Casita Snape (MM B: 104851)

[Hayame Snape Potter Black]

Hayame avanzó hasta las cocinas de su casa todavía con expresión de estar pensando mientras que Czésar gruñía y murmuraba por lo bajo, acerca de las personas que traspasaban el territorio y que querían meterse a la casa; de vez en cuando el elfo doméstico miraba sobre el hombro como esperando a ver si el elfo más joven se pasaba por ahí pero al parecer este todavía no terminaba sus deberes y entonces, el elfo volvía a murmurar y a gruñir

No estaba de muy buen humor

-No, definitivamente no han venido a atacar la casa -dijo la Snape con calma mientras que caminaba hacia donde estaba Lisette con el bebé y se colocaba de cuclillas para comenzar a acariciar la cabeza del pequeñito, que emitió unos gruñiditos en sueños y medio abrió los ojos adormilado para ver a su madre -ya sabes cómo son estas cosas, a la gente no le interesa una vieja casita muggle y no por nada fué que hice esto, era con la idea de protegernos pero aún así...

[Kiyotaka Ayanokouji]

El mago acababa de regresar no había comido... No había nisiquiera peleado... Ni siquiera al momento de cruzar las praderas las plantas carnívoras ni siquiera quisieron acercarse a el... El mago sencillamente no representaba ningún signo de violencia

 

--Ahora puedo morir en paz--

 

Sin emitir ningún otro ruido el mago sencillamente se dispuso a derramar varias lágrimas de macho a medida que entraba en su tienda de campaña... Al fin había logrado su misión... Su ciclo había terminado... De la peor manera posible pero al menos su corazón al fin había saldado su cuenta... O almenos fue obligado a hacerlo de esa manera...

 

El mago llorando en silencio se dispuso a dejarse caer sobre su cama...

[Hayame Snape Potter Black]

El joven elfo que le había llevado de comer a aquella persona sacudió un poco las orejas y le miró con algo de sorpresa, mientras que ladeaba la cabeza y se asomaba un poco más a la tienda de campaña; parecía que el mago no le había visto llegar con la comida y la bebida para que pudiera alimentarse un poco y ahora se le veía algo decaído y triste, como si en el pequeño trayecto entre la casa y aquel sitio de descanso, hubiera pasado algo malo

-El ama Hayame le envía algo de comer y de beber, para que pueda recuperarse de su viaje!

Volvió a anunciarse el elfo y se atrevió a entrar un poco en la pequeña tienda de campaña para luego, ver un poco curioso los alrededores de esta aunque también estaba tratando de ser discreto; ya sabía que no debía de estarse entrometiendo en los asuntos ajenos pero le intrigaba al ser apenas un nuevo integrante de aquella familia y de aquella casa y no sabía si el recién llegado era familia o solamente una visita

Suponía que era de esas cosas que le iba a tener que terminar pregntando a Czésar, que ahora le guiaba, hasta que pudiera ajustarse plenamente a su nuevo trabajo

[Kiyotaka Ayanokouji]

-- Gracias elfito...--

 

Decía el mago cabizbajo, triste y bastante desilucionado de todo... Su último grano de felicidad finalmente se había muerto... Ni siquiera lo dejaron defenderse... Ni siquiera lo dejaron explicarse... Era tanto su odio?... Era tanto su dolor?... Que nisiquiera lo pudo recibir?

 

--Elfito ven siéntate a mi lado--

 

Decía el mago mientras se secaba sus lágrimas y respirando hondo... Necesitaba mantener la calma

 

--Dime algo tú crees que soy una mala persona?--

 

El mago sencillamente suspiro agarrando el plato de estofado al primer bocado comenzó a derramar varias lágrimas... El tener que renunciar a su último recuerdo feliz... Fue lo más doloroso que hizo en su vida y más porque nunca la pudo ver para decírselo de enfrente... En esta ocasión el no perdió nada a él se lo arrebataron de la noche a la mañana... A él nisiquiera le pidieron opinión, nisiquiera le dijeron algo solo la decisión estaba tomada y con la notificación fue más que suficiente... Pero aún así jamás se atrevería a odiarla...

Editado 17 de Octubre del 2019 por Sherlock Holmes

[Lisette Ryddleturn]

En el interior de la casa de los Snape, la chica se había puesto sumamente nerviosa cuando había escuchado que había alguien en la puerta y la mirada de la chica pelirroja solo había hecho que la tensión creciera más

Habiendo sido novias por largo tiempo, cuando veía como la actitud de Hayame cambiaba sabía que algo estaba por suceder o que quizás todos tenían que tener cuidado

Y solo en esos minutos le había visto tres cambios de ánimo muy rápidos que iban del enojo cuando había llegado del sótano, a la melancolía, a la depresión y luego, a la alerta tensa

Al tiempo y cuando hubo terminado de atender sus asuntos la dejó tomar de regreso a su pequeño bebé que parecía que estaba empezando a despertar por todos los mimos que le daba su mamá

-Quién es la persona que está afuera, Hayame?

Le preguntó la Ryddleturn quedándose sentada en su silla y levantando un puño cerrado para mostrar preocupación mientras veía que Czésar se molestaba y murmuraba muchas cosas

-No han venido realmente a atacarnos, verdad? porque ninguna de nosotras ha hecho nada malo y hasta donde sabía solamente las personas con las que te juntas atacarían una casa familiar como esta

Sabía que eso tal vez podría molestar a la mujer pelirroja pero tenía que decírselo al final

[Hayame Snape Potter Black]

Elfo

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La pequeña criatura observó a aquella persona con un poco de extrañeza y confusión porque no estaba acostumbrado a que lo empezaran a tratar de aquella manera; aunque bueno, ahora que servía a otra casa las personas en esta lo trataban y lo tenían como uno más de la familia y lo incluían aún y con las órdenes que le daban y había notado que incluso a veces hasta se disculpaban si se equivocaban en algo o terminaban por ofenderlos

Justo como lo que harían con cualquier otra persona y eso lo ponía nervioso al ser tan nuevo para él pero al mismo tiempo, era una sensación agradable

Pero en esos momentos el otro mago parecía que estaba triste o desanimado así que, imaginó que aquello también era parte de su trabajo así que sostuvo mejor la bandeja con los alimentos y la depositó a un lado del hombre; unos momentos después se inclinó a modo de agradecimiento y se sentó al lado del mago, con las pequeñas manitas entre sus rodillas y miró confundido al hombre que hablaba

-No sabría decirle, señor

Dijo el pequeño elfo comenzando a mover las orejas

-No creo que el señor sea un mago malo pero Julius tampoco lo conoce, en realidad, apenas estoy conociendo a todas las personas en este sitio, Julius es nuevo, señor -confesó el pequeño elfo comenzando a mover las pequeñas piernas para mecerlas

[Kiyotaka Ayanokouji]

El mago sonrió levemente y le acarició la cabeza ah elfito lo comprendía... Cambiar una vida a la cual estaba acostumbrada por otra completamente nueva... Entonces el mago le indico que se podía retirar de la tienda... Necesitaba estar solo.

 

--El mundo es injusto... La vida es una completa sin vergüenza y el destino es el mejor troll de internet de todo el mundo...

 

Cosa que el mago se dispuso a comer... A decir verdad no tenía hambre... Pero sabía que no podía volver a entrar a ese pozo de tristeza... Su último signo de alegría había desaparecido...

 

--Has no tengo motivo por el cual quedarme aquí...--

 

Cerrando un momento los ojos el mago comenzó a tener pesadillas... Pero irónicamente eran sus mejores recuerdos... El mago... Se despertó gritando para momentos después volver a llorar... Su corazón había muerto y ni siquiera sabía cómo brindarle un luto adecuado...

 

--Solo me queda una cosa que hacer--

 

Sin decir más el mago suspiro y sacando su varita se la apunto a si cabeza dónde comenzó a extraer un hilo grueso de plata... El dolor era inmenso... El mago solo podía gritar!! El mago se estaba extrayendo los recuerdos dónde en un último suspiro los guardo dentro de un frasco...

[Lisette Ryddleturn]

La bruja todavía no recibía una respuesta por parte de su amiga pero de todas maneras se le quedaba viendo como si en cualquier momento esta le fuera a responder

Pero no creía que aquella persona fuera peligrosa o la bruja no le permitiría quedarse en los jardines, de lo que conocía a Hayame era muy estricta en ese sentido

Y sabía que la Snape jamás permitiría a otra persona el estar cerca de su familia o de su bebé que tenía pocos meses de haber nacido, si sintiera que fueran a atacarlo

Permitió que la madre de este lo alzara entre sus brazos y eso permitió que la chica rubia también se pudiera levantar de su silla, sonriéndole un poco con ternura a su ex novia

-Yo creo que el pequeño Severus está bastante feliz siendo cargado por tí, sabes?

Dijo la bruja con una sonrisa, cruzando sus manos por delante de su delantal y con gran ternura cuando le pareció percibir un grito en el exterior y eso la hizo voltear bastante asustada

-Qué fue eso?

[Hayame Snape Potter Black]

Elfo

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La criatura escuchaba con atención a aquel mago e intentaba comprender qué era lo que estaba pensando o qué quería hacer, como para haber ido hasta la casa de los Snape para buscar donde quedarse; por lo general las personas evitaban aquel sitio tan solo por saber que la hermana de Sagitas vivía en ese sitio y no solía tener muy buen humor para la gente, sobre todo si los consideraba que eran un riesgo apra su familia o para su estilo de vida, al menos por lo que el viejo Czésar le había contado cuando le hubieran hecho espacio en la servidumbre después de haberle salvado la vida en aquella ocasión

Así que pensaba, que aquella llegada era un buen cambio y se sentía muy interesado en ver cómo reaccionarían con el tiempo y con aquel nuevo inquilino en su patio delantero

Pero Julius ahora parecia algo nervioso por el cambio de actitud en el mago, que si bien ya estaba triste ahora lucía mucho más deprimido así que inmediatamente, se bajó de donde le habían invitado a sentarse; unos momentos después se inclinó ante la petición del hombre de que lo dejasen solo y comenzó a andar hacia la salida de la tienda de campaña colocada entre el verde césped y las rosas negras que adornaban alrededor de la pequeña casita

-Si el joven necesita cualquier cosa, el señor siempre puede llamar a Julius, Julius tiene la órden de atenderle mientras esté aquí

Indicó el elfo con su voz chillona y jóven antes de volver a inclinarse y retirarse por un tiempo, todavía preocupado por la cara que le había visto a aquel hombre y lo que había estado diciendo; los elfos tenían un sexto sentido para ciertas cosas así que no se sentía demasiado cómodo dejandolo solo

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Un rato después, el elfo regresaba corriendo velozmente con los ojos muy abiertos, mientras se asomaba solo un poco sin entrar del todo a la tienda, con miedo y mucha preocupación; todos habían escuchado el grito que había dado aquel hombre y al menos él, había salido disparado a ver si algo había pasado o si había ocurrido justo un ataque en los terrenos de la casa

-Señor, se encuentra bien? -le preguntó el elfo intentando no ser un entrometido pero de todas maneras, bastante preocupado por el otro

[Lisette Ryddleturn]

Mientras su familia reaccionaba a los gritos que habían escuchado, la bruja se había sostenido el vestido y el delantal para salir de la cocina rápidamente

Pasó por el largo pasillo hasta la puerta de salida de la casa y por unos instantes se quedó quieta, dudando acerca de salir de la casa por si acaso era demasiado peligroso

Movió la tela que cubría el cristal de la puerta para asomarse al exterior y estar segura de que no había nadie esperando para agredirlas y finalmente su expresión se volvió seria y apretó la varita

Abrió la puerta y salió al exterior y pudo ver como el elfo nuevo de la familia salía disparado en dirección de la tienda de campaña donde estaba la persona que había llegando pensando que la casita Snape era una posada

-Espera!

Le pidió al elfo pero este ya se había adelantado y la Ryddleturn se agarró mejor el vestido y la varita y salió corriendo detrás de él por si acaso necesitaba ayuda

Cuando al fin llegó cerca de la tienda pudo escuchar los sonidos que salían de esta y su preocupación se volvió todavía más grande, quizás debería de haber esperado a su ex novia para que también ayudase

-Está bien allá adentro?

Le preguntó en pequeños susurros al elfo sin atreverse a asomar mientras se agachaba de cuclillas para estar a la altura de la pequeña criatura mágica