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Botica Lockhart (MM B: 110527)


Bodrik
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Muchísimo tiempo había transcurrido desde la ultima vez que había pisado el negocio familiar, si, la Botica Lockhart era un sueño hecho realidad donde todos habian puesto sus energía y cada cual tenia algo que hacer y que aportar, pero obviamente la vida le daba giros a la vida de cada uno, haciéndolos separarse por momentos, aunque al final del día todos podian volver a aquel lugar que económicamente los podía sacar de apuros.

 

Apenas había regresado de aquel largo viaje y por desesperante o incierto que pareciera no podía prometer quedarse, sin embargo había decidido vivir un día a la vez, esperando que el universo conspirara para permitirle ver durante muchos soles y lunas a su familia y trabajar en aquel lugar.

 

Con aquella premisa en mente se atavio con un cómodo y fresco vestido de seda de corpiño ajustado pero falda al vuelo hasta por encima de la rodilla, en tonos fríos como frío prometía ponerse aquella temporada en puertas de la nevada navideña.

 

Utilizo la chimenea que conectaba el negocio con el hogar de los Lockhart un poco después que Ezra, por lo que casi le cae encima a la caja de dulces que el niño recién quitaba, al igual que el resulto un poco llena de hoyin, y mucho más como especie de una explosión sonó y cayo luego de la trasportación curtiendo de negro la piel de la Lockhart y su recién puesto atuendo.

 

--¡¡Demonios!!-- exclamo pero sonrió a al ver a su hijo más pequeño (después de Eirian) en las mismas condiciones.

 

--Ey alguien aquí no se baño-- bromeo acariciando su mejilla y pasando una mano sobre Lucy, la inseparable del niño levanto la vista para ver quien había llegado, se trataba de Garry, amigo de su nieta Bodrik y compañero de bando.

 

--Hola, bienvenido-- dijo ante el saludo del chico que no les había visto todavia.

 

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@, @@Ezra Lockhart, @@Bodrik

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  • 2 semanas más tarde...

-ahhh mamá ¿Tú también quieres dejar los dulces?- dijo al verla, su gata aún daba vueltas en la alfombra, en un tenue intento por limpiarse, se terminó rindiendo luego de un rato y tras maullar bastante fastidiada se colocó en la cabeza del niño, como siempre hacia.

 

-ya ya lucy, no seas gruñona, cuando volvamos a casa te daré un baño- vio como llegaba alguien más y le saludo alegremente -bienvenido a la botica familiar Lockhart, yo soy Ezra-

 

Acto seguido fue a la máquina dispensadora de dulces y la abrió con sumo cuidado, era grande y tranquilamente Ezra se podía meter si quería, pero más le valía que no, su sobrina Bo había insistido mucho en qué no lo hiciera.

 

Abrió la caja de dulces y apuntando con la varita, empezó a vaciarla en la máquina.

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"Dulces" la palabra favorita de su hijo Ezra, pensó la Lockhart cuando este advirtió su presencia y le pregunto si quería dejar los caramelos, ella por supuesto negó con la cabeza, no iba a privarlo de ese placer, no después que se había tomado la molestia de recolectarlos en el castillo y trasladarlos hasta alli a través de la conexión flu que mantenía las dos chimeneas sincronizadas y abiertas para transporte, aunque más tarde probaría alguno.

 

Como de costumbre acaricio el pelaje rebelde de Lucy quien montaba en la cabeza del infante, justo antes de que el chico disfrazado de gato se concentrara en su gran labor y también en presentarse ante el visitante, que parecía distraído pues no contesto a ninguno de los dos. Desde su ubicación lo vio agitar la varita para que los dulces poco a poco fueran pasando de a caja al dispensador, realmente era el trabajo ideal.

 

Sonrió y se fue justo detrás del mostrador, de donde extrajo un libraco, de esos en los que se llevaban los registros contables del establecimiento, hacia mucho no lo revisaba y esa era una de sus funciones, a ver si por su descuido no estaban en números rojos, de todas formas sería fácil remontar, sobre todo porque justo ahora estaban celebrando aquellas fiestas llamadas Hallowen.

 

Y hablando de eso, tal vez alguna promoción de algún dulce o algo especial podrían sacar, en un par de horas y hacer que la clientela aumentara, si. Eso era buena idea, estaba segura que Ezra sería un digno embajador y la mejor propaganda posible. Lo llamo preguntándole.

 

--Ezra tu y Lucy ¿quieren hacer algo especial?-- lo miro con ojos de suspenso --Preparare un dulce medicinal Hallowenesco y tu tendrás que pararte en la puerta del local a promocionarlo-- se mordió el labio inferior esperando la reacción del infante --Y claro podrás probar uno que otro, ¿te animas?--

 

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@@Ezra Lockhart, @@Bodrik

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Había quedado con su amigo Saín de encontrarse en la Botica a una cierta hora, pero la cantidad de trabajo en el hospital terminó por retrasarla y seguramente su amigo llevaría por lo menos unos 15 minutos esperándole y ella no estaba muy segura de la presencia de alguno de los propietarios en el local y si nadie atendía a Garry posiblemente se marchará realmente no quería perder la oportunidad de hacer lo que tenía en mente.

 

Corrió por el callejón una vez que le Faltaban únicamente un par de negocios de distancia y cuando apareció por fin en la puerta de la Botica, suspiro aliviada al ver la luz proveniente del interior que indicaba que alguien estaba atendiendo el recinto así que decidió caminar un poco más lento hasta llegar a la puerta.

 

-Hola, Hola – saludó con entusiasmo al encontrar en el interior a su abuela Cye, su tío Ezra, Lucy y por supuesto a Garry Ollivander su gran amigo esperándole en el interior.

 

-Veo que ya conoces nuestro local. ¿qué te parece? –

 

Bodrik quería mostrarle algunos de los ingredientes de los que disponían en la botica pues le parecido a Saín le agradaba mucho la elaboración de pociones y Bodrik y su familia habían conseguido un sin número de ingredientes, además de hierbas medicinales y para el Tea.

 

Mas allá pudo divisar a Ezra que llenaba el dispensador de dulces y no pudo evitar advertirle acerca del peligro que significaba meterse dentro del ese contenedor – Recuerda pequeño que no puedes meterte al recipiente de los dulces. lo sabes ¿Verdad? – ella se siente responsable del niño pues si abuela ha tenido unos meses bastante duros y no ha tenido tiempo para cuidar a sus niños por lo que Bodrik hace lo que puede, aunque a menudo le toca contar con Feixac o Heyda para que se haga cargo de los niños, sobre todo de Eirian y Ezra que son muy pequeños aún.

 

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-si Bo, ya lo se- dijo una vez termino de poner los dulces y cerró la tapa del dispensador -dijiste que si me veías dentro, me jalarias las orejas hasta que se estiraran como dumbo-

 

Se acercó a ella y a pesar de estar manchado fue a abrazarla, lucy salto de la cabeza del niño al hombro de la adolescente, manchando le un poco el rostro de ollin también.

 

-quien es tu amigo?- dijo mirándolo, bastante curioso -es nuevo en londres? Le gustan las pociones? Y los dulces? Y los gatos?- como siempre hacia una retahíla interminable de preguntas, hasta que la mirada de exasperación de Bo le hacía entender que fue suficiente.

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  • 3 semanas más tarde...

Cye se froto los brazos mientras aguardaba movimiento en la botica y examinaba el libraco tras el mostrador, afuera el frío de la época decembrina se hacia presente, así como la nieve, por tanto lugares como la Botica Lockhart con sus bebidas calientes e infinidad de ingredientes para pocimas resultaban reconfortante y muy atrayentes a los transeúntes del callejón Diagon.

 

--¡Hola!-- contesto al saludo de su nieta que para suerte de la rubia se encontraba en el establecimiento, a pesar de sus múltiples ocupaciones de la enorme responsabilidad que reposaba sobre la pelinegra al dirigir el hospital mágico, al que seguramente nunca le faltaba movimiento.

 

--Yo no se donde están los demás pero se me hace que vamos a tener que empezar a sacar las cajas guardadas-- dijo en tono enigmático, y claro intentaba captar la atención del pequeño Ezra.

 

Las cajas que se encontraban en el ultimo anaquel de la trastienda de la Botica contenían adornos alusivos a la navidad, luces, formas y cantidad de cosas que alegrarían el local, pues pronto también tendrían que poner un arbolito aunque claro tenia que ser algo unico y no precisamente un pino, sino algo que tuviera más que ver con pociones y esas cosas.

 

--Tal vez necesitemos manos extras para esta misión y luego podríamos mandar a traer algún premio comestible por el trabajo-- para nadie era un secretos que los Lockhart adoraban los dulces, los pasteles y cuanta comida rica podía cocinarse y que nunca faltaba ni en sus celebraciones ni en cualquier reunión.

 

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¡Que exagerado eres! – la respuesta de Ezra le daba mucha risa, pero prefería eso a que terminara atrapado en el interior del recipiente.

 

A pesar de todo el pequeño niño salió a abrazarla todo manchado y ella no dudó a pensar de eso y cuando el niño la envolvía en los brazos ella decidió levantarlo del suelo un poco. – ¿Ayudamos a la abuela asacar las cajas de pociones? – preguntó al infante que la había dejado negra por el por el hollín – No te preocupes abu que Ezra y yo estamos para ayudar – respondió a la rubia matriarca y cabeza de la familia.

 

La propuesta de Cye le dio una idea pues tal vez su amigo Garry estaría interesado en ayudar pues según las referencias que tenía sobre él, le hacían pensar que inquietaban las pociones y quien mejor que Cye para hablarle un poco sobre ellas – Garry podría ayudarnos seguramente – respondió.

 

Entonces se dirigió hacia su amigo Ollivander con la intención de invitarlo a participar de la organización de la Botica – Garry, ¿te gustaría ayudarnos a renovar los estantes de pociones? -

 

 

@,@@Ezra Lockhart, @, @@Ezequiel granger

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  • 2 semanas más tarde...

Le parecía tan lejano el día en el que se había fundado aquel negocio, lo mucho que los propietarios lo habian pensado, todo, cada detalle, que el hecho de que solo tres estuvieran ahora allí mismo, le resultaba casi inaudito. Pero los tiempos y las inclinaciones, prioridades y ocupaciones de aquellos ocho socios habian cambiado, para bien o para mal y sinceramente esperaba que fuera para lo primero.

 

El escuchar a su nieta que estaba dispuesta a colaborar con la transformación le parecía maravilloso, últimamente a @@Bodrik y a su hijo @@Ezra Lockhart era a los miembros de su familia que más veía y con quien más compartía, a pesar de que diciembre supuestamente era el mes de la reconciliación, de los reencuentros y de la unión familiar

--Bueno, manos a la obra-- dijo la bruja notando la manera en la que Bodrik introducía a @ al entorno familiar, conocía a su nieta y lo celosa que era, pero también la excelente amiga que resultaba cuando alguien se ganaba su confianza y Cye confiaba plenamente en el juicio de la pelinegra.

 

--Si Garry ayudanos, de pronto podemos hacer algo maravilloso con esas pociones-- invito la rubia haciéndoles a los tres con las manos ademán para que empezaran con la labor propuesta.

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  • 2 semanas más tarde...

Buen día, madame…-, finalmente alguien salió a encontrarlo, Garry agradecía a su rostro nada flexible de no parecer sorprendido por todo el hollín de más sobre las ropas de Cye y… ―Oh buen dia joven Ezra, soy Grelliam, gracias por la bienvenida-, aparentemente el niñito tenía la misma conocida pación por los dulces tal como la matriarca de la familia, sonrió un tanto divertido antes de volver su atención hasta la rubia.

 

Lamento llegar solo así, señora Lockhart, Bodrik me comentó que…-, se siente de pronto un poco torpe ahí dentro sin saber muy bien porque está ahí, afortunadamente Bodrik entró segundos antes de que él pudiera balbucear vagamente frente Cye.

 

La dinámica ahí era bastante familiar, muy distinta a la de su propia familia claro, pero no dejaba de ser agradable. Después de que Bodrik acabara de advertir al niño sobre el recipiente de caramelos, el pequeño estaba nuevamente ahí, esta vez lanzando una pregunta tras otra con respecto a los gustos de Garry.

 

Ahh…veras yo no…-, a Garry los niños como el joven Ezra lo ponen un poco nervioso, el por qué aun es algo que no sé pone a pensar mucho hasta que se encuentra nuevamente con uno. En realidad no quiere decirle al menor que en a él no le gustan tanto los gatos…ni mucho menos los dulces.

 

Pero es Bodrik nuevamente quien lo saca del apuro, preguntándole sobre si podría ayudar a la renovación de los estantes, algo de eso mismo que le escuchó hablar a la matriarca de Lockhart hace un momento antes. Por supuesto que no podía negarse, sobre todo al escuchar de Cye, la posibilidad de poder trabajar con alguna de esas pócimas.

 

Me apunto-, soltó sin mucho apuro, pero visiblemente animado. ―Es difícil no involucrarme en algo como esto-, caminando junto a Bodrik comenzó a doblar las mangas de su camisa, era una suerte que decidirá vestir no tan formal aquel día.

 

@@Ezra Lockhart @ @Bodrik

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Era fabuloso escuchar a su abuela tan animada con la organización en la bodega y en las estanterías de la Botica pues Bodrik conocía un poco al situación de abatimiento de la rubia matriarca con la partida de Ishaya su abuelo y la ausencia notable en las cuestiones familiares desde hacía bastas meses y de hecho Bodrik sospechaba que los mismos meses lo tenían ausentes aun en Ottery pues no se lo cruzaba ni por error en el callejón, el ministerio y mucho menos en las calles del pueblo, pero ella desconocía su verdadero paradero desde hacía meses cuando le impartió su clase de Aritmancia en la universal mágica.

 

Sin embargo, su animó estaba bastante bueno y cuando tanto Ezra como Garry aceptaban ayudar con la Organización se notó la felicidad y el deseo de realizar algunos cambios, sobre todo porque sus tíos ya no habían vuelto al trabajo y Bodrik no podía determinar la razón de aquella ausencia, y lo cierto es que después de tantos meses, la pelinegra consiguió acostumbrarse a dicha ausencia.

 

Quizá esa era la razón por la que el regreso inesperado de su amigo Ollivander se cometió en un gran alivio y que vino a llenar un poco el vacío que dejó Noah cuando se marchó de la residencia para vivir plenamente en su hogar con la familia Askar y, claro está los viajes de Alexander, y la recientes desaparición también por parte de Ezequiel.

 

-Tenemos muchas pociones raras – dijo divertida sabiendo que su amigo le encantaba jugar con este tipo de menjurjes.

Ahora el grupillo en pleno se diría a la bodega, donde tenían montones de pociones.

 

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@, @ ,@@Ezra Lockhart , @@Ezequiel granger

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