Thomas E. Gryffindor

¡Yupi! Por fin nos van a ir a rescatar de los duendes malos y feos que nos torturan. Lás bóvedas de Gringotts son frías y oscuras, ya estamos congelándonos con mi Laura esperando que un alma piadosa nos venga a buscar (gracias por tu amabilidad Sopita linda). Espero que todo marche de lo mejor en esta misión en el banco; los mortios somos "grandes", así que tenemos que hacérselos saber a los poshos; además que ellos subieron de rangos hace poco (como si supieran que los vamos a atacar en algún momento) y se creen lo mejor del mundo mágico con sus nuevos hechizos y demases. ¡Vamos a dar todo de nosotros para salir victoriosos! Somos el linaje más puro de Ottery, nadie nos podrá detener con nuestros planes malévolos. Primero será el lugar más seguro de la comunidad mágica y después el Ministerio de Magia. ¡JaJaJaJaJa!

- Las diligencias siempre son cosas muy engorrosas, para decir verdad, aborrezco un poco dar vueltas y vueltas por el Ministerio cuando tengo que hacer trámites impostergables para la familia, negocio o el mismo trabajo; pero lo que más me desmotiva es cuando se pasan los problemas de empleado a empleado sin dar una solución adecuada y expedita a lo que uno va a consultar y/o realizar. Es como que pensaran que tenemos todo el tiempo del mundo para estar en su departamento - comentó el Ryddleturn con una gota de humor expresado en su rostro pálido, empatizando un poco con Athena sobre la situación que le había mantenido fuera del Cuartel por mucho tiempo. - Bueno, yo he estado bien gracias a Merlín. Aunque debo confesarte que también estuve un período desaparecido de estos lugares, debido a que hace muy poco me transformaron a la fuerza en vampiro, pero no te asustes, ya tengo controlada la sed de sangre que suele atormentar a los neófitos como yo - añadió el sevillano, respondiendo en parte el amable cuestionamiento de la señorita Ravenclaw.

- Los periodistas siempre lucran con cosas de esa índole, sin tomar en cuenta que detrás de ese infortunado chico existe una familia desesperada por saber algo sobre su paradero. Creo que es muy complicado poder tratar esas realidades en medios de prensa tanto escritos como visuales, ya que se pueden pasar a llevar los derechos civiles de las personas que no quieren que se forme un alboroto a nivel mundial con la trágica noticia - dijo Enrick al mismo tiempo que apoyaba su mano diestra sobre la muralla que tenía justo a su espalda, con el afán de acomodarse en medio de la charla que entablaba con la mujer. - Los departamentos más competentes están comenzando con las labores de investigación luego de una conferencia de prensa que realizó el jefe de deportes posterior al ajetreo en el Atrio, la cual no terminó de muy buenas a primeras. Lo que me quedó más que claro, es que todos debemos trabajar en equipo, evitando la ambición de poder y de figurar por sobre los demás; pese a que muchos no entienden lo sencillo que es poder unir fuerzas para avanzar. Mi madre desde pequeño me enseñó que “dos cabezas piensan mejor que una”, y tengo fe que esta no es la ocasión para dejar de hacerlo - prosiguió el vampiro de la mirada dorada sin dejar de fijarla directamente en la de Athena, de modo de comprender a través de sus orbes la forma que ésta tenía de pensar. - ¿Un capuchino? - preguntó finalmente, esperando que la chica aceptara su ofrecimiento para seguir la plática de forma más amena y cordial.

El capuchino estaba realmente exquisito, especialmente por el sabor del café puro y de origen colombiano que tanto le gustaba degustar, pese a su condición de vampiro que le permitía abstenerse de este tipo de alimentos humanos. El periódico antiguo estaba bastante aburrido, ya que las noticias sobre atentados o ataques no abundaban por el mundo mágico, sino más bien estaba plagado de documentales escritos sobre la farándula y las cosas más insólitas que los magos y brujas realizaban a diario para conseguir una fanaticada estable, principalmente aquellos que postulaban a cargos públicos o que eran deportistas de élite dentro de sus respectivos equipos de Quidditch. Las noticias, al parecer, en lo investigativo estaban marcadas solamente por la desaparición del joven Mateo Black y los intentos en vano por encontrar su eventual paradero dentro de las posibilidades que manejaban los departamentos más competentes del Ministerio de Magia, hecho que sorprendió en parte al Ryddleturn, ya que aún los aurors no comenzaban con las labores de rastreo que tanto ansiaba encabezar junto a sus compañeros más capacitados y experimentados.

- ¿Quién anda ahí? - preguntó fugazmente cuando escuchó unos pasos aproximarse al sector de las oficinas de los trabajadores con sutileza. Fue así que decidió levantarse de su lugar de trabajo para saber de quién se podía tratar, percatándose por el aroma dulce en el ambiente, de que se trataba de una mujer. - ¡Señorita Ravenclaw! Tanto tiempo sin verla por estos lugares. ¿Qué ha sido de tu vida? ¿Vienes con información de lo que ha sucedido allá afuera en el Atrio? - saludó con un beso en la mejilla izquierda de la dama, para detrás preguntarle sobre si contaba con más datos acerca de la repentina esfumación del chico que aún se desconocía su paradero específico y el cómo estaban los demás que le acompañaban al momento de su traslado.

- Algo así fue lo que supe por parte de uno de los criados del castillo hace muchos años atrás. Justamente en esa época estaba también de viaje por motivos de capacitaciones al este de Siberia y tampoco logré recordar mucho lo que había sucedido luego de que nuestro hermano Antheros desapareciera del hogar y retornara a éste en mi ausencia - comentó el Ryddleturn para posteriormente tomar un trago fuerte del whisky de fuego doble que tenía junto a su mano diestra, la cual no paraba en hacer ruido a través del choque de los dedos con la superficie de la mesa un poco gastada por el tiempo. Mientras hablaba con paz en sus palabras, Enrick observó que Anna se aferraba a la zurda del peliazul y luego de unos segundos volvía a soltarla casi impaciente, gesto que dejó un tanto perplejo al pelirrubio, puesto que sabía muy bien cómo era su hermana y las veces en que ésta se sentía insegura de lo que allí podía llegar a suceder en medio del encuentro familiar que no fue previsto.

- ¿Ausencia prolongada dices? ¿Se puede saber a qué se debe? - cuestionó bastante incrédulo el sevillano, esperando una respuesta favorable por parte de la demonio que lo dejase tranquilo del por qué se marcharía por mucho tiempo. No tenía la más mínima idea de lo que Anna quisiese hacer ni menos sabía sobre el rumbo que ésta tomaría luego de que armara su equipaje en el castillo y tuviese que comunicarle aquello a Lyra. Tal vez Valen irían con ella o quizás tendrían que hacerse cargo de él en las inmediaciones del bosque de Sherwood mientras la trilliza regresaba de su emigración. - Parece que estaremos de niñeros, Antheros. Eso si decides pasar más temporadas junto a nosotros en el castillo. Creo que sería una estupenda idea que regresaras a casa y comenzaras a familiarizarte con todos nosotros. No sé si estoy seguro, pero creo que muchas veces he sentido tu presencia en el interior de nuestra morada. Lo que no me queda claro es por qué no saludas ni te apareces formalmente delante de nosotros - añadió luego de escuchar la réplica de Anna y desviando su mirada dorada hacia su hermano menor, el cual parecía estar más cómodo que en un comienzo.

El vampiro de los cálidos orbes miel esperó a que su trilliza avanzara en primera instancia en compañía del pequeño Antheros para que no se sintiese tan intimidado en esa ocasión en que el reencuentro era el tema principal sobre la mesa de conversación en la taberna hacia donde los Ryddleturn se dirigían a pasos calmados. No quería verse tan sobresaltado como lo acostumbraba, pero la situación era tan especial para él que no podía contener a flor de piel las sensaciones que lo embriagaban, sentimientos que parecía tener muy ocultos en su ser, debido a la condición fría y gélida que le hacía tomar su nueva categoría de inmortal. Por otra parte, se veía en la necesidad de conversar muchas cosas con su hermano menor referente a la calidad de vida que éste había llevado todos esos años alejado del núcleo familiar, separación de la cual nunca supo las verdaderas razones que había tenido su madre Lyra en querer dejar un tanto a la deriva al bebé de cabellos azules como el mar que tantas veces había tenido sobre sus brazos, con el afán de mecerlo para calmar el llanto típico.

Fue así que el sevillano de tez pálida tomó asiento en la silla vacía a la derecha de Antheros y a la izquierda de Anna, pero antes que comenzara con la charla, el pequeño se levantó de la mesa para ir a buscar los tragos que beberían aquella noche; gesto de nobleza que el mortífago agradeció a través de una amplia sonrisa dibujada en su rostro apolíneo. - Creo que está un tanto nervioso, hermanita. Se parece mucho a mí cuando tenía esa edad, siempre tan introvertido con las personas a quienes no les tenía la confianza necesaria para entablar una conversación o un simple saludo de bienvenida. ¿Te recuerdas como solía escapar rápidamente de esas reuniones de mamá con accionistas en la isla cuando a secas era una simple posada? - comentó el pelirrubio con expectación, observando a su hermano a lo lejos en la barra, dirigiéndose al rato hacia ellos con tres vasos pequeños; dos de ellos con bombillas de color amarillo que seguramente era para diferenciar el contenido.

- Así que... tú eres mi hermano perdido. Que alegría poder encontrarte luego de tantos años de incertidumbre sobre tu eventual paradero, Antheros. Con el resto de los chicos, siempre habíamos tenido las ganas y el deseo de colocar algún tipo de aviso que diese con tu lugar de residencia, pero al final nos retractábamos al pensar en las represalias que quizás tendría Lyra para con nosotros. Ella a ciencia cierta sabía el por qué te había dejado tan niño sin tu familia verdadera. Pero, no quiero tocar ese tema, no me compete. Lo que sí quiero saber es cómo has estado todo este tiempo hermano ¿Qué ha sido de tu vida? - expresó para luego cuestionar al chico, esperando que no se tomara a mal las ganas de conocer más sobre la vida de uno de sus lazos sanguíneos perdidos a quien había querido desde el momento de su nacimiento. Pero había algo que no dejaba de llamarle la atención; Antheros no se sentía del todo cómodo con la presencia de los dos trillizos, es más, parecía estar aburriéndose de aquella cita bajo la luz de una lámpara en la taberna mortífaga, hecho que le entristecía un resto, pero no alejaba la nostalgia de indagar en la mente de él sin verse en la necesidad de interrogar a Anna luego del encuentro sorpresa.

La segunda planta del Ministerio de Magia parecía estar un tanto vacía del lado que representaba al Cuartel General de Aurors. Los pasillos olían a humedad, el polvo estaba estancado en cada uno de los rincones en donde se entrecruzaban las paredes, la luz era tenue y delicada, se respiraba un aire de soledad y al parecer todos los que allí trabajaban estaban haciendo cosas de mayor importancia que no necesariamente implicaba estar detrás de un escritorio de madera analizando los documentos que llegaban constantemente con denuncias de los moradores de Ottery sobre ataques o presencia de objetos tenebrosos. Por su parte, el joven Enrick estaba comenzando a intranquilizarse de que nada ni nadie saliese a darle la bienvenida con amabilidad, gesto que comúnmente realizaba Elvis con la mejor de las disposiciones cada vez que un equipo de su establecimiento regresaba de un período exhausto de reconocimientos e investigaciones de nivel avanzado. No esperaba que lo acogieran con flores, pero creía necesario que siempre existiese una persona tras el mostrador de recepción para darles a todos las informaciones del día con el desembarazo de poder servirles una taza de café con un par de galletas para amenizar la jornada.

- ¿Parece que tendré que ir a mi oficina? - se preguntó el Ryddleturn, al mismo tiempo que cogía un periódico de dos días atrás que estaba sobre la mesa de centro del vestíbulo, en el cual se podía ver la foto del joven Mateo Black sonriendo por la noticia que corría por todo el mundo referente a su posible arribo al Ministerio para darse cita con autoridades de renombre que se encargarían de potenciar su carrera deportiva y ayudarlo con los típicos gastos que implicaban seguir un horizonte como ese. Fue así que el vampiro decidió encaminar sus pasos rumbo a su bufete en donde estaba la hermosa fotografía móvil de su familia completa en las tierras heladas de Icengard disfrutando de un pasatiempo de invierno en medio de la nieve que adornaba con elegancia las copas de los árboles más ancestrales que se pudiesen ver sobre la faz de la tierra. << Los amo tanto >> pensó casi espontáneamente al verlos allí tan felices como siempre, estando sus dos hijos con aquellos rostros infantiles, de alrededor de unos 5 años, que siempre recordaba con regocijo de ciclos en que las mamaderas corrían por los pasillos del castillo de los Ryddleturn.

- ¿Dónde estarán todos ahora? - se cuestionaba una y otra vez mientras tomaba asiento en su sillón de cuero negro tan confortable en las jornadas de trabajo nocturno, dándose ánimos para beber un café capuchino que comenzaba a elaborarse en la cafetera mágica que estaba justo sobre el archivador del lado izquierdo. Una vez listo el reanimador líquido espumoso, el sevillano agitó su varita blanquecina para hacerlo levitar hasta su posición de descanso, lugar en donde comenzó a leer cada uno de los artículos antiguos que estaban en el periódico con el fin de enterarse de noticias de categoría que necesitaran de la interacción de los aurors ministeriales; dándose el tiempo de sobetear el café con el cuidado de no quemarse los labios ni la lengua debido a la temperatura en que se encontraba el líquido azucarado.

El vampiro Ryddleturn se encontraba un tanto agobiado con toda la parafernalia que había acontecido en el Atrio con la desaparición del joven Mateo Black, un conocido jugador de Quidditch de la selección Argentina que había extraviado su rumbo fijo hacia las aulas del Ministerio de Magia con paradero aún desconocido y sin culpables enjuiciados en la causa de tamaña envergadura. No había podido recolectar toda la información que su colega de labores, Sophie, le había solicitado, pero creía que era bastante oportuno pasar a dar cuenta de todo lo que había sucedido en la jornada de prensa con los periodistas y los diferentes jefes de los departamentos involucrados en el estudio y análisis que debían llevarse a cabo a la brevedad para no lamentar una posible desgracia relacionada con la vida del chico extraviado en uno de los lugares más seguros de la comunidad mágica a nivel mundial.

Lucía un traje de color azabache completo desde el pantalón hasta la chaqueta, una camisa de color blanco desabrochada en los tres primeros botones superiores con el fin de exhibir un tanto sus pectorales bien tonificados y pálidos debido a su condición inmortal, zapatos de piel de cocodrilo africano de color opaco cercanos al manto nocturno, un cinturón del mismo material y tono que abrazaba sus caderas con suma elegancia, un reloj de oro blanco suizo y un estuche negro que colgaba desde su costado izquierdo en donde el noble mago mortífago depositaba a su gran amiga de batallas innumerables. Fue así que con paso tranquilo, se encaminó hasta la segunda planta y esperó a que las puertas del ascensor mágico anunciaran su llegada a destino para dibujar una radiante sonrisa a través de su rostro apolíneo y respirar profundamente el aire trabajador que hace días no sentía con tantas ganas de volver a sentarse detrás de su adorado escritorio de madera refinada.

- ¡Hola! ¿Hay alguien en casa? - vociferó con simpatía en su expresar, dudando en un instante ver la presencia de su amigo, Elvis, cruzar el sector de recepción del Cuartel General de Aurors para brindarle un cálido recibimiento como esos que solía darle cada vez que se aventuraba en algún cateo con varios de sus compañeros de servicio ministerial. Con anhelo en su mirada dorada, Enrick esperó con paciencia a que alguno de los que allí trabajaban se apareciese por los alrededores para charlar un rato y saber cómo estaba marchando todo en su ausencia, debido a los trabajos importantes que la Granger le había encomendado con tanta prudencia y discernimiento específico para salir exitosos en la búsqueda del muchacho evaporado frente a las narices frías de todos.

OFF: ¡Hola compañeros! Ya que el tema en la sala de prensa al parecer quedó estancado, me pareció correcto volver a mi lugar de trabajo para poder estar al servicio de lo que los jefes estimen conveniente. Aprovecho esta instancia para entablar una duda existencial que tengo hace unos días que revisé el foro en la Universidad. Lo que pasa es que no entiendo cómo muchos de nosotros (me incluyo) que permanecimos por lo menos con 3 roles durante el mes de Abril, no nos tomaron en cuenta a la hora de darnos los sueldos correspondientes a dicha fecha. Por lo que logré ver, hay gente que tiene muchos más roles que yo mismo y que tampoco se les dio un galeón por su presencia en el departamento o en los alrededores haciendo frente a las situaciones que como Cuartel debemos sondear. ¿Alguien sabe qué sucedió con eso? Creo que es injusto que la gente que dedicó parte de su tiempo muggle en escribir un par de líneas para llevar un buen rol, no tenga lo que se merece como todo trabajador Ministerial

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El Escuadrón para la Aplicación de la Ley Mágica o antiguamente llamado Departamento de Seguridad Mágica, es la jurisdicción más grande del Ministerio. Posiblemente uno de los más importantes entre sus pares, combinando las instalaciones de la policía y la justicia. Se podría decir que es equivalente al Ministerio del Interior de Gran Bretaña Muggle o al Departamento de Justicia de los Estados Unidos. Si bien el Cuartel General de Aurores es el cuerpo especializado que se encarga de enfrentar a ambas organizaciones ilícitas, tanto a la Marca Tenebrosa como a la Orden del Fénix; también debemos estar conscientes de que hay peligros ajenos a estas bandas injustificadas, como lo pueden ser: delincuentes que efectúen infracciones en grados menores, ladrones, contrabandistas, estafadores y secuestradores; los cuales sólo buscan aprovecharse de la gente honrada de Ottery St. Catchpole y del Callejón Diagón. Su propósito central es la protección de la ciudadanía.

Se encuentra ubicado en la segunda planta del Ministerio de Magia junto al Cuartel General de Aurores y los Servicios Administrativos del Wizengamot, e incluye a las siguientes divisiones: el Despacho de Uso Indebido de Artefactos Muggles y No-Humanos, en donde se regula el uso de la magia de los objetos muggles y se confisca los que han sido ilegalmente hechizados (alfombras voladoras, lámparas mágicas). Una de las leyes que hace cumplir es la prohibición de alterar mágicamente un automóvil muggle con la intención de volar. Y de igual forma se organizan redadas para la búsqueda e incautación de reliquias profanadas con magia oscura; la Oficina del Cuerpo de Seguridad o Brigada de Aplicación de la Ley Mágica, se encarga del cumplimiento del estatuto general y del acatamiento de las tareas convencionales de todo ciudadano, como la policía muggle. Son aquellos magos y brujas encargados de la protección y defensa dentro del Ministerio y los demás edificios gubernamentales, así como también de la persecución a malhechores frecuentes y comunes que no compatibilizan con el perfil civil de mortífago o fenixiano; y la Oficina de Inquisidores, facultados de vigilar que las personas sean fieles a las identidades que tengan registradas en el Ministerio, colaborando con el resguardo de las bóvedas de Gringotts, y que los diversos distritos e instituciones cumplan con su actividad con responsabilidad y esmero. Básicamente son los más capacitados indagadores del MM.

Cabe destacar las antiguas divisiones de: los Magos Golpeadores (Comprendían un equipo de hechiceros altamente capacitados, encargados de detener a los delincuentes peligrosos. Los requisitos de ingreso eran cinco T.I.M.O.s (Título Indispensable de Magia Ordinaria), uno de los cuales debía ser de Defensa Contra las Artes Oscuras. El equivalente en los Muggles: el Equipo S.W.A.T. Los miembros tienen una cama reservada en el Hospital San Mungo de Enfermedades y Heridas Mágicas) y las Brujas Guardianas (Fueron una fuerza especial del Ministerio que, presumiblemente, estaba estacionada en lugares estratégicos en busca de delincuentes en estado de “fugitivos”); las cuales fueron trascendentales antaño. Para trabajar aquí como empleado o jefe al señorío de una de las divisiones, los postulantes deben poseer ciertos conocimientos, capitaneados por: Leyes Mágicas, DCAO, Noción de Artes Oscuras y Maldiciones, el arte de la Aritmancia y Estudios Muggles; esta última es fundamental para la administración que normaliza su uso clandestino y escéptico.

Actualmente el Escuadrón sufrió modificaciones estructurales luego del ascenso del Sumo Inquisidor, Enrick William Ryddleturn, a la Dirección del Departamento; posterior a la renuncia de la cabecera previa al mando, Bel Evans McGonagall. Inmediatamente al arribar tras la bajada del ascensor mágico, el visitante debía virar a la izquierda y traspasar una enorme puerta de madera de roble color caoba. Encaminarse por un escueto pasillo con extensos ventanales que miran hacia el Atrio, hasta alcanzar las inmediaciones del vestíbulo central de la circunscripción de Aplicación de la Ley Mágica. Es en esta antecámara donde se halla el recibidor del Secretario (detrás de éste se localiza un hermoso ventanal que da justamente con la Fuente de la Comunidad) junto a una espaciosa sala de espera compuesta de sitiales acolchados tonalidad crema dispuestos en filas, algunos esquineros lujosos con arreglos florales y peceras, mesas de centro con revistas de novedades y periódicos del día como “El Profeta”, y diversos estantes bien bruñidos con carpetas de las causas más actuales y los diferentes formularios para las denuncias de los civiles. El embaldosado era de cerámica azabache reluciente, a la cual si mirabas con pulcritud, lograbas ver tu reflejo como un espejo; el firmamento con forma de bóveda tenía el diseño del Paraíso, ya que se podía vislumbrar (gracias a un complejo hechizo) a decenas de ángeles que revoloteaban entre las nubes mientras que otros tocaban armoniosamente sus instrumentos musicales.

Estaba conformado por 5 salas sin contar el Archivador. Una para cada División, en donde estaba: el escritorio del jefe separado del resto de los bufetes para los empleados, una mesa de pláticas internas para cada oficina, un baño o tocador con todos los servicios básicos, y una repisa con suministros de cafetería y bollería para inhibir el apetito. Un auditorio espacioso para reuniones entre oficinas, interdepartamentales del Ministerio de Magia y conferencias de prensa o entrevistas a algún miembro de la Brigada. Y finalmente el Despacho del Director, conformado por: su escribanía de fina madera tallada en araucaria chilena, un diván de cuero bruno ajustable a la postura deseada por su receptor tras el pupitre y del otro lado dos sillas placenteras y bien tapizadas de canela para sus invitados, armarios con archivadores de registros de sumarios significativos, su excusado propio de refinadas instalaciones en porcelana y mármol, y su zona predeterminada para licorería con excelente abastecimiento.

En el caso de los interrogatorios, para mantener el orden y no promover la agitación social, se contaba con una “Habitación Secreta” la cual aparecía detrás del sitial del director luego de dar la contraseña correcta al retrato de Bob Ogden, destacado hechicero que dirigió la Brigada en la década de 1920 cuando acudió a la cabaña de los Gaunt. La clave secreta es: “Dolores Umbridge y los centauros se aman por siempre”. Es necesario recalcar que en la Dirección también se encuentra la Plantilla con los nombres de todos los empleados y los aprendices del Escuadrón, los cuales permanecían allí para la comodidad del magistrado y en el caso de que se necesitara dicha información para otro estamento.

Secretario: CONAN RUSH

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Joven mago danés de aparentes 15 años de edad, pues realmente tiene alrededor de los 107. Conan es un vampiro experimentado, convertido por una merodeadora con afán de salvarle la vida luego de un brutal y trágico accidente en donde parte fundamental de su familia falleció. Mide 1,60 y pesa menos de 50 kilos; cabello castaño claro un tanto desordenado, tez blanca como la leche, orbes profundos y expresivos de tonalidad miel, de colmillos relucientes y afilados, nariz respingada y orejas perfectamente simétricas al costado de su rostro. Cursó sus estudios mágicos en el Instituto Durmstrang al norte de Europa, destacándose en asignaturas como: Artes Oscuras, Pociones y Maldiciones. En honor a su casa académica, suele usar túnicas color rojo sangre y negro oscuro, añadiendo capas de pieles tupidas de animales salvajes en oportunidades que el clima está muy frío. Se desconoce si el Rush posee algún tipo de inclinación mortífaga o simplemente es un aficionado a la historia de la batalla de Lord Voldemort, debido a que ocasionalmente emite comentarios despectivos contra los hechiceros de padres muggles o aquellos que se relacionan con estos sin un motivo de fuerza mayor, sino que por una mera amistad.

Llegó a Ottery St. Catchpole con una maleta cargada de ilusiones de ser parte del Cuartel General de Aurores, pero este deseo se vio truncado por su incorporación al Escuadrón para la Aplicación de la Ley Mágica luego del período de postulaciones de Agosto del año 2014, ocupando la vacante que una humilde funcionaria había dejado luego del altercado “inesperado” que le desvinculó de la labor de secretaria general de dicho estamento ministerial. Se cree que Conan vive en una alcoba alquilada en el Caldero Chorreante, pues tiene recelo de incorporarse a una familia ante la duda de que realmente lo aceptasen tal como es. Tiene un carácter bipolar, en momentos parece ser un chico muy educado y carismático, pero en cosa de segundos cambia su perfil a un sujeto petulante con ansias de poder y discriminación étnica. A la hora de hacer sus quehaceres, es responsable y trata de ser perfeccionista con todo lo que le encomiendan, es excéntrico y a la vez solitario, muy curioso y buen observador. Gracias a su condición de inmortal, el Rush goza de ciertos privilegios como: velocidad de movimiento y olfato intachable para detectar situaciones de peligro que puedan atormentar a la comunidad. Su varita es de madera de durazno, barnizada de azabache y de núcleo de fibras de corazón de acromántula fusionadas con coronas esmaltadas de los dientes del maxilar superior de un Colacuerno Húngaro.

* MAPA DEL VISITANTE -----------> LINK DIRECTO

Plantilla Ministerial del Escuadrón para la Aplicación de la Ley Mágica (3)

10. Director del Departamento: 1 --->Enrick W. Ryddleturn (B: 93543) Cambio 10/07/2014

10.1 Despacho de Uso Indebido de Artefactos Muggles y No-Humanos.
- Jefe de Oficina: 0 --> Vacante
- Empleados: 0 --> 5 Vacantes
- Aprendices: 0 --> 5 Vacantes

10.2 Oficina del Cuerpo de Seguridad.
- Jefe de Oficina:

* alia2 (B: 100660) Cambio 07/08/2014

- Empleados: 0 --> 5 Vacantes
- Aprendices: 0 --> 5 Vacantes

10.3 Oficina de Inquisidores.
- Jefe de Oficina (Sumo Inquisidor):
* Pik Malfoy Macnair (B: 86554) Alta 07/08/2014
- Empleados: 0 --> 5 Vacantes
- Aprendices: 0 --> 5 Vacantes

¡Hola a todos por acá! Bueno como deben pensar vengo a realizar una serie de cambios a mi ficha de personaje, es por eso que prefiero colocarla toda nuevamente, ya que cambié y añadí muchas cosas en los diferentes lugares con el fin de ampliar varios aspectos importantes en la vida de mi querido Enrick Ryddleturn. Espero que no exista inconveniente y que esté todo perfectamente con cada uno de los detalles que incorporaré esta vez. Creo que con el tiempo acabaré por escribir un libro con la vida de este vampiro que sale con cada aventura en el mundo, en verdad es un patiperro de corazón.

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Datos Personales

 

Nombre del Personaje: Enrick William Ryddleturn

 

Sexo: Masculino

 

Edad: Adulto de 35 años eternos. Nacido el 16 de Marzo de 1977

 

Nacionalidad: Española

 

Familia(s):

* Familia Ryddleturn (Sanguínea)

 

Padre(s) Sanguíneo:

Madre: Lyra Katara Ryddleturn

Padre: Conde Vlad Tepes (Drácula)

 

Padre(s) Adoptivos:

--

 

Trabajo: Cuartel General de Aurors. Oficina para las Relaciones Ministeriales. Empleado.

 

Poderes Mágicos:

 

 

Rango Social: Unicornios de Bronce

 

Bando: Mortifago.

Rango dentro del Bando: Base.

 

Nivel de Poder Mágico: --

 

Puntos de poder en objetos: 40

 

Hechizos adicionales: --

 

Puntos de poder en criaturas: 20

 

Criaturas controlables en asaltos y duelos: --

 

Habilidades Mágicas: --

 

Conocimientos Especiales:

- Primeros Auxilios

- Defensa Contra las Artes Oscuras

 

 

Perfil del Personaje

 

Raza: Vampiro

 

Aspecto Físico:

 

Es un joven inmortal que mide 1,75 (m) y pesa alrededor de 76 (Kg.). Su piel es blanca, helada y pálida, lampiño, cabellos rubios, ojos de color dorado que cambian de tonalidad a rojizos cuando ha bebido sangre humana últimamente, labios delgados color carmesí y de una sonrisa blanca y radiante. Su cuerpo es bastante trabajado, musculoso y simétrico. Posee rasgos finos europeos heredados de su padre el Conde Vlad Tepes, nariz respingada y mirada inquisidora. Anteriormente en su época humana, Enrick poseía unos ojos de tonalidad miel verdosa, los cuales le distinguían entre sus trillizos por el color café claro dulce que emergía desde lo más profundo del esmeralda común en ellos. Estos orbes igualmente cambiaban de espectro luminoso cuando su faceta de demonio afloraba ante la humana mortal, volviéndose mucho más opacos de lo habitual.

 

Cualidades Psicológicas:

 

Bastante inteligente, perseverante, preocupado que el resto de las personas que le interesan se encuentren bien, servicial, leal y valiente. Le gusta hacer reír a sus amigos con bromas y comentarios algo desubicados, pero que al fin causan carcajadas. Destaca en él un sentimiento de superioridad frente a individuos que son “sangre sucia” y que no se hacen respetar como magos auténticos, no suele compartir mucho con los demás en situaciones de felicidad ajena, es demasiado obstinado en conseguir la perfección de cada una de las cosas que realiza a diario tanto en su vida personal como en el trabajo. Cuando era pequeño era bastante introvertido, personalidad que cambió con los años al forjarse como un gran mago de poderes privilegiados. También en sus inicios, gozaba de una curiosidad innata que lo puso en más de un aprieto que desencadenó castigos provenientes de su madre Lyra.

 

Historia:

 

Antepasado: Hace 200 años

 

El rey de Icengard, Siegfried el Magnífico, era un tipo tirano y malvado. Su castillo se encontraba en las profundidades de un cráter oscuro y tétrico que alojaba en su interior un laberinto llamado Apokolip. Sediento de control y dominancia frente al resto de sus súbditos, mandaba a ejecutar una vez al mes a una doncella del pueblo para imponer respeto y miedo. Estaba rodeado de criaturas mágicas que custodiaban las gélidas murallas de piedra cubiertas por la nieve, dentro de ellas estaban: hipogrifos, erumpents, thestrals, cangrejos de fuego, crups y los míticos dragones que sobrevolaban los cielos oscuros en búsqueda de carne humana.

 

Expandió su territorio a costa de muchas vidas humanas, llegando a crear un verdadero imperio regido por la tiranía. Su ambición y codicia lo cegaron por completo, llegando a matar a su propia descendencia e incluso a su esposa Anabeth (salvándose solo su hijo menor que logró escapar). Todos le temían y nunca nadie se atrevió a contradecirlo, sus leales caballeros peleaban con el fin de mantener a sus familias a salvo del emperador.

 

Todo marchaba bien en su vida hasta que decidió conquistar Eldets. La batalla fue sangrienta, miles de vidas se perdieron, pero la arrogancia del rey le hizo perder la cordura y fue su propia varita la que se puso en su contra y lo llevó a la desgracia. Al perder la contienda, el reino de Siegfried quedó en ruinas y terminó por morir acompañado por la soledad y la depresión, quitándose la vida cobardemente en el lago glacial y lúgubre a manos de las sirenas.

 

Re-encarnación / Actualidad

 

Enrick William Ryddleturn Black nació en España, en la hermosa localidad de Sevilla junto a sus dos hermanos (trillizos): Anna y Mefistófeles; bajo el amparo de su madre Lyra Katara Ryddleturn. Fueron criados en el castillo de la familia durante varios años de su infancia, dedicándose a jugar y divertirse con las mascotas que existían en la enorme fortificación ubicada en un lugar recóndito, especialmente con un dragón Bola de Fuego Chino que le caía en gracia desde el primer día en que lo vio sobrevolar los azulados cielos en compañía de decenas de aves que construían sus nidos en las copas de los árboles más elevados que adornaban de verde los jardines del recinto.

 

Cuando tenía alrededor de 7 años de edad, la familia Ryddleturn se marchó al exilio en la “Isla Atlántida”, debido a una guerra que se estaba desatando en el Infierno dirigida por Lucifer, su abuelo. Fue así que el pequeño consentido y menor de los trillizos debió albergar sus esperanzas de acudir al colegio “Hogwarts de Magia y Hechicería” en un cofre bien cerrado y dedicarse a aprender todo junto a sus pares de manos de la matriarca a través de duras sesiones de clases teóricas y prácticas de cada una de las asignaturas básicas con el afán de convertirse en un gran mago a futuro. Alrededor de esa edad, Enrick descubrió que tenía el talento de manejar la corriente eléctrica de acuerdo a sus emociones, logrando conformar grandes tormentas de descarga en situaciones de peligro o simplemente cuando estaba triste. Por miedo al “qué dirán” decide ocultar su faceta de demonio en un comienzo, renegando de su propia naturaleza familiar, hasta que sus hermanos lo descubrieron en pleno clímax de una maldad mal intencionada que estaba por realizar con el tendido eléctrico del hotel de la “Isla Atlántida”.

 

Cuando tenía 10 años, junto a sus hermanos Anna y Mefis soltó a todos los animales de la “Isla Atlántida” a modo de travesura, vistiéndolos graciosamente para hacerlos pasar por clientes y otorgarles habitaciones en el hotel. Favorablemente para el menor de los trillizos, la jaula del Bola de Fuego Chino quedó bien sellada, evitando que éste saliese de su morada y redujera a cenizas unas cuantas cabañas del lugar. A Enrick le gustaba pasarla de lujo con sus hermanos y más aún si se trataba de liar a Lyra con sus poderes demoníacos que salían a flote en las situaciones menos esperadas, pese a que éste blasfemara un poco de aquella condición especial heredada de los Ryddleturn. Una vez, practicando magia con las criaturas vivas junto a sus entrañables, fueron espiados por Thalasse de manera escandalosa, por lo cual los tres decidieron congelarla unos días en represalia por andar husmeando donde no le correspondía, lo que desató el enojo de la matriarca por más de una semana, dándoles tareas domésticas en todo el inmobiliario de la Isla sin reproche alguno.

 

Estaba más que claro que unos niños tan pequeños y curiosos no podían dominar bien su lado demonio y mucho menos que permaneciera clandestino, por más resistencia que existiese en el fondo de sus corazones mortales. Cada vez que alguno de ellos usaba sus superioridades mágicas de una forma poco adecuada, recibía un regaño por parte de Katara, consiguiendo únicamente que los poderes despertaran con mayor fuerza y los usaran en la soledad en medio de las penumbras nocturnas. En un principio los hermanos se dedicaban a matar algunos animales (especialmente gatos) de su madre que se encontraban por su camino casualmente, hasta que ésta empezó a notar la falta de estos en sus jaulas. Fue así que los trillizos tuvieron que ocultar de otra forma sus quehaceres místicos, aunque el mayor de los tres (Mefistófeles) los tenía bastante más dominados e iba más solitario en búsqueda de la independencia, en cambio los dos mas pequeños terminaron pasándose de la raya sin medir la totalidad y magnificencia de su potencia diabólica. Un inesperado día, Lyra encontró una habitación con tres cadáveres humanos apilados sin misericordia en una esquina, incitando que el fuego se prendiera a través de sus ojos, no teniendo más remedio que sellar los poderes de Anna y Enrick, que a partir aquel momento tendrían solo su parte mágica simple despierta y no recordarían sus poderes demoníacos hasta un día clave.

 

A medida que fueron pasando los años, Enrick comprendió todo lo que su madre había realizado por él y sus hermanos con el fin de protegerlos de una eventual muerte sanguinaria, por lo que enalteció su figura y dedicó parte de su adolescencia en acompañarla a cada lugar que ésta visitaba, fortaleciendo un hermoso sentimiento que los mantendría unidos por siempre. Creció en él la necesidad de sobreproteger a sus hermanas y celarlas en las ocasiones que fuesen necesarias cuando algún pretendiente llegase a la casa con ánimos de cortejarlas y arrancárselas de su lado. Por su parte, Anna nunca dejó de verlo como un niño pequeño, mimándolo a cada momento y situación que así lo ameritase, incluso frente a los invitados más aristocráticos de su madre, provocando que Enrick se sonrojase bastante y terminara por salir corriendo del lugar de reunión.

 

Terminó sus estudios de magia en la Academia, en donde fue parte de los “Aethonans de Salem”, cursando cada una de sus cátedras con éxito, sobresaliendo del resto de sus pares en compañía de quién se convertiría en su mejor amigo, Heko. En dicho lugar histórico conoció a una bella mujer llamada Laura, la cual le cautivó desde el primer día en que sus miradas humanas se cruzaron en las gélidas tierras de Icengard, sitio en donde se dictó la asignatura de Generales. Fue así que se forjó como un gran mago de habilidades y conocimientos sólidos, con valores que se reafirmaron con el pasar de loa años de memorias académicas y conservando siempre un sentido del humor bastante peculiar a la hora de distraer a sus amigos de los problemas o situaciones que los pudiesen atormentar en su diario vivir.

 

Sus primeros pasos en el mundo laboral los realizó en el Departamento de Transportes Mágicos siendo aún aprendiz en el Centro Examinador de Aparición, pero una vez titulado de la honorable institución mágica ingresó al Cuartel General de Aurors, lugar en que conoció a otro de sus grandes amigos llamado: Elvis Gryffindor, el cual se desempeñaba como director en esos años. Con el transcurso de los meses de trabajo, Enrick aprendió múltiples técnicas para realizar cateos en compañía de un grupo selecto de magos y brujas que le acompañaban en cada jornada con la mejor disposición de enseñarle. Su procedimiento preferido es crear una atmósfera brillante, a modo de neblina rastreadora, que recorra todo el lugar sin dejar pasar ninguna esquina sin revisar. En su lugar de trabajo dispone de una oficina personal con todas las comodidades posibles para favorecer su buen desempeño; destacando sobre el escritorio, una fotografía móvil con las figuras de su esposa en compañía de sus dos hijos en medio del bosque de Icengard.

 

Contrajo matrimonio con su amada Laura Haughton un 6 de Enero del año 2012 en las heladas tierras de su antepasado, territorio en donde ambos jóvenes enamorados consumaron su amor por primera vez entregándose en cuerpo y alma. La celebración perduró por varios días y fue inolvidable para los asistentes, con un banquete de maravillas y una orquesta que no paró de tocar música toda una noche de júbilo y alegría. Previo a la celebración de la ceremonia nupcial se realizó un campamento de recepción en una reserva natural sudamericana “Cataratas del Iguazú” con el fin de llevar un registro de los invitados y de crear lazos de compartir antes de una festividad de tamaña envergadura como la que prepararon los novios, los padrinos y los escoltas con tanta devoción y dedicación. Con dicha mujer de los ojos celestes concibieron a una hermosa chica, Rosalie Marie, la primera hija del matrimonio Ryddleturn-Haughton. Para luego dar paso al segundo de sus hijos, Enrick Perseus, un muchacho de carácter noble y servicial.

 

Rosalie es su gran tesoro, describiéndola siempre como “sus propios ojos” a la hora de nombrarla ante las demás personas. Comparte muchos gustos con ésta, especialmente el amor a la música y las artes con la espada. Percy, por su parte, heredó sus energías y pasión por el tallado a mano y las notas del pentagrama. Ambos disfrutaron de una niñez con padres presentes y siempre preocupados por su bienestar y desarrollo personal. Enrick desde pequeños les inculcó el amor y devoción por su familia, el respeto por el prójimo y lo importantes que son los deportes en la vida de toda persona para gozar de buena salud. Actualmente está esperando con impaciencia y ansias, junto a su amada esposa, a su tercera hija, la cual se llamará Antonella.

 

Se asoció con su mejor amigo Héctor y con Marcus McGonagall con miras de forjar una agencia de detectives privados en el Callejón Diagón, “Wright & Wrong”, la cual se dedicaría a descifrar los misterios que enmascaran las tan rutinarias desapariciones, los asesinatos inesperados, las fugas de reos desde prisión, la aparición de objetos ancestrales de magia inexplicable y muchos sucesos paranormales que acontecen día a día en el mundo mágico. Fue así que Enrick sacó a relucir sus dotes como investigador privado, tal cual como lo había soñado desde pequeño al contemplar desde los televisores muggles, de la en ese entonces hostal de la isla de exilio, la serie de “Sherlock Holmes”, adoptando la célebre frase «Elemental, mi querido Watson ». Al tiempo decide realizar una sociedad con su madre para administrar mejor la “Isla Atlántida” con miras a un mejor desarrollo con el paso de los años, ampliando la infraestructura y adaptando las áreas verdes para poder favorecer el deporte y la recreación de los clientes junto a sus familias y mascotas.

 

En sus ratos libres suele sacar a pasear a sus mascotas: Noctowl y Kiara, por los jardines del enorme Bosque de Sherwood, ya que gusta de tomar aire fresco y admirar la naturaleza alrededor del castillo. Actualmente está terminado de construir una cabaña de campo en los mismo terrenos, la cual será su nuevo hogar familiar junto a Laura y sus hijos una vez que todo esté marchando en orden luego de la boda, aunque sabe muy bien que no podrá dejar a su madre y hermanas solas por mucho tiempo sin aparecerse por los rincones del fortín velando por la seguridad de sus seres queridos. Su gran pasión por la arquitectura y el tallado a mano le inspiró para levantar aquella vivienda de material firme y llena de ventanales por donde el sol atraviesa con sus rayos luminosos por la mañana y la luna alumbra en las sombras en plena noche estrellada.

 

Un tanto desorientado como todo adolescente, decidió probar suerte incorporándose a la “Orden del Fénix” junto a sus amigos de escuela. Allí se destacó con su participación en el Clan de los Paladines, innovando en el estudio del aura a través de la experiencia que le brindaron cada uno de sus compañeros generosamente. Pero una situación en particular le hizo alejarse completamente de los terrenos del lado de la luz de manera súbita. Sin saber que lo estaban siguiendo por varios años, el fornido humano quedó totalmente vulnerable frente a la ambición de un joven vampiro de rasgos británicos, el cual no vaciló en apoderarse de su alma en su propia morada y convertirlo en una verdadera bestia sedienta de sangre, impulsivo y capaz de asesinar descontroladamente a cuanto humano se le cruce en momentos de angustia y frenesí cuando la ambición lo domina.

 

En exploración de respuestas y para no dañar fatalmente a sus seres amados, el menor de los trillizos sale de su hogar de manera precipitada rumbo a Transilvania para ubicar al vampiro más antiguo de la historia y del que se tiene registro, el Conde Drácula. Estando allí, pone en peligro la vida de su madre y hermanos (Anna y Mefis), los cuales no se quedaron tranquilos en las inmediaciones del Bosque de Sherwood y salieron en su búsqueda. Luego de combatir contra un hombre lobo, Enrick es poseído por la maldad del Conde, siendo inducido por éste para que asesinara a sus dos hermanos de la manera más brutal posible. Gracias a los nobles sentimientos de Mefistófeles, el pelirrubio retoma el control de su conciencia y los ayuda a terminar con el vil vampiro ancestral utilizando la “Lanza del Destino”, forjada en el Olimpo por el Dios Hefesto, en manos de Anna.

 

Una vez que regresa de su viaje a los territorios del bosque de Sherwood, Enrick ingresa a las filas de la “Marca Tenebrosa”, siendo partícipe de varias celebraciones especiales en donde aprovecha de sociabilizar con la elite de Ottery. También tiene que enfrentar una nueva tragedia en su vida, la muerte de su hermano mayor a manos de su abuelo Lucifer, el cual es el responsable directo del deceso del mayor de los trillizos Ryddleturn producto de un ataque de ira descontrolada que terminó con la incrustación de una daga en el pecho del demonio. Aquella pérdida hizo que el español retomara el control de la protección de su hogar y el cuidado de cada uno de sus hermanos menores junto con Anna, sentimiento de amparo y refugio que utilizó a la hora de ayudar a su esposa con el control excéntrico de la ojinegra malvada en las mazmorras de la fortificación; utilizando una técnica demoníaca de transmutación de almas.

 

 

Pertenencias:

 

Objeto Mágico Legendario: --

 

Objetos Mágicos:

 

Objeto 1: Varita Mágica

 

Mide 30 (cm.) de longitud, madera de araucaria, muy poderosa, excelente para realizar hechizos complicados, de defensa personal y de ataque. Su núcleo es una mezcla de fibra de corazón de Boggart y pelo de la cola de Thestral, lo que le concede propiedades espectaculares. La madera es de color blanca-amarillenta, bastante compacta, liviana, milenaria y de temperatura fría al tacto como la nieve. Anteriormente perteneció a un malvado rey de las tierras lejanas de Icengard y ahora es la fiel compañera de Enrick, su re-encarnación.

 

Posee un hermoso calado en su contorno además de sobresalientes y pequeñas espinas que brotan desde el costado, tal cual como lo hacen en una bella rosa. La fibra de corazón de Boggart que posee la hace perfecta para utilizar los hechizos que más le temen sus oponentes y el pelo de cola de Thestral le entrega el sello de dominio ante la muerte, aunque se considera que el portador de esta varita (al igual que el rey pasado) está condenado de por vida al repudio de sus cercanos, debido a que de ella emerge cierta energía maligna que puede apoderarse del alma de su dueño, haciendo florecer una personalidad oculta y déspota.

 

Enrick normalmente la lleva guardada en un estuche de cuero negro de bisonte que está adosado siempre a su cinturón al costado izquierdo de su cadera. Suele llamarla “Marie” en honor a su primera hija. Cuando se dispone a alzarla para luego apuntar a su rival o blanco, el movimiento es similar al aleteo de un cisne blanco.

 

Clasificación: AA

Puntos de poder: 20

 

Objeto 2: Anillo (Argolla de Matrimonio)

 

Pieza de oro macizo que se utiliza en el dedo anular izquierdo, justo en la línea imaginaria que da con el corazón. Adquirida en Magic Mall por Enrick semanas antes de contraer matrimonio junto a Laura. En su interior dice: “Te amo Laura Haughton 6-01-2012”.

 

Clasificación: A

Puntos de poder: 10

 

Objeto 3: Anillo (Anillo Familiar con forma de Dragón)

 

Encontrado en un cofre escondido bajo tierra en los terrenos de la “Isla Atlántida”. Posee la forma de un dragón metálico de plata que lleva una hermosa piedra esmeralda sobre su cráneo. Sirve de guía a la hora de querer encontrar a un miembro de la familia que se encuentra en peligro, tomando la forma de aquella bestia alada en miniatura, la cual se desprende del dedo y comienza a sobrevolar en dirección al lugar indicado. Enrick lo utiliza en el dedo medio de la mano derecha.

 

Clasificación: A

Puntos de poder: 10

 

Mascotas y Criaturas:

 

Criatura 1:

 

Noctowl

 

Lechuza marrón con toques dorados en su plumaje al contacto con los rayos del sol. Mide alrededor de unos 35 (cm.) de cabeza a patas. Es macho y tenía alrededor de 4 meses de vida cuando el sevillano la adquirió en Magic Mall. Suele estar al aire libre en el Castillo Ryddleturn volando soberanamente. En ocasiones específicas (generalmente cuando está muy inquieto, ya que le gusta hacer maldades en el invernadero) permanece en una jaula plateada lo bastante espaciosa para que se pueda dar algunas vueltas sin regañar. Es un poco torpe a la hora de entregar correspondencia y la falta de experiencia le ha traído bastantes problemas al perderse en el trayecto de ida o de vuelta.

 

Clasificación: X

Puntos de poder: 10

 

Criatura 2:

 

Kiara

 

Canina de raza Husky-Siberiano de pelaje café claro con blanco y ojos celestes. Adquirida por Enrick en Magic Mall cuando ésta tenía sólo mes y medio de nacida. Suele estar en el Castillo Ryddleturn revoloteando por los jardines y ladrándole a los gatos y desconocidos que se acercan al lugar familiar. Desde pequeña está acostumbrada a dormir a las faldas de su amo, el cual procura bañarla a diario con el motivo de que huela bien perfumada al resto de los moradores. Es un tanto celosa y posesiva con los suyos, protege su territorio y es muy obediente a las indicaciones.

 

Clasificación: X

Puntos de poder: 10

 

Total puntos de poder en criaturas: 20

 

Criaturas en la Reserva: --

Elfos:

 

Darien

 

Pequeño elfito de menos de un año de vida que encontró hace poco tiempo a las afueras de un bar en Brasil cuando concurrió allí a vacacionar con su familia. Tiene ojos grandes y de tonalidad verdosa como la joya esmeralda, orejas caídas y simétricas. Suele hacer pucheros para que su amo lo tome en brazos, es obediente y buen amigo. Cuando otra persona se acerca a Enrick, éste se pone de mal humor y cambia inmediatamente su carácter, poniéndose grosero y bribón. No sabe hablar bien hasta que finalmente se enfrentó a una situación en que necesitó comenzar a expresar pequeñas frases para poder comunicarse con las personas queridas de su amo con la noticia del fallecimiento de Mefistófeles.

 

Licencias, Tasas, Registros:

Licencia de Aparición: Obtenida

 

Licencia de Vuelo de Escoba: Obtenida

 

Registro de Elfos:

- Registro de Darien

 

Registro de Criaturas no mágicas:

- Registro de Noctowl

- Registro de Kiara

 

Registro de Vampiros: Link

 

Registro de Demonios: Link

 

Registro de XXX: --

 

Otros Datos:

 

- En su condición de demonio heredada por los Ryddleturn, Enrick puede manejar a su antojo la electricidad, logrando crear enormes tormentas y adiestrando su poder para lanzar rayos y truenos a diestra y siniestra con tal de defenderse.

- Posee una daga ancestral perteneciente a la familia Ryddleturn, encontrada en una fuente llena de peces de variados colores en medio del bosque de la “Isla Atlántida”, la cual conserva alrededor de su borde metálico filoso una pequeña figura de un dragón.

- Su vicio principal es el chocolate artesanal y su mayor miedo son las Acromántulas.

- Su Patronus es un Mapache, animal con el cual está familiarizado desde pequeño, ya que cuando se encontraba en la “Isla Atlántida” bajo exilio, era este ojeroso amigo quién le llevaba avellanas y nueces para capear el apetito voraz invernal.

- Dentro de sus hobbies están: el tallado en maderas, equitación, practicar surf y buceo en las costas del farellón costero a las afueras de Ottery y en la “Isla Atlántida”, salir a trotar con buena compañía y realizar ejercicios matutinos para mantenerse en forma.

- En la boda; sus padrinos fueron: Gyvraine C. Sullivan & Elvis F. Gryffindor / sus escoltas: Jesse Potter Blue & Héctor Weasley D.

 

Cronología de cargos:

 

- Departamento de Transportes Mágicos. Centro Examinador de Aparición. Aprendiz.

- Orden del Fénix / Initié Noviembre 2011 – Enero 2012

- Marca Tenebrosa / Base Abril 2012 - Actualidad

 

Premios y reconocimientos:

 

- Mejor rol en la Madriguera / Fénix Idol http://i.imgur.com/zweOB.gif

- Rey del Karaoke en la Madriguera / Fénix Idol http://i.imgur.com/4QHIM.gif

- Beca de Rol Avanzado (500 galeones)

- Gala de San Valentín 2012 / Pareja más romántica

 

Links de Interés Referentes al Personaje:

 

Link al Perfil de Comprador MM: 114

Link a Bóveda Personal: Bóveda N° 93543

Link a Bóveda Trastera: --

Link a Bóveda de Negocio: Bóveda de Wright & Wrong / Bóveda de Isla Atlántida

Link a Bóveda Familiar Ryddleturn: Bóveda N° 77616

Link a Bóveda Familiar 2: --

* Chicos también me gustaría realizar otros cambios que tienen que ver con mi PERFIL. Resulta que se debe cambiar la raza a "Vampiro" y el grupo a "Mortífagos". Junto con eso también deseo pedir que en la ficha diga: "Ficha de Enrick W. Ryddleturn", ya que cambié de Nick hace algún tiempo atrás. Espero que no exista algún inconveniente con estas cosas que necesito. De antemano les doy las gracias y le dejo chocos a quien realice este cambio. ¡Saludos!

Enrick se sintió profundamente ofendido al observar a través de sus orbes dorados cómo el nuevo integrante a la conversación interna que llevaban en la sala de prensa le dejaba con la mano estirada en el aire sin estrechársela amablemente, gesto mimado que al parecer creyó compensar con un leve movimiento de cabeza, señal que no convenció del todo al menor de los trillizos Ryddleturn, el cual no quiso hacer de la situación un momento de tensión entre los empleados ministeriales, por lo que respiró profundamente mientras ambos jefes de las divisiones departamentales correspondientes comenzaban a entenderse en un diálogo cada vez más fluido. - ¡Caballeros! No quiero ser maleducado, pero debemos trabajar todos en equipo para demostrar la unidad a la hora de enfrentar una situación tan delicada. Por otra parte, Señor Haughton, agradezco el título de escolta personal, pero en estos instantes no quiero sobresalir delante de todos, siempre es mejor mantener un bajo perfil - comentó el musculoso auror al mismo tiempo que contraía sus fornidos bíceps braquiales al cruzarse de brazos en actitud de espera ante las posibles palabras que aquel hombre de secreta mirada le propinaría en cosa de segundos delante de todas las cámaras de los reporteros allí presentes.

<< Su energía me parece familiar. Lo más curioso de todo es que no logro ver nada en su interior. ¿Cómo es posible que su alma esté vacía? A menos que. ¿Será un vampiro al igual que yo? ¡No, no, no, no! Enrick William para de sugestionarte. Este no es momento para comenzar con cosas esotéricas >> pensaba con interés el fortachón pelirrubio de cabellos un tanto ondulados al observar detenidamente la presencia de Hugo, detalle que no se le escapaba a la hora de analizar a las personas que se encontraban cercanas a su entorno desde que se había transformado en un bebedor de sangre compulsivo y frenético, tanto así que todos los allí presentes corrían riesgo de muerte si un ataque de sed lo llegase a agobiar en medio de toda la comunidad. - ¡Señor Dupont! Hugo le está hablando - vociferó el español al mismo tiempo que le brindaba un pequeño codazo al director de “Juegos y Deportes Mágicos”, el cual parecía haber caído en una especie de trance con tantos flashes que emergían de los aparatos fotográficos de periodistas de diferentes medios escritos.

Enrick seguía flanqueando del lado izquierdo a Mirshka Dupont mientras la rueda de prensa se desarrollaba con completa normalidad, interviniendo periodistas de los más selectos medios de comunicación escrita, con interrogantes que fueron muy bien planteadas y que eran de sumo interés para todos los allí presentes que discutían de alguna u otra forma por la desaparición repentina del jugador de Quidditch, vulnerando todos los mecanismos de seguridad que tenía la institución de labores mágicas en donde la mayoría de magos y brujas trabajaba día a día. Las cámaras fotográficas ya lo tenían muy agobiado, los murmullos que se hacían cada vez más insoportables en el espacio de prensa tratando de conglomerar más información de la que estaba dando el representante directo de deportes le estaba ocasionando un dolor de cabeza irresistible y el sonar de las plumas al rozar los pergaminos entintados le causaba tanto malestar que prefirió escabullirse entre los medios justo detrás de la señorita Gryffindor que estaba muy firme del lado derecho del encargado.

- ¡Caballeros! ¡Caballeros! Un poco de orden aquí - vociferó con energías al ver la llegada de un representante del Gabinete del Ministro de Magia con intenciones de boicotear lo que el señor Dupont estaba realizando con la mejor de las intenciones para encontrar al Mateo Black con vida y sin lamentaciones de un final trágico. Fue así que se quedó junto a Hilary mientras los dos hombres trataban de entenderse, fijando su mirada de oro en los orbes del recién llegado con intenciones de espiar el trasfondo de la situación desde su alma, detalle que lo dejó más que perplejo al denotar que lo único que podía percibir de él era vacío. Se encaminó a los dos tipos una vez que Mirshka requirió de su persona, haciendo hincapié a través de su caminar, de lo abochornado que estaba con tanta parafernalia, hechos que siempre incomodaban al Cuartel General de Aurors que gozaba de bajo perfil en cosas de mucha exposición mediática. - Enrick Ryddleturn, auror ministerial. Es un gusto conocerlo señor Haughton - saludó con cordialidad el pelirrubio al mismo tiempo que le ofrecía su mano diestra a Hugo para que éste se la estrechara con amabilidad, ya que en esos momentos era necesario que la comunidad mágica viese a todo el Ministerio unido en una única causa y no trabajando por separado debido al egoísmo y las ganas de sobresalir ante el resto de sus colegas sin colaborar con humildad y sencillez.

Tan pronto como hubo emitido su último comentario en relación al rector del departamento deportivo, Mirshka se daba la media vuelta para volver a dirigirle la palabra con el fin de invitarlo cordialmente junto a la mujer que le hacía compañía rumbo a la sala de prensa del Ministerio de Magia; sitio en el cual se realizaban las conferencias importantes y que requerían una muestra homogénea de público para dar informes detallados de situaciones especiales que acontecían en el mundo mágico y que eran de suma preocupación para cada bruja y mago que rondaba la institución de labores. - Por mi parte señor Dupont, no tengo ningún problema en escoltarlo a ese lugar un tanto incómodo para muchos. Además tiene usted toda la razón hombre, así nos ven trabajando juntos para evitar los típicos rumores mal intencionados de los periodistas que suponen que el Ministerio está en pleno proceso de decadencia - comentó con entusiasmo el joven inmortal Ryddleturn al mismo tiempo que le brindaba una palmadita en la espalda al mago, en señal de buena disposición y simpatía por querer trabajar en alianza codo a codo con los demás empleados motivados.

- ¡Señorita Gryffindor! Mi nombre es Enrick Ryddleturn, soy auror y un muy buen amigo de Elvis Gryffindor - saludó caballerosamente el rubio, al mismo tiempo que tomaba la mano derecha de la señorita y besaba su dorso con hidalguía, esperando que su padrino de bodas fuese familiar de ella y así entablar un buen tema de conversación mientras se encaminaban junto a Mirshka rumbo a la sala de presa. Dentro de sus pensamientos, el vampiro anhelaba que aquel problema relacionado con la desaparición del jugador de Quidditch se solucionara lo antes posible sin tener que lamentar un desenlace fatal que provocaría una situación de pánico entre la comunidad mágica, ya que todos pensarían que estarían totalmente inseguros en su propio lugar de trabajo e inclusive dentro de sus casas.

¡Hola a todos por acá! Bueno paso a informar que he leído dos veces el relato que colocó Patrick en un comienzo del tópico para no olvidar las cosas que allí se publicaron y que son de suma importancia a la hora de enfrentarse a una situación así. Creo que la iniciativa es muy buena, ya que muchos de nosotros podemos tener diferentes dudas en relación a esta temática tan interesante como lo son las estrategias de duelos personales y las redadas especialmente, es más, creo que yo muchas veces no me siento capacitado de ingresar a los asaltos por el exclusivo hecho de perderme cada cierto tramo en medio de los escritos mortífagos y fenixianos, ocasionando mi muerte de manera inesperada y bastante expedita al no saber qué rolear por no estar bien coordinado con los demás chicos (bueno... eso me pasaba a cada momento en la Orden del Fénix). Así que estaré al tanto de sus comentarios y dudas para aprovechar de nutrir mis conocimientos con las interrogantes que surjan en el trayecto. ¡Un abrazo a todos! << Especialmente a mi amore Laura >>

El auror ministerial encaminó sus pasos, luego del interrogatorio personal que le había realizado al director del “Departamento de Juegos y Deportes” en el atrio, rumbo a la sala de prensa del Wizengamot para tomar atención y nota de todos los detalles que al mago se le pudiesen haber escapado de preguntar y que quizás más de algún periodista de las diferentes editoriales del mundo mágico, le cuestionaría sin pelos ni tapujos en la lengua a una de las máximas autoridades encargadas del traslado del jugador de Quidditch del equipo nacional de Argentina. Hasta ese momento no descartaba ninguna de sus hipótesis, pero lo que le parecía extraño era que su bando, los mortífagos, no debían estar implicados en el accidental desvanecimiento, debido a que las acciones de los seguidores del “Señor Tenebroso” siempre eran evidentes para toda la comunidad mágica con el fin de imponer respeto y temor a los insignificantes de sangre sucia que cada día plagaban más el Ministerio, Ottery y por qué no decirlo... la mismísima “Academia de Magia y Hechicería”.

Con tranquilidad se quedó parado, flanqueando el lado izquierdo de Ishaya, esperando las primeras palabras del mago inundado por el brillo que causaban los flashs de las cámaras fotográficas de los inoportunos reporteros. Deseaba que la ronda de preguntas diese algún indicio o directriz que apuntara hacia los eventuales culpables de lo que había sucedido, pero también presentía que el asunto a tratar no era algo extremadamente fácil, por lo que era necesario ser muy audaz para lograr unir todas las pistas que hasta ese momento tenía reunidas y así armar el puzzle de la tragedia que quizás podía ser obra del bando fenixiano.

El Ryddleturn tomó nota inmediatamente en su libreta de comentarios mientras el director del departamento en cuestión seguía con el relato de los acontecimientos que él manejaba desde su punto de vista más externo a la situación que allí había acontecido con la rápida desaparición del joven jugador de Quidditch de fama mundial. Lo que le extrañó en una parte fue la actitud que el hombre demostraba con una mujer de cabellos violetas, ya que se refirió a ella en un tono muy sospechoso y queriendo darle una información más selecta a través de la entrevista que daría en la sala de prensa del Wizengamot luego de culminar el interrogatorio que el inmortal de los orbes dorados llevaba consigo. - Entiendo sus palabras señor Dupont, pero déjeme decirle que igualmente me parece sospechoso que su empleada tampoco haya dado señales de vida. Tal vez sea parte de esta evaporación repentina o quizás, lamentablemente, sea una víctima más de lo que aquí aconteció - expresó el español con un tono de bastante preocupación, no dejando de anotar todo lo que veía y percibía a su alrededor con los sentidos bien desarrollados que le otorgaba su condición de vampiro.

- Claro, se entiende que aún no den señales de su trabajo. Espero que la integridad del Ministro esté a salvo de quien o quienes hayan querido causar un alboroto con lo del señor Black. Tal vez fue todo un montaje para desviar nuestra atención del verdadero objetivo que puede o pueden tener estos malhechores - añadió el fornido mago, observando el vaivén de Ishaya en plena conversación, desviando sus pasos hacia una mujer que el menor de los trillizos de Lyra Katara desconocía, es más, nunca antes parecía haberla visto merodear por los largos pasillos de la institución mágica laboral.

Con caballerosidad, Enrick le tendió su diestra al director del departamento que necesitaba consultar, al mismo tiempo que desplegaba una radiante sonrisa acogedora para darle a conocer al mago de sociedad de que se trataba de un hombre de buenos modales y bastante cordial. Sin más impedimentos, el pelirrubio decidió ir desplazando a los reporteros que ya habían arribado al lugar como buitres de rapiña, para encaminar al Dupont rumbo a una esquina vacía en medio del Atrio con afán de poder conversar con más tranquilidad y de forma más personalizada. Sus orbes dorados se desviaban en un ir y venir constante, quedando completamente sorprendido con la magnificencia del hecho y que estaba siendo totalmente cubierto por el área de prensa; tomando fotografías y testimonios sin el permiso requerido para establecerse dueños de la verdad absoluta del acontecimiento inesperado en la comunidad mágica deportiva.

- Necesito saber algunos detalles de la situación que se dio el día de hoy con el señor Black. ¿Quién estaba a cargo del traslado del jugador de Quidditch? - preguntó el vampiro con seguridad, esperando que el máximo representante de Juegos y Deportes le respondiese con honestidad y sin ocultar detalles o alguna responsabilidad que cayera directamente en uno de sus empleados por negligencia y falta de compromiso. El español debía cumplir a cabalidad la misión que le había encomendado su jefa Sophie para así recaudar la mayor cantidad de información posible para la investigación misteriosa, sin defraudarla y orientando el caso de la desaparición hacia un final fructífero.

La reacción inmediata de su hermano fue tal y como lo había pensado, el chico era bastante introvertido tal cual como lo era él a su edad, con un carácter oculto que quizás era preciso explotar para que sacase a relucir todas sus virtudes sin inconvenientes ni limitaciones que le impidiesen proyectarse en su vida como mago a lo largo del camino que estaba siguiendo en el bando de los seguidores del Señor Tenebroso. Desconocía por completo el trasfondo de toda la situación que allí se estaba vivenciando, pero era lo bastante perceptivo como para darse cuenta de que Antheros estaba un poco anonadado con tanta muestra de cariño que él solía entregarle a diario a todos los que convivían junto a él en el castillo del bosque de Sherwood, tanto así que los elfos se sentían gratos de atenderlo a la brevedad cuando el vampiro se los solicitaba con cordialidad y posteriormente agradecía por los servicios.

- Entonces no hay nada más que decir en este lugar. Si mi hermano pequeño quiere tomarse un rico trago con nosotros, Anna, debemos mimarlo y complacerlo sin dar excusas baratas de que seremos un mal ejemplo si bebemos frente a él. Aunque deberé controlar un poco tanta levantada de codo, no quiero llegar borracho a casa como cuando era adolescente y junto con Mefis salíamos de fiesta. ¿Lo recuerdas hermana? - expresó el Ryddleturn con simpatía, para luego formular una pregunta a la chica de cabellos rubios; recordándose con bastante nostalgia de su hermano fallecido hace más de 4 meses. Pese a que el tiempo pasaba rápidamente, tanto para Enrick como para Anna les era difícil poder vivir sin una parte de tres a la cual estaban acostumbrados a sentir junto a ellos. Pero en ese preciso momento fue sacado de la sensación de trance en que se había sumergido, ya que la española lo estaba tironeando junto a Antheros en dirección a la taberna que el huidizo mortífago había sugerido como opción a visitar para amenizar la conversación.

- ¡Pasen vosotros primero! - musitó con tranquilidad y caballerosidad luego de que Anna abriera la puerta del local, colocándose en su posición inicial para afirmar la estructura de madera y así evitar que se cerrase fuertemente en pleno rostro de alguno de sus hermanos, ocasionándoles una vergüenza que quería impedir a toda costa. << Espero que todo salga de maravillas con Antheros. Quiero acercarme más a él y poder demostrarle que pese a que los años habían pasado fugazmente desde que lo tuve en los brazos, puede confiar en mí >> pensó el vampiro justo antes de cruzar el umbral, dándole tiempo al tiempo para conformar un bonito vínculo con su hermano menor y retomar el período perdido.

- Puede que tengas razón Sophie, pero no podemos confiarnos demasiado sobre los actos de los fenixianos como los de los mortífagos. Siempre hay situaciones en las que se pueden ver involucrados los individuos por cosas de bandos, pero hay otras en donde la mano del hombre influye más allá de unos cuantos ideales mágicos. Tal vez se puede tratar de un simple ajuste de cuentas o quizás el mismo jugador se auto secuestró para hacer polémica y causar furor entre el grupo de su fanaticada. Creo que todo puede pasar en esta vida y claramente esta ocasión puede ser una de ellas. No debemos sorprendernos colega - expresó el Ryddleturn luego de escuchar atentamente las palabras de su compañera mortífaga con bastante respeto y cordialidad, demostrándole su interés en el caso que estaban analizando juntos. Posterior a sus palabras, Enrick desvió su mirada dorada en dirección al lugar que la Granger le indicaba con afán de examinar los dos puntos brillantes ubicados entre la niebla.

- ¡Entendido jefa! Pero cuando vaya al diario “El Profeta” pregunte por la señorita Bel Ryddleturn. Ella es la directora y por lo demás... es mi hermana menor. Dígale que va de parte mía y seguramente le tenderá una mano con mucho gusto - vociferó el vampiro de los cabellos rubios antes que la chica saliese del lugar de los acontecimientos rumbo a su nueva misión como auror. Fue así que el menor de los trillizos encaminó sus pasos nuevamente a la parte central del Atrio para luego dirigirse a los ascensores mágicos destinando su caminar hacia el Departamento de Juegos y Deportes Mágicos, pero la presencia de alguien a quien reconocía como el director de dicho lugar le hizo dar un paso en falso, retrocediendo inmediatamente para comenzar con las labores de investigación.

- ¿Señor Mirshka Dupont? - preguntó el joven inmortal con cautela acercándose al hombre que estaba también en medio de la escena del crimen. - Me presento, soy Enrick Ryddleturn, auror del Ministerio de Magia. Necesito hacerle algunas consultas que están relacionadas con la desaparición del joven Black. ¿Podría usted concederme algunos minutos de vuestro valioso tiempo? - añadió con caballerosidad, esperando la respuesta del rector de aquel departamento que estaba totalmente relacionado con el deportista de élite.

- ¡Vaya, vaya, vaya! ¡Qué sorpresa me he llevado el día de hoy! Nunca pensé que volvería a verte Antheros. Hace algunos años atrás perdí la esperanza de que mis ojos volvieran a contemplar tus azulados cabellos hermano, ya que han pasado dieciocho años desde que mamá... bueno, cosas del pasado que no conviene recordar ahora, pero lo bueno es que ya estás cerca de nosotros de nuevo - expresó el menor de los trillizos Ryddleturn con una sonrisa dibujada en su rostro blanquecino, para después acercarse lentamente hasta su hermano menor y tenderle un cálido abrazo fraternal junto con un beso en la mejilla. Esperaba que el adolescente no reaccionara mal ante su gesto de cariño, él solía ser así con sus familiares más cercanos y esa no iba a ser la excepción a la regla, menos ante un reencuentro que el español anhelaba desde que su madre les arrebató el cuidado del menor.

- No lo sé Anna, por mi parte vengo recién llegando a la fortaleza oscura y pues, me gustaría que nos marcháramos a un lugar más solitario para conversar los tres, de la vida, junto a una copa de whisky de fuego doble o un exquisito ron cubano. ¿Qué me dicen hermanos míos? - preguntó finalmente el auror mortífago guiñándole su ojo izquierdo a su trilliza y desviando su mirada en dirección a Antheros para que él también diese su opinión con respecto a la situación que se estaba vivenciando aquella noche, ya que tal vez éste no quería relacionarse con el inmortal poseedor del poder del trueno y encaminaría sus pasos rumbo a otra dirección del enorme recinto sin querer compartir debido a sus razones personales, motivos que Enrick respetaría a cabalidad si se daba de esa forma.

Enrick se acercó rápidamente al lugar en donde se encontraba su camarada Sophie para poder llevar a cabo la tarea de manera óptima y precisa. Mientras pedía humildemente que los reporteros se quitaran de su camino, aprovechaba de analizar paso a paso la situación que allí se estaba dando y todas las personas que se encontraban a su alrededor, sabiendo que quizás alguna de ellas había tenido algo que ver en el asunto de la desaparición y que ahora se hallaba allí parada a su lado para tratar de desviar el centro de atención. No sabía si toda la trama habría sido planeada por los mortífagos, pero si eso hubiese sido así, su colega le habría realizado alguna señal para advertirle de que fuese lo menos evidente en relación a su vínculo con los seguidores de la “Marca Tenebrosa”.

- Disculpa la demora Sophie - expresó el Ryddleturn al mismo tiempo que se acercaba a la mujer vampiro para entregarle un beso en la mejilla derecha como signo de saludo. - No encuentro muchas pistas evidentes en este caso, pero lo que me llama mucho la atención es que la o las personas que cometieron este delito, fueron muy pulcras a la hora de no estropear sus planes con huellas o marcas que los ligaran al crimen ¿No lo crees? - continuó diciendo el auror mientras se agachaba para revisar más de cerca el perímetro delimitado por su compañera de labores. - ¿Crees que sea cuestión de bandos o un simple grupo de fans que interceptó la llegada del jugador para pedir un rescate millonario en galeones a sus familiares más cercanos? - cuestionó inmediatamente a la Granger, esperando que le entregase una respuesta certera y convincente para comenzar a trazar las líneas de su investigación.

Estaba en pleno juego con el Black cuando su anillo familiar comenzó a reaccionar como si alguien de su linaje estuviese acercándose a pasos agigantados hacia el lugar en donde éste se encontraba disfrutando de una noche de explicaciones y diversión. Su cuerpo comenzó a irradiar sensaciones hacia todas sus terminaciones nerviosas especiales, una sacudida muy peculiar brotó desde lo más interno de su existencia y sus sentidos se agudizaron a la perfección para poder identificar a las presencias que se aproximaban con seguridad por medio del claro que se formaba en el patio central. - ¡Sabes Zack! Dejaremos esto para después. Necesito poder encontrar a algunas personas en la fortaleza oscura. Desde hace un tiempo me están llamando como si quisiesen juntarse a la brevedad - explicó el menor de los trillizos Ryddleturn, al mismo tiempo que le brindaba una sonrisa a su creador para después desaparecer de la escena mediática en medio de la oscuridad con bastante prisa.

Comenzó a revolotear con rapidez por todo el campo verdoso, teniendo mucho cuidado con los obstáculos que aparecían en su camino de regreso al lugar de donde había lanzado al dragón de plata que se forjaba en su anillo familiar. - Me llamabas hermanita - susurró al oído derecho de Anna una vez que apareció a sus espaldas sin que ella ni su acompañante se diesen cuenta de la maniobra del movimiento silencioso de acecho. Fue así que estalló en carcajadas al observar a través de sus dorados ojos cómo la rubia se sobresaltaba del susto que le había hecho pasar, de manera desprevenida y sorpresiva, su hermano. Enrick desde pequeño gozaba de buen humor y ganas de pasarlo bien, por lo que la española no dudaría que efectivamente tenía frente a sus orbes esmeraldas a su adorado mimoso. Luego de entregarle un abrazo bien apretado, con el cuidado de no romper sus costillas en el acto por la magnificencia de su fuerza muscular, el vampiro desvió su mirar hacia el chico que le hacía compañía. Los cabellos azul rey que éste exhibía le hicieron meditar inmediatamente en la posibilidad de que aquel mago podría ser el bebé del cual Lyra se alejó por completo desde sus primeros meses de vida sin mayores explicaciones, el mismo retoño al cual habría tenido entre sus brazos junto a sus trillizos hace años atrás y que ahora parecía tener frente a su fornida figura inmortal. - Anna... ¿Acaso él es Antheros? ¿El pequeño Antheros Ryddleturn? - dijo de forma muy entrecortada debido a la emoción que le embriagaba en esos momentos de felicidad y alegría por quizás estar en presencia de un reencuentro fortuito.

Caminó con mucha prisa al ver que un punto en específico del atrio comenzaba a llenarse de magos y brujas curiosas que buscaban un autógrafo del jugador de Quidditch que iba a resguardar junto con Sophie, pero gracias a sus habilidades como vampiro mortífago logró detectar que dicho afamado joven no se encontraba del todo al interior del ascensor que seguramente lo traería al Ministerio de Magia. Una sensación de expectación y perplejidad invadió su inmortal cuerpo cuando finalmente llegó al sitio en donde su colega de cabellos rubios comenzaba a corretear a la muchedumbre para poder realizar las pericias correspondientes, relacionadas con la desaparición del chico de popularidad mundial.

- ¡Sophie! ¡Sophie! ¿En qué puedo ayudarte? - vociferó el auror con energías, al mismo tiempo que ayudaba a la Granger a corretear a las personas que entorpecían las labores de rastreo por parte del equipo especial del Cuartel. - ¡Ya escucharon todos aquí! No queremos gente chismosa por estos lados, pero se acepta la buena voluntad de todos los que deseen ayudar y que tengan las facultades para hacerlo. A los demás, les pedimos que se mantengan alejados del perímetro de trabajo o que se vayan a sus respectivas oficinas ministeriales - añadió el vampiro ahora en dirección a todos los que se encontraban allí, con el afán de colaborar con el despeje de la zona y así poder investigar correctamente sin inconvenientes ni estorbos. - ¿Qué sugieres Sophie? - le preguntó una vez más a su compañera sin desviar su mirada dorada de los ojos de la pelirrubia, esperando una pronta respuesta para comenzar luego con las indagaciones y posibles hipótesis de la desaparición misteriosa acontecida nuevamente ante sus respingadas narices profesionales.

- ¡Sophie querida! ¿Por qué tan estresada? - le alcanzó a decir el vampiro neófito antes que la mujer saliese del lugar con bastante apuro, dejándole una misión encomendada. Ya todo comenzaba a volver a la normalidad, hecho que le agradaba bastante al Ryddleturn, pese a que extrañase mucho a su amigo Elvis. Rápidamente encaminó sus pasos hacia su oficina para dejar en el perchero aquella chaqueta azabache que llevaba puesta y poder salir al atrio lo más cómodo posible en base a las necesidades que tendría en dicho sitio. Antes de cerrar la puerta definitivamente, se devolvió con prisa para sacar unas calugas de manjar que tenía en un frasco de cristalería europea sobre el escritorio para amenizar el transcurso del viaje.

A pasos acelerados, Enrick se orientó hacia el conocido ascensor mágico, al mismo tiempo que se colocaba en la boca un dulce de leche y tarareaba el coro de una canción romántica recordándose de su amada esposa. Debía arribar fugazmente a la entrada del Ministerio de Magia londinense para hacerle compañía a la Granger y ayudar en lo que fuese necesario en su tarea como auror. Anheló por mucho tiempo volver a las pistas en el cuartel y ahora era el momento preciso e indicado para demostrar una vez más sus ganas de trabajar, por lo que a través de una amplia sonrisa en su jovial rostro inmortal y pálido a la vez, atravesó gran parte del patio central hasta divisar a lo lejos su lugar de destino un poco aglomerado.

Enrick ya había acabado de realizar los trámites junto a su hermana Anna en otra planta del Ministerio, por lo que debía regresar a sus obligaciones de auror en el Cuartel para refrescar su cabeza con los mandatos de aquel lugar y saber de alguna u otra manera si es que acaso se tenían noticias de la partida de Elvis Gryffindor del cargo de director. La última vez que estuvo en su oficina resultó bastante penoso no contar con la presencia de su amigo y padrino de bodas en los pasillos, se le extrañaba muchísimo, pero no sabía cómo ayudar a remediar un situación tan engorrosa como esa y salir de las dudas que acongojaban su mente en búsqueda de las respuestas necesarias para esclarecer los hechos. Esperaba que su amada Laura hubiese conseguido algún detalle que hubiese pasado por alto cuando Elvis se había marchado rápido de aquel lugar, alguna señal que les comunicara a todos quienes lamentaban su partida que todo se podía tratar de un error ministerial por negligencia.

Tras cruzar el umbral del ascensor mágico en el segundo piso, el Ryddleturn encaminó sus pasos en dirección al sitio de recepción del cuartel para ver si alguna persona, mago o bruja, salía a recibirlo con noticias. Lucía un traje elegante compuesto por: pantalón azabache de tela sofisticada, una camisa blanquecina bien planchada, corbata azul marina, una chaqueta de terno de iguales tonalidades que el pantalón, un cinturón de cuero opaco que cruzaba su cintura y adosaba en su costado izquierdo un estuche con la varita del vampiro, zapatos de piel de cocodrilo negros y correctamente lustrados, un reloj suizo de oro blanco en su muñeca izquierda y los anillos de boda - familiar en los respectivos dedos. Realmente irradiaba luz en los pasillos del Cuartel, acompañado por la palidez típica de su nueva condición de vampiro y los orbes de matices dorados muy brillantes e intensos.

- ¡Hola a todos! ¿Hay alguien en casa? - expresó el auror con simpatía y esbozando una cálida sonrisa radiante dibujada en su rostro apolíneo. Esperaba que prontamente alguien saliese a su encuentro para entablar una conversación en compañía de un exquisito café capuchino y unas galletas de chocolate recién horneadas del local comercial a las afueras de los baños del Ministerio de Magia. Debía conocer los avances del caso del director, problemas nuevos en las mansiones de Ottery o simplemente chismear un tanto para amenizar la mañana como se debía y así comenzar una jornada laboral con ánimos.

Enrick observó detalladamente cada uno de los movimientos que realizaba el Black mientras le dirigía la palabra tratando de explicarle cada uno de los motivos que había tenido a la hora de escogerlo como su compañero en la eternidad. No dudaba en lo absoluto en lo relacionado a que poseía cualidades especiales que le hacían diferente a los demás, pero no lograba conectar esos dones con la magnificencia del hecho de que ahora era un ser inmortal que gozaría de juventud perpetua sin que el tiempo ni espacio dañase su pulida piel de mármol. La fuerza descomunal, la velocidad sin límite y su aroma llamativo para seducir a la presa que desease, le eran cualidades muy tentadoras y que sabría utilizar muy bien a la hora de necesitar de ellas en casos extremos, pero tampoco quería valerse de ellas para descuidar sus quehaceres como mago o simplemente caer en la vagancia de no poner la cuota del mínimo esfuerzo para conseguir los objetivos que se plantease en la vida.

- No te preocupes Zack, comprendo a la perfección cada una de las palabras que dices. Pero quiero decirte que no te confíes en tus fortalezas, ya que éstas pueden llegar a transformarse en sus debilidades si tu oponente resulta ser más astuto que tú - formuló el trillizo menor Ryddleturn, esbozando una amplia sonrisa radiante en su rostro apolíneo al ver que su creador cambiaba de tonalidad sus ojos pasando a tener aquella coloración que indicaba amenaza segura. Fue así que el pelirrubio decidió tomar con humor aquel momento y divertirse un rato con Zack, revitalizándose con las propiedades vampíricas (igualmente que el otro mortífago) y así lanzarse fugazmente al cuerpo de éste, comenzando a dar vueltas y vueltas cuesta abajo de una colina, sin soltarse a modo de juego, para quedar posado sobre el vampiro experimentado con ambas manos perpendiculares a la superficie y a la altura de la cabeza del Black. - ¡Vamos! ¡Pasémosla genial juntos! - expresó finalmente el español al mismo tiempo que se lanzaba a través de un salto en dirección a uno de los árboles del territorio, con el afán de que Zack lo siguiese.