Lisette Ryddleturn

-Es horrible pero usted sabe que siempre las cosas son así cuando uno está en la guerra y pertenece a una institución como lo es el Ministerio, donde también los magos son una especie de soldados Dijo la elfina que había estado cuidando hasta ese momento a su ama y que ahora levantaba una pequeña mano para pasarla por entre los cabellos y la cabeza de esta -Hay heridas y pérdidas todos los días, parece que entre los magos la muerte ya fuera una cosa natural sin importar como venga y que todos tienen que hacerse a la idea de ella Dijo pensando que de hecho era impresionante como a pesar de todo a los magos se les consideraba como uno de los seres con vidas más longevas entre las criaturas de la tierra -A veces ustedes los magos no tienen idea de la gran suerte que tienen, viven mucho tiempo y han encontrado la forma de defenderse de una manera que los otros seres mágicos no podemos Dijo quizás con un poquito de decepción

La bruja había dado un salto de asombro por el llamado de Sagitas, se notaba que estaba bastante angustiada por el hecho de haber perdido a su hijo de esa manera y de pronto No podía imaginarse lo que era perder un hijo así, ella nunca había tenido hijos así que no sabía si había alguna forma en que pudiera compartir ese dolor para que no estuviera tan sola Se sentía algo mal y miserable de que no pudiera hacer nada al respecto más que pensar en la mejor forma de apoyarlos, yendo con todos los demás a buscar a su director -Muy bien, entonces si alguien quiere ayudar que solo se quede una persona por equipo internacional y eso también ayudará a que se manden informes por si ven algo en cualquier otro lugar Dijo la rubia esta vez mirando en dirección de los equipos que ella misma había ayudado a llegar al Ministerio y esperando que alguien aparte de los americanos se animara a ayudarlos

La bruja rubia ahora abría la boca con impresión y seguramente que ahora tenía el aspecto de una especie de bacalao al que habrían sorprendido al sacarlo del agua Y es que estaba dividida entre la impresión de las dos cosas que en pocos instantes, habían venido a su conocimiento y a su visión por lo que no sabía cuál poner primero La enorme casa gigantesca, que le hacía recordar a las mansiones de Sagitas que también eran muy grandes pero al menos las italianas no las había visto de primera mano Y por otra parte, lo de las sirenas de cabello de diferentes colores que era algo que tampoco se hubiera imaginado que podía existir, esperando que todos pudieran ver una Aunque ella no hablaba sirenio así que tendría que dejarle todo el asunto de la comunicación a Sagitas que se suponía que iba a ese sitio por ser la experta del momento -En verdad nos quedaremos en toda una planta? parece que no pudieran impresionarme más, esta casa es grandísima!

La bruja comenzó a ponerse nerviosa por como habían comenzado a hablar todos ellos acerca de que iban a comenzar a dividir sus investigaciones al respecto Realmente se sentía muy curiosa acerca de la mujer que habían apuntado antes pero al parecer también aquello había sido un punto para que fueran a diferentes sitios También lo había escuchado de cómo las cosas podían ser diferentes y cuando sintió la mirada de la otra muchacha asintió con la cabeza, dejándola saber que sentían lo mismo -Yo también voy con ustedes, me siento con una sensación involucrada con el pobre elfo y quiero saber quién estuvo detrás de acusar a todos nuestros departamentos Les dijo a las mujeres y se acomodó la ropa para dejarles saber que estaba dispuesta a partir tan pronto como les dieran las indicaciones de que era momento de moverse

La bruja se encontraba ayudando a la otra para que pudiera salir de aquel lugar aunque se notaba que estaba teniendo problemas para poner un pie detrás del otro La hizo sentar sobre una roca mientras seguían de camino al bunker donde esperaba que todos los demás estuviesen mejor y entonces, sacó la varita y le apuntó -Puede que sientas un poco extraño pero creo que has aspirado mucho humo y además, aquel sujeto realmente se estaba aprovechando de que estabas en problemas Dijo la bruja rubia mientras que empezaba a lanzar unos pocos hechizos más para ayudar a que la bruja pudiera otra vez tomar fuerzas para ponerse de pie y caminar -Vamos, ya falta poco para que lleguemos y entonces podremos irnos todas juntas de regreso al Ministerio de Magia, sé que tus otras dos compañeras estarán bien y podrán encargarse de todo

La bruja rubia había seguido como le habían indicado a lo que sería lo que parecía ser la prueba final de aquel libro donde tenía que poner en práctica los hechizos Estaba muy nerviosa, no era buena para los hechizos y eso lo sabía de siempre pero se iba a esforzar en dar lo mejor que tenía para salir adelante en las tareas que le pusieran En ese caso, se trataba de un duelo lo que la hizo tragar pesado pero iba a intentarlo, no estaba de más aprender un poco para no salir tan mal parada en aquella guerra sobre sus cabezas Especialmente después de ya haber sido atacada tantas veces, comenzaba a darse cuenta de que tenía que ser un poco más rápida en sus reacciones y le faltaba mucho de eso Y no quería tampoco regresar a casa tan herida, había visto como sus demás parientes iban bastante lastimados cuando salían de sus propias lecciones y eso la ponía nerviosa Era un alivio sin embargo el poder ver que la maestra en esos momentos entendía sus nervios y lo estaba tomando con calma, lo que la hacía sentir un poco más segura de intentarlo -Entendido y muchas gracias por enseñarme estas lecciones, realmente se salen de lo que estoy acostumbrada y espero que me ayuden en un futuro Agradeció dejando sus cosas como se lo habían indicado y parándose en la marca que le habían indicado, acomodándose para lo primero que le encantaría su maestra SALVAGUARDA MÁGICA Recordaba que para hacer aquel hechizo no tenía que hablar así que agitó la varita para que aquella magia la pasara de largo y no le hiciera heridas grandes Sonrió, estaba fascinada de ver que aquel encantamiento era bastante útil, algo que le podía servir también para su vida diaria y si tenía que escapar de algo Se había emocionado y sus ojos se iluminaron al ver lo que podía hacer y vería si podía probar los demás hechizos, uno a uno y con calma porque tenía que probar el de curación también O eso recordaba, había preguntado a todos en la familia cómo tenía que tomar aquellas lecciones y las pruebas y todos le recordaron que lo importante, era lo que contenía el libro Que tenía que mostrar que si lo había leído y lo había comprendido para poder pasar la clase tranquilamente y que todo estaría bien, que no se asustara -AVIS Ordenó mientras sacudía la varita para que doce pequeñas palomas blancas salieran de la punta y comenzaran a volar en dirección de la maestra que tenía a unos metros -Vuelen alrededor de ella para que no pueda apuntar bien Les ordenó recordando que solo podía darles una órden y esperando que eso pudiera servir para poder protegerse de los hechizos que le fuera a arrojar después

Lisette tomó aire profundamente, todavía bastante nerviosa por el ataque que había recibido y que no se había esperado en lo absoluto, la había tomado completamente desprevenida Se pasó una mano por el pecho para calmarse ella sola pero la tranquilizó ver que la maestra que tenía delante tampoco estaba tomando mal que se hubiera asustado por lo que había pasado Se había sentado otra vez y había movido la cabeza de forma afirmativa para aceptar la taza que le estaban ofreciendo dándose cuenta de que no era un acto de mala fe Era la segunda vez que trataba con profesores después de haber dejado Hogwarts así que estaba algo tensa por como debía de comportarse frente de ellos Aunque no era del todo verdad, había llevado las clases de conocimientos y ahí también había tenido profesores pero estos no la habían atacado para probar los hechizos -Muchas gracias Le dijo a la maestra y entonces se sentó y comenzó a beber un poco, sorprendiendose por los sabores que tenía aquella bebida, era un poco más fuerte de lo que había esperado Incluso le había picado la nariz por las especias que le habían añadido y dejó el resto a un lado por el momento, no se parecía en nada a lo que hubiera bebido antes -Sí, así es. Cuando leí el primer libro me pareció que ayudaría bastante en las labores de mi pueblo natal pero no quería quedarme solamente en el libro más basico Le fué explicando mientras movía un poco las manos como si con ellas hiciera unos pocos ademanes para que supiera que sí se estaba tomando en serio la clase -Pero avanzar también ayuda por si pasa cualquier cosa... creo recordar que eran tres amuletos o anillos, uno para eliminar plagas, otro para entender las emociones de los animales y el otro para no caerse muy duro si hay un accidente Comenzó a enumerar tocandose la punta de los dedos mientras intentaba recordar bien cómo era que funcionaba cada uno de ellos -Últimamente desde que llegué a esta ciudad tengo más animales en mi nueva casa así que es de gran utilidad y bueno, también he tenido pequeños accidentes donde planear en el aire evita que me pegue muy fuerte Tomó aire otra vez y miro con preocupación a la maestra que le estaba enseñando en aquellos momentos -Todos los libros son siempre para atacar a los demás? los demás libros de estudio no se parecen en nada al primero?

La bruja solo sonrió a lo que decía la profesora y bueno, suponía que la profesora era de las personas que le gustaban meterse en problemas y por eso pensaba en lo que pasaba en las peleas Ella era de vida más tranquila aunque su familia no lo fuera y las únicas veces que había tenido que pelear por su vida, nunca le habían arrojado el hechizo cambiante Por el contrario, le había servido tener la ropa larga por que habia conseguido rasgar tiras de tela como su madre le había enseñado para curar las heridas de los demás Pero no estaba ahí para discutir de esas cosas con su maestra, cada una tenía sus ideas y lo que le interesaba era aprender la clase por avanzar un poco más -Para usar los Oidos Indiscretos en específico Pensó la chica por unos momentos mientras se imaginaba todas las pláticas que había estado teniendo con su familia y que no le gustaría que fueran escuchadas -Creo que como estamos en guerra lo usaría casi todo el tiempo porque no me gustaría que las personas malas me escucharan hablar con las personas importantes para mí Pensó de forma detenida porque era verdad, ya los habían perseguido muchas veces y no quería tener más confrontaciones o preocupaciones en esos momentos -No quisiera que ninguna de las personas en la familia se pusiera en riesgo si alguien más escucha nuestras conversaciones así que es una buena protección para eso Comenzó a pensar otra vez en lo que la maestra estaba diciendo porque le había pedido otra situación en la que podía utilizar el otro hechizo que venía en el libro -Bueno, dado que tengo mucho trabajo de campo supongo que podría utilizarlo si algún animal pierde el control y está el peligro de que pueda arrollarme Dijo pero también estaba pensando en una situación en la que pudiera estar en la casa y entonces, le fuera a caer un librero encima, ese hechizo podría ayudarla a no salir lastimada -Ay! La profesora le había dado un uso a ese hechizo porque la había atacado sin previo aviso y como recién había tenido que hablar del salvaguarda mágica, entonces usó ese mismo para que no le pegaran esos hechizos -Pensé que no iba a atacarme sino hasta que tuviera que pasar a la parte de pelea de la clase, pero no esperaba que quisiera poner un ejemplo de ese hechizo Le dijo comenzando a frotarse el pecho preocupada porque se había llevado un susto muy grande y todavía estaba temblando del nerviosismo por haber sido atacada tan de repente

La bruja se quedó mirando a su profesor cuando este hizo un comentario acerca de las ropas que ella llevaba en aquellos momentos y le recalcaba lo de ropa cómoda para el trabajo Suspiró pacientemente y comprensiva, las personas de las ciudades tenían una idea muy diferente de lo que era la ropa cómoda de trabajo y fácil para los demás En su caso, ella provenía del campo y las mujeres como ella solían usar aquel tipo de indumentaria para todo, desde el trabajo duro con la tierra hasta para la montura -Esta es mi ropa cómoda para trabajar, de cuando vivía en mi hogar y también la utilizo para trabajar en el ministerio. Me imagino que por eso lo dice? Respondió con calma a aquel profesor, recordandose justamente eso, que él probablemente tenía la idea de las personas citadinas que no era la misma a las suyas pero eso estaba bien, estaba aprendiendo ella sobre las costumbres de los magos de ciudad -Es lo que usamos en mi pueblo mágico para todo tipo de trabajos, es útil y versátil para correr, movernos e incluso, para trepar y montar a las bestias si lo necesitamos Terminó de explicar y ladeó poquito la cabeza hacia un lado, ahora escuchando lo que decía aquel profesor acerca de la lección que estaba por iniciar Por unos momentos se distrajo mirando la poción en la que trabajaba y que le recordaba en mucho a su casa y se preguntó qué estaría haciendo la familia en aquellos momentos -Supongo que utilizaría una combinación entre el anillo detector de enemigos y el anillo de escucha Dijo la bruja después de pensar por unos momentos en la pregunta que le estaba planteando aquel maestro sobre lo que haría en una situación de riesgo real -El anillo detector de enemigos avisaría a ciencia cierta si realmente hay algo de lo que deba de preocuparme y con el de escucha, podría saber quizás si es más de uno Pensó que bueno, si eran más de un enemigo quizás se estarían comunicando de alguna manera y el otro anillo podría hacerla escuchar si no eran de la familia

La bruja llegó al sitio bastante preocupada ya que aquella iba a ser la primer clase que fuera a recibir de cualquiera de los libros de magia a los que comenzaba a tener acceso Anteriormente no se había sentido con animos de intentar llevar sus estudios un poco más lejos, quedándose en la comodidad de su hogar y con lo que ya había conseguido en el colegio Pero su familia la había animado a que si bien, las clases eran un poco más complicadas mientras que avanzaban y que además eso la ayudaría con el sistema de batallas Al final eso había conseguido que bueno, intentara ver si tomar una clase más, dar un paso más realmente no era para temer y se había inscrito para estudiar el segundo libro Había recibido la carta en la casa de otra persona de la familia pero estaba muy asustada y nerviosa, siendo al final la última en partir de la casa de la familia Pero les había asegurado que volvería pronto y había recibido animos de su hermano mayor que la estaría esperando a su regreso para saber cómo le había ido Finalmente había llegado a donde estaba la persona que le enseñaría sobre el libro de la fortaleza y se había sentado en el tronco que parecía que estaba delante de la maestra -Recibí su mensaje de que tenía que venir con usted para comenzar con los estudios referentes al nuevo libro que he comprado, es mi primera vez estudiando así Nunca había visto a una persona como ella ni había recibido clases en un lugar tan caliente que comenzaban a dolerle un poco la cabeza pero se aguantó el dolor Le explicó mientras se acomodaba la enorme falta del vestido y esperaba a que comenzaran las clases, poniéndose el pesado volúmen sobre el regazo

Lisette también se veía animada por ver que Ashley comenzaba a tomar parte en todo aquello, era bastante revigorizante tener a las chicas dispuestas a luchar -No soy buena para las peleas, ya lo sabes pero al menos quisiera intentar defender este negocio, me agrada venir aqui incluso cuando está tranquilo Dijo pero entonces le parecía que algunas de aquellas bestias comenzaban a golpear con bastante fuerza los vidrios exteriores lo que la hizo saltar con los ojos abiertos -Aunque quizás Ashley tiene razón y deberíamos de colocar algunas llamaradas por fuera para evitar que cualquiera de esos monstruos quiera meterse Dijo y se frotó los brazos con nerviosismo para luego sacar la varita y comenzar a hechizar las ventanas, seguramente ya estaban reforzadas pero dos hechizos más nunca estarían de más

-Creo que está bien Le dijo Lisette a Hayame y le sonrió, intentando verse un poco más animada mientras que notaba como la bruja de cabello rojo que se había acercado, seguía viéndose preocupada -Estaremos bien, somos tres personas que estamos atentas por si algo pasa y quizás Sean quiera unirse de repente en algún momento y ya seríamos más Dijo y luego ella misma sacó su varita de uno de los bolsillos de el delantal que tenía por encima de la falda de su vestido y solo cerró los ojos por unos momentos El aire frío que las rodeaba de repente se estaba volviendo muy violento y los árboles que las estaban rodeando se volvían cada vez mas siniestros y amenazantes -Siento que nos están viendo desde los árboles... temo que pudieran comenzar a seguirnos, si es que nadie lo ha hecho ya a estas alturas, tengo que admitir que me asusta

-Entonces estoy de acuerdo, si crees que puedes crear algo rápido... lo que sea que nos proteja, entonces haré lo posible por ver si encuentro algo en el camino Aseguró temblando un poco pero con expresión segura y decidida, sabiendo que querría ayudar dentro de todo lo posible para que todas sobrevivieran a aquel horror Casi podía sentir los deseos de aquella pintura de matarlas y tragó pesado, pero estaba decidida a que todas saldrían adelante y ella misma combatiría si lo necesitaban Ya había comenzado a hacerlo cuando entrara a trabajar con toda su familia a pesar de que ella nunca había sido del tipo de brujas que luchaban contra nadie Pero la situación se lo había exigido, llevándola a límites que no se conocía y encontrando una fuerza en su pecho que no creía verdadera pero que ahí estaba -Vamos entonces Dijo y comenzó a caminar, abrazando el brazo de Alessandra para ayudarla a moverse a través de ese paraje con cuidado porque todavía no sabía si se había lastimado

La bruja suspiró aliviada ya que parecía que Alessandra se encontraba bien y no se había hecho daño al momento de caer en aquel páramo ahora gris y frío Pudo escuchar también los aullidos de los lobos, ya no sonaban como los preciosos cachorros que habían visto que jugueteaban al inicio cuando se mostraron la pintura Quizás por eso era que se habían escondido y perdido de la vista de las brujas, porque a final de cuentas resultaba que eran algo para atraerlas al interior? -Crees que en verdad esas cosas vayan a matarnos? no trajimos ninguna poción para defendernos, qué vamos a hacer si alguno de esos lobos nos muerden? Le preguntó a la bruja mostrando que en verdad se sentía preocupada mientras que se acercaba una mano a los labios, pensando en alguna solución que pudiera ayudarlas

Dentro del coche la bruja podía sentir como este se iba moviendo rápidamente y se bamboleaba de vez en cuando por los esquives a los coches muggles Por instinto sentía que su familia estaba preparada para cualquier cosa que les tuviera preparada aquel viaje y por unos momentos se olvidó del miedo que sentía En su lugar comenzó a emocionarse, realmente nunca había visto de frente a una sirena real ni a una de las bonitas así que el pensar en poder tener a una delante la emocionaba -Querida Sagitas, te pidieron a tí venir de primera fuente por que tu sabes mucho acerca de criaturas mágicas, dime, es cierto que las sirenas de este sitio son hermosamente rubias? Le preguntó ya que en cierta forma a ella siempre le habría gustado pensar que podría transformarse en una sirena y por un instante se preguntó si la animagia podía conseguir eso

Camino al bosque del circo Al final habían decidido que lo más seguro era permanecer en la casa de seguridad hasta tener noticias de los demás pero ella se había sentido demasiado impaciente Aquella persona le hacía sentir demasiado desconfiada y temía que hubieran terminado persiguiendo a Ashley o a Hayame, aunque ella había dicho que se encargaría del asunto -Tengo que saber que estarán bien así que iré a buscarlos pero si siento algo sospechoso, no vendré aquí directamente, no tienen de qué preocuparse por eso Les aseguró a las personas que estaban ahí para proteger a las mujeres a toda costa y que realmente no querían dejarla ir a donde se encontraba su familia Así que después de varias indagaciones le habían dicho lo obvio, que iría a buscar a Sagitas y el sitio más seguro para Sagitas como siempre, era su amado circo -Hayame! Intentaba llamarla con las manos a los lados de la boca mientras entraba en las extensiones de aquella especie de bosque refugio y parque, el parque de las lamentaciones

-Tal vez deberíamos de ir al propio Azkaban para que averiguemos de una vez por todas qué es lo que están haciendo en aquel lugar a las espaldas de todos Dijo de repente la bruja mientras que veía como la mujer de cabello rojo se iba alejando y esperaba que de alguna forma, hiciera un poco más que creer solo en sus palabras Esperaba que alguna de las otras dos pudiera decir algo que pudiese ser tomado como un consejo, como algo que se alejase de un pedido de ayuda por parte de ella Al menos ella se sentía bastante perdida muchas veces, sintiendo que no podía hacer nada para ayudar a aclarar aquel misterio que los tenía a todos de cabeza -Si no debemos de preocuparnos por nada, Azkaban debería de encontrarse tan vacío como siempre pero si hay problemas entonces... justo eso será lo que recibamos al llegar

-Estoy de acuerdo Dijo la bruja mientras que veía como la mujer pelirroja comenzaba a salir de aquella casa y todo lo que estaba alrededor de ellas parecía fallecer repentinamente A veces los hogares cambiaban bastante de cuando tenían personas a cuando estas tenían que alejarse pero definitivamente, el saber que había un corazón ahí era suficiente Solo quería poder regresar en algún momento en que ya todo estuviese arreglado y las personas ya no se sintieran tan tensas al respecto de aquellas votaciones tan extrañas Hasta donde sabía, ya nadie hablaba bien de las elecciones que se habían dado y los pocos que lo hacían, no lo hacían precisamente como si fuera algo positivo -Crees que la mansión Dumbledore pueda guardar ese secreto? honestamente, tengo miedo de que entremos en aquel sitio y nos encontremos dos cadáveres en el suelo

Departamento de Accidentes Lisette se viró y apretó la mano de la pequeña elfina con cariño, sonriendo todavía con emoción y adelantándose a lo que sonaba como un evento hermoso y que todos recordarían -Ah! entonces se encuentra a distancia, pensé que estaría aquí mismo en el Ministerio Dijo sorprendida pero era obvio, si estaba planeando hacer algo en general no iba a delimitarse por lo que era el ministerio y su pequeñas oficinas que no daban oportunidad a nada -Está bien, la aparición me parece bastante buena porque de esa manera también vamos a poder trabajar mucho más rápido y tener todo listo para la fecha que Anthony quiera Dijo y se aferró bien a la mano de la elfina pero asegurándose de que no iba a lastimarla, a veces los magos se olvidaban de que los elfos eran mas pequeños y les hacían daño -Se me ocurre asegurarnos de que la ruta esté bien marcada, para que se entienda el festejo y todo sea claro para los magos... puedo imaginarme la calle de la ruta con adornos colgando! Dijo aunque debía de esperar a comentarle sus ideas a Anthony, ya quería comenzar con los preparativos y podía ver pasar en su cabeza las imagenes de todo Y por supuesto, decoraciones que no solo atrajesen a los adultos sino a los pequeñitos que también impulsarían a sus padres a asistir al festejo por supuesto

Departamento de Accidentes La bruja rubia sonrió con agrado y mucha ternura a la elfina que se había acercado a ella, le estaba dando mucha ternura y le recordaba a sus propias elfinas en casa Siempre se sentia encantada por las elfinas femeninas que sentía que tenían un poco más de tacto y mucha fineza para ciertas cosas, ya que su experiencia con los varones era un poco tosca O quizás era porque solamente conocía al elfo doméstico que le pertenecía a la que había sido su novia y él ya era anciano y bastante gruñón lo que lo hacía más hosco con la gente -En verdad desea mi ayuda? Preguntó quizás con mucho más entusiasmo para luego, recordarse que tenía que tranquilizarse y no sobre emocionarse o eso podría quizás asustar a la pobre elfina -Es un placer conocerte Tami, eres verdaderamente encantadora y debo de decir que me gusta mucho el pequeño vestido que llevas en estos momentos Halagó y sus ojos se iluminaron con cariño antes de ella misma hacer una pequeña inclinación suave y educada hacia aquella elfina -Mi nombre es Lisette Ryddleturn, del pueblo mágico de Westown, es un placer conocerte Aseguró cerrando los ojos mientras colocaba la punta de los dedos por delante de sus labios y volvía a sonreír con el agrado de presentarse ante la elfina -Entonces, vamos a hacer una cabalgata de los reyes magos? Le preguntó con los ojos claros brillando y se acercó a la elfina para seguirla a donde tuvieran que ir -Adoraré y voy a considerarme honrada de poder ayudar con lo que sea! me se algunas historias sobre los magos muggles y algunas de los magos mágicos, con cuáles vamos a trabajar? Le preguntó, no podía creer que alguien de fuera del departamento hubiera decidido pedirle ayuda y estaba decidida a asegurarse de que esa persona no tuviera nada de qué arrepentirse

La bruja decidió que no podía decir nada al respecto, aquella noche ya era demasiado extraña y no quería empeorarla con algún comentario fuera de lugar Se cubrió los hombros un poco mejor mientras que aquella noche aún resonaba en el exterior de aquel refugio con su fría lluvia que amenazaba sus cabezas No creía que pudiera comprender como era que todas habían terminado perdidas en medio de un bosque, solo por querer buscar la manera de poner otro local Se quedó mirando a la bruja hasta que desapareció detrás de la puerta, pensando que a final de cuentas la vida nunca era algo que podría predecirse con toda seguridad -Espero que puedas encontrar a Ash pronto Dijo la bruja en un tono de voz bajito mientras que su elfina hacía aparición y se inclinaba, mirando como su pobre niña temblaba un poco aún sintiendo frío

Un fuerte grito se escuchó a la distancia, al parecer venía desde la enorme entrada principal del negocio y la rubia volteó con alarma pensando que quizás se había metido uno de los monstruos Pero parecía que afortunadamente no era eso lo que estaba sucediendo pero de todas maneras los gritos que se estaban dando a la distancia no solamente habían hecho voltear a la Ryddleturn Aquella fea criatura de nieve y de extrañas espinas de hielo también parecía haber girado la cabeza con algunos de sus compañeros, intentando adivinar de dónde venía el sonido -Hay que ir a avisarle a Hayame enseguida para que cierre bien las puertas de entrada y esas cosas no puedan meterse al negocio, antes de que puedan hacer verdadero daño... vamos! Dijo Lisette poniéndose de pie al tiempo que lanzaba un hechizo para tapar las vistas externas al interior de aquel edificio y tomando la mano de Ashley, corrió hacia la gran entrada de ese negocio

-Ya viste esas cosas? son enormes y parece que están buscando a alguien a quien devorar, pensé que solamente los demonios que tenía en casa hacían esas cosas! Le dijo a Ashley mientras que finalmente recuperaba el habla después del susto que había sentido al ver aquellas cosas que todavía rondaban el lugar No se imaginaba lo que podría ser si acaso algun cliente por ingenuo y por no ver aquellos monstruos decidía aquel día acercarse al negocio buscando atención -Crees que Hayame ya los haya visto? necesitamos hacer algo para que la gente se mantenga alejada de este sitio y no se los vayan a comer esas cosas Le dijo a la otra niña rubia y se giró sobre las rodillas para volver a asomarse por la orilla de la ventana para poder ver a las criaturas, y una parecía que trataba de acercarse al cristal

Dejó escapar un pequeño y corto grito muy agudo debido a lo que lograba ver del otro lado de la ventana pero inmediatamente se cubrió con fuerza la boca Un momento después se giró para recargarse en uno de los muros a los que recién había hechizado con una expresión de absoluto terror mientras que la boca se le ponía seca Con la cabeza comenzó a hacerle señas a Ashley para que ella no fuese a gritar si veía a una de aquellas criaturas que andaban por el exterior como si quieran cazarlas Era horrible, primero habían sido demonios y ahora parecía que una especie de monstruos diferentes también iban detrás de ellas sin que pudieran hacer nada para evitarlo Respiró profundo y se deslizó despacio hacia el piso, intentando pensar rápidamente qué era lo que tenía que hacer a continuación ahora que había visto esas cosas

La bruja observó con agrado como el líquido que se había comenzado a acumular en el interior de las ventanas se resbalaba inmediatamente después de que pusiera el impermeabilizante Eso era bueno porque el agua solía hacer que se mantuviera el frío pero ahora no se iba a quedar sobre las ventanas y por el contrario, había comenzado a vaporizarse por el calor Y no solamente eso, también la nieve por fuera en cuanto entraba en contacto con los cristales calientes se derretía y caía, repelido por el hechizo que había arrojado -Mucho mejor, ahora también entras las luces del día pero de todas maneras y por seguridad colocaré un polarizado externo para que nadie pueda ver de afuera hacia adentro Dijo y se acercó hacia la ventana que ahora relucía transparente y pristina, para ver hacia el exterior y asegurarse de que todo el sitio estuviera protegido