Ver el castillo después de tanto tiempo la dejó en blanco por unos minutos, sentía una mezcla de emociones, en general se sentía rara pero a la vez feliz de ver aquel lugar nuevamente. Suspiró y decidió avanzar, sin dejar de observarlo todo a su alrededor, tratando de recordar... Y los recuerdos venían a su mente, agolpandose uno tras otro, y aunque no todos eran buenos no pudo evitar sonreír con nostalgia.
- Siempre se vuelve al hogar - recordó.
Escuchó voces en algún lugar del castillo pero no quiso interrumpir, pensó que sería mejor ir a saludar después de descansar un poco del viaje. Además aún tenía que encontrar una habitación disponible, porque al parecer todo se había movido desde la última vez que estuvo ahí.
Después de dar un pequeño tour, siempre evitando toparse con alguien, encontró una habitación que le pareció adecuada para quedarse. No estaba segura si estaba en el segundo o tercer piso, pero se podía ver el lago desde una de las ventanas y eso le bastó. Con ligeros movimientos de varita arregló el lugar y después se dejó caer sobre la cama. Todo era calmo y mientras intentaba recordar la última vez que durmió en el castillo sus ojos se fueron cerrando casi sin darse cuenta.