Mery Gaunt Karkarov

Mery Anne Haughton Corrió detrás de Hades hasta llegar a la habitación, era tan grande que la pelirroja se quedó sin palabras aunque debería darle su toque femenino y mortifago para que se notara que la pelirroja vivía en aquella mansión. Imaginó todo con los colores contactados, con los cuadros, la ropa, sus mascotas y, como era cosa de la mortifaga, todo desordenado y patas arriba. - Creo que esta habitación es perfecta -dijo mientras le daba un abrazo tan fuerte que pensaba que lo dejaría sin aliento. Se alejo de el y escuchó sus palabras. Una sonrisa macabra se dibujó en su rostro pero sabía que hacer algún comentario de aquellos implicaría que todos supieran que era mortifaga, pero, ¿que más le daba? tarde o temprano se enterarían así que le daba más bien igual-. a ver si es verdad y haces que me divierta un poco hermanito -dijo mientras le sacaba la lengua. Se tiró al suelo, justo al lado del ventanal y se quedó mirando al Nigromante, desde un punto de vista bajo, el chico parecía mucho más impresionante que nunca, a demás, si ya de por sí daba miedo, mirarlo desde abajo era tiritar de miedo aunque ella no debía de tenerlo ya que eran familia, amigos y compañeros. - Y bien, ¿que me invitas a hacer en esta maravillosa tarde? -le preguntó mirando el cielo a través del cristal.

Holaaaaaa Bueno, paso por aquí por dos cosas (?) okno, es solo una, pero queda bien eso de decir que son dos u.u xD Como matriarca reciente, desaparecida y amoroso de la familia, y porque Monica me dijo que lo hiciera xD paso a decir que Alia queda aceptada en la familia Haughton /O/ Y ahora dejo la seriedad, que no se porque parece que soy una chica seria, y paso a aceptar maternalmente a mi hijosa *-* Es un placer tenerte de nuevo de hija, aunque esta vez sea de adoptiva :3 Un saludo /o/ Chao

Mery Anne Haughton Las palabras de Hades despertaron una emoción y unas ganas de ir a ver que habitación se quedaba que por un momento hasta se mordió las uñas cosa que odiaba hacer. Terminó de escucharlo, otra cosa no sería la joven, pero educada era uno de sus apellidos. - La mayoría de las veces suelo hacer demasiadas tonterías, y lo sabes, aunque ahora visitaré este sitio más amenudo -bromeó mientras se ponía de pie. Tenía ganas de moverse en aquel momento. Si, era una chica muy extraña, podía estar a punto de dormirse y segundos después correr la maratón de New York-. Bien pues, vayamos a descubrir mi habitación -comentó, mientras cogía de la mano a Hades, SU Hades. Subió las escaleras lo más rápido que pudo, pero, ¿a donde se dirigía? se quedó parada en quien sabe que piso era y después se giró hasta su hermanito mayor y lo miró directamente a los ojos. - Se que me quieres, ¿a que sí? -preguntó sin sentido ninguno. Le dió la risa y se lanzó a darle un fuerte abrazo-. quiero mi habitación o acabaré como spiderman -se cruzó de brazos y comenzó a recordar la última vez que los fenixianos fueron a por ella en su propio castillo, claramente el Ragnarok debía de saberlo y no se cortó ni un pelo en decirlo-. ¿sabías que el otro día vinieron a atacarme los fenixianos? -no quiso decir más, últimamente aquellos seres parecían ser piojos.

Mery Anne Haughton - Por fin bajaste, pensé que tendría que traerte arrastras yo misma... -comentó con tono juguetón. Los momentos que pasaba junto aquel chico eran mágicos para la Tempestad, lo quería como a un hermano mayor, como a un guía y hasta como a un padre, sin él la pelirroja estaría bastante perdida en aquel mundo. Como siempre, Hades despeinó a la pelirroja aunque esta no hizo absolutamente nada, ya tendría tiempo de vengarse de él en aquella tarde, o incluso algún día de todos los que le quedaban con vida. Se sentó en el sofá en el cuál su amigo le indicó, aunque más bien se tiró en él ya que estaba bastante cansada. Eso de ir por los castillos y mansión de visita siendo la primera vez era bastante agotador, aunque en el fondo adoraba ver sitios nuevos. - Y tanto... yo bien, como siempre -comentó mientras le dedicaba una gran sonrisa-. ¿Cuándo as visto que yo no esté bien? sabes que soy pequeña pero matona, a demás, pocas cosas pueden hundirme -dijo soltando una gran carcajada, a veces pensaba que estaba volviéndose loca, pero poco le importaba, quien no quiera acercarse a la mortifaga que no se le acercara, no se iba a molestar-. ¿y tu que tal? -preguntó torciendo levemente su cabeza.

Holis *+* Bueno, creo que me veo en la obligación de pasarme a registrarme (???? ok no, lo hago porque quiero y porque, como la familia esta totalmente abandonada, alguien tendrá que activarla, y si no está en el árbol no tiene tanta gracia T.T jajajajaja Dejo el formulario y ya veo si me aceptan *+* Nombre real: María Edad: 15 *+* País: España, Andalucía /o/ Link a tu ficha de personaje: http://www.harrylatino.org/index.php/topic/98518-ficha-de-mery-anne-haughton/ Mascotas, elfos, aves mensajeras aprobadas por el MM: Elfos --> Nami, Zeff y Wina *+* Mascotas --> Robi (perrita pastor Alemán) y Ka (boa) Si perteneces a otras familias aclararlo aquí: Mis dos familias son la Haughton (soy matriarca de esta) y la Gaunt, ambas sanguíneas *-* Por lo que esta familia sería la adoptiva ilegalosa /o/ Algo que deberíamos tomar en cuenta en el rol: Demasiadas cosas.... Mery tiene mal humos, es vampiresa, mortia y de pocos amigos *+* Todo en resumidas cuentas xD Aclaro que sere amiga de la familia, pero que aclare esto : "Hermana pequeña de Hades Ragnarok y blinkera personal de la familia" Si no pone eso en el árbol prometo avadearlos a todos ¬¬ xD Y ahora, me voy *+*

Mery Anne Haughton (peleando con Zeff) - Eres horrible Zeff, no se ni como puedo vivir contigo, inútil... Dijo la Haughton empujando la cabeza del elfo. No soportaba que su propio elfo perdiera sus cosas y encima echara la culpa a otros elfos. Bajaba las escaleras del castillo Gaunt demasiado rápido acompañada del elfo, que bajaba casi arrastras ya que Mery lo había cogido de la oreja. - Pero señorita... Su colgante... Intentaba decir el elfo, pero la pelirroja lo golpeaba o estiraba más fuerte de su oreja haciendo que diera un pequeño grito y así tener que callarse y seguir avanzando. Su camino por el castillo Gaunt era más bien horrible e incomodo para ambos, aunque el elfo llevaba las de perder en aquel caso. Llegaron hasta los jardines exteriores y la ojigris sacó su varita, apuntando directamente al elfo. Ya había llegado el momento de este, había vivido demasiado junto a la Tempestad y había echo demasiadas trastadas. - Elfo del demonio... -susurró la ojigris con odio-. Incarcerus -dijo, y las cuerdas ataron a este por las muñecas, tobillos y boca. Cayó al suelo al instante y la chica se acercó hasta él despacio y con una sonrisa maléfica en su rostro-. Donde demonios esta mi colgante -dijo mientras cogía al elfo de su ropa estropajosa y lo levantaba-. no te lo diré otra vez más... Donde esta -sus últimas palabras sonaron fuertes, llenas de odio y frialdad, los sentimientos que le tenía a aquel bicho eran demasiado horribles. Off: Me aburro y quería rolear xD Pueden unirse a la matanza del elfo /o/

Mery Anne Haughton <<¿Un elfo? Creía que tendrían más clase por estos lugares...>> pensó la pelirroja mirando con desprecio al elfo que acababa de abrirle la puerta. Entró despacio sin parar de mirar al elfo, aquellos horribles seres que parecían querer parecerse a los fenixianos, aunque no lo conseguían ya que los fenixianos eran una especia aparte fuera de todo lo normal en el mundo. - Vengo por aquí de visita, elfo... Comentó, observando la entrada de la mansión Ragnaventus. Era bastante bonita, asombrosa, aunque tampoco podía esperar menos ya que uno de los patriarcas era el maravilloso Hades a quien iba a visitar en aquel momento. - ¿Dónde se encuentra el señor Hades Ragnarok? Preguntó volviendo a fijar su mirada en el elfo. No tenía muchas ganas de esperar a que el miserable bicho pensara la localización de Hades y se hiciera el guía turístico por el castillo hasta el sitio. Suspiró mientras miraba el horizonte pensando si gritar o contenerse. - ¡¡¡HADEEES!!! ¡¡¡Baja aquí ahora mismo si no quieres que suba yo!!! Vociferó intentando aguantar la risa. Seguramente el chico bajaría muerto de la risa, o por el contrario, demasiado enfadado como para dirigirla la palabra a la mortifaga. La segunda opción era la más lógica, que iba a esperar de un mortifago, Nigromante, patriarca de una mansión y quien sabe que más.

Mery Anne Haughton La primera vez que iría de visita a aquella mansión, bueno, recordaba como mandó una vez a su elfina para una fiesta de la familia D'Aubigne, aunque de esa familia ya no había ni el recuerdo en ella. Sonrió mientras caminaba por las calles de Ottery, ahora tocaba ver la mansión Ragnaventus, al igual que a Hades, un gran amigo suyo, aunque lo quería tanto como a un hermano mayor, ese hermano mayor que nunca tubo. Se encontraba ya delante de la puerta de la mansión. Alzó su mano golpeando la puerta varias veces seguidas. Solo esperaba que alguien le abriera la puerta, aunque si podía ser el chico al cual le iba a dar una pequeña sorpresa, mejor. Suspiró, esperando poder entrar cuanto antes a la mansión.

Wina, elfina personal de Mery Anne Haughton La puerta del castillo Gaunt sonó tres veces, golpeada por alguna persona desde su exterior. Soltó la ropa de su ama encima de la cama y colocó su delicada y asquerosa ropa. Bajó las escaleras con cautela aunque al estar abajo del todo, recordó que podía haber aparecido allí con un simple chasquido de su mano. Abrió la puerta y para su sorpresa encontró a una amiga de la joven Haughton. Si no recordaba mal, ambas eran muy amigas, hasta el punto de parecer novias. Hizo una pequeña reverencia, dejando entrar así a la jovencita. - ¿Desea algo, señorita? ¿Busca a algún familiar en concreto? -comentó con su voz chillona y algo desagradable-. por cierto, me presento, soy Wina, elfina de Mery Anne Haughton -acabó, sonriendo para así enseñar sis pequeños y amarillentos dientes.

Mery Anne Haughton Alguien más llegó, llamando la atención de la pelirroja. Soltó una carcajada mientras se levantaba y les hacía una pequeña reverencia. Llevaban demasiado tiempo sin aparecer a molestar a los mortifagos y bueno, le había tocado a ella. Suspiró, levantando las manos, no tenía ganas de ponerse agresiva, irritada y defender su vida, al fin y al cabo todo acabaría igual. - Bien, ¿a donde se supone que tengo que acompañaros? -preguntó, con una sonrisa en su rostro. Sabía que aquello les iba a molestar bastante, y mucho más cuando querían matarla allí, delante de su madre y hermana, pero no iba a consentir eso, no iba a consentir que la mataran y si su sangre se derramara allí-. No tengo ganas de lios ni problemas, así que vosotras decidme donde ir y yo os sigo, igual, quiera o no, ya es una tortura dirigiros la palabra -finalizó, alzando sus hombros y torciendo su cabeza. Se quedó quieta en el sitio, mirando a las chica y esperando así que le dijeran algo. La única frase que pasó por su mente fue "Semper Fidelis" sabía que debía de luchar, pero no tenía ganas y menos con los humores que llevaba en aquel momento. Los hechizos comenzaron a dar en ella, pero ya era feliz, así que solo se quedó con una sonrisa en su rostro, esperando así que les molestara mucho más.

Mery Anne Haughton Rol con Sophie y Anne No quiso ni escuchar a su madre, ¿pillar un enfado? no quería volverse echa una furia en los primeros minutos de llegar al sitio, con su hermana mayor y su madre. Dirigió una mirada fría y distante a su madre, sabía perfectamente de lo que quería hablar y lo que había oído, ya sabía que iba a tener hermanos mellizos, pero no por la boca de Anne, cosa que hacía enfardar mas a la chica. - Hola -se limitó a decirle a su hermana. La miró y le dedicó una sonrisa falsa, para después caminar y sentarse en un sillón a escuchar la pequeña pelea que se disputaba entre las chicas. Si no había entendido mal, hablaban de su padre. Bueno, por aquella parte la mortifaga no tenía ningún problema ni nada en lo que protestar, pero ya llegaría su momento. Se recostó un poco en el sofá, alzando su cabeza para así dirigir una mirada al techo de la habitación. El echo de tener un hermano o hermana más era una gran mala noticia. Nunca había sido su ilusión tener hermanos, pero debía de aguantarse, y para su surte siempre los había conocido y tratado con ellos adultos, pero esta vez era un bebé lo que llegaba al mundo de la Haughton. - ¿Embarazada de los mellizos? -medio gritó, incorporándose. Su cabeza dio varias vueltas, pero se estabilizó de momento. Anne no tenía suficiente como estar medio irritada con su hermana Sophie, como para ahora mantener una pelea con la ojigris-. mamá, ¿desde cuando sabes que son mellizos? -dijo, con vis fría, desagradable y algo borde.

FICHA DE PERSONAJE http://www.renders-graphiques.fr/image/upload/moyen/nami_one_piece.png Datoshttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png Personales. Nombrehttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png del Personaje: Mery Anne Haughton Sexo: Femenino Edad: Joven, 17 años. Nacionalidad: Inglesa. Familia(s): Familia Haughton (Matriarca) Familia Gaunt Padre(s) Sanguíneo: Anne K. Gaunt Haughton. Dante E. Gaunt Padre(s) Adoptivos: Anne K. Gaunt Haughton Trabajohttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png: Oficina del Ministro de Magia. Oficina de Asesores, Gabinete de Protocolo y Prensa. Asesor Legal. Poderes Mágicos:-- Rango Social: Unicornios de Bronce. Bando: Marca Tenebrosa Rango dentro del Bando: Tempestad. Nivel de Poder Mágico: -- Puntos de poder en objetos: 20 Hechizos adicionales: -- Puntos de poder en criaturas: 20 Criaturas controlables en asaltos y duelos: -- Habilidades Mágicas: -- Conocimientos Especiales: - Historia de la magía - Leyes mágicas Perfil del Personaje: Raza: Vampira. Aspecto Físico: Mery es una chica de mediana estatura, con la piel clara, casi blanca y unos grandes ojos grisáceos, que al darles el sol, parecen casi blancos. Tiene una melena larga, la cual siempre lleva lisa, excepto en ocasiones especiales que se la puede ondular; de un color rojizo que llama mucho la atención. Sus curvas son muy marcadas y provocativas, cualquier prenda que se ponga la hace sexi. Suele vestir lo más cómoda posible, adorando los shorts vaqueros y camisetas anchas y cómodas. No obstante, si hay alguna ocasión especial, o desea arreglarse un poco, su forma de vestir, cambia totalmente. Se mantiene desdehttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png pequeña en una buena forma física, es ágil, rápida, y con una vista exquisita. En su forma de vampira, la ojigris viste un traje de cuero negro, su pelo recogido en una trenza y sus ojos, de un color rojo fuego. Sale su caza parahttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png el alimento de personas. Cualidades Psicológicas: Es una chica de caracter muy duro. Fria como el hielo y agresiva. Es orgullosa, sarcastica y muy vengativa. Es muy inteligente, sabe como hacer las cosas parahttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png dañar a las personas, o para que les agrade. Controla facilmente a la gente, y consigue hacer lo que quiera cuando quiera. Es muy caprichosa y consentida. Prefiere actuar con astucia que dejarse guiar por las emociones que casi nunca se atreve a mostrar. Distante y fría son los rasgos predominantes de su personalidad aunque sabe adaptarse a las situaciones siendo sociable con aquellos a los que estima. Historia: Mery Anne Haughton nació una fría noche de invierno en la localidad de Dover, Inglaterra, lugar que visita de vez en cuando junto a su madre, Anne K. Haughton. Desdehttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png pequeña, Mery hacía mucho deporte y le gustaba mucho salir a la calle y poder encontrarse con sus amigas. Desdehttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png que tiene uso de razón, siente una gran curiosidad respecto a la identidad de su padre sanguíneo, del cual su madre se niega en rotundo a hablar, y del cual la pequeña no conoce ningún dato. Su relación con su madre siempre ha sido muy buena, salvo porque ésta, en ciertas ocasiones, se ve obligada a alejarse de su hija durante algún tiempo. Cuando la madre se marchaba, Mery solía quedar al cuidado de algunos amigos de su madre, los cuales no simpatizaban con la pequeña. Es por esto que en una de sus prolongadas ausencias, Mery buscó refugio en la familia Diggory, donde Jessi R. Diggory la acogió con mucho cariño y la trato como si fuera su hija de verdad. Tiempo después, la chica comenzó sus clases en la Academia, lo cual coincidió con el regreso de Anne, su madre, quien había estado ausente por su trabajohttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png como árbitra de Quidditch. Al volver, la invitó a regresar con ella al Castillo Haughton, pero Mery decidió que quería pasar tiempo también con los Diggory, por lo que alterna las estancias en ambos lugares. Comenzó la Academia hace no mucho, y se esfuerza al máximo por obtener buenas calificaciones, pues quiere convertirse en una gran bruja, le cueste lo que le cueste. Una tarde, iba a ver a la familia Diggory, cuando se encontró con un hombre tirado en el suelo, lo miró y se rió de el, andando y sin ayudarlo. Cuando la pelirroja se dio la vuelta para mirar si seguía hay o no, el desconocido no estaba, por lo que se dio la vuelta y al instante, el desconocido, mordía su cuello. Ella reacciono rápido y se lo quitó de encima. En hombre salio corriendo con la boca llena de sangre, y Mery cayó al suelo y se desmayo. A las horas, la pelirroja despertó tirada en el suelo, y no se acordaba de nada, por lo que se levanto, un poco mareada, y siguió avanzando hasta llegar a la mansión Diggory, donde su madre la esperaba. Tras una tarde juntas, Mery volvió a su casa, y durmió hasta el día siguiente, que empezaría sus clases de Rol Básico. Pertenencias: Objeto Magico Legendario: -- Objetos Magicos: Objeto 1: Varita Clasificación: AA Puntos de poder: 20 puntos. Mascotas y Criaturas: Perro-Pastor Aleman: Llamada Robi. Es una perrita cariñosa, algo cabezota y muy nerviosa. Le gusta mucho estar con su ama, Mery, y si alguien intenta hacerle daño, la defiende. Le cuesta mucho acercarse a gente desconocida, ya que es poco sociable. Tiene un año, y la proporción de sus orejas, comparadas con su cuerpo entero, es algo descompesado. Clasificación: X -no mágica- Puntos de poder: 10 Boa constrictor: Macho, llamado Ka. Clasificación: X -no mágica- Puntos de poder: 10 Criaturas en la Reserva: Elfos: - Wina: Wina es una elfina de orejas gachas, ojos grandes y de color azabache. Es muy educada, aunque algo intrepida y demasiado cotilla. Es muy contestona. Tiene una voz bastante aguda. - Zeff: Zeff es un elfo mal educado. No soporta esperar y ser mandado, aunque el miedo que le tiene a Mery supera a cualquier otro. Tiene unos grandes ojos color gris merengue, orejas puntiagudas y una boca pequeña y con grietas. Tiene una voz grave y suele vestir con harapos que encuentra a su paso. - Nami: Nami es una elfina miedosa, contestona y atrevida. El encanta estar con las mascotas de su ama, y siempre esta metida en todos los líos. Tiene unos ojos pequeños color azul oscuro, unas orejas pequeñas y una boca grande. Viste con ropa gris y negra ya que siempre suele ir sucia. Licencias, Tasas, Registros: Licencia de Aparición: No. Licencia de Vuelo de Escoba: No. Registro de Elfos Domésticos: Registro de Zeff. Registro de Nami Otros Datos: Otros datoshttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png: *Adora la música, rasgo que ha heredado de su madre, siendo una gran trompetista, así como una excelente bailarina. *Le encantan los animales, en especial los perros. *Es buena deportista, le gusta mantenerse en forma. Además de baile, practica siempre que puede natación, deporte que adora. *Su alimentación de vampira se basa en sangre humana. Cronología de cargos: -- Premios y reconocimientos: -- Links de Interés Referentes al Personaje: Link al Perfil de Comprador MM: 169 Link a Bóveda Personalhttp://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png: Bóveda 98807 Link a Bóveda Trastera: -- Link a Bóveda de Negocio: Bóveda 100430 Negocio Puntos Cardinales Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda de la familia Haughton Link a Bóveda Familiar 2: Bóveda de la Familia Gaunt Dejo todo para actualizar :3 Lo más importante de todo es apuntar que soy matriarca Haughton ^^ Chao

Mery Anne Haughton Lo más esperado había llegado, un grito de su madre llegó hasta los oídos de la pelirroja para que momentos después la serpiente apareciera arrastrándose en dirección de la chica, acto seguido un sectusempra salió en dirección de ella. Los ojos de la pelirroja se abrieron de par en par, si Anne le había dado no sabría como reaccionaría. Por suerte, la serpiente estaba a salvo, y la ojigris la cogió y salió corriendo, más tarde se ocuparía de ella. El tiempo pasó, y una vez dejó a la serpiente en su habitación, bajó a donde estaba su madre y varias voces comenzaron entrar por sus oídos, era su hermana, Emmet y su madre, pero no tenía ni idea de que hablaban, pero algo hizo que ya supiera de que hablaban, ¿Mellizos? que era aquello, no podía ser, suficiente tenía con saber que tendría un hermano, con ahora enterarse de que serían dos. - Buenas -dijo mientras entraba donde estaban los chicos. Reconoció a su hermana Sophie y le dedicó una pequeña sonrisa para después mirar a su madre-. mami, ¿hay algo que no sepa? -preguntó aun de pie, no quería ser ella quien le preguntara directamente todo, aunque no sabía que era peor. Se quedó de pie observando a los tres integrantes en la sala, no sabía si hacía bien en estar allí, pero le daba bastante igual.

Mery Anne Haughton La busqueda de su serpiente estaba siendo un completo desastre, y su madre había desaparecido por arte de mágica. Dio una carcajada, "por arte de mágia" pensó, claro que había desapareciado, le tenía demasiado miedo a aquellos seres como para ponerse a buscarlos, seguramante se encontraría encaramada en una meso, o en el piso más alto del castillo Gaunt pensando que la serpiente no sabría subir las escaleras, pero, ¿no había penso que si sabe trepar por las barandillas? Ahora más que nunca tenía que tener el oido bastante fino para escuchar si la Gaunt gritaba, eso significaría que Ka le había echo una visita. - Ka, ¿donde demonios estás? -dijo la vampiresa echa una furia. Subió dos pisos y la serpiente no estaba. El cansancio se estaba apoderando de la joven por lo que decidió sentarse y esperar a un poco, con suerte, o la serpiente aparecería en las tres primeras escaleras de la planta baja, o Anne la encontraría, aunque la primera opción sería más agradable que cualquier otra.

Hola!! Bueno, hace tiempo me pasé para ser amiga de la familia, y ahora vengo a pasarme a decir en vez de ser amiga de la familia, me gustaría cambiar a ser hija sanguinea de Anne *-* Yo ya soy hija sanguinea de ella en la Haughton, pero como quiero tener una familia adoptiva (o en este caso sanguinea) pues me aso por aquí tambien xD se que es extraño, pero bueno, yo me entiendo, y Anne también xD eso es lo importante *-* Y bueno, solo eso, que quiero ser sanguinea de esta familia y ya esta, anteriormente lo dejé todo en la ficha cuando me pasé a ser amiga, así que no creo que haga falt ponerlo todo otra vez, si lo es, avisadme y yo me paso a dejarlo, que no me importa :3 Espero que estén las lineas y ya esta, ya me marcho besitos

Mery Anne Haughton Si, aquello iba a ser totalmente imposible y le tocaba buscar a la serpiente a ella sola. No era que le molestara, pero tampoco le agradaba demasiado buscar una serpiente mientras su madre se subía a una lampara para no verla. Por un momento una imagen de Anne haciendo aquello se dibujó en su mente, y sin poder evitarlo soltó una carcajada. Escuchó con atención a su madre quien dejaba más que claro que no iba a buscar al reptil. Suspiró aunque su momento de felicidad sin acordarse del engendro que la Gaunt llevaba en su vientre se desvaneció, ¿de verdad era necesario nombrar al bebé en cada momento? Si, sin duda si que era necesario, así comenzaba a acostumbrarse a el. - Bien, pues corre a esconderte, trepar paredes o cualquier cosa mientras yo busco a mi preciosa mascota -dijo con tono frió y distante. Le molestaba que su madre no ayudara en la búsqueda de un animalito indefenso, aunque todo era esperar a que se acostumbrara a el-. Seguro que sigue mis pasos y se enamora de las serpientes el ser que llevas dentro... -comentó sin darse cuenta de que su madre estaba subiendo ya las escaleras para hacer quien sabe que. "No tiene remedio..." pensó mientras se adentraba a la salas llamando a Ka.

Mery Anne Haughton Y como era una cosa que ya se veía venir, el rostro de la Gaunt cambió totalmente. Si, aquello que le pidió era imposible para su madre, como pedirle a ella que se hiciera cargo de unos niños pequeños. Su bello se erizó de solo pensarlo pero después se centró en la desaparición de su preciosa serpiente. - No grites mujer, no hace falta que ofrezcas tu ayuda de tal manera -dijo mientras su rostro cambiaba a expresar disgusto y a la vez algo de gracia. Era impresionante ver como su madre, una gran Mago Oscuro, una mujer que parecía valiente y sin miedo a nada, le temía a una serpiente inofensiva, y más aún, cuando pertenecía a el bando del cual el símbolo tenía una serpiente. Aguantó una carcajada que amenazaba con salir y se mantuvo derecha-. Mamá, es una serpiente inofensiva, no te va a comer ni nada por el estilo, no hace falta que escales paredes ni te cuelgues a lamparas... -comentó con un tono chistoso. Suspiró mientras pensaba donde podría estar Ka, aunque ningún sitio le vino a la mente, podría estar rondando por cualquier habitación, dormida en cualquier rincón o a saber que más cosas podría hacer. Al momento, después de que la voz de Anne parara de llamar a sus elfos, estos aparecieron para cumplir sus ordenes. Como era lógico, ella no iba a mover ni un solo dedo para buscar a la serpiente y, en aquel caso, mandó a sus elfos. La explicación que dio sobre la boa fue totalmente ofensiva, y a la vez graciosa. - Se llama Ka, mide aproximadamente dos metros y medio, sus escamas son verdes y negras y sus ojos color ámbar. No es ni fea ni asquerosa como dice vuestra ama, así que ya sabéis, a buscarla -comentó mientras se cruzaba de brazos. No se fiaba demasiado de que aquellos seres despreciables buscaran a su preciada serpiente, aunque no iba a estar ella sola por todo el castillo buscando, así que más le valía fiarse de estos-. ¿Te apuntas a la búsqueda, mamá? Será divertido, y te prometo que no dejaré que se acerque la serpiente a ti si la encontramos -dijo mientras la miraba con ojos inocentes, aunque convencerla para que hiciera eso iba a ser más que complicado.

Mery Anne Haughton Nadie bajaba las escaleras, ¿sus voces no eran demasiado fuertes como para que la escucharan? Suspiró mientras se levantaba con pesadez y miraba de un lado a otro en señales de algún familiar. Justo cuando iba a lanzar otro grito, mucho más fuerte que el anterior una voz familiar llegó a sus oídos. Era su madre, que claramente, no había bajado por las escaleras. ¿Tanto griterío para que su madre estuviera en una habitación paralela a donde estaba ella? - Mami, esto es horrible, Ka a desaparecido -dijo con un tono de voz desesperado. Entonces, justo después de decir esas palabras, recordó lo mucho que odiaba su madre a los reptiles. Agachó la cabeza, ahora no sabía si la desaparición era peor que los gritos que soltaría su madre al encontrar a la Boa-. Me tienes que ayudar a buscarla, por favor. Sabes lo mucho que la quiero y lo importante que es para mi -finalizó mientras ponía cara de niña pequeña para así intentar ganarse a su madre.

Mery Anne Haughton Recordó al momento que había traído consigo a su serpiente Ka, un preciosa Boa constrictor de tonos verdes brillantes y negros. Los ojos de esta no eran tan grandes como los de otros reptiles, aunque su color ámbar hacía que parecieran mucho más grandes. Sin prestar demasiada atención a su madre y el maravilloso fantasma, que parecía estar completamente enamora y seguro de conocer a la Gaunt, salió disparada escaleras abajo en busca de la serpiente. Aquello era un trabajo totalmente imposible. El castillo Gaunt era enorme, y una serpiente podría estar en cualquier sitio, y más siendo Ka, que era aventurera y seguramente estaría arrastrándose por los suelos de cada habitación. La desesperación de la pelirroja era tan grande que por un momento estaba mordiendo las puntas de su pelo, cosa que odiaba y no soportaba ver ni hacer. - ¡¡¡Mamá!!! -gritó con todas sus fuerzas. Si, aquel trabajo era para que lo buscaran todos los familiares, elfos y residentes del castillo, incluyendo al recién aparecido fantasma-. ¡¡¡¡¡Corre mamá, ayúdame!!!!! -siguió gritando totalmente desesperada mientras se colocaba de rodillas en la primera escalera para que así la escuchara con mejor calidad.

Mery Anne Haughton "¿Fantasmas?" aquellos seres incorpóreos y aterradores que encantaban a la pelirroja. Uno de sus sueños siempre a sido ver a un fantasma, tenerlo cerca y poder conversar con el, aunque si no conversaba no iba a suceder nada malo ya que tampoco sabía si estos le harían algo o no. Sacó su varita con cuidado mientras se colocaba tras su madre Anne y comenzaba a caminar hasta la habitación donde procedían los golpes. - Creo que por muchos hechizos que lancemos, el fantasma nos podrá... -dijo la Haughton emocionada pero a la vez algo asustada. Al momento de que Anne abriera la puerta de la habitación el ser incorpóreo apareció enfrente de esta. Las lagrimas saltaron de los ojos de la tempestad, su sueño acababa de cumplirse, un fantasma estaba a pocos metros de ella. "¿Anne Bonny?" repitió en su mente la pequeña mientras torcía su cabeza intentando pensar si ese nombre le sonaba o no, aunque estaba bastante claro que aquel nombre era la primera vez que lo escuchaba. Soltó una pequeña carcajada al ver el miedo que recorría el cuerpo de la Gaunt y solamente cruzó sus brazos para ver que más hacía aquel ser.

Mery Anne Haughton Últimamente, cada vez que veía a su madre Anne, la ojigris solo encontraba malas noticias, o entregaba malas noticias, y esta vez esperaba que hubiera algo bonito y que no causara problemas entre ambas ya que no solían acabar demasiado bien. Tras besar la mejilla de su madre, las palabras que salieron de la Haughton dejaron a la pelirroja estupefacta. ¿Embarazada? los pelos de la Tempestad se elevaron totalmente en solo pensar en tener un hermano pequeño. Parecía que iba a perder el conocimiento, el pecho se le encogió hasta parecer que no cogía aire, aunque rápidamente un tema distinto salió de la boca de la Gaunt. - Con que fantasmas... -dijo mientras pensaba que ella se convertiría en uno de esos al saber que un hermano pequeño venia en camino-. Que bien, son tan... encantadores esos seres -dijo mientras tragaba un gran nudo e intentaba olvidar la palabra "embarazada". Suspiró mientras miraba la enorme panza de la licántropa, aquello era como una pesadilla, un ser más en el mundo, y peor que todo eso, un hermano pequeño al que aguantar y cuidar-. ¿Puedo acompañaros en vuestra aventura? -se limitó a decir desviando la mirada hacía Santos y Emmet.

Mery Anne Haughton - Terracota, no me importa lo que tengas que limpiar, si quieres que se prendan fuego los cuadros o no, solo quiero saber donde esta Anne -se limitó a decir con frialdad. Aquella elfina no le caía nada bien y siempre hacía que su humor empeorara más de lo que estaba. Esta se dio la vuelta y comenzó a subir las escaleras ignorando a la Haughton y su elfina. Por un momento, quiso ir y estrangular a aquella elfina mal educada aunque se contuvo. Tras escuchar las ultimas palabras de Terracota comenzó a caminar hacía los pisos superiores junto con Wina. Los escalones se hacían eternos y la pelirroja comenzaba a estar cansada aunque eso no impidió que al pasar por el lado de la elfina de su madre le diera un pequeño pescozón y siguiera subiendo. Cuando iba por la sexta planta la ojigris escuchó ruidos en el siguiente piso, reconociendo la voz de la Haughton. Siguió subiendo para comprobar que era cierto, en la séptima planta había tres figuras a las que reconocía con facilidad, su madre, Emmet y Santos. A los tres los conocía bastante ya que dos de ellos eran sus alumnos en la casa de los tritones, y la otra era su propia madre. - Quiero decirte mamá que tienes una... -no pudo terminar la frase al ver la gran barriga que tenía Anne-. Mamá, sabía que te gustaban los bollos, ¿pero hasta tal punto? -dijo con los ojos totalmente abiertos mientras se acercaba a darle dos besos-. ¿Que sucede aquí? -finalizó viendo que cada persona tenía una cara de susto y a la vez de emoción que solo le faltaba tener un cartel en sus frentes diciendo "Tengo miedo pero estoy emocionado"

Mery Anne Haughton Una vez recuperada de el ataque fenixiano la ojigris tenía un lugar pendiente donde ir de bastante importancia. Apareció a las afueras del castillo Gaunt donde seguramente su madre Anne debía de estar haciendo cualquier cosa que no se le ocurría a la chica. Caminó con paso rápido hasta llegar a la puerta de entrada que se encontraba abierta. Sin pensarlo dos veces, empujó a esta entrando a la estancia. Para su sorpresa se encontró a dos elfinas hablando. Una de ellas le era muy familiar. Se acercó hasta ellas para comprobar que Wina se encontraba hablando con uno de los elfos de su madre. - Wina, detrás mía, acompáñame a hablar con Anne -dijo con frialdad dándole un pequeño empujón en la cabeza a esta. Después miró a la otra con asco-. Y bien, ¿donde se encuentra la señora Haughton? -preguntó con el mismo tono de voz. Los elfos para la ojigris eran seres despreciables, sin contar a los tres que le servían a ella, al igual que los odefos y los muggles, aunque no podía hacer que desaparecieran del mapa. Wina, elfina de Mery La pequeña estaba muy desesperada pero ya no le quedaban fuerzas como para buscar por todas las habitaciones a la madre de su ama. Otro elfo apareció justo donde estaba la pequeña. Se quedó observándola con asco y mirada de superioridad para después ponerse de pie y colocar su ropa andrajosa. - Soy Wina, elfina personal de la señorita Mery Anne Haughton, hija de Anne K. Haughton -dijo con tono orgulloso mirando a la otra elfina por encima del hombro-. Venia en busca de la señorita Anne para contarle una cosa que sucedió bastante importante, ¿donde se encuentra? -dijo para escuchar a alguien entrar por la puerta de entrada. Se quedó mirando a la figura femenina que se alzaba ante ellas para comprobar que era su ama. Le hizo una pequeña reverencia para no llevarse así ningún regaño y se colocó detrás suya con la cabeza gacha siguiendo las ordenes de esta.

Wina, elfina personal de Mery Anne Haughton. Con desesperación la pequeña elfina apareció en los jardines del castillo Gaunt donde la madre de su ama Mery debía de estar. Estaba totalmente nerviosa, sus diminutos pies tropezaban consigo mismos hacíendo que diera zancadas y alguna vez que otras cayera al suelo, aunque eso no impedía de que Wina llegara hasta la puerta del castillo. No supo si llamar o aparecerse dentro de este pero eligió la segunda opción sabiendo de que la señora Anne se enfadaria muchisimo con ella. Comenzó a dar vueltas por el hall sin saber que hacer, por lo que se enctó en el suelo de este para esperar a ver su tenía la suerte de que Anne apareciera y la viera.

Mery Anne Haughton Junto con su elfina Wina, la pelirroja se apareció en los jardines del castillo Gaunt, el cual su madre era matriarca. Su sonrisa estaba permanente en su rostro al ver el grandioso castillo en el cual Anne tambien residia. Suspiró mientras ordenaba a su elfina marcharse y después caminar con paso lento observando la fachada de la zona. Se acercó hasta la puerta de entrada del castillo alzando su mano para golpearla con fuerza para que así todos la oyeran y fueran a recibirla. Mientras esperaba a alguien, la ojigris echó unos pasos atras para mirar la entrada con más detenimiento toda la fachada, después se giró para mirar el jardín, todo tan verde, árboles altos alzandose en algunas zonas, todo maravilloso. Un elfo abrió la puerta del castillo permitiendole el paso así a la chica. Esta entró con total clama al sitio, sentandose en la sala de recibimiento de vesitas para esperar así a algún matriarca o familiar.