Gala de Navidad 2018

[Tamarindo]

Vaya pregunta mas difícil me hacía ahora Xell, sobre todo porque se me daba mal contar y explicar lo que había visto, pero no podía mas que intentarlo y contentarla, todo aquello parecía importante como para que no fuese útil a la hora de ayudar el bosque...

 

--Pues verás, Xell, no sé como explicarte. Pero era una persona enorme, pero enorme enorme, con unos hombros anchisimos, como si fuere una montaña de hombre, y tenia una capa o un manto asi como de musgo y ramas, como de vegetación, para camuflarse, tardé en verlo, claro, porque estaba bien camuflado. Y luego tenia una espada que parecía usar como báculo y con ella en el aire hizo que los arboles florecieran con un simple paso de su espada por el aire, no sé si me explico. Es como si tuviera la magia de como dar vida al bosque. ¿Será que es el guardían? Pero no puede haber dos. No lo sé.

 

Me quedé callada un momento, en el que no dijimos nada ninguna y nos miramos como sin saber qué pasaba ni qué eran esas ¿visiones? que habíamos tenido juntas y a la vez diferentes.

 

--No entiendo nada, Xell, esto es muy raro. Y Dennis parece que no habla nada, no sé si ella habrá visto algo diferente.

 

Me empecé a preocupar de si Dennis había tenido una experiencia traumatica y por eso no sabía qué decir o no hablaba.

 

--De todos modos, tenemos que ir juntas a ayudar al bosque. Sea quien sea a quien hayamos visto, tenemos que ayudar como sea a que esto remita. ¿Tienes alguna idea de qué hacer?

[Darla G Dumbledore]

 

 

El frío del lugar la sorprendió, no era habitual que fuera sensible a las sensaciones del clima del lugar, ella era vampiro. Elevó su mirada, observando con asombro las lianas y telarañas que conformaban un tapial que volvía impenetrable al Bosque Prohibido.

 

Por instinto aferró con más firmeza su varita mientras avanzaba unos pasos acercándose a la valla natural pero se detuvo de repente. Un sonido extraño llegaba a sus oídos, sorprendida al descubrir que se trataba de música.

 

La rubia avanzó despacio y si le había sorprendido el hallar así al Bosque, más le asombró el cuadro frente a ella. Un caballero de aspecto extraño, más parecido a un guardabosque que a un músico, había

correr sus gruesos dedos con inefable agilidad sobre las cuerdas de un arpa, su sonido era casi celestial. Cerca de él un muchacho peliverde, con los ojos cerrados, escuchando la música ¿o dormía?

 

Su mirada iba de uno a otro, y se quedó como hipnotizada viendo el movimiento magistral de los dedos del músico. No supo si cerró los ojos o había sido transportada, el lugar parecía haber cambiado. A unos metros de ella el peliverde aún escuchaba con los ojos cerrados, lo reconoció.

 

--¿Señor Ryvak? ¿Antoni? ¿Dónde estamos? --preguntó Kimberly sorprendida.

 

 

 

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[Xell Vladimir Potter Black]

Nuestras versiones eran diferentes. ¿Por qué habríamos tenido visiones diferentes de la figura del Guardián? La versión que ella mostraba era muy linda. Por un momento, imaginé a un gigante de los que ya no se veían, ancho de hombros, una auténtica mole humana. Pero no un gigante de aquellos tontos que no saben hablar nada, todo gesticulaciones, no, no... Un hombre grande, con un manto verde de hierba cubriendo su espalda. No podía imaginar cómo sería la espada tan grande. Pensé que sería como una gran vara de madera que hacía florecer todo a su paso.

 

Suspiré, era una imagen hermosa. Pero... Entonces...

 

- Un duende... Un gigante... ¡Qué difícil, la verdad...! ¿Quién crees que pueda ser el Guardián? No se parecen en nada.¿Es humano la figura de tu visión, Tamarindo? El mío era claramente un duende, con orejas melladas, como si hubiera pasado por mil guerras que las hubieran ido rompiendo a trocitos.

 

Permanecí en silencio, pensativa, respetando el de Dennis. Supongo que ella estaría tan inquieta como nosotras. Por el camino, se juntaba más gente, supongo que habrían oído hablar de lo que le sucedía al Bosque. Aún así, eran pocos los que teníamos curiosidad por este hecho insólito. Tal vez ni les molestara que eso ocurriera. Pocos éramos a los que el Bosque les importaba.

 

- ¿Ir juntas...? ¿A dónde...?

 

¡Oh, era boba! Claro que teníamos que ir juntas al Bosque a buscar al Guardián, encontrarlo, volver el Bosque transitable.

 

- ¿Pero cómo entramos? No se me ocurre nada...

[Dennis Delacour]

Después de la llegada de Tama se había dedicado a escuchar el intercambio de ideas y palabras del par de brujas que estaban junto a ella, pero en un momento su cabeza empezó a doler y sentía como si se fuera a caer, las energías del bosque estaban disminuyendo rápidamente y las podía sentir como un llamado de auxilio desesperado que se clavaba en su corazón y embotaba su cabeza. No se percato del pequeño animal que se había hecho presente y que Xell se disponía a tomar, simplemente respiro un poco profundo con algo de dificultad por la sensación de molestia que el dolor del bosque le causaba.

 

Sentía que caería en cualquier momento y para evitar aquello busco como soporte el hombro de Tama, pero justo en el momento en el que lo toco sintió un tirón fuerte que la llevaba hacia otro lugar, en ese momento fue como si su mente se perdiera en un limbo del que no sabía cómo salir.

 

Movió su cabeza de un lado a otro para tratar de sacarse el malestar pero cuando reaccionó un poco no vio ni a Xell ni a Tama y lo más raro es que estaba dentro del bosque. Aquello no podía ser, cómo había logrado pasar las barreras que lo habían sellado evitando el acceso a cualquier persona o criatura dentro de sus terrenos. Trato de tocar un pequeño bowtruckle que vio en un árbol pero su mano solo lo atravesó. Acaso ella no estaba allí y era solo una ilusión?, no entendía qué pasaba.

 

Ante sus ojos una serie de imágenes pasaron tan rápido que sintió que pudo contener en aire incluso durante esos momentos, veía a una joven tratando de proteger las criaturas del bosque ante el ataque de magos oscuros, sintió el pánico de las criaturas y de las plantas en su corazón, y luego sintió el dolor de ver a aquella joven caer cegada por el odio y la maldad. Los magos que causaron eso se alejaron dejándola en medio del bosque, la rubia se acercó pero no podía hacer nada, ella no era más que una ilusión puesta en el lugar para conocer la historia del bosque.

 

De pronto las ramas, hojas y la tierra misma tomo posesión de aquel cuerpo vacío ya que su alma había partido a otro lugar, la tierra la absorbio para que no quedara rastro de aquella valiente joven, pero cuando pensó que todo había acabado la vio surgir de la tierra misma, brillante y fuerte, con el suficiente amor en su alma por el bosque pero también con la fuerza y valentía necesaria para cuidar de cada rincón de ese sagrado lugar.

 

 

Las criaturas poco a poco la rodeaban y le hacían reverencias y la miraban con admiración y respeto, ella ahora sería su protectora y lucharía por ellos hasta el final, la vio partir y alejarse en dirección a donde provenía un sonido de cascadas acompañada de cada criatura del bosque, de cada sonido de aves y de cada murmullo de hojas y del viento. Cada ser vivo dentro del bosque ahora estaba unido a ella y vivirán como un solo conjunto de sentimientos pendientes de ayudar a quien lo necesitara.

 

De pronto todo se desapareció frente a sus ojos y se encontró sentada en un terreno algo desigual con Xell y Tamarindo frente a ella que mientras conversaban también la observaban un tanto preocupadas. No sabía dónde estaba ni cómo había llegado allí o que había pasado durante el tiempo en que estuvo perdida en algún momento de la historia del bosque. — Que ha sucedido?, mi mente se perdió unos instantes muy lejos de aquí en el tiempo pero a la vez muy cerca en distancia — preguntaba a las brujas mientras que trataba de explicar el porqué se había quedado en silencio tanto tiempo.

[Anthony R. Dracony M.]

La imagen que podía visualizar mientras mantenía los ojos cerrados dejando que la música me transportará a ese mágico sitio, era tan bello que no deseaba dejar de admirarlo...entonces comence a pensar porque me parecía tener la certeza de que era en el Bosque donde estaba este árbol....mi pensamiento parece resistirse a dejar la visión que la bella música me deja ver, pero también siento que debo relacionar lo que se con la imagen y se que debo abrir los ojos, pero antes de hacerlo, pongo esfuerzo por mirar algo más...desvió la mirada del árbol y la imagen se desdibuja entre una extraña bruma que unos instantes ocultan el lugar, me esfuerzo por distinguir que me muestra y es cuando distingo el lecho de un río seco y más adelante se halla una fuente de piedra blanca que extrañamente no tenía agua tampoco y una sombra parecía alejarse a toda prisa...

 

 

Las imágenes tan reales en mi mente me maravillan pero una voz clara me sorprende llamandome por mi nombre...abro los ojos al fin y veo a la rubia que algunas veces compartimos aventuras: Kimberly Black

 

Ella luce sorprendida al igual que yo que la miro entre asombrado y contento de ver a alguien conocido...me enderece para responder su pregunta que era lo que ella me pedía.

 

--Hola Kimberly, este monte queda algo lejos de la hacienda Tonks, vine aquí buscando a este mago para preguntarle sobre el guardían del Bosque...¿también estás ayudando a encontrarlo? ¿qué te parece si vamos juntos? el Bosque está en peligro de desaparecer! la gente en Ottery asegura que solo el Guardían del Bosque puede evitarlo. ( @@Darla Potter Black )

[Darla G Dumbledore]

 

 

--¿Al Guardián del Bosque? --preguntó la rubia sorprendida, intentando entender cómo podía haber visto el bosque en su visión y terminar apareciendo allí junto al joven mago --¿es el que tocaba esa bonita canción? --volvió a preguntar mientras buscaba al hombre del arpa con la mirada para señalarlo.

 

Hacía muchísimos años había oído la leyenda del Guardián del Bosque, algunos decían que era una bella mujer que tenía el poder de convertirse en cierva, para poder trotar entre los animales del bosque sin que éstos se asustaran. Otros le habían contado de un gigantesco guardabosques, que muchos confundían con pequeñas montañas por sus ropajes camuflados perfectamente con la naturaleza. Mientras que otros magos y brujas comentaban que el guardián venía de una estirpe de duendes mágicos que se habían extendido por toda la tierra par cuidar los bosques de los cultivos del hombre, evitando que los incendiasen.

 

La propuesta del peliverde le pareció lo mejor, se acercó a él sonriendo y extendió su mano libre.

 

--Me parece perfecto poder acompañarle Señor Ryvak --aunque la bruja conocía al mago y sabía de la confianza y familiaridad que tenía con la Potter Black y el Granger, quienes lo consideraban un miembro más de la familia, ella no lo conocía tanto como para tratarlo por su nombre, aunque debía reconocer que lo que primaba en éste caso era el hecho de que el mago era de más alto rango que ella, al ser Director, aunque la Black había dejado de trabajar ya hacía un tiempo en el Ministerio.

 

--¿Nos guía para aparecernos allá? ¿O debemos hacer escala en algún otro lugar? --consultó con su compañero de aventuras.

 

 

 

http://i.imgur.com/pRPNZzd.jpg

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[Xell Vladimir Potter Black]

Era difícil entender la situación, que si un Guardián del Bosque, que si una ardilla que no estaba segura de si había existido, que si había que entrar o no en el Bosque... Añoraba a mi familia, solía dejarles a ellos las decisiones importantes, me gustaba que dirigieran mi pasos. Pero ahora... Tamarindo tenía la visión de un Guardián del Bosque totalmente diferente a la mía y Dennis parecía... ensimismada.

 

No sabía a qué atenerme. Por eso, cuando Dennis habló, de repente y sin avisar (me había acostumbrado a su silencio), respingué y contemplé su rostro. Parecía que venía de muy lejos, De repente, intuí que acababa de sufrir una visión como la mía, tal vez como las nuestras... ¿Habría visto al Guardián? Tal vez ella tendría la solución sobre cual de las dos tenía razón.

 

- ¿Cómo qué te perdiste? ¿Quieres decir que has visto algo? ¿Tal vez has visto al... Guardián?

 

Me llevé las dos manos a la boca, permaneciendo en silencio para que ella se soltara a hablar. Pero no le di tiempo, estaba tan impaciente que dejé que mi voz atravesara el muro de dedos que le había puesto delante.

 

- ¿Era sobre el Guardián? ¿Has visto si era un duende o un gigante?

 

Miré de reojo a Tamarindo, esperaba que se pareciera a mi visión pues el duende había sido muy amable con la ardilla, parecía buen persona... Buena criatura... ¿Por qué la ardilla se habría ido con él y me había dejado? ¿En realidad habría existido? Eché de menos a mi familia de nuevo, ellos eras brujos sabios, seguro que hubieran sabido al instante lo que significaba aquella visión. Aquellas visiones.

 

Ay, qué lío...

 

¿Por qué no se unían el resto de caminantes que estaban por allá, cuchicheando cerca?

[Anthony R. Dracony M.]

El peliverde comenzó a reir, la música tan bella que el mago tocaba usando el arpa era la que le hizó "visualizar" aquellas imagénes, una que ahora estaba seguro se trataba ni más ni menos que la imagen del famoso árbol de los Deseos, que va junto con la leyenda del guardián del Bosque y del que ahora el Ryvak tenía deseos de que alguna vez estuviera en su suerte presenciarlo fisicamente y no solo por la sugestión de aquella hermosa melodía.

 

También tenía en la mente esa imagen del lecho de río seco y la fuente de piedra blanca...pero si su risa salió espóntanea, fue por lo que menciono Kimberly, que el mago fuese el guardián. Miro el ojimiel hacia la roca donde hace un minuto está sentado el mago de cabellera castaña con canas en algunos lugares que delatan su edad, y este no estaba, solo su arpa...¿en donde estaba?

 

 

-- Vaya....juraría que estaba aquí, no me di cuenta cuando se fue....no Kimberly, él es uno de los personajes más antiguos que moran lejos de las demás familias en Ottery, a él acudí con la esperanza que me relatará sobre el guardián del Bosque, pero esa leyenda se perdio en su memoria. ¿Habías tú escuchado sobre música que te hiciera "visualizar" lugares especificos? porque la música que él interpretó, me hizo "ver" el árbol de los Deseos, que dice la gente en Ottery, se encuentra en el Bosque y también vi un lugar especifico al que creo debemos ir, espera....

 

 

Atisve un poco, al parecer el mago que tocaba el arpa, había ido a su cueva, no se si a traer algo, pero la imagen del lecho seco de ese río, parecía el lugar al cual deberíamos ir...me concentré en la imagen aquella y como Kimberly había respondido que está dispuesta a acompañarme, la tome del brazo...--Nos apareceremos a donde la música del arpa me señala -- Un golpe a mis talones gire sobre mi y con la aparición conjunta, llegamos a ese lugar, donde por fortuna, hallamos más personas, entre ellas a mi amiga @Dennis Delacou

 

 

--¡Hola!

 

 

@@Darla Potter Black @ @@Tamarindo

[Tamarindo]

Cuando Dennis habló de repente me sobresalté, no me esperaba que hablara de repente despues de tanto silencio, pero sus palabras me daban mala espina. Ella tambien había tenido una visión de un guardian? Sería la visión de mi guardian gigante bonachón o sería el duende de Xell? Seguro que ella nos sacaría de esta incertidumbre y resolvería nuestras dudas... aunque si resultaba ser que había tenido otra visión de otra persona... iba a ser todo mas confuso aun.

 

Xell le preguntó a Dennis que había visto, yo me mantuve callada y atenta a sus expresiones en la cara. Xell me echó una mirada cuando preguntó si habia visto a un gigante o a un duende... crucé los dedos a mi espalda para que fuera el gigante y asi haber tenido una visión mas acertada que Xell... aunque ese sentimiento era un poco feo...

 

--Dinos, Dennis, ¿qué has visto?

 

Dije al fin, esperando que la chica rubia nos hiciera caso y no tardase mucho mas en responder...

[Xell Vladimir Potter Black]

Tama también se había preocupado ante la ausencia de Dennis. Se notaba que la conocía, que tenía ganas de que contestara sobre su visión. Su boca no lo decía pero su expresión corporal me decía que esperaba que ella apoyara su versión de cómo era el Guardián. Me hubiera puesto a reír, no estábamos compitiendo, aunque tenía que reconocer que yo también quería que apoyara a mi extraño duende.

 

- No la presiones, mujer. Deja que respire un poco de aire antes de que nos cuente lo que ha visto.

 

Había pensado en que alguien se acercara a nosotras y, de repente, la voz de Antoni sonó fuerte a nuestro lado. Di un saltito sobre mis pies y solté un gritito que resonó demasiado fuerte a la entrada del bosque. Creo que, incluso, algunas de las zarzas recias que rodeaban el bosque temblaban con las ondas de la voz. Me puse la mano en la boca y miré a los lados. Me imaginaba a varios animales huyendo, asustados por mi grito. Después reflexioné que, de estar asustados, lo estarían por lo que había sucedido, por estar atrapados, solos ante el peligro.

 

¿En serio estarían solos o las leyendas serían ciertas, con lo que habría un Guardián protegiéndoles?

 

- Hola, Antoni, perdona mi grito; me asusté. ¿Has visto el bosque...? ¿Sabes qué puede haber sucedido?

 

Debía haberlo visto. Venía con una chica que no conocía. Esperaba que nos la presentara. ¿O sería mejor que me adelantara y me presentara primero? Tenía un algo que me pareció reconocer pero no... no la supe situar de qué la recordaba.

 

- ¿Creéis que es malo que no podamos entrar al Bosque? Tal vez se esté defendiendo de algo, ¿pero de qué?