๑۩♚۩๑ Mansión Black Lestrange ๑۩♚۩๑ (MM B: 78195)

[Ashley Emily Black Lestrange M.]

Reunión de la Honorable familia Black Lestrange

Por varios minutos contemplaba aquella carta que me había llegado meses atrás aquella reunión había comenzado, la verdad mi desaparición por el mundo mágico lleva muchos años, tenía miedo que la familia ya no me recordara o peor aún, que estuviera tachada en el árbol familiar.

 

¿Qué sería de mis padres?¿De mi hermana Gemela?¿Que nuevas cosas habría en aquel lugar?. En el fondo sabía que tenía que vencer aquel miedo e ir a visitar aquella familia, el mundo de los mugles no estaba mal, pero no pertenecía ahí. La búsqueda de mi pequeña hija perdida y de su padre Alex había sido un fracaso.

 

-Me rindo, es imposible encontrarlos.-Me dijo a misma, el deseo por querer encontrarlos me había alejado de mi familia, en el fondo sabía que no me daría por vencida pero encontraría la manera de encontrarlos desde mi hogar.

 

Era momento de regresar, pero el tiempo y la distancia había dejado atrás aquella pequeña bruja tímida con buenos sentimientos, que a veces sentía que no encajaba en la familia Black Lestrange ese había sido el motivo por el cual algunos meses antes de desaparecer estuve viviendo con mi padre adoptivo en la Castillo Gryfindor una familia que me había acogido amablemente.

 

*****

 

Caminaba por las calles del pueblo de Ottery en dirección a la casona de los Black Lestrange que se encontraba alejada del pueblo, llevaba conmigo solo una pequeña maleta que venía jalando con la mano derecha. Sentía las miradas de los magos y brujas, tal vez era mi atuendo muggle llevaba un vestido color negro arriba de la rodillas haciendo juego con un saco color rosa pálido y una zapatillas del número 15 del mismo color.

 

El Camino fue corto y cuando menos lo espere ya me encontraba en la puerta principal de la Mansión Black Lestrange, no dude en girar la perilla y entrar a la casa, al fin de cuentas esa también era mi hogar, era momento dejar aquella niña tonta que podía ser manipulable y a causa de mi inmadurez había perdido a mi hija.

 

-Ama Ashley esta en casa – Pude escuchar a mi elfina Venus, la gire y pude ver como hacia una pequeña reverencia

 

- Dejate de tonterías Venus y ve a dejar mis cosas a mi habitación y prepárame un poco de té- Le dije en tono arrogante.- y también busca a mi hermana Mia, dile que estoy aquí y que vengo a ver que alcanzo de la reunión familiar

 

- No he visto a la ama Mía en casa – dijo Venus

 

- busca Marie o alguno de sus elfos – Le dije mientras caminaba a la sala – Elfina tonta- destras de ellos escuche un clack y desaparecio

Editado 6 de Marzo del 2017 por Ashley Emily Black Lestrange M.

[Rose Black Lestrange]

Las copas,la música retumbaba en la cabeza de Rose pero sumando a eso un malestar que no entendía por completo,en el otro extremo de la mansion se encontraba su hermana y con ella una sensación de atacarla aunque sea con alguna de las sandalias que pensaba sacarse;en ese momento un pequeño recuerdo asomaba en su cabeza, Alegna a los besos con el chico que rose había pasado la noche divirtiéndose.La furia volvía en su interior al parecer el alcohol hacia su magia no en una si no en ambas gemelas que no tan solo compartían el parecido físico también el gusto por los hombres.

 

Los gritos retumbaban de la sala principal hacia toda la mansion sin importar que los familiares pudieran escuchar,por otro lado los elfos corrian asustados para dar aviso.

 

-Tenias al que quisieras pero no justo a el te le tiraste !!! que te pasa ?!- con una mirada intensa sobre su hermana mientras en su bolso buscaba su varita pero los nervios le hacian una mala jugada.

 

-Nunca me terminaste de conocer pero te juro que hoy los vas a hacer, claro vos crees que por haber pasado 24 años rodeada de nuestra familia e involucrada en todo este mundo te sentís con el derecho de pasar por encima mio, te informo que tengo el apoyo de nuestro padre y me ire con el -

 

@@Alegna Black

[Alegna Black]

El dolor de cabeza mezclado con las imágenes de una noche por decir ajetreada llegaban en estampida haciendo que mis ojos pesaran mas que si estuviese cansada, mal sabia que mezclar bebidas no le daba bien resultado pero.. por festejar su cumpleaños había obviado ese detalle y la noche invitaba al descontrol. ¿Cómo había llegado a la mansión? Valla que misterio, ya ni recordaba como podía estar parada.

 

Pero allí se encontraba en una punta de la sala de su hogar, con la boca pastosa y muerta de sed, un estrepitoso sonido agudo y unos pasos me sacaron de la concentrada misión de caminar dos pasos seguidos sin retroceder tres. Los gritos de su hermana eran mas inentendibles que lo que había pasado la noche anterior, pero unos recuerdos aislados surcaron mí cabeza y el enojo de Rose cobro sentido.

 

-Ya no grites escandalosa agite la mano restando importancia a lo que decía que culpa tengo yo si el pibe prefirió una versión mejorada?

 

Me sobaba la sien mientras contestaba solo impulsada por el cansancio y la resaca, sin darme cuenta que mis palabras podían ser dolorosas o hirientes. Me descalce y deje que mis pies disfruten el frio piso de la sala. Rose decía algo pero no lograba conectar ideas así que no me moleste en seguir escuchando hasta que cierta parte mi cerebro decidió encenderse. ¿El apoyo de nuestro padre? Era cierto que con él mi relación no había florecido pero que me i portaba eso.

 

-Sabes Rose haz lo que creas necesario, y saluda al señor Houghton de mi parte.

 

Trate de subir las escaleras pero mis piernas no respondían como debian.

 

@

[Rose Black Lestrange]

- A mi no me das la espalda Alegna Black - aun mas molesta por las palabras y acciones que mostraba su hermana,toma en sus manos la varita y con lo primero que salia de su boca apunta a su gemela,al menos sus intenciones no eran de hacerle daño pero si aclarar las cosas con ella y dejar bien su postura.

 

--Carpe retractum-el rayo de luz rodeaba la cintura de la gemela y con un simple movimiento Rose la atrae hacia ella.Era la primer discucion que estaban pasando las gemelas por lo tanto no se podría definir que pasara si alguien no intervenía a tiempo,por que las copas de alcohol la juventud y aun sus hormonas a flor de piel eran dos bellas en potencia con su apellido por alto.

 

El tiempo pasaba lento o se trataba que los elfos demoraban de localizar a algún familiar para detener la absurda disputa en un día festivo por el cumpleaños de ambas, donde casualmente debían festejar en la mansion pero ningún rastro de festejo mostraba la impotente mansion,¿podría ser que se olvidaron de tan importante dia?.

 

@@Alegna Black @@Ashura Lestrange @@Mia Black Lestrange etc ( son muchos para recordar)

[Alegna Black]

Dos malditos escalones eran los que con gran esfuerzo había subido para que una fuerza invisible me llevara desde el punto que me encontraba casi al frente de mi clon bien vestido, debía admitir que esa noche tantos celos sentía por esa personalidad abierta y simpática que Rose emanaba que mi mejor idea fue quitarle al joven que había disfrutado con ella toda la velada. Pobre hombre ni cuenta se dio que la que lo besaba no era mi hermana sino su gemela.

 

-¿Qué quieres Rose?

 

Saque la varita y con fluido movimiento corte la unión que me ataba a la suya, pudiendo posicionarme a dos metros de ella pero sin perder contacto visual, si quería un duelo estaba preparada aunque sea para perder, no me daba bien en ellos pero Rose no lo era tampoco, o eso creía. Extendí los brazos en señal de entrega que ella hiciese su primer movimiento.

 

-Vete Tadeus

 

El pobre elfo no pudo ni abrir la boca mi orden era clara y concisa, pero él estaba a cargo de la mansión y de su inmaculada estética y no pensaba dejar que dos ebrias miembros de la familia solucionaran sus problemas en medio de la sala, con un simple chasquido de dedos, nos re direcciono a la sala de duelos que contaba mi hogar. Tanto tiempo sin pisarla, creo que el mismo que no veía a mi primo.

 

¿Qué habrá sido de él? ¿habrá vuelto a su vida de muggle? No lo culparía, habilidades de mago no tiene y la presión de llevar el prestigioso apellido Black Lestrange le debía pesar mas de lo necesario y no supo como cumplir con ese papel.

 

-Bueno es un lugar mas propicio ¿no crees? Ahora ¿quieres solucionarlo?

 

Me despoje de la chaqueta, quedando en la remera de la noche con los jean, ni un ápice de duda surco mi rostro y mi cerebro había ganado la lucha con la resaca por lo que ya estaba prácticamente lucida. Mantuve mi diestra relajada con la varita a punto. No sabia como reaccionaria Rose en eso tenia razón. No la conocía.

 

@

[Mia.]

Sus visitas a su mansión comenzaban a estar marcadas por eventos peculiares, que iban desde altercados con visitas indeseables, alguna que otra celebración y si tenía suerte alguna disputa familiar, ¿en qué momento su hogar se había convertido en un sitio con tanto movimiento? No lo tenía del todo claro, pero al parecer la llegada de sus hijos y nietos, estaban cambiando el aura tranquila que tanto le había gustado en otro tiempo, para convertirla en algo con más vida y alegría, aunque considerando que la alegría no se presentaba tan a menudo, al menos si tenía más vida.

 

Considerando la posibilidad de obsequiar algo a sus nietas Alegna y Rose, pero no sabía que era lo que podía darles una vaga idea cruzó por su mente; diversión. Sí era justamente lo que tenía pensando para que sus nietas disfrutaran del día en que cumplían 24 años, aunque considerándolo bien, no estaba segura que su sorpresa fuese recibida de tan buen modo, pero poco le importó porque en ese momento su mente comenzó a divagar en la posibilidad de volver a la casona de su madre y encontrarse con su diversión personal, y más que diversión era alguien que la hacía sentir un poco confusa.

 

Inmersa en sus pensamientos, soltó una blasfemia en el momento en que gritos provenientes de ese par que tenía como nietas llegó hasta ella. ¿Qué estaba ocurriendo? no estaba del todo segura, por lo que negando lentamente, sacó de su mente los recuerdos del pelinegro de su sistema y con la varita en mano, salió de su habitación, para encaminarse hasta la sala de duelo. Una vez allí, ingresó con aire molesto, mirando a cada una de sus nietas, respiró profundamente, era mejor estar un poco relajada y no dejar ver su enojo.

 

— ¿Qué demonios esta ocurriendo? —bramó fulminándolas con la mirada, esperando a que respondieran a su pregunta, bajó lentamente su mirada hasta su vestimenta.

 

Se encontraba vestida únicamente por una fina y casi transparente bata de cama, que dejaba poco a la imaginación, un atuendo que era más que lógico no era el apropiado para que su familia la viera. Considerando esa situación, se incrementó un poco su molestia, por lo que presionó a las dos brujas a que respondieran a su pregunta cuanto antes y le aclararan lo que estaba ocurriendo.

 

—Sino hablan, pueden irse olvidando de sus regalos de cumpleaños y a mi no me vengan con amenazas de que se irán con su padre. —las últimas palabras estaban cargadas de un dejo de dolor, porque era un golpe bajo decir eso y estaba segura que si su hija Ashura escuchara esa declaración de Rose, estaría triste.

 

 

Esperando su respuesta jugueteó con su varita mágica entre sus dedos, deseando que no la hicieran esperar mucho, porque su paciencia en realidad era muy poca.

, Editado 21 de Mayo del 2017 por Mia Black Lestrange

[Mia.]

Sus visitas a su mansión comenzaban a estar marcadas por eventos peculiares, que iban desde altercados con visitas indeseables, alguna que otra celebración y si tenía suerte alguna disputa familiar, ¿en qué momento su hogar se había convertido en un sitio con tanto movimiento? No lo tenía del todo claro, pero al parecer la llegada de sus hijos y nietos, estaban cambiando el aura tranquila que tanto le había gustado en otro tiempo, para convertirla en algo con más vida y alegría, aunque considerando que la alegría no se presentaba tan a menudo, al menos si tenía más vida.

 

Considerando la posibilidad de obsequiar algo a sus nietas Alegna y Rose, por su cumpleaños. Se quedó de pie mirando los jardines desde su habitación, recordando como le costaba cada vez más abandonar el castillo de la familia de su madre, porque era el único sitio en el que el Crowley solía frecuentarla, algo que le agradaba, pero a la vez le causaba alguna que otra confusión, porque no estaban avanzando hacía ningún sitio, algo que en otro momento y en el presente no estaba tan segura de agradecer.

 

Sacada de sus pensamientos por los gritos provocados por una de sus nietas, blasfemo, ¿qué ocurría? sin detenerse a pensar si quiera que aún se encontraba con una simple bata de baño sobre su cuerpo, abandonó su habitación con la varita en mano, para encaminarse hasta la sala de duelos, en donde al parecer se estaba llevando a cabo la pequeña pero gran disputa de hermanas. Inhalando profundamente, ingresó a la habitación y miró a cada una de ellas directamente a los ojos.

 

— ¿Qué diablos esta ocurriendo? —bramó sin siquiera detenerse a pensar en que su tono de voz no era para nada el más adecuado para el momento.

 

Necesitaba comprender que era lo que ocurría, así que esperaba que pronto alguna de las dos diablillas que tenía por nietas le respondieran, mientras se llevaba la diestra hasta su rizada cabellera y la apartaba un poco de su rostro. Mientras caía en cuenta de su vestimenta, algo que no habría que vieran los demás miembros de su familia, porque poco o nada dejaba a la imaginación.

 

—Espero que sea algo relevante, porque sino es así lamentaran todo y se irán olvidando de sus regalos de cumpleaños. —las miró impaciente, esperando a que alguna de las dos comenzara a hablar.

 

@@Alegna Black @

[Rose Black Lestrange]

Jamas se esperaba eso ni menos en cuestión de segundo aparecer en una sala de duelos,una completa inexperta para la situación pero mas que eso corría el hecho que no deseaba un duelo con su hermana por mas molestaba que se encontrara;las palabras de Alegna sobresaltaban en su cabeza al borde de arrepentirse hasta de ese enojo,toda una verdadera estupidez que arruinaba el día especial.La culpa y la poca lucides necesitaban poner un fin a lo que estaba por empezar varita firme y con velocidad prefirió silenciar a su hermana.

 

Silencius, disculpa Ale...sin terminar las palabras se hacia presente su abuela Mia con un atuendo sumamente no apto para el momento.

Con timidez y vergüenza Rose bajaba la mirada peor momento no podía ser,un casi duelo con su hermana y como frutilla su abuela enojada con ambas pidiendo explicaciones acaso ¿algo mas podia pasar?;y si justo silencio a su Hermana cuando ambas necesitaban dar explicaciones.

 

Fui yo Mia solo dije la primer estupidez que salio de mi,creí que con eso molestaría a Alegna de frente pero aun su mirada al suelo y con un pequeño movimiento de la varita terminaba el hechizo para darle lugar a su gemela que hablara-finit encantate..., fue una pelea de niñas por un chico que no vale el motivo de que estemos acá.

 

Lo hacho hecho estaba y en su parecer los puntos menos sumaban para quitarse crédito luego del esfuerzo que hacia para corresponder dignamente a su verdadera familia y en especial con su abuela alguien de renombre en aquel mundo pero como mirarla a los ojos comenzando por la transparencia en sus prendas, aun no existía la confianza suficiente.

 

@@Mia Black Lestrange @@Alegna Black

[Sapphira Black Lestrange]

La vampiresa se encontraba en los jardines de la mansión rodeada de sus amadas criaturas y es que a veces prefería estar rodeada de criaturas que rodeada de gente , se encontraba acariciando el hermoso pelaje de su Aethonan duquesa cuando sus agudos sentidos , llega a escuchar unos gritos proveniente de la mansión.

Que estaba pasando , que interrumpían ese momento de tranquilidad y silencio que se vivía en los jardines , y por curiosidad se acerca a la mansión y cada que se encontraba por entrar a la mansión , se podía escuchar que había una pelea entre hermana y una pelea muy fea porque al entrar veo que se estaba atacando con las varitas.

Aunque la primer en llegar fui Mía con un atuendo poco apropiado para la ocasión, a la vampiresa se la podía ver siempre con un collar que llevaba un pequeño dije de infinito un regalo que especial que había recibido , a las hermanas se las notaba pasadas de copa pero al escuchar el motivo de su pelea no podía creer que fuera por un hombre.

- Peleandose en un día especial para uds y por un hombre que seguro no debe valer la pena que dos hermanas se quieran arrancar los pelos por un hombre

@ @@Mia Black Lestrange @@Alegna Black

[Ragnar Bjorn Lodbrok BL]

Ese hombre extraño si que lograba pasar desapercibido si así se lo proponía. Por lo que en esa ocasión estaba en la sala cuando vio como sus dos sobrinas llegaban peleando por un hombre. Era raro verlas con unas copas de más sin duda no estaban acostumbradas como el viajero que se encontraba observándolas desde las sombras.

 

Quería hacerles una jugarreta, por lo que le metía ideas a sus sobrinas de llevar una pelea. Como si el hombre aquel fuera el ultimo y el único que se fijaría en ellas. Vaya diversión que se estaba llevando el mago, sin embargo no se espero que desaparecieran del sitio y se fueran un tanto retirado de donde se localizaba.

 

Después de un momento de andar buscándolas, sobre todo guiado por los gritos que estas estaban produciendo era que las hallaba, un contratiempo sucedió cuando vio a su madre aparecer y amenazar a las dos brujas que les diera alguna explicación. No quería para nada voltear a ver su progenitora por que seguramente descubriría la travesura que el misterioso hombre estaba realizando. Por lo que se quedo escondido para que no lo viera nadie y quedarse escuchando como seguía ocurriendo todo en el espacio.

 

Una mujer más se estaba uniendo a la diversión. Solo esperaba que no lograran observarlo y poder seguir con su diversión. Veía que la cara de sus sobrinas estaba recuperando un poco la cordura en ambas. Además de que se le quedaban viendo en dirección a la matriarca de la familia más que asombro como con pena que incluso de momento agachaban la mirada.

 

Finalmente dirigió la mirada a la jefa del banco, para toparse con una bata que no dejaba nada a la imaginación. En ese momento se le ocurrió una travesura que esperaba que ninguna de las chicas se diera cuenta de lo ocurrido.

 

Del piso se comenzó a colar un aire a primera instancia ligero, sin embargo fue acelerando que la bata de la Matriarca se elevaba como si fuera el vestido de una actriz muggle de nombre Marylin Monroe. Pero no todo se quedaba ahí ya que el viento producía el mismo efecto en las blusas y cabello de las mujeres presentes en la sala.

 

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