Encantamientos~

[Dennis Delacour]

Todos dimos nuestras respectivas respuestas mientras Bel de forma muy atenta las escuchaba, supongo que estaba analizando cada una de ellas para ir haciéndose una idea de lo que queríamos cada uno de nosotros con respecto a esta clase, que hasta el momento estaba siendo bastante agradable por el grupo con el cual la estaba compartiendo. Realmente estaba bastante feliz en esta clase, prácticamente estaba "Encantada en Encantamientos" sonreía ante el juego de palabras en mi mente pero al menos no lo dije en voz alta ya que en mi cabeza sonó divertido pero creo que habría sonado algo tonto pero bueno estábamos en familia así que no me hubiese preocupado mucho.

 

Bel agradeció por nuestras respuestas recalcando que lo importante era poner todo el empeño y esfuerzo para lograr aprender lo mayormente posible sobre este tema y de esa manera conseguir nuestros propósitos. Cuando dijo que ahora era el momento de la práctica me alegre mucho ya que quería empezar a reforzar lo que había aprendido en el colegio y de la mano de bel se que ibamos a estar muy bien. - Totalmente preparada para lo que haya que hacer - dije a nuestra profesora con todo el ánimo posible.

 

Saco tres pergaminos doblados que puso sobre el escritorio, no había terminado de explicar que teníamos que hacer cuando Heberth prácticamente se lanzó para ser el primero en elegir su pergamino escogiendo el de la derecha - Tranquilo heb vamos sin atropellar - le dije riendo por el entusiasmo con respecto a la tarea. Yo me decidí por el de la izquierda, dejando a Wen el del centro.

 

Al abrir el pergamino vi que se trataba del encantamiento Levitatorio, era uno de los primeros que se aprendían pero eso no quería decir que fuera de los mas sencillos, había ocasiones en que las cosas no se daban como esperaban. Después de escuchar las indicaciones de Bel y que nos mostrara los espacios de trabajo me dirigí a donde reposaba el material que me serviria en mi tarea.

 

Observe lo que tenía en mi lugar, plumas de diversos tamaños y rollos de pergamino para practicar reposaban sobre una mesa larga. Supongo que empezaremos por algunos objetos que no fueran tan pesados y de ahí en adelante todo sería más difícil. Bel tomó asiento en su escritorio, he de admitir que no me gustaba ser observada pero bueno así funcionan las clases sino de qué otra manera podrían evaluarnos y corregir nuestras fallas.

 

Apunte mi varita a una de las plumas pequeñas, iba a empezar de menor a mayor por ahora. Y con voz clara pronuncie - Wingardium Leviosa - poco a poco la plumita fue alzando vuelo aunque no me gustaba que se alejara de donde estaba, pero era una de las fallas de este hechizo, la falta de control. La deje de encantar para que volviera a caer donde estaba en primer lugar. Tenía que seguir intentando pero evitar que se salieran de mi espacio para que no creyeran que no podía controlarlas.

 

Bueno tal vez con algo de mayor tamaño pudiese tener mejor manejo, pensé y volví a mirar mis opciones, aunque en mi mente estaba la inquietud sobre qué pasaría si quería encantar algo que no estuviera en esta mesa precisamente.

 

@ @@heberth portillo @@Wendolyn Maxwell

[Wendolyn Maxwell]

Luego de terminar la exposición de las infinitas razones para tomar esta clase y que la profesora validara y agradeciera cada una de ellas, se decidió que esa hora de pasar a la parte divertida de esta lección, que según mi criterio era la parte práctica. Bel buscó por unos segundos en su bolsillo hasta sacar tres pergaminos cuidadosamente doblados para que no se viera su contenido y los dejó sobre el escritorio. Cada uno de ellos contenía un encantamiento que debíamos realizar.

 

Mi hermano se apresuró a tomar uno de los pergaminos sin dejarnos tiempo a Dennis o a mí de terminar de procesar la información proporcionada por Bel y se dirigió a su puesto de trabajo totalmente concentrado en su tarea. Aquello era tan típico en él que solo atiné a sonreír, sobre todo después de escuchar el comentario de mi tía ante su comportamiento.

 

- Dudo que te escuche.- Murmuré divertida mientras que con un ligero encogimiento de hombros me acercaba al escritorio para tomar el último pergamino que quedaba, justo el del centro.

 

Al abrirlo descubrí que el encantamiento que debía practicar sería el de cambio de color. Había leído sobre él hace ya mucho tiempo en un libro especializado en la materia, pero no recordaba exactamente alguna ocasión en que lo utilizara o en que viera a un mago o bruja ponerlo en acción por lo tanto no pude evitar sentir un ligero retortijón en el estómago ante los nervios de fallar en algo tan simple.

 

Tratando de apartar aquello de mi mente, me coloqué en el área designada para la práctica del encantamiento y observé los peluquines de color rosa chicle y pequeñas esferas blancas y negras a las cuales debía cambiar. Decidí que lo mejor era comenzar por los peluquines por lo que, después de sacar la varita, apunté al más cercano concentrándome en visualizar el objeto del color deseado.

 

-Colovaria.- De inmediato el peluquín se tornó de un rojo carmín muy intenso. Sonreí ante mi acierto, no había sido para nada difícil. Con un poco más de confianza realicé el encantamiento al menos unas seis veces más con otro peluquín y en varias esferas hasta haber cambiado de color cada uno de los objetos por lo menos una vez.

 

[Rory Despard]

Por ahora la clase transcurría sin problemas. Heberth y Dennis se habían puesto ya en marcha escogiendo cada uno un papel, dejando el último para Wen que tendría que practicar el encantamiento de cambio de color. Empezado el entrenamiento permanecí en el escritorio con los nervios volviendo porque pronto tendría que usar aquella varita inestable.

 

Y temía los resultados.

 

Los chicos lo estaban haciendo bastante bien. Vi a Heberth acercarse y escuché su pregunta, bastante lógica, a la que no tardé en dar respuesta.

 

- En este caso todo tiene que ver con intensificar el hechizo. Así que aunque el movimiento es prácticamente el mismo, es la concentración y la energía mágica que canalizas la que varía, para que funcione.

 

Al cabo de poco menos de una hora el control de los chicos era notorio. Era momento entonces de llevar su conocimiento un paso adelante. Fue entonces que chasqueando los dedos capté su atención para ordenar que se detuviesen.

 

- Por favor les pido ahora que observen al armario que tienen al fondo de la habitación. Cada uno ha practicado el hechizo y como le mencioné a Heberth, ya dominado el movimiento es nuestra capacidad de canalizar la magia a través de la varita la que necesitamos trabajar. Y ahora, para probar su avance, todos ingresaremos a ese armario.

 

Porque el artefacto no era uno cualquiera, sino un armario evanescente, y el espacio al que nos llevaría sería nada menos que el enorme almacén de una herrería abandonada. Con un hechizo expansor, no tuvimos dificultad para ingresar todos en su interior, y ya con las puertas cerradas pronuncié fuerte y claro.

 

Armonia Nectere pasus.

 

El hechizo salió, pero para mí espanto, junto a él, unas vivas llamaradas también lo hicieron, de manera que tras el brillo intenso típico de aquel tipo de transporte, fuimos expulsados con violencia del interior del armario hacia el almacén. Y cuando di media vuelta, todo lo que pude ver fue el pobre objeto consumiéndose por las llamas.

 

Maldije a mi varita, pero intenté minimizar en lo posible el daño. Y en su lugar decidí que los chicos se enfocaran en todos los objetos que descansaban en ese lugar. Piezas de lo que parecía una enorme armadura estaban desperdigadas por el suelo. El techo, a dos aguas, tenía una sólida viga en medio, lo bastante gruesa como para que alguien pudiese caminar por ella.

 

- El trabajo en equipo resulta fundamental, y de él dependerá ahora su propio éxito personal. Observen bien la armadura porque ella es su reto personal. Deberán armarla, cambiar el color opaco del metal por uno reluciente, y elevarla hasta la viga alta del techo, para finalmente hacer que se mueva a lo largo de la viga- los observé con suspicacia unos instantes- ustedes deciden el cómo, lo que yo quiero son resultados.

 

¿Juntarían sus fuerzas en cada encantamiento necesario, o solo dejarían que cada uno se encargase de una parte? Con lo unidos que se habían mostrado hasta el momento, saber de que forma trabajarían ese reto resultaba el doble de interesante.

 

@@Wendolyn Maxwell @@Dennis Delacour @@heberth portillo

[Dennis Delacour]

Mientras continuaba practicando mi hechizo escuche a Heberth hacerle una pregunta a Bel lo cual me ayudó mucho ya que había pensado en ese aspecto del hechizo si quería hacer levitar varias cosas a la vez por lo que estuve atenta a su respuesta también. Por que no era lo mismo hacer levitar una sola cosa que un grupo de ellas y eso sería muy útil ante cualquier problema.

 

Ya llevaba casi una hora practicando el encantamiento con uno o varios pequeños objetos a la vez. Había leído en alguno de los libros de la academia que este hechizo servía para encantar la ropa de los magos de modo que está levitara y con ella elevará al mago del suelo por algunos minutos. Me pareció interesante de ver, y creo que Heb se hubiese prestado para la prueba sin problemas, sólo esperaba que esto no fuera a valer un llamado de atención ya que igual lo hacía por practicar.

 

Ya estaba a punto de dirigir mi varita hacia la vestimenta de mi sobrino cuando Bel nos indicó que era momento de continuar con algo más complicado para ver la capacidad de concentración y canalización de magia que teníamos. Bueno supongo que lo tendré que dejar para después. Nos indicó que debíamos entrar a un armario que estaba en el salón de clases. La seguimos dentro de el armario y cuando estuvimos en su interior Bel pronunció el encantamiento.

 

Que menudo susto fue ver salir llamas de la varita de nuestra profesora y acto seguido salimos disparados de ese armario como si hubiésemos sido pateados al exterior, caímos fuera del bendito armario estrepitosamente dentro de un sitio amplio que parecía alguna especie de herrería llena de varios objetos y cuando me levante sólo vi restos del armario arder.

 

Me gire y observe a Bel con cara de que pasó aquí? Pero supongo que era mejor no preguntar al respecto. Ella nos dio ahora nuestra próxima tarea y debíamos enfocarnos en eso ahora si queríamos tener éxito en la misma. Observe cada una de las piezas tratando de encontrar la manera en que pudiéramos trabajar mejor. Se me ocurrió algo y esperaba que mis compañeros estuvieran de acuerdo.

 

-Bueno chicos necesitamos concentrarnos y enfocarnos en esta tarea si queremos que funcione - les dije. Acto seguido me concentre lo mejor que pude y canalizando mi magia hacia mi varita apunte hacia las piezas y haciendo una floritura pronucie -Wingardium Leviosa - acto seguido las piezas de la armadura levitaron ligeramente sobre el suelo. Ahora tenía que explicar lo que creía serviría.

 

- Heberth ahora tu encargate de mover las piezas y darles dirección para que se vayan armando, Wen tu decides si vas cambiando las piezas de color una a una o toda la armadura al final. Como sea mejor para ti. Ya cuando esté lista necesitaremos de la magia de los tres para llevar a cabo la siguiente parte - teníamos que trabajar juntos para que funcionará pero como siempre nos habíamos entendido bien esto lo íbamos a lograr y así demostrar nuestras habilidades.

 

@ @@Wendolyn Maxwell @@heberth portillo

[Wendolyn Maxwell]

Llevaba ya un rato practicando el encantamiento de cambio de color y, por el momento, estaba contenta con lo que había logrado, pero sentía que era algo muy sencillo; ya comenzaba a aburrirme de tan solo encantar los objetos uno por uno. Aun no me atrevía a realizar el encantamiento sobre más de un objeto al mismo tiempo, no sabía si resultaría efectivo. Tenía serias dudas con respecto a eso.

 

Pero al parecer no era la única con ese tipo de preguntas rondando por la mente. Escuché como Heberth se acercaba a la profesora Evans para preguntar sobre si era posible la movilización de varios soldaditos, y la respuesta dada fue más que suficiente para disipar no solo sus dudas, sino también las mías.

 

Observé las esferas durante un segundo, lo mejor era intentarlo ahora que estábamos practicando. Apunté al conjunto de esferas canalicé la magia a través de la varita y me concentre para que cambiaran sus colores una vez más. En menos de un instante todas presentaban un color azul Prusia con una línea gruesa en medio de color amarillo. Sonreí al ver este cambio y durante la siguiente hora seguí experimentando con diversas formas y colores.

 

Esferas verdes con franjas plateadas, violetas con puntitos celestes, rojas con leones dorados… Ahora si me estaba divirtiendo al crear estos diseños.

 

El chasquido de los dedos de Bel hizo que dejara mi forma de entretenimiento a un lado. Al parecer tendríamos que viajar para nuestra siguiente asignación y nuestro medio de transporte sería nada más ni nada menos que un armario evanescente. Nunca había viajado en uno, pero tenía entendido de que eran objetos muy caprichosos. A pesar de eso no dude ni un segundo en entrar.

 

- ¡Auch! Ese es mi pie, Heb.- Susurré al sentir un pisotón sobre mis dedos.

 

Una vez todos dentro del armario la profesora realizó el hechizo que nos llevaría a nuestro destino, pero, para horror de todos, al hacerlo grandes llamaradas salieron de su varita y terminamos siendo expulsados violentamente del armario. Con un quejido y el brazo adolorido, después de un aterrizaje forzoso sobre este, observé como las llamas consumían lentamente el armario. No me explicaba como aquello pudo haber salido tan mal.

 

Bueno, este no era el momento para averiguarlo. Debíamos enfocarnos en nuestra próxima tarea. Observé las piezas de la armadura y la viga en el techo que señalaba Bel. En teoría, lo que nos proponía hacer al Evans no era tan difícil, lo complicado era canalizar toda esa magia en conjunto para que no se cometieran errores.

 

Quien tomó la iniciativa fue Dennis. Rápidamente hizo que levitaran las piezas a unos pocos centímetros del suelo y procedió a explicarnos el plan. Asentí para demostrar mi acuerdo con lo planteado y alcé la varita hacia los objetos metálicos.

 

Fruncí ligeramente el ceño al concentrarme en enfocar mi objetivo, esta vez eran muchos más objetos que en la práctica anterior y de tamaños muy variables.- Colovaria.- De a poco cada una de las piezas se tornó de un plateado brillante, nada que ver con ese tono opaco de tenía hace unos segundos.

 

@ @@Dennis Delacour @@heberth portillo

[Dennis Delacour]

Estábamos tratando de trabajar en equipo para lograr la tarea que nos había sido solicitada. Trataba de mantenerme enfocada para ayudar a mis compañeros a armar la armadura y tenerla lista para cuando viniera el momento más complicado que sería llevarla a la viga del techo y hacer que caminara por ella.

 

Cada uno tenía que encajar su labor con la del otro. Hacer que todo se moviera de manera que engranara perfectamente como las piezas de una gran máquina que de esa forma nos llevará a cumplir lo que queríamos. Había enfocado mi magia en mantener las piezas levitando para que fuera más fácil que Heberth las pudiera ir ayudando a unir y para que Wen las cambiará de color por el tono brillante que lucían ahora. Mi sobrina había dejado cada una de las piezas relucientes con su nuevo brillo y color.

 

Cuando frente a nosotros estuvo lista la armadura era momento del siguiente paso. - Chicos ahora necesitamos canalizar nuestra magia y dirigirla en una misma dirección. Por favor necesito su ayuda para llevar la armadura a la viga - les dije esperando que hicieran el hechizo junto conmigo. Todos juntos lo lograriamos.

 

Apuntando de nuevo mi varita a la armadura y haciéndole una seña a Wen y Heb para que estuvieran conmigo y dijéramos al tiempo, pronuncie de manera fuerte -Wingardium Leviosa - poco a poco vi como la armadura lentamente empezaba a levitar hacia el techo. Este hechizo no permitía dar dirección al objeto pero como estábamos los tres enfocados en lo mismo estábamos llevando la armadura justo a la viga donde luego tendríamos que hacerla caminar.

 

@@Wendolyn Maxwell @ @@heberth portillo

[heberth portillo]

El practicar el encantamiento se había vuelto algo muy agradable, me esforzaba cada vez por hacerlo mejor hasta llegar el punto de poner a marchar a todos los soldaditos de juguete que estaban en el suelo; la recomendación que minutos antes Bel me había hecho era la mejor, el canalizar a través de mi varita toda la magia para que el encantamiento saliera bien surgió efecto y por eso los soldados comenzaron a marchar por todos lados en la dirección que yo apuntaba.

 

Pasaron unos minutos hasta que Bel nos llamó haciendo un chasquido con sus dedos, nos enseñó el armario del fondo y nos mencionó que era hora de poner en práctica lo que estábamos aprendiendo, el armario era un armario evanescente, fue algo difícil ingresar los cuatro a este, incluso pise un pie de mi dulce hermanita Wen - Disculpa - dije sonriendo mientras parecíamos salchicha en un pote; poco después Bel dijo unas palabras y llegamos a un tipo de fábrica abandonada.

 

Al llegar Bel nos mencionó la prueba que debíamos realizar para poder aprobar el conocimiento, así que de inmediato comenzamos a trabajar en equipo, mientras mi tia Dennis lograba hacer levitar las piezas, wen las iba cambiando de color yo use el mio para ir armando la armadura. - Locomotor escarpe - dije apuntando a una de las piezas para ir uniendo en orden, estas se unieron a las grebas de cada una y nuevamente continue, - locomotor rodillera - apunte a esta para que se uniera a el quijote y después a las grebas. Poco a poco fui uniendo todas las piezas que Wen ya estaba terminando de arreglar con un color plateado.

 

Estaba terminada la armadura, cuando escuche que mi tía Dennis necesitaba de nuestra ayuda para elevarla hasta la viga, mire a Wen que al igual que yo ya habíamos logrado terminar de hacer lo principal que era cambiarle de color y armarla; - lista wen - dije mientras la miraba y apuntaba a la armadura - Wingardium Leviosa - pronuncie para ayudar a elevar la armadura,lo mismo hizo mi dulce hermanita y entre los tres la subimos hasta la viga con un poco de dificulta ya que se encontraba bastante alta pero gracias a nuestro trabajo en equipo todo había salido bien; al dejarla bien sobre el la viga mire a las chicas, - bueno es mi turno, y creo que necesitare de la ayuda de ustedes - dije mientras las miraba.

 

Los tres apuntábamos a la armadura y casi al tiempo pronunciamos - Locomotor Armadura - esta de inmediato comenzó a avanzar por la viga como si tuviera alguien dentro de esta y marchara a la perfección; esperaba que Bel estuviera orgullosa de nosotros ya que habíamos cumplido con el requerimiento que ella nos había puesto. hicimos avanzar la armadura por un largo trayecto de una viga a otra teniendo la precaución de que esta no se fuera a caer sobre nosotros.

 

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[Dennis Delacour]

Realmente estábamos disfrutando de esta clase. No podíamos quejarnos en absoluto, teníamos una profesora genial y de compañeros nada más y nada menos familia . Éramos sólo Delacour Rambaldi recibiendo la instrucción en este conocimiento y eso lo hacía aún mejor.

 

Estábamos trabajando tan a gusto que entre todos habíamos aportado a la tarea que nos había asignado Bel para realizar. Después de que la armadura estaba armada y brillando entre los tres la hemos subido a la viga. Canalizar nuestra magia y en grupo dirigirla a un solo objetivo hacia todo mucho más fácil.

 

Web y Heb me ayudaron para hacerla levitar lo suficiente para que llegara a la viga que se nos había indicado antes por nuestra profesora. Ahora era turno de ayudar a mi sobrino a moverla a lo largo de la misma. Cuando el nos indicó dijimos al tiempo -Locomotor Armadura- lo cual hizo que está se moviera en la trayectoria que se le señalaba.

 

No pude evitar sonreír de satisfacción al ver que habíamos logrado entre los tres hacer lo que Bel nos había pedido cumplir. Estábamos listos para el siguiente paso a seguir que ella nos encomendara realizar. Definitivamente la estaba pasando genial.

 

@ @@heberth portillo @@Wendolyn Maxwell

[Rory Despard]

La prueba final había sido dada y los chicos habían respondido estupendamente, provocándome una auténtica sorpresa como en lugar de decantarse por una de las opciones que les había planteado habían decidido aplicar ambas en distintos momentos.

 

Aplaudí entonces su labor y consulté la hora en mi reloj de pulsera, comprobando que ya era momento de partir de vuelta a la universidad. El problema era como hacerlo ahora que no había armario evanescente ¿que debía hacer?

 

Ya con la armadura de vuelta en el suelo, me giré hacia ellos para darles las últimas indicaciones.

 

- Los encantamientos son pieza fundamental de nuestra formación como magos. No se delisgarán de ellos incluso llevando otros cursos porque son encantamientos muchos de los hechizos que se usan en duelos sea defensiva u ofensivamente.

 

Tras dedicarle una amplia sonrisa a los tres me giré con intención de convertir en traslador un viejo zapato de cuero empolvado en el suelo, pero en lugar del característico brillo azulado, nuevamente la varita echó fuego calcinando por completo el calzado.

 

- Arghh maldito traste- dije aventando la varita- lo siento chicos. Creo que solo queda una opción para volver.

 

Temía que de hacer desaparición conjunta alguno se escindiera, así que concentrando mis propias fuerzas mágicas abrí un portal conforme las enseñanzas que había aprendido de los uzzas, e hice que los tres pasaran por él directo al salón en el Ateneo.

 

Ya de vuelta en la universidad solo quedaba despedirme. Me sentía absolutamente agotada por haber usado aquella magia,pero muy contenta por lo compartido.

 

- La clase ha finalizado queridos. De seguro en breve les serán certificados los cursos. Siento si no pude ser más de ayuda- eché una mirada sombría a la varita que había tomado a último momenle- pero han sido unos alumnos estupendos y espero que todo marche bien para ustedes en lo siguiente que decidan emprender. ¡Mucho ánimo y mucha suerte!

 

@@Dennis Delacour @@heberth portillo @@Wendolyn Maxwell