplearía sus conocimientos de la manera a la cual le pareciera mas propio <<aaah entonces eso era>> creyó comprender al fin la polémica que se llevo hacia unos momentos, rió con una sonrisa irónica.

-Sobre conocimientos…-

Su participación al final le puso algo nerviosa, tal vez fuera que aun estaba algo adormilado el asunto y había perdido sus pensamientos eligiendo conocimientos, clavo sus ojos al suelo y continúo.

– Pociones seria- comento aun pensativamente -<<el arte de crear magia>>- pensó -Conocimiento de maldiciones y cuidado de criaturas mágicas sería bueno- había varios muy interesantes, no se dejaba guiar mucho por “me serviría para el departamento de…”, aunque era lo más conveniente, simplemente le costaba soltar sus ideas –y tal vez Astronomía o defensa contra las Artes Oscuras- dijo esto último con una mueca.

Quiso seguir hablando abrió la boca para continuar al mismo tiempo que levanto la vista hacia la clase, luego con una sonrisa prefirió no continuar –Creo que eso seria algo- tomo asiento aun con algo de vergüenza de su participación tardía.

Off:

Bueno, primero que nada lamento la tardanza, ehm, pues me gusto mucho esta clase, más que nada por la participación que hubo por parte de los compañeros, muy activos ellos, mi clase anterior cada vez éramos menos hasta que solo quede yo xD , y pues es diferente no(?) Porque ya con tres cuatro personas más esto agarra más sabor xD, no y la verdad es que hasta te motiva para continuar.

A las profesora, hay que agradecerles el tiempo y las correcciones, aunque eran muy similares a las de las clases de generales xDD (jamás aprenderé a escribir bien u__u, ), me gusto mucho la actitud de la profesora Kya xD y las respuestas de Bel /o/ <<geniales>> y bueno, supongo que nos volveremos a ver por ahí no(?) entonces hasta pronto(¿).

Espero y mi aportación también les aya gustado <<o disgustado lo que sea es bueno xD>> y pues nos seguimos leyendou~

Tarea

Bueno aun no pido el cambio <<pensamos que primero tenían que revisarlo DD; >> pero aquí están alunas correcciones <<que creímos haber hecho xD>>

Sobre el Examen de vuelo <<aun esperamos respuesta>>

consejo regulador de escobas

De hecho tuve problemas <<nos confundimos>> pero creo que nomas hay que esperar <<Creemos>> xC

the Easter Bunny

http://i.imgur.com/ri5A6tj.gif

La búsqueda había iniciado ya, Sain había encontrado un Huevo con envoltura dorada que regalo a Bea para que se animara a buscar, y dando saltos de vez en cuando, busco Huevos por todos lados.

Camino por toda la sala, trataba de no sentarse o recargarce, para no aplastar ninguno, lo huevos podrían encontrase en cualquier lugar. Camino por los estantes llenos de libros y alguno que otro objeto que adornara y justo a un lado, una ramilla seca escondía unos huevillos de chocolate, difíciles de encontrar pues parecían parte del lugar.

http://i.imgur.com/wweRtBM.jpg

Siguió buscando y caminando, cerca de una rama se detuvo, tal vez para contemplarla o para ver que escondía, sin buscar mucho para no romperla deserto, pero justo abajo encontró un par de huevitos coloridos escondidos entre sus raíces.

http://i.imgur.com/Hi1ESlH.jpg?2

Feliz por los que había logrado conseguir, siguió buscando por ahí y cada vez encontraba huevitos diferentes...

Encontró huevos muy coloridos…

http://i.imgur.com/20im1Rh.jpg?1

Otros con diseños extraños…

http://i.imgur.com/uJYk4U1.jpg

Aunque eras sus favoritos…

Algunos muy chiquitos, que encontró solo por aquel brillo que emanaban sus hermosas envolturas…

http://i.imgur.com/uZ3RrLI.gif ~ http://i.imgur.com/uZ3RrLI.gif ~ http://i.imgur.com/uZ3RrLI.gif ~ http://i.imgur.com/uZ3RrLI.gif ~ http://i.imgur.com/uZ3RrLI.gif

Incluso encontró el Huevo perfecto para regalar al pequeño Argentus y a Lunatica….

http://i.imgur.com/B6wUqeJ.jpg

http://i.imgur.com/2YhGQpi.jpg?1

Aun que les dejaría escoger el que quisieran solo por si las dudas...

Entro a una de las habitaciones, y colgó un trió de huevos en la cabecera de la cama Mitzi, tal vez a ella le gustarían…

http://i.imgur.com/uwFxunH.jpg?1

Camino de regreso a la sala y encontró, justo en la mesita de centro, un adorno peculiar de un gato regordete, aunque pensó que solo se trataba de alguna estatuilla, pero al tomarla para observarla se dio cuenta, que se trataba de un huevito pintado.

http://i.imgur.com/gp00fvD.jpg

Siguió caminado por ahí, dando saltos de vez en cuando (cuando recordaba su disfraz de conejo) encontró huevos por lugares extraños, de muchos colores y diferentes tamaños….

http://i.imgur.com/k9YQG1l.gif

Y ya pasado un rato prefirió tomar un descanso, recostarse en la hierba fresca y contemplar sus huevos por un rato, pero al recargar su cabeza en el suelo sintió un par de piedras, voltio para ver de qué se trataba y de encontró un par más que casi aplastaba….

http://i.imgur.com/8Xjo0P2.jpg?1

http://i.imgur.com/h5vqRpd.jpg

Sain tomo todos los que se encontró y en su canasta los guardo, había juntado ya tantos que prefirió tomarse un descanso.

-<<Vaya que Bodrik se esmero en esto>>- pensó mientras contemplaba el huevito que mas le gustó.

http://i.imgur.com/3STrqYI.jpg

Off Rol:

<<Podemos hacer off rol aqui(?) DDD; >> Espero que si xDDD

Sabemos que así no lo habían pedido...pero me gustaba la idea xDD
See~

Pdd: perdón si las imágenes aturden un poco x3

La búsqueda de huevos, supuso Sain, era eso precisamente…Una Busqueda, por lo que no espero más a las instrucciones y aunque las jefas aun no terminaran de esconder los huevos, seguramente ya habían escondidos los suficientes para comenzar y Sain quería llenar su canasta para llevársela a Yuli y al pequeño peli azul con el que ahora vivía.

-Raw Raw~ - agito sus pequeños brazos en el aire – Soy un conejo podrido que quiere huevos de chocolate- gruño -<<aunque, no estoy muy convencido de que los conejos rujan>> tampoco creo que excitan conejos verdes <<y que busquen huevos>> o que coman chocolate <<y por qué no usas magia para buscarlos>> ¿no es trampa? <<¿Tu crees? Eres un conejo verde que mas da>>- se quedo inmóvil discutiendo consigo mismo.

El brillo dorado debajo de un esponjoso cojín color verde trajo a Sain de vuelta de su discusión mental, que eran comunes cuando pasaba aquellos largos ratos en la soledad de su casa, pero que habían cesado desde su llegada a Ottery, ahora por lo general tenia con quien discutir algún tema o a alguien o algo con lo que ocupar su mente.

Camino sin prisas hacia aquel brillante reflejo, quito el cojín verde que le cubría y encontró justo debajo un gran huevo con envoltura dorada. Los ojos de Sain, aunque tranquilo, brillaron con inocencia, el huevo se reflejaba en el cristal de sus anteojos y en su rostro rasguñado se le dibujo una sonrisa.

-¡Sira!- llamo a su sobrina sin dejar de ver el huevo aun –Creo…que encontré uno- dijo en un tono tranquilo.

Al voltear con Mitzi para enseñarle su huevo vio en la entrada a una joven muy familiar, por así decirlo, se trataba nada más y nada menos que de Bea Haughton, una de las gemelas con la que Sain compartía sus clases en la academia, Sain la miro por unos instantes, el rostro de la Haughton no parecía muy convencida de estar ahí.

-Haughton…- dijo después de que Mitzi le hizo una seña para que se animara a acercarse –Buscamos huevos de chocolate ¿Vez?- le mostró el huevo que tenía en la mano.

A pesar de tener un par de clases con la Haughton, le conocía muy poco, aunque consideraba que era una de las que más participaba le veía como una persona muy tranquila.

-Te puedes quedar con el- le entrego el huevo a Bea –pero tendrás que seguir buscando los tuyos- le sonrió guiñándole un ojo y giro sobre sus talones -Vamos Mitzi- exhorto a su sobrina -¿Como termina el juego?¿Que pasara cuando tengamos todos los huevos? -

Millicen Musck, una chica castaña, muy simpática a simple vista, fuerte y su primer contrincante en un duelo…bueno, casi oficial y que en aquel momento le estaba costando a Sain librarse de ella.

El duelo había comenzado hace poco, en opinión de Sain, ambas habían actuado bastante bien, pero sentía que no lo suficiente, el frió no era un obstáculo, por más que Sain se quejara de él, no era una excusa válida, tenía que pensar más rápido y con mas astucia. Al escuchar a la castaña mandar aquella docena de medias lunas, se dio cuenta de que su preciada araña, aun no había dado con su objetivo.

-Vamos linda...- susurro por la araña -¡Evanesco!- grito rapidamente después de que Millie pronuncio su hechizo, por suerte la docena de medias lunas habían desaparecido. Dudo por unos instantes esperando que alguna le impactara, pero no fue el caso, había actuado lo suficientemente rápido y es que ya había lidiado con un movimiento similar una acción atrás (el ataque con las cuerdas), tal vez Millie debió esperar un poco, para que de perdida a Sain se le olvidara aquel movimiento, pensó por un momento que Millie trataba de jugar con sus reflejos o su mente y que dejo pasar aquel movimiento, tan parecido, el cual Sain ya había lidiado con él.

EL plan de Sain parecía demorarse mas de lo esperado, pero no significaba que había fallado del todo, solo tenía que entretener a Millie lo suficiente, solo tenía que darle más tiempo a aquel animalito para que hiciera su trabajo.

Miro a Milli volverse sobre sus tobillos tan de repente y pisotear en el suelo sin piedad, entonces Sain se dio cuenta, la araña había logrado inyectarle su veneno a Millie ese era el momento, la oportunidad que esperaba con, ya casi, desesperación, era el momento adecuado para ejecutar su siguiente movimiento.

-Silencius- soltó claro y alto, pero con rapidez, estirando su brazo hacia Milli, como si intentara de que el hechizo funcionara más rápido, o por lo menos antes que el de la castaña.

“-Morph….- “ la boca de Millie había enmudecido nuevamente y la pequeña roca que apuntaba con su varita siguió siendo solo una roca.

Soltó un largo suspiro y solo vapor salio de su boca -Supongo que trato de hacer un antídoto- dijo entrecortadamente por el frió y con una mirada de preocupación, no quería ver a la castaña agonizar, solo terminar con esto y no se, tal ves después ir con Millie y Yuli a tomar alguna bebida caliente. Le miro esperando que diera alguna señal de que todo había terminado, de que el veneno de su araña había terminado con su contrincante y así correr a auxiliarle.