Kiosko: Una mordida rapidita (MM B: 95066)

[Seba Granger]

Hacia solo unos días que había llegado el nuevo cargamento de libros que habíamos comprado hace un mes con Darla, la verdad es que hora que lo pensaba se había tardado un poco la encomienda, así que me había propuesto ayudar a los elfos a ordenar y etiquetar cada nuevo libro para que estuviera en los registros del local.

 

Dash los acarreaba desde la bóveda de un lote de 10, pese a que era uno de los mas pequeños de los elfos tenía bastante fuerza, aunque igual se hacía ayudar de su propia magia.

 

Aquella tarde una carta llegaba de improviso, Leto llegaba corriendo hacia donde estaba casi escondido entre dos estantes con libros a mis pies y casi sobre mi cabeza en las repisas.

 

La nota era de mi hermana que me necesitaba con urgencia en el kiosko, -¿Que le ha hecho esta mujer ahora al local?- resoplé un poco asustado para luego salir hacia el lugar que para mi suerte no estaba tan lejos de la librería.

 

 

Hacia el kiosko

La verdad no estaba del todo seguro de como esperaba encontrar el lugar, al menos con algunos destrozos o aun mas sucio de lo que lo había encontrado la última vez que había ido.

 

Tenia hasta cierto modo ingresar, por fuera al menos no le veía nada raro.

 

-¿Mujer donde estas?- llame desde el exterior.

[Akiza Ravenclaw H.]

Mis sospechas fueron correctas, escuché la voz de mi hermano en las afueras, me reí un poco, ya que sabía que por eso iba a ver un golpe o algo así por parte de él, fui hacia donde estaba él, llevando otra bebida, al mirar su cara me pude imaginar que había pensado que se incendió el kiosko o algo por el estilo.

 

-Hola...hace mucho tiempo que no te he visto...siempre te olvidas de mi...eres malvado - dije con una sonrisa en el rostro, sabía que me iba a refutar aquello, porque el piensa que yo me desaparezco desde hace mucho tiempo...bueno en parte es verdad, con tantas cosas que hacer, desaparecía muy rápidamente.

 

-Bueno volviendo al tema de interés...se me ocurrió que podríamos remodelar el lugar, ya se ve demasiado anticuado...podríamos cambiar muchas cosas para que sea más llamativo y de esa forma traer más gente...que te parece...además podríamos hacer una piscina - dije sin pensar, era divertido ver que se podría crear una piscina...no sabía que iba a pensar en el mientras me imaginaba donde podría quedar perfectamente aquello.

[Seba Granger]

-Yo te olvido?, de que hablas mujer, si cada que vengo a verte no estas, o estas durmiendo, no se donde te metes- gesticulaba un poco con las manos que esta chica me iba a volver loco.

-Osea que me llamas para eso?, pensé que te había pasado algo, o que tal vez habías destruido el kiosko, aun no se que paso la ultima vez que vine al lugar, Dash me había dicho que el había limpiado todo- trague un poco de saliva mientras pensaba en lo que ella había dicho de cambiar el lugar.

-¿Crees que podremos poner una piscina?, digo que hay espacio como para una no tan grande, pero no se si para eso necesites algún permiso especial mágico- a veces me sentía un poco ignorante en la burocracia mágica, hace años que no me encargaba de contratar ningún servicio de los que solían pedir antes para las mansiones o negocios.

-¿Esa bebida es para mi?- dije apuntando la que tenia de sobra.

[Akiza Ravenclaw H.]

Pensé en las palabras de mi hermano, no sabía si había que hacer un trámite para la piscina, pero hasta mientras teníamos que ver cómo podríamos remodelar, estaba pensando a ver que se podía hacer...mientras tanto recordé que tenía dos bebidas, y me comencé a reír, me olvide que esa bebida era para mi hermano.

 

-Lo siento, me olvide que tenía las bebidas en mis manos, toma claro que es para ti - dije y le tendí la bebida que era una limonada, sabía que estaba un poco dulce porque le puse bastante azúcar, a la final me encantaba que todo esté al estilo de "coma diabetico" - Lo siento si es que está dulce...realmente me gusta que esté así -

 

-En fin volviendo al tema...no lo se, no estoy segura si hay que pedir permiso, pero tu puedes ir a preguntar verdad - le pregunté con ojitos al estilo gato con botas...realmente no me gustaba hacer trámites porque era muy estresante hacer colas...espero que acepte para que vaya hacer trámites.

[Seba Granger]

Tome la bebida que me cedía para dar un sorbo de esta, casi escupiendo esta pero me la trague para no ser del todo mal educado, -¿Quiere que muera joven verdad?, ¿me quieres con diabetes?- dije tratando de no reír, baje unas sillas de la mesa que estaba cerca de donde estábamos y le ofrecí sentarse.

-Si supongo que puedo hacer las consultas, pero no te abuses ¿eh?- camine hacia la puerta del kiosko, -Espera que me busco algo menos dulce, pero sigue contándome lo que has pensado, te escucho desde acá- añadí mientras me asomaba por la barra del kiosko y me volvía perder sacando una bebida con menos azúcar, ademas de un plato con unas papas de bolsa que había encontrado, antes me cerciore que no hubieran vencidos.

-Oye, ¿Donde están tus elfos?- salí por la puerta del kiosko de nuevo con el plato de papas y la bebida en la otra mano, -Provecho- le ofrecí del plato.

-¿Como has estado?- pregunte de repente.

[Akiza Ravenclaw H.]

Me reí apenas vi que quería otra bebida, era normal, no era tan dulce como yo, no sabía cuales eran los gustos de mi hermano, di un suspiro y miré cómo buscaba otra bebida - No seas exagerado, es rico esa bebida...pero bueno...señor amargado deberías sonreír más para que no te salgan arrugas - dije con una leve sonrisa...

 

Me alegré que diga que quería hacer los trámites...me sentía feliz, que me pudiera ayudar, con todo lo que he vivido en este tiempo y pueda disfrutar.- Gracias por hacerlo...bueno trataré de no abusarme de ti...aunque tu eres bueno para los trámites...podría hacerlo - dije con una sonrisa, esperé su contestación, no estaba segura que pensar de hoy en adelante...luego pensé en los elfos - Mmm, pues de manera sencilla los mandé a dormir - dije simplemente.

 

-Yo...bueno un poco agotada de todo...y tu? - pregunté con una sonrisa - Por cierto cómo está mi cuñis loquis - pregunté también ya que de ella tampoco sabía mucho desde ya hace tiempo.

[Seba Granger]

-¿Y tu estas agotada de que?- dije medio en broma, no sabia muy bien que había hecho mi hermana estoy días o mas bien meses ya que solia perderse mucho aunque cada que nos veíamos le pedía que no se desapareciera asi como lo hacia.

 

-Tu cuñis esta bien, supongo que a esta hora ya en casa, solo que como me mandaste llamar con tanta urgencia no alcance a esperarla- comi una papa del plato para luego sorber una vez mas de la bebida.

 

-No le digas loca, pensé que se habían visto hace unos días, al menos me dijo que se iban a juntar- dije pensando un poco lo que ella me había dicho.

 

Ademas estaba casi seguro que ambas mujeres que eran parte de mi vida eran del mismo bando, que mi hermana nunca me lo hubiera reconocido no quería decir que no lo sospechara.

 

-¿Cuando vas a ir a casa?, podríamos cenar un día de estos-

[Akiza Ravenclaw H.]

Me reí ante su comentario, el pensaba que no hacía nada mientras desaparecía, sin embargo, tenía que entender que no solamente era el hecho de desaparecer, sino de hacer lo que tengo que hacer en el otro lado...di un suspiro, recordé además del drama que había en el Ministerio, por lo visto tenía mucho trabajo que hacer, pensaba que iba a estar libre, pero no era así, realmente todo se acumuló y tenía que hacerlo todo bien, para seguir en este mundo en paz y armonía.

 

-Que bueno que mi cuñis loquis esté bien...y no te enojes sabes que la estimo mucho...sería peor que no le dijera nada cariñoso- dije con una sonrisa, yo si aplicaba la frase "no hay amistad sin bullying", y así era, aunque conociendo a mi hermano, no le iba a gustar que le siga diciendo así...aunque en algunas ocasiones me decía a mi de esa forma y no me enojaba sino me reía. - Bueno, si el problema es que no recuerdo en donde me dijo para encontrarnos, ya sabes soy un poco despistada- dije en son de disculpa.

 

Escuché la propuesta, de ir a cenar...sonreí sería bueno para la distracción - Bueno, esta bien, me encantaría cenar con ustedes...en donde y cuando...bueno espero que no me vuelva a perder - dije con una risita, estaba segura que por el momento no lo iba hacer, así que tome un poco más de mi bebida, y cogí una papa también del plato.

[Seba Granger]

-Cuando me contaras algo mas de esa vida que no conozco de ti- reí un poco para molestarla, mientras cogía una papa mas del plato que estábamos compartiendo.

-Podemos cenar en nuestra casa o salir a comer afuera, como ustedes quieran- añadí respondiendo a la pregunta de mi hermana.

-El chiste es que pasemos un rato juntos, ademas que yo recuerde no conoces del todo el local y donde vivimos con Darla- mire a la rubia por un instante.

-Hace unos meses te fuimos a buscar a tu mansión y nos atendió Christine, ¿Que pasa contigo?, por que haces que me preocupe tanto- reí un poco mas, aunque de verdad me preocupaba por ella.

-¿Como vas con el trabajo?, hace muchísimo que no me paso por el ministerio, creo que desde que me fui, o tal vez fui a buscar a tu cuñada un par de veces, pero ya hace mucho-

[Maida Black Yaxley]

Durante sus días se aislamiento por voluntad propia, Maida había desarrollado ciertas habilidades, como el silencio prolongado, la poca necesidad de moverse —y así llamar menos la atención—, beber poco, y comer nada. Pero esta mañana, algo en su firme entrenamiento había fallado, y a medida que las manecillas del reloj avanzaban, cada vez sentía más hambre. De hecho, cuando se miró en el reflejo de los vidrios de aquel negocio, pudo observar la languidez de su piel. ¿Por qué tenía tanta hambre y por qué no podía recordar cuando había sido su última comida?

 

Comer en lugares públicos suponía la alta posibilidad de encontrarse con algún conocido o peor, familiar y tener que dar explicaciones acerca de su comportamiento, aún no tenía ganas. Además, cuando estaba ensimismada tendía a las alucinaciones, tampoco estaba para andar dando escenitas en público, pero que tenía hambre, era una verdad irrefutable.

 

— Pido algo fácil de preparar y rápido de comer —decidió mientras ingresaba, pero se quedó en umbral, completamente en blanco. Al menos el sitio estaba vacío, eso ya era una ganancia a cualquiera de sus intereses.

 

@Radamantys