Osito Mediador: El Escape

[Hayame Snape Potter Black]

En el Sitio Seguro

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-Escucha Ren... necesito en estos momentos comunicarme con cualquiera de las sedes que se encuentren en Italia, en estos momentos es muy imperativo llamar a cualquiera, cualquier mago o bruja que sea capaz de respondernos en una conversación privada y preferentemente, que no sea espiada por el enemigo, entiendes?

Dijo con un tono severo y grave lo que provocó que aquella persona abriese todavía más los ojos y retrocediese con la silla, tumbando en el camino una pila de toda la información que había recopilado en varios pergaminos

-Vaya que debe de ser pesado eso de que te ataquen con varios hechizos al mismo tiempo -murmuró aquella persona parpadeando repetidamente para luego, hacer una leve mueca -comentó frunciendo el ceño mientras se enderezaba en su silla y luego, emitía un gruñido -Italia!... tienes idea de lo que he tenido que filtrar entre todas las tonterías que comunican los italianos en sus propios comunicados y lo que hablan de los ingleses en tperminos vulgares?... gracias deberían de dar de que aún no me he lavado los oídos con el agua bendita que los muggles utilizan para todo...

[Tauro M.]

Sherlock empezó a hablar de las hermanas Snape y Tauro se preguntó qué daño pudieron haberle causado o por qué se refería a ellas de ese modo tan despectivo. ¿Qué diferencias tendrían entre ellos? Sospechaba que pronto lo descubriría porque al parecer iban a entrar en un lugar que pertenecía a las brujas o eso es lo que había entendido. <<¡Fantástico! Ahora voy a tener que actuar como una criminal>>, fue lo que pensó. Quizás el haberse dejado convencer y arrastrar por el Holmes no había sido buena idea, pero ya que estaban allí debían llegar al fondo del asunto.

 

-- ¿Y esto? --preguntó al ver el papel, que después de mirar con atención la dejó un poco sorprendida, ya que era como una fotografía pero que mostraba sucesos que ya habían ocurrido junto con rostros conocidos para la bruja porque en cierto momento se cruzó con ellos, aunque en calidad de enemigos. No podía demostrar que los conocía, luego tendría que dar explicaciones acerca de su pasado que no estaba dispuesta a discutir, así que simplemente le siguió la corriente.

 

-- Está bien, te creo... ¿Entonces lo que me propones es que cometamos un suicidio? Porque no me estás dando garantías de nada, Sherlock, ¿de qué me sirve la información si esta va a morir conmigo? No tiene sentido --Ahora ya el plan no le parecía tan sólido y viable como pensaba, dudaba de que cincuenta mortífagos hubiesen perdido sus vidas en esa misión, más si a manos de Lord Voldemort por no haber cumplido --Lo que dices es una locura. No sé si eres un suicida pero yo no lo soy.

[Hayame Snape Potter Black]

En el Departamento de Accidentes

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El hippie aguardaba pacientemente, esperando que las cosas prontamente se resolviesen de forma favorable aunque seguía bastante preocupado por lo que estaba ocurriendo en general; había decidido hacerse un té bastante fuerte para que lo ayudase a la concentración y a librarse de las malas vibras que se le pegaban por las auras, era su problema, se había enfocado tanto en la espiritualidad de todo lo que lo rodeaba que se embebía de energías positivas y negativas

Y en aquellos momentos, necesitaba deshacerse de todo lo negativo para ser capaz de ayudar apropiadamente a unas amistades que ya consideraba como verdadera familia

Abrió mucho los ojos al ver a las dos brujas que se le acercaban para saber si se encontraba bien y carraspeó un poco, sosteniendo mejor la taza de té entre sus manos; se avergonzaba de sí mismo, no solía ser tan transparente que las demás personas notasen su preocupación ante todo por lo que terminó sonriéndoles mientras que cerraba los ojos por detrás de las lentillas púrpuras

-Solo espero que el sendero me cruce nuevamente con alguien que parece que busca tomar por el momento el mismo rumbo de mis andares con ustedes... motivos diversos con toda la probabilidad de los azares, pero por los mismos grabados de nuestras huellas -canturreó para después, reírse -lamento que mis vagares las hayan hecho cambiar sus energías por unas de preocupación hacia mi ser físico...

[Kiyotaka Ayanokouji]

EN LA OFICINA DE SHERLOCK

 

El sitio era un caos, documentación tirada por todos lados, algunas botellas y restos de colillas de cigarro por doquier, telarañas, polvo y estaba casi seguro que alguno que otro ratón por ahí estaría... Era francamente un cochinero, como si nunca hubiera estado ahí...

 

--Bienvenida a mi humilde oficina, perdona el desorden--

 

Decía el mago y quitándose el sombrero, saco su varita para que con un movimiento de la misma comenzaba a devolver las cosas a su estado original, lo roto se arreglaba, la suciedad desaparecía, las botellas y cigarros se desintegraban ya que hacía años que no tomaba, pero lo que si aparecía era un escritorio, con bellos ornamentos detrás de el se habilitaba un pizzaron con un mapa conceptual acerca de los nuevos dueños del nuevo ministerio dónde sobre salía la leyenda *Alien* para posteriormente ser tapado por una sábana...

 

--Te pido una disculpa, esto es simple protección, así que Tauro lo que estoy oyendo parece ser excusas, no eres una mujer que le gusta vivir la aventura? Que sucede contigo? Murió mucha gente protegiendo y buscando ese sitio y no te da siquiera un poco de curiosidad de ver qué se esconde ahí??! Por dios eres demonio y casi estoy seguro que eres inmortal, además esto no lo puedo hacer solo, a lo mucho llegaría a la mitad del camino--

 

Decía el mago mientras colocaba su sombrero y su abrigo en un perchero y tomaba asiento en su gran silla en el escritorio y suspirando un poco volvió a mirar a Tauro y un tronando los dedos apareció dos vasos con agua fría...

 

--a que le temes?--

[Hayame Snape Potter Black]

En el Sitio Seguro

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Aquellas dos personas se quedaron viendo por varios momentos como si quisieran ponerse de acuerdo acerca de lo que vendría o los pasos que se tendrían que dar; finalmente la bruja de cabellos rojos suspiró cerrando los ojos y se hizo el largo cabello hacia atrás para apartarlo de donde le incomodaba y luego dirigió la mirada en otra dirección, hacia uno de los enormes mapas mágicos que mostraban el mundo en general y los puntos que todavía conservaban comunicación con ellos

-Entiendo lo que quieres decir y realmente puedo imaginar lo difícil que es estar descifrando en estos momentos sus desagradables conversaciones -dijo con un tono paciente y suave, como si la sola idea de escuchar las burlas y la prepotencia con la que algunos de ellos hablaban fuera nauseabunda -pero necesitamos saber lo que está ocurriendo de aquel lado, ya han muerto demasiadas personas y no podemos permitirnos más bajas...

[Lisette Ryddleturn]

Bunker Escondido

La elfina asintió varias veces a lo que estaba diciendo la vampiro porque ella misma sabía que lo que había asegurado era cierto, lo había escuchado de los demás magos

-Ella tiene razón, hay demasiadas víctimas y los elfos siempre tenemos esa necesidad de proteger a los humanos, por favor si puede hacer algo para detener esta maldad

Pidió la elfina juntando sus pequeñas manitas mientras veía con gesto suplicante a aquel hombre que parecía que en esos momentos tenía todas las respuestas

Se preguntaba si en algún otro lugar en Inglaterra estarían ya buscando a los responsables o si alguien se acordaba de su ama que había estado en el hospital

Quería que las cosas cambiaran, quería que las cosas fueran mejores pero a ese paso parecía que la guerra solamente se iba a convertir en una nube negra sobre todos

Una terrible y mortal para todos los seres vivos

[Hayame Snape Potter Black]

En el Sitio Seguro

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Ren se quedó viendo a Hayame y después de escuchar lo que decía su gesto se volvió más contrito, como si se hubiera sentido culpable de haberse quejado del trabajo que tenía por hacer; pero peor aún fué escuchar a la elfina que le suplicaba de aquella manera tan insistente para que diera de su parte para ayudarlos, puesto que en verdad muchos de sus compañeros estaban muriendo

Y por un instante se imaginó a él mismo capturado en Italia, esperando a que alguien en alguna parte del mundo hiciera algo por salvarlo

-Muy bien, muy bien... -suspiró aquel hombre y se acomodó mejor las orejeras sobre la cabeza, frunciendo el ceño y componiendo un gesto más decidido -tengo un par de oídos por aquel lado, buenos hombres y buenos amigos que no dudaran en darnos la ayuda que necesitamos y la información que requieres... Merlín, lo que hago por mis amigos... -gruñó dándose la vuelta en su silla y comenzando a teclear mientras que la pelirroja sonreía suavemente

Esperaba en verdad, tener algo positivo de todo eso. Por favor, necesitaban algo en verdad positivo

[Lisette Ryddleturn]

Hospital

En la clínica de Santos Mangos mientras tanto, la elfina que se había quedado al cuidado de la chica rubia estaba sentada a su lado, leyendo un libro que flotaba mágicamente

Y con la otra mano, aferraba con fuerza la mano de su ama que estaba profundamente dormida y que hacía poco tenía bastante fiebre y había tenido una de sus pesadillas

Aunque estaba haciendo un poco de frío en el exterior al menos el interior de aquella habitación era cálido y la elfina quería que su ama sintiera que ella estaba a su lado

Y a pesar de que se estaba esforzando mucho, no lograba concentrarse en su libro porque no dejaba de preguntarse a cada rato si su ama en algún momento finalmente recuperaría todas sus fuerzas

-Todo estará bien, todo estará bien, la ama despertará pronto y regresaremos a trabajar al ministerio con todos los demás y toda la familia va a estar reunida otra vez

[Hayame Snape Potter Black]

Clínica Santos Mangos

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Steve había dejado su nuevo y flamante escritorio en el ministerio y en el departamento de accidentes por pedido de Mattías para ir a ver a la chica rubia que a sus ojos y a los de muchos compañeros, era una heroína; no podía creer que una persona hubiera aguantado por tanto tiempo a esos italianos y además hubiera decidido hacer un viaje tan largo y tan peligroso, con el único impulso en mente de sobrevivir y traer información valiosa para ellos

Estaba muy impresionado y admiraba que una chica pudiera tener aquella fuerza de voluntad

Y después de haber tenido una pequeña discusión con Mattias (realmente quería saber quien era la misteriosa mujer de la que hablaba que iban a estar esperando), había decidido ir a ver cómo seguía Lisette; estaba preocupado por la salud de su compañera y si por él fuera, les enviaría algún virus mágico desconocido por medio de lechuza... aunque la pobre lechuza seguramente terminaría llevándo las peores

Se asomó un poco a la habitación, para ver a la elfina y tocó un par de veces la puerta para anunciar su llegada

-Buenos días...

[Lisette Ryddleturn]

Hospital

Parecía que aquel sonido de la puerta había sido lo único que se había necesitado para hacer que la rubia abriese los ojos con alarma y dejase emitir un quejido lastimero

Seguía soñando pero por su expresión de pánico era evidente que pensaba que estaba siendo atacada o que quizás lo iba a ser pronto mientras estaba acostada

Así que empezó a removerse mientras cerraba los ojos y murmuraba, saltando de inmediato la elfina y dejando caer el libro que flotaba para tomar fuertemente su mano

Debía de tratarla con mucha gentileza y cariño para que la pobrecita bruja no se alterase más y que pudiese regresar al sueño reparador que la ayudaba a lidiar con esas cosas

-Está bien puede pasar

Le dijo al otro brujo

-Está bien querida ama, todo está bien, usted no está sola, su querida elfina está a su lado y usted sabe que yo no la dejaría sola, tranquila mi niña, tranquila y vuelva a dormir