ஆ..La Culpa..ஆ

[Hayame Snape Potter Black]

Clínica

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El viejo elfo doméstico dió un gran salto al ver cómo una persona extraña se acercaba a la mujer y algunas de las enfermeras también se quedaron viendo a aquel recién llegado con dudas; parecía que se había confundido de hospital ya que había ingresado hablando con un tono bastante firme cosa que había descolocado a los medimagos que ya estaban en la clínica, porque, bueno...

No era la primera vez que llegaban personas a aquella clínica confundiéndola con San Mungo o con cualquier otra institución de salud a donde los magos y brujas fuesen a curarse; de hecho, lo normal era que muchos de los clientes que después de un tiempo se volvían permanentes, entraran en aquel sitio pensando que era cualquier otro sitio, incluyendo restaurantes, bares o cafeterías

Así que tampoco se habían sobresaltado pero parecía que al elfo doméstico no le estaba haciendo ninguna gracia el que el Holmes pareciera querer atender a la familia

-Y usted qué hace aquí!?

-Déjale Czésar... -la Snape le regañó mientras que una de las enfermeras seguía vendando el brazo de la Snape -pero que con cariño, muchacha!! -se quejó la pelirroja y luego, miró al hombre que acababa de llegar -qué haces en Santos Mangos?... esta si es una verdadera sorpresa... y bueno... sobre la magia que causó la explosión, creo que apenas estamos intentando averiguar quién y porqué estallaron aquel stand... has sabido lo que ha pasado últimamente en este sitio?

Le preguntó observándole con precaución

-Tienes poco de haber llegado al pueblo... y justo en el peor momento -se rió con cansancio

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[Kiyotaka Ayanokouji]

El mago tocó el hombro de la enfermera y haciéndole un gesto con la mirada la apartó de la vampiresa mientras el se remangaba las mangas de su camisa...

 

-- sé que es este lugar... Te sorprenderia la cantidad de veces que eh venido aqui... Las instalaciones no son como en San Mungo... Pero aquí son más discretos...--

 

Le decía el mago mientras retomaba el vendado en el brazo con cierta agilidad debido a su experiencia vendadose varias partes de cuerpo y también cuando estaba en el servicio de la orden...

 

--Asi que una explosión... Si eso explica el estruendo de hace un momento... Pero porque estás recibiendo atención médica? Que no tú especie se cura rápido?--

 

Y sin decir nada más le guiño un ojo mientras colocaba el seguro del vendaje y momentos después se estaba colocando su abrigo...

 

--nos vamos? O esperamos a tus hermanas--

[Hayame Snape Potter Black]

Clínica

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La bruja ladeó unos momentos la cabeza y luego, miró a la enfermera que al momento de ser apartada por el muchacho parecía ver a su directora con dudas en la mirada; no la culpaba, la gente ahí había aprendido a desconfiar de todas las personas debido a las experiencias previas que habían tenido con la gente del lugar y con los ataques que recientemente se habían estado dando en el pueblo

Era evidente que no se sentían muy felices y precisamente muy confiados con lo que podría significar aquello, pero la Snape asintió una vez con la cabeza y la enfermera se encogió de hombros

Si su directora se los ordenaba, ellas no tenían más que hacer que esperar ahí a que las volviesen a necesitar

-Oye! -se quejó con el Holmes no por el dolor sino por lo que había dicho -tienes que saber que de hecho, estas instalaciones fueron el San Mungo original hasta la expropiación ministerial hace algunos años... San Mungo era mío, sabes?... así que puedo asegurarte que las instalaciones de este sitio son de primera calidad, jamás bajamos en nuestros estándares de atención a cualquier paciente pero sí, así como dices nos gusta ser un poco más eh... discretos

Suspiró y miró a las chicas que también estaban siendo atendidas o más bien, a Lisette que todavía parecía bastante afectada por la explosión ya que las dos habían estado a la misma distancia de esta

-Nos vamos...? -repitió la Snape unos momentos y entonces, miró con extrañeza al Holmes -espera...quieres venir a ayudar con la investigación acerca de todo esto?

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[Kiyotaka Ayanokouji]

Por supuesto!! Así que esa bruja era la que le había negado la atención hace muchos años... Por su culpa murió durante 3 minutos... Al parecer nuestros caminos están más vinculados de lo que imaginaba... El mago se giró sobre sí mismo mirar para las hermanas las cuales estaban haciendo atendidas...

 

--reconozco que no sabía lo de la expropiación ministerial... Supongo que sí me ausente durante muchos años--

 

Y sin decir más el mago sencillamente suspiro, agarrando su abrigo de el saco un pequeño cofre que al toque con la varita, se empezó a agrandar, donde momentos después el mago comenzó a sacar varios juegos de naipes explosivos, fluidos explosivos, polvos de neblina negra y algunos otros más artículos de ataque y defensa sacando por último su vieja fotográfica...

 

--Pueden tomar lo que gusten... Uno nunca sabe lo que nos podemos encontrar--

 

Decía eso mientras sacaba una figura de madera de una Thompson por si las cosas se ponían feas...

[Malum Luxure]

(?

Me encontraba perdida en mi propio mundo en la reserva, trabajando entre las criaturas que tanto amaba y también tanto rédito le daba a mis bolsillos, era plenamente cociente de que el negocio era algo de cuidado y con los años de experiencia que tenia no admitía falla, seguía mis propias reglas cortas y simples...seguridad, bienestar y efectivo...lo esencial.

 

-Pequeños ya les conseguí un buen dueño...uno mejor que los propios.- Solté una risita divertida acariciando a los micropuff.

 

Si bien mi aspecto no era el mejor y era claro que estaba lejos de parecer la directora de criaturas, en ese momento un elfo llego y me lo quede mirando con algo de desconfianza hasta que me tendió un mensaje, me dispuse a leerla con suma atención y a pensar la propuesta, no conocía a la dama que era la que emitía la misiva.

 

-Mmmm tentador.- Dije pensativa mirando a la criatura.

 

Salí del recinto donde me encontraba mientras me acomodaba la ropa y pensaba en que era una realmente una excelente oportunidad de ver a las criaturas mencionadas, tener el favor de un nuevo cliente potencial para el negocio y bueno el efectivo era algo muy necesario con dos niños en crecimiento.

 

-Dile tú ama que mi respuesta es afirmativa y que la veré en el puerto en dos horas...muelle 7.- Le di la espalda y camine a la salida para prepararme.

 

No tenia apuro así que solo desaparecí del recinto para llegar a Luxure, bañarme, cambiarme, vestirme y salir al encuentro de mi cita..los negocios eran los negocios y como se trataban de mi campo eran prioridad.

 

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@@Lucrezia Di Medici Di Médici

[Lisette Ryddleturn]

CLINICA

La bruja apenas y podía enderezarse levemente de las heridas que tenía a causa de la explosión que la había empujado hacia atrás con todo y sus elfinas y que había provocado que la terminasen llevando a atender

Había sido una fortuna que al menos la bruja pelirroja hubiese recuperado la fuerza suficiente para ir hacia ella aunque Ashley la ayudaba, para llevarlas a todas a atender en la clínica

Al menos Lisette sabía que estando ahí estaban a salvo porque todas las personas en ese sitio las apoyaban por encima de todo y eran las personas más leales que conocía

Pero mientras finalmente se sentaba y las enfermeras la curaban con la ayuda de las dos elfinas que se veían bastante magulladas, un mago llegaba con ellas para intentar ayudar también

La Ryddleturn se colocó una mano sobre la cabeza con un gesto de total sorpresa y algo de aturdimiento, no esperaba encontrar a aquel hombre también asistiendo a aquel lugar

-Parece que no solo Sean Spina, tu también te multiplicas por todas partes?

Le preguntó la chica antes de soltar un quejido por las pomadas y pociones mágicas que le estaban colocando sobre el cuerpo junto con las gasas para que sanara más rápido

Entonces miró la pequeña cajita ornamentada que de poco en poco el mago comenzaba a hacer crecer hasta que empezó a poder sacar cosas de esta y los ojos de la bruja se agrandaron mucho

-Por Merlín bendito, qué es esa cosa?

Preguntó señalando el arma mientras rogaba con toda su alma que solo fuera una falsificación y no se pusiera a disparar esa arma muggle en ese lugar

[Kiyotaka Ayanokouji]

El mago miró de reojo ante los comentarios de aquella niña... Jóvenes se quieren comer el mundo cuando apenas si pueden con su papilla... Cosa que el mago suspirando giro el cofre hacia las chicas en espera de que se decidieran o no tomar algo... Lo que aprovecho el mago para empezar a revisar sus provisiones y acomodarlas en los diferentes bolsillos de su gabardina, incluyendo su segunda varita... Ese eterno abrigo... Cosa que volviendo a mirar a esa niña le sonrió y se lanzó un bulto de madera parecido a una granada...

 

--los aparatos y armas traídas desde el mundo exterior dejan de funcionar... La magia los atrofia por decirlo de alguna manera... Y sin embargo todo artefacto muggle creado con magia aquí mismo digamos que se vuelve funcional--

 

Y sin decir más el mago paso al lado de la bruja deteniéndose a su lado por un instante y mirándola de arriba hacia abajo se colocó su sombrero comenzando a caminar hacia la salida negando con la cabeza... Sencillamente le resultaba sorprendente lo que la juventud de ahora había avanzado...

 

--Entonces que Lissete cierto? Vienes conmigo? Quisiera llegar al fondo de esto... Tengo hambre--

[Lucrezia Di Medici]

Los muelles eran…muelles. El hedor que bañaba aquellos espacios comunes de transporte era una característica que no mermaba, sin importar el carácter mágico o muggle de la carga que se transportaba en las embarcaciones que por allí pululaban. La marea golpeaba contra las firmes estructuras de concreto y piedra construidas para evitar la erosión salina de la contaminada agua que iba y venía en forma de pequeñas olas. El frío viento traía consigo el aroma de moluscos y frutos del mar que se cocinaban casi improvisadamente en oscuras tabernas costeras, que aprovechaban la adquisición directa a buenos precios de materia prima fresca que proveían los pescadores de la zona. En la zona confluían distintos y dispares ruidos, desde el sonido típico de las gaviotas hasta las bocinas estruendosas de los buques que llegaban a la zona.

 

Lucrezia se encontraba a varios metros del muelle 7, en un estrecho pasillo conformado entre dos adosadas y precarias casas de piedra que habían sobrevivido a las inclemencias del tiempo por al menos cinco siglos. El adoquinado sendero que se mostraba irregular hacia que el sonido de sus zapatos produjese un sonoro eco potenciado por la casual acústica del lugar. Aquel sector del puerto era apenas transitado y si en el camino se había cruzado más de dos personas era demasiado. En aquella oportunidad, cuidadosa de su aspecto ante posibles testigos, la aristócrata no había escatimado esfuerzos en disimular su condición. Vestía en ese momento una blusa blanca que no poseía detalles sobresalientes a los que estaba acostumbrada ni denotaba su posición adinerada. Sus piernas eran ataviadas por una falda negra que se ceñía a su blanca piel y combinaba a la perfección con unos zapatos bajos comunes. La simpleza en su vestir la despegaba forzadamente de su típico porte elegante y lujoso.

 

- ¿Muelle 7, verdad? - preguntó, una vez se aseguró de que no hubiese nadie a varios metros a la redonda.

 

Passepartout salió de su improvisado escondite detrás de su figura, pues aquel era un espacio poco frecuentado pero habilitado tanto para muggles como para magos y brujas. Observó con sus enormes ojos a ambos lados, parte de una costumbre adquirida con la experiencia de años ante la posibilidad de ser descubierto por personas indiscretas. Su alargada nariz, apenas doblada, pareció vibrar al encontrarse con los distintos aromas que allí abundaban en cantidades escandalosas. Luego de confirmar que no había potenciales testigos cerca el elfo doméstico tomó posesión delante de su adorada ama e inclinó levemente su maltrecha cabeza en señal de respeto. La obligatoriedad de aquel gesto de sumisión era algo que Passepartout disfrutaba con suma satisfacción, pues encontraba en esa conducta un camino lento pero seguro de ganarse un cariño genuino de su ama.

 

- Lady Luxure dijo eso exactamente, ama Lucrezia. Debe estar a punto de llegar…- indicó, volviendo a recuperar con cautela su lugar detrás de las delgadas piernas de Lucrezia.

 

La Médici miró alrededor sin dejar que en su expresión fluyera la intranquilidad incipiente que comenzaba a indagarla. No le gustaba cuando las cosas se retrasaban, aunque solo fueran unos ínfimos segundos y aún más cuando se trataban de negocios por fuera de la ley. Confiaba profundamente en la fiabilidad que le asignaba, aun sin conocerla, a su contacto en el Departamento de Control de Criaturas Mágicas. Como toda una mujer de negocios, sabía que ciertas cuestiones ocasionales podían retrasar las tratativas y hasta la burocracia necesarias para efectuar movimientos de una envergadura similar a al criaturas peligrosas dentro de Gran Bretaña. Piero le había asignado una tarea incluso más complicada que convencer a los tercos e ineptos Triviani de traicionar al Ministro de Magia, quien era además su progenitor. El futuro de su alianza con Azzinari pendía de un cada vez más tenso hilo.

 

Lucrezia pegó su espalda a una de las paredes laterales del estrecho pasillo y agachó su cabeza, refugiando su semblante entre las lacias cortinas del rubio cabello que caían a ambos lados de su rostro. Sobre su cabeza llevaba un sombrero de diseño pamela de un exquisito material negro que resaltaba al golpear los tenues rayos de sol sobre él; era quizás el única detalle que recordaba su verdadera esencia. Las curvadas alas de esa pieza, adquirida en Valencia, servían para mantener aun más oculta su identidad logrando la confidencialidad pretendida para el encuentro que estaba a punto de llevarse a cabo. Sonrió mientras acomodaba los pliegues de su falda.

 

- ¿Y bien? - exclamó en el instante en que percibió, leyendo la suave brisa en el aire, la presencia de otra persona en el lugar.

 

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@@Lady Luxure Grindelwald

[Hayame Snape Potter Black]

Clínica

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La bruja pelirroja alzó una ceja mirando al hombre que se alejaba y el comportamiento que estaba teniendo y los gestos que hacía para con la Ryddleturn que parecía bastante preocupada por las armas que acababa de ver; la entendía, aunque había cosas muggles que no funcionaban había otras que sencillamente, no necesitaban de la electricidad para poder accionarse por lo que era natural que la rubia sintiera ese peligro en lo que el otro muchacho mostraba

Resopló un poco, cualquier cosa que no llevaba electricidad podía ser un problema siempre y cuando no pudiese ser detenida lo suficientemente rápido por motivos mágicos

-No le hagas caso

Le pidió a la muchacha que seguramente iba a resentir el comportamiento de aquella persona y su forma hosca de dirigirse a los demás, como si quisieran agredirle; se puso de pie igualmente adolorida aunque ya no tanto como antes y caminó hasta quedar al lado de la chica de ojos claros, dándose cuenta de que comenzaban a ser bastante cercanas otra vez.

A final de cuentas eso era algo bastante bueno aunque en casa tenían a alguien más así que...

-Vamos a ayudarlo. Acaba de regresar al pueblo y me preocupa que le pase algo a final de cuentas, porque no sabe que tanto han cambiado las cosas -suspiró pacientemente y tomó la mano de la chica para estirarla y que fueran con ellos, alzando la vista con una sonrisa divertida -vienes Ash?... a tí nunca te ha gustado perderte de la diversion...

[Kiyotaka Ayanokouji]

El mago sencillamente suspiro al ver cómo las dos chicas se iban juntas agarraditas de las manos... Y mirando la suya por un momento sencillamente la cerro no había tiempo para esas cosas... Su corazón al final se encontraba cerrado Y encerrado bajo toneladas de odio... Para el esas cosas habían acabado... Cosa que suspirando nuevamente el mago se dispuso a seguir a las señoritas...

 

--Como dije no es necesario que se preocupen por las armas son de madera y por si solas no producen ningun daño, además como les dije solo son por si acaso se pone difícil la cosa...--

 

Sin más el mago sencillamente se limitó a seguir a las chicas hacia el callejón... El aire sencillamente cambio... El ambiente se tornaba pesado... La gente nos miraba con desconfianza como si fuéramos a causar un daño mayor...

 

--Snape... Antes de que lleguemos al stand dime que sucedió? Exactamente como llegaron a ese hospital?--