Aaron Black Yaxley

Aaron Augustine Black Ryddleturn. Trataba de mantener el cuello erguido.... La mente era un arma de doble filo, todos sabían que el delirio era su peor enemigo; Me vi sentado en una roca, mirado el etenso y desafiante mar, las olas reventaban pocos metros bajo mis pies y la brisa marina humedecía mi rostro... El sudor era lo que mantenía aquél delirio. - Cre..crees que si podría ir a San mun...go, ¿estaría acá?...- pregunté a duras penas volviendo a mi realidad. El elfo me miraba atónito, sin permiso para decisiones rápidas- no.. ti..re la daga para ata...atacarte- agregué tratando de mantener la mirada gris en los dos platos que traía la criatura como ojos- creo que serás el..pri...mer elfo..al..cual agradecería si...si pudiese ayudarme- espeté derrotado, sino pedía ayuda al elfo moriría en cuestión de horas, el mismo me corroboraba el hecho. Intenté holgar más el cuello, un calor abrazador tomaba mi cuerpo, quizás era la fiebre efecto del veneno. Busqué a duras penas una bolsita de cuero que traía atada al cinto, aquella estaba llena de galeones que podrían pagar más de alguna poción. Al estar sentado, apoyando la espalda en el mesón de la recepción, lancé la bolsita a ras del piso, impactando suave con la daga que giró diez veces más rápido que un segundero del reloj; las monedas se esparcieron por el piso. -Haz lo que ... ten.. tengas que hacer, no moriré aquí..con..tigo- solté en un bufido, aquél que se detuvo al ir tragándome el orgullo que tenía por sobre los elfos, era el único ser que podía brindarme una mano en aquél minuto. Me retorcía levemente, mordiendo el labio inferior por la herida que ardía con los efectos del veneno.

Aaron Augustine Black Ryddleturn. Escuché una voz un tanto gangosa y se me vino la única criatura que no podía soportar en el mundo, un elfo. Encaminé la mirada gris hasta toparme, borrosamente con su silueta; pequeño, ojeroso y de orejas puntiagudas, aquellas características me bastaban para cerciorarme de que era un elfo. -No .. no...- sonreí con la respiración entrecortada, negando con mi cabeza en una ironía precedente. "Un elfo me salvaría la vida en este momento??...cuán mal estaré" pensé. Descubrí mi hombro, dejando notar cierta musculatura del cuello y parte del pectoral al desgarrar aquella parte de la prenda; la herida se bordeaba negra, un negro azabache, de seguro me habían envenenado. me apoyé de espaldas al mesón, sosteniéndome con mis codos en su borde. Pude apreciar mi caminillo de sangre desde la entrada. Miré nuevamente a la criatura y volví a mirar mi herida, queriendo ser directo con tan solo aquél acto de que necesitaba ayuda. - ¿Te vas a quedar ahí parado?- pregunté con cierta molestia tras mis delirios. Estaba débil, con suerte podría darle un apretón, pero ésto iba de mal en peor- me.. me han atacado en el callejón..- dije al único ser mágico que había en esos instantes y a duras penas tiré la daga a sus pies, seguramente si la analizaba sabría que tipo de veneno contenía. Me resbalé por aquél apoyo a mi espalda hasta quedar sentado, suspirando de vez en cuando por los efectos que me había traído tal. OFF: Un gusto Vyssedhra !.. lindo local (?) xD.. disculpa al chico por haberlo manchado con su sangre (?) jajajaja. Si no contesto de inmediato es porque estoy con mucho estudio. Saludos !!!

Aaron Augustine Black Ryddleturn. Entre de golpe, empujando la puerta con el hombro y una mano sobre la herida que me había dejado la daga de aquél anciano. Sentía cierto mareo, y el sudor en mi frente, que si bien no era mucho, comenzaba a helarse. Y es que en las calles del callejón Diagón, me habían atacado de golpe y seguramente la filosa hoja que llevaba mi sangre, estaría envenanda. Poco pudieron apreciar mis brillantes grises en aquella peculiaridad gélida de mi mirar; mármol negro, y un cuadro de una bruja conocida por su habilidad con las pociones, algo que a mi nunca se me había dado bien en la escuela. De hecho, casi me costaba entrar al Cuartel General de Aurores por ello. No demostraba cara de locura o signos que pudieran desacreditar mi apariencia, pero si una notoria debilidad al apoyarme en la rejilla que separaba de caerse a la planta baja del local. Me acerqué al mesón que atendían buscando alguna ayuda o que alguien me dijera si tenía algún veneno en mi cuerpo, solo esperaba no fuera de hombre lobo, ya que no quería lidiar con la luna todos los meses. Despejé mi cabeza sacando la capucha que cubría mi cabeza. -Necesito...agu..a- dije a quién me recibiría; una sequedad comenzaba a afectarme y tras una leve delirio no supe si pedir una poción primero- rá..pido- solté tomando mi varita por el mango plata- por... favor- aquello ni yo me lo creía, jamás había pedido un favor pero ésto ya comenzaba a volverme loco. Desabroché un par de botones de aquél abrigo largo que mantenía primer corte hasta el cinturón, cayendo hacia atrás hasta mitad de mis gemelos, aquellos cubiertos por una bota que bordaba mi rodilla, dejando notar el pantalón oscuro al igual que todo el atuendo, distinguiendo a su vez la camisa blanca con una pañoleta de distinta tonalidad. "Anciano de ... ", pensé mientras veía como mi mano estaba manchada en sangre.

Aaron Augustine Black Ryddleturn. - No.. so.. solo como amiga- reía entre que tosía aún por el comentario anterior, dando unos pequeños golpes con mi puño en el pecho- no gusto de los compromisos, sabrás- sinceré a la rubia- y tampoco echaría a perder nuestra amistad- le dije finalmente aún sabiendo que su comentario había sido de bromas y para ponerme en una situación nerviosa puesto que la bruja, era la única que sabía como quebrarme el esquema, por ello nos fastidiábamos mutuamente en un sin fin de simpatía para ambos. En ello, la música cedió y noté una pequeña mala racha en el ambiente, bajé mi diestra a tal punto de palpar la varita en mi pantalón, aquella maderosa amiga que no me dejaba ni por medio segundo. Mis plateados orbes aún se concentraban en Soa, con quién la conversación siempre era buena. - Claro que te seguía...- solté con un resoplido- .... esa cabellera parlanchina circundando las personas por el callejón no está de más ¿no?- inferí con ese acto sarcástico inherente a mi persona- además... raramente, estás más guapa que de 13 años- reí colocando la guinda de la torta con aquél tono divertido- es bueno reencontrarse contigo Soa... no he visto a nadie de mis viejos amigos en mucho tiempo- sinceré mientras mi alter ego aceptaba receloso mis actos de bondad. ¿Que cuales eran mis planes?, aquella pregunta era un tanto subjetiva, puesto que me encontraba aspirando a filas mortifagas como siempre había anhelado; la pureza de la sangre era una herencia familiar muy preciada y delicada. Además, según recordaba, la chica mantenía un carácter completamente distinto al mío, aspiraciones en distintos caminos, algo peculiar y difícil de conversar en ese lugar, en ese minuto, en esa instancia. De todas formas era una vieja amiga, y no podría discutir algo así con ella. - Bueno...- dije peinando el flequillo castaño que caía ligero por mi frente-... mis planes por ahora son difíciles de explicar, pero creo que es para algo... grande- solté en un énfasis en mescolanza de serio y divertido- y obviamente eso me deja por aquí, entre Londres y Ottery, viendo la manera de que surjan nuevas cosas- fui soltando difícil, sin dar información primordial o cabos que unieran a otros- No te he contado que pertenezco al cuartel general de Aurores- quizás con éso me sacaba de la idea en que pensara al bando a cual pertenecía- Trabajo con Seba Granger, es mi jefe, y pues ahí me he ido desarrollando-... Hubiera continuado en que me desarrollaba para una mano de poker, una carta para un buen juego con el cuál me mantenía en alevosía dentro del mundo mágico; la mezcla de Auror con perfil mortífago era un buen paso, al menos eso creía- con gusto acepto un duelo, que mejor ¿no?, creo que también he estado lejos de aquél preciado hobbie... si quieres terminamos éste jugo y sali.... Sagitas, la honorable Directora del Departamento de accidentes en el Ministerio. Aquella bruja que había visto una vez en mis inicios de Auror, ahora se encontraba parada frente a mi como cualquier mortal, y como dueña del local. - Señorita Potter Blue, ¿Como está?, yo muy bien gracias- comenté con leve ironía mientras me ponía de pie- creo que no recuerda quién soy- afirmé sacando la placa de Auror que me correspondía como empleado del Cuartel. Quizás me recordaría en una de las veces que le había ayudado junto a mi jefe- pretende sacarme de éste local?-pregunté-....ahhh- fui comentando- ¿ésto es por el elfo?, si quiere le dono uno, hay varios en el castillo Black, que clamarían por Libertad- sonreí en una fina y gélida sonrisa- aunque temo decir que mis elfos no se atreverían a dejar tan preciada familia, sin ofender por supuesto- agregué en tono cordial pero arribista. Nadie jamás me había dejado fuera de un local, aunque de todas maneras el estar con elfos no era de mi gusto- Me atrevería a decir que me está echando como un muggle, sin embargo ya debía irme, por lo que no tomaré su acto como una mala educación- agregué mientras sacaba unas cuantas monedas de oro, mucho más que suficientes, como para pagar diez zumos de los que habíamos pedido- No me iré de éste lugar sin dejar el pago por lo que consumí e invité- dije mientras hacía flotar las monedas hasta dejarlas cerca de la caja- y por favor, deje a Soa aquí en el lugar, ella no ha tenido nada que ver con ésto- me permití en aclarar- ah!, y creo que con eso basta para llevar al elfo a san mungo por una leve chispa en su trasero- sonreí- como un rasguño en un gigante, creo que la criatura...- afirmé penetrando al elfo con mis plateados orbes- ... le falta un poco de rudeza frente a tan mísera broma. No hice del ambiente una brisa tensa. sino más bien defendí mi punto de vista que a su vez entendía el de la Potter Blue, al fin y al cabo era su local, y si tratar a los elfos de manera servicial o amable era un requisito para pasar por ahí, creo que debía retirarme de la estancia por esa vez. Pero algo me hizo alzar nuevamente la voz. - Soa, no te preocupes... no pediré disculpas a un elfo, ya me conoces, además no causaré un revuelo aquí, soy miembro del Cuartel General de Aurores, no dejaré manchado mi nombre- Dije mientras volvía a mirar a Sagitas- Creo que la vez que nos vimos fue en el Ministerio, señorita Potter Blue y si bien era un joven aprendiz, usted actuó de la misma manera aún tras pedirle disculpas, en fin, creo sinceramente que se debería pensar las cosas antes de actuar... lo del elfo no era tan grave, pero no dejaré que me trate de seguir caminos malignos por guardar las costumbres de mi familia, una familia honorable frente al mundo mágico- ¡hasta cierto punto!, me gritaba mi subconscinte recordándome al traidor de Sirius Black- Y por cierto, conozco a Felicity y le aseguro que no piensa de mi en esa forma...- inferí tras el comentario que le había hecho a mi ex compañera de academia- El respeto ante usted siempre será válido, pero ante una criatura inferior a la sangre mágica, no. Y No se preocupe, conozco el camino...- dije a Sagitas con una una leve reverencia de cordialidad al mover mi cabeza- Soa, cuando quieras me avisas de aquella práctica, ha sido un placer verte, espero nos encontremos luego, - dije a la rubia tras besar su mejilla- Señorita Potter, Soa- me dirigí a ambas para luego retirarme de aquél lugar. Sin saber, quizás si Soa se retiraría conmigo, aunque no lo creía, ella aún esperaba a ese "alguien". Caminé hacia la puerta, no iba a armar revuelo apelando en quedarme o no, y en el camino me encontré con aquél elfo al cuál había asustado. Saqué mi varita rápidamente, en un acto de solo querer verla, pero que de seguro asustó a la pequeña criatura, y tras mi fina y elegante sonrisa, crucé el umbral saliendo al callejón... OFF: Siento lo del elfo, Sagitas ups ! jejejejeje, // Soa, cuando quieras o si "me sigues", planeamos un duelo ! EDITÉ porque me demoré bastante en hacer el rol y pues ya habían escrito las dos diablillas -.- jajajajaja . Un poco de drama no le hace mal a nadie ¿no? jajajaj . Saludos.

Aaron Augustine Black Ryddleturn. Si, definitivamente me invadían los recuerdos, aquella fastidiosa sonrisa, pícara, malévola y decididamente amistosa; como pocos personajes de mi historia Soa formaba parte de ello, y aquello ya era importante para mi. La conversación era cada vez más amena, acogedora y agradable, casi podría decir que necesitaba una vieja amiga con quién hablar, que de no ser por mi hermano, quizás olvidaría mis inicios como mago. - Bueno, veo que algunos magos de hoy en día han perdido sus modales ¿no?, aunque difícil comparase conmigo...un Black- le guiñé un plateado orbe en un gesto que sabría, sería de fastidio, puesto que ello era algo inherente a mi- un ¡¿zumo?!-reí cuestionable, yo hubiera pedido un whisky de aperitivo por la hora, pero creo que ésta vez la acompañaría en un acto más, saludable. Mi inconsciente se reía de mi- bien creo que serán dos entonces- dije a la rubia invitándole al delirante refresco luego de que ocupara la varita para amedrentar con una chispa en el trasero a un elfo que me prestare atención- Dos jugos de naranja...- ordené a la pequeña criatura para acto seguido, fijar mis plomizos ojos en un reloj inexistente en la muñeca izquierda-.. para hoy. El descuidado elfo salió como petardo a la cocina, lugar en el que seguramente serviría los zumos. La chica siguió hablando respondiendo a mis preguntas. - Salvándote de algunas locuras...- dije abriendo de par en par los plomizos orbes que se tornaban plateados a medida que les daba la luz de un pequeño farol- quién lo diría, la pequeña Soa salvándose de si misma....-reí ante mi comentario, actuando con ella como siempre había sido, ni más ni menos, era también un acto de sinceridad en mi carácter originario- bien, en todo caso creo que hablamos el mismo idioma... cariño- dije resaltando la ironía en el la última palabra- Yo, luego de terminar la academia me fui de viaje al norte de Europa... - comencé recordando aquella historia que seguramente sonaría latera y aburrida- Invierno de 1938....- bromee para luego rodar los ojos en blanco- ok ok, me retiraré del humor...Bueno, a ver, me fui de viaje al norte de Europa, dejé todo atrás al igual que tú.. ni si quiera avisé, ni he visto a mi hermana, ni familia que de seguro me aventarán varias maldiciones al verme, pero en fin. Conocí a un vampiro con quién había estado manteniendo contacto, aquél hoy en día es la figura paterna que me recibió con brazos abiertos cerca de tierras Rusas. Con el me he criado desde la salida de la academia y pues ni te imaginas con quién me he vinculado gracias a ello... La chica me interrumpió insinuándome con Dorothy, aquella compañera de clases con quién había enlazado una memorable amistad; si bien las acciones eran para pensar algo distinto, fue algo que se desvaneció con el tiempo, se deshizo como recuerdo en el pensadero, manteniendo las buenas imágenes de mi infancia mágica. -...No, no logré casarme con Dorothy... - solté mirando lo macizo de la barra en una farsa poco notoria-... me escape del compromiso?- dije en tono que no podía dar más de broma, marcando la incógnita tras las últimas palabras, soltando una risa que se encontraba escondida- siempre quedarán con la duda ¿eh?- sonreí a mi ex compañera- pero no, no fuimos más que buenos amigos, muy buenos amigos...por mi aún lo somos, igual que ... la men ta ble mente, contigo- sonreía en una fina curvatura que radió en mi semblante, llena de recuerdos y buenos momentos que nos unían a todos como el buen grupo de clases que alguna vez fuimos- ¿haz sabido algo de ella?, porque yo no le vi luego de la última vez en ese local de hojas de café, o té- agregué memorando la última vez que vi a la ojiverde.. -ya ni recuerdo el nombre de aquél lugar- chasqueé en una mueca desolada- y bien, como iba contando, ya que siempre haz de interrumpirme ¿eh?, ¡diablilla!... la persona con la que he familiarizado es con Percy, quién terminó siendo mi hermano tras ser adoptado como hijo por su padre, Enrick Ryddleturn. No me había percatado que los zumos ya estaban a nuestro costado, en la barra, donde yo me sostenía apoyado por mi diestra, inclinado en un acto cómodo y varonil para extender aún más aquella conversación con tan admirable bruja, una buena amistad que reencontraba luego de varios, varios años. - Cuando llegué creí lo mismo, no recordaba mucho las calles de Ottery, menos las de éste famoso callejón, pero con el tiempo me fui socializando con los nuevos rostros, y pues, también me fui reencontrando con viejos amigos- dije mientras bebía del refrescante jugo de naranja- que bueno que planees quedarte, ya hacía falta alguien a quién molestar un poco...-dije en tono de picardía, que cambió drástico con la palabra "fenix". No se daría cuenta, quizás me preguntaría por que la tos, ya que el jugo cambió de camino y me hizo toser un poco-.... la edad, la edad...- fui diciendo entre risas aunque solo era un joven de veintitantos, un joven aspirante a mortifago, un amigo que tomaba un camino distinto, muy distinto al de la rubia.

Aaron Augustine Black Ryddleturn (Siguiendo a Soa) Como cualquier mago, aparecí en el adoquinado de las calles; lo hubiera hecho tras flameantes llamas negras, pero el lugar no era el adecuado para dar a conocer mis ideales, por lo tanto solo fue una aparición normal, de esas que marean cuando sientes que te jalan del ombligo. El atuendo era simple; una chaqueta de cuero abierta, dejando ver la camisa celeste agua holgada a los tres primeros botones, jeans azules y botines a tono con la vestimenta. Como siempre, mi varita de mango plata me acompañaba inherente a mi persona, escondida entre las prendas, solo visible y en un lugar reconocible por mi. La brisa arremolinó mi castaño, dejando que escuchara los murmullos del tumulto por aquél conocido callejón. Pasee mis plomizos y cristalinos orbes por algunos de los personajes que circundaban mi camino. Brujas y magos de todo tipo, altos, chicos, delgados, regordetes, etc. En ello, alguien robó mi mirada; una chica de cabellera rubia, esbelta y un tanto desorientada, miraba hacia todos lados como si estuviera en un país desconocido. "No será de por acá", pensé entre que me decidí a seguirla. Algunas palabras habrá dicho, pero no las escuché, ya que justo me ensordeció un grupo de jóvenes magos pasando con gran velocidad en sus escobas nuevas, por suerte no me botaron ni movieron, sino, les hubiera aventado un par de maldiciones para que no desearan montarse e vuelo otra vez. Se me perdió de vista, pero no de sentido, puesto que pude ver las puntas de su cabellera ondular en el aire al cruzar el umbral de una conocida taberna a la cual jamás había tenido la oportunidad de entrar. Decían que dentro de aquella taberna, estaba un cuadro del señor tenebroso; solté una bufa por ello, aquél mago no se prestaría para burlas ni apuntar a los suyos estando allí dentro. - Buenas, señor- saludó alguien en la entrada. No emití respuesta, demostrando la altanería de todo Black al entrar en un local abierto al público general, exigiéndome solo un movimiento de cabeza que solté por inercia en son de saludo. Tan solo podía ver aquella extensa cabellera dorada cubriendo la espalda. Me abrí paso ligero entre los presentes, mientras un par de elfos chasquearon los dedos desapareciendo del lugar. No solía llevarme bien con aquellas criaturas, y seguramente no habían tenido un buen trato de mi parte. -¿Necesitas ayuda?...- pregunté a la bruja cuando llegué a su lado, posando mi diestra suavemente en su hombro para que me viese-... So... ¿Soa?...- tartamudeé quitando la mano de la misma- woww...emm, hola- saludé un tanto sorprendido de verle, habían pasado varios años de que no había visto a aquella mujer; un sentimiento escondido en algún rincón afloró desde muy dentro de mi, algo como nostalgia y felicidad. Entre risa y buenos recuerdos fui esbozando una sonrisa fina que curvó en mi semblante, sosteniendo la gélida mirada gris en sus azulados orbes. Aquella niña que había compartido mis primeros años de academia ya era toda una mujer, pues claro, yo ya era todo un hombre, los años nos castigaban pero a su vez nos mantenían como un buen whisky, a mis ventitantos aún memoraba aquellas andanzas junto a Roxanne, Dorothy y Percy, el último con más ánimo, ya que nos habíamos familiarizado a medida que pasó el tiempo y le consideraba un hermano más. - Como estás pequeña diablilla...- dije tras darle un afectuoso abrazo-... ok ok, mucho cariño para ti- reí- tendrás que guardar ese abrazo hasta que me muera porque será el último que habrás recibido de mi ¿ que ha sido de ti, todo éste tiempo?- en verdad quizás yo también debería preguntarme eso, puesto que desde que salí de la academia y fui de viaje fuera de Ottery, había perdido comunicación con todos, comunicación que por cierto ya estaba recompensada con algunos, puesto que había regresado hace un buen tiempo. Los elfos se miraron entre si, no conocían mi faceta amistosa, ni muestra de afecto alguno; yo no me olvidaba de sus presencias, un tanto desagradables para mi, pero no había que hacerle, la taberna estaba atendida por ellos. - ¿Quieres algo?- pregunté a mi vieja compañera de curso.

Hola que tal, ahora que estoy graduado me gustaría pedir mis conocimientos gratis (?) xD. No sé si aquello forma parte de algo inusual y aparte de los cambios normales a realizar los cuales son mensuales, pero bueno, en intentar no hay nada de malo ¿no? xDD. Los dos conocimientos que me gustaría, poseyera mi personaje de rol serían: Muchas gracias. Atentamente. Aaron Black Ryddleturn. PD: Si se pudiese también, me gustaría saber si puedo realizar el siguiente cambio que consta en agregar más que nada. Muchas gracias . Saludos. !

Hola que tal, paso a solicitar un cambio en mi ficha personal, lo que no haya sido descrito que quede tal cual. Eso, muchas gracias. ! No quiero que se edite de momento. Ahora si me quedo conforme con mi ficha, si pudiesen editarla porfavor. Gracias de antemano. Puntos de poder en criaturas: -- Habilidades Mágicas: -- Conocimientos Especiales: -- Perfil del Personaje: Raza: Humano. Aspecto Físico: http://i.imgur.com/2BYRLzd.png Alto, esbelto y de cuerpo tonificado por el afán al deporte. 1.80 mts. para ser más exacto; tez clara, ojos plomizos como la luna nueva de cada mes, plateada por el profundo del color y penetrante por tal aspecto; Cabello castaño oscuro que se forma, a veces, en rebeldía por el corte entresacado, pero la mayor parte del tiempo consta en andar peinado y presentable. Rasgos varoniles, marcados y elegantes, denotando seriedad en la mirada, cejas medianamente pobladas, y labios conformes a todo lo anterior de aspecto y color normal. Sonrisa fina, gélida y llamativa por el blanquecino de la dentadura y la picardía de sus facciones. Acostumbra vestir de forma normal y cómoda; pantalones beige, poleras claras (de preferencia blancas, celestes, azules) la mayoría en cuello "v". Camisas y unas cuantas chaquetas también abundan en su ropero (a cuadros azules, chaquetas de cuero) además de los zapatos que acostumbra a usar, como botines corte inglés con caña por sobre el tobillo y las botas de montar (estilo del juego muggle "polo") que las ocupa con "tormenta", su yegua negra azabache. Todo aparte de la elegante vestimenta que utiliza para el trabajo. Cualidades Psicológicas: Un joven feliz, desordenado y orgulloso a la vez. Una mezcla que le hace interesante ante los demás aunque a veces su carácter frío e impulsivo le juegan en contra, pero poco es lo que le importa si fuese su enemigo o el enemigo de un amigo, pues si se le encuentra en mal momento no dudará en atacar a ciegas a quienes se le interpongan. Fiel a sus ideales y al grupo social que le rodea. Caballero y con el honor siempre en alto. Un tanto altivo en primera instancia con los que no conoce, pero luego se da simpático con los que logre afinidad y amistad sin perder los modales de un buen mago. Perseverante con lo que desee conseguir, aunque fuese difícil o peligroso, pues la adrenalina siempre se le ha dado como una buena amiga. Su carácter lo hace ser un poco temeroso a las relaciones sentimentales con el sexo opuesto, pero eso no quiere decir que alguna chica alguna vez pueda domar su ser. Historia: Nació en la cuna de casta pura, Familia Black. Como todo descendiente del linaje respetable, el chico creció con el ideal de la sangre limpia en sus proyectos de vida. Honorable y respetado, se fue dando a conocer entre la comunidad mágica desde muy pequeño, sobre todo por al rebeldía que tenía al ocupar la varita que le fue otorgada a corta edad. Una maderosa que se transformaría en su mejor amiga. Desde pequeño fue independiente, sin menospreciar la ayuda de su querida hermana Evarela, con quién siempre mantuvo buena relación y quién le ayudó y crió en el mundo mágico por ser la mayor, pues el chico careció de madre al momento de su nacimiento. También le fue de gran compañía su primo, con quién creció como un hermano más, Santos. A pesar de algunas diferencias que se fueron dando en el trayecto de su niñez, como todo niño deseoso de alcanzar la grandeza, los chicos se tuvieron siempre un respeto mutuo y se ayudaron a surgir uno con el otro. Al entrar a la academia de magia y hechicería en Ottery hizo grandes amigos, con los cuales comparte de vez en cuando, a pesar que en el intercambio que tuvo por algunas calificaciones, perdió contacto con algunos, pero sabía que estarían bien en alguna parte. Percy, Roxanne, Dorothy, Soa; fueron algunos de los compañeros con los cuales partió en dicha academia y con quienes compartió las primeras aventuras en el mundo mágico. Hoy en día y después de un largo tiempo ha terminado su academia, con trabajo en el "Departamento de Aurores" y un gran afán por los duelos, el chico se dispone a surgir tanto dentro de su círculo social como en el mundo mágico. De forma tal que la erradicación de la magia no divulgue entre manos sucias y por ello es que se unió como aprendiz en dicho departamento, no para erradicar las artes oscuras, sino para caer en el sutil dicho "es mejor tener más cerca a los enemigos que a los amigos". Pertenencias: Objeto Magico Legendario: -- Objetos Magicos: Objeto: Objeto 1: Varita mágica. Alerce, 34.5 cm. rígida. Su centro es de pluma de fénix, seguido del maderoso y conjunto al mango de plata con finos y tribales relieves dorados, que se incrustan a lo largo de la varita hasta llegar a su punta en una especie de remolino. Clasificación: AA Puntos: 20 Total de puntos: 20 Mascotas y Criaturas: -- Criaturas en la Reserva: -- Elfos: -- Licencias, Tasas, Registros: Licencia de Aparición: No. Licencia de Vuelo de Escoba: No. Registro de XXX: -- Otros Datos: Curiosidades El mango de su varita lo consiguió en una clase de básicos, aquél se unificó a su varita de forma inexplicable. Posee gran afán por los duelos. No tiene simpatía con los elfos. Tiene una yegua negra azabache llamada "tormenta". Cronología de cargos: 09/09/13 a la actualidad: Aprendiz de la oficina para el Cateo y Erradicación de las Artes Oscuras. Cuartel General de Aurores. Premios y reconocimientos: -- Links de Interés Referentes al Personaje: Link al Perfil de Comprador MM: -- Link a Bóveda Personal: Bóveda Nº 96937 Link a Bóveda Trastera: -- Link a Bóveda de Negocio: -- Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda Familia Black. Link a Bóveda Familiar 2: --

Nick: Aaron Black Lestrange Nombre: Rodrigo Edad: 22 Fecha de cumpleaños: agosto-24 País: chile Skype: rorro.gastón Que tal, paso a dejar mi ficha para postularme a tan codiciado bando. Así que esperando una pronta respuesta y rellenando un par de lineas sin hacer que ésto obviamente sea spam, dejo mis saludos para los presentes. Anhelo rápidamente entrar a rolear a la mini-marca para ser un gran mortio !

Patriarcas / Matriarcas: Glenin Black Ficha | Bóveda - 10% Aaron Black Lestrange Ficha - Bóveda Nº 96937 - 40% GoshI Ficha - Bóveda Nº 92152 - 10% Matthew Black Triviani Ficha - Bóveda Nº 111237 - 40% Registro de la Familia: Registro Actual Black Registros Anteriores Black: 74739, 84495 Hogar de la Familia: Castillo Actual Black 101404 Castillos Anteriores: 97865 - 91612 - 79965 Miembros de la familia con link a sus bóvedas personales.: Patriarcas/Matriarcas Glenin Black (Ficha | Bóveda) Goshi (Ficha | Bóveda) Aaron Black Yaxley (Ficha | Bóveda) Matthew Black Triviani (Ficha | Bóveda) Hogar de la Familia: Castillo Black El apellido Black significaba muchas cosas, pero entre ellas grandeza, linaje y nobleza. Cualquiera que ostentara la sangre de los Black debía estar orgulloso de serlo, de ser parte de una ancestral familia de magos de sangre pura, que podía remontarse hacia el Medievo. Poseer la frialdad y la arrogancia propia de la familia no eran objeto de defectos, sino de cualidades que lo hacían diferentes al resto. Cualquiera que supiera los principios que regían a estos nobles podría darse cuenta al instante si se encontraba frente a un Black. El estilo que dominaba a sus miembros se reflejaba en cada huella que dejaban. Entre ello podemos encontrar su antigua residencia, Grimmauld Place n° 12, que a pesar de estar en medio de la ciudad de Londres, poseía el aire refinado propio de la aristocracia mágica. Lamentablemente, por lo hechos sucedidos años atrás, se terminó convirtiendo en un juntadero de basura y la familia desistió en habitar algo que no vaya para su altura. Por ese motivo, se trasladaron a Ottery St. Catchpole, posicionándose muy pronto como una de las familias más distinguidas. Luna Farien Black* - Lord Michael Black - Laura Black - Hop Black Lord Michael Black Fernando Black | Tikis Black Luna Farién Black Glenin Black | Shona Black Laura Black Perenelle Black Hop Black GoshI | Alexia Black Fernando Black Orión Black | Aths | Mahía Black | Gabrielle Delacour | Luisitha Black M. Glenin Black Alyssa Black Triviani | Aland Black Triviani | Animaga Black Shona Black Mel Black GoshI Otto Black Orión Black & Gatiux Malfoy Schönheitt Black | Kya Black D'Lecroix Orión Black Aziid Black Gabrielle Delacour Akiza Ravenclaw H. | Martin N' Roses Mahía Black Evarela Black | Hugo J. Haughton | Aaron Black Yaxley Luisitha Black M. Maida Black Yaxley Alyssa Black Triviani Galery Grindelwald Malfoy | Mia Black Lestrange Gabrielle Delacour & Mahía Black Jessie Black Lestrange Aland Black Triviani Candela Triviani Aaron Black Yaxley Matthew Black Triviani | Oriánthi Black Triviani Arcanus Martin N' Roses Phineas Albireo Black ** Cornelia Black Martin N´ Roses & Evarela Black Bridget Wenlock | Blackimse Black Martin N´ Roses Jon Grange *: Integrante sanguíneo. *: Integrante adoptivo. **: Personajes ficticios.

Buenas, me gustaría hacer estos cambios en mi ficha personal, conservando la misma foto de la ficha, por favor, de ante mano muchas gracias, y mis saludos cordiales.

*aparesco (?)..* ok aún no tengo licencia de aparición U.U! . Paso a dejar el link de mi Bóveda personal como había prometido. La tardanza fue de los duendes xD!. Saludos. Bóveda personal: http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=96937 Evarela ! saludos !

hola! *aparezco en mi ficha personal (?) xD* ...paso a dejar: Link a bóveda personal: http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=96937 De ante mano muchas gracias, ésto se pone más entretenido y la imaginación abunda que es bueno e importante. un saludo!.

Muchas gracias Lacri, dejaré el link de la Bóveda de los Black para que sea agregada a la ficha de mi personaje y luego cunaod tenga mi bóveda personal volveré a postear, pues aún no la tengo :/ ...un saludo. Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda Familia http://www.harrylatino.org/index.php?showtopic=78837

Hola. La verdad me gustaría hacer algunos cambios que voy teniendo en éstos días entre ellos que ya tengo familia y que he mandado a crear la bóveda pero aún no me la han aceptado, así que eso tendré que postearlo luego. Sé que los cambios se hacen cada mes, pero si no posteaba ahora se me olvidaría luego. Familia(s): * Familia 1: Black * Familia 2 -- Padre(s) Sanguíneo: Mahia Black (madre). Padre(s) Adoptivos: --

1.- Link al tópico de su ficha de personaje: Ficha de Aaron Black 2.- Link de las bóvedas de negocios que posea el personaje: -- 3.- Link del tópico de registro de sus familias: Familia N° 1: Registro Black (patriarca) Familia N° 2: Registro Yaxley 4.- Link a las bóvedas de sus familias:Bóveda Familia N° 1: Bóveda 97834 Black (patriarca) Bóveda Familia N° 2: Bóveda Yaxley Información Privada de Gringotts (Sólo la dirección del Banco la puede editar) Saldo en Bóveda previo a la Migración 2021: 60242 G

*¿Por qué quieres ser un Black? Sirius Black y Regulus Augustus Black, son dos grandes inspiraciones de HP, Por su coraje y habilidades mágicas y porque ambos son el contrario del otro en sí..(yo me entiendo xD) *¿Por quién te gustaría ser adoptado? Hermano de Evarela. *¿Te comprometes a respetar las pautas/reglas/condiciones que has leído en este tópico?Claro, porque no? *¿A qué otra familia perteneces? a ninguna por el momento. *¿Cuál es tu Nick en harrylatino.com? Aaron.Black.Lestrang *Bóveda de Personaje: la traigo a penas la obtenga (unos minutos) *¿Será tu familia sanguínea o adoptiva? Sanguínea.

HOla, me paso para avisar que he mandado mi ficha de personaje para poder participar de está página llena de magia, aún no entiendo muchas cosas pero espero ya comprender todo más rápido una vez que me una a algún rol que haya, o entrando por solicitud a alguna de las familias.

"Si no eres fiel a la sangre, entonces no eres digno de tu magia" Datos Personales: Nombre del Personaje: Aaron Augustine Black Yaxley. Sexo: Masculino. Edad: 37 años. Estado Civil: Soltero. Nacionalidad: Británica. Familia(s): Black (Patriarca) Yaxley Padre(s) Sanguíneo: Mahia Black y padre desconocido. Padre(s) Adoptivos: Orión Yaxley (padrino). Trabajo: Líder Político y miembro del Wizengamot- Partido del Conservadurismo Mágico (PCM) Poderes Mágicos: Hechizos adicionales: -- Criaturas controlables en asaltos y duelos: -- Habilidades Mágicas: Nigromancia - certificación Conocimientos Especiales: Conocimiento de Maldiciones. Defensa contra las artes oscuras. Artes Oscuras Runas Antiguas Pociones Historia de la Magia Conocimiento de Bando 1 Conocimiento de Bando 2 Medallas: Medalla por Aprobación del Curso Libro de la Fortaleza: 2000 puntos Medalla por Aprobación del Curso Libro de la Sangre: 4000 puntos Medalla por Aprobación del Curso Libro del Equilibrio: 6000 puntos Medalla por Aprobación del Curso del Libro del Druida: 8000 puntos Total de experiencia en Medallas: 20000 puntos Perfil del Personaje: Raza: Humano. Aspecto Físico: Esbelto (1.80 mts) Cabello castaño oscuro. Ojos grises. Tez clara. Aaron destaca por la genuina e indiferente mirada, con un rostro parco, de gestos irónicos y una sonrisa que realza su sarcasmo. Su corte de cabello hace culto a las viejas costumbres londinenses, pero aún así, no suele utilizar boinas. Viste con orgullo las modas mágicas que aún quedan atrapadas en el tiempo, sobre todo para aquellos recelosos de la sangre mágica; túnicas siempre oscuras, ya sea azabaches, azules o grises, pantalones de tela ligera y de vez en cuando una que otra camisa de lino. A veces se le puede ver un prendedor (cabeza de venado) que hace alusión a la salvaje libertad de la familia de su padrino. De calzado rudo y varonil. La varita la lleva envainada al cinto, a la altura de la lumbar, por lo que en su determinante andar, siempre lleva las manos por detrás, expresando una parsimonia envidiable. Cualidades Psicológicas: Toujours Pur. Como fiel y digno miembro de los Black, la sangre mágica se sobrepone ante cualquier situación. Mantiene un temperamento frágil que a veces controla con la innata ironía que le caracteriza, lo que le hace parecer a veces violento y manipulador, como también sensible o endeble, con situaciones o personas que esconde de la voz pública. Las disfraza a plena vista para que no encuentren sus debilidades. Con una moral diferente a la del resto, vive en el eterno conflicto mágico de la sangre. Historia: Nacido en la noble cuna de los Black, Aaron creció con el arraigado concepto de la sangre mágica y su pureza. Con una madre ausente, el mago comenzó a ser criado por una de sus hermanas mayores, Evarela Black, para luego y adentrado en la edad de cursar Hogwarts, ser apadrinado de un viejo Ryddelturn que le llevó a formar lazos con una bruja a la cuál querría como un nieto a su abuela, la distinguida Lyra Katara. Fue en aquella familia, y colegio de magia y hechicería donde formaría sus primeras amistades, pero el joven Black comenzaría a sentirse insatisfecho, incursionando en la magia oscura, comenzando a constituir los diferentes pilares de su vida. Sybilla Macnair había salvado su vida en su debut como miembro de lo que él comenzaría a llamar, "la noble casta", tendría alrededor de trece años cuando la bruja evitó que muriese envenenado con una daga maltrecha y encantada. Aaron comenzaría entonces a descubrir sus propias ambiciones, con el apoyo de brujas y magos que idealizaban las magias ocultas para obtener su poder; fue así como cayó ante los crueles adoctrinamientos de Juv, una malvada mortífaga quien sería pionera de las primeras fortalezas crudas y viles del joven Black. En paralelo y ante la ausencia de familiares en el castillo Black, el muchacho buscaría apoyo y consorte en una de las distinguidas familias mágicas, los Rosier, donde comenzaría a construir sus primeros lazos políticos con Armand Rosier, abuelo de la que luego y aunque no lo necesitara, sería casi una protegida del chico, Juliette. Con el tiempo y aprendiendo que no debía estar siempre de forma presencial, sería Nius el encargado de informarle sobre el paradero de la bruja y la protección que había jurado a la madre de ésta. Apenas terminó Hogwarts, comenzó a trabajar de tinterillo en el antiguo Cuartel General de Aurores, lugar en el que construyó fuertes lazos y admiraciones, como lo fueron con Seba Granger y Darla. Fue en aquella época de su vida, en un día cualquiera, que los hijos de Fernando Black decidieron volver al castillo para disputarse la herencia casi a punta de varitas. Los hermanos de su madre se separarían de tal manera que fue su tío, hermano de Mahía, quién le invitó a formar parte de su familia, adoptándolo como un hijo más. Fue así como Aaron volvió a unir lazos con los suyos, adoptando el lema de la noble y salvaje libertad, siendo un Yaxley más en el mundo mágico. En aquella familia construyó lazos con varios de los Yaxley, pero en especial con la hija de Luisa Black Yaxley, quien sería su prima y mayor confidente, Maida. Con la bruja serían una dupla formidable por su paso en la fortaleza oscura y los demás antros mortífagos, cuidándose el uno del otro como si fuesen verdaderos mellizos, a tal punto de trabajar codo a codo en el cuartel de seguridad mágica y en las primeras aspiraciones políticas del Black. El mago, ya de adulto, siempre se movió en círculos cercanos; fuera de los Black y los Yaxley, los Macnair a través de Sybilla, comenzarían a fomentar el idealismo familiar de Aaron. Allí conoció a quién sería una de sus amistades más febriles, comenzando por una desconfianza innata hasta divagar en la línea del amor y el odio, Arya Macnair; juntos podrían ser la fuerte llamarada de un colacuerno húngaro, mientras que separados solo eran una bomba de tiempo el uno para el otro. Aún no se sabe cómo ni cuándo, aunque tal vez no lo haya pasado mal, pues el mago tuvo tres hijos con una gitana- ¿paradoja de una maldición?- la zíngara o más conocida como Candela Triviani se había cruzado en su vida a tal punto de tener descendencia; Matthew, Jeranne y Oriánthi, a quienes conoció de adolescentes y en quién pretende dejar huellas ya de adultos, serían uno de los tantos pilares que sostenían al Black hoy en día (aunque sus hijos no lo supieran). Posicionándose en el mundo político, Aaron jamás dejó su esencia de lado. El afán por la sangre mágica logró encaminarlo a un reconocimiento en la sociedad mágica de tal forma que le otorgaron el puesto de Ministro de Magia. Mortífago por idealismos y Grindelwalista por esencia, fue él, Aaron Augustine Black Yaxley el primer mago en revelar a la sociedad mágica ante el muggle, desconociendo de pleno y a viva voz, el estatuto del secreto mágico. ¿Intereses propios?, quizás...él le llamaba,"Libertad". Hoy en día, lidera una reunión de magos de sangre pura, queriendo restaurar al famoso y temido clan de los veintiocho. Hoy en día, lidera una reunión de magos de sangre pura, queriendo restaurar al famoso y temido clan de los veintiocho. Tal cuestión se llevó a cabo en el palacio de Buckingham, lugar que hoy reclama como suyo y para los suyos por derecho jerárquico de poder, siendo ésta la cuna de la reconstitución política y mágica. Normas que defenderían la supremacía de las nobles familias como la suya, arraigadas al concepto de "sangre pura", ya no como un desmedro social, sino como un precepto que les correspondería por derecho. Todo su gobierno luchó por mantener tales principios, cuestión por la que ganó adeptos a su filosofía como también grandes enemigos que debería enfrentar día tras día, sea como político o como mortífago. Sin embargo y al concluir su mandato, fueron los mismos supremacistas los que reconocieron su labor, instándole a dirigir el legado más antiguo de todos los tiempos, la casta mortífaga. Hoy y luego de haber atravesado unas caóticas elecciones, con Sagitas al poder y unos cuántos fenixianos queriendo difamar su imagen, preside el PCM (partido por el conservadurismo de la magia) y oculto entre sus ideales, al legado de Lord Voldemort bajo el seudónimo de "Caelum"- El Cincel-, nombre propio y tradición de la familia de los Black, al ser nombrados como hijos de las constelaciones estelares. Aferrándose a su idealismo y queriendo perdurar en el tiempo, sumado a ello los conocimientos oscuros que aprendió de Asra Boswell, tiene un horrocrux hasta ahora, inspirado en conseguir más en cuanto se le de la oportunidad. (Historia en construcción) Pertenencias: Objeto Magico Legendario: -- Elfos: Nius Licencias, Tasas, Registros: Licencia de Aparición: Aprobada Licencia de Vuelo de Escoba: Aprobada Personajes Secundarios: Emiliano Black: antepasado Otros Datos: Compra especial en tributo a Lyra Katara Selwyn:http://i.imgur.com/wSvQO4v.png Certificación Curiosidades Grindelwalista en esencia, Mortífago por idealismos. Está perdidamente enamorado...de la sangre mágica. En un arranque de ira, fracturó una de las orejas de su elfo, Nius. Es un narciso por donde se le mire. Tiene afecto por sus hijos. Su primer amigo fue Perseus Myrddin, y sus primeras amigas fueron Dorothy, Soamily y Roxanne. No le gustan los elfos, pero a pesar de ello, no le gustaría perder a Nius. A pesar de su temperamento, es cauto antes de dar cualquier paso. No le importaría asesinar a alguien de su familia si es necesario. Siente admiración por Seba y Elvis, quienes fueron sus primeros jefes. (No sabe que son fenixianos). Le gusta ser el centro de atención. Su varita es de roble inglés con centro de fibra de corazón de dragón, 13", inflexible. Con grabados de magia primigenia en espiral desde su mango hasta la punta. Tiene una extraña cicatriz en el dorso de su mano izquierda. Lo que le une a las Macnair. El prendedor de ciervo fue un regalo de su prima Maida. No confía en los Malfoy, a excepción de Felicity quien parece ser la hermana que nunca tuvo. Tiene una cicatriz fina, en paralelo al ojo izquierdo y otra que bordea su cuello en medialuna producto de las guerras mágicas y un osado ataque de Lucrezia Di Médici correspondientemente. Juliette Rosier y Zoella Triviani, son las únicas personas que conocen el horrocrux de Aaron. Cronología de cargos: Aprendiz en el CGA. Empleado del CGA. Aprendiz del CI Empleado del CI Jefe del CI Director del CI Ministro de Magia inglés. Premios y reconocimientos: -- Links de Interés Referentes al Personaje: Link al Perfil de Comprador MM: -- Link a Bóveda Personal: Bóveda Nº 96937 Link a Bóveda Trastera: Bóveda N° 110350 Link a Bóveda de Negocio: -- Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda Familia Black Link a Bóveda Familiar 2: Bóveda Familia Yaxley