SLE I | Fecha 1: Montrose Magpies vs Vratsa Vultures

[Invitado Arcanus]

Turno 4

Luciana Aymar - Guardiana

La bludger que la golpeadora de los Vratsa Vultures había enviado hacia Luciana había salido para cualquier lado. A lo mejor era que aun la joven no había entrado en calor, sea por lo que fuere, era bueno ver como aquella pesada pelota de desvíaba muy lejos de ella. Era demasiado pronto para recibir golpes. La primer amenaza ya había sido eliminada, por lo que ahora solo quedaba Cilian frente a ella. El joven lanzó un fuerte tiro hacia el aro central pero la pelirroja no tuvo más que estirar las manos y contener la Quaffle.

Sin esperar ni un instante lanzó la Quaffle a sus compañeros pero casi al instante, un cazador rival apellidado Moran realizó una buena tecnica para hacerse con ella. Luciana suspiró porque sabía que de nuevo dependía de ella mantener el partido igualado. Nuevamente se preparó para, en el peor de los casos, recibir el golpe de una pesada bludger. Afortunadamente los Guardianes de ambos equipos poseían un equipamiento más resistente por lo que el daño no sería demasiado. Luego de un pase de los Vratsa Vultures, la pelota fue a parar a manos de Cilian. La pelirroja hubiera pensado que vendría por su revancha si no fuera por la mirada que había en el rostro del muchacho, como si quisiera deshacerse rápidamente de la Quaffle. Era sorprendente lo rápido que había llegado ante ella y se preparaba para disparar.

Nuevamente, Luciana se alistó en el aro central para atajar el tiro de Cilian que era diferente al que había hecho anteriormente. Atenta a lo que pudiera pasar con la bludger que vendría hacia ella, dispuesta a esquivarla. Decidió que confiaría en sus golpeadoras que harían lo mismo con Cillian por lo que no era necesario hacer ninguna atajada extravagante. Tan solo volvería a tomar la Quaffle en sus manos esperando que ahora si sus compañeros comenzaran a atacar.

[Mica Gryffindor]

Turno 5

Aquel lejano partido en Roma la había hecho descubrir que quería seguir jugando con toda la frecuencia que le fuese posible. Por eso, al enterarse de la Liga había aceptado capitanear un equipo sin dar tantas vueltas al asunto. Esta vez no estaba allí por compromiso, sino por su propia necesidad. 

El partido había comenzado. Podía sentir en su cuerpo la adrenalina. Era una sensación que no se comparaba con nada. Si bien los dos primeros enfrentamientos entre cazadores habían favorecido a los rivales, representantes del país anfitrión, no perdía la fe en su equipo. Sabía que todos ellos darían lo mejor de sí mismos para intentar llegar a una victoria… todos ellos lo deseaban.

Por fortuna, el tercer enfrentamiento fue diferente. Cuando creyó que estaba ya perdido, logró alcanzar la Quaffle entre los demás y alejarse unos metros como para lograr desmarcarse. A lo lejos divisó a su compañero Kenzo Ito. Poco sabía del asiático, pero era infalible a la hora de disparar a los aros. Era el momento de demostrar aquel talento. 

Sin pensarlo dos veces, la Gryffindor lanzó hacia Kenzo la Quaffle, a la espera de que éste la recibiera y supiese esquivar debidamente la defensa rival. Ahora todo estaría en sus manos. 
 

[Yojimbo]

Turno 5

伊藤健三 (Kenzo Ito) - Cazador

 

Los obstáculos que había tenido que sortear para llegar a donde estaba pasaron por mi mente en ese segundo. Las horas de entrenamiento, las peleas con mi familia, la gente que había dejado de lado y la que había conocido en el camino. Incluso en ese momento con la escoba en la mano, apretándola un poco más de lo que debería,  a punto de empezar mi primer partido de la Liga, me pregunté si toda mi experiencia era suficiente. Tal vez podría haber metido media hora más de entrenamiento por día. Quizás esos trabajos que había tomado, de los cuales no estaba del todo orgulloso, para poder tener el dinero suficiente para comprar el mejor equipamiento no habían sido tan necesarios.

Di un paso hacia adelante, con mi equipo alrededor. No conocía a ninguno de ellos personalmente, eran esencialmente desconocidos para mí. Tampoco tenía ningún ser querido cerca. Nadie en esa tribuna estaba esperando verme. Nadie gritaría mi nombre, ni me reconocería, ni mucho menos. Pero justo cuando la luz del campo pegó de frente en nuestros uniformes blancos y negros, hice una promesa. En ese momento lo único que quería era darles a todos esos desconocidos un motivo para recordarme. No tenía la experiencia, quizás tampoco tenía la habilidad, pero el fuego que se había encendido en mí no tenía intenciones de apagarse. Mis dudas y mi ansiedad daban vueltas como nubes de viento negras alrededor de esa llama, pero no podían extinguirla.

 El partido había empezado a favor del equipo rival, quienes habían logrado tomar el control de la situación. Sintiendo el aire a grandes velocidades alrededor de mi cuerpo, volaba alrededor del campo, tomando todas las decisiones que creía correctas. Mi velocidad no era comparable con la de mis compañeros, quienes se movían mucho más rápido intentando recuperar la Quaffle. 

Me posicioné cerca de los aros rivales, poniendo mi atención en Mica, quien había volado alejándose de los rivales con la Quaffle bajo el brazo. Agaché mi cabeza y volé en su dirección, hasta estar alineado a ella. No tuve ni que hacerle una seña, Mica sabía exactamente donde estaba y lo que ella tenía que hacer. >>Impresionante - pensé. Su conciencia de campo es increíble. <<

Tal y como esperaba, la Quaffle salió disparada directo hacia mí con una precisión impecable. Agarré la bola de un giro, acercándome lo más rápido que pude a los aros. Aprovechando esa velocidad, lancé la Quaffle directamente hacia el Aro Central. Sentí la atención de la defensa rival en mí, pero no pude dejar de ver la Quaffle. >>¡Vamos, tenés que ser mi primer gol!<<

 

01:27 hs (ARG)

[Malum Luxure]

Turno 5

Malum Luxure - Golpeadora.

La situación había cambiado con el transcurso del partido, ahora era turno del rival intentar realizar un gol, pero es algo que yo no permitiría eso estaba en mis manos, mi melena negra serpenteaba con la brisa como preludio de que estaba por atacar, mis ojos opacos parecían estar destellando brillo rojo ya que era una característica algo particular en mi persona cuando algo me emociona bastante, mi anterior ataque no había tenido tanta suerte como había deseado y eso me había puesto un poco de mal humor, pero considerando que este deporte era muy activo siempre podrías obtener muy pronto tu revancha.

En esta oportunidad debía defender del ataque del equipo rival hacia nuestros propios aros, la esencia de mi posición en el equipo tenía dos funciones las cuales eran atacar distrayendo a los jugadores o defender los aros y a mis compañeros de la misma forma. Las bludgers siempre estaban en movimiento dentro del campo así que aprovecharía la más cercana a mi tratando que su compañera no me golpee de parte del otro equipo.

Mi sonrisa torcida es una marca de familia, la actitud de diva sobre la escoba tan natural, pero no debía centrarme en ello si no en mi objetivo, aseguré el bate en mi mano y simulé usarlo como largavista para medir la distancia, tomando impulso le di de lleno a la bludger con la clara intención de golpear a Kenzo y así no permitir que anote, era cierto que no me molestaba en aprender sus apellidos, como mucho la posición en la que juegan a medida que transcurre el partido, lo que realmente me importaba era que podía golpearlos con toda la fuerza y con eso si salía bien favorecería a los buitres.

Defendería a mis compañeros y los aros de la mejor manera posible o haría el mejor intento de no volver a fallar, por que a la hora de la verdad esa no es una opción válida.

[Sophie Elizabeth Granger]

Turno 6 

Sophía Elvira Mackenzie - golpeadora

 

Había fallado la primera vez en golpear a alguien del equipo rival y eso le molestaba, sentía que había fallado en su objetivo. Pero eso no iba a pasar de nuevo o eso esperaba así que sobrevolo de nueva cuenta el campo en espera de una bludger qué poder lanzar. Los movimientos de los jugadores de pronto favorecieron a Ito y Mael no lo había dejado pasar por alto, podía verlo intentar atajar al cazador. Miro de reojo y la vio, una bludger se dirigía hacia ella así que levanto el bate listo para recibirla y redirigirla hacia el Gryffindor. Además sería una muy buena oportunidad de desquitarse por su manera de actuar en la Mansión. Dioses, el joven de ojos negros como la noche era un mandon insufrible.

 

La pelota toco el bate y la rubia uso un golpe qué había ensayado mucho y ya dominaba, el golpe de martillo, no solo era lanzado con toda la fuerza qué poseía sino que a la vampira le encantaba apuntar a la cara de sus rivales y esa no fue la excepción. El bate fue levantado y la pelota fue redirigida a Mael con dirección a su cara

[Mael Blackfyre]

TURNO 6

Ser capitán de los Vratsa Vultures era demostrar valía y eso era lo que teniamos que hacer los siete jugadores que nos encontrabamos en la cancha. La salida fue un golpe de adrenalina que retumbaba sobre mi pecho a cada latido de mi corazón y no podia aminorarlo en las acciones de mis compañeros, como cuando robaron la quaffle en cada oportunidad o Cillian metió aquel gol. Seria recompensado luego.

Pero ahora las cartas estaban a favor de los Montrose Magpies que habian logrado pasar nuestra defensa. Saqué todo el aire y me aferré lo mejor que pude a ella. La desgraciada de Mica habia hecho aquel pase y lo habia visto en cámara lenta a su compañero. Y vino hacia mi con gran estilo. Sentí una corazonada, tal vez guiada por su mirada o tal vez no, pero intuía dónde iba a lanzarla. Asi que me decidí a lanzarme al aro central.

No sabia si todo aquello funcionaria. Tal vez atajara la Quaffle hasta con la cara, prefería aquello a la golpeadora contraria que era obvio que iba a querer distraerme. Pero no era mi intención que lo lograra, asi que lo esquivaria a toda costa. Cada pensamiento que tenia dentro de mi cabeza, la escoba parecia seguirlo. Asi que todo parecía ir viento a favor. Era el momento de arruinar su oportunidad.

Quedé protegiendo el aro central, esperando aquella misma quaffle que el jugador japones lanzo con todas sus fuerzas. Mis guantes de cuero estaban espectantes a recibir el impacto, mi tunica ondeaba, el animal emblema del equipo estaba estampada en ella. La tribuna alrededor estaba impactante para hacer mi jugada y devolverles el ataque.

[Yojimbo]

Turno Penal 1

伊藤健三 (Kenzo Ito) - Cazador

 

- ¡Gol!

Con el puño en el aire recuperé mi balance sobre la escoba tras el fuerte tiro que había efectuado. Escuché el vitoreo del público y de mis compañeros, sintiendo la atención de todos por unos momentos. Era como si se hubieran percatado de mi presencia. >> Es exactamente lo que tenía que pasar - pensé. Este será el primero de muchos. << La Quaffle había pasado justo en el medio del aro central, casi atajada por Mael. Ese jugador era un muy buen guardián, así que tendría que usar todas las herramientas posibles para que esa Quaffle siga pasando por el aro.

Casi sin darme cuenta, me moví justo a tiempo hacia abajo esquivando una Bludger que venía a gran velocidad. Sentí cómo esa pelota rozaba mi túnica por encima de mi hombro y justo a centímetros de mi oreja. Quedé perplejo ante mi suerte, y bien sabía que eso no volvería a pasar. >> ¡Vamos Kenzo, concentrate! <<

Uno de los jugadores rivales había infringido una regla minutos antes, eventualidad que a duras penas había notado. Necesitaba urgente mejorar mi conciencia de lo que estaba pasando alrededor, pero era muy difícil mantener la atención en todos los detalles mientras la nube de ansiedad y nervios volaba sobre mi cabeza. Escuché la palabra "penal" y mis compañeros cazadores volvieron a poner su atención en mí.

De nuevo frente al guardián, sosteniendo la Quaffle, en cuanto se dio la señal supe qué hacer. >> Practiqué este movimiento miles de veces, puedo hacerlo. << Tras hacer un movimiento de látigo con todas mis fuerzas hacia adelante, disparé la Quaffle usando la técnica Disparo Fuerte Recto que iba directo al Aro Central. Tendría que tener mucha suerte para poder pasar la defensa de ese talentoso guardián dos veces seguidas.

 

19:26 hs ARG

 

[Mael Blackfyre]

TURNO Penal 1

 

Estaba seguro que ante la escena de ver la Quaffle atravesar los aros, me habría costado casi todos mis dientes al apretarlos severamente entre si, por no llegar a bloquearla. Por un segundo, la bludger enviada por la Granger, me había rozado el torso. Me habría dejado seguramente un lindo moretón. Pero era una de dos y claramente había elegido la peor. El silbato del árbitro señaló el gol y los festejos hicieron que la ira brotara en mi ser. “Maldición” pensé escupiendo al suelo. Si hubiera tenido allí la varita, seguramente habría encendido la escoba del joven goleador.

Pero ahora nos preparábamos para la siguiente acción: cumplir con una fracción. Negué internamente con la cabeza, aunque perdiéramos en ése encuentro es no significaba el partido entero y si el joven lograba meter otra vez tanto teníamos dos opciones: o lo usábamos de incentivo para lograr dar vuelta el resultado o lo esperábamos afuera de la cancha. La segunda opción era más seductora. Respire. Me agarré de la escoba y le recé a todos los santos que me ayudaran.

Me elevé en el aire con la intención de proteger el aro central. Aquel aro parecía ser el preferido del cazador japonés que recién se acababa de lucir con el tanto. ¿Tendría dos goles a favor? ¿Realmente iba a dejar que eso sucediera? Para la suerte de Ito, esperaba que no, porque eso internamente me enfurecería mucho más y últimamente no lograba controlarme demasiado. Y tenía que demostrar al resto de los Vultures que era un digno capitán. Me lancé con todas las esperanzas…

[Dana Gryffindor]

Turno penal 2

Mi corazón iba a salir disparando del pecho cuando vi que Kenzo se disponía a lanzar no solo al aro central sino que en posición de la habilidad de disparo fuerte recto. Pude ver todo en cámara lenta, sus movimientos, a nuestro capitán en posición y lanzándose para atajar.

Pero la quaffle falló, y como por arte de magia cayó en mis manos con el mismo objetivo que mi rival: un segundo penal. Un brote de esperanza acarició mi estómago para convertirse en un nudo de nervios que fueron rápidamente aplacados al concentrarme en los tres aros y la guardiana de las urracas.

-Solo somos tú y yo- le dijo a la atractiva contrincante- ten cuidado, no te vayas a lastimar intentado atrapar la quaffle.

Ya no sentía nervios, de hecho una sonrisa de oreja a oreja se dibujó en mi rostro como el personaje de aquella divertida historieta muggle, el Guasón. Apreté con cada uno de mis dedos la quaffle y la estire en dirección a Luciana.

-Observala, porque recién la volverás a ver cuando atraviese uno de esos aros.

Era muy competitiva, demasiado, podía sentir cómo mi mente se despejaba de cualquier preocupación y mi único objetivo era ganar. Tanta adrenalina inyectada de golpe en mis venas me hacía sentir completamente viva dándome más y más razones para amar ese maldito juego sobre escobas.

Como si de un látigo se tratase, en posición oblicua a los aros, mi brazo arrojó la quaffle que embistió hacia el aro lateral derecho. Disparo fuerte sesgado, llamaban ese lanzamiento, rompedor de aros le decía yo.

El disparo logró que la tribuna contenga la respiración en un silencio que hacía mas ruido en mi corazón que los gritos fervientes de anhelo. Mis acaramelados ojos siguieron la trayectoria ¿daría en el aro? ¡claro! Como que me llamaba Dana Gryffindor.

Lo conseguiría, por ellos, por mi equipo y por mi.

 

[Invitado Arcanus]

El partido transcurría con mucha velocidad y dinamismo. De una jugada se pasaba a la otra en cuestión de segundos. Luciana aún tenía la espina de haber concedido ese gol, el cual hubiera atrapado si hubiera realizado algún movimento especial. Desafortunadamente sus golpeadoras no habían logrado desestabilizar a Cilian que logró vulnerar su defensa y convertir un gol con aquel tiro especial. Sin embargo, sus compaeros habían logrado empatar el encuentro con un espectacular tiro de Kenzo. Como si fuera poco, era su momento de ponerse en ventaja, ya que además del gol, tenía un tiro penal a su favor.

La pelirroja se distrajo por un momento mirando a las tribunas y cuando se dio cuenta una cazadora de los Vratsa Vultures se dirigía hacia ella con la Quaffle bajo el brazo ¿Qué era lo que había pasado? Echó un rápido vistazo al marcador y seguían empatados. Nadie estaba siguiendo a Dana para quitarle la pelota por lo que se dio cuenta que la chica se dirigía para lanzar un penal ¿Cómo había ocurrido eso? No había tiempo para preguntas. Luciana se limitó a suspirar mientras Dana se colocaba en posición de tiro.

Al parecer ella tenía más ganas de hablar que de jugar. Porque hacía comentarios con el objetivo de ¿Distraer? ¿Asustar? a la Guardiana que se limitó a sonreír. Lo que más le gustaba de los habladores, era cuando les cerraba la boca. Sea como fuere, no debía permitir otro gol. Necesitaba atajar esa pelota para que su equipo pudiera remontar el resultado. Se paró en el centro de los tres aros y usó toda su concentración para decidir hacía que aro volaría. Observó hasta el último segundo los movimientos de Dana y se lanzó rápidamente hacia el aro lateral derecho. El tiro de la cazadora era bastante fuerte, por lo que Luciana tendría algo de ventaja ya que detener esos tiros eran su especialidad.