Cillian Haughton

Hito 1 (primer post de curación) Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn De nuevo, ¿qué es lo que pasaba con ellos? ¿por qué no podían avanzar? Cillian comenzaba a frustrarse, pero sabía que no podía rendirse, sabía que tenía que poner todo de su parte para lograr seguir avanzando hacia la siguiente fase de infiltración por que era ahí donde Ludwig y Ashley lo esperaban. Utilizo una vez más Curación sobre si mismo, curando algunas de sus heridas y luego se dirigió a sus compañeros. - ¿Creen que tiene algún sentido que estemos intentándolo tanto? - Cillian estaba seguro de que habría un premio para todos aquellos que lograran apoyar en recuperar el Ministeiro de Magia pero era agotador el tener que estar intentando una y otra y otra vez - Episkey - murmuró apuntando primero a Illidian en esta ocasión, logrando así curar algunas de sus heridas y luego se dirigió a Mica quien en esta ocasión parecía haber salido un tanto más ilesa - Episkey - murmuró apuntando a ella. Se sentó junto a la chica y comenzó a tararear una famosa canción de una cantante muggle mientras esperaba a que sus compañeros decidieran una vez más si debían continuar o no.

- ¿Tuviste que ver con uno de tus hijos? Cillian no estaba sorprendido, entendía aquella situación, el mismo había estado con su hermano y de no ser por que Louis había impedido su propio nacimiento también tendría una historia similar que contar. Negó, aquella sociedad en la que vivían era un poco rara, pero aún así era feliz en aquel lugar así que no se quejaba de nada. - Yo estuve con mi hermano por un tiempo, fue algo raro... Pero lo disfrute, no voy a negarlo - el tiempo seguía avanzando, pero a Cillian no le importaba, le gustaba estar en aquel lugar a solas con Ludwig -. El murió hace un par de años, él y mi madre. Pero no quiero hablar sobre esta tema, ¿esta bien? Se acurrucó un poco más en Ludwig y pensó en que quizá el futuro a su lado sería mucho más sencillo de lo que su vida había sido hasta ese momento. Cillian no era una persona a la que se le pudiera calificar como mentalmente sana, pero aún así intentaba mantenerse tranquilo. Dejo escapar un pequeño suspiro y después volvió a besar al rubio. - ¿Crees que sea hora de volver dentro? Quizá alguien nos este buscando. @ Ludwig Malfoy Triviani

- Creo que es mejor que volvamos a la mesa - comentó el Ryddleturn a Ashley. Tomó uno de los pastelillos y le indicó a la chica que lo siguiera. ¿Qué se estaría tramando en aquella mesa? A Cillian le costaba mezclarse en cualquier tema político y prefería sentirse apartado pero cada vez se sentía más obligado a tener que participar de alguna manera. Sus pasos eran lentos, retardando su regreso lo más que le fuera posible pero al final llegó de nuevo junto a Ludwig. - ¿Interrumpimos algo importante? - lanzó la pregunta al aire, esperando que ninguno de los presentes se molestara por aquella interrupción - Te he traído algo de postre - le murmuró al oído a Ludwig mientras tomaba asiento a su lado una vez más, por su parte Ashley podía tomar el asiento que quedaba vació a un lado de Cillian, si es que quería involucrarse en aquella platica. Intentó seguir la platica pero estaba lo bastante perdido como para no entender ni una sola palabra de lo que hacían así que simplemente se quedo en silencio durante un par de segundos. ¿Qué es lo que seguía en el plan para aquella noche? Estaba seguro de que el discurso que el rubio había dado no era lo único que tenían preparado y luego estaba el que Ashley le había platicado algo sobre una subasta. @ Ashley Emily Black Lestrange M. @ Ludwig Malfoy Triviani @ Illidan Black Lestrange @ Mica Gryffindor @todoslosqueesténconellosenlamesa.

@ Adrian Wild Únete al rol, Adrián, únete. Aún te queda mañana y puedes sacar buenos galeones de ahí. Yo los necesito para mi próximo libro porque me he quedado pobre ;o; pero ya se viene la gala también así que a ver que me gano ahí para poder seguir avanzando. Y sí, ayer nos emocionamos y por eso avanzamos tanto y pues también porque pensamos que será más como una mazmorra pero ya nos dejaron claro ahí que no... Así que ahora toca ir lento, pero seguro. Espero ver tu rol por ahí, Adrián. O igual a ver cuando roleamos en otro lado.

Hito 1 Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn Estaba listo. Observó a sus compañeros esperando que aquella fuera la última vez que tuvieran que volver a ese callejón para curarse y después volvió su vista al Ministerio de Magia. ¿En qué parte se estaría ocultando El Inquisidor? Seguro había tomado la oficina de Sagitas o algo por el estilo, es lo que hacían los villanos en todas las historias. Desde su posición pudo observar cómo otras dos brujas luchaban contra aquellas abominaciones y espero que tuvieran la suerte de acabar con ellas y adentrarse al ministerio. — Hora de intentarlo de nuevo. Una vez más estaba en la calle frente al Ministerio, está de nuevo se encontraba infestada por aquellas terribles abominaciones, lo primero que hizo fue bloquear el avance de algunas de ellas invocando una muralla que termino bloqueando su avance hacia ellos al tiempo que murmuraba - Forticum - acto seguido apunto a una de las abominaciones que había logrado acercarse hasta ellos y murmuró - Babosas - logrando que esta comenzará a tener problemas intestinales con babosas - Deprimo - murmuró apuntando al suelo debajo de otra de las abominaciones creando una agujero en el que la misma termino atrapada. - Creo que esta vez tendremos más suerte. O por lo menos eso esperaba, una de las abominaciones estuvo a punto de estar lo bastante cerca del Ryddleturn pero este logró utilizar - Obliviate - logrando que esta olvidara la razón por la que estaba ahí y dejándola bastante desorientada - Proyección Mágica - pensó y al instante un auto comenzó a volar por los aires golpeando a varias abominaciones a su paso - Flechas de fuego - invocó y de su varia salieron una andanada de filamentos de fuego que dieron de lleno contra un par de abominaciones y por último utilizó - Seccionatus - invocando así doce medias lunas cortantes que igualmente lograron dejar malheridas a varias abominaciones.

Hito 1 (post de curación dos) Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn Los hechizos de curación que sus compañeros utilizaron sobre él, le habían sido de bastante ayuda. Cillian estaba ya un poco mejor y casi listo para volver a luchar contra aquellas abominaciones que custodiaban la entrada del Ministerio. ¿Realmente valía la pena que arriesgaran su vida de aquella manera para vencer al hombre que había tomado el Ministerio de Magia por la fuerza? Se dejó caer un momento sobre el piso del callejón, no tenía muchas ganas de continuar, pero si de volver junto a Ludwig y Ashley. Sabía que no era tan poderoso como para cuidar de ellos, pero haría lo que estuviera en sus manos para volver junto a ellos y apoyarlos en su avance. Volvió a levantarse y apuntó de nuevo a Mica con su varita — Episkey —murmuró, logrando así curar las heridas restantes en su cuerpo y acto seguido hizo lo mismo con Illidian — Episkey. Volvió de nuevo al margen de la calle, estaban casi listos para volver a la acción o por lo menos eso pensaba él. — ¿Una vez más antes de la boda? Saldremos de esta, no tengo pruebas pero tampoco tengo dudas.

Hito 1 (post 1 de curación) Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn Si bien Cillian y su grupo se habían adentrado ya al Ministerio detrás de otro grupo de magos que habían logrado vencer a las abominaciones, habían terminado teniendo que volver al principio. Se encontraban bastante malheridos de su último encuentro con las abominaciones y habían olvidado curarse, lo cual les obligaba a retroceder en su avance. Cillian no quería separarse de Ludwig en aquel momento, pero no tenía otra opción y sería demasiado egoísta de su parte si lo obligaba a volver junto a él fuera del Ministerio de Magia así que simplemente se despidió de él con un beso y le pidió que tuviera cuidado, ya se reencontrarían más tarde. Al llegar de nuevo al callejón utilizó primero Curación en él, necesitaba curar sus heridas para lograr ayudar a sus compañeros. Una vez comenzó a ver como algunas heridas comenzaban a cerrarse se dirigió primero a Mica — Creo que su boda terminará siendo en este mismo callejón —bromeó al tiempo que apuntaba con su varia hacia uno de los brazos de la chica y murmuraba —Episkey. Y acto seguido se dirigió hacia la posición de Illidan al que podía notar ya un poco cansado de toda aquella situación, no era el único. Apuntó con su varita al rostro, un poco malherido, del chico y murmuró — Episkey.

Buenas tardes. Creo que no tengo dudas sobre como funciona el rol así que no vengo a dejar alguna pregunta, más bien sería una sugerencia. Entiendo lo que se busca con la limitación de que todos siempre en un mismo hito para que lleguemos todos juntos al final de la historia, pero... ¿Qué pasa si el único momento que yo, Cillian, tenía era el domingo por la noche libre y estaba interesado en el rol? Los que ya estamos en él no teníamos la intención de dejar a nadie atrás, incluso se invito a quienes estaban activos a esa hora. Teniendo el supuesto de que mi único día libre era el día domingo, si solo terminaba el hito 1, si no tenía más tiempo libre en los días siguientes me perdería las demás oportunidades de jugar ya ganar unos cuantos galeones (?) que nunca le vienen mal a nadie. Así que, seguir la regla establecida de que si termina un hito, los demás deben sumarse al siguiente que este en curso al momento de entrar o volver al rol me parece bastante limitativa. Estuve leyendo los hitos y desde mi punto de vista, creo una buena opción para que todos participemos será solo limitar la entrada al Hito 1 y al Hito 5. Explico, el Hito 1 prácticamente se cumple al liberar la entrada (ya sea eligiendo la primera opción o sacando un buen dado en la otras dos) y el equipo que llego primero o tuvo la suerte de su parte ya tiene esa ventaja. Así que la entrada al Ministerio de Magia esta abierta, cualquiera puede entrar. Al Hito 2 podría entrar cualquiera a partir de ese momento, teniendo que cooperar para la cadena de 25 roles en curso (se podría implementar el que aparte de mencionar el hito se especifique el conteo), cada que una cadena termina comienza otra y así hasta que no haya más usuarios interesados en el rol. El hito 3 y 4 no tendría mayor problema, solo sería seguir con la historia de acuerdo a lo planteado. Mi propuesta es que del hito 2 al hito 5 sea libre la entrada para cualquiera que se pueda y quiera sumar. Hasta estar todos en el cuatro luchando con las abominaciones. Y recién al hito 5 darle una fecha de inicio, no sé, el próximo fin de semana o así, dándole a todo usuario en el foro la posibilidad de realizar por lo menos alguno de los hitos 2 al 4 y ahí ya partir todos a acabar con el inquisidor teniendo un solo final (?). No es una idea tan pulida, se me ocurrió de camino al trabajo y seguro que hay algunas mejores. Pero la planteo aquí, @ Mackenzie Malfoy para que la consideres, que igual sé que tomaras la mejor decisión para el rol. Saludos.

@ Kamra Ashryver D. Ya ni me acuerdo de que serie hablábamos y como vengo rapidito antes de entrar a una reunión del trabajo, pues lo mejor es que no busque porque no me da tiempo xD. @ Ashley Emily Black Lestrange M. Misma respuesta que para Kam (?), ya no sé ni de que estabamos hablando pero lo bueno de esto es que siempre podemos sacar un nuevo tema para seguir aumentando el contador. @ Adrian Wild La que nos montamos anoche en ese rol que ya hasta llegó administración a poner un alto para replantear el juego (?) jejeje, bueno es que no es que hayamos hecho mal, simplemente nos prendimos un poco con el juego.

Hito 2 Italiano, la mayoría de los que estaban ahí intentando salvar al Ministerio Mágico Británico pertenecían al Ministerio de Magia de Italia, pero aún así estaban demasiado comprometidos con la misión. Cillian seguía de cerca el camino de todos sin despegarse de Ludwig ya que a su lado se sentía seguro y si bien había comenzado esa misión sin él, ahora estaba ahí justo a su lado. Y Ashley también lo estaba, pero ella iba un poco más adelante de ellos bastante concentrada en sus pasos. A Cillian el Ministerio de Magia nunca le había parecido tan enorme como aquella noche, caminaba y caminaba… Y no parecían avanzar demasiado, continuaban aún en el área custodia por los Redentis. — ¿Crees que salgamos vivos de esta? —pregunto a Ludwig en voz baja, no quería ser escuchado y poner en riesgo al grupo que avanzaba lento pero seguro, en percepción del Ryddleturn—. Es raro que Sagitas haya permitido que alguien se entrometa así en sus dominios. Si bien él Ryddleturn no aprobaba del todo la forma de gobernar de la bruja, lo cierto es que sabía que gracias a ella es que el Ministerio de Magia en Londres se mantenía en pie. Algo comenzó a molestar su visión, ya que pegaba directamente a sus ojos, era un rayo de luz.

Hito 2 Cillian, si, ese era su nombre. Y en aquel momento seguía al grupo hacía el ascensor. Ludwig no perdía ni un segundo, aún cuando sabía que estaban en peligro hacía lo posible por demostrarle a Cillian que gustaba de él así que cuando sintió la mano del rubio sobre su trasero no pudo más que sonreír. Quería responder de alguna forma, pero sabía que si se sobrepasaba aunque fuera un poco terminaría por lograr que los descubrieran así que simplemente se limitó a devolverle el beso a su amado. ¿Cuánto faltaba para lograr superar a los Redentis? Aquellos magos eran sin duda un dolor de cabeza, ¿por qué apoyaban al inquisidor? ¿Acaso le debían algo? No lo sabía y aunque lo supiera ni lograría entenderlo. No quería vivir en un mundo liderado por alguien como aquel hombre que había convertido el ministerio en aquello. Avanzaba lento pero seguro y a cada paso que daba se sentía un poco más seguro de estar casi por terminar con aquel tramo custodiado por los Redentis, ¿que vendría después? ¿qué más tendría preparado el inquisidor los magos que intentarán derrocarlo de su intento por hacerse del Ministerio de Magia cuando ni siquiera era realmente un mago? Si no que había tenido que robar su magia actual de alguien más. En su avance Cillian pudo notar que había una parte del Ministerio que no era más que escombro.

Hito 2 Trasero. Era lo que tenía frente a él y por suerte era el Ludwig así que su avance a través de las inmediaciones del Ministerio en medio de toda aquella oscuridad podía decirse que era hasta agradable. Si bien él y su grupo no habían logrado acabar con las abominaciones de la entrada, alguien más lo había hecho y por suerte para ellos eran viejos conocidos. Cillian no comprendía porque era tan necesario tener tanta vigilancia en aquel lugar, pero estaba casi seguro de que todo aquello no era más que puro teatro y el inquisidor era alguien bastante fácil de vencer. Si, claro como si eso fuera cierto de alguna forma. Avanzaban lentamente, pero era la única forma si no querían ser descubiertos por los Redentis que custodiaban el lugar. ¿Por qué se había metido en esto? Estaba un poco más animado al principio pero a cada minuto que pasaba estaba cada vez más cansado y lo único que quería era encontrar aquel inquisidor y acabar con él para poder volver a su hogar… o quizá al de Ludwig. Y entonces algo llamó su atención, ¿qué era eso que se movía a un par de metros del grupo? ¿Era acaso una sombra?

Hito 1 Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn Salió de nuevo a la calle, una vez más tenía que luchar contra aquellas criaturas, pero esta vez tenía que ser más rápido. Esta vez tenían que lograr acabar con ellas y seguir avanzando para no quedarse atrás en la lucha contra el inquisidor. Apunto de nuevo hacia una de las abominaciones – Expulso – murmuró al tiempo que apuntaba hacia uno de los autos que estaba en la calle, logrando que este golpeara a una de las abominaciones – Babosas – gritó mientras apuntaba su varita al segundo, logrando que este comenzara a vomitar babosas – Proyección Mágica – pensó y otro de los coches del lugar salió volando contra una tercera abominación. ¿Acaso en esta ocasión tendrían algo más de suerte? Esperaba que sí, necesitaba que la tuvieran para seguir avanzando, pero algo parecía no estar de su parte aquella noche. Apunto con su varia una vez más hacia otra de las abominaciones y murmuró – Tarantallegra – logrando que esta comenzara a bailar de forma totalmente descontrolada y luego dirigió sus ataques hacia una abominación diferente – Seccionatus –soltó y de su varita salieron doce medias lunas cortantes que dejaron bastante malherida a otra de las abominaciones – Obscuro – murmuro una vez más para que de su varita saliera una cinta oscura que fue a dar a los ojos de otras de las abominaciones dejándola temporalmente sin vista. Por segunda vez aquella noche terminó sus ataques con un – Obliviate - que dejo a la séptima abominación en su camino sin recuerdo alguno de lo que estaba haciendo en aquel momento.

Hito 1 (post de curación 2) Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn - ¿Y de donde es que salió este inquisidor? – Cillian se había perdido demasiado tiempo del mundo mágico así que no tenía ni idea de quien se trataba ni porque estaba tan interesado en tener tanto poder. Volvió sobre sus pasos y volvió a utilizar Episkey sobre Mica y un último Espiskey sobre el mismo, con eso estaba listo para volver a la batalla. Así que ahora solo faltaba la decisión de sus compañeros para seguir avanzando. Cillian quería que esa boda de la que habían hablado en el anterior descanso se volviera una realidad. Sí, el mundo mágico estaba lleno de eventos últimamente, pero ninguno de ellos era una boda. Y aunque sabía que no sería la suya, aún no, le emocionaba que quizá aquello terminara por darse en algún momento. Hora de volver a la lucha, una vez, que cansado. Pero alguien tenía que salvar al mundo mágico… Por lo menos en Londres y aunque sabía que para ese momento ya había más magos en la lucha, quería por lo menos seguir intentando hasta que sus fuerzas se lo permitieran. Ludwig estaba ahí, solo que no luchaba en su equipo.

Hito 1 (post de curación 1) Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn Una vez más habían sido vencidos por aquellas abominaciones y Cillian comenzaba a cansarse, parecía imposible ganarles y por cada una de ellas que eliminaban aparecía una nueva. Cillian corrió de nuevo al callejón de hace unos minutos, esperando que sus compañeros vinieran detrás de él. Y así fue, ellos llegaron justo un segundo después de él así que primero utilizó Curación en él y acto seguido se acerco a cada uno de ellos. - ¿Creen que debamos seguir adelante? Parece bastante difícil y he visto que otras personas se han unido a la lucha, creo que alguien se ha encargado de dar aviso a toda la comunidad mágica -se detuvo junto a Mica y utilizó un Episkey que logró curar algunas de sus heridas y acto seguido siguió su camino hacia Illidian – aun puedo seguir, pero creo que no por mucho tiempo. Siento que con cada una de esas abominaciones que lucho pierdo un poco más y más de energía. Llegó hasta Illidian y utilizo el segundo Episkey para curar algunas de sus heridas, de seguir así terminarían muertos antes de lograr avanzar hacia el interior del Ministerio.

Hito 1 Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn Cillian salió de nuevo al callejón, donde las Abominaciones seguían protegiendo la entrada del Ministerio. ¿Lograrían cruzarlas esta vez? Cillian se sentía animado en el tema así que dirigió sus pasos hacia la entrada, para posicionarse en un sitio que le permitiera luchar contra un par de abominaciones sin tener que moverse demasiado. Apuntó con su varita a la primera de las abominaciones – Obscuro – murmuró y una cinta oscura surgió de la varita y fue a dar hasta los ojos de la primera abominación, tapando así su vista y logrando que su avance se viera interrumpido – Tarantallegra – murmuró ahora hacia la segunda abominación – logrando que esta bailara de forma completamente descontrolada – Seccionatus -soltó apuntando a la tercera logrando que doce medias lunas cortantes salieran de su varita y fueran a dar contra la tercera abominación, creándole varias heridas. - Deprimo -murmuró una vez más logrando crear un agujero en el que una vez más cayo una de las abominaciones. Tenía que ser más rápido, debía avanzar hacia a la entrada y así lo hizo, aún quedaban un par de aquellas cosas más así que seguía con su varita en guardia – Cineade – murmuró logrando crear una nube de gas alrededor de una de las abominaciones que estaba por el lugar, el cual dañaría sus vías respiratorias. Estaba ya a un par de pasos de la entrada del Ministerio una vez más. ¿Tendrían suerte esta vez? Apunto con su varita una en contra de una abominación – Babosas – soltó, ocasionando que aquel mismo instante comenzará a vomitar babosas y justo entonces apareció una abominación más – Obliviate – murmuró hacia la misma, logrando así que esta olvidara porque estaba en aquel lugar aunque lo más seguro es que el efecto de aquel hechizo no durara demasiado sobre esas cosas y por ello debían ser rápidos.

Hito 1 (post dos de curación) Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn ¿Matrimonio? Sonrió. Pensó por un momento que estaba haciendo un mal tercio en aquel lugar, pero no le importo. Ya estaba ahí, había acudido al llamado de la Gryffindor y llegaría hasta donde ella estaría dispuesta a llegar. Aunque sí, deseaba que Ludwig estuviera ahí también, para el también poderle matrimonio a la persona más importante para aquel en el mundo. - Tenemos que poner todo de nuestra parte para vencerlos – si bien Cillian pensaba que más bien eran aquellas abominaciones las que les estaban partiendo la cara a ellos, no quiso contradecir al Black Lestrange, era mejor continuar con aquellos ánimos arriba. Se puso de pie, por su parte sentía que sus heridas habían quedado curadas por completo. - Entonces, ¿si se casan puedo ser el padrino? Igual me conformo con ser solo el pajecito y estar en el evento. Tomó su varita una vez más y se dispuso a volver al lugar de la pelea. ¿Cuántas abominaciones más habría esperándolos? Tenían que ser fuertes y aguantar hasta lograr atravesarlos y adentrarse en el Ministerio de Magia. Seguro dentro habría algunos problemas mayores que afrontar, pero eso ya lo verían más tarde. Comenzó a caminar de nuevo hacia la calle que se dirigía al Ministerio y se detuvo solo a un par de pasos del final de callejón. - ¿Vienen o necesitan un segundo a solas?

Hito 1 (post 1 curación) Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn No habían logrado salir victoriosos de aquella primera lucha, las abominaciones parecían no tener fin aún cuando al principio solo parecían ser 20 de ellas. Cillian ahogó un grito de dolor sentir el primer ataque. Y luego vino el segundo, de seguir así perdería en aquel lugar así que tenían que huir momentáneamente de la lucha, necesitaba curarse para volver a la acción. Fue detrás de sus compañeros, al llegar fue Mica quien se encargo de curarlos, por lo menos aquellas heridas que parecían más graves. ¿Qué debían hacer ahora? ¿Volver a la lucha? – Curación – murmuró apuntando su varia hacia el mismo y después utilizo un Episkey en Mica y otro Episkey en Illidian, logrando así que estuvieran un poco más preparados para volver a la acción. - No creo que sea buena idea retirarnos, debemos llegar hasta el final de esto… ¿Qué va a pasar con el mundo mágico si dejamos que el inquisidor avance más con su plan? – no entendía nada, pero sabía que de dejar que toda aquella historia avanzara estarían un poco peor de lo que estaban actualmente. Desvió su mirada hacia Illidian y luego volvió a centrarse en Mica, ¿estarían de acuerdo ellos en seguir? Mica parecía segura e Illidian, Cillian estaba casi seguro de que aquel hombre iría a donde la Gryffindor fuera.

Hito 1 Illidian Black Lestrange, Mica Gryffindor, Cillian Ryddleturn Era la segunda vez que era llamado por Mica por medio de su patronus, aquella leona que apareció esa noche tan de repente mientras Cillian intentaba dormir un poco. Según había entendido, algo pasaba en el Ministerio de Magia… ¿No se suponía que las elecciones estaban por comenzar? Suspiró, no podía ignorar el llamado así que le llevo solo un par de minutos prepararse y aparecer en el lugar indicado por Mica, el cual se encontraba a solo un par de calles del Ministerio. Apenas aparecer, Mica les explicó un poco más sobre lo que sucedía en aquel lugar y sin demorarse demasiado, se dirigieron al Ministerio. Cillian supuso que aquella noche sería todo menos tranquila, ya que mientras se adentraban en las calles cercanas al Ministerio, unos extraños seres que parecían humanos caminan de un lado a otro, al parecer custodiando algo. Les basto encontrarse frente a la calle entrada del Ministerio para percatarse de que lo que custodiaban era justo aquel lugar. ¿Qué es lo que estaba pasando ahí? ¿De verdad el inquisidor tenía tanto poder como hacerse del Ministerio, así como si nada? Negó, no entendía nada de aquello, pero necesitaba ponerse en guardia ya que aquellos extraños seres llamados Abominaciones por su creador comenzaban a acercarse a ellos. En total eran 20 abominaciones con las que tendrían que luchar si querían adentrarse al Ministerio y seguir avanzando. Cillian se hizo de su varita y apuntó a la primera de las Abominaciones que se cruzó frente a él – Flechas de Fuego – murmuró, logrando que una andanada de filamentos de fuegos salieran disparados uno tras otro en contra de aquella cosa – Cinaede – mencionó apuntando a la segunda abominación logrando que alrededor de la misma surgiera un gas invisible que dañaría sus vías respiratorias – Tarantallegra – soltó apuntando a un tercero e inmediatamente la abominación comenzó a bailar a un ritmo acelerado. Solo faltaba un poco más, a su lado Mica e Illidian hacían lo suyo luchando contra aquellas abominaciones – Deprimo – dijo apuntado con su varita al suelo bajo debajo de una de las abominaciones creando un agujero en el que este cayo – Forticum – invocó, logrando que una muralla atrapara a otra de las abominaciones ya que esta apareció de un lado a otro de la calle antes de que esta lograra cruzar ese límite – Babosas – murmuro apuntando a otra probando que una de las abominaciones comenzara a vomitar babosas, impidiendo así su avance – Seccionatus – murmuró contra la última abominación en su espacio haciendo que de su varia salieran doce medias lunas cortantes que lograron hacerle bastante daño a aquel extraño ser. Cillian no tenía ni idea de que en realidad estaba dañando a humanos inocentes, pero la realidad era que en aquel momento era su vida o la de ellos.

Una vez más. Cillian no había conseguido crear un vinculo con aquel libro, le costaba bastante aprender los poderes y habilidades que este tenía para brindarle. Pero había decidido intentarlo una vez más, necesitaba seguir avanzando así que apareció justo en el lugar se se le había indicado, en algún punto de la luna. Ante él había un palacio, pero contrario a lo que él hubiera esperado se encontraban en medio de una selva. — ¿Me recuerdas, Khufu? Estaba seguro de que no era así, los Uzza los creían seres insignificantes así que lo más seguro es que se hubiera olvidado de Cillian apenas terminar su anterior prueba. Para el momento en que llegó, Alyssa ya se encontraba en el lugar, Cillian había tenido pocas interacciones con ella y la realidad es que nunca habían cruzado palabra alguna así que este simplemente se limito a saludarla. — ¿Qué tiene preparado en esta ocasión para nosotros? —Si bien las ideas de Cillian estaban un poco más ordenadas en aquella ocasión, seguía siendo la misma persona—. Espero que sea algo sencillo, sabes que no soy bastante bueno con esto de crear un vinculo con sus libros, pero quiero intentarlo.

— Más tarde, más tarde... Cillian estaba casi seguro de que no tendrían aquella conversación ya que estaba casi seguro de que no le caía del todo bien a la bruja. Aún así se posicionó a su lado en medio de aquel lugar. Observó como una muralla se levantaba entre ellos, limitando así las opciones de que de Darla y Cillian para atacarlos así que este último tuvo que pensar un poco más sobre la acción que debía realizar a continuación. — Silencius —murmuró apuntado hacia la posición en la que estaba Matteh al momento de levantar la muralla, poco antes de que este lograra conjurar algún otro hechizo, dejándolo así mudo durante un par de segundos lo cual afectaría a su siguiente acción [Morphos]. Así que fuese cual fuera el plan del Black tuviera planeado para atacarlos, este se había visto impedido gracias a la acción del Cillian. Se acercó un poco más a Darla, ¿qué debía hacer ahora? Cillian observó el escenario a su alrededor y no puedo encontrar nada que le fuera realmente de ayuda. No pensaba tan rápido en aquel tipo de situaciones así optaba siempre por acciones que resultaban bastante simples pero que siempre ayudaban de alguna forma. — Floreus —conocía bien la posición del Matthew así que al igual que el silencius aquel efecto lograría impactar haciendo así que de la varita de este saliera un ramo de flores en lugar de su próximo hechizo.

¿Podía existir algún momento más perfecto que ese? Cillian estuvo a punto de declararse a Ludwig justo en aquel momento, pero se resistió. Sobre todo por que quería continuar con aquella platica, conocerse mejor para lograr así sentirse un poco más cercano a él. Respondió al beso del Malfoy, le encantaba cada vez que Ludwig lo besaba, aquel beso duró bastante tiempo y Cillian no tuvo problema alguno con ello. — ¿Hijos? No... —técnicamente había tenido uno, pero Cillian no podía siquiera recordarlo ya que Louis se había encargado de impedir su propio nacimiento—. La verdad es que nunca he sido tan bueno para eso, supongo que sería un pésimo padre. Sabía que Ludwig tenía a Ashley así que devolver la pregunta era un tanto sin sentido pero aún así lo hizo, pero con una pequeña variación —. ¿A parte de Ashley tienes algún otro hijo? —. Si era así, Cillian estaba interesado en conocerlos. Sonrió, ¿qué más preguntas podía hacer en aquel momento? No habían preguntado sobre sus padres, pero realmente él no quería hablar sobre ese tema ya que era un poco delicado. Cillian había perdido a su madre y a su padre nunca lo había conocido así que lo mejor era dejarlo de lado. @ Ludwig Malfoy Triviani

Hormiga 247 Primero la segregación, luego las limitaciones... ¿A dónde quería llegar Sagitas con todo aquello? Hormiga 247 no lo entendía, pero estaba segura de que aquella mujer tenía un plan en mente. Uno mucho más grande que el solo lanzar aquellos edictos cada cierto tiempo limitando y segregando a los humanos bajo su cargo. Hormiga 247 no aprendía, sabía que la última vez que había estado cerca de Sagitas, ella había notado su presencia y aquello las ponía en peligro así que aquella vez solo se limito a enterarse de los pormenores de aquel nuevo edicto y después puso todas sus patas en movimiento para buscar a Hormiga 505. — Creo que comienzo a entenderte... —Sí, hormiga 247 no tenía sus ideas del todo claro, desde que había bebido aquella poción sus pensamientos eran cada vez más confusos, algunas veces estaba de acuerdo con hormiga 505 y otras simplemente no entendía porque ella no quería entender un poco más a los humanos para poder imitar aquello que pudiera serles de ayuda—. No la entiendo, 505, no entiendo a Sagitas para nada. ¿Qué busca con todas esas reglas extrañas, por qué no puede ser igual que nuestra reina que lo único que busca es el bienestar de todas en e hormiguero?

Ciertamente no espera que Illidian aceptara así que quedo un tanto sorprendido en que no pusiera resistencia a su propuesta de infiltración. — ¿Y por que supones que soy un experto en el tema? —sí, Cillian conocía ese mundo, se sentía a gusto en él pero nunca había utilizado un vestido. No pensaba hacerlo en aquella ocasión, era bienvenido en aquel lugar sin problema alguno y de hacerlo seguro que levantaban algún tipo de sospecha—. No... No alcanzó a negarse a la petición de Illidian hacia Santagio de ir a su lugar para utilizar su ropa, Cillian no conocía a la agente pero por su aspecto podía deducir que toda su ropa sería igual de aburrida. En fin, tendría que apañarselas ya que en algún lugar aparte de Amy solo había otra mujer, que parecía estar siempre de mal humor y que en aquel momento vestía completamente de negro. Ninguna de las dos tenía lo que necesitaban, pero en fin... Para ese momento ya estaban en la habitación de Santiago y la chica parecía bastante entusiasmada ya que ponía todas sus pertenencias a disposición de Cillian que no pudo evitar realizar una mueca de desaprobación al observar el armario de la chica. Ahí no había nada que les fuera a hacer realmente de ayuda así que tendría que recurrir a algún hechizo para alterarlos momentáneamente. Le llevo poco más de una hora el que Illidan estuviera perfecto y eso por que utilizó magia en el proceso, pero al final estaba conforme con el resultado. Que Cillian no se hubiera vestido nunca en su vida, no quería decir que no sabía como hacerlo. — Creo que estamos listos. @ Illidan Black Lestrange @ Ludwig Malfoy Triviani

— Ojala yo me hubiera quedado con el dinero y las propiedades de Juliene —no pudo evitar quedarse callado. Si bien su relación con aquella vampiro había evolucionado bastante con el paso del tiempo para que vivieran tantas cosas juntos y aunque se odiaran en un principio al final de todo se habían convertido en una parte importante de la vida del otro. Juliene, Juliene... ¿Qué estarás planeando justo en este momento? Pensó mientras disfrutaba de aquel momento. Juliene estaba cerca, podía sentirlo y aquel detalle que le había enviado no hacía otra cosa que confirmarlo. — En un principio esa fue la razón por la que me case con ella, quería su dinero. En ese entonces yo no tenía tanto, en realidad ahora tampoco lo tengo, pero esta vez es solo por mi culpa. Y ella sí, ella tiene bastantes cosas y por lo que sé... En Gringotts aún guardan gran parte de su fortuna. Se recostó sobre el basto y con un pequeño jalón, logró que Ludwig se recostara junto a él para poder acurrucarse de nuevo en su pecho. Sabía que tenían poco tiempo de conocerse, pero esperaba que aquello no terminara así de buenas a primeras, quería que avanzara hasta convertirse en algo más. @ Ludwig Malfoy Triviani