David Augustus Lestrange

@@Emmet Haughton Gaunt Gracias por la actualización. Sí, fue un juego realizado por el Concilio. Creía que era un Crucigrama, pero no, había sido en una Sopa de Letras que se realizó durante la medianoche peninsular española del 9 al 10 de Diciembre, durante las actividades de Adviento. Sopa de Letras Post donde me declaran ganador

¡Hola! Vengo a pedir la acualización de mi perfil que mi anterior posteo; http://www.harrylatino.org/topic/106688-consultas-sobre-el-mall-y-la-web/?p=5117080 quedó en el olvido xD. Pero da igual, porque de nuevo hay mucho que actualizar. ID del foro: 111240 Número de Comprador Frecuente: 97 LINK al perfil en la Web del Magic Mall: Aquí Sería actualizar el nick, ahora es David Black Lestrange. El nivel mágico, ahora es 10. El rango social, ahora es Dragones de Plata. Y los puntos, que en realidad son 730, no 700. Y si es posible añadir mi imagen de perfil actual (http://www.harrylatino.org/uploads/profile/photo-111240.jpg?_r=1511459807) allá. Por último vengo con una pregunta parecida a la de Athena. Yo también gané una llave en esos juegos que se hicieron. Gané la de Gryffindor en un crucigrama sino recuerdo mal (puedo buscar el link si es necesario). ¿Esa llave debo pedirla en algún lado o ya la puedo utilizar para comprar los huevos o está en trámite? Gracias de antemano. PD- Aprovecho para agradecer la respuesta a Cissy por mi anterior duda. En realidad mientras la escribía ya más o menos iba imaginándome que sería eso que decías, pero quería asegurarme xD.

Intentaba aguantar, pero era difícil dejar de reír teniendo en cuenta que un bigote dibujado hacía que cualquier persona perdiera seriedad, dijese lo que dijese. No podía dejar de mirar el bigote y como sus intentos por quitárselo eran en vano. ¿Por qué no utilizaba la magia para retirárselo? Seguro que algún hechizo serviría, o puede que no, pero el rato divertido ya no se lo quitaba nadie. —¡No! ¿Amenazarla? ¡Jamás! Amenazar con destrozar un negocio era una cosa, pero amenazar con la integridad de una persona era otra cosa totalmente diferente. —Creo que... —dijo ahora mirando para Tamarindo, la dueña del negocio. —Si tuviera que atacar a alguien sería a ti. —comentó dirigiéndose todo el rato a la dueña, con la que tampoco se llevaba mucho mejor. Prefería actuar antes que amenazar, las amenazas sólo servían para que la persona a la que pensabas atacar estuviera en alerta y pudiera defenderse, así que era mucho mejor atacar sin avisar y pillar de imprevisto. ¿Por qué atacar a la dueña? Pues porque a fin de cuentas ella había sido la culpable de todo ese malentendido al no "mojarse" y no decir de manera clara y concisa cuál de los dos cuadros haría primero. ¿Ambos clientes deberían ser enemigos o aliados contra Tamarindo? La respuesta vino sola cuando llegaron sus acusaciones. Alzó una ceja. ¡Es verdad! ¡Era esa misma mujer! —¿Mal de ojo? No seas boba, por favor... Ya fue suficiente castigo para ti tener que llevarte ese feo collar... Respondió hablando con un tono burlón, intentando menospreciar el hecho de que se hubiera hecho con el collar. En realidad el collar le había gustado, pero la normas de esa subasta de sólo poder comprar una cosa le habían hecho decidir no seguir subastando más y dejándose la piel en otro objeto, un diamanta, un objeto que tampoco logró comprar... Mientras hablaba dio un paso al frente acercándose a la otra mujer, con la varita en alto, apuntando hacia ella. —¿Yo voy a enterarme? No puedo consentir que tú me amenaces y me menosprecies por mi poco patrimonio... Wingardium Leviosa Y con un rápido movimiento de varita y gracias al hechizo levitador logró que uno de los cuadros se separase de la pared, uno que estaba a un par de metros de la mujer. El cuadro viajaba directamente hacia Sagitas, no muy rápido es cierto, pero viajaba de tal manera que de darle, le impactaría con el pico del cuadro en toda la cabeza. Sería doloroso si llegaba a darle, eso seguro. ¿Sería capaz de defenderse? Sí, podría haber sido mucho más agresivo, pero se estaba controlando...

¡Hola! Paso por aquí a dejarte un pedido :B Imagen: Te dejo por aquí tres imágenes, súper diferentes entre ellas xD. Usa la que más te guste, te inspire o más sencilla te resulte, pero vaya, también siéntete completamente libre de elegir otra que a ti te guste dentro de tu galería, completa libertad realmente. http://media.wwg.com/2017/04/thresh-3-206477.jpg https://i.pinimg.com/736x/3e/b0/d8/3eb0d88fa15249f619e1e7dc1e034e2c.jpg https://i.pinimg.com/originals/6d/aa/83/6daa8325c04a39602607e5a80d9dae2a.png Texto: Nick. Avatar: Sí. Observaciones: Como más te guste o mejor creas que queda, no tengo preferencia en colores ni nada parecido. Excepto en el avatar, si es posible que sea largo, me parecen más elegantes xD. Nada, muchas gracias de antemano :3 *Le deja chocolate*

¡Hola! Hay un pequeño error en mi nuevo nick. Al parecer antes de la "D" hay un espacio, se ve cuando se aprieta el botón de mencionarme que aparece @ David Black Lestrange. Visualmente no se aprecia, pero a la hora de las menciones sí es más incómodo pues no me están llegando debido a ello, ¿podría solucinarse? ¡Gracias! Gracias a Hobbamock que fue quien se dio cuenta xD.

ID: 111240 Nick: David Black Lestrange Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Fecha: 2018-01-17 Poción: Poción Herbovitalizante Puntos: 20 Precio: 1.000 G Total de puntos: 20 Total de Galeones: 1.000 G

¡Cuánta sequedad por parte de su querida hermanita! ¿Qué pasará? ¿Por qué me habla así? Pensaba que quizá fuese su carácter natural, algo áspero. Sin embargo, ese tipo de comportamientos nunca le habían desagradado, todo lo contrario, le hacían sonreír con cierta maldad pensando que le daban la excusa perfecta para ser tan insoportable como le diera la gana sin sentirse culpable, aunque de normal nunca se sentía culpable por nada que hiciese, desconocía qué eran los remordimientos. —Perdóname por mi error en el nombre. —se disculpó de una manera que se notaba demasiado que no era real. —Tengo la mala costumbre de no recordar los datos insignificantes. —dijo aparentando culpabilidad. El dato sin importancia que supuestamente no había recordado era el nombre de una de sus hermanas mayores. Rose... A ella, sino recordaba mal, la conocía. La había visto una vez en su antiguo hogar. Alzó una ceja. Su intento de defender o justificar la lectura de libros muggles era ejemplar, pero no le haría cambiar de opinión. Libros muggles... ¡Qué locura! El mero hecho de que le pudiera parecer entretenido leer los libros que escribían los no mágicos le hacía gracia. —Para ser exactos... ¿quién disfrutaría de las versiones muggles aparte de los traidores a la sangre, los sangre sucia y los propios muggles? —preguntó sin dejar de alzar una ceja ante lo que estaba escuchando. Seguramente su hermana mayor era amante de todo lo muggle, quizá hasta se avergonzaba de ser una bruja... quién sabe. Ya la iría conociendo más, aunque no es que tuviera muchas ganas de hacerlo, pero bueno, la familia era la familia y se decía que era importante... —Obvio que esperaba invitación, gracias encanto, eres toda una señorita. —dijo con una sonrisa sentándose en la silla de su lado, la que ella había corrido, mientras la miraba entre curioso y divertido. Así sentado mucho mejor. Vio que ella se servía té y más galletas y no lo dudó, se lo quitó y le dio un sorbo al té que se estaba sirviendo para ella misma mientras agarraba una de las galletas y jugueteaba con ella en su mano. —Bueno hermanita... háblame sobre ti. —siguió hablando mientras posaba el té de nuevo sobre la mesa y dirigía sus ojos a su hermana una vez más. — ¿Cuáles son tus aficiones? ¿Hay algo que te guste además de leer libros tontos?

Alzó una ceja ante tal grosería. Le habían quitado los libros de la mano. Esa manía suya de querer ocultar los libros para que no pudiera verlos es lo que hacía que los libros le llamasen todavía más atención. No se hubiera fijado tanto en ellos si no se hubiera cuenta de que ella intentaba por todos los medios esconderlos, guardarlos rápidos y alejarlos de su tacto y de su vista. Eso le hacía pensar que esos libros podían contener información más que interesante, y casi se había convertido en una necesidad verlos. Sin embargo, no quería hacerlo por la fuerza, no en esos momentos que la necesitaba como aliada por culpa de los fantasmas. —Vamos, vamos... ¿No tienes curiosidad por saber qué hay escrito en ellos? Tu padre no está, no se enterará de que los vemos... Intentó que su atención por leerlos aumentara y que fuese una cómplice en su "delito" de ver los libros. Conocía la historia de la diadema de Ravenclaw y según su información estaba destruida, por lo que el libro que más le llamo la atención fue el de los demonios, el que finalmente acabó agarrando para mirar detenidamente la portada y la contraportada. ¿Qué información podría traer ahí? ¿Cómo destruirlos? ¿Cómo dominarlos? Sólo la mera idea de que pudiera ser algo así le emocionaba, si fuese posible dominar a los demonios se convertiría en alguien muy poderoso. Los fantasmas volvieron. La biblioteca no había sido tan buen escondite como pensaban en un principio. Con la cara pintada acabó colgado de una lámpara, no sabía qué clase de dibujo tenía en su cara, no había un espejo cerca para poder verse, pero esperaba que fuese una pintura que se quitase rápido con agua, de lo contrario haría lo posible para que ese fantasma desapareciera para siempre. Con la varita apuntó a la lámpara, sabía un hechizo para destruirla y así poder bajarse de allí. La caída no sería demasiado grande, pero antes de que hiciera falta el fantasma volvió a posarlo de la lámpara y suspiró agradecido. Sin embargo, Saori no estaba en muchas mejores condiciones, y si antes ella le había ayudado, lo justo es que ahora la ayudase a él, pero no sabía muy bien qué hacer para librarla de esos fantasmas. —Dejemos que cuente la historia, puede ser divertida... Comentó poniendo uno de sus dedos en el labio para indicar que permaneciera en silencio. Sabía que tenía que ayudarla, que tenía que liberarla de los fantasmas para que dejasen de molestarla, pero la idea de escuchar la historia de la Dama gris le apasionaba tanto que dejaría eso para un poco más tarde, para después de la historia. Él creía que la diadema estaba destruida, pero a lo mejor no era verdad del todo... Además la tonalidad de los ojos de Saori había cambiado y ahora no estaba muy seguro de querer que quedase libre después de saber qué hacía a otros humanos como él... La historia estaba siendo entretenida, no cabía duda. Ellos parecían ser los actores a la par que los espectadores. Si el barón había matado a Helena... —Para continuar bien la historia tengo que... ¿matarla? Dijo apuntando con su varita a la cabeza de Saori, pero obviamente no iba a hacer nada. ¿La diadema seguía existiendo? Quería saber toda la información posible y para conseguir información por parte de los fantasmas tenía una idea, estaban en una biblioteca, había muchos libros así que podría usarlos para lanzárselos. —Wingardium Leviosa Empezó a decir apuntando a los libros y utilizó ese hechizo de levitación para mover los libros gracias a la magia y lanzarlos contra los fantasmas, esperando además, que la mujer aprovechase la distracción para liberarse de ellos y volver a escapar a un nuevo lugar mucho más seguro que la biblioteca.

ID: 111240 Nick: David Rambaldi Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Fecha: 2018-01-13 Objeto: Espejos comunicadores Puntos: 40 Precio: 2.000 G Objeto: Nimbus 2000 Puntos: 20 Precio: 1.000 G Total de puntos: 60 Total de Galeones: 3.000 G

ID: 111240 Nick: David Rambaldi Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Fecha: 2018-01-11 Objeto: Monedero de Piel de Moke Puntos: 10 Precio: 500 G Objeto: Recordadora Puntos: 10 Precio: 500 G Total de puntos: 20 Total de Galeones: 1.000 G

—¿Qué madre no se alegra cuando ve a su precioso hijo? Cuestionó de manera retórica a las palabras de su madre mientras le dedicaba una pequeña sonrisa. Luego puso sus ojos en su hermana, no se conocían formalmente, pero sabía perfectamente quién era. La nota que le había citado a acudir al negocio se lo había explicado a las mil maravillas, era su hermana Alegna. Siendo hermanos no les quedaba más remedio que conocerse mejor, se llevasen bien o mal compartían la misma madre. —¿Esta es Rose, no? Preguntó a su madre mientras continuaba mirando a su hermana. Sabía perfectamente que se trataba de Alegna, por eso la pequeña sonrisa que se le escapó llevaba consigo cierta maldad. Se le hacía complicado aguantar la risa en ese momento, pero resistió. ¿Se tomaría bien que la confundiese? Puede que sí, pero puede que posiblemente no. En realidad, le daba igual. No era la clase de persona a la que le preocupase poner de mal humor a los demás, en realidad le encantaba enfadar a las personas que lo rodeaban. Sacar de las casillas a la gente era un juego muy divertido. —Por supuesto que tengo alguna sugerencia, tengo sugerencias que si me permites el atrevimiento son una auténtica maravilla y aquellos que visiten el Callejón Diagon y pasen por el negocio querrán adquirir. —comentó con toda la tranquilidad del mundo, dejando claro que era alguien muy humilde... Hizo una pausa antes de seguir hablando, pues no había podido dejar escapar un pequeño detalle sobre la clase de libros de los que estaban hablando. —Libros muggles... ¿En serio? ¿Lo dices en serio? Negó con la cabeza. ¿Vender libros muggles? ¿Acaso eran ellos muggles? ¿Acaso las personas que compraban eran muggles? Siguió negando bastante confundido. —Creo, querida madre, que si ella te ha sugerido que vendas libros muggles es porque quiere que el negocio sea una ruina... no le hagas caso. Terminó diciendo sin importarle que su hermana estuviera presente, no era alguien que se ocultase para decir lo que pensaba. Le gustaba decir las cosas a la cara si era necesario. Para él, vender libros muggles era una equivocación, además de algo cuanto menos deshonroso. Para vender esa clase de tonterías existía la otra parte de Londres, la parte donde estaba la gente que confundía las varitas con ramas de árboles y que no poseían el valioso don de la magia.

—¿CÓMO QUE NO? ¡LO ERES! Dijo gritando a la mujer, a la Ravenclaw. Decía que no era un monstruo, pero lo era... ¡Obvio que lo era! Hija de un vampiro y de un demonio... ¡Qué locura! Bien es cierto que el joven siempre había tenido buena relación tanto con vampiros como con demonios, de hecho en el pasado había estado enamorado de una, pero eso no cambiaba su visión de que ella fuera un monstruo. ¿Por qué? Pues porque había devorado humanos. Y lo decía tan tranquila, estaba loca. No estaba asustado, pero se sentía amenazado. Tendría todos sus sentidos puestos en ella, no estaba dispuesto a ser la comida de ella ese día. No. Se defendería como hiciera falta y si tenía que hacerle daño, se lo haría. Cuando se trataba de su defensa personal no tenía reparos en utilizar las peores maldiciones que conociese. Suspiró negando con la cabeza. Bueno, al menos prefería convivir con ella que con los malditos fantasmas, ellos no devoraban humanos pero eran unos pesados de cuidado. Para su sorpresa lo que hizo la hija de un vampiro funcionó y gracias a su ayuda consiguió librarse de los fantasmas. No lo dudó dos veces y corrió detrás de Saori para alejarse todo lo posible de esos fantasmas. No le aterraban, pero eran unos pesados. Cuanto más lejos estuviera de ellos mucho mejor. Después de ser ayudado por Saori quizá había sido demasiado duro con sus palabras acerca de que era un monstruo. Puede que fuese cierto que hubiera devorado humanos, pero hasta ahora con él había sido buena, de eso no cabía la menor duda. En todo momento siguió a Saori esperando que aquella caja funcionase durante bastante tiempo, al menos durante el tiempo que tardaban en esconderse. La seguía de cerca, hasta que fue empujado en una especie de biblioteca. No dejó pasar desapercibido la reacción que tuvo ella cuando vio que los libros estaban a la vista del joven. —¿Qué contienen esos libros? Quiso saber bastante interesado. Quizá guardaban información de gran valor, quizá uno hablaba sobre algún objeto super fantástico que perteneció a Ravenclaw... a parte de la diadema claro. Se acercó para ayudarla, así de paso podría cotillear un poco sobre qué iban los libros, aunque estando delante ella sería difícil poder mirar algo. —¿Por qué no miramos en estos libros? —dijo acercándose y agarrando del suelo uno de los libros que se le había caído. —Puede que en uno de estos libros traiga cómo hay que librarse de esos fantasmas, o de lo que narices sean eso. —porque no estaba seguro de que fuesen fantasmas normales, parecía de estos típicos que lo único que hacían y provocaban era caos. Apartó el libro que había agarrado para poder mirarlo luego y siguió ayudando a levantar del suelo los libros caídos, intentando fijarse en el título de los mismos para ver de qué podían ser. —Por cierto, perdona por lo de monstruo... Me ayudaste y todo eso, así que ya no me pareces un monstruo. Había cambiado de opinión bastante rápido.

Estaba en una pequeña población de la geografía británica disfrutando de la tranquilidad y la paz que se respiraba en un ambiente así. Se encontraba en un pequeño hostal, en una habitación acogedora leyendo una de sus últimas adquisiciones; Un libro de hechizos, el del primer nivel. Antaño, antes de haber estado desaparecido un tiempo, en el Magic Mall no podían comprarse esa clase de objetos ni se podían adquirir esos conocimientos mágicos, por lo que estaba encantado y sorprendido de que ahora sí lo hubiera. Centrado en la lectura escuchó un ruido proveniente de la ventana, pero no le prestó atención. El ruido continuó, no paró en ningún momento. Parecía un picoteo, pero estaba demasiado concentrado en la lectura o al menos lo estaba intentando porque después de unos cuantos segundos y mientras empezaba a ponerse de mal humor miró en dirección a la ventana. La causante del ruido era una maldita lechuza. Sacó su varita dispuesto a hechizarla por cansina, pero se contuvo las ganas cuando vio que tenía una carta. Abrió la ventana, dejó entrar al animal y leyó el pergamino que traía. Se pensó la invitación. Bueno, ¿por qué no ir? Se puso una túnica negra y desapareció del lugar, apareciendo al instante en Londres. Se dirigió al Callejón Diagon y buscó el negocio familiar. Nunca había estado, pero había prestado la suficiente atención como para saber cuál era, solamente tenía que buscarlo. Después de un rato andando por el callejón de manera tranquila visualizó el edificio donde se encontraban al menos su madre y una de sus hermanas. Entró con paso firme y una vez dentro buscó a sus familiares. No tardó en encontrarlas. Se dirigió primeramente a su madre para propinarle un beso en una de las mejillas y seguidamente se separó mirando para su hermana, haciéndole un gesto con la cabeza como forma de saludo. No conocía demasiado a su familia así que eso de convivir un poco era una idea fantástica. —¿De qué hablaban?

ID: 111240 Nick: David Rambaldi Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Fecha: 2018-01-10 Objeto: Reloj Mágico Familiar Puntos: 20 Precio: 1.000 G Objeto: Pensadero Puntos: 40 Precio: 2.000 G Total de puntos: 60 Total de Galeones: 3.000 G

Nick: David Rambaldi ID: 111240 Libro de Hechizos: Libro de la Fortaleza Justificante de compra del Libro (Link al post del Concilio de la bóveda trastero): Aquí Rango Social: Dragones de Bronce Nivel de Magia: IX Fecha aproximada de aprobación EXTASIS o de salida de la Academia (versión anterior): Marzo o Abril del 2011 Link a la Bóveda: 89424 Link a la Ficha: David Rambaldi

ID: 111240 Nick: David Rambaldi Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Fecha: 2018-01-09 Poción: Seducción Eterna Puntos: 20 Precio: 1.000 G Poción: Sueño Angelical de Amor Puntos: 40 Precio: 2.000 G Total de puntos: 60 Total de Galeones: 3.000 G

ID: 111240 Nick: David Rambaldi Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Nivel Mágico: IX Fecha: 2018-01-09 Nombre del producto: Libro de la fortaleza Consumible o Libro de Hechizo: Libro de Hechizo Nivel (del libro): 5 Precio: 5.000 G Precio total: 5.000 G

ID: 111240 Nick: David Rambaldi Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Fecha: 2018-01-09 Objeto: Saeta de Fuego Puntos: 20 Precio: 1.000 G Objeto: Quaffle del Mundial de Quidditch de 1994 Puntos: 20 Precio: 1.000 G Total de puntos: 40 Total de Galeones: 2.000 G

ID de usuario: 111240 Nick Actual: David Rambaldi Nick Nuevo: David Black Lestrange Premio obtenido: Primer lugar en un juego (Trivia) Subtitulo deseado: Valar Morghulis Premio obtenido: Regalo de Tamarindo (tercera en un juego)

@Aries. ¡Gracias! Lo había descartado al ver que en el árbol había un Dave Black Lestrange e íbamos a parecer gemelos (?). Pero como acabo de comprobar que en realidad no usa ese nick, me pondré el compuesto *-*. A los hermanos no hay que ganárselos, hay que molestarlos @@Mia Black Lestrange ¡Merci! xD. Claro, me gustaría estar. ¿Te paso el mío por mensaje privado para que me añadas? :3 @@Eobard Thawne De repente tú y yo vamos a vernos hasta en la sopa, omg (?) xD. Al mío le gusta el frío, te mirará raro xD. ¡Gracias! @@Candela Triviani Yo te prestaría, pero con intereses abusivos xD @@Ashura Lestrange Gracias por aceptarme como madre Todo amoroso yo xD. Bue, yo soy vago (?) así que no tienen que esforzarse mucho para que me vuelvan así. Ahora que me has aceptado ya puedo contarte mis defectos xDDD Nos vemos

¡Hola! De ser posible, vengo a unirme a la familia. Nombre del personaje: David Link a la ficha de personaje: David Rambaldi Link a la bóveda en Gringotts: 89424 Elfos registrados: Krex. Lleva casi toda la vida con David. De ojos verdes y orejas puntiagudas. No es muy amable con aquellas personas o seres que no sean David. Posible padre/madre: Ashura Lestrange Nombre Real: David Fecha de cumpleaños: 9 de Abril País: España Redes Sociales: Tengo un FB que creé especialmente para el foro porque no uso FB para otra cosa y es David Pérez. Difícilmente me encontrarán (?) así que si alguien quiere, le agrego yo xD. @@Ashura Lestrange A priori, y aprovechando que gané un cambio de nick, me cambiaré a David Lestrange. Si alguien tiene alguna objeción por usar el apellido de la familia que lo diga ahora o calle para siempre (?) No sé si tengo que decirlo, pero será como familia sanguínea.

Alzó una ceja y siguió mirándola mal una vez más. Esas carcajadas suyas no le estaban gustando mucho, esperaba que los fantasmas también se comportaran mal con ella porque tenía ganas de poder reírse de ella como estaba sucediendo al revés. Se separó unos cuantos centímetros de ella, no quería estar muy cerca ahora que tenía esa información. ¿De verdad se alimentaba de almas y de sangre o le estaba gastando una mala broma? La miró de arriba a abajo retrocediendo un paso más, no estaba dispuesto a que probara su sangre, tampoco su alma. Si hacía falta la hechizaría o haría lo que hiciera falta para mantenerla lejos. —Pues ya te adelanto que mi sangre no te gustará, ni te molestes en intentar hincarme el diente... Entonces... si tú te alimentas de esas cosas, ¿qué eres? ¿Un monstruo? Le preguntó sin cortarse un pelo. Si eso que le había dicho era cierto estaba claro que no era exactamente una humana, sería alguna clase de esas bestias o criaturas que no le agradaban demasiado, aunque lo cierto es que siempre había estado rodeado de seres y personas que no eran exactamente humanas. Debía de tener una clase de imán para ellos. Y por si fuera poco no tenía poder sobre los fantasmas, vamos, que podían hacer lo que les diese la gana. ¡Maldita sea! Si lo llega a saber no entra en ese castillo de locos. Empezó a reírse por los comentarios tan inoportunos que los fantasmas soltaron sobre Saori, pero pronto se arrepintió pues uno de los fantasmas empezó a tomarla con él. Durante segundos fue manejado por el fantasma como una simple marioneta, resistía con la varita en sus manos pero no podía hacer gran cosa contra un fantasma, así que se le ocurrió otra cosa diferente que quizá funcionase si la Ravenclaw estaba dispuesta a colaborar. —Alohomora Dijo intentando apuntar a la puerta cerrada donde estaba Saori. Esperaba que su magia hubiese funcionado y que la puerta pudiera abrirse, sino solamente le quedaba esperar que ella fuera lo suficientemente inteligente como para saber que solamente tenía que utilizar ese hechizo para poder salir. El fantasma siguió manejando al joven agarrándolo por la túnica... —Vamos, ¡AYÚDAME!

ID: 111240 Nick: David Rambaldi Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Fecha: 2018-01-06 Poción: Aliento de pimienta Puntos: 20 Precio: 1.000 G Poción: Poción de Odio Puntos: 20 Precio: 1.000 G Total de puntos: 40 Total de Galeones: 2.000 G

—¡Eh! Pues claro que me ofende... Dijo alzando una ceja. ¿Cómo no le iba a ofender que le dijeran que estaba siendo un desagradable? Cada vez se confirmaba más que el punto fuerte de la dueña de la galería no era el trato con los clientes. Podría dibujar muy bien y todo lo que quisiera, pero si no tenía ni idea de cómo debía dirigirse a las personas que le hacían tener ganancias le iría muy mal en el mundo de los negocios. Y eso lo repetiría las veces que hiciera falta hasta que aprendiera a no ofender a sus clientes. —Supongo que está claro que seré el primero al que le dibujes el cuadro, ¿verdad? No deberías consentir que ella te amenazase de esa forma. Comentó mirando a ambas mujeres, manteniéndose a un par de metros de ambas, escuchando la "pequeña" discusión que estaban teniendo -que además le estaba divirtiendo- y metiendo cizaña. Vio que la otra clienta sacó la varita y en un acto reflejo sacó la suya, pero manteniéndola oculta detrás de su espalda. No sabía con qué propósitos la mujer la había sacado además de para utilizarla contra esa bandeja tan juguetona, quizá sólo la querría para eso, pero si cambiaba de idea y la utilizaba para atacarle a él estaría más que preparado para poder defenderse de lo que hiciera falta. —Mira, yo lo veo muy fácil... ¡Empieza por mí! Con un cuadro de mi elfo doméstico. —pidió pensativo, tenía varias ideas en la cabeza de cómo lo quería. Además todavía no le había dicho hasta ahora qué clase de pedido quería y era ese, un cuadro para regalar a su elfo doméstico y ponérselo en el pequeño lugar donde vivía. —O empieza por el suyo y aquí habrá destrozos... —sonó amenazante, pero no fue únicamente sonido pues también mostró su varita para dejar muy clara sus intenciones. Pero su amenaza careció de seriedad cuando se fijó en el bigote que le habían dibujado a la otra clienta. No pudo evitar empezar a reírse a carcajadas.

ID: 111240 Nick: David Rambaldi Link a la Bóveda Trastero: 110791 Link a la Bóveda de la cual se hará el descuento: 89424 Fecha: 2018-01-05 Objeto: Espectrogafas Puntos: 10 Precio: 500 G Objeto: Omniculares Puntos: 10 Precio: 500 G Total de puntos: 20 Total de Galeones: 1.000 G