Fengari M.

holas! espero no llegar tarde bueno, si.. ya sé que llegué tarde, pero al menos llegué! en fin... entiendo que no necesitamos dejar imagenes ¿afirmativo? asi que solo dejaré la fichita y cruzaré los dedos por no estar haciendo algo que no me corresponde xD

los quiero!

Nick: Fengari Black Lestrange
Nombre del Jugador: Hugo Lloris
Pais: Francia

 

 

«¿Es que nadie me pone atención?» mastiqué mis labios mientras reflexionaba sobre el quehacer ministerial, los papelitos que no llegué a revisar de mi escritorio y la pérdida de mi abuela que aun no hacia acto de presencia, «¿será que también ella anda perdida? ¡Rayos! ¡Todos se me pierden!» cavilé golpeando mi puño contra la palma. La sola idea de afrontar todos mis deberes sola me enfureció, de cierta manera, porque no estaba muy segura de querer empezar. Extrañaba aquellos tiempos, donde solo obedecía órdenes, sin tomar nada personal, sin apegarme sentimentalmente con las decisiones de mis superiores… es que era más fácil así, sin pensar.

—bueno ¡hora de trabajar! —molí invisiblemente mis reflexiones entre la palma y el puño y me puse en pie. Dejando atrás el mullido sillón donde literalmente me estaba derritiendo.

«¡Espera! ¿Qué pasó con lo de hablar con la directora? —¡cierto!— aprovecha y ve a buscarla… ¡ahora!» asentí a favor de la Otra voz interior y me despedí de una flotante pelusa que captaba mi vista. Acercándome con precaución al despacho, golpeé varias veces sobre la gruesa lámina de madera, sin obtener resultado alguno. O estaba ocupada, o no estaba. Preferí optar por asumir la segunda opción, así que con la consciencia limpia, marché a mi oficina llevándome el estandarte incorpóreo de La chica Responsable, después de todo… lo había intentado.

Cerré la puerta tras de mí y observé nuevamente aquella conocida y valorada habitación, muebles y estantes llenos de carpetas que jamás revisaría, bueno, no en ese momento y, un par de masetas que había podido trasladar desde el invernadero de mi casa hasta la oficina de Relaciones Ministeriales. Sonreí y caminé hacia ella con un brillo destellante en los ojos, tan fulminantes cómo una lunática enamorada de Romeo. Lo sé, nada tiene sentido. Junté las manos a manera de plegaria y alabé a los capullos que habían brotado de las ramitas; las hojas de un verde limón eran sedosas al tacto, y el perfume de las nonatas flores aromatizaba el ambiente.

Si poseía la intención de hacer algo relevante por la oficina, había quedado muy atrás, junto a las ideas de salvar el planeta, cuidar a los delfines y salvar a los osos polares. No obstante, a pesar de la gran distracción y la cursi y estrafalaria escena, tenía muy en claro que debía ponerme a laburar lo más pronto posible.

—¡oh! ¡Qué hermosa eres! ¿Necesitas un poco más de agua preciosa? —murmuré rociando la planta con una regadera de cobre. En aquel momento, sentí un aroma particular, mas bien, familiar «¿alguien de mi familia anda por aqui?».

«¡Uh! Parece que es un día ocupado» pensé mientras observaba las pilas de documentos en la admisión del departamento. La pobre Elizabeth se veía más tensa de lo normal, al parecer, ella sufría los estragos del papeleo acumulado. Me compadecí de ella, pero lamenté aun mas, no tener alguna broma para la recepcionista. «Bueno… ya se me ocurrirá algo» reflexioné llevándome la punta de mi dedo a la boca, haciendo toquecitos a la par que puntualizaba los deberes que tenía que cumplir.

—¿debería escribir una lista? —Dudé gestualizando el abatimiento.— quizás así no olvidaría instantáneamente lo que estaba pensando hace unos segundos…

Antes de animarme a cerrar completamente la puerta de mi oficina, y dejar por completo la sensación de “protección” que me brindaba la misma, tanteé el algodón de mi vestido para confirmar la ubicación de mi varita… «Por si acaso».

Mientras deambulaba por los pasillos del Cuartel, noté el calor corporal de muchos individuos en el piso, más de lo que estaba acostumbrada; y por alguna razón, consciencia quizás, tuve la necesidad de corroborar que mi nombre aun estuviera estampado en la placa de la Oficina de Relaciones Ministeriales, después de todo, extendí mi ausencia más de lo que me hubiese gustado. Extrañé muchísimo el trabajo en el cuartel, la vida en Ottery y los innumerables desafíos del bando.

—¡espera! ¿Dónde están todos? —Moví mis ojos sobre cada pedacito de materia del hall, y noté que los escritorios se encontraban vacios.— ¿habrá alguna reunión de emergencia de lo que no me haya enterado?

Rápidamente dejé de jugar con los papeles del escritorio de Aaron y golpeé la puerta de la directora, debía asegurarme que ella supiera que ya estaba de vuelta. Aunque después de llamar al despacho de Desireé pensé que sería menos doloroso enviarle un memorándum ¡ash! «¿quizás podría ayudar a otros jefes, parecen muy ocupados?». Torcí los labios y empecé a morderme los bordes de la boca conforme pasaban los segundos. ¡Tenía que hacer algo! Me sentía… vaga(?

Así que finalmente, enredé los brazos sobre mi pecho y alcé la voz— ¿alguien necesita ayuda?

http://i.imgur.com/gpzV4ro.png?1?7192

Oficina de Relaciones Ministeriales

 

Hola Litah!

Estoy de vuelta y requiero de tu presencia lo antes posible en la oficina. Espero que no te hayas perdido coomo yo, pero ok, lo comprendo(? si vuelves con algun informe extraoficial de lo que ha sucedido en mi ausencia, te lo agradecería mucho. Y si vienes con algún escudo, mucho más. Si no me encuentras en la oficina para cuando estés en las instalaciones, es porque morí de la presión. Iré a reportarme con Desireé.

Deseame suerte!!

 

Fengari Naberrie Black Lestrangre

Oficina de Relaciones Ministeriales

Cuartel General de Aurores

Ministerio de Magia

Aun recordaba el día que habían asesinado a la cantante, el Atrio del Ministerio se había convertido en un gran caos, incluso estaba segura que lo cerraron y que ese mismo día estaba a tres minutos de caer al suelo a causa de un ataque de claustrofobia. El solo recordarlo erizaba los cabellos de mi nuca. Suspiré lentamente y cerré los ojos como un gesto de negación, odiaba los lugares cerrados, no los comprendía y mientras más lejos estuviera de eso, mucho mejor. Incluso con el pensamiento.

«¿Y si te acusasen de infiltrada en el Cuartel y te llevaran a Azkaban?» la sola idea se sintió tan pesada como un plomo en mi espalda. Sin embargo, estaba preparada para todo, y siempre tenía una coartada para todo. «¿Y el beso de los dementores?» la pregunta apareció sin ningún interludio en mi mente. Por varios segundos estuve detenida en la misma postura. No temía ir a Azkaban, de hecho había oído de prisiones más temibles que esa, pero los dementores eran otra cosa… eran la clase de criaturas que me encantaría tener para resguardarme, pero con las que no quisiera tener ningún malentendido. Aun así, todo el misterio que conllevaban alimentaban aun mas las ganas de visitar Azkaban.

Miré a Darla y asentí entusiastamente a cada oración que decía. El tema de Azkaban me tenía muy motivada. Así que cuando noté que estaba rozando los límites de la seriedad, me enderecé en mi asiento y presioné los labios mordiéndolos por dentro, inspiré y me concentré en una pintura que colgaba detrás de la directora, mientras esta atendía las propuestas de la otra jefa. El despacho era notablemente muchos más grande que las oficinas convencionales, pero aquello era entendible, era la dirección del departamento, y lamentablemente, había estado ahí más veces de las que me gustaría admitir.

Aunque me estaba obligando a mantenerme quieta con la mirada fija, realmente estaba muy atenta a cada palabra que decían mis compañeros, asimilando las propuestas y reflexionándolas. Junté mis manos sobre mi regazo y los alineé en un agarre visiblemente doloroso, con los nudillos tronando y las falanges aparentemente enredadas con los demás dedos. No obstante, el minúsculo movimiento mantenía mi inquietud natural distraída mientras mis otros sentidos estaban atentos a las exposiciones.

«Otra vez la cantante» pensé cuando la nombraron nuevamente, yo ni siquiera tenía idea de que había una cantante llamada así «pero… bueno, una vida es una vida» reflexioné sin sentir nada al considerarlo, aun no… aun no sentía la vida de los humanos más valiosa que la de las criaturas. Sonreí al comentario de Darla, y seguí su propuesta hasta que la culminó con una pregunta al aire. «Oh oh…» yo había iniciado la idea pero ahora me parecía más grande de lo que había imaginado. Sería una gran prueba para medir mi capacidad como nueva en la jefatura.

—Yo podría llevar la campaña al Profeta para su difusión. Pero es notable que una campaña de tal magnitud conlleva un tiempo de formulación, además de que tenemos que tener las bases bien hechas, o se nos caerá todo —Apenas dije, quería escuchar el punto de vista del tercer jefe.

«¿A qué se refiere con último finalistico?» reflexioné arrugando el ceño. Paseaba la mirada por detrás de donde se ubicaba el profesor «¿Cuántas reglas muggles se rompieron aquí? Hmmm ¿Por qué estoy pensando esto?» Sacudiendo la cabeza, vi de reojo al vuelapluma «¡qué incomodas!» y asentí cada vez que Hank puntualizaba una oración. «¿Hank? ¿Solo Hank? ¿Sin apellidos?» me cuestioné gestualizando todas las teorías posibles «¡qué raro!», y al comprender que ello no tenia mayor importancia, guardé un mechón de cabello tras la oreja y preferí analizar el comentario que hizo a la idea que había expresado antes.

Los escombros de alrededor vibraron cuando la pizarra se desprendió de su base y echó a volar por los cielos. En su lugar, una misteriosa luz definida en una forma ovoide apareció. No perdí de vista a la aurora, no mientras me levantaba perturbada del asiento reciclado y me acercaba a la placa de luz, conforme ésta empezaba a transformarse en una nueva forma, releí con cuidado lo que decía. «¿Qué es esto?»

—¿qué debo hacer? —pregunté confundida al mago, no tenía idea de lo que significaba, ni si era un examen o quizás una práctica calificada… «Probablemente sea un accidente ¿o no?». Mojé mis labios y controlando las manos para no tocar la luz, busqué sentido a las palabras. «El primer bloque...»

«Esto me parece conocido» pensé razonando. Cuando estuve convencida de la idea que tenía en la mente. —La revelación de identidad de una bruja cualquiera a un muggle está prohibida. De hacerlo, el Departamento de Accidentes Mágicos y Catástrofes intervendría en primera instancia, siendo el Cuartel General de Desmemorizadores los llamados a desmemorizar a los testigos del acto mágico. Al ser la bruja esquizofrénica, ésta puede alegar que fue inconscientemente, de lo contrario podría ser llevada ante el tribunal de Azkaban por haber infringido esta ley por conocimiento previo. —dije, «¿creo?».

El segundo bloque también tomó una nueva forma «¿otro?» pensé concentrándome en la oración. Cuando encontré la respuesta, la señalé —Está prohibido usar magia para alterar el clima meteorológico bajo fines lucrativos o personales. En este caso, el granizo gigante no me parece que sea un “accidente” de “menor medida”, al destrozar las viviendas de los muggles, ocasionaron daños considerables y por consiguiente buscaran el origen de tal —haciendo una pausa, me pregunté «¿pero cuáles son las consecuencias para estos?», mordiéndome los labios, pensé rápido y seguí— esta conjetura conlleva a que el Departamento de Accidentes Mágicos y Catástrofes intervengan nuevamente.

—primero, el Equipo de Reversión de Accidentes Mágicos tendría que deshacer la “magia accidental” prioritariamente. Despues, desmemorizar a los testigos que pudieron presenciar la extraña anomalía o en todo caso, limpiar la memoria de los sobrevivientes del desastre “natural”. Y por último, el Comité de Excusas para los Muggles deberían inventar las excusas pertinentes para ser transmitidas al Primer Ministro Muggle, para que a su vez, éste las transmita a los muggles mediante sus diversos medios de comunicación, a fin de salvaguardar la situación y el secreto absoluto de nuestro mundo mágico.

Haciendo una gran pausa, tomé aire y miré de soslayo al tercer bloque, cuyas palabras de luz habían tomado forma. —El tercer modelo también es un ejemplo de un acto prohibido por el Ministerio. El uso del veritaserum y otras pociones que causen efectos psicológicos está regulado directamente por el Ministerio de Magia, queda prohibido su uso para aquellos que no tengan los permisos pertinentes. Como la mayoría de prohibiciones, al ser de conocimiento público e infringidas bajo conocimiento, porque definitivamente un profesor de Transformaciones conoce las leyes mágicas, éste será acusado de violar las leyes, probablemente será llevado a una audiencia ante el tribunal del Wizengamot, donde evaluaran al acusado y dispondrán las consecuencias… las cuales podrían ser, desde ser absuelto hasta ser condenado a Azkaban.

—¡Bueno! Todo depende de los detalles. En ese caso se trata de la sospecha de un robo, pero el profesor sabía que estaba prohibido el uso del Veritaserum, quizás solo lo releven del cargo. —añadí sonriendo mientras me convencía de lo que decía, realmente estaba usando los conocimientos que tenia para suponer las consecuencias, puesto que aun no me habían hablado de consecuencias en la clase. Al menos, esperaba estar en lo correcto, ir por el camino correcto.

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OFF ROL

Yo cuento hoy como tercer día(? es más, los católicos asumimos que el tercer día es el domingo :B lo que me lleva a pensar que estoy a tiempo con la tarea

Observe mi alrededor notando tratando de no distraerme con los detalles físicos, pero no pude evitar notar los gestos que utilizaba la directora para acompañar sus palabras, realmente se trataba de algo importante no solo para ella como cabeza del departamento de Aurores, también era importante para ella como persona, era como uno de esos proyectos personales que alguna vez abrazamos con toda nuestra convicción hasta sentirnos listos para luchar contra el mundo a favor de realizarlo. Me sentí inspirada.

Suspiré y guardé silencio mientras meditaba sobre la posición que señalaba la mujer, realmente compartía la intención y me encontraba alentada en pro del desarrollo de la reapertura de Azkaban. «He esperado esto desde que era niña» recordé delineando las palabras en mi mente, todo el significado que Auror tenía para mi, estaba englobado en Azkaban. Lo anhelaba, quería que fuera parte de mí. «Pon atención Fengari, deja de divagar» me dije alentándome a seguir con la exposición, junté mis manos y parpadeé varias veces siguiendo el hilo de concentración que tenia, los ojos fijos en la Granger, y las ideas aflorando en mi mente.

Cuando Desireé terminó su ponencia, miré re reojo a mis compañeros esperando que ellos tomaran la palabra, su experiencia guiaría mi opinión, aunque ya tenía más que clara mis intenciones. No obstante, quise comentar, no de forma ofensiva —me parece estupendo el proyecto de reabrir Azkaban, y no creo que nos cueste justificar el porqué, ya que como sabemos, nuestro deber es velar por la población, y lamentablemente, cada día hay más adeptos a los prohibidos “bandos”, cuyos actos dejan en un total caos a no solo el Ministerio, sino también, a los magos y brujas que sienten el temor de su vida peligrar ante estos actos vandálicos.

Haciendo una pausa para respirar, pasé al siguiente punto —Yo estoy comprometida al cien por ciento con realzar el trabajo en mi oficina —dije tomando aire, consciente del peso del cargo— sobre todo ahora que mencionas el tema de Azkaban, que es el deber prioritario de la oficina para las Relaciones Ministeriales. Además, si mis compañeros están de acuerdo, me gustaría sugerir que ideemos una campaña masiva para fomentar las denuncias, ¿cómo? Podemos empezar por los medios de comunicación o inclusive, asambleas donde se informe a los magos cómo hacer debidamente una denuncia o ¿qué hacer frente a un asalto o redada? Qué sepan que los Aurores están pendientes.

Acaricié la punta de mis dedos contra el regazo de mi falda sin quitar la vista del frente. Esperaba no meter la pata dejándome llevar por mi persuasión.

Estado Mayor de Coordinación Ministerial wow! que nombre tan grande *O* ...vengo vengo vengo, porque quiero ayudar y colaborar en esta mafia :B

Trabaj... (SI, yo trabajo u.ú) trabajo en la Oficina para las Relaciones Ministeriales del Cuartel General de Aurores, y creo que podría ayudar con el proyecto sobretodo, porque ahora que reabriran Azkaban y que los juicios empezaran, puedo usar mi influencia en el cargo a vuestra disposicion.

Además, hmmm citaré por aqui una pequeña descripción de la oficina para que alguna buena personita interesada se postule, necesitamos empleados para expandir nuestro poder

 

Oficina para las Relaciones Ministeriales

Oficina encargada de llevar y coordinar con los miembros del Wizengamot, los juicios de Magos Tenebrosos y Criminales Mortífagos. También contiene la organización interna de la seguridad en las celdas de la Prisión de Azkabán, además de tramitar los demás acuerdos que puedan generar un contacto directo con las diversas oficinas del Ministerio.

Jefe Encargado: Fengari Naberrie Black
Asistentes Administrativos (5):

• Litah Black Lestrange

 

Me tumbé contra el respaldo del sillón, y miré a través del techo de cristal hacia el cielo nuboso del medio día. Dentro de unas horas caería la noche y la batalla contra los Doxys sería una bonita e interesante Azaña para relatar a los estudiantes de la Academia. «Los chicos ya deben estar preparándose para su graduación» pensé considerando que el tiempo pasaba más rápido de lo que me hubiera gustado admitir, así como las nubes, los aprendices viajaban hacia nuevos horizontes,… «¡Qué sabia Fengari! Lo sé, lo sé» me dije sonriendo con los labios apretados.

Con los ojos casi cerrándose, elevé la pestaña derecha para mirar de reojo al Weasley, había respondido a mi divertida oferta, siguiendo el hilo divertido de mis dulces palabritas. El primer impulso fue inflar mis mejillas en señal de indignación por su tomada de pelo, pero después de meditarlo mejor, sentí que mis paredes ofensivas se desinflaban como un globo en el aire. Entonces, reí.

—Estaría encantada de acompañarte en ese estimulante viaje hacia los confines del saber —le dije esforzándome por controlar la risa, apenada por tontear con mi compañero delante de los estudiantes.

El rubor no tardó en posarse sobre mis mejillas acalambradas de tantas risitas. El nuevo jefe no se veía peligroso, bueno, en mi mente y gracias a mi imaginación, había algo en él que aun hacia que mis sentidos estuvieran despiertos, ¿celos? ¿Desconfianza? O quizás… era demasiado agradable como para admitir que podría considerarlo en un futuro no muy lejano, un amigo. Suspiré y sacudí mi cabeza acomodándome correctamente en el asiento de mimbre. Con el codo apoyado en el reposabrazos, descansé mi rostro en mi palma observando “al nuevo“ conversar con Dark.

«No… no se ve tan malo» reflexioné «debe ser odefo» inspiré y sonreí hacia ambos magos. Mientras meditaba sobre ello, presté atención a las florituras que realizaba con su varita, apareciendo una bandeja de tazas de chocolate sobre la mesita de la sala de estar. —Preciso —murmuré cogiendo uno de los tazones con cuidado— ¡que amable! —

«¡Espera! ¿Qué la quaffle está el aire? ¿Qué es eso? Ok no, no entiendo de quidditch»

Como ninguno de los muchachos respondió a la pregunta del mago, di un pequeño sorbo de mi chocolate y respondí serenamente —a mí me gusta dormir, ¡ah sí! y el chocolate ¿a ustedes?

Firmas Temáticas??? yo quieroo o/

Yo definitivamente apoyo esa idea, pero tengo una duda, podré usar yo una?? *o* es que... no he participado en muchas firmas temáticas, creo que solo en una u.ú y... realmente me gustó mucho, estoy segura que a los minis les encantaría, sobretodo porque cuando uno es aprendiz. es complicado actualizar firmas, y Las Firmas Tematicas, no solo ayudan a renovar firma, sino que también, los hacen parte del Grupo, se identifican con él.

No se que tenía que decir :B iré por ahí y quizás lo recuerde y vuelva de nuevo.

Los quiero!

Observé cada detalle del precioso prendedor, desde los bordes hasta el intenso color violeta de su piedra, era tan encantador pero a la vez, tan delicado y solido, me recordaba a las características de mi familia. Los Black Lestrange eran hermosos a la vista, pero duros como el diamante «cómo papá», la sola comparación removió mi corazón y valoré aun más el artilugio. Mientras me detenía a memorizar su forma, recordé que aun tenía algo pendiente que hacer, «¡oh rayos!» Pensé sintiendo el aun el zumbido de la voz de la directora, tenía que asistir a mi primera reunión.

Levanté la vista y sacudí la cabeza ante las palabras de mi abuela —lo siento, no fue esa mi intención… —iba a decir “nona” pero me reprimí— de hecho, te ves muy joven, nadie imaginaria que fueras mi abue.

Sonreí y di otro vistazo a la joya, «¿acaso también tendría algún don especial?» releí los filamentos de plata y me quedé con aquella sensación en los labios, después tendría tiempo de hostigar a la Black Lestrange con mis dudas. Respiré profundamente y elevé las comisuras de mi boca en un gesto de patética alegría. No me importaba lo ridícula que pudiera verme sonriendo como un sol, como una niña feliz apunto de seguir el camino del arcoíris con saltitos de alegría. En mi mundo, eso estaba bien.

Con esa aura de dicha, sacudí mi cabeza asintiendo a Litah y girándome para caminar –casi levitando– hacia la oficina de la directora del departamento. Sin embargo, la sonrisa no me duró tanto. Al primer golpecito que quise dar hacia la puerta, noté que ésta estaba entreabierta y con todos los jefes del piso reunidos alrededor del escritorio de la Granger. Mordiéndome los bordes de la boca por mi tardanza, cerré la puerta e hice una modesta reverencia en silencio mientras tomaba mi asiento.

«¡Oh! ¡Bien, llegue a tiempo!» pensé escuchando con atención el mensaje de la directora, la idea de reabrir Azkaban fue el dulcecito que le faltaba a mi paladar. Por alguna razón que aun no comprendía, la sola imagen de reaperturar la temible cárcel me inspiraba una satisfacción tremenda, yo añoraba ese tipo de acción, la de infiltrarme en los casos mas sonados siguiendo el proceso de los acusados hasta que alguno de la Orden del Fénix pagara vilmente su condena tras los barrotes que los dementores cuidarían. O en todo caso, ayudando en silencio a que los mortífagos jamás cayeran ahí.

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OFF ROL

No te preocupes Desireé (tengo que acostumbrarme a tu nuevo nick) me leiste la mente *O* esperaba que me incluyeras(?

Gracias Litah!!!

Me sentía muy contenta por el puesto que había obtenido, era como si después de haber transitado por un monótono sendero, después de los primeros pasos llenos de anhelo y hambre por conocerlo todo, hubiera obtenido una gloriosa recompensa. De hecho, no era el lugar más alto que alguien con sed de superación quisiera alcanzar, pero no era mi momento para otro lugar, estaba donde quería estar, lista para aprender. Aun sonreía como una niña observando una caja llena de dulces.

Dejé el papel sobre mi escritorio, aun en la sala de empleados, y me acomodé sobre el mueble de caoba batiendo mis pies contra el aire, pensé en mis padres y en lo mucho que me gustaría compartir aquel logro con ellos, «pero no están aquí» no estaban ni ahí, ni en ningún otro lugar al que pudiera llegar. Suspiré y empecé a tantear los dedos uno contra otros, después de un incomodo silencio, sacudí mi rostro tratando de quitar los pensamientos tristes y me obligué a sonreír. Sacudí mis puños en el aire eché otra ojeada a la carta. «¡Oh si! ¡Oh si! ¡Oh si!» pensaba controlándome por no bailar entre los escritorios.

De pronto, el sonido de unos tacones llamaron mi atención rápidamente, mi rostro se iluminó al reconocer el familiar sonido y sentí como mis labios se alzaban en una sonrisa mas dichosa. A falta de mis progenitores, tenía a la abuela con más estilo del Ministerio. Alcé la mano para saludarla y asentí a su pregunta.

—¡claro que sí! —exclamé juntando mis manos en una palmada. Iba a contarle en ese instante la nueva noticia, pero rápidamente sentí un duro bulto en la palma izquierda— ¿un regalo? —era solido como una roca, pero con tantos ángulos como una pieza de orfebrería. Desdoblando la mano susurré— ¿Qué… qué es esto?

La imagen del broche me llegó profundamente a mi baúl de recuerdos. Inmediatamente levanté la mirada encontrando el mismo broche recogiendo el cabello azabache de Litah, y aprisioné el mío contra mi pecho. Era el primer regalo que alguien de mi familia me hacía, bueno… el primero sin motivo alguno, tan casual como una palabra de afecto. Desde que vi los filamentos y el color de la piedra, mi color favorito, eliminé los pensamientos tristes, y abracé a los de mi abuela. Una mujer extraña y a veces distante, pero ahora la veía como algo mas allá de solo la madre de mis padres, la veía como a una segunda mamá.

—es precioso, muchas gracias nona —murmuré sintiendo el rubor acentuar mi pena, estaba sorprendida y muy agradecida. Entonces, poco antes del ensordecedor grito de la directora desde su despacho, recordé que aun no había compartido con nadie mi ascenso— ¿adivina quien obtuvo el puesto de jefe de nuestra oficina?

Desireé había tomado la atención de todos en el departamento, así que solo sonreí hacia la directora asintiendo en forma de agradecimiento, todas las emociones evolucionaban aun mas, me sentí apenada, orgullosa, con ganas de gritar como loca, hambrienta, pero plena. Ahora debía ir a mi primera reunión, pero antes, quería ver la reacción de la Black Lestrange.

Holitas a todos o/

Anne ♥♥♥ Primero: espero que pronto nos cuentes de que trata Tánatos me ha sonado mucho a la salsa tártara xDD y lo sé, solo a mi se me ocurren esas comparaciones :C

Segundo: aww gracias!! prometo que me esforzaré por pensar en algo genial para los minis, de hecho... todos tienen ideas y ya estan presentandolas!!! asi que me pido el mes de... (desde junio mi cerebro estará pendiente de otra cosa, entonces tiene que ser antes... hmmmm «en marzo-junio(? podria salir la actividad del tesoro, mayo libre») me pido el mes de MAYO!!!

Tercero: tambien creo que es fantástica la idea de tener algo asi como un "banco" de ideas, para que... cuando estemos faltos de inspiracion, tengamos una base donde apoyarnos, incluso algunas ideas podrian estar desarrolladas, para que cuando hayan semanas vacías e inactivas, usar las Ideas ya elaboradas y sacar algo a tiempo flash!

*apapacho a Anne* wii estoy emosionada *O* creo que se vendrá una muy buena temporada para el escuadron *me pongo una pulsera que dice «yo quiero a Anne»* mia mia mia mia de mi, talvez a vecs de Juve puedo compartir.

Mientras seguía tonteando por la recepción, observaba de reojo que las oficinas empezaban a movilizarse, «¿ya empezaran con sus labores?¿y yo?¿y la oficina de Relaciones Ministeriales?» me cuestioné sintiéndome pesada al considerar cada una de las preguntas, como si al instante de formularme cualquier cosa, un pesado plomo de tres kilos cayeran sobre mi espalda. Sabía que con la ausencia de un jefe en la oficina, nos atrasaríamos muchísimo con el trabajo y las responsabilidades que debíamos resolver y atender.

Alguna vez había considerado preguntar ¿qué era exactamente lo que hacíamos en la Oficina de Relaciones Ministeriales? Y de hecho, aunque su nombre era muy descriptivo, preferí ocultar mi duda para emprender por mi misma la búsqueda de respuesta a mi inquietud. —¿algún día podré hacer todo eso que pensé hacer?

«Se me caerá el cabello del estrés» pensé sonriendo y dejándome caer en un bonito sofá de cuero, frente a mí se encontraba Elizabeth rebuscando aparentemente algunos archivos tras su mostrador, no habían muchos magos ajenos al cuartel, pero se podía escuchar con claridad los pasos agiles y secos que daban muchos Aurores. «Realmente estaban ansiosos por empezar» me dije asintiendo. Con mi índice y pulgar, empecé a delinear mi mentón mientras me sentía celosa por mis compañeros de las otras dependencias.

«¡Estoy aburrida!» y también estaba preocupada, hacían días que no veía a mi glamurosa abuela por el departamento, «¿Dónde estará Litah?». Mientas me cuestionaba si la mujer de risos estaba visitando alguna boutique de zapatos, una carta llegó levitando desde el ascensor, sin levantar sospechas y manteniendo un vuelo sigiloso hasta aterrizar sobre mi regazo. —¿y esto? —al notar que el sello era del Ministerio de Magia, abrí rápidamente el sobre después de corroborar que estaba dirigido para mi «¿será mi despido? ¡Seguro notaron que no hago nada!».

Pero conforme leía el mensaje, unos suaves cosquilleos avanzaron desde el dorso de mis manos hasta chispear en mis brazos y fulminarme de alegría en el pecho— ¡oh si! —exclamé poniéndome en pie y dando unas palmaditas, tensándome toda para no empezar a saltar en medio de la recepción. La misiva era para informarme que había obtenido la vacante del puesto de jefe de oficina— ¡muy bien Fengari! ¡Te lo mereces! —me dije respirando profundamente para tranquilizarme. Había deseado tanto la oportunidad.

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OFF ROL

Oh!!! Muchas gracias Seba

«¿Internet? ¿Pociones de amor? Ok… eso me supera» pensé sintiendo una punzada en la cabeza con solo imaginar todos los puntos de vistas que podían derivarse de un aparente simple tema— entiendo… es mucho trabajo— mencioné rascándome el cuello. A veces podía tensarme tan rápido.

Empecé a leer cada uno de los preceptos sobre el pizarrón mientras me mordía los labios por inquietud. Los dos temas eran muy controversiales… claro, si se tomaba en cuenta que en el pleno siglo XXI era arcaico considerar que un niño de doce años tendría que tener una licencia para cuidar a un puffkein. Rodando los ojos, tomé aire y alcé la mano— algunas criaturas mágicas son inofensivas como para requerir un permiso. Los micropuffs son inofensivos, incluso son parte de nuestro folklore mágico. Muchos niños tienen esas esferas. También los gusamocos son dóciles —dije indignada, «¿creo?».

—Y ¿por qué está prohibida la adquisición de pociones a muggles? es decir, tomando en cuenta lo que dijiste, ellos crean una especie de “poción”, para curar sus propias enfermedades, es decir, desarrollaron una línea de medicamentos tanto industriales como artesanales.

—Yo, cuando vivía en Perú, observé a muchos muggles llamados… “chamanes” que hacían una especie de poción que podía curar heridas e incluso preparaban brebajes de amor a partir de hierbas ajenas a nuestro mundo —me detuve pensando en la infinidad de ejemplos— por ejemplo, El Caldo de Pollo, no tengo idea de quien los preparó primero, si muggles o mágicos, pero es una preparación que alivia el resfriado. También la miel con limón, ayuda a la garganta… lógicamente estas “pociones” muggles, parecen inofensivas en comparación a las pociones mágicas, entonces, no le encuentro la lógica a catalogarlas como prohibidas, porque entonces, esta ley tendría que tener muchas excepciones.

Junté mis manos y enlacé mis dedos meditando sobre lo que había exclamado, realmente habían tantos huecos… las leyes eran absolutas, pero tenía que admitir que algunas eran demasiado severas. Suspiré y me apachurré contra el respaldo de mi silla, pensando sobre chamanes, filtros de amor, sopas de pollo y miel. —yo pienso que el Ministerio de Magia hace un gran trabajo para salvaguardar nuestro “mundo” del muggle. Por ejemplo, el Departamento de Accidentes Mágicos y Catástrofes tiene que regular constantemente todos los accidentes mágicos que involucren a los muggles. Desde tíos victimas de encantamientos inocentes hasta muertes masivas a causa de los llamados “ataques” por parte de los bandos prohibidos.

—Sé que hay un comité de excusas para enmascarar estos “accidentes” y que también hay una oficina de desmemorizadores, que resuelven las implicancias de usar magia ante muggles, hay muchos niños que a veces, más por impulso que por desconocimiento, hechizan a sus tías muggles o primos molestosos, y éstas dos oficinas se encargan de formular las coartadas para enmascarar esos sucesos, de ser necesario utilizan magia para borrar la memoria de los muggles implicados —tomé aire, y observé mi alrededor, pensando que probablemente, eso le había pasado al escenario donde me encontraba.

—Realmente el trabajo que hace el ministerio sobre este aspecto es grandísimo pero también silencioso. Creo que se le da poca importancia a las leyes. En muchos aspectos. Por ejemplo, hace mucho que se dejaron de lado los juicios, al menos, yo no he oído de ninguno. Y aunque el Ministerio de Magia tiene todo un departamento para éstos, el Departamento de Accidentes Mágicos y Catástrofes, hace un arduo trabajo para cubrir estos actos…deshacer magia accidental, desmemorizar testigos o sobrevivientes de catástrofes causadas por gente mágica, encargarse de dar excusas al primer ministro muggle… todo por mantener el mundo mágico fuera de peligro.

—y es que, creo que la comunidad mágica aun no comprende la importancia de los peligros ajenos a mortífagos u odefos, desde simples ladrones o contrabandistas, secuestradores— consideré dando un gran suspiro— yo como auror del ministerio, tengo una gran labor velando por la seguridad del pueblo mágico, y estoy muy contenta de estudiar este curso de Leyes Mágicas, porque así amplio mis escasos conocimientos sobre este tema, para poder desarrollarme mucho mejor en mi trabajo.

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OFF ROL

Te envié la tarea por MP.
Pd: has sido muy cruel al dejarme solo tres días para hacer toda esa tarea

Holitas *O* ..que bueno que te agrade Leis!! jajaja tienes razón, no habia notado que repetia mucho las palabras, muchas veces me pasa eso lo corregiré. Como notaras, he mencionado lo de la fortaleza oscura, pero aun no lo he puesto aqui porque estoy leyendolo bien, pienso desmenuzarlo en partes y con cuidado, porque no quiero meterme en lios D: ahí está la lider y altos rangos, y temo dejarme llevar por mi lado "criticón"(? ...asi que traeré esa parte, más lo que comentó Afro y a ver si encuentro algo interesante por ahi TT__TT ...

puedo comentar lo de la "sansión" de Kirara sobre un presunto mortifago que la usó para pasar informacion?? si me preguntan de donde he sacado eso, solo dire que mis fuentes son confiables pero a la vez estan muy aturdidas x.x .. no se que taaaan bueno sea eso.

Athena fué mi profesora de rol avanzado, es genial!!! jajaja bueno seriamente puedo decir que entiendo por qué hay varios ex-mortios que fueron dados de baja que estan ahora como minis en la orden, ella es amable, y es bien sabido que se atrae moscas con miel que con hiel. Incluso, algunos conocidos mios, que estan en la orden, me comentan que es un cambio para bien, puesto que la "bonis" (asi le dicen) es muy querida por todos.

bueno compañeritos, cambio y fuera

primero: ¿qué es «Tánatos»?

segundo: "libro cerrado" jajajajajjajajaja

bien, ahora despues de comenzar con una de la lluvia de preguntas que tengo para torturar a Anne y obligarla a que me explique miles de veces hasta que lo entienda bien de forma, perfecta(? *O* paso a lo siguiente: awww yo tambien te quiero Anne eres mi mami ilegal, mi maestra jedi y sobre todo quien me enseña el camino cuando estoy perdida ..estoy sensible :C

Pienso que el cuadro es fantástico!!! realmente ahora puedo estar segura de saber que hace el escuadrón, y cada vez que mi memoria se formatee, podré venir aqui y leerlo de nuevo y estar informada *O* ...es más, viendo que está vacía la seccion de ... (ya olvidé el nombre D:) me ofresco a ir pensando algo para halloween(? asi con mucha antelación ajajjajajaja o si es demasiado tiempo, algo para de aquí dos meses

Que bueno verte de vuelta Mery!! me gusta mucho el juego que planteaste, asi conoceremos mejor a los minis. Hola Nona!!! *apachurro a Litah*

Adiosin!

Hoola

oh nono, mi mensaje a la nación era en general. Yo les agradecí (a ti y a mathias, de quien de hecho tomé su grabación como base) un montón por su ayuda en el whatsaap, lo recuerdas??? espero no malinterpretar nada, ni que me malinterpreten a mi, no estoy obligandolos o poniendoles una condicion o algo similar, he vuelto a leer lo que escribi, y quizas no me expresé correctamente, siento mucho si lo han tomado como "ohh que pesada! quiere que todo se lo den a la mano", yo tal vez lo tomaria asi. pero no lo hice con esa intencion, sino la de pedirles (pedir no es igual a exigir. y ) que me ayuden. solo les pedí humildemente ayuda.

pero osea, no tienen que darmela si no es factible, entiendo, osea todos tenemos cosas que hacer e imagino que es ***ido estar buscando links y mirando donde hay chismes y toda esa cosa, looo sé. o al menos, a mi siempre me ha sido indiferente, ahora me adapto y me divierto a medida que escribo (que escribí ese borrador xD) Despues de todo, muchos de nosotros andamos por diversos topics del foro, diferentes, y uno nunca sabe donde encontrará algo interesante, yo aun soy inexperta en temas "sociales" por aqui, soy algo... "asocial" pero ustedes, los que tienen tiempo aqui en el foro, tienen un circulo mas extenso que yo, y estoy muy segura de que definitivamente se enteran de las cosas antes que yoo, es por eso que valoro muuuuuuchisimo su ayuda.

Por favor no quiero que se sientan ofendidos, u obligados.

Y para finalizar, si les lei cuando mencionaron la fortaleza, por eso lo he agregado a mi borrador. tambien les agradecí eso :C

Por ultimo, Afrodita te agradezco nuevamente, por el link que has dejado. Muchas gracias.

Creo que he estado en una sesión con la psicóloga(? he abierto mi alma jajajaa.. adios!

Anne ya volviiiste!! has sobrevivido a los críos! *la apapacho y me amarro a ella para que me haga piojito n.n*

jajaja graciiias *-* Sip!! de hecho, ese mal momento ya pasó, nuevamente me siento motivada gracias a tii!! la verdad es que me siento muy bien, he empezado la semana con pilas y aunque estuve flojeando un ratito, me he animado un montón!! creo que es porque tuve exceso de pendientes muggles D: ..y sip! sabes, me parece genial la idea de tener un cuadro donde podamos ver las actividades que se estan haciendo actualmente, las que se estan programando y asi... para ver donde faltan manos y asi las desubicadas como yo, seguir el mapa y no hostigar con preguntas a la jefa

Juve!!! me explicas en qué va el rol?? esque me he confundido con los flash backs... por favorciito

«Huele a cenizas ¡espera! ¿Cómo huelen las cenizas? Eso no importa, solo sé que son cenizas» pensé mientras esperaba a que el inefable me acompañara, pero se veía incierto y algo perdido en sus propios predicamentos, así que después de mirarle durante unos diez o doce segundos sin parpadear, encogí los brazos y giré mi atención hacia otro lado. Aun podía seguir el olor de las colillas, «¿serán colillas de cigarro?» me pregunté reconociendo aquel aroma que me llevaba a agradables recuerdos de una niñez no tan lejana «¿Qué estarás haciendo exactamente ahora papá?».

«Hay que darle su espacio, cuando esté listo, seguramente me buscará» pensé esforzándome por no hacer evidente mi conclusión «el trabajo causa estrés, el estrés hace perder la cabeza. Conclusión, es peligroso ser jefe ¿quizás por eso Enrick no vuelve?».

Así que resoplé y lentamente me retiré pasito a pasito de la puerta de la oficina de Relaciones Ministeriales, justo al frente de la placa donde seguramente se encontraba el nombre de mi jefe, por lo que me giré y atisbé a Aaron, aun tenía muchas formas de darle nuevamente la bienvenida, algunas bromas que se habían quedado guardadas en mi amable e inocente corazón. Sonriendo, avancé hacia su escritorio pero lo encontré junto a su jefe «¡rayos! ¡Se me adelantaron!» pensé mordiéndome el labio inferior. Tenía una solución de cicuta reservada para él.

Rodeé los ojos y caminé hacia al ventanal, observando el exterior y reflexionando sobre todo lo que había sucedido hasta el momento «¿volvería mi jefe? ¿Se habrá perdido otra vez? ¿Dónde está mi abuelita?» acompañé la pregunta mirando de reojo hasta su escritorio, vacio… «¿Es que todos me dejan?» pensé masticándome los bordes de la boca. La sala parecía aislada, cada individuo conversando con otro —así es aburrido— consideré torciendo mis labios y agarrándome los codos tras la espalda.

En el reflejo del espejo de la recepción, revisé mi vestuario y noté que en aquella ocasión, también había optado por ropas cómodas que no bloquearían mi agilidad, «porque los jeans y las botas de montar son muy cómodas» aseguré a mi reflejo, suspirando, notando claramente que como muchos días atrás, estaba lista para la acción. Acción que no llegaba… «¡Oh!» Conforme paseaba por la recepción, vi a la directora llegar, quién nos saludó conforme pasaba hasta su despacho y, a quien saludé con una sonrisa aguardando a que el inefable estuviera listo para hablar sobre el asunto que lo había traído.

Efectivamente algo había jalado uno de los mechones de mi cabello. Tenía todos los sentidos alertas por las sabandijas y sus temibles dientecitos, definitivamente no quería probar cuán doloroso podría ser recibir sus dosis de veneno, además, los tres pares de brazos me eran… perturbables. Rápidamente me tensé cuando sentí nuevamente el tirón de de platinada cabellera, así que me puse en pie y me giré sobre mis talones para encarar a quien fuera que estuviera haciéndome la broma, sin embargo, nadie estaba ahí.

—¡Hay! ¡Santos bebes alienígenas! —exclamé notando que los alumnos se encontraban relajados a varios metros de mi. «Oh oh» así que con mucha calma, apunté mi varita hacia la porción de cabello de donde supuse que se colgaba uno de los bichitos, «¡qué bueno que mi cabello crece rápido!» pensé cerrando los ojos, y sentí cómo un suave peso caía gracias a la gravedad hacia el suelo, tirando del cabello que sostenía en mi mano. Inmediatamente, sacudí el mechón y vi claramente los ojos absolutamente negros de los doxys. Vi el rostro de Dark atento al nuevo jefe, y le lancé al aprendiz el bicho para que se hiciera cargo— ¡todo tuyo campeón!

Mucho más tranquila, me tumbé en un sillón de mimbre suspirando y derritiéndome conforme pensaba en cómo darle cristiana sepultura a mi cabello, eran aproximadamente unos sesenta centímetros los que había cortado de mi cabellera ondulada, y aunque sabía que crecería pronto, en el fondo de mi corazón, me sentía aliviada al encontrar a todos los estudiantes sanos y salvos. Ahora, debía resolver dos asuntos. Conocer al nuevo estudiante, y analizar al nuevo jefe. La casa estaría llena por una temporada, y así como yo fui recibida con amabilidad «les enviaré vociferadores a primera hora», también ellos.

—siento mucho lo sucedido, al parecer algunos chicos estuvieron jugando con un nido de doxys en los límites de las tierras de los dragones —sugerí «o eso es lo que creo que pasó» medité durante unos segundos. Acaricié mi cabellera y empecé a morderme los labios. En aquel momento, no estaba segura de cómo proceder, si enviar al estudiante a su habitación, o enviar mejor al nuevo jefe a su habitación. Estaba celosa por la llegada de un nuevo jefe, expectante por los nuevos alumnos, y muy triste por Oniria. «Demasiados sentimientos».

— creo que todos necesitamos una taza de chocolate, así podríamos conocernos mejor. —propuse batiendo mis pestañas mientras sonreía gentilmente, esforzándome por mantener quietas las manos y no morder los bordes de mi boca, esperando que alguno dijera algo. No podía verme seria y responsable por lapsos grandes de tiempo.

«No. No vas a mirar la decoración ni mucho menos distraerte con las tonalidades rosas que decoran el salón. Absolutamente no ¡Ni lo hagas! Lo que menos necesitamos es que te distraigas contando las luces del techo» me dije a mi misma mientras recorría visualmente cada uno de los corazones que flotaban en el aire, subrayando aun más la temática romántica que invadía en aquella ocasión el Gran Salón, el perfecto y tradicional aposento para la celebración de la graduación.

Todo era perfecto, cursi y hasta cierto punto, idóneo. Mientras las personas terminaban de tomar sus lugares, las directoras empezaron a intercalar las líneas de la entrega de diplomas. Conforme los graduados cogían los certificados, mis dedos más se enredaban en una maraña poco ortodoxa de falanges y movimientos dolorosos. Los nervios recorrían todo mi cuerpo, desde la yema de mis dedos hasta mi clavicula, como si se tratasen de olas invisibles que azotaban contra mi cuerpo produciéndome electricidad. Era mi primera vez en la graduación como jefa de casa. Y estaba más que orgullosa.

Tuve que esforzarme por no aplaudir efusivamente cuando la pequeña peliblanco encabezó la ceremonia, con cuidado de no golpear a alguien con la cola de mi vestido rojo, sonreí a gusto sosteniéndome en mis zapatos negros. «¡Que rápido pasa el tiempo!» reflexioné acomodándome nuevamente en mi silla, a pesar de que aparentemente nada había cambiado, el tiempo lo había cambiado todo. Así que suspiré y aguardé a que la dragona estuviera libre. «¿De dónde conoce a tanta gente?» me pregunté mordiéndome los labios, definitivamente era la única con un serio complejo de ermitaña, debía… socializar, más.

Dando un paseo por la sala, saludando a algunos conocidos y disfrutando de algunos dulces, avanzó la noche, cuyo clima era perturbadoramente relajante. —creo que deberíamos salir, eres perfecto para mí, me inspiras solides —le decía a una estatua griega de imponente estilismo— lo sé, a veces, realmente puedo enloquecer a las personas, pero… todos tienen defectos ¿no? —continuaba explicando mientras acomodaba un mechon de mi cabellera platinada dentro del broche que anudaba mi recogido. Llevando las pupilas hacia el rabillo de mis ojos, ví a Oniria y recordé que aun guardaba su obsequio.

—Syngnó̱mi̱ méli, nos vemos cuando termine la fiesta —le dije sonriéndole mientras caminaba hasta la Haughton.

—¡Oniria! ¡Muchas felicidades! —exclamé dándole un fuerte abrazo, estaba tan orgullosa de ella, sin duda completaba el circulo de una excelente etapa en mi vida, era como una hija, una pequeña hermana, una gran amiga— cuéntame, ¿Cómo te sientes?

Aiya!

hola a todos *-* vengo a dejar el avance de mi borrador de la sección de sociales, está muy en borrador(? lo he armado deacuerdo a cómo lo narraré básicamente, y me encantaría leer sus sugerencias para mejorarlo.

Además, quisiera pedirles su apoyo.

Esta sección en definitiva es la mayor responsabilidad que me han dado en el Vox, y como dije en el whatsaap, soy pésima para captar los cotilleos, por eso, necesito que todos me ayuden. Solo me basta con que me dejen los links de los lugares donde ustedes creen que hay material para la sección, y una pequeñisima reseña de una o dos líneas donde me expliquen de qué trata, sería perfecto!!! La sección anterior, fué realmente muy buena, la mía es diferente, no hay comparación, y probablemente guste menos, pero quiero hacerlo bien, y para hacerlo bien, necesito del apoyo de todo el equipo.

Realmente les estaré agradecida.

Dicho eso... Leis, te dejo aquí mi avance, para que lo revises.

Namárië!