Sophie M.

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Apenas si leía los rótulos de los negocios del callejón, sabía a ciencia cierta que perdería preciados minutos si me fijaba detenidamente en cada uno de ellos. Sobre todo porque cada vez se abrían nuevos negocios por tanto siempre era una sorpresa que te esperaría en aquella callejuela adoquinada.

Mi visita del día de hoy, estrechamente relacionada con el trabajo, en cambio contaba con un objetivo claro, de acuerdo con Roxanne debía visitar un sitio llamado Cacao Café, pues querían contratar los servicios de la Oficina.

No fue tan difícil de localizar el lugar pues había un llamativo rótulo que ponía el nombre y la ventana no era más que un compendio muy apetitoso de diversos chocolates. Tragué el exceso de saliva pensando que no sería capaz de comprar al menos uno. Pero para mi sorpresa a pesar de que giré mi cabeza en ambas direcciones no fui capaz de encontrar una puerta de acceso. En cambio de eso una banca se alzaba poco más allá.

Alcé la cejas con sorpresa, no importaba cuando creía estar acostumbrada a la magia, a veces me sorprendía tanto como la primera vez. El vacío que provocó en mi estómago el tirón de la silla al elevarse dejó un leve mareo pero sobre todo una sensación de júbilo y emoción. Una vez arriba me arreglé la capa que colgaba de mis hombros y avancé entre mesillas de madera dispuestas por todo lado.

El fuerte olor a café me llevaba hasta el lugar donde se encontraban los trabajadores.

-Buenas - dije en voz alta captando la atención de alguno - busco a alguno de los dueños del local es para los servicios de Red Flú y Antiaparición - expliqué para que éste fuera a comunicar con sus jefes el mensajes. Mientras yo me giré curiosa para observar el lugar embriagada con el olor.

Estaba algo equivocada pues la Rambaldi no se encontraba sola en su oficina, parecía ser que llegaba una nueva empleada a la Oficina del Consejo Regulador de Escobas. Le contesté a la sonrisa nerviosa que me dirigía ocupando una silla contiguo a la suya.

Al final todo había resultado mejor de lo que había esperado, tantos nervios para encontrarme con una Roxanne dura y seria. No estaba acostumbrada a que me hablara así pero era definitivamente mejor que balbucear razones. Mejor pasar a la acción y aquello si no me sorprendía, la Directora no había llegado a aquel puesto por error, quién mejor que ella para planificar las acciones para el Departamento.

Para nadie era un secreto que los empleados de aquella oficina habían estado algo descarrilados y muy a pesar de ello aunque fuera a paso lento algunas veces siempre se ofrecían los servicios de una u otra manera.

Asentí solemne mientras ella nos dotaba de instrucciones a ambas, la chica recién llegada y para mi también. Esperé que guardara silencio pues a pesar de que no quisiera escuchar los motivos detrás de mi prolongada ausencia sí debía informarle de una particularidad de la Oficina.

- Iré inmediatamente al sitio que indicaste - comencé - solo que sí debía informarte que en la oficina Alba también se ha ausentado y no he logrado comunicarme con ella, por tanto desconozco su paradero o motivo de ausencia. Me ha parecido conveniente que estés al tanto- terminé con una sonrisa. Ya sabía que aquel enojo se pasaría. Y cuánto más rápido haciendo lo que me pedía. Así que salí de la oficina aprovechando que la otra chica hacía una pregunta sobre Mía.

No me entretuve demasiado en la entrada, sabía que mi destino estaba más allá de todo eso: El Callejón Diagon.

Buena parte de los pergaminos que antes cubrían casi la totalidad de mi escritorio había sido ordenado en los archiveros del fondo. No fue hasta entonces que me sentí cómoda en el lugar, detestaba mi oficina en desorden lo cual era muy irónico si lo comparábamos con mi habitación en donde aplicaba muchísimo la frase 'mi desorden es mi orden'.

Aparté unos minutos antes de salir de la oficina para tomarme un té de manzanilla no porque ocupara calmarme en realidad era solo para razonar. Debía ir a justificar mi ausencia de la semana anterior y puesto que no podía explicar los verdaderos motivos detrás, pues los asuntos de mi bando no era asunto del Ministerio de Magia, entonces decidí una aproximación más familiar para justificar aquel tiempo alejada de la oficina y para mi suerte no era del todo una mentira, más bien una verdad a medias.

Salir de la oficina y cruzar parte del Departamento hasta la oficina de Roxanne tomó escosas segundos. Frente a la puerta de su oficina, respiré profundo antes de llamar la puerta, me gustaba ofrecerle a mi jefa la mejor de mis actitudes.

- ¿Hola? - llamé abriendo un pequeño resquicio de la puerta esperando alguna señal de que la Rambaldi efectivamente se encontraba allí.

Y no había sido capaz de cumplir mi última promesa hecha en la mansión 3X, de quedarme a ver si venían por mis presas, rápidamente había tenido que emprender otro viaje al chivatazo de más mortífagos desprevenidos.

Y como no iban a estarlo si se batían en duelo con algunos integrantes de la orden del fénix, era fácil olvidarse de las dichosas palabras mágicas en pleno duelo, especialmente porque estabas ocupado pronunciando otro montón más que defendían tu vida. Pero la guerra... no era mucho más que la guerra.

Así que volvía a la Mansión 3X, con dos mortífagos esta vez.

- Cissy, Mathías – dije con parsimonia – la mansión 3X les da la bienvenida esperando que sus estadía aquí sea laaarga y placentera, pero sobre todo larga – bromeé llevándolos al sótano con los demás prisiones que comenzaban a amontonarse.

Sus respectivos acertijos ya estaban pensados y era solo cuestión de dejarlos claros en cada una de las celdas.

Acertijo de Cissy

Un movimiento en particular de muñeca debes realizar, no es muy difícil de realizar, pero si un poco difícil de pronunciar.

 

Acertijo de Mathias Lear

Qué cosa más particular debes localizar, difícil de ubicar pero no imposible de conseguir. Este lugar no está a la vista para ti solo debes caminar y tal vez se abra a ti.

 

- Listo chicos – revisé el reloj antes de mi siguiente afirmación – deberán moverse rápido si quieren venir por todos ustedes – dije en voz alta para todos los capturados.

*desaparezco*

- Traigo compañia - dije con tono hilarante apenas poniendo un pie dentro de la Mansión 3X. Había sido un día o más bien casi un par de días de idas y venidas. Con rescatados, con atrapados la mayoría de las veces, otras casi que por placer.. en fin, no podía esperar a tener un pequeño momento de paz, en silencio o con tragos, cualqueir opción era buena.

En esta ocasión me acompañaba Brardolla Black, una mortífaga que si era sincera conocía poco o nada, pero aquello no me había detenido para ir por ella. Y para sorpresa de todos (? Fokker una vez más. Estaba segura de que volvía porque le había gustado el trato.

- Bueno Fokker, ya sabes a donde ir y conoces el proceder, puedo buscar a Julienne si te aburres- dije divertida mostrándole al mortífago su celda - y señorita Brardolla por aquí, tienen suerte de que sea yo, Mery se divierte de forma extraña con ustedes - reconocí frunciendo el entrecejo. - ahora - y comenzó a escribir los dos acertijos.

Acertijo para Brardolla Black.

Mi herramienta explosiva es. Mi piel resistente también. Aunque mi carácter noble no sea, mi color de peligro escasea.

Acertijo para Fokker

Una piedra es, común y bastante eficiente ¿Ya sabes que es? Piensa y piensa y conseguirás la respuesta.

 

.

- Muy bien, disfruten su estadía - dije alejándome solo un poco de las celdas - me quedaré por aquí un rato, quiero saber si vendrán por ustedes- confesé sincera y ocupé uno de los sofás mullidos dispuestos allí para comodidad de los captores y envidia de los capturados.

*desaparezco*

Ni siquiera me he fijado en donde me estoy colando .. pero ainé insiste que en la guerra todo se vale.. y es por eso que he venido a dejarles dos líneas casi completas de puro spam.. porque aunque se valga todo... no me gustan esas tan mecionadas y horriblemente famosas 'tijeras oxidades'

Este es el topic de guardines muy bonito todo *lo observa con detenimiento* cuando tenga algo más de orden y disciplina volveré.. pues era de mis favoritos.. luego mi trabajo en el MM era de muchos roles en mansiones y simplemente no pude con ambos..

mucho preámbulo ya.

*capturo a Brardola*

y

*desaparezco*

Algo complicado era creer todo el esfuerzo y empeño que se había invertido en apenas cuarenta y ocho horas que se habían fijado para la actividad, de verdad que todo cambiaba de un segundo a otros y habíamos tenido diversos altibajos pero de una u otra manera habíamos ido resolviéndolos poco a poco.

Aquellas últimas horas, me parecía a mí, se habían invertido más en rescates que en capturas, lo cual era un poco lógico, pues conforme avanzaban las horas los mortífagos se habían puesto mucho más precavidos en sus andanzas. Mientras que por otro lado en sus cuartes se organizaban equipos de rescate, aunque no en todos pues desconocía el paradero de otros rangos distintos de bases y avanzados. Casi parecía una lucha entre nosotros solos. ¿Sería por ocupados los altos rangos? Bueno, seguro que no era por despistados.

No podía evitar preguntarme en aquel momento, cuál sería la siguiente prueba y de pronto el pensamiento de que podría tener que ver con duelos me decepcionó un poco. Precisamente la razón por la que tanto empeño había puesto en aquella es porque era capaz de hacerlo y de hacerlo bien, en cambio duelos… bueno dejaba mucho que desear, aunque eso no significaba que pasaría de participar en la actividad. Muy al contrario prefería verlas como oportunidades de aprendizaje. Aunque no era tan motivador matar un mortífago, aunque en el contexto de aquella guerra, tanto como a un odefo hipócrita y vendido.

- Yo también, es más aquí todos- comenté cuando Kritzai comentó que odiaba el nombre, mientras que Juliens había expresado no conocerlo en lo que parecía un serio sarcasmo bañado de burla. Su siguiente gesto no lo había visto venir, y de hecho fue capaz de robarme un poco el aliento. El olor que dejaba el cigarro, su tacto en mi mentón y su mirada seguro me impulsaron para sonreírle de regreso y contestarle al fin. - Es correcto, nos vamos.

Juliens iba haciendo más bromas en voz alta y era imposible no reírse de sus repetidas burlas al bando contrario. Los mortífagos sí que sabían divertirse con las palabras, tanto que gustaban de jugar con ellas.

No pasarían muchos más minutos cuando de pronto Kritzai desaparecía y con ello, Juliens, Afrodita y yo. No quedaba más por hacer allí.

Mientras desaparecía eso sí, no pude apartar el gesto de Kritzai de mi mente, estaba siendo algo adolescente en lugar de la mujer atrevida que solía osar decir que era. No no, aquello cambiaría apenas tuviera la oportunidad, seguramente cuando celebráramos nuestro éxito en aquella actividad al menos, pues sabía que las guerras se ganaban por batallas, y no era lo mismo ganar una batalla que la guerra, para eso.. seguramente quedaba mucho por ver, aunque no sabía a ciencia cierta de cuantas etapas se compondría aquello.

No importaba, por el momento había logrado escapar con dos nuevos tempestades. Una fuga en masa, pues hasta el momento no había visto que nadie aplicara un movimiento doble, era doble el riesgo pero también doble el beneficio y a mi me gustaban los juegos de azar. De este parecía haber salido victoriosa aunque no habría sido posible sin los compañeros del rango.

¿Cuán unidos quedarían los tempestades después de esto? seguramente más que antes... por otro lado ¿cuántas asperezas entre los de distintos rangos? esperaba que ninguna si es que todos allí contaban con la madurez oportuna para aquellos casos, aunque se sabía a ciencia cierta que algunos (no todos) no podían diferencias sabiamente entre un juego y la realidad. Aquella actitud había costado más de un problema dentro del rango pero prefería no pensar en eso.

En cambio era mas importante preguntarse que estaría pasando en la Mansión 3X. ¿Habrían logrado atrapar a mas? ¿Habrían escapado algunos de los atrapados? La ansiedad amenazó más fuerte que hasta ahora, lo descubriría en apenas unos segundos sería mejor no adelantarse a los hechos.

Tanto y tan rápido cavilaba mi mente que no había notado que había terminado de aparecer en la Mansión de los tempestades, al abrir los ojos la conocida arquitectura se alzaba imponente frente a todos. Caminamos a su interior.

OFF:

♫♪ Pizza 2 x1 ♫♪ xDDD

*desaparezco*

Capturas, rescates, caputurados y rescatistas y más de un desprevenido se podían encontrar donde miraras en las bases de los diferentes rangos. Aunque ahorita la mejor palabra para mi era: refuerzo. Algo había salido mal en el rescate de Juliens, algo sobre medidas incorrectas y no queríamos dar de que hablar a la competencia y es por ello que preferíamos (? hacer doble trabajo en lugar de que pensaran que queríamos saltarnos las reglas, eso nunca.

Al entrar al sitio de los bases el ruido era cada vez mayor, debían estar ahí al menos los que tan activamente habían estado robando los nuestros, pero es que exigía mucha energía aquella actividad, así que todos los rangos no paraban de trabajar tan rápido como les era posible. Así que pensando en que el final estaba cerca decidí realizar una misión más peligrosa que la que hubiera realizado hasta ahora, estaba decidida a llevarme los tempestad que aún tenían en su poder, o al menos dos de ellos pues desconocía el último recuento de cabezas.

Escaleras, pasillos, puertas.. todo lo crucé como si lo supiera de memoria y así era, había pasado más en aquella base que en la mía propia, si mis cuentas eran correctas. La apariencia de las cárceles habían cambiado casi o nada excepto que parecía que habían más de una celda vacía, recién desocupada por su inquilino. Reí satisfecha, no quería alardear, ni contar los basiliscos antes de que salieran del huevo, pero el esfuerzo de los tempestades no paraba de dar frutos.

Podía sentir el estrés de las "últimas horas" acumulándose en mis hombros, pero nada que una copa de vino (o dos) no resolviera. Por el momento era importante concentrarse en el objetivo, sacar de allí dos de los tempestades que habían estado encarcelados por más tiempo, pero es que había que reconocer que ambos era algo más que escurridizos.

Juliens fue el más sencillo de localizar pues cantaba a todo galillo una canción loca, como decía su propia letra. Eso y que Afrodita se encontraba en frente a su celda también.

- ¿Están listos para salir de aquí? - pregunté al patriarca Haughton y a la Malfoy atrapando su atención mientras leía el acertijo en su puerta.

 

 

Un menor de edad que antes no lo era, que en todo asalto hace acto de presencia. De cabello rubio y de Alto Rango, solo tres lo sobrepasan. No es tu similar y tampoco tu hermano, pero daría todo por su bando.

- Hank, la respuesta es Hank - dije y por toda respuesta la celda se abrió -despídanse de los bases chicos, hay que tener buenos modales - sonreía a mis acompañantes, hasta el momento solo habíamos sido rescatista y rescatado. En esta ocasión sería casi como un escape en masa- ahora vamos por Kritzai.

No ocupamos revisar todas, pues estaban colocados uno a la par de la otra. La única explicación de que encontrara exactamente el mismo acertijo en la puerta de kritzai era que los hubiera atrapado juntos.

- Bueno esto hace las cosas más sencillas - solté aliviada - ¿Kritzai? - pregunté llamando al castaño, para que estuviera listo a salir de su celda. - Fumando muy sexy - solté sin pensar mucho en lo que decía. - la respuesta es Hank. - dije en respuesta al acertijo y la celda estaba sin llave ahora para que pudiera salir.

Volteé como maestra de kindergarden contando sus estudiantes, asegurándome de que fueran todos, contando cabezas. Aquello era un equipo y todos escaparíamos de allí y no había mucho más que los bases pudiera hacer para detenernos. Estábamos al fin a la merced de nuestros propios errores. Ya quería llegar a nuestro propio cuartel y de aquella manera volver a reorganizarnos, sabía que eran pocos los tempestad que aún quedaban presos, pero si mal no recordaba eran bastante pocos.

- Ahora es momento de hacerlo bien estas ultimas horas muchachos y señorita - añadí sonriendo especialmente a Afrodita - aunque yo creo que esta pizza ya se coció - riendo, nos volteamos todos para salir de ahí.

*desaparezco*

__

OFF:

Roles de 20 líneas... tomará más que eso para impresionarme (?)

*desaparece otra vez*

Escapaba victoriosa con otro mortífago. Y si no me equivocaba al salir también estaban ayudando a escapar a Juliens, todos los planes de los tempestades seguían saliendo de maravilla, aunque no le habría llamado suerte. En equipo habíamos trabajado arduamente para estar en aquellas condiciones, quizá no aventajados pero tampoco del todo perdidos.

Estábamos cerca del límite del tiempo pactado para aquella fase de la Guerra de Rangos, así que tampoco era momento de rendirse, muy al contrario era tiempo de un último esfuerzo por parte de los tempestades. Y de todos los rangos en realidad.

-Tenía algún tiempo sin verte, creí que te cogían los pollos – bromeé con el Haughton mientras nos encaminábamos a la salida para desaparecer rumbo a la mansión 3X, en donde no solo tempestades esperaba más que solo integrantes de esa base, nuestras celdas estaban bien ocupadas por integrantes de otros rangos. - ¿Qué harías sin mí? Bueno seguro que lo mismo, solo que encerrado – le saqué la lengua todavía bromeando con él.

Me pregunté eso sí, si irían por ellos. Para nadie debía ser un secreto cual era la mejor estrategia en aquel juego, todos la habíamos descifrado ya.

-Es como mi cuarta visita hoy, entiendo a que te refieres – dije tapando mi nariz, y tras una sonrisa más desaparecimos del cuartel de los bases.

*desaparezco*

OFF:

les cuento que ya no sé ni que rolear xDDDDDDD

Saludos Bases! Me honran sus esfuerzos

*desaparece más*

- Voy a exigir una habitación - pensé con amargura mientras volvía a los dominios de los bases. Hasta aquel momento las hostilidades no eran tantas, al menos no más allá que los repetidos juegos de palabras. Seguramente no seguiría así cuando para todo aquello tuviéramos que empuñar una varita. Esperaba que los esfuerzos competitivos que estábamos haciendo algunos dieran buen resultado al final de la jornada, aunque ya de por si había sacado provecho.

Había conseguido al menos uno de los objetivos creía yo de la actividad, al tiempo que se creaba una guerra entre integrantes de un diferente nivel mágico al mismo tiempo se fortalecían los lazos entre los del mismo nivel, aquello lograría un mejor trabajo de equipo y por tanto seríamos más eficientes, letales. La disciplina tarde o temprano vence la inteligencia.

- ¿Emmet? - llamé tratando de localizar al mortífago que debía sacar de allí en aquella ocasión. Otro tempestad totalmente incauto. Pero bueno seguramente no después de aquello. No fue complicado localizarlo pues la voz de un hombre exigiendo alcohol viajó hasta mis oídos.

- ¿Por qué no me sorprende esa sed tan particular? – dije a media risa tomando su acertijo para resolverlo, uno matemático Si bien no era mi especialidad al menos habían métodos para resolverlos.

"Con qué número real de debe sumar 5 para que su resultado sea 1?"

Muy bien, intenté plantearlo en mi cabeza lentamente, recordando cuanto sabía de álgebra, muggles est****os que se ocupaban más de la matemática, suponía que por si falta de magia. Un número real, quería decir que comprendía los enteros y racionales. Por tanto al al aplicar x + 5 = 1 se podía obtener con facilidad que x era -4.

-Cuatro negativo – dije al fin en voz alta en respuesta al acertijo, aquello lo había logrado. Emmet quedaba libre.

-¿Nos vamos? – pregunté con una sonrisa satisfecha de estar salvando otro tempestad de las garras de los bases.

*desaparezco*

-¿Fokker? - pregunté con honesta curiosidad que pronto se convirtió en una más morbosa. Aquel prisionero era de los más interesantes que teníamos, sin olvidar que uno de los dos hombres.

Algo agotada me encontraba a este momento, pero aquello no era razón suficiente para dejar de dar la lucha. Hasta el momento parecía que era una encarnizada entre bases y nosotros, los bases avanzados. Reí socarronamente y May volteó interesada.

-Es que somos los bases avanzados – dije por toda explicación, aunque 'avanzados' era la palabra clave.

Escapábamos una vez más de la guarida de los bases – May intenta que sean los Magos oscuros la próxima, digo para que sea más elegante – comenté bromeando mientras saludaba con descaro algún base que asomaba – No se preocupen ya nos vamos .

Y así era, aunque aún se dejaban algunos de los nuestros, Juliens , Kritzai y Centauro seguían en su poder, aunque esperábamos que no por demasiado tiempo. Por nuestra parte teníamos cuatro de los suyos y no desaprovecharíamos oportunidad alguna para ir por más.

Aquella guerra de rangos, como estaba dando de qué hablar.. y lo cierto era que quedaba aún mucho más.

- Qué difícil será concentrarse en él - contesté a la castaña tomando su mano, escapando a la Mansión 3X.

*desaparezco*

La cantidad de experiencias hasta ahora vividas eran demasiado diversas, tanto era así, que incluso había intentado atrapar a uno de los míos. “No pueden culparme, era la emoción del momento (?, y era mejor que perderse la oportunidad” pensé mientras avanzaba hasta la pizzería por lo que sería la millonésima vez y esta vez más segura que las anteriores de que volvería.

En esta ocasión, mi misión era salvar a la mismísima que me había sacado de otra celda. Tenían a May (que he dicho que Julienne no ) y no sabía como podría pasar aquello, pero si sabía que era fácil irse de la lengua. Muy fácil.

-Parece que con esto quedamos a mano – dije en voz baja cuando alcancé la celda de May – aunque eso no quita que puedas cobrarme – añadí atrevida pero después me concentré en su acertijo.

El acertijo era de los más viejos que existían, aunque eso no lo hacía fácil de resolver, requería una fiera lógica y muchos de los más grandes magos no han tenido una gota de lógica y se quedarían aquí para siempre, como señalaría una gran bruja en algún tiempo remoto. No era nuestro caso.

Se debe preguntar a cualquiera de los dos ¿cuál puerta me diría que es la correcta el otro guardián? Y entonces se debe salir por la contraria a la que señale el guarda. El razonamiento detrás era sencillo para comprobar como correcta la respuesta: si se le pregunta al que dice la verdad, señalaría la puerta falsa pues sería la respuesta del que miente; si por el contrario se le pregunta al que miente, señalaría la puerta falsa pues mentiría sobre lo que diría el otro guardián.

- El placer ha sido todo mío. ¿Nos vamos?

*desaparezco*

Para aquella altura del juego ya me encontraba algo agotada. Incluso tenía la impresión de haber trabajado más que lo que los muggles llamaban obreros o campesinos. Si bien no había sudado un ápice el juego era exigente a un nivel mental, aunque realmente lo que más exigía era tiempo. Tiempo y cómplices.

En esta ocasión no era distinto pues una vez más May sería mi mejor aliada.

-Todo parece indicar que será así – le concedí a la Malfoy, entrando al lugar en donde se había hecho con dos botellas de vodka. Tragué con dificultad. Antojo. – Que tal si tan solo escapo unos segundos a dejar nuestro invitado – dije señalando a Vladimir que traía para apresar. – ¿Y te hago compañía? No creo en eso de que una mujer beba sola, deberían ser la menos dos – terminé con una sonrisa y acto seguido llevé al prisionero al sótano.

-Instálate, haz lo que quieras, excepto escapar dado que no depende de ti – y una risita falsa solté – ah sí claro, tu acertijo. Tampoco soy tan cruel. Algunas veces.

Acertijo para Vladimir Alexae

¡Qué ruido! ¡No se calla! Tendremos que regresar a esa bestia por donde vino. Un poco de tierra no le caería mal.

 

Escapé de aquel sitio tan deprimente para volver al lado de May.

-¿En qué íbamos? – dije arrebatando una de las botellas de las manos de la bruja y dando un largo trago - ¿ me dirás que cobrarás por tus servicios?

*desaparezco*

De ser sincera, eran pocas las veces las que me comprometía con una actividad de aquella manera, la ventaja de hacerlo es que al final se podía estar satisfecho de al menos “haberlo intentado todo”… sin embargo, no era la meta de un mortífago solo intentarlo, no, la ambición de ganar era más, era eso o perecer en el intento.

Pero no habíamos perecido los tempestades, de hecho a este momento éramos un grupo bastante unido, comunicado, dispuesto a actuar. Iba a requerir que los otros bandos también aunaran sus fuerzas si querían si quiera hacernos dudar un poco de nuestra supuesta supremacía. Pero no hacía bien hablar de más, era mejor dejar que las acciones fueran las que demostraran mi punto.

Y en eso andaba, pues debía rescatar a Goshi de los bases que la tenían presa, ya habíamos resuelto el acertijo era una cuestión de salir de aquella “pizzería” aunque no entendía aún como se atrevían a decir pizza, si ellos no eran poco más que la insípida base… pero otra vez le resté importancia, que su nombre fuera extraño y fuera de lugar (? No los hacía menos fuertes o amenazantes. Dediqué una cálida sonrisa a la Malfoy.

-Yo estoy ya harta del olor, no sé como lo has hecho tú encerrada aquí todo el día – dije asqueada a la ojiverde. Un evidente sarcasmo. Al tiempo que alcanzábamos el lugar para desaparecernos – vamos a casa – dije triunfante de sacar una compañera más del cautiverio. Quedaban unos pocos… eso era certeza de más para regresar.

OFF:
básicamente me he llevado a Goshi!

Bye Bases.. seguro que nos vemos nuevamente

*desaparezco*

Ya había estado en el la base de los bases, aunque para este momento y con tanto movimiento que había tenido no recordaba porqué motivo, en aquel instante, sin embargo, el motivo de mi regreso lo tenía más que claro. Tenían a Goshi, quién se había descuidado apenas un segundo y se la habían llevado sin más.

Fue sencillo colarse en la habitación de celdas, pues ya había estado allí y aun así mi paso fue sigiloso y precavido, no podía permitirme imprudencias.

Mientras alcanzaba casi la celda correcta reflexioné que aquella actividad de una u otra forma la actividad estaba logrando bastante éxito, para esta altura no me importaba quien ganara al final, ya lo había pasado bien atrapando compatriotas mortífagos, en mi opinión era el más noble de los objetivos.

- Ven Goshi nos vamos – dije llamando desde las barras de su celda al tiempo que leía nerviosa el acertijo. Era hasta ahora el más confuso que me había encontrado. - ¿Qué sabes de esto? - le pregunté a la encarcelada y luego de cruzar algunas palabras llegamos a una respuesta.

- Estaban en el cementerio de Pequeño Hangleton, el mismo pueblo donde cerca se erige la Mansión Riddle en la colina- dije en voz alta y segura a la espera de comprobar si se abría la celda de la tempestad.

 

"Se hallaban en el cementerio oscuro y descuidado de una pequeña iglesia, cuya silueta

se podía ver tras un tejo grande que tenían a la derecha. A la izquierda se alzaba una

colina. En la ladera de aquella colina se distinguía apenas la silueta de una casa antigua

y magnífica." Harry Potter y el Cáliz de Fuego.

Mortífagos iba y venían, casi que a placer aunque en realidad lo que definía su ir y venir tenía que ver con las reglas de todo el juego.

Yo por mi parte volvía de nuevo a la mansión 3X, solo que no venía sola.

- Aquí estamos los tempestades - dije con total amabilidad a Anne como si solo estuviera trayéndole de visita a mi hogar y no a encerrarla como era la realidad. - Hemos estado algo ocupados, como habrás notado, de hecho Mery es una de las que ha hecho un trabajo excepcional - le comenté de nuevo como si habláramos del clima, con calma.

Alcanzamos el interior de la Mansión, inmaculado y con apenas uso pues lo que más estábamos utilizando era su sótano en donde esperaba una celda por Anne.

- Por aquí -le indiqué y dócilmente se dejó guiar - Bueno mami hemos llegado - la dejé en compañía de los otros mortífagos que teníamos "en nuestro poder".

Revisando los rostros parecía que al menos una había logrado escapar, estaba impresionada.

- Tú acertijo - dije entregándole un pergamino a la Nigromante que presuntamente sería su llave de libertad.

 

Fue amarilla y el negro estuvo ahí. Fue luminosa y tenía oscuridad. Estuvo en la élite mágica pero cambió lealtad por fidelidad luego de todo dejarlo ir. ¿De quién estamos hablando?

*desaparezco*

Mi ojo atento (? o quizá mi olfato para los descuidos (? Me habían traído en esta ocasión hasta la Nigrosecta, o al menos ese creía que era el nombre que los nigromantes habían utilizado para nombrar su base de operaciones. Sentía algo de indecente satisfacción que mi primera captura resultara tan valiosa, bueno, la primera luego de haber sido caputurada yo misma.

- Muy descuidada mami – dije con un tono divertido – sabes que me gustaría hacer esto de otra forma – añadí con un dejo inocente en la voz – pero es que así es la guerra dura y cruel – le dediqué una sonrisa sincera. Al fin y al cabo era solo un juego. Uno muy divertido por cierto.

- Así que en lugar de echarnos guante a nosotras pues…. – dejé la frase al aire.

-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Así es señores.. Anne es tan amable que se ha pasado por todos lados, ha capturado mortios.. y se viene a descuidar en su propio topic.. bueno.. alguien tiene que hacerlo.

*atrapo a anne por no poner la palabra en ninguna parte*

Y

*desaparezco*

La libertad que bella y efímera que era. Pero así me sentía en aquel momento, libre a pesar de que por mucho eran las celdas más cómodas en las que había estado nunca.

Quién había venido por mi era ni más ni menos que May, una morífaga que conocía desde que había ingresado al bando. Le dediqué una sonrisa que podría significar un poco más de gratitud y salí por fin de la celda. No quería quedarme mucho más en aquel sitio aún a pesar de la hospitalidad, especialmente porque cuánto más tiempo perdiera allí menos posibilidad de atrapar otros mortífagos.

-Gracias – dije cuando estuve junto a la castaña mientras avanzábamos a la salida – ya me dirás como puedo pagarte el favor – añadí en tono divertido segura de que ella entendería mis insinuaciones –por ahora… muero por seguir atrapando a otros – reconocí como niña con juguete nuevo.

- Aunque reconozco que la estadía no ha estado del todo mal, pero sería mejor irnos y hacer más travesuras no? - otra sonrisa retorcida, a veces no podía evitarlo, otras como en esta ocasión sencillamente no quería. Ofrecí mi mano a la Black Lestrange, así podríamos desaparecer juntas seguramente camino a la mansión 3X, con suerte a darle otro significado

___

OFF:

bueno may ha venido por mi hemos contestado su acertijo y estamos a un rol de huir ..
gracias por la estadía y el viaje gratis (?)

saluditos...

*desaparezco*

Definitivamente entre los errores más caros se encontraba el descuido. Era la misma historia de la escuela muggle y los ejercicios de matemática ¿cuántos errores por olvidar un palito al que le llaman 'menos' (aunque en realidad es el símbolo de substracción) ?

En fin, no quedaba más que no resistirse y hacerlo mejor la próxima: despacito y con buena letra.

Iba preparada para lo peor, seguramente por como habíamos tratado nuestros capturados, quizás nos habíamos tomado la guerra muy a pecho, pero para mi sorpresa a pesar de que tenían una celda para mi, las palabras de Anna no dejaron de salir con la misma amabilidad y carisma que le caracterizaba.

- Seguro que no es demasiado el tiempo - exclamé con una sonrisa bastante más aliviada. Mientras me enfrentaba al hecho de que debía ser rescatada para lo cuál uno de mis compañeros debía venir por mi, y como si no fuera suficiente, resolver el condenado acertijo que Anna acababa de poner en mi puerta.

"en el pasado en la Marca" pensé reflexionando. No era muy conocedora del pasado de la Marca, pero en cambio conocía a muchos que lo eran, quizá era una cuestión de forzar mi memoria. Pero hacerlo no era tan divertido pues severas imágenes eran un borronazo de cabellera azul, aunque no pude evitar sonreír y distraerme en esos recuerdos. Hasta que de pronto la respuesta estaba ahí, como si la hubiese sabido todo el tiempo (?)

- Boss - dio en voz alta y alarmada - Boss estuvo en La Marca en el pasado - aquello fue suficiente, la celda se abría. La próxima regla que debía cumplir era escapar con un rescatista.

- ¿May? - justo a tiempo, no sabía quién era.

*desaparezco*

Nunca lo había pensado de aquella manera, pero cuanta diversión debían tener los detectives. Siempre detrás de la pista, sigilosos, atentos. Hasta ahora no había participado de actividad igual, pero lo cierto era que lo estaba pasando en grande. Seguir mortífagos y atraparlos, seguramente el sueño inserteaquípalabranoATP de cualquier odefo, lástima que no contaran con tanta suerte.

Aquel día, había sido uno bueno y era impresionante el avance pues aún quedaban bastantes horas de aquello. ¿Cuántos más acabarían cayendo en la trampa? El recuento de cabezas solo se sabría al final. Sin embargo ahora me ocupaban otras cosas, caminaba hasta la base de los 'bases' en donde les informaría que teníamos dos de los suyos en nuestro poder.

- Soy tan amable que he venido personalmente - dijo al entrar sacando del bolsillo interior de su capa los dos pergaminos que debía entregar. No hablaba a nadie en particular.

- Los Tempestadodes hemos cogido a Fokker y a Jessie y he traído los precios de sus cabezas - dije en tono algo melodramático. Acto seguido dejó los pergaminos y me devolví por donde venía. Seguramente vería más de aquellos bases, yo no era de la que subestimaba sus enemigos.

Acertijo para Rescatar a Fokker

Hay criaturas asombrosas, misteriosas en el mundo mágico. Pero ninguna como esta, poderosa y llena de malicia, enorme y venenosa es. ¿Ya sabes de cuál hablamos? ¿Quieres una pista? No tiene escamas.

 

Acertijo para Rescatar a Jessie

 

Las matemáticas, siempre han sido caprichosas pero solo porque los números lo son más aún... ¿Qué harías para que a diez, agregándole uno sea nueve?

 

*desaparezco*

Sophie 'Jubilee' Haughton

- Wow - solté cuando aparecí en la Mansión 3X, la dispuesta para nosotros, los tempestad para compartir durante aquella actividad mortífaga, aunque de ser sincera hasta el momento no me había interesado lo suficiente por la actividad. Pero es que la primera había sucedido tan rápido que no había siquiera reaccionado.

Pero hoy, la historia era diferente. Con la varita dirigí los dos cuerpos que traía conmigo. Ambos inconscientes, ambos capturados. Había resultado extremadamente fácil. Tanto que mi cara era de casi aburrimiento, lo cuál era contradictorio pues me divertiría muchísimo con los bases que llevaba como ofrenda a mis compañeros.

- ¿Alguien en casa? - pregunté ingresando al fresco interior de la Mansión. Obtuve silencio por toda respuesta. Dirigí al interior los cuerpos aunque si querer Fokker se golpeó un poco su cabeza con la gigantesca aldaba - uy , eso dolerá más tarde.

Supuse entonces que estarían en el sótano, algo predecible pero eso no disminuía la adrenalina de ello. Busqué cuidadosamente la entrada al mismo siendo que no había estado nunca allí pero no fue difícil. Conforme avanzaba el murmullo de voces se hacía más sonoro.

- Buenas - dije y seguro algo sorprendidos pues los cuerpos iban delante de mi. y hasta después se reveló mi figura - con ustedes Jessie Stabolito y a este - dije señalando a Fokker - seguro que le conocen.

-Mery - exclamé más emocionada - pero si ya nos tienes con que divertirnos. - Observé a Katie con una risa retorcida, sí era mi sobrina y sí le quería mucho y mucho había compartido con ella. Pero esto.. era la guerra. - pues yo he traído dos más. Me pregunto como deberíamos proceder - no hablaba a nadie en particular, solo reflexionaba la deliciosa posibilidad de opciones.

*desaparezco*

Pues bueno.. hasta me siento mal de.. venir a por una base totalmente incauta *damos crédito a Ainé por la palabrilla*

pero es que.. bueno.. alguien tiene que hacer no es así?... a mi me dijeron todos los bases.. y yo entiendo que ella justo acaba de entrar.. pero es un trabajo en equipo sus pizzas debieron advertirle! :unsure.

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me aprovecho para preguntar si se ocupa participación en alguna actividad, puesto que la que tenía con Juve está en construcción.

así que tengo algo de voluntad para hacer algo más

quiero algo que sea divertido.. y yo insisito en que algún día los pondré a jugar póquer o.o

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*capura a Jessie Stabolito*

y

*desaparezco*

uuh yo también quiero acosar la pizza.. o la base... o lo que sea que se hayan inventado

En un tema totalmente aparte!

Bases nuevos!! Que gustazo verlos ingresar a la Marca! Sean bienvenidos todos! Seguro que lo pasan aquí genial! Verán como al fin La Marca es bastante más de lo que imaginaban (? y nada eso!! Disfruten!! Y maten muchos poshos! y hagan orgullosos a sus líderes! *0*

Alba: mi mejor empleada de siempre! me alegra muchísmo verte aquí! bien merecido! seguro que le sacas provecho

Bea: ciela hija!! *la amoroseo* cómo te ha costado salir de la Academia! condenada vida muggle no? bueno.. pues el esfuerzo a rendido sus frutos... y acá estamos! :3 todas mortias y a punto de salir a hacer maldades /o/

A los demás apenas les conozco de vista, pero esas son las ventajas del bando.. pronto les conoceré más

.Y bueno ya.. soy bien agradable y social, háblenme cuando gusten! Dejo mi skype : irina_m_b

y bueno dejo de hacer pelota! para que vengan más mortios /o/

Dicen que echando a perder se aprende.. espero que sea cierto.

Declaro aqui que soy un desastre en duelos.. un desastre que quiere arreglarse y por eso.. me inscribo.. pues creo fielmente que estas actividades de a poco van a ir mejorando mi habilidad ( aunq me maten en un abrir y cerrar de ojos xD)

Ficha de inscripción:

Nick: Sophie Wright Ryddleturn

Rango: Tempestad

¿Que esperas del Torneo de Duelos?

Espero sea un incentivo para mejorar mi habilidad en duelos... mediante la amable colaboración de compañeros mas experimentados que compartirán su sabiduría si les pregunto, no me cabe duda. Espero divertirme y no tener que hacer tochos xD o que las actividades sean muy pesadas ( en términos de que haya que leer muchas páginas a fin de ponerte al hilo y resulta inevitablemente en un tocho)

Bueno ya eso, aprender y diversión ^^

Muchos días habían transcurrido desde que la Haughton invirtiera todo un día en el Castillo de su ancestral familia, pero se alegraba en gran manera de que fuera así; se sentía más descansada que en muchas semanas, casi podía decirse que plena, feliz.

Su plan para aquel día sería simple, quería ver a sus hijas, aunque dudaba que se encontraran en el hogar de los Haughton, su vida de mortífagas había absorbido su vida tanto como la mía y cada vez se complicaban un poco más nuestros encuentros, sabía lo que la Marca Tenebrosa esperaba de ellas. Muchas actividades y misiones se organizaban continuamente y tal era nuestra osadía que en general llevábamos a cabo más de una a la vez. No, lo más probable es que no estuvieran ahí.

Por otro lado y aquello si lo anhelaba más, era una conversación con su madre. Ya ni siquiera recordaba en qué había versado la última conversación que sostuvieran; de hecho la recordaba embarazada y sabía que para aquel momento sus dos hermanos debían ser unos mellizos risueños.

Al ingresar al Castillo de pronto sintió una punzada de nostalgia al mismo tiempo que el acoplaba al frío interior. Ahora que lo pensaba bien, podría ser que no terminara haciendo ninguna de aquellas cosas. Más bien sorpresas podrían llegar en cualquier momento.