El Secreto de los Centauros

[Juliens]

Es complicado, en ocasiones, controlar el como se desarrolla un acontecimiento. Cuando de alguna forma todo parecía estar más clamado es cuando todo se sale de control, cuando el peligro comienza a llenar por completo el sitio en dónde están. Quizá en parte sea su culpa, quizá sus acciones si tengan que ver con lo sucedido y de alguna forma si sean ellos quienes controlan el caos. Huyen, porque dada la situación es lo único que pueden hacer. Huyen por un pasadizo para mantenerse alejados del peligro.

Sin embargo, pese a la rápida huida, no logran salir a salvo completamente. Benjamin no es una persona que se asusta con facilidad, y aún así está asustado. Casi no logran escapar, las acromántulas estuvieron todo el tiempo atrás de ellos. Estuvieron muy cerca de convertir a todos en víctimas de una situación que de alguna forma pudo evitarse.

Para cuando recupera la compostura Goderic ya no está con el grupo. Desde que escaparon hasta ese momento pasaron varios minutos. Weasley fue quién se encargó de poner a salvo a Kaori, de darle primeros auxilios e incluso de encender una pequeña fogata para mantener a todos calientes mientras se recomponen y deciden que es lo que deben hacer.

Él ya está mejor, el miedo se fue conforme el calor volvió a meterse en su cuerpo. Es en ese momento en que se da cuenta de que Kaori está estable, pero la situación bien podría empeorar. Se pone de pie y saca la varita mágica del bolsillo.

—Perdón por no actuar en el momento, Kaori. Corpus Patronus

Su varita mágica emite un brillo bastante reconfortante. De la punta se desprenden hebras de luz que, revoloteando en el aire, comienzan a unirse hasta adoptar la figura de una criatura mágica llena de poder. Delante de ellos, brillando como lo hacen los patronus, se puede ver una pequeña ave fénix volando y batiendo sus alas. Se acerca a la bruja y derrama en sus heridas un par de lágrimas, el antídoto para cualquier veneno.

Al recibir el antídoto, Kaori se despierta. Luego de recibir el mensaje de Goderic todos emprenden el camino hacia el lugar en el que habitan los centauros.

[Valky]

Aun se encuentra frente a Goderic cuando empieza a escuchar voces que sonaban muy lejanas, murmullos que no puede entender. Observa a su alrededor confundida, tratando de comprender que es lo que estaba pasando. Todo a su alrededor parece detenerse al mismo tiempo que cada uno de los invitados de la extraña boda empiezan a transformarse en arañas gigantes. Asustada busca su varita pero se da cuenta de que esta no esta, indefensa trata de buscar una salida por la cual huir y mantenerse a salvo.

—...Solo queda esperar — escuchó una voz lejana — a menos que quieran jugar a crear pociones con los elementos que existen en el bosque. —y ahí estaban otra vez, esos murmullos que no sabe de donde provienen, pero que siente que es lo único real. 

Como pudo se abrió paso hacia la salida, eran demasiadas arañas siguiéndola, podía sentir las filosas patas rosándola cuando la puerta se cerró tras de ella. Todo parecía en calma una vez más, todo menos la sangre que manaba de una herida en su brazo. Entonces lo recordó... una acromántula la mordió en el bosque y aquel extraño sueño era efecto del veneno, lo que significaba que no estaba muerta.

—Perdón por no actuar en el momento....— vuelve a escuchar, esta vez reconoce la voz, es Ben. 

Escucha también que la puerta se abre de par en par y por un momento pensó que moriría, que las acromántulas la convertirían en su cena, pero en lugar de eso observa salir a la pareja de recién casados Emily y Goderic, felices seguidos de los invitados y entonces, todo a su alrededor fue consumido por la obscuridad. 

Aun con los ojos cerrados es consiente de que está recostada sobre el frio suelo del bosque, cuando finalmente los abre lo primero que ve es a Ben y un hermoso fénix. <<Lagrimas de Fénix>> piensa entonces recordando las clases de Cuidado de Criaturas Mágicas, en donde le habían explicado que esas lagrimas eran capaz de curar los venenos y dolencias más fatales. 

Lo siguiente que ve es el cielo nocturno cargado de estrellas, entonces otra de las clases que recibió cuando apenas estaba entrando en Mahoutokoro llega a su mente, la de Astronomía, debían estar cerca de la guarida de los centauros, pues a ellos les encantaba ver y predecir cosas usando esa rama de la magia. 

Antes de sentarse se limpió con la manga de su abrigo la boca, pues la sentía algo pastosa. No sabe cuanto tiempo estuvo inconsciente, pero espera no haber retrasado demasiado al grupo. Ya una vez sentada se da cuenta de que su ropa esta sucia y que tiene varios raspones que empezaban a doler, así que pensó en un curación para sanar por completo. 

—Gracias por no dejar que muriera —dice posando su mirada en el fuego, tratando de usar su conocimiento de la Adivinación, lanzó varias hojas al fuego y en el humo creyó ver la figura de centauros, centauros enojados. 

Las figuras desaparecen en el momento en el que llega Goderic, diciendo haber encontrado a los centauros. Lo mira y luego mira a Emily, no puede evitar sonreír y pensar que quizá su extraño sueño sea un presagio, aunque ellos eran familia, no, aquello era muy loco y en todo caso la adivinación usando los sueños, nunca se le habían dado bien, así que apartó esa idea de su cabeza.

—Bueno creo que nos ahorraron el ir hacia ellos —dice señalando a los centauros que ocultos entre la sombra de los enormes arboles del bosque, habían empezado a rodearlos —¿Algún plan? —Susurra, pues no tenía idea si mientras ella se estaba tomando una siesta, ellos habían trazado un plan a seguir. 

[Emily Karkarov]

—Mi plan por el momento es hacer como que no nos intimida su presencia. —dice Emily en voz muy baja, intentando que solo sus compañeros la escuchen.

No puede evitar mirar algo preocupada a Kaori. No porque estuvieran rodeados por centauros, sino porque aunque ya Goderic y Ben se habían encargado de recuperarla del veneno de acromántula, aun parecía algo débil y distraída. Y más le preocupaba que, de repente, la mirara y sonriera. Decide que lo mejor sería vigilarla de forma no muy notoria.

Mientras tanto, tenían que pensar en como convencer a los centauros de darles la información que necesitaban.

—Llegamos aquí guiados por las estrellas —dice, ahora en voz mucho más alta, dirigiéndose a los primeros centauros que salían de las sombras, intentando explicar como la astronomía los había ayudado a llegar hasta allí —no nos tomó mucho tiempo, a decir verdad, pues estábamos en una latitud y longitud que nos facilitó la tarea. Afortunados nosotros que pudimos seguir la trayectoria de dos cuerpos celestes cuya intersección nos trae a este mismo bosque...

Honestamente, lo que decía no era tan inventado pues la posibilidad de que la trayectoria de que dos cuerpos celestes se entrecruzaran sobre el gran bosque era bastante alta, pero aun así espera que nadie refute lo que acaba de decir. 

—Luego usamos una bola de cristal —comenta, como dándole miedo que si hay mucho silencio entre ellos le empiecen a preguntar más detalles —solo para confirmar que realmente debíamos encontrarlos aquí. Yo solo pude ver algunas figuras difusas —confiesa, para no parecer muy pretenciosa frente a ellos pues la adivinación no era su fuerte —pero uno de nosotros es vidente y por ello... henos aquí.

Alguna vez, alguien en Hogwarts le había dicho que los centauros eran tan orgullosos como inteligentes. Y esperaba que si podía disfrazar el encuentro del grupo de magos con ellos como algo "dictado por el destino", les revelarían la información que necesitaban para irse de allí. Era un riesgo que estaba tomando pues, así como orgullosos, también eran criaturas inteligentes y desconfiadas.

[Goderic Slithering]

Se alegra que Kaori pareciera en mejores condiciones. Sin embargo, su aviso de centauros rodeándolos le quita un poco el alivio que había comenzado a sentir. No sabía si venían con buenas intenciones, por curiosidad o simplemente con el plan de expulsarlos del bosque cueste la sangre que cueste. Se lamenta un poco no haber sido capaz de detectar que los seres lo seguían, aunque supone que siguieron sus rastros que no se había preocupado de borrar. Sin embargo, tampoco le aflige demasiado la situación, solo quisiera estar más preparado para el encuentro pero ya que había sucedido solo tendrían que adaptarse y actuar rápido.

Para su sorpresa, Emily es la primera en actuar vendiendo una media mentira respecto a las estrellas y constelaciones.

«Pero uno de nosotros es vidente y por ello... henos aquí» Reconoce que aquella frase es bastante adecuada como un pie para intervenir su parloteo incesante.

— Exacto, cuando nos encontrabamos en el claro del bosque he visto las estrellas, realizado cálculos gracias a mi astrolabio y he notado que la constelación de Géminis parecía inquieta.— dice nombrando una constelación que conocía gracias a su conocimiento de astronomía.

Sabe que los centauros eran seres desconfiados y protectores con su pueblo y territorio, la única forma de que no se convirtiera en una batalla campal era no solo demostrarle buena fé sino también demostrándoles que poseían la capacidad y conocimientos para poder ayudarlos con la profecía e información que poseían. Trata de recordar más de lo aprendido de los cientos de libros de Conocimiento de Criaturas Mágicas que había estudiado pero nada parece particularmente más útil que el plan actual, por lo que simplemente continúa.

— La constelación de Casiopea también parece temerosa, como si estuviese prediciendo la ira de otro Dios.— nuevamente hacía uso de sus conocimientos de astronomía para guíar la conversación.— A pesar de ser vidente no he podido lograr profetizar algo, solo mi tercer ojo me ha guiado a esta ubicación por lo que supongo que la profecía que las estrellas han contado ha caído en sus manos. ¿Me equivoco?

[Juliens]

Benjamin conoce bien a las criaturas mágicas. Y aunque los centauros son seres inteligentes y capaces de conformar una sociedad con reglas y costumbres, aún su cultura y sus costumbres son estudiadas por las personas que se especializan en el cuidado de las criaturas mágicas. Por eso Benjamin sabe que de alguna forma las cosas no serán tan sencilla. Los centauros son bastante orgullosos, se toman muy mal las ofensas y en consecuencia pueden actuar de forma agresiva. Conocen el firmamento más que cualquier mago, y es mediante el firmamento que el grupo logró llegar al sitio haciendo uso de los vagos conocimientos que tienen en astronomía. Seguir las estrellas no es realidad divertido, sin embargo es bastante útil.

Otro campo de interés, y que conoce gracias a las clases de cuidado de criaturas mágicas, es el don que tienen los centauros para ver el futuro. Bueno, no precisamente ver el futuro, pero si son bastante hábiles para interpretar las señales y dilucidar los eventos que están próximos a suceder. Es una característica de los centauros que envidia de alguna forma. Bastian, su padre, era capaz de conectarse con el tiempo y llevar su mente hacia el futuro haciendo uso de profecías y proyecciones.

—Logramos ver varias constelaciones, usamos algunos artefactos para estar seguros. Los astros y demás cuerpos celestes no solo nos indicaron el camino, sino que además nos decían que aquí sucedería algo, que debían seguir el camino enseñado —dice Benjamin. Usa los términos correctos y de alguna forma siente que todo lo que dice es verdad, en parte lo es. Es lo que él interpretó usando la teoría de la adivinación que aprendió en Ilvermorny.

Se queda callado por un momento, porque espera que se de una reacción, que los arcos de los centauros comiencen a disparar flechas o arremetan contra ellos.

—Hay algo más, algo que nunca antes había visto pero de lo que si escuché. El viento sopla con la fuerza justa y en la dirección indicada. Produce un sonido que apenas puede escucharse, como un silbido. Y el aire sopló siempre desde el lugar en dónde estábamos hasta este lugar, también nos guiaba. En Ilvermorny nos enseñan a escuchar y sentir la naturaleza. Y estoy seguro de que hoy el viento nos dijo hacia dónde ir junto a todas las demás señales.

 

[Valky]

Cada uno de los miembros del grupo empiezan a hablar, intentando justificar el porque cuatro forasteros estaban en su territorio. En un principio se siente preocupada pues los centauros se muestran reacios a bajar sus armas, más cuando Emily menciona la palabra vidente, varios de ellos empiezan a murmurar entre si y otros más bajan los arcos. 

Recuerda que una de sus clases de cuidado de criaturas mágicas, cuando estaban hablando sobre híbridos, específicamente sobre los centauros, el profesor en ese entonces comentó lo inteligentes que pueden llegar a ser, además de supersticiosos, también comentó que les gustaba la astronomía y muchos eran muy sabios en cuanto a adivinación se trataba, así que si querían ganarse su confianza tenían que hacer parecer su presencia como un designio del destino. 

Adivinación... adivinación, ¿Qué sabía ella sobre adivinación? tan solo un par de trucos como la lectura en el fuego, al no ser un área que le apasionase nunca puso demasiado énfasis en aprender algo más, era una suerte que Emily, Goderic y Benjamin, fueran más sabios en esa área, aunque estaban inventando gran parte de lo que decían, tenían que al menos que saber del tema para que la mentira sonara creíble y que los centauros no se dieran cuenta. 

—Es verdad que esperábamos la visita de humanos en el bosque, las estrellas anunciaron su llegada... pero llegan antes, lo que me hace dudar en si son ustedes los elegidos —dice finalmente uno de ellos, el líder de ese grupo.

Kaori entonces empieza a buscar dentro de su cabeza información que pudiese servir de ayuda, si bien adivinación y astronomía no son su fuerte, cuidado de criaturas mágicas lo es un poco más. Recuerda entonces que los centauros tienen varios rituales, al menos de lo que se tiene conocimiento hasta ese entonces, entre ellos el de las Estrellas. Levanta la mirada para comprobar si las condiciones eran las óptimas para su realización, pero aun hay luna, quizá a eso se refería con que habían llegado antes, puesto que el mes, posición de los planetas era el adecuado.

—Quizá aun tenemos algo más que hacer antes del ritual de las estrellas, pero sin la parte de la profecía que sabemos ustedes tienen, no podemos seguir —Se aventuró a decir. 

[Juliens]

 

Kaori está un poco loca. No sabe si realmente lo está o aún hay en su sistema rastros del veneno. No tiene sentido, el fénix que invocó utilizó mucha de su magia para eliminar todo el veneno. O quizá no. Quizá de alguna forma el veneno de las acromántula de este bosque es más potente, más poderoso. Espera que no sea el caso, espera que sea solo locura. Encarar a un centauro de esa forma, decirles que es culpa de ellos que no avancen en el ritual. Tienen mucha suerte cuando las criaturas no atacan, pero se mantienen expectantes. Ben sabe que es puro suerte, sabe gracias a sus conocimientos en cuidado de criaturas mágicas que las palabras pueden ofender a los centauros.

Levanta la vista hacia el cielo para observar las estrellas, los astros, los cuerpos celestes. Dejando de lado la belleza del firmamento esa noche, las figuras dibujadas en el cielo tienen un significado. Sabe por sus clases de astronomía que las estrellas y los cuerpos celestes están de alguna forma conectados en la infinidad del espacio. Sabe también gracias a sus conocimientos, aunque vagos, de adivinación que las estrellas, el viento, las hojas, toda la naturaleza están diciendo algo. Cuando todos esos elementos se mezclan para dar señales y enseñar caminos nada es coincidencia, todo tiene un motivo y un fin. Está seguro que el fin de ellos es concluir con la misión que tienen encomendada y que se auto impusieron.

—Miren como la osa parece estar unida a esa otra constelación, una unión incompleta, inestable. Señalan a un lugar indefinido si se la mira a la ligera, pero apuntan a un sitio específico si la observas con detalle. El problema es que parece cambiar, no está definida. Ellos aún no deciden si contarnos sus secretos, los comprendo. Quizá yo tampoco confiaría en nosotros

Todo el pequeño discurso que suelta está fundamentado en el libro "Leyendo las estrellas, Volumen 2", que utilizó en una de sus varias clases del conocimientos de Adivinación.

[Goderic Slithering]

[Valky]

[Juliens]