Patrick Colt

No me estoy burlando de nadie, Bastian. Bájale dos toques a tu tonito que sé ser un poco peor que eso. Se han cambiado varias veces el formato de las fichas, que ya yo, un usuario viejo y despistado de este foro, se pierde con facilidad. Agradezco muestres un toque de paciencia para mi solicitud que está basada en la guía que me dejó Felicity, la cual te dejo citada arriba, para que no te atrevas a decir que me burlo del equipo. De lo contrario, tienes otros muchos compañeros moderadores que pueden venir a ayudarte en la actualización. Así que, en base a lo que Fee me dijo en lo que te he citado, te agradezco que completes el perfil de Godric, datos adicionales que he colocado en Otros Datos como me ha indicado tu compañera. Saludos.

Hola gente, he colocado una actualización en mi ficha. He sido guiado un millón de ocasiones por Pik, Fee y Bastian en esta actualización, y ahora estoy a la espera de comentarios. Espero puedan pasarse a verla, gracias y saludos!

Se había aburrido lo suficiente como para darle media vuelta a la situación. La dejarían vivir, o al menos la dejarían libre para que sus amistades la socorrieran y la llevaran hacia las jaulas de pájaros del Hospital de San Mungo. Seguramente allí la revivirían. El Cardenal de la Muerte aguzó su mirada hacia el umbral de entrada, donde la puerta ya no existía y avanzó hasta salir nuevamente al callejón. — Te dije que eso de extinguir a los Miembros de la Orden del Fénix sería aburrido para estas fechas — le indicó Patrick Colt a su compañera, Gyvraine, quien lejos de ser citadina, era una fiel mortífaga del bando — mujeres como tú deberían ser ejecutadas. No pueden arrancarnos a los hombres aquéllos juguetes que nos da horas de placer. ¿Ahora dónde conseguiremos poshos? Refunfuñó hasta desaparecer.

El corazón le latía bastante rápido. Era la adrenalina que empezaba a poblar todo su cuerpo, su torrente sanguíneo, y que ponía a trabajar su mente a una manera que solo él era capaz de controlar. La habilidad oclumántica del Demonio estaba tan activa como los atributos que había aprendido a manejar de su raza, y la varita gris que empuñaba hacia el pecho de la mujer, vibraba de una manera muy consistente e intensa. -Expeliarmus- dijo y su profunda voz salió igual de irreconocible que cada vez que llevaba puesta su máscara. Lo que para Patrick Colt sería imposible no reconocer, era ese rojo que pintaba el rayo que viajaba hacia Helen con la intención de desarmarla en el acto. De golpear en su pecho, tal cual como era su trayecto, sería suficiente para lanzar su varita a cinco metros hacia la izquierda, en donde había una ventana abierta. -Celerus Babosas- repitió otro hechizo, aunque este último era no verbal. El rayo del color de la noche iba a la misma mujer, Helen Reyes, el cual de impactarle al lugar donde iba dirigido, le iba a imposibilitar hablar por el resto de los minutos que le quedara con vida. - Sectusempra - dijo, esta vez un rayo verde abandonó la punta de la varita de Patrick Colt, hacia Helen como los dos anteriores rayos, con la intención de impactar el pecho de la mujer al recorrer los diez metros que Patrick Colt no tenía intención de acortar y que lucharía por mantener de ella y de cualquiera.

Demonios. No pudo hacer otra cosa que bufar de cansancio. Había perdido la razón por unos segundos y entendió que se trataba de su siempre útil hechizo de rastreo: Un miembro de la Orden del Fénix rondaba por el Callejón Diagon. Tomó su varita de Alerce gris, su máscara de titanio cubrió su rostro y apareció en los predios del lugar comerciante. La brisa era fría, y bajaba desde donde podía verse el final de Gringotts, sin embargo se encontraba frente al negocio cuyo nombre rezaba Doyle's. Allí, frente a la puerta de entrada, sintió que la sensación de su hechizo intensificaba, por lo que decidió entrar. Levantó la mano diestra, donde tenía su varita y la puerta estalló en mil astillas, tocó su antebrazo izquierdo con la punta de ésta y ardió. El llamado a sus compañeros había sido hecho y él entraba al local desnudo. Los presentes lo veían como si estuviera ataviado con una sotana negra, tenía diversas manchas oscuras (más si se podía) por toda su tela, pero todo aquello era producto de una ilusión gracias a su raza demoníaca. — Venimos buscando reinas — dijo, buscando a Helen Reyes entre los que se encontraban en el lugar. Al hallarla, levantó su varita en su contra y dedujo que se encontraba a diez metros de ella — vamos niña, es hora que empieces a tirar besitos.

Listo moderadores (los que se pasen, si aparte de Pik es Fee), así queda mi ficha. Favor copiar y pegar todo tal cual. Cambio realizado: http://imagizer.imageshack.us/v2/800x600q90/849/7da4.png Datos Personales: Nombre del Personaje: Patrick Colt. Sexo: Masculino Edad: Inmortalidad Nacionalidad: Londres, Inglaterra Familia(s): Ryddleturn, familia adoptiva - Patriarca Padre(s) Sanguíneo: Patrick no conoce que tenga familia. Padre(s) Adoptivos: Patrick no conoce que tenga familia. Trabajo: Concilio de Mercaderes. Plantilla del Magic Mall. Encargado de la Primera Planta, Empleado. Poderes Mágicos: Rango Social: Dragón de oro Bando: Mortífago Rango dentro del Bando: Nigromante. Nivel de Poder Mágico: --- Puntos de poder en objetos: 40 Habilidades Mágicas: - Oclumancia - Animagia - Chettah - No como Patrick Colt Conocimientos Especiales: -Defensa contra las Artes Oscuras -Transformaciones -Encantamientos -Pociones -Aritmancia -Leyes Mágicas -Cuidado de Criaturas Mágicas -Maestría con escobas. Perfil del Personaje: Raza: Demonio Aspecto Físico: Es un mago delgado y bastante alto. Su cabello alborotado y marrón hace juego con su mirada parda. Su dentadura es afilada y le brinda un aspecto agresivo y cansado. En sus muñecas y tobillos pareciera tener grabado a fuego la forma de gruesas cadenas. Es de facciones delgadas, sus rasgos demoníacos le dan ese aspecto de haber sido maltratado, un ejemplo son esos cortes por todo su rostro que aún no sanan y casi siempre se ve en él un gesto severo y rígido, o con una desquiciada y sádica sonrisa. El tatuaje de la Marca Tenebrosa reposa quieta en su ante brazo izquierdo cubierto siempre por la larga manga de la túnica negra que viste. Ese tatuaje antes de ser activado solo puede verse en forma de calavera. Pero en cuanto es utilizado para realizar el llamado a su Bando Mortífago o de sentir que lo están invocando, una serpiente sinuosa sale de la fáuces del cráneo y se pasea por toda su extremidad. Cualidades Psicológicas: Frío, ambicioso y vanidoso. Es muy calculador y asocial. Tiene reacciones volátiles como una cruda, ruda y cruel tormenta. Tiene un sentimiento extático por el crimen y es opositor a los lazos ministeriales que intentan regularlo todo. Es impulsivo y generalmente actúa como un oscuro choque de electricidad, tal cual como su mirada que irradia el color oro. Es un ser sediento de poder y dominio. No muestra compasión por nada ni por nadie; se alimenta del temor y del sufrimiento; y disfruta sembrando el luto en los hogares de Inglaterra. Quienes le conocen aseguran que no descansará hasta desaparecer esa estú.pida ideología de tratar a todos por igual: la pureza de la sangre y la exclusividad mágica debe prevalecer. Cualquier medio es bueno para cumplir sus objetivos. Tiene un poder de convencimiento envidiable y una habilidad para ejercer anónimamente la manipulación, la cual aprendió a forjar en sus orígenes en el Colegio Durmstrang de donde se graduó con buenas calificaciones. Historia: Luego de 666 años de sufrimiento pagados en el Infierno por todos sus pecados en la tierra, Patrick Colt retorna desde el mundo de los muertos para cobrar venganza y cumplir una misión que en su gran parte desconoce. El objetivo mortífago que había dejado pendiente al ser capturado y acabado, parecía estar en un momento deplorable. Lleno de angustias, y sufriendo aún, fue nombrado Terrateniente de las fuerzas del infierno con el fin de gobernar el terror y el caos que se enviaba a la Tierra, en donde la Orden del Fénix había logrado erradicar los ideales del que había sido su fraternidad por siglos. Fue recibido como Demonio y entrenado como guerrero, sembrando y fortaleciendo el rencor que ya había echado raíces en su interior. Por ello, Mavado Evans, padre del Príncipe Godric quien fue desterrado del territorio del Edén por pecar contra su Padre Celestial, se aprovechó de su debilidad y arremetió contra la vida de su hijo e hizo que, con magia prohibida y muy oscura, Patrick Colt reencarnara en el cuerpo de Godric con tal de poder cumplir sus planes y completar las misiones que le había encomendado. Ninguno logró morir en la transmutación, en su lugar Patrick Colt ha mantenido la persistente fuerza que pertenece a Godric en el interior de su propio cuerpo. Fuerza que se mantiene lo suficientemente controlada para que no logre salir a la luz en todos estos años del retorno de su verdugo. A partir de la eliminación de su rastro y que nadie en la nueva sociedad lo recuerde, Patrick Colt se ha logrado ganar un lugar en los procesos mediáticos del Ministerio de Magia. Con un atributo anónimo de manipulador, ha conseguido obtener demasiada información, mucho más de lo que se imaginaría, lo que podría convertirlo en un peligro y la que usaría para beneficio propio. Tiene marcas de cadenas en sus muñecas y tobillos, que reflejan el castigo de los años que estuvo en el infierno; y los lugares en su cuerpo donde la vocación por su bando perdió terreno. Sigue igual de leal a la Marca Tenebrosa como siempre, pero su estadía en el mundo de los vivos depende de su estabilidad emocional y del logro de sus propios objetivos, para ello su base primordial es su propio yo; que, lejos de ser beneficioso a los ideales Mortífagos, sumarán innumerables victorias para su interés personal y el interés del Rey en el Inframundo que lo tiene bajo su poder. Pertenencias: Objeto Magico Legendario: Válido sólo para Orden de Merlín. Objetos Magicos Objeto 1: Varita de madera de roble Rojo, cuya empuñadura es de oro macizo y con forma de llamarada. Su núcleo guarda el cuerno del unicornio que tuvo como mascota antes de entrar a la casa de Ravenclaw en Hogwarts, y mide 35 cms. Esta varita pertenece a Príncipe Godric. Clasificación: AA Puntos de poder: 20 Objeto 2: Varita de madera de madera de Alerce Gris, su núcleo es de astilla de colmillo de dragón, su longitud nunca ha sido calculada aún cuando se ve que es bastante larga. Es suficientemente leal a Patrick Colt. Pareciera que estuviera calcinada y en todo su largo tiene grabados Alquímicos. Esta varita pertenece a Patrick Colt. Clasificación: AA Puntos de poder: 20 Mascotas y Criaturas: Criatura 1: Oxhlen - Grifo Clasificación: XXXX Puntos de poder: 80 Criatura 1: Céltionix - Lechuza Clasificación: X Puntos de poder: 10 Criatura 1: Fénix: Coraggio Clasificación: XXXX Puntos de poder: 80 Nota: Patrick no es capaz de usarlas por que ellas solo atienden a su dueño real, Príncipe Godric. Criaturas en la Reserva: Criatura 1: Proudly -- Opaleye de las Antípodas - Enviado a la reserva por baja de rango social. Clasificación: XXXXX Puntos de poder: 160 Nota: Patrick no es capaz de usarlas por que ellas solo atienden a su dueño real, Príncipe Godric. Elfos: * Elfo 1: Morgan (Asesinado) * Elfo 2: Jacaré Licencias, Tasas, Registros: Licencia de Aparición: Si Licencia de Vuelo de Escoba: Si Registro de XXX: ---- Otros Datos: Otros datos: - Fue alumno del Colegio Durmstrang de donde se graduó con buenas calificaciones. - Tiene una varita de Cedro negro que utiliza en las ocasiones en que requiere ingresar al ministerio. Es de 35 centímetros de longitud, su núcleo es Fibra de corazón de Dragón y es muy flexible, por lo que generalmente se adapta a la habilidad de cualquier dueño. Links de Interés Referentes al Personaje: Link al Perfil de Comprador MM: -- Link a Bóveda Personal: Bóveda nº 77694 Link a Bóveda Trastera:--- Link a Bóveda de Negocio: Pizzas Mama Mía Negocio cerrado: Disco Brooklyn Bridge Link a Bóveda Familiar 1: --- Link a Bóveda Familiar 2: Familia Ryddleturn http://imagizer.imageshack.us/v2/800x600q90/18/dy4r.png Datos Personales: Nombre del Personaje: Príncipe Godric Sexo: Masculino Edad: Joven, 25 años Nacionalidad: Italiana http://i516.photobucket.com/albums/u324/GodricMcgonagall2/asav.gif Perfil del Personaje: Raza: Humano. Aspecto Físico: Es musculoso. De tez canela. Sus ojos son color sangre, y sus facciones faciales tan tersas como un felpa. Le gusta peinar sus cabellos plateados con fijador, dándole un aspecto fresco y juvenil. Posee un tatuaje que dibuja sobre su piel las alas de un fénix en su espalda. Cualidades Psicológicas: Godric es un sinfín de cosas juntas. Se puede decir que debido al afán que tiene por enderezar al mundo de las andanzas del mal, puede llegar a ser tan Amoroso, como tan vengativo. Nadie es perfecto en este mundo, por lo que no puede evitar sentir deseos de maldad y venganza (Características de un nato guerrero), cuando la situación lo requiere, más si es de su familia de quien se trata. Es impulsivo y prematuro, pero aprende rápido con cada golpe que la vida le brinda. Tiene una mente ágil, y es muy sabio. Tiende a captar las cosas rápidamente, y la única persona que es de su entera confianza es su Hermano Gemelo, a quien ama con todas sus fuerzas. Es su única familia con vida, antes que su descendencia. Tiene un poder de análisis muy ágil y cuando se encuentra en peligro es capaz de matar. Posee un gran sentido de pertenencia con sus hijos y su hermano gemelo, así como también con la Orden del Fénix que es como la familia que nunca conoció. Tiende a ser calculador y sarcástico, pero su personalidad es de alta carisma y sobreprotectora. Historia: La historia de Godric da un vuelco repentino. Lo que cazó a muerte una vez, fue en lo que se convirtió ahora y es cazado. Príncipe Godric fue poseído por el cuerpo de un demonio del ejército infernal. Aquel ser que lo poseyó, construyó, tiñendo el lienzo de la anatomía del Arcángel, un cuerpo nuevo que se adaptaba a las necesidades que tenía por ser un demonio. El día que Príncipe Godric fue traicionado por su hermandad Fenixiana, perdió toda creencia y se llenó de rencor. Traicionó la confianza de su Padre Celestial, quién al ver que su hijo, el Arcángel Godric no cesaba de odiar, le dio la espalda; y fue cuando Mavado Evans, padre difunto de Príncipe Godric, aprovechó la debilidad de su hijo para hacerle daño y traer del infierno al señuelo que le serviría para matar por fin a Godric, Patrick Colt. Príncipe Godric no está muerto. Vive dentro del cuerpo de Patrick Colt, pero ahora, una lucha incesante de ideales, impera alma contra alma entre el Arcángel y el Demonio. A continuación, la noche en la que Príncipe Godric murió. Nadie supo nada de Godric Aaron, a partir de aquella noche. Su desaparición sigue siendo un misterio. ------ Era de noche, aquel martes. El Cuerpo de Godric había salido a la calle, moribundo. Los stigmatas se repetían insensatos en su piel, en su cuerpo; la sangre derramada por sus venas caía al pavimento para perderse con la ayuda de la lluvia que no cesaba de caer. Ottery era fría aquella noche, ornamentada con los rayos estridentes del casi amanecer y de esos rayos que no paraban su labor. Las nubes aún cargadas de energía electro magnética se veían rojizas, cubriendo el amplio firmamento nocturno y templado. La mirada escarlata del hombre refulgía entre la noche, en aquel rincón a donde el endemoniado Líder de la Orden del Fénix fue a trastabillar, chocando contra algunas cajetas frágiles y empapadas que apañaron su caída. El rostro opaco por el dolor y los gemidos retenidos por sus labios cuales cárceles de su expresión, hacían que su fuerza, una fuerza ausente desde hace un tiempo ya, cesara, cesara ante el auge de Magia Negra que parecía perseguirlo asfixiante. De un momento a otro quedó tendido sobre el suelo, sus ojos empezaron a ser teñidos por el agua de la lluvia que los rociaba y su rostro poco a poco quedó inexpresivo. Su mirada fúnebre, perdida en el infinito cielo de la noche se apagaba, dilatándose hasta ser cubierto por el centelleante y limpio color que sólo un demonio era capaz de tener en sus pupilas. El oro que se desbordaba de su mirada era tenebroso. Y parpadeó. Su cuerpo fue inyectado de calor inmediatamente y fue partícipe de un involuntario respingo, de tal manera que la lluvia parecía repelida. Sonrió. La anatomía transmutada era irreconocible. Parpadeó, sonrió y se sentó sobre las cajas donde había caído. Las decenas de cortadas se multiplicaban por todo su cuerpo y su sonrisa, más retorcida, parecía ser dueña del gesto en su rostro. De pronto la risa cesó y sus pupilas se voltearon hacia atrás, su pecho se arqueó hacia adelante, y un grito ensordecedor fue rasgado por el rugir de un rayo que se apropió del escenario por completo. De su boca, de sus ojos y de sus fosas nasales, emanó un gas tan negro como la noche que quedaba atrás poco a poco para formar un cuerpo frente al nuevo ser habitante de Inglaterra. Aquel cuerpo, desnudo, era espeluznante. Estaba atado completamente por cadenas, y era recorrido por gusanos que taladrando su piel putrefacta, se comían la poca carne que tenía. Pero el ciclo era funesto e interminable, causando un dolor que en la Tierra no enardecía. Sus ojos eran de fuego, y su boca era la jaula de una dentadura desordenada rellena por colmillos amarillentos y ensangrentados. Pero ante tanto evidente sufrimiento, el ser sólo sonreía. Una carcajada se provocó desde su pecho como si fuera protagonista de alguna venganza alimentada por su voz tan profunda como el infierno. — Patrick... — dijo. El nuevo y abatido cuerpo abrió los ojos observando lo que pasaba. El demonio fue invadido por un escalofrío que alimentó su pensamiento de alejarse lo más que podía, pero el miedo lo paralizaba. Abrió más los ojos intentando digerir lo que pasaba. Pataleó en un intento por que el suelo le ayudara a escapar, pero era inútil, no había lugar a donde ir cuando ese ser en frente era enorme y lo fulminaba con esas dos lanzas de fuego que lo perforaban. El ser espeluznante negó con la cabeza al mirarlo y posterior levantó su diestra. En ese instante, el grito de Patrick llenó cada rincón de esa callejuela al sentir que su cuerpo abandonaba el plano suelo. No podía hacer nada contra esa imagen que jugaba con él a puro placer y cuya energía era prácticamente incontrarrestable. — Patrick, eres un id.iota. ¿No me recuerdas? Estás de regreso a la tierra para empezar con la misión — El semblante de Colt fue inundado de un gesto de dolor y sufrimiento, no podía contener la desganas que su cuerpo entero soportaban a causa de la tortura. Cuando el demonio bajó su diestra, el cuerpo de Patrick Colt cayó de lleno sobre el suelo, y luego de reincorporarse dificultosamente, se sentó una vez más sobre la calle y miró al hombre fijamente. — Mavado — dijo como quien intentara buscar una explicación a los sucesos, pero de inmediato dejó que una sonrisa ataviara su rostro en aceptación — ¿Desde cuando no te das un baño, Evans? — preguntó el Londinense — Es bueno estar de regreso a mi ciudad natal, ¿lo sabía? Y el hombre, a quien llamaban el Cardenal de la Muerte, recorrió la calle enteramente con la mirada sintiendo un deseo de complicidad y acecho contra todo el poblado que observaba. Esa cabeza ladeada con su mirada oro punzante, eran la de un cazador lanzándose contra su presa. — Desde hoy te tendré vigilado hasta que cumplas con lo que te ha asignado — Patrick asintió ante las palabras del Demonio. — De tu hijo, ¿el negro? — preguntó Patrick. — Y de todos los que le rodearon — — Tendré que esconder mi mirada entonces si quiero triunfar y enaltecerlo, Mavado — - Pero no de todos, Colt; tú nunca sabrás quien ha sido ni quien fue, ¿estamos? — siguió el demonio y la lluvia no paraba de caer, pero reaccionó como si algo captara su atención — igual, nadie te recordará en la Tierra. Un bullicio al fondo del corredor, fue lo que los obligó a interrumpir la charla haciendo que Patrick desenfundara su varita de Alerce gris hacia la oscuridad del callejón. Mavado no dudó en convertirse en humo negro nuevamente para colarse por entre la gravilla del pavimento hacia el centro de la tierra a través de un alcantarillado. Patrick por su parte, no se quedaría para averiguar aquello que parecía haberlos estado observando en medio de la oscuridad, y con la varita en ristre, desapareció. ---- Transcurrido el tiempo, Príncipe Godric ha desaparecido. Ni su familia, ni sus amistades, ni sus compañeros de bando, ni el Departamento de Aurores sabe de su paradero. Los años han pasado y nunca nadie más supo de Príncipe Godric. Sin embargo, su espada y su varita de Roble Rojo que reposan entre las ruinas de la Torre Oeste del Castillo Evans McGonagall, se mantienen calientes y cimbreantes como si aún tuvieran vida. Otros Datos: Otros datos: Tiene una espada que reposa en la clausurada y ruinosa Torre Oeste del Castillo Evans McGonagall. Cronología de cargos: Perteneció a la Orden del Fénix y fue Líder. Perteneció al Departamento Organizativo del Cuartel General de Aurores y fue Director. Perteneció a la corte del Wizengamot. Perteneció a la Academia de Magia y Hechicería en la que fue Profesor de Generales, Duelo Avanzado y Bando y Perfil. Premios y reconocimientos: Mejor Auror o Miembro de la Orden del Fénix. Links de Interés Referentes al Personaje: Link al Perfil de Comprador MM: -- Link a Bóveda Personal: Bóveda nº 77694 Link a Bóveda Trastera:--- Link a Bóveda de Negocio: Negocio cerrado: Disco Brooklyn Bridge Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda nº 97458 - Familia Evans McGonagall Link a Bóveda Familiar 2: --

Hola Fee. Tienes razón y entiendo. Sin embargo no quiero perder los datos de P. Godric, puedo vaciar la ficha pero en un spoiler dejar los datos tal y como estan ahora? Adicional, en su momento puse el prefijo ex, lo que indica que fue parte en su momento, ejemplo Ex-Miembro de la Orden del Fenix. ¿Puede quedar asi o definitivamente debe quedar en blanco? Gracias por las respuestas que me des.

http://imagizer.imageshack.us/v2/800x600q90/849/7da4.png Datos Personales: Nombre del Personaje: Patrick Colt. Sexo: Masculino Edad: Inmortalidad Nacionalidad: Londres, Inglaterra Familia(s): * Familia 1: --- * Familia 2: Ryddleturn - Adoptiva Padre(s) Sanguíneo: Padre(s) Sanguíneo: Patrick no conoce que tenga familia. Padre(s) Adoptivos: Patrick no conoce que tenga familia. Trabajo: Concilio de Mercaderes. Plantilla del Magic Mall. Encargado de la Primera Planta, Empleado. Poderes Mágicos: Rango Social: Dragón de oro Bando: Mortífago Rango dentro del Bando: Nigromante. Nivel de Poder Mágico: --- Puntos de poder en objetos: 40 Puntos de poder en criaturas: 330 Habilidades Mágicas: - Oclumancia Animagia - Chettah - No como Patrick Colt Conocimientos Especiales: -Defensa contra las Artes Oscuras -Transformaciones -Encantamientos -Pociones -Aritmancia -Leyes Mágicas -Cuidado de Criaturas Mágicas -Maestría con escobas. Perfil del Personaje: Raza: Demonio Aspecto Físico: Es un mago delgado, y bastante alto. Su cabello alborotado y marrón hacen juego con su mirada de color pardo. Su dentadura es afilada brindándole un aspecto de agresivo cansancio junto con su piel blanquecina. En sus muñecas y tobillos pareciera tener grabado a fuego la forma de gruesas cadenas. Es de facciones delgadas y amoratadas, tiene cortes que aún no sanan por todo su rostro. Sin embargo siempre mantiene en él un gesto severo y rígido, como también sospechoso con una sonrisa mediana de adorno. El tatuaje de la Marca Tenebrosa reposa quieta en su ante brazo izquierdo cubierto siempre por la larga manga de la túnica negra que viste. Ese tatuaje antes de ser activado solo puede verse en forma de calavera, luego al momento de ser tocado o de presentir el llamado Mortífago, una serpiente sale de la calavera para enroscarse y acosarla. Este tatuaje se conecta con el dibujo de un dragón en su espalda que transporta el ardor a todo su cuerpo. Cualidades Psicológicas: Frío, ambicioso y vanidoso. Es muy calculador, antisocial y asocial. Es extático por el crimen y es apasionado por el detrimento a los fuertes cimientos del Ministerio de Magia y la Orden del Fénix que muere por protegerlo. Es un ser sediento de poder. No muestra compasión por nada ni por nadie; se alimenta del temor y del sufrimiento ajeno. Disfruta sembrando el luto en los hogares de Inglaterra y no descansará hasta desaparecer esa estú.pida ideología de tratarse todos por igual. La pureza de la sangre debe prevalecer. Disfruta del Poder y el Control. Cualquier medio es bueno para cumplir sus objetivos. Tiene un poder de convencimiento envidiable y una habilidad anónima en el uso de la manipulación. Historia: Luego de 666 años de sufrimiento pagados en el Infierno por todos sus pecados en la tierra, Patrick Colt retorna desde el mundo de los muertos para cobrar venganza y cumplir una misión que en su gran parte desconoce. El objetivo mortífago que había dejado pendiente al ser capturado y acabado, parecía estar en un momento deplorable. Lleno de angustias, y sufriendo aún, fue nombrado Terrateniente de las fuerzas del infierno con el fin de gobernar el terror y el caos que se enviaba a la Tierra, en donde la Orden del Fénix había logrado erradicar los ideales del que había sido su fraternidad por siglos. Fue recibido como Demonio y entrenado como guerrero, sembrando y fortaleciendo el rencor que ya había echado raíces en su interior. Por ello, Mavado Evans, padre del Príncipe Godric quien fue desterrado del territorio del Edén por pecar contra su Padre Celestial, se aprovechó de su debilidad y arremetió contra la vida de su hijo e hizo que, con magia prohibida y muy oscura, Patrick Colt reencarnara en el cuerpo de Godric con tal de poder cumplir sus planes y completar las misiones que le había encomendado. Ninguno logró morir en la transmutación, en su lugar Patrick Colt ha mantenido la persistente fuerza que pertenece a Godric en el interior de su propio cuerpo. Fuerza que se mantiene lo suficientemente controlada para que no logre salir a la luz en todos estos años del retorno de su verdugo. A partir de la eliminación de su rastro y que nadie en la nueva sociedad lo recuerde, Patrick Colt se ha logrado ganar un lugar en los procesos mediáticos del Ministerio de Magia. Con un atributo anónimo de manipulador, ha conseguido obtener demasiada información, mucho más de lo que se imaginaría, lo que podría convertirlo en un peligro y la que usaría para beneficio propio. Tiene marcas de cadenas en sus muñecas y tobillos, que reflejan el castigo de los años que estuvo en el infierno; y los lugares en su cuerpo donde la vocación por su bando perdió terreno. Sigue igual de leal a la Marca Tenebrosa como siempre, pero su estadía en el mundo de los vivos depende de su estabilidad emocional y del logro de sus propios objetivos, para ello su base primordial es su propio yo; que, lejos de ser beneficioso a los ideales Mortífagos, sumarán innumerables victorias para su interés personal y el interés del Rey en el Inframundo que lo tiene bajo su poder. Pertenencias: Objeto Magico Legendario: Válido sólo para Orden de Merlín. Objetos Magicos Objeto 1: Varita de madera de roble Rojo, cuya empuñadura es de oro macizo y con forma de llamarada. Su núcleo guarda el cuerno del unicornio que tuvo como mascota antes de entrar a la casa de Ravenclaw en Hogwarts, y mide 35 cms. Esta varita pertenece a Príncipe Godric. Clasificación: AA Puntos de poder: 20 Objeto 2: Varita de madera de madera de Alerce Gris, su núcleo es de astilla de colmillo de dragón, su longitud nunca ha sido calculada aún cuando se ve que es bastante larga. Es suficientemente leal a Patrick Colt. Pareciera que estuviera calcinada y en todo su largo tiene grabados Alquímicos. Esta varita pertenece a Patrick Colt. Clasificación: AA Puntos de poder: 20 Mascotas y Criaturas: Criatura 1: Descripción Clasificación: Categoría que le corresponde Puntos de poder: Puntos que le corresponden Criatura 1:Oxhlen - Grifo Clasificación: XXXX Puntos de poder: 80 Criatura 1:Céltionix - Lechuza Clasificación: X Puntos de poder: 10 Criatura 1:Fénix: Coraggio Clasificación: XXXX Puntos de poder: 80 Nota: Patrick no es capaz de usarlas por que ellas solo atienden a su dueño real, Príncipe Godric. Criaturas en la Reserva: Criatura 1: Proudly -- Opaleye de las Antípodas - Enviado a la reserva por baja de rango social. Clasificación: XXXXX Puntos de poder: 160 Nota: Patrick no es capaz de usarlas por que ellas solo atienden a su dueño real, Príncipe Godric. Elfos: * Elfo 1: Morgan (Que ha muerto) * Elfo 2: Jacaré Licencias, Tasas, Registros: Licencia de Aparición: Si Licencia de Vuelo de Escoba: Si Registro de XXX: ---- Otros Datos: Otros datos: En su caso, otras cuestiones que se quieran detallar, no contempladas en apartados anteriores. Cronología de cargos: Caso de que quieran detallarse cargos rolísticos del personaje. Premios y reconocimientos: Caso de que quieran detallarse premios y reconocimientos al personaje. Links de Interés Referentes al Personaje: Link al Perfil de Comprador MM: -- Link a Bóveda Personal: Bóveda nº 77694 Link a Bóveda Trastera:--- Link a Bóveda de Negocio: Negocio cerrado: Disco Brooklyn Bridge Link a Bóveda Familiar 1: --- Link a Bóveda Familiar 2: Familia Ryddleturn - Adoptiva http://imagizer.imageshack.us/v2/800x600q90/18/dy4r.png Datos Personales: Nombre del Personaje: Príncipe Godric Sexo: Masculino Edad: Joven, 25 años Nacionalidad: Italiana http://i516.photobucket.com/albums/u324/GodricMcgonagall2/asav.gif Perfil del Personaje: Raza: Humano. Aspecto Físico: Es musculoso. De tez canela. Sus ojos son color sangre, y sus facciones faciales tan tersas como un felpa. Le gusta peinar sus cabellos plateados con fijador, dándole un aspecto fresco y juvenil. Posee un tatuaje que dibuja sobre su piel las alas de un fénix en su espalda. Cualidades Psicológicas: Godric es un sinfín de cosas juntas. Se puede decir que debido al afán que tiene por enderezar al mundo de las andanzas del mal, puede llegar a ser tan Amoroso, como tan vengativo. Nadie es perfecto en este mundo, por lo que no puede evitar sentir deseos de maldad y venganza (Características de un nato guerrero), cuando la situación lo requiere, más si es de su familia de quien se trata. Es impulsivo y prematuro, pero aprende rápido con cada golpe que la vida le brinda. Tiene una mente ágil, y es muy sabio. Tiende a captar las cosas rápidamente, y la única persona que es de su entera confianza es su Hermano Gemelo, a quien ama con todas sus fuerzas. Es su única familia con vida, antes que su descendencia. Tiene un poder de análisis muy ágil y cuando se encuentra en peligro es capaz de matar. Posee un gran sentido de pertenencia con sus hijos y su hermano gemelo, así como también con la Orden del Fénix que es como la familia que nunca conoció. Tiende a ser calculador y sarcástico, pero su personalidad es de alta carisma y sobreprotectora. Historia: La historia de Godric da un vuelco repentino. Lo que cazó a muerte una vez, fue en lo que se convirtió ahora y es cazado. Príncipe Godric fue poseído por el cuerpo de un demonio del ejército infernal. Aquel ser que lo poseyó, construyó, tiñendo el lienzo de la anatomía del Arcángel, un cuerpo nuevo que se adaptaba a las necesidades que tenía por ser un demonio. El día que Príncipe Godric fue traicionado por su hermandad Fenixiana, perdió toda creencia y se llenó de rencor. Traicionó la confianza de su Padre Celestial, quién al ver que su hijo, el Arcángel Godric no cesaba de odiar, le dio la espalda; y fue cuando Mavado Evans, padre difunto de Príncipe Godric, aprovechó la debilidad de su hijo para hacerle daño y traer del infierno al señuelo que le serviría para matar por fin a Godric, Patrick Colt. Príncipe Godric no está muerto. Vive dentro del cuerpo de Patrick Colt, pero ahora, una lucha incesante de ideales, impera alma contra alma entre el Arcángel y el Demonio. A continuación, la noche en la que Príncipe Godric murió. Nadie supo nada de Godric Aaron, a partir de aquella noche. Su desaparición sigue siendo un misterio. ------ Era de noche, aquel martes. El Cuerpo de Godric había salido a la calle, moribundo. Los stigmatas se repetían insensatos en su piel, en su cuerpo; la sangre derramada por sus venas caía al pavimento para perderse con la ayuda de la lluvia que no cesaba de caer. Ottery era fría aquella noche, ornamentada con los rayos estridentes del casi amanecer y de esos rayos que no paraban su labor. Las nubes aún cargadas de energía electro magnética se veían rojizas, cubriendo el amplio firmamento nocturno y templado. La mirada escarlata del hombre refulgía entre la noche, en aquel rincón a donde el endemoniado Líder de la Orden del Fénix fue a trastabillar, chocando contra algunas cajetas frágiles y empapadas que apañaron su caída. El rostro opaco por el dolor y los gemidos retenidos por sus labios cuales cárceles de su expresión, hacían que su fuerza, una fuerza ausente desde hace un tiempo ya, cesara, cesara ante el auge de Magia Negra que parecía perseguirlo asfixiante. De un momento a otro quedó tendido sobre el suelo, sus ojos empezaron a ser teñidos por el agua de la lluvia que los rociaba y su rostro poco a poco quedó inexpresivo. Su mirada fúnebre, perdida en el infinito cielo de la noche se apagaba, dilatándose hasta ser cubierto por el centelleante y limpio color que sólo un demonio era capaz de tener en sus pupilas. El oro que se desbordaba de su mirada era tenebroso. Y parpadeó. Su cuerpo fue inyectado de calor inmediatamente y fue partícipe de un involuntario respingo, de tal manera que la lluvia parecía repelida. Sonrió. La anatomía transmutada era irreconocible. Parpadeó, sonrió y se sentó sobre las cajas donde había caído. Las decenas de cortadas se multiplicaban por todo su cuerpo y su sonrisa, más retorcida, parecía ser dueña del gesto en su rostro. De pronto la risa cesó y sus pupilas se voltearon hacia atrás, su pecho se arqueó hacia adelante, y un grito ensordecedor fue rasgado por el rugir de un rayo que se apropió del escenario por completo. De su boca, de sus ojos y de sus fosas nasales, emanó un gas tan negro como la noche que quedaba atrás poco a poco para formar un cuerpo frente al nuevo ser habitante de Inglaterra. Aquel cuerpo, desnudo, era espeluznante. Estaba atado completamente por cadenas, y era recorrido por gusanos que taladrando su piel putrefacta, se comían la poca carne que tenía. Pero el ciclo era funesto e interminable, causando un dolor que en la Tierra no enardecía. Sus ojos eran de fuego, y su boca era la jaula de una dentadura desordenada rellena por colmillos amarillentos y ensangrentados. Pero ante tanto evidente sufrimiento, el ser sólo sonreía. Una carcajada se provocó desde su pecho como si fuera protagonista de alguna venganza alimentada por su voz tan profunda como el infierno. — Patrick... — dijo. El nuevo y abatido cuerpo abrió los ojos observando lo que pasaba. El demonio fue invadido por un escalofrío que alimentó su pensamiento de alejarse lo más que podía, pero el miedo lo paralizaba. Abrió más los ojos intentando digerir lo que pasaba. Pataleó en un intento por que el suelo le ayudara a escapar, pero era inútil, no había lugar a donde ir cuando ese ser en frente era enorme y lo fulminaba con esas dos lanzas de fuego que lo perforaban. El ser espeluznante negó con la cabeza al mirarlo y posterior levantó su diestra. En ese instante, el grito de Patrick llenó cada rincón de esa callejuela al sentir que su cuerpo abandonaba el plano suelo. No podía hacer nada contra esa imagen que jugaba con él a puro placer y cuya energía era prácticamente incontrarrestable. — Patrick, eres un id.iota. ¿No me recuerdas? Estás de regreso a la tierra para empezar con la misión — El semblante de Colt fue inundado de un gesto de dolor y sufrimiento, no podía contener la desganas que su cuerpo entero soportaban a causa de la tortura. Cuando el demonio bajó su diestra, el cuerpo de Patrick Colt cayó de lleno sobre el suelo, y luego de reincorporarse dificultosamente, se sentó una vez más sobre la calle y miró al hombre fijamente. — Mavado — dijo como quien intentara buscar una explicación a los sucesos, pero de inmediato dejó que una sonrisa ataviara su rostro en aceptación — ¿Desde cuando no te das un baño, Evans? — preguntó el Londinense — Es bueno estar de regreso a mi ciudad natal, ¿lo sabía? Y el hombre, a quien llamaban el Cardenal de la Muerte, recorrió la calle enteramente con la mirada sintiendo un deseo de complicidad y acecho contra todo el poblado que observaba. Esa cabeza ladeada con su mirada oro punzante, eran la de un cazador lanzándose contra su presa. — Desde hoy te tendré vigilado hasta que cumplas con lo que te ha asignado — Patrick asintió ante las palabras del Demonio. — De tu hijo, ¿el negro? — preguntó Patrick. — Y de todos los que le rodearon — — Tendré que esconder mi mirada entonces si quiero triunfar y enaltecerlo, Mavado — - Pero no de todos, Colt; tú nunca sabrás quien ha sido ni quien fue, ¿estamos? — siguió el demonio y la lluvia no paraba de caer, pero reaccionó como si algo captara su atención — igual, nadie te recordará en la Tierra. Un bullicio al fondo del corredor, fue lo que los obligó a interrumpir la charla haciendo que Patrick desenfundara su varita de Alerce gris hacia la oscuridad del callejón. Mavado no dudó en convertirse en humo negro nuevamente para colarse por entre la gravilla del pavimento hacia el centro de la tierra a través de un alcantarillado. Patrick por su parte, no se quedaría para averiguar aquello que parecía haberlos estado observando en medio de la oscuridad, y con la varita en ristre, desapareció. ---- Transcurrido el tiempo, Príncipe Godric ha desaparecido. Ni su familia, ni sus amistades, ni sus compañeros de bando, ni el Departamento de Aurores sabe de su paradero. Los años han pasado y nunca nadie más supo de Príncipe Godric. Sin embargo, su espada y su varita de Roble Rojo que reposan entre las ruinas de la Torre Oeste del Castillo Evans McGonagall, se mantienen calientes y cimbreantes como si aún tuvieran vida. Puntos de poder en criaturas: 330 Habilidades Mágicas: Animagia - Chettah - - Oclumancia Conocimientos Especiales: -Defensa contra las Artes Oscuras -Transformaciones -Encantamientos -Pociones -Aritmancia -Leyes Mágicas -Cuidado de Criaturas Mágicas -Maestría con escobas. Otros Datos: Otros datos: Tiene una espada que reposa en la clausurada y ruinosa Torre Oeste del Castillo Evans McGonagall. Cronología de cargos: Perteneció a la Orden del Fénix y fue Líder. Perteneció al Departamento Organizativo del Cuartel General de Aurores y fue Director. Perteneció a la corte del Wizengamot. Perteneció a la Academia de Magia y Hechicería en la que fue Profesor de Generales, Duelo Avanzado y Bando y Perfil. Premios y reconocimientos: Mejor Auror o Miembro de la Orden del Fénix. Links de Interés Referentes al Personaje: Link al Perfil de Comprador MM: -- Link a Bóveda Personal: Bóveda nº 77694 Link a Bóveda Trastera:--- Link a Bóveda de Negocio: Negocio cerrado: Disco Brooklyn Bridge Link a Bóveda Familiar 1: Bóveda nº 97458 - Familia Evans McGonagall Link a Bóveda Familiar 2: --

Por un momento, la oscuridad de la noche se confundió con esas pequeñas ramificaciones que se deslizaban por todas partes sobre el suelo. Entre los muebles, bajo las alfombras, por las paredes inclusive. Todas, con direcciones diferentes, que buscaban a la misma presa al final de la estancia del Castillo. Detrás de la mujer, la ventana que daba al jardín, revelaba esa luz que escapaba desde las aguas de un lago aledaño. Dentro del perímetro también se encontraba el reflejo de la luna que coronaba el mar de estrellas empotradas en el mar negro que se alzaba a través de las nubes morbosas. La mirada color oro del Cardenal de la Muerte fulminaron los ojos rojos de la gitana. Relucían en un carmesí galante, que recordó a Patrick Colt todos los litros de sangre que había visto correr a lo largo de sus años. Incluyendo la suya propia, que ahora corría por sus venas con adrenalina evidente. — ¿Tatuaje? — la sonrisa bajo la máscara de Colt era visible. Las carcajadas que se abultaron en su pecho escaparon con gracia por las fauces del demonio — ¿Crees que la tinta china que tienes en la nuca es bonita? Le preguntó desafiante mientras la Triviani sufría una transformación. Los ojos de Patrick Colt se abrieron de par en par a través de las rendijas de su máscara observando el fenómeno. — Eras fea… pero… — y la vio desaparecer justo en el momento en que los dedos de oscuridad se acercaron a la silueta de la mujer, y las que se convirtieron en jirones de humo negro al intentar zarparse alrededor de esa demonio que ya no estaba — te iba a devolver la compostura. Culminó, bufando de cansancio y chasqueó sus dedos en cuanto varios personajes empezaban a invadir el vestíbulo, quizás, buscando respuestas a todo ese alboroto. La oscuridad de su invocación se retrajo y fusionándose con su cuerpo desapareció.

No tuvo otra opción que negar y bajar la mirada. Patrick Colt no estaba acostumbrado a lidiar ese tipo de actitudes infantiles. Sin embargo, Candela se había llevado todos los méritos como para robarle a Patrick Colt la única sonrisa que dedicaba a los incompetentes miembros de la Orden. — Tú, en cambio — dijo mirando hacia el suelo. La mirada color oro que refulgía a través de las rendijas de su máscara, dejaba su rastro de luz por cada ribete plateado de su túnica negra — debes ser la payasa del circo. Bueno, del casino, según entiendo de apuestas y semejanzas. Levantó la cabeza y su primera reacción fue inspirar lo más profundo que podía. Sabía, que en ese lugar las cosas no iban a ser fáciles en el afán por persuadirla. — Tendré que presentarte ante el resto de cabe… — — ¿Dónde está Petrov, Candela? — espetó. La interrupción obligó a que la frase de la gitana quedara varada en el vacío del vestíbulo del Castillo. La presencia del Cardenal de la Muerte era cada vez más evidente, y su cuerpo ahora era acorralado por un celaje de oscuridad que lo enmarcaba — ¿Dónde tienes escondido al Ministro de Rusia? La pregunta casi detuvo el tiempo. El aire, si alguna vez existió, también detuvo su marcha junto a la vida del fuego en las antorchas que dejaron de arder. La barbilla del Nigromante se alzó a la altura de sus hombros, mientras cincelaba con sus lanzas de oro la mirada de la bruja. — Ya no llevas el tatuaje, no te equivoques — — Ve con Cuidado Patrick —siguió la bruja sin importarle la amenaza del Cardenal — ¿Qué te hace pensar que puedes agregarte así, sin más? — Soy el Cardenal de la Muerte, Candela. Deberías saber que lo que quiero lo consigo, a como dé lugar — hizo un siseo enfático en esa última frase. Sonrió, y mostro un giro con su varita de Alerce — Expectro Protego — y muchas bifurcaciones abandonaron la punta del arma mágica, adhiriéndose al suelo para hacer una sola entidad junto a su madera — a como dé lugar — reafirmó con travesura.

— El tonito, Candela — parecía divertido mientras alzaba la mano a la altura de una oreja. En ella, la varita de Alerce gris se mostró triunfante, y lejos de parecer tan dósil como el brillo de su punta, la intención del mortífago era la de advertencia — yo también me sé algunos truquitos — replicó sonriente — uno de los tantos para lograr que acudas de inmediato. Se atrevió a darle la espalda a la bruja. La vista era tranquilizante por una de las ventanas del vestíbulo, pero igual de oscura que el alma de quien parecía ser un invasor sin vergüenza. — No me conoces bien, eh, Candela ― le recordó en tono de pregunta. Ladeó un poco la cabeza, permitiendo que su máscara se alimentara con las luces de los braceros de las antorchas incendiadas; y que brindaban a la estancia, el éxtasis del sombrío encuentro ― no querrás ser la última en la lista de agraciados. Era eso a lo que se refería, pues un interminable cúmulo de almas se apilaban atravesadas por lenguas de fuego en el centro del infierno. Sin embargo, allí, en el enorme Castillo Triviani, la calma parecía ser el principal foco del Cardenal de la Muerte. — Han cerrado el Mall, Candela. Y a esta hora, El Profeta ya debe haberse encargado de escandalizar a Inglaterra ― prosiguió, atravesando los cristales de la ventana con su mirada dorada y reluciente. El marco del jardín parecía atraerlo más que el rostro de su ex compañera ― nos hemos quedado sin trabajo. El tono en su voz áspera era divertido. ¿Quién estaría tan tranquilo al quedarse sin trabajo? La oclumancia activa atesoraba los pensamientos del mortífago, por lo que Candela Triviani no podría saber la respuesta a esta pregunta escudriñando en sus pensamientos. — Vengo a introducirme en el negociado de la Triviani ― no iba a poder ver el gesto de sorpresa en el rostro de Candela. Seguía mirando cómo la noche daba ese cruel abrazo al pueblo mágico, sin que éste emitiera su oposición al respecto. Era una invasión absoluta a Ottery St. Catchpole, mucho más que la de Patrick Colt a la residencia de la gitana ― y no intentes fingir. Ya es un escándalo internacional en el mercado negro, que en Inglaterra tienen secuestrado al Ministro Ruso. Rusia, Candela. Rusia. Le recalcó a la mujer, como si con el nombre de ese país pudiera martillarle la idea en su cabeza sobre el problema en el que estaba involucrada. Rusia no solo era una potencia mundial en artes de guerra, sino que era también uno de los países con el sistema de magia oscura más desarrollada. — Rusia — se devolvió a la Triviani, revelándole su mirada color oro por si tenía alguna duda de que era Patrick Colt quien le hablaba.

http://i44.tinypic.com/2ryj9eo.jpg — E-es-es aquí — — Interesante — — Al parecer son tres o cuatro patriarcas los que sustentan a los habitantes del castillo, mi señor, Jacaré estuvo pendiente del movimiento de sus habitantes, mi señor — Se frotó las manos muy pausadamente. En esos momentos, su mente presentaba la conjugación de muchos presentes, entre ellos, el de las llamas que debían estar consumiendo al Centro Comercial y la fachada de esa edificación que tenía en frente. — Cómo se llaman — la voz seca restalló tan sutil como tirar de un gatillo. — Jacaré no pudo averiguar nada más. El elfo principal se llama Chuck, el resto de elfos al ver a Jacaré intentaron alertar a la familia — la criatura doméstica pareció haberse despojado de todo pánico para contar su hazaña que había durado apenas dos días — Jacaré puede asegurar que los Triviani son una familia muy cerrada, y sabe el nombre de su elfo principal pues uno de los miembros de la familia lo llamó allí mismo, donde el agua de la fuente borbotea día y noche — Ladeó un tanto la cabeza, incrédulo. Jacaré no había hecho lo que su amo le había pedido, y éste no se había percatado que detrás de la máscara había un gesto de fastidio. — Piérdete — no había siquiera terminado de pronunciar la esdrújula, cuando el elfo ya se había convertido en polvo. Las verjas se imponían ante él impasibles, no se movían; y los jirones que se enroscaban entre sí daban la sensación de que entonaban una melodía repelente. Hacían bien su papel protector, pero a él no le hacía efecto alguno. El Nigromante sintió que se encontraba en el medio del jardín. La fuente seguía su ciclo interminable, donde se desprendía desde su piedra el rocío del agua efervescente; y tras él, bastante más atrás, las verjas aún cerradas e impenetrables. Abrió los ojos y era cierto. El intruso siguió avanzando, sin prestarle atención a su propia presencia oscura y dantesca. Aún con su máscara, parecía un ente satanizado. La oscuridad lo enmarcaba, y la mirada color oro a la altura de su rostro era la única señal de que en ese cuerpo había algo distinto a la carencia de colores que se ceñía por toda su silueta y lo acosaba. Los segundos se gastaban y con ellos sus pasos. Ni siquiera se había percatado que la entrada principal del Castillo le había presentado alguna molestia. La oclumancia y su varita mágica, de alerce gris, iban igual de alertas la una de la otra en medio del recibidor del domicilio donde residían los Triviani. Tres elfos que hacían las labores domésticas en la misma habitación, vieron lo que sus propios ojos no querían creer. Los rumores eran ciertos. El trío de Chucks fue protagonista de una taquicardia que amenazaba con sus integridades físicas. Hasta entonces, siempre creyeron firmemente que la leyenda era solo eso, un mito; pero, ver en persona al Cardenal de la Muerte, parecía una falacia. — El Cardenal de la Muerte — dijo y su voz ronca y áspera como una piedra, cinceló la audición de cada uno de los tres elfos — aprovechen que estoy de gracia y me anuncio ante ustedes. Candela Triviani, ahora — y los tres elfos desaparecieron.

http://i44.tinypic.com/2ryj9eo.jpg— S-s-su nom-m-bre es Chuck, mi lord — — Chuck… — susurró sonriente. El asfalto a sus pies crujía estrepitosamente en esa noche invernal donde la nieve parecía querer pintarlo todo de ese profundo y somnífero blanco. El Mortífago iba ajustándose el guante izquierdo con la mano que sostenía su varita. Caminaba con esa seguridad que siempre lo había caracterizado. Mirada fija, dorada reluciente y una sonrisa bajo esa guarnición de titanio que coronaba su metal de un gesto lastimero, sollozante y en tortura. No se molestaba en mirar a Jacaré. Ese elfo que lo acompañaba siempre, desde antes del deceso de su compañero Morgan, cuyos restos reposaban putrefactos sobre las aguas de una de las lagunas en la Cámara Secreta del Castillo Ryddleturn. Lyra le había confiado ese espacio de su castillo, del que se había apropiado por encima de los reptiles perennemente centinelas que se alzaban erguidas en la bóveda de piedra. Allí, la advertencia al elfo de piel café era clara, y por ende en dicha medianoche caminaba un paso atrás de su Amo a quien llamaba: Señor Oscuro. La túnica negra del Cardenal de la Muerte bailaba al son de la melodía de la brisa fría y carente de fuerza. Sonaba armoniosa a sus oídos, pareja única que danzaba fuera del alcance de su máscara. Era larga y profunda como la noche, y la nieve que pegaba en su tela se derretía poco después de lograr otro ribete blanco sobre campo de oscuridad. El ingente mago imponía cuando caminaba. Las aceras se hubieran vaciado de haber estado pobladas como sucedía de día por esa misma calle llamada Ottery St. Catchpole, la que siempre tenía que sufrir ese azote de fuerzas pétreas que emanaban desde el alma de ese Nigromante. Y después de varios minutos de caminata, el andar del hombre disminuyó. Se detenía lentamente frente a dos verjas altas que poblaban su mirada de los jirones que se interponían entre él y el fragor de la luna llena. Detrás de esa cortina de hierro que protegía el terreno blanco detrás, un Castillo se alzaba digno de apreciación y de una fachada ladrona de buenas impresiones. Sus labios volvieron a enarcarse en una retorcida sonrisa, para luego permitirles expresar única palabra: — Chuck.

Wanda McGregor Todo había transcurrido normalmente. Esos días que había estado en la Primera Planta, laborando para poder ganarse un par de galeones, le habían servido para ser dueña de la calma otra vez. Casi, casi que había olvidado todo el altercado del que fue víctima hacía unos días atrás, altercado que de recordarlo rezaría para no sufrir otra vez. Terminaba de despachar la mercancía a una de las clientes del Magic Mall más recurrentes, su nombre casi que no lo olvidaba: Sagitas. Ella y su bóveda eran casi que protagonistas de una envidiosa lista de objetos adquiridos, muchos de ellos deseados por la vendedora. Sin embargo, su triste empleo solo le servía para poder ver cómo las cosas que más anhelaba tener para su uso, se las llevaba el segmento de ricachones de la sociedad mágica de Londres. Estaba acomodando la caja registradora, y surtiendo el estante de debajo con los últimos objetos que la tienda había adquirido, y el sonido de la puerta la llamó. Los campaneos eran sonoros, en su mayoría de ocasiones por culpa de algún cliente interesado en la compra. Esa vez, no era así, Fredson entraba con un rostro más enmarañado que la melena coronando su cabeza. — Wanda, no sé qué podemos hacer — dijo, sigilosamente a la encargada de las ventas y el orden de la primera planta del Magic Mall —, mejor renunciemos. Digo. La reunión en la oficina ha terminado, Patrick Colt viene hacia acá.

HOLA GENTE DEL FORO Vengo a solicitar un cambio en mi ficha, específicamente en la Historia de Patrick Colt (La segunda ficha del primer posteo, pues la primera es de Príncipe Godric). ------------ Historia: Luego de 666 años pagando en el Infierno por todos sus pecados en la tierra, luego de morir, Patrick Colt retorna desde el mundo de los muertos para cobrar venganza. La misión mortífaga que había dejado pendiente parecía estar en un momento deplorable. Lleno de angustias, y sufriendo aún, fue nombrado Terrateniente de las fuerzas del infierno con el fin de gobernar el terror y el caos en donde la Orden del Fénix había logrado erradicar los ideales del que había sido su fraternidad por más de seis siglos. Fue recibido como Demonio y entrenado como guerrero, sembrando y fortaleciendo el rencor que ya había echado raíces en su interior. Por ello, Mavado Evans, padre del Príncipe Godric quien fue desterrado del territorio del Edén por pecar contra su Dios, arremetió contra la vida de su hijo e hizo que, con magia prohibida y muy oscura, Patrick Colt reencarnara en el cuerpo de Godric con tal de poder cumplir su venganza y completar las misiones que le había encomendado. Ninguno logró morir en la transmutación, en su lugar Patrick Colt ha mantenido la persistente fuerza de Godric en el interior de su cuerpo. Fuerza que se mantiene lo suficientemente controlada para que no logre salir a la luz en todos estos años del retorno de su verdugo. Luego de la eliminación de su rastro en la memoria de quienes dieron a luz a la nueva sociedad, Patrick Colt se ha logrado ganar un lugar en los procesos mediáticos del Ministerio de Magia. Con un atributo de manipulador, ha conseguido obtener demasiada información, mucho más de lo que podría convertirlo en un peligro, para el beneficio propio. La marca de cadenas en sus muñecas y tobillos, reflejan el castigo de los años en el infierno, y el lugar en su cuerpo donde el amor por su bando perdió terreno. Sigue igual de leal a la Marca Tenebrosa como siempre, pero su estadía en el mundo de los vivos depende de su estabilidad emocional y del logro de sus propios objetivos, que, lejos de ser beneficiosos a los ideales Mortífagos, sumarán innumerables victorias para su interés personal y el interés del Rey en el Inframundo junto a Mavado Evans.

O sea, que en parte tengo razón, por que también había dicho sobre el botón de Me Gusta. La celebración era por el botón negativo que se quitó, que me parece un poco genial y ya no habrá que pelearse por eso(?) gracias por compartirnos tus conocimientos, del resto no sabía nada xD

El cuadrante de redacción de posteos tienen auto-guardado *0* y lo único que no me terminó de gustar mucho, pero que no es grave, es que también es de formato enriquecido, así que la opción de copiar y pegar también traerá consigo el formato desde donde lo copies, así que ya no es como antes que era un bloc de notas. ¡QUITARON EL SISTEMA DE REPUTACIÓN! *0* No sé si entrar en crisis o saltar de la felicidad, pero ese botón de me gusta el posteo, queda mejor xDDDDDDD creo que evitará que el equipo sufra constantes ataques por esas tonterías y los demás nos dejemos de pelear por eso (?) para pelear Ottery y los bandos, ca***o.

Daros, gente invitada, la bienvenida a nuestro foro. Ok, no xDDDDD Gracias hormiguitas trabajadoras, sóis una chispa de invagos todos por traernos algo que huele a fresco y que sabe a novedad. Espero que esto, con la nueva película que debe estrenarse pronto, sea el boom que necesitamos para seguir jugando en este sistema detalladamente pensado y gratis, que nos divierte día a día. Somos todos unos adultos enviciados con un mundo que nos llena de magia, y tengo que agradeceros por dejar el pellejo por los usuarios, felicitaciones!

—¿Ho-hola? ¿Se-señor Colt? Vengo de parte de-del Jefe del Mall ¿se-se encuentra usted aquí? — — Mi señor, los retumbos eran ciertos, tenemos compañía — susurró en medio de la oscuridad el elfo, con voz filosa y predispuesta, dándose media vuelta hacia los estantes que segundos antes habían atravesado para llegar hasta allí. Escuchó, tras de sí, rugir a su amo. El enojo no sólo era palpable en su gesto, sino también por el cambio brusco en la energía proveniente de su cuerpo. El elfo mostró las palmas de sus manos hacia los pasillos, altísimos y profundos hecho por las estanterías y por la oscuridad, y empezó a moverlas en esa dirección. Patrick Colt sintió cómo su alma era retenida en el lugar que se encontraba; por ello, desvió la mirada hacia arriba y a sus lados, pero logró ver esa capa celestina que los cubría por completo. — Velo de la Mu… — susurró el libro con voz femenina, interrumpida por que el Mago Tenebroso cerró sus páginas con un azotón. — Jacaré espera las órdenes del Señor Oscuro. Jacaré ha creado un campo de energía contiene dentro todo lo que cause sensibilidad al entorno: Sonidos, luces, presencias, olores, miradas; Jacaré y el Señor Oscuro se mantendrán invisibles mientras el Señor así lo desee — Pensó que jamás se había equivocado al elegirlo como su elfo de cabecera; haber prescindido de los servicios de Morgan, asesinándolo en la Cámara de los Secretos del Castillo Ryddleturn, no gozaría de su rechazo. Tomó el libro y lo posó bajo su brazo. En su otro brazo, alzó su varita de Alerce Gris. Mantuvo su mirada cortante hacia el frente en conjunto con la punta de su arma mágica, y avanzó lentamente junto a la criatura. Ambos, elfo y amo, cuidaban sus propios pasos el uno al lado del otro, Jacaré un poco más adelantado fue el primero en penetrar bajo la burbuja en esa oscuridad que compartían los pasillos. Había un silencio aterrador y muy común entre las estanterías; también compartían los ecos producidos por los pocos sonidos a esa hora de la madrugada, por lo que la voz de Wanda McGregor demoró en escucharse unos veinte segundos más. — Jaceré, ¿Identificas esa voz? — interrogó a su elfo sin dedicarle un solo gesto de esa mirada dorada y punzante; la voz del Cardenal de la Muerte era casi un hilo — ¿Sabes de quién se trata? — — No, mi señor. Lo lamento. Aunque Jacaré está tomando en cuenta que es un empleado más del Magic Mall; dijo que viene en nombre del encargado — — ¡Kurt! — — Así es, el señor oscuro está en lo correcto — Pero, Patrick Colt no estaba del todo convencido en revelarse, aún cuando avanzaban y se introducían más y más en la abstinente oscuridad. No debía confiar en envíos o encargadas, el Mago Oscuro, como Ex Ángel Caído y estratega en combate del bando tenebroso, sabía que las tácticas de espías eran versátiles y sumisas como un depredador en caza. El chirrido de la puerta de entrada volvió a sonar y el corazón de Patrick Colt dio un sobresalto. El gesto en su rostro daba la sensación de que iba concentrado cuando giraban una esquina hacia la izquierda. — Jacaré, son las ocho de la mañana. Los clientes empezarán a llegar — — Estamos cerca mi señor — le indicó su elfo mientras seguía arrastrando sus pies sobre el suelo de madera, a través de los estantes y cubiertos aún por ese escudo impenetrable. Y no se habían equivocado. La salida estaba a tan sólo unos metros frente a ellos. Se mostraba allí, con tan solo salir de ese último pasillo de estantes y atravesar a las dos mujeres que sostenían una conversación de ventas. Jacaré se detuvo un instante y reforzó el escudo. — Mi señor, ¿qué hacemos? — preguntó el elfo con una mirada asesina en su rostro, de verlo directamente a los ojos se hubiera podido leer sus fatídicas intenciones por asesinar. — Imperio — pensó de manera inmediata y susurró aquel hechizo. Wanda cayó inmediatamente en un shock emocional bajo las órdenes del Mago Tenebroso. La bruja empezó a atender al cliente, de nombre Camile Black, a quien tomó por el hombro y a quien guió hacia otros estantes para apreciar la mercancía. La entrada quedaba despejada, libre, a la espera de ser atravesada por el mortífago y su sirviente, pues la principal intención de ese hechizo sobre McGregor, era la de distraer a Camile y a ella misma, de su presencia. — Jacaré, ahora — y después de tantos minutos de suspenso, victorioso, sonrió — sácame de aquí.

~ El Auge Oscuro en el Magic Mall El dominio nocturno aún azotaba toda Inglaterra en esa madrugada de agosto. Las nubes poblaban todo el cielo y castigaban con sus pesadas lágrimas de invierno a la calle Charing Cross, donde los apurados pasos de un hombre guarnecido bajo su capucha de algodón lo delataban de charco en charco. Debajo de la capa había una sombra profunda, sólo podía verse unos labios curvados en un gesto de repugnancia y sobre ellos, dos puntos dorados que refulgían con la misma sensación. El hombre pasaba de ser un transeúnte, a un ser misterio. Diferente a los hombres y mujeres de la noche anterior, éste no reparó en los locales aledaños. Galantes en prendas, discos de música y muchas otras chucherías que distraían a la gente común. Y de cualquier persona haberse detenido para analizar la situación, seguramente el espanto se hubiera apoderado de sus cinco sentidos: El extraño hombre había entrado a ese popular bar al que no todo el mundo se atrevía a entrar. Las puertas rechinaron cuando las empujó para ingresar. Dentro, el ambiente era movido, sonoro y las copas chocaban de vez en cuando unas contra otras cuando no eran azotadas por los ocupantes contra sus mesas. Pero de inmediato fue notoria esa presencia que inundaba el lugar, el fuego en las antorchas titubearon su luminiscencia cuando el hombre reveló su identidad echando hacia atrás la capucha que lo cubría. Estaba enfocado y no se había percatado que lo único que seguía su marcha era la música que continuaba entonando sus tonadas, aún cuando esa aura negra que emanaba del hombre, se había robado el alegre aliento desde los pulmones de la gente. Él, lo único que tenía húmedo eran las suelas de sus negros mocasines, pues las gotas de la lluvia sobre la túnica cobalto con ribetes dorados como su mirada, se escurrieron hasta el suelo formando un charco. Pero no se detuvo y avanzó hasta la parte trasera del Caldero Chorreante custodiado por las temerosas miradas. Su barbilla iba en lo alto, y su pecho hinchado tal cual como su mirada que ahora fulminaba la salida trasera del local. Tenía la mente en blanco, enfocada en el objetivo y cubierta por su habilidad oclumántica tal cual como el hechizo Impervius lo había protegido de la lluvia. Abrió la puerta y se encontró con una muralla de bloques de arcilla, acortó la distancia ante ella y la puerta del Caldero Chorreante se cerró a sus espaldas, dejándolo en completa intimidad consigo mismo. Pero allí no quedó sólo al extraer esa alargada e imponente varita, cuyo poder le hacía sentir compañía, y sin interrumpir el patrón sobre los bloques del muro, éste empezó a abrirse para permitirle el paso. Qué tedioso había sido para él toda esa caminata. Estaba acostumbrado a irrumpir en el Callejón Diagon sin pudor ni vergüenza, con una máscara sobre su rostro y repartiendo dolor con esa batuta de poder mágico que ahora empuñaba con su mano. Y aunque tenía su objetivo claro y sin obstáculos en el camino, permanecía impávido, y las pocas miradas que se ganó su andar por Diagon, pasaron desapercibidas. Se permitió respirar aún más despacio cuando sus pies se pararon sobre la entrada del Centro Comercial de Magia. La inscripción que marcaba la inauguración de la estructura brillaba sobre su cara. Penetró la entrada y subió las escaleras. Era toda una gloria que sentía correr por sus venas aún cuando sabía que la luna había sido su única custodia, y que sólo le quedaba media hora para el amanecer. Pero el cargo de Encargado de la Primera Planta le permitía la entrada al lugar a cualquier hora, no le interesaba. El comercio, al estar cerrado, le iba a permitir dar una mirada al lugar para conocerlo por completo, y esa sensación de primerizo no lo abandonó cuando ingresó al bastión de ventas de Objetos mágicos del Magic Mall. Miró a un lado, y luego a otro, enmarcado por ese umbral que le había dado acceso a la enorme habitación que contenía los estantes poblados por artefactos que daban una contrariedad importante a la oscuridad que provenía desde el hombre de mirada dorada. — No hubo mucho movimiento desde anoche a las once menos cuarto, mi señor — — Perfecto, Jacaré — contestó el hombre al diminuto elfo que había hecho aparición tras el mostrador frente a la entrada — ¿Dónde está el libro? — — Sígame, el señor oscuro se maravillará — El elfo salió del mobiliario y encabezó la entrada de su amo hacia el interior. Tuvieron que pasar al lado de enormes estantes, que encaminaban a enormes pasillos. Las luces que despedían algunos objetos suplantaban a esas velas apagadas sobre las arañas que pendían del techo. Giraron una y otra vez, y el hombre tuvo la impresión que se perdía. Sin embargo, el elfo parecía estar bastante orientado por lo que confió a él los pocos minutos que le quedaban de paciencia, hasta que salieron de detrás de un último estante de oscura caoba y vio un gran mostrador. Ningún mueble allí dentro era equivalente o similar a ese. Había muchos aparatejos y estantes que se repetían, pero como ese inmueble no había uno igual. Avanzó, dejando atrás al elfo y posando su mirada en la caja registradora que emitía un interesante resplandor que parecía atraerlo, y cuando estuvo frente a él, no se pudo contener. — El Velo de la Muerte — los rumores decían que la última vez que ese objeto había sido visto, enorme como un arco de entrada, había sido dentro del Ministerio de Magia; era capaz de ocasionar la muerte de manera instantánea a quien lo cruzase o a quien fuera cubierto por su velo. El hombre, tan misterioso como siempre, volvió a susurrar como haciendo un profundo llamado a la muerte, y el libro al lado de la caja se movió —, responde a tu nuevo Dueño, cumple tu objetivo en esta sala, dale la información al gran Patrick Colt.

El tiempo parecía quedarse varado, junto con los acontecimientos. El ardor en su antebrazo izquierdo aún prevalecía, ahora que los compañeros de la Marca Tenebrosa habían aparecido para darle muerte a la mujer, quien estaba presuntamente involucrada con el bando rival. Patrick Colt no la dejaría escapar, no se lo perdonaría. Había estado demasiado ausente de las andanzas mortífagas como para fracasar en aquélla misión. Avanzó, sintiendo el placer azotar su pecho ante cada hechizo que golpeaba el pecho de Xell. La mujer recibía cada impacto con una agitación involuntaria de su cuerpo maltratado. Pero, ahí estaba su magia, estampada en el cuerpo de la bruja transformando su vida en muerte. Qué fácil había sido aquél suceso, como siempre. Mientras seguía caminando a paso lento, recuerdos recorrían su mente. Cada vez que veía otra persona sucumbir ante su poder oscuro, seguía seguro que no necesitaba esa arma de plata que le proporcionaba más letalidad. La muerte había llegado ante los ojos de los pequeños, cuyos padres eran clientes de dicha guardería, uno de los locales del Callejón Diagon. Y del mismo modo que sus recuerdos se acabaron, se acabó esa distancia entre sus compañeros Zack y Agatha, a quienes tomó del brazo y guió a la salida. Eran extrañas las miradas hacia el trío cuando salieron al Callejón mismo, que tenía en común todos los negocios mágicos en Londres. Y ni siquiera cuando desapareció con ellos, se paró a pensar que esas miradas de extrañeza se debían a que era un enmascarado sin ropa tomado de las manos de sus compañeros, antes de desaparecer del lugar.

El tiempo corría con cautela, desgranándose segundo a segundo desde el puñetero reloj. La varita de Alerce gris que llevaba siempre a cada batalla, la que le había sido fiel en cada hechizo, vibraba con suma intensidad desde su puño diestro. Sonreía, sentía una calma en su pecho ahora que alzaba la varita hacia el pecho de la Miembro de la Orden del Fénix, cuyo nombre era Xell. – Sectusempra– bramó el Mago Oscuro con malicia y predisposición. Desde la varita del Cardenal de la muerte, se escuchó el sonido de un disparo que inundó todo el lugar. Sonriente, vio como la luz del rayo asesino se integraba al escenario. La distancia entre Xell y Patrick se acortó en ese pequeño lapso de diez metros, llegando hasta su pecho para de impactarle, desangrarla en el acto y matarla de inmediato. – Vitae – conjuró nuevamente, viendo cómo una silla se transformaba con una silueta parecida a la de un león, con zarpas y colmillos de un tigre sable, cuatro patas fornidas que le permitían desplazarse y articulaciones. Ese supuesto león, se posó a un lado de Patrick para protegerle.

– Genial – el ardor en su tatuaje se incorporó como la brisa fría en una ladera bajo el azote del invierno. El calambre le producía placer, además que también le subía desde su antebrazo izquierdo, alimentando cada trazo de ese tatuaje que la Marca Tenebrosa había marcado sobre su piel. La sensación era paradójica, pues su cuerpo empezó a producir calor justo en el instante en que una máscara cubrió su rostro. Y, así mismo desnudo, desapareció de su habitación. La brisa de otoño lo cubrió por completo, apartando los gases negruzcos que habían cubierto su silueta desde el cielo hasta su aterrizaje. El sonido parecido al de un cañón, sonó en los alrededores del Callejón Diagon, donde el Mago Oscuro había aparecido varita en mano. Caminó con paso firme y agigantado hacia el local desde donde provenía el llamado de su tatuaje producto de su compañera Angel Caído, que le alertaba sobre la miembro de la Orden del Fénix que estaba en el lugar. – Nuevamente la vecina me pidió pollo, esta vez asado – comentó cuando entró al lugar a diez metros de distancia de todo mago y bruja, distancia que mantendía. – Te aplicaremos un Fuego Maldito y ya está.[/i

Por fin me convenciste de pasar, después que te arrodillaste tantas veces, me lo suplicaste, me lo imploraste, me besaste los pies y me prometiste cielo y tierra, vengo a aceptarte, Pandora, como la adoptada. *Pandora se arrodilla ante su padrastro* Levántate. En nombre de Príncipe Godric, el primero de su nombre, el primero en portar la corona del liderazgo, la ley, la luz, la justicia, y el ejército, de actual paradero desconocido, Lord Evans McGonagall, Señor de la Torre Oeste, y Guardián del Castillo, te proclamo su bastarda y heredera después de sus hijos y su hermano Gemelo Boss Elessar. Sirve a este trono como Godric lo hizo en antaño, protegiendolo y dando la vida por el reino. Que este trono de Ottery siga siendo nido de Lideres del Bando de la Orden Del Fénix, reino de legado, de lideres, y de excelencia.

Los cambios tendrán que esperar entonces, si para ellos depende un formato. Ahora no tengo tiempo para ello. Dejo claro que estoy enterado. Gracias. PD: Gracias a Lyra que me hizo el favor de adaptar mi ficha al nuevo formato, he editado el primer post para que mi ficha adopte el nuevo formato. Favor validar, saludos.