Primer Caso // Acompañantes Encubiertos. (M.M.I)

[Illidan Burke]

Aquel departamento estaba conformado, contaba con los agentes suficientes, leales, entrenados y listos para resolver toda la problemática que la comunidad Italiana denunciaba, ansiosa de ser protegida y resguardada por aquellos que apenas tomaban las riendas de aquella desolada nación. Illidan ingresaba al recinto,  vistiendo un elegante traje negro a medida, un chaleco marrón, casi del mismo tono que su corbata, aunque esta era más oscura.  Un sobre todo largo, con los botones sin abrochar, que rozaba sus gemelos al caminar. Unas gafas de sol sobre sus ojos azules. Portaba un vaso plástico de café negro en su diestra y una dona en su siniestra, alternando entre sorbos y pequeños mordiscos entre uno y otro. 

Esta vez no se encaminó a su oficina, sino que fue derecho a la sala de juntas. Esta disponía de unos 10 metros de largo, por 6 de ancho, un atril, una pizarra, y frente a estos, pupitres individuales, ocupados casi todos por agentes del departamento, todos experimentados, y listos para seguir sus órdenes. El Black Lestrange deposito su matutina bebida sobre el atril, junto a una carpeta marrón de cartón, repleta de casos por asignar. Devoró la rosquilla  y tras chuparse los dedos y pasarlos por sobre su chaleco, se quitó las gafas para guardarlas en el bolsillo interno de su sobre todo. 

- Buenos días, damas y caballeros... - Diría para todos los presentes. Observando a su equipo un tanto ansioso. - Carrillo! - Diría buscando con la mirada a un sujeto bajito, de cabello negro y con sobre peso. Carrillo se puso de pie y realizo una especie de torpe saludo. - Asigne estos casos a los agentes libres, en grupos de dos - Diría entregando la carpeta que estaba sobre el atril. El gordo bajito de inmediato, comenzó a repartir los casos a los agentes de par en par, que poco a poco fueron saliendo de la sala, sin mediar preguntas. 

Pocos segundos después quedaron solo Illidan, Carrillo y dos agentes más, Santiago, una joven de cabello moreno y buen cuerpo y Gómez, un hombre de aspecto mexicano y bigote tullido. - El caso de más competencia... - Comenzaría para volver a dar un trago a su café.- Es de una agencia de acompañantes nocturnos que venden polvo de cuerpo de unicornio en los barrios bajos de este distrito... - Suspiraría un tanto frustrado. - Como poco entiendo de esto vamos a necesitar ayuda externa... - Agregaría. - ¿Alguna idea? - Soltaría mirando a los restantes. Y sin dejar pasar más de un par de segundos, Santiago se pondría de pie, haciendo bailar la coleta que sujetaba su peinado hacia atrás, aferrado a su cabeza. - @ Cillian Ryddleturn  es ministerialmente, el único acompañante activo del CMI, podríamos consultar con él... - Diría eficiente y alcahueta la muchacha. 

Illidan tomaría unos segundos volviendo a beber su café, mientras se preguntaba por qué diablos un acompañante estaba declarado como tal dentro del ministerio. - Gómez, vaya a buscarlo, y pídale amablemente que nos ayude a resolver este caso... - Ordenaría el directo. Gómez sin media palabra y sosteniendo su varita desaparecía del lugar, en busca de aquel compañero para la misión. 

 

 

 

Editado 25 de Agosto del 2021 por Illidan Black Lestrange
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[Alyssa Black Triviani]

Alyssa se apoyó contra el umbral de la puerta, contemplando desde su posición como Illidan coordinaba a sus agentes. No tenía idea qué asuntos podría estar tratando el Departamento de Seguridad Italiano, pero sin duda despertaba su curiosidad. Así que en lugar de seguir con la ocupada maána que tenía por delante, la Triviani optó por quedarse allí escuchando, bebiendo el café que descansaba en su mano derecha. 

- Polvo de cuerno de unicornio... - masculló la Triviani.

Había escuchado hablar de aquella droga, al parecer era todo un éxito arrazando Europa sin nadie que le haga competencia. Pero el coste que semejante droga tenía sobre la población de unicornios era debastadora..., y las consecuencias en la comunidad mágica tampoco se quedaban cortas. 

Editado 5 de Octubre del 2021 por Alyssa Black Triviani

[Cillian Haughton]

— ¿Gómez?

Cillian tenía poco tiempo desempeñándose como acompañante y en los últimos días estaba pensando demasiado en dejarlo debido a su relación con Ludwig, pero aún así aún tenía un par de cuentas por pagar y necesitaba el dinero, por eso no le sorprendió el momento en que aquel hombre apareció justo a un lado suyo en medio de una concurrida calle de Londres. Sus clientes frecuentes sabían exactamente dónde encontrarlo siempre que estuviese disponible gracias a un encantamiento que no podía recordar quién le había enseñado.

— ¿Lo de siempre? —cuestionó al agente del departamento de seguridad mágica italiana.

El hombre tardo solo un segundo en responder, no estaba ahí para requerir aquel tipo de servicio y fue entonces cuando Cillian se detuvo, sentía un poco de intriga por la que Gómez lo buscaba. Rebuscó entre uno de los bolsillos de su gabardina y sacó un paquete de goma de mascar, ofreció una al agente y al recibir una negativa de este comenzó abrir una de ellas.

— Necesitamos de tus servicios, Ryddleturn. El departamento de seguridad mágica la necesita —Cillian escuchaba atentamente las palabras del agente mientras masticaba—. Tenemos un caso relacionado a una agencia de acompañantes y requerimos de tu apoyo para infiltrarnos.

No estaba entendiendo nada, a Gómez nunca le entendía nada y es por eso que sus encuentros casi nunca incluían algún tipo de conversación. Aún así, aunque no entendía nada, Cillian aceptó a acompañarlo al recinto, seguro ahí abría alguien mejor calificado para explicarle la situación. Extendió su brazo izquierdo para tomar la mano de Gómez y con un ligero movimiento de varita desaparecieron.

Un segundo después estaban en una pequeña sala de reuniones en la que se encontraba un llamativo grupo de personas esperando indicaciones del Director del departamento sentadas sobre unos pupitres que a algunos de ellos le quedaban algo pequeños. Cillian comenzó entonces a masticar un poco más fuerte, tenía que figurar. Y aprovecho un pequeño silencio para tomar la palabra.

— No entiendo porque Gómez me ha traído aquí, pero por lo poco que ha dicho creo que es algo grave, ¿alguno podría explicarme?

 

@ Illidan Black Lestrange

[Illidan Burke]

Fue imposible no captar la llegada de Gómez con Cillian, no espero un segundo en hablar, y al parecer Gómez no supo explicarle al prostituto para que se le requería. Illidan aun de pie sobre el atril, se fijó en el, reconociéndolo de inmediato, claro que el nombre le sonaba, pero al verlo los recuerdos del la fiesta en la Dumbledore llegaron a el.  

*Clak* Sonaba en algún lugar de la sala de juntas, Aun así nadie pareció notarlo. - Cillian es bueno verte, espero me recuerdes - Diría el oji azul intentando beber de aquel vaso ya vacío, algo decepcionado observó el mismo unos segundos. - Ejem - Santiago se acercaba con lo que al parecer era otro vaso de café. - Señor director imaginé quería beber algo más y bueno, puede quedarse mi café - Diría la morena haciendo entrega de su expreso. Illidan claro tomó el vaso sin mediar palabras. *Clak* Volvía a sonar en el lugar. 

- Cillian estamos investigando una banda... - Diría el director. - Son acompañantes, una agencia completa, que usando eso de fachada venden polvos de unicornio... - Continuaría. *Clak* una vez más. Illidan levantaría la mirada un tanto nervioso, recorriendo el salón, hasta que allí volvió a sonar, *clak*, visualizando el origen del sonido.

Sanchez, uno de los agentes más viejos, de unos 150 kilos, cabello corto y gris, se encontraba descalzo con uno de sus gordos pies sobre el pupitre frente a él, haciendo uso de un alicate, cortaba sus uñas como si en su casa se encontrara. - ¿En serio Sánchez... ?- Diría el Black Lestrange un tanto frustrado. - ¿Aquí y ahora? - agregaría. Sánchez levantó ambos hombros como si no entendiera el cuestionamiento. - Gracias a dios este año te jubilas... - Diría uno de sus compañeros. 

 

@ Cillian Ryddleturn

[Cillian Haughton]

¿Qué demonios? 

¿Acaso aquel era un lugar serio? No, quedaba bastante claro que no lo era. En su camino hacia el frente, Cllian se acercó a uno de los pupitres donde otro corpulento hombre se encontraba sentado, pero este de una estatura algo más pequeña que el otro y no pudo evitar arrugar la nariz, algo apestaba realmente mal alrededor de aquel hombre. 

— Pensé que el Departamento de Seguridad Mágica Italiana tendría personal más capacitado entre sus miembros —comenzó, no conocía de aquel lugar a nadie más que Gómez e Illidian por lo poco que le había contado Ludwig sobre él más que por otra cosa y quizá se estaba equivocando pero la primera impresión sobre los presentes no era realmente algo bueno—, Illidian.

Le tomó solo un par de segundos llegar hasta la posición de Illidian, quien parecía un poco molesto por la acción de aquel viejo y regordete agente. ¿Polvo de unicornio? ¿A que se refería exactamente con aquello? Para Cillian había solo dos opciones, podía ser un est****o nombre para algún tipo de sustancia extraña o quizá era algo mucho peor y estuviera realmente relacionado a la caza ilegal de unicornios. Pero la realidad es que no podía saberlo, no era uno de aquellos agentes "calificados" que se amontonaban en la sala de reuniones.

— ¿Sabes el nombre de quien maneja esa agencia? —a pesar de no tener bastante tiempo siendo un acompañante, conocía un par de personas y sabía también que había más de uno con los que era mejor no relacionarse—. Gómez menciono algo sobre infiltrarse, quizá pueda ayudarlos, pero da por seguro de que si me pasa algo Ludwig te matará con sus propias manos (?).

@ Illidan Black Lestrange

[Illidan Burke]

Illidan escuchaba a Cillian quejarse, un tanto decepcionado por el equipo del departamento, pero el rubio sabía que aquellos eran invaluables agentes, por más desastre que fueran en sus vidas personales, eran óptimos detectives, y no fallaban a la hora de combatir el crimen o reprimir hippies. 

- Pues te equivocas... - Diría el director mirando a Cillian un tanto agresivo. - Sanchez por ejemplo, así como lo ve, aprendió a leer cuando aún usaba pañales... - Miraría con orgullo a su subordinado, el cual ya calzado se ponía de pie para hablar. - Si aún lo recuerdo, tenía como 9 años! - Orgulloso con una sonrisa en el rostro volvió a tomar asiento. 

- La agencia se llama Gatitas Melosas,  Dirigida por Jony Posaderas locas... - Tras la primera información, golpearía la pizarra, revelando una foto de un sujeto, de un metro ochenta, sobrero de copa y traje a juego color rosa. Llevaba con moño dorado, el cual no combinaba con el resto del atuendo,  del sombrero salía una pluma negra. - Hay un casting de acompañantes, masculinos y femeninos en la noche... - Diría ahora centrándose en el punto. - Tú eres el experto Cillian, ¿qué recomiendas? - Finalizaría el director. 

 

@ Cillian Ryddleturn

[Cillian Haughton]

¿Experto?

El no se veía como un experto, pero quizá algo podría aportar a ese caso. Jony Posaderas Locas, repasó mentalmente la información que tenía sobre el inmenso mundo relacionado a su profesión. Por que sí, al final del día, alquilarse a cambio de un par de galeones también podía considerarse una profesión. Le bastó un par de minutos recordarlo, había estado una vez en aquel lugar que Illidian acaba de mencionar.

— Supongo que quien fuese que te proporciono esta información hizo bien su trabajo y te informo que esas gatitas que menciona el nombre del lugar son en realidad ga-ti-tos —separó cada una de las sílabas de la palabra que enfatizar aquel detalle—. Jony es un tipo raro, pero con bastante poder.

Sonrió, tenía una idea pero no estaba tan seguro de que a al Director de Seguridad le gustara. Cillian había observado a los presentes, ninguno daba con el perfil de las gatitas de Jony. Ninguno más que Illidian así que si quería resolver aquel caso tendría que involucrarse el mismo. ¿Estaría de acuerdo? Lo descubriría en un momento.

— Debemos infiltrarnos, conozco el lugar y Jony me conoce a mí así que no desconfiara de mi —la sonrisa en el rostro del Ryddleturn se hacia más y más grande a cada segundo—. Pero necesito a uno de ustedes conmigo, al final del día ustedes son los expertos, ¿no? Por cierto, ¿tienes algún problema con los tacones altos, Illidian? 

 

@ Illidan Black Lestrange

[Ludwig Malfoy]

El establecimiento Gatitas Melosas había visto pasar un sinfín de “trabajadoras” cuyo objetivo era entretener a sus invitados. Una tras otra hacían show de tipo cabaret y los espectadores se quedaban impactados ante tal show, muy pocos sabían que en realidad se trataban de Drag Queens, hombres vestidos de mujer, con tacones, peluca y maquillaje exótico. Todos y cada uno comprometidos para dar el mejor espectáculo jamás antes visto, desde karaoke, show de lipsync e incluso carrera de tacones.

Ludwig Malfoy por su parte había tenido años queriendo experimentar una nueva faceta, había estado obsesionado con un show muggle que se llamaba RuPaul Drag Race y cada día estaba más convencido de querer ser parte de ese espectáculo. Por lo que un día se armó de valor y llegó al establecimiento donde sabía que llegaban estos chicos exóticos y se convertían en maravillosas actrices. El rubio temblaba pero se había decidido a hacerlo, no podía decirle a nadie de su familia y mucho menos a Cillian, no quería arruinar su relación.

Entró al lugar con unos lentes de sol una gabardina larga y un sombrero, tratando de ocultar su cara para no ser visto por nadie. Una vez dentro, se fue a los camerinos y vio ahí a todas las chicas que se preparaban para la función. Evidentemente nadie lo esperaba y no sabía siquiera si le harían caso pero tenía que intentarlo.

-Ho…hola – dijo pero nadie le hizo caso, las chicas se estaban poniendo listas, algunas con siliconas, otras con pelucas, tenían mucho que hacer – disculpen… DISCULPEN – gritó y un par de drag Queens lo voltearon a ver – yo se que esto es muy inusual pero…quisiera convertirme en drag.

Las chicas lo miraron y todas dejaron de hacer lo que estaban haciendo, todas menos un par al parecer se estaban drogando con una especie de polvo, las demás se le acercaron y sonrientes lo pusieron en una silla, ese día Ludwig Malfoy se convertiría en Pepé dela Creme.

[Illidan Burke]

Suspiro un tanto agobiado, Cillian parecía tener más información que él, y el Black Lestrange, pensaba en mandar a la Agente Santiago en su lugar. Pensó detenidamente en el vestuario, el departamento no tenía ese tipo de cosas, calculaba que Cillian tampoco, pero sin afirmarlo, Illidan ya había asumido que debía vestirse de mujer, e infiltrarse junto con Cillian en aquel tugurio. 

- Muy bien, tenemos poco más de dos horas para prepararnos - Diría un tanto inquieto, no le gustaba llevar misiones sin preparación, pero la charla se había prolongado y la información ahora era otra. - Amy Santiago, necesito usar su departamento, usaremos su ropa para ir al casting... - Diría un tanto serio. - Cillian, tendrás que hacer de asesor de imagen, no quiero parecer un travestido inexperto... - Eso lo decía más que nada porque si no se producía bien, la misión fracasaría.

- Todo sea por el bien de la comunidad Italiana... - Diria intentando ganar valor. La agente santiago con varita en mano, tomaria la mano de Illidam y buscaria Contacto con Cillian, tras unos segundos, se aparecerian en el dormitorio de la agente. Era un cuarto espacioso, con un vestidor, dos armarios y dos cajoneras. - Señor cillian disponga de la ropa, tiene de todo.... - Diria Amy al acompañante profesional.

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Las "chicas" se preparaban para lo que sería una noche de mucho trabajo, a la vez que esa misma noche, se realizaría el Casting, para los nuevos ingreso. Lud, en un afán de explorar nuevas emociones, se encontraba en el cambiador general de las Drags queens. - Disculpa cariño, el casting es en el piso de arriba... - Diria una de ellas, con un poco de poco blanco en la nariz.

- Y deberías tener tu propia vestimenta, nadie te prestará nadie aquí... - Le diría otra. - Somos muy materialistas! - Agregaría para luego volver a fijar su vista en el espejo y aplicar un poco de rimel a su rostro. El sanador, no tenía muchas opciones. O buscaba algo que vestir para el casting, o salía de compras urgente. 

@ Cillian Ryddleturn  @ Ludwig Malfoy Triviani

[Ludwig Malfoy]

Todas las chicas le habían puesto empeño a la cara del Malfoy, le habían puesto bastantes máscaras para hacer su piel perfecta y borrar las cicatrices que tenía por las batallas anteriores, le pusieron rímel y lápiz labial, incluso una le prestó una peluca con la condición de regresársela mas tarde. Pero ninguna de ellas le quiso dar algo de vestir. A Ludwig no le sorprendió la actitud de aquellas drag queens, sabía que eran muy competitivas y celosas de su trabajo, definitivamente no tenían tiempo para un amateur, después de todo ellas se estaban ganando la vida “honradamente”, sin embargo el Malfoy había pasado por una serie de etapas para poderse aceptar y animarse a descubrir su nueva faceta que no quería darse por vencido.

Además de todo era evidente que no se echaría para atrás con el rostro ya maquillado. Se miró al espejo y se veía sensacional, una peluca negra con cola de caballo hacía una perfecta combinación con sus ojos azules. Era una persona diferente y se sentía extasiado por descubrirse a si mismo, o misma. No tenía tacones ni vestido pero haría lo necesario para conseguirlos antes de la audición.

Ahora sabía que el casting sería un piso mas arriba pero ¿Dónde encontraría un vestido de su talla? No podía salir así a la calle, lo reconocerían, pero desafortunadamente no tuvo otra opción, posiblemente nadie lo identificaría con tanto maquillaje y la peluca negra. Salió del lugar y comenzó a caminar buscando una tienda donde podría encontrar un atuendo digno para el… o ella.

 

@ Cillian Ryddleturn  @ Illidan Black Lestrange