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Valentina Ricci Yaxley

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Mensajes publicados por Valentina Ricci Yaxley

  1. Un pelo violeta muy característico ondeaba acercándose a ellos mientras tonteaba con su chico. Debía tratarse de Sagitas. Sabía que era ella porque ya había visto ese color de cabello tan llamativo en alguna de las instalaciones del Ministerio, probablemente en la Feria de Empleo. Recordaba que era tía de su antiguo compañero de trabajo, Antoni Tonks, y siempre andaba detrás de ella.


    Mucho gusto, profesora. Recuerdo haberla visto acompañada de su sobrino Tonks, me ha hablado mucho de usted —comentó tratando de acercarse a ella.


    Sin duda, sería curioso eso de no poder utilizar la varita en ningún caso, sobretodo teniendo en cuenta que ya había hecho uso de ella en su primera dificultad. Por suerte, los muggles reunidos allí parecían haberse montado su propio mundo mágico paralelo. Al parecer, les gustaba evadirse de la realidad viendo series totalmente incoherentes con la vida muggle. Valentina había utilizado la televisión con anterioridad, así que sabía de qué se trataba.


    Matar zombies... ¿pero qué clase de ideas tienen estos muggles? Parece que siguen inventándose cuentos de hadas surrealistas en los que creer. Pobres... —comentó a su compañero.


    A continuación, la profesora habló de ciertas Leyes Mágicas de cumplimiento obligatorio e incluso les entregó un pergamino con ellas para refrescarlas. En él pudo leer una ley que le llamó la atención:


    "El encantamiento permanente de objetos muggles debe estar regulado por el Ministero de Magia"


    «Maravilloso, ya la estoy liando nada más empezar...», pensó recordando sus andadas en el metro. Tal vez debería volver a él cuando terminara la clase y arreglar las barras metálicas encantadas, por si las moscas. Tan solo esperaba que Zurin no sacara su vena de Warlock y se pusiera demasiado estricto con ese asunto.


    Pues verá... —empezó a responder a la pregunta directa de la profesora—, digamos que tal vez hice un ligero uso de la magia en un lugar público... pero vaya, no se dieron ni cuenta —intentó excusarse tanto delante de ella como del Warlock—. Además, bastante caras son las tasas de la Univesidad como para tener que gastar más galeones. El paro no me permite poder tener muchos caprichos —comentó recordando todas las noches en las que había tenido que ser invitada a cenar por su pareja desde que no cobraba ni un knut.


    La verdad es que tampoco tenía idea de que se pudiera hacer ese cambio, nunca lo había probado. ¿Necesitaremos libras? —se unió a la pregunta de Zurin.

  2. Ver a la señorita Ivashkov sentada en las bancas de los alumnos mientras ella ocupaba el sitio del profesor era imponente, pese a que ni siquiera hubiera acudido allí para cursar idiomas. Hace relativamente poco era una de sus profesoras en Hogwarts, y ahora las tornas habían cambiado. Esperaba estar a la altura, aunque no se debía centra en ella, sino en las otras dos muchachas que acababan de hacer acto de presencia. Escuchó atentamente las palabras que recibió por parte de la demonio.


    Una muy buena respuesta, Alyssa. Una mente bien cultivada puede marcar la diferencia entre magos corrientes o magos poderosos, por supuesto siempre que el poder no sobrepase los límites de la ética.


    Acto seguido, la segunda alumna contestó a las mismas preguntas, tal y como lo había hecho su compañera. Eso sí, de una manera mucho más escueta.


    Me parece interesante eso que dices, Alessandra. Me acuerdo cuando a mí misma se me daban mal las Runas Antiguas y siempre intentaba evitarlas —memoró divagando en sus recuerdos—. Pero bueno, no estoy aquí para contaros mi vida. Intentaré, pues, que mejores tus habilidades aquí —terminó.


    Así que habéis venido a mi para aprender del noble arte de las pociones... Pues bien, os diré que las pociones se pueden clasificar en diferentes grupos dependiendo del resultado que obtengamos. Así, podemos crear antídotos para enfermedades, venenos o transformar algún aspecto de aquel que la ingiera a nuestro placer, tanto en el ámbito físico o incluso aplicándole o sustrayéndole habilidades. Precisamente nosotros nos centraremos en este último aspecto.


    Hizo una pausa para indicarle a las chicas que miraran los libros que tenían delante suya.


    Si os fijáis, aquí tenéis una enorme lista de ingredientes, sobretodo orgánicos, cada uno con una serie de propiedades parecidas o distintas al anterior. Supongo que os preguntaréis para qué lo necesitáis. Bueno, dado que tenemos la oportunidad de compartir clase con el profesor de Idiomas, se me ocurrió que tal vez podríamos hacer un pequeño... experimento entre estas cuatro paredes. ¿A que sería genial poder hablar un nuevo idioma mágico totalmente desconocido con tan solo unos tragos? La cantidad de horas que nos ahorraríamos en aprenderlo sería muy interesante, el tiempo vale muchos galeones de oro últimamente.


    No sabía si crearse grandes expectativas después de que las mujeres confesaran que la preparación de brebajes no era el punto fuerte de ninguna de ellas, pero había tenido esa feliz idea en una de sus reuniones con Niko y realmente le apetecía llevarla a cabo, ya que en el caso de que tuviera un poco de éxito, no sabría distinguir con exactitud ni el idioma ni la correcta forma de hablarlo, ya que no era su especialidad. Pero, ¿y si resulta que, de pronto, creaban la poción más efectiva del mundo para hablar en lenguas extranjeras? Una patente de esa receta la haría volverse de oro, incluso se podría permitir una jubilación anticipada con dinero suficiente como para vivir por el resto de años. Si de verdad conseguía algo decente que atrajera a los directores del Mall, obtendría grandes recompensas.


    Lo primero que tendréis que hacer, por supuesto, será enumerar los ingredientes. Buscad aquellos que os resulten atractivos para facilitar el aprendizaje, por ejemplo, e id describiéndolos cuando los encontréis. Tranquilas, no hay prisa, podéis tomar el tiempo que necesitéis —finalizó la explicación—. En cuanto a Leah, ahora Niko te dirá qué tiene pensado para ti —sonrió.

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  3. ¡Una mortífaga estudiando el mundo de los muggles! Esa noticia hubiera sido todo un escándalo para los miembros de su bando, sin duda, pero su novio tenía bastante curiosidad por las lecciones que recibirían en esa asignatura, así que no pudo negarse a acudir a la misma clase que él en la Universidad. A fin de cuentas, era una excusa más para pasar tiempo juntos, aunque fuera simplemente compartiendo pupitre con él.


    Tampoco el mundo muggle era una completa novedad para ella, teniendo en cuenta que, debido a problemas con la ley, su padre había sido forzado a abandonar la comunidad mágica para esconderse entre ellos con la pequeña Valentina. Para no desentonar, la niña había convivido con sus costumbres más de una vez, llegando incluso a asistir durante la primaria a un colegio muggle de lo más corriente. Aún así, hacía mucho tiempo que no actuaba como ellos, ya que cuando quería visitar a su padre lo hacía mediante la aparición y no solía abandonar la mansión familiar. A eso había que sumarle que toda su etapa adolescente en la que tuvo menos vigilancia familiar estuvo internada en Hogwarts.


    La muchacha se apresuró a primera hora para llegar al lugar acordado con Zurin, desde el cuál llegarían Merlín sabe cómo hasta la dirección que aparecía en la nota enviada por la profesora Sagitas el día anterior. Tal y como también decía, acordaron en vestir lo más muggle posible, por lo que apostó por un vestido gris básico con cinturón, zapatillas blancas y bolso.


    ¿Piensas meternos ahí abajo? —preguntó bastante seria. A decir verdad, nunca había montado en metro, ya que no disponía de él en la villa donde se crió, pero sabía que podía ir lo suficientemente rápido como para que un muggle no supiera controlarlo en caso de imprevisto— No me pensaré dos veces alzar la varita si ponen en riesgo nuestras vidas, aviso.


    Anduvo sujeta de la mano del chico hasta bajar a la parada. Cientos de personas se movían por todas partes y a toda velocidad. Incluso se podía escuchar una música de fondo emitida por los instrumentistas callejeros instalados allí. Se soltó un segundo para seguir la bella música de un violín, su instrumento favorito. Una veinteañera de cabello moreno y largo interpretaba un movimiento de las Sonatas y Partitas para violín solo de Bach. «¿Cómo puede tocar tan bien siendo aparentemente tan joven?», pensaba. Y quedó tan encandilada que ni siquiera se percató de la ausencia de su novio. Cuando quiso darse cuenta, no había ni rastro del chico.


    Zu... ¿Zurin? Sapos malditos... —farfulló al verse sola. ¿Qué debía hacer? Sabía que cogiendo la línea correcta, tal y como había comentado con el warlock, llegaría a la sala de recreativos antes de en lo que se dice quidditch. Pero claro, el problema estaba en entrar. No le apetecía entrar con descaro y ser vista por un segurata, no se podría desaparecer tan fácilmente de la sala de reclusiones y llegaría demasiado tarde a clase. No, debía haber otra solución.


    Observó a su alrededor. Las personas se acercaban a las máquinas expendedoras de la estación para comprar sus tickets. Introducían el dinero y ya podían pasar con ese trozo de papel. Nada más introducirlos en el lector, las barras se movían automáticamente. Pero ella no tenía ni un penique de esos, aunque poseía algo de mucho más valor: su varita.


    Se acercó a la barrera más alejada de la muchedumbre. Tan solo necesitaría un poco de intimidad para llevar a cabo un encantamiento de lo más básico que haría que las barras se movieran sin necesidad de introducir el billete. Esperó a que el segurata estuviera distraído para sacar la punta de su varita escondida en el bolso. Rápidamente, la movió en dirección a las barras y murmuró el encantamiento en cuestión. Acto seguido, se dirigió hacia ellas bien dispuesta y felizmente las atravesó.


    Fácil —comentó hacia nadie. Recordó las palabras de su chico para dirigirse a la línea de color rojo, que la conduciría al punto de encuentro. Tan solo tuvo que esperar un par de minutos hasta que el siguiente coche se detuvo ante ella. Subió y le preguntó a un señor que en qué parada se debía bajar para llegar al próximo centro comercial y esperó hasta llegar.


    Bajó del coche y fue hasta la salida, procurando no perderse con tantas bocas de metro juntas. Una vez fuera, un majestuoso edificio se alzaba sobre ella. Debía ser ese. Se introdujo en él y pudo ver cómo un cartel luminoso anunciaba el nombre del recreativo una planta más arriba de la que se encontraba. Subió por las escaleras mecánicas preguntándose qué las impulsaría a funcionar y anduvo hacia la puerta, donde se encontraba el chico que le había pillado la delantera unos veinte minutos atrás.


    ¡Zurin! Me dejaste sola, maldito. Al menos me alegra ver que llegaste sin problema y bastante antes que yo, supongo. Por cierto, ¿y Sagitas? —echó un ojo a su alrededor y pudo ver que no estaban solos, sino que habían ya cuatro personas más. Pudo distinguir, entre ellos, a Anne Gaunt, su jefa, y a Darla, compañera de bando. Hizo un saludo generalizado con la mano y esperó a la vera de Zurin a ser llamados por su profesora correspondiente.

  4. http://i.imgur.com/23ho1pb.png

    Alumnas: Alessandra G. Delacour y Alyssa Black Triviani - Leah. A Ivashkov

    * * *

    Septiembre llegó trayendo un nuevo curso académico. El día uno, el Expreso de Hogwarts trajo consigo a numerosos magos y brujas de todo tipo. Para algunos era su primer año, lleno de ilusiones y con expectativas preconcebidas, mientras que muchos otros por fin se graduarían y pasarían a formar parte de la vida adulta de la comunidad mágica de Gran Bretaña, que incluiría también ampliar sus estudios en la Universidad.

    En el Ateneo de Conocimientos las clases continuaban como de costumbre, acompañadas del calor estival que aún perduraba. Valentina esperaba que las altas temperaturas no alteraran las propiedades mágicas de los brebajes que pronto daría a conocer a la nueva trupe de alumnos que se avecinaba. Pocos días antes, había recibido la noticia de que compartiría el aula con un compañero del claustro, el señor Niko Tonks, con el que también trabajó tiempo atrás siendo su profesora de Pociones. Tan solo esperaba que su invitado se encontrara cómodo entre sus calderos para llevar a cabo la lección de Idiomas.

    Aún temprano, la profesora novel llegaba a los terrenos de la Universidad para preparar el aula a tiempo para sus alumnos. Esperaba que las lechuzas enviadas a @ y @@Alyssa Black Triviani advirtiéndoles de la hora y el número de aula hubieran llegado correctamente a sus destinos. Suponía que los demás alumnos del otro profesor acudirían más o menos a la par que ellas.

    Con un par de libros colocados en dos pupitres, se dirigió a su escritorio para echarle un último ojo a las fichas de alumnos que había solicitado con algunos datos relevantes. De ahí pudo saber que Alessandra llevaba trabajando en San Mungo durante un largo tiempo y que Alyssa era inquisidora. Mientras tanto, Niko llegó a la habitación y la saludó amablemente. A cambio, ella lo invitó a una taza de café. Los minutos pasaron rápidamente mientras tomaba una de sus bebidas favoritas.

    ¡Bienvenidas a Pociones! —dijo cuando finalmente las dos muchachas se situaron en los asientos—. No se si me conoceréis, pero me presento. Soy Valentina Ricci y seré vuestra profesora durante este tiempo. A mi lado se encuentra Niko, profesor de Idiomas, con quien compartiremos lección —presentó a su compañero de oficio—. Antes de entrar en materia, me gustaría conoceros un poco mejor. ¿Qué os ha motivado a indagar más en el noble arte de las pociones? ¿Cuáles son vuestras expectativas? ¿Qué os produce más curiosidad de todo este amplio campo que se nos ofrece? —terminó apoyándose sobre el escritorio para escuchar mejor a las recién llegadas.

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  5. Estimada Srta. Ricci:
    Nos complace invitarla a la Subasta Mortífaga que se celebrará el día 1 de septiembre en las mazmorras de la Torre Negra. La recepción se llevará a cabo a partir de las 21:00.
    Atte.: http://i.imgur.com/W5lf85I.png
    Mia Black Lestrange

     

    La invitación que había llegado días atrás a casa de la bruja había quedado cogiendo polvo sobre su mesilla de noche. Justo era la fecha indicada para el evento, un par de horas antes de que se iniciara la velada.
    Suena interesante, ¿no crees?
    ¿El qué, exactamente?
    La fiesta que te comenté hace un par de días. Bueno, no es una fiesta como tal, es una subasta para los miembros del bando. Y adivina qué se subasta. ¡Mortífagos! —contestó antes de que la elfina pudiera responder.
    No tiene mala pinta. Tal vez debería arreglarse ya, si desea ir. Así podrá tomar un poco el aire, después de unos cuantos días sin salir del castillo.
    Valentina conversaba amigablemente con su elfina de nombre Ellie. En eso último que dijo, llevaba bastante razón. La joven llevaba días sin apartarse de Ottery mas que para hacer unas cuantas compras básicas a lugares cercanos. No parecía tener ánimo, no le apetecía hacer otra cosa que no fuera vaguear en su habitación, y eso producía que Zurin se preocupara. Por suerte, si asistía al evento podría encontrarse con su pareja, así que tenía una buena excusa para ponerse un vestido bonito y acudir a la cita.
    Media hora antes de las nueve de la noche, la muchacha estaba lista. El conjunto elegido esta vez era el de un mono largo negro de escote abierto y espalda al aire, con plataformas altas color crema y el pelo recogido en una coleta lisa. La máscara apropiada más una pulsera dorada para darle vida al conjunto, y...
    El broche final —dijo Ellie mientras colocaba el anillo de pedida en la mano izquierda de su ama—. Así podrán aprovechar para hacer público su recién estrenado compromiso.
    ¡Es cierto! —exclamó— Aún no he tenido la oportunidad de presumir de tan elegante joya —terminó acariciando la enorme gema con su mano derecha.
    Antes de que se hiciera demasiado tarde, salió hacia los terrenos, justo hasta donde los límites de aparición dejaban de surtir efecto. Su cuerpo desapareció en una enorme bola de humo negro para aparecer en la Torre Negra, lugar indicado para el acto. Avanzó en dirección al sótano, a las mazmorras, donde unos carteles anunciaban en el pasillo la puerta correcta.
    ¡Zurin! No esperaba que estuvieras por aquí tan puntual —saludó a su amado con un beso en los labios—. ¿Qué tal todo? ¿Cómo te ha ido el día en el Ministerio, querido? —lo sujetó de la mano.
    Observó a su alrededor. Los invitados iban llegando poco a poco. Se podía divisar un montón de bebidas, así que se acercó a una de las mesas para servirse una buena copa de ginebra sabor fresa. Una mujer ataviada con un mono de cuero bastante ajustado iba dando la bienvenida. Una vez que estuvieran todos los invitados, comenzaría la subasta.
    Quizá deberíamos ir tomando asiento —sugirió.
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  6. Vengo a hacer un conocimiento, ya que el último que me correspondía por este nivel lo dejé tirado, ups ^^"


    * Nick: Valentina Ricci

    * ID: 119766

    * Conocimiento: Estudios Muggles || En caso de que no se abra tomaré Runas Antiguas (no, no tiene nada que ver con que mi novio los haya elegido xD)

    * Nivel de Magia: 4

    * Link a la Bóveda: Bóveda nº 107218

    * Link a la Ficha: Ficha nº 107207

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  7. La enorme perla que lucía en medio del cielo estrellado se alzaba sobre toda la Isla de Creta. Una figura femenina y esbelta caminaba lentamente por la paradisíaca Playa Elafosini. La arena rosácea se deslizaba entre los pequeños dedos descalzos de la muchacha, que avanzaba dirigiéndose hacia la orilla hasta que pudo sentir el agua del mar. Se sujetó cuidadosamente el vestido blanco de tela fina hasta la altura de las rodillas, pues era demasiado bonito como para permitir que se estropeara con las sales marinas.


    Lástima que un lugar tan puro se tenga que convertir en un escenario manchado sangre —entonó hacia la nada y con la mirada perdida en el horizonte, que quedaba adornado con alguna que otra barca pesquera.


    Y era cierto, pues se podía escuchar al mismísimo silencio allí presente. Las aguas rompían tímidas sobre las rocas, siendo hasta difícil darse cuenta de que se encontraban allí, estáticas, cubiertas de algas y con alguna que otra visita matutina de los cangrejos de mar de la zona. La brisa fresca jugueteaba con algunos de los mechones cobrizos que caían cubriendo toda la espalda de la joven, así como con las hojas de los árboles que se encontraban a bastantes metros desde su posición.


    Valentina Ricci continuaba esperando pacientemente. Allí debería enfrentarse a un mago de entidad desconocida. Tan solo era consciente de que pertenecía al bando oscuro, y que durante esa noche lo haría pagar por todo el sufrimiento que hubiera causado a la comunidad mágica honrada donde convivía. Solo así, si veían caer poco a poco a sus miembros, la Marca Tenebrosa dejaría de actuar tan vilmente como lo estaba haciendo hasta la actualidad.


    Te estaba esperando... —dijo justo antes de darse la vuelta. A unos cuantos metros se encontraba un muchacho, casi adolescente, algo tostado y un tanto bajito para ser un chico. No parecía prometer mucho, así que esperaba acabar pronto con aquel enfrentamiento. Se fue acercando poco a poco hasta quedar lo suficientemente cerca como para lanzar un ataque y que impactara contra él.


    No había nada más que arena entre ellos. La playa se extendía a ambos lados, quedando rodeada por rocas en los dos laterales y un frondoso bosque en el lado paralelo al mar, que pronto quedaba cortado por una gran estructura rocosa con una entrada imperceptible para los muggles.


    Langlock —Apuntó hacia el Crowley y el rayó salió hacia él. Su lengua quedaría pegada al paladar, impidiéndole poder pronunciar palabra durante un turno completo.


    Mejor ni pronuncies palabra, no me interesa nada de lo que me vayas a decir —terminó con las presentaciones.

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  8. De los dos hechizos que Valentina lanzó, tan solo uno fue útil, ya que el Necromantia Lingua impidió que el primer ataque impactara en la bruja. El siguiente problema que tenía es que se encontraba silenciada por la segunda acción que llevó a cabo, por lo que tan solo podría utilizar hechizos no verbales.


    Fuego púrpura fue el primer hechizo en el que pensó justo antes de que Mia invocara su segundo Fuego Maldito. Esta invocación de una llama violeta la dejó inconsciente, sin llegar a quemarla.


    Lo siguiente que pasó por su cabecita fue un Episkey, puesto que el segundo mago que había hecho notar su presencia la atacó fracturándole el esternón. Le había hecho daño, sí, pero mucho más sería el daño que recibirían ellos.

  9. Habían entrado tres de esos repugnantes magos tenebrosos en escena. Una mujer y un par de chicos que, a decir verdad, lucían un aspecto un tanto enclenque. Sabía que debía actuar más rápido que ellos. Sin pensárselo dos veces, se dirigió hacia Mia y apuntó hacia la varita que sostenía con una de sus manos.


    Limitate —de esta forma, la varita de Mia quedaría limitada, impidiéndole lanzar rayos e invocaciones durante los siguientes tres turnos completos. Esto les daría bastante ventaja a los aurores, y la pelirroja era consciente de ello.


    El siguiente efecto sería para tanto para Mia como para Liam, uno de los dos muchachos. Necesitaba frenarle los pies, tal vez cegarlos, y para eso tenía el hechizo perfecto en su repertorio...


    Strellatus —la luz flasheó con gran fuerza sobre el rostro del muchacho, primero, para continuar después con el de la chica. Así, los dejó completamente ciegos y con un ardor de lo más molesto.


    Que sepáis que vais a pagar por todos vuestras malas acciones esta noche, ¿escucháis bien?

  10. Parecía que todos los aurores disponibles en esa fecha estaban allí presentes. Esperaba que el número de malhechores estuviera equiparado al de ellos tres. Primero de todo, tendrían que defenderse antes de sufrir los primeros ataques.


    Corpus Patronus —con la varita en alto, invocó la figura de una enorme víbora venenosa que se alzó delante de ella para protegerla de todo mal—.


    Aqueroa —continuó envolviéndose en una masa de agua en forma de esfera que serviría para repeler cualquier ataque, dejándola de todas formas poder atacar.


    Por ahora será suficiente... —susurró para sí misma preparándose para el inminente ataque de los mortífagos. Segundos después, ya habían comenzado a salir de sus escondites y estaban intercambiando hechizos con el primero de sus compañeros aurores.

  11. Las miles de gotas de lluvia caían de forma intensa en una noche de cielo casi completamente nublado. Una tormenta propia del período estival invitaba a los magos y brujas del lugar a quedarse en casa, refugiados en sus respectivos hogares, pero parecía que la pelirroja estaría llamada a acudir a otro lugar un poco más lejos del cómodo sofá en el que deseaba estirarse.


    El patronus plateado de un águila imperial entró velozmente por las ventanas del Cuartel General de Aurores, irrumpiendo en el ambiente de paz que se respiraba. Era evidente que uno de sus jefes necesitaba ayuda, o bien la necesitaría dentro de poco, así que no debía hacer oídos sordos y tendría que presentarse junto a ella en la mayor brevedad posible. Así, escondió su rostro bajo un velo de luz opaca, se vistió con un atuendo cómodo de camiseta y pantalón corto y desapareció para aparecerse en el lugar indicado.


    El escenario de aquella noche era la mansión Malfoy. Valentina hizo su aparición fuera de los jardines para adentrarse en ellos a pie. Allí pudo comprobar la identidad de los compañeros aurores que habían acudido.


    Buenas noches. Una velada interesante, parece ser —hizo una breve reverencia—. Espero que hagamos justicia en este lugar lleno de magos oscuros —finalizó—.

  12. ¡Buenas! Me paso por aquí porque la dueña y señora del escuadrón insistió en que dejara fichita xD

     

    Nick: Valentina Ricci
    ¿Cuál es tu área de rol favorita?: Mmm... supongo que en los negocios del Callejón. Compulsear en una trama del MM por subir al T4 me estresa y dejo de rolear por placer u.u

    ¿Cual sería tu sugerencia para mejorar el rol del bando?: No se, no participé mucho, pero repetiría lo que ya se ha comentado anteriormente. Un rol en el que todos participáramos, o la gran mayoría, haría que nos conociéramos más y estuviéramos en un ambiente guay. La cosa es que eso supone un poco de compromiso por parte de todos. Si a muchos no les apetece entrar en una trama pues poco se puede hacer.

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  13. Bueno, pues paso a reactivarme con un nuevo post o/¿Qué tal, chicos? Hace mucho que no me paso por aquí :( Pero bueno, espero que alguno de los mensajes que envié cale en la conciencia de alguno y tengamos nuevos aspirantes dentro de poco.


    Pillé a tres novatos:


    gouveia

    manuito_88

    Maida SC


    Básicamente les ofrecí ayuda para ir empezando, vaya, hacer la ficha, y les dejé caer si habían pensado pertenecer a un bando o a otro.


    gouveia, que es una chicade Hufflepuff, me contestó, pero solo dijo que gracias y que si tal me preguntaría. manuito_88 aún no leyó, y Maida SC me dejó en leído, pero se que ha pedido formar parte de la Ivashkov y Rambaldi (nunca se si esta última es mortífaga), así que apunta maneras.


    Y pues eso es todo por ahora.

  14. Ok, ya grabé la prueba de audio :3 La cosa es que no dejé el correo ni nada y obviamente no tengo acceso a la carpeta de las pruebas. Mi correo es vito.95@live.com

     

    De todas formas, por si urge tener que subirla, la puse en drive y creo que todo el que tenga el enlace la puede escuchar. Porfis, alguien que tenga acceso que la descargue y la ponga en la carpeta junto a las otras. Esta es la prueba. Creo que está en .mp3, por lo que no debería haber problema a la hora de reproducirla.

     

    ¡Saludos!

  15. Uy, me encontré esto de casualidad +.+ Y encima tiene premios! Paso a dejar fichita:

    Nick: Valentina Ricci
    Nivel de duelo que crees que posees (con un número del 1 al 5 ): Ehm o.o 2? 2'5? No se, nunca tuve un duelo serio xD
    ¿Que esperas de esta competencia?: Aprender, pasármelo bien y llevarme algo si es que cae
    Disponibilidad horaria y país: España, todo el día (a finales de Septiembre tendré nuevo horario)

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  16. Hola! Creo que aún estoy a tiempo de enviar la prueba, si no me equivoco. Lo iba a grabar ahora, pero juro que lo he intentado y no he hecho más que grabar chorradas, que poco más y se me va a llenar la memoria interna del movil con los intentos de la prueba xDDD Así que creo que me esperaré a mañana para enviar el audio, si no os importa :3

     

    Saludos!

  17. Pues no se muy bien cómo va esto, pero me han dicho que se puede votar y vine a cotillear.

    Hombre: Mi voto es para Emmet Haughton Gaunt, que para algo es mi hermanoso y nos une la sangre.

    Mujeres: Voto a Leah A. Ivashkov porque es muy monina. ¿Quién no querría una Leah en su casa? (?)

     

    Y eso es todo.

     

    (Realmente no se si es bueno o malo que te voten. Espero que sea bueno y no me matéis)

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  18. He leído y acepto los términos y condiciones de este contrato (?)

     

    Supongo que no vale solo con eso porque se consideraría spam. Me moló mucho eso de los nuevos hechizos +.+ aunque tengo que mirar en qué rango se pueden usar y tal. Tengo ganas de asalto. Al Centinela le echaré un ojo, así como al Vox, que postulé y ahí quedó la cosa *lalala* Tutorías no se hasta qué punto me interesa, me suena a tocho y a tener que cumplir con mi tutor y probablemente acabaría abandonándolo. Al salseo del punto 10 también le eché un ojo.

     

    Pues eso, que ando por aquí.

  19. Apenas llevaba medio año en la comunidad mágica situada en Gran Bretaña, y lo último que esperaba encontrarse Valentina era con una fiesta de ese calibre. Al parecer, el Orgullo Gay era una fecha señalada también en el calendario mágico.
    Decidió vestirse con un vestido fresco de color blanco, acompañado con una corona de flores multicolores en la cabeza, de los mismos colores de la bandera LGTB. Sin duda, un atuendo perfecto para pasar el día de fiesta junto a sus amigos mortífagos para celebrar tal ocasión y un festejo añadido: los Crazy Awards. Una vez lista, se dirigió hacia el escenario montado en el Callejón Knockturn pensado para la ocasión.

     

    ¡Hola, chicos! —saludó alegremente a los magos que ya se encontraban allí. Acto seguido, recogió las papeletas que su querida amiga Ashura se encontraba repartiendo para rellenar los correspondientes votos.

    Mujeres

    • Miss pechonalidad: Taurogirl Crouchs <3, Galery Grindewald
    • La madre de mis hijos: Ashura Lestrange, Evarela Black Haughton
    • Sex Symbol: Leah A. Ivashkov

    Hombres

    • Johnny Bravo: Liam Hawthorne, Spectrum Crouchs
    • El padre de mis hijos: Mr Zurin :love:
    • Sex Symbol: Mr Zurin

    Mixtos

    • Hetero con cara de gay: Ernest Macnair Wilfred
    • La última coca cola del desierto: Patrick Colt, Spectrum Crouchs
    • Más hiperventilado/a: Ernest Macnair Wilfred, Anne Gaunt, Mery Gaunt Karkarov
    • El/la más hincha: Emmet Haughton Gaunt, Divied E. Potter Black
    • El/la más Dramoso/a: Pik Macnair
    • El/la más spamoso/a: Mr Zurin & Ashura Lestrange, nuestro blinkie lo dice todo! :3
    • El/la más vago/a: Hugo J. Haughton
    • El/la Cara de Pollo: Jessie Stabolito, Felicity Malfoy :P
    • El/la más gruñón/a: Patrick Colt
    • Mortio reloaded: Evarela Black Haughton (aunque no se si se llegó a ir o.o)
    • El/la Mortio/a del Mes: Juv Malfoy Croft
    • El/la más raro/a: Aysha Potter Black
    • Reina Gay: Hugo J. Haughton xD
    • El/la más picaflor: Juv Malfoy Croft
    • El/la más enamoradizo/a: Agatha Haughton Malfoy
    • El/la más emo: Vladimir Karkarov
    • El/La Bob Esponja: Anne Gaunt, Pik Macnair
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  20. ¡Maldita sea! ¡Maldita sea! —repetía una y otra vez la joven mientras daba vueltas por su habitación— Ya es la hora y aquí sigo, sin poder salir —refunfuñaba en voz alta.

    Valentina continuaba frotándose el rostro con todos los jabones habidos y por haber sin ninguna mejora visible. Por suerte, hacía ya un buen rato que su elfina Ellie se había puesto en marcha en busca de ayuda, y uno de los elfos del castillo familiar iba ya en busca del director para ponerlo al tanto de su situación. No era nada formal llegar tarde a su segundo día de trabajo, pero era preferible antes que presentarse con esas pintas y ser la comidilla de tdo el alumnado hasta Merlín sabe cuándo.
    Señorita Ricci, he traído el preparado lo más rápido posible del Magic Mall —Las palabras de Ellie sonaron para la pelirroja como si de una bendición se tratara.
    ¡Al fin! Muchísimas gracias. De tener que haberlo hecho yo, no se cuánto más habría llegado tarde. —En seguida, tomó el frasco y lo ingirió al completo. —Esperemos que esto sea suficiente para recuperar mi bello rostro. ¡Ah! Y recuerda amenazar de muerte de mi parte a los niñatos de la primera planta, que se que han sido ellos los que han jugado con mi té.
    A toda prisa, terminó de acicalarse y vestirse con unos pantalones hippies anchos y coloridos y una blusa básica color blanco. En su bolso metió algunos frascos y salió corriendo hacia el exterior. Una vez en las afueras y tras comprobar que las inflamaciones iban desapareciendo, se desapareció para aparecerse en los terrenos de la Universidad.
    Madre mía, ya han pasado como quince minutos. Elvis me va a crucificar boca abajo —iba diciendo mientras aceleraba la marcha hacia el Ateneo de Conocimientos. Caminaba atravesando los jardines cuando escuchó cierto ajetreo de alumnos proveniente de la orilla del lago. La muchacha no pudo evitar acercarse a curiosear un poco. Total, qué más daba ya ir tarde cinco minutos más que menos.
    Cuál fue su sorpresa que, mientras cambiaba su rumbo para dirigirse hacia lo que parecían unas gradas, pudo distinguir la voz del director de la Universidad. Sin estar demasiado segur de que se tratara de él, fue acercándose cada vez más apresurada hasta poder confirmar que era el mismísimo Elvis, el cuál se encontraba junto al profesor de Transformaciones y un grupo de varios muchachos.
    ¡Señor director! Perdone la demora, pero ya sabe que he tenido cierto... problemilla en casa —se disculpó cuando apenas quedaban rostros en su piel de aquel fatal accidente—. ¿Qué hace aquí? Oh, bueno, no me quiero entrometer en sus asuntos. Por cierto, ¿sabe dónde se encuentran mis alumnos? Espero que no se hayan marchado a casa viendo que no llegaba —preguntó preocupada—.
  21. Al mejor aprendiz pienso regalarle un pase gratis a mis baños. ¡Por Merlín! Dais asco con tanto fango por encima, lo necesitaréis —dijo a la par que sus pasos avanzaban hacia la muchacha pálida de cabello cobrizo.


    Así que eres una Hawthorne, ¿cierto? —preguntó con aire de desdén mientras acariciaba una mejilla de la muchacha con la punta de su varita —Creo que no nos han presentado antes. Perdona, he estado demasiado ocupada —se disculpó queriendo ocultar que en realidad tampoco le interesaba tener que hacer de niñera con los aspirantes a la Marca— ¿Qué tal tu padre? Gran mago, sin duda. Espero que su hija haya heredado las mismas dotes mágicas. Ya sabes, no está bonito eso de decepcionar a papá —terminó susurrándole al oído.


    Acto seguido, colgó su larga capa de uno de los resaltos que sobresalían de la pared. Miró hacia el fondo de la habitación para clavar su mirada sobre uno de los muñecos de entrenamiento. Levantó su varita y pronunció:


    Accio estatua —El objeto atravesó la sala, llegando casi a rozar la cabeza de Cillian, que aún seguía inmóvil en el centro. La joven lo colocó entre su pupila y ella y volvió a dirigirse a Beryl.


    ¿Has escuchado hablar del hechizo Seccionatus? —y viendo la cara de indiferencia que recibió por respuesta, continuó— Claro, la dirección de Hogwarts prohíbe enseñar este tipo de hechizos. Malditos sean... Pero bueno, te lo describiré brevemente. Se trata de una invocación de unas doce medias lunas cortantes que irán dirigidas a tu víctima, en este caso el muñeco«A no ser que pretendas desafiarme y me las lances a mi», pensó—. Es muy interesante, puedes sacarle bastante sangre al rival, y lo mejor de todo es que simplemente tienes que pensar en el hechizo y sus efectos, ya que es del tipo no verbal. Te vendrá bien cuando quedes silenciado en un combate y no puedas pronunciar una palabra, tal y como ahora. ¡Silencius! —elevó la voz apuntando hacia la chica hasta dejarla muda. Agarró el muñeco y se alejó unos cuantos pasos hacia atrás.


    Veamos cuántas medias lunas eres capaz de lanzar. Espero que al menos aciertes una —rió malvada—.

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  22. Ola k asei @@Mery Gaunt Karkarov @@Bea Haughton G.

    Valentina está aquí *levanta manita* y he estado leyendo los posts anteriores. Acabo de publicar la tercera prueba, ayer llegamos de noche y me quede frita en la cama. Echadle un vistazo y a ver qué os parece, pero en resumen es una habitación de la mansión como la Sala de los Menesteres donde el ED practicaba, y que cada una supervise a un mini y a ver con qué nos sorprenden antes de enseñarles los hechizos.

    Por otro lado, llegué tarde a la segunda prueba y ya está abierta la tercera, no se si debería rolear o no porque ya como que avanzó la trama. Por cierto, ¿solo hay tres minis? o.o

    1. Ábrela, no tengo problema.

    2. OMG las diferencias son mínimas xDDD Pero sí, el 1 mola más, si no el 3.

    Sobre Dylan e.e es que creo que pasa tantísimo del tema xD Se podría intentar, aunque más de una vez le dije en modo informal que ya era hora de graduarse y me fumó.

    Estoy bastante off con el tema de los consejeros, así que obviamente el reparto me parece bien porque poco tengo que opinar.

    3. Guay. ¿Tiene algo que ver con la ceremonia de iniciación, o simple diversión?

    Por cierto, ¿al final qué pasó con la Noche de Walpurgis? o.O

    4. Chachi +.+ quedará bello.

  23. Sabía que los aspirantes habían acabado exhaustos tras la prueba en el bosque bajo la tormenta, pero eso se trataba de un simple juego de niñitos comparado con todo a lo que se tendrían que enfrentar si es que llegaban a formar algún día parte de las filas de la Marca Tenebrosa. Asaltos sangrientos, amigos yaciendo en el suelo al borde de la muerte e incluso miembros de sus propias familias pidiendo clemencia con un último hilo de voz saliendo de entre sus labios.

    No, ninguno de ellos estaba preparado... por el momento. Algunos Caballeros de Walpurgis ya había demostrado su valía, pericia y astucia, unos más que otros. Pero las tres mentoras sabían que no sobrevivirían a un ataque fenixiano hasta que no supieran controlar por completo sus poderes. Y precisamente en esa noche oscura y tormentosa deberían ponerse a prueba una vez más.

    Bienvenidos de nuevo a la mansión, chicos. ¿Cansados tras la pequeña aventura en el bosque? —sonrió levemente mientras observaba a los tres muchachos, algunos llenos de barro y empapados de la cabeza a los pies. —He de decir que vuestro atuendo andrajoso no casa precisamente con las instalaciones majestuosas de la mismísima Riddle —volvió a decir, esta vez con cierto aire de desaprobación—. Por favor, venid conmigo.

    La pelirroja anduvo pasillo alante por un pasillo que algunos candelabros de oro viejo alumbraban lúgubremente. Detrás de ella, los aspirantes caminaban en fila india, siendo Bea y Mery las que cerraban la comitiva. Menos de un par de minutos fueron suficientes para llegar hasta un portón de madera.

    La estancia era de lo más amplia. Un suelo cubierto con varias alfombras negras se concentraba en el centro de la habitación. Lámparas de araña colgaban del techo y varios ventanales de cristal y espejos de cuerpo entero quedaban enmarcados sobre la pared de piedra fría. Al fondo, subiendo unos pequeños escalones, se encontraban como una especie de muñecos de boxeo, estatuas de madera y de metal, algunas con dianas en el pecho y ruedas a modo de pies, todas preparadas para el entrenamiento que se llevaría a cabo a continuación.

    Supongo que os preguntaréis qué estamos haciendo aquí —dijo la mortífaga. Con un simple chasquear de dedos, las lámparas comenzaron a brillar fuertemente, permitiendo contemplar los muñecos que se hallaban al fondo—. Hemos podido comprobar algunas de vuestras habilidades pero, ¿qué tal se os dan los duelos? —sacó la varita escondida en su capa antes de seguir— Se que en Hogwarts habréis aprendido, al menos, a sujetar la varita y a apuntar al contrincante, pero me temo que nada tienen que ver las clases de Duelo Avanzado con la vida real. Allí fuera os vais a encontrar con más de una ocasión en la que tendréis que volarle la cabeza a alguien. Por supuesto, siempre en defensa propia, ¿no? —volvió a sonreír pícaramente—.

    Bien, no hay que ser un genio en matemáticas para hacer el reparto. Cillian, últimamente has estado demasiado tiempo con Mery, así que esta vez te tocará trabajar con Bea. Pansy, tú serás quien vaya con Mery, y yo me quedaré con Beryl. No se trata de un duelo, no os vengáis arriba. Por ahora, tan solo practicaremos la técnica que ya sabéis hasta perfeccionarla, y cada jefa supervisará a un muchacho.

    Allí al fondo está el material que utilizaremos. Para empezar, quiero que cada uno nos demostréis de qué sois capaz, así que no nos bastará con que sepáis hacer levitar una simple pluma —hizo una pausa para comprobar que sus pupilos entendían la explicación.

    ¿Todo claro? Eso espero, no me gusta repetir lo mismo dos veces.

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  24. Holi,

     

    Se que he estado un poco desaparecida este mes, I'm sorry u.u Pero ya vuelvo a ponerme al día con las cosas del foro, entre ellas el escuadrón. A ver si por fin consigo que algún novato me conteste a un MP, que en todo el tiempo que llevo aún no lo conseguí T_T #truelife

     

    Pues eso, que espero que la jefecita Fee no me mate mucho.

     

    ¡Saludos!

  25. Un ambiente lúgubre amenizado con la banda sonora de truenos eran tan solo el prólogo de los extraños acontecimientos que se llevarían acabo en aquella noche de ambiente primaveral. Era el día señalado, el día en que los aspirantes a mortífagos, conocidos también como Caballeros de Walpurgis, deberían mostrar toda su valía y entereza antes de proclamarse oficialmente seguidores del gran Señor Tenebroso. Y Valentina sería una de las mujeres indicadas para comprobar que aquella joven horda de magos novatos merecían el privilegio de unirse a sus filas. Pero la misión encomendada por las mismísimas líderes mortífagas no las realizaría en solitario, sino que la acompañarían Bea Haughton y Mery Gaunt, a cuál más imponente.


    Las tres poderosas brujas se encontraban en la mansión Riddle, lugar de reuniones para los miembros del bando. Cada una vestía una hermosa capa negra y poco a poco fueron cubriendo sus rostros con la máscara, en el caso de la pelirroja color plateado y brillante con algunos relieves oscuros. Siguiendo las instrucciones, cada una debería secuestrar a los caballeros o damas indicados y trasladarlos desde los jardines de Hogwarts hasta la mansión sin que fueran siquiera conscientes de a dónde se dirigían. Tras desaparecer sus dos compañeras, Valentina se envolvió en una nube de humo antes de aparecerse en los jardines del castillo.


    Con bastante sigilo, pudo ver a sus víctimas de espaldas. Eran las últimas que quedaban en el lugar y no sabía siquiera si se habrían percatado de que alguien se había llevado a sus compañeros. Levantó la varita mientras se acercaba a la mujer de cabello rubio antes de decir:


    Petrificus Totalus —y la mujer cayó rígida sobre el césped. Y así volvió a hacer con el muchacho.


    Lucrezia di Médici y Anastacius Wright. ¿Qué les habría llevado a querer formar parte de los suyos? Tal vez lo mejor hubiera sido ofrecerles un zumo con unas cuantas gotas de Veritaserum y que se hubieran puesto a cantar. O mejor, invitar a un mago legilimante. Sin duda, hubiera sido el método más rápido, e incluso más ortodoxo. Pero bien es cierto que la diversión de las tres damas se hubiera reducido bastante.


    Con cada cuerpo sujeto por una mano, Ricci volvió a aparecerse en el mismo lugar del que se fue. Los dejó junto al resto de aspirantes para que pudieran escuchar las instrucciones que daba Bea.


    Tranquilos, el efecto se os pasará en seguida —entonó no muy segura de que los muchachos pudieran escucharla. —Cuánta carne fresca... me gusta —sonrió pícaramente mirando a sus compañeras. —Espero que merezca la pena haberme mojado bajo la lluvia para recogeros —terminó diciendo.

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